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UNIDAD ESPIRITUAL EUDISTA

CURSO “EL CORAZÓN DE MARÍA EN SAN JUAN EUDES”

Actividad Nº 2: El Corazón de María a la luz de la Escritura.

AUTOR:

NAVAS COLINA, JOSE GREGORIO

BOGOTÁ, OCTUBRE DE 2021


La Historia de la Salvación que nos relata la Sagrada Escritura y de la cual somos partícipes
gracias a Jesús de Nazaret, que nos ha constituido como Hijos Adoptivos del Padre (Cf. Ef 1,3-14),
tiene su auge en el los relatos de los Evangelios, en donde encontramos la figura de la Madre de
Jesús, la Virgen María. Es preciso recordar que la Palabra de Dios es uno de los ejes transversales
de nuestra fe, y en cuya Palabra encontramos la intervención extraordinaria del Dios Viviente que,
por misericordia, tiene la voluntad de salvarnos; en este plan salvífico de Dios se encuentra la figura
de María, una joven virgen de Nazaret, que se convertirá en Madre del Salvador.

1. Un bordado de voces la Escritura que hace brillar la figura de María


En la primera sesión de este segundo módulo, el Padre Fidel Oñoro nos ilumina
relatándonos como la Virgen María es una figura que predomina dentro de la Sagrada
Escritura, y comienza rescatando el valor que tiene el nombre de la Santísima Virgen, un
nombre conocido desde el Antiguo Testamento, que en hebreo se escribe Míriam y que en
español traducimos como María. Resulta relevante comenzar con esto, puesto que, en el
pasaje de la Anunciación, que es la antesala al debut magnífico que tendría la Madre de
Jesús en el Plan Salvífico de Dios, cobra su relevancia cuando san Lucas menciona “el
nombre de la Virgen”, un nombre que, si bien, vendría a ser cambiado en cierta forma –por
el mensaje del Ángel– por “Llena de Gracia”. El Padre Oñoro nos recuerda que las tres
palabras importantes de este pasaje comienzan con la “alegría”: ¡Alégrate! Lo cual es
pensar en esa alegría que Dios quiere poner en el Corazón de María, y que viene a
complementarse con el kejaritomene (Llena de Gracia) que pronuncia el Ángel. En la
“Joven Virgen” vemos como confluyen tres nombres que predominan en su persona:
“María”, que es el nombre que sus padres le han dado, “Llena de Gracia” que es el nombre
que le da Dios por medio del Ángel y “Esclava del Señor” que es el nombre que ella misma
se otorga. Estos nombres vendrán a definir la misión de la Virgen dentro del Plan de
Salvación y que san Juan Eudes vendría a identificar con un acercamiento definido en la
persona de María donde basaría esa devoción al Corazón de María que hemos heredado de
él y que, sin duda, ha bebido de las fuentes de la Escritura y de donde se desprenden toda la
teología que encontramos en la espiritualidad eudista referidos a la Madre de Dios. María
es un misterio que está relacionado con la Palabra de Dios, María ante la visita del Ángel
Gabriel se somete aun proceso que termina en un desenlace que nos traería a toda la
humanidad la alegría perpetua: Jesús. Ella cae en la perplejidad “por las palabras del
Ángel” queda impactada, y este impacto le genera inquietudes, entra e un cuestionamiento
y le pregunta a la “Palabra” para terminar abandonándose por medio de un “hágase” que no
acabaría nunca en su vida, su vida que desde ese momento estuvo ante “la sombra” del
Espíritu Santo.
2. Remontarse hasta el Antiguo Testamento

La segunda sesión estuvo a cargo del P. Álvaro Duarte, donde vimos como el Corazón
de María está pre-figurado en la Escritura, haciendo hincapié en el Antiguo Testamento,
desde una lectura cristológica. El uso que san Juan Eudes hace de la Biblia lo vemos
reflejado en los escritos sobre el corazón de María, se fija en toda la Biblia y busca a María
en ella, incluyendo el Antiguo Testamento. María estaba en el Plan de Dios y por esto san
Juan Eudes consideraba que ella debía estar a lo largo de la Sagrada Escritura. San Juan
Eudes va a tomar elementos significativos de muchos libros del Antiguo Testamento para
acuñarlos a la Virgen María, los cuales cuentan con un sentido mariológico y teológico de
gran relevancia para los postulados sobre el la Virgen Madre: “En el Antiguo Testamento
hay sombras de la Virgen María”, afirma el Padre Duarte, citando las palabras del Concilio
Vaticano II. Basándose en las Obras Completas VI de san Juan Eudes, el Padre Álvaro nos
presentó una lista de los títulos o elementos que se van a relacionar –gracias a san Juan
Eudes- con la Madre de Dios, entre estos figuran: el cielo, el sol, el centro de la tierra,
fuente del paraíso terrenal, la fuente sellada del Cantar, el mar, sus aguas mezcladas con
fuego, sus aguas son de cristal, la zarza ardiente, el arpa de David, el trono de Salomón, el
templo de Jerusalén, candelabro de oro, Arca de la Alianza, vaso de oro que contiene el
maná, Corazón de María, santuario, víctima, incensario del divino amor, entre otras (O.C
VI, 117-563). Dentro de este apartado, también se mencionó lo que otros Padres de la
iglesia ya habían comentado sobre la Virgen María, y se hizo referencia especial de san
Bernardino, quien se refirió a las siete llamas del corazón de María y que luego san Juan
Eudes recopilaría. San Juan Eudes se convierte en un maestro que sabe compaginar cada
relato bíblico con la figura de María, haciéndola brillar como la escogida desde la eternidad
por el Padre para ser la Madre del Salvador por la acción del Espíritu Santo.
3. Textos inspiradores del Nuevo Testamento

Aproximarnos al Corazón de María a la luz de los Evangelios es acercarse a una


reflexión teológica, que busca entender a María en su experiencia espiritual que no es más
que la experiencia de su corazón lo que, ciertamente esta aunado a una reflexión teológica y
antropológica partiendo del término “corazón”. San Juan Eudes planteó esa espiritualidad
del Corazón y elaboró toda una teología con elementos bíblicos, filosóficos-antropológicos
y espirituales que hoy tenemos como base de los estudios del Corazón de María.
Ciertamente María no es el centro del revelador Misterio de Dios en la Salvación, por eso
diría san Juan Eudes que “María es nada, nada tiene y nada puede sino de Jesús, por Jesús y
en Jesús” (Libro 2, Cap. 5). Estamos llamados a una sana experiencia mariana, a un sano
equilibrio que nos evite caer en una “mariolatría” pero tampoco caer en la invisibilización
de su rol, del rol de la mujer en el proyecto salvífico de Dios y de la dimensión femenina
del misterio revelado, de lo que se trata, es de aprender como nos narra en Nuevo
Testamento desde la figura de santa Isabel, aprender a “Creer”: “bienaventurada la que
creyó, porque se cumplirá lo que le fue dicho por parte del Señor”.
4. Una síntesis en el Magníficat

Finalmente, el Padre Fidel Oñoro nos comparte como san Juan Eudes citaría de diferentes
formas al Magnificat dentro de la Obra del Corazón de María, es uno de los grandes referentes, al
cual le dedicaría todo el libro décimo basado en este cántico que María pronuncia de sus labios en el
pasaje de la visitación. El Magnificat es el cántico del Corazón de María, dice el Padre Eudes, la
santa virgen hacen que broten los sentimientos que colman su alma -su corazón espiritual- a partir
del feliz momento de la encarnación del verbo. Así, el corazón corporal, nos relata el Padre Oñoro,
contribuyó, a su manera, a la explosión de este canto de amor. Sin duda este canto de amor fue
propiciado por el Espíritu Santo que ya fungía como su propio corazón espiritual. El Corazón de
María “danza” en el amor que de él brota y que se refleja en cada palabra del Magnificat. Diría
Benedicto XVI que “el Magnificat es el espejo del alma de María”, y es precisamente lo que san
Juan Eudes va a recopilar en sus escritos, que nos adentran a esa alma tan pura de la virgen que
invita a nuestros propios corazones a danzar en el amor de Dios que es nuestra alegría, que nos
“alegra el espíritu”.

Referencias bibliográficas

Oñoro, F. (2021). Un bordado de voces en la Escritura que hace brillar la figura de María.
Colombia: Unidad de Espiritualidad Eudista https://acortar.link/lF4S3g   

Duarte, A. (2021). Remontarse hasta el Antiguo Testamento. Colombia: Unidad de Espiritualidad


Eudista https://acortar.link/aEFkcB

Raigozo, A. (2021). Textos fundantes del Nuevo Testamento Lectio de Lc 2,19. Colombia: Unidad


de Espiritualidad Eudista https://acortar.link/uYz1CM

Oñoro, F. (2021). Una síntesis en el Magníficat. Colombia: Unidad de Espiritualidad


Eudista https://acortar.link/lUZdp0

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