Está en la página 1de 4

La princesa de fuego

Hubo una vez una princesa increíblemente rica, bella y sabia. Cansada de
pretendientes falsos que se acercaban a ella para conseguir sus riquezas, hizo
publicar que se casaría con quien le llevase el regalo más valioso, tierno y sincero
a la vez. El palacio se llenó de flores y regalos de todos los tipos y colores, de
cartas de amor incomparables y de poetas enamorados. Y entre todos aquellos
regalos magníficos, descubrió una piedra; una simple y sucia piedra. Intrigada,
hizo llamar a quien se la había regalado. A pesar de su curiosidad, mostró estar
muy ofendida cuando apareció el joven, y este se explicó diciendo:
- Esa piedra representa lo más valioso que os puedo regalar, princesa: es mi
corazón. Y también es sincera, porque aún no es vuestro y es duro como una
piedra. Sólo cuando se llene de amor se ablandará y será más tierno que ningún
otro.
El joven se marchó tranquilamente, dejando a la princesa sorprendida y atrapada.
Quedó tan enamorada que llevaba consigo la piedra a todas partes, y durante
meses llenó al joven de regalos y atenciones, pero su corazón seguía siendo duro
como la piedra en sus manos. Desanimada, terminó por arrojar la piedra al fuego;
al momento vio cómo se deshacía la arena, y de aquella piedra tosca surgía una
bella figura de oro. Entonces comprendió que ella misma tendría que ser como el
fuego, y transformar cuanto tocaba separando lo inútil de lo importante.
Durante los meses siguientes, la princesa se propuso cambiar en el reino, y como
con la piedra, dedicó su vida, su sabiduría y sus riquezas a separar lo inútil de lo
importante. Acabó con el lujo, las joyas y los excesos, y las gentes del país
tuvieron comida y libros. Cuantos trataban con la princesa salían encantados por
su carácter y cercanía, y su sola presencia transmitía tal calor humano y pasión
por cuanto hacía, que comenzaron a llamarla cariñosamente "La princesa de
fuego".
Y como con la piedra, su fuego deshizo la dura corteza del corazón del joven, que
tal y como había prometido, resultó ser tan tierno y justo que hizo feliz a la
princesa hasta el fin de sus días.
Preguntas

1. ¿Qué tipo de cuento es?


2. ¿Cuáles son los personajes?
3. ¿Cuál es el desenlace?
4. Biografía de Esopo y Rafael Pombo

Solución

1. Tipo de texto: Narrativo


2. La princesa y el joven que le llevo la piedra
3. La princesa se da cuenta que estaba haciendo las cosas mal y que su
corazón era duro como una piedra, pero decide ser como el fuego que quitó
la capa de tierra alrededor del oro y decide hacer las cosas bien para ella y
para todo el reino.
4. Biografía de Esopo
Según una tradición muy difundida, Esopo nació en Frigia, aunque hay quien lo
hace originario de Tracia, Samos, Egipto o Sardes. Sobre él circuló una gran
cantidad de anécdotas e incluso descripciones sobre su físico que se hallan
recogidas en la Vida de Esopo, publicada en el siglo XIV al frente de una
recopilación de sus fábulas preparada por el monje benedictino Máximo
Planudes.
Así, se cuenta que Esopo fue esclavo de un tal Xanto o Janto de Samos, que
le dio la libertad. Debido a su gran reputación por su talento para el apólogo,
Creso lo llamó a su corte, lo colmó de favores y lo envió después a Delfos para
consultar el oráculo y para ofrecer sacrificios en su nombre y distribuir
recompensas entre los habitantes de aquella ciudad. Irritado por los fraudes y
la codicia de aquel pueblo de sacerdotes, Esopo les dirigió sus sarcasmos y,
limitándose a ofrecer a los dioses los sacrificios mandados por Creso, devolvió
a este príncipe las riquezas destinadas a los habitantes de Delfos.
Éstos, para vengarse, escondieron entre el equipaje de Esopo una copa de oro
consagrada a Apolo, le acusaron de robo sacrílego y le precipitaron desde lo
alto de la roca Hiampa. Posteriormente se arrepintieron, y ofrecieron
satisfacciones y una indemnización a los descendientes de Esopo que se
presentaran a exigirla; el que acudió fue un rico comerciante de Samos,
descendiente de aquel a quien Esopo había pertenecido cuando era esclavo.
De todo este relato parece histórico que Esopo fue un esclavo y que viajó
mucho con su amo, el filósofo Janto; también se concede bastante credibilidad
al episodio de su muerte.

Biografía de Rafael Pombo


José Rafael de Pombo y Rebolledo (Bogotá, 7 de noviembre de 1833 - †
Ibidem, 5 de mayo de 1912) fue un escritor, poeta, fabulista, traductor,
intelectual y diplomático colombiano.
Origen y circunstancias de su nacimiento
José Rafael Pombo Rebolledo nació en el hogar conformado por Lino de
Pombo O’Donnell y Ana María Rebolledo Tejada, ambos pertenecientes a
familias de la aristocracia de Popayán. Cuando el General Francisco de Paula
Santander designa a Lino de Pombo como secretario del Interior y de
Relaciones Exteriores, se trasladó con su familia a Bogotá, ciudad a la que Ana
María llegó con siete meses de embarazo, dando a luz a su hijo Rafael, cuarto
hijo de la pareja, en la capital colombiana.
En el hogar aprendió las primeras letras de labios de su madre. Su casa era un
escenario social e intelectual al que acudían grandes exponentes de la política
y las letras nacionales como Salvador Camacho Roldán, Sergio Arboleda
Pombo, Manuel Ancízar, Ignacio Gutiérrez, Alejandro Posada, Rufino Cuervo,
José Ignacio de Márquez, José Eusebio Caro, Nicolás Tanco, José María
Rojas Garrido y Carlos Holguín Mallarino, entre otros. A la edad de once años
ingresó en el seminario de la capital, donde el estudio del latín hizo de él un
diestro traductor de los clásicos.
En 1855 Pombo es de Bogotá viaja a Estados Unidos para ocupar un cargo
diplomático. De forma paralela a su trabajo, fue contratado por la D. Appleton &
Company en Nueva York para traducir al castellano una serie de canciones
infantiles de la tradición anglosajona. El resultado de este trabajo fue, más que
una traducción, una adaptación transformativa que fue publicada en dos
volúmenes con los títulos Cuentos pintados para niños y Cuentos morales para
niños formales, en donde sale a relucir el talento de Pombo para la narración y
el fluido manejo de la prosa dirigida a diversos públicos.
A pesar de su extensa y diversa obra literaria, Pombo es recordado
principalmente por esta contribución a la literatura infantil. Entre sus fábulas
infantiles más populares están Michí Juan Chunguero, Pastorcita, La pobre
viejecita, Simón el bobito, El gato bandido y El renacuajo paseador.
Fue premiado en una ceremonia de coronación como Poeta Nacional de
Colombia, en un homenaje en el Teatro Colón de Bogotá el 20 de agosto de
1905. El 6 de febrero de 1912 reemplazó a Manuel María Mallarino como
miembro de la Academia Colombiana de la Lengua, de la que fue secretario
vitalicio. Según Antonio Gómez Restrepo, crítico literario y albacea
testamentario designado por Pombo minutos antes de su fallecimiento, el
escritor tras la ceremonia se recluyó en cama, decayendo su salud
progresivamente hasta su muerte el 5 de mayo de 1912. La ley 87 del 16 de
noviembre de 1912 honró la memoria de Rafael Pombo nombrándolo Gloria de
las Letras Nacionales.
Pombo no publicó sus poesías, salvo algunas ediciones por petición de
amigos. En sus últimos años compiló y ordenó su producción literaria dispersa
en diversos medios impresos de la época y en manuscritos que guardaba entre
sus pertenencias. Tras su fallecimiento, su habitación fue sellada y solo casi
cuatro años después, emitida una orden por parte de un tribunal a fin de hacer
los inventarios de lo que dejara, se realizó la compilación de su obra poética.

También podría gustarte