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La venganza,

“Hamlet” escrito por William Shakespeare es una obra trágica escrita en torno
al año 1600. No se conocen muchos datos sobre el nacimiento del autor ni sobre
sus primeros años. “Hamlet” es de las dos obras cuya extensión predomina ante el
resto de sus obras y es aquí donde a partir de la opinión de ciertos críticos se dice
que es un punto de viraje para el autor. La obra se presenta con tres líneas de
acción y dividida en cinco actos.

La venganza forma parte de la obra de “Hamlet” complementando a la obra


como un símbolo importante. Siendo Hamlet el héroe, se desprenden las
características típicas del manierismo. Es la famosa crisis del renacimiento que se
encuentra comprendida entre el alto Renacimiento y el Barroco. Tomando la visión
de Dvorak, él dice que es el espiritualismo el motor del movimiento de la época.
Durante dicho movimiento se dice que la victoria de todos los héroes se da en virtud
de la derrota de ellos mismos. Esto en otras palabras trata de explicar como los
héroes representados en dicha época resultan victoriosos pero a partir de su propia
derrota Se evidencian claramente las debilidades de dichos personajes en las
obras y en el caso de esta obra, dicha situación se ve reflejada sobre el príncipe
Hamlet. Las debilidades de dicho personaje llevan a que en sus momentos más
deseados de venganza, desista de matar a Claudio.

El aspecto recurrente de la venganza en la obra no sólo se puede ver en


todas las líneas de acción sino que en torno a varios personajes. Estos personajes a
través de sus acciones logran demostrar su deseo de venganza mediante distintos
métodos que ellos utilizan a su favor durante el transcurso de la obra. Tomando
como caso de estudio al príncipe Hamlet, se presenta inicialmente en el acto
primero, escena 5 con la aparición del espectro. Aquí se revela el símbolo del
espectro revelando su identidad, que en efecto es el difunto rey Hamlet. Durante
aquella aparición el rey le dice a su hijo que Claudio lo ha envenenado y por lo tanto
el último debe pagar por lo que ha hecho. “​ Yo soy el espectro de tu padre”1,

1
​SHAKESPEARE, William (2015), ​Hamlet​, Titivillus, p.60
“...podría hacerte tal relato que la menor de sus palabras llenaria de horror tu alma,
helaría tu sangre juvenil…”2. ​Aquí se plantean dos ideas, por un lado, se confirma la
veracidad sobre la identidad del alma que en este caso es el padre del príncipe pero
también nos cuenta que algo terrible ha sucedido. Esta idea se ve aún más
reforzada gracias a la siguiente frase: “... la serpiente que mordió la vida de tu padre
hoy lleva su corona”3, es en este momento donde se plantea la tragedia de la obra y
se instaura la venganza en el personaje de Hamlet.

El príncipe todavía no estaba totalmente convencido de que aquel espectro


fuera realmente su padre y no un demonio que estuviera tratando de corromper su
alma. Para ello decide poner en escena una obra cuyo guión ha sido modificado
para crear un paralelismo con la realidad sobre la muerte del padre de Hamlet. El
motor de esta obra secundaria dentro de “Hamlet” tiene como motivo la verdadera
venganza que existe por parte del príncipe pero también que a medida que
transcurre la obra principal las acciones tienen una gradación ascendente en cuanto
al deseo de venganza. En el momento que asesinan al protagonista de la obra
secundaria, Claudio se levanta de su asiento y se retira del lugar donde estaba
siendo representada la obra. Es en este momento donde se confirma lo que el
espectro había pronunciado acerca de Claudio. Esto hace que la tensión dentro de
la obra principal aumente y por consiguiente el sentimiento de venganza también lo
haga. Ahora, al confirmar que Claudio efectivamente había envenenado a su padre
lo único que le restaba a Hamlet y por consiguiente su único cometido era tomar
venganza hacia Claudio.

En torno a la mitad de la obra se da el momento de mayor tensión, en otras


palabras el clímax. Sin embargo, cuando hablamos de este clímax no nos referimos
a aquel que hace referencia al desarrollo de la obra sino aquel que gira en torno al
tema de la venganza dentro de la obra. Esto sucede específicamente en el acto
tercero, escena 3 cuando a Hamlet se le presenta la oportunidad de tomar venganza
por lo que ha hecho Claudio: “Ahora lo podría hacer perfectamente, ahora que esta

2
o. cit, p.61
3
o. cit, p.62
rezando; lo haré ahora”4. Cabe destacar que el difunto Rey pide el restablecimiento
de la corona a quien pertenece y terminar la vida de quien lo ha eliminado a él; sin
embargo no pide sufrimiento hacia Claudio. Mientras este último se encuentra en el
piso, Hamlet reflexiona sobre sus próximas acciones y no le lleva más que unos
instantes en desistir sobre lo que estaba a punto de hacer. Aquí es cuando aparece
el carácter dubitativo de Hamlet que hace que a veces tome decisiones equivocas.
Esto último es un típico ejemplo del momento espacio-temporal en el que se escribe
la obra. Hamlet pronuncia las siguientes palabras: “Con esta medicina lo único que
has logrado es prolongar un poco tu vivir ya infectado”5. Aunque aquí se muestre
este carácter dubitativo, Hamlet lo hace debido al respeto por la religión,
principalmente porque sabe que si lo asesina en dicho momento, Claudio iría al
cielo. El único deseo de Hamlet es que el alma de su tío no halle salvación y arda en
el infierno. Por esta razón desiste y decide guardarse el gran significado de la
venganza para un momento más adecuado.

Su deseo por la venganza era tan grande que Hamlet se encontraba de cierta
manera perseguido por la situación. Esté tema tan recurrente aparece hasta en las
acciones más pequeñas como por ejemplo cuando Polonio es asesinado detrás de
la cortina debido a que el príncipe Hamlet creía que allí se escondía Claudio. Sin
embargo detrás de todo lo que he estado analizando se esconde un aspecto que a
veces puede pasar desapercibido. Esté es el hecho de la prolongación de la acción
de su venganza final. Por una parte esta prolongación se puede atribuir al carácter
dubitativo del príncipe, sin embargo, por otro se puede decir que el príncipe se
encuentra esperando el momento más adecuado para actuar. A través de esté
última atribución se podrían desprender dos visiones, por un lado la cristiana y por
otro la humanista. La primera podría hacer referencia a la Biblia de Jerusalén: “Mía
es la venganza, yo daré el pago merecido, dice el Señor. Antes al contrario: si tu
enemigo tiene hambre, dale de comer; y si tiene sed, dale de beber, haciéndolo así,
amontonarás ascuas sobre su cabeza”6. Contrario a lo que se menciona

4
o. cit, p.127
5
o. cit, p.128
6
​Biblia de Jerusalén​, Romanos, t.12
anteriormente en el ensayo, se puede plantear otra perspectiva sobre la decisión de
desistir en dicho momento de la venganza directa hacia Claudio. Dicha visión
alternativa se basa en la idea que se menciona anteriormente; Hamlet evita la
acción instantánea de dañar a su enemigo con el cometido de qué esté sufra por un
periodo de tiempo más largo. Por otra parte la humanista justificaria la prolongación
de la venganza cómo una forma de buscar, mejorar y por lo tanto resultar en una
forma más eficaz de vengarse sobre las acciones de Claudio.

Es así cómo Hamlet gracias a las distintas sucesiones de acontecimientos


logra vengarse del rey Claudio. Sin embargo cabe destacar que Hamlet es un
hombre de pura reflexión, qué de cierto modo reflexiona de manera excesiva dado
su menester de venganza. De todos modos esto lo ayuda para aplazar su acción de
venganza y convertirse en un hombre de acción.

Palabras: 1284

Bibliografía

- Hauser, A. (1982). ​Origen de la literatura y del arte modernos​. [Madrid]:


Guadarrama.
- Shakespeare, W. and Gutiérrez, J. (2001). ​Hamlet​. México: Edits. Mexicanos Unidos.

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