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5 consejos para usar los hornos

microondas con seguridad


¿Sabía que la Administración de Alimentos y Medicamentos de los EE. UU. (FDA, pos
sus siglas en inglés) regula los hornos microondas? Los fabricantes de hornos
microondas deben certificar que sus productos cumplen con las normas de seguridad
creadas y aplicadas por la FDA para proteger la salud pública.

Por lo general, los hornos microondas son seguros cuando se usan correctamente. No
obstante, algunas personas han sufrido quemaduras, y en casos menos frecuentes, otras
lesiones causadas por la radiación del microondas, especialmente en casos que implican
un uso o un mantenimiento inadecuados. Por ello, los hornos siempre deben usarse (siga
leyendo más abajo para conocer las recomendaciones) y mantenerse según las
recomendaciones de los manuales del usuario.

Cómo funcionan los hornos microondas

En primer lugar, ha de saber que las microondas —las ondas producidas por estos
hornos— son un tipo de radiación electromagnética. Estas ondas hacen que las
moléculas de agua presentes en los alimentos vibren. Estas vibraciones, a su vez,
producen el calor que cocina los alimentos.

Las ondas se generan en un tubo de vacío llamado magnetrón que se encuentra en el


interior del horno. Se reflejan en el interior de metal del horno; pueden atravesar vidrio,
papel, plástico y otros materiales similares; y son absorbidas por los alimentos.

Las microondas son un tipo de radiación no ionizante. No tienen los mismos riesgos que
los rayos X u otros tipos de radiación ionizante (la radiación ionizante es un tipo de
radiación más energética que puede provocar cambios en las células humanas).

Riesgos de lesiones y antecedentes sobre los hornos microondas

La mayoría de las lesiones relacionadas con los hornos microondas son el resultado de
quemaduras por calor como consecuencia del contacto con recipientes calientes,
alimentos sobrecalentados o explosiones de líquidos.

La mayoría de las lesiones no tienen relación con la radiación. Dicho esto, ha habido un
número muy reducido de casos en los que se han producido lesiones por radiación
debido a circunstancias inusuales o un mantenimiento inadecuado.

En general, estas lesiones por radiación ocurren como consecuencia de la exposición a


cantidades elevadas de radiación de microondas que escapa a través de espacios en los
sellos de los hornos microondas. Sin embargo, las normativas de la FDA estipulan que
los hornos microondas deben diseñarse de manera que eviten estas fugas de radiación.
De hecho, los fabricantes deben certificar que sus hornos de microondas cumplen con
las normas de seguridad de la FDA. Estas normas exigen que la radiación emitida por
los hornos esté muy por debajo de los niveles que se sabe que causan lesiones.
Si bien algunas personas han demostrado preocupación acerca del hecho de que los
hornos microondas pueden provocar interferencias en ciertos marcapasos eléctricos, los
marcapasos actuales están diseñados a prueba de estas interferencias. Pregunte a su
proveedor médico su tiene alguna inquietude.

Consejos de seguridad

1. Siga las instrucciones de uso del fabricante. Las instrucciones del manual del
usuario indican las precauciones de seguridad y los procedimientos de uso
recomendados. Por ejemplo, algunos hornos microondas no deben utilizarse
cuando están vacíos. Además, no se debe calentar agua o líquidos durante más
tiempo del recomendado e indicado por el fabricante.
2. Use recipientes aptos para hornos microondas. Use recipientes fabricados
especialmente para usarse en los hornos microondas. Por lo general, no debe
usar recipientes metálicos ni papel de aluminio, ya que estos materiales reflejan
las microondas y hacen que la comida se caliente de manera poco uniforme y
también pueden dañar el horno. Asimismo, tampoco debe usar algunos
recipientes de plástico porque los alimentos calientes podrían derretirlos. La
FDA recomienda utilizar recipientes de vidrio, cerámica y plástico diseñados
para usarse en hornos microondas.
3. Evite sobrecalentar el agua. El agua “sobrecalentada” es agua que se ha
calentado por encima del punto de ebullición, pero sin los indicios
característicos de estar hirviendo. Si usa un horno microondas para calentar agua
por encima del punto de ebullición dentro de un recipiente limpio, la más
mínima perturbación o un pequeño movimiento pueden hacer que el agua
explote violentamente y salte fuera del recipiente. Se han reportado quemaduras
de piel graves o lesiones por agua hirviendo en la cara y las manos de las
personas como resultado de este fenómeno.

Agregar ingredientes tales como café instantáneo o azúcar al agua antes de


calentar reduce en gran medida el riesgo erupción de agua caliente. Recuerde
también seguir las instrucciones del fabricante a la hora de calendar.
4. Descarte la existencia de fugas. A menos que las bisagras, el cierre o los sellos
de la puerta estén dañados, el riesgo de que haya fugas de radiación de estos
hornos es mínimo y no debe ser causa de preocupación. La FDA recomienda
inspeccionar el horno para descartar la existencia de estos problemas. La agencia
también recomienda no usar un horno si la puerta no cierra bien o si está
doblada, deformada o dañada de algún modo.
5. No use hornos que parezcan funcionar con la puerta abierta. La FDA vigila
estos electrodomésticos para detectar problemas de seguridad relacionados con
la radiación y ha recibido un número creciente de denuncias sobre hornos
microondas que parecen permanecer encendidos —y funcionar— con la puerta
abierta. Si esto sucede, la FDA recomienda que deje de usar el horno
microondas inmediatamente.

“En ocasiones, un fallo en el interruptor de cierre de la puerta puede permitir que el


ventilador, la luz y/o el plato giratorio funcionen con la puerta abierta. Sin embargo, los
sistemas de seguridad redundantes de los hornos microondas están diseñados para
impedir que el magnetrón emita microondas”, explica Ting Song, Ph.D., una ingeniera
biomédica de Resonancia Magnética y Productos Electrónicos de la FDA. “Cuando los
sistemas de seguridad redundantes funcionan normalmente, el magnetrón no se pondrá
en funcionamiento. Sin embargo, dado que cada horno tiene un diseño distinto, los
consumidores no pueden estar un 100 por cien seguros de que no se emita radiación de
microondas en estos casos”.

Cómo denunciar un problema

Según la experiencia de la FDA, la mayoría de los hornos de microondas que se


someten a pruebas tienen fugas de radiación muy pequeñas o indetectables.

No obstante, si su horno microondas demuestra algún indicio de fugas o daños, o si


sospecha que pudiera tener un problema de radiación, puede ponerse en contacto con el
fabricante del horno. Los fabricantes están obligados a informar a la FDA sobre
diversos problemas, incluidos los defectos en los hornos microondas, el incumplimiento
de las normas federales, y los casos de exposición accidental a la radiación. (Para
obtener más información, visite la página de la FDA sobre hornos microondas - en
inglés)

También puede denunciar todos los problemas o lesiones que sospeche en relación con
la radiación directamente a la FDA completando y enviando por correo el Formulario de
reporte de exposición accidental a la radiación.

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