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Artículo 11. Principio de imparcialidad.

Consagración:

Consagrado como uno de los principios

Definición:

…..

La administración del estado en su actuar debe proceder de manera objetiva,


respetando el principio de probidad el cual se encuentra consagrado en la
Constitución Política en el articulo… consistiendo en observar una conducta
funcionaria intachable y un desempeño honesto y leal de la función o cargo.

Esta objetividad debe estar referida tanto a la subsatanciacion del procedimiento


como en las decisiones adodtadas por esta,

. Este artículo nos señala que el procedimiento administrativo debe perseguir como finalidad
específica que el contenido del acto terminal sea el resultado de la justa ponderación de todos los
antecedentes que originaron su dictación. A su turno, el artículo 52, inciso segundo, de la ley Nº
18.575, Orgánica Constitucional de Bases Generales de la Administración del Estado, establece que
el principio de probidad administrativa consiste en observar una conducta funcionaria intachable y
un desempeño honesto y leal de la función o cargo, con preeminencia del interés general sobre el
particular. La exigencia de fundamentación de los actos administrativos, prevista en el artículo 11,
inciso segundo, de la ley Nº 19.880, se relaciona con el recto ejercicio de las potestades otorgadas
a la Administración activa, toda vez que permite cautelar que éstas se ejerzan de acuerdo a los
principios de juridicidad -el que lleva implícito el de racionalidad, evitando todo abuso o exceso, de
acuerdo con los artículos 6° y 7° de la Constitución Política de la República, en relación con el
artículo 2° de la ley Nº 18.575, Orgánica Constitucional de Bases Generales de la Administración
del Estado-, y de igualdad y no discriminación arbitraria - contenido en el artículo 19, Nº 2, de la
Carta Fundamental-, como asimismo, velar porque tales facultades se ejerzan en concordancia con
el objetivo considerado por el ordenamiento jurídico al conferirlas. Las circunstancias de hecho y
los fundamentos de derecho en base a los cuales se dicta un acto deben expresarse en el mismo,
de manera que la sola lectura de su contenido permita conocer cuál fue el raciocinio de la
autoridad administrativa para la adopción de su decisión. En el mismo sentido, se ha pronunciado
la doctrina al señalar que “la resolución de recursos administrativos debe motivarse en todo caso,
cualquiera sea su objeto, (…), ya se declare inadmisible el recurso, ya se admita y desestime, o ya
se admita expresamente la procedencia del recurso, acordándose modificar o revocar el acto
impugnado, o retrotraer el expediente al momento en que el vicio fue cometido”, constituyendo
un deber de la Administración, basado en el principio general de contradicción, tener en cuenta las
alegaciones del interesado al resolver (Fernando Pablo, Marcos, La Motivación del Acto
Administrativo, Editorial Tecnos SA., Madrid, 1993, p. 203

La Administración debe actuar con objetividad y respetar el principio de probidad consagrado en


la legislación, tanto en la substanciación del procedimiento como en las decisiones que adopte.
Los hechos y fundamentos de derecho deberán siempre expresarse en aquellos actos que
afectaren los derechos de los particulares, sea que los limiten, restrinjan, priven de ellos,
perturben o amenacen su legítimo ejercicio, así como aquellos que resuelvan recursos
administrativos

Concordancia: C.P.R. Arts. 7°, 8° y 19 (Nº 2 y Nº 3 ); Ley 19.880, Bases de los Procedimientos
Administrativos que Rigen los Actos de los Órganos de la Administración del Estado, Art. 4°, 17
(letra f) y 41; Ley Nº 18.575, Orgánica Constitucional de Bases Generales de la Administración del
Estado, Arts. 2° y 54; D.F.L. Nº 2/1998, Ministerio de Educación, sobre Subvención del Estado a
Establecimientos Educacionales, Art. 53 (inciso primero); Ley Nº 18.695, Orgánica Constitucional
de Municipalidades; Ley Nº 18.961, Orgánica Constitucional de Carabineros de Chile, Art. 36.

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