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El grabado

A nivel general, la estampa podría confundirse con lo que se llamaría imagen impresa.
Constituye una categoría específica de objetos, se distingue especialmente en que la materia
que sirve de soporte no se moldea, sino que se imprime con tinta. Se hallan forzosamente
reunidos los tres elementos constitutivos: una imagen matriz, un material de soporte y un
soporte más flexible.

El término deriva del griego “grafía”, que significa dibujar o escribir. En término estricto, se
refiere al proceso creador de un dibujo artístico sobre un material apropiado con el fin de
obtener la impresión, es decir, producir un número determinado de ejemplares de la obra.
Ligado a la evolución del arte, el grabado ha conocido profundas transformaciones. En sus
comienzos no se separa sino tímidamente de la pintura, de la cual dependió largamente. Fue
solo gracias a ciertas grandes personalidades artísticas, que encontraron en él un buen sistema
de expresión, cuando el grabado deja de ser un simple medio de reproducir la pintura.
Igualmente, sus estrechas relaciones con los libros, decorándolos e ilustrándolos, suponen
también un elemento constante de dependencia.

Hoy día se considera grabado original a una estampa resultante de la creación de un artita
grabador, guiado por su sentido artístico y su saber hacer artesanal. Las condiciones que debe
respetar son:

1. La traza del modelo debe ser original.


2. El artista debe haber elaborado él mismo la plancha de impresión.
3. Los medios de expresión son elegidos respetando los materiales.
4. La tirada es realizada por el artista a partir de la plancha original, que la ejecuta o bien
solo o bien con ayuda de un imprimador profesional, respetando los procedimientos
artesanales tradicionales.
5. Toda la tirada está autorizada por el artista y su límite debe respetarse.

La estampa es un objeto de arte móvil que se presta al transporte debido a su autonomía,


flexibilidad y ligereza. Es indudable que el grabado es la expresión artística que ha alcanzado
mayor popularidad en los últimos decenios. Arte de las minorías en épocas anteriores, ha
pasado ha conseguir un gran protagonismo.

Desde el punto de vista técnico, la tirada es la multiplicación de un dibujo o de un texto


elaborado por los procedimientos de grabado y transferido con tintas sobre el papel. Cada
prueba de una misma plancha difiere generalmente una de otra: no se puede garantizar una
identidad perfecta. Se pueden obtener pruebas muy diferentes. Es por lo que cada una de ellas
tiene valor de original. A parte de las pruebas definitivas existen otras que representan los
diferentes estados de elaboración de la misma plancha.

 Prueba de estado: Estampación hecha durante la ejecución del trabajo, antes de que
quede definitivamente terminado. Conviene tener en cuenta que por la rareza o
escasez de este tipo de pruebas, los coleccionistas se muestran muy interesados.
 Prueba de ensayo: Indica las condiciones definitivas en que se va a realizar el tiraje o
edición completa. “Bon a tirer”, sirve como modelo específico de la edición numerada.
 Prueba de artista: No se diferencia de la edición numerada, se retiene para su
propiedad un porcentaje del 5% de pruebas. Se indican con números romanos,
también se incluyen en este apartado las pruebas H.C.
 Edición numerada: 1/30
 Prueba cancelada: Una vez terminada la edición completa y numerada, debe existir
una especie de garantía entre el grabador y coleccionista. Para ello se cancela la
plancha o piedra una vez realizada la ultima prueba, rayando o cruzando la imagen. En
estas condiciones se suele hacer la prueba cancelada que servirá de testimonio de que
la edición es rigurosamente limitada y que la estampación de más pruebas es
imposible.

Si se quiere verdaderamente considerar como original al conjunto de pruebas tiradas a partir


de una plancha, hace falta que el número total de ejemplares no sobre pase cierto límite y ello
depende en parte de la técnica utilizada y de la solidez de la plancha:

- punta seca, maniera negra o manera al lápiz, hasta 50 ejemplares.


- Mismas técnicas pero con planchas aceradas y todas las técnicas de aguafuerte, hasta
100 ejemplares.
- Otros sistemas de estampación sobre madera o metal, litografía o serigrafía, hasta 200
ejemplares.

Técnicas de grabado

- Grabado el relieve (xilografía, linóleo)


- Grabado en hueco (plancha de metal)
- Grabado en plano (litografía, serigrafía)

A nivel general, una estampa nace de la conjunción de dos tipos de actividades: el trabajo
sobre una matriz a partir de técnicas de grabado, litografía o serigrafía, y la impresión de dicha
matriz o estampación. Una estampación se define como el conjunto de operaciones llevadas a
cabo sobre un soporte para hacer posible que la imagen contenida en el mismo pueda ser
impresa repetidas veces. En todos los casos, a excepción de la serigrafía, tal imagen se imprime
presionando a mano o a máquina una hoja de papel en contacto con la matriz entintada.

Grabado el relieve

Xilografía

La xilografía al hilo es aquella en la que se emplea madera cortada en el sentido de la fibra, o


sea, en dirección al eje del árbol. En esta técnica se emplean toda clase de maderas con
distinto grado de dureza, poro o densidad, si bien aconseja el uso de las más duras ya que
presentan los bordes más nítidos y consistentes, permitiendo mayor número de pruebas. La
superficie de la madera ha de estar perfectamente plana y uniforme y una vez preparada se
efectúa un dibujo sobre la superficie o graba, teniendo en cuenta la inversión que sufre la
imagen al ser estampada. Para grabar se vacían con instrumentos de corte, los espacios
seleccionados. En sus comienzos la xilografía a fibra resulta excesivamente uniforme y seca de
trazo, sin matiz alguno. Luego, con el dominio de la técnica, los grabados consiguen
gradualmente valores de luces y sombras, medios tonos por medio de líneas entrecruzadas
con más o menos separación o bien variando los negros a base de punteados con gubias de
distinta sección.

Linóleo

Tejido hecho de lienzo impermeabilizado por una capa de aceite de linaza y corcho
pulverizado. Ofrece un buen grado de dureza para soportar la presión del tiraje y a la vez
presenta gran facilidad de trabajo, lo que permite conseguir un grafismo más espontáneo que
el de la madera, si bien no admite líneas muy finas. Picasso ha dignificado esta técnica
consiguiendo calidades antes insospechadas. Los revestimientos plásticos, el tablex y los
tableros chapados han aumentado en la actualidad las posibilidades de esta práctica,
presentando una aceptable dureza y aumentando las posibilidades de trabajo.

Grabado en hueco

El proceso de grabado calcográfico es inverso al en relieve, ya que en lugar de grabar la


plancha con la intención posterior de entintar la superficie como en la xilografía, en éste se
trabaja la plancha teniendo en cuenta que serán las incisiones las que reciban la tinta y se
estamparán en el papel. Comienza en Occidente a mediados del s. XV como fruto y aplicación
del trabajo en metal de los plateros. Las planchas utilizadas son de cobre o cinc normalmente,
aunque también pueden usarse las de aluminio, latón, acero o hierro. Para conseguir en ellas
las incisiones se usan dos técnicas: la directa, en la que el grabador arranca el metal mediante
un utensilio y la indirecta, mediante mordidas producidas por ácidos.

Grabado directo

 Buril: El nombre de esta técnica procede del instrumento usado desde antiguo por los
orfebres. Está compuesto por una varilla de acero de determinada sección, montada
en un mango en forma de seta. Es importante la manera de empuñar el buril: debe
albergarse en la cavidad de la mano y apoyar el dedo índice en la varilla, para empujar
el útil con el resto de los dedos. De este modo el grabador aplica dos fuerzas con la
que el buril incide en la plancha: fuerza de dirección y fuerza de presión. La ano libre
también tiene un papel importante ya que hace rotar la plancha con la velocidad
indicada. Al efectuar la incisión se levanta una viruta que se elimina con el rascador. La
característica principal del grabado a buril es la nitidez de su grafía. Sus líneas son finas
en los extremos y algo más gruesas en la parte central. La excesiva dificultad que
conlleva el aprendizaje de la técnica y la lentitud del proceso pueden provocar que su
ejecución caiga en lo artesanal, ahogando así la espontaneidad del artista.
 Puntaseca: Se realizan incisiones en la plancha por medio de un punzón de acero o
una punta de diamante, montado especialmente en un mango. Se distingue por su
trazo nervioso, así como en el hecho de no eliminar totalmente el metal arrancado en
el momento de la incisión quedando al lado del surco una barba o rebaba. El mayor
inconveniente que presenta esta técnica es la corta vida de la plancha en el tiraje, ya
que la presión del tórculo consigue hacer desaparecer las rebabas y a la vez va
cegando las incisiones.
 Maniera negra (mezzo tinta): Consiste en granear la plancha de cobre o cinc con un
punteado uniforme, logrado mediante un instrumento llamado “berçeau”. Se trata de
una cuchilla curva y dentada a la que se imprime un movimiento de balance con el que
se consigue un punteado general de toda la superficie. Una vez preparada la plancha
se lleva a cabo un raspado o desgraneado de zonas determinadas por medio de
rascadores y bruñidores de acero, que van eliminando progresivamente el punteado y
consiguiendo una amplia gama de grises.

Grabado indirecto

 Aguafuerte: Se desengrasa la superficie de la plancha, después de lijada, usando


blanco de España con vinagre o agua; a continuación se lava la plancha con agua y se
barniza, fijándose éste con un hornillo. Sobre el barniz se rasga el dibujo con una punta
de acero, quedando el metal al descubierto y se introduce en la cubeta que contiene el
baño de ácido nítrico diluido o el percloruro de hierro. Para conseguir una variada
gama de grises se irán recubriendo las incisiones de más claras a más oscuras con el
barniz, sumergiendo la plancha en el ácido tantas veces como sea oportuno. Para
entintarla se elimina previamente el barniz con un disolvente y se aplica la tinta con
una muñequilla para que se introduzca en las incisiones realizadas por el ácido.
 Barniz blando: Es una variante de la anterior. En ella se cubre la plancha con un barniz
muy fluido y graso, que salta por contacto. Sobre esta plancha se extiende un papel y
se dibuja. La presión que se ejerce en este momento hace que el barniz quede
adherido al papel, dejando las partes descubiertas al ataque del ácido. Con este
procedimiento se consiguen efectos parecidos al dibujo con lápiz sobre papel.
 Aguatinta: Consiste en espolvorear sobre la superficie de la plancha una capa de resina
finamente pulverizada. Suele hacerse a través de una caja hermética donde se
introduce la plancha y que mueve la resina por medio de un ventilador. Los granos se
depositan sobre su superficie y se fijan calentándolos. Cuando se somete al ácido, éste
penetra solo en los intersticios dejados por los granos de resina, trabajándose, por
tanto, igual que el aguafuerte, mediante mordidas o reservas con barniz según el tono
de gris deseado.
 Azúcar: Es un variante del anterior, en ésta se dibuja directamente sobre la plancha
con una mezcla de tinta china y azúcar. Cuando seca se barniza toda la plancha y se
sumerge en agua. Al cabo de un rato los trazos con mezcla de azúcar se reblandecen,
hinchan y hacen saltar el barniz, dejando al descubierto el metal, donde atacará el
ácido.
 Lavis (mordiente directo): Se trata del efecto de corrosión directa ya que el ácido se
extiende con un pincel sobre la plancha, quedando la mordida realizada a medida que
se dibuja.

Grabado en plano

Litografía

El dibujo original se realiza con una materia grasa, después se pasa un algodón con polvos de
talco o resina por toda la superficie y se elimina el sobrante con un algodón limpio. A
continuación, se pasa una esponja mojada con un ligero mordiente con la que se consigue fijar
el dibujo y abrir los poros de la superficie no dibujada. La capa de ácido se seca mediante goma
arábiga hasta que quede una superficie con una película muy fina de goma sobre ella. Al
secarse se borra el dibujo con aguarrás y se entinta con rodillo cubriendo toda la plancha. Se
limpia de nuevo con goma arábiga y una vez seca, se procede otra vez al borrado del dibujo. Se
pasa finalmente una esponja embebida en agua y la piedra queda lista para el entintado y
tiraje. La tinta se da dando pasadas por toda la superficie con un rodillo, se adhiere en las
partes grasas y será repelida en las húmedas. Existen diversos procedimientos para dibujar
sobre la piedra con materia grasa:

a) Al lápiz o barra litográfica: La materia que los compone está formada por ceras, jabón
y negro humo. Se usa directamente sobre la piedra y el trazo es parecido al del lápiz
sobre papel. Las barras se emplean sobre piedras de grano fino y con ellas se pueden
conseguir los valores más variados.
b) A la pluma: es recomendable el uso de piedras de grano fino. Las plumillas son iguales
a las usadas en el dibujo artístico. Es muy conveniente encontrar el punto exacto de
densidad de la tinta, ya que muy densa no corre bien por la piedra y demasiado fluida
la haría carecer de consistencia.
c) Al lavado: esta técnica está indicada cuando se desean conseguir aguadas, efectos de
veladuras y grises. El procedimiento es de gran espontaneidad de ejecución y de
excepcional riqueza de valores, pero exige un perfecto conocimiento de la técnica.

Tipos de litografía:

 Litografía en papel: Por este procedimiento el artista dibuja con lápiz litográfico sobre
un papel. Con el trazo aún fresco, se coloca sobre la piedra o plancha y se somete a la
presión de la prensa, trasladándose el dibujo a la plancha, engomada a continuación.
 Frotis: Se impregna la piedra con una esponja con tinta diluida, quedando grasiento los
trazos del dibujo y quedando aquella más consistente que si se diese con rodillo.
 Maniera negra: es una imitación litográfica de la del grabado en hueco, se usa una
piedra de grano grueso, se entinta con rodillo, calentando ligeramente la tinta. Con el
rascador se sacan los valores de grises y blancos que se desean, al hacer desaparecer la
tinta y descubrir la piedra. Con ello se consigue un dibujo en negativo sobre fondo
negro.
 Aguafuerte litográfico: técnica usada por las artes gráficas comerciales, se puede
extender una capa del mismo barniz que se emplea en el aguafuerte. Después del
secado, se ralla por medio de puntos y la mordida se efectúa con ácido acético diluido.
 Estarcido: para conseguir medias tintas se emplea una brocha empapada en tinta
litográfica, que se frota sobre una malla metálica con la que se consigue un salpicado
de puntos de tinta sobre la superficie de la piedra, siendo éste un bien complemento
para el dibujo a pincel, pluma o tiza.
 Estructuras naturales: se entinta la piedra con un rodillo cargado de tinta litográfica y
mientras está todavía fresca se coloca cualquier objeto. Se cubre el conjunto con papel
impermeable y se presiona. La tinta queda adherida a la superficie y la preparación se
lleva a cabo como si fuera un reporte.

Serigrafía

Es el sistema de estampación que ofrece mayores posibilidades para efectuar tirajes en


cualquier superficie, material y formas sin limitación de colores ni tintas. Cualquier equipo
serigráfico cuenta con unos elementos imprescindibles para la estampación: el marco, que
mantienen estirada la tela y la pieza de seda, actualmente desplazada por el nylon o el
poliéster, de mayor resistencia a la abrasión y desgarros, poco sensibles a los cambios de
temperatura y humedad, y ofrecen además la posibilidad de conseguir gran detalle, idóneo
para la estampación artística. En la estampación la tinta se filtra por el tejido mediante la
presión de una paleta de goma. Si el tejido está tapado en determinados puntos y no en otros,
la tinta pasará al papel a través del tejido en las partes descubiertas, según el dibujo
determinado. Si se trata del tiraje de una sola pantalla y por tanto de un solo color, no existe
más problema que de registro que el del papel, pero en la estampación de dos o más pantallas
la perfecta coincidencia del registro y el papel es fundamental.

Grabado y estampación en color

 Entintado del tiraje en color: En litografía y serigrafía se usa una piedra, plancha o
pantalla por cada color a estampar. El entintado se puede realizar por medio de
tampones o rodillos.
 Entintado a poupée: Procedimiento más usado para planchas en hueco. Consiste en
entintar las distintas áreas a colorear por medio de muñequillas de gasa. Es importante
delimitar perfectamente los distintos campos a colorear pues de no controlar la
igualdad de campos durante todo el tiraje se puede convertir cada prueba en un
monotipo.
 Entintado por plantillas: Se utiliza una diferente para cada color a estampar, pasando
por el tórculo cada vez.
 Procedimiento roll-up: Consiste en entintar en hueco una plancha grabada a buril,
aguatinta o resina. Una vez limpia la superficie y con los surcos cargados de tinta, se
pasa sobre ella el segundo color con un rodillo duro y de una sola pasada, para lo cual
el desarrollo del rodillo debe ser mayor que la superficie de la plancha. La segunda
tinta debe ser menos viscosa que la introducida en las incisiones. Al estampar en una
sola operación se consigue un grabado a dos colores.

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