Campaña Nacional de eficiencia de cosecha y post-cosecha de granos

INFORMACIÓN TÉCNICA Nº 5/2003 – INTA

Autores:
Bragachini, M; Bongiovanni, R; Méndez, A; Rinaldi,
M; Scaramuzza, F y J. Peiretti; Junio 2003. Técnicos
de EEA Manfredi INTA, pertenecientes al Proyecto
Agricultura de Precisión.

INTRODUCCIÓN al trabajo “Eficiencia de cosecha: Soja, Maíz y Trigo”

Argentina en los últimos 14 años pasó de una producción de 37 a 70 millones de toneladas de grano, y en
los últimos 7 años de 12 a 35 millones de toneladas de soja.

En ese mismo periodo en Argentina y en contra mano con el crecimiento productivo y tecnológico del sector
agropecuario, se produce una baja significativa en el nivel de reposición de cosechadoras, con una drástica
caída a partir del año 1999 hasta el 2002 que constituyó el año de menor venta de los últimos 14 años, con
sólo 550 cosechadoras vendidas.

Problemática:
• Mayor producción de grano basada en el incremento de productividad y también en el
crecimiento del área de siembra, nos llevan a una mayor demanda de equipos de
cosecha, dado que la capacidad productiva de las cosechadoras es medida en t/h y no en
ha/h (mayor t/ha = menor velocidad y menor ha/h)

• Menor reposición de cosechadoras: Existe un déficit de cosechadoras para la presente

campaña 2003 (tabla 1) Se necesitaría incorporar 1.143 máquinas para evitar que el
parque actual de 18.000 cosechadoras aumente su edad promedio actual estimada en
11,5 años. Este requerimiento de cosechadoras se ubica en un 15 % por encima de la
media de ventas de los últimos 14 años, que fue de 995 máquinas. Aún cuando se
incorporen 1.143 unidades durante el año 2003, permanecerán activas 2.934
cosechadoras con una edad prome dio de 28 años, lo que compromete seriamente la
eficiencia de cosecha, por las altas pérdidas que se producen (tabla 2)

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Tabla 1:

Situación actual Situación proyectada para el 2003

Año Edad Unidades % parque Edad % Edad Unidades % parque Edad %
2003 1 1.143 6,35% 0,06
2002 1 550 3,06% 0,03 2 550 3,06% 0,06
2001 2 590 3,28% 0,07 3 590 3,28% 0,1
2000 3 697 3,87% 0,12 4 697 3,87% 0,15
1999 4 760 4,22% 0,17 5 760 4,22% 0,21
1998 5 1.467 8,15% 0,41 6 1.467 8,15% 0,49
1997 6 1.706 9,48% 0,57 7 1.706 9,48% 0,66
1996 7 1.560 8,67% 0,61 8 1.560 8,67% 0,69
1995 8 780 4,33% 0,35 9 780 4,33% 0,39
1994 9 1.180 6,56% 0,59 10 1.180 6,56% 0,66
1993 10 643 3,57% 0,36 11 643 3,57% 0,39
1992 11 859 4,77% 0,52 12 859 4,77% 0,57
1991 12 831 4,62% 0,55 13 831 4,62% 0,6
1990 13 1.350 7,50% 0,98 14 1.350 7,50% 1,05
1989 14 950 5,28% 0,74 15 950 5,28% 0,79
1989+ 24 4.077 22,65% 5,45 28 2.934 16,30% 4,61
Total 18.000 100% 11,5 18.000 100% 11,5
Al comparar el nivel de reposición de cosechadoras entre Brasil y Argentina queda claro que existen dos
caminos distintos y contrapuestos.

Brasil en los últimos 4 años 1999/2000/2001/2002, tuvo una producción de grano promedio de 100 millones
de toneladas de granos, mientras que Argentina se ubicó en una producción promedio de 67 millones de
toneladas de granos. Brasil repuso en esos años un promedio de 4.000 cosechadoras/año mientras que
Argentina lo hizo en un promedio de 650 cosechadoras/año. Estos datos orientativos nos indican que la
relación de reposición de cosechadoras en Brasil es de 1 cosechadora cada 25.000 toneladas de granos
producidos, mientras que en Argentina es de 1 cosechadora repuesta cada 103.000 toneladas de granos.

La relación de reposición de cosechadoras en Brasil es de 4,12 a 1, superior con relación a nuestro país. En el
presente año 2003, parece que Argentina retomará la buena senda de reposición de cosechadoras ya que se
estima una venta superior a las 1400 cosechadoras. En lo que va del año, al 31 de Mayo/2003 se han
vendido en Argentina unas 980 máquinas.
Tabla 2: Pérdidas de cosecha de los principales cultivos y su implicancia económica
Área Pérdidas Pérdidas Valor Pérdidas 20%
cosechable reducción
Cultivos (ha) (kg/ha) (t) (U$S/t) (U$S) pérdidas
Soja 13.500.000 166 2.241.000 160 358.560.000,00 $ 71.712.000
Maíz 2.500.000 385 962.500 75 72.187.500,00 $ 14.437.500
Girasol 2.500.000 135 337.500 175 59.062.500,00 $ 11.812.500
Sorgo 500.000 350 175.000 55 9.625.000,00 $ 1.925.000
Trigo 6.300.000 135 850.500 120 102.060.000,00 $ 20.412.000
Totales 25.300.000 4.566.500 601.495.000,00 $ 120.299.000
Fuente: INTA Manfredi - 2003

Solución: Reducir un 20 % las pérdidas promedio de cosecha, que equivale a 1.000

cosechadoras de un valor promedio de U$S 120.000.

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Problemática general:
• Crecimiento del área y del rendimiento de los cultivos.
• Mayor demanda de servicio de cosecha.
• Menor reposición de cosechadoras y cabezales en los últimos años.
• Retraso en el inicio de la cosecha.
• Mayor pérdidas de granos en cantidad y calidad (precosecha y durante la cosecha)
• Mayor velocidad de cosecha, menores controles, elevadas pérdidas durante la cosecha.
• Mayores toneladas de grano perdidos en el suelo = Dinero que queda en el campo entre el rastrojo
que no puede ser aprovechado ni por el productor, ni por el contratista, ni por el país.
• Pérdida de ganancia.
• Dinero no invertido en reposición de cabezales y cosechadoras.
• Menor saldo exportable.
• Menor mano de obra para la industria metalmecánica Argentina.

Soluciones propuestas por el INTA:

• Elevar el nivel de inversión en equipos de cosecha.
• Mejorar la eficiencia de cosecha.
• Regular la cosechadora.
• Cosechar en tiempo y forma.
• Aumentar las ganancias y reinvertirlas en renovar el envejecido parque de cosechadoras.
• Transformar las pérdidas en puestos de trabajo genuinos.

Señor productor:
Esta problemática del sistema productivo argentino indica la necesidad de enfatizar la conveniencia de
realizar profundos cambios que permitan mejorar la situación actual de altas pérdidas por retraso en el inicio
de la cosecha, cosecha con alta velocidad, cosecha sin controles ni regulaciones, falta de parámetros de
evaluación e inexplicable falta de concientización de la real implicancia económica de las pérdidas en
cantidad y calidad de grano, dado que disminuye el margen neto de la explotación, afectando la posibilidad
de reinversión en nuevas cosechadoras que permitan recolectar en tiempo y forma los granos producidos con
alta tecnología durante el proceso productivo.

Hoy en nuestros campos se repite una escena de baja oferta de cosechadoras, retraso en el inicio de
cosecha, desesperación del productor por cosechar lo que queda, como sea, lotes con alto grado de
deterioro de la calidad del grano en planta, altas pérdidas por vuelco o desgrane de precosecha, granos
afectados en su calidad (precosecha), granos altamente susceptibles al daño mecánico de trilla y posterior
movimiento que dificultan el almacenaje, debido a que las cosechadoras trabajan con alta velocidad de
avance y alta agresividad de trilla (rpm cilindro) ocasionando roturas excesivas de granos y castigos en la
comercialización, operarios que no realizan regulaciones correctas de las cosechadoras, ni las evaluaciones
de pérdidas como parámetros de corrección, todo ello conlleva a una pérdida millonaria que afecta los
ingresos de los productores y contratistas, disminuyendo la posibilidad de reinvertir en equipos de cosecha
demorando la renovación del envejecido parque actual, impidiendo lograr una oferta de equipos de cosecha,
acorde a la demanda y a la realidad tecnológica con que llegan los cultivos previo a la cosecha en nuestro
país.

El cambio propuesto comienza tomando conciencia de los parámetros de pérdidas, que cada productor
trabaja en su campo para realizar un correcto análisis de hasta dónde conviene invertir en reequipamiento y
puesta a punto para mejorar y recuperar un alto porcentaje del margen neto que dejamos en el rastrojo año
tras año.

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 CASO SOJA - Situación actual de las pérdidas estimadas de cosecha
Niveles de tolerancia - Metodología de evaluación de pérdidas

La siembra de soja representa un área cosechable estimada para la campaña 2003/04 de aproximadamente
13.500.000 ha.
De mantenerse los actuales niveles de pérdida de 166 kg/ha, quedarían en el rastrojo 2.241.000 toneladas
de soja valuadas en 358 millones de dólares. Mejorando un 20% la eficiencia de cosecha se recuperarían
71,7 millones de dólares, que significan nada menos que 600 cosechadoras nuevas.

SOJA Pérdidas Tolerancia (2600 kg/ha) Aclaración: la tolerancia expresada

en kg/ha o sea 105 kg/ha debe
Tipo de pérdidas kg/ha % Kg/ha % mantenerse independientemente del
rendimiento variable del cultivo, o
Precosecha 24,6 0,9 0 0
sea que si el cultivo posee un
Cosechadora 141,4 5,4 105 4 rendimiento mayor (a 2.600 kg/ha),
TOTAL 166 6,4 105 4 la tolerancia en kg/ha es la misma.

Cabezal 111,5 78,2 70 66,7

Cola 29,9 21,8 35 33,3
Fuente: INTA Manfredi

Metodología para la determinación de pérdidas en Soja

a) Pérdidas de Precosecha

Las pérdidas de precosecha son las producidas por desgrane natural, por plantas volcadas y vainas ubicadas
por debajo de la altura de corte, que no pueden ser recolectadas por el cabezal.

Para evaluar estas pérdidas, aplicar la siguiente metodología:

En una zona representativa del lote, colocar cuidadosamente

4 aros de alambre de 56 cm de diámetro cada uno, que
juntos representan 1m2.

Recolectar los granos sueltos, vainas sueltas y vainas que a

nuestro juicio, no serán recolectadas por el cabezal. Para
determinar la pérdida de precosecha en kg/ha, contar todos
los granos sueltos y los obtenidos de las vainas desgranadas.

Recordar que 60 granos medianos de soja ó 10 gramos/m2 = 100 kg/ha de pérdida de precosecha.

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b) Pérdidas por Cola (con equipamiento de triturador más esparciador)

Se determinan arrojando 4 aros ciegos después del paso del

cabezal y antes que caiga el material por la cola, uno por
debajo del cajón de zarandas de la cosechadora (zona
central) y los 3 aros restantes en el área que abarca el
cabezal y antes del paso del triturador y esparcidor de
granza.
Para soja 60 granos ó 10 gramos recogidos en los cuatro aros
ciegos representan 100 kg/ha de pérdida por cola.

c) Pérdidas por Cabezal:

Recoger todos los granos sueltos y los obtenidos de las vainas

desgranadas que hayan quedado por debajo de los cuatro
aros ciegos, obteniendo así la muestra de 1m2 que incluye la
pérdida de cabezal más la pérdida de precosecha (lo que ya
estaba caído en el suelo antes del paso de la cosechadora ).
Posteriormente, para obtener las pérdidas por cabezal, se le
deben restar las pérdidas de precosecha.

Para recordar: tener en cuenta todas las pérdidas en el cálculo:

Pérdida de cosechadora = Pérdida de cola + Pérdida de cabezal - Pérdida de precosecha

CASO MAÍZ: Situación actual de las pérdidas estimadas de cosecha

Niveles de tolerancia - Metodología de evaluación de pérdidas.

Pérdidas de cosecha de Maíz y tolerancia orientativa

El área de siembra de maíz de la próxima campaña es de aproximadamente 3,15 millones de ha, de las
cuales se cosecha el 82% para grano (2,5 millones de ha) y las 650.000 ha restantes son destinadas a
silaje de maíz o consumo directo, ya sea como grano húmedo o seco.

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De las 2,5 millones de ha cosechadas, el promedio de pérdida ocasionado durante la cosecha provoca una
disminución promedio de 385 kg/ha, que representan el 5,5% del rendimiento potencial, equivalente a
962.500 toneladas, valuadas en 72 millones de dólares, de los cuales se podrían recuperar en forma rápida
(ajustando el momento de cosecha, el equipamiento y regulación del cabezal y cosechadora), unos 75 kg/ha
(20%), valuados en 14,4 millones de dólares por año, sin perder capacidad operativa, esto equivale al valor
de 120 cosechadoras nuevas.

MAIZ Pérdidas Tolerancia para 7.000kg/ha

Tipos de pérdidas Kg/ha % Kg/ha %
Precosecha 65 0.9 0 0
Cosechadora 320 4.6 210 3
TOTAL 385 5.5 210 3
Cabezal 233 72 130 1,85
Cola 87 28 80 1,15
Fuente: INTA Manfredi

Aclaración: la tolerancia expresada en kg/ha (210 kg/ha) debe mantenerse independientemente del
rendimiento variable del cultivo, o sea que si el cultivo posee un rendimiento mayor (a 7000 kg/ha), la
tolerancia en kg/ha es la misma.

Dentro de las pérdidas por cabezal ( 233 Kg/ha.) podemos determinar:

CABEZAL Pérdidas
Tipos de pérdidas Kg/ha %

Espiga 77 33

Desgrane 156 67
Fuente: INTA Manfredi

Metodología para la determinación de pérdidas en Maíz

Para verificar la eficiencia y el correcto funcionamiento de la cosechadora, es necesario evaluar las pérdidas.
Si el análisis arroja valores superiores a la tolerancia, debemos determinar las causas y hacer las
regulaciones necesarias.

a) Pérdidas de Precosecha
Estas pérdidas se pueden dividir en dos tipos:
1. Espigas desprendidas de las plantas y ubicadas en el suelo.
2. Espigas adheridas a plantas volcadas, que no pueden ser levantadas por el cabezal. A tal efecto, se
considera que las plantas volcadas en la dirección de la hilera son recuperables en un 50%, ya que la
cosechadora levanta sólo aquellos tallos caídos en el sentido de avance de la cosechadora, al presentar
un punto de apoyo para ser tomados por las cadenas recolectoras. Las plantas volcadas en sentido
transversal a la hilera (de 45º a 90º ), son recuperables en su totalidad por el cabezal.

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Para evaluar estas pérdidas, aplicar la siguiente metodología:

• En una zona representativa del lote y en dirección del

surco, delimitar un rectángulo de 14,3 m de largo si el
cultivo está sembrado a 0,70 m entre hileras, o de 19 m
si está sembrado a 0,525 m, por el ancho del cabezal a
utilizar.

• Juntar las espigas desprendidas de la planta, que no

puede levantar el cabezal.

• Dividir el número de espigas por el número de hileras del

cabezal.

El valor obtenido multiplicado por 150 (*) equivale a la cantidad de kg/ha de maíz que se pierden en
precosecha.

Aclaración: (*) 150 g es el peso promedio de los granos de una espiga. Este coeficiente puede variar con el
cultivo, 150 es un valor promedio de maíces de 7000 Kg/ha. Para una mayor precisión, es aconsejable
desgranar 10 espigas representativas, pesar y promediar, reemplazando el coeficiente 150 por el real del lote
evaluado.
nº de espigas juntadas / nº de hileras del cabezal x 150 = Pérdidas de precosecha en kg/ha.

b) Pérdidas por Cola (con equipamiento de desparramador más esparcidor)

Se determinan arrojando 4 aros ciegos después del paso del

cabezal y antes que caiga el material por la cola, uno por
debajo del cajón de zarandas de la cosechadora (zona
central) y los 3 aros restantes en el área que abarca el
cabezal.

Los granos y espigas con granos sin trillar que se encuentran

por encima del aro ciego son las pérdidas por cola y los que
quedan debajo son las pérdidas por cabezal (desgrane de
rolos espigadores).

Para maíz 33 granos o 10 gramos recogidos en los 4 aros (1m2) representan 100 Kg/ha de pérdidas

c) Pérdidas del cabezal por deficiente recolección de espigas:

Una vez que pasó la cosechadora y en el mismo rectángulo

delimitado para evaluar las pérdidas de precosecha, se
recogen las espigas que quedaron sin cosechar.

El número de espigas recolectadas se divide por el número

de surcos del cabezal, éste número es multiplicado por 150
gr (valor aproximado de las espigas) y nos indica la
cantidad de kg/ha de maíz que se pierden por una
deficiente recolección de espigas por el cabezal.

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Para obtener un dato más confiable, se recomienda realizar por lo menos 3 repeticiones, de acuerdo a la
desuniformidad del cultivo y promediar los resultados de las evaluaciones.

d) Pérdidas del cabezal por desgrane:

El material recogido en la parte inferior de cada aro ciego

representan las pérdidas generadas por el desgrane de los
rolos espigadores del cabezal (granos sueltos, pedazos de
espigas) siendo el mismo las pérdidas por cabezal.

Aclaración: Los granos que se encuentran encima de los 4

aros ciegos son las pérdidas provocadas por cola y por
debajo son las pérdidas por desgrane del cabezal.

En resumen las pérdidas totales son:

Pérdidas de Precosecha
+
Pérdidas por cola Pedazos de espigas con granos y granos sueltos
+
Pérdidas por cabezal Granos sueltos, espigas atacadas por los rolos espigadores, espigas enteras
voleadas por el sinfín, caídas del cabezal o no levantadas

Pérdidas TOTALES

CASO TRIGO: Situación actual de las pérdidas estimadas de cosecha

Niveles de tolerancia - Metodología de evaluación de pérdidas.

Pérdidas de cosecha de TRIGO y tolerancia orientativa:

En la presente campaña 2003/2004 existe una intención de siembra de trigo que supera las 6.300.000 ha. a
nivel nacional. De mantenerse las pérdidas promedio de cosecha, del orden de 135 kg/ha, quedarán en el
suelo 850.500 toneladas, lo que representa unos u$s 102.060.000. Reducir un 20 % esas pérdidas
significaría un ahorro de 20,4 millones de u$s equivalente a 170 cosechadoras nuevas.

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 Aclaración: la tolerancia
TRIGO PÉRDIDAS TOLERANCIA para 3500 kg/ha expresada en 90 Kg/ha
Tipos de pérdidas kg/ha % kg/ha % se toma
independientemente del
Precosecha 20 0,57 0 0 rendimiento del cultivo,
Cosechadora 115 3,3 90 2,6 si el rendimiento es
menor o mayor a 3500
Total de pérdidas 135 3,87 90 2,6
kg/ha la tolerancia
Cabezal 52 1,5 40 1,15 seguirá siendo 90 Kg/h
Desgrane 8
Espigas caídas 44
Cola 63 1,75 50 1,45
Zarandón (limpieza) 17
Sacapajas (separación) 30
Espiga mal trillada
16
(cilindro)

Metodología para la determinación de pérdidas en Trigo

a) Pérdidas de Precosecha:

Como primer paso se debe realizar el recuento de estas

pérdidas, es decir, las que se producen antes de que la
máquina comience su labor. Éstas se pueden producir
por aves, desgrane por vientos fuertes o granizos,
problemas genéticos del cultivo, enfermedades de fin de
ciclo, etc. En una zona representativa del lote se colocan
con cuidado 4 aros de 56 cm de diámetro cada uno con
lo que lograremos 1 metro cuadrado de evaluación.

Se recolectan los granos sueltos y espigas quebradas y volcadas que a nuestro juicio no serán levantadas por
el cabezal. Estos granos sueltos y los obtenidos al desgranar las espigas volcadas o quebradas, se colocan en
el recipiente evaluador de pérdidas y se lee directamente la pérdida en kg/ha.

Recordando que 333 granos de trigo por metro cuadrado equivalen a 100 kg/ha de pérdidas

b) Pérdidas por Cola (con equipamiento de desparramador más esparcidor)

Se determinan arrojando 4 aros ciegos durante el paso de

la cosechadora y antes que caiga el material por la cola,
uno por debajo del cajón de zarandas de la cosechadora
(zona central) y los 3 aros restantes en el área que
abarca el cabezal.

Se juntan los granos y el desgrane de las espigas mal

trilladas que se encuentren en el aro ciego. Los granos
recogidos se colocan en el recipiente evaluador de
pérdidas, determinándose las pérdidas por cola en kg /ha.

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Aclaración: como aros ciegos se pueden utilizar las tapas de tambores de 200 litros que poseen 56 cm de
diámetro = 4 de 1/4 de 1 m2.

c) Pérdidas por Cabezal:

Para determinar las pérdidas por cabezal es necesario

recoger todos los granos sueltos y los obtenidos de las
espigas quebradas que no fueron recolectadas por el
cabezal, por la altura de corte o voleo del molinete que
quedaron por debajo de los 4 aros ciegos, obteniendo
así la muestra de 1 m2 que incluye la pérdida de
cabezal, más la pérdida de precosecha ( lo que estaba
caído en el suelo). Posteriormente, para obtener las
pérdidas por cabezal, se les deben restar las pérdidas
de precosecha.

Conclusión

Si el análisis de las pérdidas arroja valores superiores a la tolerancia, hay que determinar las causas. Junto
con el operario de la cosechadora realizar las regulaciones hasta lograr que las pérdidas sean inferiores a la
tolerancia, siempre que el cultivo lo permita.

RECUERDE
60 granos medianos de Soja o 10 gramos/m2 = 100 kg/ha de pérdida
33 granos de Maíz o 10 gramos/m2 = 100 kg/ha de pérdida
333 granos medianos de Trigo o 10 gramos/m2 = 100 kg/ha de pérdida
140 granos medianos de Girasol o 10 gramos/m2 = 100 kg/ha de pérdida
285 granos de Sorgo o 10 gramos/m2 = 100 kg/ha de pérdida

Para obtener un dato más confiable se recomienda realizar por lo menos 3 repeticiones, de acuerdo a la
desuniformidad del cultivo y promediar los resultados de las evaluaciones.

El operador puede detectar las fallas de su cosechadora observando el rastrojo de su cultivo, o bien
mediante dispositivos electrónicos ubicados en la cola de la máquina que emiten una señal visible a través de
un monitor ubicado dentro de la cabina.

Aclaración: Los monitores de pérdidas no acusan las pérdidas por cabezal y éstas generalmente son las más
importantes en cultivos como soja, maíz y girasol.

Señor productor, para saber exactamente el grado de eficiencia con que está cosechando su
cultivo sólo necesita:
* 4 Aros de 56 cm. de diámetro (los aros ciegos pueden ser tapas de tambores de 200 litros o de
alambre forrados con tela o plástico tipo media sombra). Los 4 representan 1 m2 de evaluación.
* 1 Recipiente medidor de pérdidas de cosecha.

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Recipiente volumétrico que transforma las pérdidas de 1 m2 de muestreo en qq/ha.

Forma de uso:
Colocar los granos caídos en 1 m2 en el recipiente y leer en
forma directa los qq/ha de pérdida para los 4 cultivos
principales. Este recipiente se puede adquirir en el INTA
Manfredi. El recipiente evaluador de pérdidas está calibrado
con la relación de 10 gr/m2 que representa 1 qq/ha de
pérdida en todos los cultivos.

Para evitar errores no utilice el recipiente evaluador de

pérdidas para evaluar las pérdidas de precosecha, dado que
el grano al estar en contacto con el suelo adquiere una
humedad tal que no resulta volumétricamente
representativo de su peso real.

Autores:
Bragachini, M; Bongiovanni, R; Méndez, A; Rinaldi, M; Scaramuzza, F y J. Peiretti; Junio 2003.
Técnicos de EEA Manfredi INTA, pertenecientes al Proyecto Agricultura de Precisión.

MÁS INFORMACIÓN DEL INTA

Sr. Productor, para mayor información consúltenos en:

INTA - Proyecto Nacional de Agricultura de Precisión - Ruta 9 km 636, (5988) Manfredi, Cba
Tel / Fax: 03572 - 493039 / 53 / 58 / 61
E-mail: agripres@onenet.com.ar / agprecision@cotelnet.com.ar
Página web: www.agriculturadeprecision.org

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