Está en la página 1de 7

CARACTERÍSTICAS MACROSCÓPICAS DE LA MADERA

Las características macroscópicas son las que se pueden apreciar a simple vista, o con ayuda de
un aumento pequeño (lupa) y con nuestros sentidos (olor, sabor, tacto etc.). El estudio de las
características macroscópicas se puede dividir en dos grupos:
• Las relacionadas con la estructura celular (elementos anatómicos)
• Las relacionadas con las características físicas (propiedades organolépticas).

1. Elementos Anatómicos
1.1 Anillos de crecimiento
La apariencia de los anillos de crecimiento es la siguiente:
• Corte transversal: los anillos de crecimiento se aprecian en forma de círculos
concéntricos, cuyo origen es la médula del árbol;
• Corte longitudinal radial: los anillos se aprecian como líneas paralelas, en la misma
dirección que la longitud de la pieza;
• Corte longitudinal tangencial: los anillos se aprecian en forma de V invertida.
Se denomina textura de una madera la relación entre la anchura del leño tardío respecto al total.
El valor de la textura se relaciona con la resistencia de la madera, cuanto mayor sea la textura
es la resistencia de la madera.

1.2 Albura y duramen


En muchas especies, la madera formada con unos años de antelación sufre unos fenómenos
denominados de duraminización, que determina como principal efecto el cambio de color, hacia
tonos más oscuros.
Es característico de cada especie y de su crecimiento, los años a partir de los cuales empieza
dicho proceso. También es característico de cada especie la diferente apariencia de estas partes
de la madera.

1.3 Vasos
En muchas especies de latifoliadas, los vasos o elementos conductores de la savia presentan un
tamaño elevado, en diámetro y longitud, que se hacen perceptibles a simple vista. La apariencia
de los vasos es la siguiente:
• Corte transversal: pequeños agujeros circulares de apenas unas décimas de mm de
diámetro. Para su perfecta visión, es recomendable realizar en dichas partes cortes con
cuchillo. En este corte también se observa la agrupación de los vasos, que pueden ser
agrupados de diferentes formas o difusos.
• Corte longitudinal: pequeñas rajas de unas décimas de mm de anchura y profundidad, y
varios mm de longitud, orientadas según el eje longitudinal.
1.4 Radios leñosos
La mayoría de las células de la madera tienen una orientación axial, quedando una pequeña
proporción de células orientadas en dirección transversal-radial, es decir, en la dirección
médula-corteza. Cuando los radios leñosos están formados por varias células en anchura y
altura, resulta posible su observación a simple vista.
La apariencia de los radios leñosos es la siguiente:
• Corte transversal: líneas más o menos estrechas, que cortan perpendicularmente a los
anillos de crecimiento. La apariencia de estas líneas es a veces más clara y a veces más
oscura que el resto de la madera.
• Corte longitudinal tangencial: líneas de madera de color más oscuro que el resto de la
madera, de escasa anchura (de unas décimas de mm) y de longitud muy variable (de 1
a 100 mm) orientadas según el eje del árbol.
• Corte longitudinal radial: el radio se presenta como un espejuelo cuya anchura es la de
la totalidad del corte, y longitud variable, según lo indicado en el corte tangencial.

1.5 Parénquima axial


En algunas especies de madera, las células del parénquima se agrupan, haciéndose visibles a
simple vista.
La forma como se agrupa el parénquima es característico de cada especie, unas veces es de
forma aleatoria en pequeños grupos de células, otras veces está relacionada con la situación de
los vasos y otras la agrupación es continua, recta o formando olas u otro tipo de figura . La
apariencia de este parénquima depende de la forma de la agrupación.

1.6 Canales resiníferos


En algunas ocasiones estos canales son perceptibles a simple vista, fácilmente en los cortes
longitudinales y con cierta dificultad en los cortes transversales, siendo característico de cada
especie su situación dentro de la madera, su tamaño, su color y la forma en cómo se agrupan.

2. Propiedades organolépticas de la madera

Las propiedades organolépticas son aquellas que son percibidas por los órganos sensoriales,
influenciando positiva o negativamente en la utilización de las maderas.

2.1 Color
Esta propiedad es de importancia secundaria para la anatomía e identificación de maderas y
debe ser considerada con mucho cuidado, porque es muy común se encontrar una amplia
variación natural de tonalidad entre individuos de una misma especie y hasta entre varias partes
de un mismo tronco. Pocas son las maderas que presentan una coloración inconfundible como
las de Peltogyne sp (Fabaceae)., Euxilophora paraensis (Rutaceae) y Diospyrus ebanum
(Ebenaceae).
La variación de color natural de la madera se debe a la impregnación de diversas sustancia s
orgánicas en las células y en las paredes celulares (resina, tanino, gomas y variados
colorantes), depositadas, de forma mas acentuada, en el duramen. Frecuentemente, las
maderas de color más oscuro presentan gran durabilidad, una vez que estos productos
colorantes son más tóxicos para los hongos, insectos y agentes marinos xilófagos.
El color de la madera es de gran importancia desde el punto de vista decorativo, definiendo
un uso noble y especial. Sustancias colorantes, cuando presentes en elevadas
concentraciones, pueden ser extraídas comercialmente y aplicarse al teñido de cueros,
tejidos etc. El nombre del país Brasil se debe a la obtención de la tinta roja extraída del
duramen del “pau-Brasil” (Caesalpinia echinata), muy utilizada para teñir tejidos. En
general, la albura de la madera presenta una coloración más clara que el duramen, aunque
existan especies que no presentan diferencias de coloración. En algunas maderas, la albura
oscurece cuando es expuesta a la acción de la luz solar, presentando la misma coloración
del duramen (Aspidosperma polyneuron y Goupia glabra). El color de la madera está sujeto
a variaciones; la madera recién cortada es, generalmente, más clara y, cuando expuesta al
aire, durante un determinado tiempo, presenta un tono más oscuro, debido a la oxidación
de componentes orgánicos presentes en el leño; el pardeamiento también ocurre cuando
ha elevación del contenido de humedad, exposición al sol, en contacto con determinados
metales y ataque de ciertos hongos y bacterias. El color debe ser observado en una
superficie del duramen, recientemente cortada o pulida, en el plan tangencial. El color es
susceptible a modificaciones artificiales mediante tinturas o decoloraciones (acción de agua
o vapor). Se justifica la importancia de una identificación basada en caracteres anatómicos
inalterables y peculiares de cada especie, evitando alteraciones de interpretación de valores
en la comercialización de muchas especies comunes, como si fueran valiosas. Debido a la
subjetividad en la descripción macroscópica del color de las maderas, se recomienda el uso
de la tabla de Munsell para tejidos vegetales (Munsell Collor – Munsell Collor for plant
tissues. Baltimore, 1952). Mas recientemente, se han utilizado técnicas colorimétricas, con
la ayuda de procedimientos computacionales, que proporcionan una gran precisión en la
determinación de los colores.

2.2 Olor
El olor es una característica difícil de ser expresada y definida. El olor típico que algunas
especies presentan se debe a la presencia de ciertas sustancias volátiles o extractivos, que
se concentran principalmente en el duramen. Debido a la volatilidad de ciertos materiales,
el olor tiende a disminuir con el tiempo de exposición, pero se vuelve muy pronunciado
cuando se raspa, corta o humedece la madera, en el plan tangencial. El olor a considerar y
evaluar se refiere a la madera seca y no a la madera verde o semiseca, que a menudo tiene
un olor natural pronunciado y, en algunos casos, un olor rancio, resultante de la
fermentación. Algunas maderas, cuando están muy secas o muy envejecidas, necesitan una
ligera humectación para potenciar el olor. Existen muchas maderas cuyos olores son típicos
y que permiten una fácil identificación.
El olor natural de la madera puede ser agradable, como de Ocotea pretiosa (Lauraceae) y de
Cedrella fissilis (Meliaceae); pero puede ser extremamente desagradable, como de algunas
especies del género Nectandra (Lauraceae). Dependiendo de su utilización, la madera puede
ser más o menos valorada, a depender de su olor natural. En la producción de envases para
te y productos alimenticios, las maderas deber ser inodoras; para cigarros, sin embargo, el
sabor mejora cuando los productos son acondicionados en envases de madera de Cedrella
sp.; Santalum álbum (Santolaceae) es muy utilizado en la producción de artículos de
perfumería, debido a su agradable aroma. El alcanfor (Cinnamomum canphora, Lauraceae)
es usado en la producción de baúl para almacenamiento de lanas y cueros, ya que su olor
fuerte y característico es capaz de repeler insectos. Madera para muebles residenciales no
pueden tener olor desagradable y, cuando se trata de muebles para niños, la madera no debe
tener ningún olor.

2.3 Sabor
El sabor y el olor son propiedades estrechamente relacionadas ya que se originan a partir
de las mismas sustancias. También es una característica difícil de definir y, muy
excepcionalmente, el sabor contribuye a la identificación y distinción de especies . En
general, las especies ricas en taninos tienen un sabor amargo. El sabor se siente más en
maderas verdes o recién cortadas, siendo más intenso en la albura que en el duramen.
Dependiendo del sabor desagradable, algunas maderas deben desecharse para ciertos usos
industriales, como envases de alimentos, palillos de dientes, paletas para helado y juguetes
para bebés etc. Algunas maderas se descartan para ahumar carne y queso, ya que
transmiten un sabor y olor indeseables a los alimentos. Estas mismas maderas pueden tener
un uso preferencial para segmentos de construcción civil, como estructuras de techo, ya que
son repelentes de insectos. Las maderas de Vatairea guianensis (Fabaceae), Simarouba
amara (Simaroubaceae), Aspidosperma polyneuron (Apocynaceae), Spathelia excelsa
(Rutaceae), Glycoxylon sp (Sapotaceae) presentan sabor muy característico.

2.4 Veteado
Veteado es el término que se utiliza para describir el aspecto natural de las caras de la
madera (diseño o dibujo), en particular la cara longitudinal del duramen, bien pulida, que
resulta de las diversas características macroscópicas: duramen, albura, color, grano, anillos
de crecimiento y radios. Los veteados especialmente atractivos tienen su origen en
determinadas anomalías, como granos irregulares, ramas, bifurcaciones, nudos,
crecimientos excéntricos, deposiciones irregulares de sustancias colorantes, etc. El veteado
es diferente, dependiendo si la madera ha sido aserrada tangente a los anillos de
crecimiento, originándose la madera floreada, o si es aserrada radialmente a los anillos de
crecimiento, cuando se obtiene la madera cuarteada.
El veteado de la madera es fundamentalmente importante en la fabricación de laminados,
por la combinación de colores y formas, siendo muy apreciado con fines ornamentales y
utilizado para la fabricación de tableros, muebles y tabiques. Algunas maderas tienen un
veteado muy característico: Pithecolobium racemosum (Fabaceae) y Swartzia laevicarpa
(Fabaceae).

2.5 Brillo
Es la propiedad que tienen algunas maderas de reflejar la luz incidente. La cara radial es
siempre la más brillante debido al efecto de las bandas horizontales de los rayos. Desde el
punto de vista de la identificación y distinción de la madera, la característica de brillo es
irrelevante y difícil de definir. La importancia del brillo es principalmente de naturaleza
estética y esta propiedad se puede incrementar, artificialmente, mediante pulidos y
acabados superficiales. Algunas maderas tienen un brillo natural fácilmente visible, como
Ocotea cymbarum (Lauraceae) y Tapirira guianensis (Anacardiaceae).

2.6 Textura
La textura es el efecto que producen en la madera las dimensiones, distribución y porcentaje
de los diferentes elementos estructurales que la componen, principalmente los poros
(vasos). En las angiospermas, la textura está determinada principalmente por el diámetro
de los vasos y el ancho de los radios; en las gimnospermas, la textura está determinada por
el grosor y la regularidad de los anillos de crecimiento. La textura de la madera es de gran
importancia en el encolado y en la aplicación de revestimientos superficiales. La madera de
textura gruesa absorbe en grandes cantidades las sustancias que se le aplican; en el caso de
pinturas, son necesarias varias capas para obtener un buen acabado. Desde el punto de vista
del encolado, la absorción excesiva del adhesivo por una superficie porosa puede provocar
una mala adherencia. Según el grado de uniformidad de la madera, se destacan los
siguientes tipos de textura, observados en el corte tangencial:
• Gruesa - tiene radios leñosos grandes, parénquima leñoso abundante, poros
grandes y visibles a simple vista y la madera es de difícil acabado. Ejemplos de
madera con textura gruesa son: Pinus taeda, Pseudotsuga menziesii, Pinus elliottii.
• Fina – presenta tejido fibroso abundante, parénquima escaso y los poros son
pequeños, distribuidos de forma difusa en el leño, resultando en una superficie
homogénea y uniforme. Ejemplos de madera con textura fina son: Tabebuia sp.,
Schinus longifolius, Eucalyptus globulus.
• Mediana – es el término medio entre la textura gruesa y fina. Ejemplos de madera
de textura media: Astronium urundeuva, Gleditsia triacanthos, Cedrela spp.
Además de los tipos mencionados, la textura puede recibir otra clasificación:
• Homogénea o uniforme - cuando los elementos constituyentes, grandes o
pequeños, no muestran mayores variaciones en toda la superficie longitudinal de la
madera;
• heterogénea: cuando hay un gran contraste entre los elementos de leño temprano
y leño tardío.

2.7 Dureza
La dureza es una característica difícil de definir y, muy excepcionalmente, contribuye a la
identificación y distinción de especies. Es de menor importancia a los efectos de la anatomía
y la identificación de la madera. La dureza se puede evaluar de forma aproximada
presionando la uña o aplicando una esfera a las caras de la madera.

2.8 Grano
El término grano se refiere a la orientación general de los elementos longitudinales de la
madera con relación al eje del tronco. Como resultado del proceso de crecimiento y bajo las
más diversas influencias (mejoramiento genético, altitud, pendiente, vientos etc.), existe
una gran variación natural en la disposición y dirección de los tejidos longitudinales o axiales,
originando varios tipos de grano. El grano se puede clasificar de varias formas:
• Grano recto: cuando los tejidos axiales se orientan paralelos al eje principal del
tronco o piezas de madera. Este tipo de orientación se considera ideal, facilitando
los procesos de aserrado, secado, procesamiento y acabado. La resistencia mecánica
es considerablemente superior, sin deformaciones en las piezas de madera y
presentando un buen acabado superficial. Como ejemplos de grano recto, tenemos
la Swietenia macrophylla (Meliaceae).
• Grano espiralado: está determinado por la orientación en espiral de los elementos
longitudinales de la madera, en relación con el eje del tronco. Si hay un giro
completo alrededor del eje del árbol, en menos de 10 (diez) metros, la madera
presenta limitaciones de uso, principalmente como material de construcción. En
algunas especies, es muy posible observar tal defecto, debido a la presencia en
espiral de la corteza. Las principales consecuencias del uso de la madera son:
disminución de la resistencia mecánica, deformación por secado y dificultad en el
procesamiento y acabado.
Todos los árboles tienen el grano espiral en mayor o menor grado, como principio
constructivo del árbol, de manera de atender eficientemente el proceso fisiológico
de transpiración y distribución del agua a través del dosel. Otras posibles causas de
la espiral son la acción de los vientos, el desarrollo del dosel, el movimiento solar, la
rotación de la tierra, la deposición irregular de nutrientes en el suelo etc.
• Grano entrecruzado: los tejidos axiales están orientados en diferentes direcciones .
Provienen de árboles con fibra en espiral, en los que la dirección de inclinación ha
sufrido modificaciones periódicas. La resistencia mecánica no se ve muy afectada,
pero la madera presenta problemas de deformación y alabeo durante el secado y es
difícil trabajar con ella. Sin embargo, desde un punto de vista decorativo, se puede
utilizar madera por los dibujos atractivos.
• Grano ondulado: los elementos axiales de la madera cambian constantemente de
dirección, apareciendo como una línea sinuosa irregular. Las superficies
longitudinales presentan bandas alternas oscuras y claras, con un bello efecto
decorativo, que se encuentra fácilmente en maderas Ocotea porosa (Lauraceae). Las
características de la madera son prácticamente las mismas que las de grano
entrecruzado.
• Grano diagonal u oblicuo: es la desviación angular que presentan los elementos
axiales en relación con el eje principal del árbol o pieza de madera. Proviene de
árboles con troncos excesivamente cónicos, con crecimiento excéntrico, etc. Este
tipo de grano afecta significativamente las propiedades tecnológicas de la madera,
provocando una disminución de la resistencia mecánica, deformación por secado y
dificultad en el procesamiento y acabado.
Bibliografia
Castro, J. 2005. Anatomia da Madeira e suas Implicações Tecnológicas. Universidade Federal de
Viçosa. 140 p.
Vignote, S.; Martínez, I. 2006. Tecnología de la Madera – 3ª ed. Madrid: Ediciones Mundi-Prensa.
678 p.

También podría gustarte