La guerra de los mundos.

H. G. Wells.

La historia comienza con una breve introducción, hemos sido vigilados sutil y
silenciosamente por seres más avanzados al ser humano, sus fines por el
momento eran desconocidos, siempre se creía que en marte la vida era inferior a
la del ser humano, tal vez si, tal vez no, por ahora eso no importa, la historia
comenzó a principios del siglo xx, nuestro protagonista se encuentra con un
astrónomo famosos llamado Oglivy, se encontraban observando al planeta rojo
desde un telescopio, empezaron a notar algo en sus superficie, -quizás cayo un
asteroide, o fue una explosión volcánica- había pensado Oglivy. Un par de noches
mas tarde cayo un meteorito a la tierra, la gente no le dio importancia, pensaban
que había sido una estrella fugaz, solo Oglivy le dio importancia y fue a investigar
la zona de impacto, era un agujero enorme, en donde yacía un raro objeto
cilíndrico, esto impresiono al astrónomo, pues la mayoría de los meteoritos son
redondos y otras veces se queman al impactar, el se acerco para apreciar el
objeto mas de cerca y noto como alguien o algo dentro de ese cilindro trataba de
salir, corrió hacia el pueblo en busca de ayuda, pero nadie lo auxilio, salvo por un
periodista llamado Henderson, al regresar a la zona de impacto los ruidos raros
cesaron, lo que estuviera adentro se desmayó o peor aún, muerto. La noticia se
expandió por todos lados y al cuarto día nuestro protagonista se enteró, sin perder
tiempo fue al lugar del impacto.

Había mucha gente alrededor del cilindro, nadie hablaba, solo observaban,
confundidos, para ese entonces el concepto de extraterrestre era algo poco
conocido, al atardecer, el cilindro se abrió, cualquiera hubiera esperado ver algo
similar a un ser humano, lo que salió del cilindro era grande, de color gris,
caminaba tortuosamente, con tentáculos, se escucharon gritos, el horror había
superado al asombro, y nuestro protagonista corrió hacia el bosque, a lo lejos
observaba a la gente dividida, corriendo de un lado al otro, en eso, del agujero
salió un rayo de luz, una gran llamarada se dirigió hacia las personas que seguían
ahí, era como si hubieran entrado en combustión, fue en ese momento en el que
todo fue de mal en peor, los visitantes del planeta rojo no vinieron de visita, sus
intenciones empezaron a aclararse, querían conquistar la tierra. De pura suerte,
nuestro protagonista llego a su casa sano y salvo, todo esto era algo muy confuso,
demasiado para procesar en una noche, pasaron los días, y para este punto el
ejército británico empezó una guerra contra estos invasores, no habían muchas
posibilidades de sobrevivir, mucho menos de ganar, las bajas eran demasiadas, el
protagonista fue testigo de estas derrotas, anteriormente se aseguro de llevar a su
esposa con unos familiares lejanos para que estuviera a salvo, conoció a un
soldado que le conto lo que estaba pasando, el pertenecía a artillería, pero habían
sido superados en poco tiempo por los marcianos, solo él había sobrevivido,
ambos partieron hacia Londres, y por fortuna llegaron a salvo, en Londres se
había desatado un mayor caos, los diarios eran muy vagos, no había mucha
información, las batallas continuaron, hubo una victoria para la tierra, pero eran
mayores las derrotas.

El protagonista conoció a un cura, ambos se habían quedado atrapados en una

casa, pues afuera estaban rodeados de marcianos, el discutía mucho con el cura,
ambos no coincidían mucho en cuanto a ideas, así que decidió racionarle la
comida, cosa que no sirvió de mucho, pues el cura lo amenazaba con gritar para
llamar la atención de los marcianos, durante una discusión el protagonista golpeo
al cura y lo dejo inconsciente, hizo el suficiente ruido para llamar a los marcianos,
el se escondió y se llevaron el cuerpo del cura.

El tiempo paso y el protagonista se armo de valor, decidió salir a explorar, todo era
raro, había un inmenso silencio, resulta que los marcianos habían muerto, se
habían preparado para todo enfrentamiento, pero parece que no sabían nada de
medicina, pues habían muerto producto de algún virus o bacteria, el resto es
historia, la humanidad poco a poco se empezó a reestablecer, algunas familias se
reunieron y otras no, después de un rato de caos y guerra, solo quedaba un
mañana.