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ENSAYO SOBRE LA POLITICA MONETARIA: LA ESTRATEGIA DE

INFLACIÓN DE INFLACIÓN OBJETIVO EN COLOMBIA


INTRODUCCIÓN
Las instituciones tienen una gran importancia para el desarrollo económico de los
países, porque son ellas las que constituyen las reglas de juego que ayudan o
permiten la orientación de las acciones de los agentes. En el caso específico de
los bancos centrales, se configuran para estabilizar la economía, asegurando que
la cantidad de moneda en circulación mantenga el nivel de precios sustentable en
el tiempo, y que estos objetivos estén coordinados con otros objetivos de la
política económica como el empleo, la tasa de cambio y el crecimiento del
producto.
Para describir la política monetaria en Colombia debemos comenzar por analizar
los términos, objetivos y estrategias con las que está relacionada. Uno de sus
principales fines es mantener controlada la inflación, el alza en los precios de los
productos y servicios que ofrece el país por aumento o disminución de dinero
circulante. Lo anterior, puesto de que son conocidas las repercusiones que tienen
los objetivos de política económica para mejorar o empeorar la calidad de vida de
la población, esta diseñado para mantener una economía saludable y sostenible
en el tiempo, que sea atractivo para invertir y que pueda generar prosperidad.
El Banco de la República tiene la función de ejercer como banquero de bancos, la
emisión de moneda legal, y son los encargados de manejar las reservas
internacionales del país, entre otras cosas. De ahí la importancia de conocer los
hechos históricos que antecedieron a la creación de una de las instituciones más
importantes del país, por la que encontraremos una síntesis de todo el proceso en
este ensayo y su relación con la política monetaria.
Dentro del documento, también abarcaremos de cómo es la implementación de la
política monetaria en Colombia y como ésta afecta a la economía. Se explicará
sobre la importancia de tener un inflación baja y estable. Y, asimismo, los
aspectos más relevantes que tiene tomar decisiones monetarias en un ambiente
de incertidumbre como fue durante la pandemia del COVID-19, y el rol del Banco
Central frente a estos panoramas.
Finalmente, postularemos una posición frente a la estrategia de inflación objetivo
en Colombia, analizando el contexto internacional y local de los cambios en el
marco de las políticas implementadas para poder llegar a esta estrategia, en un
mundo globalizado y cambiante con la que cerro la década de los noventa.
DESARROLLO
Contexto histórico
Antes de empezar a indagar sobre la política monetaria de Colombia es importante
conocer el contexto histórico que permitió, con base en la experiencia, la evolución
de la institución económica que actualmente dirige el país: el Banco de la
República. Gobiernos nacionales de diferentes décadas estuvieron encargados de
orientar los crecientes progresos conceptuales para el proceso de modernización
de las instituciones monetarias del país.
El evidente fracaso de las instituciones creadas durante estos periodos hizo
necesaria la creación de un organismo que controlara la emisión y que fuera
independiente del Gobierno. Y no fue hasta con la llegada a Colombia de la misión
Kemmerer, la misma que promovió y efectuó la fundación del Banco de la
República, entidad que tuvo el privilegio de emisión, pero con rígidas normas de
conservar el “patrón oro”. Es necesario subrayar la importancia del contexto
internacional en que se dieron las reformas planteadas por la Misión Kemmerer
pues ellas no estuvieron ajenas al proceso de desarrollo institucional de otras
partes del mundo. Para 1922 la conferencia económica internacional de Génova
recomendaba el retorno al Patrón Oro y la fundación de bancos centrales de
emisión en los países donde éstos no existían, como medidas inmediatas para
adelantar la reconstrucción económica del mundo (SÁNCHEZ & ARMENTA,
2005).
La crisis de 1929 se prolongó en gran parte de los años treinta, y tuvo un efecto
prolongado sobre las instituciones económicas y políticas de los países. La
situación monetaria de Colombia en agosto de 1930 era complicada pues la salida
de capitales había conllevado fuertes pérdidas en las reservas de oro, disminución
del stock de dinero, deflación y caídas en la actividad bancaria (SÁNCHEZ &
ARMENTA, 2005). Para el 24 de septiembre de 1931 se suspendió la vigencia del
“patrón oro” en el país y se dispuso la eliminación de la convertibilidad del billete
de banco a metal; asimismo, la abolición del libre comercio de oro dentro del país
limitándolo al Banco de la República, mientras que los agentes estaban obligados
a entregar al banco emisor el oro que tuvieran en su poder y el que produjeran a
futuro.
En el periodo de 1939 a 1945 se vio afectada por la volatilidad del comercio
exterior a causa de la Segunda Guerra Mundial, generó un desequilibrio
macroeconómico en la actividad nacional. Los primeros años del conflicto bélico
generó la mayor caída en la demanda mundial de café que lo llevó al precio
internacional del grano a un mínimo histórico, una situación que se agrava en
1942 con la entrada de EE.UU al conflicto armado, ocasionando una caída
vertiginosa de las importaciones colombianas provenientes de ése país. Las
importaciones de Colombia las llevaron a un mínimo histórico, provocando una
desbordada acumulación de reservas internacionales, y de este modo estancando
el crecimiento económico del país (SÁNCHEZ & ARMENTA, 2005).
Las principales preocupaciones de las autoridades monetarias después de la
guerra fueron el aumento de los precios, una oferta monetaria abrumada y un
repunte de las importaciones que condujo a una disminución permanente de las
reservas internacionales. Hacia 1950, una misión del Sistema de la Reserva
Federal elaboró una serie de recomendaciones para la reorganización de los
bancos de la República. En 1951 ocurrieron tres importantes sucesos: 1) se
modificó la constitución de la junta directiva y quedó integrada por miembros del
gobierno y agentes externos escogidos por los bancos nacionales y extranjeros; 2)
se otorgó el derecho de emisión por 20 años más, es decir, hasta 1973, y el
derecho exclusivo de emitir billetes que por mandato constitucional pertenecían al
Estado; 3) por medio del Decreto 756 de 1951, se confirieron a la Junta Directiva
amplias facultades para la regulación monetaria y crediticia. La reforma ayudó a
consolidar el proceso de centralización de las reservas crediticias, pero la
asignación del crédito es determinada por la banca comercial sin intervención y
depende en parte de la política de desarrollo aprobada por el emisor. Estas
normas son complementarias a la creación de entidades como Banco Popular,
Banco Cafetero y Banco Ganadero.
Sin embargo, Colombia vivía una serie de desequilibrios macroeconómicos, que
llevaron a la dictadura del entonces presidente Rojas Pinilla a iniciar un proceso de
liberación de importaciones, pero la posición de la JDBR (Junta Directiva del
Banco de la República) se tornó contraccionista y adopto medidas económicas
como el aumento a los niveles de encaje ordinarios. Los efectos restrictivos se
notaron algunos meses después de la expedición de las medidas.
Los medios de pago del financiamiento público aumentaron significativamente, lo
que provocó que el tipo de cambio se depreciara nuevamente a fines de 1962.
Ante una fuerte caída de los ingresos, el gobierno decidió utilizar la emisión
primaria como fuente de financiamiento entre 1961 y 1962. Como era de esperar,
los desajustes monetarios produjeron un desequilibrio cambiario que sería resuelto
a través de la devaluación del peso en noviembre de 1962, tras la cual el país
firmó un nuevo arreglo de Stand-by con el FMI. De esta forma, se materializaba
así otra crisis cambiaria originada en los desequilibrios fiscales y monetarios.
En esta ocasión, la decisión política incluyó abandonar el antiguo sistema de tipo
de cambio fijo y adoptar el esquema de minidevaluación (crawling peg). El nuevo
régimen cambiario espera que el tipo de cambio aumente de manera gradual y
casi continua, en línea con las expectativas de la política económica y monetaria.
Con la reforma de la Constitución de 1886, la nueva Carta Magna, la Constitución
Política de 1991, en cuanto a banca central se refiere, le otorgó total
independencia al Banco de la República y lo consagró como la principal autoridad
monetaria, cambiaria y crediticia; de esta forma, el objetivo principal es asegurar el
poder adquisitivo de la moneda, sin descuidar los demás objetivos de la política
económica planteada.

La política monetaria
La política monetaria o política financiera es una rama de la política económica
que usa la cantidad de dinero como variable para controlar y mantener la
estabilidad económica. Comprende las decisiones de las autoridades monetarias
referidas al mercado de dinero, que modifican la cantidad de dinero o el tipo de
interés. Cuando se aplica para aumentar la cantidad de dinero, se le denomina
política monetaria expansiva -expansión cuantitativa-, y cuando se aplica para
reducirla, política monetaria restrictiva (República, 2021).
Para las autoridades monetaria es común establecer cuatro objetivos básicos de la
política monetaria, que pueden enunciarse de diferentes formas: 1) estabilidad del
valor del dinero (contención de los precios, prevención de la inflación); 2) tasa más
elevada de crecimiento económico; 3) Plena ocupación o pleno empleo (mayor
nivel de empleo posible); y, 4) evitar desequilibrios permanentes en la balanza de
pagos y mantenimiento de un tipo de cambio estable y protección de la posición
de reservas internacionales.
El banco central puede influir sobre la cantidad de dinero y sobre la tasa de
interés, a través de cambios en el tipo de interés y en Operaciones de Mercado
Abierto (OMA). La elección del mecanismo intermedio a utilizar depende de su
facilidad de manejo, de la cantidad de información al respecto disponible sobre
cada medida, y del objetivo final que se quiere conseguir. Un buen candidato es la
tasa de interés, ya que se conoce en el acto, mientras que determinar la cantidad
de dinero lleva algunos días (República, 2021).
¿Qué métodos se utilizan para controlar la cantidad de dinero circulante?
Encontramos estos 4 procesos: política de descuento, variación del coeficiente de
caja, las OMA y los instrumentos cualitativos.
Política de descuento
La política de descuento consiste en determinar el tipo de redescuento y la fijación
del volumen de títulos susceptibles de descuento. Es decir, el banco central (el
banco de los bancos) establece las condiciones con las que está dispuesto a
conceder créditos a los bancos comerciales (Bancolombia, Banco Bogotá,
Colpatria, entre otros) a corto plazo. El alcance de esta política depende de las
necesidades y comportamiento que tengan estas entidades financieras.
Mediante la variación del tipo de descuento, que es el tipo de interés de los
préstamos que concede el banco central a los bancos comerciales. Un banco pide
préstamos al banco central cuando tiene una cantidad de reservas inferior a la que
necesita, bien sea porque ha concedido demasiados préstamos, o porque ha
experimentado recientes retiradas de dinero. Cuando el banco central concede un
préstamo a un banco, el sistema bancario tiene más reservas y estas reservas
adicionales le permiten crear más dinero (República, 2021).
Como se requiere mantener controlado la cantidad de dinero circulando en una
economía, el banco central puede alterar la oferta monetaria modificando el tipo de
descuento, es decir, una subida del tipo de descuento disuade a los bancos de
pedir “créditos” al banco central; por lo tanto, reduce la cantidad de reservas que
hay en el sistema bancario, lo cual reduce, a su vez, la oferta monetaria. En
cambio, una reducción del tipo de descuento anima a los bancos a pedir
préstamos al banco central, eleva la cantidad de reservas y aumenta la oferta
monetaria.
El banco central utiliza los créditos por los que cobra el tipo de descuento no sólo
para controlar la oferta monetaria, sino también para ayudar a las instituciones
financieras cuando tienen dificultades.
Variación del coeficiente de caja
El encaje bancario es un porcentaje de los depósitos recibidos por cada entidad
financiera que no puede ser utilizado. Por ley, dicho capital debe mantenerse en
efectivo en las bóvedas de la propia institución o en sus cuentas en el banco
central del país. Ello, con el objetivo de mantener su liquidez y evitar riesgos.
¿Qué pasaría si el banco central reduce este coeficiente a los bancos? Esto
permitiría que las entidades financieras guarden menos dinero en el banco y
concedan más prestamos, aumentando la cantidad de dinero en circulación. Si,
por el contrario, el coeficiente aumenta, el banco reserva más dinero, y no puede
conceder tantos préstamos, por lo tanto, la cantidad de dinero en circulación baja.
De esta forma, el banco puede aportar o quitar dinero del mercado.
Operaciones de mercado abierto, OMA
Las OMA son el principal instrumento que tiene el Banco de la República para
aumentar o disminuir la cantidad de dinero en la economía. Cuando es necesario
aumentar la liquidez, el banco central compra títulos o papeles financieros en el
mercado, inyectando dinero a la economía; por el contrario, cuando el banco
quiere disminuir la liquidez, vende títulos y, por lo tanto, recoge dinero del
mercado.
Existen dos tipos de OMA: de expansión y de contracción, y cada uno de estos
tipos se subdividen en otros dos subtipos: OMA transitorias (o Repo) y OMA
permanentes.
 Las OMA de expansión: Se denominan así cuando la operación se hace
para aumentar la cantidad de dinero. En estos casos, el Banco de la
República interviene comprando títulos para inyectar la cantidad de dinero
que sea necesario, se puede hacer de dos formas:

o OMA transitorias (Repo): Conocidas también como operaciones


repo, que son la compra temporal de papeles financieros. Este tipo
de compra tiene vigencia durante un determinado período de tiempo
(un día, siete, etc.). Se habla de una compra temporal con pacto de
reventa, porque al cabo del período establecido, el Banco de la
República debe vender de nuevo los títulos a las entidades a las
cuales se los compró.

o OMA permanentes: En estas operaciones la compra de títulos de


deuda pública es definitiva y la liquidez queda en poder del público
de manera permanente.

 Las OMA de contracción: Se denominan así cuando las operaciones se


hacen para disminuir la cantidad de dinero circulante. En estos casos el
Banco de la República interviene vendiendo títulos para reducir la cantidad
de dinero que sea necesaria a través dos formas, iguales a las OMA de
expansión:

o OMA transitorias (repo en reversa): Conocidas como operaciones


repo en reversa, que consta de transacciones de venta temporal de
papeles financieros. Al igual que en la de expansión, esta venta tiene
vigencia durante un determinado período de tiempo. Se habla de una
venta temporal con pacto de recompra porque al cabo del período
establecido el Banco de la República debe comprar de nuevo los
títulos a las entidades a las cuales se los vendió.

o OMA permanentes: Son las operaciones en las cuales la venta de


títulos de deuda pública es definitiva.
Las operaciones de mercado abierto producen dos tipos de efectos: Efecto
cantidad, que esta relacionado con la cantidad de dinero circulante en la
economía. Y el efecto sobre el tipo de interés, que tiene que ver cuando el banco
central compra o vende títulos de renta fija o deuda pública, influye sobre la
cotización de esos títulos y consecuentemente sobre el tipo de interés efectivo de
esos valores.
Instrumentos cualitativos
Junto a los métodos de intervención estudiados anteriormente existen también una
serie de medidas que puede tomar el banco central, denominadas instrumentos
cualitativos entre los que destaca el denominado "efecto anuncio" que consiste en
hacer público las opiniones del banco central y ejercer influencia así sobre el
comportamiento de los operadores económicos y las expectativas empresariales
(República, 2021).
La política monetaria en Colombia se rige por un esquema de Inflación Objetivo,
cuyo propósito es mantener una tasa de inflación baja y estable, y alcanzar un
crecimiento del producto acorde con la capacidad potencial de la economía. Esto
significa que los objetivos de la política monetaria combinan la meta de estabilidad
de precios con el máximo crecimiento sostenible del producto y del empleo. En
tanto las metas de inflación sean creíbles, estos objetivos son compatibles. De
esta forma, la política monetaria cumple con el mandato de la Constitución y
contribuye a mejorar el bienestar de la población.
La estrategia de inflación objetivo en Colombia
Durante la crisis financiera internacional de 1998, algunos países intentaron
defender sus regímenes cambiarios elevando las tasas de interés y las tasas de
cambio flotantes. Desde 1991, debido a la nueva constitución nacional que
estipula responsabilidades adicionales para el gasto público sin prestar la debida
atención al equilibrio fiscal, la deuda pública fue creciendo. A pesar de las
continuas reformas tributarias, la situación se fue deteriorado debido al aumento
sustancial del gasto público. Al igual que otros países, la política monetaria de
Colombia respondió manteniendo el sistema de banda deslizante, interviniendo el
mercado cambiario con reservas internacionales y aumentando las tasas de
interés. Las mayores tasas de interés domésticas llevaron a un colapso del crédito
doméstico y pusieron en evidencia la fragilidad del sistema financiero. Posterior a
esto, la inflación del país empezó a tener comportamientos volátiles que género en
problemas de fuga de capital y el efecto de las altas tasas de interés sobre la
estabilidad financiera.
La fuga de capital disciplinó la política monetaria que intentaba mantener
corredores monetarios y objetivos cambiarios. La estrategia de inflación objetivo
era cada vez más aceptada a nivel internacional, incluida la del Fondo Monetario
Internacional (FMI). Durante el que fue el primero de cuatro acuerdos se
consolidaron importantes elementos de la estrategia de inflación objetivo,
instaurando metas de inflación multianuales. En 2001, el Banco de la República
implementó el procedimiento operativo orientado hacia el futuro, y comenzó a
definir la franja para las tasas de interés de intervención, con base en la diferencia
entre el pronóstico de inflación y la meta. Esta época sostuvo cambios
sustanciales en el rumbo de las políticas económicas del país, la nueva
Constitución Nacional de 1991 asignó el manejo de la política monetaria a la Junta
Directiva de un banco central independiente y le asignó como objetivo la defensa
de “la capacidad adquisitiva de la moneda” (República, 2021); se estableció,
además, una franja de intervención que con el tiempo se convertirían en las tasas
de intervención que se moverían en función del pronóstico de inflación. Cuando se
introdujo la franja el objetivo era simplemente el de darle algo estabilidad a la tasa
de interés y también se utilizaron algunos modelos para pronosticar la inflación.
En la segunda mitad de 2004, los inversionistas internacionales aumentaron su
tolerancia por el riesgo y los capitales internacionales retornaron a los países
emergentes. La tasa de cambio se apreció y el Banco de la República defendió
este indicador interviniendo fuertemente en el mercado cambiario. La banca
central demostró que la intervención en el mercado cambiario que, aparentemente
no funciona en los estudios académicos, es un instrumento efectivo para controlar
la tasa de cambio.
¿Cómo se implementa la política monetaria en Colombia?
Para implementar la política monetaria es necesario determinar la meta de
inflación que se quiere alcanzar y los instrumentos de política que se van a utilizar.
A partir del año 2010, la JDBR adoptó la meta de inflación de largo plazo que se
había propuesto desde el inicio del esquema de Inflación Objetivo. Dicha meta
corresponde a un rango de inflación de 3% ± 1 puntos porcentuales, medida a
través de la variación anual del índice de precios al consumidor que elabora el
DANE.
En cuanto a los instrumentos de política monetaria para lograr la meta de inflación,
el Banco de la República utiliza principalmente subastas de operaciones REPO,
que como explicamos anteriormente, son formas en las que el banco central
suministra o desproveer liquidez al sistema financiero, mediante créditos a un día
y, en ocasiones, a plazos cortos. Los bancos respaldan estos préstamos con
títulos de deuda pública (TES) con pacto de recompra el día de cierre de la
operación. En algunos casos, cuando la economía presenta excesos en el
mercado de liquidez primaria, el Banco central utiliza las subastas de Depósitos
Remunerados no Constitutivos de Encaje (DRNCE) para drenar estos excesos. En
ambos casos, la tasa de interés de estas operaciones está determinada por la tasa
de política que decide la JDBR, en sus reuniones mensuales.
¿Cómo afecta la política monetaria a la economía?
Cuando el Banco de la República modifica la tasa de interés de las operaciones
REPO (conocida también como la tasa de intervención) pone en marcha una serie
de fuerzas que con cierto rezago afectan las tasas de interés de mercado, la tasa
de cambio y las expectativas de inflación, variables que a su turno influyen sobre:
 El costo del crédito
 Las decisiones de gasto, producción y empleo de los agentes.
 El precio de los activos
 La tasa de inflación.
Este proceso a través del cual las decisiones de política monetaria afectan las
distintas variables económicas y recibe el nombre de Mecanismo de Transmisión,
el cual finalmente debe conducir a un cierto resultado de crecimiento e inflación.
Las autoridades monetarias vigilan la operación de este mecanismo para que
actúe con la efectividad y dirección deseadas, y se mantienen atentas a introducir
los cambios necesarios, de manera que se logren alcanzar las metas propuestas.
Un ejemplo general de la forma como opera el mecanismo de transmisión es el
siguiente:

Cuando la inflación proyectada se ubica por debajo del rango meta:

Ilustración 1 (República, El proceso de toma de decisiones de política monetaria, cambiaria y crediticia del Banco de la
República, 2021)

Cuando la inflación proyectada se ubica por encima del rango meta:


Ilustración 2 (República, El proceso de toma de decisiones de política monetaria, cambiaria y crediticia del Banco de la
República, 2021)

¿Por qué es importante tener una inflación baja y estable?


Una inflación baja y estable mejora el bienestar de la población. Esto tiene lugar
de varias maneras:
 Una inflación baja promueve el uso eficiente de los recursos productivos.
Por el contrario, cuando la inflación es alta una parte del tiempo de los
individuos y una parte de los recursos de la economía se invierten en la
búsqueda de mecanismos para defenderse de la inflación. Así, por ejemplo,
cuando la inflación es alta las empresas deben destinar más recursos al
manejo de su portafolio para evitar pérdidas financieras. Estos son usos
improductivos que no generan riqueza a la sociedad.

 Una inflación baja disminuye la incertidumbre. Se ha observado que las


economías con alta inflación también padecen de una inflación más
variable. La incertidumbre puede afectar negativamente la rentabilidad
esperada de la inversión y por lo tanto el crecimiento en el largo plazo. La
mayor incertidumbre implica también que los precios relativos pierden su
contenido informativo sobre la escasez o abundancia relativa de bienes y
factores en la economía. Esto impide una asignación eficiente de los
recursos y en consecuencia disminuye el crecimiento económico.
 Una baja inflación incentiva la inversión. Las decisiones económicas más
importantes que toman los individuos y las empresas son, usualmente,
decisiones de largo plazo: las decisiones de hacer una fábrica, de constituir
una empresa, la decisión de educarse, de comprar vivienda. Estas
decisiones dependen crucialmente del grado de incertidumbre sobre el
futuro. Una inflación baja y estable es un indicador de estabilidad
macroeconómica que contribuye a que las personas y las empresas tomen
decisiones de inversión con confianza.

 Una inflación baja evita redistribuciones arbitrarias del ingreso y la riqueza,


especialmente contra la población más pobre. Los asalariados y las
personas jubiladas tienen menos mecanismos para protegerse de la
erosión inflacionaria de sus ingresos. Las cláusulas de indización de
ingresos no existen o son muy infrecuentes. En Colombia, por ejemplo, los
salarios y las pensiones de los jubilados se reajustan una vez al año.
Además, entre menor sea el ingreso de las personas, es más probable que
tengan menos mecanismos de defensa contra la inflación, como ahorros o
propiedades inmuebles. Por esta razón, una inflación creciente significa una
redistribución del ingreso en contra de la población más pobre.

Tomar decisiones de política monetaria en un ambiente de incertidumbre


Para la toma de decisiones de política monetaria es indispensable contestar dos
preguntas fundamentales: ¿Cómo está la economía? y ¿Hacia dónde va la
economía? La necesidad de evaluar la salud de la economía tanto en el presente
como en forma prospectiva obedece a que los instrumentos de política monetaria
actúan sobre la economía de forma lenta. Es lo que se conoce como
anteriormente lo mencionamos, mecanismos de transmisión, a través de los
cuales los cambios en las tasas de interés de política afectan las demás tasas de
interés de mercado con un rezago variable que puede llegar a ser de seis
trimestres. La respuesta a cada una de estas dos preguntas involucra un
importante grado de incertidumbre debido a:
1. La información sobre la mayor parte de las variables económicas (por
ejemplo, el PIB, empleo, el comercio internacional, etc.) sólo está disponible
con rezago.

2. Otras variables importantes (como la brecha del producto o el crecimiento


potencial de la economía, la tasa natural de desempleo, la tasa de cambio
real de equilibrio, etc.) son inobservables, por lo cual deben ser estimadas a
través de modelos e indicadores indirectos.
3. En la mayoría de los casos es difícil predecir el origen, los efectos, la
persistencia y la magnitud de los choques que enfrenta la economía.
Algunos ejemplos de choques son:

a. Cambios en las tasas de interés externas o en los flujos de capitales.


b. Variaciones de los precios internacionales del petróleo, del café, del
carbón y otros bienes básicos de exportación.
c. Condiciones climáticas que pueden afectar la oferta de alimentos.

De otra parte, el alcance y los efectos de la política monetaria no siempre son


predecibles ya que dependen de:
a. Las expectativas de los agentes sobre el comportamiento futuro de
las tasas de interés, la tasa de cambio, la actividad económica y la
inflación.
b. Los rezagos en la transmisión de los cambios de la política
monetaria sobre las tasas de interés del mercado, la demanda de la
economía y demás variables económicas.
c. La posibilidad que no siempre operen los mismos mecanismos de
transmisión, ni que su potencia sea constante.

¿Qué hace el Banco de la República para tomar acciones y reducir la


incertidumbre?
 Enfatiza su compromiso de alcanzar la estabilidad de precios como el
objetivo primordial de la política monetaria en cumplimiento de su mandato
constitucional.

 Anuncia metas de inflación con anticipación para que puedan ser tomadas
en cuenta por los agentes económicos en sus decisiones.

 Analiza diversos indicadores económicos y usa una gran variedad de


modelos con diferentes enfoques (estadísticos y de pronóstico,
estructurales y de simulación) para mejorar su capacidad de predicción
económica.

 Realiza análisis de sensibilidad para evaluar los riesgos. Por ejemplo,


analiza cómo cambian los pronósticos de inflación ante diversos escenarios
de condiciones domésticas e internacionales.
 Mantiene un equipo técnico de primer nivel, actualizado en los desarrollos
más recientes del análisis y de las técnicas económicas a nivel
internacional.

 Realiza investigaciones que contribuyan a entender el funcionamiento de la


economía y a desarrollar mejores metodologías de análisis.

 Interactúa con otros Bancos Centrales y permanece abierto a la opinión de


la comunidad académica nacional e internacional a través de la realización
y participación en seminarios y foros de debate sobre temas centrales de la
economía colombiana y mundial.

 Organiza reuniones periódicas con diversos sectores de la sociedad


colombiana (empresarios, trabajadores, Congreso de la República, etc.),
con el fin de conocer sus puntos de vista y de explicar las decisiones y los
resultados de las políticas del Banco.

 Implementa una política de transparencia a través de la publicación y


explicación de las medidas de política monetaria tomadas por el Banco.

CONCLUSIONES
El presente artículo tiene como objetivo principal analizar la dinámica de la política
monetaria en Colombia a través del tiempo y como ésta se fue modificando con
las llegadas de diferentes crisis monetarias en las distintas administraciones
nacionales. Desde que Nueva Zelanda adoptó el régimen de inflación objetivo en
1990, muchos otros países han adoptado la estrategia para conducir la política
monetaria y mantener bajo control la inflación. Las experiencias son variadas y se
concluye resaltar el control de la inflación de dos dígitos a uno solo. No es absurdo
resaltar la apreciación de Gómez (2006) cuando dice que la inflación fue de dos
dígitos (23.5%) durante prácticamente la totalidad del último cuarto del siglo
pasado; y que mantener una inflación de un solo digito es un récord mundial de
“inflación moderada.”
El país desarrolló esquemas de indexación con los que aprendió a tolerar la
inflación. Como se mencionó anteriormente, el objetivo de la política no era el de
bajar la inflación sino el de mantener la inflación en estos niveles. Así las cosas, el
régimen de metas de inflación ha ayudado a la economía colombiana a mantener
la inflación en niveles bajos y estables.
La inflación de un dígito de comienzos del siglo XXI es algo que no había sucedido
en Colombia desde 1971. A principios de los años setenta, la inflación aumentó
sorpresivamente por una combinación de factores similar a los factores que
causaron una caída de la inflación a fin de los años noventa, pero que en aquella
ocasión operaron en sentido inverso. A principios de los años setenta la fase
expansiva del ciclo económico, el aumento en la inflación de los productos
importados y un choque de oferta en la agricultura de alimentos llevó la inflación a
dos dígitos y el Banco de la República ha logrado sostener la tasa de cambio
durante la coyuntura de entrada de capitales en diversas épocas, así como en la
pandemia del COVID-19 que a pesar de que no se cumplió la meta trazada, el
índice de inflación pudo mantener bajo y controlado.
No es muy lejos conocer las consecuencias de una inflación desbordada como es
el caso de Venezuela, donde el régimen chavista en los últimos 13 años, por
cuenta de las tres reconversiones monetarias que ha efectuado el Banco Central
de Venezuela (BCV), ha eliminado 14 ceros del valor nominal de la moneda, el
bolívar. La tasa de inflación interanual de este país llegó a 2.719% en el quinto
mes del 2021, una cifra que, si bien es excesivamente alta, sigue estando por
debajo de la registrada en marzo, cuando el indicador alcanzó a superar 3.000%.
La modificación monetaria atañe un problema relacionado con la tasa de cambio,
que durante mucho tiempo ha estado sobrevalorada y no responde a la realidad
económica del país. En la actualidad, 100 millones de bolívares equivalen
aproximadamente a 25 dólares. La volatilidad de la moneda venezolana sigue
siendo tan alta que el comercio se ha tenido que dolarizar para no cambiar los
precios cada día de los productos y servicios que ofrece el comercio aún vigente.

Bibliografía
Gómez, J. G. (19 de Septiembre de 2006). La Política Monetaria en Colombia. Colombia.

República, B. d. (2006). El dinero y la política monetaria.

República, B. d. (2021). El proceso de toma de decisiones de política monetaria, cambiaria y


crediticia del Banco de la República.

SÁNCHEZ, F., & ARMENTA, A. F. (Mayo de 2005). HISTORIAMONETARIA DE COLOMBIA EN EL SIGLO


XX:. Bogotá, Colombia.

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