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IAlllAl PARA
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AlllllAREB BE
ElllERIERIA
SEGUNDA PARTE

SEIA
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RfJTE~iri
el pueblo
Ministerio de Trabajo y Seguridad Social
S E NA COLOMBIA
Sub•Direcci6n General de Operaciones
Divisi6n de Administraci6n, Comercio y Servicios

Doc. 0100 - Circulaci6n restringida


Bogotá D. E., Octubre de 1972

MANUAL PARA AUXILIARES

DE

ENFERMERIA
I

11
La escasez de literatura hospitalaria en espaflol sobre administraci6n y
manejo de hospitales es bien conocida entre los dirigentes de los hospi-
tales latinoamericanos. Para suplir esta necesidad, el Comité Asesor
del Programa Latino Americano de la Asociaci6n Americana de Hospi-
tales, ha recomendado poner a la disposición de los hospitales de Amé-
rica Latina una serie de manuales y obras de referencia sobre diversos
departamentos de hospitales, por medio de traducciones al espaflol, es-
pecialmente adaptadas a las necesidades y características de los hospi-
tales latinoamericanos. Estas obras y manuales se han escogido entre
el grupo de publicaciones de la Asociación Americana de Hospitales y
de otras fuentes autorizadas en materia de hospitales.

La publicación de e ste manual ha sido posible por la valiosa cooperación


de la 11International Cooperation Administration 11 del Departamento de
Estado de los E stados Unidos de América, la cual ha proveído el financia-
miento del P rograma Latino Americano de Hospitales, con cuyos fondos
esta obra se ha editado; y a la cooperación de la ''w. K. K ellogg Founda-
tion", de Battle Creek, Michigan, quien ha proporcionado los fondos para
costear los gastos de traducción de e sta obra.

Que remos hac e r patente nuestro reconocimiento a la Universidad de Chile,


Escuela de Salubridad, por la coordinación y ejecución de los trabajos de
traducción y la preparación del material dactilográfico.

Finalmente agradecemos a las personas que hicieron la revisión y adapta-


ción de este material, ajustándolo a las necesidades de los hospitale s lati-
noamericanos, habiéndole dado claridad, sencillez y precisi6n al contenido
de sus páginas.

Es el de seo de todas las ins tituciones y personas que colaboran en la prepa-


ración y publicación de este manual, que los dirigente s de los hospitales de
América sepan aprovechar los valiosos conceptos qu e se exponen y puedan
aplicarlos y adaptarlos con provecho a la solución de algunos de sus proble-
mas técnicos y administrativos.

José González, M. D.
Director del Programa Latino Americano
Asociación Americana de Hospitales "
1?11B.JE$EmT'FllA<Cil«»mT

Con base en el anterior Prefacio , la División de

Administración, Comercio y Servic ios del SENA

reproduce el presente Manual con fines eminente-

mente didácticos, a fin de suminis trar a las Ins-

tructoras de Enfermería un documento que les sir-

va de guía para el desarro llo de sus programas.

Queremos agradecer a la Asociaci6n Americana de

Hospitales y al Ministerio de Sa lud Pt1blica de Colom -

bia e l suministro de este Manual , que constituye una

ayuda muy valiosa para lo s objetivos del SENA .


128

Sección 2

CONTENIDO

CAPITULO 1

TRATAMIENTOS 130

Como a plica r un enema de limpieza 131


ª·
b. Como aplica r calor 13 8
c. Como a plica r frro H9
d. Como aplicar c oluciones a vendaj e s htímedos
no est é riles 15'1

CA PITULO Il

TEMPERA TURA, P ULSO Y RESPIRACION 156

a. Como t omar l a temperatura 157


b. Como tomar e l pulso 168
c. Como contar l a s r espirac ione s 172

CAPITULO III

CUIDADO PRE Y POST OPERA TOR I O 176

a. Como a yudar en e l cuida do pr e-oper a torio 17 7


b. Como a yuda r en e l cuidado po st-operatorio 183

CAPITULO IV

TECNICA DE AWU-MIENTO 189

Como l a varse l as m a nos 191


ª·
b. Como usar fa m as carilla 19 3
c. Como usar e l dela n tal 195
d. Cuida d o matutino. p a ra el enfer mo aislado 2 03
e. Algunos otros p untos en la técnica d e a islamiento 2 08

CAPITULO V

EL CUIDADO DEL LAC TA NTE 2 12

a. Como h acer una cuna 2 13


129

b. Como se cambia un pai'ial 216


c. Como se lavanta al nii'io; se le coloca la camisa ;
se le muda 220
d. Como se le limpia diariamente 225
e. Como se le pesa 229
f. Como se le baña 232
g. Com? s e le toma la temperatura 243
h. Como se le alimenta 247
i. Llevándolo donde su madre para que le dé el pecho 252

CAPITULO VI

CUIDADO DE LA MADRE 255

a. Cuidado perineal 256


b. Cuidado de los pechos y pezones 259
c. Como colocar un sujetador de pecho 261
130

C A P I T U L O I

T R A T A M I E '. •N T O S

a. c6mo aplicar un enema de limpieza

h. c6mo aplicar calor

c. c6mo aplicar frío

d. c6mo aplicar soluciones a venda-


jes h<ímedos no est6riLes.
131

C A P I T U L O I

COMO APLICAR UN ENEMA DE LIMPIEZA

Al d ar un enema de limpieza, se hace pasar una s o lu-


ción por la parte baja del intestino o del recto de l
enfermo .
Esto permite que mueva l o s intestinos y l os liµlp ie
t o talmente. También hace salir el gas por el recto

Puede ser que Ud. haya visto hacer esto en su casa,


o aún que Ud. misma l o haya h echo. Sin embargo , e s
un asunto t o talmente distinto cuando se aplica a un
enfermo en un hospital. UD DEBE CEÑIRSE ESTRICTAMEN-
TE A LAS INSTRUCCIONES . Si esto no ocurre, bar~ rn~s
mal que b ien. Su profesora le enseñar~ a dar un ene-
ma a un niño .
132:

QUE SE HACE:

Para dar un enema va a necesitar:

a. una bandeja o .. lavatorio con lo siguiente:

un irrigador : (recipiente del litro con una


abertura cerca del fondo )

un tubo de goma de tres pies o más o meno s,


que se una al irrigado r.

un tubo rectal

un tubo de unión, de vid rio unido al ·· tubo


de goma ( para c o nectarlo con el tubo r e ctal)

un tornillo o sistema d e pinzas ( para cer~ar


el tubo de goma)

un termómetro de baño ( si es posible )

b. una cubierta de chata o una toalla para tapar


la b andeja o el lavatorio .

c. una pequena sábana de goma ( más o meno s de una


yard a cuadrada )

d. una sábana de tracci6n para cubrir la sábana de


goma

e. una chata con su tapa

f. papel higi~nico

g. un soporte ( para c o l g ar el irrigador.)


11
133

l. Para saber qu~ solución se va a usar y cómo


se va a usar.

Agua jabonosa ( enema de pompas de jabón ) o


agua salada ( llamado 11 enema salino 11 ) se
usan a menudo. Para l o s adultos se requiere
generalmente, un litro.

2. Prepare al enfermo en esta forma:

a. Lleve al lado de la cama, la s~bana de


tracci6n, la sábana de goma y el s op orte-
-si no se guarda la chata ni el papel hi-
giénico en la mesa de noche, hay que lle-
va lor también.

b. Ponga un biombo y d !gale al r.enfermo l o


que va a Qacer

c. Coloque la s~bana d e tracci6n s obre la de


goma.
Pídale al enfermo que levante las cad eras
cuando haga esto , d eslice la dos sábanas
por debajo dejando la sábana de tracción
junto a la piel del enfermo.

d. Ponga el soporte al lado de la cama en la


parte derecha. Determine la altura de modo
que la parte de abajo del irrigador no que-
de más alto que un pie y medio de la cama.

(NOTA: El soporte no es absolutamente necesario.


Ud. misma puede mantener el irrigador en alto
mientras dé el enema. Sin embargo , es más
fácil colgarlo del soporte, hasta que haya ad-
quirido bastante práctica.)
134

e. Ponga la chata a l o s pies de la cama o en


la silla, donde pueda alcanzarla con faci-
lidad.

f. Deje un lugar para colocar la bandeja del


enema cuando la lleve.

3. Prepare · el enema en esta f orma:

a. Cierre la espita del tubo de mod o que el


enema no . se salga cuando l o conecte con
el irrigador.

b. Para los enemas de jabón, use jab6n blanco


suave y agua caliente. cuando el a gua esté
jabonosa, saque la espuma de encima y saque
cualquier tro cito de jabón que haya quedad o .

c. Para un enema salino , use d o s cucharaditas


de sal y mézclelas en un litro d e agua.

d. PRUEBE LA TEMPERATURA DE LA SOLUCION


Deber!a ser de 4o.s 0 c. Si no d ispone de
un termómetro de b año, su profesora l e va
a enseñar a med irla.

e. Co loque en un pedazo de papel higiénico o


en una toalla de p apel, una cucharad ita c on
vaselina o gelatina lubricante.

(No meta nunca la punta del tubo rectal en


el frasco c on vaselina )

Coloque el tubo rectal en un pedazo de papel


higiéni~ o en la bandeja

f. una el tub o rectal al tubo de vidrio . Tape


la bandeja o e l lavatorio y llévela a la
cama.
135

4. DE EL enema así:

a. Haga que el enfermo se vuelva hacia e l la-


do izquierdo , y ayúdelo si es n e c e sario . Fí-
jese que las caderas queden cerca d el borde
de la cama en el lado en que Ud . trab aja.

b. Cuelgue el irrig a dor del s op orte

c. Col6quele vaselina o gelatina lubricante


al tubo rectal, en la región c omp rend i d a
entre la punta y tres pulgadas hacia arri-
ba. Asegúr e s e que las aberturas d el tubo
n o se tapen c o n vaselina.

a. Mantenga el tubo rectal s obre la chata.


Abra la espita del tubo y d e j e q ue la s o -
luci6n caiga en ella hasta que p ase uni-
formemente. ( Es para prevenir que el aire
del interio r del tubo entre en el enfe rmo )
Cierre ens09uid a la espita.

e. Eche hacia atrás la frazada o la r opa d e


cama para dejar al d escubierto las cad eras
pero n o el resto d e su cuerpo .

' f. Mantenga el tubo rectal a unas .cinco pul-


gadas del enfermo . Intr oduzca suavemente
el tubo en el recto d e l enfermo en una pro -
fundidad de cuatro pulgadas más o meno s.

g. Abra la espita y d eje que la s o lución pase


lentamente.
Si el enfermo se queja de reto rtij o nes, dí-
gale que respire pro fundamente p o r la boca.
Al mismo tiempo tape el tubo d ob lándol o con
los dedos más o meno s medio minuto e
136

h. cuando haya entredo toda la s o luci6n, cie-


rre la espita.

i. Saque el tubo rectal del recto

j. Envuelva la punta en un pedazo de papel


hig~nico.

k. Desconecte el tubo rectal del de vidrio ,


y déjélo en el rifio n.

L Po nga al enfermo d e espaldas y c o l óquele


la chata debaj o . P í d ale que mantenga la
soluci6n p o r uno s cinco minutos. Si está
permitido levante la cabecera de la cama .
vea que el c o rd6n de llamada y el papel
estén a mano .

(No ta: Nunca deje que un enfermo va~a al


bafto despu~s de un enema a meno s que tenga
permiso de l a enfermera.)

S. Ll eve la bandeja o lavatorio y las c o sas q ue


us6~ a la pieza d e se rvicio o cuarto sép tico .

LÍmpielas con cuid ado . Esterilice el equip o en


la f o rma que aprend i 6 . ( Lea 11 Como s e Cuid a
el Equipo del Ho spital " ) Lávese las mano s.

6. Cuando el edfermo haya termnnado, llévese la


chata.

Po nga mucha cuidado para no derramar nada.


137

Averigue si se necesita una muestra de d eposi-


ciones. Examine c on cuidado el contenid o de la
chata. Si ve algo que .le parezca extraBo , pí-
dale a la enfermera que mire antes de vaciarla.
Si no es así, vaciéla y lávela cuidado samente.
LAVESE LAS MANOS

7. Vuelva ,-donde el enfermo

Saque las sábanas de goma y de tracci6n

DEJE QUE EL ENFERMO SE LAVE LAS MANOS

( Si no puede darle un recipiente con agua, c on-


sígále un pafto humedecido en agua y jab6 n y una
t o alla )

Antes que se vaya, vea que está c6m6do .

8. Llévese el s oporte y la sábana de goma

Lleve la sábana de protecc16n a la lavander•1 a. "

'i,I! \I'
~LJ
¡" •
138

C A P I T U L O I

COMO APLICAR CALOR

Para curar o para disminuir el dolor, el méd ico p uede


ordenar q ue s e aplique calor a una r e gi6n dete rminada
del cue r p o . Lo s tres tipo s de calor que puede or d enar
s on :

CALOR MEDIANTE LIQUIDO. Se de ja la ·mano , ei brazo o


el pie del enfermo en una s o luci6n caliente ( o agua
caliente simplemente ) durante un cier~o tiempo .

COMPRESAS CALIENTES ( no estériles ) Un paño se emp a-


pa en una s o luci6n caliente ( o agua), se exp rime
y aplica contra la piel del enfermo .

La enfermera le explicará qué tipo d e calor va a ap li-


car, por cuánto tiempo , y la frecuencia. Además de ce-
Hirse a las instrucciones, hay que recordar que un en-
fermo puede quemarse sin sab erlo . Para asegurarse que
esto no sucede, SIGA LAS INSTRUCCIONES AL PIE DE LA
LETRA .
No aplique calor a un nifio o a un lactante a meno s que
su profesora le ensefte en de talle c6mo hacerlo .

COMO SE APLICA CALOR MEDIANTE LIQUIDO:

va a necesitar :
139

una tina de un pie, un lavato rio o recipiente para los


brazo s ( de acuerdo a la regi6 n que debe permanecer 1
en el líquido )

un jarro

un ter m6me tr o para el baño

una s6bana de trace i6n

una sábana de goma

una t o alla de baño.

l. Pregúntele a la enfermera :

a. Qué slución va a usar

b. Qué parte del b~azo o del pie d eben


sumergirse

c. cuánto tiempo d ebe durar

2. Prepárese para aplicar este tipo de calo r, en


l a siguiente f o rma:

a. Preparese la s o luci6n. Su pre:feso ra le en-


señará c6mo se preparan las s o lucio nes que
se usan en su h o spital.

b. Tome la temperatura c on el termómetro para


bafio.

Deb ería ser de 43:2º -46º ( Si n o dispone d e un


term6metr o para baño , su pro feso ra l e ens eñar~
a hacerl o )
140

c. Lleve a la cama la s~bana de g oma y el


recipiente con la soluci6n Si no hay toa-
lla lleve una.

d. Dígale al enfermo l o que va a hacer.

3. Prepare al enfermo de esta manera:

a. Para colocar en ,l!quido el brazo o la


mano, levante la cabecera de la cama.
Co loque la sábana de goma por debaj o d el
brazo del enfermo, y el recipiente encima
de ella.
141

b. Para colocar el pie en liquido, eche hacia


atrás la ropa de cama que corresponde al
pie enfermo.

(NOTA: Si el enfermo est~ bastante bien,


puede sentarse dejando colgar la piernas
al borde de la cama, · En ese caso coloque
la s~bana de goma con el recipiente, en-
cima de la silla al lado de su cama. Fí-
jese que la espalda y la otra pierna no
queden al descub ierto )
142

4. Haga que el enfermo meta el pie o la mano


en el recipiente.

Fíjese que lo haga lentamente de mod o que se


aco stumbre al calor en forma gradual COMPRUEBE
QUE LA REGION QUE DEBE ESTAR EN EL LIQUIDO QUE-
DE TOTALMENTE CUBIERTA POR EL TOME EL TEEMPO

s. Si la soluci6n del recipiente se enfría, agre-


gue más soluci6n caliente.

Cuando vacíe más líquido saque el pie o el


brazo. Mida la temperatura antes de c o l ocarlo
d e nuevo .

6. Una vez que se ha cumplido el tiempo determinado


seque el brazo o el pie ••

Llévese el recipiente y la sábana de g oma. Lún-


pielos y guárdelo s en la forma en que se le en-
señ6.

COMO SE HACE PARA APLICAR COMPRESAS CALIENTE NO


ESTERILES

va a necesitar:

Trozo s de gasa peque~os o grandes ( grandes, si deben


cubrir la pierna1 pequ~o s para la muneca o dedo)

un recipiente

una sábana de goma o de hule

una sábana de tracci6n o una t o alla para cubrir la


sábana d e goma

un jarro .
143

l. Pregúnte le a la enfermera :

a. Qué soluci6n va a usar:

b. Qué númer o exacto d e c o mpresas d e b e aplicar

e. cuánto '' tiempo d e b en mantenerse

2. Prepárese para aplicar las compresas :

a. Prepare la s o luci6 n y mida la temperatura.


Esta debe ser el máximo que puedan s op o rtar
sus manos.

b. Colo que las c o mpr e sas ( gasa o almohadillas


de tela } en la s o lución del recipiente.
Lleve el recipiente, la sábana d e g oma (
tratamiento} y la t o alla o sábana de tracci6n
a la cama

c. Extienda , la t o alla o la sábana d e tracción


por encima d e la de tratamiento . Ambas debe
colocarlas debaj o de la regi6n en que va a
aplicar las c ompresas. Fíjese que la sába-
na de tratamiento no tóque la p iel de l en-
fermo. Si es necesario, dóblela d ebajo de
la :·. t o alla. Bebe hacia atrás la r opa de
cama, en la medida necesaria para que no se
humedezca

3. Aplique las compresas en esta f orma :

a. Exprímalas, s o las o por separado , hasta


que no goteen . Hágalo con cuidad o p o rque
esto evita que el enfermo se q ueme.
144

b. Extiéndalas s obre la región c o rrespo n ñ iente


en forma rápida, para que no se enfrí~n con
el aire. Cubra t o da el área. Para esta se-
gura, pida a la enfermera que examine su
trabajo antes d e seguir adelante.

c. Tome el tiempo .

4. Si el enfermo no puede cambiar él mismo sus


c ompresas

a. Vuelva a su lado p or lo meno s cad a cinco


minutos

b. Mantenga el calor d e la solució n, ya sea


agregando más s o lución caliente, o calen-
tando el recipiente en un anafe.

c. Empape las c ompresas en la s o luci6 n caliente


y coióquelas c omo l o hiciera la primera vez.
No deje caer la s o lución sobre las c ompresas
si estas están s obre la piel del enfermo.

5. Si el enfermo puede cambiar sus compresas ( Pre-


gúntele a la enfermera si está bastante bien para
hacerlo )

a. Arregle el descanso de la espald a y deje el


recipiente c c on la soluci6n d ond e pueda al-
canzarlo con facilidad.

b. Enséñele a empapar las compresas, a expri-


mirlas bien, y a c o locárselas~ ·

Enséñele a hacerl o cada vez que se enfrien.


145

c. Mantenga caliente la soluci6n. Añada más


cantidad que esté caliente o use el anafe.

6. Una vez que .se hayan mantenido durante el


tiempo que correspondía, seque al enfermo .

La piel puede quedar delicada después de las


compresas.
Séquelas con suavidad usando la t oalla para
absorber sin restregar

7. Llévese las cosas que ha usado en la f orma que


le ha enseñado su pro fesora.
146

COMO SE LLENA Y SE COLOCA UNA BOLSA DE AGUA CALIENTE

va a necesitar:

una bolsa de agua caliente

una funda para bolsa, o una toalla y alfileres de gancho

un jarro con agua caliente

un term6metro para el bafio.


147

l. La bolsa se prepara en esta forma

a. Coloque el terrn6metro dentro del jarro con


agua para saber la temperatura Debe ser de
54.4º

b. Llene un tercio de la bolsa co n el agua


del jarro. Si tiene mucha agua el peso
molesta al enfermo . NO LLENE NUNCA LA
BOLSA CON EL AdUA DE LA LLAVE

c. Con una mano 'sujete la bolsa p or el cuello


para qlle la boca esté en posici6n vertical.
Con la otra mano afirm~ la bolsa s obre una
mesa para qus el agua llegue hasta el nivel
del cuello. No debe ~uedar aire dentro, por-
que adern~s de enfriar el agua en forma rá-
pida, hace aumentar el volumen de la bolsa
y en consecuencia es m~s dif!cil usarla.

d. Manteniendo la bo lsa en la posici6n anterior


(lett:a e · ) atornille rápidamente la tapa.
Hecho esto, sosténgala invertida en el aire
para asegurarse que el agua no se sale.

e. Seque la parte de fuera. Col6quela dentro


de su funda envuélvala en una t oalla.

2. Co loque la bolsa en la regi6n del cuerpo del


enfermo que correspo nde a la orden

Consulte con la enfermera para no equivocarse


de lugar, y siga sus instrucciones sin intro-
ducir cambios.
148

Procure que tanto los alfilet.es corno la boca ·


de la bolsa queden en direcci6n opuesta al cuer-
po del enfermo .

3. Observe . al enfermo cada hora por lo menos.

Fíjese en la piel y avísele a la enfermera si


la nota roja.
Cuando la bolsa no esté caliente, 11,nela en
la misma forma que lo hizo al comienzo.
149

C A P I T U L O I

COMO APLICAR FRIO

En ciertas condiciones puede usarse el frío para


disminuir el dolor o un ed ema en alguna parte del
cuerpo .
El m~dico puede ordenar:

COMPRESAS FRIAS. Gasa o tela que se empapan en agua


helada, se exprimen y se aplican a la piel.

BOLSA DE HIELO o COLLAR DE HIELO que se aplica a


cierta parte del cuerpo . La enfermera le d irá cual
debe aplicar. El collar de hielo se usa generalmen-
te para el cuello.

Para aplicar bien este tratamiento, se debe saber


con exactitud en qué parte del cuerpo debe aplicarse
y cuánto debe durar.

QUE SE HACE PARA APLICAR LAS COMPRESAS FRIAS

va a necesitar :

un recipiente conteniendo agua y hielo

tr ozo s de gasa grandes o pequefio s

una sábana a~ tratamien to

una t oalla o sábana de tracción para cubrir la s áb ana


de tratamiento.
150

l. Para aplicar las c ompresas prepárese en esta


f o rma:

a. Ponga cubos o trozo s de hielo en el reci-


piente. Afiada un p o co de agua fría. Empa-
pe las compresas en el agua.

b. Lleve a la cama las compresas en el reci-


piente, la sáb ana de tratamiento y la t o a-
lla o la sábana de tracción.
Dígale al enfermo l o que va a hacer

c. Extienda la t o alla o la sábana de tracci6n


sobre la sábana d e tratamiento . Co l 6quelas
debajo de la regi6n del cuerpo d o nde deben
aplicarse las c o mpresas

2. Aplique las compresas así:

Exprima una o d o s a la vez.

Extiéndalas sobre la piel de la regi6 n que deben


cubrir.
S i tiene dudas preguntale a la enfermera d6nde
deben colocarse y cuál es el área q ue deber1an
cub rir.

3. Pregúntele a la enfermera si el enfermo p uede


cambiarse las c ompresas s o lo. Si es así:

a. Enséñele c o mo se empapan, exprimen y se


aplican.

b. Dígale que las cambie cada vez que se


entibien

c. Cuando sea necesario , afiada hielo para


mantener el agua fría.
151

¿·~--:-->~
~;/

4. Si no puede cambiarlas 61 solo, cámbielas Ud.


cada cinco minutos por lo menos.

s. Cuando la aplicaci6n ha durado el tiempo que


corresponde, seque al enfermo

Guarde las cosas que ha usado en la forma que


se le ha enseftado.
152

COMO SE HACE PARA APLICAR UNA BOLSA O UN COLLAR


DE HIELO:

va a necesitar :

una bolsa o un collar

una cubierta para la b o lsa de hielo ( una toalla


delgada de cada o un tro zo grande de gasa )

hielo en escamas o molido.

l. Prepare la bolsa o el collar de hielo e n esta


forma:

a. Ponga trocitos d e hielo llenando hasta la


mitad.

b. con una mano apriete la bolsa para sacar-


le todo el aire. Con la otra atornille la
tapa. Fíjese en que los hilos d el tornillo
y de la abertura c orresP.ondan para que no
se filtre agua por el borde.

c. Seque la parte d e afuera. Examine con cui-


dado para que no se salga el a gua.

d. P6ngala en su fund a o envu~lvala e n una


gasa o en la t oalla. NO USE NUNCA UNA BOL-
SA O UN COLLAR DE HIELO SIN ENVOLVERLOS.
EL HIELO QUEMA TANTO COMO EL CALOR

2. Co loque la bolsa o el co llar en la reg i6n del


cuerpo del enfermo donde deba aplicarse.
153

Confirme con la enfermera para que no se equi-


voque y siga sus instrucciones. Fíjese e n que
la tapa de metal no esté en contacto con el
cuerpo del enfermo.

Asegure el collar de hielo en el cuello con


una venda o cinta.

3. Vuelva donde el enfermo cada hora.

Si la piel que está de bajo de la bolsa o co -


llar se ha puesto azul o muy blanca , av!sele
inmediatamente a la enfermera.
Si se ha derretido el hielo, vuelva a colocar
más.
154

C A P I T U L O I

COMO APLICAR SOLUCIONES A VENDAJES HUMEDOS NO ESTERILES

Ha y veces que el médico quiere que s e apliquen ve nd ajes


calie ntes y húmedos en ciertas partes del cuerpo , por
varias ho ras. En estos caso s, para que las compre sas
no cambien de lugar, se co l oca una venda e ncima de ellas
La:· enfeme ra se encarga de co l ocar las compr e sas y la
venda . Sin embargo, puede peu irle que manten ga húmedo
el vendaje. Para cumplir e sto , caliente, NO EN EXCESO,
la s o luci6n que se deja cae r s obre la vend a cada cier-
t o tiempo para mantenerla húmeda. Como al hacer e sto
se pued e quemar fácilme nte al e nfermo, LA TEMPERATURA
DE LA SOLUCION NO PUEDE NUNCA SER ·MAS ALTA QUE 43° .
La ,enfermera va a instruirla sobre la s o luci6n que se
d ebe usar.
155

QUE SE HACE:

Va a necesitar:

un pequeño recipiente c o n la s o lución que c o rrespo nd e

un cuentago tas médico para vend ajes muy pequeño s

una taza o una pera de goma ( para vendajes grandes)

un t e rmómetro de baño.

l. Prepárese en esta f orma para aplicar la s o -


lución:

Caliéntela en la f orma en que le ha enseñado


su profesora.

VERIFIQUE LA T~ERATURA CON EL TERMOMETRO


DE BAÑO. Verifique que n o tiene más de 430
156

Ll e ve a la cama e l recip iente y e l cue nta go tas


méd ico la taza o jeringa.

Si se usan bolsas de a g ua caliente p ara mante-


n e r caliente el v e n d aje, sáquelas.

Desprende las t o allas, s~banas de goma o de hu-


l e que pueden estar e nvo lviendo el vend aj e .

Fíj e se en la parte grue sa que forman las c om-


p r e sas debajo del v e n daje, porque e sta es la
p arte que debe humed ece rse.

2. Aplique la soluci6 n e n e sta forma :

Si usa una pera de goma o cuentago t as méd ico ,


p ara llenarlo c o n la s o luci6n, aprie te la par-
t e d e goma. De o tro modo , llene la taza me tién-
d o la dentr o de la s o luci6 n.

Apriete la parte d e goma lentamente por e ncima


d e l vendaje, o vacíe un poco de la taza cad a
v e z. No debe mo jarse e l vendaje en tal ;f o rma
que gote e. Debe practicar hasta que p u e d a f o r-
marse un juicio exacto .

3. Envuelva el vend aj e e n la forma en q u e e stab a

Vue lva a llenar las b o lsas con agua calie nte y


pón g alas en su luyar primitivo. No n e c e sitan
fund as ya que no van a e star en contacto c o n la
p i e l del enfermo .

4. Examine el vendaje po r lo menos cad a dos h o ras

cuand o lo encuentre parcialmente s e c o , repita


l o s pasos 1, 2 y 3.
156

C A P I T U L O II

T E M P E R A T U R A P U L S O y

R E S P I R A C I O N

a. cómo t omar la temperatura

b. cómo tomar el pulso

c. c6mo contar las r esp iracio nes

Hay ciento s signo s que explican al méd ico


y a la enfermera mucho de la c o ndició n del
enfermo y de la f o rma en que su o r gan ismo
se defiende de la enfermedad , . Uno de estos
es la temperatura del cuerpo. Otr o , es la
forma y el núme r o de veces que salta su
pulso en un minuto . El tercer o , es la for-
ma y el núme r o de veces que inspira o ex-
pira - las respiraciones.

Es tal la importancia de estas tres c o sas,


que se " t oman " ( miden o cuentan ) en
ciertas horas d el d ía. Las tr e s se t oman
en la misma h o ra y se anotan en la h o ja
del enfermo en este o rden: temperatura,
número de pulsacio nes por minuto y númer o
de respiracio n es por minuto .
Sin embargo , Uu . d ebe aprender a tomarlas
por separado al c omienzo, ya que va a nece-
sitar mucha práctica antes de .. p oder t omar-
los en forma c o rrecta.
157

C A P I T U L O II

COMO TOMAR LA TEMPERATURA

La temperatura se t o ma p ara med ir la cantid a d d e calor


del cuerpo . Para hacerlo se c o l o ca un tipo especial de
termó me tro en la boca o en el r e cbo del e nfermo , d uran-
te un tiempo determinado . El calo r d e l cuerp o 11 s e re-
gistra " e n el termómetro med iante un column a d e mercu-
rio que se mide en una escala --series de línea s que
marcan e n ·.grados.

Al aprend er a t o mar la t e mpe r a tura debe r e c o r d ar cie r-


t o s p unto s :

La tempe ratura debe ser exacta. En o tras palab ras, Ud.


debe practicar hasta que p ued a leer el termó metro en
f o rma c o rrecta.

\~
158

Se usan d iferentes termóme tro s p ara la t e mperatura


en la boca y en el recto . Nunca los c onfund a. Jamás
t ome la t e mpe ratura en la boca c on un t e rmóme tro p a-
ra e l r e cto o viceve rsa · • Su p r o f e s ora l e d irá cuál
es cuál.

cuando c o l oque l o s t ermóme tro s en la b oca o e n e l


r e cto , d eben estar perfe ctamente limpio s. Si n o se
l o s limp ia bien, hay gran peligr o de contag i o .

Lo s t e rmóme tro s .se quiebran fácilmente. Tóme l o s can


mucho cuid ado y haga t odo l o posible para que e sto
no suceda e n la b oca o e n e l recto del enfe rmo .

NUNCA c o l oq ue un termóme tro de b oca a unn nifio , a


un e nfe r mo p e rturbado me ntalme nte o a uno incons-
cie nte , al e nfe rmo que no p ueda c e rrar la boc a .

QUE SE HACE PARA TOMAR LA TEMPERATURA EN LA BOCA :


159

va a necesitar:

una b andeja c on termómetro s para la boca ( a men o s que


cada enfermo tenga uno en la mesa de n o che )

un cuaderno para la temperatura (TPR) o una h o ja de pa-


pel y

un lápiz.

1. LAVESE LAS MANOS

2. Sa.que el termómetro d el frasco en que se guarda.

Enjuáguelo en agua fría p ara quitarl e el sabor


d e la solución en que ha estado sumergido .

3. Léalo en esta f o rma, si usa termómetr o en escala


F. (x)

a. Sos tenga el ~tremo opuesto al que se intro-


duce en la b o ca del enfermo, entre su p ulgar
y l os dos dedo s que siguen

b. Fíjese en la escala. Cada línea lar ga re-


presenta un grad o . Las líneas c o rtas que
quedan entre las largas, representan cada
una 2/10 de g rad o , c o n excepción de una
línea especial, más larga que las o tras en
entre l o s 98 y 99 grado s. Esta marca la
temperatura más c o rriente que es d e 98 y
6/10 de grado .

c. Haga girar el termómetr o entre sus ded o s


hasta que vea claramente la c o lumna de mer-
curio .
160

a. Fíjese en la línea que marca dond e llega


la columna de mercurio. Si es una línea
c o rta, fíjese en la línea lar g a más pró -
xima al b o rde que queda dentro de la
b o ca del enfermo . Esa marca el g~ad o d e
temperatura y las 2,4,6, u ocho s décimas
de grado según sea el caso.

(x) Describir el termó me tro y escala en . :c o .

a. So stenga el extremo o puesto al que se


introduce en la boca del enfermo , entre
su pulgar y l o s do s dedos que siguen

b. Las líneas.. c ortas representan 1/10 ele


grado . La temperatura más corriente está
por debajo de 370

c. Haga girar el termó metro entre sus d e do s
hasta que vea claramente la c o lumna d e
mercurio
d. Haga la lectura d irecta en la línea que
marca donde lleg a la columna de mercurio .
4. A menos que el termómetro marque meno s d e 36° ,
sacúdalo en esta f o rma:

a. Aléjese de cualquier cosa que p odrían g o l-


pear o quebrar el termómetro.

Mientras practique, há g alo colocand o el b razo


p or encima de un c o lchó n o almohada en caso
que se le caiga el termómetro.

b. Sujete firmemente la punta entre sus de-


dos y el pulg ar. Que el movimiento d e su
muñeca sea suelto , c omo si estuviera sa-
cudiéndo se el a g ua d e l o s dedo s.
161

//----\

c. Lea de nuevo el termómetro. Si n o marca


bajo 36°, sacúdalo de nuevo hasta que
marque.

s. To rne la temperatura del enfermo en esta f o rma:

a. Si está de pie, pídale que se siente. Hay


menos peligro de accidentes si está sentado.

b. Sujetando el termómetro casi del med i o , co-


16queselo en la boca un poquito hacia un la-
do.
162

Pídale que lo ponga debajo de la lengua ( En


o tra forma no registra la temperatura en f or-
ma exacta) vea que cierre la boca y junte l o s
labios.

c. Paqa estar segura que ha marcado bien,


déjelo por l o meno s dos minuto s dentro
de la boca.
163

d. Sáquelo suj~•. ndo l o del extremo superior .


Lírnpielo con un tro zo de kleenex, algodón
o gasa, desde el extremo superior hasta
la punta, haciéndo l o girar en sus dedo s
mientras l o limp::a.

e. L~alo en la misma f orma en que l o hizo


antes. Si tiene alguna duda, pídale a
la enfermera que la ayude.

f. Igual que antes sacuda el term6me tro ,


hasta que el mercurio baje de 36º para
que quede listo para usarlo co n o tra
persona

g. Colóquele en el frasco que c orresponde


como le enseñ6 su profesora.

1.
6. Ano te la temperatura inmediatamente, Si está
usando el cuaderno para temperatura :

Fíjese cual es la c o lumna que corresponde. Ge -


generalmente están encab ezadas por la hora. Ve-
rifique el nombre del enfermo y asegúre ses que
está escribie ndo la temperatura d onde correspon-
d e . Exprese las d écimas de grado c ol ocando un
número pequeño al lado pero arriba de l grado
t otal, por ejemplo 37 . 2° .

7. Avísele inmediatamente a la enferme ra s i la


temperatura sube de 370 , PERO NO LE DIGA AL
ENFERMO.
El médico o la enfermera pueden hacerlo me j or
sin alarmarlo.

8. Revise los frasc os e n que se guardan l os t e rm6-


metros.

Siga las instrucciones de su profesora p ara lim-


piarlos.
Vea que estén lleno s de las solucione s c orre s-
p ondientes, en tal f orma que cubra t odo el ter-
mómetro exceptuando un área de una pulgada en el
extremo superior.

QUE SE HACE PARA TOMAR LA TEMPERATURA RECTAL:

va a necesitar:
165

una b andeja con termómetro s rectales ( a meno s que el


enfermo tenga uno en la mesa de n~che )

un cuaderno para temperatura ( TPR ) o una ho ja de


papel.

un láp iz

vaselina o gelatina lubricante en un pedazo de papel


hig iénico o gasa

l. Saque el termómetro del frasco

léalo y sacúdalo hasta que la columna de mercurio


b aje de 36º grado s.
166

2. Co loque un poco de vaselina o gelatina lubri-


cante a la punta.

NO INTRODUZCA NUNCA LA PUNTA DEL TERMOMETRO EN


EL J ARRO DE VASELINA O EN LA BOCA DE UN TUBO
DE GELATINA

3. Tome la temperatura en esta forma :

a. Pídale al enfermo que se ponga d e lado .


Eahe h~~ia atr~s la ropa de mod o que
pueda ver la abertura del recto .

b. Introduzca p o r al!í la punta del t e rm6 -


metro, más o menos una pulgada.

c. Si el enfermo es capaz, p1dale que suje-


te el term6me tro. Vuelva en tre minuto s.
Este es el tiempo que se requiere para
que se registre la temperatura en f orma
correcta.

d. Si él no puede sujetar el term6 metro , há-


galo Ud. También en caso de un niño , de
un enfermo c onfuso o incrl>nsciente .

e. Sáquelo después de tres minuto s. Límpie lo


con un pedazo de Kleenex, gasa o algod6n,
en la misma f o rma que se hace c on el ter-
m6metro de b o ca.

f. Léalo, y sacúdalo hasta que la c o lumna


de mercurio baje d e los 36º y c o lóqu e lo
en el frasc o en q ue se guarda, d e acuer-
do a las instruccio nes de su pro f e s o ra.

4. An o te inmediatamente la temperatura

S i o cupa un libro TPR, h§galo igual que para


la temperatura de la boca. Para que se sepa
que es rectal, e scr ib a una peque~a R fr e nte
a l o s núrneros,en la f orma que le ha enseñ a do
su profesora.
167

Hay que hacer esto porque la temperatura rectal,


es m~s alta que la de la boca.

S. Si la temperatura sube de 38° notifique inmedia-


tamente a la enfermera.

6. Limpie el term6metro y llene los frascos donde


se guarda en la forma en que se le enseñ6
168

C A P I T U L O II

COMO TOMAR EL PULSO

cuando el coraz6n late, bombea sangre a t odo el cuerpo,


a través de largos tubos que se llaman " vaso s sanguí-
neos 11 •
Es t os vasos sanguíneos, que parecen tubos de goma del-
gado s, se extienden y se encogen. cada vez que late
el c orazón, las paredes de l o s tubos se e xtie nden para
dejar pasar sangre. Entr e . uno y otro latid o , cuando
el c orazón no lanza sangre, vuelven al grosor que te-
nían antes.

En ciertas partes del cuerpo , una persona puede sentir


este movimiento de expansi6n y encogimiento co n l os
dedos. Es t o se llama 11
pulso 11
y la rnuf'ieca es uno de
l os lugares donde se le siente con rn~s facilidad .

Aprender a tomar el pulso requiere tiempo y práctica


Ud . debe poder informar c on exactitud sobre:

LA RAPIDEZ - número de pulsaciones por cada minuto .

EL RITMO - regularidad de las pulsaciones, es decir,


si siempre transcurre e l mismo tiempo entre cada pul-
sación, corno es el tic-tac de un reloj, o la gota que
cae de la llave de agua: o si e s irregular, c orno p or
ejemplo cuando una persona corre un poco, se detiene
por un momento, y luego carnina o corre nuevamente.

QUE SE HACE:

va a necesitar :
169

un relo j con segundero

un cuaderno TPR o una hoja de papel

un l~piz.

l. Pídale al enfermo que se siente, si est~ de pie--


p o rque la rapidez puede variar.

Vea que el brazo descanse en forma cómoda.


No podrá tomarle Ql pulso si está sujentado
algo con firmeza o si tiene los puño s cerra-
d o s fuertemente.
170

2. Búsquele el pulso c o l o cando dos o tres dedo s


en el lado interno de la muneca, en la parte
vecina al pulgar.

Presione ligeramente, moviendo sus dedos un


poco de un lugar a o tro hasta que pueda sen-
tir el latido. Si presio na muy fuerte, puede
t omar su propio pulso y no el del enfermo .

3. Cuando haya encontrado el pulso, fíjese en


el ritmo.

4. Tome el pulso en esta forma:

Mire la posici6n del segundero de su relo j,


En este momento empiece a contar las pulsa-
cio nes.

Cuente durante medio minuto, hasta que el


segundero esté en la p o sición exactamente
opuesta a la que estaba cuando Ud. empezó
a contar. Si no está segura de haber con-
tado bien, hágalo de nuevo.

(NOTA: Si el ritmo es irregular, CUENTE DU-


RANTE EL MINUTO ENTERO )

S. Cuando haya contado medio minu_o, multiplique


el número de pulsaciones por dos.

An6telo inmediatamente. Si usa un cuaderno


TPR, escríbalo en el medio de la c o lumna que
c o rresponde al lado del nombre del enfermo .
171

a º'"·

6. Notifique a la enfermera inmediatamente si el


pulso era inferior a 60, o superior a 100

Dígale también si el pulso era irregular, pero


NO SE LO DIGA AL ENFERMO.
172

C A P I T U L O II

COMO CONTAR LAS RESPIRACIONES

La respiraci6n incluye e) movimiento de entrada y


salida del aire. Corno Ud . probablemente sabe, cuando
una persona hace entrar aire, su pecho aumenta o
se 11
expande ¡ cuando deja salir el aire, se achi-
11

ca o contrae
11
Para contar las respiraciones Ud .
11

puede observar el pecho cuando se levanta y baja, o


también puede colocarle la mano en e l pecho .
cualquiera que sea su sistema, debe hacerlo sin que
l o sepa el enfermo. Esto se deb e a que es muy d ifí-
cil que respire en forma natural si lo está pensan-
do y en consecuencia la cuenta no es correcta. Ade-
mlis de contar las respiracion e s, debe aprena·er a
notar si el enfermo respira con facilidad ( corno l o
hace usted ) o si hace un esfue rzo para respirar -
-lo que se llama " respiraci6n trabajosa.

Debe darse cuenta también si su respiraci6n es rui-


do sa, o si no puede oírse en ab soluto.

QUE SE HACE:

va a necesitar:
173

un r e l o j con s egundero

un cuaderno TPR o una ho ja de papel

un lápiz

&~ 12~ 4 p
l . . sf(I://, ~ G5 Íb
~le vJ 0 ,,~ /
Jo.""' e\ IJJ ,•1:;•.,

\
174

l. Torne la muñeca del enfermo en la f orma en


que lo hace para t omarle el pulso.

(En e sta forma no s e dará cuanta que l o está


observando cómo respi~a )

Si n o ve con clarid ad c 6mo se levanta o baja


su p echo, dóbl e le e l brazo en el c od o para
que lo pueda sentir respirar mientras le su-
jeta la muñeca. E s te sistema le será más fá-
cil especialmente cuando esté practicando .

2. Fíjese si, las respiracio nes son ruido sas o


trabajosas o si no lo son.

3. Para c o ntar las respiraciones haga esto:

Mire su reloj para saber la posició n de l s e -


gundero . Cuento 11 uno 11 en cuanto el pecho
se levante al llenarse d e aire. Cuend o "d o s"
cuando el pecho vuelva a levantarse.
Haga esto durante medio minuto, hasta q ue
el segundero esté en la posición exacta-
mente opuesta a la que estaba cuando Ud.
empezó. Si no está segura de haberlo hecho
en forma correcta, repítalo.

4. Multiplique por d o s el número que c o ntó


durante el 1: medio minuto .

(Por ej111nplo, si c o nt6 8 respiracio nes, el


núme ro total por minuto es 16 )

Anote inmediatamente el número • Si usa un


cuaderno TPR, escríbalo al lado derecho de
la c o lumna que c orrespo nde, al lado del n om-
bre del enfermo.
175

5. No tifique al momento a la enfermera si tiene


meno s de 14 respiraciones o más de 28 .

Dígale si la respiraci6n es ruidosa o trab a-


j o sa . Pero NO LE DIGA AL ENFERMO. La enferme-
ra o el médico pueden explicarselo mej or sin
alarmarlo.

6. Si se trata de un niño que ha estado llorando


o haciendo esfuerzo , e spere hasta que se tran-
quilice para cantarle las respiraciones.

Si el nino está dormido cuéntele las respira-


ciones antes de despertarlo

Si se trata de un nifio , t6mele el pulso y cuén-


tele las respiraciones, antes de t omarle la
temperatura.
176

C A P I T U L O III

CUIDADO y POST OPERATORIO

a. Cómo ayudar en el cuidado pre-operatorio

b. cómo ayudar en el cuidado post-operatorio


177

C A P I T U L O III

COMO AYUDAR EN EL CUIDADO PRE OPERATORIO

El cuidado pre-operaté rio , es el que se da a un enfer-


mo antes de una operaci6n quirúrgica. Lo que necesita
un enfer~o puede ser totalmente diferente de l o que
necesita o tro. En parte depende del tipo de operaci6n
a que se va a usar ( la droga que permite que no sufra
do lor durante la operaci6n )

A menudo el paciente no puede recibir nada por la boca


durante varias horas antes de la operaci6n. Por esto ,
cada vez que un enfermo debe ir a la sala de operacio-
nes, PREGUNTELE A LA ENFERMERA ANTES DE DARLE NADA DE
COMER O BEBER .

La emfermera le dirá l o que tiene que hacer en cada


caso .
Aparte de lo que ella le diga, recuerde siempre l o
siguiente:

Aunque no lo demuestre es seguro que el enfermo está


preocupado o con miedo; su tarea, así como la de l o s
demás, es ayudarlo a que tenga menos miedo y no esté
tan preocupado • .A menudo esta es la parte m~s impor-
tante del cuidado pre-operatorio .

El éxito de una operaci6n puede depender de la prepa-


ración del enfermo. Est~ segura que hace exactamente
lo que se le dice a la hora que corresponde.
178

QUE 5B HACE:

PARA ~YUDAR A QUE EL ENFERMO SE SIENTA MENOS PREO-


CUPADO Y CON : .MENQS MIEDO:

l. Déle todo su atenci6n cuando se encuentre a


su lado o lo lleve a la sala de operaciones

Si ud. conversa con otra persona mientras l o


está cuidando, lo hace pensar que Ud. no po-
ne atenci6n a l o que hace, aunque Ud. esté
totalmente preocupada. Si no le pone atenci6n
creerá que a Ud. no le interesa el resultado
de la operaci6n. ·

2. Conteste solamente aquellas preguntas que Ud.


sabe que puede y debe contestar.

Si no está segura respecto a su respuesta,


pregúntele a la enfermera para que ella l o
haga o para que le diga lo que debe respon-
der.

Si su respuesta no satisface al enfermo. dí-


gale a la enfermera. Ella puede ayudarlo .

3. Dé al enfermo una explicaci6n de l o que hace.


Si no conoce el por qué, pregúntele a la en-
ferrnerl!I.

4. Háblele con naturalidad, pero no se refiera


a las molestias que han experimentado l os
otros enfermos con la operaci6n
179

5. Dígale donde van a estar sus e f e cto s personales


mientras l o operan para que no se preocupe por
ello s.

QUE SE HACE:

cuando la en
CUANDO LA ENFERMERA LE PIDE QUE PREPARE A UN ENFERMO:

l. Reco ja una muestra de or ina y envíela a l labo-


ratorio .

Puede hacer esto con do s días de anticipaci6n,


un d ía antes, o el mismo día de la operaci6m.
El inf9rme del laboratorio p e rmite que e l mé-
d ico sepa c6mo puede s oportar la operación y
la rapidez de reacci6 n para sanar.

2. Déle un enema de limpieza

Según las Órdenes del médico, puede hacerlo la


noche antes, en la mafiana temprano o una o dos
h oras antes de que l o lle ve n a la sala de ope-
raciones.

Se le da para evitar las mole stias que siguen


a la operación y a veces es de n ec esi dad para
el éxito de ella.

3. Báñalo y l!mpiele la b oca y los dientes.

El objeto de esto s es la comodidad del enfermo


y a la vez para que esté comp l e t amente limpio
en 18 sala de operacion es . Una p i el limpia d is-
minuye la, posibilidad de microbio s que podrían
producir una infección en l a herida.
180

(Cuando una herida tiene pues, es p orque está


infectada.)

4. Quítele las joyas, alfileres, horquillas, pei-


netas, dentadura p o stiza, ojos artificiales
(de vidrio) o el aparatito para la s ordera

ES DE MUCHA IMPORTANCIA PARA LA PROTECCION


DEL ENFERMO

La dentadura postiza, p or ejemplo, puede aho -


garlo si está anestesiado . Haga lo siguiente:

a. Revísele Ud. misma el pelo para q ue no


queden horquillas, alfileres, peinetas
o barritas para sujetar el pelo .

b. Pídale que se saque los collares o cade-


nas, o hágalo ua. misma. Su pro fes ora le
dirá qué debe hacer si el enfermo quiere
llevar un r o sario o una medalla religio -
sa a la sala de operaciones.

c. Fíjese si tiene relo jes o pulseras. Pí-


dale que se las saque.

a. Examine si tiene anillos en l o s d edos.


Si no quiere sacarse un anillo , intro -
duza un trozo de venda por el anillo y
amárrelo a la muñeca del enfermo . Si no
lo hace así, puede perderse ya que l o s
dedos quedas laxo s con la anestesia

e. Si usa un o j o artificial, un aparatito


para la s ordera o algunos dientes p o s-
tizo s (aun cuando se trate de uno ), es
mej or que se l o saque si puede hacerlo .
181

f. Dígale que va a guardar sus c osas para


que no se le pierdan. A menudo se dejan
con llave en el escritorio de la enfer-
mera jefe o en el armario de l o s reme-
dios. Su pro fesora ie dirá cu~l es el
sistema de su hospital .

s. Vístalo para la sala de operaciones.

Huga lo siguiente :

a. P6ngale una camisa limpia. En alguno s


hospitales se usan camisas especiales
en casos de operaci6n

b. En algunos ho spitales se usan ciertas


toall8s o gorr o s para la cabeza. Su
profesora le enseñará c6mo se c o l oca
la toalla. Se hace para que el pelo
esté cubierto dentr o de la sala de ope-
raciones. ( Lo s pelos sueltos pueden
ser agentes de microbios que infectan
la herida )

c. Tambi~n en alguno s hospitales se usan


calcetines o medias especiales para que
los enfermos no se enfríen.

6. Que el enfermo orine una hora o menos de una


hora antes de la operaci6n.

ESTO ES MUY IMPORTANTE. Si Ud. o lvida esto ,


el enfermo puede orinarse sin saberlo en la
sala de operaciones. AVISELE A LA ENFERMERA,
si el enfermo no puede orinar.
182

7. Llévelo a la sala de operaciones.

( En muchos hospitales se usa una camilla que


se trae directamente de la sala de operaciones)

a. Haga que la enfermera verifique l o que


ha hecho para asegurarse que nada se ha
o lvidado .

b. Cuando la enfermera haya terminado las


anotaciones en la h o ja del enfermo , t 6-
mela y llévela.

c. Ayiidelo a pasarse a la camilla y llévelo


a la sala de operaciones. ( Si hay do s
personas, cada una debe ir en un extremo
de la camilla )

d. Cuando ha llegad o c on el enfermo , asegú-


rese que se han dado cuenta que el pacien-
te ya lleg6. Antes de irse, dígale que
otra persona l o va a cuidar, pero que
Ud. lo verá después. Haga que esa perso-
na le hable antes que Ud. salga. Su pro-
fes ora le dirá que va a hacer c on la ho ja.
183

C A P I T U L O 111

COMO AYUDAR EN EL CUIDJ'i.00 POST OPERATORIO

Por cuid ado post-operatorio se entiende t oda la aten-


ción que recibe un enfermo , durante l o s vario s días
que siguen a la operación. Lo mismo que cuando se
prepara al enfermo el cuidado es muy diferente de
acuerdo a la · 1operaci6n practicada y a la anestesia
que se ha usad o .
Por ejemplo , pueden comer o beber de t od o d espués
de una operaci6n. Sin embargo muy a menudo no pueden
t omar nad a p or la b o ca, o a v e ces algunos s or bos de
agua de vez en cuando. PREGUNTELE A LA ENFERMERA AN-
TES DE DARLE NADA DE COMER O BEBER A UN ENFERMO DES-
PUES DE UNA OPERACION
184

QUE SE HACE:

PARA AYUDAR EN LA ATENCION POST OPERATORIO, LA


ENFERMERA PUEDE PEDIRLE:

l. Que prepare la unidad mientras el enfermó


está en la sala de operaciones.

a. Haga la cama de éter en la f o rma en q ue se


le enseBó

b. Saque todo l o que haya en la mesa d e noche.


Co loque solamente lo que debe estar

c. Hable con la enfermera para saber si es


necesario un soporte y si es asi llévelo
al lado de la cama.

d. Saque los muebles que pueden estorbar


el paso de la camilla a la cama.

2. Ayude a trasladar al enfermo a la cama

Generalmente no necesitan cuatro o cinco per-


s onas. Se hace en la misma forma que cuando
se traslada un enfermo imposibilitado a una
camilla. La frazada o sábana que queda deba -
j o de su cuerpo en la camilla, debe usarse
como hamaca o cuna para lev~ntarl o .

3. Ob serve al enfermo hasta que haya " salido de


la anestesia 1 11 (cuando está t otalmente c ons-
ciente )
185

cuando se la ha asignado este papel NO LO DEJE


SOLO POR NINGUN MOTIVO NI AUN POR UNOS POCOS
SEGUNDOS. Si lo hace, puede ahogarse, caerse
o herirse en alguna f orma. Mientras esté con él :

a. No diga NADA fr.ente a un enfermo incons-


ciente, que no diría si estuviera despierto.
Puede oir y reco rdar lo que ua. ha dicho
aunque Ud. no l o crea.

b. Si le vienen vómito s, p6ngale la cab eza hacia


un lado.
ES MUY IMPORTANTE. Impide que aspire y se
ahogue con el material que vomita. Sujete
el recipiente para vómitos deb a j o d e su boca
y barbilla. Límpiele la boca cuando haya ter-
minado.

c. Tómele el pulso , y cuéntele las respiraciones


cada vez que le digan. Puede ser cada 10 mi-
nutos. Anótelo s.

d. Fíjese en el co l or de la piel. Mírele l o s


labios y uf'ías "

e. Examine si hay hemorragia. Si hay vendaje


examínelo en la f orma en que se le ensef'íó.
Hágalo generalmente cada 10 minutos.

f. Llame inmediatamente a la enfermera, en


los siguientes caso s : si parece estar aho-
gándose; si su pulso tiene algo raro , es-
pecialmente si es muy rápido ( s obre 120)
o muy lento ( b aj o 60) ; si sus respiracio-
nes son muy rápidas ( más de 300) o muy
trabaj0sas¡ si su p iel toma un co l o r blan-
co como la muerte, o si los lab i os o uñas
se ponen azules; si hay hemorragia o san-
gre en el vendaje; si está inquieto ( se
mueve mucho en la cama ) o se queja de
dolor.
186

g. En cuanto empiece a volver, llámelo por


su nombre y dígale que está con él.

h. cuando esté en apariencia totalmente


consciente ( puede responder con preci-
sión qué día es y cómo se llama el ho s-
pital ) llame a la enfermera.

Pídale que l o examine y pregúntele si


puede dejarlo s o l o .

4. Observe si recibe líquido a través de la vena


o si se le hace una tt:ransfusi6n

Si está inconsctente, es probable que le pidan


que se quede con él, y le s o stenga el brazo
para que no se mueva la aguja.

Si no está a su lado , vaya a verlo por l o menos


cada 10 minutos.

COMUNIQUELE INMEDIATAMENTE A LA ENFERMERA:

a. Si parece que el líquido no entra. El


nivel en la b otella debe bajar. Si pasa
por gotas a través de una ampo lleta de
cristal al tubo , es muy fácil de obser-
var este fen6meno . Fíjese que las gotas
estén cayendo t od o el tiempo

(NOTA: NO APRIETE O SUELTE EL TORNILLO


A MENOS QUE SE LO HAYAN DICHO ESPECIAL-
MENTE )
187

b. Si queda meno s de una copa de líquido


en la botella; no t oque el t ornill o .

c. Si la piel del enfermo se ve estumecida


o hinchada alrededor de la aguja; no la
toque.

d. Si el enfermo se queja de sentir mucho


frío , tiene escalo;río s ( tiene tanto
frío que su cuerpo se estremece y sus
dientes castañetean ) o si hay cual-
quiera otra c osa que le parezca extra-
ña

S. Mi d a y registre l o que el enfermo t oma o


expulsa.

Lo que se elimina tiene siempre gran importan-


cia después de una operaci6n, ya que algunos
enfermo s tienen dificultades en eliminar.

Siempre mida .1a orina la primera vez que eli-


mina y dígale a la enfermera. Ella le dirá si
tiene que medirla d espués"

Lo que absorbe se mide por lo menos una vez


al día.

6. Saque al enfermo de la r opa de éter

Esto se hace generallpente junto con el cuidado


de la tarde o de después de almuerzo .

Además de lo usual :
188

a. Saque de la cama las frazadas extras , y


las sábanas de goma o de tracci6n que es-
tán debajo de la cabeza. Debe sacar la
frazada que está debajo en la misma f orma
en que saca una sáb ana sucia.

b. Cámbiele la camisa y la ropa de cama que


esté húmeda o sucia

c. Póngale una almohada debaj o de la cab eza


y si es po sible levántela la cabecera de
la cama más o menos unas cinco o seis
pulgadas. Puede ser que se sienta más
c6modo si levanta l o s pies levemente,
siempre que se pueda.

7. Según las instrucciones de la enfermera y


cada cierto tiémpo,. cámbielo de po sici6n

Es necesario para pro~egerle la piel, para


que la herida sane y especialmente para evi-
tar que le dé neumonía.

Cada vez vu~lvalo hacia el otro lado de la


cama, poni~ndole una almohada por la espal-
da en la forma que se le ha enseñado .

'
189

C A P I T U L O IV

T E e N I e A DE A I S L A M I E; .N T O

a. c6mo lavarse las manos

b. c6mo usar las mascarillas

c. c6mo usar el delantal

d. Cuidado matutino para el enfermo aislado

e. Algunos otro s punto s en la técnica de


aislamd.énto

Hay algunas enfermedad es que se contag ian con


tal facilidad de una persona otra, que la lim-
pieza por s! s o la, no protege ni evita el c on-
tagio. cuando una persona tiene una de estas
enfermedades, es menester tomar ciertas precau-
ciones o medidas de pro tecci6n. Estas precaucio-
nes se denom;_nan 11 técnica de aislamiento ".

El objetivo de la t~cnica de aislamiento es que


l o s 11 gérmenes 11 que producen la enfermedad que-
den dentro de la unidad del enfermo . Aunque Ud.
no pueda verlos, esto s gérmenes se encuentran
en t odas partes en la pieza del enfermo - en
el suelo, en l o s muebles, en la ropa de cama,
y en todos los objetos que se llevan a la cama,
así co~o en el pr opio enfermo. Se dice que el
enfermo y todas las cosas que están allí, es-
tán 11 contaminadas 11
190

Cuando Ud. con su r opa t oque o se restriegue


contra ellas, los gérmenes pasan ( contagian)
a sus mano s o r opas. La técnica de aislamiento
se usa para evitar que Ud. transporte esto s
microbios en las mano s, r opa, o cualquiera
de l o s objetos que haya usado en la unid ad .

En este cap!tulo Ud. aprender~ a _ ·pro tegerse


para no c ontagiarse y para no llevar el con-
tagio a los otro s enfermos. Una vez que haya
aprendido esta técnica en forma perfecta,
tendr~ menos peligro d e contagio en el ho s-
pital, que en un autobús o en el cine.
191

.,.

C A P I T U L O IV

COMO LAVARSE LAS MANOS

Sus manos se contagian en cuanto se ponen en contacto


con un enfermo " aislado " o c on cualquier objeto de
esa unidad ..
Antes de t ocar algo que está " limpio Ud. debe la-
11

varse para librarse de los g6rmenes .. Al referirse a


la técnica de aislamiento , la palabra " limpio " tie-
ne un significado diferente al que se le da siempre.
Es limpio t odo . lo que no está contagiado con l os or-
ganismo s que producen la enfermdad. Tod o l o que NO
ha estado cerca del enfermo , su cara, brazo s, unifor-
me, están limpios
11 11

.l
192

QUE SE HACE:

Para asegurarse de que no queda ningún germen en sus


mano s, debe lavárselas muy cuidadosamente, en la si-
guiente f o rma :

l. Abra la llave del agua en el lavato rio

El lavatorio está 0 limpio " • Si debe usar


la mano para dar el agua, su profeso ra le
enseñará c6mo hacerlo . En algunos ho spitales
se usa una toalla de papel para este objeto .
En o tros, Ud. debe lavar la llave en cuanto se
jabo ne las manos.

2. Mójese las mano s y use _bastante jab6n

Con una de las mano s llenas de jab6n restrié-


guese la otra, p oniendo especial cuidado al
hacerlo entre l o s dedos y alrededor de las
muñecas.

Vea que ~enga jab6 n debajo de las ufias. Lim-


p ieselas usando un •;;>alillo de dientes o con
las unas de la o tra mano .

3. Enjuáguese las mano s debajo del agua que c o rre


de la llave.

Coloque los dedo s oblicuos al lavato rio , d e


modo que el agua c o rra de las muñecas hacia
las puntas.

4. Repita los pasos 2 y 3 durante un minuto y


medio .
193

C A P I T U L O IV

COMO USAR LA MASCARILLA

Las mascarillas son trozo s de gasa con que se tapan la


boca y la nariz. Puede usarla o no usarla mientras a-
tiende al enfermo aislado . Se usan cuando los gérmenes
de la enfermedad permanecen en el aire, y en las co sas
y pueden pasar a su nariz o b oca cuando el enfermo res-
pira o t ose.

cada vez que entre a la unidad de un enfermo aislado,


use una mascarilla limpia, recién salida de la lavan-
dería.
cuando se la ponga debe tener las manos siempre lim-
pias; si no lo hace así va a c ontagiarse las mano s y
el pelo .
Cada vez que toque a ;.::g o que está contaminado , LAVESE
LAS t-4.ANOS ANTES DE TOCAR LA MASCARILLA

QUE SE HACE:

PARA COLOCARSE LA MASCARILLA:

l. Estírela o desenrr6 llela y co1Óqu$sela s ob re


la naríz y boca.

Debe cubrir ambas.


193A
194

2. Amarre las cintas en f orma de lazo por detrás


de su cabeza y hágalo con firmeza.

Su profesora le ensefiará a hacerlo para que


quede c6moda y no se corra la mascarilla.

COMO SE HACE LA MASCARILLA:

l. LAVESE LAS MANOS:

Están contagiadas.Si no tiene las mano s lim-


pias se contagiará el pelo.

2, Derrame las cintas y sujete la mascarilla


de las cintas.

P6ngala en el recipiente que corresponde.


Su profesora le dirá d6nde.

3. LAVESE LAS MANOS


195

C A P I T U L O IV

COMO USAR EL DELANTAL

( O BA'rA )

Nota : Los términos " delantal 11


y " bata " se usan
indistintamente.

Debe u s arse un delantal s obre el uniforme en la unidad


de aislamiento, para que l o s microbios no pasen al uni-
f orme ni a sus brazos. Debe usarlo cada vez que traba-
je en la unidad y que su r opa puede rozar la cama, mue-
bles u otros objetos que estén contaminado s.

Se llama 11 técnica del delantal " la forma c orrecta de


col ocárselo y sacárselo . En esta lecci6n va a aprender
cómo p onerse o qúita~se el d elantal sin que l o s micro-
bio s pasen a su uniforme o a la parte debaj o del delan-
tal. La práctica le permitirá hacerlo c on rapidez y des-
treza.
196

,, !

QUE SE HACEs

PARA COLOCARSE UN DELANTAL LIMPIO ( recién sacado


de la lavander1a )

l. Asegúrese que sus mano s no están contaminadas.

Si ha tocado algo c o ntaminado, lávese las


mano s antes de t o car el delantal. S i no hace
esto , los gérmenes pasarán al interior d e és-
te cuando se lo p o nga.

2. Desdoble el delantal y meta los brazo s en las


mangas

La abertura está en la espalda.

3. Amarre la parte del cuello.

S i tiene cint~e · amárresela en un l a zo , S i es


diferente, cierre l o s bro ches, o abo t o ne l o s
d o s lados de la parte del cuello .

4. Acerque los dos bordes interiores d el delantal


en la parte de la espald a de mod o que queden
frente a ,·frente.

Acérquelos hasta que el delantal le ajuste b ien.


Mientras con una mano sujeta el delantal en su
espalda, con la o tra t oma las cintas de la cin-
tura y las amarra en un lazo.
197

PARA COLOCARSE UN DELANTAL QUE ESTA CONTAMINADO EN LA


PARTE EXTBRNA : .
198

l. Asegúrese que sus mano s no están contaminadas

Lávesela si no está segura

2. Sujetando el delantal desde la parte d e adentro,


sáquelo del gancho

Acuérdese que debe c o l ocárselo sin to~ar en


ab s o luto. · la parte de afuera.

Junte las manos p or las p almas y c on las puntas


de los dedos trate de separar los dos bordes
del cuello. Luego , sujetándo lo por l o s hombro s,
sáquelo del gancho levantándolo.

3. Siempre sujetándol o desde el interior, deslice


primero un brazo y después el otro, dentro de
las mangas.

Desde el interior estire el delantal p or en-


cima de los hombro s.

4. Co l ocando sus manos p or detrás del cuello ,


amarre las cintas que están ah!.

Hágalo sin tocar el delantal por fuera

s. Junte los dos bordes de atrás para que se en-


fréot.en.

Dobl4 lo que sobra hasta que el delantal se


ajuste a su cuerpo . Con una mano t ome las
cintas de la cintura y amárrelas en un lazo .
199

QUE SE HACE:

PARA SACARSE UN DELANTAL QUE SE MANDA INMEDIATAMENTE


A LA LAVANDERIA :

l. Desamarre las cintas del cuello y de la cin-


tura.

2. Sáquese el delantal, dejándolo caer.

Tenga cuidado de n o t o car los brazo s o el uni-


f o rme con las mano s.

ESTAN CONTAMINADAS

Saque los brazos sujetando 1 a par.te_ de afuera


de las mangas.

3. Hágalo un rollo c o n las manos y déjelo cae r


en el cesto de ropa que c o rresponde a d o n d e
le diga su profeso ra.

Tenga cuidado de n o acercarlo a su unifo rme


ni a los brazos cuando l o enrolla y l o s guarda.

4. LAVESE LAS MANOS


2 00

COMO SE S~CA UN DELANTAL QUE VA A USARSE DE ~\.JEVO:

l. Desamarre las cintas del cue llo y de la


cintura.
201

2. LAVESE LAS MANOS

Antes de empezar sÚbase las mangas de tal modo


que no se moje los puños "

3. Desamarre las cintas del cuello y sáquese el


delantal.

DEBE SACARSELO SIN TOCARLO POR FUERA

De o tro modo, contagiará la parte de ad~ntro


con sus manos.

Por la parte de atrás del cuello tire el delan-


tal hacia delante.
T6melo por a:lentro y sáqueselo, sin tocar la
parte de afuera

4. D6blelo por el revés y por el medio de modo


que los bordes inte.r nos queden uno frente al
otro.

El e>eter ior de la parte contaminada debe quedar


hacia afuera

QUE EL DELANTAL NO ESTE EN CONTACTO CON SU


UNIFORME MIENTRAS HACE ESTO

S. Cuélguelo en el gancho de modo que las costuras


de los honi>ros queden juntas

El borde abierto del delantal debe quedar hacia


la entrada de la unidad. El cuello debe quedar
hacia arriba, de modo que la otra persona que
lo use no ten9a dificultad en pon,rselo.
202

...

6. LAVESE LAS MANOS

De las contagió al doblar el delantal y col-


garlo en el gancho.
203

C A P I T U L O IV

CUIDADO MATUTINO PARA EL ENFERMO AISLADO

Es probable que un enfermo que está aislado se sienta


separado del resto del mundo , ya que todos l o que se
le acercan, incluyendo sus visitas, deben tomar pre-
cauciones especiales. Esto se agudiza, si, además de
estar separado de los demás, la atenci6n que recibe
es diferente

Es p or eso que Ud . debe aprender la técnica de aisla-


miento en tal forma que pueda actuar en f o rma fácil
y natural. Así no será tan obvio que se lava las ma-
nos, se p one un delantal, y toma las cosas en f orma
especial. El enfermo se acostumbrará pronto y no lo
notará en absoluto. Si planifica bien su trab ajo , lo
ayudará más. No tendrá entonces que esperar más de
l o necesario para que Ud. se ponga y sque el delantal.
Para ayudarla, vamos a rep~sar el lavado d e la mañana,
usando la técnica de aislamiento . Supongamos que el
enfermo no puede bajarse de la cama pero puede lavar-
se solo. No va a tener un baño completo en la mañana •

.
I • ..,. -

QUE SE NECESITA:

Necesitará lo habitual:

r opa , limpia

agua para lavarlo y jabón

l o necesario para la limpieza de la boca

una peineta y escobilla


204

Alcoho l para fricciones y p o lvo s de talco.

l. Antes de tocar nada en la unidad, lleve todas


las cosas que se guardan fuera de ella.

Lleve primero la ropa limpia

Si el lavatorio y la taza para los enjuagatorios


se guardan fuera de la unidad, llénelos y llQ-
veselos al enfermo antes que Ud. t oque cualquier
o tra cosa dentro de esa unidad

2. Levante el descanso de la espalda y coloque


todo al alcance del enfermo

No necesita colocarse el delantal para hacer


esto, siempre que tenga cuidado para que sus
r opas no toquen la ropa de cama, mueb les, o
cualquier cosa que esté contaminada.

3. LAVESE LAS r 4-!ANOS


205

4. c uando el enfermo haya terminado de lavarse,


vuelva a la unidad

Re vise todo para asegurarse que no le falta


nad a para el lavado de la manana.

s. v acíe y lave la taza para los enjuagatorio s


y el recipiente para v6mitos

Tenga cuidado para que la taza contaminada y


el recipiente no t oquen su uniforme y que el
enjuagatorio no la salpique. Si tiene que ha-
cerlo con la mano abra la llave del agua, use
una toalla de papel.
206

6. Esterilice el recipiente y la taza inmediatamente


y lléveselos a la unidad

7. v acie el lavatorio y p6ngale agua limpia para


lavarle la espalda al enfermo

Compruebe que no c o ntamina las llaves no se


c ontamina Ud. Hágalo con el mismo cuidado con
que lav6 la taza para l o s enjuagatorio s y el
recipiente para l o s v6rnitos.

8. LAVESE LAS MANOS

9. Si es necesario, p6ngase una mascarilla


•x-
un · delantal. ···

10. Lávele la espalda y hágale la cama corno de


c o stumbre.

RECUERDE: No puede ir a buscar nada fuera de


l a unidad mientras us e e l delantal y sus ma -
n o s estén contaminadas, ni puede tampo c o t o -
carse la cara a meno s que se lave las mano s
p rimero.

11. Haga un atado c o n la r opa sucia en la forma


en que le enseftó su pro fesora.

12. LAVESE LAS MANOS

13. Sáquese las mascarillas y el delantal.


207

14. Llévese la ropa y todas l~s otras cosas


que se guardan fuera de la unidad

Tenga mucho cuidado para no tocar con ellas


su uniforme ni su cara. Su profesora le di-
r~ qué debe hacer con la ropa sucia.

La ropa limpia que no se us6 no puede quedar


en la unidad ni colocarse junto con la sucia.

TODO LO QUE SE SACA DE LA UNIDAD DEBE SER


ESTERILIZADO O QUEMADO

15. LAVESE LAS MANOS


208

C A P I T U L O IV

ALGUNOS OTROS PUNTOS EN LA TECNICA DE AISLAMIENTO

Cuando haya aprendido a dar el lavado de la mañana


siguiendo la técnica de aislamiento.no le será di-
fícil atender a los enfermo s en otras necesidades.
Deb e recordar :

No c ontamine nada fuera de la unidad, ya sea t ocán-


do la cuando sus manos estén contaminadas, o co l oéan-
do la en c ontacto con un objeto que no está 11 limpio "

Use un delantal y una mascarilla cuando trab aje cerca


del enfermo , o cuando haya peligro de que sus r opas
r ocen l o s muebles u otro s objetos de la unidad

QUE SE HACE:

Hay ciar.to s puntos que debe rec ordar con recpec to a


algunas c o sas:

COMIDAS :

1• Cuando se sirve y se retira una band eja, no es


l . necesario un delantal si tiene suficiente cuida-
do para no contaminar su uniforme.

2. Use ·el delantal si Ud. la da la comid a al en-


fermo o se queda con él.
209

3. Recuerde que los plato s y la comida quedan conta-


minados después que el enfermo come

Lo s restos de comida se queman y l o s platos se


esterilizan. Su pro fes ora le enseñará qué hace
con ellos en su h o spital.

4. c uando entra la batjdeja, el salero yrn la azuca-


rera a la unidad, éstos se contaminan

A veces se dejan t odo tiempo en la unid a d . Si no


es así, hay que esterilizarlos despúés de cada
c omida. Su profesora le explicará c6mo se hace
en su hospital.

5. NO OLVIDE LAVARSE LAS MANOS DESPUES DE TOCAR


LA BANDEJA O CUALQUIER COSA QUE HAYA EN ELLA,
PORQUE ESTAN CONTAMINADAS'

EN LOS MOMENTOS QUE SE SIRVE ALIMENTO FUERA DE LAS


COMIDAS Y AGUA PARA BEBER

l. Cuando se sirva o se retire el alimento que se


da· entre comidas o el agua para beb er, n o hay
necesidad de un delantal.

2. Su pro fesora le enseñará qué hace c o n l o s vasos,


tazas y jarros c ontaminados

No o lvide lavarse las manos después de t o carlos


21 0

ORINALES Y CHATAS

l. Si el enfermo necesita ayuda,use el d elantal


y mascarilla.

2. Generalmente la o rina y las depo sicio nes se


vacían en un excusado o v ertedero sin s ome-
terlas a tratamiento especial

Si hay que s ometerlas a tratamiento especial,


l a enfermera le d ir~

3. Cuando lleve para vaciar y limpiar el o rinal


y la chata tenga cuidado para n o c o ntaminar
ninguna o tra cosa de la pieza de servicio

Para tocar la llave del agua o l o q ue tenga


que t o car, use una toalla de papel.

4. Si la chata y el orinal no se guard an en l a


unid ad del enfermo , hay que esterilizarlo s
inmediatamente y cada vez que se utilicen

TEMPERATURA,PULSO Y RESPIRACIONES

l. Generalmente siempre se guarda un term6metro


en la unidad del enfermo .

TOME MEDIDAS PARA QUE NO LO SAQUEN NUNCA NI


QUE LO CONFUNDAN CON EL DE LOS OTROS ENFERMOS.
211

2. Si al tomar la temperatura de la b o ca, el


pulso o c o ntar las respiracio nes, tiene e l
s uf iéiente cuidado para no rozar sus r opas
y la cama del enfermo , no ne~esita usar
d elantal ni masca rilla.

3. Cuando t o me la teznp ~~atura fect~¡, u s e el


de lantal, a meno s que el ..enfermo se c o l oq ue
él mismo el termómetro .

COMO SE LIMPIA LA UNIDAD UNA VEZ QUE EL ENFERMO SE VA

l. Hay que es~eriliza~ t cdo l o que pued a esteti-


lizarse, ya sea haci~ndol o hervir :,· o remo ján-
d o l o en soluciones especiales.

Su profeso ra le dirá qué hace con c ad a uno d e


l cf; objetos.

2. Hay que quemar l os p eriódico s y rev istas.

3. Generalmente se limpia el c o lchón, la almohada ,


la s~bana de goma y l o s muebles, usando una so-
lución especial.

4. Hay que airear la unidad antes de hacer la cama


y admitir a otro enfermo .
212

C A P I T U L O V

EL CUIDADO DEL LACTANTE

a. c6mo hacer una cama

b. cómo se cambia un pañal

c. cómo se levanta al niño: se le c o l o ca


la camisa: se le muda

a. cómo se le limpia diariamente

e. cómo se le pesa

f. cómo se le bafia

g. Cómo se le t o ma la temperatura

h. cómo se le alimenta

i. Llevándolo donde su madre para que le


dé el pecho .
213

C A P I T U L O V

COMO HACER UNA CUNA

Hay diferentes clases de cunas. Algunas tienen abajo


un espacio para colocar t oda la ropa blanca que se
va usar durante 24 horas. Otras veces, se le co l o ca
en una mesa de noche al lado de la cuna. Su pro feso -
ra va a enseftarle qué tipo de cuna se usa en su h os-
pital, y donde se c o loca la ropa blanca.

Todas las cunas tienen .·un colch6n con funda y una


sábana plástica o de goma para proteger el c o lch6n.
214

QUE SE HACE:

va a necesitar

una sábana o funda de c o lch6n

un pro tector de cama

una sábana de algod6n

una frazada de lana ( depende del clima )

l. Prepárese en esta f o rma :

a. Lávese y séquese las manos

b. Junte la r opa blanca y col6quela cerca


de la cuna en el orden en que va a ocu-
par la

2. Si está haciendo la cuna y el nifio está adentro:

Envuélvalo en un frazada de algod6n y s~quelo .


Sujetándolo firmemente con un brazo , ap6 yele
la cabeza en la curva de su codo y c on un an-
tebrazo por la espalda; su mano debe estar de-
baj o de las nalgas

3. Co n la mano libre saque la ropa sucia y guárde-


la donde corresponde

4. Dé vuelta al colch6n

S. Estire la sábana de encima del c o lch6n , y meta


debaj o de éste e l b o rde del lado c o ntrario .
215

6. Co loque en el centro la almohadilla de cama

Quítele la frazada al bebé y déjela junto


c on la ropa sucia.

7. Col oque al bebé en un lado de la cuna, y


meta debajo del colch6n el lado de la sábana
que estaba suelto .

8. Si se usa una funda de c o lch6n, que es seme-


jante a una funda de almohada, meta el co lch6n
en la funda, enseguida c o loque ' ªl b eb é em la
cama y estire la funda p or debajo de ella, me-
tiendo los bordes de la ropa por debaj o del
colch6n

9. Tape al bebé con la frazada de algod6n

Métala bien firme a l o s pies de la cuna y en


f orma floja a l o s lados .

10. Si es necesario, tápQLo con la frazada de lana

11. Lávese y séquese las mano s.


=
216

C A P I T U L O V

COMO SE CAMBIA UN PAÑAL

Es necesario cambiar el pañal al bebé pero esto se


hace generalmente antes :.o después de alimentarlo .

cuando le cambie el pañal, busque si tiene partes


r o jas o c on llagas en la piel, y si las hay, avíse-
le a la enfermera. Fíjese también en el tipo de co-
lor, tamañi, solidez o suavidad de la deposici6n
y si el b~)é ha orinado. La enfermera le dirá para
que l o registre.

Si el nino tiene deposiciones frecuentes ( 4 o más


en 24 h oras ), o estas s on acuo sas o tienen sangre,
dígale a la enfermera y guárdelas para que las exa-
mine. Como la piel del bebé es suave y se irrita
co n facilidad, límpiela sin rudeza.
217

QUE SE HACE:

va a necesitar:

algodón

aceite o agua

un pañal

una almo had illa de cama

un recipiente para el algod6n sucio

l. Prepárese en esta f o rma :

a. Lávese y séquese las manos

b. Junte la r opa en la unidad del bebé

2. Abra los alfileres, ciérralos y dejélo s en un


lugar seguro fuera de la cuna.

3. Límpiele las nalgas c o n algodón

Use aceite o agua. Seque la piel c on algodón,


o seque el exceso de aceite. Deje el algodón
en el recipiente apropiado.

4. Deje el pai'ial sucio y la almohadilla de cama


en l o s recipientes que c o rrespondan

S. P6Dg!le el pai'ial limpio .


218

Hay diferentes maneras de d obla los paftales. La en-


fermera le ensenará el mé~odo que se sigue en su h o s-
pital.
Generalmente se dobla como un cuadrado largo, para lo
cual se aprovecha la mitad. Enseguida el extremo in-
ferior se dobla hacia delante en la proporci6n de un
tercio de largo.

_1
B
219

En el caso de beb~s masculinos esta parte extra se


c o l o ca hacia adelante y hacia atrás en lae niñ as.
Esto permite que la orina se absorba mejor p o rque
el gro s o r aumenta.

Ponga el pañal debajo de las nalgas, pasand o l o s ex-


t.Eemos p o r entre las piernas. Los bordes de l o s lados
se c o l o can sobre el del frente1 Ud. debe c o l o car sus
dedos debajo de la parte en que se juntan los extre-
mo s, para no clavarlo c o n el alfiler.

Po nga el alfiler de lado p e r o con la . cabeza hacia


adelante

6. Po nga una almohadilla de cama limpia, deb aj o


del bebé

7. Lávese y séquese las mano s

8. Re gistre las depo sicio nes .o la orina ..

9. Co muníquele inmediatamente a la enfe rmera si


encuentra sarpullido s o partes rojas en la
piel .
220

C A P I T U L O V

COMO SE LEVANTA AL NIÑO~ SE LE COLOCA LA

CAMISAr SE LE MUDA

A la mayoría de los bebés, les asustan los movimientso


repentino s o rápidosr levante y muévalo con suavidad,
y sujételo con firmeza para que se sienta seguro .

El bebé recién nacido necesita que le sujeten la ca-


beza.
221

QUE SE HACE PARA LEVANTAR AL BEBE:

a
l. Lávese y séquese las manos

2. Con una mano tómele los pies y los t obillos,


c o locando un dedo entre ellos para que el
bebé tenga más firmeza y seguridad.

3. La o tra mano y antebrazo, lo coloca debajo


de los hombros y espaldas del bebé exten-
diendo los dedos para que el pulgar y el
mefiique queden alrededor del cuello, suje-
tando la cabeza con los otros dedos.

Esto da firmeza a la cabeza y cuello del bebé

4. Lev~ntelo cuidadosamente y lléveselo a los


brazos.

QUE SE HACE PARA PONERLE LA CAMISA

Generalmente en los hospitales se viste a los bebés


s o lamente con una camisa o vestido y un pafial
La camisa no tiene botones ni cintas.

l. Introduzca una mano por debajo de la camisa,


y coja los pies del bebé. Con la otra mano
meta la camisa por la cabeza de éste.
222

2. Meta una de sus mano s p o r los pufios d e la


manga.

3. ·To me una de las manos del bebé y m€tasela c on


mucho cuidado por la manga

4. S i se trata de una camisa abierta c on b o t o nes


o lazos:

Introduzca una de su~ · manca en la manga. To-


me la mano del bebé y c o n su otra mano estire
la manga sobre el brazo

5. Suavemente p6ngalo de lado mientras le estira


la camisa en la espalda

6. Co l óquele el otro brazo e n la misma f o r ma

QUE SE HACE PARA ENVOLVER A UN BEBE:

Para hacer esto va a necesitar : una frazada de algod6n


( de una yarda cuadrada )

Para qué el bebé no tenga frío , envuélvalo en una fra-


zada mientras l o alimenta o cuando se lo lleve a la
madre.

l. Muévalo suavemente hacia un lado de la cuna

2. Es tire la frazada. Co lóquela al lado del b ebé


pero con una esquina hacia la cabecera de la
cuna y la o tra esquina hacia les pies .
223

3. Levante al bebé y p6ngalo sobre la frazada.

Cuide de que quede en el centro .


224

4. Doble la esquina inferior de la frazada hacia


arriba para cub .-ir l o s pies y piernas.

S. Doble las esquinas de los lados de la f~aaada


cubriendo sus brazos y pecho.
225

C A P I T U L O V

COMO SE LE LIMPIA DI ARIAMENTE

El lavado diario no es generalmente un bafio completo,-


sino solamente la limpieza de ciertas parte s del cuer-
po.
Como la piel es delicada y se irrita fácilmente, hay
que lavar c on suavidad. Debe observar la piel por si
encuentra sarpullidos o partes rojas, y por si encuen-
tra que l o s ojos eliminan algo . Si se trata de un ni-
fto recién nacido, debe fijarse si el c ord6n pierde
líqúido • Debe dar cuenta a la enfermera inmediatamen-
te de lo que note. Antes de desvestirlo, mantenga la
pieza tibia y libre de corrientes de aire, y cúbralo
c on una frazada para evitar que se enfríe.

Si no limpia al bebé en la cuna ( sino en una mesa


fuera de la cuna) , t6melo siempre, o sújételo con
la mano , cada vez que Ud. se vuelva o se aleje, para
que no se caiga.
226

QUE SE HACE:

va a necesitar:

algod6n

aceite o agua

una camisa, o vestido y un pafia!

un recipiente para el algodón sucio

l. Lávese y s~quese las manos

2. Junte la ropa

Coloque cerca de la cuna le camisa limpia


y el panal

3. Desvista al beb~ en la cuna

D ~jelo cubierto con la frazada para que no se


enfrS.e.
Cuando sea posible p!dale a la enfermera que lo
mire.

4. Coloque la ropa sucia en los recipientes apro-


piados

S. L!rnpiele los oj os primero s

Use un pedazo diferente de algod6n para cada ojo,


y limpie la esqdina interna hacia el lado exter-
no de la cara. Si elimina algo, dígale a la en-
fermera y ella lo atende rá

6. Límpiele la cara, la cabeza y la parte externa


de la oreja.
227

No limpie la nariz a menos que tenga materia.


En ese caso se usan trocitos de algo d6n retor-
cido y humedecidos en agua,

7. Limpie los dobleces de la piel

Hágalo en el cuello , debajo de los brazos,


en la curva del codo, muBecas manos, debajo
de la rodilla, alrededo r de . los tobill o s y
de l o s pies. Saque c on un algod6n el exceso
de agua 6 de aceite.
La enfermera le dirá cómo se iimpia el cor-
d6n.

8. P6ngale la camisa

9. L!mpiele las nalgas y los gehitsles


. .
En caso de ufia niBa, separe ios lados de la
vulva y 11mpielo s de arriba hacia abajo usan-
d o un tro zo difenente de algodón para cada
lado.

10. Póngale el pafial

llJ.. Lávese y s~quese las mano s

12. Dé un informe inmed iato a la enfermera

No te especialmente si hay:

a. Llanto marcado , irritabilidad o inquietud

b. Signos de c o l o r o incomodidad

c. Incapacidad de mover los brazo s, las


piernas o la cabeza
228

d. Sacudidas musculares

e. Ahogo

f. Demasiada secreción en la boca o


en la ;-.nariz

g. Dificultades para tragar o respirar

h. Un marcado color azul en la uñas o


en la piel.
229

C A P I T U L O V

COMO SF! LE PESA

Siempre hay que pesar al bebé;en el momento de nacer


Se puede hacer en la sala de partos o en la sala cuna.
Durante su estada en el hospital se puede pesar el be-
bé una vez al d!a, o so lamente dos o tres veces a la
semana, pero siempre a la misma hora que se le ha pe-
sado antes.
Cuando tienen más edad se les pesa de ~cuerdo a las
ordenes del médico. La enfermera le dirá la frecuen-
cia c on que h~y que pesarlo y la hora en que se le
pesa.

La mayoría de los bebés se asustan ·con l os movimientos


repentino s o rápidos¡ levante y muévalo c on suavidad
y sgjételo firme para que sienta seguro.
230

QUE SE HACE:

va a necesitar: una balanza, papel para cubrir


la balanza y papel para limpiar

l. Prepárese en est~ forma :

a. Lávese y séquese las manos

b. Compruebe el peso anterior del bebé

c. Coloque en el platillo el papel de cubierta


y equilibre la balanza usando el papel para
limpiar para mover el peso.

d. Desvista . al bebé, cubriéndolo con una fra-


zada para que no se enfrte

Si se usa la técnica de del.Bntal, col6quese


el delantal de aislamiento.

2. Levante con cuidado al bebé, en la forma en que


se le enseñ6

3. Lentamente colóquele en el platillo

Sujételo con una mano encima de su cuerpo, de


modo que si se mueve de repente o se acerca mu-
cho al borde del platillo, lo pueda volver a su
p o sici6n.

4. Con el papel para limpiar coloque al peso en


for~a que se equilibre la balanza.

Fíjtse en el peso. Avísele inmediatamente a la


enfermera si el peso del bebé es de 6 u 8 libras
más o menos que el peso que registr6 anteriormen-
te.

S. Levante al bebé como l o hizo antes •


.._
Vuélvalo a la cuna, y c'Úbralo con una frazada.
231

6. Saque el papel que se us6 para la balanza

En la sala para l os recién nacidos, registre


el peso ahora.
Si se trata de un nifio mayor, que no perte-
nezca a la sala de recién nacidos y si hay
que usar un delantal de aislamiento. Ud. re-
cibirá de le enfermera las instrucciones pa-
ra registrar su peso.

7. Lávese y séquese las manos

Sáquese el delantal d e iaislamiento c omo se


le ha enseftado

8. Vista al bebé

9. En caso de un bebé de más edad, levante


l o s lados de la cuna.
232

C A P I T U L O V

COMO SE LE BAÑA

En alguno s ho spitales se b afia a los bebés t odos los


días, en o tros, cada tercer d ía. Si no se le da un
bafio completo , se le da un b afio parcial. La enferme-
ra la p ondrá al tanto del sistema de sus ho spital.

El b afio tiene los siguientes propósitos:

Mantener la piel mlimpia y seca

Hacer que el nifio se sienta seguro y c6modo

Estimular la circulación

Darle un cuidado " maternal 11

Mientras l o bafte, debe observar y comunicarle a la


enfermera:

Si hay sarpullidos, llagas, o partes enrojecidas en


la r piel.

Si hay eliminaci6n en cualquier parte del cuerpo

Si el nifio realiza acto s extraños.

Tómelo con suavidad1 sujete siempre el cuerpo y la


cabeza con firmeza. Nunca se vuelva sin subirle la
ropa de cama. Mientras no haya peligro déjelo que
patalee y se mueva a su gusto .
233

H~gale el b año agradabls. Evite la premura y las


interrupciones tanto como pueda. El : sentirse co-
mo co n su madre, le hace b ien. Mientras desarro lla
su labor, convérsele y juegue con él.

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QUE SE HACE:

Para dar un baño completo va a necesitar:

jab 6n suave

aceite si se usa en su ho spital

algod6n limpio

dos paño s de material suave para lavarle


234

una toalla suave

la r opa de cama necesaria { una pequeña sáb ana de goma;


una sábana para cuna; un cubrecama, si se usa en el
h o spitaf)

r opa para el niño ( camisa; pañal; vestido ; si se usa


en el ho spital )

lavatorio o tina chica

frazada de algodón para el - ~año

dos palillo s dedientes

b o lsa para la ropa sucia, si se usa en el hospital

recipiente para botar l o que se usó

l. Prepárese en esta f orma:

a. L~vese y séquese las manos

b. Junte las c osas. · que necesita.


Déjelas en un lugar limpio dentro
de la unidad del bebé

c. Llene el lavatorio en sus dos tercio s


con agua caliente a una temperatura
agradable, al co l ocar dentro de ella
la parte interna d e su muñeca

2. Póngase el delantal de aislamiénto ( Si es


esta la costumbre para bañar los bebés en
su hospi ta 1)
235

3 ñrregle la ropa de cama y la ropa del b ebé


en la silla, en el orden en que la va a usar.

Ponga los otros objeto s en la mesa de noche.

4. Tuerza unos cuatro o cinco pedazos de algodón


f ormando mechas, y hurnedézcalas en a~a

s. Háblele

Suavemente baje el lado de la cuna.


236

6. S in apretarlo, envu~lvalo en una frazada de


algodón, dejándo le los brazos a l o s lados

7. Lírnpiele las ventaQillas de la nariz y las


orejas con mechas individuales.

Bote las mechas de algodón en el recipiente


para la basura

a. Humedezca en agua caliente el paño para lim-


piar y lávele la cara.

LÍmpiele los ojos son suavidad desde el b orde


interno hacia afuera. Séquele la cara c on go l-
pecitos pequeños usando la toella

9. Tome el bebé

Sujétele con firmeza los hombros y la cabeza


237

10. Co n una mano f o rme bas tante espuma y jabó-


nele la cabeza

No le eche jabón a l o s o jos

11. Sujételo s obre e l lavatorio

Enjuáguele bien la cabeza c o n agua limpia y


c a liente .
Séquele con g o lpecito s suaves. Si tiene es-
camo s o el cuero cabelludo , dígale a la e n-
fermera

12. Desvista al bebé

Eche la r op a sucia en la bolsa o d o nde se


l e ha ensefiado

13. Co l oque al bebé e n la almohadilla de cama

En un extremo de l a cama e xtienda la fra zada


de algodón para l a c a ma

1 4. Fo rme espuma c o n las manos o c on un pafio


para lavarse, empapado en agua calie nte
y jabonosa

Lávele el cuerpo s i gu i e ndo este o r den : cue-


llo ,brazo s, nalgas Bo te e l pafto u s a d o

15. Co l 6quele encima l a frazada de algo dón

Enjuáguese y séquese las mano s c on rapide z


238

\\\ \
\ \ 1 ,\ )

'

,
16. Saque al bebé de la cama

Con un brazo sujételo con firmeza1 afirmándole


la cabeza y espalda.

17. Mátalo en la ba~era ( lavatorio ) empezando


por los pies.

Con la otra mano sujétele y dir{jale las pier-


nas y nalgas.
Mánténgalo siempre sujeto con una de sus manos
y su brazo.
Con la mano libre enjuáguelo con el segundo pa-
ño para lavarse. Si no se le puede co l ocar den-
tro del bafto, enjuáguelo en la cama, saturando
el segundo paño con agua caliente y limpia.
239 .

18 ~ Sáquelo de la bañera ( o lavatorio )

Co l 6 que l o encima d e l a frazada de algo d 6 n


q ue está seca. Tápelo sin asjustárse la al
cuerpo . Séquelo minucio samente . c o n g o lpe-
cito s suaves. Seque p o r dentro . l o s p lie-
gues naturales y las d obladuras de la piel.

19. P6ngala en una parte de la cama

Deje a un lado la frazada c o n la r opa sucia.


Póngale la camisa

Límpie l o s genitales d e la niña c o n una mo ta


d e algod ó n humedecida en agua caliente o c o n
aceite. Co n mucha suavidad eche hacia a trás
el prepucio del niño ; no l o haga si ve llmuy
tirante.
En e ste caso informe a la enfermera,
Cuando el prepucio está tirante n o hay que
f orzarlo.

20 . Póngale el pañal

21. LÍmpiele las uñas c o n un mo ndadie nte s .

Si están largas r e c 6 rteselas r e c t a. La e nfer-


mera l e enseñará a hacerlo .

COMO SE HACE :

La cama del b ebé después del b año :


240

1. Ponga 1el beb€l a los pies de la cama

2. En la parte de la cabecera, suelte la. sábana


de abajo

D6blela hacia los pies de la cama


241

3. Estire la sábana de la cuna por encima del


c o lch6n '

Métala en la parte superior del c o lchó n

4. Cambie:. al bebé a la cabecera

Saque la sábana sucia y p6ngala c on el res-


t o de la ropa usada

S. Meta la sábana de la cuna en la parte de l o s


pies.

6. Fo rme cuadrado s en las esquinas c o n las sába-


nas de arriba y de ab ajo.

7. Po r el lado en que está, meta la sáb ana de-


b ajo del colchón

O. Ponga al beb~ en e l c e ntro del c o lchó n en


una almohadilla de cama y una pequeña sá-
b ana de goma

9. Le vante ese l a d o d e la cuna y repita l o


mismo al otro lado

10. Sin apretar, c o l o que una frazada .:.d e algo d ó n


s obre el bebé

11, S i se usa en su h os pital , ponga más r op a d e


cama ene irna

Pregúntele a la enfermera
242

12. Levante al lado de la cuna

13. S~quese el delantal de aislamiento c omo ha


aprendido

14. Coloque la ropa sucia o lo que debe botarse


en los recipientes apropiados.

15. IAVESE LAS :·.MANos.

16. Dé cuenta a la enfermera de .sus observaciones.


243

C A P I T U L O V

COMO SE LB TCMA LA TEMPERATURA

La temperatura del recién nacido o del que tiene más


edad, puede tomarse en el recto o en la exila ( de -
baj o del b razo). Debe tener un termómetro para cada
beb é. La temperatura puede t omarse una vez a l d ía o
c on menos frecuencia. La enfermera le dirá la f orma,
la frecuencia y la hora a que debe t omarse l a t empe-
ratura.
244

QUE SE HACE:

va a necesitar:

un term6metro rectal

un lubricante ( vaselina o aceite )

algodón

un recipiente para el algodón sucio.

l. Lávese y sé4uese las manos

2. Junte lo que va a usar.

3. Limpie el term6me tr o con algod6n empapado


en agua clara.

Revise la tarjeta con el nombre, el b raza-


lete de identificaci6n o la etiqueta. Sa-
cuda la columna de mercurio para que b aje
a 35° o a meno s. En caso de temperatura
rectal, lubrique el termómetro co n un al-
god6n con vaselina o aceite. Deje el ter-
mómetro en la unidad del bebé, pero no en
la cama

4. Tómele la temperatura en esta f o rma:

a. Abra l o s alfileres del panal y ense gui-


da ci~rrel o s y déjelos en un lugar se-
guro.
245

b. Examine · el termómetro y vea que no tenga


grietas o queb raduras.

c. Separe las nalgas y coloque suavemente


el term6metro , en forma que la parte en-
gro sada se introduzca en el recto , entre
media y una pulgada, no hay q_ue f orzarlo
Si tiene dificul t ades, llame a la enfer-
mera inmediatamente.

d. Déjelo ahi p or tre s minutos

e. Saque el termómetro , l!rnpielo c on algod6n


y lea la temperatura

f. Limpie y co l 6quel o en el frasco que co rres-


ponde para q ue se desinfecte

g. cambie el pañal

h. LAVESE LAS .MANOS

i. Registre la temperatura e indique si se


trata de temperatura rectal.

5. Tome en esta f orma la temperatura axilar:

a. Examine el termómetro para ver que no ten-


ga grietas o queb raduras.

b. Suelte la ropa de cama: asegúrese que la


axila está seca
246

c. Ponga el term6metro c on la parte engro sada


debajo de la axila de manera que no pueda
circ .. lar aire.

d. Sujete el brazo del bebé contra el c o stado ,


para que el term6metro no cambie de lugar
durante cinco minuto s

e. Sáquelo, límpielo con algod6n y vea la tem-


peratura

f. Límpielo y col6quelo en el frasco que corres-


p onde para que se d e sinfecte

g. Arregle la ropa de cama

h. Lávese las mano s

i. Registre la temperatura e indique que se tra-


ta de temperatura axilar

'J /,
! .. -/ .....
\ . ·"'---
·~ - ..../
247

C A P I T U L O V

COMO SE LE ALIMENTA

Esta lecci6n se refier e a l a alimentación por b i b erón


y por chup ete. Los bebés reciben alimento generalmente
cad a 3 o 4 horas, o se les alimenta en forma irregular.
Hay al guno s que después de un intervalo de 3 6 4 ho-
ras est~n tristes e inqúieto s1 o tros no parecen tener
ha mbre d espués de este intervalo . Es lo que se denomi-
na" 11 dema·n a a individual 11 o 11 alimentaci6 n a uto -
regulada 11 • Significa en o tras palabras, que sólo se
alimenta el bebé cuando presenta signos de hambre.
La enfermera la pondr~ al d ía respecto al h o rario d e
alimentaci6n de su hospital.

En al guno s hospitales, para alimentarlos se l o s saca


de la cuna y se los tiene e n b razos. Parece que es-
t e c o ntacto estrecho durante el período ~e alimenta-
ció n, l es p rodujera sentimiento s de agrado .
- 248

QUE SE HACE:

Para alimentar el bebé Ud. va a necesitar una bot e -


lla c on chupe te, un cubr e chupe te y una f6rmula es-
téril.
cada fórmula tiene su etiqueta que corresp onde al
beb é.
La e nferme ra le enseffará c6mo se ponen las e tique -
tas a las f6rrnulas en su ho spital. También va a
ne c e sitar un calentador para botellas ( o lavato-
rio c on a gua caliente ) y o tro recipiente p ara
las b o tellas vacías y l o s chupe tes.

l. Prepárese en esta f orma:

a. LAVASE 'LAS MANOS


249

b. Elija la f6rmula para el bebé y coloque


la botella en e l calentador.

2. Una vez que la f6rmula se ha cale ntado por


unos minutos, ll~vela a ta cuna

Revise ta etiqueta de ta f6rmula c on e l nom-


b re del bebé que est~ en le cuna y su b raza-
l e te de identificaci6n o el papel c o n su nom-
b re.

3. Saque el cubre -chupe t e , y col6que l o d o n d e


c orresponde.

Para probar la t e mperatura y la f o rma ·en que


sale el líquido , de j e caer algunas ~ o tas del
chupete, no en cho rr os ni tampoco q u e s e d es-
parrame.

4. Si es necesario camb i e e l pañal

L~vese las manos de nue vo.

s. Coloque un paño suave o un ~b abero b ajo la


ba rbilla.

6. Tome al bebé en sus b razos y envuélvalo e n


una frazada

So sténgalo . .para que e sté c6modo .


250

Tóquele los lab ios con el chupete • cuando


empiece a mover l o s lab ios y a chupar, intro.
duzca el chupete de modo que quede encima de
l a lengua.

Siempre incline la b otella para que el chupe-


t e esté con l e che todo el tiempo. Deb e infor-
mar a la enfermera e n caso que la leche salga
demasiado rápida o d emasiado lenta, en caso
que aparenteme nte el b ebé t e nga d ificultad
p ara respi~ar, succionar o tragar.

Infórmela también si el beb é no qu ier e t omar


la leche, pero no insista en que la t ome a
la fuerza.
251

7. Despu~s de alimentarlo, quítele los gases

Sujetándole la -,cab eza y los honi>ro s, le-


vántelo en posición casi recta y gol p éele
la espalda suavemente o afírrnelo sobre su
hombro y le da golpecitos suaves. A cu~ste­
lo de lado en la cama, o boca abajo, en la
forma que le indique la enfermera.

8. Enjuague la b otella y el chupete en a gua


fría.

Guárdelos en los recipientes que c o rrespon-


de.

9. Lávese las mano s

10. Registre la cantidad de alimento que tom6


el beb~ y la f o rma en que lo hizo.
252

C A P I T U L O V

LLEVANDOLO DONDE SU MADRE PARA QUE LE DE

PECHO

Las horas en que hay que llevar al bebé para que su


madre lo alimente, dependen d el horario de alirnenta-
ci6n d el hospital o del hecho que la madre esté con
~l la mayor parte del tiempo ( compartiendo la p ie-
za;)
La enfermera se lo dará a c onocer, así corno también
el tiempo que dura su alirnentaci6n. La enfermera Ile-
vará al b eb é donde su madre, cuando por primera vez
el b ebé va a recibir el pecho y ayudará a la madre
a co locarse al bebé
253

QUE SE HACE:

l. L~vese las mano s

2. Envuelva al bebé en una frazada

3. Lléveselo a la mad r e

Sujétela la cab eza en la curva de su c odo


y la espalda y nalg as con su antebrazo
y mano.

4. I dentifique el nombre d el bebé con el de


la madre

5. Fíjese en que la mad re se lave las manos


antes de tomar al b eb é

Debe estar en una posici6n c6moda en la


cama o sentarse en una silla.

6. Recu~rdeleque d eb e lavarse los p ezone s


que el beb~ tome e l pecho ( si este es el
procedimiento q ue se lleva a cabo en e l
ho spital)

7. Examine los pecho s y p ezones por si existe n


p artes rojizas, grie tas o llagas.
254

Si encuentra al go así, avísele a la enfermera


antes de colocar al bebé

8. Vue lva para ve r si e l b ebé esta amamantán-


do se bien

Si le parece que tiene dificultades en ali-


mentarse o est~ sofio liento y no t orna, d í gale
a la enfermera para que ayude a la madre .
No olvide recordar a la madre que deb e sa•
carle los gases a l final de cada alirnenta-
ci6n

9. Lleve al bebé a la s a la cuna

Quítele la frazada c on que lo envo lvi6 . Acués-


t e l o d e lado o boca ab ajo corno l e ind i q ue la
e nfermera.

10. Lávese las manos


255

C A P I T U L O VI

C U J: D A D O DE L A MADRE

a. Cuid ado p erineal

b. Cuid a do d e los pecho s y


pezones

c. Cómo c o l ocar un sujetador


de p echo .
256
1
C A P I T U L O VI

C U I D A D O P I R I N E A L

Durante vario s dias, después de dar a luz, se produce


una pérdida de sangre, llamada loquios. Para que la en-
ferma se sienta limpia y cómoda durante l os primeros
días, hasta que pueda levantarse y hacerlo ella s o la,
debe limpiarse su perineo por lo menos una vez al d ía,
y de spu~s de cada movimientos intestinal.

QUE SE HACE:

va a necesitar :

una chata c on tapa

la s o lución que se usa en el h o spital

motas de algod6n y una t oalla higiénica

un saco o p apel para el algodón y la toalla sucia

un cintúrón·. limpio y alfileres de gancho.

l. Lávese las mano s


257

2. Lleve lo que va a necesitar a la cama y dé-


jelo s donde pueda alcanzarlos con facilidad

3. Daje la cama

Eche hacia atrás la r opa de cama y pro teja


a la enferma con una frazada o,sábana. La
enfermera le dirá c6mo hacerlo.

4. Desabroche la t o alla higiénica en la parte


delantera,

Pídale a la enferma que se ponga de lado y


saque el alfiler de la parte de atrás. Sa-
que la toalla sucia de adelante para atrás,
fijándose en la cantidad y color de l os lo-
quios, Bótela en la bolsa o en el papel.

s. Siente a la enferma en la chata

6. LAVESE LAS MANOS

7. Deje caer la s o lución sobre el perineo o


humedezca las mo tas de algod6n.

Use trozos distinto s de algosón cada vez.


Limpie los bordes de cada lado con movi-
miento de arriba hacia abajo.
Bo te el algodón en el saco de :,papel.
Si es necesario , seque con algodón limpio .
258

O. Saque la chata

Col6quela sobre la silla y tápela.

9. Haga que la enferma se ponga de lado

Separe las nalgas y limpie la parte al-


rededor del recto.
Seque con motas de algod6n.

10. Coloque la t oalla higiénica limpia desde


adelante hacia atrás, sujetándo la con
los alfileres.

11. Llévese lo que ocup6.

12.. LAVESE LAS MANOS


259

C A P I T U L O VI

CUIDADO DE LOS PECHOS Y PEZONES

Hay que cuidar los pezones de la madre para evitar


las infecciones. En el bafio de la maftana, hay que
lavar los pechos y los pezones, con jab6n, agua y
un paño. Mientras la madre no pueda hacerlo sola,
Ud . debe lavarlos

QUE SE HACE:

va a necesitar :

una camisa limpia para la madres

una pano limpio y una toalla

un lavatorio con agua caliente

jabón

l. Lleve a la cama l o que va a necesitar

2. Lávese las manos

3. Quítele la camisa
260

4. Lave con agua y jab ón los pecho s y l o s


pezones

Empiece con el pezón y lave desde esta


zona hasta el pecho

Saque el jab ón del paño y enjuague la


solución jabonosa del pecho y del pezón

Saque con la t o alla limpia

S. Obs~rvelos

Av!sele a la e nfermera si encuentra


alguna zona roja o con llagas

6. Póngale la camisa limpia

La abertura está al frente Si hay


que cubrir l o s pechos o pezones c o n
algo especial, la enfermera le hará
saber.
261

C A P I T U L O VI

COMO COLOCAR UN SUJETADOR DE PECHO

cuand o la leche baja a l o s pechos d e spués de dar a


luz, esto s se ponen p esad o s y l a persona se s i en t e
incómo da p or algunos días. Se p u ede usar un suje-
tador de pecho que disminuya es ta pesadez y que
mantenga l o s pechos .
Puede ser que la madre t e n ga su propio sopo rte q u e
sirve l o s mismos pr o p ós itos .

QUE SE HACE:

1. Lleve a la cama un su j e tado r de pecho y


a lguno s alfileres de g ancho.
262

2. Lávese las manos

3. Pídale que se ponga de lado

Deslice el sujetador bajo los h ombros.


Haga que se vuelva al otro lado de mo-
do que no se tuerza en la espalda.
Ajuste los tirantes sobre los hombro s

4. Pídale que co l oque las manos deb aj o de


cada pecho

Esto se hace para que queden en p osici6n


normal y hacia el centro

5. Ate el sujetador

Junte los do s bordes al medio . Estire


en el borde inferior para que l o s pechos
queden firmes

Cierre con alfileres de :gancho , c o l oca-


dos a lo largo y empezando por el extre-
mo inferior.

Haga pinzas y cierre ( con l o s alfileres


a lo largo ) p or l o s lados y deb aj o d e
los pechos para que ajuste más y sujete (
los pechos firmeme nte

Ajuste y ab r oche l o s tirantes de l os


?ombros.

6. LAVESE LAS MANOS .

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