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000
EN LAS PLANCHAS 23, 24, 30, 31 Y PARTE DE LAS PLANCHAS 37 Y 38
AUTORES
Citación: Salazar - Ortiz, E., Numpaque, J., Bernal, L., Ocampo, E., Matajira, A., Villabona,
J., Gómez, D., García, G., Méndez, S., Martínez, E., Sánchez, D., Sotelo, A.P. y Aguirre, L.
(2020). Geología del área Sinú – San Jacinto, Planchas 23, 24, 30, 31 y parte de las
planchas 37 y 38 a escala 1:50.000. Bogotá: Servicio Geológico Colombiano.
CONTENIDO
RESUMEN 6
ABSTRACT 8
INTRODUCCIÓN 11
1 GENERALIDADES 12
1.1 Localización e Infraestructura 12
1.1.1 Vías de acceso 13
1.2 Trabajos Anteriores 13
1.3 Método de Trabajo 16
1.3.1 Recopilación de información bibliográfica 16
1.3.2 Mapa Fotogeológico 17
1.3.3 Levantamiento Geológico de Campo 18
1.3.4 Análisis de Laboratorio e Interpretación de Resultados 20
1.3.5 Metodología para la elaboración de los perfiles geológicos y los análisis
cinemáticos 23
1.3.6 Metodología de los análisis petrográficos y microfaciales. 23
1.4 Mapa Geológico y Memoria Explicativa 25
1.5 Personal Participante 25
1.6 Agradecimientos 26
2 GEOMORFOLOGÍA 27
2.1 Modelo Digital del Terreno (MDT) 27
2.2 Mapa de Pendientes 27
2.3 Drenajes 29
2.4 Categorización Geomorfológica 32
2.4.1 Geomorfoestructura 33
2.4.2 Provincias 33
2.4.3 Regiones 36
2.5 Unidades y Subunidades Geomorfológicas 36
2.5.1 Unidades y Subunidades de Ambiente Estructural 36
2.5.2 Unidades y Subunidades de Ambiente Estructural – Agradacional 47
2.5.3 Unidades y Subunidades de ambiente Denudacional 48
2.5.4 Unidades y Subunidades de Ambiente Agradacional Fluvial 55
2.5.5 Unidades y Subunidades de Ambiente Antropogénico 58
2.6 Procesos Morfodinámicos 61
2.6.1 Erosión Laminar 61
2.6.2 Erosión en surcos 62
2.6.3 Erosión cárcavas 62
3 ESTRATIGRAFÍA 67
3.1 Paleógeno 69
3.1.1 Formación San Cayetano – Sector San Jacinto (E1E2sc) 69
3.1.2 Formación San Cayetano – Sector Luruaco (E1E2sc) 149
3.1.3 Formación Maco (e5e6m) 193
3.1.4 Formación Palenque (e5e6pa) 225
3.1.5 Formación Chengue (e4e6ch) 242
3.1.6 Formación San Jacinto (e6e8sj) 274
3.1.7 Formación El Carmen (e7n1ec) 318
3.2 Neógeno 328
3.2.1 Formación Rancho (n1n8r) 328
3.2.2 Formación Arjona (n1n2a) 340
3.2.3 Formación Tubará (n5n8t) 377
3.2.4 Formación Popa (N2Q1p) 395
3.3 Cuaternario 425
3.3.1 Formación Rotinet (q4r) 425
3.3.2 Depósitos Cuaternarios (Q) 443
5 GEOQUÍMICA 472
5.1 Generalidades del Análisis 473
5.2 Análisis de Resultados 474
5.2.1 Proveniencia de Sedimentos 474
5.3 Grados de madurez 475
5.4 Grados de meteorización 476
5.5 Relaciones bivariantes en elementos mayores y menores 477
5.6 Discriminación de Ambientes Tectónicos 480
CONCLUSIONES 494
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS 501
ANEXOS 520
INDICE DE MAPAS 541
RESUMEN
superior – Eoceno superior, con una roca generadora del Cretácico – Paleoceno. Por
último, las unidades explotadas hidrogeológicamente corresponden principalmente a las
secuencias del Neógeno – Cuaternario en las formaciones Rotinet, Tubará y depósitos
cuaternarios someros.
ABSTRACT
The Direction of Basic Geoscience of the Colombian Geological Survey developed the
project named Geological Cartography of the Sinú - San Jacinto Area in a Scale 1:50000,
in the north and central parts of the San Jacinto Folded Belt (San Jacinto and Luruaco
Serranias) and in the northern part of the Sinú Folded Belt. The total cartographic
coverage of the project was 2.675 km2, in jurisdiction of Bolivar and Atlántico
departments, with IGAC (Agustin Codazzi Geographic Institute) sheet reference numbers
23, 24, 30, 31, 37 y 38.
The results of the interpretation of the acquired geological information include: a. - the
description of geomorphological of provinces, regions, units, and subunits. b. - the
characterization of 12 sedimentary units based on the integration of 710 new
biostratigraphical data, 259 petrographic analysis of conventional thin sections, and 324
clastic rocks X ray fluorescence analysis. c. - the proposal of 2 structural styles based on
the integration of surface and seismic refraction data. d. – the geological evolution model
for the studied area.
The Paleogene sequence outcrops widely in the studied area, disposed in long bands in
southwest-northeast direction with a general normal graded bedding tendency.
Siliciclastic rocks, mostly rhythmically interdigitated litharenites and siltstones deposited
in transitional marine environments with deltaic influence, compose the San Cayetano
Formation (Late Paleocene – Early Eocene). Discordantly in top of this unit, outcrops the
Maco, Palenque and Chengue formations (Early and Middle Eocene), constituted by
The Neogene succession outcrops in the southeast and northwest margins of the
mapped area, comprising the Rancho, Arjona, and Tubará formations. The three units
are composed by siliciclastic arenaceous and mixed bioclastics sequences, with
synsedimentary deformational structures, local accumulation of gastropods and
bivalves, and coal laminae, deposited in transitional marine environments with deltaic
influence.
The Quaternary units described in this document are located in the north and west areas
of the map, near San Estanislao, Soplaviento, Turbaco and Turbana towns. One of them,
named La Popa Formation (Pliocene – Pleistocene), corresponds to a mixed siliciclastic-
bioclastic sequence composed by sublitharenites and coral reefs deposited and formed
in shallow marine platforms. The other one, named Rotinet Formation (Pleistocene),
corresponds to conglomeratic intervals formed by channel fillings and bars migration in
braided rivers.
The sediments associated to recent deposits are formed by mud volcanism and the Canal
del Dique hydric dynamic; these are represented by wide lacustrine and fluvial deposits,
and by the current fluvial activity that leaves alluvial and flood deposits. In addition,
gravitational processes are present near steep slopes, evidence of which are colluvial and
fluviotorrential deposits.
Two deformational styles were defined from the integration of surface and seismic
refraction data. To the west, in the Sinu Folded Belt, the geological structures are formed
by gravitational tectonic, with presence of normal faulting and a translational zone with
mud diapirism. To the east, in the San Jacinto Folded Belt, the proposed model is a
synsedimentary reverse faults and folds system.
The economic potential in the project area lies in the exploitation of construction
materials like the limestones of the Chengue and La Popa formations, sands and
conglomerates of the Maco and Rotinet formations, and, in less proportion, chert and
siliceous mudstones of the San Cayetano Formation. Multiple publications suggest the
existence of a for type II – III hydrocarbons potential in the Late Paleocene – Late Eocene
units, with a Cretaceous – Paleocene source rock. The hydrogeological potential lies in
the Neogene – Quaternary sequences, mainly in shallow quaternary aquifers, and in the
Rotinet and Tubará formations.
INTRODUCCIÓN
1 GENERALIDADES
Tabla 1. Coordenadas planas origen Magna Sirgas de los vértices del polígono
del área de estudio
El área de trabajo abarca los municipios de Turbaco, San Estanislao, Soplaviento, Arjona,
Mahates, Calamar, San Juan Nepomuceno, María la baja (municipios de Bolívar), Santa
Rosa, Villanueva y Repelón (Atlántico) entre otros; limita al norte con los municipios de
Santa Catalina y Sabanalarga; al sur con San Juan Nepomuceno, María La Baja y El
Carmen de Bolívar; al este con Manatí (Atlántico), Santa lucía (Atlántico), Calamar, El
Guamo y al oeste Cartagena, Turbaná y Arjona (municipios de Bolívar). Se reconocen dos
zonas fisiográficas importantes, la primera se caracteriza por presentar zonas
montañosas representadas por las serranías de Luruaco y San Jacinto y la segunda se
caracteriza por zonas bajas y planas, próximas al Canal del dique (figura 1).
El área de estudio presenta dos accesos principales los cuales se realizan desde la ciudad
de Cartagena, el primero por la troncal del Caribe que conecta con el municipio de San
Juan Nepomuceno y el segundo por la vía de La Cordialidad que une a Cartagena con
Luruaco, adicionalmente sirven como conexiones intermedias las carreteras terciarias de
los municipios de Repelón, Villanueva, Luruaco, Turbaná, Arjona, Carreto, Cruz del viso,
San Cayetano entre otros (figura 1).
En el caribe colombiano, desde principios del siglo XX, se han venido realizando
numerosos trabajos geológicos, que iniciaron como informes internos de las compañías
de petróleos en exploración de la cuenca Sinú-San Jacinto, desde que en 1906 se
perforara el pozo petrolero Perdices-1.
Diversos autores consideran que las rocas que conforman estos cinturones yacen sobre
corteza oceánica (Duque-Caro, 1978; Duque-Caro et al., 1996; Reyes & Zapata, 2001;
Reyes et al., 2001; Barrera et al. 2001; Guzmán et al., 2004; Guzmán, 2007), mientras
que las rocas de las Subcuencas de Plato y San Jorge (al E, dentro de la Cuenca del Valle
Inferior del Magdalena), lo hacen sobre corteza continental, entonces la Falla de Romeral
actuaría como una sutura en este sector del Caribe Colombiano. Por otra parte, otros
autores consideran que no hay suficientes evidencias para afirmar que el basamento del
CPSJ está conformado por corteza oceánica (Ujueta, 2007; Bermúdez et al., 2009;
Herrera et al., 2009), lo cual pone en duda la prolongación de la Sutura de Romeral
sugerida por Duque-Caro (1978).
Figura 1. Mapa de accesos (vías principales) y poblaciones del área del proyecto
Sinú – San Jacinto
El área del proyecto hace parte de los municipios de Bolívar y Atlántico. Este mapa corresponde a la
combinación utilizada del Modelo Digital de elevación DEM 12.5 e información base del IGAC.
Fuente: autores
Entre los trabajos estratigráficos más representativos realizados en la zona del cinturón
de San Jacinto se encuentran los realizados por Werenfels (1926), quien realizó estudios
al sur de los Montes de María, y reconoció una sucesión del Cretácico superior al Plioceno
de las formaciones “Black Shales”, “Arroyo Seco Fm.”, “Toluviejo Series”, “Pacini Shales”,
“Cerrito Fm.”, “Sabana Sandstone” y “Sincelejo Sandstone”. Posteriormente, Chenevart
(1963), propuso una sucesión del Cretácico Superior al Oligoceno de las unidades Grupo
Cansona (Fm. San Cayetano inferior y superior), formaciones Carreto, San Jacinto y
Porquero. Después, Duque y Dueñas (1987), reconocen formaciones similares a las de
Chenevart (1963) y proponen otras de acuerdo a columnas levantadas en los alrededores
de San Jacinto y el corregimiento de San Cayetano, teniendo una sucesión del Paleoceno
al Oligoceno de las formaciones San Cayetano, Chengue, San Jacinto, Carmen y Rancho.
Duque-Caro et al. (1996) complementan lo propuesto por Duque y Dueñas (1987) y
proponen una sucesión del Cretácico superior hasta el Plioceno de las formaciones
Cansona, San Cayetano, Maco, Chengue, San Jacinto, Carmen (Mb. Arenisca del Oso),
Rancho (Mb. Barcelona), Jesús del Monte y Zambrano, siendo la más reciente; esta
sucesión propuesta es la más acogida y en trabajos posteriores, como Guzmán et al.
(1998), Barrera et al. (2001), Guzmán et al. (2004) Y Guzmán (2007), se hacen ajustes en
la edad de las unidades con nueva información bioestratigráfica, cambiando el termino
Carmen por El Carmen, así como la subdivisión de la Formación El Carmen donde pasa a
tener un miembro adicional denominado Mb. Nepomuceno (Guzmán et al., 2004 y
Guzmán, 2007) y el paso de Formación Rancho a Grupo Rancho con el Miembro
Barcelona, la Formación Alférez y la Formación Mandatú (Guzmán, 2007).
mantiene gran parte de las formaciones de Reyes & Zapata (2001), excluyen la Formación
Perdices y la sustituyen por las formaciones El Morro y El Carmen. Finalmente, Pineda et
al. (2013), utiliza el termino Luruaco, en lugar de San Cayetano, y agrupa otras
formaciones de Reyes & Zapata (2001), presentando una sucesión del Paleoceno al
Pleistoceno de las formaciones Luruaco, Arroyo de Piedra-Pendales, Las Perdices, Piojó,
Tubará y Rotinet-La Popa.
Los trabajos más recientes corresponden a las publicaciones de Bermúdez et al. (2009) y
Alfonso et al. (2009) quienes a partir de secciones estratigráficas y slim holes localizados
en las zonas aledañas al municipio de Chalán (fuera del área del presente estudio),
caracterizan litofacialmente unidades del Paleógeno y Neógeno, incluyen análisis
bioestratigráficos y de litofacies. Por último, se han desarrollado una serie de trabajos
enfocados en los modelos de evolución tectónica del Caribe que proponen modelos de
margen convergente con subducción y acreción de terrenos alóctonos (Duque-Caro,
1978; van der Hilst y Mann, 1994; Taboada et al., 2000; Flinch, 2003; Guzmán, 2007;
Mantilla-Pimiento, Jentzsch, Kley, y Alfonso-Pava, 2009; Pindell y Kennan, 2009;
Chiarabba et al., 2015; Ardila y Diaz, 2016; Bernal-Olaya, Mann, y Escalona, 2016; Silva-
Arias et al., 2016; Syracuse, Maceira, Prieto, Zhang, y Ammon, 2016; Mora et al., 2017) y
modelos de margen pasivo con esfuerzo extensionales afectados por inversión (Caro y
Spratt, 2003; Moreno et al., 2009; Rossello y Cossey, 2012; ANH, 2016).
Esta fase se ejecutó durante la totalidad del desarrollo del proyecto, de manera previa y
posterior al trabajo de campo.
En el caso de las fotografías aéreas estas fueron seleccionadas y adquiridas del banco de
imágenes del Instituto Geográfico Agustín Codazzi (IGAC), se realizó el análisis de las
líneas de vuelo que se encuentran dentro del área de estudio, posterior a ello se hizo la
selección de las mejores líneas de vuelo en cuanto a cubrimiento dentro del área,
integridad de la fotografía y escala de trabajo inferior a 1:50.000, siendo ideal una escala
cercana a 1:25.000.
Se considera una de las etapas más importantes dentro del desarrollo del proyecto, ya
que se realiza la captura de información primaria de la zona de interés a través de
diferentes etapas tales como socialización, planeamiento del trabajo de campo,
reconocimiento del área entre otras. A continuación, se describen las actividades de
manera sucinta:
Etapa de socialización, consiste en una etapa previa a las actividades de campo, la cual
se fundamenta en la divulgación y socialización del proyecto, tanto a las autoridades
civiles como militares, con el fin de informar los alcances del trabajo de campo y facilitar
el acceso del equipo de profesionales a las diferentes áreas de la zona de estudio. Esta
etapa de socialización se llevó a cabo durante toda la etapa de campo, ya que a medida
que se desarrolló el levantamiento de la información geológica, se interactúo con los
habitantes de la región a los cuales se les menciona en qué consisten las actividades que
se están desarrollando.
microscopio óptico de luz transmitida con objetivos de 20X, 40X y 100X. Se cuantificaron
sistemáticamente los palinomorfos presentes en la placa oxidada tratando de alcanzar
los 200 especímenes, si esta cantidad se obtuvo antes de terminar la totalidad de los
campos, se continuó barriendo y registrando, únicamente, los marcadores
bioestratigráficos. De igual manera, la placa no oxidada fue analizada para identificar
posibles marcadores bioestratigráficos y el tipo de materia orgánica. Adicionalmente se
interpretó el grado de alteración térmica que sufrió la materia orgánica (TAI =Thermal
Alteration Index) en la lámina no oxidada, basado en la coloración de esporas de tipo
triletes psiladas de pared delgada (Traverse, 2007); cuando no fueron recuperadas las
esporas, la medida fue estimada observando la materia orgánica en general.
evitar dañar las estructuras en la roca. Para las clasificaciones y edad general de las
formas se siguió a: Anderson, 1929, Beu, 2010, Budd et al., 1992, Camacho y Longobucco,
2007, Kantor et al., 2017, Oliver y Holmes, 2006, Pilsbry y Brown, 1917, Wetzel, 2002.
El capítulo de Geología estructural fue realizado por Daniel Gómez y Luis Miguel Aguirre
con el asesoramiento del Geólogo Jairo Osorio Naranjo, el capítulo de Geoquímica fue
elaborado por Diana Marcela Sánchez y Daniel Gómez, el capítulo de Geología
Económica por Angélica del Pilar Sotelo y de Evolución Geológica fue redactado por Luis
Miguel Aguirre, Daniel Gómez, Edward Alexis Salazar y Jairo Alexander Duarte.
1.6 Agradecimientos
2 GEOMORFOLOGÍA
Este capítulo describe escala 1:50.000, las geoformas existentes en el área del proyecto
Sinú – San Jacinto, categorizadas a nivel de Unidades y Subunidades; geoformas
localizadas en la Región Caribe, departamentos de Bolívar y Atlántico.
Se tomó como insumo básico el Modelo Digital del Terreno, Palsar de 12,5 m, de
resolución, a partir del cual se generaron imágenes 2D y 3D que permitieron visualizar
las condiciones morfológicas regionales del terreno y en las que se soportó el análisis
requerido para la generación del mapa geomorfológico del área del proyecto (figura 2).
Como resultado del procesamiento del mapa base y el MDT-2D se elaboró el mapa de
pendientes del proyecto, siguiendo los lineamientos definidos por Carvajal (2012), (tabla
2).
Tabla 2. Clasificación de las Pendientes del proyecto Sinú-San Jacinto
Inclinación (Grados) Convención Descripción % de Área
0,0 - 5° Plana a suavemente inclinada 70.45
5.01 - 10° Inclinada 16.89
10.01 - 15° Muy Inclinada 7.03
15,001 - 20° Abrupta 3.37
20,01 - 30° Muy abrupta 2.02
30.01 - 45° Escarpada 0.24
45,01 - 89,99 Muy escarpada 0.003
Fuente: autores
Figura 2. MDT-2D, del proyecto Sinú-San Jacinto, destacando la morfologia del terreno
y el canal del dique
Fuente: autores
Dos sectores caracterizan las áreas de mayor pendiente: La Serranía de San Jacinto, que
destaca el mayor relieve regional con alturas y pendientes desde muy escarpada a muy
inclinadas (15° a > de 45°), localizadas en los sectores de los cerros del Toro y Capira,
entre otros; La Serranía de Luruaco con alturas menores que las de la serranía de San
Jacinto, pero con pendientes comparables, como el Cerro el Peligro, La cuchilla de
Bijabana y la sierra en donde se localiza el Corregimiento de La Tabla; una amplia zona
plana a suavemente inclinada (0° a 5°) caracteriza buena parte del área por donde
discurre el canal del dique y se localizan el embalse de la represa de Repelón y la Ciénaga
de Luruaco, y las localidades de Santa Lucia, San Cristóbal, San Estanislao, las Piedras,
Evitar, Sincerín, Mahates, Conejo, Puerto Badel, Puerto Nuevo y parte del área rural del
Municipio de Calamar, pendientes que ocupan más del 70% del área (figura 3).
2.3 Drenajes
Producto del procesamiento del mapa de MDT-2D, el mapa base y la distribución del
drenaje se identificaron dos sectores que caracterizan los tipos de drenaje del área:
El sector relativamente plano que limita buena parte del embalse de Repelón-Guájaro y
las planicies del Caribe, es dominado por un patrón de drenaje resecuente de tendencia
paralela. Finalmente, en dos sitios de poca extensión localizados en jurisdicción del
Corregimiento de Cañaveral, se observan morfologías redondeadas de patrones de
drenaje radial, asociado a actividad de diapirismo de lodo (figura 5).
Sector Sur: Difiere considerablemente con el sector Norte por la distribución geográfica
acentuada del relieve, definido como la Serranía de San Jacinto de laderas con
tendencias diferentes: la oriental (figura 6), caracterizada por el desarrollo de un relieve
alto con una red hidrográfica consecuente, de disección profunda, rectangular a sub-
rectangular densa que se adapta; mientras que la ladera occidental, presenta modelado
de altura media a baja de patrón resecuente y el desarrollo de una red de tendencia
paralela a sub-paralela que normalmente entrega sus caudales en ciénagas y pantanos
localizados en la margen izquierda del Canal del Dique.
La parte suroccidental del sector Sur presenta un patrón resecuente con el desarrollo de
una red sub-paralela que entrega sus aguas a las ciénagas y/o humedales que bordean
el trazado del Canal del Dique (figura 6).
Es importante destacar que el área plana y baja del sector norte del área, ha sido objeto
de importantes modificaciones de la red natural de desagüe, mediante la construcción
de represas como la de Repelón que modifica buena parte de la ciénaga del Guájaro.
Además, la construcción del Canal del Dique que ha generado el rompimiento de la
armonía natural de los drenajes por canales de riego para adecuación de la tierra para
actividades agrícolas de la región.
2.4.1 Geomorfoestructura
2.4.2 Provincias
Son los conjuntos de regiones con geoformas parecidas y definidas por un macro relieve
y una génesis geológica similar, demarcados por fallas regionales y continentales defini
das o inferidas (Carvajal, 2012).
San Jacinto en la Serranía de San Jacinto (26), la cuenca baja del Magdalena (2) y en los
Montes de María (25), departamentos de Bolívar y Atlántico.
2.4.3 Regiones
Agrupan áreas equivalentes a vertientes que están contenidas dentro de una provincia
geomorfológica y que representen un ambiente morfogenético particular con
condiciones climáticas homogéneas, aunada a la información geomorfológica disponible
de las planchas 23, 24, 30, 31, 37, 38 y las condiciones geológicas encontradas en el
desarrollo del proyecto; información que se integró y ajustó por criterio experto a las
condiciones del área, se identifican 5 tipos de ambientes morfogenéticos, (figura 9).
• Ambiente Morfogenético Estructural (S): Son las geoformas del relieve controladas
por la geodinámica interna a través de la tectónica relacionada con los plegamientos
y la acción de las fallas geológicas.
• Ambiente Morfogenético Denudacional (D): son los modelados controlados por la
acción de los agentes climáticos externos que generan meteorización, disección,
erosión y procesos de remoción en masa sobre las geoformas preexistentes.
• Ambiente Morfogenético Estructural - Agradacional (EA): Son formas del terreno
asociadas a fenómenos de geodinámica interna superficial relacionada con
diapirismo de lodo, cuya expresión en superficie son los volcanes de lodo.
• Ambiente Morfogenético Agradacional, Fluvial y Lagunar (F): Son las formas del
terreno producidas por procesos morfodinámicos (erosión, transporte y
sedimentación), generadas por la dinámica hidráulica continental tales como: ríos,
arroyos (caños y quebradas), lagos y lagunas.
• Ambiente Morfogenético Antropogénico (A): Geoformas producto de las actividades
desarrolladas por el hombre que modifican la superficie terrestre.
Agrupa las unidades genéticas del relieve generadas por la dinámica interna de la tierra
a través de la tectónica tales como basculamientos, pliegues y fracturas:
Se localizan en la parte centro occidental del área a lo largo de los arroyos Aguas Viejas
(Zona norte L2) y Carabalí (Zona norte L2), y al oriente del municipio de Turbaco (Zona
Norte K3).
Estas unidades se localizan al sur del área, en la parte media de la Serranía de San Jacinto,
inmediaciones de los arroyos de Enchamá (Zona sur O19) y Providencia (Zona sur O20).
Ladera definida por la inclinación de sus estratos en contra de la pendiente; estas varían
de largas a muy largas y ocasionalmente cortas a muy cortas y van desde inclinadas a
abruptas, con patrón de drenaje subdendrítico a dendrítico. Se encuentra soportada en
rocas sedimentarias estratificadas en capas gruesas tipo lodolitas, arcillolitas y hacia el
techo calizas de las formaciones San Jacinto y Chengue.
Sssle
Son aquellas geoformas del terreno del terreno asociadas a fenómenos de geodinámica
interna superficial relacionada con diapirismo de lodo, cuya manifestación en superficie
forma estructuras llamadas volcanes de lodo.
Volcán Lodo
Incluye las geoformas cuya expresión morfológica está definida por la acción combinada
de procesos moderados a intensos de meteorización, erosión y transporte de
sedimentos que remodelan y dejan remanentes de las unidades preexistentes creando
nuevas unidades.
Geoformas con laderas moderadas, rectas y onduladas, alturas que varían entre 30 y 90
m, con pendientes abruptas a muy abruptas; disectadas por drenajes de tipo sub-
paralelo. Su génesis está relacionado con procesos erosivos o de socavamiento lateral.
Están soportadas por rocas de las formaciones San Cayetano y Maco, compuestas
principalmente por areniscas, lodolitas y conglomerados.
S. De Luruaco
Dcrem
Geoforma alomada y elongada con alturas menores de 200 m., sobre su nivel de base
local, con laderas cortas a muy cortas, convexas y pendientes muy inclinadas a muy
abruptas (figura 19). Su origen está relacionado con procesos intensos de meteorización
y erosión diferencial, soportadas en rocas sedimentarias de la Formación San Cayetano.
Se caracteriza por presentar movimientos en masa locales y procesos erosivos intensos.
Esta unidad se encuentra localizada al occidente, en los sectores Bajito, en cercanía a los
arroyos Icotea, Crecencio, y Marucha, al Este de la vereda la Estrella (Zona sur J20) (figura
20).
Geoforma caracterizada por lomos de relieve bajo de cimas alargadas y angosta ubicados
a alturas menores de 250 m, con laderas de longitudes moderadas a largas entre 250 m
y 1000 m y pendientes moderadas a inclinadas. Los patrones de drenaje son sub-
paralelo, con valles en "V" de incisión moderada.
N
.
X
Dldebl
Se encuentran localizados al oriente (Zona norte D7) y occidente (Zona norte D11) de la
cabecera municipal de Villanueva, y al oeste (Zona sur J17) del municipio de San
Cayetano. Están soportadas en rocas sedimentarias de la Formación San Cayetano (figura
21).
Se ubican al límite sur entre los sectores de Guaimaral y Santa Ana, afectados por una
alta disección de los afluentes del arroyo Lungo; esta unidad presenta una mayor
continuidad hacia el SE y en cercanías a la localidad de Arjona (Zona sur A8).
Geoforma alomada, elongada, de alturas menores a 200 m, sobre su nivel de base local,
de laderas cortas a muy cortas, convexas y pendientes muy inclinadas a muy abruptas,
constituida por suelo residuales, cubiertos por niveles de material coluvial. Esta unidad
se encuentra al norte (Zona norte D11) del área de estudio., constituida desde el punto
de vista geológico por materiales de la Formación La Popa.
Incluye las geoformas que se originan por procesos de erosión de las corrientes de los
ríos y por la acumulación o sedimentación de materiales en las áreas aledañas a dichas
corrientes, tanto en épocas de grandes avenidas e inundación, como en la dinámica
normal de las corrientes perennes, durante la época seca. De esta manera, es posible
encontrar unidades aledañas a ríos, quebradas y en el fondo de los cauces, cuyos
depósitos son transportados y acumulados cuando estos pierden su capacidad de
arrastre.
Depósitos naturales de agua que se forman en zonas deprimidas o muy planas, mal
drenadas durante la época de inundación o de altas precipitaciones, cuyo tamaño y
profundidad dependen de su ubicación y colmatación. Dentro del área esta unidad se
encuentra bien distribuida a lo largo de ambas márgenes del canal del dique, formando
un complejo lagunar con desarrollo de poblaciones que toman sus nombres (figura 26).
Geoforma de acumulación con aspecto de medio semicono, inclinado, con el ápice hacia
arriba. Su perfil longitudinal y transversal es convexo con inclinaciones no superiores a
los 10°, de longitudes largas. Se localizan hacia la parte suroriental del área de estudio
en inmediaciones del Municipio de San Cayetano en los arroyos Lamba (Zona sur I16) y
Enchamá (Zona sur N21).
Geoformas alargadas generadas por la acción dinámica de los cauces principales que
drenan las serranías de Luruaco y San Jacinto; están soportadas por sedimentos aluviales
de tamaños variables.
Esta unidad es producto de los procesos erosivos y fluviales que afectaron las unidades
rocosas de las formaciones San Cayetano, Chengue, San Jacinto y El Carmen, por donde
se generaron los valles de los principales arroyos como lo son: Cascara (Zona sur G1),
Grande (Zona norte I3) y Pozones (Zona norte F7), y sobre la cabecera municipal de San
Basilio de Palenque (Zona Sur I14).
Incluye las geoformas originadas como resultado de la intervención del hombre sobre el
terreno, con el objetivo de realizar construcción de vivienda, obras de ingeniería,
represas canales y disposición de residuos o escombros y adecuación de nuevas vías, que
modifica la morfología natural del terreno.
Figura 28. Canal del Dique en inmediaciones del Municipio de San Estanislao
N:1640718, E: 883457
Fuente: autores
Erosión laminar
acentuada
son más acentuadas que los surcos y tienen canales con profundidades que varían entre
0.5 – 5 m.
2.6.6 Deslizamiento
del Arroyo el Banco que vierte sus aguas al embalse del Guájaro, sur del Municipio de
Repelón (figura 35 y 36).
3 ESTRATIGRAFÍA
Dentro del marco cronoestratigráfico general del Anticlinorio de San Jacinto y Luruaco,
se ha documentado la existencia de un basamento ígneo Cretácico de afinidad oceánica
(Cardona et al., 2012; Lara et al., 2013; Silva et al., 2016) sobre el cual reposa de manera
discordante una secuencia finogranular (Formación Cansona) depositada en ambientes
marinos proximales a distales profundos (Juliao-Lemus et al., 2016), con edad
Campaniano – Maastrichtiano (Duque et al., 1996; Guzmán et al., 2004; Guzmán, 2007;
Bermúdez et al., 2009, Alfonso et al., 2009). Este conjunto litológico constituye el
basamento de la cuenca, aflora en superficie de manera restringida y aislada en los
alrededores de El Carmen de Bolívar (Sector Cerro Cansona), en inmediaciones de los
municipios de Chalán, Sincelejo y Montería (Duque et al., 1996, Bermúdez et al., 2009,
Alfonso et al., 2009) y es suprayacido de manera discordante por una secuencia
Paleógena marina – transicional de composición mixta detrítica - calcárea con espesor y
litología variable e importantes cambios faciales en sentido sur – norte (figura 38).
Los trabajos cartográficos y exploratorios desarrollados desde los años 60s en los
anticlinorios de Luruaco y San Jacinto, han generado una amplia variedad de
terminología y nomenclatura formacional empleada para denominar las unidades
litológicas aflorantes (Chenevart, 1963; Duque 1968, 1972 en Guzmán et al., 2004;
Alemán, 1983; CHEVRON, 1986, Bermúdez et al., 2009; Alfonso et al., 2009). Para el
desarrollo del presente trabajo se adopta la nomenclatura formacional propuesta por
Duque-Caro et al. (1996) y Guzmán et al. (2004) para las unidades del Paleógeno y del
Pleistoceno, y la propuesta de Guzmán (2007) para las formaciones del Neógeno.
3.1 Paleógeno
El termino San Cayetano fue usado por primera vez por Chenevart (1963), para
denominar a las rocas sedimentarias aflorantes en los alrededores de los Montes de
María, nombradas informalmente como Formación San Cayetano Inferior y Formación
San Cayetano Superior (De Porta, 1974); la primera constituida por “limolitas
intercaladas con margas y bancos de areniscas blancas localmente glauconíticas” y la
segunda correspondiente a una “alternancia de limolitas y areniscas finas”. Camacho et
al. (1968 en INGEOMINAS-SGC, 2001), acogen el termino San Cayetano para designar las
rocas sedimentarias aflorantes en los alrededores de la Serranía de San Jacinto, y la
dividen, informalmente, en los miembros Capiro? y Romualdo?.
Duque-Caro (1973) y Dueñas & Duque-Caro (1981 en Guzmán et. al., 2004) también
utilizan el termino San Cayetano inferior y superior en sus trabajos. Posteriormente,
Guzmán et al. (2004), Duque-Caro et al. (1996), GEOTEC (1997), Barrera (1999), Barrera
et al. (1999), Reyes et al (1999), Reyes & Zapata (1999), Clavijo & Barrera (1999 en
Guzmán et. al., 2004), con trabajos de campo, establecen a la Formación San Cayetano
inferior como Formación Cansona y el San Cayetano superior como Formación San
Cayetano, constituido por “secuencias granodecrecientes de litoarenitas arcósicas desde
conglomeráticas hasta grano fino… cemento silíceo, localmente calcáreo, mal
seleccionadas. Intercalaciones menores de lodolitas interestratificadas con arenitas
grises de grano fino a medio, cemento calcáreo, bioturbadas” (Guzmán et. al., 2004).
Clavijo (1997 en Guzmán, 2007), propuso dividir la Formación San Cayetano en los
Miembros Capiro y Matuyana, pero dicha división es solo local. En trabajos posteriores
se continúa el uso del término San Cayetano empleado en las memorias oficiales del
INGEOMINAS-SGC.
La Formación San Cayetano no cuenta con una sección tipo definida formalmente;
Chenevart (1963), no indica una sección tipo o de referencia para la unidad. Duque-Caro
(1991) (en INGEOMINAS-SGC, 2001), en trabajos de cartografía indica como sección de
referencia el arroyo Las Palmas. Guzmán et al. (2004), recomienda como sección tipo la
sucesión aflorante en la carretera San Cayetano-Carreto, Bolívar.
La Formación San Cayetano en el sector San Jacinto aflora en la parte oriental del Mapa
geológico Sinú San Jacinto Zona Sur, conformando una franja alargada en dirección NE-
SW que configura los flancos y valles de pliegues regionales como el sinclinal de San
Cayetano y el anticlinal del Guásimo, ocupando un área aproximada de 231 Km² (figura
39).
Hacia la parte suroccidental del mapa se presentan exposiciones de menor área cerca
del canal del Dique en inmediaciones de los corregimientos de Correa (María La Baja) y
Rocha (Arjona) formando lomas y lomeríos disectados (Mapa Zona sur cuadrícula L3-M3-
N3).
Figura 39. Mapa de Localización de la Formación San Cayetano dentro del área de
estudio
Fuete: autores
La mayor altura que presenta esta unidad dentro del área cartografiada se localiza en el
cerro Toro al sur del corregimiento de San Cayetano (Mapa Zona sur cuadrícula L16-
M16- N16), donde conforma sierras estructurales que alcanzan 520 m de altura sobre el
nivel del mar. Hacia la parte oriental del mapa, la unidad muestra unidades geomorfoló
gicas de origen estructural desarrollando sierras de ladera estructural y de contrapendi
ente, con divisorias elongadas en dirección noreste-suroeste, siguiendo la tendencia
estructural general del área.
Evangelista, Cerro Capira, Peñones, San Antonio, Loma de Piedra y La Playa (figura 41,
tabla 4).
La sección estratigráfica presenta un espesor de 148 metros, de los cuales 95.5 m son de
roca expuesta y 52.5 metros de cubierto. La sucesión litológica fue dividida en 3
segmentos definidos de acuerdo con sus características litológicas. El segmento A
definido como el miembro basal, consta de una sucesión heterolítica, rítmica, compuesta
por intercalaciones de arcillolita, limolita y arenisca en capas tabulares a lenticulares, con
contactos netos a ondulosos; dicho segmento se encuentra limitado por dos fallas
geológicas. El segmento B consta de un conjunto de capas delgadas a medias, tabulares,
de arenisca. El Segmento C se caracteriza por la presencia de intercalaciones de arenisca,
limolita y lodolita, en capas medias a gruesas, donde se evidencia un incremento en el
contenido de arenisca hacia el techo (figura 43). Estos segmentos se describen a
continuación de manera detallada de base a tope:
Conjunto con un espesor de 18 m, de capas delgadas a medias (0.2 – 0.3 m), de arenisca
de forma tabular con contactos netos (figura 45 A). Las areniscas son de textura muy fina
a fina, con laminación interna plana paralela (figura 45 B) a ondulosa continúa definida
por la concentración de materia orgánica oxidada y bioperturbación baja a media (figura
45), presenta granos subredondeados a subangulares, buena selección, matriz del 10 %,
cemento silíceo, con bajo contenido de micas. Composicionalmente se clasifican como
sublitoarenitas; el color de las areniscas es oliva pálido (5Y 6/2) a amarillo oscuro (5Y
6/4).
Figura 43. Columna generalizada del sector el Puente, de la Formación San Cayetano
Fuente: autores
La sucesión está constituida de base a tope así: hacia la base y parte media del segmento
se aprecian capas medias a gruesas (0.2 m – 1.0 m) de lodolita y limolita, tabulares,
Las lodolitas y limolitas son de composición silícea, con laminación interna plana paralela
difusa y presencia de esporádicos lentes de mudstone calcáreos. Las lodolitas y limolitas
son de color marrón amarillento oscuro (10YR 2/2, 10YR 4/2).
Las areniscas son de textura muy fina, con cemento silíceo a localmente calcáreo, sus
clastos son subangulares a subredondeados, bien seleccionadas, matriz arcillosa del 5 al
20%, con presencia de mica y biotita (1 – 2%). Composicionalmente se clasifican como
sublitoarenitas, con laminación interna plana paralela definida por la concentración de
óxidos de hierro; bioperturbación baja. Las areniscas son de color gris amarillento
(5Y7/2) a amarillento oscuro (5 Y 6/4).
Hacia el tope del segmento con un espesor de 6.5 m, se encuentran conjuntos de capas
delgadas a gruesas (4 a 50 cm) de arenisca, interestratificadas con capas delgadas de
lodolita, tabulares con contactos ondulosos a netos. Las areniscas son de textura fina,
con granos subredondeados a subangulares, compuestos de cuarzo (90%), líticos (8%) y
accesorios de biotita y moscovita (1 a 2%); presentan laminación interna plano paralela
a ondulosa (figura 46 A-B), con bioperturbación baja a media hacia el tope de la capa,
con evidencia de madrigueras de tipo Paleophycus (figura 47) y estrato crecimiento. Las
areniscas son de tonalidades naranja grisáceo (10YR 7/4) a amarillo oscuro (5Y 6/4). Las
limolitas de color naranja grisáceo (10YR7/4).
Figura 48. Columna generalizada del sector Evangelista de la Formación San Cayetano
Fuente: autores
3.1.1.3.2.2 Segmento A (0 m- 12 m)
Figura 50. Afloramiento de capas medias a gruesas de limolita interestratificadas con capas
medias de arenisca de grano fino en el segmento B del sector Evangelista-1
Fuente: autores
Esta sección presenta 412 m de espesor y fue dividida en tres segmentos conformados
por dos sucesiones heterolíticas separadas por un paquete de capas gruesas a muy
gruesas de areniscas de grano fino a medio. De base a techo se tiene: interestratificación
de limolitas- limolitas arcillosa y areniscas (Segmento A), Paquetes de capas gruesas a
muy gruesas de areniscas (Segmento B), e Interestratificación de areniscas y limolitas
(Segmento C).
Figura 51. Afloramiento de capas de arenisca de textura fina con contactos ondulosos
en el segmento C del sector Evangelista-1
Fuente: autores
Figura 52. Capas gruesas de areniscas de grano fino separando una interestratificación
de limolita arcillosa y arenisca, en la parte basal del segmento A- sector Evangelista-2
Fuente: autores
Hacia la parte media del segmento se reconocen capas gruesas a muy gruesas de
areniscas conglomeráticas, canaliformes, con presencia de intraclastos arcillosos,
algunas de las cuales presentan clastos tamaño guijo hacia la base configurando una
gradación normal.
Los intervalos arenosos que separan las sucesiones rítmicas presentan un espesor
máximo de 5 m. Las areniscas presentan laminación plano-paralela y ondulosa
discontinua. En estos intervalos se observan lechos conglomeráticos de gránulos a guijos
compuestos de chert negro y líticos volcánicos (?).
3.1.1.3.3.1 Segmento A (0 m - 68 m)
La parte basal de la sección levantada en el sector cerro Capira, está conformada por
capas gruesas a muy gruesas de areniscas de grano grueso y muy grueso, algunas
conglomeráticas, dispuestas en estratos de geometría tabular, con contactos regulares
netos hacia tope y base, con cemento silíceo y localmente calcáreo, con estructuras
En esta parte del segmento se presentan capas macizas de areniscas con contactos
planos netos a ligeramente ondulosos; con textura media a muy gruesa, algunas con
laminación plano paralela y ondulosa continua y gradación tanto normal como inversa,
siendo más común el granodecrecimiento; aumenta la proporción de areniscas
calcáreas; varían en color de marrón amarillento oscuro (10YR 2/2) a gris oliva claro (5Y
5/2).
conformando una transición entre la parte basal y el tope de la sección del sector cerro
Capira.
En conjunto, la sección del sector Cerro Capira configura una sucesión estrato y
granodecreciente, con aumento del material calcáreo hacia la parte media y un paso
gradual desde las facies características de la parte basal (capas gruesas de arenisca) a las
sucesiones heterolíticas que constituyen el tope de la sección.
El sector Peñones presenta un espesor de 197 m, se localiza al occidente del sinclinal San
Cayetano, entre los cuadrángulos H18 e I18 (figura 41). Se levantaron dos columnas
estratigráficas separadas por una zona cubierta de 20 m, nombradas Peñones-1 y
Peñones-2.
3.1.1.3.5.1 Segmento A (0 m – 39 m)
Las capas de areniscas presentan color gris medio (N5), gradación normal, laminación
plano paralela y ondulada, estratificación inclinada tangencial a la base de la sección, en
las capas de areniscas se observan estructura convoluta, (figura 59 D) y hacia la parte
media-alta estructuras “Flutes marks”.
Hacia la base y parte media de la sección se observa mayor contenido de lodolitas con
nódulos concéntricos (figura 59 B), un aumento en la aparición de madrigueras (entre
los 13 a los 14 m), mayor contenido de cemento calcáreo, y en menor proporción láminas
de carbonato de calcio endurecido.
En este segmento a la base y al tope se observan capas con mayor espesor de sucesiones
heterolíticas de capas delgadas de lodolitas, lodolitas arenosas intercaladas con
areniscas, presenta intraclastos lodosos y restos vegetales, al tope se observa mayor
contenido de materia orgánica.
El sector Peñones -2 (figura 61), presenta 125 m de espesor -de los cuales 29 m se
encuentran en una zona tectónicamente deformada, principalmente hacia el techo del
sector. Se caracteriza por la presencia de capas muy gruesas tabulares de conglomerados
arenosos polimícticos y areniscas conglomeráticas; en los conglomerados el armazón es
de tamaño gránulos a guijos finos, con clastos de forma elongados a subesféricos,
subangulares a subredondeados, los contactos entre granos son generalmente flotantes,
longitudinales y puntuales, compuestos de cuarzo hialino, cuarzo ahumado, cuarzo
lechoso, feldespatos, epidota, biotita, chert, óxidos e intraclastos de lodolita, estas capas
se encuentran de manera cíclica y en contacto gradacional con capas gruesas de
areniscas conglomerática de la misma composición; el color predominante es café
amarillento moderado (10YR 5/4).
lechoso, chert (?), e intraclastos lodosos; en algunas capas se observa cemento calcáreo,
la matriz por lo general es de color gris azuloso medio (5B 5/1).
Algunas capas hacia la parte media del sector los Peñones-2 son matriz soportadas y el
resto presentan estratificación inclinada tangencial, en artesa y, por lo general los
intraclastos lodosos se observan imbricados.
3.1.1.3.6.2 Segmento A (0 m – 28 m)
El color predominante del segmento C es oliva pálida (10Y 6/2); hacia la base presenta
cemento calcáreo y al techo cemento silíceo.
3.1.1.3.7.2 Segmento B (8 m– 16 m)
Conformado por intercalaciones de areniscas finas a lodosas con lodolitas. Hacia la parte
inferior del segmento las intercalaciones de areniscas finas a lodosas alcanzan un metro
de espesor, presentando estratodecrecimiento hasta capas delgadas; la geometría de las
Las lodolitas tienen bioperturbación y materia orgánica (restos de hojas), el color es gris
amarillento (5Y 7/2) y amarillo oscuro (5Y 6/4). Estas intercalaciones se encuentran
separadas en algunas partes por capas medias a gruesas (0,20 a 0,50 m), tabulares a
irregulares de areniscas de grano fino a medio con laminación ondulosa o plano paralela
(figura 69), los granos que la componen son subesféricos y subangulares a subelongados
con moderada selección, contiene líticos (12 – 30%), cuarzo lechoso, cuarzo hialino,
moscovita, bioperturbación media y fragmentos de hojas.
Este sector se encuentra ubicado en el flanco oriental del sinclinal San Cayetano en
donde las capas tienen un rumbo aproximadamente norte – sur y dirección de
buzamiento hacia el occidente. En este sector se realizó el levantamiento estratigráfico
de dos columnas: la columna Loma de Piedra - 1 (espesor 41 m) se encuentra ubicada
aguas arriba del arroyo Lamba con respecto a la columna Loma de Piedra - 2 (espesor 19
m); estas columnas se encuentran separadas por un intervalo cubierto de
aproximadamente 15 m (figura 71).
Figura 71. Columna generalizada del sector Loma de Piedra de la Formación San
Cayetano
Fuente: autores
Las areniscas se presentan en capas medias predominantemente (0.1 a 0.3 m), tabulares,
irregulares a lenticulares, hacia la parte inferior y la superior se presentan esporádicas
capas gruesas a muy gruesas (0.8 a 1.5 m) de areniscas de grano grueso a ligeramente
conglomerática.
Figura 74. Columna generalizada del sector La Playa de la Formación San Cayetano
Fuente: autores
3.1.1.3.9.1 La Playa - 1
Las areniscas se presentan en capas tabulares, muy delgadas a medias con contactos
netos a ligeramente ondulosos, el tamaño de grano es fino a muy fino, los granos son
subangulares a subredondeados, subesféricos a esféricos y tienen buena selección,
presentan cemento silíceo. Están compuestas por cuarzo (85 – 90%), líticos (7 – 10%),
feldespato (<5%) y trazas de moscovita (<2%), la mayoría de las areniscas tienen
bioperturbación media a alta que genera un moteado paralelo y perpendicular a la
estratificación, laminación plano paralela predominante y calcos de carga,
esporádicamente laminación inclinada y convoluta. Los niveles arenosos presentan
estratocrecimiento. Composicionalmente son clasificadas como sublitoarenitas, color
naranja amarillento oscuro (10YR 6/6) y naranja muy pálido (10 YR 8/2).
Estas areniscas se encuentran intercaladas con láminas medias a gruesas (6 hasta 10 mm)
de limolitas, lodolitas arenosas y areniscas lodosas con contactos netos a ondulosos; las
lodolitas (figura 75) se encuentran bioperturbadas y contienen materia orgánica.
3.1.1.3.9.2 La Playa - 2
3.1.1.3.9.3 Segmento A (0 m – 11 m)
Figura 77. Diagrama ternario de Clasificación Composicional QFL para areniscas según
Folk (1974),
las muestras ploteadas se encuentran listadas en la tabla 2
Fuente: autores
Es el segmento basal de la Formación San Cayetano y está constituido por las siguientes
petrofacies clásticas, finogranulares levemente calcáreas, (tabla 5).
Texturalmente según Folk (1954) las muestras IGM 5067526, 5067527, 5067529 y
5067530 son clasificadas como arenisca, según Folk (1954), caracterizadas por ser de
grano fino a muy fino, predominantemente subangular y subesférico, con buena
selección, es una roca granosoportada, submadura tanto composicional como
texturalmente (figura 77).
Los procesos diagenéticos más frecuentes por argilización, rellenan los espacios
Interpartícula de una matriz arcillosa, producto de la alteración de micas y feldespatos
tanto sódico-cálcicos como alcalinos.
Composicionalmente son clasificadas como Arcosas Líticas calcáreas según Folk (1974) y
están constituidas por cuarzo monocristalino (en promedio entre 10 y 23%), cuarzo
policristalino (entre 1.0 y 3.0%), plagioclasa (16%) algunas parcialmente sericitizadas y
con macla deformada, feldespato alcalino (ortoclasa) algunos caolinizados (en promedio
15%), y fragmentos líticos de: rocas metamórficas como filitas (2.0%), esquistos
moscovíticos (6.0%), y esquistos grafitosos (3.5%); de rocas ígneas volcánicas como
basaltos (entre 3.0 y 6.0%); de rocas ígneas plutónicas se encuentran cuarzodioritas
(entre el 2.0 y el 5.0%); y por último fragmentos líticos sedimentarios de areniscas (5.0%)
y limolitas arcillosas (4.0%).
Como minerales accesorios contiene esfenas, circón, micas como moscovitas y biotita,
muy deformadas y haciendo parte de la matriz de la roca, algunas totalmente
cloritizadas. Es de resaltar que hacia la base y hacia el tope la roca presenta cemento
calcáreo tipo espar equant y blocky (IGM 5067527).
Los procesos diagenéticos más frecuentes son argilización y carbonatación, que rellenan
los espacios interpartícula de una matriz arcillosa y/o esparita y micrita ocupando
totalmente la porosidad intergranular. En la muestra con IGM 5067527 como estructura
sedimentaria esta presenta laminación interna muy fina, definida por la concentración
de óxidos de hierro y granulometría más fina, limo grueso a arena muy fina (0.05 –
0.1mm).
Este segmento cuenta con una sola muestra IGM 5067532, localizada en la base del
segmento 2. Texturalmente clasificada como una arenisca lodosa según Folk (1954), se
observa una variación en el tamaño de grano desde limo medio (0,03 mm) hasta arena
media (0,5 mm); en donde la fracción arena muy fina representan el 39% de la roca, son
granos subangulares y subelongados, mal seleccionada, lodosoportada, inmadura tanto
composicional como texturalmente (figura 81).
Los procesos diagenéticos más frecuentes son argilización, que rellenan los espacios
interpartícula de una matriz arcillosa ocupando totalmente la porosidad intergranular
producto de la alteración de micas y feldespatos tanto sódico-cálcicos como alcalinos y
oxidación, presentándose óxido de hierro tanto en granos como en forma de cemento
ferruginoso peculiar, rodeando los clastos, en parches, ocupando espacio poroso.
4
X
Geología del área Sinú – San Jacinto a escala 1:50.000 en las planchas 23, 24, 30 y 31 y parte de las
planchas 37 y 38.
Para este segmento se analizaron siete muestras listadas de base a techo como IGM
5067535, 5067538, 5067541, 5067539, 5067546, 5067542, 5067553. Texturalmente se
observa una intercalación de niveles de arenisca limosa con limolitas arenosas y arenisca
arcillosa, clasificadas como según Folk (1954), se observa una variación en el tamaño de
grano desde limo medio (0,03 mm) hasta arena media (0,5 mm) y en el tope del
segmento comienzan aparecer fracciones muy gruesas llegando a encontrarse hasta
guijarros (4-6 mm); son granos subangulares y subelongados, mal seleccionada,
lodosoportada, inmadura a submadura tanto composicional como texturalmente (figura
83).
Como minerales accesorios contiene, circón, micas moscovita y biotita, muy deformadas
y rellenando espacios intergranulares, apatitos y minerales opacos (pirita).
Los procesos diagenéticos más frecuentes son argilización, que rellenan los espacios
interpartícula de una matriz arcillosa ocupando totalmente la porosidad intergranular
producto de la alteración de micas y feldespatos tanto sódico-cálcicos como alcalinos y
oxidación, presentándose óxido de hierro tanto en granos como en forma de cemento
ferruginoso peculiar, rodeando los clastos y en parches, rellenando espacio poroso.
Se analizaron 19 secciones delgadas, este segmento está constituido por las siguientes
petrofacies clásticas, finogranulares levemente calcáreas.
Texturalmente clasificadas como areniscas según Folk (1954), se analizaron dos muestras
en este segmento, referenciadas como IGM 5067493 y 5067494, localizadas en el tope
del segmento, su granulometría varía por sectores de la roca de arena fina a arenas muy
fina y en otros sectores de limo grueso a arena fina, estas variaciones en el tamaño de
los detritos son debidas a la bioturbación que se presenta hacia el tope del segmento.
Son clastos predominantemente subangulares y subesférico, con buena selección, es
una roca granosoportada, submadura tanto composicional como texturalmente (figura
89).
Los procesos diagenéticos más frecuentes son carbonatación, donde las precipitaciones
de carbonato de calcio rellenan los espacios interpartícula con esparita y micrita
ocupando totalmente la porosidad intergranular.
Figura 92. IGM 5076278. Microfotografía de Arcosa Lítica, constituida por cuarzo
monocristalino (Qz),
plagioclasa (Pl) biotita (Bt), Hornblenda (Hb), sericita (Ser), clorita (Chl), líticos plutónico (Lp), todo
embebido dentro de una matriz limo arcillosa. Aumento 10X. A. Nicoles cruzados. B. Nicoles paralelos
Fuente: autores
Este segmento cuenta con dos muestras IGM 5076315 localizada al tope del segmento y
la IGM 5076316 en el tope del segmento.
Texturalmente según Folk (1954) la muestra IGM 5076315 y IGM 5076316, son
clasificadas como areniscas, se caracterizan de base a techo por su variada
granulometría, hacia la base predomina facies finogranulares, hacia el tope aumenta de
tamaño a arena media (0.5 mm) con esporádicos granos de tamaño arena gruesa,
predominantemente subangular y subesférico, con moderada selección, es una roca
hacia la base lodosoportada y hacia el tope granosoportada, la madurez de la roca tanto
composicional como texturalmente varia de base a tope de inmadura y submadura
respectivamente (figura 95).
Como minerales accesorios contiene esfenas, circón, mica moscovita y biotita, algunas
totalmente cloritizadas, piroxenos y magnetita. Hacia el tope la roca presenta cemento
calcáreo tipo espar equant y blocky.
Los procesos diagenéticos más frecuentes son argilización y carbonatación, que rellenan
los espacios interpartícula de una matriz arcillosa y/o esparita y micrita ocupando
totalmente la porosidad intergranular.
Tabla 6. Análisis bioestratigráficos en 152 muestras de la Formación San Cayetano - Sector San
Jacinto.
Especímenes diagnósticos de edad Edad
Muestra
Foraminíferos Palinología Foraminíferos Palinología
Nothia robusta
VCB-185 Haplophragmoides No diagnóstica Cretácico – Eoceno No diagnóstico
horridus
Paleoceno
Polypodiaceoisporites? Cretácico – Mioceno
NZG-201 Nothia robusta
fossulatus temprano
temprano -
Mioceno medio.
Cretácico temprano -
IBA-256 Nothia excelsa No diagnóstica
Paleógeno.
No diagnóstico
Cretácico temprano -
PAR-1726 Nothia excelsa -
Paleógeno.
-
Spinizonocolpites
breviechinatus Cretácico tardío
Spiroplectammina Paleoceno tardío -
LLG-242-B spectabilis
Spinizonocolpites echinatus (Maastrichtiano) al
Eoceno medio.
Polypodiaceoisporites? Eoceno tardío.
fossulatus
De las muestras analizadas para foraminíferos el 92% fueron estériles y solo un 8% de las
muestras presentan una abundancia de 1 - 50% de foraminíferos planctónicos; por otra
parte, para foraminíferos bentónicos el 55% de las muestras fueron estériles, el 35%
tuvieron una abundancia de 1 - 20% y un 10% una abundancia del 20 - 50%.
El análisis realizado en una muestra para macrofósiles dio una abundancia moderada
(entre 1 y 5 macrofósiles) donde además se reportan Icnofósiles marinos (Paleodictyon).
Por otro lado, los análisis realizados en 17 muestras de nanofósiles calcáreos fueron
estériles.
Por otra parte, Geotec (1997) propone una edad Paleoceno a Eoceno medio a partir de
Spiroplectammina trinitatensis, Acarinina sp. y Clavigerinella sp. Así mismo, Guzmán
(2007) reporta un rango de edad Paleoceno tardío a Eoceno temprano a partir de
formaminíferos planctónicos y bentónicos. Por otro lado, Osorno (2008) reporta un
rango de edad Paleoceno tardío a Eoceno tardío a partir de la asociación Rzehakina
epigona / Spiroplectammina grzrybowsky, registradas ya en Duque-Caro (1968).
Adicionalmente, Alfonso et al. (2009) a partir de análisis de palinomorfos y foraminíferos
estableció un rango de edad Paleoceno tardío a Eoceno tardío inferior; Bermúdez et al.
(2009) y Bermúdez, H., Grajales, J., Restrepo, L., & Rosero, J. (2009) reportan un rango
de edad entre el Paleoceno y el Eoceno-Oligoceno a partir de análisis palinológicos.
Formación San Cayetano, y a su vez sugieren que la Formación Arroyo Seco podría
corresponder en parte a la Formación San Cayetano, como anteriormente lo propuso
Porta (1974).
El dominio de las facies arenosas con presencia de estructuras internas generadas por
tracción en un régimen de flujo superior, y de manera subordinada a conglomerados de
guijos con laminación plano paralela; sobre las facies finas representadas por limolitas
laminadas, sugiere que los procesos de tracción en flujos de alta energía fueron
dominantes sobre la sedimentación por suspensión. Debido al predominio de facies
gruesas en estos sectores, se interpreta que la sedimentación ocurrió en un frente
deltaico asociado a canales distributarios rellenos por barras. Bhattacharya (2006) define
el frente deltaico como el área dominada por sedimentos gruesos (arena y grava) dentro
de un sistema deltaico (Bhattacharya, 2006).
Estas características se podrían relacionar con la facies B definidas por Zavala et al. (2014)
para descargas hiperpícnicas o turbiditas extracuencales; las cuales se relacionan a flujos
turbulentos con alta carga de sedimentos; o podrían corresponden a canales
distributarios dentro de un sistema deltaico dominado por ríos (Rodríguez y Arche,
2010). Los conglomerados macizos se relacionan probablemente con las facies B1 y B1c
definidas por Zavala et al. (2014); las areniscas conglomeráticas con laminación inclinada
tangencial definen la facies B2. Las areniscas conglomeráticas y conglomerados con
estructuras internas formadas por procesos tractivos son generadas por disminución de
la carga de sedimentos, pérdida de competencia y densidad del flujo.
Las facies de areniscas con laminación, que suprayacen a las areniscas conglomeráticas
macizas, se interpretan como producto de una disminución en la carga de sedimentos
posterior al cese de flujos gravitacionales, lo que permite la acción de procesos tractivos
evidenciados por la estructura interna de las rocas.
Esta unidad fue definida por Chenevart (1963) para la cuenca del Magdalena inferior que
según el autor se extiende entre el macizo cristalino de Santa Marta (prolongación de la
Cordillera Central) y los Montes de María (prolongación de la Cordillera Occidental). El
autor define originalmente dos unidades; la Formación San Cayetano inferior de edad
Campaniano a Maastrichtiano, equivalente con la Formación Cansona y la Formación San
Cayetano superior, equivalente a la actual Formación San Cayetano, compuesta por una
alternancia de limolitas y arenitas finas de facies marinas y edad Paleoceno, que
suprayace en continuidad estratigráfica al cretácico marino (Chenevart, 1963). En el
trabajo de Chenevart no se precisa la existencia de una sección tipo, ni de una
descripción más detallada de estas rocas.
Reyes, Guzmán, Barbosa, y Zapata (2001) destacan que Raasveldt (1953) denomina a la
Formación San Cayetano como Formación Luruaco, alrededor de Tolú, sin embargo, el
origen de ese nombre parece provenir de la población de Luruaco en el departamento
del Atlántico, donde se encuentra la secuencia heterolítica principalmente siliciclástica
del Paleoceno – Eoceno inferior en el Anticlinorio de Luruaco. Bueno (1970) utilizó el
nombre Formación Luruaco, mientras que Reyes, Guzmán, Barbosa, y Zapata (2001)
utilizan el término Formación San Cayetano para abandonar y unificar la propuesta de
Bueno (1970), siendo este el mismo sentido en el que se utiliza dentro del presente
trabajo.
La Formación San Cayetano-sector Luruaco tiene una extensión de 101.1 km2 y aflora en
el mapa del sector norte, en sentido NNE-SSW desde la cuadrícula O10 hasta las
cuadrículas A11, A12, A13, A14 y A15 (figura 103); a medida que se va avanzando hacia
la serranía de Luruaco la cobertura de esta unidad aumenta. La unidad conforma en el
sector central de la zona de estudio, entre las poblaciones de Villanueva y Repelón, una
serranía con colinas muy altas de hasta 450 msnm orientados al NNE (figura 104 y figura
105). Hacen parte de esta serranía (de W a E) la Cuchilla Cascajal (cuadrícula C11), el Alto
Cerrará (cuadrícula B14), la Cuchilla Bijibana (cuadrícula B14), la Loma Mendocita
(cuadrícula D13) y la Loma Armadillo (zona norte cuadrícula A15).
Figura 103. Mapa de Localización de la Formación San Cayetano dentro del área de
estudio
en el recuadro amarillo se evidencia la extensión areal de la Formación San Cayetano – Sector Luruaco
Fuente: autores
Figura 104. Serranías con colinas muy altas de la Fm. San Cayetano-sector Luruaco
en contraste con los lomeríos de la Fm. Tubará y las zonas planas asociadas a los depósitos aluviales.
Estación ANM085. E: 879181 N: 1648099
Fuente: autores
Una sección de esta unidad se encuentra desde la cuadrícula A12 hasta la A15 del mapa
de la zona norte, en el arroyo Banco, donde se realizó el levantamiento de una columna
estratigráfica compuesta (figura 106 y anexo 5) de 1530 m de espesor. Se accede a la
cabecera de este arroyo por la antigua escuela de la vereda Cieneguita, se toma el
camino al oriente paralelo al afluente de primer orden hasta llegar a la confluencia de
los arroyos Pacheco y Admirador, en donde inicia el arroyo Banco; aguas abajo por este
último, luego de una zona estructuralmente afectada, afloran los estratos más inferiores
de la Formación San Cayetano, conformados por un paquete monótono de lodolitas
grises verdosas (Segmento A), con capas interpuestas lenticulares (cuneiformes) muy
gruesas de sublitoarenitas; pasan gradualmente a un segmento heterolítico rítmico
(Segmento B) de capas tabulares medias de arenitas y lodolitas. Por otra parte, los
estratos superiores se encontraron mejor expuestos en la sección levantada en el arroyo
Pacheco, de forma que se describieron allí los segmentos C y D, compuestos por intervalo
3.1.2.3.1 Segmento A
Las lodolitas hacia la base son monótonas de color gris verdoso (5G 6/1), presentan
laminación plana paralela (figura 107 D), con láminas arenosas discontinuas, que exhiben
laminación convoluta y muy localmente ondulada (wavy), de textura muy fina, la
bioturbación es moderada (i.b.=3) con estructuras de reposo y madrigueras horizontales.
Presenta algunos lentes dispuestos en capas medias interpuestos (15 cm de espesor) de
calizas tipo mudstone.
3.1.2.3.2 Segmento B
En los primeros 132 m del segmento heterolítico o Segmento B, predominan las lodolitas
sobre las sublitoarenitas en una proporción de 70 a 30. Las lodolitas son de color gris
verdoso (5Y 6/4), presentan laminación plana paralela, localmente lenticular y ondulosa,
con bioturbación variable entre moderada y baja (i.b.=2-3) con madrigueras horizontales
y verticales; en los sectores más arenosos se reconoce laminación convoluta y
estructuras en flama. Localmente presentan nódulos calcáreos (10 cm de diámetro) y
lentes de calizas tipo mudstone (figura 108 B).
Las arenitas hacia la base son de textura muy fina, mientras que en la parte media y
superior son finas marcando un granocrecimiento en los sets; la selección es moderada
y los granos subredondeados; se reconocen calcos de carga, algunos niveles presentan
laminación plana paralela, inclinada en cuña y estructuras de deformación sin-
sedimentaria como laminación convoluta. Composicionalmente varían entre
cuarzoarenitas y sublitoarenitas con cuarzo (95%), líticos ígneos verdes y negros (5%),
esporádicos feldespatos, cemento silíceo localmente calcáreo, el porcentaje de matriz es
muy bajo (3%) y presenta materia orgánica en láminas y hojuelas diseminadas.
En la parte superior del Segmento B comprendido entre los metros 510 m a 661 m,
ocurren intervalos continuos gruesos y muy gruesos de hasta 2,5 m, de intercalaciones
de lodolitas y arenitas finas a muy finas con laminación convoluta (figura 109 C),
estructuras en llama, microfallas, pseudonódulos, inyectitas y slumps de pequeña escala
(figura 109 D), que en conjunto corresponden a estructuras de deformación en
sedimentos suaves, como se observa en la figura 109 A y figura 109 B (soft sediment
deformation structures, p. ej. Agnon, Migowski y Marco, 2006; Rodríguez-Pascua, Calvo,
De Vicente y Gómez-Gras, 2000), estos niveles son continuos y restringidos a un solo
intervalo, con contactos netos hacia la base y el tope, donde las capas inferiores y
superiores no están deformadas y conservan la estratificación plana paralela.
Composicionalmente las lodolitas no varían con respecto a las del resto del segmento,
presentan micas diseminadas, foraminíferos (?) y restos de materia orgánica, mientras
que las arenitas son sublíticas, con cuarzo (90%), fragmentos ígneos verdes y negros
(9%), esporádicos feldespatos (1%), muscovita, acumulaciones en la parte media de la
capa, de fragmentos vegetales carbonizados en algunos niveles incluso con fragmentos
maderáceos milimétricos (figura 108 E) y glauconita diseminada, en ocasiones oxidada;
el cemento es en general silíceo, y algunos niveles es calcáreo.
Hacia la parte más superior del Segmento B (a partir de 682 m), la proporción de capas
de arenita disminuye gradualmente, la laminación es ondulosa a lenticular (figura 109 D)
y ocurren con mayor frecuencia, aunque en proporción baja, las capas delgadas y medias
tabulares a lenticulares compuestas, conformadas por calizas tipo mudstone. El contacto
superior se marca tras un cubierto, en donde inicia un predominio notable de lodolitas
de color gris oliva (5Y 4/1), macizas y monótonas (metro 779) correspondientes al
Segmento C, aunque litológicamente muy similares a las del Segmento A. El contacto con
el Segmento C se interpreta fallado por la relación estructural de los estratos, vista en
campo.
En la parte media del arroyo Banco se reconoce una sección de este segmento (figura
106) y otra más completa en el arroyo Pacheco (cuadrículas A11 y B12), el contacto
inferior es fallado con el Segmento B, y se infiere por los cambios litológicos y
estructurales que en el Segmento B son marcados por la secuencia heterolítica
desarrollada con dirección de buzamiento SE, mientras que en el Segmento C posee
dirección de buzamiento al NE. La sección medida tiene un espesor mínimo de 136 m en
el arroyo Banco (figura 106), mientras que en el Arroyo Pacheco afloran 288 m de sección
estratigráfica.
El Segmento C es lodoso (figura 110 A), litológicamente similar a las facies lodosas del
Segmento A; en el arroyo Banco inicia con lodolitas en capas muy gruesas color gris
verdoso (5GY 6/1), moderadamente bioturbadas con desarrollo de madrigueras
horizontales dentro de las que se reconoce Phycosiphon y relictos de laminación plana
paralela, presentan hasta el 10% de partículas diseminadas de cuarzo tamaño arena muy
fina; son frecuentes los lentes elongados interpuestos (70 x 8 cm) y las capas lenticulares
de calizas tipo mudstone.
En los primeros metros ocurre una capa tabular muy gruesa de calizas tipo mudstone,
mientras que las lodolitas presentan acumulaciones en altas proporciones de
foraminíferos en volumen y moldes. Hacia la parte inferior del Segmento C (1115 – 1163
m de la columna estratigráfica – Anexo 5), la concentración de partículas de textura
arena muy fina se incrementa y la unidad se hace heterolítica, con intercalaciones de
lodolitas en capas delgadas y medias, y cuarzoarenitas lodosas en capas muy delgadas,
aunque predominan siempre las lodolitas (85:15); estas arenitas disminuyen a medida
que se asciende estratigráficamente.
En el arroyo Pacheco (afluente del arroyo Banco), se encuentra una sección adicional del
Segmento C con un espesor de 288 m con buzamientos en sentido NW, en dirección
opuesta a los estratos descritos en el arroyo Banco (buzamiento SE). Como ya se enunció,
parece corresponder a un anticlinal fallado en el núcleo, lo que genera una fuerte
deformación hacia la base de este segmento en el arroyo Pacheco, impidiendo
determinar con mayor precisión el espesor real.
Los 268 m restantes del Segmento C en la sección estratigráfica del arroyo Pacheco
(Anexo 5), corresponden a capas tabulares a subtabulares muy gruesas (figura 110 D),
de lodolitas con laminación lenticular de arenitas con textura muy fina o fina a plana
paralela, localmente con moldes de foraminíferos y restos vegetales milimétricos baja a
moderadamente bioturbadas (i.b.= 2-3), con madrigueras como Phycosiphon (figura 110
C); localmente (metro 115 de la columna), la proporción de niveles arenosos aumenta y
se presenta laminación ondulosa (wavy). Hacia el sector intermedio (metro 167 a 183 de
la columna) la laminación es plana paralela y la bioturbación escasa (i.b.= 1), son
frecuentes los lentes interpuestos (50 x 15 cm), de calizas tipo mudstone, en ocasiones
3.1.2.3.5 Segmento D
Finalmente, el conjunto superior que aflora en la cabecera del arroyo Pacheco, posee un
espesor de 26 m (25 m en el arroyo Banco) compuesto por capas delgadas, tabulares de
lodolitas y calizas tipo mudstone silicificadas, color gris verdoso (5G 6/1) y gris azuloso
claro en muestra fresca (5B 7/1), frágiles, con evidencias de afectación tectónica como
intenso diaclasamiento, plegamiento (figura 111 C), venas de calcita de hasta 2 mm y
lentes deformados de calizas (mudstone). Este último segmento presenta laminación
plana paralela (figura 111 E), moldes de foraminíferos y radiolarios, con un nivel
interpuesto hacia la parte media de cuarzoarenitas de grano muy fino y laminación flaser
en capas medias que en conjunto suman 60 cm de espesor.
NOMBRE
IGM MUESTRA Norte Este NOMBRE COMPOSICIONAL
TEXTURAL
Biomicrita rala
(Folk) Biomicrita rala (Folk)
5064403 FGR-133-P 1652049 871709
Wackestone Wackestone (Dunham)
(Dunham)
Biomicrita fosilífera
(Folk) Biomicrita fosilífera (Folk)
5064420 FGR-153-P 1651467 873232
Mudstone Mudstone (Dunham)
(Dunham)
Biomicrita fosilífera
(Folk) Biomicrita fosilífera (Folk)
5064425 FGR-155-P 1651636 873636
Mudstone Mudstone (Dunham)
(Dunham)
Litoarenita feldespática de
Arenita de grano
5064775 FGR-164-A-P 1648649 874599 grano fino con cemento
fino
calcáreo pseudoesparitico.
5064774 FGR-164-B-P 1648649 874599 Arenita limosa Litoarenita feldespática
5064772 FGR-169-P 1652016 874145 Arenita limosa Litoarenita feldespática
5066981 FGR-181-P 1633513 872100 Arenita limosa Litoarenita feldespática
5064977 FGR-182-P 1633543 872478 Arenita Litoarenita
5064437 GDG-206-P 1652695 875491 Arcillolita Arcillolita
5064758 GDG-270-P 1645586 872246 Arenita Litoarenita
5064760 JJV-414-P 1651742 873790 Arenita Litoarenita feldespática
5064767 JJV-415-P 1651845 873971 Arenita Litoarenita
5064770 JJV-454-P 1645129 871700 Arenita arcillosa Litoarenita feldespática
5064905 NZG-146-P-A 1641918 871629 Arenita arcillosa Litoarenita feldespática
5064906 NZG-146-P-B 1641918 871629 Arenita Litoarenita feldespática
5064908 NZG-147-P 1641580 871342 Arenita limosa Litoarenita feldespática
5064904 NZG-149-P 1641454 870812 Arenita arcillosa Litoarenita
Fuente: autores
Para las muestras clasificadas como arenitas fue usado el triángulo de clasificación
composicional según Folk (1974) para 28 muestras (figura 112) y a continuación se
describen petrográficamente los 4 segmentos de la columna estratigráfica que describe
la Formación San Cayetano en el sector Luruaco.
Figura 112. AMP-241-P. Litoarenita. 4X. Barra = 500 µm. Izq. PPL, Der. XPL A y B.
Líticos volcánicos de diferentes composiciones y texturas: En la esquina inferior izquierda, fenocristales
de plagioclasas parcialmente sericitizados, embebidos en vidrio volcánico de color oscuro con amígdalas
rellenas de sílice y zeolita; Arriba en el centro, lítico holocristalino con textura perlítica completamente
serpentinizado. A la derecha, de color oscuro en luz plana, lítico porfirítico con fenocristales de
plagioclasa con textura pilotaxítica acompañados de piroxenos cloritizados. C y D. AMP-241-P.
Litoarenita. 4X. Barra = 500 µm. Izq. PPL, Der. XPL. Arriba a la derecha, esquisto muscovítico. En el
centro, cuarcita con bordes suturados y extinción fuertemente ondulante. E y F. NZG-149-P. Litoarenita.
20X. Barra = 100 µm. Izq. PPL, Der. XPL. En la esquina superior derecha, lítico metamórfico compuesto
por cristales de cuarzo y zoicita
Fuente: autores
Segmento A
Las litoarenitas feldespáticas de grano fino texturalmente se caracterizan por estar mal
seleccionadas, con clastos subangulares en contactos predominantemente
longitudinales. Composicionalmente tienen en promedio unos 13% de cuarzo
monocristalino, 16% de feldespatos (con predominio de plagioclasa sobre feldespato
potásico) y 36% de fragmentos líticos con composiciones similares a las litoarenitas ya
descritas. Como minerales accesorios se reconoce moscovita, (figura 114 E y figura 114
F). biotita clorita, esfena, epidota, zircón y anfíbol detrítico
3.1.2.4.1 Segmento B
Al igual que las litoarenitas del Segmento A, descritas anteriormente, el espacio poroso
está relleno de cemento tipo esparita en un mosaico granular de cristales de carbonato
de calcio con tamaños promedio de 80 µm, con la diferencia que a veces presenta
fábricas tipo equant (figura 115 C y figura 115 D), y otras isópacas. Además, se presentan
cristales subhedrales y euhedrales de hasta 15 µm de siderita, formada a partir de la
interacción entre el cemento calcáreo y fragmentos degradados de minerales que
contienen hierro (figura 115 A y figura 115 B).
Las litoarenitas feldespáticas de grano fino a muy fino, en algunos casos son lodosas y
texturalmente se caracterizan por un tener selección moderada a muy buena, con clastos
subangulares en contactos predominantemente tangenciales y longitudinales.
Particularmente, la muestra IGM 5064760 (JJV414P) presenta granodecrecimiento hacia
el tope (figura 117 A y figura 117 B); las demás son masivas, sin laminación o bioturbación
aparente. El espacio poroso está relleno de cemento tipo esparita en un mosaico
granular de cristales xenotópicos de carbonato de calcio con tamaños promedio de 50
μm, sin orientación preferente, en algunas secciones, poiquilotópico. Es común el
reemplazamiento parcial o total de feldespatos y fragmentos líticos por calcita,
conservando en algunos casos la textura original del clasto, o en el caso de las
plagioclasas, la macla polisintética (figura 117 C y figura 117 D).
Las muestras calcáreas del Segmento B se clasificaron como biomicritas ralas de textura
mudstone, con fósiles que muestran matriz calcárea muy fina (83%) mezclada con clastos
terrígenos con aproximadamente el 15%, correspondiente a cuarzo (6%), feldespatos
(3%), líticos metamórficos y volcánicos (3%), y micas detríticas (3%) (figura 119 A y figura
119 B). Los bioclastos (presumiblemente foraminíferos) están completamente
recristalizados por carbonato de calcio. En algunas muestras fue posible identificar
Figura 119. Microfotografías de las biomicritas sucias correspondientes a los niveles lodosos
del segmento B
A y B. IGM 5064425 FGR-155-P. Biomicrita sucia. 4x. Barra = 500μm. Izq.: PPL. Der.: XPL. Vista general de
la sección donde es posible observar icnofósiles rellenos de lodo calcáreo y una menor cantidad de
detritos terrígenos (Qz) que en la matriz circundante. C y D. ANM-234-P. Biomicrita sucia. 20x. Barra =
100μm. Izq.: PPL. Der.: XPL. Arriba en el centro, foraminífero bentónico trocospiral bien conservado. La
matriz mixta (Mtrx) de la roca está completamente bioturbada. Feldespatos (Pl) (algunos parcialmente
sericitizados), cuarzo (Qz), biotita (Bt) y moscovita (Ms) subangulares en contactos flotantes y
tangenciales
Fuente: autores
3.1.2.4.2 Segmento C
3.1.2.4.3 Segmento D
Los aloquímicos que las componen son foraminíferos (figura 121 A y figura 121 B)
planctónicos y bentónicos, trocoespirales (0.3%), planoespirales (0.3-0.6%),
unicamerales (0.6-3.3%) y uniseriales (0.6-2.6%), con tamaños desde 25 hasta 770 µm,
con un promedio de 170 µm. Fragmentos fosfáticos (0.6%), probablemente restos de
peces (figura 122 C y figura 122 D), con tamaños entre 35 y 980 µm, con un promedio de
150 µm; radiolarios (4.3-7.0%) con estructuras internas y externas mal preservadas,
formas esféricas y discoidales, a veces con la conchilla reemplazada en sílice y radiolarios
espumelaridos y menos frecuentemente naseláridos (figura 121 C y figura 121 D).
A su vez, las muestras tienen pequeños porcentajes de terrígenos tamaño limo donde se
pudo identificar cuarzo, moscovita y plagioclasa (figura 122 A y figura 122 B). Bajos
porcentajes de fitodetritos y pirita autigénica con habito framboidal. La alta
disponibilidad de sílice permite la precipitación de calcedonia en el espacio móldico de
las cámaras de los foraminíferos.
Ya que la proporción de fósiles silíceos no es tan alta (figura 122 E y figura 122 F), la
principal fuente para la silicificación de carbonatos es la meteorización química
continental (Laschet, 1984), de modo que se sugiere que la depositación ocurrió cerca
de una fuente fluvial que aportaba sílice disuelta.
Cerca al contacto entre las formaciones Tubará y San Cayetano, al costado oriental, se
clasifica la lidita del Segmento D como una arcillolita rica en radiolarios con laminación
plana paralela y con diferentes grados de bioturbación y dos eventos de fracturamiento
(figura 123 E y figura 123 F), el primero relleno de carbonato de calcio microcristalino
con varios episodios de crecimiento (figura 123 A y figura 123 B), algunos drusiformes. El
segundo relleno de cristales de siderita que permean la fábrica arcillosa (figura 123 C y
figura 123 D). En cuanto a los bioclastos, se identificaron radiolarios bien preservados,
espumelaridos (4-5%) y radiolarios discoidales (1%), junto con escasos foraminíferos
planctónicos biseriales y planoespirales. Además, se observan agregados irregulares de
glauconita (figura 122).
Figura 123. Microfotografías de las arcillolitas del segmento D cercano al contacto con la Fm.
Tubará
A y B. IGM 5064764 (ACM-0322-P). Arcillolita fosilífera. 4X. Barra = 500μm. Izq.: PPL. Der.: XPL. Es
evidente el proceso de reemplazamiento de la matriz lodosa y los fósiles de radiolarios (RA), por
carbonato de calcio a través de las fracturas (fracturas con Cal). C y D. IGM 5064764 (ACM-0322-P).
Arcillolita fosilífera. 20X. Barra = 100μm. Izq.: PPL. Der.: XPL. En el centro, radiolario espumelarido (RA)
con la capsula central aún preservada, parcialmente reemplazado por carbonato de calcio. A la izquierda,
dos radiolarios completamente reemplazados en carbonato; el radiolario de la esquina superior derecha
aún conserva su composición silícea original. Cristales euhedrales y subhedrales zonados de siderita (Sd).
E y F. IGM 5064437 (GDG-0206-P). Arcillolita fosilífera. 4x. Barra = 500μm. Izq.: PPL. Der.: XPL. Arcillolita
rica en radiolarios (RA), laminación plana paralela, fracturadas (Frac)
Fuente: autores
Localización de las
FORAMINÍFEROS
muestras
Muestra Edad Planctónico Bentónico Columna Cartográficas
Globocassidulina subglobosa Haplophragmoides X
porrectus,
VCB269 Paleoceno - Eoceno.
Amosphaerordina
pseudopauciloculata.
Cretácico – Mioceno Rhabdammina cf. R. X
VCB283
inferior. cylindrica.
FGR226 X
ANM273
Campaniano – Ammosphaeroidina
FGR217
Eoceno (?) pseudopauciloculata
FGR219
FGR221
Spiroplectammina X
Cretácico superior spectabilis, Annectina
VCB271 (Campaniano) al grzbowskii,
Eoceno tardío. Ammosphaeroidina
pseudopauciloculata
Cretácico tardío – Spiroplectammina X
DSC063
Eoceno tardío spectabilis
Fuente: autores
Los resultados obtenidos (tabla 10) al hacer el análisis de nanofósiles calcáreos, indican
que solo 9 de las 54 muestras analizadas mostraron una edad, mientras que 45 fueron
estériles.
Tabla 10. Resultados de nanofósiles calcáreos – Formación San Cayetano, sector Luruaco
NANOFÓSILES CALCÁREOS Localización de las muestras
Muestra Edad Asociación Columna Cartográficas
Rhomboaster spp + Rhomboaster cf. cuspis Seg. A
VCB278 Paleoceno - Eoceno + Ellipsolithus spp.
FGR223 Ypresiano Toweius callosus + Tribrachiatus orthostylus Seg. B
Helicosphaera seminulum + Sphenolithus cf. Seg. D
ANM263 Ypresiano - Bartoniano radians
Sphenolithus radians + Helicosphaera Seg. D
VCB272 Ypresiano - Bartoniano seminulum + Discoaster barbadiensis
Sphenolithus radians + Helicosphaera Seg. D
seminulum + Chiasmolithus spp. +
Reticulofenestra dictyoda +
ANM262 Ypresiano- Bartoniano Campylosphaera dela
Sphenolithus radians + Helicosphaera X
ANM261 Ypresiano - Bartoniano seminulum + Discoaster cf. saipanensis
Toweius gammation + Neococcolithes X
dubius + Sphenolithus radians +
Helicosphaera seminulum +
Campylosphaera dela + Pontosphaera
FGR146 Ypresiano-Lutetiano obliquipons
Tribrachiatus orthostylus + Discoaster X
VCB234 Ypresiano lodoensis + Sphenolithus radians
Sphenolithus radians + Helicosphaera X
seminulum + Discoaster cf. barbadiensis +
GDG220 Ypresiano Discoaster cf. diastypus
Fuente: autores
Al relacionar las edades interpretadas por los diferentes métodos se concluye que para
palinología se tiene una mayor dispersión en los datos, esto debido a los amplios rangos
bioestratigráficos que representan, sin embargo, los datos son concordantes con lo que
se ha reportado para la Formación San Cayetano (Guzmán, 2007; Reyes et al., 2001a), ya
que se encontraron palinomorfos retrabajados del Cretácico y el rango en general se
establece desde el Paleoceno con Bombacacidites annae (figura 124) hasta,
aproximadamente el Oligoceno temprano (figura 125).
Los foraminíferos, por su parte, presentan especímenes que tienen rangos amplios desde
el Cretácico (marcado por foraminíferos bentónicos) hasta el reciente, que, al
compararlo con el resto de dataciones resultantes, comparten el intervalo de tiempo
comprendido entre el Paleoceno (figura 126) y el Eoceno, con mayor recurrencia de
especímenes del Eoceno medio. A pesar que los foraminíferos hallados en las muestras
analizadas, en su mayoría son bentónicos y poseen rangos estratigráficos amplios,
existen dos muestras asociadas a la columna estratigráfica del arroyo Banco (tabla 8), la
DSC062 ubicada en el segmento C y la VCB272 perteneciente al segmento D, cuyas
asociaciones de foraminíferos planctónicos a marcan rangos estratigráficos específicos,
la primera del Paleoceno al Oligoceno temprano (Rupeliano) correspondiente al género
Acarinina sp. y la segunda del Eoceno temprano (Ypresiano) al Eoceno medio (Lutetiano)
marcada por Acarinina cf. A. pentacamerata, Acarinina esnaensis; Dentoglobigerina
galavisi, Pseudoglobigerinella bolivariana; Acarinina sp. , como se observa en la (figura
127).
A partir de los datos suministrados por las diferentes técnicas se determina que la
Formación San Cayetano – sector Luruaco es de edad Paleoceno tardío- Eoceno medio
(Bartoniano). A pesar, que se identificaron especímenes cuyo biocrón varía desde el
inicio del Paleoceno hasta el Oligoceno temprano (Acarinina sp.) en el Segmento C, no
se identifican formas específicas del Paleoceno temprano a medio, ni del Eoceno tardío;
mientras que la edad más reciente, Eoceno medio, se ve sustentada por la presencia de
formas típicas de foraminíferos planctónicos y nanofósiles calcáreos que no van más allá
del Bartoniano, presentes en el Segmento D de la columna estratigráfica.
La Formación Maco fue descrita por primera vez en 1941 por Mc Naughton y en 1942
por Butler, en un informe interno de la Texas Petroleum Company, como una secuencia
de conglomerados y areniscas con espesores de 220 a 400 m expuesta en el Cerro Maco
y Cordillera Pinturas; Mc Naughton en Butler (1942) menciona que la Formación Maco
podría presentar “hasta 1000 metros de espesor en Cerro Pintura”.
Duque Caro et al., (1996) realiza el mapa geológico de la plancha 38 a escala 1:100.000
con su memoria explicativa, describiendo la Formación Maco mediante columnas
estratigráficas mencionando como sitios de referencia las localidades Arroyo del medio,
Cacaos-camino Serranía de Pinturas y Salvador–Media Luna, litológicamente
constituidos por sucesiones iterativas y cíclicas de capas gruesas tabulares y lenticulares
de conglomerados de litoarenitas, litoarenitas arcósicas y sublitoarenitas.
propuesto por Van der Harts (1960, en Alemán, 1983), describe una secuencia de 800 m
de espesor, compuesta por conglomerados masivos, areniscas conglomeráticas y
ocasionales intercalaciones de areniscas y shales. Por su parte Barrera et al. (2001) en la
memoria de la plancha 31, Campo de la Cruz, describen la Formación Maco de manera
general a partir de dos secciones estratigráficas, proponen ambientes de depositación
turbidíticos de características proximales en la base y medias distales en el tope y le
asignan la edad de Eoceno medio, basándose en la edad propuesta por Duque et al.
(1996). Clavijo y Barrera (2001) describen la Formación Maco, en la memoria 44 – 52
Sincelejo Sahagún a partir de la sección Arroyo Palenquillo donde reportan
conglomerados clasto soportados de tamaño grava a guijo. A la Formación Maco le
asignan una edad de Eoceno medio por comparación con datos bioestratigráficos de
Duque et al. (1996). El ambiente de depositación está relacionado con turbiditas, en un
abanico submarino. Por último, Reyes, et al. (2001) en la memoria de las planchas 23, 29
y 30 en los municipios de Cartagena y Arjona, describen la Formación Maco en la Cantera
Limón como una secuencia arenosa de grano medio, grueso, ligeramente
conglomerática, mal seleccionada con dos niveles de conglomerados polimícticos en la
parte media de la sección. Hacia el tope se encuentra una alternancia de areniscas
ligeramente conglomeráticas con lodolitas. Los autores le asignan una edad de Eoceno
medio por asociación con lo reportado por Duque et al. (1996) y proponen un ambiente
de depósito asociado a un abanico submarino con facies proximales y medias.
La Formación Maco se encuentra aflorando al suroriente del área de estudio como una
franja alargada e irregular de longitud aproximada 29.5 Km, un ancho promedio de 2.36
km en extensión superficial y un área de 48,65 Km2 (figura 130).
La Formación Maco aflora únicamente en el mapa geológico del sector sur con una
dirección noreste – suroeste, entre las cuadrículas O18 a la A25; la expresión superficial
de la formación presenta una dirección N10°-15°S desde las cuadrículas O18 hasta L19 y
una dirección N20°-30°E desde la cuadrícula L19 hasta A25.
Su expresión geomorfológica en las lomas El Llanto y Salto del Mico es de un relieve alto
a muy alto (figura 131 y figura 131 C), con lomeríos y laderas convexas de pendientes
inclinadas a muy inclinadas y crestas redondeadas (figura 131 B) y hacia el municipio de
Arroyo Hondo en inmediaciones al Canal de Dique se presenta en colinas bajas y
peniplanicies. La altura promedio del relieve para la unidad varía 180-220 msnm, con
altura máxima de 370 msnm y mínima de 50 msnm (figura 131 A).
En este sector se levantó una columna estratigráfica sobre el flanco occidental del
anticlinal Arroyo Hondo (H20) con un espesor de 265 m en total, de los cuales 163 m
corresponden a la Formación Maco (figura 132) y los restantes 102 m corresponden a la
Formación San Cayetano. En esta sección se reconocen tres segmentos: A) la parte basal
de la sección con un espesor de aproximadamente 102 m corresponden al probable tope
de la Formación San Cayetano (Paleoceno tardío-Eoceno temprano) compuesta por
lodolitas físiles con lentes calcáreos, B) La parte intermedia de la sección corresponde a
la Formación Maco donde se identifican sucesiones conglomeráticas y heterolíticas de
areniscas de grano fino y lodolitas con grano decrecimiento y estrato decrecimiento y C)
El tope de la sección compuesto por facies detríticas arenosas localmente
conglomeráticas.
3.1.3.3.1.1 Segmento A
Figura 133. Afloramiento constituido por lodolitas y lentes calcáreos, tope de la Formación San
Cayetano?
Estación de Campo ACM-373 N: 1610548 E: 889378. A) Segmento compuesto principalmente por
lodolitas con lentes calcáreos. B) Fragmento de lente calcáreo, caliza mudstone (Dunham, 1962) C)
Lodolitas con fractura en bloques
Fuente: autores
El contacto entre las formaciones San Cayetano y Maco, es discordante con una
paraconformidad a la base del nivel conglomerático conforme a lo indicado por Barrera
et al, (2001).
3.1.3.3.1.2 Segmento B
Los niveles conglomeráticos basales son suprayacidos por una sucesión rítmica,
compuesta por areniscas de textura fina a media intercaladas con lodolitas dispuestas
en capas delgadas a gruesas (figura 135 A) tabulares a ligeramente onduladas, macizas o
laminadas, con contactos netos planos paralelos ligeramente ondulados.
Las areniscas de la sucesión rítmica son muy fina a finas con buena selección, presentan
cemento silíceo y ocasionalmente calcáreo, matriz lodosa (2%-10%),composicionalmen
te varían entre sublitoarenita y litoarenita con cuarzo (97-79%), feldespatos (<1%), líticos
sedimentarios (14-2%), ígneos (10-1%); el color de las areniscas es naranja amarillento
oscuro (10 YR 6/6), esporádicamente se encuentran intraclastos < 30 cm de areniscas
muy finas, mientras que las lodolitas (figura 135 B y C) son de color gris amarillento (5 Y
7/2). Al tope del segmento, es frecuente la presencia de estructuras sedimentarias como
laminación ondulada paralela, localmente plana paralela (figura 136 A) y plana no
paralela; además de laminación inclinada tangencial a la base e inclinada plana,
esporádicamente calcos de cargas. Es común reconocer fitodetritos (restos de hojas)
3.1.3.3.1.3 Segmento C
Las areniscas son de textura muy fina, con selección buena y cemento silíceo,
composicionalmente corresponde a sublitoarenita con cuarzo (94%), feldespatos (1%) y
líticos (5%), localmente presentan láminas con restos vegetales o fitodetritos, la roca
presenta color naranja amarillento oscuro (10YR6/6); por otra parte, las areniscas de
textura fina a gruesa presentan mala selección, cemento silíceo y matriz lodosa hasta un
8%. Composicionalmente corresponde a sublitoarenitas, la cuales presentan cuarzo
(87%), feldespatos (1%) y líticos (12%), localmente se observa laminación plana paralela,
en algunas capas se encuentran intraclastos lodosos formando lechos o láminas dentro
de las areniscas; la roca en general es de color naranja amarillento oscuro (10YR6/6) y
localmente naranja muy pálido (10YR8/2).
Hacia la base del segmento en una cantera abandonada (figura 138) y con un espesor de
6 m, se observa una sucesión iterativa de capas medias a muy gruesas de conglomerados
tabulares localmente lenticulares, en contacto neto, en este sector se observa estrato
decrecimiento mientras que en las capas de areniscas son lenticulares y tabulares con
estrato crecimiento. De base a techo la sucesión se presenta intercalada entre
conglomerados y areniscas; conglomerados clasto y matriz soportados con clastos 10-50
cm redondeados a subelongados, embebidos en una matriz arenosa de grano medio
subangular y cemento silíceo; los clastos son de líticos volcánicos y sedimentarios
(areniscas, calizas y chert). Las capas de arenisca conglomerática son de grano grueso
hasta canto de 10 cm, clastos subredondeados, y cemento silíceo, composicionalmente
consta de cuarzo 65%, líticos 30%, feldespatos 5% y óxidos de hierro <1%. Los intervalos
arenosos y conglomeráticos son suprayacidos por capas tabulares gruesas de
conglomerados clasto y matriz soportados con bloques y cantos de hasta 1 m de
diámetro subredondeados a redondeados, subesféricos mal seleccionados, con matriz
arenosa de grano medio a ligeramente conglomerática, los granos de la matriz son
subangulares a redondeados, composicionalmente constituidos por líticos ígneos
volcánicos (basaltos andesitas) y plutónicos; sedimentarios calcáreos, siliciclásticos y
chert y cuarzo hialino, cemento calcáreo.
Hacia el tope del segmento en este sector con 12 m de espesor (cantera Catinco, figura
139), se presenta de manera general una alternancia de capas medias de lodolitas
arenosas de color gris verdoso (5GY6/1), suprayacidas por niveles potentes de
conglomerados arenosos, matriz soportados intercalados por conglomerados clasto
soportados y capas tabulares de areniscas de textura gruesa a fina. Localmente capas
lenticulares de areniscas con contactos netos (figura 139 A).
Las areniscas son de textura fina a media están bien seleccionadas y presentan granos
subangulares a subredondeados, matriz arcillosa y cemento silíceo; composicionalmente
son sublitoarenitas con cuarzo 75%, feldespato 15% y líticos 10%. Las areniscas son de
color marrón oliva claro (5Y5/6).
Los conglomerados polimícticos matriz soportados (figura 139 B) están compuesto por
clastos desde gránulos hasta guijos de 10 cm, principalmente de líticos sedimentarios
(areniscas y chert) 23%, calcáreos 3%, ígneos volcánicos (andesitas) 2%, ígneos
plutónicos 5%, con matriz de textura arena gruesa a conglomerática mal seleccionada
con granos subredondeados a subangulares y subesféricos, composicionalmente rica en
cuarzo con líticos similares al armazón.
El arroyo El Salado (D23) se localiza sobre el flanco oriental del anticlinal Arroyo Hondo
y se describe de base a tope con un espesor acumulado de 6 m, distribuidos en
afloramientos aislados, considerando las características similares a las encontradas en el
sector El Hobo, hacia la base se encuentran capas gruesas a medias de conglomerados
clasto soportado seguido por conjuntos de capas delgadas intercaladas de areniscas y
lodolitas, al tope predominio de capas delgadas a muy delgadas de areniscas lodosas,
lodolitas y limolitas.
e hialino (3%), los clastos no presentan gradación. La fracción fina o matriz del
conglomerado contiene cuarzo (84%), fragmentos líticos de chert? color negro (8%),
basaltos? de color verde (4%) y chert? de color marrón (4%), clasificadas como
sublitoarenitas y su cemento es calcáreo.
El sector arroyo Japón se encuentra al sur en la región Cieneguita (N18), hacia la base del
segmento con un espesor de 10 m distribuidos en afloramientos aislados, se reconocen
capas delgadas tabulares de areniscas interestratificadas con capas tabulares y
lenticulares de lodolitas y areniscas lodosas. Hacia el tope, se presentan capas gruesas
tabulares de conglomerado intercaladas con capas medias a delgadas de areniscas
conglomeráticas con gradación normal y capas delgadas a medias de areniscas con
cemento calcáreo.
Hacia el tope se encuentra una sucesión conformada por capas gruesas a muy gruesas
de conglomerado y areniscas con contactos netos y gradacionales con gradación normal.
Los conglomerados polimícticos son matriz y clasto soportados, con un armazón
conformado por clastos tamaño gránulos hasta guijos gruesos (11 cm) subangulares a
subredondeados, composicionalmente el armazón contiene líticos volcánicos,
plutónicos, sedimentarios, embebidos en una matriz arenosa de textura arena muy
gruesa a media, compuesta por cuarzo 88%, líticos 11% feldespato 1%, color gris oliva
claro (5Y 5/2). Las areniscas y areniscas ligeramente conglomeráticas son mal
seleccionadas de textura media a gránulos, granos subredondeados a subangulares,
subesféricos, cemento silíceo y localmente calcáreo, composicionalmente sublitoarenita
con cuarzo 88%, líticos 10%, y feldespatos 2%, color marrón amarillento moderado
(10YR5/4). Al tope de las capas se observa gradación normal con mejor selección de las
partículas en la parte más finas de cada capa. En este sector se presentan láminas de
materia orgánica que generan laminación plana paralela (figura 142), adicionalmente se
reconoce estrato crecimiento en la sucesión.
Tabla 11. Listado de muestras analizadas con conteo de puntos y resultados de la Formación
Maco
Norte Este Clasificación
Muestra IGM Clasificación textural
composicional
161066 88928
GDG304P 5067115 Litoarenita Arenisca de grano fino a medio
4 1
161067 88927 Litoarenita
GDG305P 5067610 Arenisca de grano fino
3 8
161071 88925 Litoarenita
GDG318P 5067619 Arenisca de grano fino a medio
1 8
161071 88925 Litoarenita
GDG321P 5067621 Arenisca de grano fino a medio
9 6
161064 88928 Litoarenita
GDG356P 5067641 Arenisca fina a gruesa
9 8
161684 89338
JAO193P 5064675 Arcosa lítica Arenita de grano muy fino a fino
4 7
160511 88737 Arenisca de grano muy fino a
NZG003PA 5064262 Litoarenita feldespática
4 1 fino
160151 88597 Litoarenita
NZG026PA 5054260 Arenisca de grano fino a grueso
1 1
160171 88559 Litoarenita
NZG027PA 5064222 Arenisca de grano fino a medio
9 4
161245 89128 Litoarenita
NZG097P 5064698 Arenisca de grano fino a medio
3 6
161318 89047 Litoarenita
NZG104PA 5064695 Arenisca de grano fino a medio
0 1
161318 89047
NZG104BP 5064710 Arcosa lítica Arenisca de grano fino a medio
0 1
161313 89049 Litoarenita Arenisca de grano fino a muy
NZG105P 5064697
0 1 grueso
161305 89057 Litoarenita Arenisca de grano fino a muy
NZG106P 5064707
0 3 grueso
161707 89278 Litoarenita Arenisca de grano fino a muy
NZG129P 5064709
9 6 grueso
161665 89365 Litoarenita Arenisca de grano medio a
NZG135P 5064702
1 9 gránulo
161659 89383 Litoarenita
NZG136PB 5064700 Arenisca conglomerática
6 6
161510 89259 Litoarenita
PAR1823P 5064663 Arenisca conglomerática
7 7
161183 89084
VCB163P 5064720 Litoarenita feldespática Arenisca de grano fino a grueso
6 7
Fuente: autores
Dado que la mayor parte de las muestras analizadas corresponden a rocas detríticas, se
describen en orden de abundancia.
Rocas detríticas: Las litoarenitas (tabla 11) corresponden con areniscas que varían
texturalmente desde areniscas de grano muy fino hasta areniscas conglomeráticas con
granos y clastos de formas subangulares a subredondeadas y subelongados, las muestras
presentan una selección mala a moderada, y una madurez textural correspondiente con
areniscas submaduras, con una matriz arcillosa del 5-8%, cemento silíceo y algunas
muestras contienen cemento calcáreo, los contactos entre partículas son longitudinales
hasta puntuales. los constituyentes más abundantes son los líticos (figura 144) que van
desde 48-89% de los cuales se reconocen cinco tipos de líticos volcánicos entre ellos
basaltos vesiculares (figura 144 C y D), basaltos con textura traquítica (figura 144 E y F),
andesitas, líticos volcánicos parcialmente alterados y líticos totalmente cubiertos por
minerales de alteración (figura 144 A y B); así mismo, se reconocen tres tipos de líticos
sedimentarios como chert (figura 144 A y B), limolitas (figura 144 C y D )y areniscas; en
el caso de los líticos metamórficos se reportan cinco tipos, metalimolitas, esquistos
micáceos, esquistos grafitosos, cuarcitas (figura 144 E y F) y filitas; también se reconocen
dos tipos de líticos plutónicos, líticos de composición cuarzo feldespáticos y líticos con
texturas simplectíticas (texturas mirmequíticas y pertíticas (figura 144 E y figura 144 F);
en menor proporción se encuentra el cuarzo con un porcentaje entre 16-38%, mientras
los feldespatos son del 5-17 %; como minerales accesorios se reconocen: biotita,
moscovita, epidota (zoisita, epidota y clinozoisita), circón, augita titanífera,
glauconita, granate y calcedonia (lítico), en algunas muestras se encontraron
esporádicos fragmentos de bivalvos (figura 145 C y D), foraminíferos (figura 145 A y B) y
equinodermos.
Las litoarenitas feldespáticas (ver tabla 11 identificadas con IGM 5064262, 5064720, en
5064218) varían texturalmente desde grano muy fino a grueso de formas subangulares
a subredondeados con selección mala a moderada, presentan una madurez textural
moderada y cemento calcáreo, el contacto entre partículas es longitudinal a flotante.
Composicionalmente contiene fragmentos líticos entre el 26-50%, cuarzo del 28-58% y
feldespato del 15-21%, los clastos distinguidos son de composición similar a los
reportados en las litoarenitas.
Las arcosas líticas estudiadas (en tabla 11 con IGM 5064675, 5064710) son areniscas que
varían texturalmente de grano muy fino a grueso con formas subangulares, presentan
una selección moderada a mala, en cuanto a la madurez textural corresponden con
areniscas submaduras de matriz arcillosa, cemento silíceo y los contactos entre
partículas son longitudinales, en menor proporción los contactos tangenciales,
composicionalmente presenta feldespatos con un porcentaje que oscila entre 8-50%, el
cuarzo de 18-23%, y los líticos de 27-74%. Los clastos y granos reconocidos son de
composición similar a los reportados en las litoarenitas.
Las sublitoarenitas analizadas (tabla 12, IGM 5064113, 5067452, 5064071, 5064224,
5064258) corresponden texturalmente a areniscas que varían entre limo y arena fina con
formas subangulares a subredondeados, presenta una selección buena a moderada, la
madurez textural de las muestras es moderada a buena, la matriz es arcillosa y presenta
ocasionalmente cemento silíceo, el contacto entre partículas es longitudinal a flotante,
composicionalmente con un porcentaje importante se reconocen cuarzo <80%,
feldespatos con un 1-2% y líticos > 20%. Los clastos distinguidos son de composiciones
similares a los reportados en las litoarenitas, adicionalmente se reconoce
reemplazamiento del cemento por carbonatos (figura 146 A).
Las rocas calcáreas presentes en algunas muestras (tabla 12), consisten en micritas y
microesparitas (Folk, 1962), compuestas por micrita con esporádicos moldes
recristalizados de foraminíferos uniseriales, mientras, la microesparita presenta entre
sus componentes partículas tamaño limo de cuarzo, plagioclasa, chert, clorita
(secundaria) y óxidos de hierro, así mismo, se reconocen cambios texturales por
bioperturbación.
En la tabla 13 se muestran los resultados de los análisis realizados para las técnicas de
foraminíferos, palinología y nanofósiles calcáreos junto con las edades obtenidas a partir
de estas.
Tabla 13. Análisis bioestratigráficos según las diferentes técnicas y sus resultados obtenidos Los
intervalos sin información (---) indican que la muestra no fue analizada bajo la técnica
respectiva
Especímenes diagnósticos por edad Edad
Muestra Nanofósiles Nanofósiles
Foraminíferos Palinología Foraminíferos Palinología
calcáreos calcáreos
AMP124 No diagnóstica --- Estéril --- --- ---
HAP099 --- --- Estéril --- --- ---
AMP128-Fo-B No diagnóstica --- Estéril --- --- ---
Oligoceno temprano
AMP128-Pa-C --- Rhoipites planipolaris --- --- ---
a Mioceno medio
ACM373C Estéril Estéril --- --- --- ---
ACM373B Estéril No diagnóstica --- --- --- ---
ACM373 --- No diagnóstica --- --- --- ---
AMP028 --- No diagnóstica --- --- --- ---
AMP030 No diagnóstica --- --- --- --- ---
AMP033 No diagnóstica --- --- --- --- ---
AMP064 No diagnóstica --- --- --- --- ---
AMP106 --- No diagnóstica --- --- --- ---
AMP107 --- No diagnóstica --- --- --- ---
AMP114 No diagnóstica No diagnóstica --- --- --- ---
Perisyncolporites
pokornyi, Eoceno medio a
AMP209 Estéril --- ---
Spirosyncolpites Mioceno medio
spiralis
DSC004 Estéril No diagnóstica --- --- --- ---
Eoceno temprano a
DSC025 --- Bombacacidites brevis --- --- ---
Mioceno medio
GDG332 Estéril --- --- --- --- ---
GDG338 Estéril --- --- --- --- ---
GDG357 Estéril --- --- --- --- ---
Echitriporites
trianguliformis var.
HAP296 Estéril orbicularis; --- --- Eoceno ---
Spinizonocolpites
echinatus
Otros análisis bioestratigráficos han sido realizados por otros autores y se referencian a
continuación: Duque-Caro (1968) y Duque-Caro et al. (1996) proponen una edad Eoceno
medio, determinada a partir de la asociación de foraminíferos planctónicos Globorotalia
broedemanni - Clavigerinella akersi - Globorotalia bullbrooki, para litologías finas
cercanas al contacto inferior con la Formación San Cayetano. Posteriormente, Guzmán
et al. (2004) mencionan una edad para la Formación Maco restringida a las zonas
planctónicas P10 a P14 que hace equivalentes a la zona bentónica Bulimina jacksonensis.
Siguiendo la bioestratigrafía propuesta por Wade et al., 2011, la edad para la asociación
faunística hallada por Duque–Caro (1968), Duque-Caro et al. (1996) y actualizada por
Guzmán et al. (2004), Correspondería al intervalo de tiempo Eoceno temprano? - Eoceno
medio.
En síntesis, la edad obtenida en este trabajo a partir de las muestras con recuperación
de palinomorfos, presenta un amplio rango cronológico que abarca desde Paleoceno al
Mioceno medio. Teniendo en cuenta que diversos autores han reportado edades más
restringidas a partir de foraminíferos planctónicos y bentónicos, se concluye que la edad
para la Formación Maco es Eoceno temprano? – Eoceno medio, adicionalmente por la
relación suprayacente con la Formación Chengue en la región no sería más joven que el
Eoceno medio.
La Formación Maco presenta un espesor que varía entre 163 m hasta 450 m
aproximadamente, calculados con base en la sección estratigráfica El Hobo, sector Loma
El Llanto, donde se registró un espesor de 163 m; Por medio de cortes estructurales
(Corte geológico C – C´) se determinó un espesor promedio de 450 m.
Otros autores han reportado diferentes espesores para unidad, Mc Naughton (1941)
menciona que la unidad constituida principalmente por conglomerados cerca del Cerro
Maco podría presentar hasta 1000 m de espesor, por su parte, Butler (1942) describe la
formación con un espesor de 220-400 m al sur del arroyo del Medio, sección constituida
principalmente de conglomerados. Posteriormente, Duque et al, (1996) determinan
espesores desde 210 m hasta 850 m en las localidades Arroyo del Medio y Serranías
Pinturas respectivamente. Barrera et al. (2001) menciona 258 m de espesor medidos en
la sección San Cayetano-Carreto. Guzmán et al. (2004), determinan el espesor promedio
de 219 m para la Formación Maco. Guzmán (2007) señala una variación en el espesor
entre 900 m a 200 m dependiendo del sector estudiado.
La facies heterolítica está conformada por una sucesión rítmica compuesta por areniscas
finas interestratificadas con limolitas y lodolitas en proporción 40:60 con predominio de
arenas, dispuestas principalmente en capas tabulares con estructuras planas paralelas y
en menor frecuencia láminas onduladas paralelas, inclinadas tangenciales y esporádicos
fitodetritos milimétricos. La sedimentación de esta sucesión estaría influenciada por
corrientes de tracción y decantación del material en suspensión, producida por
corrientes de baja energía posiblemente enmarcadas en un ambiente de sedimentación
en la zona intermedia de un frente deltaico. (Dalrymple, 2007).
Figura 148. Columna sector El Hobo, ciclos de grano decrecimiento del segmento B (en rojo)
Fuente: autores
Hacía la parte sur, la unidad se caracteriza por presentar geoformas de relieves colinados
de cimas planas y laderas redondeadas, acompañada por una morfología más alta,
asociada a los cerros Arenita y La Gueca y hacía el norte muestra geoformas más bajas
conformadas por leves ondulaciones del terreno (figura 150), con alturas máximas entre
100 m y 200 m, asociadas a las cuchillas Agua Viva (Zona sur M11 y M12), La Gueca (Zona
sur M11 y M12) y Arenita (Zona sur M12 y N12).
La Formación Palenque no cuenta con una sección estratigráfica levantada, por lo que la
caracterización se realiza con base en transectas cartográficas que cortan la unidad de
base a techo con dirección NW-SE. Las diferentes texturas, estructuras y características
composicionales identificadas, permiten dividir la unidad en dos sectores (figura 151), el
sector noroeste comprendido del Sinclinal de Palenque (Zona sur J12) hasta cercanías
del corregimiento de Palenque (Zona sur J13), y el sector sureste, desde el arroyo hondo
en el caserío la Bonga (Zona sur L13) hasta el flanco oeste del Cerro Toro (Zona sur K15).
Aflora en el flanco oeste del Sinclinal de Palenque (Zona sur J12) hasta los alrededores
del corregimiento de Palenque (Zona sur J13). Con base en las transectas de campo se
dividió, el sector en tres segmentos: inferior, medio y superior.
lodolitas con laminación interna marcada por óxidos, que se observan alineados (Rip
up?) (figura 153 B). Entre las areniscas conglomeráticas es posible encontrar
intercalaciones de lodolitas grises de color gris amarillento (5Y 7/2) con areniscas de
grano grueso en contacto neto. Hacia el tope del segmento, se reconocen capas delgadas
con contactos difusos de areniscas de grano fino a grueso de colores naranjas
amarillentos oscuros (10YR 6/6), con formas subangulares, intercaladas con capas
delgadas de limolitas y lodolitas. Similares texturas son observables en alrededores del
municipio de Mahates (Zona sur A16, A17).
Figura 154. Base de la capa arenisca de grano medio con cemento calcáreo
y presencia de madrigueras horizontales (Thalassinoides?) en amarillo, así como evidencia de alto
fracturamiento por la presencia de diaclasas. (N:1605601N, E: 875201)
Fuente: a
3.1.4.3.2 Sector Noroeste
Aflora por el arroyo Hondo en cercanías al caserío La Bonga (Zona sur L13) hasta el arroyo
Criollo en el flanco oeste del Cerro Toro (Zona sur K15). La descripción del sector sureste
se hace con base en las estaciones y transectas de campo.
La parte más basal del sector sureste se observa por el arroyo Hondo, caserío La Bonga
(Zona sur L13) y por la cuchilla Arenita en dirección al caserío La Bonga (L14). La sucesión
corresponde a capas delgadas a gruesas (6-36 cm) con formas tabulares de areniscas de
grano fino, subangulares, con laminación plano paralela, materia orgánica y turboglifos
a la base de las capas; esta litología se intercala con capas delgadas (6-8 cm) de lodolitas
arenosas (figura 155).
Hacia el tope de la sucesión, en los alrededores del Arroyo Criollo (Zona sur K15, L15), se
observan capas delgadas (2-10cm) con formas tabulares de areniscas de grano fino a
grueso de color gris azuloso claro (5B 7/1) con cemento calcáreo; las areniscas se
Los conglomerados líticos, se encuentran asociados a las fracciones más gruesas dentro
de la Formación Palenque, corresponden a un conglomerado arenoso con partículas
subredondeadas a redondeadas, subesféricas a esféricas con muy mala selección.
Texturalmente están compuesto por arena (62%), gravas (30%) y lodo (8%), con granos
de cuarzo (30%), feldespato (13%), micas (biotita y moscovita), terrígenos (anfíboles,
epidota, turmalina) y minerales opacos, además de líticos metamórficos (cuarzo
policristalino), volcánicos, plutónicos y sedimentarios (chert) y cemento ferruginoso
(figura 157).
Figura 157. Muestra JJV363 IGM 5064453, la cual corresponde a un Conglomerado lítico
Aumento 4x, Escala grafica 500um, XPL (Der), PPL (Izq). Se observa algunos de los componentes de la
sección como líticos volcánicos (Lv), sedimentarios (Ls), metamórficos (Lm) y partículas de cuarzo (Qtz)
Fuente: autores
Por otra parte, se observan litoarenitas de grano medio con algunas partículas tamaño
granulo (Muestra 5064462, JJV358); con formas subangulares a subredondeadas,
subelongados a subesféricos y mala selección. Texturalmente está compuesta por arena
(88%), lodo (10%) y grava (2%) con granos de cuarzo, feldespato, micas (Muscovita,
biotita y clorita), sericita, granos aloquímicos de bioclastos (figura 158) y minerales
opacos, además de líticos metamórficos predominantemente, líticos volcánicos,
sedimentarios y plutónicos con cemento calcáreo (figura 159). Por otra parte, se
observan estructuras como: granodecrecimiento y laminación plana difusa.
Figura 158. Muestra JJV358 – IGM 5064462, Litoarenita con cemento calcáreo
Aumento 10x. Escala grafica 200um. XPL (Der), PPL (Izq). Se observa un bioclasto (Bioc) recristalizado
junto con partículas de cuarzo (Qtz), líticos sedimentarios (Ls), plagioclasa (Pl), biotita (Bt)
Fuente: autores
Figura 159. Muestra JJV358 – IGM 5064462, Litoarenita con cemento calcáreo
Aumento 4x. Escala grafica 500um. XPL (Der), PPL (Izq). Sección constituida principalmente de partículas
de cuarzo (Qtz), líticos metamórficos (Lm), plagioclasa (Pl) y algunas partículas de biotita (Bt) y oxidos
(Ox) todo en una matriz de lodo calcáreo (Micrita)
Así mismo, las litoarenitas feldespáticas limosas (5064534, JJV-363-B; (5064545, JJV-
369), se caracterizan por ser areniscas de grano fino a medio, con formas subangulares
a subredondeados, subesférico a subelongado y selección moderada a mala.
Texturalmente está conformada por arena (85% a 89%), lodo (10% a 15%) y grava (1%)
con granos de cuarzo, feldespato, micas (biotita, moscovita y clorita), minerales
arcillosos (sericita), otros terrígenos (anfíboles, turmalina, apatito, epidota, glauconita),
granos aloquímicos (peloides) y minerales opacos, además de líticos metamórficos
(cuarzo policristalino), líticos volcánicos mayor en la muestra JJV369 y ausencia de líticos
volcánicos (muestra JJV363B), líticos sedimentarios (chert) y líticos plutónicos, (figura
160 y figura 161).
Figura 160. Muestra JJV369, IGM 5064545, Litoarenita feldespática con epidota
Aumento 4x. Escala grafica 500um. XPL (Der), PPL (Izq). Sección compuesta de partículas subangulares de
cuarzo (Qtz), plagioclasa (Pl), moscovita (Ms) y epidota (Ep)
Fuente: autores
Figura 161. Muestra JJV363B, IGM 5064534, Litoarenita feldespática con anfíboles
Aumento 2.5X, Escala grafica 500um, XPL (Der), PPL (Izq). Sección compuesta de cuarzo (Qtz), plagioclasa
(Pl), líticos sedimentarios (Ls), volcánicos (Lv) y metamórficos (Lm) así como anfíboles (Amp), biotitas (Bt)
y óxidos (ox)
Fuente: autores
Las muestras JJV 358 - IGM 5064460 y JJV 353 - IGM 5064536) corresponden a
Wackestone según Dunham (1962) y micritas fosilíferas (figura 162 A) según Folk (1962).
Presentan bioperturbación reconocible por la formación de lóbulos en la sección (figura
162 B), adicionalmente se identifican micritas terrígenas (figura 163), con abundante
material terrígenos (35% a 45%), de tamaño de grano arena muy fina.
Están compuestas por ortoquímicos (50% a 60%), terrígenos (35% a 45%) y bioclastos
(2%). El material terrígeno está representado por granos subangulares a
subredondeados de cuarzo, plagioclasa, líticos metamórficos, mica moscovita, biotita,
clorita, circón y óxidos, y cemento esparítico.
Figura 162. Muestra JJV 353 – IGM 5064536. Micrita con fósiles
A. Aumento 4x, Escala grafica 500um, XPL (Der), PPL (Izq). Sección constituida por pequeñas partículas de
cuarzo (Qtz) y plagioclasa (Pl) así como moscovitas (Ms) y óxidos (Ox) en una matriz de lodo calcáreo
(micrita). B. Aumento 4x, Escala grafica 500um, XPL (Der), PPL (Izq). Se observa bioturbación reconocible
por la formación de lóbulos en la sección
Fuente: autores
Figura 164. Algunos de los palinomorfos diagnósticos recuperados para la Formación Palenque
Fuente: autores
En la tabla 15 se muestran los resultados de los análisis realizados para las técnicas de
foraminíferos, palinología y nanofósiles calcáreos y las edades obtenidas.
A partir de los resultados obtenidos en los análisis palinológicos de las muestras AMP-
130-Pa, AMP-131-Pa, AMP-167-Pa, HAP-175-Pa y HAP213-Pa, se le asigna a la Formación
Palenque una edad Eoceno medio a Oligoceno temprano?, la cual es concordante con la
edad reportada por Guzmán et al. (2004), quien le asignó a la unidad un rango de edad
Eoceno medio – tardío.
De igual forma, la unidad es suprayacida por los depósitos aluviales actuales (Q2al) desde
N10 a A16 y 17 (Ver Mapa geológico Sinú San Jacinto Zona Sur) y N18 y L17 (Ver Mapa
geológico Sinú San Jacinto Zona Norte) y por los depósitos fluvio lacustres y de llanura
de inundación (Q2fll) M18 a L19 (Ver Mapa geológico Sinú San Jacinto Zona Norte)
inferidos por cambios morfológicos observados en campo y fotogeología; no se observó
formaciones que suprayacen a la unidad.
A partir de la información obtenida por medio del corte geológico B – B´, se propone para
la Formación Palenque un espesor de 2300 m (Ver corte geológico del Mapa geológico
Sinú San Jacinto Zona Sur). Guzmán et al. (2004), estima para la unidad un espesor de
1000 m.
La parte intermedia (figura 151), que aflora en la cantera El Paraíso, se interpreta como
un ambiente deltaico, posiblemente asociado a canales distributarios en la parte frontal
del delta (Nichols, 2007, Arche et al, 2010), con muy muy alta energía, integrado por
areniscas conglomeráticas, conglomerados y areniscas gruesas a muy gruesas en capas
medias a gruesas con presencia local de intraclastos de lodolitas alienados (rip up?).
Reyes et al. (1999), reportan para los sedimentos de la unidad facies con la secuencia de
Bouma que permite asignarles un ambiente de depósito de abanico submarino con facies
proximales para la parte media y proximal a media hacia el techo de la unidad.
La Formación Chengue aflora en el área de estudio (figura 165), en tres (3) sectores
principales: a. En el sector de Botijuela – Arroyo El Salto – Arroyo Japón, Arroyo Enchama
(Zona sur N19, M19, L19), como una franja alargada y estrecha en sentido SSW – NNE
con una longitud de 10 Km, un ancho promedio de 2 Km y extensión areal aproximada
de 20 Km2, con límite norte marcado por el sinclinal de El Ceibal, b. En los flancos
occidental y oriental del sinclinal Guásimo (Zona norte M23), con una extensión areal de
9 Km2 y en c. Los flancos del anticlinal de Arroyo Hondo (Zona norte N24, N25) con una
extensión de 11 Km2. Las geoformas asociadas a la Formación Chengue, corresponden
esencialmente a cuestas alomadas y acolinadas (figura 166) ligeramente redondeadas
con alturas promedio de 200 m y máximas de 310 m, además de glacis de acumulación
que producen morfologías planas, ligeramente onduladas. Las características
morfológicas y geomorfológicas de la Formación Chengue, contrastan fuertemente con
los rasgos presentados por las Formaciones Maco y San Jacinto (figura 166 A y B), que se
caracterizan por espinazos y cuestas con alturas superiores a los 300 m, con escarpes
pronunciados y de alto ángulo.
El segmento A tiene sus mejores exposiciones en el Arroyo Enchamá (Zona sur N19), en
el carreteable de Arroyo Hondo – Calamar (Zona sur B24) y en el flanco occidental del
Sinclinal de Guásimo (Zona norte M23); corresponde a lodolitas grises oscuras (N4),
lodolitas grises (N7), limolitas, limolitas silíceas con coloraciones amarillo oliva (5Y 7/6) y
en menor proporción wackestones (figura 168 A y B) con foraminíferos, dispuestas en
capas muy delgadas a delgadas, con geometría tabular, color amarillo (5Y 8/4),
laminación plana paralela continua y contactos entre capas netos plano paralelos (figura
168 A - C). Estas litologías se encuentran interdigitadas esporádicamente con litoarenitas
de grano muy fino a medio (figura 168 C), moderado calibrado, con granos subangulares
a subredondeados, sub-esféricos, con laminación ondulada discontinua y maciza, en
capas delgadas, con coloraciones amarillas claras (5Y 8/4). En las capas de sublitoarenitas
se encuentran fitodetritos milimétricos (figura 168 D), con estructuras pobremente
conservadas. Las facies de wackestones se reconocen, en la parte media del arroyo El
Salto y en la zona nororiental, arroyo Las Tinajas, municipio de Arroyo Hondo,
caracterizadas por capas finas a medias tabulares, con contactos netos irregulares,
partición cúbica, maciza y con laminación plana paralela discontinua. En cercanías al
núcleo del Sinclinal Guásimo, aflora el segmento A como una secuencia monótona de
limolitas silíceas, dispuestas en capas muy delgadas a delgadas, tabulares, con contactos
netos planos paralelos (figura 168 E y F), partición cúbica, alta porosidad y afectada por
diaclasamiento. Es común reconocer moldes de foraminíferos parcialmente disueltos.
Al igual que la litofacies de rudstones – grainstones de algas rojas con líticos, los
grainstones de macroforaminíferos se interdigitan con capas delgadas de lodolitas
negras fisiles (figura 170 F).
Tabla 16. Listado de las 25 secciones delgadas analizadas de la Formación Chengue, organizadas
por segmentos y por petrofacies
Segmento IGM Estación Norte Este Clasificación Petrográfica
Los análisis microfaciales realizados a las nueve muestras provenientes del segmento B
de la Formación Chengue (tabla 16), indican un predominio de la fracción calcárea
bioclástica con un contenido terrígeno supeditado.
Fuente: autores
Los análisis palinológicos realizados a nueve (9) muestras (tabla 16) indican una
abundancia pobre (˂ 100 palinomorfos por placa) y ocasionalmente abundante (entre
200 y 300 palinomorfos por placa), con buena preservación sin evidencias de
degradación (figura 179).
Por otra parte, las especies de polen identificadas son: Bombacacidites aff.
Nacimientoensis, Bombacacidites nacimientoensis, Cyclusphaera scabrata, Echitriporites
trianguliformis var. Orbicularis, Foveotriporites hammenii, Foveotriporites sp1 J&D 2001,
Gemmamonocolpites aff. Amicus, Gemmamonocolpites aff. Disperses, Gemmamonocol
pites aff. Gemmatus, Gemmamonocolpites amicus, Grimsdalea minor, Mauritiidites
franciscoi var franciscoi, Mauritiidites franciscoi var. minutus, Monoporopollenites
annulatus, Proxapertites humbertoides, Retidiporites aff. Agilis, Scabraperiporites aff.
Minimus, Spinizonocolpites aff. Baculatus, Spinizonocolpites aff. breviechinatus,
Spirosyncolpites spiralis, Striadiporites boletelloides (hongo), Striatopollis catatumbus,
Striatopollis? Tenuistriatus, Tetracolporopollenites maculosus, Zonocostites aff. Minor,
"Baculapollenites"sp., Baculamorphomonocolpites spp., Bombacacidites sp.,
Brevitricolpites sp1 (J&D 2001), Clavainaperturites spp., Clavamonocolpites sp.,
Clavatipollenites sp., Clavatricolpites sp., Echimonocolpites sp., Echipollenites spp.,
El análisis de nanofósiles calcáreos en cuatro (4) muestras (tabla 17) indica una
abundancia baja (una especie en 10 campos visuales), con preservación moderada, leve
disolución y/o recristalización que no imposibilita la identificación de las especies,
aunque algunas características diagnósticas han sido afectadas. Las especies reportadas
corresponden a: Campylosphaera de la, Coccolithus formosus, Helicosphera seminulum,
Reticulofenestra dictyoda, Sphenolithus radians, Chiasmolithus spp. (figura 180).
Tabla 18. Síntesis de litofacies definidas para la Formación Chengue, integrando aspectos macro
y microfaciales. Se incluye el ambiente de depositación interpretado
Ambiente
Segmento Litofacies Atributos sedimentológicos
depositacional
Capas muy delgadas a delgadas con
laminación plana paralela, abundante
a. Lodolitas y limolitas
microfauna de foraminíferos bentónicos,
silíceas
planctónicos, radiolarios y nanoplancton
Mar
calcáreo.
abierto/offshore
A b. Wackestone de
Capas medias, tabulares, laminación plana
foraminíferos
paralela discontinua, masiva y hummocky.
Formación Chengue
bentónicos y
Foraminíferos bentónicos y planctónicos.
planctónicos
c. Litoarenitas de grano Capas delgadas, laminación ondulada Corrientes de
muy fino discontinua, fitodetritos milimétricos. turbidez
Capas muy gruesas macizas, rodolitos de Rampa/Plataforma
d. Rudstones de algas
algas esféricos tamaño granulo. Algas rojas calcárea, bioclástica
rojas Melobesioides
Melobesioides, macroforaminíferos insitu
e. Rudstones - Capas delgadas a medias lenticulares,
grainstones de algas estratificación swaley, líticos sedimentarios
rojas con líticos de chert. Algas rojas Melobesioides,
B sedimentarios macroforaminíferos, fragmentación de
Depósitos de flujos
(Calciclásticos) algas.
gravitacionales
f. Grainstone de
Capas medias, lenticulares, líticos de chert calciclásticos.
macroforaminíferos
tamaño granulo. Macroforaminíferos
(Lepidocyclininae
(Lepidocyclininae indet.) fragmentados con
indet.) con líticos
microabración.
sedimentarios
Fuente: autores
El análisis de SMF asocia esta litofacies con las microfacies SMF 6 y SMF 7, indicando
ambientes generales tipo slope (FZ 4), en sectores adyacentes a complejos de reef o a
estructuras biogénicas, márgenes de plataforma, zonas de foreslope y reefs (FZ 4 - 5)
(Flügel, 2004).
Así pues, se propone que la litofacies de rudstones de algas rojas con líticos
sedimentarios corresponde a litologías retrabajadas y transportadas desde una fuente
in-situ, semejante a la descrita en la litofacies de Rudstones de algas roja, pendiente
abajo como un flujo denso gravitatorio acumulado en ambientes marinos tipo basin /
offshore superior o plataforma restringida, representados por las lodolitas y limolitas que
se encuentran interestratificadas con la litofacies calciclástica (Salazar-Ortiz et al., 2020).
La geometría de las capas, las características litofaciales y los rasgos geomorfológicos de
lomeríos alargados y de corta extensión indican que la litofacies calciclástica pudo
haberse depositado en lóbulos dentro de un sistema de abanicos submarinos
calciclásticos (Payros y Pujalte, 2008). La caracterización de microfacies SMF, indica que
la litofacies de rudstones y grainstones de algas rojas con líticos sedimentarios (SMF 4)
se asocia con ambientes de foreslope donde se genera resedimentación de carbonatos,
en contextos tipo basin (FZ 1) y en ambientes tipo pie de pendiente (toe of slope – FZ 3)
(Flügel, 2004). En cuanto a la proveniencia de la fracción terrígena, que presenta una
composición predominante de líticos sedimentarios de chert laminado con foraminíferos
y radiolarios silicificados, se propone una fuente proximal asociada al tope de la
Formación San Cayetano para la cual han sido reportados niveles de limolitas y lodolitas
silíceas (liditas).
El análisis litofacial de la Formación Chengue, permitió definir seis litofacies (tabla 18)
que en conjunto indican condiciones de depositación en un sistema marino complejo en
el cual se conjugan ambientes tipo mar abierto/offshore (segmento A), plataformas
calcáreas bioclásticas restringidas y procesos de flujos gravitatorios pendiente abajo del
tipo calciclástico (Segmento B).
2005, Brandano et al., 2005, Braga et al., 2009, Bassi et al., 2009, 2010, Bassi y Nebelsick,
2010), con acción de corrientes que permiten la movilización y rotación de los rodolitos
lo que produce las formas redondeadas u ovoides. Modelos actualísticos desarrollados
en el archipiélago hawaiano (Adey y Macintyre, 1972), en las islas Fraser de Australia
(Lund et al., 2000), además de las islas Ryukyu en Japón, Papúa Nueva Guinea, Golfo de
México, Rio de Janeiro y Nueva Zelanda (Bassi, 2005, Bassi y Nebelsick, 2010), establecen
que el predominio de algas Melobesioideae y Sporolithacea indica, batimetrías
comprendidas entre 40 y 70 m con un máximo de 120 m marcado por Sporolithon sp.
Así, se establece que la plataforma bioclástica del Eoceno medio asociada a la Formación
Chengue, presentaba una paleobatimetría que oscilaba entre 40 y 70 m (figura 181),
condiciones paleoambientales oligotróficas, bajo aporte terrígeno, salinidad normal y
asociado a la zona eufótica superior (Adey et al., 1982).
Figura 181. Esquema teórico del modelo depositacional para la Formación Chengue
donde coexisten ambientes marinos profundos tipo open marine cercanos a la línea de acción base
tormentas, plataformas calcáreas bioclásticas in situ y procesos de flujos gravitatorios en el pie de
pendiente. Se indica la localización hipotética de las litofacies referidas en la tabla 5y se incluyen en el
modelo. Adaptado de Payros y Pujalte (2008)
Fuente: autores
La denominación de Formación San Jacinto fue empleada por primera vez en informes
internos de la Texas Petroleum Company por Notestein (1929 en Duque et al., 1996),
donde se describe un conglomerado basal de espesor variable en todas las localidades,
suprayacido por subarcosas de grano fino a muy grueso, ocasionalmente glauconíticas,
cemento calcáreo con presencia de conchas gruesas de ostreidos y restos de plantas. De
acuerdo con Guzmán et al. (2004) en el sector de Chalán afloran micritas lenticulares
dispuestas en capas gruesas plano paralelas. La localidad tipo de la unidad corresponde
al municipio de San Jacinto, Bolívar, mientras que la sección tipo se encuentra en el
Arroyo San Jacinto (Guzmán et al., 2004), localizado a 18 Km al sur del área de estudio.
Secciones adicionales reportadas por Duque et al. (1996) corresponden a los arroyos San
Jacinto, Piedra Azul y Alférez y de manera parcial (solo la base) en los arroyos El Medio,
Salvador - Media Luna y Cacaos - Alto de Pinturas; dichas secciones se encuentran fuera
del área de estudio del presente proyecto.
En términos generales Duque et al. (1996) describe una unidad granodecreciente que
puede ser dividida en tres segmentos; la parte basal corresponde a un conglomerado
basal matriz soportado, que se reporta en la mayoría de localidades con espesores
variables, dispuesto en capas gruesas, tabulares y lenticulares, estratificación cruzada
irregular no paralela discontinua y acumulaciones locales de bioclastos (ostreidos,
gasterópodos, bivalvos y macroforaminíferos). La fracción conglomerática corresponde
a cantos y guijos de limolitas ferruginosas, andesitas, granodioritas, filitas, además de
cuarzo lechoso y chert negro. El conjunto conglomerático basal es suprayacido por un
segmento intermedio que presenta variaciones texturales entre lodolitas arenosas,
limolitas y arenitas conglomeráticas, en capas medias a gruesas, con gradación normal,
laminación planoparalela y estructuras en flama, fragmentos de gasterópodos, bivalvos,
macroforaminíferos, nódulos y lentes de micritas, además de materia orgánica
bituminosa e intensa bioturbación. Es común la ocurrencia de yeso secundario y pirita.
El segmento superior de la formación está compuesto por litoarenitas de grano medio,
lodolitas arenosas y arcillolitas dispuestas en capas finas a gruesas tabulares con
laminación plana paralela y bioturbación de Thalassinoides y Zoophycus (Duque et al.,
1996).
La Formación San Jacinto se presenta en el área de estudio como una franja alargada,
continua y estrecha con dirección preferencial N30E, desde la parte más sur del área
hasta la zona del canal del Dique (Zona norte L25, L24, L23) en el corregimiento de El
Pilón, Arroyo Hondo y alcanza una extensión areal de 46 Km2 (figura 182). Afloramientos
aislados se encuentran en los núcleos de los sinclinales de Guásimo y Arroyo Hondo
(Zona norte M23, M25). Las geoformas representativas de la Formación San Jacinto
corresponden a espinazos, crestas y cuestas con escarpes pronunciados (figura 182)
preferencialmente en la margen oriental de las geoformas, con cimas agudas e
irregulares y alturas que oscilan entre 315 m a 380 m en la parte sur del área de estudio
(sector de Botijuela, figura 183 C), mientras que hacia el cerro de La Pelota (figura 183 A
y B) se presentan elevaciones menores que oscilan entre 140 m y 180 m. En la parte baja
de los espinazos y de las crestas se generan glacis de acumulación asociados a los
escarpes donde se acumulan bloques y cantos de los niveles arenosos y conglomeráticos
de la unidad. Las geoformas asociadas a la Formación San Jacinto presentan un
importante contraste respecto al relieve bajo de colinas, lomeríos y valles disectados
(figura 183 B y C) que presenta la Formación El Carmen (Oligoceno) y las cuestas
alomadas de la Formación Chengue.
La Formación San Jacinto en el sector norte (figura 184) se caracteriza por una litología
detrítica y mixta terrígena – bioclástica de subarcosas y litoarenitas de grano medio a
muy grueso ligeramente conglomeráticas, dispuestas en capas medias a gruesas con
estratificación cruzada, laminación ondulada, flaser, lentes conglomeráticos y de carbón
bituminoso, índices de bioturbación moderados, fitodetritos y bioclastos de bivalvos,
gasterópodos y macroforaminíferos. En menor proporción lodolitas y limolitas. En el
sector sur, la unidad está compuesta por facies exclusivamente terrígenas en una
secuencia granodecreciente hacia el tope, que varía texturalmente entre conglomerados
clastosoportados de gránulos y guijarros y subarcosas de grano medio ligeramente
conglomeráticas con facies finogranulares supeditadas. Estas litologías están dispuestas
en capas medias a muy gruesas lenticulares y tabulares con gradación normal,
laminación plana paralela, cruzada planar, convoluta, calcos de carga, rizaduras de
corriente y turboglifos.
El segmento inferior aflora en la margen occidental del Arroyo El Queso, Arroyo Totumito
(Zona sur F23) y en localidades cercanas a los flancos del sinclinal de Arroyo Hondo.
Corresponde a una potente secuencia detrítica que varía texturalmente entre arenitas
de grano medio a muy grueso ligeramente conglomerática, moderada a pobremente
seleccionadas, con granos subangulares y subredondeados, coloraciones amarillas
parduzcas (5Y 6/4) y amarillo naranja (10R 6/6), cemento calcáreo, dispuestas en capas
medias a gruesas lenticulares (figura 185 A), con contactos netos irregulares. En las
litofacies de arenitas medias a gruesas se identifica estratificación cruzada planar
(tabular) (figura 185 B), laminación plana paralela continua y laminación ondulada
discontinua. Se presentan acumulaciones de fitodetritos milimétricos interlamina,
pobremente conservados y oxidados que corresponden a fragmentos de hojas (figura
185 C). Procesos de disolución parcial sobre el cemento calcáreo genera erosión
esferoidal y estructuras kársticas. Las trazas fósiles observadas en los intervalos arenosos
corresponden a trazas horizontales (figura 185 D) probablemente de locomoción y de
Figura 185. Características litofaciales del segmento inferior de la Formación San Jacinto
en el sector Norte. A. Capas medias lenticulares de litoarenitas de grano medio a grueso (Estación MAC
262, sector Arroyo Hondo). B. Estratificación cruzada planar de bajo ángulo en niveles de arenitas de
grano medio a grueso (Estación MAC 262, sector Arroyo Hondo). C. Fitodetritos milimétricos y
centimétricos pobremente conservados (Flechas amarillas), altamente oxidados (Estación MAC 266,
sector Arroyo Hondo). D. Trazas horizontales de la icnofacies Cruziana? En niveles de arenitas de grano
medio (Estación MAC 263, sector Arroyo Hondo). E. Estratificación cruzada de bajo ángulo dada por
niveles conglomeráticos (Estación HAP 261 Arroyo El Queso). F. Serpúlidos centimétricos con paredes
calcáreas rellenas (Estación HAP 262)
Fuente: autores
El segmento intermedio tiene su mejor exposición en el Arroyo La Escoba (Zona sur G22)
y corresponde de manera general a litoarenitas de grano fino a grueso calcáreas
ligeramente conglomeráticas con bioclastos, dispuestas en capas medias a gruesas
estratodecrecientes (figura 186), altamente bioturbadas, con geometrías lenticulares,
contactos netos irregulares, lentes centimétricos de carbón bituminoso (figura 187 C),
bioclastos dispersos y coloraciones amarillo pardusco (10YR 5/4) y grises oscuras (N4).
Esporádicos niveles de lodolitas y wackestones en capas delgadas.
Figura 186. Aspecto general del segmento intermedio de la Formación San Jacinto
sector norte arroyo La Escoba. A. Secuencia estratodecreciente de arenitas bioclásticas de grano grueso
dispuestas en capas gruesas que gradan a arenitas de grano fino - medio en capas delgadas y medias.
(Arroyo La Escoba, Estación AMP 195). B. Secuencia estratodecreciente de niveles arenosos en capas
gruesas a finas, lenticulares con estratificación cruzada (Arroyo La Escoba, Estación AMP 194)
Fuente: autores
El sector sur corresponde al área comprendida entre las inmediaciones del cerro La
Pelota (Zona sur I21) y Botijuela, margen sur del área de estudio (Zona sur O20), y se
caracteriza por un conjunto litológico predominantemente detrítico (figura 189) con
facies rudíticas, arenosas ligeramente conglomeráticas y finogranulares en menor
proporción, que presentan una tendencia granodecreciente hacia el tope, con ausencia
de macrofósiles.
Figura 189. Columna estratigráfica esquemática de la Formación San Jacinto Sector Sur
basada en la transecta del Arroyo Enchama y las estaciones de campo en el sector de El Naranjal
JJV 372, JJV 376. Espesor calculado a partir del perfil estructural
Fuente: autores
El segmento inferior (figura 190, figura 191) aflora en la margen occidental del tren
general de la unidad, en las localidades de El Hobo (Zona sur H21), El Cantil (Zona sur
I20), El Naranjal (Zona sur M20), y en el Arroyo Enchama (Zona sur N20); está compuesto
por una alternancia de conglomerados matriz-soportados y arenitas de grano fino a
grueso ligeramente conglomeráticas. Se observan importantes variaciones faciales en
sentido norte – sur, mientras que en el sector del Hobo y El Cantil se reporta un
predominio de facies arenosas con intervalos rudíticos y lodosos supeditados, en los
El segmento superior de la Formación San Jacinto en el Sector Sur (figura 189), presenta
características litofaciales homogéneas desde el sector del Cerro La Pelota hasta
Botijuela y se caracteriza por arenitas de grano fino a grueso ligeramente
conglomeráticas, dispuestas en capas delgadas a medias ocasionalmente gruesas,
tabulares (figura 192 A y B), con contactos netos iregulares y transicionales, coloraciones
que varían entre amarillo pálido (5Y 8/4) y amarillo rojizo (10 R 6/6). Texturalmente se
reconocen granos moderadamente seleccionados, subangulares a subredondeados, con
esfericidad moderada; composicionalmente presenta abundancia de cuarzo hialino y
lechoso, fragmentos líticos de chert y de rocas ígneas indeterminadas. Es común
reconocer fragmentos centimétricos (9 cm) de madera fósil (xilopalo? figura 192 E),
esporádicos bivalvos pobremente conservados con tamaños que no superan el
centímetro; como material amalgamante se reconoce cemento calcáreo y silíceo. Los
intervalos arenosos del segmento superior presentan una amplia variedad de
estructuras físicas, predomina la laminación plana paralela continua y la estratificación
cruzada planar (tabular figura 192 C y D), en menor proporción se identificó gradación
normal (B), estructuras de deformación penecontemporánea como calcos de carga y
laminación convoluta, además de dropstones (figura 192 F), moud couplets (figura 193
A) y ocasionales turboglifos (tool marks, figura 193 B). De manera particular en el sector
de Naranjal (Zona sur L20) aflora una secuencia de arenitas de grano fino, muy bien
seleccionado, friable y poroso, con ondulitas, yeso drusiforme concordante con la
laminación e impregnación de crudo (figura 193 C). Los ichnofosiles reconocidos en el
segmento superior de la Formación San Jacinto, corresponden a trazas decimétricas de
habitación asociadas a Thalassinoides y Planolites (figura 193 D), con índices de
bioturbación I.B. = 2.
Figura 192. Características litofaciales del segmento superior de la Formación San Jacinto
Sector Sur
A. Capas medias tabulares de areniscas de grano grueso con laminación plana paralela y contactos
irregulares a la base. Sector Naranjal (Estación JJV 372). B. Capas medias de arenitas de grano grueso que
gradan a arenitas de grano fino, contactos transicionales entre capas, gradación normal (flecha amarilla).
Sector Naranjal (Estación JJV 372). C. Estratificación cruzada planar en arenitas de grano medio a grueso
(resaltada con líneas amarillas). Flanco oriental del Cerro la Pelota (Estación MAC 355). D. Estratificación
cruzada planar en areniscas de grano grueso ligeramente conglomeráticas. Sector Botijuela 8Estación
HAP 117). E. Fragmento centimétrico de madera fósil incluido dentro de una arenisca de grano grueso.
Sector Naranjal (Estación JJV 376). F. Dropstone centimétrico de mudstone embebido en una arenita de
grano grueso ligeramente conglomerática. Sector Naranjal (Estación JJV 376)
Fuente: autores
Figura 194. Triángulo de clasificación composicional QFL (Folk et al., 1980 en Boggs,
2009)
para 19 muestras con conteo, de la Formación San Jacinto
Fuente: autores
Arcosas Líticas y
Subarcosa de grano
5064263 AMP099PA 1605013 889059
medio
subarcosas de grano fino -
medio
Litoarenita feldespática Litoarenita feldespática de
5064509 AMP151P 1600635 888263
de grano medio grano fino - muy grueso
Grainstones - Rudstone Rudstone - Grainstone
5064055 HAP090PB 1597775 886496
de bivalvos arenoso de bivalvos
Litoarenita feldespática Litoarenita feldespática de
5064445 IBA239P 1603932 889319
de grano grueso grano fino - muy grueso
Arcosas Líticas y
Sur Base
5064046 MAC311P 1606999 890381 Arcosa de grano medio subarcosas de grano fino -
medio
Litoarenita feldespática Litoarenita feldespática de
5064124 NRL121PA 1608969 889639
de grano grueso grano fino - muy grueso
Arcosas Líticas y
Arcosa lítica de grano
5064127 NRL131P 1608149 889926
medio
subarcosas de grano fino -
medio
Litoarenita feldespática
Litoarenita feldespática de
5063941 AMP 027 1610496 8900025 de grano medio con
grano fino - muy grueso
bioclastos
Clasificación
Sector Segmento IGM ESTACION Norte Este Petrofacies
Petrográfica
Arcosas Líticas y
5063944 AMP 030 1610057 889804 Subarcosa de grano fino subarcosas de grano fino -
medio
Arcosas Líticas y
Subarcosa de grano
5064229 AMP 100 1604800 889151
medio
subarcosas de grano fino -
medio
Arcosas Líticas y
Subarcosa de grano
5064052 HAP 090P 1597775 886496
medio
subarcosas de grano fino -
medio
Arcosas Líticas y
Arcosa lítica de grano
5064491 JJV 382 1602011 888571
fino
subarcosas de grano fino -
medio
Arcosas Líticas y
Subarcosa de grano muy
5064050 MAC 334 1606827 890324
fino
subarcosas de grano fino -
medio
Wackestone - packstone Wackestone - packstone
5064123 NRL 120 1609034 889530
de foraminíferos de foraminíferos
Litoarenita feldespática Litoarenita feldespática de
5064130 NRL 126 1608916 889821
de grano grueso grano fino - muy grueso
Litoarenita feldespática Litoarenita feldespática de
5064129 NRL 128 1608775 889849
de grano muy grueso grano fino - muy grueso
Arcosas Líticas y
Subarcosa de grano
5064128 NRL 132 1608218 889998
medio
subarcosas de grano fino -
medio
Arcosas Líticas y
Subarcosa de grano
5064099 NRL 159 1609157 892328
medio
subarcosas de grano fino -
medio
Wackestone de Wackestone packstone de
5064228 NZG 012 1604760 890016
foraminíferos foraminíferos
Arcosas Líticas y
Subarcosa de grano
5064486 NZG 054 1600925 888654
medio
subarcosas de grano fino -
medio
Arcosas Líticas y
Subarcosa de grano
Tope 5064102 MAC352PA 1610045 892643
medio
subarcosas de grano fino -
medio
Arcosas Líticas y
Subarcosas de grano
5064225 HAP125P 1598816 889079
medio
subarcosas de grano fino -
medio
Litoarenita feldespática Litoarenita feldespática
5064547 JJV379P 1602367 888824 fosilífera fosilífera
(macroforaminíferos) (macroforaminíferos)
Litoarenita feldespática Litoarenita feldespática de
5064141 MAC331PA 1607593 890551
de grano grueso grano fino - muy grueso
Arcosas Líticas y
5064043 MAC340P 1606432 890694 Subarcosa de grano fino subarcosas de grano fino -
medio
Fuente: autores
Petrofacies siliciclástica identificada en tres (3) de las muestras analizadas (tabla 19),
clasificada texturalmente como arenitas y arenitas levemente conglomeráticas (Folk,
1954) y composicionalmente como sublitoarenitas (Pettijohn et al., 1987). Los
componentes detríticos corresponden a granos subredondeados, en menor proporción
subangulares, mal seleccionados, con tamaños de grano que oscilan entre arena media
(350 µm) y arena gruesa (900 µm), compuestos mayoritariamente por cuarzo
monocristalino ondulante y cuarzo policristalino con más de tres cristales (figura 195 A y
B); en menor proporción plagioclasas albitizadas, fragmentos líticos ígneos volcánicos
con vacuolas rellenas por zeolitas e intrusivos (figura 195 C), chert microcristalino y
fragmentos de cuarcitas. Como minerales accesorios se identifica biotita, horblenda,
moscovita (figura 195 D), epidota y clorita. Es recurrente la ocurrencia de glauconita
detrítica con geometrías esféricas, elipsoidales o deformadas por sobrepresión de granos
(figura 195 A y B), tamaño arena fina y media (200 – 300 µm). La fracción bioclástica no
supera el 5% de la roca total y corresponde a fragmentos de macroforaminíferos no
identificables a nivel de subfamilia y foraminíferos bentónicos. No se reconoció
porosidad primaria o secundaria.
corresponden con biotita, clorita, horblenda, epidota (figura 196 A y B), circones, zoisita,
clinozoistita, opacos y esporádica glauconita detrítica (figura 196 D) y autignénica. La
fracción bioclástica no supera el 1% de la roca total y corresponde a foraminíferos
bentónicos pobremente conservados, bivalvos fragmentados, macroforaminíferos
(Nummulitidae, figura 196 B), fragmentos de corales y fragmentos milimétricos de
fitodetritos probablemente restos maderáceos. No se reconoció porosidad primaria o
secundaria.
Predomina el cemento calcáreo espar tipo equant (figura 196) y blocky bien desarrollado
sin procesos de sobrecrecimiento al interior de los granos; en una de las muestras se
reconoce cemento silíceo (IGM 5064716). La petrofacies de arcosas líticas y subarcosas
se reconoce mayoritariamente en el segmento superior de la unidad, y de manera
supedita en la parte intermedia e inferior (tabla 19).
Petrofacies calcárea con aporte terrígeno, documentada en dos (2) muestras (tabla 19),
clasificadas como wackestones (Dunham, 1962) o micritas impuras (Folk, 1962). La
fracción ortoquímica corresponde a lodo calcáreo micrítico homogéneo (figura 197 A –
C), con procesos locales de pseudoesparitización (figura 197 D). La fracción aloquímica
está compuesta por foraminíferos bentónicos y planctónicos moderadamente
preservados (figura 197 A y B), con tests gruesos quillados y arreglos biseriales o
miliolidos, radiolarios del Orden Spummellaria?, con tamaños promedio de 80 µm, y
geometrías esféricas donde se conservan las espinas polares y secundarias (figura 197
A partir del análisis petrográfico de 25 secciones delgadas, de las cuales 11 tienen conteo
tradicional y las restantes 14 fueron analizadas por medio de campos visuales, se
definieron para el Sector Sur, cinco petrofacies (tabla 19) que corresponden con
litoarenitas feldespáticas de grano fino a muy grueso, litoarenitas feldespáticas
fosilíferas (con macroforaminíferos), arcosas líticas y subarcosas de grano fino a medio,
wackestones – packstones de foraminíferos y rudstones - grainstones arenosos de
bivalvos. Las petrofacies de arcosas líticas – subarcosas, wackestones-packstones y
rudstones – grainstones poseen las mismas características petrográficas descritas en el
numeral 3.1.6.4.1 Petrografía Sector Norte, por lo tanto, en este numeral se describirá
en detalle las petrofacies de litoarenitas.
Petrofacies identificada en siete (7) de las 25 muestras analizadas (tabla 19), clasificada
texturalmente como arenitas (Folk, 1954), y composicionalmente como litoarenitas
feldespáticas (Pettijohn et al., 1987). La fracción detrítica corresponde a granos
subangulares, moderadamente seleccionados, con variaciones texturales entre grano
fino a muy grueso. Composicionalmente se reconoce un predominio de cuarzo
monocristalino ondulante y policristalino con 2 a 3 cristales, fragmentos líticos plutónicos
(figura 199 A – C) (pertitas, antipertitas) y volcánicos con textura microlítica (figura 199
B) y vesículas (12% de la roca total); en menor proporción líticos sedimentarios de chert
No
Arcidae gen.
HAP 302 Estéril Diagnósti - - - -
et sp.
ca
No
HAP 303 - - Bivalvia - - -
Diagnóstica
Cicatricosi
sporites
dorogensi
s,
Cycluspha
era Eoceno
scabrata, temprano
No Foveotrip -
JJV 376 - - - -
Diagnóstica orites Oligoceno
hammenii temprano
, T05-T08
Grimsdale
a minor,
Spirosync
olpites
spiralis
Monocolp Eoceno
opollenite temprano
s ovatus, -
JJV 382 - - - - -
Spirosync Oligoceno
olpites tardío
spiralis T05-T11
No
JJV 411 - Estéril - - - -
Diagnóstica
MAC 330 Estéril - - - - - -
Arcidae gen.
LLG 148 - - - - - -
et sp.
Fuente: autores
Lenticulina sp., Nonion sp., Spiroplectammina sp., Rhabdammina sp., Rzehakina sp.,
Textularia sp., y Trochammina sp.
Los análisis palinológicos se realizaron a cinco muestras de las cuales, tres arrojaron
recobro y palinomorfos diagnósticos (figura 203), una fue estéril y otra más no
diagnóstica (tabla 20). Los palinomorfos identificados presentan buena conservación (no
El análisis de nanofósiles calcáreos se realizó sobre tres muestras de las cuales una
obtuvo recobro (tabla 20) con abundancia rara (1 especie entre 1-10 campos visuales) y
preservación moderada (Leve disolución y/o recristalización que no imposibilita la
identificación de las especies, aunque algunas características diagnósticas han sido
afectadas). Los especímenes reconocidos corresponden a: Campylosphaera de la,
Sphenolithus radians (figura 204), Phontosphaera spp., Discoaster spp., Reticulofenestra
<3µm, Reticulofenestra 3-5µm, Coccolithus pelagicus, Coccolithus formosusSphenolithus
spp.
El espesor de la Formación San Jacinto fue calculado con base en dos perfiles geológicos
elaborados en la zona del cerro La Pelota y en el sector de Botijuela ante la ausencia de
columnas estratigráficas completas en la zona de estudio. Para el sector del Cerro La
Pelota se estima un espesor aproximado de 420 m, mientras que en el sector de Botijuela
el espesor de la Formación San Jacinto alcanza los 398 m. otros reportes de espesor para
la unidad corresponden a Duque et al. (1996) quienes estiman un espesor total de 500
m en el Arroyo Salvador y de 450 m en el flanco oriental del Anticlinal del Tigre. Guzmán
et al. (2004) proponen un espesor de 185 m, sin embargo, no precisan la localidad donde
fue medido.
Tabla 21. Síntesis de asociaciones litofaciales definidas para la Formación San Jacinto,
organizadas de base a tope, integrando aspectos macro y microfaciales. Se incluye el
ambiente de depositación interpretado
Asociaciones Ambiente
Sector AL Atributos sedimentológicos
Litofaciales depositacional
Capas medias a gruesas lenticulares, granos
Arenitas de grano moderadamente seleccionados, maduros
medio a muy grueso composicional y texturalmente con laminación
plana paralela continua y laminación ondulada Foreshore en un
ligeramente
1 discontinua. Fitodetritos, trazas de Cruziana?, sistema dominado
conglomeráticas con cemento calcáreo equant y blocky.
laminación plana por olas
Estratificación cruzada de bajo ángulo en los
paralela intervalos conglomeráticos. Nidos de
serpulidos.
Las litofacies reconocidas en la Formación San Jacinto, sector sur se interpretan como un
sistema marino somero de frente de playa superior predominantemente detrítico que
varía a un sistema de delta front dominado por mareas.
como una franja continua en sentido sur – norte, que probablemente se profundizaba
hacia la zona norte (sector norte Cerro La Pelota – Arroyo Hondo) y hacia el sur (sectores
de Botijuela – Naranjal) se somerizaba con la presencia de facies rudíticas, y el desarrollo
de deltas asociados con probables aportes desde el onshore. La continuidad cartográfica
de la Formación San Jacinto como franjas alargadas semejantes a ridges alineados (ver
Mapa Geológico), especialmente desde el Cerro La Pelota hacia el norte, la persistencia
ocurrencia de glauconita detrítica y autigénica, la continuidad en las estructuras
sedimentarias de tracción en regímenes energéticos altos, así como la fauna de
invertebrados, corales, fragmentos maderáceos y macroforaminíferos que en conjunto
indican condiciones de frente playa superior, sustentan el modelo depositacional
propuesto. Dentro de este sistema marino somero se interpretan subambientes locales,
que presentan una probable distribución geográfica: 1. Biostromas con fauna
heterozoan y photozoan que ocurren preferentemente en la zona norte (Sector Arroyo
Hondo – Cerro La Pelota), 2. Barras de playa (longshore bars) dominadas por oleaje
(Arroyo la Escoba), 3. Intervalos deltaicos dominados por mareas (Arroyo La Escoba y El
Naranjal) y 4. Canales distributarios en sistemas someros (Sector Naranjal).
del Oso, descrito en tres secciones estratigráficas y que alcanza un espesor entre 30 y 65
m. Litológicamente está compuesto por una secuencia de cuarzoarenitas y litoarenitas
calcáreas ligeramente conglomeráticas, glauconíticas dispuestas en capas tabulares con
contactos netos plano paralelos y ondulosos, con abundantes fragmentos de bivalvos,
nummulites y lepidocyclinas.
En la zona sur del área de estudio (Zona sur N21, sector Carrizal), se reconocen
afloramientos aislados de corto espesor donde afloran secuencias monótonas y
homogéneas de arcillolitas y lodolitas (figura 206 B y C), en menor proporción mudstones
y wackestones, dispuestas en capas delgadas y muy delgadas, tabulares, físiles, con
laminación plana paralela discontinua, coloraciones grises y grises oliva (N7, 5G 4/1). Es
común reconocer moldes de foraminíferos en los planos de estratificación.
Interdigitados ocasionalmente con las lodolitas se reconocen capas delgadas a medias
tabulares de arenitas de grano fino y muy fino con la laminación plana paralela (figura
206 D). Descripción petrográfica
Tabla 22. Síntesis de los análisis bioestratigráficos realizados a ocho muestras de la Formación
El Carmen. Se incluyen los ejemplares diagnósticos y la edad interpretada
Especímenes diagnósticos de edad Edad
Muestra
Foraminíferos Palinología Foraminíferos Palinología
Mioceno temprano
Neogloboquadrina continuosa, Globigerinoides
HAP 113 obliqua
- (Burdigaliano) – tardío -
(Tortoniano) M2 – M13a
3.2 Neógeno
La primera mención fue hecha por Notestein y Aitken (1929) (en Duque Caro, et al., 1996)
como Series del Rancho en un informe interno de la Texas Petroleum Company para
referirse a la espesa sucesión de areniscas y lodolitas arenosas que afloran al este de
Carmen de Bolívar, entre la Serranía de San Jacinto y el Valle Inferior del Magdalena.
Duque Caro et al., 1996 conservan el nombre bajo el rango de formación en la memoria
explicativa de la Plancha 38 a partir del levantamiento estratigráfico de dos secciones; la
primera, que se considera la más completa y ha sido propuesta como la sección tipo por
(Guzmán, Gómez, y Serrano, 2004), aflora sobre la carretera que de Carmen de Bolívar
conduce al municipio de Zambrano. Está constituida por una sucesión de 970 m que
Barrera et al., (2001) levantan una sección estratigráfica en la vía entre Lata y Guamo
donde se describe la parte basal de la unidad como una alternancia granodecreciente de
arcillolitas con areniscas de grano muy fino con estratificación ondulada discontinua, que
van aumentando progresivamente de espesor hasta alcanzar capas medianas a gruesas
de areniscas de grano fino con cemento calcáreo, restos de plantas mal preservados y
láminas de yeso paralelas a la estratificación.
Desde los 0 a los 122 m (figura 212) se presentan dos secuencias granocrecientes y
estratocrecientes constituidas predominantemente por capas medias y delgadas de
arenitas de grano fino, tabulares, bien seleccionadas, con contactos netos planos, granos
subredondeados a subangulares, esféricos a subesféricos, con predominancia de
laminación plana paralela y, en menor proporción, estratificación convoluta, ondulada
paralela, ondulada no paralela y hummocky; son generalmente friables, presentan
estructuras de deformación sinsedimentaria (figura 213 B) y bioturbación baja a
moderada (Taylor y Goldring, 1993) con trazas de planolites, arenicolites y ophiomorpha
(figura 213 C); estos niveles arenosos están intercalados con: capas medias a delgadas
de limolitas arenosas con láminas de materia orgánica con restos vegetales y de
moluscos, con presencia de estructuras en flama y calcos de carga (figura 213 A); y, capas
gruesas y muy gruesas de arenitas de grano fino a medio con cicatrices de erosión e
intraclastos en la base, y concreciones calcáreas con diámetros centimétricos a
decimétricos. La proporción de arenitas en relación a las limolitas arenosas en este
segmento es 85:15, aproximadamente.
La secuencia comprendida entre los 170 y los 242 m (figura 212) está constituida por
capas medias y delgadas, tabulares, con contactos netos planos de arenitas de tamaño
de grano medio y fino (figura 214 A), moderadamente seleccionadas, con granos
subangulares y subesféricos a subelongados, con laminación plana paralela a ondulada
paralela, cemento calcáreo y algunas láminas ricas en óxidos de hierro, moscovita y
materia orgánica; están intercaladas con capas medias y delgadas tabulares de limolitas
y lodolitas, con estratificación plana paralela y ondulada paralela, con láminas de yeso y
restos fósiles de plantas mal conservados (figura 214 B y C). La bioturbación es escasa
(Taylor y Goldring, 1993) con algunas trazas horizontales en la interfaz entre las capas
arenosas y lodosas.
Las mejores exposiciones de esta secuencia están en la vía que San Pedro Consolado
conduce a El Guamo (zona sur O23 y O24) y en el carreteable que va de San José de Lata
a El Guamo (M24).
Figura 213. Afloramiento en el curso del arroyo Las Tinas (N: 1598907; E: 893707)
A. Intercalación de arenitas y limolitas carbonosas con trazas fósiles horizontales (flechas rojas) y
estructuras en flama (flecha amarilla). B. Misma locación. Estructuras de deformación en sedimentos
blandos asociadas a slumps. C. Afloramiento en predios de la finca El Desprecio (N: 1608691; E: 894396)
Detalle del tope de uno de los estratos arenosos. Planolites? (flecha blanca), arenicolites (flechas rojas) y
marcas de arrastre (flecha amarilla)
Fuente: autores
Figura 214. Vía El Guamo – San José de Lata (N: 1601975; E: 901247)
A. Intercalación de capas tabulares delgadas de limolitas arenosas y arenitas de grano muy fino, con
capas medias de arenitas de grano fino. B. Afloramiento en el curso del arroyo Canime (N: 1606781; E:
897982) Capas delgadas y muy delgadas de limolitas arenosas con láminas de yeso. C. Vía El Guamo –
San José de Lata (N: 1601982; E: 900004) Fragmentos de hojas mal preservados en arenitas
Fuente: autores
Duque Caro et al., 1996 reportan que la Formación Rancho corresponde a las zonas
planctónicas N.13 a N.18, Mioceno tardío – Plioceno temprano. Peters y Sarmiento (1956
en Guzmán et al., 2004) le asigna una edad de Oligoceno tardío en la zona de los
foraminíferos Guttulina caudriae y Planulina karsteni.
Figura 215. Izquierda, luz plana; derecha, luz polarizada. Superior. IGM 5063964
4x. Barra = 500 μm. Arcosa lítica de grano fino bien sorteada, compuesta predominantemente por
clastos subangulares a subredondeados de cuarzo monocristalino, plagioclasa y líticos metamórficos.
Medio. IGM 5064276. 20x. Barra = 100 μm. Litoarenita feldespática de grano muy fino a fino con
cemento calcáreo; clastos euhedrales de hornablenda, y subhedrales de zoisita y clorita. Inferior. IGM
5064056. 20x. Barra = 100 μm. Litoarenita feldespática de grano fino con epimatriz producto de la
alteración diagenética de fragmentos líticos
Fuente: autores
La Formación Arjona, aflora al norte del canal del dique, hacia el noroeste y oeste de la
zona de estudio y cubre un área de 411,39 Km2 (figura 217). Los mejores afloramientos
se han localizado en los alrededores de los municipios de Arjona, Turbaco y Villanueva,
en los arroyos Zipacoa, Coco, Bijagual, Colorado y Toro, en el municipio de Villanueva
(Zona norte D9, E9 y F9); el arroyo Pozones en Turbaco y los arroyos San Sebastián y San
Luis en el municipio de Arjona (Zona sur N9, O9, J7). La expresión geomorfológica de la
unidad es similar a la de la Formación San Cayetano en la zona norte del área de estudio
y está compuesta por lomeríos fuertemente disectados por drenajes (figura 218).
que los afloramientos de la base, se localizan los alrededores del municipio de Turbaco,
cerca al contacto con la Formación La Popa.
Para esta unidad no fue posible realizar una columna estratigráfica, sin embargo, se
describen las características litofaciales de la formación a partir de secciones y
afloramientos aislados y se propone una columna esquemática idealizada (figura 219).
Los espesores reportados en cada una de las localidades son aproximados. Las
descripciones litológicas presentadas a continuación se hacen de base a tope con
criterios eminentemente cartográficos, donde la base de la Formación Arjona
corresponde a los sectores de Rocha, Turbaco, Cañaveral y arroyo Pozones (Zona sur N9,
O9, J7), la parte media y tope a los sectores del municipio de Arjona (Zona sur Arroyos
San Sebastián, Flechas y San Luis N9, O9, J7), y el tope de la Formación, a las localidades
de Villanueva y Zipacoa (Finca Ariguaya, arroyos Zipacoa, Coco, Bijagual, Plátano y Toro
Villanueva (Zona norte D9, E9 y F9).
Por la carretera que conduce del municipio de Arjona al corregimiento de Rocha (E3 del
mapa sur) se encuentran afloramientos puntuales, que muestran parte de la base de la
Formación Arjona con espesores entre 5 a 10 m. Se reconoce una secuencia de capas
delgadas (figura 220), con geometría tabular y contactos netos, compuestas por arenitas
lodosas con tamaño de grano muy fino, los granos son subangulares y el color es naranja
amarillento pálido (10YR 8/6); estas capas se encuentran intercaladas con capas
delgadas de lodolitas arenosas de color gris.
Los intervalos arenosos están compuestos por cuarzo, líticos negros, marrones y micas;
texturalmente los granos son subangulares a subredondeados y subesféricos.
Ocasionalmente se presentan láminas de material carbonoso. En los niveles arenosos se
observa estratificación plano-paralela, cruzada y ondulada.
En el sector Turbaco - Cañaveral sobre los cauces de los arroyos Platanito y Vieja Agua
en los alrededores del municipio de Turbaco (J6 y J7 del mapa norte). Aflora algunos
afloramientos puntuales de la Formación Arjona de hasta 10 m de espesor. Aunque la
exposición de esta unidad es moderada, se logran identificar un conjunto de capas
medias y delgadas (figura 222) con geometría tabular y ondulosa, en contactos netos y
algunos transicionales, constituidas por arenitas de grano fino a medio. Texturalmente
los granos son subangulares - subredondeadas, baja esfericidad y calibración moderada.
Sobre el arroyo Pozones y sus afluentes cercanos, en el noreste del municipio de Turbaco
(H8 del mapa norte), se realiza un recorrido entre las estaciones ACM-333 y ACM-337
que cubre un intervalo de aproximadamente 200 m de espesor hacia la base de la
Formación Arjona. Se observa una secuencia homogénea de capas medias a delgadas de
geometría tabular compuestas de arenitas lodosas de tamaño de grano muy fino,
intercaladas con capas medias de lodolitas físiles (figura 223 A y B). Texturalmente los
granos son subredondeados a subangulares, presentan coloración verde pálido (5G 7/2);
y azul pálido (5B 6/2). En los intervalos lodosos se encuentran ocasionalmente capas
medias de calizas de textura mudstone con geometría lenticular (figura 224 A y B).
Figura 223. Afloramiento de los intervalos finos de la Formación Arjona por el arroyo Pozones
(A)
B. Detalle de las lodolitas y arenitas de grano muy fino lodosas. Estación ACM-333
(N: 1638544, E: 864054)
Fuente: autores
Figura 224. Lentes de caliza de la Formación Arjona por el arroyo Pozones (A)
B. Detalle de los lentes de caliza con textura mudstone. Estación ACM-334
(Norte: 1638855 Este: 864183)
Fuente: autores
Al este del municipio de Arjona en la vereda San Luis, al sur del corregimiento de San
José de Chiquito, fluye el arroyo San Luis (L9 y L10 del mapa norte), sobre el que se
encuentra el flanco sureste del anticlinal de Arjona, donde se encuentra una buena
exposición de la Formación Arjona (Entre 500 metros de la parte media y tope). Se
encuentran afloramientos compuestos por capas gruesas a medias de geometría tabular
(figura 225), constituidas por arenitas de grano medio a grueso, con contactos netos,
continuos y también contactos transicionales (figura 225, figura 226 A y B), presentan
estratificación convoluta y estratificación tipo “wavy bedding”. Texturalmente los granos
son subangulares con calibrado de moderado a malo, las arenitas se encuentran
intercaladas con lodolitas físiles ricas en materia orgánica y capas muy delgadas y
delgadas de carbón (figura 227 A y B) con espesores de 5 a 10 cm.
Figura 227. Afloramiento de la formación Arjona sobre el cauce del arroyo San Luis (A.)
B. Capas de arenitas amalgamadas con contactos difusos y cintas de carbón. Dato estructural N20E/44SE.
Estación ACM-352, (N: 1631132, E: 867919)
Fuente: autores
Al norte del municipio de Arjona en la region de Flechas (J7 del mapa norte) se realiza un
recorrido sobre el arroyo Flechas entre las estaciones HAP-322 y HAP-328; donde se
encuentran varios afloramientos de la Formación Arjona que se distribuyen a lo largo del
cauce y alcanzan aproximadamente 300 metros de espesor. En esta localidad, la
Formación está constituida por capas delgadas a medias de geometría trabular, de
arenitas intercaladas con lodolitas y lodolitas arenosas. Algunas capas presentan
geometria lenticular. Las arenitas tienen tamaño de grano fino a medio y algunas
presentan cemento siliceo. El color es naranaja amarillento oscuro (10YR6/6) y gris oliva
claro (5Y5/2). En la parte media del arroyo se presentan arenitas de grano grueso a muy
grueso ligeramente conglomeráticas, dispuestas en capas muy gruesas con geometria
lenticular y contactos netos y ondulosos. La fracción rudítica está compuesta por cuarzos
esféricos, líticos de chert, líticos sedimentarios de caliza y líticos volcánicos. Hacia el sur
del arroyo Flechas la litología está compuesta por sedimentos finos, con segmentos
constituidos por lodolitas y arcillolitas calcáreas, con lentes delgados de micritas color
naranja muy pálido (10YR 8/2), con bioperturbacion con presencia de trazas verticales
de icnofosiles de 15 cm (figura 228 ), seguidos por capas delgadas y medias a gruesas de
arenitas de grano grueso a muy grueso muy fracturadas de geometría lenticular (figura
229) los granos son subredondeados a subangulares y presentan una selección
moderada.
Al noreste del municipio de Arjona, en el arroyo San Sebastián, vereda el Tigre (N9 y M9
del mapa norte), aflora una sección de la Formación Arjona, con buzamientos hacia el
sureste. Debido a que el cauce del arroyo va casi paralelo al buzamiento de las capas, se
expone una secuencia de aproximadamente 700 m de Formación. Esta sucesión está
compuesta por intercalaciones de capas delgadas, medias y gruesas de arenitas, lodolitas
y lodolitas arenosas, predominando la fracción arenosa (80%) sobre las lodolitas (20%).
Las arenitas tienen tamaño de grano fino a medio; con granos subangulares a
subredondeados y subesféricos. Las lodolitas son ricas en materia orgánica y presentan
láminas delgadas de carbón. Por el mismo arroyo, se encuentran capas medias a gruesas
de conglomerados arenosos matriz-soportados (figura 230 A y B). La matriz es arenosa y
pobremente seleccionada compuesta principalmente por granos de cuarzo. Los clastos
varían en tamaño desde gránulos a guijos con contornos subangulares a redondeados y
El arroyo Zipacoa se localiza al noroeste del corregimiento del mismo nombre (G9 del
mapa norte). El recorrido realizado fue desde la estación ACM-328 hasta la estación
ACM-331, se encuentran varios afloramientos con buena exposición y que comprenden
aproximadamente 300 metros de espesor de la Formación Arjona. La litología observada
en el arroyo Zipacoa, corresponde a intercalaciones de arenitas, arenitas lodosas con
lodolitas y lodolitas arenosas (figura 234); las capas de arenitas varían en espesor, desde
delgadas a medias (figura 235 A y B); con geometría tabular y contactos netos; el tamaño
de grano es fino a medio predominando el grano medio, los granos son subangulares a
angulares; calibrado moderado y color marrón a amarillento pálido (10YR 6/2). Algunas
capas de arenitas tienen cemento calcáreo.
intercaladas con esporádicas capas delgadas de arenitas de grano fino y color gris
amarillento (5Y 8/1), con estructura ondulosa continua (figura 236 C).
Figura 236. Afloramiento fracturado de la Formación Arjona por el arroyo Coco (A.)
B. Capas tabulares de arenitas de grano grueso. C. Estructura ondulosa continua Estación HAP-307
(coordenadas N: 1640557, E: 867921)
Fuente: autores
Hacia el este del casco urbano de Zipacoa, con dirección al sector Medellín (H11 del mapa
norte), se encuentran afloramientos aislados y cubiertos por vegetación,
esporádicamente se encuentran afloramientos pequeños que muestran unos pocos
metros de la secuencia de la Formación Arjona (figura 236) están compuestos por capas
medias a gruesas aparentemente tabulares de arenitas lodosas con tamaño de grano
medio a grueso y color amarillo grisáceo (5Y 8/4). Presentan alto grado de
bioperturbación, relictos de laminación plano-paralela, ondulitas. Los intervalos
arenosos presentan alto grado de fracturamiento.
Por el arroyo Toro (D8 y D9 del mapa norte) aflora la Formación Arjona en afloramientos
puntuales con poca continuidad que muestran unos 10 metros de espesor de la
secuencia de la Formación Arjona. La secuencia está compuesta por intercalaciones de
arenitas y lodolitas, con marcado predominio de la fracción lodosa (figura 238 A y B) (70%
de lodolitas y 30% de arenitas). Las arenitas están dispuestas en capas medias a gruesas
tabulares; el tamaño de grano es medio y ocasionalmente grueso. Texturalmente los
granos son subangulares - subredondeadas y su color es 5Y 7/2. Las lodolitas están
fracturadas y su color es N8; en algunos sectores presentan pátinas de óxido.
Por el arroyo Toro se observan capas delgadas tabulares constituidas por arenitas de
grano muy fino y lodosas; bioperturbadas con relictos de laminación ondulada y
presencia de madrigueras. La roca fresca es de color gris azuloso medio (5B 5/1) y
presenta una alteración de color gris amarillento (5Y 7/2). Predominan las lodolitas
calcáreas de color gris muy claro (N8) con pátinas de óxido de hierro y restos vegetales.
Posición
estratigráfica IGM Muestras Este Norte Localidad Clasificación
aproximada
Arroyo Colorado del Arcosa Lítica (Folk,
5064970 HAP-310-P 867921 1640557
municipio de Villanueva 1974)
Bioesparita (Folk, 1962)
5066964 VCB-220-P 866358 1648401 Municipio de Villanueva Grainstone (Dunham,
1962)
Litoarenita
5066974 VCB-236-P 870202 1638582 Municipio de Villanueva Feldespática (Folk,
1974)
Fuete: Autores
Las muestras con esta clasificación presentan dos tamaños de grano predominantes,
arena fina a muy fina con buena selección y clastos subangulares a subredondeados y
arena media con mala selección y clastos angulares a subredondeados con contactos
longitudinales. Composicionalmente presentan cuarzo entre 29% y 60%, feldespatos
alrededor del 13%, con predominio del feldespato potásico sobre la plagioclasa y líticos
9%; Es común encontrar a las arcosas líticas que tengan cemento calcáreo tipo esparita
de origen diagenético, distribuido de manera heterogénea en las rocas en porcentajes
que varían de 0%-43%. Se identificaron bioclastos de foraminíferos planctónicos,
bentónicos y algas rojas. Las arcosas líticas se caracterizan por ser inmaduras
composicionalmente y tienen porosidad secundaria asociada a diaclasas. La figura 241 A
y B muestra la sección IGM 5064966 (JAO-241-P-A) y de La figura 241 C y D la IGM
5064953 (GDG288-P) ambas secciones arcosas líticas.
Texturalmente predomina el tamaño de grano arena fina, los granos son alargados,
angulares a subredondeados, la selección es de mala a moderada. Composicionalmente,
en promedio, tiene 43% de cuarzo, 14% de líticos (entre volcánicos y metamórficos) y
11% de feldespatos (predomina el feldespato potásico sobre la plagioclasa). Es común
que las litoarenitas tengan cemento calcáreo, que varía de 4% a 33%, el origen es
diagenético y posterior al fracturamiento de la roca, de forma que las fracturas o
diaclasas se encuentran rellenas de cemento calcáreo. Se identificaron bioclastos de
foraminíferos planctónicos, bentónicos y algas rojas; en algunas secciones se evidencia
el desarrollo de matriz arcillosa. En la figura 242 A y B muestra un alga roja en la muestra
IGM 5064960 (GDG-293-P), y la figura 242 C y D muestra la sección IGM 5064960 (GDG-
293-P) una litoarenita feldespática de la Formación Arjona.
La única roca catalogada como arcosa es la muestra 5066978 (Sector de Rocha), esta
corresponde a una arena de grano muy fino y se puede ver granocrecimiento a arena de
grano medio, los clastos son subangulares a subredondeados; se reconocen fragmentos
de foraminíferos. Está compuesta por 44% de cuarzo monocristalino, 13% de
feldespatos, 3% de líticos y 8% de anfíboles, epidota, glauconita y oxi-hidróxidos de
hierro. La sección posee cemento calcáreo de origen diagenético, que equivale al 32%,
el cual se encuentra corroyendo los clastos. La roca posee laminación plana paralela,
porosidad secundaria asociada al desarrollo de diaclasas y es inmadura
composicionalmente. Las rocas subarcosas tienen tamaño de grano arena fina a muy
fina, con granos angulares a subredondeados, moderadamente seleccionados. La
muestra 5064307 (figura 243 A y B) posee cemento calcáreo (39%) y 45% de cuarzo. Las
muestras 5064964 y 5064972, poseen más del 65% de cuarzo y entre el 6-10% de matriz
arcillosa. Las muestras son composicionalmente inmaduras. La figura 243 A y B muestra
la sección IGM 5066978 (JJV517-P) clasificada como Arcosa.
Las rocas calcáreas son mucho menos frecuentes que las rocas terrígenas, para la
Formación Arjona las rocas calcáreas corresponden a grainstones y mudstones. Las
muestras poseen macroforaminíferos de la familia Nummulitidae, fragmentos de valvas
de ostreidos y de algas rojas. Es común encontrar material terrígeno en las calizas,
principalmente granos de cuarzo y fracturas rellenas calcita. La figura 244 A y B muestra
la sección IGM 5064297 (ANM 226-P) clasificada como Mudstone algunas de las
secciones calcáreas de la Formación Arjona, la figura 244 C y D muestra algas y
fragmentos de bioclastos de la muestra IGM 5064954 (GDG-283-P) y las figuras 244 E y
F un foraminífero Nummulitidae de la misma muestra.
Para nanofósiles las muestras resultaron estériles, excepto la muestra VCB-222 que tuvo
recobro de las especies: Discoaster deflandrei, Sphenolithus disbelemnos y
Triquetrorhabdulus carinatus (figura 245) de preservación moderada y alta abundancia,
estas especies permiten asignar una edad de Mioceno temprano (Aquitaniano –
Burdigaliano).
(figura 246), que permite asignar una edad de Mioceno tardío (tabla 25). Los intervalos
de edad que dan los foraminíferos son muy amplios, y para la Formación Arjona se
descarta la posibilidad de una edad del Cretácico.
Especímenes Localidad
diagnósticos de
Muestra Edad Paleoambiente
edad con
foraminíferos
Spiroplectamina Arroyo Colorado,
spectabilis, municipio de Villanueva
HAP- 310- Haplophragmoides Maastrichtiano - Marino batial -
Fo walteri, Nothia Eoceno tardío abisal
excelsa, Nothia
robusta
Rzehakina Maastrichtiano a Arroyo Colorado,
HAP-311-Fo Marino batial
fissistomata Paleoceno municipio de Villanueva
Cretácico tardío Arroyo Flechas,
Psammosphaera Marino batial -
HAP-327-Fo – Mioceno municipio de Turbaco
fusca, Nothia robusta abisal
temprano
Nothia robusta, Arroyo Coco, Municipio
PAR-1955- Cretácico Tardío
Nothia excelsa, Batial - Abisal de Villanueva
Fo al Paleógeno.
Bathysiphon sp.
Nerítico Arroyo Flechas
PAR-1975- Ammosphaeroidina Campaniano a
superior a
Fo pseudopauciloculata Mioceno
abisal.
Ammodiscus Maastrichtiano - Municipio de villanueva
JJV-457-Fo Batial
glabratus Eoceno
PAR-1977- Campaniano Arroyo Flechas
Reophax duplex Batial
Fo Tardío al reciente
Neogloboquadrina Arroyo Toro, municipio
acostaensis, de Villanueva
VCB-222-Fo Mioceno tardío No diagnóstico
Paragloborotalia
continuosa
Fuente: autores
Tabla 26. Muestras con resultados diagnostico con palinología para la Formación Arjona
Fuente: autores
Figura 247. Algunos granos de polen encontradas en algunas de las muestras para la
Formacion Arjona
Fuente: autores
En síntesis, para la Formación Arjona se toma el Mioceno como edad para esta unidad;
se tienen en cuenta la presencia de palinomorfos típicos del Mioceno como:
Malvacipolloides maristellae, Bombacacidites muinaneorum y Nijssenosporites fossulat
us, como también los resultados de nanofósiles Discoaster deflandrei, Sphenolithus disb
elemnos y Triquetrorhabdulus carinatus y foraminíferos Neogloboquadrina acostaensis,
Paragloborotalia continuosa.
Otros autores que han reportado edades para la Formación Arjona corresponden a
Anderson (1929, en De Porta et al., 1974) quien asigna una edad Mioceno, así mismo
Bürgl (1961) propone una edad Oligoceno superior. En la Plancha 29-30 se determinó
una edad de Oligoceno superior - Mioceno, Guzmán et al. (2004) la asigna al Oligoceno
superior - Plioceno, aunque señala que faltan estudios bioestratigráficos para precisar la
edad de la unidad.
Según Reyes et al., 2001 la Formación Arjona se correlaciona con las Formaciones
Carmen en el área del Carmen de Bolívar, Porquero del área de Montería y Las Perdices
en el área de Luruaco. En Guzmán et al. (2004), se menciona que la Formación Arjona,
también se correlaciona con la Formación Bayunca que aflora en la misma área y
probablemente se correlaciona con las Formaciones Porquera, El Cerrito, Rancho,
Mandatú, Jesús del Monte, Zambrano, Sincelejo y Tubará del Cinturón de a la Formación
San Cayetano (E1E2sc) San Jacinto. Anderson (1926 en De Porta et al., 1974) correlaciona
la Formación Arjona con el “Carmen Group” del Oligoceno – Mioceno inferior del área
del Valle Inferior del Magdalena.
Las muestras de esta unidad, colectadas para palinología dieron buen recobro con
abundancia de fitoclastos y en algunas muestras de lodolitas se tiene presencia de
dinoflagelados. De estas observaciones se interpreta que el ambiente de depósito
corresponde a un área marina somera con aporte de material continental. Por su parte
las muestras con foraminíferos dieron menor recobro, pero los ejemplares encontrados
en ellas sugieren un ambiente marino de transición entre batial y abisal.
En las planchas geológicas número 16 y 17, Barrera (2001) presenta las características
texturales de la Formación Arjona, con una interpretación de ambiente marino
profundo, con aporte de material terrígeno, reportando además un contenido fósil que
indica un ambiente marino de zonas batiales.
De otro lado en las planchas geológicas 23 y 29 Reyes et al. (2001), concluyen que las
rocas de la Formación Arjona corresponden a un ambiente marino más somero de
plataforma continental. En el que habría flujos de gravedad en las zonas de cambio de
pendiente de dicha plataforma.
Guzmán et al. (2004) indican que esta Formación muestra una sedimentación de origen
marino somero de tipo deltaico entre transicional y continental, así mismo, Aguilera
(2011) mantiene esta interpretación.
En el mismo sector, hacia Cienaguita (A17 Mapa geológico Sinú San Jacinto Zona Norte)
están expuestas capas medias tabulares de arenitas de grano fino, con laminación plana
paralela que se denota por variación de color naranja pálido (10YR 8/2) con láminas
delgadas de color café moderado (5YR 3/4) por oxidación, las arenitas están interpuestas
con capas delgadas y muy delgadas de lodolitas físiles de color amarillo moderado (5Y
7/6) con laminación plana paralela ligeramente ondulada, con niveles de arcillolitas de
color gris claro (N7) (figura 251 A y B).
A B
C D
A B
C D
E F G H
J K
L
Tabla 27. Síntesis de clasificación petrográfica y definición de petrofacies para siete secciones
delgadas de la Formación Tubará
Segmento IGM Estación Clasificación petrográfica Petrofacies
Arcosa lítica de grano fino con Arcosa lítica de grano fino con
Medio 5064390 ANM096
cemento esparítico cemento esparítico
son pizarras y esquistos cuarzosos (1,7 a 5,2%); los fragmentos líticos sedimentarios
corresponden a chert, arenitas y arcillolitas (2,5 a 1,6%); como minerales accesorios
hornblenda, epidota, clorita, biotita, moscovita, clinopiroxeno y opacos, trazas de
titanita, zoisita y zircón, también se identifican trazas de posibles restos vegetales (figura
254 A y B).
Se analizó una sección delgada de número IGM: 5064083, corresponde a una roca
calcárea con aporte terrígeno (tabla 27), clasificada como bioesparita dispersa (Folk,
1962), con textura wackestone (Dunham, 1962). La fracción ortoquímica está constituida
por microesparita neoformada (46,2%), con textura en mosaico, y cristales tamaño
grueso, algunos exhiben macla polisintética, se encuentra invadiendo los bordes de
algunas partículas. La fracción aloquímica (23,3%) está constituida principalmente por
fragmentos desarticulados y fragmentados de bivalvos (figura 254 E y F), en menor
proporción y moderadamente preservados, gasterópodos, foraminíferos planctónicos
con geometrías esféricas.
500 µm
250 µm
Los análisis palinológicos se llevaron a cabo en siete muestras de las cuales, una muestra
presenta palinomorfos diagnósticos y seis no fueron diagnósticas. Los palinomorfos
identificados poseen una preservación regular y la abundancia es pobre (<100
palinomorfos en muestra). Los palinomorfos reportados corresponden a esporas:
Polypodiisporites sp., polen: Retitricolpites simplex y otros palinomorfos: Dinocyst indet
(figura 256).
20 µm 20 µm 20 µm
Arcidae indeterminado - - 2 - - -
Mactridae gen. et sp. 4 - - - 5 -
Ostrea sp. - 4 - - - -
Scapharca cf. inequilateralis - - - - 2 -
Bivalvos indeterminados - - 2 - 3 -
Total 70 42 18 28 15 10
Fuente: autores
La interposición de capas medias y finas de arenitas muy finas, con laminación plana
paralela y variación de color amarillo claro y naranja respectivamente, se relacionan con
influencia mareal (Reineck, E, Singh, 1980). La ocurrencia de fitodetritos milimétricos
puede asociarse con aportes esporádicos desde zonas onshore o foreshore donde se
acumulan restos vegetales, y se removilizan con corrientes mareales hacia zonas marinas
someras (Reineck, E, Singh, 1980).
Guzmán et al. (2004) y Zapata et al. (2001) postulan un ambiente marino somero con
base en el predominio de Buliminella elegantísima y Ammonia becarri, el alto contenido
de moluscos desartículados y mezclados con fragmentos líticos; la ocurrencia de material
carbonoso y yeso laminar estaría asociado con ambientes lagunares. En el pozo El
Coconuco la Agencia Nacional de Hidrocarburos (ANH) interpreta ambientes marinos
someros a plataforma con caídas de ceniza y flujos piroclásticos. Para Reyes, Guzmán,
Barbosa, & Zapata (2001), el ambiente de depositación corresponde con abanicos
submarinos proximales.
El nombre de Grupo La Popa fue definido por Anderson (1926), quien lo describe como
un conjunto de shales arenosos, areniscas con presencia de corales y arrecifes coralinos
que se encuentran elevados y están expuestos en los alrededores de Cartagena.
Posteriormente el mismo autor en 1929, redefine la unidad como Formación La Popa,
nombre que proviene del Cerro La Popa, ubicado en la ciudad de Cartagena, donde
consta de shales arenosos poco consolidados bien estratificados y horizontes de margas
calcáreas, separando a las calizas coralinas que afloran en el tope del cerro en mención
(Anderson, 1929).
Mendivelso, Carvajal & Pinzón (2010), destacan que el desarrollo de cuestas en rocas de
la Formación La Popa permite establecer y atribuir el origen de estos basculamientos a
la actividad neotectónica relacionada localmente a movimientos verticales asociados a
diapirismo de lodo.
Con base en lo propuesto por Camacho & Valdiri (1968), en este trabajo se nombran y
describen los niveles en los cuales fue dividida la Formación. La base de la sección
estratigráfica corresponde al tope del Nivel Detrítico, con un espesor de 35.7 m; por su
parte el tope de la sección corresponde al Nivel de Calizas Arrecifales, con un espesor de
36 m.
3.2.4.3.1.1 Segmento A
Capas medias a muy gruesas, tabulares de 9.1 m de espesor total con contactos netos,
conformadas por arenitas de grano fino a medio, con buena selección, granos
subangulares a subredondeados, con laminación cruzada planar y en artesa (figura 261
A y B), gradación normal, con bioturbación 1 a 2 (Taylor y Goldring 2007), de color marrón
amarillo moderado (10YR5/4). Composicionalmente presenta cuarzo hialino (92%),
líticos (7%), óxidos de hierro (1%) y fitodetritos (restos de hojas), clasificada como
sublitoarenita con cemento calcáreo, según Folk (1974). Ocasionalmente, presenta
acumulaciones de gránulos a guijos con laminación cruzada planar (figura 261 B), clastos
redondeados a subredondeados, compuestos por cuarzos lechosos, liditas, chert, líticos
sedimentarios y fragmentos calcáreos.
3.2.4.3.1.2 Segmento B
Sucesión de Capas medias a muy gruesas con 12.3 m de espesor total, de contactos
netos, conformadas por lodolitas y lodolitas arenosas calcáreas, masivas, con grado de
bioturbación 2 a 3 (Taylor y Goldring 2007), con variación de colores oliva pálido (10Y
6/2), gris oliva claro (5Y 5/2) y lentes de arenitas de color marrón claro (5Y 6/4) y amarillo
oscuro naranjado (10YR 6/6) (figura 262 A y B), en sectores se presentan acumulaciones
de fitodetritos como restos de hojas (figura 262 B). Presenta lentes delgados a medios
de cuarzoarenitas de grano fino a medio, subangulares a subredondeados (figura 262 A),
moderadamente seleccionada y bioturbación grado 2 – 3, compuesta por cuarzo hialino
y lechoso (93%) y líticos (7%) y acumulaciones de fitodetritos entre ellos fragmentos de
hojas.
3.2.4.3.1.3 Segmento C
Capas muy gruesas masivas, tabulares con 10.3 m de espesor total, contactos netos,
conformadas por arenitas de grano fino a medio, subangulares a subredondeados, color
naranja amarillento oscuro (10YR 6/6) y gris amarillento (5Y 7/2), selección moderada,
laminación plano paralela intercaladas con capas delgadas de lodolita, grado de
bioturbación de 2 a 3 (Taylor y Goldring 2007), se identifican niveles de hardgrounds y
madrigueras de Ophiomorpha? dispuestas en forma vertical (figura 263 A) de tamaños
entre 1 – 4 cm de diámetro y 1 – 20 cm de largo, con mayor concentración hacia el tope
del segmento (figura 263 A y B). Composicionalmente consta de cuarzo hialino y lechoso
(93%), líticos (5%), micas 1% y óxidos de hierro 1%, clasificada como sublitoarenita, según
Folk (1974).
3.2.4.3.1.4 Segmento D
Capas gruesas a muy gruesa, tabulares con 3.5 m de espesor total, de contactos netos
conformadas por arcillolitas masivas ocasionalmente calcáreas de color gris amarillento
(5Y 7/2) con desarrollo de oxidación, laminación plana paralela discontinua (figura 264 A
y B), presencia de fracturas y grietas de desecación rellenas de material arenoso silíceo
(figura 264 A). Se presentan esporádicos lentes de caliza tipo wackestone donde se
reconocen moldes externos e internos de bivalvos y gasterópodos sin orientación
determinada.
3.2.4.3.1.5 Segmento E
Capa gruesa, tabular de 0.5 m de espesor con contactos netos de color amarillo pálido
naranja (10YR 8/6), conformada por rudstones coralinos (Dunham 1962 y Embry y
Klovan, 1971) (figura 265 A y B). La matriz corresponde a lodolitas arenosas, mientras el
armazón se encuentra constituido por fragmentos de individuos coralinos con tamaños
>2 mm, los bioclastos presentan en promedio tamaño guijo y se encuentran ligeramente
fracturados, no se identifican estructuras sedimentarias ni orientación determinada de
los individuos (figura 265 B).
3.2.4.3.2.1 Segmento F
3.2.4.3.2.2 Segmento G
Capa muy gruesa masiva, tabular con espesor de 1.1 m en contacto neto ondulado,
compuesta por arenitas de grano muy grueso de color gris amarillento (5Y 8/1), con
granos subredondeados a subangulares, selección moderada, bioturbación de 3 a 4,
presenta fragmentos de bioclastos entre los que se cuentan gasterópodos y bivalvos,
además de cemento calcáreo. Composicionalmente está constituida por cuarzo hialino y
lechoso (92%), líticos negros (5%) y verdes claros (1%) y óxidos de hierro 2%,
clasificándose como una sublitoarenita calcárea (figura 268).
Presenta texturas que van de arena muy fina a media (0.07 a 0.4 mm), con granos
subangulares a subredondeadas, moderada selección, y contactos flotantes-
longitudinales (figura 270 A y B). Composicionalmente, está constituida por cuarzo
(35,9%) monocristalino principalmente y policristalino, feldespatos (1.7%), plagioclasas
(3%), fragmentos de bioclastos (5%) como foraminíferos, espinas de equinodermos y
rodolitos de algas rojas, con un tamaño promedio de 0.7 mm, líticos metamórficos (4%),
líticos sedimentarios (9.3%), materia orgánica (0.1%), glauconita (0.3%) y cemento
calcáreo tipo equant (40.7%).
Presenta textura que va de arena muy fina hasta arena gruesa, granos subangulares a
subredondeados, mala selección, los contactos son principalmente tangenciales,
flotantes y saturados en menor proporción, no se identifica laminación (figura 271 A y
B). Composicionalmente, presenta cuarzo monocristalino (68.5%), feldespato potásico
(2.7%), plagioclasas (1.5%), líticos metamórficos (5.0%), líticos sedimentarios (1.5%),
líticos ígneos (2.0%), moscovita (1.0%), glauconita (2.3%), óxidos de hierro dispersos en
la muestra y algunos fragmentos de minerales opacos (0.3%), arcilla intergranular con
distribución no uniforme producto de alteración (2.3%) y cemento silíceo (12.9%).
Packstone de algas rojas y corales (figura 272 A y B), se identifican bioclastos con textura
media (0.3mm), cemento esparítico (25%) y micrita como matriz (5%),
composicionalmente presenta fragmentos de algas rojas (57%), fragmentos de corales
(8%) y fragmentos de bioclastos (4%); Packstone de Bivalvos (figura 272 C y D); se
identifican bioclastos con textura media (0.2mm), cemento esparítico (30%) y matriz
micrita (10%), composicionalmente presenta fragmentos de bioclastos (46.9%) como
foraminíferos y restos de corales, fragmentos de bivalvos (2.7%), fragmentos de algas
rojas (4%) y esporádicos briozoos; cuarzo monocristalino (1.7%), líticos sedimentarios
(3.7%) y óxidos de hierro (1%) y Packstone coralinos (figura 271 E y F), se identifican
bioclastos con textura media (0.2mm a > 2mm), cemento esparítico (6%) y matriz micrita
(33%), composicionalmente presenta fragmentos de corales (55%), óxidos de hierro (4%)
y acumulaciones de materia orgánica (2%).
3.2.4.4.2.2 Mudstone
3.2.4.5.1 Macrofósiles
reconocen algas calcáreas del género Spongites sp. Se destacan las muestras AMP-365-
Ma-C, AMP-0368-Ma-D, AMP-368-Ma-A (figura 274 A B y C) y AMP-368-Ma-C, las cuales
exhiben una asociación del coral Siderastrea sp. (Coral hermatípico formador de arrecifes
organizado en colonias), el crustáceo Ceratoconcha sp. y bivalvos perforadores no
identificados, estas muestras aportan una mejor resolución bioestratigráfica, con una
edad que va del Plioceno al Reciente.
Tabla 32. Síntesis de resultados bioestratigráficos de macrofósiles de la Formación La Popa, incluye el número de especímenes
recolectados para cada muestra analizada
MUESTRAS
ASOCIACIACIÓN FAUNÍSTICA AMP AMP AMP AMP AMP AMP AMP AMP
AMP AMP AMP
0365 0365 0366 0367 0368 0368 0368 0368
0336 0343 0368 MaC
MaB MaC MaB MaB MaA MaB MaD MaE
Bivalvos
_ _ _ 2 _ _ 1 _ 10 _ _
perforadores
Bivalvos
Bivalvo
_ _ _ _ _ 1 _ _ _ _ _
indeterminado
Corales
1 _ _ _ _ _ _ _ _ _ _
(coloniales?)
Favites sp. _ _ _ _ _ _ _ 300 _ _ _
Corales
Siderastrea sp. _ _ _ 300 _ _ 300 _ 300 300 _
Cnidaria
_ _ _ _ 300 _ _ _ _ _ _
indeterminados
Icnitas: galerías
Icnofosiles _ 2 _ _ _ _ _ _ _ _ _
no identificables
Equinoder Espículas de
_ 50 _ _ _ _ _ _ _ _ _
mos equinodermo
Algas Spongites sp. _ _ 300 _ _ _ _ _ _ _ 300
Crustaceos Ceratoconcha sp. _ _ _ 4 _ _ 15 _ _ _ _
TOTAL 1 52 300 306 300 1 316 300 310 300 300
Fuente: autores
3.2.4.5.2 Nanofósiles
3.2.4.5.2.1 Foraminíferos
3.2.4.5.2.2 Palinología
3.2.4.6.1 Contacto
aledaños al municipio de Turbaco (Zona norte J2), en donde hacen parte del flanco oeste
de una estructura sinclinal. Dataciones reportadas en este trabajo para la Formación
Arjona le asignan edad de Mioceno. Por otra parte, a la Formación La Popa la suprayacen
de forma discordante unidades cuaternarias con dinámica y depositación actual
cartografiadas y nombradas en este trabajo como Depósitos Aluviales Actuales.
3.2.4.6.2 Espesor
Otros autores reportan espesores para la Formación La Popa los cuales varían según la
ubicación del afloramiento en donde fueron calculados. A continuación, se enuncian
algunos de ellos: Bürgl (1957), reporta un espesor de 150 m para la Formación La Popa
en el área de Cerro La Popa. Más adelante, Ángel et. al. (1985), reportan espesores para
la Unidad Detrítica del Popa de aproximadamente 1200 m medidos en el Pozo Baru-1,
158 m medidos en el Pozo Santa Rosa y 30 m para el Anticlinal de Pasacaballo, los mismos
autores reportan espesores para la Unidad Calizas Arrecífales del Popa de 70 m medidos
en la Cantera de Cimaco, 100 m en la Cantera de Albornoz, 40 y 80 m medidos los Pozos
INS y Coloncitos-1 respectiva y aproximadamente 20 m para el sector de Cañaveral.
Reyes et. al. (2001), reportan para el municipio de Turbaco (área de estudio del presente
proyecto) un espesor de 100 m o más y para el sector de Pasacaballo menor a 40 m.
Guzmán et. al. (2004) cita que el espesor promedio para la Formación es de 63 m. Como
uno de los trabajos más recientes Reyes (2008), reporta los siguientes espesores
asociados al lugar de levantamiento: sector de Manzanillo un espesor de 27.75 m
(Unidad Detrítica y Calcárea), sector de Arroyo de Piedra 11.45 m (Unidad Calcárea) y los
Pozos Bocacanoa-1 131.25 m, Bocacanoa-2 109.9 m, Bocacanoa-3 110.4 m y Bocacanoa-
4 93.82 m, en los cuales se describen las Unidades Detríticas y Calcáreas.
3.2.4.6.3 Correlaciones
3.3 Cuaternario
La Formación Rotinet aflora en los alrededores del embalse del Guájaro, donde fue
propuesta inicialmente por Link (1927) como “Rotine Gravels” para nombrar un abanico
de fragmentos de rocas ígneas, calizas y chert. Posteriormente el término fue utilizado
por Caro et al. (1985) para hacer referencia a los sedimentos que afloran en las
inmediaciones de la población de Rotinet y Aguada de Pablo; luego Reyes et al. (2001),
mantuvieron el nombre en la cartografía a escala 1:100.000. Guzmán et al. (2004) utiliza
el término Formación Rotinet, retirando la característica litológica del nombre. En este
trabajo se acoge el nombre el término asignado por Guzmán et al. (2004). La localidad
donde aflora y por la cual fue nombrado es la población de Rotinet, ubicada en la plancha
24IIIB del IGAC.
La Formación Rotinet, en el área de trabajo, tiene una extensión areal de 51.7 km2 (figura
279). Aflora al oeste de Villa Rosa, por la vía que conduce a San Estanislao de Kostka
(Zona norte E16, F17, F16, F15, F14, F13, G14), en el carreteable a Las Piedras, al este del
embalse del Guájaro y en inmediaciones de Aguada de Pablo (Zona norteA25, B23, B24
y B25) (figura 279).
Figura 280. Formación Rotinet en el área norte del proyecto Sinú - San Jacinto
Fuente: autores
Figura 282. Vista al oriente (100°Az) desde un alto conformado por arenitas de la
Formación Rotinet en el sector de Tierra Caliente
Se observa un filo formado por capas de la unidad que buzan hacia el sur, las coloraciones más rojizas
corresponden a litologías con predominio conglomerático, mientras que los tonos grises corresponden a
arenitas. El valle corresponde a depósitos de coluvión indiferenciados. Al fondo se observa el Embalse
del Guájaro. (N: 1644177, E: 883387)
Fuente: autores
El segmento intermedio aflora aguas arriba por el arroyo Los Platos (Zona norte F16), a
las afueras del casco urbano de San Estanislao en dirección NW, también por el camino
hacia el oeste de la finca Tierra Caliente, en el flanco oriental del Anticlinal de San
Estanislao (Reyes y Zapata, 1998) y al oeste de la finca Pica Pica (Zona norte E16-F16). El
segmento está compuesto principalmente por un conjunto de arenitas de grano medio
a muy grueso moderadamente seleccionadas con algunos gránulos (figura 285 C),
dispuestas en capas medias a gruesas, con estratificación cruzada en artesa (figura 284
A y B), y geometría canaliforme de relleno, con contactos netos, color gris verdoso claro
(5GY 8/1), localmente con intercalaciones de lodolitas verdes con laminación plana
paralela continua (figura 286). A la base de los niveles arenosos se observa
esporádicamente capas medias a gruesas lenticulares de conglomerados polimícticos
matriz soportados (figura 285 A y C), con clastos tamaño grava; la fracción rudítica está
compuesta por gránulos y guijos subredondeados y subelongados, con imbricación
unidireccional, mal seleccionados, compuestos por fragmentos líticos oscuros
(andesitas), sedimentarios (lodolitas y chert), cuarcitas, matriz arenosa, muy esporádicos
clastos de rocas metamórficas. La matriz, arena de grano medio a grueso, color 10YR 6/6,
constituida por abundantes fragmentos líticos, subredondeados a subangulares, de mala
selección.
Figura 286. Afloramiento de la Formación Rotinet cerca del casco urbano de Villa Rosa
segmento intermedio. A. Arenitas con estratificación inclinada en artesa y lentes de conglomerados
matriz soportado. B. Detalle de la estratificación cruzada en artesa de las arenitas. C- Detalle de la
composición de los guijos medios y gruesos del conglomerado. (N: 163480, E: 884498)
Fuente: autores
Las arenitas de grano medio aflorantes en este segmento (figura 287 A), presentan
procesos de erosión diferencial que generan estructuras esféricas de hasta 20 cm (figura
287 B, figura 288 Ay B) por acumulación de carbonato de calcio como cemento.
Adicionalmente se reconocen rizolitos y madrigueras (figura 288 C) rellenas de “caliche”
producidas por paleo-pedogenésis (figura 287 y figura 288). Composicionalmente
corresponden a litoarenitas y sublitoarenitas con fragmentos líticos (25%), feldespatos
(5%) y cuarzo (70%); dentro de los líticos se reconocen chert e intraclastos arcillosos.
Localmente hay intercalaciones de lodolitas verdes laminadas (laminación ondulosa),
con fragmentos vegetales carbonizados y muscovita.
Figura 289. Arenitas deleznables con estructuras esféricas por erosión diferencial (A.)
B. Detalle de las estructuras esféricas; las bandas blancas corresponden a niveles de calcretas. C. Detalle
de las calcretas; se observa además rizolitos y madrigueras, que a la vez presentan relleno de “caliche”
(N: 1643699, E: 880026)
Fuente: autores
Litoarenita
*5064978 VCB-218 1642192 875750 feldespática de grano
fino
Intermedio
Litoarenita
*5064391 ANM-123 1645096 879801 feldespática de grano
medio
Litoarenita de grano
*5064084 ACM-107 1643328 884552 Litoarenita medio con cemento
albítico
Fuente: autores
La sección delgada con IGM 5064084, texturalmente se clasifica como arenita de grano
fino a grueso (Folk, 1951), con moderada selección, tamaño de partículas promedio
arena media, que varía entre limo grueso a arena mediana, con granos subelongados,
subangulares a subredondeados, con contactos puntuales, flotantes, longitudinales y
contactos concavos-convexos.
Composicionalmente se clasifica como litoarenita (Folk, 1974) (figura 290) con cemento
albítico en una proporción mayor que las litoarenitas feldespáticas (11%); constituidas
por cuarzo monocristalino (49,39%), cuarzo policristalino (8,13%), plagioclasa (4%),
feldespato potásico (5,7%); fragmentos líticos sedimentarios (10,07%) que
corresponden en su mayoría a chert, limolitas arenosas y arenitas de grano muy fino;
fragmentos líticos volcánicos con textura hialocristalina de plagioclasa y porfirítica de
plagioclasa en una matriz afanítica aparecen al 3,64%; y fragmentos líticos metamórficos
de esquistos micáceos (14,56%), además de fragmentos de alteración hidrotermal
(2,43%); como minerales accesorios hornblenda, epidota, esfena, zircón, biotita, y
opacos (figura 292).
Figura 293. IGM: 5064084. Litoarenita de grano medio con cemento albítico
A y B. cuarzo (Qz), plagioclasa (Pl), feldespato alcalino (Fsp), horblenda (Hb), cemento albítico (Cal).
Lente 10X. Escala 200 µm. Izquierda: Nicoles cruzados, Derecha: Nicoles paralelos
Fuente: autores
alrededores del corregimiento Aguada de Pablo (E17 Zona norte, figura 279). El contacto
suprayacente, con los depósitos de coluvión indiferenciados, se observa en la figura 279
y es discordante.
En cuanto a las correlaciones, Guzmán et al. (2004) establecen que las gravas de Rotinet
corresponden al equivalente litológico de la Formación Cascajal de Henao (1951), y en
las planchas 23, 29 y 30 se correlacionan con la Formación Arroyo Grande por la edad y
litología, siendo de ambientes diferentes.
Según Caro et al. (1985) esta Formación es un depósito tipo distributary mouth bar, en
el sentido de Reineck & Sing (1975), asociados a un antiguo delta del río Magdalena.
3.3.2.1.1 Generalidades
Los Depósitos de Flujo de Lodo Volcánico son cartografiados en el área de estudio con
base en la interpretación de sensores remotos, su ubicación se restringe a zonas rurales
ubicadas al este del casco urbano del municipio de Turbaco (Zona norte J3). Son
identificados el Volcán de Lodo Cañaveral (Zona norte G6) y el Volcán de Lodo Turbaco
(Zona norte J5) los cuales ocupan un área total de 4.74 km². Los nombres, descripciones
de campo y fotografías adjuntas son tomadas del libro “Volcanismo de Lodo del Caribe
Central Colombiano” (Carvajal & Mendivelso, 2017).
3.3.2.1.2 Descripción
Se ubica al E del casco urbano del municipio de Turbaco, cubre un área cartografiada de
2.84 Km² (figura 295 A y B). Se caracteriza en una zona colinada baja de forma dómica,
elongada en dirección E-W, región conocida como La Loma de los Volcanes con un 1 km
de diámetro y 50 m de altura, en cuya cima se encuentran distribuidas más o menos 130
bocas de forma circular con conos de hasta 60 cm de altura. El lodo emanado presenta
color gris, verdoso y café aspecto untuoso (Carvajal & Mendivelso, 2017).
Figura 296. Emanaciones de lodo del volcán de Turbaco (A.). B. Alineación de bocas
del volcán de Turbaco
ubicación: Finca La Bonanza, municipio de Turbaco, departamento de Bolívar
Fuente: tomadas y modificadas de (Carvajal & Mendivelso, 2017)
3.3.2.2.1 Generalidades
Estos depósitos se caracterizan por presentar forma de abanico, con ápices hacia el NW
(área con topografía más elevada) y zona de expansión hacia el SE (área de topografía
baja), adyacente a los Depósitos del Canal del Dique. Cartografiado en áreas de
pendientes inclinada en la zona próxima a casi planas en la zona distal (Zuidam, 1985),
con índices de contraste del relieve moderado a muy bajo respectivamente.
4.2.1.2.2 Descripción
En la zona de estudio los Depósitos Fluvio Torrenciales presentan como material fuente
las rocas de las Formaciones San Cayetano y Arjona, los cuales se depositan en cercanías
y al oeste del Canal del Dique.
En el cauce del arroyo Las Tablas, área rural del municipio de Repelón (Zona norte J15)
se describe afloramiento de 3 metros de espesor (figura 297), con pendiente escarpada
que exhibe clastos con tamaños de guijos a bloques matriz soportadas, con formas
subangulares a subredondeadas, algunos clastos presentan imbricación; la matriz
corresponde a arenas conglomeráticas. Se identifican segmentos con gradación normal,
indicando la sobre posición y repetición de eventos. Los depósitos descritos se asocian
con eventos fluviotorrenciales con generación de geoforma de abanico y proveniencia
probable de la Formación San Cayetano.
3.3.2.3.1 Generalidades
3.3.2.3.2 Descripción
En el área rural del municipio de Mahates (Zona sur B14), en el pie o zona baja del
costado oeste del Cerro Capira se identifican bloques métricos de formas angulares
compuestos de arenitas conglomeráticas con guijos y guijarros redondeados, y arenitas
gruesas a muy muy gruesas, (figura 299 A), provenientes probablemente de la Formación
San Cayetano.
En el límite norte del municipio de San Juan Nepomuceno (Zona sur C22) en el pie o zona
baja del Cerro La Pelota, se caracterizó la ocurrencia de clastos y bloques de formas
angulares a subredondeadas, conformados texturalmente por arenitas conglomeráticas,
conglomerados arenosos y conglomerados de composición lítica y sublítica (figura 299
B), provenientes de la Formación San Jacinto.
3.3.2.4.1 Generalidades
3.3.2.4.2 Descripción
Sobre el arroyo Banco (Zona norte B15), hacia sus márgenes se cartografían Depósitos
Aluviales Actuales asociados a la dinámica actual del cauce, se observan materiales
transportados con tamaños de grano entre arenas y gravas tamaño bloque, se observa
la presencia de fragmentos de plantas y troncos. La incisión del drenaje expone escarpes
de hasta 12 metros de altura, con acumulación de sedimentos asociados a depósitos
aluviales subactuales (figura 300) con disposición horizontal, e intercalaciones de capas
gruesas a la base y medias hacia el tope, conformados de material no consolidado de
arenas finas y lodos arenosos, composicionalmente clasificadas como arenas sublíticas.
Sobre el cauce del arroyo Buena Vista (Zona sur D21), el cual cuenta con flujo
intermitente asociado a temporadas de lluvias; se caracteriza la presencia de arenas finas
a medias y gravas de tamaños gránulos a guijos con formas subredondeadas (figura 301
A y B). Las gravas se componen de chert, líticos volcánicos y sedimentarios de arenitas.
En este segmento el arroyo presenta forma meándrica, identificando diferencias
texturales entre los sedimentos ubicados en la zona de sedimentación o lóbulo (texturas
más finas) y la zona de erosión o cuello (texturas más gruesas).
3.3.2.5.1 Generalidades
3.3.2.5.2 Descripción
En el costado izquierdo (aguas abajo) del Canal del Dique, se caracteriza un perfil de 2
metros de alto (figura 302) que de base a techo presenta niveles gruesos a muy gruesos
de limo arcilloso con materia orgánica, arenas finas con granos subangulares y
subredondeados de buena selección, lodos arenosos con presencia de materia orgánica
y nivel de arcillas; en la totalidad de los niveles se reporta la presencia de micas con
contenidos entre el 3 a 5%.
En cercanías al casco urbano del corregimiento de Gambote (Zona sur F9) al costado
este del Canal del Dique, se realizó una perforación superficial de 70 cm (figura 303 A y
B) con equipo auger donde se recuperaron sedimentos no consolidados conformados
por arenas finas con granos medios a gruesos de forma angular a subangular, con muy
bajo a escaso contenido de lodo.
4 GEOLOGÍA ESTRUCTURAL
Este capítulo describe las principales estructuras geológicas del área de estudio definidas
a partir de información colectada en superficie durante las fases de campo, incluyendo
en algunos sectores restringidos imágenes sísmicas del subsuelo.
Los esquemas tectónicos que se rigen bajo este modelo proponen para el noroeste
colombiano el inicio de la subducción oblicua entre la Placa Caribe y la Placa
Suramericana en el Cretácico temprano, formando un arco volcánico en la prolongación
norte de la Cordillera Central (actualmente, el basamento cristalino del Valle Inferior del
Magdalena) denominado Arco Magmático de Magangué (Silva-Arias et al., 2016; Mora
et al., 2017); posteriormente, en el Eoceno medio se da la acreción del cinturón plegado
de San Jacinto e inicio de la subducción plana del plateau del Caribe, dando como
resultado el cese del magmatismo (Mora et al., 2017). En el Oligoceno empieza la
depositación de las rocas que conforman el cinturón plegado del Sinú, el cual es
acrecionado al borde occidental del cinturón plegado de San Jacinto a partir del Mioceno
(Cediel, Shaw, y Caceres, 2003), momento en el cual se presenta la colisión del bloque
Chocó-Panamá desencadenando el pico de mayor deformación dentro de la orogenia
andina (Mora et al., 2017).
La zona cartografiada tiene una extensión de 2700 km2, de los cuales el 70 por ciento
corresponden al cinturón plegado de San Jacinto y el 30 por ciento restante al cinturón
plegado del Sinú.
El cinturón plegado de San Jacinto está definido como el conjunto de tres franjas
discretas dispuestas en relevos izquierdos, que de sur a norte se denominan: anticlinorio
de San Jerónimo, anticlinorio de San Jacinto y anticlinorio de Luruaco; dichas estructuras
Dentro del polígono de estudio aflora el extremo norte del anticlinorio de San Jacinto y
el extremo sur del anticlinorio de Luruaco, donde en conjunto se presentan una serie de
pliegues y fallas con dirección general NE-SW con leves variaciones en dirección N-S. Las
fallas de primer orden son inversas con vergencia noroeste y un rumbo aproximado
N20°E-N30°E; asociadas a estas y en dirección N50°E-N60°E, se presentan fallas de
segundo orden con cinemática de rumbo destral que parecen separar zonas de mayor y
menor deformación. Los pliegues están representados por anticlinales y sinclinales
paralelos entre sí, con cabeceo hacia el noreste, que geométricamente varían desde
suaves hasta cerrados, con planos axiales subverticales con rumbo paralelo a la
tendencia general del cinturón.
Ubicado al oeste del cinturón plegado de San Jacinto, el cinturón plegado del Sinú ha
sido descrito como una estructura alargada con una extensión superior a los 500 km de
largo y 150 km de ancho. Comprende los anticlinorios de Tubará y Abibe-Las Palomas,
junto con la plataforma continental y el talud, costa afuera (Duque Caro, 1978). En la
zona de estudio está representado por una espesa secuencia sedimentaria con edades
que van del Oligoceno al reciente, cuya expresión en superficie se caracteriza por
presentar sinclinales amplios separados por anticlinales apretados dispuestos con una
tendencia aproximadamente paralela a los límites del cinturón.
El primer evento diastrófico ocurre entre en el Eoceno medio; dicho evento falla, pliega
y exhuma la Unidad predeformacional (A) permitiendo su erosión y la sincrónica
depositación discordante de la Unidad sindeformacional 1 (B) sobre los flancos dorsal y
frontal de un anticlinal por propagación de falla. En la bibliografía se encuentran
El segundo evento diastrófico ocurre en el Mioceno medio, el cual reactiva y repliega las
estructuras formadas durante el evento diastrófico del Eoceno, permite la erosión de las
formaciones más antiguas y la sincrónica depositación discordante de la Unidad
sindeformacional 2 (D). El origen de este evento es la colisión del Bloque Chocó-Panamá,
suceso que produce el escape tectónico del Bloque Norandino a lo largo del sistema de
fallas del oriente andino (Boschman et al., 2014) y controla la deformación del cinturón
plegado del Sinú, debido a que en respuesta a la colisión, cambia la dirección, sentido y
magnitud del vector de desplazamiento del Bloque Norandino, transformando el margen
convergente en un margen inactivo. Prueba de ello son las velocidades actuales de la
Placa Caribe medidas en el archipiélago de San Andrés (SAN0: 18.4 mm/año; CN35: 17.2
mm/año) en comparación a las medidas en las estaciones de GPS ubicadas en tierra
firme, próximas al área de estudio (BACO: 18.7 mm/año; BARU: 17.0 mm/año) (Mora-
Páez et al., 2019) (figura 308).
Figura 309. Vectores de GPS relativos a Suramérica estable; Bloque Norandino (NAB)
Cordillera Oriental (EC), Sistema de fallas del oriente andino (EAFS), Cinturón deformado del sur del
Caribe (SCDB), Bloque Panamá (PB)
Fuente: Mora-Páez et al., (2019)
Figura 310. Perfiles geológicos del Anticlinorio de San Jacinto (localización en la figura 4)
ilustrando las estructuras principales interpretadas a partir del trabajo de campo junto con los diagramas de polos de los pliegues más importantes;
nótese como los pliegues se hacen más apretados hacia el sur. E1E2sc: Formación San Cayetano; e5e2pa: Formación Palenque; e5e6m: Formación
Maco; e4e6ch: Formación Chengue; e6e8sj: Formación San Jacinto; n7n1ec: Formación El Carmen; Q2al: Depósito aluvial; Q2ci: Depósitos de
coluviones indiferenciados
Fuente: autores
4.3.1.1 Fallas
Es una falla inversa, en su mayoría cubierta por depósitos aluviales recientes, con una
longitud de 3.5 km y orientación N20°E, inferida a partir de relaciones estratigráficas al
poner contacto la Formación Chengue del Eoceno medio sobre la Formación San Jacinto
del Eoceno tardío.
Es una falla de alto ángulo con desplazamiento de rumbo destral, con una longitud
aproximada de 8 km y orientación N50°E – N70°E. Afecta principalmente los estratos de
la Formación San Cayetano, morfológicamente genera interrupciones y desplazamientos
de crestas lineales de hasta 500 m, particularmente evidentes en los niveles de chert.
4.3.1.2 Pliegues
inmersión leve al noreste y rumbo del eje axial N15°E (); tanto el núcleo como los flancos
de ambas estructuras se desarrollan en los estratos de la Formación Palenque.
El sinclinal de San Cayetano está localizado en la parte suroeste del área del anticlinorio
de San Jacinto; su eje pasa por el oriente del corregimiento de San Cayetano, y se
extiende alrededor de 35 km dentro del área de estudio, desde el sector Mulato (N22)
hasta el sur de la región El Toro (Zona sur, M17). Este pliegue afecta principalmente la
Formación San Cayetano, y presenta un leve desplazamiento en sentido dextral
generado por la Falla de Los Micos a la altura de la región Songo Arriba (Zona sur, H18).
Se trata de un pliegue abierto, vertical, con una inmersión débil al noreste y plano axial
con rumbo promedio N27°E (figura 311).
más apretados. Es un pliegue subvertical, con una leve inmersión en dirección noreste y
plano axial con dirección aproximada N30-40°E.
4.3.2.1 Fallas
Esta estructura descrita originalmente por Reyes y Zapata (2001) corresponde a una falla
inversa con vergencia hacia el noroeste, de rumbo N50°E, que se extiende dentro del
área de estudio cerca de 10 km con una posible inclinación de 50° hacia el este, la cual
choca en su terminación sur contra la Falla Villanueva-El Totumo. Según Reyes y Zapata
(2001) en campo se observaron rasgos asociados principalmente a una falla inversa, sin
embargo, algunas características morfológicas sugieren un movimiento de rumbo en
sentido lateral derecho. Estratigráficamente, la repetición de los segmentos que
componen la Formación San Cayetano sobre el curso del Arroyo Banco son producto del
accionar de esta falla (figura 311).
La Falla Villanueva-El Totumo hace parte del lineamiento del Sinú, estructura regional
que separa el cinturón plegado del Sinú del cinturón plegado de San Jacinto (Duque Caro,
1978). El lineamiento del Sinú tiene una longitud aproximada de 360 km, desde
Galerazamba al norte hasta la Serranía de Abibe al sur, atravesando once planchas de
escala 1:100.000. Cruza la zona de estudio de norte a sur con rumbo promedio N5°E. La
falla Villanueva – El Totumo ha sido descrita como una falla de cabalgamiento con un
buzamiento promedio de 40° al este, vergencia hacia el oeste y cinemática inversa
(Guzmán, Reyes, y Ibañez, 1998). En la zona de estudio pone en contacto a la Formación
San Cayetano de edad Paleoceno tardío - Eoceno temprano, sobre la Formación Arjona
de edad Oligoceno tardío - Mioceno temprano (figura 312).
4.3.2.2 Pliegues
Figura 314. Superior: Perfil geológico del anticlinorio de Luruaco (localización en la figura 4)
ilustrando las estructuras principales interpretadas a partir del trabajo de campo junto con los diagramas de polos de los pliegues más importantes;
El diapiro ubicado en el núcleo del anticlinal de San Estanislao se infiere a partir de la imagen sísmica de la línea ANH-MM-02. K2c: Formación
Cansona; E1E2sc: Formación San Cayetano; n1n2a: Formación Arjona; N1h: Formación Hibácharo; n1n8t: Formación Tubará; q4r: Formación Rotinet;
Q2al: Depósito aluvial; Q2fll: Depósitos fluviolacustres y de llanura de inundación
Fuente: autores
El cinturón plegado del Sinú se encuentra localizado al oeste del llamado lineamiento del
Sinú, que dentro del área de estudio tiene como expresión la falla Villanueva - El Totumo
(Duque Caro, 1978). Se caracteriza por involucrar una espesa secuencia de rocas
sedimentarias con edades que van del Oligoceno al reciente, deformadas por intensos
procesos de diapirismo de lodo, cuya expresión en superficie es evidente en las bocas y
manaderos de los volcanes de Cañaveral y Turbaco.
A pequeña escala es común encontrar fallas normales con buzamiento hacia el noroeste
asociadas a colapso gravitacional en zonas de talud, dentro de los estratos de la
Formación Arjona (figura 315).
5 GEOQUÍMICA
Figura 317. Localización de las muestras analizadas mediante FRX (círculos amarillos)
Fuente: autores
Fuente: autortes
Antes de interpretar los análisis, se aseguró que los valores estuvieran en base anhidra,
es decir, que hayan sido eliminados los volátiles H2O+, H2O-, y/o LOI (loss on ignition) y
se recalcularon los datos al 100%, tal como lo sugiere la Unión Internacional de Ciencias
Geológicas (IUGS) (Winter, 2001). A partir de los datos de la química de roca total se
Para determinar estos ambientes tectónicos (arcos de islas, margen continental activo y
pasivo), fue usado el diagrama de discriminación de Roser y Korsch (1986) (figura 317),
en donde se observa que 127 muestras de la Formación San Cayetano, 15 muestras de
la Formación Palenque, 63 de la Formación Maco y 8 de la Formación San Jacinto quedan
en el campo de margen continental activo; eso quiere decir que estos sedimentos son
derivados de márgenes continentales tectónicamente activos o sobre límites activos
entre placas (Wilson, 1991). Esta categoría incluye márgenes activos complejos, material
derivado de arcos magmáticos de margen continental y depositados en una variedad de
cuencas incluyendo trincheras, ante arco, intra-arco y tras-arco, y material derivado del
levantamiento de áreas asociadas con fallas de tipo strike-slip y depositados en cuencas
tipo pull apart. (Ángeles et al., 2016). Otro número menor de muestras de las
formaciones San Cayetano (74), Maco (2) y San Jacinto (8) se ubican dentro del campo
de arco de islas, lo que indica que estos sedimentos son volcanogénicos pobres en cuarzo
derivados de arcos de islas oceánicos, depositados en cuencas ante, intra, tras arco y
trincheras. El restante número de muestras se distribuye en el campo de margen pasivo
(San Jacinto-4, Palenque 3: San Cayetano-13 Maco: 7). El ambiente de margen
inmaduras asociadas a valores altos de Fe2O3/K2O. Las rocas de la Formación San Jacinto
muestran una variedad composicional que pasa por arcosas, grauvacas y sublitoarenitas
en las granulometrías más gruesas, y pelitas férricas en su fracción fina.
Figura 319. Diagrama composicional para rocas sedimentarias terrígenas (Herron, 1988)
E1E2sc: San Cayetano, E2E3pa: Palenque, E2m: Maco, E2sj: San Jacinto. Tomado y modificado de Herron
(1988). (n: 324)
Fuente: autores
Respecto a los procesos de meteorización a los que fueron sometidos las rocas
analizadas, se emplea la relación K2O/Na2O en donde se pudo observar que en las
muestras de la Formación San Cayetano (0.89), Palenque (0.55) y Maco (0.62) se
presenta un efecto menor de los procesos de meteorización, con fuentes de aportes
cercanas al área de depósito. La Formación San Jacinto (1.08) presenta valores promedio
un poco mayores a 1, de lo que se deduce que estas rocas posiblemente han estado
sometidas a procesos más prolongados de meteorización o transporte (rocas lejanas a
su área de depósito) que las tres formaciones antes mencionadas. Conforme se
incrementa la fracción arcillosa en el sedimento aumenta la relación
Al2O3+K2O/MgO+Na2O (índice de madurez según Björlykke, 1974), mientras que
disminuye el contenido de SiO2, disminuyendo también la fracción arenosa. Esta relación
AL2O3+K2O/MgO+Na2O en promedio es mayor la Formación San Jacinto (5.26), seguido
de la Formación Maco (3.68), San Cayetano (3.61) y Palenque (3.36).
Para observar la tendencia que tienen los elementos mayores (elementos que
representan el mayor porcentaje en la composición química de las rocas) se grafican
contra el SiO2. Se presentan correlaciones lineales negativas con los óxidos de Ti, Fe, Mg,
Al, Mn y K lo que podría indicar, que estos elementos son concentrados en la fracción
fina del sedimento. El Ca y Na se encuentran con mayor dispersión (figura 319).
Los óxidos máyores Fe, Mg, Al y Ti (figura 319), para todas las muestras analizadas,
exhiben tendencias similares con una correlación lineal negativa que se extiende al
100%. Según Fralick y Kronberg (1997), algunos de elementos traza inmóviles exhiben
tendencias lineales que se extienden desde el origen. Tal comportamiento se observa en
las gráficas Zr vs TiO2, TiO2 vs Al2O3, Zr vs Y, Zr vs AL2O3.
Figura 320. Diagramas de dispersión de óxidos mayores vs. SiO2 (n: 324)
Fuente: autores
Figura 321. Diagramas de dispersión de TiO2 (%), Al2O3 (%), Y (ppm) y Zr (ppm)
Nb (ppm). (n: 324)
Fuente: autores
Según Bhatia (1983), existe una correlación entre la composición geoquímica de las
arenitas y las características tectónicas de las cuencas sedimentarias, y establece
funciones discriminantes y parámetros para separarlas entre arcos de islas oceánicos,
arcos de islas continentales, márgenes continentales activos y márgenes pasivos. En la
tabla 35 se presentan los rangos para cada ambiente y los resultados de las muestras
analizadas. Promediando los valores de los óxidos mayores y las relaciones Fe2O3g + MgO,
Al2O3/SiO2, K2O/Na2O, Al2O3/(CaO+ Na2O), existe una mayor afinidad de las muestras
asociadas a las formaciones San Cayetano, Palenque y Maco a un arco volcánico
continental, ya que los valores de SiO2, TiO2, Mn, Mg, P2O5 y las relaciones antes
mencionadas son similares a los reportados por Bhatia 1983 para tal ambiente tectónico,
mientras que la Formación San Jacinto, presenta valores promedio de SiO2, MnO, MgO,
Na2O, K2O y la relación Al2O3/SiO2 afines a un margen pasivo.
Para conocer las posibles composiciones de la roca fuente se empleó el diagrama Zr/TiO2
vs. Nb/Y propuesto por Winchester y Floyd (1977), donde se observa que para las
6 GEOLOGÍA ECONÓMICA
6.1.2 Calizas
6.1.4 Hidrocarburos
El sistema petrolífero interpretado para la cuenca Sinú-San Jacinto tiene como rocas
fuente las formaciones Cansona (Cretácico superior) y San Cayetano (Paleoceno superior
– Eoceno temprano), como sello las formaciones Chengue y El Carmen y como rocas
reservorio las formaciones San Cayetano y San Jacinto (Aguilera et al., 2010). La mejor
roca fuente caracterizada según Aguilera et al., 2010, es la denominada Formación
Arroyo Seco, correlacionable con parte de la Formación San Cayetano (Guzmán, Gómez,
& Serrano, 2004).
Aguilera et al. (2010 b) reporta muestreos en la secuencia del Paleoceno, localizados del
Cerro Cansona hacia el sur donde se destaca potencial de generación, debido al índice
de hidrógeno mayor a 200 mg HC/g TOC, S2 mayor a 5 mg HC/g Roca, la madurez termal
se encuentra cerca al límite entre madurez temprana y las condiciones óptimas para
formar aceite, además, el kerógeno identificado es tipo II-III, propenso a formar
hidrocarburos líquidos. La madurez para la roca fuente en la zona de trabajo, según
Osorno & Rangel (2015), está entre 0.2-0.1, basado en la distribución de los isómeros de
esteranos, clasificándola como inmadura.
Este acuífero es de tipo libre, aunque localmente puede ser semiconfinado o confinado
debido a las intercalaciones arcillosas, sus afloramientos se consideran como sus áreas
de recarga. La producción de los pozos que lo captan varía entre 0.5 y 5 l/s dependiendo
del espesor saturado y de la granulometría de los sedimentos. Los depósitos del
Cuaternario desarrollados en un ambiente fluvial-cenagoso, poseen un espesor máximo
de 40 m, captado fundamentalmente por aljibes. Entre las poblaciones de San Jacinto y
San Juan Nepomuceno existe un pequeño campo de pozos que explota el aluvión del
arroyo Rastra, utilizándose el agua para el abastecimiento de estas dos poblaciones. En
total operan 6 pozos con profundidades entre 10 y 15 m que explotan arenas gruesas y
gravas situadas a partir de los 5 m de profundidad. El nivel estático se encuentra entre
2.5 y 3.5 m y producen caudales entre 3 y 10 l/s. La transmisividad promedio reportada
es de 400 m2/día (Hincapie & Huguett, 2003).
En el pozo estructural Barú -1 el espesor total de estos depósitos alcanza unos 160 m.
Los niveles inferiores presentan valores de resistividad entre 15 y 25 ohm-m para arenas
saturadas con agua salobre a poco dulce, mientras que los niveles calcáreos saturados
tienen resistividades desde 25 hasta 100 ohm-m. La descarga natural se efectúa
mediante manantiales de fracturas con caudales entre 1 y 4 l/s y algunos pozos. En la
7 EVOLUCIÓN GEOLÓGICA
Para el intervalo del Paleoceno temprano a tardío, entre las biozonas de foraminíferos
P0 a P2, existe un faltante en el registro sedimentario del CPSJ, asociado a la discordancia
del Paleoceno (Duque et al., 1996, Guzmán et al., 2004, Mora et al., 2017) que algunos
autores asocian con un evento de acortamiento regional relacionado con la colisión del
plateau Caribe contra la margen noroccidental de Suramérica (Pindell et al., 2005,
Bayona et al., 2012, Mora et al., 2017).
Los análisis petrográficos realizados a más de 259 muestras, así como las
interpretaciones de datos geoquímicos provenientes de 324 muestras terrígenas con
relaciones de Fe2O3+MgO, Al2O3/SiO2, K2O/Na2O y Al2O3/(CaO+Na2O), indican
comportamientos afines con arcos volcánicos continentales ubicados en el basamento
del VIM como parte de la margen norte de la Cordillera Central (Mora et al., 2017); estos
resultados son concordantes con los trabajos de Cardona et al. (2012), Silva-Arias et al.
(2016), Sarmiento et al. (2016 en Mora et al., 2017), Mora et al. (2017) y Silva-Arias et
al. (2019). La inmadurez tanto textural como composicional de las rocas de la Formación
San Cayetano indica bajas tasas de transporte con afectaciones reducidas de
meteorización climática, asociadas a una probable cercanía a las áreas de aporte. La
relativa estabilidad tectónica durante la depositación de la Formación San Cayetano y el
incremento del nivel del mar dentro del ciclo greenhouse (Zachos et al., 2001) generan
en conjunto un sistema retrogradante evidenciado en la ocurrencia de mudstones y
wackestones con foraminíferos y radiolarios en el segmento superior de la Formación
San Cayetano que se extiende de manera regional. Estas condiciones se modifican
durante el Ypresiano, asociado a un evento tectónico regional que produce la
discordancia del Eoceno temprano (Duque et al., 1996, Guzmán, 2007, Mora et al.,
2017).
dominados por mareas, y por la Formación El Carmen depositada en ambientes tipo open
marine/offshore con paleoprofundidades entre 200 y 800 m.
La colisión del bloque Chocó – Panamá es el evento diastrófico más importante durante
el Mioceno, suceso que genera el escape tectónico del Bloque Norandino y cambia
permanentemente la dirección de su vector de desplazamiento hacia el nororiente
(Boschman, van Hinsbergen, Torsvik, Spakman y Pindell, 2014; Freymueller, Kellogg, y
Vega, 1993; Kellogg y Vega, 1995; Trenkamp, Kellogg, Freymueller, y Mora, 2002).
Las espesas secuencias sedimentarias depositadas durante este intervalo de tiempo son
producto de un cambio importante en la fuente de aporte, gracias a la conexión entre
las cuencas del valle medio e inferior del proto-Magdalena, evento que propició la
descarga de grandes cantidades de sedimentos distales y el llenado de la cuenca del Valle
Inferior del Magdalena (Mora et al., 2018).
Como consecuencia del escape tectónico del Bloque Norandino, se produce una
disminución progresiva de la velocidad relativa entre éste y la Placa Caribe. El trabajo de
Mora-Páez et al., (2019) muestra campos de velocidades medidos con sistemas de
posicionamiento global entre la Placa Caribe y el margen noroccidental del Bloque
Norandino con valores, direcciones y sentidos equivalentes, lo que resultaría en
velocidades relativas cercanas a cero entre ambos bloques, o un margen convergente
inactivo.
La relativa estabilidad tectónica sumada al llenado parcial de la cuenca del Valle Inferior
del Magdalena durante el Mioceno medio, permitió que la carga de sedimentos del
proto-Magdalena fuera transportada y depositada de manera progradante de sur a
norte. El registro sedimentario de este evento en la zona de estudio está representado
en los estratos de la Formación Rotinet, compuesta por conglomerados y arenitas
conglomeráticas con estratificación cruzada depositados en sistemas fluviales
canaliformes con relleno y migración de barras, asociados al antiguo delta del Río
Magdalena (Caro et al., 1985 en Guzmán et al., 2004).
7.7 Reciente
CONCLUSIONES
• Los resultados obtenidos de los análisis palinológicos indican una edad de Eoceno
medio a Oligoceno temprano? para la Formación Palenque.
• Las características litofaciales de la Formación Chengue permiten identificar dos
segmentos, el Segmento A compuesto por lodolitas, lodolitas silíceas, wackestones y
en menor medida litoarenitas de grano muy fino y el segmento B que corresponde a
una secuencia mixta calcárea – terrígena compuesta por rudstones de algas rojas,
rudstones y grainstones con líticos sedimentarios y grainstones de macroforaminífe
ros.
• La Formación Chengue tiene una edad de Eoceno temprano – Eoceno medio
(Ypresiano – Bartoniano), definida a partir de foraminíferos planctónicos y
nanoplancton calcáreo, alcanza un espesor promedio de 320 m y se depositó en
ambientes marinos tipo open marine y plataformas calcáreas afectadas por
retrabajamiento y flujos calciclásticos.
• Las características litológicas y composicionales de la Formación San Jacinto indican
un predominio de facies terrígenas y mixtas en la zona norte, caracterizadas por
arenitas de grano fino a grueso con estratificación cruzada planar, laminación swaley,
flasser y rizaduras de corriente, arenitas bioclásticas y rudstones de bivalvos,
mientras que en la zona sur se reconocen facies eminentemente terrígenas con
conglomerados clasto y matrizsoportados y arenitas de grano fino a grueso con
estratificación cruzada planar de bajo ángulo, ondulitas, moud couplets y trazas de
Thalassinoides y Planolites.
• Los análisis bioestratigráficos realizados a muestras provenientes de la Formación
San Jacinto permiten asignar, con base en las asociaciones diagnosticas de
foraminíferos planctónicos y de palinomorfos, una edad comprendida entre Eoceno
medio – Eoceno tardío.
• El espesor calculado para la Formación San Jacinto en el área de estudio oscila entre
398 m y 420 m, los contactos formacionales a base y tope se consideran discordantes
y el ambiente de depositación corresponde a un sistema marino somero de frente
de playa que variaba entre frente de playa superior (upper shoreface) a foreshore,
con esporádicas variaciones a deltas locales y restringidos, dominados por mareas.
• La Formación El Carmen descrita y analizada en el área de estudio está compuesta
por secuencias monótonas de arcillolitas y lodolitas negras, limolitas, wackestones y
arenitas de grano fino y muy fino con laminación planaparalela dispuestas en capas
muy delgadas a medias.
• La edad propuesta para la Formación El Carmen es de Oligoceno – Mioceno
temprano, entre las biozonas E15 – M5b, con base en foraminíferos planctónicos.
• Para la Formación El Carmen se calcula un espesor aproximado de 380 m y se
propone un ambiente de depositación marino de baja energía tipo open
marine/offshore.
• La Formación Rancho está compuesta por secuencias granocrecientes de arenitas de
grano fino a medio intercaladas con limolitas, con presencia de estructuras de
gráfico, de forma que se presume que los altos contenidos de la relación Fe 2O3/K2O
pueden deberse a la inmadurez composicional de los sedimentos.
• En la mayoría de elementos inmóviles, se observa una correlación lineal positiva que
se extiende hasta el origen, lo cual indica que los sedimentos conservan la misma
proporción elemental que existía en la roca fuente, suponiendo que no han sido
móviles en la roca fuente después de que la erosión del sedimento ocurrió.
• Según la comparación de los valores promedio de arenitas analizados con respecto a
los valores presentados por Bhatia (1983), las muestras asociadas a la Formación San
Cayetano, Palenque y Maco presentan valores cercanos a los reportados para un
ambiente de arco volcánico continental, mientras que las muestras de la Formación
San Jacinto presentan valores cercanos a los reportados al margen pasivo.
• Para las muestras analizadas en este trabajo, las rocas fuente podrían corresponder,
basados en la dinámica de los elementos inmóviles y según lo propuesto por
Winchester y Floyd (1977), a andesitas y andesitas basálticas. En muestras de pozos
petroleros geográficamente más cercanos al área de estudio (Apure-1, Remolino
Grande), también se han reportado basaltos y andesitas, las cuales podrían ser áreas
fuente de las unidades analizadas (Cerón, 2007; Silva et al., 2016).
• El potencial económico para la zona de estudio se basa en la explotación de
materiales para construcción, hidrocarburos y aguas subterráneas. En general los
materiales para construcción son asociados a las calizas de las formaciones Chengue
y La Popa, arenas y conglomerados de las formaciones Maco y Rotinet y en menor
proporción chert y lodolitas silíceas provenientes de la Formación San Cayetano.
• Los estudios adelantados en la cuenca Sinú-San Jacinto han mostrado que las
unidades del Paleoceno superior al Eoceno superior conforman buenos reservorios,
la roca generadora pertenece al Cretácico – Paleoceno, posee un buen potencial de
generación, madurez termal cercana al límite entre madurez temprana, con las
condiciones óptimas para formar aceite y kerógeno tipo II-III, propenso a formar
hidrocarburos líquidos.
• Las unidades explotadas hidrogeológicamente corresponden principalmente a las
secuencias siliciclásticas del Neógeno – Cuaternario, siendo los más relevantes los
acuíferos Rotinet, Tubará y los depósitos cuaternarios someros, esto debido a que
los niveles de la tabla de agua se encuentran cerca de la superficie, los valores de
transmisividad son medios y los caudales de producción ayudan a cubrir el volumen
requerido por la comunidad.
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ANEXOS
ÍNDICE DE FIGURAS
Figura 1. Mapa de accesos (vías principales) y poblaciones del área del proyecto
Sinú – San Jacinto 14
Figura 2. MDT-2D, del proyecto Sinú-San Jacinto, destacando la morfologia del
terreno y el canal del dique 28
Figura 3. Mapa de pendientes del área del proyecto Sinu-San Jacinto 30
Figura 4. Red de Drenaje rectangular a sub-dendrítica en el Sector Norte del
proyecto Sinú-San Jacinto 31
Figura 5. Red de drenaje radial asociado a los volcanes de lodo de El Muerto y
Cañaveral 32
Figura 6. Red de Drenajes Sector Sur del Proyecto Sinú-San Jacinto 33
Figura 7. Las Geomorfoestructuras en el territorio colombiano 34
Figura 8. Localización del área de Sinú-San Jacinto, en las provincias
geomorfológicas de Colombia 35
Figura 9. Ambientes morfogenéticos del proyecto Sinú-San Jacinto 37
Figura 10. Unidades y Subunidades geomorfológicas presentes en
el proyecto Sinú-San Jacinto 39
Figura 11. Espolones facetados en la Loma armadillo
N:1653613, E:877423 41
Figura 12. Lomos estructurales en inmediaciones del Arroyo Songo
N:1609891, E:884086 42
Figura 13. Sierra en el sector de Potreros, finca las Palmeras
N: 1606108, E: 888222 43
Figura 14. Sierra homoclinal en el sector La Escoba y Finca La Piedra
N:1615684, E: 891768 44
Figura 15. Laderas estructurales de Sierra homoclinal 45
Figura 16. Laderas estructurales de Sierra homoclinal 46
Figura 17. Volcanes de lodo sector del Cañaveral 47
Figura 18. Colina residual (Dcrem) 48
Figura 19. Lomas denudadas 49
Figura 20. Lomos denudados bajos de longitud moderada a larga 50
Figura 21. Lomeríos poco disectados (Dlpd) 51
Figura 22. Lomeríos disectados
E:880290 N:1643261 52
Figura 23. Lomeríos muy disectados 53
Figura 24. Montículos y ondulaciones en inmediaciones del Arroyo Maretira 54
Figura 25. Lóbulo Coluvial
N:16549567, E:896647. Az=270 55
Figura 26. Ciénaga del Guájaro 56
Figura 27. Llanuras de inundación (Fpi) 58
Figura 28. Canal del Dique en inmediaciones del Municipio de San Estanislao 59
Figura 29. Camaronera en la margen derecha del Canal del Dique 60
Figura 30. Embalse del Playón, al sur del área 61
Figura 31. Erosión laminar acentuada en el sector de arroyo Hondo 61
Figura 32. Erosión en surcos en la parte oriental del proyecto 62
Figura 33. Carcavamiento en inmediaciones del Municipio de Manatí 63
Figura 34. Pisadas de patas de vaca, en los alrededores de Manatí 64
Figura 35. Localización del deslizamiento del corregimiento de La Tabla 65
Figura 36. Afectación de viviendas y en el colegio del Corregimiento de La Tabla 65
Figura 37. Flujos en los alrededores de Manatí 66
Figura 38. Marco lito-cronoestratigráfico de las unidades aflorantes en el área
de estudio 70
Figura 39. Mapa de Localización de la Formación San Cayetano dentro del área
de estudio 72
Figura 40. Laderas estructurales de sierra sinclinal (Sssle) desarrolladas por la
Formación San Cayetano 73
Figura 41. Localización de secciones estratigráficas levantadas en el arroyo Lamba 75
Figura 42. Columna estratigráfica compuesta esquemática 76
Figura 43. Columna generalizada del sector el Puente, de la Formación San
Cayetano 79
Figura 44. Detalle de meteorización esferoidal en arcillolitas, bastón 6 (A) 80
Figura 45. Afloramiento de capas tabulares de arenisca de textura fina (A) 80
Figura 46. Afloramiento de capas tabulares a ondulosas de areniscas 81
Figura 47. Detalle de trazas tipo Palaeophycus 82
Figura 48. Columna generalizada del sector Evangelista de la Formación San
Cayetano 83
Figura 49. Características litológicas del segmento A-del sector Evangelista-1 84
Figura 50. Afloramiento de capas medias a gruesas de limolita interestratificadas
con capas 85
Figura 51. Afloramiento de capas de arenisca de textura fina con contactos
ondulosos 86
Figura 52. Capas gruesas de areniscas de grano fino separando una
interestratificación 87
Figura 53. Areniscas conglomeráticas del segmento B, del sector Evangelista-2 88
Figura 54. Características litológicas del segmento C en el sector Evangelista-2 90
Figura 55. Columna generalizada del sector Cerro Capira de la
Formación San Cayetano 92
Figura 56. Parte basal de la sección sector cerro Capira 93
Figura 57. Segmento B sección arroyo Lamba- sector cerro Capira 93
Figura 58. Columna generalizada del sector Cerro Peñones - 1 de la
Formación San Cayetano 95
Figura 214. Vía El Guamo – San José de Lata (N: 1601975; E: 901247) 335
Figura 215. Izquierda, luz plana; derecha, luz polarizada. Superior. IGM 5063964 337
Figura 216. Palinomorfos diagnósticos de la muestra HAP041 (N: 1598853;
E: 893943) 338
Figura 217. Distribución de la Formación Arjona en el área de estudio 341
Figura 218. Geomorfología de la Formación Arjona 342
Figura 219. Columna esquemática idealizada de la Formación Arjona
en la zona de estudio 343
Figura 220. Capas de arenitas de la Formación Arjona 344
Figura 221. Afloramiento de la Formación Arjona por el sector de Rocha 345
Figura 222. Afloramiento de arenitas de la Formación Arjona 346
Figura 223. Afloramiento de los intervalos finos de la Formación Arjona por el
arroyo Pozones (A) 347
Figura 224. Lentes de caliza de la Formación Arjona por el arroyo Pozones (A) 347
Figura 225. Afloramiento de segmentos arenosos de la Formación Arjona
por el arroyo San Luis 348
Figura 226. Afloramiento de capas de arenita de la Formación Arjona (A) 348
Figura 227. Afloramiento de la formación Arjona sobre el cauce del arroyo
San Luis (A.) 349
Figura 228. Afloramiento de lodolitas calcareas de la Formación Arjona por el
arroyo Flechas 350
Figura 229. Afloramiento de capas delgadas y medias de arenitas fracturadas 351
Figura 230. Afloramiento de capas de arenitas de grano grueso a conglomerática 352
Figura 231. Estratificación plano-paralela en la estación LLG-210 (A.) 352
Figura 232. Afloramiento de lodolitas en el arroyo Bijagual 354
Figura 233. Afloramiento de la Formación Arjona en el arroyo Bijagual 355
Figura 234. Afloramiento de la Formación Arjona por el arroyo Zipacoa 356
Figura 235. Afloramiento de la formación Arjona por el arroyo Zipacoa (A) 357
Figura 236. Afloramiento fracturado de la Formación Arjona por el arroyo
Coco (A.) 358
Figura 237. Afloramiento de capas de arenita de la Formacion Arjona 359
Figura 238. Afloramientos de segmentos lodosos de la Formación Arjona en el
arroyo Toro 360
Figura 239. Litología de la Formación Arjona por carreteables en Villanueva 361
Figura 240. Triangulo de clasificación QFP (Folk, 1974) 364
Figura 241. . Arcosa Lítica, IGM 5064966 (JAO-241-P-A) 365
Figura 242. . Litoarenita Feldespática, IGM 5064960 (GDG-293-P) 366
Figura 243. Subarcosa, IGM 5064307 (ANM244-P) 367
Figura 244. Mudstone IGM 5064297 (ANM 226-P) 368
Figura 245. Especies de nanofósiles identificadas en la muestra VCB-222 369
Figura 246. Foraminíferos bentónicos y planctónicos 371
ÍNDICE DE TABLAS
Tabla 1. Coordenadas planas origen Magna Sirgas de los vértices del polígono
del área de estudio 12
Tabla 2. Clasificación de las Pendientes del proyecto Sinú-San Jacinto 27
Tabla 3. Leyenda de unidades geomorfológicas del proyecto Sinú San Jacinto 40
Tabla 4. Localización de sectores descritos de la Formación San Cayetano en el
Sector San Jacinto 74
Tabla 5. Clasificación Composicional de 49 Secciones delgadas de la columna
Estratigráfica levantada en el Arroyo Lamba de la Formación San
Cayetano, ordenadas por segmentos y por petrofacies 117
Tabla 6. Análisis bioestratigráficos en 152 muestras de la Formación San
Cayetano - Sector San Jacinto. 136
Tabla 7. Muestras de la Formación San Cayetano – sector Luruaco analizadas
petrográficamente 164
Tabla 8. Resultados de palinología – Formación San Cayetano, sector Luruaco 182
Tabla 9. Resultados de foraminíferos – Formación San Cayetano, sector Luruaco 185
Tabla 10. Resultados de nanofósiles calcáreos – Formación San Cayetano, sector
Luruaco 186
Tabla 11. Listado de muestras analizadas con conteo de puntos y resultados
de la Formación Maco 212
Tabla 12. Listado de muestras clasificadas por comparación de campos visuales 213
Tabla 13. Análisis bioestratigráficos según las diferentes técnicas y sus resultados
obtenidos Los intervalos sin información (---) indican que la muestra
no fue analizada bajo la técnica respectiva 220
Tabla 14. Muestras utilizadas para la clasificación petrográfica de la Formación
Palenque 233
Tabla 15. Análisis bioestratigráfico técnicas y resultados obtenidos 239
Tabla 16. Listado de las 25 secciones delgadas analizadas de la Formación
Chengue, organizadas por segmentos y por petrofacies 253
Tabla 17. Análisis bioestratigráficos en 16 muestras de la Formación Chengue 262
Tabla 18. Síntesis de litofacies definidas para la Formación Chengue, integrando
aspectos macro y microfaciales. Se incluye el ambiente de depositación
interpretado 269
Tabla 19. Síntesis de clasificación petrográfica y definición de petrofacies para
39 secciones delgadas de la Formación San Jacinto 295
Tabla 20. Análisis bioestratigráficos en 13 muestras de la Formación San Jacinto. 305
Tabla 21. Síntesis de asociaciones litofaciales definidas para la Formación San
Jacinto, organizadas de base a tope, integrando aspectos macro y
microfaciales. Se incluye el ambiente de depositación interpretado 314
ÍNDICE DE ANEXOS
ÍNDICE DE MAPAS