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Los libros no sólo se encuentran en las bibliotecas, también llegan a lugares poco comunes y a
veces lejanos en los que diferentes personas disfrutan de la dicha de leer. Colecciones
itinerantes que viajan de un lado a otro buscando promover la lectura en todo el
departamento de Antioquia.
"Para nosotros las Cajas viajeras es un programa que lleva más de 20 años de funcionamiento
y que consiste en la descentralización de préstamo. Lo realizamos con primaria, bachillerato y
comunidad general que posean personería jurídica. Facilitamos un máximo de 300 materiales.
Por periodos de 30, 60 y 90 días máximo. La finalidad es que la gente se beneficie de las
colecciones que nosotros tenemos", dice Marta Sofía Moreno, bibliotecóloga de la Biblioteca
Comfama de San Ignacio.
En forma similar funcionan las otras Cajas viajeras, cuyo nombre no fue al azar, sino que es una
tradición que bibliotecas como la Pública Piloto llevan años realizando.
"Desde que la biblioteca inició sus labores, hace 55 años, uno de los propósitos fue tener
programas de extensión bibliotecaria con el que se buscaba llevar a los barrios, a los obreros y
a los colegios alejados, la posibilidad de acceder a los libros . Fue así como en los años 60 se
formó el bibliomovil, un vehículo que se equipaba con libros de promoción de lectura y
talleristas que se desplazaban alrededor de Medellín y de Antioquia", cuenta Cruz Patricia Díaz,
jefe de división y formación de cultura.
El bibliomovil funcionó durante más de diez años y gracias a la experiencia que aportó se fue
consolidando la biblioteca Pública Piloto en la sede central ubicada en el barrio Carlos E
Restrepo y otras seis sucursales en diferentes corregimientos. Con el tiempo se conformaron
colecciones de libros que adoptaron el nombre de Cajas viajeras.
Al principio las cajas era el principal contenedor de los libros, en algunas ocasiones éstas eran
decoradas por la misma biblioteca que prestaba el servicio. Con el tiempo las cajas se han ido
modificando y en algunas ocasiones se utilizan maletines y bolsos de lona que facilita el
transporte, evitan el deterioro y hace que el material bibliográfico seduzca a un mayor número
de usuarios.
"En la actualidad tenemos 71 Cajas viajera, colecciones entre 100 y 150 libros, que se
encuentran en instituciones educativas de Medellín. Por lo general son temas de literatura,
promoción de lectura y también colecciones básicas que el profesor utiliza para llevar a cabo
sus clases. Todavía entregamos los libros en cajas, pero se procura que los colegios dispongan
de un mueble para exhibirlos", dijo Díaz.
Otro caso
La iniciativa se pone en práctica en los tres cursos de este nivel educativo para conseguir los
siguientes objetivos :
1º.-Estimular el interés por la lectura (crear el gusto por los libros y entender la lectura como
algo lúdico).
ESTRUCTURA: La maleta se prestará una semana (de viernes a jueves) con 4/5 libros
seleccionados para los objetivos propuestos y una carpeta de actividades. Así mismo se
incorpora un pequeño recetario para padres interesados en la educación responsable de los
hijos.