Está en la página 1de 12

LA ILIADA

XXII.- LA MUERTE DE HÉCTOR

Cuando Aquiles se dio cuenta del engaño de Apolo, ya todos los troyanos se
habían refugiado. Príamo y Hécuba, desde lo alto de las murallas, rogaba a su hijo
Héctor que no saliese de la ciudad.

Pero Héctor no se conmovió y salió dispuesto a luchar. Cuando vio a Aquiles


con su terrible lanza y su armadura de bronce resplandeciente, se sobrecogió y se echó
a la fuga. Tres veces dieron ambos, corriendo, Aquiles en pos de Héctor, la vuelta a la
ciudad. Para alentar a Héctor, Atenea tomó la forma de Deífobo; animado Héctor al
ver a su hermano, dejó de huir y dispuso a luchar contra el griego. Los dos arrojaron
primeramente sus venablos, sin alcanzarse. Con un valor desesperado, Héctor sacó la
espada y se precipitó furiosamente sobre Aquiles; comenzó entonces una lucha
terrible, que culminó cuando el griego hundió su espada en el cuello de su rival, pero
sin tocarle la garganta, lo que le permitía hablar. Moribundo, el héroe troyano rogó
que su cadáver fuera entregado a sus padres y no echado a los perros. Pero Aquiles,
“mirándole con torva faz”, le respondió:

“No me supliques, ¡perro!, por mis rodillas ni por mis padres. Ojalá el furor y el
coraje mi incitara a comer tus carnes todas crudas. ¡Tales agravios me has inferido!
Nadie podrá apartar tu cabeza a los perros ni aunque Príamo Dardánida me ofrezca
diez o veinte veces el debido rescate; ni aún así, la veneranda madre que te dio a luz te
pondrá en un lecho para llorarte, sino que los perros y las aves de rapiña destrozaran
tu cuerpo.”

El alma del muerto, dando un doloroso gemido, partió a la sombra morada.


Aquiles le arrebató la armadura y perforándole los tobillos, las atravesó con unas
correas y las ató a su carro.

Así, hubo de arrastrar delante de los muros de Troya, el cadáver del valiente
guerrero. Desde lo alto, Príamo y Hécuba lamentaron su desgracia. Toda la ciudad
gemía de dolor.
XXIV.- FUNERALES DE HÉCTOR

Aquiles no pudo dormir toda la noche. Inmerso en un hondo dolor, arrastraba a


cada rato el cadáver de Héctor, aunque Apolo hacía que este no se corrompiese.

Al fin los dioses tuvieron piedad de Héctor y su familia. Zeus, por medio de Iris,
rogó a Tetis que persuadiese a su hijo a que entregara el cuerpo a sus deudos. Aquiles 
se mostró dispuesto a ello.

Entonces Iris fue donde el rey Príamo y le aconsejó que fuera donde Aquiles a
pedir que le entregara el cadáver de su hijo.

Lleno de alegría, el anciano rey se alistó, cogió grandes riquezas y por la noche
se dirigió en su carro a la tienda del guerrero. El dios Hermes le ayudó, haciéndole
invisible a los ojos de los centinelas. El lugar donde se hallaba Aquiles estaba trancado
con una enorme barra, pero Hermes lo sacó fácilmente y a sí pudo entrar Príamo.

El anciano se acercó silencioso ante el héroe, se postró a sus pies y tomándole


de las manos, exclamó sollozando:

“¡Calcula la inmensidad de mi dolor, pues beso la mano de aquel que acaba de


matar a mi propio hijo!”

Aquiles tenía un corazón de hierro, sin embargo, se ablandó y satisfizo los


deseos del infortunado padre. Cenaron ambos y establecieron una tregua de once
días, para los funerales de Héctor.

Muy de noche, el anciano rey salió de la tienda, cargó el cadáver de Héctor y


atravesó otra vez el campo sin ser visto. Troya se llenó de lamentaciones cuando los
despojos del héroe penetraron en la ciudad.

Los funerales duraron nueve días. Al décimo, se incineró el cuerpo en medio de


una solemnísima pompa y el llanto de Dardania.
LA ODISEA
CANTO X
Odiseo cuenta sus aventuras los picotes los lotófagos los cíclopes. Odiseo se presenta y
comienza a relatar su historia desde que salió de Troya. Primero destruyeron la ciudad
de Ísmaro (dónde estaban los Cicones), dónde perdió bastantes compañeros. Más
tarde llegaron a la isla de los lotófagos. Allí, tres compañeros comieron el loto, y
perdieron el deseo de regresar, por lo que hubo de llevárselos a la fuerza.
Posteriormente, llegaron a la isla de los cíclopes. En una caverna se encontraron con
Polifemo, hijo de Poseidón, que se comió a varios de sus compañeros. Estaban
atrapados en la cueva pues estaba cerrada con una enorme piedra que les impedía
salir. Odiseo, con su astucia, emborracho con vino a Polifemo y mando afilar un palo
con el que cegaron al cíclope mientras esté dormía. Consiguieron escapar ocultándose
bajo pieles de oveja.

CANTO X
La isla de Eolo. El palacio de Circe la hechicera.
Odiseo sigue narrando como viajaron hasta la isla de Eolo, qué trato de ayudarles a
viajar hasta Ítaca. Eolo entregó a Odiseo una bolsa de piel que contenía los vientos del
oeste. Al acercarse a Ítaca sus hombres decidieron ver lo que había en la bolsa,
dejando salir a todos los vientos y creando una tormenta que hizo desaparecer la
esperanza de regresar al hogar. Tras 6 días de navegación llegaron a la isla de los
Lestrigones, gigantes caníbales que devoraron a casi todos los compañeros de Odiseo.
Huyendo de allí llegaron a la isla de Circe quién dijo al héroe que para regresar a casa,
antes tendrá que pasar por el país de los muertos. Igual que calipso Circe se había
enamorado de Odiseo. Pero ninguna de las dos se vio correspondida.
Resumen de Edipo Rey
La peste se ha desatado sobre Tebas y el pueblo está muriendo. En su desesperación,
todos acuden al ágora para pedir la intervención de Edipo Rey. A fin de comprender la
causa y remedio de tan terrible flagelo, Edipo solicita la ayuda de Creonte, hermano de
su esposa Yocasta.
Tras consultar el oráculo de Delfos, Creonte le informa que la peste es el castigo de los
dioses por el asesinato de Layo, el antiguo rey de Tebas a quien Edipo no llegó a
conocer. Por lo tanto, hasta que el responsable no expíe sus culpas, la peste seguirá
azotando a la ciudad.
Edipo ordena una investigación y exhorta al pueblo a entregar al culpable. Entre tanto,
el rey consulta al ciego Tiresias por consejo de Creonte. Tiresias le hace saber que él es
el asesino de Layo, y que además vive en incesto con su madre, Yocasta. Edipo, que se
tiene por hijo de Pólibo, rey de Corinto, y Mériba de Doria, concluye que Creonte se ha
confabulado con Tiresias para destronarlo.
Creonte y Edipo discuten acaloradamente, hasta que se hace presente Yocasta. Con el
propósito de disipar las preocupaciones de Edipo, Yocasta le hace saber que Layo
murió en manos de unos bandidos en el cruce de tres caminos. Asimismo, le anima a
no temer de las profecías del oráculo, ya que en tiempos pasados el oráculo predijo
que Layo y ella tendrían un hijo que mataría a su padre y se desposaría con su madre.
Para evitarlo, se deshicieron de la criatura.
Una profecía semejante había recibido Edipo en su juventud, razón por la cual se exilió
de Corinto para evitar su suerte. Edipo recuerda que en su exilio mató a alguien en el
cruce de tres caminos, pero lo hizo por sí mismo y no en grupo. Aun así, comienza a
temer que él sea el asesino de Layo.
Un mensajero aparece para anunciar que Pólibo ha muerto y que este debe ir a tomar
su cargo como sucesor. En la conversación, Edipo descubre que no es hijo de sangre de
Pólibo, ya que el mismo mensajero le explica que lo recibió de un pastor cuando era
niño y lo entregó al rey de Corinto.
Inmediatamente, hacen comparecer al pastor quien, finalmente, confiesa que ese niño
se trataba del hijo de Layo, y que este se lo había confiado para que lo matara. Sin
embargo, tuvo piedad de la criatura y lo entregó al mensajero confiado de que se lo
llevaría lejos de allí.
Ante la terrible verdad, Yocasta se suicida. Edipo, consternado, decide romper sus ojos
con los broches del vestido de Yocasta, de modo que cuando muera no pueda mirar a
sus padres a los ojos en el Hades. Ciego, le pide a Creonte que lo exilie, de modo que
Edipo se condena a vivir para siempre como un extranjero, desprovisto de todo poder,
afecto y consideración.
LA ENEIDA
Libro II

Eneas, a petición de Dido, cuenta la caída y el saqueo de Troya y las tribulaciones por él
mismo sufridas desde ese evento.
El relato de la toma de Troya se abre con el episodio del caballo: Ulises, junto con otros
soldados griegos, se oculta en un caballo de madera "alto como un monte" (instar
montis equum) mientras que el resto de las tropas griegas se oculta en la isla de
Ténedos, frente a Troya. Los troyanos, ignorando el engaño, entienden que los griegos
han huido y hacen entrar el caballo en su ciudad. Piensan que se trata de una ofrenda
a los dioses, a pesar de las advertencias de Laocoonte, que es asesinado por dos
monstruos marinos junto a sus dos hijos. Llegada la noche, Ulises y sus hombres salen
del caballo, abren las puertas de la ciudad y someten a Troya al fuego y el terror. En el
momento del asalto, Eneas, dormido, ve a Héctor, que en sus sueños le anuncia el fin
de Troya y le ordena salvar a los penates y huir.
Los ruidos del combate terminan por despertar a Eneas, que viendo a su ciudad en
llamas y librada a manos de los griegos, decide al principio luchar hasta morir, junto
con sus compañeros. Visita el palacio de Príamo y contempla la muerte del hijo de
éste, Polites, en manos de Pirro, que luego decapita al rey de Troya. En medio del caos
ve a Helena y se dispone lleno de ira a castigar a la culpable de la guerra. Venus, su
madre, se le aparece y lo conmina a contenerse: los verdaderos culpables son los
dioses, no Helena. Lo insta luego a buscar a los dioses Penates y a su familia, para huir
de Troya. Eneas busca a su padre Anquises y a su hijo Julo. Anquises se rehúsa
inicialmente a partir, hasta que un presagio divino lo convence. Parten entonces de la
ciudad en llamas. Habiendo perdido de vista a su mujer, Creúsa, regresa a Troya.
Finalmente, tras encontrar a la aparición de Creúsa, vuelve con los suyos a las afueras
de Troya, donde prepara lo necesario para la partida.
Sueño de una noche de verano (Shakespeare)
Sueño de una noche de verano es una comedia satírica de William Shakespeare
en donde se entrelazan el mundo mágico de las hadas y el mundo de los
humanos a causa del amor. Oberón hace uso de la magia de una flor para
recuperar a Titania y para enderezar el amor de dos parejas terrenales.

Acto I
Escena 1 (Atenas. Cuarto en el palacio de Teseo)

Teseo (duque de Atenas) e Hipólita (su prometida), planean los festejos para su
boda con Filóstrato (el director de fiestas) cuando Egeo aparece con su hija
Hermia, con Lisandro y Demetrio, para solicitarle al duque que aplique justicia
ante su decisión como padre, pues ha decidido que Hermia se casará con
Demetrio y no con Lisandro, quien también ama a Hermia y es correspondido por
ella.

Teseo le advierte a Hermia que debe cumplir con los deseos de su padre o deberá
a morir por ley o confinarse a la vida solitaria y austera. Le pide que lo piense
bien hasta la luna nueva, día en que él contraerá nupcias con Hipólita.

En su defensa, Lisandro acusa a Demetrio de haber cortejado a Elena, la hija de


Nédar; y ahora la pobre señora, ama entrañablemente a este hombre inconstante y
desleal. Teseo confiesa haber oído referir eso mismo, pero por lo pronto le pide a
Hipólita, Egeo y Demetrio que lo acompañen a atender otros asuntos.

Lisandro planea huir con Hermia lejos de Atenas, a casa de una anciana tía muy
opulenta y sin hijos que estaría dispuesta a ayudarlos y vive a siete leguas de
Atenas, donde la ley de Teseo no puede perseguirlos. Hermia promete escaparse
con Lisandro y concuerdan que se encontrarán la noche siguiente en el bosque, a
una legua de la ciudad, en el punto donde se vieron por primera vez en una
mañana de mayo.

Elena aparece lamentándose por el rechazo de Demetrio y le pregunta a Hermia


cuál es el secreto para obtener su corazón. Hermia le aclara que pese a que ella lo
desprecia, él la corteja más, pero él no es correspondido, pues ha planeado
fugarse con Lisandro para casarse con él. Ante esta noticia, Elena planea avisarle
a Demetrio sobre el escape y llevarlo al lugar de encuentro con el objeto de
consolarlo y recibir a cambio su amor.
Escena 2 (Cuarto en una quinta)

Quincio (el carpintero), Snug (el ensamblador), Bottom (el tejedor), Snowt (el
caldero), Flauto (el componedor de fuelles) y Straveling (el sastre) planean
montar la obra de la muy lamentable comedia y muy cruel muerte de “Píramo y
Tisbe”, para representarla ante el duque en su noche de bodas. Bottom
interpretará el papel de Píramo, un amante que por amor se mata con el más
grande heroísmo. Faluto será Tisbe, la señora a quien ha de amar Píramo;
Straveling representará la madre de Tisbe; Snowt será el padre de Tisbe y
Quincio será el director.

El grupo de artesanos planea reunirse en el bosque del palacio, una milla distante
de la ciudad y a la luz de la luna, para ensayar la obra.

Acto II
Escena 1 (bosque cerca de Atenas)

Puck o Robin Buen-chico (un duende sirviente del rey Oberón), se encuentra con
un hada (perteneciente al séquito de Titania, la reina de las hadas) quien va en
busca de su reina para llenar de rocío sus verdes dominios. Puck le advierte que
el rey va a celebrar sus fiestas en el bosque y no desea encontrarse con la reina,
pues Oberón está loco de celos porque Titania le robó un hermosísimo
muchacho, hijo de un rey indio, para servirle de paje, y él hubiera querido que el
muchacho fuese un caballero de su séquito.

El hada reconoce a Puck como el duende al que le gusta asustar a las personas y
hacer travesuras en el campo.

Escena 2 (Entran Oberón con su Séquito y Titania con el


suyo)

Titania y Oberón se encuentran con enorme disgusto. Oberón le recrimina su


presencia porque cree que ella ama al duque Teseo; de igual manera, Titania cree
que Oberón está enamorado de Hipólita.

Titania advierte que las estaciones del año han cambiado sus acostumbradas
libreas y el mundo por su disensión, pero Oberón señala que el remedio sería que
ella le entregara al muchacho. La reina de las hadas se niega a hacerlo, pues la
madre del muchacho fue amiga de ella y tras su muerte, Titania lo cuida como si
fuera su hijo. No obstante, Oberón insiste.

Titania, convencida en su postura, se marcha con su séquito para no reñir más.

Oberón le pide a Puck que busque la flor de occidente de color púrpura conocida
como “amor desconsolado”, pues el flechazo de cupido sobre ésta la convirtió en
una flor cuyo jugo tiene el poder de hacer que cualquier hombre o mujer se
enamore perdidamente de la primera criatura que vea tras verter el jugo sobre los
párpados.

Puck se marcha a buscar la flor y Demetrio y Elena llegan al bosque buscando a


Hermia y Lisandro. Demetrio está cansado de que Elena lo persiga y lo siga
amando, la trata con desprecio y exige que lo deje en paz, sin embargo Elena
muere de amor por él y pese a su rechazo, lo sigue en su camino.

Oberón es testigo de dicha escena y planea verter el jugo de la flor en los


párpados de Demetrio para que él muera de amor por Elena.

Puck regresa con la flor y Oberón lo instruye para que vierta el jugo en los
párpados de Demetrio, con la debida precaución de que cuando despierte, sea
Elena la primera persona que vea.

Escena 3 (otra parte del bosque)

Titania se dispone a dormir entre cantos y danzas de sus hadas. Oberón exprime
la flor en los párpados de Titania con el deseo de que cuando despierte se
enamore de cualquier ser, ya sea un gato, leopardo, oso o cerdo berraco, pues de
esta forma ella ya no se opondrá a entregarle el muchacho.

Lisandro y Hermia llegan al bosque agotados tras fugarse y deciden tomar un


descanso. Hermia le pide a su amado que duerman separados por honor y
respeto.

Puck continúa buscando a Demetrio, cuya referencia dada por su amo era que
vestía trajes de Atenas y al ver a Lisandro se confunde y vierte el jugo en sus
párpados. Entre tanto, Elena y Demetrio continúan buscando a la otra pareja,
pero Demetrio, harto de Elena, la amenaza con matarla si no se marcha.
Elena encuentra a Lisandro durmiendo y cuando éste despierta, está
perdidamente enamorado de ella. Elena se siente ofendida por sus palabras de
amor, pues cree que se burla de ella y se retira, pero Lisandro la sigue.

Al poco tiempo, Hermia se despierta buscando a su amado porque tuvo una


pesadilla en la que una serpiente le devoraba el corazón, pero Lisandro ya se
había marchado y ella emprende a su búsqueda o de lo contrario, prefiere morir.

Acto III
Escena 1 (en el bosque)

Quincio, Bottom, Flauto, Snowt y Straveling se reúnen en el bosque para ensayar


la obra. Puck descubre a los artesanos y decide jugarles bromas. Cuando Bottom
se separa del grupo, Puck le coloca una cabeza de asno en sus hombros sin que se
dé cuenta. Snowt y Quincio apenas le vieron su aspecto transformado y huyeron
del bosque. Bottom no comprende el motivo de su huida y como cree que sólo
desean asustarlo, decide permanecer en el bosque cantando para demostrar su
valentía. Su canto despierta a Titania, quien al abrir sus ojos cae profundamente
enamorada de Bottom con cabeza de asno, y le ordena a sus hadas y duendes que
sirevan y complazcan a su amado en todos sus deseos.

Escena 2 (otra parte del bosque)

Puck le informa a Oberón que la reina está enamorada de un rudo artesano con
cabeza de asno, asimismo le informa que ha vertido el jugo en el muchacho que
desprecia a Elena.

En ese momento, Demetrio encuentra a Hermia y le pide que no lo rechace más,


pero Hermia está preocupada por el paradero de Lisandro y teme que Demetrio lo
haya matado.

Oberón descubre la grave equivocación de Puck y le ordena al duende que vierta


el jugo en los ojos de Demetrio cuando éste se duerma. Puck obedece las órdenes
de su amo y atrae a Elena. Cuando Demetrio despierta queda profundamente
enamorado de Elena y ella se siente ofendida porque cree que él también se burla
de su inocencia. Lisandro continúa profesándole su amor y Demetrio riñe contra
él por el amor de Elena. Ella por su parte, está convencida de que todo esto es un
plan ideado por ellos para burlarse de ella.
Hermia descubre lo que ocurre y no puede comprender por qué Lisandro ha
dejado de amarla. Elena cree ahora que los tres están involucrados en el plan y
desprecia a su amiga. Lisandro y Demetrio acuerdan tener un enfrentamiento
para ganar el amor de Elena.

Oberón le pide a Puck que aleje a Lisandro de Demetrio, imitando sus voces y
provocándolos, hasta dejarlos exhaustos, para entonces verter el remedio en los
párpados de Lisandro y arreglar el enredo.

A pesar de que Puck está muy divertido con el enredo que ha ocasionado hace lo
que su amo le pide.

Mientras tanto, Oberón va en busca de la reina Titania para pedirle que le


entregue el muchacho.

Acto IV
Escena 1 (en el bosque)

Titania busca todos los medios para complacer a Bottom, quien se siente cansado
y decide dormir. Oberón vierte el antídoto sobre los ojos de Titania, pues ya ha
conseguido que le devuelva al muchacho y ella ha sido muy condescendiente y
amable con él.

Al despertar, Titania cree que ha tenido una pesadilla en la cual estaba


enamorada de un asno. Titania y Oberón se marchan reconciliados y planean
asistir juntos a la boda de Teseo e Hipólita para colmarlos de bendiciones, al
igual que a las otras dos parejas.

Puck le quita el disfraz a Bottom y también se marcha. Bottom despierta


convencido de que lo ocurrido fue un sueño y busca a sus compañeros.

De pronto se oyen los cuernos de caza y entran Teseo, Hipólita y Egeo y


encuentran a Demetrio, Elena, Hermia y Lisandro dormidos en el bosque.

Teseo los despierta con los cuernos de caza. Lisandro confiesa que él y Hermia
intentaban escapar lejos de Atenas para casarse, pero lo ocurrido después no lo
recuerdan con claridad. Egeo, enfadado, demanda justicia pero Demetrio
interviene y aclara que ama a Elena y a ella se había prometido antes de conocer
a Hermia.
Teseo afirma que la fortuna los salvó a todos y los invita a que regresen con él al
palacio para celebrar las nupcias de las tres parejas.

Escena 2 (entran Quincio, Flauto, Snowt y Straveling)

Los artesanos están preocupados por Bottom porque no lo encuentran por ningún
lado y no regresó a dormir por la noche. Creen que los espíritus del bosque se lo
llevaron y ahora no podrán representar la comedia que tenían preparada para
Teseo.

Snug le informa a sus compañeros que el duque regresó al palacio, junto con
otras dos parejas que se han casado también.

Bottom aparece y les cuenta que ha tenido sueños muy extraños que no puede
narrar, pero les da instrucciones a sus compañeros para que recojan los disfraces
y modos de comportamiento para causar una buena impresión ante el duque.

Acto V
Escena 1 (Aposento en el palacio de Teseo)

Teseo e Hipólita conversan sobre la extraña aventura que tuvieron los


enamorados en el bosque y concluyen que el lunático, el enamorado y el poeta no
son más que un pedazo de imaginación.

Teseo le pide a Filóstrato que le enseñe los eventos preparados para las fiestas y
escoge la obra de “Tisbe y Píramo”, pues le conmueve la noble intención de los
artesanos por complacerlo con una obra representada por ellos mismos.

La obra trata del amor entre Píramo y Tisbe, quienes se amaban pero estaban
separados por un muro, y por las grietas de éste se contentaban con hablarse en
voz baja. Píramo le porpone a Tisbe encontrarse junto al sepulcro de Nino para
galantearse allí. Esa noche, un león asustó a la fiel Tisbe, quien llegó primero, y
en su fuga dejó caer su manto que el vil león manchó con su sangrienta boca. A
tal punto llega Píramo y encuentra el manto de su fiel amada destrozada para lo
cual se suicida con su espada. Tisbe, quien permanecía oculta entre los
matorrales encuentra a su amado muerto, toma una daga y se suicida también.

A Teseo le place la tragedia y compensa a los artesanos con elogios.


Escena 2

Entran Puck, Oberón y Titania con sus hadas, quienes con cantos y bailes
bendicen el lugar y las fiestas nupciales. “Cantad y bailad ahora hasta que raye la
aurora, pues hadas y duendes son seres de noche que viajan tras las sombras”

Personajes
Hermia: Personaje principal. Enamorada de Lisandro por quien está dispuesta a
fugarse, rechazar la ley de Atenas y desobedecer a su padre por amor a él.
Lisandro: Personaje principal. Enamorado de Hermia. Joven de buena estirpe y
adinerado.
Demetrio: Personaje principal. Enamorado de Hermia pero bajo el hechizo de
Oberón, se enamora de Elena, a quien le había profesado amor antes de conocer a
Hermia.
Elena: Personaje principal. Ingenua, enamorada de Demetrio y perseverante,
pero cree que todos se burlan de ella cuando finalmente Demetrio ha puesto sus
ojos en ella.
Oberón: Personaje principal. Rey de las hadas y duendes del bosque. Cela a su
esposa porque cree que ella ama a otros. Coloca un jugo mágico en los párpados
de Titania para obtener sus propósitos: recuperar al muchacho protegido de
Titania y recuperar el amor de su esposa.
Titania: Personaje principal. Reina de las hadas del bosque. Está enfadada con
Oberón y al caer bajo su hechizo se enamora de Bottom con cara de asno. Tanto
Titania como Oberón son seres que viven en el bosque y durante la noche.
Bottom: Personaje principal. Hombre simple y artesano tejedor de Atenas que
interpreta el papel de Píramo. Cuando Puck le juega la broma de colocarle una
cabeza de asno, él permanece en el bosque para retar la valentía de sus
compañeros, quienes huyeron al ver su transformación. Titania se enamora de él
bajo el hechizo de Oberón.
Puck: Personaje secundario. Travieso duende que disfruta haciendo diabluras a
los seres humanos. Obediente y fiel duende de Oberón.

También podría gustarte