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Trabajo Escrito:
LA EDUCACIÓN CRISTIANA
EN EL ANTIGUO
TESTAMENTO Y NUEVO
TESTAMENTO
25 de septiembre de 2021
INTRODUCCION
Base Bíblica
Deuteronomio 6:1-9
El gran mandamiento
1Estos, pues, son los mandamientos, estatutos y decretos que Jehová vuestro Dios mandó
que os enseñase, para que los pongáis por obra en la tierra a la cual pasáis vosotros para
tomarla; 2para que temas a Jehová tu Dios, guardando todos sus estatutos y sus
mandamientos que yo te mando, tú, tu hijo, y el hijo de tu hijo, todos los días de tu vida,
para que tus días sean prolongados. 3Oye, pues, oh Israel, y cuida de ponerlos por obra,
para que te vaya bien en la tierra que fluye leche y miel, y os multipliquéis, como te ha
4Oye, Israel: Jehová nuestro Dios, Jehová uno es. 5Y amarás a Jehová tu Dios de todo tu
corazón, y de toda tu alma, y con todas tus fuerzas. 6Y estas palabras que yo te mando hoy,
estarán sobre tu corazón; 7y las repetirás a tus hijos, y hablarás de ellas estando en tu casa,
y andando por el camino, y al acostarte, y cuando te levantes. 8Y las atarás como una señal
en tu mano, y estarán como frontales entre tus ojos; 9y las escribirás en los postes de tu
Enseñar a los demás a ser cristianos es más que darles información. Es crear una
comunidad por el Espíritu Santo en quien podemos aprender a ser cristianos.
Métodos de educación en el Antiguo Testamento
1. La tradición—Contar historias
Debido a que el pueblo no tenía por escrito las Sagradas Escrituras, se contaban entre ellos
historias acerca de Dios. Con frecuencia nos referimos a esa práctica como compartir
nuestro testimonio. Jamás debemos dejar de contar nuestras historias. Muchos pastores
nunca han compartido su testimonio con sus hijos acerca de su conversión a Cristo. Esa
historia les da a los hijos su identidad cristiana.
En ocasiones hay muchos predicadores en una familia. ¿Por qué? Porque al oír cada
generación la historia de sus antecesores, encontraron parte de su propia identidad.
Deseamos usar ese poder para la gloria de Dios. El resultado de mirar atrás es ver hacia
delante. En el Antiguo Testamento miraban en retrospectiva de modo que pudieran confiar
en que Dios los llevaría
2. Altares o monumentos
Amontonaban piedras en columnas como recordatorio de que algo había ocurrido allí. A
veces erigían un altar de sacrificio, pero lo dejaban como señal memorial.
3. Festivales o celebraciones
4. Símbolos
Los símbolos representan algo. No adoramos los símbolos sino lo que representan. Es
importante entender esto en nuestra cultura acostumbrada a adorar símbolos en todo.
5. Adoración
La adoración era otra forma de enseñanza. La celebración de la Pascua era una de ellas.
Consistía de diversos tipos de comidas: cordero, pan sin levadura, hierbas amargas y
rábanos picantes. Con ello recordaban todo lo que sufrieron sus antepasados en la Pascua y
en el desierto.
La Pascua se celebraba cada año en el día 14 del primer mes del año judío. La Pascua es
una ocasión muy especial. Los platos especiales nunca antes deberán haberse usado. Se
comen diversos alimentos.
Éxodo 13:8. Y contaras en aquel día a tu hijo, diciendo: Se hace esto con motivo de lo que
Jehová hizo conmigo cuando me sacó de Egipto.
La escuela de los patriarcas era una escuela centrada en la familia. Abraham, por ejemplo,
brindó instrucciones sobre un código de conducta centrado en Dios para sus hijos y
familiares. El propósito de la escuela era promover la lealtad a Dios y servir como un
baluarte contra la idolatría El objetivo último era que los individuos pudieran experimentar
la salvación Los docentes de la escuela de los patriarcas eran hombres y mujeres de
fe, resultado de una relación personal con Dios. A su vez, Dios se comunicaba de manera
directa con los docentes, quienes atendían las cosas del cielo y se esforzaban por seguir las
instrucciones divinas.3 Estos docentes no dudaron a la hora de reprobar la maldad o
explicitar la conducta ética. Una función clave de los docentes, además, era el papel de
pacificadores. Los docentes eran sensibles a las necesidades de los estudiantes. Intercedían
por ellos y se aseguraban de que hubiera conducción divina en sus vidas
Los productos de la escuela patriarcal fueron ilustres. José, quien al comienzo solo parecía
el hijo favorito, pronto dio evidencias de un carácter ético y se elevó hasta posiciones de
responsabilidad. De manera similar, aunque el tiempo que Moisés pasó en la escuela de los
patriarcas fue breve, le brindó los fundamentos de su éxito. Allí desarrolló su compromiso
con Dios y su causa.
Cuando se implementó por completo, la escuela de los patriarcas sirvió para preservar el
culto a Dios a lo largo de las generaciones. Desafortunadamente, eso fue algo que se volvió
cada vez menos frecuente, en particular durante el período de la esclavitud en Egipto. Hizo
falta entonces un programa correctivo.
EDUCACION EN EL NUEVO TESTAMENTO
En el Nuevo Testamento, la primera escuela que se señala es una en la que Juan el Bautista
era el único alumno. Era una escuela familiar, una escuela cuyo propósito preparó el
camino para una reforma.
La escuela estaba ubicada en un marco rural, un contexto que pareció contribuir al éxito de
la escuela. Era una escuela con dos maestros: Zacarías y Elizabet. Eran individuos de
oración y llenos del Espíritu, y sus vidas mostraban su compromiso con Dios. Dios se
comunicaba con los maestros, y ellos, a su vez, transmitían una visión del llamado de Dios
a sus estudiantes.
Los resultados del ministerio de Juan fueron significativos. “Toda la gente de la región de
Judea y de la ciudad de Jerusalén acudía a él. Cuando confesaban sus pecados, él los
bautizaba en el río Jordán”. Jesús lo describió como “más que un profeta”. Quizá el
resultado más significativo de la experiencia educativa fue que Juan logró reconocer y
proclamar a Jesús como Hijo de Dios.
El marco educacional no era idílico, dado que parte de las experiencias tempranas de Jesús
tuvo lugar en un país extranjero donde él y sus padres eran refugiados. Tiempo después
regresaron al hogar familiar en Nazaret, un pequeño pueblo en la campiña galilea. Era una
comunidad, sin embargo, de reputación objetable.
Como estudiante, Jesús era inquisitivo. A los 12 años, pasó varios días en el templo con los
eruditos religiosos, “oyéndolos y preguntándoles”. Jesús también era un niño sociable y
extrovertido. Cuando se perdió, sus padres supusieron que estaba con parientes o amigos.
Los resultados de la educación de Jesús pueden ser vistos en su sentido de misión divina
para su vida. A los 12 años, preguntó a sus padres: “¿Por qué me buscabais? ¿No sabíais
que en los negocios de mi Padre me es necesario estar?” También desarrolló su
entendimiento. Cuando los padres de Jesús lo encontraron en el templo, haciendo y
respondiendo preguntas, “todos los que le oían se maravillaban de su inteligencia y sus
respuestas”. Acaso lo más significativo fue que Jesús desarrolló una relación personal con
su Padre. En esencia, la educación temprana de Jesús lo preparó para el ministerio.
El ministerio de enseñanza de Jesús reveló quizá con más claridad el plan divino para la
educación. Su abarcante propósito fue revelar el carácter de Dios y, por extensión, los
principios de su reino
Aunque Jesús enseñaba con frecuencia en la sinagoga y más tarde en el templo, su marco
de enseñanza fue variado. Incluía el campo abierto, los hogares privados y otros lugares
públicos en ciudades y aldeas. Sus estudiantes eran la mayoría de las veces sus doce
discípulos. En ciertas ocasiones, enseñaba a grupos más grandes, que a veces sumaban
miles. En ocasiones, sin embargo, sus enseñanzas eran personalizadas, como era el caso de
Nicodemo y la mujer junto al pozo. Los que asistían a sus clases incluían mujeres y niños,
así como también obreros, mercaderes, miembros de las fuerzas de seguridad, escribas y
líderes religiosos.
En su instrucción, Cristo enfatizó ciertos temas, que incluían el papel de las Escrituras, la
distinción entre lo importante y lo trivial, el reconocimiento del “cuadro completo”, un
énfasis en el servicio, y una visión hacia el futuro. Jesús orientó sus enseñanzas para
involucrar de manera activa a sus estudiantes en la experiencia de aprendizaje. Esto incluyó
el énfasis en pensar, saber, comprender, ser y hacer.
En sus enseñanzas, Cristo usó una variedad de estrategias pedagógicas, métodos que
promovían el pensamiento de alto nivel, y ayudó a que sus estudiantes comprendieran,
recordaran y aplicaran mejor sus instrucciones. Esas estrategias incluyeron
ilustraciones, historias, noticias, y referencia a eventos históricos. Incorporaron el uso de
analogías, objetos tangibles, demostraciones y repeticiones. Otros métodos de enseñanza
incluyeron el uso de preguntas, comparaciones y contrastes, paradojas y anomalías, y
énfasis por medio de hipérboles. En varias ocasiones, sus estudiantes también participaron
del aprendizaje activo, resolución de problemas y aprendizaje en colaboración.
Jesús tuvo una profunda influencia en sus estudiantes. Cuando concluyó una sesión de
enseñanza, sus oyentes quedaron asombrados de sus enseñanzas, por lo que se preguntaban
unos a otros: “Jamás se ha visto nada igual en Israel”. Cierto día, alarmado por la creciente
popularidad de Jesús, los principales sacerdotes enviaron a los guardias del templo para
arrestarlo. Al final del día, sin embargo, los guardias regresaron con las manos vacías. “¿Se
puede saber por qué no lo han traído?” les recriminaron los sacerdotes. “¡Nunca nadie ha
hablado como ese hombre!” contestaron los guardias.
CONCLUSION
La educación cristiana en la Biblia era una fuerza constante y poderosa en los hogares y la
sociedad del pueblo de Dios, aunque su forma y contenido cambiara según las necesidades
de los diversos tiempos y lugares. Sin importar la época o el lugar, la educación
proporcionaba una estructura para transmitir enseñanza valiosa y la tradición sagrada y,
como tal, debe considerarse uno de los pilares fundamentales de la vida y la fe del pueblo
de de Dios.