«TOTUS TUUS»

La verdadera devoción a la Virgen María

Hace unos días, un sacerdote nos explicó que la verdadera devoción a la
Virgen María se podría resumir en tres actitudes: amarla, invocarla e
imitarla… Ella recibió, jovencísima, la misión de ser la Madre de
Jesús… Sabe muy bien lo que nos pasa, y nos quiere ayudar para que
seamos como su Hijo, nuestro Capitán… En verdad, tenemos una
Madre que vela por nosotros… Hoy podemos reflexionar cómo vivió
esta hermosa realidad san Juan Pablo II… «Totus Tuus» es el lema que
el Papa eligió para su escudo. Significa: soy todo tuyo. El Papa había
perdido a su madre cuando era muy joven, pero encontró en la Virgen María una Madre
que amó con mucha intensidad. Le parecía escuchar las palabras de Jesús en la cruz:
«hijo, aquí tienes a tu madre», y él respondía con toda confianza: «Totus Tuus»: soy
todo tuyo. La Virgen María siempre estuvo presente en la vida del Papa.
«Totus tuus» hace parte de una oración que el Papa rezaba
frecuentemente. Tenía tan presente a la Virgen que, cuando
escribía sus encíclicas, homilías, discursos, escribía en la parte
superior de cada página un trozo de esta bella oración: «Yo soy
todo tuyo… y todas mis cosas son tuyas… te acojo en todas
mis cosas… dame tu corazón…». Pero esta presencia de María la sintió sobre todo
en el atentado. Un 13 de mayo se había aparecido la Virgen en Fátima, y un 13 de
mayo habían intentado asesinarlo. Cuando el Papa se estaba recuperando y
comenzaba a recobrar las fuerzas, quiso leer el tercer «secreto» de Fátima.

«TOTUS TUUS»
La verdadera devoción a la Virgen María
Hace unos días, un sacerdote nos explicó que la verdadera devoción a la
Virgen María se podría resumir en tres actitudes: amarla, invocarla e
imitarla… Ella recibió, jovencísima, la misión de ser la Madre de
Jesús… Sabe muy bien lo que nos pasa, y nos quiere ayudar para que
seamos como su Hijo, nuestro Capitán… En verdad, tenemos una
Madre que vela por nosotros… Hoy podemos reflexionar cómo vivió
esta hermosa realidad san Juan Pablo II… «Totus Tuus» es el lema que
el Papa eligió para su escudo. Significa: soy todo tuyo. El Papa había
perdido a su madre cuando era muy joven, pero encontró en la Virgen María una Madre
que amó con mucha intensidad. Le parecía escuchar las palabras de Jesús en la cruz:
«hijo, aquí tienes a tu madre», y él respondía con toda confianza: «Totus Tuus»: soy
todo tuyo. La Virgen María siempre estuvo presente en la vida del Papa.
«Totus tuus» hace parte de una oración que el Papa rezaba
frecuentemente. Tenía tan presente a la Virgen que, cuando
escribía sus encíclicas, homilías, discursos, escribía en la parte
superior de cada página un trozo de esta bella oración: «Yo soy
todo tuyo… y todas mis cosas son tuyas… te acojo en todas
mis cosas… dame tu corazón…».
Pero esta presencia de María la sintió sobre todo en el atentado. Un 13 de mayo se
había aparecido la Virgen en Fátima, y un 13 de mayo habían intentado asesinarlo.
Cuando el Papa se estaba recuperando y comenzaba a recobrar las fuerzas, quiso
leer el tercer «secreto» de Fátima.
Después, ya no tenía dudas. Sabía que la Virgen le había protegido. ¿Cómo pudo
fallar un asesino profesional a pocos metros de distancia? Cuando el Papa se había
entrevistado con Alí Agca, el hombre que intentó asesinarlo, éste le dijo: «¿Por qué
no está usted muerto?» Y añadió: «Yo sé que apunté perfectamente. Sé que el
proyectil era devastador y mortal. ¿Por qué no está usted muerto entonces?». Juan
Pablo II descubrió una mano materna capaz de hacer equivocarse a quien le había
disparado con la pistola. Al final, diría: «Una mano disparó y otra guió la trayectoria
de la bala». Tiempo después, en su visita a Fátima, el Papa se arrodilló ante la
imagen de la Virgen, y después de un largo silencio en oración, mandó a incrustar
en su corona la bala que Ella desvió. También hizo poner en la Plaza de San Pedro
un mosaico con la imagen de la Virgen.
«Totus tuus»: si comienzas a abrir tu corazón a María, Ella lo acogerá y llegarás a
ser realmente suyo. Y de Ella aprenderás a imitar a Cristo. La misión de la Virgen
María es llevarnos a Jesús. Aprende a invocarla, acude a su protección, sobre todo
en el momento de la tentación; aprende a imitarla, haciendo crecer en ti las
virtudes que crecieron en Ella. Pero, sobre todo, deja que también transforme tu
corazón para que seas otro Jesús…
PIENSA…
1. ¿Por qué es tan importante y necesaria la devoción a la Virgen
María?
2. En la vida de cada día tenemos enemigos que nos disparan de
muchas maneras… ¿Cuáles pueden ser esas “balas”?
3. ¿Qué cautelas debes tomar cuando uses el ordenador, Internet,
el celular y otros aparatos semejantes para mantener tu corazón
limpio como el de María?
4. Piensa una lista de situaciones en las que tú también puedas Después, ya no
decir: «Totus tuus».
tenía dudas. Sabía
que la Virgen le había protegido. ¿Cómo pudo fallar un asesino profesional a pocos
metros de distancia? Cuando el Papa se había entrevistado con Alí Agca, el hombre
que intentó asesinarlo, éste le dijo: «¿Por qué no está usted muerto?» Y añadió: «Yo
sé que apunté perfectamente. Sé que el proyectil era devastador y mortal. ¿Por qué
no está usted muerto entonces?». Juan Pablo II descubrió una mano materna capaz
de hacer equivocarse a quien le había disparado con la pistola. Al final, diría: «Una
mano disparó y otra guió la trayectoria de la bala». Tiempo después, en su visita a
Fátima, el Papa se arrodilló ante la imagen de la Virgen, y después de un largo
silencio en oración, mandó a incrustar en su corona la bala que Ella desvió. También
hizo poner en la Plaza de San Pedro un mosaico con la imagen de la Virgen.
«Totus tuus»: si comienzas a abrir tu corazón a María, Ella lo acogerá y llegarás a
ser realmente suyo. Y de Ella aprenderás a imitar a Cristo. La misión de la Virgen
María es llevarnos a Jesús. Aprende a invocarla, acude a su protección, sobre todo
en el momento de la tentación; aprende a imitarla, haciendo crecer en ti las
virtudes que crecieron en Ella. Pero, sobre todo, deja que también transforme tu
corazón para que seas otro Jesús…
 PIENSA…
1. ¿Por qué es tan importante y necesaria la devoción a la Virgen
María?
2. En la vida de cada día tenemos enemigos que nos disparan de
muchas maneras… ¿Cuáles pueden ser esas “balas”?
3. ¿Qué cautelas debes tomar cuando uses el ordenador, Internet,
el celular y otros aparatos semejantes para mantener tu corazón
limpio como el de María?
4. Piensa una lista de situaciones en las que tú también puedas
decir: «Totus tuus».
 «TOTUS TUUS»
La verdadera devoción a la Virgen María
Hace unos días, un sacerdote nos explicó que la verdadera devoción a la
Virgen María se podría resumir en tres actitudes: amarla, invocarla e
imitarla… Ella recibió, jovencísima, la misión de ser la Madre de
Jesús… Sabe muy bien lo que nos pasa, y nos quiere ayudar para que
seamos como su Hijo, nuestro Capitán… En verdad, tenemos una
Madre que vela por nosotros… Hoy podemos reflexionar cómo vivió
esta hermosa realidad san Juan Pablo II… «Totus Tuus» es el lema que
el Papa eligió para su escudo. Significa: soy todo tuyo. El Papa había
perdido a su madre cuando era muy joven, pero encontró en la Virgen María una Madre
que amó con mucha intensidad. Le parecía escuchar las palabras de Jesús en la cruz:
«hijo, aquí tienes a tu madre», y él respondía con toda confianza: «Totus Tuus»: soy
todo tuyo. La Virgen María siempre estuvo presente en la vida del Papa.
«Totus tuus» hace parte de una oración que el Papa rezaba
frecuentemente. Tenía tan presente a la Virgen que, cuando
escribía sus encíclicas, homilías, discursos, escribía en la parte
superior de cada página un trozo de esta bella oración: «Yo soy
todo tuyo… y todas mis cosas son tuyas… te acojo en todas
mis cosas… dame tu corazón…». Pero esta presencia de María la sintió sobre todo
en el atentado. Un 13 de mayo se había aparecido la Virgen en Fátima, y un 13 de
mayo habían intentado asesinarlo. Cuando el Papa se estaba recuperando y
comenzaba a recobrar las fuerzas, quiso leer el tercer «secreto» de Fátima.

«TOTUS TUUS»
La verdadera devoción a la Virgen María
Hace unos días, un sacerdote nos explicó que la verdadera devoción a la
Virgen María se podría resumir en tres actitudes: amarla, invocarla e
imitarla… Ella recibió, jovencísima, la misión de ser la Madre de
Jesús… Sabe muy bien lo que nos pasa, y nos quiere ayudar para que
seamos como su Hijo, nuestro Capitán… En verdad, tenemos una
Madre que vela por nosotros… Hoy podemos reflexionar cómo vivió
esta hermosa realidad san Juan Pablo II… «Totus Tuus» es el lema que
el Papa eligió para su escudo. Significa: soy todo tuyo. El Papa había
perdido a su madre cuando era muy joven, pero encontró en la Virgen María una Madre
que amó con mucha intensidad. Le parecía escuchar las palabras de Jesús en la cruz:
«hijo, aquí tienes a tu madre», y él respondía con toda confianza: «Totus Tuus»: soy
todo tuyo. La Virgen María siempre estuvo presente en la vida del Papa.
«Totus tuus» hace parte de una oración que el Papa rezaba
frecuentemente. Tenía tan presente a la Virgen que, cuando
escribía sus encíclicas, homilías, discursos, escribía en la parte
superior de cada página un trozo de esta bella oración: «Yo soy
todo tuyo… y todas mis cosas son tuyas… te acojo en todas
mis cosas… dame tu corazón…».
Pero esta presencia de María la sintió sobre todo en el atentado. Un 13 de mayo se
había aparecido la Virgen en Fátima, y un 13 de mayo habían intentado asesinarlo.
Cuando el Papa se estaba recuperando y comenzaba a recobrar las fuerzas, quiso
leer el tercer «secreto» de Fátima.
Después, ya no tenía dudas. Sabía que la Virgen le había protegido. ¿Cómo pudo
fallar un asesino profesional a pocos metros de distancia? Cuando el Papa se había
entrevistado con Alí Agca, el hombre que intentó asesinarlo, éste le dijo: «¿Por qué
no está usted muerto?» Y añadió: «Yo sé que apunté perfectamente. Sé que el
proyectil era devastador y mortal. ¿Por qué no está usted muerto entonces?». Juan
Pablo II descubrió una mano materna capaz de hacer equivocarse a quien le había
disparado con la pistola. Al final, diría: «Una mano disparó y otra guió la trayectoria
de la bala». Tiempo después, en su visita a Fátima, el Papa se arrodilló ante la
imagen de la Virgen, y después de un largo silencio en oración, mandó a incrustar
en su corona la bala que Ella desvió. También hizo poner en la Plaza de San Pedro
un mosaico con la imagen de la Virgen.
«Totus tuus»: si comienzas a abrir tu corazón a María, Ella lo acogerá y llegarás a
ser realmente suyo. Y de Ella aprenderás a imitar a Cristo. La misión de la Virgen
María es llevarnos a Jesús. Aprende a invocarla, acude a su protección, sobre todo
en el momento de la tentación; aprende a imitarla, haciendo crecer en ti las
virtudes que crecieron en Ella. Pero, sobre todo, deja que también transforme tu
corazón para que seas otro Jesús…
PIENSA…
1. ¿Por qué es tan importante y necesaria la devoción a la Virgen
María?
2. En la vida de cada día tenemos enemigos que nos disparan de
muchas maneras… ¿Cuáles pueden ser esas “balas”?
3. ¿Qué cautelas debes tomar cuando uses el ordenador, Internet,
el celular y otros aparatos semejantes para mantener tu corazón
limpio como el de María?
4. Piensa una lista de situaciones en las que tú también puedas Después, ya no
decir: «Totus tuus».
tenía dudas. Sabía
que la Virgen le había protegido. ¿Cómo pudo fallar un asesino profesional a pocos
metros de distancia? Cuando el Papa se había entrevistado con Alí Agca, el hombre
que intentó asesinarlo, éste le dijo: «¿Por qué no está usted muerto?» Y añadió: «Yo
sé que apunté perfectamente. Sé que el proyectil era devastador y mortal. ¿Por qué
no está usted muerto entonces?». Juan Pablo II descubrió una mano materna capaz
de hacer equivocarse a quien le había disparado con la pistola. Al final, diría: «Una
mano disparó y otra guió la trayectoria de la bala». Tiempo después, en su visita a
Fátima, el Papa se arrodilló ante la imagen de la Virgen, y después de un largo
silencio en oración, mandó a incrustar en su corona la bala que Ella desvió. También
hizo poner en la Plaza de San Pedro un mosaico con la imagen de la Virgen.
«Totus tuus»: si comienzas a abrir tu corazón a María, Ella lo acogerá y llegarás a
ser realmente suyo. Y de Ella aprenderás a imitar a Cristo. La misión de la Virgen
María es llevarnos a Jesús. Aprende a invocarla, acude a su protección, sobre todo
en el momento de la tentación; aprende a imitarla, haciendo crecer en ti las
virtudes que crecieron en Ella. Pero, sobre todo, deja que también transforme tu
corazón para que seas otro Jesús…
 PIENSA…
1. ¿Por qué es tan importante y necesaria la devoción a la Virgen
María?
2. En la vida de cada día tenemos enemigos que nos disparan de
muchas maneras… ¿Cuáles pueden ser esas “balas”?
3. ¿Qué cautelas debes tomar cuando uses el ordenador, Internet,
el celular y otros aparatos semejantes para mantener tu corazón
limpio como el de María?
4. Piensa una lista de situaciones en las que tú también puedas
decir: «Totus tuus».