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CENTRO DE FORMACIÓN PROFESIONAL

DE CHIAPAS MAYA
UNIVERSIDAD MAYA CAMPUS TUXTLA
CLAVE: 07PSU0061T
SISTEMA: ESCOLARIZADO.
PLANEACION DE LA ACTIVIDAD DE EDUCACIÓN PARA LA SALUD
TEMA:” Prevención de la diabetes mellitus”
OBJETIVO: Brindar información clara y oportuna con el fin de que las personas
conozcan de que se trata esta enfermedad y como prevenirlo.
DIRIGIDO A: Las personas que asisten al Hospital General No. 2 IMSS del
servicio de consulta externa y al personal.
FECHA: 10 de febrero de 2022 DURACIÓN: 10 a 15 minutos
CONTENIDO:
 Concepto o definición
 Signos y síntomas
 Factores de riesgo
 Grupos vulnerables
 Tratamiento
 Complicaciones
 Prevención

TÉCNICA DIDÁCTICA: Exposición oral con interrogatorio


RECURSO DIDÁCTICO: Guion de charla, tríptico y cartel.
EVALUACIÓN: Al término de la plática se realizarán una serie de preguntas para
reforzar los conocimientos sobre el tema informado.
¿Cuáles son los signos y síntomas de la diabetes mellitus?
¿Como puedes prevenir la diabetes mellitus?
¿Cuál es el tratamiento de la diabetes mellitus?

Bibliografía
CLINIC.ORG, M. (30 de 10 de 2020). MAYOCLINIC. Obtenido de MAYOCLINIC.:
https://www.mayoclinic.org/es-es/diseases-conditions/diabetes/symptoms-causes/syc-
20371444
GOB, S. D. (23 de 11 de 2010). NORMA Oficial Mexicana NOM-015-SSA2-2010, Para la prevención,
tratamiento y control de la diabetes mellitus. Obtenido de NORMA Oficial Mexicana NOM-
015-SSA2-2010, Para la prevención, tratamiento y control de la diabetes mellitus.:
http://dof.gob.mx/nota_detalle.php?codigo=5168074&fecha=23/11/2010

DIABETES MELLITUS
NORMA Oficial Mexicana NOM-015-SSA2-2010, Para la prevención,
tratamiento y control de la diabetes mellitus.

Definición:
La enfermedad sistémica, crónico-degenerativa, de carácter heterogéneo, con
grados variables de predisposición hereditaria y con participación de diversos
factores ambientales, y que se caracteriza por hiperglucemia crónica debido a la
deficiencia en la producción o acción de la insulina, lo que afecta al metabolismo
intermedio de los hidratos de carbono, proteínas y grasas

Diabetes gestacional: es la alteración en el metabolismo de los hidratos de


carbono que se detecta por primera vez durante el embarazo, ésta traduce una
insuficiente adaptación a la insulinoresistencia que se produce en la gestante.
Diabetes tipo 1: al tipo de diabetes en la que existe destrucción de células beta
del páncreas, generalmente con deficiencia absoluta de insulina. Los pacientes
pueden ser de cualquier edad, casi siempre delgados y suelen presentar comienzo
abrupto de signos y síntomas con insulinopenia antes de los 30 años de edad.
Diabetes tipo 2: al tipo de diabetes en la que se presenta resistencia a la insulina
y en forma concomitante una deficiencia en su producción, puede ser absoluta o
relativa. Los pacientes suelen ser mayores de 30 años cuando se hace el
diagnóstico, son obesos y presentan relativamente pocos síntomas clásicos.

La Diabetes mellitus se clasifica de la manera siguiente:


Para fines de clasificación y registro se utilizará la CIE-10.
Con fines de diagnóstico y tratamiento, se empleará la siguiente clasificación:
Diabetes Tipo 1.
 Mediada inmunitariamente
 Idiopática

Diabetes Tipo 2. (NOM.GOB, 2010)

CAUSAS:
La causa subyacente de la diabetes varía según el tipo. Pero, independientemente
del tipo de diabetes que tengas, puede provocar un exceso de glucosa en la
sangre. Un nivel muy alto de glucosa en la sangre puede provocar problemas de
salud graves.
Causas de la diabetes tipo 1
Se desconoce la causa exacta de la diabetes tipo 1. Lo que sí se sabe es que tu
sistema inmunitario, que normalmente combate las bacterias o los virus dañinos,
ataca y destruye las células que producen insulina en el páncreas. Esto te deja
con muy poca insulina, o sin insulina. En lugar de ser transportada a tus células, el
azúcar se acumula en tu torrente sanguíneo.
Se cree que el tipo 1 es causado por una combinación de susceptibilidad genética
y factores ambientales, aunque todavía no está claro cuáles son esos factores. No
se cree que el peso sea un factor en la diabetes tipo 1.
Causas de la prediabetes y de la diabetes tipo 2
En la prediabetes —que puede provocar diabetes tipo 2— y en la diabetes tipo 2,
las células se vuelven resistentes a la acción de la insulina, y el páncreas no
puede producir la cantidad suficiente de insulina para superar tal resistencia. En
lugar de pasar a tus células donde se necesita como fuente de energía, el azúcar
se acumula en tu torrente sanguíneo.
No se sabe con certeza por qué sucede esto exactamente, aunque se cree que los
factores genéticos y ambientales desempeñan un papel decisivo en el desarrollo
de la diabetes tipo 2. El sobrepeso está estrechamente relacionado con el
desarrollo de la diabetes tipo 2, pero no todas las personas con diabetes tipo 2
tienen sobrepeso.
Causas de la diabetes gestacional
Durante el embarazo, la placenta produce hormonas para apoyar el embarazo.
Estas hormonas hacen que tus células se vuelvan más resistentes a la insulina.
Normalmente, tu páncreas responde produciendo una cantidad suficiente de
insulina adicional para superar esta resistencia. Pero algunas veces, el páncreas
no puede seguir el ritmo. Cuando esto sucede, en tus células ingresa demasiado
poca glucosa y en tu sangre permanece demasiada cantidad de glucosa, lo cual
da lugar a la diabetes gestacional. (CLINIC.ORG, 2020)

SÍNTOMAS
Los síntomas de la diabetes varían según cuánto se eleve tu nivel de glucosa
sanguínea. Es posible que algunas personas, en especial las que padecen
prediabetes o diabetes tipo 2, no experimenten síntomas. En el caso de la
diabetes tipo 1, los síntomas tienden a aparecer rápido y a ser más intensos.
Algunos de los signos y síntomas de la diabetes tipo 1 y tipo 2 son:

 Aumento de la sed
 Micción frecuente
 Hambre extrema
 Pérdida de peso sin causa aparente
 Presencia de cetonas en la orina (las cetonas son un subproducto de la
descomposición de músculo y grasa que ocurre cuando no hay suficiente
insulina disponible)
 Fatiga
 Irritabilidad
 Visión borrosa
 Llagas que tardan en cicatrizar
 Infecciones frecuentes, como infecciones en las encías o en la piel, e
infecciones vaginales
Aunque la diabetes tipo 1 puede aparecer a cualquier edad, suele aparecer en la
infancia o en la adolescencia. La diabetes tipo 2 (el tipo más frecuente) puede
aparecer a cualquier edad, aunque es más común en personas mayores de 40
años. (CLINIC.ORG, 2020)
FACTORES DE RIESGO
Los factores de riesgo de la diabetes dependen del tipo de diabetes.
Factores de riesgo para la diabetes tipo 1
Aunque se desconoce la causa exacta de la diabetes tipo 1, los factores que
pueden indicar un mayor riesgo incluyen los siguientes:

 Antecedentes familiares. Tu riesgo aumenta si tu padre, tu madre o algún


hermano tienen diabetes tipo 1.
 Factores ambientales. Circunstancias como la exposición a una
enfermedad viral probablemente tienen alguna relación con la diabetes tipo
1.
 La presencia de células del sistema inmunitario que causan daños
(autoanticuerpos). Algunas veces, los familiares de personas con diabetes
tipo 1 se someten a una prueba de detección de autoanticuerpos de la
diabetes. Si tienes estos autoanticuerpos, tienes mayor riesgo de padecer
diabetes tipo 1. Pero no todas las personas que tienen estos
autoanticuerpos padecen diabetes.
 Ubicación geográfica. Ciertos países, como Finlandia y Suecia, presentan
índices más altos de diabetes tipo 1.
Factores de riesgo para la prediabetes y la diabetes tipo 2
Los investigadores no están completamente seguros de la razón por la que
algunas personas manifiestan prediabetes y diabetes tipo 2 y otras no. Sin
embargo, es evidente que ciertos factores incrementan el riesgo, como, por
ejemplo:

 Peso: Mientras más tejido graso tengas, más resistentes serán tus células a
la insulina.
 Inactividad: Mientras menos actividad realices, mayor será tu riesgo. La
actividad física te ayuda a controlar el peso, utiliza la glucosa como energía
y hace que tus células sean más sensibles a la insulina.
 Antecedentes familiares: Tú riesgo se incrementa si alguno de tus padres o
hermanos tienen diabetes tipo 2.
 Raza o grupo étnico: Aunque no está claro por qué, personas de ciertos
orígenes, como las personas negras, hispanas, los indígenas
estadounidenses y asiático-americanas, corren un mayor riesgo.
 Edad: Tu riesgo aumenta con la edad. Esto puede deberse a que te
ejercitas menos, pierdes masa muscular y aumentas de peso a medida que
envejeces. Pero la diabetes tipo 2 también está aumentando entre los
niños, los adolescentes y los adultos jóvenes.
 Diabetes gestacional: Si desarrollaste diabetes gestacional cuando estabas
embarazada, aumenta tu riesgo de desarrollar prediabetes y diabetes tipo
2. Si diste a luz a un bebé de más de 9 lb (4 kg), también corres el riesgo de
tener diabetes tipo 2.
 Síndrome de ovario poliquístico: Para las mujeres, tener síndrome de ovario
poliquístico (un trastorno frecuente caracterizado por períodos menstruales
irregulares, crecimiento excesivo de vello y obesidad) aumenta el riesgo de
desarrollar diabetes.
 Presión arterial alta: Una presión arterial de más de 140/90 milímetros de
mercurio (mm Hg) implica un alto riesgo de desarrollar diabetes tipo 2.
 Niveles anormales de colesterol y de triglicéridos: Si tienes niveles bajos de
lipoproteínas de alta densidad o de colesterol "bueno", tu riesgo de
desarrollar diabetes tipo 2 será mayor. Lo triglicéridos son otro tipo de
grasas que se transportan en la sangre. Las personas con niveles altos de
triglicéridos afrontan un riesgo elevado de padecer diabetes tipo 2. Tu
médico puede informarte cuáles son tus niveles de colesterol y de
triglicéridos.
Factores de riesgo para la diabetes gestacional
Las embarazadas pueden desarrollar diabetes gestacional. Algunas mujeres
presentan un mayor riesgo que otras. Algunos de los factores de riesgo de la
diabetes gestacional son:

 Edad: Las mujeres mayores de 25 años presentan un riesgo mayor.


 Antecedentes familiares o personales: Tu riesgo aumenta si tienes
prediabetes (un precursor de la diabetes tipo 2) o si algún familiar cercano,
por ejemplo, alguno de tus padres o hermanos, tiene diabetes tipo 2.
También corres un mayor riesgo si has tenido diabetes gestacional durante
un embarazo anterior, si has dado a luz a un bebé de gran tamaño o si tu
bebé nació muerto y no se pudo determinar la causa.
 Peso: El sobrepeso antes del embarazo aumenta el riesgo.
 Raza o grupo étnico: Por razones que no se comprenden bien, las mujeres
de origen afroamericano, hispánico, indígena estadounidense o asiático son
más propensas a desarrollar diabetes gestacional. (CLINIC.ORG, 2020)
GRUPOS VUNERABLES
Personas en riesgo de llegar a tener diabetes.
En primer lugar, se incluyen los hijos de padres con diabetes independientemente
de su nivel de glucemia, a las personas con prediabetes identificados mediante
pruebas de detección con glucosa de ayuno o PTGO, de acuerdo a criterios
diagnósticos de esta Norma.
También se considera dentro de este grupo a aquellos individuos con uno o varios
de los siguientes factores de riesgo: sobrepeso, obesidad, sedentarismo,
familiares de primer grado con diabetes, >65 años de edad, las mujeres con
antecedentes de productos macrosómicos (>4 kg) y/o con antecedentes de
diabetes gestacional y mujeres con antecedente de ovarios poliquísticos.
Asimismo, se considera dentro de este grupo a las personas con hipertensión
arterial (>140/90), dislipidemias (colesterol HDL <40 mg/dl, triglicéridos >250
mg/dl), a los pacientes con enfermedades cardiovasculares (cardiopatía
isquémica, insuficiencia vascular cerebral, o insuficiencia arterial de miembros
inferiores) y con antecedentes de enfermedades psiquiátricas que reciban
antipsicóticos. De igual forma, ante la ausencia de dichos criterios debe comenzar
a hacerse a partir de los 45 años. Si los resultados son normales, se deben repetir
las pruebas en intervalos de tres años. (GOB, 2010)
TRATAMIENTO
El tratamiento de la diabetes tiene como propósito aliviar los síntomas, mantener
el control metabólico, prevenir las complicaciones agudas y crónicas, mejorar la
calidad de vida y reducir la mortalidad por esta enfermedad o por sus
complicaciones.
Las personas identificadas con glucosa anormal en ayuno, y/o intolerancia a la
glucosa, requieren de una intervención preventiva por parte del médico y del
equipo de salud, ya que el riesgo para desarrollar diabetes mellitus Tipo 2 y
enfermedad cardiovascular es elevado, conforme a lo establecido en la Guía de
recomendaciones para la promoción de la salud, prevención, detección,
diagnóstico, tratamiento y control de la prediabetes.
En las personas con glucosa anormal en ayuno, y/o intolerancia a la glucosa, de
primera intención se recomienda la intervención no farmacológica (dieta y
ejercicio). Nutrición: Reducir la sobre-ingesta calórica, principalmente la ingesta de
carbohidratos refinados y de grasas saturadas. El objetivo es lograr la reducción
de al menos un 5 a 10% del peso corporal. Consultar Manejo Nutricional de la
diabetes mellitus tipo 2 y Obesidad. Ejercicio: Se recomienda ejercicio aeróbico
mínimo 30 minutos al día durante 5 veces a la semana. El tipo e intensidad del
ejercicio debe adaptarse a la edad y condiciones físicas de cada paciente.
Consultar Ejercicio en Diabetes mellitus y Obesidad. También es importante
considerar las actividades y roles que tradicionalmente realizan tanto hombres
como mujeres para sugerir acciones concretas en el cuidado de su salud. El
cambio de estilo de vida es por tiempo indefinido.
Tratamiento farmacológico. Se llevará a cabo conforme a la Guía de
recomendaciones para la promoción de la salud, prevención, detección,
diagnóstico, tratamiento y control de la prediabetes.
El planteamiento de un programa terapéutico a largo plazo para la o el adulto
mayor con diabetes debe tener en cuenta los siguientes aspectos: valoración de la
expectativa de vida, la existencia de complicaciones propias de la diabetes, la
presencia de trastornos neuropsiquiátricos u otros problemas médicos
coexistentes y la cooperación y facultad del paciente para comprender el
programa terapéutico.
En la diabetes tipo 2, el manejo farmacológico se iniciará cuando el médico
tratante así lo juzgue pertinente, incluso desde el diagnóstico, sobre todo en
presencia de hiperglucemia sintomática y para alcanzar metas de control lo más
tempranamente posible, conforme a la Guía de Tratamiento Farmacológico para el
Control de la diabetes mellitus.

Manejo no farmacológico.
Es la base para el tratamiento pacientes con prediabetes y diabetes y consiste en
un plan de alimentación, control de peso y actividad física apoyado en un
programa estructurado de educación terapéutica.

 Control de peso.

Se considera que el o la paciente ha logrado un control ideal de peso, si mantiene


un IMC >18.5 y <25; se pueden establecer metas intermedias, de acuerdo con lo
especificado en el Apéndice Normativo E.

 Plan de actividad física y ejercicio.

El médico de primer contacto debe estar capacitado para establecer el plan básico
de actividad física o ejercicio para lo cual se apoyará en el equipo de salud y
profesionales en esta materia.

 Plan de alimentación.

En el establecimiento del plan alimentario se deberán analizar y considerar los


hábitos de la o el paciente y realizar las modificaciones que sean necesarias a fin
de contribuir en el logro de las metas de tratamiento.
Para proporcionar atención nutricional al adulto mayor se deben conocer las
múltiples alteraciones que afectan al individuo, tanto las propias del
envejecimiento, como las enfermedades crónicas y la falta de prótesis dental por
la adoncia parcial o total, que afectan la función de nutrición.
La dieta para el paciente diabético será variada con suficiente consumo de
verduras y frutas, hidratos de carbono complejos, fibra y con restricciones en el
consumo de grasas, con el objetivo de mantener concentraciones normales de
glucosa en la sangre y disminuir los niveles de lípidos.
Se recomienda reducir o evitar el consumo de azúcares simples (miel, jaleas,
dulces y bebidas azucaradas), permitiéndose el uso de edulcorantes no nutritivos,
como aspartame, acesulfame de potasio, sucralosa, sacarina y los permitidos por
la Secretaría de Salud. Pacientes tratados con sulfonilureas o insulina distribuirán
el consumo de alimentos a lo largo del día de acuerdo a las recomendaciones de
su médico.

 Educación para pacientes y familiares


La mayor parte del cuidado de la diabetes depende de la persona con este
padecimiento. Para lograr el control necesita ser educado en su autocuidado; la
educación terapéutica es parte integral del tratamiento, debe proveerse desde el
diagnóstico del padecimiento y luego, de manera continua, a lo largo del ciclo vital
conforme aparezcan nuevos tratamientos o complicaciones.
Para garantizar la calidad de la educación de la persona con diabetes se deben
establecer programas de educación terapéutica, individuales o de grupo,
estructurados y proporcionados por personal capacitado y/o educadores en
diabetes de acuerdo con el Apéndice Informativo B de esta Norma sobre los
estándares de educación.

 Grupos de Ayuda Mutua

Con el propósito de incorporar y crear redes de apoyo social y la incorporación de


manera activa de las personas con diabetes en el autocuidado de su
padecimiento, facilitar y promover su capacitación, se fomentará la creación de
grupos de apoyo y ayuda mutua en las unidades de atención del Sistema Nacional
de Salud, así como en centros de trabajo, escuelas y otras organizaciones de la
sociedad civil. Deben estar supervisadas o dirigidas por un profesional de la salud
capacitado.
Los grupos de apoyo y de ayuda mutua deben servir para educar, estimular la
adopción de estilos de vida saludables como actividad física, alimentación
correcta, automonitoreo y cumplimiento de las metas del tratamiento y control.
(GOB, 2010)
COMPLICACIONES
Las complicaciones de la diabetes a largo plazo se desarrollan de manera gradual.
Cuanto más tiempo hace que tienes diabetes (y cuanto menos controlado esté tu
nivel de azúcar en sangre), mayor riesgo de complicaciones existe. A la larga, las
complicaciones de la diabetes pueden provocar una discapacidad o incluso ser
mortales. Las posibles complicaciones incluyen las siguientes:
Enfermedad cardiovascular. La diabetes aumenta drásticamente el riesgo de
sufrir diversos problemas cardiovasculares, como arteriopatía coronaria con dolor
de pecho (angina), ataque cardíaco, accidente cerebrovascular y estrechamiento
de las arterias (aterosclerosis). Si tienes diabetes, eres más propenso a tener una
enfermedad cardíaca o un accidente cerebrovascular.
Daño a los nervios (neuropatía). El exceso de azúcar puede dañar las paredes
de los vasos sanguíneos diminutos (capilares) que alimentan los nervios,
especialmente en las piernas. Esto puede provocar hormigueo, entumecimiento,
ardor o dolor, que generalmente comienza en las puntas de los dedos de los pies
o las manos y se extiende gradualmente hacia arriba.
Si no recibes tratamiento, podrías perder toda la sensibilidad de los miembros
afectados. El daño en los nervios en relación con la digestión puede causar
problemas con náuseas, vómitos, diarrea o estreñimiento. En el caso de los
hombres, puede dar lugar a la disfunción eréctil.
Daño renal (nefropatía). Los riñones contienen millones de racimos de vasos
sanguíneos diminutos (glomérulos) que filtran los residuos de la sangre. La
diabetes puede dañar este delicado sistema de filtrado. El daño grave puede
conducir a la insuficiencia renal o a la enfermedad renal terminal irreversible, que
pueden requerir diálisis o un trasplante de riñón.
Daño ocular (retinopatía). La diabetes puede dañar los vasos sanguíneos de la
retina (retinopatía diabética), que puede conducir a la ceguera. La diabetes
también aumenta el riesgo de otras afecciones graves de la visión, como cataratas
y glaucoma.
Daños en los pies. Los daños en los nervios del pie o un flujo sanguíneo
insuficiente en los pies aumenta el riesgo de diversas complicaciones en los pies.
Si no se tratan, los cortes y las ampollas pueden dar lugar a graves infecciones,
que suelen tener una cicatrización deficiente. Estas infecciones pueden, en última
instancia, requerir la amputación del dedo del pie, del pie o de la pierna.
Enfermedades de la piel. La diabetes puede volverte más susceptible a tener
problemas en la piel, como infecciones bacterianas y micóticas.
Deterioro auditivo. Los problemas de la audición son comunes en las personas
diabéticas.
Enfermedad de Alzheimer. La diabetes tipo 2 puede aumentar el riesgo de tener
demencia, como la enfermedad de Alzheimer. Cuanto más deficiente sea el
control del nivel de azúcar en sangre, mayor será el riesgo. Aunque existen teorías
de cómo pueden estar relacionados estos trastornos, ninguna de ellas se ha
demostrado todavía.
Depresión. Los síntomas de depresión son comunes en personas con diabetes
tipo 1 y tipo 2. La depresión puede afectar el manejo de la diabetes.
Complicaciones de la diabetes gestacional
La mayoría de las mujeres con diabetes gestacional dan a luz bebés sanos. No
obstante, los niveles de azúcar en sangre no controlados o no tratados pueden
provocarles problemas a ti y a tu bebé.
A causa de la diabetes gestacional, pueden aparecer complicaciones en tu bebé,
como las siguientes:
Exceso de crecimiento. La glucosa en exceso puede atravesar la placenta, lo
cual hace que el páncreas de tu bebé fabrique más insulina. Esto puede hacer que
tu bebé crezca demasiado (macrosomía). Los bebés muy grandes son más
propensos a requerir una cesárea.
Bajo nivel de azúcar en sangre. Algunas veces, los bebés de madres con
diabetes gestacional presentan un nivel bajo de azúcar en sangre inmediatamente
después del nacimiento porque su propia producción de insulina es elevada. La
alimentación inmediata y, algunas veces, una solución de glucosa intravenosa
puede hacer que el bebé recupere su nivel normal de azúcar en sangre.
Diabetes tipo 2 más adelante. Los bebés de madres con diabetes gestacional
tienen un mayor riesgo de padecer obesidad y diabetes tipo 2 más adelante en su
vida.
Muerte. La diabetes gestacional sin tratar puede producir la muerte del bebé, ya
sea antes o inmediatamente después del nacimiento.
A causa de la diabetes gestacional, también pueden aparecer complicaciones en
la madre, como las siguientes:
Preeclampsia. Esta afección se caracteriza por la presión arterial alta, el exceso
de proteínas en la orina, y la hinchazón en las piernas y los pies. La preeclampsia
puede dar lugar a complicaciones graves e incluso mortales, tanto para la madre
como para el bebé.
Diabetes gestacional posterior. Una vez que has tenido diabetes gestacional en
un embarazo, eres más propensa a tenerla nuevamente en el próximo embarazo.
También eres más propensa a padecer diabetes, en general, diabetes tipo 2, a
medida que envejeces.
Complicaciones de la prediabetes
La prediabetes puede transformarse en diabetes tipo 2. (CLINIC.ORG, 2020)
PREVENCIÓN
La prevención de la diabetes mellitus se realiza en tres niveles: primaria,
secundaria y terciaria.
Prevención primaria
Tiene como objetivo evitar el inicio de la enfermedad. En la práctica, prevención es
toda actividad que tiene lugar antes de las manifestaciones de la enfermedad con
el propósito específico de prevenir su aparición.
Existen dos tipos de estrategias de intervención primaria: en la población general y
en la población con factores de riesgo asociados a la diabetes.

 En la población en general

Medidas destinadas a modificar el estilo de vida y las características


socioambientales, conforme a los factores de riesgo señalados en el numeral 8.1.4
que, unidas a factores genéticos, constituyen causas desencadenantes de la
diabetes.
Puesto que la probabilidad de beneficio individual a corto plazo es limitada, es
necesario que las medidas poblacionales de prevención se mantengan de manera
permanente para que sean efectivas a largo plazo.
Las acciones de prevención primaria deben ejecutarse, no sólo a través de
actividades médicas, sino también con la participación y compromiso de la
comunidad y autoridades sanitarias utilizando los medios de comunicación
masivos existentes en cada región como radio, prensa y televisión, entre otros.
Los factores protectores para la prevención y control de esta enfermedad
consisten en modificar los cambios en el estilo de vida que abarca reducción de
peso, una adecuada nutrición, la realización de ejercicio y la disminución de los
factores de riesgo cardiovascular.

 En la población con factores de riesgo

La intervención inicial y a lo largo del padecimiento se realizará especialmente


con tratamiento no farmacológico y consistirá en:
Educación para la salud: folletos, revistas y boletines, entre otros.
Promoción de la salud: corrección de factores dentro del estilo de vida.
Prevención y corrección de obesidad: dietas con bajo contenido graso y azúcares
refinados y alta proporción de fibra alimentaria.
Uso racional y prescripción adecuada de medicamentos diabetogénicos, por
ejemplo, diuréticos, corticoides, beta-bloqueadores.
Promoción del ejercicio físico rutinario y programado.
Integración a Grupos de Ayuda Mutua, encaminados a que el o la paciente sea
responsable de su autocuidado y permanentemente se autogestionen en pro de su
control metabólico.
Uso de la evidencia científica a través de monofármacos preventivos, que
disminuyan el porcentaje de conversión a DMT-2, conforme a la Guía de
recomendaciones para la promoción de la salud, prevención, detección,
diagnóstico, tratamiento y control de la prediabetes.
Prevención secundaria.
Estará encaminada a pacientes ya confirmados con diabetes mellitus y cuyos
objetivos son evitar la aparición de complicaciones agudas, y evitar o retrasar las
complicaciones crónicas.
Las acciones para cumplir los objetivos propuestos se fundamentan en el control
metabólico óptimo y permanente de la enfermedad.
Prevención Terciaria
Estará dirigida a pacientes que presentan complicaciones crónicas y tiene como
objetivo evitar la discapacidad por insuficiencia renal, ceguera, pie diabético y
evitar la mortalidad temprana por enfermedad cardiovascular.
Estas acciones requieren de la participación de profesionales especializados en
las diferentes complicaciones.

 Control de peso

El control de peso es una de las metas básicas para la prevención de la diabetes.


La reducción ideal de peso debe ser entre el 5% y el 10% del peso total. Debe ser
una meta anual hasta alcanzar su peso ideal.
El primer paso en el tratamiento de la diabetes en adultos mayores debe ser la
instauración de un régimen alimentario que lo conlleve a una disminución de peso,
sobre todo si presentan sobrepeso, para que de esta manera disminuya el patrón
de insulinoresistencia, sin provocar pérdida de masa muscular (sarcopenia). Es
importante tener en cuenta la edad del paciente, comorbilidades asociadas o no a
la diabetes mellitus, nivel de funcionalidad y soporte social.

Actividad física
La actividad física habitual en sus diversas formas: actividades de la vida diaria,
trabajo no sedentario, recreación y ejercicio, tiene un efecto protector contra la
diabetes.
Por tal motivo, se debe recomendar a la población general, mantenerse
físicamente activa a lo largo de la vida, adoptando prácticas que ayuden a evitar el
sedentarismo.
En el caso de personas de vida sedentaria, se les debe recomendar la práctica de
ejercicio aeróbico, en especial la caminata, por lo menos 150 minutos a la
semana.
La aplicación de la anterior indicación deberá efectuarse de manera gradual,
acompañada de las instrucciones pertinentes sobre las precauciones para evitar
lesiones u otros posibles problemas.
La actividad física más recomendada es de tipo aeróbico, intensidad leve a
moderada, es importante aclarar que debe ajustarse para pacientes con
cardiopatía isquémica o en pacientes que están bajo tratamiento con beta-
bloqueadores, algunos calcios antagonistas como el verapamilo y diltiazem, que
toman antiarrítmicos, o digitálicos, entre otras, conforme se establece en el
Apéndice Normativo E.

 Alimentación

Debe promoverse un tipo de alimentación que sea útil para la prevención de la


diabetes, conforme a las recomendaciones de la Norma Oficial Mexicana NOM-
043-SSA2-2005, Servicios básicos de salud. Promoción y educación para la salud
en materia alimentaria. Criterios para brindar orientación.
El aporte energético total debe adecuarse, a fin de mantener un peso adecuado,
evitándose planes de alimentación con menos de 1200 Kcal al día, como se
señala en el Apéndice Normativo B. (GOB, 2010)

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