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TEMA UNO “Porque yo los he creado para mi gloria.

Definidos Fui yo quien los formé”


Isaías 43:7 NTV

Definido significa: Que tiene unas características claras y precisas o que tiene unos límites
concretos. Es formular con exactitud el significado. relacionado: delimitar; Tomar una
decisión o resolver algo sobre lo que había dudas. relacionado: determinar. Dar definición
al significado de una palabra. Expresar con exactitud y precisión el significado de una
palabra o la naturaleza de una persona o una cosa. decidir por autoridad legítima [un punto
dudoso de dogma, de disciplina, etc]. expresar de manera exacta y precisa el significado de
una palabra o concepto Delimitar, fijar explicar.

Sabiendo el significado de definidos, entonces preguntamos ¿Qué define a un cristiano?

A un cristiano lo define Cristo, porque la esencia de la vida cambiada es Cristo en uno y


a través de uno como resultado de ese encuentro con la gracia redentora de Dios. No es
producto del esfuerzo humano porque por sí mismo el ser humano sería incapaz de
alcanzar la salvación, y de cambiar la naturaleza caída; pero cuando se rinde al Señorío de
Jesucristo provoca un cambio de dirección, un cambio de mente, una vida con libertad de
los lazos opresores del pecado, una vida con propósito, una vida plena y abundante. La vida
cambiada no significa perfección, pero si un proceso de transformación, en el que Jesús va
perfeccionando su obra hasta el día de la redención completa. La esencia de la vida
cambiada es que el ser humano va en un proceso de parecerse cada día más a Cristo, y
llegar a ser como él es. 1 Corintios 2:16

Es por esta razón que nos llamamos cristianos, porque seguimos a Cristo, hemos
entendido que fuimos creados para la alabanza de Dios, somos cristianos porque hemos
muerto a la vieja naturaleza de pecado y hemos renacido en Cristo a una vida diferente.
Entonces por qué siendo cristianos seguimos con crisis de definirnos y todavía buscamos
el favor de la sociedad cuando debería definirnos la Palabra de Dios.

¿Hasta qué punto nos define el mundo? ¿La Palabra? ¿Cómo podemos desarrollar nuestra
identidad de manera más plena en el segundo caso?

El mundo tiene un parámetro para definir al ser humano, por lo general es de acuerdo con
el estatus, belleza, destrezas, edad, posición, cultura u otros. Hay estigmas en la sociedad, y
muchos hasta un estándar de la persona ideal. El mundo quiere etiquetarnos y hasta
definirnos, de hecho, muchos cumplimos con ciertos convencionalismos sociales porque
no queremos desencajar en el medio que nos rodea.

AÑO DE LA
IDENTIDAD
TEMA UNO “Porque yo los he creado para mi gloria.

Definidos Fui yo quien los formé”


Isaías 43:7 NTV

La Palabra nos define de una manera apropiada porque nos da un equilibrio y un concepto
adecuado de lo que somos. La Palabra nos define sin etiquetas, y nos da libertad, pero eso
sucede cuando realmente la vivimos y aplicamos en nuestro auto concepto.

La identidad la podemos desarrollar de manera más plena cuando somos definidos por la
Palabra, ya que comenzamos a vernos como Dios nos ve, ninguno tenga un concepto de sí
que no debe de tener dice el consejo bíblico, ni me veo superior a otros (sobreestimar) ni
inferior a otros (subestimar). Para ello debemos convertirnos en personas guiadas por la
Palabra, sensibles a la voz de Dios, confrontados y moldeables en nuestro carácter.
Entonces los complejos, las montañas rusas emocionales, las reacciones alteradas no nos
dominaran. No será el mundo quien nos etiquete, sino que por la Palabra podemos gozar
de una autoestima saludable. 1 Corintios 3: 23 Pertenecemos a Cristo

¿Qué se requiere para definirnos como Dios lo hace?

Entre más cerca estemos de Dios, más clara será la visión del espejo de nuestra vida. Ya que
Él nos creó, a imagen suya. La óptica divina es muy diferente a la nuestra, el lente del ser
humano está lleno de pecado, inmoralidad y prejuicio, y eso ensucia la visibilidad, pero el
lente de Dios está regulado por su amor, propósito, misericordia y fidelidad. El parámetro
adecuado está en lo que la Revelación Escrita dice de nosotros, cuando permanecemos en
su presencia, hay intimidad con él, y renunciamos las marcas que probable hemos recibido
por parte de otros, entonces comenzaremos a vernos con el lente de Dios y veremos que
fuimos creados para gloria de su Nombre.

AÑO DE LA
IDENTIDAD
TEMA DOS Yo Soy el que Soy. Dile esto al pueblo de Israel:

Ser o Hacer “Yo Soy me ha enviado a ustedes”.


Éxodo 3: 14 NTV

Moisés fue el primer ser humano que se atrevió a preguntar cuál es el nombre de Dios. La
respuesta fue: Yo soy el que Soy; el Creador del cielo y de la Tierra no quiso darse a conocer
como el Todopoderoso, el Altísimo, el Grandioso, el hacedor de milagros y maravillas,
aunque lo es, el quiso conectarnos con su Ser. No dijo: yo soy el que hago, sino Yo soy.

Moisés venía de una vida de mucha actividad en Egipto, que puede significar para nosotros
un trabajo forzado o esclavitud, hasta que un día se dio cuenta que su verdadero yo, no era
ser príncipe de Egipto, sino ser libertador de su pueblo y generación.

La sociedad actual es muy demandante y nos lleva a un activismo desbordante, que se ha


reflejado aun en la iglesia. Para disminuir este problema debemos empezar a tener
prioridades definidas, de esta forma la misión estará clara y no andaremos perdiendo el
tiempo en actividades que no van en el cumplimento de la misión, porque cuando
estamos cargados en el hacer y no en el ser nos intoxicamos.

Definitivo nos intoxicamos de muchas maneras, no sólo las drogas destruyen el


organismo, también distorsionan las relaciones y lo que somos las palabras que nos
marcaron, abusos de confianza, falsas creencias y muchas cosas más que deforman el ser
que somos.

Marcos Brunet nos dice que en el libro de Génesis aparece claramente la obra de la
creación y redención eterna.

“En el principio creó Dios los cielos y la tierra” Génesis 1: 1; Génesis 1: 2 Nos hablan ambos
textos que Dios forma el ser. A pesar de que vemos la obra del diablo la de deformar. Dios
sigue formando.

Dios forma, el diablo deforma y Cristo Transforma


Cristo Transforma en Genesis 1: 3 Dios crea la luz pero también se puede hablar de la
transformación de esa creación que estaba desordenada.

Trayendo este ejemplo que nos habla Marcos Brunet, podemos decir que Dios nos formó
de una manera desde la eternidad, pero desde el momento que entraste al vientre de tu
madre, comenzó el intento del enemigo para deformarte con maldiciones hereditarias,
trastornos de personalidad, enfermedades y mucho más. Cuando comenzaste a crecer, el
ambiente que te rodeaba, las palabras que escuchaste, las experiencias vividas intentaron
deshacer el diseño original para que no seas “conforme” a lo planeado.

AÑO DE LA
IDENTIDAD
TEMA DOS Yo Soy el que Soy. Dile esto al pueblo de Israel:

Ser o Hacer “Yo Soy me ha enviado a ustedes”.


Éxodo 3: 14 NTV

Pero cuando conociste a Jesús comenzó el proceso de transformación, de desintoxicación,


para que vuelvas a esa imagen y semejanza del Creador. Dios está interesado en sanar
nuestro Ser, el esta interesado en lo que somos más que lo que hacemos. Para muchas
personas la posición es la que los define, para nosotros los Hijos de Dios lo que nos define es lo
que tenemos en el interior y aunque el diablo siempre ha querido deformar esa identidad,
sabemos que el Gran Yo Soy está con nosotros y nos ha formado y transformado.

Moisés tuvo que reconocer donde esta su identidad pero para poder liberar a otros él primero
debía ser libre. Toda Persona que no conoce su identidad es vulnerable a la esclavitud.

Pero para conocer a ese Gran Yo Soy se requiere un Selah (pausa en lo vivido) para pensar y
repensar y prepararse para lo que viene. Salmos 46: 10

No se puede conocer a ese Gran Yo Soy en una rutina de hiperactividad, nos quita la energía y
las ganas de pensar, se necesita estar quietos, reconocer que nuestro reposo esta en el Señor
y no hay mejor forma de ser definidos que en la presencia del Señor, que en su regazo, allí
donde no hay palabras que puedan expresar todo lo que él significa para nosotros y es en ese
taller donde recibimos la identidad que nos define. A eso se le llama Intimidad, y eso es lo que
nos mantiene definidos.

La Intimidad es una amistad estrecha, Dios siempre ha querido tener una relación de
intimidad con el ser humano y es que los seres humanos somos las únicas criaturas hechas a
la imagen de Dios, capaces de pensar, razonar y tomar decisiones. Hoy en día las relaciones
humanas son bien superficiales, no hay intimidad y esta se ve afectada por la infidelidad o
dedicación a la relación. Y por ello caemos en el error de sustituir la intimidad por el poco de
actividades donde creemos que estaremos con Jesús.

Nunca podrás llevar una relación bien estrecha con una persona a menos que tengan cosas
en común; Cuando más andas con alguien, más te vas a parecer a ella. Es de valorar que entre
más tiempo pase con Jesús más nos vamos a parecer a Él. La causa por la que muchos
cristianos se debilitan, bajan la cabeza y se olvidan que Dios está con ellos es porque no llevan
una relación íntima con El, viven esperanzados a lo que los demás le puedan decir, a un culto
y fuentes que se secan muy rápido.

La comunión íntima de Jehová es con los que le temen, Y a ellos hará conocer su pacto.
Salmos 25:14. La intimidad es un encuentro frecuente e intenso, sin distractores, no es un
encuentro ocasional, se requiere tiempo, no es algo apresurado, no es como ir al
supermercado, es conocer profundamente, conocer a Dios nos hace amarle y ese amor nos
da una identidad clara.

AÑO DE LA
IDENTIDAD
TEMA TRES
Definidos por
una espiritualidad
integral
Como cristianos también hemos sido definidos por ser personas espirituales, pero lo
primero que debemos hacer para una sana espiritualidad es renunciar.

La escuela de la renuncia es la que Jesús dijo Mateo 16: 24” Si alguno quiere ser mi discípulo,
niéguese a sí mismo, tome su cruz cada día y sígame”, también dijo Mateo 10:37 “El que
ama al padre o la madre más que a mí no es digno de mi” “ Si alguno viene a mí, y no
aborrece a su padre, a su madre, a su mujer e hijos, a sus hermanos o hermanas, y aun hasta
su propia vida, no puede ser mi discípulo” Lucas 9:62 “ nadie que pone su mano en el arado,
mira atrás es apto para el reino de Dios”….. Podríamos mencionar muchos textos de la Biblia
dichos por Jesús que nos amplía el panorama que la vida cristiana es de renuncia, de
abandonar, de dejar, es de creer. Significa renunciar a muchas cosas que ocupan el primer
lugar en nuestra vida; y poner en el trono de nuestra vida al Rey de reyes y Señor de señores.
Y rendirle toda nuestra adoración, es rendirle nuestras coronas, nuestros logros y aquello
que según nosotros hemos alcanzado.

La primera muerte que experimentamos es a nuestra vieja naturaleza de pecado, además


la muerte a nuestras pasiones, concupiscencias y vanaglorias de la vida, por otro lado, esa
confianza en Dios, ese creer y agradarle y aprender que todo lo que deje es temporal, es
pasajero, sin embargo, la herencia que Jesús nos preparo es incorruptible, incontaminada
e inmarcesible.

La espiritualidad integral tiene centralidad en Cristo


Conocer a Dios, no es una experiencia extrasensorial, misteriosa o imposible de tener, al
contrario, es una realidad y se hace cuando hay una relación estrecha con él, al conocer a
Dios se comienza a tener una óptica diferente pues se ve con los ojos de él y se actúa como
lo haría el Espíritu. Si hay algo por lo que debemos ser definidos es por ser llenos del Espíritu
y esas vivencias con el Espíritu inmediatamente se produce en el creyente una pasión
ardiente por hacer la obra de Dios donde no hay lugar para ser pasivo, sino que el ministerio
se hace dinámico, porque el conocer a Dios se demuestra en la relación de amor al prójimo,
como bien lo relata Juan “El que no ama no conoce a Dios porque Dios es amor”.

La espiritual integral va más allá de bulla, emociones existenciales, hay cambios en todo,
porque todo temor se va, todo miedo, insuficiencia e incapacidad, sino que es investido del
poder de Dios que lo capacita para toda buena obra que le da las habilidades y que lo lleva a
vivir otra dimensión de vida cristiana sin descuidar por supuesto su dependencia absoluta
en la ayuda del Espíritu. La espiritualidad integral nos lleva a que esas vivencias o
experiencias las llevemos a nuestros círculos de influencia, la familia, el trabajo, el campo
laboral, etc.

AÑO DE LA
IDENTIDAD
TEMA TRES
Definidos por
una espiritualidad
integral
No puede existir un divorcio en nuestras acciones, comportamiento o estilo de vida, la
espiritualidad integral es que será la misma donde sea que este, no habrá dualidad y
mucho menos un juego entre lo sagrado y lo profano. La espiritualidad integral debe
provocar una transformación pues el Evangelio es poder de Dios. Poder que puede
cambiar todo mi ser y transformar a los que están a mí alrededor.

La espiritualidad no se define por la autorrealización, felicidad, se define en Dios.

No está mal querer la autorrealización, pero no debemos buscar nuestra definición basado
en esos conceptos. Para algunas personas buscan la felicidad en un amor, en dinero, en
placeres, deleites, posesiones, poder, posiciones, y llegan a creer que éxito es tenerlo todo
es nunca pelear, y una utopía total. Por ello muchos jóvenes creen que deben buscar un
príncipe azul y serán felices por siempre.

la felicidad solo la puede dar Cristo y que su gozo es quien nos fortalece, la felicidad no es
cero problemas es que a pesar de ellos siempre soy feliz, puedo sonreír y puedo
experimentar la alegría del Señor.

Esa búsqueda de la felicidad nos ha llevado muchas veces a competir con otros, a
desvalorizar a otros y a cuantificar todo en lugar de cualificar. La felicidad se encuentra
en los pequeños detalles, en las personas a nuestro alrededor y en la salvación que Dios nos
ha dado a través de Jesucristo quien se llegó a convertir en el centro de nuestras vidas y de
familias que solo podemos ser felices con El en el trono.

Definidos por su gracia, por su amor, por su misericordia. Vivamos en ella, disfrutemos de
esos regalos.

La espiritualidad me hace ser parte del Cuerpo de Cristo


Cristo en nosotros absorbe toda orfandad, todo individualismo, egoísmo, autosuficiencia,
para que podamos depender del Padre y también de los hermanos.

Juan 17: 1 la oración de Jesús no es para que estemos juntos, sino para que seamos UNO. Y
es que cuando amamos de verdad es una evidencia que Cristo esta siendo formado en
nuestro interior y que ya transformo nuestro ser, nos definió y nos marco en su esencia. El
amor no es un concepto filosófico, no es un sentimiento, peor una ilusión es una persona.
Dios es amor y cuando amamos de verdad es por que estamos definidos en su amor. Si
hacemos algo sin amor para Dios es como Nada, porque no permanece entonces la
definición no fue amor.

AÑO DE LA
IDENTIDAD

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