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DISPOSICIONES COMUNES A TODO PROCEDIMIENTO

I.- Contenido.
Están reguladas en el libro I del CPC, entre los arts. 1 y 252.

II.- Importancia.
1) Tienen aplicación general dentro de los procedimientos y asuntos que reglamenta el
CPC en sus libros II, III Y IV, salvo norma expresa en contrario (Ejemplo: los requisitos de
la sentencia de un árbitro arbitrador no se rigen por el 170 CPC sino que por el 640).
2) Tienen aplicación general en los procedimientos civiles especiales reglamentados en
leyes especiales, salvo norma expresa en contrario.
3) Tienen aplicación por remisión en los procedimientos penales (art. 52 NCPP).

LA ACCIÓN, LA PRETENSIÓN, LA DEFENSA Y LA CONTRAPRETENSIÓN

Un litigio es un conflicto intersubjetivo de intereses jurídicamente trascendente,


caracterizado por la existencia de una pretensión resistida. El proceso está destinado a
resolver el litigio. Mediante el ejercicio de la acción se origina el proceso, al poner en
movimiento la jurisdicción. La acción va dirigida al Estado (Tribunales) y no al adversario;
es la pretensión la que se dirige a éste.
En consecuencia, la acción procesal es el mecanismo que la Constitución y la ley pone a
disposición de las partes para traspasar el conflicto al proceso; y la pretensión es el
derecho de las partes para solicitar al tribunal una decisión jurisdiccional favorable a sus
intereses en la solución final del proceso. Es usual que acción y pretensión sean
confundidas. Ello se ha debido a que su titularidad corresponde a una misma persona y a
que generalmente las dos van contenidas en un mismo acto: en la demanda o querella.

Acepciones.
En el derecho comercial se utiliza “acción” para referirse a las cuotas en las que se divide
el capital de las sociedades anónimas. En el derecho penal, se usa para referirse a la
conducta constitutiva de un tipo penal.
En el orden procesal, tiene tres acepciones:
a) Como sinónimo de derecho, como cuando se dice “el actor carece de acción
para…”
b) Como similar a pretensión, hablándose de “acción fundada o infundada…”, “acción
real o personal”, etcétera.
c) En el sentido de “potencia o posibilidad de provocar la actividad jurisdiccional”, que
es el sentido procesal auténtico de la palabra.

Evolución histórica del concepto de acción.


Han existido diversas teorías, las que se han clasificado en cuanto a identidad o
diversidad entre la concepción de la acción en relación con el derecho material en
monistas y dualistas.

1.- Teoría monista o clásica respecto de la acción.


Esta teoría plantea la identidad entre acción y derecho material, definiendo a la acción
como el derecho sustancial deducido en juicio. De acuerdo con esta teoría, no habría
acción sin derecho, lo cual resulta inadmisible por cuanto no explica diversas situaciones
que se presentan, como son las obligaciones naturales o las demandas rechazadas en
sentencia definitiva (acción sin derecho). Esta teoría aparece hoy universalmente
desechada.

2.- Teorías dualistas o modernas respecto de la acción.


Sostienen la diferencia entre la acción y el derecho material. La teoría dualista ha
sustentado tres variables: teorías concretas, abstractas y abstractas atenuadas.

2.1. Teorías concretas de la acción: Sustentadas por Chiovenda, Calamandrei y Redenti,


conciben la acción como un derecho a obtener una sentencia de contenido determinado,
de carácter favorable para el titular, el cual tiene derecho a tal contenido, precisamente
por la titularidad de la acción de la cual disfruta.
2.2. Teorías abstractas de la acción: Sustentada por autores como Carnelutti, y Couture,
conciben la acción no como poder de reclamar un fallo de contenido más o menos
concreto, sino un fallo sin más, ya se subordine o no este derecho a requisitos distintos
como el de buena fe del accionante.

2.3. Teorías abstractas atenuadas de la acción: Sus partidarios (Guasp y Betti, entre
otros) establecen que el derecho de accionar no exige ser titular de un derecho, sino sólo
afirmar la existencia de un hecho o de determinados requisitos. Desde este punto de
vista, Guasp define la acción como el poder concebido por el Estado de acudir a los
Tribunales de Justicia para formular pretensiones.

De todas las teorías, Juan Colombo Campbell saca las siguientes conclusiones:
1) La acción es un derecho distinto e independiente de la pretensión.
2) El sujeto pasivo de la acción: el juez; de la pretensión: demandado o querellado.
3) El juez se pronuncia sobre la acción al mismo momento en que se le plantea, y sobre la
pretensión en la sentencia definitiva. Por ello, el derecho de acción se agota con su
ejercicio, en tanto que la pretensión se mantiene hasta la sentencia.

En síntesis: la acción procesal es el último de los tres requisitos necesarios para la


formación del proceso:
1.- Un conflicto de intereses de relevancia jurídica.
2.- Un órgano jurisdiccional competente.
3.- El ejercicio de la acción.

Características de la acción procesal.


1) Es un derecho procesal. La acción es el derecho para activar la jurisdicción, que se
materializa mediante actos procesales, generalmente demanda y querella.
2) Es un medio indirecto de protección jurídica. Es indirecto porque supone la intervención
de un tercero, que es el juez.
3) Tiene como destinatario el tribunal. Puesto que el único fin de la acción es abrir el
proceso.
4) Es un derecho autónomo de la pretensión. La acción persigue abrir el proceso, en tanto
que la pretensión persigue de la otra parte el cumplimiento de una obligación o que sufra
una sanción.
5) Se extingue con su ejercicio, sea que el actor obtenga o no la apertura del proceso. Si
se quiere reintentar, ello implica el ejercicio de una nueva acción.
6) Tiene dos objetivos: Abrir el proceso (objetivo directo) y permitir al Estado conocer las
infracciones al derecho para terminarlas y evitarlas a futuro (objetivo indirecto).
7) Se liga al concepto de parte. El actor es el sujeto que ejerce la acción. Si no hay parte,
no hay acción.
8) Su ejercicio implica el pronunciamiento inmediato del tribunal, en el sentido de abrir o
no el proceso.

Regulación de la acción en Chile.

A) Constitución Política:
Si bien no existe disposición constitucional que contemple el derecho de acción
expresamente, sí se encuentra amparado implícitamente en los arts. 19 N°3 y N°14 y 76.
La primera disposición consagra la garantía de igual protección de la ley en el ejercicio de
los derechos, la cual evidentemente incluye el derecho de acción procesal. Como toda
sentencia debe fundarse en un proceso previo legalmente tramitado y teniendo presente
que la tramitación necesariamente debe comprender la fase de conocimiento, es evidente
que para que ésta exista es necesario que una acción active la jurisdicción del tribunal.
Además, la Carta Magna contempla muchas acciones específicas, como la de
reclamación de nacionalidad, de indemnización por error judicial, de reclamación de
legalidad del acto expropiatorio, de protección, de amparo, etc.

B) Ámbito meramente legal:


La disposición básica es la contenida en el art. 254 del CPC, que establece los
requisitos de la demanda civil en juicio ordinario, normas que, son de aplicación supletoria
para muchos otros procedimientos (art. 3 CPC). En materia penal, las formas de ejercer la
acción penal pública la querella y el requerimiento del Ministerio Público.
Clasificación de la acción.

a) De acuerdo a la pretensión: acciones civiles y penales.

b) De acuerdo al objeto que se persigue a través de la pretensión civil: acciones muebles,


inmuebles y mixtas.

c) De acuerdo con el contenido de la pretensión: acciones civiles petitorias, cuando el bien


protegido es el dominio de un bien u otro derecho real; y posesorias, cuando lo que se
pretende es la protección de la posesión respecto de inmuebles.

Concepto de la pretensión. Sus requisitos y efectos.

A. Concepto de Pretensión. Es una declaración de voluntad por la que se solicita una


actuación de un órgano jurisdiccional frente a persona determinada y distinta del autor de
la declaración.

B. Estructura. La pretensión procesal requiere de elementos subjetivos que son: a) el


órgano jurisdiccional; b) el actor y c) el demandado, y de un elemento objetivo, cual es el
bien litigioso que se pretende, que puede ser una cosa o una conducta.

C. Características de la pretensión procesal.


1) Se materializa, al igual que la acción, a través de un acto procesal
2) Es un derecho exclusivo del sujeto activo. Muy excepcionalmente puede ser el sujeto
pasivo quien acciona. Son los casos de demanda de jactancia (art. 269 a 272) y la acción
forzada del art. 21 del CPC. No ocurre lo mismo con la reconvención, pues si bien el que
pretende es el sujeto pasivo, lo que ocurre es que se abre un nuevo proceso, que sólo por
economía se tramita con el inicial.
3) Se dirige contra el sujeto pasivo del proceso: demandado o querellado.
4) La pretensión se falla en sentencia definitiva, al final de la instancia.
5) Mira al interés particular del pretendiente, lo cual lo distingue con la acción, que tiene
un interés social comprometido.

D. Paralelo entre acción y pretensión.


Semejanzas
Se asemejan en que, generalmente, ambas corresponden al sujeto activo del proceso,
Ambas se plantean ante un tribunal y por medio de un acto procesal
En su objetivo, pues ambas tienen por objeto lograr la solución de un conflicto.
Diferencias
Sujeto destinatario: la acción se dirige La pretensión contra el adversario.
hacia el tribunal
Objetivo: la acción tiene como objetivo La pretensión se dirige a obtener una
primordial la apertura del proceso sentencia favorable
Oportunidad en que se resuelven: si se El pronunciamiento respecto de la
acoge o no la acción, es resuelto tan pretensión se da sólo con la sentencia.
pronto como se presenta
Efecto de su rechazo: la acción rechazada La condena o la absolución se mantendrán
puede volver a interponerse; si se rechaza a firme en virtud de la cosa juzgada.
la pretensión

La defensa del demandado.

1) Concepto. Es el poder jurídico del demandado de oponerse a la pretensión que el


actor ha formulado frente a él y ante el órgano jurisdiccional.

2) Formas de defensa. Ante una demanda, el sujeto activo puede accionar o no accionar.
Sus posibles actitudes son:
1.- Rebeldía o contumacia. El demandado asume una actitud pasiva, manteniéndose
inactivo, sin hacer nada. La rebeldía no importa una aceptación; por el contrario, implica
una contestación ficta de la demanda en la que se tienen por negados genéricamente los
fundamentos de su pretensión. Ello importa que el actor será quien deberá probar los
hechos en que funda su pretensión. Además, en primera instancia y para aquellos casos
en que no se trate de plazos fatales para que el demandado realice sus actuaciones,
deberá acusársele las rebeldías respecto de cada trámite.

2.- Reacción. Si el demandado comparece en el proceso, puede asumir las siguientes


actitudes:
2.1. Allanamiento. Es una aceptación expresa del demandado a la pretensión hecha
valer por el sujeto activo. Para que un mandatario judicial se allane, requiere de la facultad
especial del inciso 2° del art. 7° del CPC.
2.2. Oposición a la pretensión. Puede revestir las siguientes formas:
A.- La defensa negativa. Consiste en una mera negativa y no lleva consigo ninguna
afirmación de un hecho nuevo. La carga de la prueba recaerá en el demandante, puesto
que con estas el demandado no introduce hechos nuevos que tengan por objeto destruir
la pretensión. Por último, estas defensas no deben ser analizadas en lo dispositivo del
fallo; sólo en la parte considerativa.

B.- Las excepciones. Son las peticiones del demandado que tienen eficacia extintiva,
impeditiva o invalidativa del efecto jurídico afirmado como fundamento de la pretensión.
Se clasifican en:
b.1.- Excepciones dilatorias. Son las que se refieren a la corrección del procedimiento
sin afectar el fondo de la acción (pretensión) deducida. Tienen un carácter taxativo (art.
303 CPC), pero genérico, por cuanto en el número 6 se pueden comprender todos los
vicios del procedimiento cuya corrección sea posible solicitar. Estas excepciones deben
hacerse valer en un mismo escrito, antes de la contestación de la demanda y dentro del
término del emplazamiento. Suspenden la tramitación del procedimiento y deben ser
resueltas una vez concluida la tramitación del incidente que generan.

b.2.- Excepciones perentorias. Tienen por objeto destruir el fundamento de la pretensión


e importan la introducción de un hecho de carácter impeditivo, modificativo o extintivo de
la pretensión del actor. Normalmente se confunden con los modos de extinguir las
obligaciones. Estas excepciones no suspenden la tramitación del proceso y deben
hacerse valer en el escrito de contestación de la demanda (art. 309 CPC). Una
contestación de demanda con excepciones perentorias implica que la carga de la prueba
va a recaer en el demandado, ya no en el demandante. Deben ser resueltas en la parte
dispositiva del fallo, debiendo contener las consideraciones de hecho y de derecho en las
que se basa (art. 170 CPC).

b.3.- Excepciones mixtas. Son aquellas que no obstante tener el carácter de perentorias,
pueden ser ejercidas como dilatorias antes de la contestación de la demanda. Son las de
cosa juzgada y de transacción. Formuladas éstas, el tribunal puede fallarlas luego de
concluida la tramitación del incidente que generen, o estimarlas que son de lato
conocimiento, en cuyo caso mandará contestar la demanda y se reservará el fallo de esas
excepciones para la sentencia definitiva (art. 304 CPC).

b.4.- Excepciones anómalas. Son aquellas perentorias que pueden ser deducidas con
posterioridad a la contestación de la demanda, durante todo el juicio, hasta antes de la
citación para oír sentencia en primera instancia y hasta antes de la vista de la causa en
segunda (art. 309). Son las de prescripción, cosa juzgada, transacción y pago efectivo de
la deuda, siempre que se funde en un antecedente escrito. Si son deducidas en primera
instancia, después de recibida la causa a prueba, se tramitan como incidentes y se
reservará la resolución para definitiva. Si se deducen en segunda, se sigue igual
procedimiento pero el tribunal se pronunciará respecto de ellas en única instancia.

La reconvención o Contrapretensión

El demandado puede no sólo adoptar una actitud defensiva, sino que una actitud
agresiva, haciendo valer una pretensión en contra del demandante, quien pasa a ser
sujeto pasivo respecto de ella. La reconvención es la demanda del demandado mediante
la cual se introduce una nueva pretensión. Se acepta por el principio de economía
procesal.
La oportunidad de deducirla es el escrito de contestación de la demanda (En lo
principal: Contesta la demanda. Primer otrosí: Deduce demanda reconvencional). La
reconvención se substancia y falla conjuntamente con la demanda principal, debe ser
notificada al demandante igual que la demanda y éste puede asumir las mismas actitudes
del demandado respecto a la demanda principal.
Requisitos de la reconvención:
a.- Que el tribunal tenga competencia para conocer de la reconvención estimada
como demanda (art. 315 CPC y 111 y 124 COT)
b.- Que la contra pretensión se encuentre sometida al mismo procedimiento de la
demanda.

EL PROCESO

a) Concepto. El proceso es la serie de actos que se desenvuelven progresivamente, con


el objeto de resolver, mediante un juicio de la autoridad, el conflicto sometido a su
decisión.
b) Terminología. La voz proceso es utilizada con diversos alcances tanto en la ley, como
en doctrina y jurisprudencia. Es así como podemos hablar de proceso como litigio, juicio,
procedimiento, expediente, causa, auto, pleito y litis.
c) Paralelo entre procedimiento y proceso. El proceso es un conjunto de actos unidos
hacia un fin común, que el procedimiento (un conjunto de ritualidades) organiza para el
mejor cumplimiento de tal fin.

El Debido Proceso Legal.

a.- Finalidad e importancia.


La finalidad del debido proceso legal procesal lo constituye la garantía de un juicio
limpio para las partes en cualquier proceso, ya que la función jurisdiccional aplicada de
acuerdo a sus características minimiza el riesgo de resoluciones injustas. La
extraordinaria trascendencia que tiene el debido proceso para la adecuada protección de
los derechos de la persona, generó la incorporación de este concepto como uno de los
fundamentales a nivel internacional. En los principales tratados internacionales se
contempla el debido proceso como una de sus principales garantías. Tales son:
Declaración Universal de los Derechos Humanos, Pacto Internacional de Derechos Civiles
y Políticos, Declaración Americana de los Derechos y Deberes del Hombre y la
Convención Americana de Derechos Humanos.

b.- El debido proceso en nuestra CPR.


El art. 19 Nº3 establece que “toda sentencia de un órgano que ejerza jurisdicción
debe fundarse en un proceso previo legalmente tramitado. Corresponderá al legislador
establecer siempre las garantías de un procedimiento y una investigación racionales y
justos”. El precepto se aplica a toda autoridad que ejerza jurisdicción. La voz sentencia no
sólo se refiere a las judiciales, sino a cualquier resolución que afecte derechos.
En consecuencia, para que una resolución sea válida se requiere de:
1) Que exista un proceso previo, legalmente tramitado
2) Que se desarrolle a través de un procedimiento racional y justo,
correspondiendo al legislador su establecimiento

c.- Garantías mínimas de un procedimiento racional y justo.


a) Derecho a que el procedimiento se desarrolle ante juez independiente e imparcial. El
juez debe ser independiente de los órganos ejecutivos y legislativos del Estado (art. 76
CPR) e imparcial, es decir que no se encuentre en una especial relación con alguna de
las partes o con la materia del conflicto (art. 194 COT)
b) Derecho a un juez natural preconstituido por la ley. Es menester que el tribunal se
encuentre predeterminado por la ley. “Nadie puede ser juzgado por comisiones
especiales, sino por un tribunal que le señale la ley y que se halle establecido con
anterioridad por ésta” (art. 19 Nº 3 inciso 4º CPR).
c) Derecho de acción y defensa. Pues no basta con que la ley establezca derechos si
ello no va acompañado de las medidas de protección adecuadas para asegurar que tales
derechos se respeten
d) Derecho a un defensor. Toda persona tiene derecho a una defensa jurídica en la forma
que la ley señale y nadie puede impedir o restringir la debida intervención de un letrado si
hubiere sido requerido. Por mandato de la CPR, la ley debe arbitrar los medios para
otorgar asesoramiento a quienes no puedan procurárselos (art. 19 Nº3 incisos segundo y
tercero)
e) Derecho a una pronta resolución del conflicto. Un proceso rápido es esencial para la
existencia de un debido proceso. El art. 84 CPR establece que una LOC determinará la
organización y atribuciones de los Tribunales necesarios para la pronta y cumplida
administración de justicia. En consecuencia, si se estableciera un procedimiento con
plazos o trámites innecesarios que dilaten la resolución, el procedimiento no sería racional
y, por tanto, sería inconstitucional.
f) Derecho a que se contemple la existencia de un contradictorio. Se manifiesta como
la garantía “del día ante el tribunal” del derecho anglosajón (“his day in Court”). Esto
consiste en que el demandado tenga una razonable posibilidad de hacerse escuchar,
comparecer y exponer sus derechos. Para que se verifique la existencia del contradictorio
respecto del demandado, es menester que se le notifique de la acción en su contra y que
tenga un plazo razonable para hacer efectiva su defensa.
g) Derecho a que se permita a las partes rendir pruebas para acreditar sus
fundamentos, que asegure la posibilidad de valerse de los medios generalmente
reconocidos por el ordenamiento, derecho que no es absoluto ya que no puede permitir
rendir pruebas obtenidas ilícitamente.
h) Derecho a la igualdad de tratamiento de las partes. Significa que ambas partes
puedan tener análogas posibilidades de expresión y prueba. El problema es la
desigualdad económica entre las partes, pues el costo de la justicia es, por sí, un
instrumento de desigualdad. Esto se ha tratado de remediar a través de la eliminación de
las cargas económicas para ejercer derechos procesales antes de la sentencia, y a través
del privilegio de pobreza.
i) Derecho a sentencia que resuelva el conflicto. Como la finalidad del proceso es la
solución del conflicto, resulta imprescindible la existencia de una sentencia. Además, ésta
debe ser fundada.
j) Derecho a recurso para impugnar sentencias que no emanen de un debido proceso.
Debe contemplarse el recurso de casación que permita impugnar sentencias dictadas sin
un debido proceso.

Clasificación del proceso.


I.- Civiles.
a) De conocimiento:
i. Meramente declarativos. Su fin es la declaración de un derecho, reconocer una
situación jurídica preexistente, sin que se imponga al demandado ninguna condena ni se
le solicite la modificación de una situación determinada. Ejemplo: La declaración de
inaplicabilidad de una ley por inconstitucionalidad.
ii. Constitutivos: Procuran sentencias que, además de declarar un derecho, produzca un
nuevo estado jurídico, creando, modificando o extinguiendo un estado jurídico. Estas
sentencias, al igual que las meramente declarativas no son susceptibles de ejecución ni la
necesitan puesto que lo perseguido por el actor se satisface con la sola sentencia. Ej.:
sentencia que declara el divorcio.
iii. De condena: Mediante éstas, además de declararse un derecho, se impone al
demandado el cumplimiento de una prestación de dar, hacer o no hacer. La sentencia de
condena es siempre preparatoria, pues no permite por sí sola la satisfacción de la
pretensión.

b) De ejecución: Tienen por objeto satisfacer lo establecido en la sentencia de condena o


en la fuente de la obligación que ha sido infringida. Su objetivo es que a través de la
acción de cosa juzgada se cumpla íntegramente la sentencia condenatoria. Además se
aplica directamente el procedimiento ejecutivo cuando la parte tiene un derecho que
consta en un título ejecutivo.
Estos procedimientos se dividen de acuerdo a la obligación de que se trate: de dar, de
hacer y de no hacer.

II.- Penales.
a. Faltas: Las conocen los juzgados de garantía, mediante:
i. Procedimiento monitorio (Art. 392 CPP)
ii. Procedimiento simplificado (Art. 388 y 392 inc. final CPP)
b. Crímenes y simples delitos:
i. De acción penal privada (art 55 y 400 CPP)
ii. De acción penal pública:
1. Procedimiento abreviado (Art. 406 CPP)
2. Procedimiento simplificado (Art. 388 CPP)
3. Juicio oral (Art. 281 y sigtes. CPP)
iii. De acción penal pública previa instancia particular (Art. 55 CPP).

Naturaleza Jurídica del Proceso.

Determinar la naturaleza jurídica del proceso tiene importancia porque con ello se precisa
la legislación que debe aplicarse. Se han sostenido las siguientes teorías:

1. Teoría del Contrato: Supone la existencia de un contrato entre demandante y


demandado, en el cual se determina el conflicto, lo que limita el poder del juez para su
resolución. Nació en el derecho romano (la litis contestatio), pero en la actualidad ha
perdido toda vigencia, ya que no explica el proceso en sí, sino que alude a la
institución que lo origina. Además, no explica los procesos desarrollados en rebeldía
de una de las partes, puesto que en esos casos no hay una convención para la
generación del proceso. Posteriormente, ya en la época de la revolución francesa,
aparece una segunda vertiente, que considera al proceso como un cuasicontrato, en
donde existe un hecho voluntario y lícito tanto del demandante, que acude a
tribunales, como del demandado, que voluntariamente concurre a defenderse. Sin
embargo, esta doctrina tampoco explica el proceso en sí, sino que sólo su origen.

2. Teoría de la Relación Jurídica: Por relación jurídica se entiende toda vinculación


intersubjetiva regulada por la ley. Actor, demandado y juez se vinculan entre sí,
mediante los actos procesales. Esta relación jurídica crea derechos y obligaciones
recíprocos entre los interesados en el litigio y los funcionarios encargados de
resolverlo, como la obligación del juez de proveer y sentenciar, la de las partes a
comparecer y acatar las resoluciones.
En cuanto a la forma y los sujetos entre los cuales se generaría la vinculación, se han
formulado diversas teorías: Kohler excluye al juez y postula sólo una relación bilateral
entre partes; en tanto Hellwig y Wach incluyen al juez en la relación, el primero
estableciendo una relación indirecta entre partes (que sólo se vinculan por intermedio
del juez) y el segundo concibiendo una relación triangular, en la cual todos se
relacionan directamente.

3. Teoría de la Situación Jurídica: Posteriormente, Goldschmidt establece que no es


posible hablar de relación jurídica, por cuanto la solución del conflicto es tan sólo una
mera expectativa de las partes en orden a obtener sentencia favorable, por lo que
sitúa al proceso en un escalafón inferior, cual es el de simple situación jurídica. La
situación jurídica se define por un complejo de meras posibilidades de obrar,
expectativas y cargas. El proceso no sería una relación jurídica por cuanto el juez no
está obligado para con las partes (sólo tiene deberes como funcionario público) y
porque entre litigantes no existe ninguna obligación.

4. Teoría de la Entidad Jurídica Compleja: Postulada por Carnelutti, establece que el


proceso es una entidad jurídica de carácter unitario y complejo, cuya característica
central es la pluralidad y estrecha coordinación de sus elementos.

5. Teoría de la Institución Jurídica: El autor Jaime Guasp concibe al proceso como una
institución jurídica permanente, de carácter objetivo, a la cual las partes acuden
cuando existe entre ellas un conflicto que debe ser solucionado (explica la utilidad del
proceso pero no su naturaleza jurídica).

Los elementos del proceso.

Los elementos se dividen en dos clases:


1) Elementos subjetivos: Las partes y el juez.
2) Elemento objetivo: El conflicto sometido a decisión del tribunal.

Elementos subjetivos.

Las Partes:
1. Concepto. Todo aquel que pide o frente al cual se pide en juicio la actuación de la ley
en un caso concreto. Importa determinar el concepto de parte pues es sólo a éstas a
quienes afecta la sentencia que se dicte.

2. Clasificación de las partes.


a) Directas u originarias: Demandante y demandado.
b) Indirectas o derivadas: Terceros.

3. Capacidad para ser parte.


Para comparecer válidamente en juicio se requiere tener capacidad para ello. El
CPC no da normas específicas sobre la materia. Por lo tanto, debemos recurrir al Código
Civil o Código Penal, según sea la naturaleza de la acción. De acuerdo con éstos,
sabemos que la capacidad es la regla general y que, por lo tanto, para ser capaz de
comparecer en juicio se requiere ser persona y no estar sujeto a ninguna especial
incapacidad.
Hay que distinguir entre:
1.- Capacidad para ser parte (o de goce): es inherente a toda persona por el sólo
hecho de ser tal. Por lo tanto, basta ser sujeto físico y vivo (o una sucesión hereditaria),
incluyéndose las personas jurídicas.
2.- Capacidad Procesal (o de ejercicio) para actuar en el proceso, es la facultad para
comparecer en juicio, para realizar actos procesales con efectos jurídicos en nombre
propio o por cuenta de otros.
3.- Ius Postulandi: Es la capacidad para que la actuación judicial sea correcta y se
traduce en la necesidad de cumplir con dos requisitos procesales, a saber: patrocinio y
poder.

4. Las partes en el Código de Procedimiento Civil. (Art. 18 y siguientes)

A.- Pluralidad de Partes o Litis Consorcio: La regla general es que haya un


demandante y un demandado. Sin embargo, hay casos en que existe una relación
procesal múltiple, sea activa, pasiva o múltiple. Esta situación puede producirse al inicio
del proceso (litis consorcio originario), o con posterioridad a ello (litis consorcio
sobreviniente). En el primer caso se caracteriza por ser facultativo para quienes lo
constituyen, y por estar consagrado expresamente en el art. 18 CPC, conforme al cual se
produce esta situación en los siguientes casos:

a) Cuando varias personas deducen una misma acción (contra del mismo sujeto pasivo)
b) Cuando varias personas deducen acciones, sean estas iguales o diferentes, pero
emanadas todas de un mismo hecho.
c) Cuando la ley autoriza para proceder por muchos o contra muchos, como en el caso de
las obligaciones solidarias.

Para evitar que esta pluralidad de partes se constituya en un elemento disociador


del proceso, el legislador establece que habiendo litis consorcio, y siendo iguales las
acciones o las defensas, debe designarse un procurador común, todo lo cual se regirá
de conformidad a las siguientes reglas:
a) Debe ser nombrado de común acuerdo entre las partes en el plazo que fije el tribunal, o
en su defecto por el Juez, pero con la obligación de designar a un Procurador del Número
o a uno de los abogados de las partes (art. 12 CPC)
b) El nombramiento puede ser revocado por unanimidad o a petición fundada de una de
las partes, pero en todo caso la revocación no surte efecto sino hasta que se designa un
reemplazante (art. 14 CPC)
c) El procurador designado debe seguir las instrucciones de las partes y si estas no están
conformes con su cometido, tienen el derecho de hacer alegaciones separadas y a
presentar sus propias pruebas, todo en los mismos plazos y condiciones que el
procurador común, todo lo cual obviamente sólo irá en su propio beneficio o perjuicio. No
obstante ello, lo obrado por el procurador común les sigue empeciendo (art. 16 CPC)
d) No será necesario designar un procurador cuando (art. 20 CPC):
a. Sean distintas las acciones de los demandantes.
b. Sean distintas las defensas de los demandados.
c. Habiéndose iniciado el juicio con iguales acciones o excepciones, surgen
incompatibilidades de intereses entre quienes litigan conjuntamente.

B.- Intervención Forzada de Parte:


Un carácter básico del ejercicio de las acciones es su voluntariedad. Sin embargo,
nuestro Código contempla casos de intervención forzada en los que las partes se ven en
la necesidad de comparecer en el proceso, so pena de soportar las graves consecuencias
de su inasistencia. Son cinco casos:
a) Artículo 21 CPC: Cuando una acción corresponde a otras personas determinadas pero
distintas del sujeto activo, el o los demandados quedan facultados para pedir que se
ponga la demanda en conocimiento de ellos a fin de adoptar, dentro del término de
emplazamiento, alguna de las siguientes actitudes:
i. Adherir a la demanda: Se forma un litis consorcio activo y debe designarse procurador
común.
ii. No adherir: Caducan los derechos del potencial demandante para entablar la misma
acción con posterioridad, pudiendo el demandado hacer valer la excepción de cosa
juzgada.
iii. No hacer nada: Si se deja transcurrir el plazo de emplazamiento, si bien no se
transformará en parte, le afectará todo lo obrado en el proceso, pero tendrá el derecho de
comparecer posteriormente en el juicio, respetando todo lo obrado.

b) Jactancia: Se define como la acción y efecto de atribuirse por persona capaz de ser
demandada, derechos propios sobre bienes de otro o asegurar ser su acreedor (Couture).
Es la situación que se produce cuando una persona dice tener derechos de los que no
está gozando, para ser obligado por el afectado a interponer la demanda correspondiente.
Conforme al art. 270 CPC, se puede deducir jactancia en alguno de los siguientes casos:
i. Cuando la manifestación del jactancioso conste por escrito.
ii. Cuando la manifestación del jactancioso se haya hecho de viva voz, a lo menos delante
de dos personas hábiles para declarar en juicio.
iii. Cuando una persona haya sido parte en proceso criminal del cual pueden emanar
acciones civiles contra el acusado, para el ejercicio de dichas acciones.
La acción de jactancia, para que se declare la obligación del jactancioso de demandar
prescribe en 6 meses desde los hechos en que se funda, y se tramita de conformidad al
procedimiento sumario (art. 272 CPC). Si se da lugar a la demanda, el jactancioso tiene
10 días para demandar, ampliable a 30 por motivo fundado, so pena de declararse que no
será oído posteriormente sobre tal derecho (incidente del procedimiento de jactancia).

c) Citación de Evicción: Situación que se da propiamente en los contratos bilaterales y


especialmente en la compraventa, cuando el comprador que se ve expuesto a sufrir
evicción (pérdida de la cosa comprada por efecto de acciones judiciales interpuestas por
terceros), cita al vendedor, antes de contestar la demanda, para que éste comparezca en
su defensa como es su obligación (arts. 1843 y 1844 CC y art. 584 CPC) Pueden darse
múltiples situaciones:
i. Si el comprador no cita, libera al vendedor de su responsabilidad.
ii. Si lo cita y el vendedor concurre, el proceso se sigue en contra de éste, pero
conservando el comprador el derecho de intervenir.
iii. Si el vendedor citado no comparece, se hace responsable de la evicción, salvo que el
juicio lo pierda el comprador por negligencia procesal.

d) Citación de los Acreedores Hipotecarios en el Juicio Ejecutivo: Si una persona


adquiere en remate judicial una propiedad hipotecada, la adquiere con dicho gravamen,
salvo que los acreedores hipotecarios hayan sido citados al juicio. La citación los obliga a
optar por mantener la hipoteca o acceder a pagarse con el producto del remate.

e) Verificación de Créditos en el Procedimiento de Quiebra: Declarado en quiebra un


deudor, sus acreedores sólo tendrán derecho a concurrir al reparto de dividendos si han
comparecido al tribunal a verificar su crédito (sino, la ley presume condonación).

C.- Dos instituciones vinculadas al concepto de parte:


a) Substitución Procesal: Es aquella institución que faculta a una persona para
comparecer en juicio a nombre propio, haciendo valer derechos de terceros, adquiriendo
el carácter de parte para todos los efectos legales. No constituye un caso de
representación ni de agencia oficiosa, pues quien comparece lo hace a nombre propio.
Ejemplos:
i.- Artículo 878 C. de Comercio: Se faculta a quien desee demandar al capitán de un
navío, para deducir la acción ya sea en contra de éste o del naviero.
ii.- Artículo 2466 CC: Acción Subrogatoria.
iii.- Artículo 2468 CC: Acción Pauliana o Revocatoria.
iv.- Artículo 1845 CC: Citación de Evicción.

b) Sucesión Procesal: A diferencia de la substitución, el cambio de sujeto en este caso


puede verificarse durante el procedimiento y no sólo antes de él. Son tres casos:
i. Fallecimiento de quien litiga personalmente: (art. 5° CPC) Se suspende el procedimiento
para efectos de notificar a los herederos, y sólo se reanuda tras haber transcurrido el
término de emplazamiento, hayan éstos concurrido o no.
ii. Cesión de Derechos Litigiosos: Producida la cesión, comparecerá al proceso el
cesionario exhibiendo el título y adoptando el papel procesal del cedente.
iii. Subrogación: Opera cuando una persona paga por otra, produciéndose una traslación
de derechos (puede ser legal o convencional).

D.- Los Terceros:


Son aquellas personas que no están directamente vinculadas al conflicto
promovido ante el órgano jurisdiccional, pero que actúan al interior del procedimiento
tendiente a resolver ese conflicto. Se clasifican en:
1.- Terceros indiferentes: Aquellos a quienes no afecta de modo alguno el proceso, ni la
sentencia dictada. No son terceros, según la definición dada.
2.- Terceros intervinientes: Son los testigos, peritos, martilleros y demás personas que
intervienen en el proceso sin tener interés directo en su resultado.
3.- Terceros interesados: aquellos que, sin ser partes directas en un proceso, ven
afectados sus derechos a causa de ese proceso, por lo que se les autoriza a participar.
Son los siguientes:
a) Coadyuvantes: (o por vía adhesiva) Hacen valer pretensiones concordantes con alguna
de las partes.
b) Independientes: (o por vía principal) Su interés es independientes de las pretensiones
de las partes por lo que actúa separadamente.
c) Excluyentes: (o por vía de oposición) Tienen pretensiones incompatibles con las de las
partes.
Los requisitos para interponer una tercería son los siguientes: (art. 23 CPC)
a) Ser tercero (no ser parte)
b) Existencia de un proceso en actual tramitación.
c) Tener interés actual en el proceso (patrimonial y sobre la base de derechos adquiridos
y no de meras expectativas)

Las resoluciones judiciales dictadas en los procesos en los cuales intervienen


terceros, producen respecto de ellos iguales efectos que respecto de las partes
principales (art. 24 CPC).

LA COMPARECENCIA EN JUICIO

Generalidades
Una persona tenga capacidad para comparecer en juicio, debe reunir la capacidad
de goce, de ejercicio y el “Ius Postulandi”, condición esta última que se entrega
exclusivamente a determinadas personas.
El concepto de comparecencia en juicio se puede entender en 2 sentidos:
1) Sentido amplio: el acto de presentarse ante un juez voluntaria o coercitivamente.
2) Sentido estricto es el acto de presentarse ante los tribunales, ejercitando una acción o
defendiéndose, o requiriendo la intervención en un acto no contencioso.
La capacidad para parecer en juicio o ius postulandi, se traduce en el estudio de
dos instituciones procesales fundamentales, cuales son el Patrocinio y el Mandato
Judicial. Mientras que el primero se refiere fundamentalmente a la fijación de estrategias
procesales (técnico del derecho), el mandatario mira a la representación (técnico del
procedimiento).

El Patrocinio: Se define como un “contrato solemne por el cual las partes o interesados
en un asunto, encomiendan a un abogado la defensa de sus pretensiones ante los
Tribunales de Justicia.”

1. Requisitos para ser Patrocinante: Ser abogado habilitado para el ejercicio de la


profesión, es decir, tener el título de abogado.

2. Forma de constituirlo: La formalidad exigida es que en la primera presentación que el


interesado efectúe ante el tribunal, el abogado ponga su firma, indicando además su
nombre, apellidos y domicilio. Lo normal en la práctica es destinar un otrosí del escrito a
este efecto. En el proceso penal, tratándose de Defensores Públicos, éste se entiende
constituido por el sólo ministerio de la ley (art. 54 Ley de Defensoría Penal Pública).

3. Sanciones al Incumplimiento: La sanción es gravísima: el escrito se tiene por no


presentado para todos los efectos legales (art. 1º inciso 2º Ley 18.120).

4. Duración: Todo el proceso, salvo renuncia o revocación.

5. Facultades del Patrocinante: Esencialmente el patrocinio se limita a la fijación de las


estrategias de defensa. No obstante, y a pesar de que ello es propio del mandatario
judicial, se le faculta para asumir la representación en cualquier estado del juicio
(facultades ordinarias del mandato: art. 1° inciso 3º, Ley N°18.120)

6. Término del Patrocinio:


a) Cumplimiento o desempeño del encargo: Forma normal de terminación. b) Revocación:
Acto por el cual el patrocinado pone fin al patrocinio vigente. Normalmente va aparejado
de la designación de un nuevo abogado patrocinante, quien tiene dos obligaciones:
comunicar la revocación a su colega y encargarse que éste reciba sus honorarios
profesionales (Código de Ética).
c) Renuncia: Debe notificarse al patrocinado junto con el estado del proceso. No obstante,
el abogado que renuncia mantiene su responsabilidad hasta por el término de
emplazamiento, salvo que previo a ello se haya designado un nuevo patrocinante (art. 1º
inc. 4º Ley 18.120).
d) Muerte o Incapacidad del Abogado: En este caso el patrocinado debe constituir un
nuevo patrocinio antes de efectuar su siguiente presentación. Cabe señalar que la muerte
del patrocinado no extingue el patrocinio, pues el abogado deberá seguir prestando sus
servicios a la sucesión.

El Mandato Judicial: Es un “contrato solemne en virtud del cual una persona otorga a
otra facultades suficientes para que la represente ante los Tribunales de Justicia.”

Diferencias con el Mandato Civil:


MANDATO CIVIL MANDATO JUDICIAL
Consensual Solemne
Se extingue con la muerte de ambas No se extingue con la muerte del
partes mandante
Todos pueden ser mandatarios (incluso Sólo aquéllos del art. 2° Ley N°18.120
incapaces)
La representación es un elemento de la La representación es de la esencia
naturaleza
La delegación no obliga al mandante si no La delegación siempre obliga al
ratifica. mandante.

Requisitos para ser Mandatario: Es preciso ser una de las personas incluidas en el art.
2° de la Ley N°18.120, esto es:

i. Abogado habilitado para el ejercicio de la profesión.

ii. Procurador del Número.


iii. Postulantes designados por la Corporación de Asistencia Judicial, independientemente
del tiempo que lleven como egresados.

iv. Estudiantes actualmente inscritos en 3°, 4° o 5° año de Derecho en alguna Universidad


autorizada.

v. Egresados de las Facultades de Derecho que hubieren cursado 5° año y hasta 3 años
después de haber rendido los exámenes correspondientes.

Forma de Constituir el Mandato (art. 6° Ley 18.120):

a) Por escritura pública.

b) Acta extendida ante un Juez de Letras o Juez Árbitro suscrita por todos los otorgantes.

c) Declaración escrita del mandante y autorizada por el Secretario del Tribunal: Es la


forma normal de constitución (Secretario: “autorizo” o “autorizo poder”, fecha, firma).

d) Artículo 29 de la Ley sobre Letra de Cambio y Pagaré: Endoso en Comisión de


Cobranza: Tiene la particularidad de que por el sólo efecto del endoso se entienden
conferidas todas las facultades especiales que en otros casos requieren otorgarse
expresamente.

Excepciones a la comparecencia en juicio representado:

a) Caso general (art. 2° inc. 3° Ley 18.120) se puede solicitar autorización al tribunal para
comparecer y defenderse personalmente.

b) Casos especiales: No se requiere tener mandato judicial ni patrocinio:

a. En departamentos (comunas) con menos de 4 abogados en ejercicio.

b. Manifestaciones Mineras.

c. Asuntos que conozcan Alcaldes o Jueces de Policía Local salvo regulación de


perjuicios de cuantía superior a 2 UTM.; los Juzgados de Menores o los Árbitros
Arbitradores.

d. Juicios políticos de que conozca la Cámara de Diputados o el Senado.

e. Juicios cuya cuantía no exceda de ½ U.T.M., cualquiera sea su naturaleza. f. Causas


Electorales.

g. Recursos de Amparo y Protección.

h. Solicitudes aisladas en que se piden copias, desarchivos, etc.

Sanciones al Incumplimiento: La sanción es menos drástica que la del patrocinio, ya


que otorga al interesado un plazo de 3 días para corregir el vicio de que adolece la
presentación y constituir legalmente el mandato. Si se hace, el escrito mantiene como
fecha la de su presentación.

Facultades del Mandatario: Las facultades puedes ser:

1.- Esenciales u Ordinarias: Existen sin necesidad de mención expresa y no pueden ser
objeto de limitaciones por las partes. Autorizan al mandatario para tomar parte del mismo
modo que podría hacerlo el que da el mandato, en todos los trámites e incidentes del
juicio y en todas las cuestiones que por vía de reconvención se promuevan al mandatario
tomar parte en todos los actos e incidentes del proceso, y en todas las cuestiones que se
promuevan por vía de reconvención, hasta el cumplimiento completo del fallo definitivo.
Como consecuencia, las notificaciones se deben hacer al mandatario judicial, siendo
nulas las que se notifiquen al mandante.

2.- De la Naturaleza: la posibilidad de delegar el mandato.


3.- Accidentales o Especiales: Sólo se entienden incorporadas al mandato si se
mencionan expresamente. Están en el art. 7° inc. 2°.
Las facultades especiales son:

- Desistirse en 1ª instancia de la acción deducida, porque produce cosa juzgada.

- Aceptar la demanda contraria (allanamiento) ya que es un acto de disposición.

- Absolver Posiciones.

- Renunciar expresa y anticipadamente a los recursos o a los términos legales.

- Transigir, ya que es un acto de disposición.

- Comprometer (designar árbitro para que resuelva conflicto).

- Otorgar a los árbitros facultades de arbitradores.

- Aprobar convenios (se refiere a la quiebra, art. 178 LQ).

- Percibir: operación mediante la cual los productos, frutos o rentas de una cosa son
objeto de apropiación o cobro por parte de la persona calificada para gozar de ellos.

Efectos del Mandato: Constituido el mandato, desaparece del proceso la persona física
del mandante, por lo que todas las actuaciones del proceso, así como, sus notificaciones
deben practicarse al mandatario. Hay excepciones cuando se solicite comparecencia
personal de la parte.

Término del Mandato:

i. Cumplimiento o desempeño del encargo: Forma normal de terminación.

ii. Terminación anticipada: Cuando el proceso no llegue ni llegará a tener sentencia


definitiva, el mandante puede solicitar que se lo libere del encargo (ej.: desistimiento de la
demanda).

iii. Revocación: Acto unilateral del mandante por el cual se pone fin al mandato vigente.
Puede ser expresa o tácita (designación de un nuevo mandatario sin hacer mención al
anterior). Debe constar en el proceso para ser oponible a la contraparte.
iv. Renuncia del mandatario: Debe notificarse al mandante e informarle el estado del
proceso. No obstante ello, el mandatario que renuncia mantiene su responsabilidad hasta
por el término de emplazamiento, salvo que previo a ello se designe un nuevo apoderado.
v. Muerte o incapacidad del mandatario: En este caso el patrocinado debe constituir un
nuevo patrocinio antes de efectuar su siguiente presentación.

Responsabilidad del Mandatario: El mandatario tiene una responsabilidad especial y


expresa (art. 28) en relación con las costas procesales (definidas por el art. 139 CPC) a
que sea condenado su mandante, sin perjuicio de poder repetir contra éste con
posterioridad (es un caso de solidaridad). Además el mandatario tiene responsabilidad
disciplinaria, en términos tales que puede ser objeto de sanciones por actos abusivos de
su parte.
Paralelo entre Patrocinio y Mandato:

PATROCINIO MANDATO JUDICIAL

Naturaleza Jurídica: Contrato Solemne Contrato Solemne

Objetivo: Fijar la estrategia de defensa La representación en juicio

Arts. 1° y 2° de la Ley N°18.120 Arts. 1° y 2° de la Ley N°18.120

Quiénes: Sólo abogados habilitados Abogados y otros del art. 2° Ley


18.120.

Constitución: Nombre, domicilio, firma Alguna de las formas del art. 6° CPC
del abogado

Oportunidad: En la primera En la primera presentación


presentación

Sanción: Por no presentado el escrito Misma sanción pero después de 3


días.

Responsabilidad: Civil y criminal Civil, criminal y por costas procesales

Ejercicio ilegal: Constituye delito Constituye delito (art.3° Ley 18.120)

4. Situaciones Especiales de Representación:


a) Agencia Oficiosa: Es la situación que se produce cuando una persona comparece
ante un tribunal, asumiendo la representación de otra sin patrocinio ni mandato constituido
en su favor, pero ofreciendo la ratificación posterior de todo lo obrado por parte de quien
ha debido ser el mandante. Requisitos:
i. El agente oficioso debe ser habilitado para comparecer en juicio o en caso
contrario debe actuar representado por alguien que lo sea.
ii. Invocar causales calificadas que han impedido al representado comparecer.
iii. Ofrecer una garantía de que lo obrado será ratificado
El tribunal califica las circunstancias y puede o no aceptarla. Si el tribunal la acepta
se debe constituir la garantía, que normalmente es una fianza (fianza de rato). Si lo
obrado no es ratificado posteriormente, se produce la nulidad de todo lo obrado (efecto
procesal), y el fiador deberá responder de los perjuicios causados (efecto civil).

b) Procurador Común: Ya analizado a propósito de la pluralidad de partes.

c) Representaciones Especiales: Se trata de dilucidar quién representa a determinadas


personas jurídicas. Para ello debemos distinguir:
i. Personas Jurídicas de Derecho Público: No existen reglas especiales. Hay que analizar
la ley que las crea y reglamenta. Ejemplos:
- Fisco: Consejo de Defensa del Estado.
- Municipalidades: Alcalde.
ii. Corporaciones y Fundaciones de Derecho Privado: Las representa su presidente (art. 8
CPC).
iii. Sociedades: Las representa el gerente o administrador. Salvo mención expresa, la
representación sólo comprende facultades ordinarias del mandato.

d) Representación de Personas Ausentes: (art. 11, 285, 844, 845 y 846 CPC, y 367
COT). Hay que distinguir tres situaciones:
1) Si se teme una eventual ausencia del demandado y quiere el demandante emplazarla
para un juicio posterior, puede pedirse como medida prejudicial, que se constituya un
apoderado que lo represente y responda por las costas y multas del juicio, bajo
apercibimiento de designarse un curador de bienes (art. 285 CPC).
2) Si el ausente ha partido del país sin dejar mandato constituido. Hay que distinguir (art.
844 y ss. CPC):
- Si se conoce su paradero: se le notifica por exhorto.
- No se conoce su paradero: se designa curador de ausentes (art. 473 CC)
3) Si el ausente dejó mandatario con facultades generales, es posible notificarlo
válidamente. Si sólo tiene facultades para un negocio en particular, sólo se lo puede
emplazar válidamente para ese caso. Finalmente, si no puede contestar nuevas
demandas y no conoce el paradero del mandante, se designa un curador de ausentes.
(Art. 11 CPC)

Cesación de la Representación Legal: Ver art. 9° CPC. Sólo se refiere a la


representación legal.

EL EMPLAZAMIENTO

Es la notificación que se le hace a la parte para que dentro de un determinado plazo haga
valer sus derechos.

Elementos. El primero de ellos es la notificación legal de la demanda. El segundo


elemento es el plazo para reaccionar, el cual varía según la clase y características del
procedimiento.

1) En la primera instancia:
a. Notificación válida de la demanda y de la resolución que recaiga en ella: Normalmente
debe hacerse en forma personal, puesto que es lo usual que sea la primera gestión
judicial.
b. Transcurso del plazo que la ley otorga al demandado para hacer valer sus derechos
frente a la demanda deducida en su contra: El plazo varía de acuerdo al procedimiento de
que se trate.
2) En la segunda instancia:
a. Notificación válida de la resolución que concede el recurso de apelación: Se notifica por
el estado diario.
b. Transcurso del plazo que la ley establece para comparecer ante el tribunal de segunda
instancia: Comienza a correr desde el hecho material consistente en el certificado del
secretario del tribunal de alzada de haber ingresado los antecedentes correspondientes al
recurso de apelación. El plazo varía de acuerdo a la ubicación relativa de los tribunales de
primera y segunda instancia.

Efectos de la notificación válida de la demanda.

1. Efectos Procesales.
a) El proceso pasa a tener existencia legal, creándose un vínculo entre partes y juez.
b) Radica la Competencia: Sólo respecto del demandante, pues el demandado aún puede
alegar la incompetencia del tribunal.
c) Precluye el derecho de retirar materialmente la demanda. Sólo puede desistirse de la
demanda, lo que produce cosa juzgada.
d) Las partes deben realizar actuaciones para que el proceso avance. El demandante
debe actuar so pena del abandono del procedimiento, el demandado debe defenderse.
e) El tribunal debe dictar las providencias para dar curso al proceso, so pena de queja
disciplinaria (art. 545 COT)
f) Se genera el estado de litis pendencia (art. 303 CPC)

2. Efectos Civiles:
a) Constituye en mora al deudor (art. 1551 N°3 CC)
b) Transforma en litigiosos los derechos para efectos de su cesión (1911 CC)
c) Interrumpe la prescripción (arts. 2503, 2518 y 2523 CC)

LA PARALIZACIÓN, SUSPENSIÓN Y EXTINCIÓN DEL PROCEDIMIENTO

A.- La paralización del procedimiento. Si las partes nada hacen, el procedimiento


permanecerá paralizado, en virtud del principio dispositivo que rige las gestiones civiles.
Tal inactividad, si se prolonga por más de 6 meses, puede dar lugar al abandono del
procedimiento, a petición de parte, situación que produce la pérdida de lo obrado mas no
la pretensión hecha vale en él.

B.- La suspensión del procedimiento. En los procesos civiles las partes pueden, de
común acuerdo, suspender el procedimiento por una sola vez en cada instancia, por un
plazo máximo de 90 días (Art. 64 inc. 2º), sin perjuicio del derecho de hacerlo valer,
además, ante la Corte Suprema en caso que, ante ese tribunal, estuvieren pendientes
recursos de casación o de queja en contra de sentencia definitiva.
El efecto que genera es que los plazos que estuvieren corriendo se suspenderán
al presentarse el escrito, los que continuarán corriendo vencido el plazo de suspensión
acordado. El procedimiento también se suspende, en primera instancia, cuando se
concede un recurso de apelación en ambos efectos (art. 191 CPC).

C.- La extinción del procedimiento. Lo normal es que un proceso termine con la


sentencia definitiva. Sin embargo, hay casos en que termina antes: transacción,
avenimiento, conciliación total, desistimiento de la demanda, el abandono del
procedimiento y el abandono de la acción penal privada.

LOS PRESUPUESTOS PROCESALES

Son los antecedentes que deben concurrir para que el juicio tenga una existencia jurídica
y validez formal. Se dividen en:
1) De existencia: Para que un juicio tenga existencia jurídica se requiere de un juez que
ejerza jurisdicción, de partes y de un conflicto o litigio.
2) De validez: Para que un juicio tenga validez jurídica se requiere de un juez competente,
capacidad de las partes y formalidades legales.

El tribunal está facultado para adoptar diversas medidas de oficio para prevenir o anular
un proceso por falta de un presupuesto de validez: arts. 256, 83, 84 inc. final, 775 CPC.
Las partes también pueden alegar la nulidad procesal, interponiendo excepciones
dilatorias, un incidente de nulidad procesal, deduciendo casación en la forma, etc.

Presupuesto de eficacia de la pretensión. La legitimación procesal es indispensable


para que pueda dictarse una sentencia eficaz. Además de la inexistencia y la nulidad del
proceso, se contempla en la doctrina la sanción de ineficacia de la inoponibilidad del
proceso, que se puede definir como la sanción que priva de efectos a un acto contra
terceras personas que no han concurrido a su celebración. Será tratada más adelante.

LOS ACTOS JURÍDICOS PROCESALES

1. Concepto y elementos. Son una especie de acto jurídico cuyos efectos se producen
en el proceso. Como no existe una regulación orgánica y específica de la teoría de los
actos jurídicos procesales (AJP) en el CPC, corresponde aplicar las normas del CC.
Se puede definir el AJP como aquellos que tienen importancia jurídica respecto de
la relación procesal, esto es, los actos que tienen por consecuencia inmediata la
constitución, la conservación, el desenvolvimiento, la modificación o la definición de una
relación procesal. Sus elementos son:
a) Una o más voluntades destinadas a producir efectos en el proceso.
b) Voluntad debe manifestarse, expresa o tácitamente.
c) La intención de producir efectos en el proceso.

2. Características. Los AJP son:


1) Actos esencialmente solemnes. (Ej.: 254, 303, 170 CPC).
2) Mayoritariamente unilaterales.
3) Suponen un proceso y, a la vez, lo crean.
4) Actos autónomos, aunque no en términos absolutos.

3. Clasificaciones. Los AJP admiten las siguientes clasificaciones:


a) Desde el punto de vista de la voluntad: unilaterales y bilaterales.
b) Desde el punto de vista del sujeto que origina el acto: del tribunal, de las partes, de
terceros.
c) Desde el punto de vista de las partes:
a. Actos de impulso procesal: se realizan para dar curso al procedimiento.
b. Actos de postulación: Pretenden no sólo dar curso, sino que también formular
cuestiones de fondo.
c. Actos probatorios: Realizados para acreditar los hechos.
d. Actos de impugnación: Pretenden atacar resoluciones.
d) Desde el punto de vista de los terceros: actos probatorios (declaración de testigos e
informe de peritos), de certificación (actos de receptor o del secretario) y de opinión
(informes en derecho).

4. Requisitos de existencia y validez de los actos jurídicos procesales. Son la


voluntad, la capacidad procesal, el objeto, la causa y las solemnidades.

4.1.- La voluntad y sus vicios. La voluntad es la facultad que nos permite hacer o no
hacer lo que deseamos. Como en todo AJ, debe manifestarse, sea expresa, sea
tácitamente (Ej.: 394, 197, 55 CPC). Vicios de la voluntad:
a) Error: Existen muchas manifestaciones del error en el CPC. A modo de ejemplo: el
error de derecho como causal de casación en el fondo (art. 767 CPC y 546 CPP). En la
CPR se contempla la indemnización por error judicial (art. 19, Nº7, letra i).
b) La fuerza: Cuesta encontrar norma al respecto en los Códigos. Existen alusiones en los
arts. 483 y 481 CPP y en el 810 CPC, como causal de revisión de la sentencia cuando se
obtuvo con violencia.
c) El dolo: Hay un caso en que el dolo no es vicio de la voluntad sino fuente de
responsabilidad, a propósito de las medidas precautorias (280 inc. 2º CPC). Además se
encuentra en el recurso de revisión.

4.2.- La capacidad procesal. Desde el punto de vista del tribunal, la capacidad se refiere
a su competencia. Con respecto a las partes, toda persona tiene capacidad, salvo las
excepciones legales.

4.3.- El objeto. Al igual que en lo civil debe ser real, determinado o determinable y lícito.
En cuanto al objeto ilícito, nos encontramos frente a varios casos, por ejemplo, la prórroga
de la competencia en materia penal y en asuntos civiles no contenciosos, las materias de
arbitraje prohibido, etc.

4.4.- La causa. “Motivo que induce al acto o contrato”. En los AJP hay siempre una
causa. Por ejemplo, en la apelación es el agravio, en el mandato es tener buenos
representantes, etc. La causa debe ser lícita.

4.5.- Las solemnidades. Si bien es cierto que lo lógico sería que existiera un impulso
antiformalista (pues las formalidades serían un obstáculo para la justicia) lo cierto es que
la experiencia nos ha hecho considerar dichas formas como indispensables para la
función jurisdiccional. Es así como los AJP son eminentemente formalistas.

5. La ineficacia de los Actos Jurídicos Procesales. El AJP es ineficaz cuando no


genera sus efectos propios y ocurre cuando no se ajusta a todos los requisitos legales.
Las sanciones de ineficacia de los AJP que contempla el derecho procesal, son:

5.1.- La inexistencia. Se produce cuando no se cumplen los requisitos de existencia de


los AJP. Los casos de inexistencia son la falta de jurisdicción (inexistencia de tribunal), la
falta de parte y la falta de proceso.

5.2.- La nulidad. Se produce cuando se incumplen requisitos de validez. La nulidad


procesal se caracteriza por lo siguiente:
a) Es autónoma en su naturaleza, en sus consecuencias y en su configuración jurídica,
pues se rige por normas especiales, siendo la jurisprudencia la que ha asentado una
teoría de la nulidad procesal.
b) No es clasificable, no es ni absoluta ni relativa.
c) Requiere de alguna causal, ya sea genérica (art. 84 y 768 n° 9 CPC) o específica (768
n°1 a 8 y 79 y 80 CPC).
d) Requiere ser declarada judicialmente.
e) Genera la ineficacia del acto viciado (nulidad propia) y, en casos, la de sus actos
posteriores (nulidad extensiva o derivada), como lo es la falta de emplazamiento.
f) Se sanea de las siguientes maneras.
- Mediante la resolución que la deniega.
- Por la preclusión de la facultad para hacerla valer. Debe promoverse dentro del plazo de
5 días desde que se tuvo conocimiento del vicio.
- Cuando la parte ha originado el vicio o concurrido a su materialización (art. 83 inc. 2).
- Mediante la convalidación expresa o tácita del acto nulo (art. 83 inc. 2).
g) Sólo procede cuando el vicio que la genera causa perjuicio: no hay nulidad sin
perjuicio, principio éste que se recoge en el art. 83, art. 768 inc penúltimo CPC, a
propósito de la casación en la forma, y en el art. 767 como requisito de casación en el
fondo.
h) Puede hacerse valer por distintos medios.
- Medios directos: nulidad de oficio (art. 84), casación de oficio (776 y 785), incidente de
nulidad, excepciones dilatorias, recursos de casación y de revisión.
- Medios indirectos: sin perseguir directamente la nulidad, pretenden su declaración.
Ejemplos: recursos de reposición, de apelación, de queja, etc.

5.3.- La inoponibilidad. Se produce cuando un AJP que tiene existencia y es válido, no


produce efectos respecto de terceros. La regla general es que el AJP (y por lo tanto la
sentencia) sea oponible sólo a las partes del proceso.

5.4.- La preclusión. En los procesos en que rige el orden consecutivo legal es posible
concebir la preclusión (extinción) de la facultad para impetrar la nulidad procesal si no se
respeta el orden y las oportunidades establecidas para tal efecto por el legislador.
Ejemplos de preclusión: art. 83 inciso 2°, 85 y 86 del CPC)

LA FORMACIÓN DEL PROCESO

Concepto de expediente y su formación.


Expediente, como conjunto de escritos, documentos y actuaciones de toda especie que
se presentan o verifican en el procedimiento (art. 29). En la formación del expediente se
deben respetar ciertas reglas:
a) Las piezas se agregan en orden de presentación.
b) El secretario debe enumerarlas
c) No se pueden retirar piezas sin decreto del tribunal (art. 29 inciso 2°)

En el proceso penal, no obstante la oralidad de las actuaciones, debe llevarse


registro de ellas (art. 30 CPP). El registro de las actuaciones realizadas por o ante el juez
de garantía (excepto la preparación del juicio oral) sólo debe contener un resumen de la
actuación. El juicio oral (y la audiencia de preparación de juicio oral ante juez de garantía)
debe ser registrado en forma íntegra. (Art. 40 y 41 CPP).

Los escritos.
Se pueden definir como acto solemne que contiene las solicitudes que presentan las
partes al tribunal y que debe reunir los requisitos contenidos en la ley.

Requisitos que deben cumplir:


a) Papel a utilizar: Hoy pueden presentarse en papel simple.
b) Contenido: Debe encabezarse por una suma., un resumen del contenido. Las
demandas nuevas deben contener una “presuma”, indicando la materia, el procedimiento
y el nombre completo y número de RUT de las partes y de sus apoderados. Luego de la
suma, debe designarse el tribunal (S.J.L., Iltma. Corte de Apelaciones, Excma. Corte
Suprema, etc.), las partes, N° de rol y luego el desarrollo del escrito. Finalmente el escrito
termina con una petición (art. 51)
c) Forma de presentación: Tantas copias como partes haya que notificar (salvo en
aquellos escritos que contengan solicitudes de mera tramitación como copias,
desarchivos y otros). Si no se entregan copias o si éstas resultan disconformes
sustancialmente con la original, no le corre plazo a la parte contraria, debe imponerse una
multa y debe apercibírsele para que las acompañe dentro de tercero día so pena de
tenerlo por no presentado (art. 31).
d) Lugar de presentación: Al tribunal por intermedio del secretario (art. 30).
e) Formalidad de recepción: Se estampa en cada foja la fecha y su forma o un sello
autorizado por la Corte que designe la oficina y la fecha. Además el secretario está
obligado a recepcionar los documentos que se le entreguen (art. 32). En la práctica el
funcionario del mesón del tribunal estampa en cada hoja, un timbre con la fecha y el
número del tribunal. Una vez presentado, el Secretario debe proceder a despacharlo al
Juez, pudiendo incluso proveerlo el directamente, cuando se trate de diligencias de mero
trámite.

La consulta del expediente. Por regla general los expedientes son públicos. Una de las
funciones de los secretarios es dar conocimiento a cualquiera persona de los procesos
que tengan en sus oficinas, salvo excepciones cuya publicidad se considera perjudicial a
los intereses ya sea de las partes o del proceso.

La custodia del expediente. El proceso se mantiene en la oficina del secretario bajo su


custodia y responsabilidad (art. 36). En la práctica se contempla la custodia especial de
ciertos expedientes para impedir su extravío y de ciertos documentos. Los expedientes
sólo pueden ser retirados del tribunal por personas (fundamentalmente los receptores) y
en los casos establecidos por la ley (art. 36). En el proceso penal (donde no hay
secretarios, la custodia corresponde al jefe de la unidad administrativa que tenga a su
cargo la administración de causas (art. 389 G COT).

Remisión de Expedientes: Cuando un tribunal solicita a otro la remisión de un


expediente, lo normal es que dicha medida se cumpla remitiendo copias a costa del
solicitante. No obstante en casos urgentes, o si no es posible sacar copias o si el
expedientes tiene más de 250 fojas, se remitirá el original (art. 37 inciso final).

Extravío y Reconstitución de Expedientes: Si se pierde un expediente, una vez


certificado ello por el secretario del tribunal, debe reconstituirse. Se solicitará que se tenga
por reconstituido en virtud de las copias simples de los escritos que se acompañen, en lo
posible que estén timbradas. El tribunal lo tendrá por reconstituido, con citación. Si hay
oposición, el tribunal resolverá el incidente. En el nuevo proceso penal, el tema lo
resuelve el art. 43 CPP (Cuando, por cualquier causa, se viere dañado el soporte material
del registro afectando su contenido, el tribunal ordenará reemplazarlo en todo o parte por
una copia fiel, que obtendrá de quien la tuviere, si no dispusiere de ella directamente.
Si no existiere copia fiel, las resoluciones se dictarán nuevamente, para lo cual el tribunal
reunirá los antecedentes que le permitan fundamentar su preexistencia y contenido, y las
actuaciones se repetirán con las formalidades previstas para cada caso.)

LOS PLAZOS

Reglamentación. Arts. 48 a 50 CC, 64 a 68 CPC, 14 a 18 CPP.

Concepto. Es el espacio de tiempo fijado por la ley, el juez o las partes para el ejercicio
de una facultad o la realización de un acto jurídico procesal dentro del proceso.

Cómputo de los plazos. Todos los plazos (sean de días, meses o años) son completos y
correrán hasta la medianoche del último día del plazo. El primero y el último día de un
plazo de meses o años deben tener el mismo número en el respectivo mes, o el
inmediatamente anterior si no existe tal número en el mes del vencimiento.
Si un plazo de meses o años principia en algún día que no existe en el mes del
vencimiento por que el primero tiene más días que el segundo, el plazo expira el último
día del referido mes.
Cuando se dice que un acto debe ejecutarse en o dentro de cierto plazo, se
entenderá que vale si se ejecuta antes de la medianoche en que se termina el último día
del plazo (arts. 48 y 49 CC).
En el proceso penal se contempla que los plazos de horas comienzan a correr
inmediatamente después de ocurrido el hecho que fijare su iniciación, sin interrupción (art.
15 NCPP).
Clasificaciones de los plazos.
1. Según quién los establece: Legales, judiciales o convencionales. Los legales son la
regla general y normalmente son fatales e improrrogables. Por el contrario, los judiciales
son no fatales.

2. Según su extensión: De horas, días, meses y años. Los de días son la regla general.
Los establecidos en el CPC se suspenden durante los días feriados (art. 66). Los de horas
y años son muy excepcionales (233, 442 y 811 CPC).

3. Según si extinguen una facultad: Fatales, cuando la posibilidad de ejercer un


derecho o ejecutar un acto al vencimiento del plazo se extingue de pleno derecho; o no
fatales en el caso contrario, esto es, que se requiera una resolución del tribunal que
declare extinguida la facultad. Hoy todos los plazos del CPC son fatales, salvo los
establecidos para actuaciones propias del tribunal (art. 64). Una contra excepción está en
el art. 159, las medidas para mejor resolver. En el proceso penal todos los plazos del
Código son fatales (art. 16 CPP).
La importancia de esta clasificación es que para los plazos no fatales, mientras no
sea declarada la rebeldía, la parte respectiva no ve extinguida su facultad procesal.

4. Según la posibilidad de extender su vigencia: Prorrogables, que pueden extenderse


más allá de su vencimiento (plazos legales); e improrrogables, que sí pueden (plazos
judiciales, cumpliendo los requisitos de los arts. 67 y 68 CPC: es decir, solicitándose la
prórroga antes del vencimiento y alegando justa causa). En el proceso penal la regla
general es la improrrogabilidad (art. 16 CPP), habiendo excepciones (art. 17 CPP, El que,
por un hecho que no le fuere imputable, por defecto en la notificación, por fuerza mayor o
por caso fortuito, se hubiere visto impedido de ejercer un derecho o desarrollar una
actividad dentro del plazo establecido por la ley, podrá solicitar al tribunal un nuevo plazo,
que le podrá ser otorgado por el mismo período. Dicha solicitud deberá formularse dentro
de los cinco días siguientes a aquél en que hubiere cesado el impedimento.).

5. Según desde cuándo empiezan a correr: Individuales: empiezan a correr


separadamente para cada parte el día que la notifican (regla general); o comunes: corren
conjuntamente para todas las partes a partir de la última notificación. Ej.: plazo para
contestar la demanda (260 CPC), para comparendo en juicio sumario (683 CPC), etc.

6. Según si se suspenden en feriados: Continuos, que corren sin interrumpirse los


feriados; y discontinuos, que se suspenden en su cómputo durante los feriados. Los
primeros son la regla general en nuestro derecho, pero los segundos son regla general en
los plazos de días establecidos en el CPC (art. 66 CPC).

ACTUACIONES JUDICIALES.
Reglamentación. Título VII, libro I CPC. Arts. 59 a 77.

Concepto. Son actos jurídicos procesales, más o menos solemnes, realizados por o a
través del tribunal, por las partes, los terceros o auxiliares de la administración de justicia,
de los cuales se deja testimonio en el expediente y deben ser autorizados por un ministro
de fe.

Requisitos. Debe concurrir para la validez de una actuación judicial:


a) Deben realizarse ante o por orden del tribunal de la causa. Significa que o las
realiza directamente el tribunal o se llevan a efecto previa orden de éste.
b) Deben realizarse en días y horas hábiles (art. 59 CPC). Son días hábiles todos los
no feriados; son horas hábiles entre las 08:00 y las 20:00 horas. No obstante pueden
habilitarse horas o días inhábiles, siempre y cuando exista causa urgente (art. 60 CPC).
c) Debe dejarse constancia escrita en el expediente: Indicándose lugar y fecha de su
realización, las formalidades con las que se procedió y las demás indicaciones que
establezca la ley o el tribunal. Luego debe firmarse el acta por todos quienes intervinieron
en ella (art. 61 CPC).
d) Deben practicarse por funcionario competente: La regla general es que las
actuaciones judiciales las practique el tribunal que conoce de la causa (art. 70 CPC). Por
excepción las ejecutan otros funcionarios, tales como secretarios u otros ministros de fe, o
inclusive otros tribunales en caso de exhorto (art. 71).
e) Deben ser autorizadas por un ministro de fe o funcionario competente (art. 61
CPC). Normalmente serán el secretario del tribunal o un receptor, según la naturaleza de
la actuación.

Requisitos Especiales. Además de los requisitos generales de validez enunciados,


determinadas actuaciones requieren cumplir con otros requisitos específicos:
a) Juramento: Algunas actuaciones requieren, para su realización, que se preste
juramento, sea acerca de decir la verdad o desempeñar un cargo con fidelidad. La fórmula
está consagrada legalmente en el art. 62 CPC, y corresponde tomarlo para pruebas de
testigos (363 CPC), absolución de posiciones (390 CPC), designación de árbitros o
peritos (417 CPC).
b) Intervención de Intérprete: Se utiliza cuando es necesario traducir ya sea
declaraciones orales de las partes o de testigos, o bien, documentos en otro idioma. Las
normas que lo regulan son el art. 63 CPC y el art. 1° letra d) del Decreto #738 del
Ministerio de RR.EE. de fecha 19.01.1967.

Formas de ordenar una actuación judicial. Existen cuatro formas o actitudes del
tribunal frente a la solicitud de las partes en orden a practicar una u otra actuación. Su
importancia radica en: 1) Determinar la tramitación que se ha de dar a la solicitud; y, 2)
Precisar el instante a partir del cual puede practicarse la actuación solicitada;

a) Con Audiencia: Frente a la solicitud de parte, el tribunal, previo a decretar o rechazar


la actuación, debe dar un plazo de 3 días a la contraparte del solicitante para que se
pronuncie (“traslado”). En consecuencia, podrá decretarse la actuación, sólo cuando
se evacue el traslado o expire el plazo de 3 días sin que exista oposición. En la
práctica, ordenar la realización de una actuación con audiencia, importa que la
solicitud se transforma inmediatamente en una demanda incidental, y por lo tanto se
sujetará a las normas contenidas en los arts. 82 y sig. CPC. Como la resolución que
resuelve un incidente es susceptible de ser apelada, pero sólo en el efecto devolutivo,
la actuación podrá practicarse desde que se notifique válidamente la resolución que la
ordena.

b) Con Citación: (art. 69 inc.1° CPC) A diferencia del caso anterior, el tribunal se
pronuncia directamente a favor del solicitante, pero la actuación no puede llevarse a
efecto sino una vez transcurridos de tres días desde la notificación de dicha
resolución, plazo en el cual la contraparte podrá oponerse, suspendiéndose la
diligencia hasta que se resuelva el incidente (“como se pide, con citación”). En este
caso, es la oposición la que da origen al incidente, por lo que del escrito en que se
contienen debe darse traslado a la contraria.

c) Con conocimiento: La solicitud se provee directamente accediendo a ella (“como se


pide” o “como se pide, con conocimiento”), y la medida puede llevarse a cabo una vez
notificada dicha resolución (art. 69 inc.2° CPC)

d) De Plano: Implica que el tribunal decreta la actuación de inmediato, sin mayores


formalidades ni espera de términos o notificaciones. Esto es excepcional, puesto que
se contrapone a la norma expresa contenida en el art. 38 CPC, por lo que la facultad
para el tribunal debe estar expresamente consagrada.

NOTIFICACIONES.

GENERALIDADES.
A) Reglamentación. Se rigen por las normas contenidas entre los arts. 38 y siguientes
del CPC. Además por las normas de los arts. 24 a 33 del NCPP.
Estas normas son de orden público e irrenunciables, salvo en los juicios arbitrales, donde
las partes pueden acordar libremente otras formas de notificación (art. 629 CPC); y en el
proceso penal, en el cual se pueden proponer otras reglas (art. 31CPP). Por ejemplo, en
la práctica está sucediendo que se notifique vía e-mail.

B) Concepto. Es la actuación judicial que tiene por objeto poner en conocimiento de las
partes una resolución judicial (Fernando Alessandri).
C) Importancia.
a) Permiten materializar el principio de la bilateralidad de la audiencia.
b) Permiten que las resoluciones produzcan efectos (Art. 38 CPC), aunque esta regla
general admite excepciones:
- Las medidas precautorias, que pueden decretarse sin previa notificación (art. 302 CPC).
- Resolución que declara desierta la apelación y aquellas que se dicten en segunda
instancia respecto del apelado rebelde (arts. 201 y 202 CPC)
- La resolución que ordena o deniega el despacho del mandamiento de ejecución y
embargo (art. 441 CPC)
- La resolución que ordena la suspensión de obra nueva (art. 566 CPC)
c) La notificación de una sentencia definitiva o interlocutoria produce el desasimiento del
tribunal, en virtud del cual el tribunal que la dictó se ve impedido de alterarla o modificarla
con posterioridad (art. 182 CPC)
Las notificaciones son actos jurídicos procesales de carácter unilateral, es decir
que no requieren del consentimiento del notificado para ser válidas (art. 39 CPC).
Tampoco se requiere declaración alguna del notificado, salvo: 1) Que la resolución así lo
ordene; o, 2) Cuando la resolución, por su naturaleza, requiere tal declaración.

D) Clasificación:
a) Según su forma: Personal, Personal Subsidiaria, Por cédula, Por avisos, Por el Estado
Diario, Tácita, Ficta y Especiales.

b) Según su objetivo o finalidad inmediata:


i. Notificación Citación: Es el llamamiento a una parte o a un tercero para que comparezca
al tribunal bajo apercibimiento de incurrir en sanciones.
ii. Notificación Emplazamiento: Es el llamado a las partes para que, dentro de un
determinado plazo, hagan valer sus derechos.
iii. Notificación Requerimiento: Apercibimiento a una de las partes para que ejecute una
prestación determinada.
iv. Notificación Propiamente Tal: Es la puesta en conocimiento de las partes o de terceros
una determinada resolución judicial, con el fin de que produzca sus efectos legales. Es la
regla general.

NOTIFICACIÓN PERSONAL PROPIAMENTE TAL.

1. Concepto: Consiste en entregar a quien se debe notificar, en forma personal, copia


íntegra de la resolución y de la solicitud en que haya recaído, cuando ésta fuere escrita
(art. 40 CPC).

2. Requisitos de validez.
2.1.- Requisitos Comunes a toda Actuación Judicial:
1) Efectuarse en días hábiles: son hábiles para notificar personalmente todos los días, si
se efectúa en lugares de libre acceso al público, en la morada o donde pernocta o donde
ejerce ordinariamente su industria, profesión o empleo, o en cualquier recinto privado en
que éste se encuentre y al cual se permita el acceso del ministro de fe. Si se notifica en
día inhábil, el plazo comenzará a correr desde las cero horas del día hábil siguiente (art.
41).
2) Efectuarse en horas hábiles: Acá hay que distinguir según el lugar en que se notifica:
- Lugares y recintos de libre acceso público: A cualquier hora, procurando causar la menor
molestia al notificado. En el juicio ejecutivo no puede requerirse de pago en público (art.
443 CPC)
- Morada, donde pernocta, donde trabaja o cualquier otro recinto privado al cual se
permita acceso al ministro de fe: Sólo entre las 06:00 y las 22:00 horas, sin perjuicio de
que el tribunal pueda habilitar otras horas.
- Oficio del secretario, despacho del tribunal u oficina del ministro de fe: Sólo entre las
08:00 y las 20:00 horas.
3) Debe dejarse constancia escrita en el expediente: (art. 43 y 61 CPC)
4) Autorizada y firmada por un ministro de fe.

2.2.- Requisitos Propios de la notificación personal:


i. Debe efectuarse en lugar hábil: Son hábiles para estos efectos (art. 41 CPC)
- Lugares y recintos de libre acceso público.
- Las morada del notificado (donde vive) o el lugar donde pernocta.
- El lugar donde ordinariamente ejerce su industria, profesión u empleo.
- Cualquier otro recinto privado en que se encuentre el notificado y al cual se permita el
acceso del ministro de fe.
- El oficio del secretario, la casa que sirve de despacho del tribunal y la oficina o despacho
del ministro de fe.
- Cualquier otro lugar habilitado si el notificado no tiene habitación conocida (art. 42 CPC)
ii. Efectuada por funcionario competente: Son competentes para notificar el secretario del
tribunal (art. 380 COT), pero sólo para notificaciones personales al interior de su oficio, el
receptor (art. 390 COT), en cualquier lugar salvo en el oficio del secretario, y
excepcionalmente un notario u oficial del registro civil en aquellos lugares en que no
hay receptores.
iii. En la forma que establece la ley: Debe entregarse personalmente copia íntegra de la
resolución y de la solicitud en que recae si es escrita.

3. Resoluciones que deben notificarse personalmente: Puede utilizarse en cualquier


caso, por ser la más completa que establece la ley. No obstante ello, existen casos en
que es obligación utilizarla:
a) En toda gestión judicial, la primera notificación a las partes o a quienes afecten los
resultados del juicio. Sólo respecto del sujeto pasivo. No necesariamente es la demanda,
pues en determinados casos el procedimiento puede iniciarse de otra forma (art. 40 inc.2°
CPC).
b) Cuando la ley lo ordena para la validez de un acto, como por ejemplo:
i. Cesión de créditos nominativos (1902 CC).
ii. Notificación de títulos ejecutivos a herederos (1377 CC), etc.
c) La resolución que dé lugar al cumplimiento de una sentencia en contra de un tercero en
el procedimiento incidental.
d) Determinadas resoluciones en que existe opción para notificar personalmente o por
cédula (ejs. sentencias definitivas de primera instancia, primera resolución luego de 6
meses de inactividad, la que ordene la comparecencia personal de las partes, etc.)
e) Cuando el tribunal lo ordene expresamente (art. 47)

NOTIFICACIÓN PERSONAL SUBSIDIARIA.

1. Concepto. Se aplica cuando al intentar la notificación personal propiamente tal, el


notificado no es habido. Siempre se efectúa fuera del recinto del tribunal y sólo puede
practicarla el receptor o eventualmente un Notario o Oficial de Registro Civil si no hay
receptor.

2. Etapas que contempla.


a) Búsquedas: Debe haberse buscado al notificado en dos días distintos, en su
habitación o en su lugar de trabajo.
b) Certificación de búsquedas: El receptor debe estampar en el expediente un
certificado de búsquedas, que indique que la persona se encuentra en el lugar del juicio y
que sabe cuál es su morada o lugar de trabajo.
c) Solicitud de notificación: Devuelto el expediente, el interesado debe solicitar que se
ordene la notificación
d) Resolución que la ordena: Si se encuentran debidamente acreditados los supuestos
legales, el tribunal ordena esta forma de notificación.
e) Notificación: Se cumple entregando las copias a que se refiere el art. 40 CPC, a
cualquier persona adulta que se encuentre en la morada o lugar de trabajo del notificado.
Si es un edificio se le puede entregar al portero o encargado. Si no hay nadie o ningún
adulto, se cumple la diligencia fijando un aviso en la puerta que dé noticia de la demanda
u otra solicitud, con indicación de las partes, materia, Juez y resoluciones que se notifican.
En este caso, en la práctica, se tiran los documentos por debajo de la puerta.
f) Aviso: El receptor debe enviar carta certificada al notificado dentro de los 2 días
siguientes a la notificación. Si se omite este aviso, no se invalida la notificación, pero el
receptor será responsable tanto civil como disciplinariamente (art. 46 CPC) Esto implica
que el legislador privilegia la seguridad jurídica por sobre la bilateralidad de la audiencia.
g) Acta y Devolución de Expediente: Practicada la diligencia, el receptor debe levantar
un acta con las menciones del art. 45 y devolver el expediente dentro de 2 días hábiles.
NOTIFICACIÓN POR CÉDULA.

1. Concepto. Consiste en la entrega que hace el ministro de fe en el domicilio del


notificado, de copia íntegra de la resolución y de los datos necesarios para su acertada
inteligencia.

2. Requisitos. Sus requisitos son los siguientes:


a) Comunes a toda actuación judicial: en día y hora hábil, por funcionario competente,
dejándose constancia en el expediente y autorizada por el ministro de fe.
b) Propios de la notificación por cédula:
i. Debe efectuarse en lugar hábil: Sólo el domicilio del notificado, que es aquel que éste ha
declarado en su primera presentación en el expediente. Si dicho domicilio no se designó o
se encuentra fuera de los límites urbanos del lugar en que funciona el tribunal, las
resoluciones que deban notificarse de esta forma, lo serán tan sólo por el Estado Diario
(art. 53 CPC). Esta sanción no sería aplica al litigante rebelde, pues este no ha podido
cumplir con la exigencia de designar domicilio.
ii. Practicarse por funcionario competente: Sólo el receptor.
iii. En la forma que establece la ley: Entregar en el domicilio del notificado, copia íntegra
de la resolución y de los datos para su acertada inteligencia (partes, N° de rol, tribunal y
materia).

3. Resoluciones que deben notificarse por cédula:


1) Sentencias definitivas de primera o única instancia (art. 48).
2) Resoluciones que ordenan la comparecencia personal de las partes (art. 48).
3) Resolución que recibe la causa a prueba (art 48). (En incidentes: por el estado)
4) La primera resolución luego de 6 meses sin haberse dictado ninguna (art. 52).
5) Las notificaciones que se practiquen a terceros (art. 56)
6) Cuando el tribunal lo ordene expresamente o en los casos que la ley lo establezca.

NOTIFICACIÓN POR EL ESTADO DIARIO.

1. Concepto. Es aquella consistente en la inclusión de la noticia de haberse dictado una


resolución en un determinado proceso, dentro de un Estado que debe contener las
menciones que establece la ley, el que debe formarse y fijarse diariamente en la
secretaría del tribunal. Es la regla general en materia de notificaciones y es una completa
ficción legal, puesto que se entiende practicada la notificación por incluirse en una lista la
noticia de haberse dictado una resolución en un determinado proceso.

2. Resoluciones que deben notificarse por el estado. Sin perjuicio de ser ésta la regla
general en materia de notificaciones, hay casos en que se establece expresamente esta
notificación, por ejemplo, la notificación que recae sobre la primera presentación respecto
del actor o la resolución que recibe la causa a prueba en los incidentes. (Art. 40 y 323,
respectivamente).

3. Sujeto que debe practicarla. Corresponde practicarla al Secretario del tribunal y,


excepcionalmente al oficial primero.

4. Forma del estado. El estado debe cumplir con todos los requisitos indicados en el art.
50 CPC: Se confecciona diariamente, se encabeza con la fecha del día en que se forma,
se deben mencionar las causa ordenadas por N° de rol, expresado en cifras y letras, junto
al rol se deben indicar los nombres de las partes. Luego, se indica la cantidad de
resoluciones dictadas en cada una de ellas y finalmente, debe llevar el sello o firma del
secretario.

5. Tiempo y forma de mantenerse. Se debe mantener por a lo menos 3 días en un lugar


accesible al público, cubiertos de vidrio u otra forma que impida alterarlos. Se
encuadernan por orden de fecha y se archivan mensualmente.
NOTIFICACIÓN POR AVISOS.

1. Concepto. Es aquella notificación substitutiva de la personal o de la por cédula, que se


utiliza respecto de personas cuya individualidad o residencia es difícil de determinar o que
por su número dificulten considerablemente la práctica de la diligencia.

2. Requisitos de procedencia: (art. 54 CPC)


i. Que la resolución deba notificarse personalmente o por cédula.
ii. Que a quien deba notificarse se encuentre en Chile (requisito jurisprudencial)
iii. Que se den alguna de las circunstancias que habilitan para solicitar al tribunal esta
forma de notificación:
- Personas cuya individualidad o residencia es difícil de determinar.
- Personas que por su número dificulten considerablemente la práctica de la diligencia.
iv. Que el tribunal aprecie los antecedentes con conocimiento de causa y con audiencia
del ministerio público. El “conocimiento de causa” normalmente se logra luego de remitir
oficios a diversas entidades solicitando información que permita facilitar la gestión, tales
como Registro Civil, Policía Internacional, Correos de Chile, etc.

3. Forma de Realizarse: Se concreta a través de a lo menos 3 publicaciones en un diario


del lugar en que se sigue el juicio, de un extracto preparado por el secretario del tribunal,
del mismo contenido que corresponde a la notificación personal o por cédula. Si se trata
de la primera notificación, es necesario publicar además en el Diario Oficial del día 1° o 15
del mes. La notificación se entiende perfeccionada con la última publicación que se
efectúe, y a partir de esa fecha comienzan a correr los plazos.

NOTIFICACIÓN TÁCITA.

1. Concepto. Se verifica en caso de existir notificaciones defectuosas o inclusive en caso


de no existir ninguna notificación respecto de una determinada resolución judicial, cuando
la persona a quien debiera haberse notificado, efectúa en el proceso cualquier gestión,
distinta de alegar la nulidad de la notificación, que supone que ha tomado conocimiento
de ella. Se fundamenta en los principios de economía procesal y de la protección, y puede
suplir a cualquier clase de notificación.

2. Requisitos.
a) La existencia de una resolución que no se haya notificado o que se haya notificado
defectuosamente.
b) La parte a quien afecta esa falta o esa nulidad haya realizado en el juicio cualquier
gestión que suponga el conocimiento de la resolución y que no haya reclamado la nulidad
o falta de notificación en forma previa

NOTIFICACIÓN FICTA O PRESUNTA LEGAL.

Cuando se ha efectuado una notificación nula, y el afectado comparece en el


procedimiento a alegar tal nulidad, la ley establece que una vez fallado el incidente y
declarada la nulidad, la resolución judicial se entenderá notificada desde que se notifique
válidamente la sentencia que declara la nulidad de la notificación. En caso que la nulidad
sea declarada por un tribunal de segunda instancia, conociendo de un Recurso de
Apelación interpuesto en contra la resolución del tribunal de primera instancia que
rechazó el incidente, la notificación se entenderá practicada desde que se notifique el
“cúmplase” de la resolución del tribunal de alzada que dio lugar a la notificación. Esta
notificación opera por el sólo ministerio de la ley y se fundamenta en el principio de
economía procesal, toda vez que antes de la introducción de esta norma (art. 55 inc.2°) si
se anulaba una notificación, debía efectuarse nuevamente toda la diligencia. En materia
penal también existe esta clase de notificación, pero presenta dos diferencias respecto de
las características antes analizadas:
a) La notificación se entiende practicada sólo tres días después de notificada por el
estado la resolución que declara la nulidad.
b) No opera respecto del procesado privado de libertad ni respecto del Ministerio Público,
los cuales deberán nuevamente ser notificados personalmente.
NOTIFICACIONES ESPECIALES.

a) Muerte Presunta: Previo a la declaración judicial de la muerte presunta, se deben


practicar 3 publicaciones cada dos meses en el Diario Oficial.
b) Cambio de Nombre: Debe publicarse un extracto en el Diario Oficial del día 1° o 15
del mes.
c) Carta Certificada: Es propia de los Juzgados de Policía Local. Es un aviso que se
envía por correo y que puede contener ya sea el aviso de que se ha dictado una
resolución (carta certificada simple o aviso, que equivalente al estado diario) o puede
contener además copia íntegra de la resolución (carta certificada transcrita, que equivale
a la notificación por cédula). Tiene además la particularidad de que la notificación se
perfecciona sólo transcurridos cierto número de días desde que es despachada, número
que varía según el tribunal de que se trate.
d) Cédula de Espera: Es una citación al ejecutado a la oficina del receptor para que
concurra a ella a que se le practique el requerimiento de pago (art. 443 N°1 CPC)
e) Procedimiento Arbitral: Las notificaciones serán personales, por cédula o de la
manera que de común acuerdo establezcan las partes (art. 629 CPC)

PROCESO PENAL. El CPP contempla que las partes pueden proponer por sí otras
formas de notificación, que el tribunal podrá aceptar si, en su opinión, resultaren
suficientemente eficaces y no causaren indefensión (art. 31 NCPP).

RESOLUCIONES JUDICIALES.

1. Concepto: Es el acto jurídico procesal que emana de los agentes de la


jurisdicción, y mediante el cual dan curso al procedimiento, resuelven los
incidentes que se promueven durante el curso de él o deciden la causa o asunto
sometido a su conocimiento.

2. Clasificación:
a) Según la nacionalidad del tribunal que las dicta: Nacionales y extranjeras.
b) Según la naturaleza del negocio en que se dictan: Contenciosas y no
contenciosas.
c) Según la naturaleza del asunto en que se dictan: Civiles y penales.
d) Según la instancia en que son pronunciadas: De primera, segunda o única
instancia.
e) Según su relación con la cosa juzgada:
i. Firmes o ejecutoriadas: Aquellas que producen plenamente el efecto de cosa
juzgada, conforme a lo indicado en el art. 174 CPC:
a) Si no procede recurso alguno, desde que se notifica a las partes.
b) Si proceden recursos y éstos se han deducido oportunamente, desde que se
notifique el “cúmplase” una vez que los recursos deducidos se hubieren fallado.
c) Si proceden recursos y estos no se interponen, desde el certificado del
secretario del tribunal, en el cual se acredite que transcurrieron todos los plazos
para interponer recursos sin que ellos se hayan hecho valer.
ii. Que causan ejecutoria: Son aquellas que pueden cumplirse a pesar de existir
recursos pendientes deducidos en su contra (art. 231 CPC). Producen este efecto
las sentencias de primera instancia, apeladas en el sólo efecto devolutivo, y las de
segunda instancia, estando pendiente un recurso de casación en su contra.
En el proceso penal, la regla general es que las sentencias causen ejecutoria dado
que la interposición de un recurso no suspende la ejecución de la decisión, salvo
que se impugnare una sentencia condenatoria o que la ley dispusiere
expresamente lo contrario (art. 355 CPP).
iii. Sentencia de término: Si bien no cabe en esta clasificación, el art. 98 CPC las
define expresamente como aquellas que ponen fin a la última instancia del juicio.
Es decir, son las sentencias definitivas de única instancia y de segunda instancia.
f) Según su contenido:
i. De condena: Imponen el cumplimiento de una prestación, sea de dar, hacer o no
hacer.
ii. Constitutivas: Crean, modifican o extinguen una situación jurídica.
iii. Declarativas: Deciden sobre la existencia o inexistencia de una situación
jurídica.
iv. Cautelares: Declaran, por vía sumaria, una medida de seguridad.
g) Según su naturaleza jurídica: (art. 158 CPC)
i. Definitivas: Son aquellas que ponen fin a la instancia, resolviendo la cuestión o
asunto que ha sido objeto del juicio. Son requisitos copulativos (la sentencia de
casación no cumple el primero, y la que declara el abandono no cumple el
segundo por lo que no pertenecen a esta clase).
ii. Interlocutorias: Son aquellas que fallan un incidente del juicio, estableciendo
derechos permanentes en favor de las partes (de primer grado) o bien, aquellas
que resuelven sobre algún trámite que debe servir de base en el pronunciamiento
de una sentencia definitiva o interlocutoria (segundo grado). También se clasifican
entre aquellas que ponen término al juicio o hacen imposible su continuación (ej.:
abandono del procedimiento) y aquellas que no producen este efecto.
iii. Autos: Resuelve un incidente del juicio sin ninguno de los efectos propios de
una sentencia interlocutoria, es decir, sin establecer derechos permanentes a
favor de las partes.
iv. Decretos, providencias o proveídos: No resuelven nada, sino que tan sólo
tienen por objeto dar curso progresivo a los autos.
La importancia de este criterio de clasificación, que por lo demás es el único
establecido expresamente en la ley, deriva de los siguientes elementos:
a) Varía la forma de notificación (art. 48 y 50 CPC)
b) En los tribunales colegiados varía el número de miembros (art. 168 CPC)
c) Tienen distintas formalidades y requisitos (arts. 169 a 171 CPC)
d) Sólo definitivas e interlocutorias producen cosa juzgada (art. 175 CPC)
e) Varían los medios de impugnación.

3. Forma de las Resoluciones Judiciales:


3.1 Requisitos comunes a toda resolución (arts. 61 y 169 CPC):
a) Requisitos comunes a toda actuación judicial.
b) Fecha y lugar en que se expide expresado en letras.
c) Firma del juez o jueces que la dicten.
d) Autorización del Secretario.
e) Si se trata de la primera resolución judicial, debe indicar el número de rol (art.
51 CPC) y la cuantía.

3.2 Requisitos de cada clase de resolución:


a) Decretos: No tiene mayores formalidades, por lo que basta que cumplan con
los requisitos comunes, y que indiquen el trámite que el tribunal ordena.
b) Autos y sentencias interlocutorias: Requisitos comunes.
i. Deben pronunciarse sobre condena en costas (autos e interlocutorias de 1er
grado)
ii. Deben resolver el asunto sometido a su decisión.
iii. Pueden eventualmente, en cuanto la naturaleza del negocio lo permita,
contener fundamentos de hecho y de derecho pero no es indispensable (art. 171
CPC)
c) Sentencias definitivas de primera o única instancia: Se contienen en el art.
170 CPC y en el Auto Acordado sobre la forma de las sentencias:
a) Parte Expositiva: Tiene por objeto dejar de manifiesto si el tribunal comprendió
realmente la naturaleza del problema sometido a su conocimiento y decisión.
Contiene:
- Identificación de las partes (nombre, domicilio y profesión u oficio)
- Enumeración de todas las acciones y excepciones opuestas.
- Indicar si se recibió la causa a prueba y si se citó a oír sentencia.
b) Parte Considerativa: Su objeto es manifestar los fundamentos de la sentencia,
con el objeto de evitar arbitrariedades.
- Considerandos de hecho y de derecho en que se funda el fallo.
- Identificación de todos los hechos que han sido fehacientemente acreditados, a
juicios del tribunal.
- Enunciación de las leyes y principios de equidad con arreglo a los cuales se
pronuncia el fallo.
c) Parte Resolutiva: Debe contener la decisión del asunto controvertido,
pronunciándose sobre todas y cada una de las acciones y excepciones, indicando
si se aceptan o rechazan, salvo dos excepciones:
- Acciones o excepciones incompatibles con otras ya aceptadas.
- Casos en que el Juez debe proceder de oficio.
No puede extenderse a puntos no sometidos expresamente a la decisión del
tribunal, bajo sanción de ser casada por “ultrapetita”. Eventualmente, las
sentencias definitivas contienen una especie de injerto de sentencia interlocutoria
de segundo grado, toda vez que deben pronunciarse sobre las costas y sobre la
legalidad y comprobación de las tachas de testigos, cuando éstas han sido
dejadas para definitiva.
d) Sentencias confirmatorias de segunda instancia:
i. Si la de primera instancia cumple con todos los requisitos: basta con cumplir con
los requisitos comunes a toda resolución, más la indicación “se confirma”.
ii. Si la de primera instancia no cumple con todos los requisitos: El art. 170 inc 2°
CPC establece que deberá cumplir con todos los requisitos de una sentencia
definitiva de primera instancia. En la práctica, basta con subsanar el defecto. El
único defecto no subsanable es la falta de pronunciamiento respecto de una
excepción opuesta en tiempo y forma. En este caso, el tribunal de alzada deberá o
casarla de oficio, u ordenar al tribunal a quo que complete la sentencia,
suspendiendo entre tanto el fallo del recurso (art. 776 CPC) Excepcionalmente no
rige esta norma, cuando las excepciones no han sido falladas por ser
incompatibles con otras aceptadas, o cuando se trate de una sentencia dictada en
juicio sumario, casos en los cuales el tribunal ad quem puede fallarlas.
e) Sentencias modificatorias de segunda instancia:
Siempre deberá indicarse la opinión del o los ministros disidentes (tribunal
colegiado), y el nombre del ministro que redactó el fallo. Además es preciso hacer
nuevamente la misma distinción:
i. Si la de primera instancia cumple con todos los requisitos: Se cambian las partes
considerativa y resolutiva en lo pertinente.
ii. Si la de primera instancia no cumple con todos los requisitos: Deberán además
subsanarse los defectos de la de primera instancia.

4. Sanción a la falta de un requisito de forma: Se distingue de acuerdo a la


resolución:
i. Autos o decretos: Recurso de reposición (excepcionalmente apelación).
ii. Sentencias interlocutorias: Recurso de apelación (excepcionalmente reposición).
iii. Sentencias definitivas: Recursos de apelación y Casación en la forma de
conformidad a la causal del art. 768 N°5 CPC.

5. El desasimiento del tribunal (art. 182 CPC): Es aquel efecto que producen las
sentencias definitivas e interlocutorias, en virtud del cual una vez que han sido
notificadas a alguna de las partes, no podrán ser modificadas o alteradas de
ninguna manera por el tribunal que las pronunció. La excepción se encuentra en el
propio art. 182 CPC y es el denominado Recurso de Aclaración, Rectificación o
Enmienda.

6. Impugnación de las Resoluciones Judiciales: Por regla general, la


impugnación de las resoluciones judiciales se verifica a través de la interposición
de recursos, que son aquellos actos jurídicos procesales de parte, realizados con
la intención de impugnar una determinada resolución judicial. La impugnación
puede perseguir diferentes objetivos:
a) Enmienda: Modificación total o parcial de la resolución.
i. Recurso de Reposición: Contra autos y decretos y excepcionalmente contra
sentencias interlocutorias.
ii. Recurso de Apelación: Contra sentencias definitivas e interlocutorias de primera
instancia y excepcionalmente contra autos y decretos que ordenen trámites no
establecidos en la ley o que alteren la substanciación regular del juicio (en
subsidio del recurso de reposición)

b) Nulidad:
i. Recurso de Casación en la Forma: (art. 766 CPC)
ii. Recurso de Casación en el Fondo: (art. 767 CPC)
iii. Recurso de Revisión: (art. 810 CPC)

c) Otros Según la Naturaleza del Recurso:


i. Recurso de Amparo: Garantía constitucional de la libertad personal y seguridad
individual.
ii. Recurso de Protección: Resguardo de los derechos y garantías constitucionales
afectados por actos u omisiones, arbitrarios o ilegales que priven perturben o
amenacen el libre ejercicio de tales derechos.
iii. Recurso de Inaplicabilidad: Velar por el principio de supremacía constitucional.
iv. Recurso de Queja: Reparar faltas o abusos graves cometidos en la dictación de
una resolución judicial.
PROCEDIMIENTO INCIDENTAL
En todo juicio se van proponiendo diversas cuestiones que deben ser resueltas
antes de la cuestión principal. Todos estos incidentes para poder proponerlos y
tramitarlos deben tener una relación más o menos inmediata con la principal.
Incidente: “toda cuestión accesoria de un juicio que requiera
pronunciamiento especial con audiencia de las partes”. Art. 82
De la lectura de este art. se entiende que los incidentes siempre deben tramitarse
con audiencia de la contraparte, pero ello no es así porque existen incidentes que
van a ser rechazados sin audiencia de la contraparte, de plano. Ej.: Art. 84.
Definición doctrinaria: " Incidente es toda cuestión necesaria de un juicio que
requiere de un pronunciamiento especial del tribunal con o sin audiencia de
las partes."
Elementos y Clasificaciones
A) Una cuestión accesoria respecto de la cuestión principal.
B) Que requiere de un pronunciamiento especial del tribunal.

1.- Atendiendo a su relación con la cuestión principal, puede ser:


A) Conexos: Son aquellos que tienen relación con el asunto principal del pleito.
B) Inconexos: Aquellos que no tienen relación con la cuestión principal del pleito.
Art. 84, se rechazan de plano.
2.- Desde el punto de vista de la oportunidad en que se formula:
Hay incidentes que nacen de hechos anteriores al juicio o coexistentes con
su principio o iniciación. Ej.: Excepciones Dilatorias.
Hay incidentes que nacen de hechos que acontecen durante el curso del
juicio. Ej.: Nulidad de la notificación de la resolución que recibe la causa a prueba.
Hay incidentes que nacen o se fundan en hechos producidos después de
dictada la sentencia definitiva. Ej.: Determinar las costas del juicio.
3.- Desde el punto de vista del procedimiento que se le aplica:
Ordinarios: Son aquellos que se tramitan conforme a las reglas de los arts. 82 a
91.
Especiales: Son aquellos que tienen una reglamentación y tramitación especifica
señalada por la ley. Son siete:
- Acumulación de autos. Arts. 92 – 100; Cuestiones de competencia. 101 – 112;
De las implicaciones y recusaciones. 113 – 128; Del privilegio de pobreza. 129 –
137; De las costas. 138 – 147; Del desistimiento de la demanda. 148 – 151; Del
abandono del procedimiento. 152 - 157.
4.- En cuanto a los efectos que produce su interposición:
A) Previo y especial pronunciamiento: Los primeros son aquellos que mientras
no son resueltos paralizan la causa principal. Se tramitan en el mismo cuaderno
principal o sea no se forma cuaderno o ramo separado. Ej.: excepciones dilatorias.
B) Aquellos que no tienen ese carácter: Los segundos no suspenden la causa
principal. Son aquellos que no impiden el curso de la causa principal porque su
resolución no es necesaria para la continuación de ella. Se tramitan en cuaderno o
ramo separado. Ej.: medidas precautorias.
Los incidentes que requieren de un previo y especial pronunciamiento se
caracterizan por 2 cosas:
- Porque suspende el curso de la causa principal. Pero a veces este efecto
suspensivo dice relación con una parte del procedimiento y a veces con un
determinado acto procesal. Ej.: Oponerse a una inspección personal del Tribunal
el efecto suspensivo sólo dice relación con esa prueba pero el término probatorio
va a seguir corriendo y las demás pruebas pueden seguir rindiéndose.
- Que no da lugar a la formación de cuadernos separados sino que se tramitan en
el cuaderno principal.
5.- En cuanto a su definición:
Dilatorio: Son aquellos que tienen por objeto corregir vicios de procedimientos. Si
se promueve un incidente dilatorio y lo pierde va a ser condenado a pagar las
costas. Art. 147.
No dilatorios
6.- Desde el punto de vista de la forma como se resuelve por el tribunal:
De plano: Son aquellos que el tribunal falla sin audiencia de las partes.
Deben acogerse a tramitación: ya sea la ordinaria o la especial que la ley
establece.

Oportunidad para promover un incidente


En cuanto a la oportunidad para promoverlos hay tres reglas fundamentales:
1.- Si el incidente nace o se funda en un hecho anterior al juicio o coexistente de
su principio deben promoverse antes de hacer cualquiera gestión principal en el
pleito. Art. 84 inc. 2. Se contemplan dos situaciones:
A) Hecho anterior al juicio.
B) Coexistente con su principio
El hecho anterior al juicio se refiere a antes de la demanda sea notificada.
2.- Si el incidente nace o se funda en un hecho que acontece durante el juicio
deberá promoverse tan pronto como el hecho llegue al conocimiento de la parte
respectiva. Art.85 inc.1.
Si se practica cualquier otra gestión el incidente va a ser rechazado.
3.- Todos los incidentes cuyas causas existen simultáneamente deberán
promoverse a la vez. Art. 86 inc.1.
Si un incidente es formulado sin considerar estas tres reglas debe ser rechazado
de plano por el tribunal. Art. 84, 85, 86. Excepciones
Hay casos que un incidente no obstante no haber sido interpuesto en la
oportunidad que corresponde no será rechazado de plano.
Hay dos casos. Art. 84 inc.3º.
1.- Cuando se trata de vicios que anulan el proceso, la totalidad del proceso. Ej.:
Incompetencia absoluta del tribunal falta de emplazamiento; pueden ser
interpuestos en cualquier momento.
2.- Cuando se trata de una circunstancia esencial para la marcha o ritualidad del
juicio. Ellas son las que no acarrean la nulidad de todo el proceso sino sólo los de
aquellas actuaciones que están viciadas.
No los rechaza de plano sino que los acoge y de ser procedentes ordenará que se
practiquen las diligencias necesarias para que el proceso siga su curso legal.
Facultades del juez para corregir vicios del procedimiento de oficio
Art. 84 inc. final. No obstante que lo normal es que los que subsanen los vicios por
medio de los incidentes son las partes, el Juez está facultado para corregir de
oficio los errores que observe en la tramitación del proceso y para tomar todas las
medidas que tiendan a evitar la nulidad de los actos de procedimiento.
Existe una limitación no puede subsanar las actuaciones viciadas en razón de
haberse realizado estas fuera del plazo fatal indicado por la ley. Excepción al
principio de la pasividad de los tribunales.
Comentarios
- Es una facultad no una obligación del tribunal.
- La jurisprudencia ha sostenido de manera uniforme que los jueces pueden hacer
uso de esta facultad sólo cuando se trate de actos que miren al orden público o al
interés general; pero no pueden hacer uso de esta facultad respecto de aquellas
actos que miran al interés privado de las partes que sólo pueden ser anulados a
petición de la parte afectada. (Relación Art. 12 CC renuncia de los Dº de las
partes).

Tramitación de los incidentes


Tramitación ordinaria o común art. 82 - 91
Esta se emplea siempre que no tengan señalado por la ley una tramitación
especial.
El tribunal puede adoptar dos actitudes una vez formulado el incidente:
1.- Resolverlos de plano. El tribunal puede resolverlos de plano en los siguientes
casos:
- Cuando se trata de un incidente que no tiene conexión alguna con el asunto que
es materia del juicio principal. Incidentes inconexos. Aquí los rechaza de plano Art.
84.
- Cuando el incidente nace de un hecho anterior al juicio o coexistente con su
inicio y la parte hace cualquier gestión principal antes de promoverlos. Lo rechaza
de plano por no observar la primera regla sobre oportunidad del incidente.
Si el incidente nace de un hecho acontecido durante el pleito y éste ha llegado a
conocimiento de la parte y dicha parte ha practicado alguna gestión después de
conocer ese hecho y no ha formulado el incidente. Los rechaza de plano por no
observar la segunda regla de oportunidad del incidente.
Cuando las partes promueven incidentes con posterioridad a otros cuyas causas
existan simultáneamente. Art.86. Aquí los rechaza de plano.
Cuando se trata de incidentes cuyo fallo se puede fundar en hechos que consten
en el proceso o sean de pública notoriedad lo que el tribunal consignará en su
resolución. Puede acogerlos o rechazarlos, pero siempre de plano. Art. 89.

2.- Acogerlos a tramitación. Cuando no estemos en presencia de los cinco casos


anteriores. La ley establece un procedimiento ordinario o común. Como en todo
procedimiento en el procedimiento incidental ordinario se distinguen tres etapas:
- Etapa de discusión.
- Etapa de prueba.
- Etapa de fallo.
Etapas del procedimiento incidental
1.- Discusión.
Existen dos trámites:
A) La demanda incidental. Es el acto por el cual uno de los litigantes solicita al
tribunal la resolución previa de una cuestión accesoria. Ella puede ser promovida
por cualquiera de las partes, tanto las partes directas (demandante y demandado),
como a las indirectas (terceros).
Esta demanda se promueve proveyendo el tribunal el traslado. Esta resolución es
un decreto.
B) Contestación de la contraparte: que tiene 3 días para hacerlo. Es un plazo legal
individual y fatal. Art. 64. Vencido este plazo el juez debe recibir el incidente a
prueba o bien fallarlo.

2.- Prueba. Con o sin la contestación del demandado incidental y una vez
transcurridos estos 3 días el tribunal debe hacer el mismo examen del juicio
ordinario que es determinar si hay o no hechos controvertidos substanciales y
pertinentes.
Si llega a la conclusión de que estos existen debe acoger la causa a prueba, abrir
un término probatorio de 8 días para que dentro de él se rinda la prueba. Art. 90.
El juez dicta una resolución que debe contener las siguientes nominaciones:
1.- Declarar que recibe el incidente a prueba.
2.- Procede a determinar los hechos controvertidos sobre los que debe recaer la
prueba. Art. 323. Esta resolución se notifica por el estado diario. Arts. 323 inc 2º y
48.
Naturaleza jurídica de esta resolución.
 Si el incidente va a ser resuelto por una sentencia interlocutoria, la resolución
que recibe la causa a prueba es también una sentencia interlocutoria, porque
resuelve sobre un trámite que va a servir de base a una sentencia
interlocutoria. Art. 158.
 En cambio, si el incidente va a ser resuelto por un auto la resolución que recibe
la causa a prueba es un auto; ello para el profesor Salas. Para los profesores
Ortiz y Pecchi, es un decreto porque no fallaría un incidente sino que sólo lo
recibe a prueba.
 Hay que ver si esa resolución que falla el incidente establece o no Dº
permanentes en favor de las partes para determinar si es una sentencia
interlocutoria o un auto.
Termino probatorio
Al igual que en el juicio ordinario el término probatorio puede ser de tres clases:
1.- Término probatorio ordinario: Es el establecido en el art.90 inc. 1º. Es de 8 días
y comienza a correr desde que se notifica por el estado diario esa resolución que
recibe el incidente a prueba. Art. 38. Durante él se puede rendir prueba en
cualquier lugar al igual que en el juicio ordinario.
2.- Término probatorio extraordinario: El legislador ha considerado que el plazo de
8 días es insuficiente para rendir prueba fuera del lugar donde se tramita el juicio y
por ello en el art. 90 inc 3º se establece un término probatorio extraordinario. Para
que él proceda es necesario que las partes lo soliciten y el tribunal lo decrete. Se
puede rendir prueba sólo en el lugar para donde se ha concedido ese término
probatorio extraordinario. El se extiende por el número de días que determine el
juez pero con un máximo de 22 días. Art. 90 inc. 3º
3.- Término especial de prueba: No hay disposición que se refiera a él en este
título pero se concluye que debe proceder conforme a las mismas reglas del juicio
ordinario por el carácter supletorio de este juicio. Art. 3.

Recursos que proceden. De acuerdo al art. 90 inc. Final las resoluciones que
pronuncie el tribunal tanto con motivo de la recepción del incidente a prueba como
la de la ampliación del término probatorio son inapelables falla en única instancia.
Prueba de testigos. Rige lo relativo al juicio ordinario. Pero hay una diferencia que
es que la parte que desee rendir prueba de testigos debe presentar lista de
testigos dentro de los 2 primeros días del término probatorio. Art. 90 inc. 2º.
3.- Fallo del incidente. art.91.
Vencido el término de prueba háyanla o no rendido las partes aun cuando éstas
no lo pidan fallará el tribunal inmediatamente o a más tardar dentro de tercero día
la cuestión que haya dado origen al incidente. No hay período de observaciones a
la prueba ni citación para oír sentencia.

Naturaleza jurídica de esta resolución


Todo incidente se falla por una sentencia interlocutoria o por un auto dependiendo
si establece Dº permanentes en favor de las partes o no los establece.
Reiteración del incidente
El legislador da reglas para evitar la promoción de incidentes para dilatar el juicio.
El art. 88 se pone en esa situación.
La sanción es para el que promueve y pierde más de dos incidentes no para el
que promueve y gane más de dos incidentes. Por eso el legislador establece la
sanción para este litigante de mala fe que habiendo promovido y perdido dos
incidentes no puede promover un nuevo incidente sin haber prestado o rendido el
depósito correspondiente y este nuevo incidente se sigue en cuaderno separado y
por lo tanto no va a suspender la causa principal.
El art. 508 COT señala que cada tribunal mantendrá una cuenta corriente bancaria
de depósito en la oficina del Banco del Estado correspondiente.
El depósito será de 10 UTM, determinándose por el tribunal de acuerdo a la
actuación procesal de la parte. Si el tribunal estima mala fe en la interposición y
tramitación de estos incidentes, podrá aumentar la cuantía del depósito al duplo.
Si se goza del privilegio de pobreza no hay obligación de depositar, pero si se
interponen nuevos incidentes y son rechazados, el juez puede imponer una multa
personalmente al abogado o mandatario judicial si estima que la interposición se
hizo de mala fe o con el claro propósito de dilatar el proceso.
Incidentes especiales:
Desistimiento de la Demanda
Es el acto en virtud del cual el demandante pone fin al juicio ordinario en cualquier
estado de éste, una vez que la demanda ha sido notificada, es decir, después de
que se ha formado la relación procesal.
Antes de notificarse la demanda el demandante puede retirarla sin ningún trámite,
y esta se tiene por no presentada. art.148.
El efecto del desistimiento es producir los efectos de cosa juzgada respecto de las
acciones hechas valer en la demanda. Para que este efecto se produzca es
necesario un pronunciamiento del tribunal, el que se hace a través de una
sentencia interlocutoria. No basta por ende la sola petición de desistimiento.
Art.150.
Tramitación:
Debe tramitarse de acuerdo a las reglas de los incidentes. Art.148. Dentro del
plazo de tres días la parte demandada debe responder oponiéndose al
desistimiento o bien aceptándolo condicionalmente o en todas sus partes. En todo
caso, si ha habido oposición, el tribunal resolverá si continua o no el juicio, o en
qué forma debe tenerse por desistido al demandante. Art.149.
Desistimiento de la acción reconvencional.
El art.151 se refiere a este punto, señalando que se entenderá aceptado, sin
declaración expresa, por el hecho de proponerse, salvo que la parte contraria se
oponga dentro de tercero día de notificada. En este caso se tramitará como
incidente y se reservará el fallo para la sentencia definitiva.

Abandono del procedimiento


Es el efecto que se produce en el procedimiento cuando todas las partes que
figuran en el juicio han cesado en su prosecución durante seis meses, contados
desde la fecha de la última resolución recaída en alguna gestión útil para dar curso
progresivo a los autos. Art.152.
Se requiere la concurrencia de tres condiciones: Procedimiento pendiente;
Inactividad procesal.; Tiempo.
Periodo para hacer valer el abandono: Podrá hacerse valer por el demandado
durante todo el juicio, y hasta que se haya dictado sentencia definitiva. Art.153.
Forma de hacer valer el abandono. El abandono puede alegarse por el
demandado por vía de acción o de excepción, pero en ambos casos se someterá
a tramitación incidental.
Cuando es por vía de acción, el demandado pide al tribunal que se tenga por
abandonado el procedimiento en razón de haber transcurrido seis mese sin que
las partes hayan hecho gestión alguna para proseguir su acción.
Será por vía de excepción cuando, habiendo presentado el actor algún escrito
tendiente a obtener la prosecución del procedimiento luego de transcurrido el
plazo de seis meses, el demandado le opone el abandono de procedimiento,
alegando que concurren todas las condiciones para declararlo.
Renuncia del derecho de abandono: Si, renovado el procedimiento, hace el
demandado cualquiera gestión que no tenga por objeto alegar su abandono.
Art.155. La ley presume la renuncia de este derecho, es un caso de renuncia
tácita.
Efectos del abandono: No se extinguen acciones y excepciones de las partes.
Art.156; Se pierde el derecho a continuar el procedimiento abandonado, éste no
se puede hacer valer en un nuevo juicio. Art.156; Subsisten los actos y contratos
de que resulten derechos definitivamente constituidos. Art. 156 inc.2º.
Juicios en que no procede el abandono. Art., 157. Juicios de quiebra; Juicios de
división o liquidación de herencias, sociedades o comunidades.
Normas especiales de los procedimientos ejecutivos. Art. 153 inc.2º
En estos procedimientos el ejecutado podrá, además, solicitar el abandono del
procedimiento después de ejecutoriada la sentencia definitiva, o en el caso del
art.472. En este caso el plazo para declarar el abandono del procedimiento será
de tres años, contados desde la fecha de la última gestión útil hecha en el
procedimiento de apremio, destinado a obtener el cumplimiento forzado de la
obligación luego de ejecutoriada la sentencia definitiva, o vencido el plazo para
oponer excepciones en su caso.
Acumulación de autos
Es aquel incidente especial que persigue se ordene reunir en una sola causa dos
o más procesos diferentes que se sustancian separadamente cuando entre éstos
se presenta alguno de los casos de vinculación jurídica que consagra la ley, a fin
de que concluyan a través de una sola sentencia.
2.-Requisitos de procedencia:
a) Debe tratarse de alguno de los casos expresamente señalados en la ley: (art.
92)
(1)Cuando la acción o acciones entabladas en un proceso sean iguales a las
que se hayan deducido en otro o, cuando unas y otras emanen directa e
inmediatamente de unos mismos hechos: (92 Nº1)
(2)Cuando las personas y el objeto materia de los procesos sean idénticos,
aun cuando las acciones sean distintas: (90 N 2)
(3)En general, siempre que la sentencia que haya de pronunciarse en un
juicio haya de producir cosa juzgada en otro:
b) Los procesos deben estar sujetos a un mismo procedimiento: (Art. 95)
c) Los procesos deben encontrarse en instancias análogas

3.-Tramitación:

a) Persona que puede solicitar la acumulación: (art 94 inc.1) Podrá ser


solicitada por todo aquél que haya sido admitido como parte legítima de cualquier
proceso de los que estén en juego;
b) Proceso en el cual debe solicitarse la acumulación: (art.98) Ella debe
pedirse ante el tribunal al cual corresponda continuar conociendo de los procesos
una vez que éstos se acumulen. Conforme a lo señalado en el art.96, la
determinación de este tribunal dependerá si los procesos se siguen ante juzgados
de igual o distinta jerarquía; si son de igual jerarquía, el más nuevo, acumulará al
más antiguo; en caso contrario, se acumulará al de mayor jerarquía.
c) Oportunidad que puede solicitar la acumulación: (art.98) Debe solicitarse en
cualquier estado del proceso, antes de la dictación de la sentencia
d) Tramitación propiamente tal: (art.99) Esta es la misma que la del
incidente ordinario
Cuando se dé lugar al incidente de acumulación de autos, los procesos que estén
más avanzados se paralizarán en el estado que se encuentren hasta que los más
atrasados lleguen a dicha etapa.

Cuestiones de competencia
Son incidentes especiales promovidos normalmente por la parte demandada en un
proceso, a través de los cuales hace valer la incompetencia de un tribunal,
solicitando que el asunto se radique ante aquel otro que él estima legalmente
competente.
Las cuestiones de competencia podrán referirse tanto a la competencia absoluta
como a la relativa; tratándose de la relativa, debe recordarse que ella debe ser
alegada por el demandado antes de efectuar cualquier gestión útil, por cuanto en
caso contrario operaría la prórroga tácita.
Las cuestiones de competencia pueden promoverse por dos vías; la inhibitoria y la
declinatoria.
A) Inhibitoria: Es aquel incidente de competencia en el cual la parte recurre
ante el tribunal que estima competente para conocer del asunto,
solicitándole que éste dirija un oficio a aquél que se encuentra conociendo
de la causa, pidiéndole que se inhiba de seguir conociendo de ella y le
remita los antecedentes.
B) Declinatoria: Es aquel incidente de competencia que se formula ante el
tribunal que está conociendo del asunto y que se estima incompetente,
solicitándole que deje de conocer del proceso y remita los antecedentes al
otro tribunal que se estima competente.
C) Paralelo entre la declinatoria y la inhibitoria:
a) Ambos son incidentes especiales relativos a la competencia;
b) La inhibitoria se plantea ante el tribunal que se estima competente y la
declinatoria ante el que se cree incompetente;
c) La declinatoria de origen a un incidente de previo y especial pronunciamiento,
ya que el art. 112 inc 1 señala que se suspenderá el curso de la causa principal
mientras se sustancie este incidente; la inhibitoria no suspende la sustanciación,
sin perjuicio de que posteriormente si se acoge la inhibitoria se declare nulo todo
lo obrado ante el tribunal incompetente (112 Inc. 3);
d) La inhibitoria se sustancia ante dos tribunales, mientras que la declinatoria ante
uno solo;
e) La declinatoria y la inhibitoria son antagónicas, en forma tal que no pueden ser
empleadas simultánea ni sucesivamente y, además, las partes que hubieren
optado por una de estas vías no podrán renunciar luego a ella e iniciar la otra (art.
101 inc. 2);
f) Una vez declarada la incompetencia de un tribunal, sea por declinatoria o
inhibitoria, todo lo obrado ante el incompetente será nulo, por haber faltado un
presupuesto procesal de validez.
g) En la inhibitoria, cuando el tribunal requerido no da lugar a la incompetencia,
siempre se generará contienda de competencia y será necesario la remisión de
todos los antecedentes ante el superior jerárquico, para que éste resuelva;
tratándose de declinatoria si el tribunal requerido no da lugar a ella, no se
generará contienda alguna, toda vez que todas las gestiones se realizan sólo ante
él.

Implicaciones y recusaciones
Son ciertos hechos o circunstancias que pueden concurrir respecto de los jueces
en general, así como de los auxiliares de la Administración de Justicia y de los
peritos judiciales, de los cuales la ley presume una falta de imparcialidad de la
persona a quien le afecta para juzgar o intervenir en el mismo (implicancia) o
faculta a la parte a quien podría perjudicar esta presunta falta de imparcialidad,
para solicitar en el procedimiento correspondiente se disponga esta prohibición
respecto de ese negocio específico (recusación).
Las causales de implicancia y recusación se encuentran señaladas en forma
detallada en los arts. 195 y 196 del COT.
 Paralelo entre las implicancias y las recusaciones:
a) La implicancia importa una prohibición absoluta para la persona afectada
por los hechos que constituyen la causal para entrar al asunto, sancionando
incluso el art. 224 del C. Penal, en relación con el art. 227 del mismo código
a quienes "con manifiesta implicancia que les sea conocida y sin
haberla hecho saber previamente a las partes" fallaren en algún proceso
o intervinieren en alguna actuación inherente al cargo.
En las recusaciones en cambio, como los hechos que la constituyen son de menor
gravedad, la ley señala que ellas deben ser alegadas por las partes a las que
pueda afectar la presunta falta de imparcialidad, quienes pueden renunciar en
forma expresa o tácita a ellas.
b) De las implicancias, tratándose de tribunales unipersonales, conoce el
mismo juez a quien le afecta la causal que se invoca; en los tribunales
colegiados conocerá de este incidente el tribunal del cual forma parte el
recusado, sin la participación de éste.
De los incidentes de recusación conoce el tribunal superior.
c) Las implicancias pueden y deben ser declaradas de oficio por el juez; de los
hechos constitutivos de causales de recusación sólo es necesario que el afectado
las haga presente a fin de que la parte a quienes puedan afectar formule la
incidencia respectiva siempre que lo estime pertinente.
d) En contra de las sentencias de los jueces afectados por causales de implicancia
puede deducirse recurso de casación en la forma, sin necesidad que la implicancia
haya sido declarada; en cambio, si el juez se encuentra afectado por hechos
constitutivos de causal de recusación, para que pueda admitirse la casación es
necesario que esa recusación haya sido declarada.

Privilegio de pobreza
En términos generales, el privilegio de pobreza es aquella institución en virtud de
la cual la ley concede a las personas de escasos recursos el beneficio de quedar
exentos de pagos que normalmente se deben efectuar ya sea a abogados y
procuradores, como a algunos auxiliares de la Administración de Justicia, así
como otros desembolsos por concepto de consignaciones en los procedimientos,
etc.
Este beneficio en algunos casos lo otorga la ley en forma directa a personas
respecto de las cuales, por el hecho de encontrarse en determinadas situaciones
se presume que son pobres, como por ejemplo los defendidos por alguna
corporación de asistencia judicial.
 Características:
a) Es un incidente especial;
b) Debe ser promovido en el mismo proceso y ante el mismo tribunal que conoce
del asunto, conforme a las normas generales (art. 130). Sin embargo, cuando
existen varios procesos seguidos entre las mismas partes, cuyo conocimiento
corresponde al mismo tribunal, podrá solicitarse el privilegio para todos esos
procesos al mismo tiempo, por razones de economía procesal.
c) Puede solicitarse también antes de la iniciación del proceso, lo que vendrá a
constituir una forma especial de medida prejudicial preparatoria (art. 130)
d) Este incidente se tramita en cuaderno separado, según lo dispone el art. 131.
e) La resolución que falla la incidencia puede ser dejada sin efecto cuando se
justifiquen circunstancias que habrían bastado para denegarlo;(136).
f) Conforme a lo señalado, la resolución que resuelve esta incidencia no establece
derechos permanentes en favor de las partes. Sin embargo algunos sostienen que
es interlocutoria.
 Tramitación:
a) La parte interesada deberá presentar al tribunal una solicitud en la cual indicará
los fundamentos de su petición, ofreciendo además rendir información para
acreditar esos fundamentos.
b) El tribunal resolverá la solicitud ordenando se rinda la información solicitada,
con citación.
c) Si la demandada en la incidencia nada dice en el plazo señalado, se rendirá la
información correspondiente y se agregarán al proceso las restantes pruebas que
aporte el peticionario o que el tribunal mande agregar, conforme lo señala el art.
132 inc.1 y, a continuación el juez resolverá la incidencia.
d) Si la contraparte se opone, de esa oposición se dará traslado y luego se
procederá de acuerdo con las reglas del incidente ordinario (132 inc 2.).
e) La resolución que se dicte es apelable y, conforme a las normas generales, la
apelación se concederá en el solo efecto devolutivo. Lo anterior, no obstante que
siendo un auto no sería apelable.
Presunción legal: El art. 135 del CPC señala en forma general que el juez, al
resolver esta incidencia, considerará como presunción simplemente legal para
establecer la calidad de pobre, el hecho de que el solicitante se encuentre preso.

Las costas
Normalmente en todo proceso se originan gastos que debe solventar la parte, a fin
de poder hacer valer convenientemente sus derechos; todos estos gastos, salvo
los que dicen relación con las consignaciones exigidas por la ley en determinados,
reciben en forma genérica el nombre de costas.
Las costas se clasifican de las siguientes maneras:
a) Costas personales y procesales: Son personales las correspondientes a los
honorarios de abogado y procurador; procesales las restantes, como por ejemplo
los honorarios de peritos, receptores, etc.
b) Costas comunes y costas individuales: Son comunes las que las partes deben
pagar por partes iguales, como por ejemplo las que se causan a raíz de un informe
pericial solicitado de común acuerdo; individuales son las que corresponde
solventar a cada parte.
c) Costas útiles y costas inútiles: Útiles son aquellas necesarias para el proceso e
inútiles las que no son indispensables.

El incidente de tasación de costas:


Es aquel incidente especial, promovido por la parte de un proceso o de una
incidencia que no se encuentre conforme con el monto en que esas costas han
sido reguladas, solicitando se rectifique o complemente la tasación.
Gestiones previas:
a) La parte en cuyo favor se ha dispuesto el pago de las costas, para obtener
efectivamente ese pago deberá solicitar al tribunal correspondiente, en primer
término, la tasación de ellas presentando al efecto el escrito pertinente el que será
resuelto en la siguiente forma "Tásense las costas procesales por el secretario y
hecho autos para regular las personales".
b) Conforme lo señala el art. 140, el secretario no es la persona directamente
obligada a efectuar la tasación de las costas procesales, pero como la ley autoriza
al juez para encomendarle a ese funcionario esta tarea, lo normal es que se
designe a éste.
c) Para efectuar esta tasación de costas procesales el secretario sólo considerará
las útiles
d) Tasadas las costas procesales, procederá el juez o el ministro de turno a tasar
las personales correspondientes a abogado y procurador: también se incluyen
dentro de estas costas las de los defensores públicos cuando hayan actuado en
representación de ausentes o incapaces.
e) En esta misma resolución el juez dispondrá que la tasación efectuada por el
secretario y que la regulación que él hace en ese momento de las personales,
sean puestas en conocimiento de las partes y se tenga por aprobadas si no fueren
objetadas dentro de 3 día, lo que se cumplirá notificando esta resolución por el
estado diario.
Tramitación propiamente tal:
a) Una vez ejecutoriada la resolución que falla el incidente de costas o, no
habiendo habido oposición dentro del plazo de citación, la parte en cuyo
favor se dispuso el pago de ellas podrá exigir éste por vía compulsiva o
ejecutiva si la contraparte no efectúa la consignación de las mismas ante el
tribunal.
b) Si las partes nada dicen dentro del término de tres días, las costas
reguladas en la forma antes indicada se tendrán por aprobadas.
c) Dentro de estos tres días las partes podrán objetar la liquidación, ya sea
porque ella es estimada muy baja o muy alta; si se formula alguna objeción,
se generará un incidente de regulación de costas, el que el tribunal podrá
resolver de plano o previo traslado de cada una de las presentaciones que
se efectúen (142).

Nulidad Procesal
El incidente ordinario de nulidad de lo obrado. (Arts. 83 y 84 CPC)
Es aquella cuestión accesoria de un proceso que requiere de un pronunciamiento
especial del tribunal, la que versa sobre la nulidad de la relación procesal misma o
de uno o más actos de procedimiento.
Vicios que dan origen a la nulidad:
La nulidad existirá en todos aquellos casos para los cuales la ley establezca
expresamente esa sanción y además, en todos los eventos en que exista algún
vicio que irrogue a alguna de las partes un perjuicio sólo reparable con la
declaración de nulidad.
Plazo para deducirlo:
El incidente de nulidad sólo puede deducirse dentro de cinco días contados de que
aparezca o se acredite que quien debe reclamar la nulidad tuvo conocimiento del
vicio, salvo que se trate de la incompetencia absoluta del tribunal, en que la
incidencia puede plantearse en cualquier momento, sin perjuicio de que el juez
deba declararla de oficio (arts. 83 y 84).

Los incidentes especiales de nulidad.


a) Caso del artículo 79: Un litigante podrá solicitar la nulidad de lo obrado en
rebeldía suya, ofreciendo probar que ha estado impedido por fuerza mayor.
Este derecho sólo podrá impetrarse dentro de tres días contados desde
aquél en que cesó el impedimento y pudo hacerse valer ante el tribunal que
conoce del negocio.
En este caso existe una aplicación del aforismo "al impedido no le corre
plazo".
b) Caso del artículo 80: Si al litigante rebelde no se le ha hecho saber en
persona ninguna de las resoluciones dictadas en el proceso, éste podrá
pedir la nulidad de lo obrado, ofreciendo acreditar que, por un hecho que no
le es imputable han dejado de llegar a sus manos las copias a que se
refieren los arts. 40 y 44, o que ellas no son exactas en su parte sustancial.
Este derecho no podrá reclamarse sino dentro de los cinco días siguientes
desde que aparezca o se acredite que el litigante tuvo conocimiento del
juicio.
c) Incidente de nulidad de la notificación: Si el incidente se funda en la
nulidad de alguna notificación y él es acogido, la notificación declarada nula
se entenderá practicada desde el momento en que se notifique a la parte
esa resolución que la declara nula. Si la nulidad ha sido dispuesta por un
tribunal superior, la notificación de la demanda se entenderá practicada
cuando el tribunal de primera instancia notifique por el estado diario la
resolución que ordena cumplir lo resuelto por ese tribunal superior, es decir
el "cúmplase".

La nulidad de oficio.
Con el objeto de evitar que, no obstante que el juez se haya percatado de que un
procedimiento es nulo por haberse incurrido en su tramitación en algún vicio
procesal él deba seguir su curso porque ninguna de las partes solicita esa nulidad,
el CPC ha introducido la facultad del juez para que éste de oficio declare la
nulidad. Así, el art. 83 dice que el juez podrá declarar la nulidad de oficio o a
petición de parte y el art. 84 inciso final añade que el juez podrá corregir de oficio
los errores que observe en la tramitación del proceso, pudiendo asimismo tomar
las medidas necesarias encaminadas a evitar la nulidad de los actos de
procedimiento. Esta declaración de oficio podrá efectuarla el juez siempre que no
exista sentencia definitiva notificada legalmente a una de las partes y siempre que
no haya precluído la oportunidad de las partes para solicitar la nulidad. La primera
limitante indicada es la consecuencia del desasimiento del tribunal y la segunda se
funda en que se las partes no han reclamado oportunamente del vicio, con ello
han convalidado el acto nulo.
La extensión de la nulidad procesal. Como lo dispone el art. 83 en su inciso
final, las declaraciones de nulidad de un acto no necesariamente implica la nulidad
de todo lo obrado con posterioridad, toda vez que el juez deberá señalar en forma
precisa cuáles son los actos nulos en razón de su conexión con el acto anulado.
Esto, sin perjuicio de que pueda invalidarse todo el proceso

LAS MEDIDAS PRECAUTORIAS.


Concepto. Entre la presentación de la demanda y la sentencia puede ocurrir que
varíe la cosa objeto del pleito o la solvencia misma del demandado. Este tipo de
medidas surge con el objeto de evitar que tales cambios perjudiquen al
demandante. Las medidas precautorias pueden definirse como los medios que la
ley franquea al demandante para que asegure el resultado de la acción que ha
interpuesto.
Clases de medidas precautorias. Existen tres tipos:
a) Las que enumera el Art. 290 CPC.
b) Las demás que autorizan las leyes conforme al Art. 300 CPC.
c) Las referidas por el Art. 298 CPC.

ANÁLISIS PARTICULAR DE LAS MEDIDAS PRECAUTORIAS

El secuestro de la cosa que es objeto de la demanda. El secuestro se define


como el depósito de una cosa que se disputan dos o más individuos, en manos de
otro que debe restituirla al que obtenga una decisión en su favor. Como medida
precautoria tiene lugar en dos casos:
a) En la situación prevista del Art. 901 del CC, o sea, cuando reivindicándose una
cosa corporal mueble, hubiere motivo de temer que se pierda o deteriore en
manos del poseedor.
b) Cuando se entablen otras acciones con relación a cosa mueble determinada y
haya motivo de temer que se pierda o deteriore en manos de la persona que, sin
ser poseedora de dicha cosa, la tenga en su poder (Art. 291 CPC).

El nombramiento de uno o más interventores. El interventor judicial es la


persona que designa el juez con el objeto de que controle la administración de los
bienes materia del juicio, y que aún se hallan en poder del demandado.
La cantidad de interventores variará según la calidad e importancia de los bienes
intervenidos.
Este nombramiento tiene lugar en los siguientes casos:
1º En el caso del inciso segundo del Art. 902 del CC, es decir cuando se demanda
el dominio u otro derecho real constituido sobre un inmueble, y hubiere justo
motivo de temer que la cosa y los muebles y semovientes anexos a ella se
deterioren en manos del poseedor demandado, o las facultades pecuniarias de
éste no ofrecieren suficiente garantía.
2º En el del que reclama una herencia ocupada por otro, si hay justo motivo de
temor antes indicado
3º En el del comunero o socio que demanda la cosa común, o que pide cuentas al
comunero socio que administra.
4º Siempre que haya justo motivo de temer que se destruya o deteriore la cosa
sobre que versa el juicio, o que los derechos del demandante puedan quedar
burlados; y
5º En los demás casos expresamente señalados por las leyes (Art. 293 CPC).
Las facultades del interventor se limitan a llevar la cuenta de las entradas y gastos
de los bienes sujetos a intervención, pudiendo –para el desempeño del encargo-
imponerse de los libros, papeles y operaciones del demandado (Art. 294 inciso 1º
CPC).
Es obligación del interventor dar aviso al interesado o al tribunal de toda
malversación o abuso que advierta.
Producida la malversación o abuso, el tribunal puede decretar el depósito y
retención de los productos líquidos en un establecimiento de crédito o en poder de
la persona que el tribunal designe, sin perjuicio de dictarse medidas más rigurosas
(Art. 294 inciso 2º CPC). En la actualidad, en virtud de lo dispuesto por el Art. 507
COT, ese depósito y retención se hace en la cuenta corriente del tribunal, sin ser
necesario recurrir a un establecimiento de crédito o a terceros.

La retención de bienes determinados. Esta medida recae exclusivamente sobre


dinero o cosas muebles, sean o no materia del juicio. Su objeto es impedir que el
demandado disponga de esas cosas durante el curso del juicio.
La retención de estos bienes puede hacerse en manos del mismo demandante,
del demandado o de un tercero (Art. 295 inciso 1º, parte 1ª CPC).
Puede ordenarse que los valores retenidos se trasladen a un establecimiento de
crédito o a terceros, cuando lo estime conveniente para la seguridad de tales
valores (Art. 295 inciso 2º CPC).
Esta medida precautoria tiene lugar:
1º En caso que las facultades del demandado no ofrezcan suficiente garantía;
2º En caso que haya motivo racional para creer que el demandado procurará
ocultar sus bienes; y
3º En los demás casos determinados por la ley (Art. 295 inciso 1º, parte final).
Decretada esta medida precautoria de retención de bienes determinados, esos
bienes se consideran en la misma situación jurídica de los bienes embargados,
según se ha establecido en la jurisprudencia. En consecuencia, su enajenación,
salvo consentimiento del juez o acreedor, adolece de objeto ilícito (Art. 1464, Nº3
CC).
Si la retención recae sobre un crédito que el demandado tiene contra un tercero, y
este último insiste en pagar a su acreedor, el pago es nulo (Art. 1578, Nº2 CC).

La prohibición de celebrar actos o contratos sobre bienes determinados.


Mediante esta medida precautoria, se impide al demandado que celebre cualquier
clase de acto o contrato sobre bienes objeto del juicio o ajenos a él. Como la ley
señala genéricamente “prohibición de celebrar actos o contratos”, Casarino estima
que al solicitar la medida hay que expresar qué clase de acto o contrato se desea
que se prohíba, o si estima que ha de ser amplia la prohibición.
Los requisitos para decretar esta medida varían según se trate de prohibir actos o
contratos sobre bienes materia del juicio o sobre bienes ajenos a él.
a) Si se trata de bienes materia del juicio: basta que el demandante invoque esta
circunstancia para que el tribunal pueda decretarla, sin perjuicio de la concurrencia
de los requisitos generales.
b) Si se trata de otros bienes determinados del demandado: es necesario que las
facultades –económicas- del demandado no ofrezcan suficiente garantía para
asegurar el resultado del juicio.

El inciso final del Art. 296 CPC agrega que para que los objetos que son materia
del juicio se consideren comprendidos en el Art. 1464 Nº 4 CC –que consagra el
objeto ilícito en la enajenación de las especies cuya propiedad se litiga- exige que
el tribunal decrete prohibición respecto de ellos.
Una vez decretada la medida precautoria de prohibición, produce efectos:
a) Efectos entre las partes: Se producen por el sólo hecho de decretarse y tan
pronto se notifique la resolución.
b) Efectos frente a terceros: Si se trata de bienes raíces, se requiere de inscripción
en el Conservador de Bienes Raíces respectivo; si se trata de bienes muebles,
sólo producirá efectos respecto de los terceros que tenían conocimiento de ella el
tiempo del contrato. Y si ese tercero procede a sabiendas, será responsable de
fraude, o sea, de estafa (Art. 297).

Procedimiento
Requisitos para la concesión de medidas precautorias.
Hay que distinguir según se trate de aquellas enumeradas por el Art. 290 CPC, las
referidas en la parte final del Art. 298 CPC y las demás que autorizan las leyes
conforme al Art. 300 CPC.
a) Medidas Precautorias señaladas en el Art. 290: exigen la concurrencia de un
doble grupo de requisitos legales, generales y especiales.
1. Generales:
- Que se limiten a los bienes necesarios para responder a los resultados del pleito:
ya que mediante ellas se busca resguardar los derechos del demandante, pero sin
imponer gravámenes innecesarios al demandado.
- Que el demandante acompañe comprobantes que constituyan a lo menos
presunción grave del derecho que se reclama (Art. 298): ello para darle seriedad a
la medida precautoria.
2. Especiales: aquellos que se analizarán en detalle al estudiar las medidas
precautorias en particular. Algunos ejemplos:
- En la medida precautoria de secuestro se debe sostener que se encuentra en
alguno de los casos en que según la ley procede el secuestro, además de
acreditar que existen motivos justos para temer que la cosa mueble se pierda o
deteriore.
- En la medida precautoria de nombramiento de un interventor se debe sostener
que se encuentra en presencia de uno de los casos en que según la ley procede el
nombramiento.
El requisito específico en algunos casos, está constituido por la circunstancia que
la ley misma autoriza concederla, y, en otros, consiste en la circunstancia de que
el demandante tenga justo motivo de temer que la cosa objeto del juicio se pierda
o deteriore, o estime que las facultades económicas del demandado no ofrecen
suficiente garantía para asegurar los resultados del juicio.
b) Medidas Precautorias contempladas en la parte final del Art. 298: deben
concurrir también los requisitos generales y, además, el otorgamiento de una
caución para responder el actor de los prejuicios que se originen, si el tribunal así
lo estima necesario.
c) Medidas precautorias contempladas en el Art. 300: solamente deben concurrir
los requisitos particulares que exija el texto legal.

Oportunidad para pedir medidas precautorias. Art. 290 inc.1: “Para asegurar el
resultado de la acción, puede el demandante en cualquier estado del juicio, aún
cuando no esté contestada la demanda, pedir una o más de las siguientes
medidas”. Debe además considerarse que el Art. 433 CPC también establece que,
a pesar de que las partes se encuentren citadas para oír sentencia, puede pedir el
demandante una o más medidas precautorias indicadas en el Art. 290. Por tanto
se pueden solicitar en primera instancia, en segunda instancia y aún en vía de
casación, formulándose ante el tribunal de primera instancia.

Tramitación de la solicitud sobre concesión de medida precautoria.


a) Primera situación: el demandante presenta su solicitud de medida precautoria
ante el tribunal que está conociendo del juicio principal, y en ella pide que, para
asegurar el resultado de su acción, se le concedan una o más de las medidas
señaladas en el Art. 290. El tribunal estudiará la solicitud, tendrá que pronunciarse
sobre ella, y ordenará la formación de un cuaderno separado. El demandado
podrá oponerse o no a ella. Si se opone se dará origen a un incidente. (Art. 302
inc. 1 CPC) La resolución que falle el incidente es susceptible de recurso de
apelación. Si la resolución en cuestión acoge la oposición del demandado, al
mismo tiempo ordenará el alzamiento de la medida precautoria decretada, y en tal
caso la apelación que deduzca el demandante se le concederá en el solo efecto
devolutivo. (Art. 194 nº4 CPC).

b) Segunda situación: el mismo caso de la anterior, pero agrega que aún le faltan
los comprobantes exigidos por la ley para acreditar a lo menos presunción grave
del derecho que reclama. El tribunal examina los requisitos y además, si se está o
no en presencia de un caso grave y urgente (Art. 299 1ª parte). En caso afirmativo,
concederá la medida por un término que no exceda de 10 días, mientras se
presentan los comprobantes, exigirá además caución para responder por los
perjuicios que resulten y ordenará formación de cuaderno separado. En seguida,
esta resolución se notificará a las partes, y rendida que sea la caución, se llevará a
efecto la medida en referencia. Dentro del término señalado se tendrá que
acompañar los comprobantes y pedir que se mantenga la medida, el demandado
tiene derecho a oponerse y su oposición dará lugar a un incidente, la resolución
que falle este incidente es apelable.

c) Tercera situación: el mismo caso de la primera, agregando que la medida


precautoria debe llevarse a efecto antes de notificarse al demandado, por las
graves razones que también hará valer (Art. 302 inc. 2). El tribunal examinará la
solicitud y si concurren los requisitos concederá la medida precautoria y ordenará
la formación de un cuaderno separado. Esta resolución se notificará
exclusivamente al demandante. Luego, pesa sobre el demandante la obligación de
notificar al demandado la resolución respectiva en el término de 5 días a contar de
la fecha del pronunciamiento, pudiendo el tribunal ampliar este plazo por motivos
fundados (Art. 302 inc. 2) y, todavía, ordenar que esta notificación se haga al
demandado por cédula (Art. 302 inc. 3). Si la notificación no se efectúa en el
término fijado, las diligencias practicadas quedan sin efecto. Si la notificación se
practica al demandado en el término, tendrá derecho a oponerse. La resolución
que falle este incidente es susceptible de apelación.

En la práctica, nuestros tribunales siguen una tramitación diversa:


a) Primera situación señalada: los tribunales es limitan a proveer la
correspondiente solicitud, confieren traslado al demandado por tres días y ordenan
la formación de un cuaderno separado. Una vez que responde el demandado,
resuelven el incidente o bien lo reciben a prueba. La resolución respectiva es
apelable en el solo efecto devolutivo.
b) Segunda situación: previo otorgamiento de caución, conceden la medida
precautoria y se lleva a efecto. El demandante debe acompañar tales
comprobantes y pedir que se mantenga la medida precautoria. De esta solicitud
los tribunales confieren de inmediato traslado al demandado y una vez tramitado el
incidente resuelven si ha lugar o no a la medida precautoria (si se mantiene o no la
que ya se había decretado previa caución).
c) Tercera situación: la conceden desde luego, sin previa notificación. Lo anterior
sin perjuicio de conferir al demandado, en esa misma resolución, el
correspondiente traslado por tres días. Tramitado el incidente de acuerdo a las
normas generales, el tribunal resuelve si ha o no lugar a la medida precautoria, es
decir, si se mantiene o no la que había decretado, sin previa notificación. A esta
última la llaman provisional, y a la que se decreta en la resolución que falla el
incidente, definitiva.

Efectos de las medidas precautorias. El Art. 301 establece: “todas estas


medidas son esencialmente provisionales. En consecuencia, deberán hacerse
cesar siempre que desaparezca el peligro que se ha procurado evitar o se
otorguen cauciones suficientes.” En cuanto al cese del peligro y las cauciones que
se han de otorgar, se trata de cuestiones de hecho que el tribunal debe
determinar.
Las resoluciones que confieren o deniegan una medida precautoria, no producen
cosa juzgada, ni siquiera formal, por tanto ante un cambio en las circunstancias
puede volver a solicitarse la medida precautoria.

LAS MEDIDAS PREJUDICIALES.

Concepto. El legislador ha creído conveniente, para asegurar el derecho de


defensa de ambas partes, establecer la institución de las medidas prejudiciales,
que se definen como “los medios que franquea la ley a las partes litigantes para
preparar su entrada al juicio”. En caso alguno constituyen una verdadera
demanda, se trata simplemente de gestiones preparatorias del juicio mismo.
No deben confundirse con las medidas precautorias, las precautorias sólo
competen al demandante, mientras que las prejudiciales pueden solicitarlas tanto
el demandante como el demandado. Las precautorias buscan asegurar el
resultado de la acción instaurada, mientras que las prejudiciales tienes por objeto
preparar la entrada al juicio. Las precautorias se solicitan en cualquier estado del
juicio, mientras que las prejudiciales antes de la iniciación del juicio. Ambas
instituciones difieren en cuanto a su titular, finalidad y oportunidad.
El Art. 273 parece dar a entender que las medidas prejudiciales sólo tienen
aplicación en el juicio ordinario, sin embargo del Art. 3 del mismo código puede
concluirse que las medidas prejudiciales son disposiciones comunes a todo
procedimiento.

Clasificación de las medidas prejudiciales.


a) Según la parte que puede solicitarlas: medidas prejudiciales del futuro
demandado y medidas prejudiciales del futuro demandante.
b) Según la finalidad: aquellas destinadas a preparar la demanda, las destinadas a
procurarse pruebas que pueden desaparecer, y las destinadas a asegurar el
resultado de la acción que se va a instaurar.
c) Según su naturaleza: propiamente dichas y prejudiciales precautorias.

ANÁLISIS PARTICULAR DE LAS MEDIDAS PREJUDICIALES.

Declaración jurada acerca de algún hecho relativo a la capacidad del futuro


demandado para parecer en juicio, o a su personería o al nombre y domicilio
de sus representantes. Art. 273 nº1. Solamente puede pedirla el futuro
demandante. Tiene un triple objetivo ya que puede versar sobre algún hecho
relativo a su capacidad para parecer en juicio, personería o sobre el nombre y
domicilio de sus representantes.
Se decretará solo cuando sea necesaria para que el demandante pueda entrar en
el juicio. Si el tribunal acepta la procedencia de esta medida prejudicial, será
necesario que señale una audiencia para que concurra a ella el futuro demandado.
Puede suceder que el futuro demandado se resista, en tales casos, la ley autoriza
para imponer multas que no excedan 2 sueldos vitales o arrestos hasta de dos
meses, sin perjuicio de repetir la orden y apercibimiento. (Art. 274).

Exhibición de la cosa que haya de ser objeto de la acción que se trata de


entablar. Art. 273 nº2. Solamente puede pedirla el futuro demandante. Ha de
tener por objeto una cosa, la cual desea examinar previamente para mejor éxito de
aquella. Se decretará solo cuando sea necesaria para que el demandante pueda
entrar el juicio.
La manera de proceder a la exhibición depende de en poder de quien se
encuentre la cosa:
a) En poder del futuro demandado: se hará mostrando el objeto o autorizando al
futuro demandante para que lo reconozca.
b) En poder de terceros: cumplirá la persona a quien se ordene la exhibición,
expresando el nombre y residencia de dichos terceros, o el lugar donde el objeto
se encuentre (Art. 275).

El solicitante tendrá derecho, siempre que lo exija, a que se deje razón en el


proceso de la clase y estado actual de la cosa exhibida (Art. 283). Si se niega a
efectuar la exhibición, podrá apremiarse con multas que no excedan de dos
sueldos vitales o arrestos hasta de dos meses, y aún, decretarse el allanamiento
del local. Iguales apremios podrán decretarse contra los terceros tenedores del
objeto.

Exhibición de sentencias, testamentos, inventarios, tasaciones, títulos de


propiedad u otros instrumentos públicos o privados que por su naturaleza
puedan interesar a diversas personas. Art. 273 nº3. Solo puede solicitarlo el
futuro demandante. El tribunal decretará sólo cuando, a su juicio, sea necesaria
para que el demandante pueda entrar en el juicio. La exhibición de los
documentos en cuestión se hará ante el mismo tribunal, de manera que este, al
decretarla, tendrá que señalar una audiencia. Rige lo dispuesto en el Art. 283.
Cuando el documento se encuentre en poder de terceros, el solicitante no
tendrá más camino que pedir esa exhibición durante el curso del juicio. Si se
encuentran en poder del futuro demandado y este desobedece, la sanción
consiste en perder el derecho de hacerlos vales después, salvo que el
demandante los haga también valer en apoyo de su defensa, que se justifique o
aparezca de manifiesto que no los pudo exhibir antes (Art. 277). Lo anterior sin
perjuicio de poder también apremiar al desobediente con multa o arresto y aún
decretarse allanamiento del local.

Exhibición de los libros de contabilidad relativos a negocios en que tenga


parte el solicitante. Art. 273 nº4. Solamente puede solicitarla el futuro
demandante. Tiene además una importante limitación, ya que esta medida es sin
perjuicio de lo dispuesto en los arts. 42 y 43 del C.Com. Por tanto no cabe
decretar la manifestación y reconocimiento general de estos libros, y la exhibición
deberá ser ejecutada en el lugar donde los libros se llevan y en presencia del
dueño o de la persona que él comisione.
Esta exhibición será decretada sólo cuando a juicio del tribunal sea necesaria para
que el demandante pueda entrar en juicio. También se aplica el Art. 283. En caso
de desobediencia, perderá el derecho de hacerlos valer después, salvo en la
forma del Art. 277, sin perjuicio de que pueda ser apremiado con multas, arresto e
incluso allanamiento. Si se trata de un comerciante, de manera adicional, puede
ser juzgado por los asientos de los libros de su colitigante que estuvieren
arreglados sin admitírsele prueba en contrario.
Reconocimiento jurado de firma, puesta en instrumento privado. Art. 273 nº5.
Puede ser solicitada tanto por el futuro demandante como por el futuro
demandado. Está destinada a preparar la demanda o su contestación. Se
decretará en todo caso (Art. 273 inc. Final), y el tribunal, junto con decretarla, fijará
una audiencia para que ella se lleve a efecto.
Si se rehúsa el reconocimiento, se procederá en conformidad a las reglas
establecidas para el reconocimiento judicial de documentos en el juicio ejecutivo y
se dará por reconocida la firma.
Medidas Prejudiciales Precautorias. Arts. 279 y 280. Sólo le corresponde
solicitarlas al futuro demandante.
Se trata de:
a) Secuestro de la cosa
b) Nombramiento de uno o más interventores
c) Retención de bienes determinados
d) Prohibición de celebrar actos o contratos sobre bienes determinados
Para que puedan decretarse se requieren tres requisitos copulativos:
a) Motivos graves y calificados para solicitarlas
b) Determinación del monto de los bienes
c) Que se rinda fianza u otra garantía suficiente para responder de los perjuicios
que se originen y multas que se impongan (Art. 279).

Una vez que el tribunal ha aceptado la solicitud, pesan sobre el futuro demandante
dos obligaciones:
a) Presentar la demanda en el término de 10 días: se trata de un plazo fatal, se
descuentan los feriados y puede ampliarse hasta 30 días por motivos fundados.
b) Pedir que se mantengan las medidas decretadas: esta petición debe formularse
en el cuaderno de medida prejudicial, junta con la presentación de la demanda;
pero no en este mismo y último escrito. Esta petición debe ser resuelta
directamente por el tribunal, sea manteniendo la ya decretada o bien ordenando
alzarla, sin perjuicio, en el primer caso del derecho del demandado para oponerse,
dando origen al correspondiente incidente.

Pueden darse diversas situaciones:


a) Futuro demandante no deduce oportunamente la demanda.
b) A pesar de haberla deducido, no pide que continúen en vigor las medidas
precautorias decretadas.
c) A pesar de haber presentado la demanda y pedido la mantención de estas
medidas, al resolver sobre esta petición, el tribunal decida no mantenerlas.
En cualquiera de estos tres casos, el demandante debe responder de los
perjuicios causados frente a la persona en contra de quien se decretaron tales
medidas. Se trata de una presunción legal.

Inspección personal del tribunal, informe de peritos nombrados por el


mismo, o certificado de ministro de fe. Art. 281. Pueden ser solicitadas tanto
por el futuro demandante como por el futuro demandado y están destinadas a
procurarse pruebas que pueden desaparecer.
En el caso de inspección personal, informe pericial y certificado de ministro de fe,
la ley requiere que exista peligro de daño o perjuicio, o que se trate de hechos que
puedan fácilmente desaparecer. Para la ejecución de estas medidas, se dará
previamente conocimiento a la persona a quien se trata de demandar, este
conocimiento también habrá de dárselo a la persona a quien se cree va a
desempeñar el papel de demandante en caso de que alguna de estas medidas la
solicite el futuro demandado. El conocimiento servirá para concurrir a la diligencia
y no para oponerse a la práctica de la medida en el término fijado por la ley.
Declaración jurada o exhibición de título por parte del simple tenedor de la
cosa de que procede la acción o es objeto de ella. Art. 282. Únicamente puede
solicitarla el futuro demandante. Debe relacionarse con lo dispuesto en el Art. 896
CC.
La petición principal consiste en que quien tenga la cosa de que procede la acción
que es objeto de ella, exponga si es poseedor o mero tenedor de la misma; y, para
el caso de exponer que es mero tenedor, subsidiariamente se solicitará que preste
juramento sobre el nombre y residencia de la persona en cuyo nombre la tiene y
que exhiba el título de su tenencia o jure carecer de él.
En caso de negativa para practicar cualquiera de las diligencias, se pueden
imponer multas o arrestos. En este caso también se aplica el Art. 283.
Confesión Judicial. Art. 284. Puede ser solicitada tanto por el futuro demandante
como por el futuro demandado y está destinada a procurarse un medio probatorio
que pudiera desaparecer. Tiene lugar como medida prejudicial siempre que haya
motivo fundado para temer que una persona se ausente en breve tiempo del país.
El tribunal realiza un examen previo del pliego de posiciones. La resolución del
tribunal sobre la conducencia de las interrogaciones no será susceptible de
recurso alguno.
La persona a quien se le exige la confesión puede adoptar tres actitudes: prestar
confesión; que se ausente dentro de 30 días subsiguientes al de la notificación sin
absolver posiciones (se le dará por confeso dentro del juicio); o que se ausente
dentro de ese plazo sin absolver posiciones, pero dejando apoderado con
autorización e instrucciones suficientes (prestará el mandatario confesión en
representación de su mandante dentro del juicio posterior).
Constitución de apoderado judicial. Art. 285. Sólo puede solicitarla el futuro
demandante. Tendrá lugar cuando exista motivo fundado para temer que una
persona se ausente en breve tiempo del país. El objetivo directo de la medida es
que la persona cuya ausencia se teme, constituya apoderado que le represente y
que responda por las costas y multas. Si la persona rehúsa cumplirla, incurrirá en
el apercibimiento de nombrársele un curador de bienes.
Declaración testimonial. Art. 286. Pueden solicitarla el futuro demandante o el
futuro demandado, respecto de testigos cuyas declaraciones, por razón de
impedimentos graves, no puedan recibirse oportunamente. Versarán sobre los
puntos que indique la parte que solicita la diligencia, calificados de conducentes
por el tribunal (pueden interponerse recursos, ya que no se prohibió como en el
caso de la absolución de posiciones). Se dará previamente conocimiento a la parte
en contra de quien se ha solicitado la diligencia.
Requisitos para decretar medidas prejudiciales.
Existen requisitos especiales (para cada caso particular) y requisitos generales:
a) Que el solicitante exprese la acción que se propone deducir y someramente sus
fundamentos (Art. 287).
b) Que se decreten sin audiencia de la persona contra quien se piden, salvo los
casos en que expresamente se exige su intervención (Art. 289).

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