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recibiere
directamente o
por interpuesta
persona,
para si o un
tercero,
dádivas o
cualquier otra
ventaja
o aceptare
ofrecimientos o
promesas, será
sancionado con
presidio de (…)
El delito se consuma aunque las promesa u ofrecimientos a que refiere el tipo penal
no se cumplan.
ARTÍCULO 146.- (USO INDEBIDO DE INFLUENCIAS)
obtuviere ventajas o
beneficios,
para sí o para un
tercero, será
sancionado (…)
No tiene relevancia jurídica que se trate de algo justo o injusto lo que se obtiene.
En cuanto a los delitos contra la fe pública, entre los que se encuentra la Falsedad
Ideológica, Fernardo Villamor Lucía, en su obra Derecho Penal Boliviano, expresa:
en las mismas
condiciones (a
sabiendas)
celebrare contrato
perjudicial a la
economía
nacional, será
sancionado (…)
ARTICULO 222. (INCUMPLIMIENTO DE CONTRATOS)
Con relación al primer elemento objetivo, cabe mencionar que el legislador, al definir al
sujeto activo, previó que este puede ser un funcionario público o quien ejerza función
directiva o de responsabilidad en relación de dependencia con el Estado, norma que es
concordante con la previsión del art. 28-c) de la L Nº 1178, que señala que el término
servidor público se refiere a los dignatarios, funcionarios y toda otra persona que preste
servicios en relación de dependencia con autoridades estatales cualquiera sea la fuente
de su remuneración; consecuentemente, se está frente a un delito especial teniendo en
cuanta la calidad del sujeto activo.
En cuanto al segundo elemento objetivo, debe partirse del criterio inicial de que la
palabra administración (servir) se traduce como el ejercicio de la dirección de una
institución y consiste en la actividad que desempeñan los individuos o las empresas en
virtud de la necesidad que deben proveer cotidianamente a partir de los recursos
materiales, humanos e incluso intangibles de los que pueden disponer y se refleja en la
gestión de los bienes con que cuentan con el propósito de obtener de ellos el máximo
aprovechamiento posible en su aplicación a las carencias del momento. De acuerdo a
Guillermo Cabanellas (Diccionario Enciclopédico de Derecho Usual, pág. 167) es la
“gestión, gobierno de los intereses o bienes, en especial de los públicos”, o siguiendo a
Bielsa se puede decir que administración es ante todo organización y administrar, en el
sentido común del vocablo es organizar económicamente los medios de los que se
dispone y usar correctamente de ellos para proveer a las propias necesidades”, de
modo que “una buena administración supone el establecimiento o mantenimiento de
una relación armónica – y por eso proporcionada - entre la satisfacción de las
necesidades y los medios disponibles (Enciclopedia Jurídica OMEBA – Tomo 1 pág. 483).
Por otra parte, cabe destacar que la aplicación de la administración que realizan los
órganos gubernamentales es interna cuando satisfacen sus requerimientos también
internos para garantizar el eficiente desempeño de las funciones que les han sido
atribuidas y es mediata, cuando realizan su función para cumplir con la sociedad
realizando el bien público; administración que además está sujeta a un conjunto de
principios como el de legalidad, que implica la actuación conforme a derecho aplicando
las normas y procedimientos fijados en el ordenamiento jurídico, de esta forma el
asumir la función pública impone al servidor, un comportamiento reglado denominado
ordenamiento jurídico administrativo, de cuyo cumplimiento no puede sustraerse.
Ahora bien, sobre la base de los criterios expuestos, se tiene que el art. 224 del Cod.
Pen. Al establecer a la mala administración como un elemento objetivo del delito de
conducta antieconómica, hace referencia a una administración deficiente o errónea,
que se produce cuando no se actúa de acuerdo con la ley, no se respeta los principios
de una buena administración o se vulneran los derechos humanos.
Por otra parte debe considerarse, respecto al delito acusado, que se está ante un delito
de resultado, lo que implica, la necesidad de que la acción se anude en un resultado,
debiendo destacarse que en la moderna Ciencia del Derecho Penal, si bien se considera
que la relación de causalidad, por si misma no es suficiente, pues se requiere para
considerar un resultado como prohibido, además de la relación de causalidad, la
imputación objetiva del resultado, es decir, que el imputado para que responda por un
resultado, es necesario que mas allá de que su comportamiento la haya causado, debe
concluirse que ese comportamiento constituye la explicación de ese resultado.
Si por el uso
indebido, el bien
sufriere deterioro,
destrozos o
pereciere, la pena
será de tres a
ocho años y
reparación del
daño causado.
ARTICULO 27. (ENRIQUECIMIENTO ILÍCITO) Ley N° 004