Los 9 cripto-pecados

que debes evitar para multiplicar tu patrimonio

Por: Gonzalo Arzuaga

Comenzar a invertir en criptomonedas es realmente desafiante, complejo, difícil de entender.

Además de todo eso, la operatoria no es sencilla. Se vuelve difícil y engorrosa.

Se entiende, claro, todavía no está desarrollada la interfaz de intercambio para el público masivo
como en otros mercados. Estamos en la primera etapa de esta adopción masiva de la tecnología.

Lo mismo pasó en los '90 con internet.

Vamos a ver alguna de las cosas que NO tenés que hacer si querés tener éxito invirtiendo en
criptomonedas. Te voy a contar cuáles son, a mi parecer, los 9 cripto-pecados de quienes
comienzan a invertir en este mercado:

Cripto-pecado N°1: No desarrollar tu plan de inversión

Cripto-pecado N°2: No conocer los fundamentos de la criptomoneda a invertir

Cripto-pecado N°3: Dejarte llevar por la euforia

Cripto-pecado N°4: Pensar que se puede hacer dinero fácil

Cripto-pecado N°5: Ser descuidado con tu seguridad

Cripto-pecado N°6: Envidiar la ganancia rápida de otras criptomonedas

Cripto-pecado N°7: Invertir todo tu capital

Cripto-pecado N°8: No tener un horizonte temporal de inversión

Cripto-pecado N°9: ¡No invertir en cripto!

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Cripto-pecado N°1: No desarrollar

tu plan de inversión
Si no tienes un plan, el mercado te va a castigar.

Eso ocurre siempre, ya sea que estés invirtiendo en criptomonedas o cualquier otro activo
financiero.

Si no se tienes un plan, estarás obligado a improvisar todo el tiempo. Es que, sin un norte, es difícil
llegar a algún lugar que valga la pena.

Desarrollar un plan que te haga sentir cómodo como inversor lleva tiempo. Para saber qué es lo
que quieres primero tienes que saber qué es lo que se ofrece, cuáles son las posibilidades.

Te planteo 4 puntos que te pueden ayudar a empezar a plasmar tu plan de inversión en

criptomonedas:

1. Operar siempre con stop-loss.

Cuando se invierte, uno compra una criptomoneda porque está convencido que el precio va
a realizar determinado recorrido, potencialmente al alza.

Pero a veces hay noticias que impactan fuertemente en el precio, o simplemente suceden
movimientos imprevisibles que no tienen un fundamento real. Por ejemplo, que un gran
inversor decida, por una razón privada, hacer una gran venta de la moneda. Los pequeños y
medianos inversores, si asumen que está sucediendo una corrida, continúan esa tendencia y
generan una caída importante del precio.

En esos casos es fundamental tener un stop loss, es decir, establecer un piso de pérdida
aceptable. Si compramos una moneda a USD 1, tal vez nos resulte aceptable una pérdida de
20%, así que estableceremos nuestro stop loss en USD 0,80. Si la moneda cae hasta ese
valor, la vendemos sin importar qué para prevenirnos de mayores pérdidas y tener capital
disponible para inversiones más prometedoras.

Resulta difícil mantener un stop loss y vender cuando el precio cae a ese valor. Nadie quiere
asumir pérdidas ni admitir que estaba equivocado.

Admitir que se está equivocado es mucho más difícil que lo que cualquier inversor espera.
Invertir es un juego donde el aspecto psicológico juega un rol muy importante.

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2. Pensar en Precio Promedio Ponderado (PPP).

El Precio Promedio Ponderado tiene un funcionamiento sencillo: si compraste 3 Bitcoins y

por el primero pagaste USD 8.000, por el segundo USD 9.000 y por el tercero pagaste USD
10.000, entonces tu PPP de los 3 Bitcoins es de USD 9.000 cada uno.

Sirve mucho para no sentir que un precio "está muy caro" en relación a otro mucho más
barato que se compró en otra oportunidad.

El PPP te previene de no comprar cuando un precio te parece alto en comparación con una
compra anterior que realizaste. En realidad, mirando a futuro, podría haber sido una
excelente oportunidad.

Esta metodología de pensar en PPP la usan mucho los inversores de largo plazo. De esa
manera, cuando el precio sube pero igual piensan que el precio es favorable para una
inversión de largo plazo, siguen comprando para promediar.

De la misma manera, cuando un una criptomoneda tiene fundamentos muy sólidos y entra
en una tendencia de corto plazo bajista, los inversores más sofisticados que apuestan al
largo plazo, siguen comprando porque están abaratando su Precio Promedio Ponderado.

Volviendo al ejemplo que usamos más arriba, el de los 3 Bitcoins que “en promedio” pagamos
a USD 9.000 cada uno, un inversor experto sabe que habrá duplicado su dinero cuando
llegue a USD 18.000, sin importar cuáles fueron los precios de compra de cada Bitcoin
cuando armó su cartera.

3. Identificar una o varias criptomonedas para conservar a

largo plazo.

Una vez que se determina una criptomoneda con potencial de crecimiento, puedes invertir
cierto dinero todos los meses. Idealmente la misma suma, el mismo día del mes, en la misma
criptomoneda.

Por ejemplo, "compraré USD 100 en Bitcoin todos los días 1 de cada mes". Un plan bien
simple como ese sirve muchísimo porque brinda disciplina y solo hay que ejecutarlo. Lo ideal
es pensar poco cuando se está ejecutando, porque es entonces cuando las emociones
generan conflictos y se comenten errores. Un ejemplo concreto de errores es "ha subido
mucho, seguro bajará, así que mejor espero", y luego se terminan consumiendo sos USD 100
en otros gastos y no en inversión. Así se deja pasar una excelente oportunidad de inversión
porque "yo pensaba que…".

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4. Tener claro cuándo vender lo que se compró.

Algunas ideas para fijar una salida: "cuando logre 20% de retorno", "cuando hayan pasado 6
meses", o lo que a usted le resulte mejor. Y lo más importante: ejecutar a rajatabla a su plan.

Si ves que el plan no está funcionando, puedes cambiarlo, pero nunca en el medio de la
ejecución.

Cripto-pecado N°2: No conocer los

fundamentos de la criptomoneda a
invertir
Hay más de 3.000 criptomonedas que cotizan en distintos exchanges, reflejadas en
CoinMarketCap.com

Lo importante cuando se invierte en una criptomoneda es conocer sus fundamentos: para qué
sirve, qué intentan lograr. Para eso hay que informarse, leer, estar en tema, consultar a los
especialistas. Es un proceso difícil que toma tiempo. Lo importante es encararlo como si fuera una
maratón, no una carrera corta de 100 metros.

Para ser un inversor de éxito en el criptomercado (y, realmente, para lograr cualquier cosa de valor
en la vida) hay que encararlo como un reto de largo aliento, una maratón. Se consigue poco
intentando obtener ganancias grandes rápidamente.

Por lo general, esa es la forma de perder dinero invirtiendo.

El problema con las criptomonedas es que viven ciclos de euforia (con su consiguiente posterior
depresión) cada varios años. Históricamente ha sido así. Entonces los medios de comunicación se
hacen eco de esas historias "increíbles" que a la gente le gusta leer, y se genera un efecto contagio
muy poderoso.

Todavía recuerdo cuando, a fines de 2017 (el último ciclo de euforia), mucha gente que no estaba
para nada relacionada con el mundo cripto se me acercaba a consultarme sobre los precios, si valía
la pena invertir. Muchos otros, directamente invirtieron y no les fue bien en el corto plazo.

Las mejores chances de tener éxito se dan si uno decide apostar fuertemente al largo plazo de la
criptoeconomía. Para eso, nada mejor que invertir tiempo en aprender y formarse antes que
arriesgar dinero en un mercado altamente volátil.

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Cripto-pecado N°3: Dejarte llevar

por la euforia
No es bueno comprar cuando sube asumiendo que "va a seguir subiendo", ni vender cuando baja
"porque va a seguir bajando". No tiene fundamento ese pensamiento.

En realidad, nadie sabe qué va a pasar con el precio en el mercado de criptomonedas en el corto
plazo, por eso lo mejor es tener una estrategia.

La explicación es sencilla: sube cuando hay más compradores que vendedores, o cuando consenso
de que el mercado va a subir. Y baja por la razón contraria, cuando hay más vendedores que
compradores, o cuando hay consenso de que el mercado va a bajar, y eso mismo empuja el precio
hacia abajo.

Cuando por algún motivo sientes que "te estás quedando afuera" de una cierta criptomoneda que
alguien está promocionando, recuerda que mañana el criptomercado también traerá nuevas
oportunidades. Ninguna oportunidad es la última, deja pasar la que no puedas comprar sin
mayores culpas.

La psicología es importante, te hará cometer errores cuando se te nuble el pensamiento. Y de eso

se aprovechan quienes manipulan al mercado psicológicamente para que la gente compre cierto
criptoactivo.

En términos psicológicos, nunca nuestras emociones y pensamientos nos van a nublar más la razón
que cuando una inversión no resulta como queremos y vamos a pérdida.

Va a suceder, alguna vez, que pierdas algo de dinero en operaciones. Por eso usamos mecanismos
como el stop loss. Nadie tiene un historial libre de pérdidas. Estar preparados para manejar esa
situación es fundamental para garantizar el futuro éxito del inversor.

Cripto-pecado N°4: Pensar que se

puede hacer dinero fácil
Cuando el precio de las criptomonedas sube con fuerza en un breve período de tiempo, muchos
medios de comunicación se hacen eco y lo reflejan dándole cobertura mediática a historias
extraordinarias.

Por ejemplo, hace un tiempo se hizo famoso Erik Finman, un chico de 12 año que hizo fortunas
comprando Bitcoin cuando salía algunos pocos dólares y hoy es millonario. También se suelen leer
noticias que hablan de gente común que multiplicó muchas veces su dinero en muy poco tiempo.

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Es cierto que algunas de esas noticias son reales, algunas de esas historias realmente ocurrieron,
pero no es la realidad generalizada del mercado y por eso se mencionan como destacadas.

Lo que quiero puntualizar aquí es que queda “flotando en el aire” la sensación de que hacer mucho
dinero en poco tiempo con criptomonedas es sencillo.

Eso no es cierto, pero mucha gente realmente lo cree gracias a noticias como la que figura arriba.

Recuerdo claramente una conversación que tuve con otro padre del colegio al que van mis hijos. A
fines de 2017, se acercó a mí y, como ya sabía que me dedico a las inversiones en criptomonedas,
me dijo sencillamente "Compré IOTA". Yo no estaba al tanto que estaba invirtiendo en crypto, así
que le manifesté mi sorpresa. "¿Qué te llevó a elegir IOTA especialmente?" le pregunté. Y su
respuesta me sorprendió: "Escuché por la radio que hablaban del tema." Fin de la historia.

No hay atajos, no hay “dinero fácil” en criptomonedas. Pero sí es cierto que actualmente ofrece una
relación riesgo/recompensa muy interesante, mucho mejor que cualquier otro activo financiero
mundial.

Perseguir el retorno rápido invirtiendo en algo que no conoces es una receta para el fracaso
financiero. La mejor recomendación es aprender para que, cuando haya una próxima corrida
alcista (bull run), estar bien preparado para aprovecharla.

Lo que es indudable es que no va a ser dinero fácil, porque habrás invertido tiempo y energía en
aprender. Además del dinero que vas a arriesgar, obviamente.

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Cripto-pecado N°5: Ser descuidado

con la seguridad
En el mundo de las cryptos este pecado puede ser mortal. Perder el acceso a tus criptomonedas es
como olvidar para siempre en qué banco tenías depositado tu dinero.

Resulta muy fácil olvidarse de que estamos hablando de dinero digital. Es importantísimo
mantener la custodia de un activo que existe solo en el mundo virtual.

Las criptomonedas utilizan la criptografía como base fundacional. Es decir, son fundamentalmente
un código secreto. Para operarlas se necesitan dos llaves: una pública que se da a conocer, y una
privada que se mantiene en secreto (quien conoce esa llave privada tiene acceso a ese
criptodinero).

El punto fundamental de la criptografía, a diferencia de otros servicios digitales que solemos usar,
es que la llave privada no puede regenerarse. No se puede reestablecer como la contraseña de un
correo electrónico. En el caso de las criptomonedas, si se pierde la llave privada, se perdió todo el
dinero.

Así de simple, así de claro y así de peligroso. Hay que tomarse muy en serio el tema de dónde y
cómo guardar esa información.

Por esta razón no es recomendable manejarse con una app para celulares: quien controle el
teléfono tendrá acceso a la billetera con las criptomonedas y las podrá enviar a cualquier otra
dirección.

Desde ya, hay que tener mecanismos de seguridad en el celular. El más común es el de establecer
una clave de acceso. Es cierto, ya sé, es un poco engorroso tener que desbloquearlo cada vez que
vas a utilizar el teléfono. Pero la alternativa de perder todas las criptomonedas en un eventual
robo es dramática.

También se recomienda usar 2FA, Two factor authentication (‘autenticación con 2 factores’) para los
sitios web de los exchanges.

Este mecanismo de seguridad establece que no alcanza solo con la contraseña para ingresar a un
sitio, sino que deberás corroborar tu identidad cada vez con un segundo sistema de identificación a
través de una app.

De esta manera, si alguien descubre el nombre de usuario y clave del sitio, todavía necesitan
acceso al teléfono celular para poder generar el código 2FA.

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Cripto-pecado N°6: Envidiar la

ganancia rápida de otras
criptomonedas
Como ya mencionamos, existen más de 3.000 criptomonedas que un inversor puede comprar en
los exchanges. En un mercado tan volátil como lo es crypto, es esperable que todos los días haya
muchos cambios, muchas criptomonedas subiendo y otras tantas bajando.

Prácticamente todo el tiempo hay otras crypto que suben más que las que uno tiene. Pero no por
ello debes lamentarte por no haber comprado esa moneda en particular. Sirve de mucho tener un
horizonte temporal y un porcentaje de retorno estimado, por ejemplo, un 25% en 6 meses. Eso
calmará los nervios cuando notes que otra crypto subió 20% en un solo día…

Adicionalmente, si miras el precio de las criptomonedas todos los días significa que invertiste
demasiado para tu perfil de riesgo. Si ya has entendido que no te harás rico de un día para el otro,
esa ansiedad solo significa que la pérdida puede generarte problemas.

En ese caso, deberías vender, desinvertir y solo dejar invertida la cantidad de capital que te haga
sentir más seguro.

La ansiedad te hará cometer errores, como vender cuando no deberías y sentir que tienes que
vender y comprar todo el tiempo para incrementar tus ganancias, cuando muchas veces no es el
caso.

Cripto-pecado N°7. Invertir todo tu

capital
Este pecado es muy común en quienes recién descubrieron crypto. Están tan fascinados con el
potencial incremento, que niegan entender el simple hecho de que es imposible que algo solo suba
y suba.

Llegan al punto de querer vender la casa para apostarla en crypto. Una situación semejante a la
pérdida de realidad de los ludópatas, quienes apuestan compulsivamente a juegos de azar como la
ruleta.

En la famosa fábula de la tortuga y el conejo, la tortuga llega primero a la meta porque el conejo se
dispersa mucho. Del mismo modo, en las inversiones en criptomonedas gana la tortuga.

Ser el conejo significa no cuidar el capital, y ese pecado puede ser mortal. Dejar pasar

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oportunidades no daña a nadie, perder dinero es el problema.

Solo recomiendo invertir el capital que estás dispuesto a perder sin que cambie radicalmente tu
vida (por ejemplo, sin llegar a tener problemas de pareja). Suena gracioso al principio, pero esa
recomendación tiene mucho sentido una vez que se la entiende completamente.

No es aconsejable invertir todo tu capital en crypto. Tanto así que tengo una recomendación, la
llamo La Regla Del 2%:

Nunca debes arriesgar más del 2% de tu patrimonio total.

Si todo sale bien, invirtiendo el 2% de tu patrimonio (algo conservador en términos de inversiones)

en criptomonedas, en 10 años podrías duplicar tu capital (¡e incluso más que eso!).

Cripto-pecado N°8: No tener un

horizonte temporal de inversión
Invertir sin un horizonte de tiempo es como ir de excursión sin un mapa de ruta. Ya sea porque se
apuesta al muy largo plazo, unos cinco años, o porque se piensa vender y capturar la ganancia una
vez que se consiga el 50% de retorno, nada es excusa para no incluir, al menos mentalmente, una
meta temporal en el plan de inversión.

De esa manera, cuando uno realiza una inversión en el mercado de cryptos, tiene la tranquilidad de
saber que hay un tiempo para ese crecimiento esperado y no se juega el capital en cada momento
al alza o a la baja.

También es muy útil para no andar cambiando de opinión en cada "sacudida" del mercado, porque
en crypto la volatilidad es más alta que en cualquier otro activo financiero del que se tenga
memoria.

Es muy fácil dudar cuando la criptomoneda que se invirtió cae 50% en dos semanas, pero quizá
vender en ese momento no sea lo más recomendable.

En cambio, si uno tiene un claro horizonte de inversión a 12 meses, por ejemplo, se pueden tolerar
con mayor comodidad esas fluctuaciones dramáticas en el precio de la criptomoneda a las que, los
que invertimos en cryptos, estamos tan acostumbrados.

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Cripto-pecado N°9: ¡No invertir en

cripto!
Dejamos para el final el pecado más grave de todos los que se pueden cometer en cryptos:
desconocer el enorme potencial de retorno que ofrecen las criptomonedas.

Para eso, el primer objetivo es lo que se llama "salir de cero": dejar de estar desinvertido en crypto.

Parece sencillo, pero en realidad no lo es. Porque para "salir de cero" hay que investigar,
interiorizarse, aprender el conocimiento de esta tecnología, animarse a descargar alguna wallet,
elegir entre todas las que existen, recordar la clave privada, pensar y decidir cuál es la mejor forma
para custodia de los criptoactivos... y los temas continúan infinitamente.

Si todavía usted no invirtió nunca en crypto, lo más importante es romper la inercia, dar el primer
paso y "salir de cero". Este es el paso más difícil: los obstáculos resultan abrumadores e intimidan a
los nuevos inversores.

¡No invertir nada en crypto es el mayor pecado que se puede cometer! Muchas personas se van a
lamentar dentro de varios años de cometerlo, pero ya va a ser demasiado tarde.

Bueno, esto es todo. Estas son las principales amenazas que atentan contra tu éxito financiero en
el mercado de las criptomonedas.

Ahora que ya conocés los crypto-pecados, estás al tanto de los principales errores que cometen
quienes fracasan en el mercado de cryptos, sin dudas el que tiene mayor potencial de crecimiento
de todos los mercados actuales.

No pierdas tiempo: armá tu plan y “sal de cero”.

Gonzalo Arzuaga

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