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acoso sexual

EL TRATAMIENTO DEL ACOSO SEXUAL EN LA LEGISLACIÓN LABORAL COSTARRICENSE

El acoso sexual en el trabajo ha sido prohibido en Costa Rica por muchos años, en especial desde
1995, con la promulgación de la Ley 7476 (Ley contra el hostigamiento sexual en el empleo y la
docencia). El objetivo de dicha ley es "prohibir y penalizar el acoso sexual como práctica
discriminatoria por razón del género y contra la dignidad de las mujeres y hombres, en relaciones
laborales y en actividades de enseñanza". En ese sentido, cualesquiera actos de discriminación
basados en género, así como cualesquiera acciones de contenido sexual y/o con intención de
obtener favores sexuales de alguien o para hostigar sexualmente a alguien, pueden ser
consideradas acoso sexual y puede incluso ocasionar la terminación inmediata de la relación
laboral.

Dependiendo de la fuente del acoso, dicha terminación puede serlo con o sin responsabilidad
patronal. Si el empleador o su representante fueren quienes hostigaren a alguno de sus
empleados, el empleado estaría facultado para dar por terminada la relación laboral con
responsabilidad patronal. Si, por el otro lado, fuere un trabajador quien es sorprendido hostigando
a otro empleado o individuo, el patrono estaría facultado para dar por terminada la relación
laboral sin ningún tipo de responsabilidad para el empleador.

Igualmente, si ciertas conductas de acoso incluyesen actos típicos de abuso sexual, tales como
tocamientos y/o violación, el individuo que incurriere en dichos actos puede ser penalmente
responsable y, en algunos casos, el empleador podría ser civilmente responsable por los daños
ocasionados a la víctima.

Sin embargo, posiblemente por razones culturales, la aplicación de esta Ley ha sido muy limitada y
muchos casos no fueron denunciados, dejando a la víctima desprotegida. Asimismo, en muchos
casos los reclamos fueron interpuestos con base en hechos falsos y hubo personas que perdieron
sus trabajos debido a la falta de un debido proceso.

Para hacer frente a esta situación, la Asamblea Legislativa promulgó la Ley 8805 en el 2010. Esta
Ley reformó y completó la Ley 7476 brindándole a los trabajadores lo que se cree es un sistema
más efectivo de protección contra el hostigamiento sexual.
Para cumplir con las leyes 7476 y 8805, las empresas ahora deben implementar ciertas estructuras
internas, tales como una Comisión Contra el Acoso Sexual, la cual debe trabajar como un órgano
interno a cargo de recibir las quejas por acoso sexual, llevar a cabo una investigación interna y
dirigir un debido proceso. Igualmente, esta Comisión ha sido facultada para implementar medidas
cautelares durante el debido proceso tendientes a evitar que la víctima o los testigos sean
intimidados y/o para evitar más hostigamientos.

De acuerdo con los cambios introducidos por la Ley 8805, la investigación interna no debe durar
más de 3 meses, tiempo durante el cual el plazo de prescripción que tiene el patrono sancionar
permanece suspendido. Durante el debido proceso, al denunciado le es otorgada la oportunidad
de defenderse y al final la Comisión debe emitir una lista de recomendaciones al patrono, quien
entonces debe decidir cuáles recomendaciones acoge y cómo el trabajador debe ser sancionado
en caso de que el acoso sexual haya sido probado.

Asimismo, ahora las empresas están siendo forzadas a informar inmediatamente al Ministerio de
Trabajo cuando una queja por acoso sexual es recibida.

Todos estos cambios están obligando a las empresas a reformar o actualizar sus políticas, así como
a entrenar al menos parte de su personal, no sólo para evitar casos de acoso sexual, sino también
para contar con personas que tengan conocimiento en esta materia y que puedan ser nombradas
como miembros de la Comisión. En nuestra opinión, a pesar de que estos cambios y
entrenamientos implicarán un costo extra para las empresas, a largo plazo, deberían rendir
resultados positivos en el tanto reducirán el riesgo de afrontar casos de acoso sexual.

A pesar de lo anterior, ya hemos detectado que implementar todo lo que ordena la Ley 8805 es
dificultoso, especialmente para empresas donde no se han implementado los cambios necesarios
o para empresas pequeñas, en donde puede no haber suficiente personal para integrar la
Comisión, o cuando el acosador es uno de los altos ejecutivos o un miembro de la Comisión. Para
estos casos, la Ley 8805 provee la alternativa de presenter una demanda ante nuestros Tribunales
Laborales ordinarios; sin embargo, a estos Tribunales usualmente les toma mucho tiempo resolver
las disputas y la exposición que la empresa podría tener podría resultar no deseable, lo que ha
obligado al patrono a conciliar con el acosador y con la víctima para evitar futuras quejas.

Como puede notarlo, el hostigamiento sexual en el trabajo en Costa Rica es un tema que cada vez
requiere mayor atención y actualización de las estructuras y procedimientos internos. Tanto los
trabajadores como los empleadores deben procurar el análisis y la asesoría apropiados para
asegurarse el cabal cumplimiento de la Ley.

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