Está en la página 1de 3

¿Qué es la filosofía?

(1991) Deleuze

El núcleo fundamental de esta tradición se puede resumir con la idea de que es una tradición primero,
fundamentalmente ontológica, es importantísimo que Deleuze recupere la filosofía como ontología (como
fundamentalmente una reflexión ontológica). En este sentido Deleuze no está de acuerdo en esa disolución
de la filosofía en las ciencias humanas o incluso en las líneas más especificas de la filosofía, o bien en la
estética, en la lógica, o bien en la filosofía de la ciencia, como filosofía más aplicada, menos ligada al
fundamento. Él apuesta siempre por la filosofía como ontología, como reflexión ultima sobre lo que es y una
apuesta decidida sobre la realidad con la arbitrariedad que estas tomas de postura exigen. En este sentido es
importante, y en este libro se ve claramente también, la interpretación de la filosofía como ontología.

Esa filosofía como ontología, es una filosofía radicalmente inmanentista. Justamente todas las tradiciones (o
las cuatro tradiciones) a las que se inserta Deleuze son tradiciones basadas en la inmanencia, crítica de toda
trascendencia ya sea teológica o valorativa. Y al mismo tiempo es una ontología de la diferencia: la idea de
que la filosofía y en general todo el pensamiento humano ha sido des del origen un intento de echar redes de
inteligibilidad sobre el caos. O de intentar, introducir un orden que pueda hacer del caos original un cosmos.
Entonces es un paralelismo con la interpretación de Blumenberg que también considera que la reflexión
teórica de la humanidad des de la construcción del lenguaje hasta la construcción de los mitos y la ciencia y
la filosofía, son intentos que los homínidos intentaron desarrollar para oponerse o defenderse de lo que él
denomina el absolutismo de la realidad, que es más o menos una versión del caos inicial deleuziano. Es
decir, el hombre se encuentra inserto en una realidad que no le es favorable, que le es hostil, en la cual está
inserto, es decir, en ese sentido es una parte de la realidad, pero es una parte de la realidad que gracias a la
consciencia a adquirido una especie de distinción de la naturaleza, de la realidad y eso le crea grandes
problemas. Por ejemplo, por la consciencia de la muerte, la consciencia de la finitud, que el resto de las
realidades no tiene. Y al mismo tiempo le crea también una sensación de pavor, de miedo frente a un caos
absolutamente desorganizado que es como se ve al principio la realidad. Entonces todo objetivo como
especie y como individuo del ser humano es justamente convertir el caos en un cosmos, en un orden de
intentar reducir, porque nunca se puede acabar, con ese pavor, ese absolutismo de la realidad. Deleuze
insiste en que, a lo más que llegamos, es una especie de caosmos, una mezcla entre caos y cosmos. Esto
significa en primer lugar que, el caos ha sido en cierta manera ordenada de forma parcial (sigue siendo un
caos, es un proyecto de cosmos) pero, el mantener el caos en la noción de caosmos viene a poner de relieve
de que ese proceso de transformación del caos en cosmos es siempre parcial. Siempre hay unos elementos de
la realidad que son incontrolables, intraducibles en un cosmos ordenado. Este es un punto absolutamente
esencial que retoma de Nietzsche y a través de él, de las intuiciones presocráticas de la relación de la
realidad como caos inicial.

INTRODUCCIÓN: ¿Qué es filosofía? Es una especie de vuelta a la tradición, volver a la pregunta por el
ser y por la pregunta qué es. Que la ontología deuziana siempre había rechazado y sustituido el es por el est.
Es decir, una filosofía, una ontología que más que preguntar por qué son las cosas, intenta primero hacer una
referencia a como son las cosas concatenadas una con otra a través de la conjunción y (una cosa y otra y
otra) y luego un cierto funcionalismo que esta presente en su filosofía de que lo importante no es preguntar
qué son las cosas, qué significan las cosas sino cómo funcionan las cosas. Qué tenemos que hacer con las
cosas. Por eso su moto de, “no interpretar sino experimentar”. Es decir, una idea pragmática, de
experimentación frente a una mera idea de interpretación. Entonces, la respuesta que da a esa idea clásica es
“la filosofía como un arte de inventar y de fabricar conceptos”. ¿Qué es la filosofía? La filosofía es una
construcción de conceptos. Y allí alude, en ese sentido, que los filósofos, no son los sabios sino que es el
amigo de la sabiduría. Hay una apuesta radical por la inmanencia, porque lo fundamental entre los filósofos
es que los sabios pensaban pero a través de figuras trascendentes. Mientras que los filósofos que no son
sabios sino amigos de la sabiduría, sustituyen esa trascendencia de las figuras por la inmanencia de los
conceptos. Punto fundamental.

También es un punto importante la relación entre la filosofía y la ciencia, la filosofía no es el producto de los
imperios, ni de las castas sacerdotales sino que es el producto de la ciudad, entendida por ciudad una
sociedad de amigos e iguales, dominada por relaciones de rivalidad (emulación). Ese es un elemento
absolutamente esencial. Por un lado, rivalidad, por el otro, amistad. Y, justamente, el que no haya unas
castas sacerdotales enérgicas hace que pueda ser la polis el reinado de la opinión. La discusión libre entre las
opiniones. Esto es esencial para el surgimiento de la filosofía: la sociedad de amigos, el que no haya un
predominio de castas sacerdotales y luego, esa relación agonista de lucha entre distintas opiniones.

Deleuze se sitúa en el marco de su época para ver su posición de filosofía en confrontación con tres de las
líneas dominantes que, tanto a lo largo de la historia como en su momento dominaban: la filosofía como
contemplación, la filosofía como reflexión y la filosofía como comunicación. Los elementos fundamentales
claro son, la contemplación es la tradición ya des de Platón del idealismo objetivo, la reflexión es la filosofía
moderna a partir del cogito cartesiano y especialmente de la reflexión kantiana y luego el idealismo que
supone una especie de idealismo subjetivo, y por último la comunicación es la filosofía habermasiana en
aquel momento dominante, que es un ejemplo de lo que él denomina un idealismo intersubjetivo. Ya no es
filosofía de la consciencia pero siguen siendo idealistas en el sentido en que lo remiten todo a acuerdos
intersubjetivos entre sujetos. Él dice en ese sentido que su apuesta, y ese es uno de los objetivos del libro, es
no tanto hacer como hicieron los posts kantianos (fundamentalmente Hegel) una enciclopedia universal del
concepto, tampoco mucho menos caer en el peligro que él denunciaba de la degeneración de la filosofía en
un mero marketing político, digamos de venta. En ultima instancia, en un periodismo dominado por la
economía. Y por eso él intenta elaborar lo que denomina una pedagogía del concepto. Y la pedagogía del
concepto supone el análisis de las condiciones de la creación filosófica.

Estos serian algunos de los puntos esenciales de la introducción.

PRIMER CAPÍTULO: ¿Qué es un concepto? Aquí, intenta definir la noción de concepto. Lo importante
en primer lugar es,
17.50

También podría gustarte