De la lectura de Estanislao Zuleta se extrae como concepto principal que la lectura es precedida

por una serie de conocimientos preestablecidos que hacen difícil el entendimiento del código en el
que el lector y el escritor encuentren un punto de convergencia y por consiguiente, una libre
interpretación. Dicha interpretación, según Nietzsche, se logra si en el hábito de leer se admira la
lectura, se cuestiona su sentido y se crea una nueva idea del sentido que trasmite el autor. Zuleta
hace un llamado a leer sin tener una idea predispuesta, solo una pregunta que se pretenda
resolver con el pasar de la misma lectura. El autor sostiene que “solo lee quien escribe”, pero
aclara al final que el establecer una búsqueda, es escribir “en el sentido fuerte”, es tener siempre
un problema, una incógnita abierta, que guía el pensamiento y guía la lectura.

el arte de saber leer, este autor plantea la reflexión respecto a que actualmente, se lee por
obligación o por abstraer un concepto puntual, conocimiento, y no por el simple hecho de leer por
leer. Para desarrollar su idea, Sessarego se basa en lo que propone Nietzsche en el Zaratustra en
donde se plantea: i) ningún lector va a entender más allá de sus conocimientos, por lo cual muchas
veces nos vemos enfrentados al particular “no entiendo” en una lectura, ii) para poder leer es
necesario se aventurero e inquieto por naturaleza.

sobre la manera como el espíritu se convierte en camello, luego el camello se convierte en león y
este se convierte finalmente en niño. Sessarego introduce la palabra código para explicar que el
lector no debería leer buscando un objetivo pre concebido sino debe interpretar el texto de forma
lenta en donde el significado de los conceptos los desarrolla de manera pausada y conveniente el
mismo autor. Cita para referenciar esta analogía a Marx y la palabra riqueza en su famosa obra el
Capitalismo, la cual deja de lado el significado previo que cualquier lecto tiene antes de entrar en
esta lectura.

De la lectura de Estanislao Zuleta se concluye que la lectura es precedida por una serie de
conocimientos preestablecidos que hacen difícil el entendimiento del código en el que el
lector y el escritor convergen y por consiguiente, una libre interpretación. De acuerdo con
lo anterior, el autor cita a Nietzsche, el cual describe que en el hábito del buen leer se
debe admira la lectura, cuestionar su contenido y crea una nueva idea del sentido que
trasmite el autor. Zuleta hace un llamado a leer sin tener una idea predispuesta, solo una
pregunta que se pretenda resolver con el pasar de la misma lectura y apoya su invitación
nuevamente en Nietzsche, quien asegura que un buen lector debe ser lento, cuidadoso y
"rumiante". Finalmente, el autor sostiene que “solo lee quien escribe”, pero aclara al final
que el establecer una búsqueda, es escribir “en el sentido fuerte”, es tener siempre un
problema, una incógnita abierta, que guía el pensamiento y guía la lectura.