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FACULTAD DE TEOLOGÍA
PRESENTA:
Pentateuco
DOCENTE:
Hay que tener en cuenta que el libro del Deuteronomio tiene la designación de
“segunda ley”, es decir, que más que un código de leyes en sentido estricto, es
Álvarez Duarte Víctor Manuel Universidad Pontificia de México
DELIMITACIÓN DE LA PERICOPA
Pericopa anterior; Dt 30, 1-14, lleva por título vuelta del desierto y
conversión: en ella se narra como Moisés convoca a todo Israel y le transmite
las palabras que Yahvé mando a Moisés concluir en el país de Moab. Así
mismo este fragmento precede de el recordatorio de lo que Dios ha hecho por
su pueblo y de las consecuencias que tiene el haberse alejado de Él. Describe
como Dios deja la acción de los hombres a su elección, es decir, la compasión
y misericordia de Dios frente a un pueblo que tiene la opción de elegir. La
libre elección es la característica de la pericopa a examinar.
PERSONAJES: Dios (Dt 28, 69), Moises (Dt 29, 1) y pueblo de Israel (Dt 29, 1).
ESTRUCTURA INTERNA
Dt 30, 15:
Dt 30, 16-18:
Dt 30, 19:
Dt 30, 20
CONTENIDO TEMÁTICO
En Dt 30, 15–20 el pueblo fue llamado para escoger entre la vida y el bien, por
una parte, y la muerte y el mal por la otra: vida por obediencia, pero muerte
por desobediencia. En este texto se observa que Moisés rogó fuertemente al
pueblo que escogiera vida y bendición. La respuesta deseada trajo buenos
resultados, incluyendo prolongación de días y vida espiritual abundante,
implicado en las palabras: «siguiéndole a él». La única alternativa era la
maldición.
1. El camino
Álvarez Duarte Víctor Manuel Universidad Pontificia de México
Ex 32, 8: Bien pronto se han apartado del camino que yo les había prescrito.
Se han hecho un becerro fundido y se han postrado ante él; le han ofrecido
sacrificios y han dicho: ‘Éste es tu Dios, Israel, el que te ha sacado del país de
Egipto.’ En el mismo libro de Deuteronomio encontramos el referente sobre el
camino, que hace alusión a la petición de seguimiento recto hacia Yahvé.
decir a Yahvé que él será tu Dios y tú seguirás sus caminos, observarás sus
preceptos, sus mandamientos y sus normas, y escucharás su voz.
b) En el Antiguo Testamento
Sal 1, 6: Pues Yahvé conoce el camino de los justos, pero el camino de los
malvados se extravía. Sal 25, 4: 27, 11; 86, 11; 119, 27.33; 143, 8).
Jb 16, 21-22. Que él juzgue entre el hombre y Dios, como suele ocurrir entre
mortales, pues me esperan años contados y emprenderé un camino sin retorno.
c) En el Nuevo Testamento
3
Cfr. «Vida» en Diccionario Bíblico Digital, Pierre Jean Montana (dir.), Grupo C Service &
Desing Ltda. Barranquilla 2003, 884.
4
Cfr. «Vida» en Diccionario Bíblico Digital, Pierre Jean Montana (dir.), Grupo C Service &
Desing Ltda. Barranquilla 2003, 604.
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b) En el Antiguo Testamento
Gn 2, 9: Yahvé Dios hizo brotar del suelo toda clase de árboles deleitosos a la
vista y buenos para comer, y en medio del jardín, el árbol de la vida y el árbol
de la ciencia del bien y del mal.
Si 15, 17: Ante los hombres está la vida y la muerte, a cada uno se le dará lo
que prefiera; 33, 14: Frente al mal está el bien, frente a la muerte, la vida; así
frente al piadoso, el pecador*.
c) En el Nuevo Testamento
3. Delante de ti
b) En el Antiguo Testamento
1 Cro 14, 15: Y cuando oigas un ruido de pasos en la cima de las balsameras,
preséntales batalla, porque Dios sale delante de ti para derrotar al ejército de
los filisteos.; 17, 8: He estado contigo dondequiera que hayas ido, he
eliminado de delante de ti a todos tus enemigos y voy a hacer que tu nombre
sea famoso, como el de los grandes de la tierra.; 29, 15: Porque forasteros y
huéspedes somos delante de ti, como todos nuestros antepasados; nuestra vida
es como una sombra sobre la tierra, y no hay esperanza.
2 Cro 20, 9: Si nos sobreviene algún mal, espada, castigo, peste o hambre, nos
presentaremos delante de este templo, delante de ti, porque tu Nombre reside
en este templo. Clamaremos a ti en nuestra angustia, y tú oirás y nos salvarás.
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c) En el Nuevo Testamento
Mt 11, 10: Éste es de quien está escrito: Voy a enviar a mi mensajero delante
de ti, que preparará tu camino por delante de ti.
Escuchar es parte del sentido del oído. Esto quiere decir que se debe prestar
profunda atención para que el sonido sea descodificado y el mensaje que se
recibe sea entendido con claridad. Es cuchar los mandatos de Yahvé implican
que se deben atender, aceptar y asimilar. De lo contrario el seguimiento del
hombre para con Dios es limitado o nulo.
Ex 15, 26: Dijo: «Si escuchas atentamente la voz de Yahvé, tu Dios, y haces
lo que considera recto; si obedeces sus mandatos y guardas todos sus
preceptos, no te afligiré con ninguna de las plagas con que afligí a los
egipcios; porque yo soy Yahvé, el que te sana.»
(Si no escuchas: Dt 18, 19: Si un hombre no escucha mis palabras, las que ese
profeta pronuncie en mi nombre, yo mismo le pediré cuentas de ello.)
b) En el Antiguo Testamento
c) En el Nuevo Testamento
Mt 7, 24: Así pues, todo el que oiga estas palabras mías y las ponga en
práctica se parecerá al hombre prudente que edificó su casa sobre roca
Mc 12, 29: Jesús le contestó: «El primero es: Escucha, Israel: El Señor,
nuestro Dios, es el único Señor.
Lc 6, 47: Voy a explicaros a quién se parece todo el que viene a mí, escucha
mis palabras y las pone en práctica; 10, 16: Quien os escucha a vosotros, a mí
me escucha; quien os rechaza a vosotros, a mí me rechaza; y quien me rechaza
a mí, rechaza al que me ha enviado.
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1 Jn 4, 5-6: Ellos son del mundo; por eso hablan según el mundo, y el mundo
los escucha. Nosotros somos de Dios. El que conoce a Dios nos escucha; el
que no es de Dios no nos escucha. En esto podemos reconocer el espíritu de la
verdad y el del error.
Ap 3, 20: Ten en cuenta que estoy a la puerta y voy a llamar; y, si alguno oye
mi voz y me abre, entraré en su casa y cenaremos juntos los dos.
Dt, 6, 5: Amarás a Yahvé tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma y con
todas tus fuerzas; 10, 12: Y ahora, Israel, qué te pide Yahvé tu Dios, sino que
temas a Yahvé tu Dios, siguiendo todas sus directrices, amándolo, sirviendo a
Yahvé tu Dios con todo tu corazón y con toda tu alma; 19, 9: (a condición de
que guardes y practiques todos los mandamientos que yo te prescribo hoy,
amando a Yahvé tu Dios y siguiendo sus caminos toda tu vida), a estas tres
ciudades añadirás otras tres; 30, 6: Yahvé tu Dios circuncidará tu corazón y el
corazón de tu descendencia, a fin de que ames a Yahvé tu Dios con todo tu
corazón y con toda tu alma, para que vivas.
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b) En el Antiguo Testamento
c) En el Nuevo Testamento
Mc 12, 32-33: Le dijo el escriba*: «Muy bien, Maestro; tienes razón al decir
que Él es único y que no hay otro fuera de Él, y amarle con todo el corazón,
con toda la inteligencia y con todas las fuerzas, y amar al prójimo como a sí
mismo vale más que todos los holocaustos y sacrificios.»
Lc 10, 27: Respondió: «Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, con
toda tu alma, con todas tus fuerzas y con toda tu mente; y a tu prójimo como a
ti mismo.»
no fallara.
b) En el Antiguo Testamento
2 Cro 34, 31: El rey se situó en pie junto a la columna y celebró el rito de la
alianza ante Yahvé: ellos deberían seguir a Yahvé y guardar sus
mandamientos, sus testimonios y sus preceptos, con todo su corazón y con
toda su alma, y cumplir los términos de esta alianza tal como estaban escritos
en este rollo.
c) En el Nuevo Testamento
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Mt 14, 29: «¡Ven!», le dijo. Bajó Pedro de la barca y se puso a caminar sobre
las aguas, en dirección a Jesús.
Mt 22, 10: Los siervos salieron a los caminos, reunieron a todos los que
encontraron, malos y buenos, y la sala de bodas se llenó de comensales.
7. Vivirás y te multiplicaras
Es parte de la promesa que hace Dios a quien cumple con sus preceptos. La
vida y la descendencia son una recompensa por el acto que es agradable a
Dios. lo podemos ver en diferentes testimonios y como parte del pacto que se
hace con el pueblo de Israel a través de sus más altos representantes.
b) En el Antiguo Testamento
Jr 30, 19: Entre ellos se oirán alabanzas, voces de gente alegre; los
multiplicaré y no serán pocos, los honraré y no serán menguados.
Ba 2, 34: Los haré volver a la tierra que juré dar a sus antepasados, a Abrahán,
Isaac y Jacob, y tomarán posesión de ella. Los multiplicaré y ya no
menguarán.
c) En el Nuevo Testamento
Lc 10, 28: Díjole entonces Jesús: Bien has respondido. Haz eso y vivirás.
8. Bendecir la tierra
b) En el Antiguo Testamento
b) En el Antiguo Testamento
b) En el Antiguo Testamento
b) En el Antiguo Testamento
c) En el Nuevo Testamento
Lc 17, 27: Comían, bebían y tomaban mujer o marido, hasta el día en que
entró Noé en el arca. Entonces vino el diluvio y los hizo perecer a todos.
b) En el Antiguo Testamento
Dt 11, 29: Cuando Yahvé tu Dios te haya introducido en la tierra a la que vas
a entrar para tomar en posesión, pondrás la bendición sobre el monte Garizín y
la maldición sobre el monte Ebal.; 23, 6: Pero Yahvé tu Dios no quiso
escuchar a Balaán, y Yahvé tu Dios te cambió la maldición en bendición,
porque Yahvé tu Dios te ama.; 30, 1: Cuando te sucedan todas estas cosas, la
bendición y la maldición que te he puesto delante, podrás meditarlas en tu
interior, cuando estés en medio de todas las naciones donde Yahvé tu Dios te
haya arrojado.
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b) En el Antiguo Testamento
Jos 8, 34: Luego, Josué leyó todas las palabras de la Ley, la bendición y la
maldición, a tenor de cuanto está escrito en el libro de la Ley.
Sb 16, 13: Pues tú tienes poder sobre la vida y la muerte, haces bajar a las
puertas del abismo y haces subir.
ANÁLISIS COMPLEMENTARIO
La historia de los dos caminos es la historia del hombre: mal y bien, bendición
y maldición, idolatría y fidelidad, muerte y vida, obediencia y traición, la
senda estrecha y la ancha. Así lo expresa el Deuteronomio y deja las cosas
muy claras al pueblo de Israel5. En la elección del camino se juega el futuro y
su vida. Se nos enseña que la vida consta de elecciones, eligiendo, haciendo
opciones grandes o pequeñas: la ropa que poner, los amigos, la vocación, entre
otras cosas6.
que se niegue a sí mismo, cargue con su cruz cada día y se venga conmigo.
Pues el que quiera salvar su vida, la perderá; pero el que pierda la vida por mi
causa, la salvara”. Es muy curioso que sean sinónimos cosas distintas: Cargar
la cruz y seguir a Jesús, perder la vida por Cristo y ganarla definitivamente.
Son de esas paradojas que tanto gustaban a Jesús para hacer la fuerza y la
originalidad de su mensaje8.
Esta perícopa nos exhorta a elegir entre dos posibilidades: la muerte y la vida,
la maldición y la bendición. Y nos insta a que elijamos la vida y no la muerte;
la bendición y no la maldición. Esa vida y bendición que tienen su origen, su
itinerario y su término en Dios. El camino de Dios propone cómo hacerlo;
amándolo, escuchando su voz y siguiendo sus senderos9.
8
Cfr. Ibid. 328-329.
9
Cfr. Ibid. 229.
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Dt 30, 15-20, invita a Israel a tomar una decisión trascendental: elegir entre la
vida y el bien, la muerte y el mal, la maldición y la bendición. Esto depende
del cumplimiento o incumplimiento de la ley. La palabra clave es vida (nada
menos que seis veces se repite la raíz “vivir”, en estos versículos. En el fondo
de la elección subyace la idea de alianza. Basta ver la serie de requisitos: amar
a Dios, seguir sus caminos, guardar sus preceptos, mandatos y decretos. Elegir
la vida es tanto como apostar por el amor, la obediencia y la fidelidad a Dios.
En definitiva, se trata de elegir a Dios: “elige la vida”, “pues él es tu vida”. La
opción por Dios implica la exclusión de otros dioses. Es una opción radical,
que exige fidelidad total y exclusiva a Dios, manifestada en la fidelidad a sus
preceptos, mandatos y decretos, es decir, a la ley deuteronómica. Una
estrategia suele variar cuando cambia la situación de voluntad. Admitida la
existencia de, al menos, dos ediciones del Deuteronomio, escritas en
circunstancias diferentes.
Yahvé es uno. Amarás, pues, a Yahvé, tu Dios, con todo tu corazón, con toda
tu alma y con todas tus fuerzas”.
Toda nuestra vida será un constante caminar por caminos de luz divina o de
oscuridad Espiritual. El camino elegido nos conducirá a un destino de vida
eterna o muerte eterna.
La perícopa de los dos caminos enseña que, si vas por el camino equivocado,
es momento de hacer un giro en la vida, Dios te da la oportunidad de girar en
“U”, para hacer un cambio radical en el camino de tu vida.
El creyente debe tener presente, cuando sea tentado a desviarse del camino,
que hay dos caminos que parecen derechos, pero al final está la muerte. El
libro de Proverbios lo recuerda dos veces para que no sea olvidado Pr 14,
12.16, 25. Debe recordar las palabras de Jesús, el conductor de la vida:
“Entren por la puerta angosta. Porque la puerta y el camino que llevan a la
perdición son anchos y espaciosos, y muchos entran por ellos, pero la puerta y
el camino que llevan son angostos y difíciles, y pocos los encuentran” Mt 7,
13-14.
La perspectiva personal sobre estos dos caminos, es que atemoriza ese “pocos
lo encuentran”. Porque el reto de los creyentes es formar parte de ese grupo
selecto de “pocos”. Ese es un desafío diario tiene que ser estar en el grupo que
encuentran y siguen el camino de la vida, este camino se llama Jesucristo, el
único camino que te lleva por la ruta y el sendero con el destino a la eternidad.