Es preocupante que en la actualidad en la Iglesia Católica ha decaído el número de aspirantes al

sacerdocio, vemos como los jóvenes ya no se sienten atraídos hacia este estilo de vida, esto se
debe a los escándalos por parte de algunos sacerdotes, que han dado mal testimonio de su
ministerio. Este acontecimiento ha generado deserciones aun por porte de candidatos en
formación hacia el ministerio sacerdotal. Por otro lado, el mundo de hoy tiene inmersa la sociedad
en un mundo consumista que su pretensión es alejar sutilmente la región de los hogares.

Si bien es cierto que la educación en el pueblo de Israel se comenzaba desde los 12 años y era
obligación por parte del padre transmitirle sus conocimientos que recibió de sus antepasados,
pero era los escribas quien les enseñaban todo lo relacionado con la Toráh . De ahí que, nuestros
abuelos educaban a sus hijos de una manera exigente y con mano fuerte las tradiciones religiosas
creciendo así con amor y respeto a todo lo relacionado con el ámbito religioso. Esta manera de
enseñar permitía que el joven creciera con un gran temor de Dios, cosa que la actualidad se ha
desvirtuado mucho.

Se podría decir, que hasta el concilio vaticano II los semanarios permanecían llenos, abundaban las
vocaciones Sacerdotales, esto se debe a que en las familias se respiraba un ambiente religioso,
además se consideraban que era un honor contar con un sacerdote en la familia. En muchos de los
casos solo era por hacer un carrerismo eclesial o por otros intereses de carácter económico. Los
tiempos han cambiado y de la misma manera los enfoques en cuanto a la formación sacerdotal, en
donde se les pide a los candidatos tener un celo por las almas y un verdadero espíritu de pastores.

Pero para lograr este objetivo es necesario replantear la forma de hacer la pastoral vocacional por
parte de los encargados creando estrategias llamativas para que los jóvenes respondan con más
facilidad y no haya tanta resistencia por parte de ellos, además es de considerar que estamos en
una época en donde los jóvenes están inmersos en un mundo digital rodeados por el internet,
teléfonos inteligentes y tabletas que vienen con un amplio servicio ilimitado, trayendo consigo
abundantes peligros.

Estos nuevos medios de comunicación han permitido ver el mudo desde otra perspectiva, y es ahí
en donde juego un papel fundamental la formación en los nuevos candidatos con miras hacia el
sacerdocio, ya que, se debe sacar provecho para aplicarlos en la evangelización sin dejar de un
lado la formación humana y espiritual, siendo ésta la mas importante, la base de toda la
formación. Esto permite ser mas consiente de la fragilidad humana y de como le debe llegar al
otro que es mi prójimo y así poder comprender su realidad.

Para ello es necesario tener en cuenta las cuatro dimisiones que se conocen en la formación de
los para poder transmitir un mensaje, de ahí que, es importante y fundamental ser buenos
comunicadores, ser hombres cercanos y generar un ambiente de confianza hacia las personas que
nos rodean, esto con el fin de entablar diálogos que le permitan a las personas expresaren con
confianza y tranquilidad.
omo enfoque la formación de sacerdotes en el s. XXI.