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CARDO PASEYRO

rB97
LA CONCIENCTA
PE VOLUCTONAPIA
DE INDO-AMEPTCA

BORDA Y
TERRA

MONTEV-IOEO MCMXXXVT
A MANERA DE PROLOGO
Irll autor rle este volumen cree o.portutro pr@-
codcrlo, a manera de prólogo, con el discurso pro-
nunciado en el gran homenaje a Baltasar Brum,
el 25 de Mayo úItimo en eI Ateneo.
Pese a su brevedaal los oratlores locales
se ,h¿bfan comprometido a-no ha.blar más de diez
minutos songifls¡¿ que contiene una anticipada
-
sfntesis de los conceptos fundamentales que se
desarroüan en el pres€nte lib¡o.

Señoras, señores Delegados, ciudadanos:


Todo se ha diCho ya para expresar y definir elocuente-
mente el conten,ido emocional de este hom,enaje. Desde los
Andes al Plata, .bajo la bóveda ,.;.r¡rpre resonante de,l cielo
de América, hay como la vilrración de un nuevo estremeci-
miento, anunciaciórr procligiosa cle la idea fructificada en mies
de e,s¡xranza.
Sobre las ,culnbres andinas ningún pensarmiento más
a'lto; ni más infinita la Pampa, que su infinita esp,eranza; ni
titnen las, oilas dcl Plata más bronc,os acentos que el hi,mno
que el cielo, el mar y la tierra conjugan para cantar Ia g[o-
ria inmortal de las rlibertades de América !
(Muy ,bien ! Aplausos)
De es,as cumbr€s, un destello; dle esa tierta, un latido;
de ese c,ielo un reflejo; de ese mar, un rugido para tejer,
hermanos de Aménica, la ,corona fúnebre de Baltasar Brum!
(Granfles aplausos)
Peruanos, arg'entinos, uruguayos :
RTIC,ARDO PAISEYRTO PROITOGO

En esta imp,r,emeditada conjunción de nuest,ros destinos, significado de valor social, esfuerzo fecuddb y conciencia
t congregados, no sólo ante Ja so,mibra pere,cerdera de un varón libre !

.ilustre, sino también ante lo que s,ignifica su glorioso sacri- (Muy bien ! Aplausots)
ficio, yo ,evooo, señores, las horas augur,ales de la Revolu- Ilustres repnesentantes <Ieil :pensamiento libre de Amé-
oión... i;,

(Muy bien !)
'ica:Al saluda'ros en nomhre de m'i partido v'el mío p,r'op,io
' Concierlcia ,1r1evo[urclonari,a dte Armrériioa qi coltnada ni tened presentes estas palabras finales, el mejor saludo sin
detenida. .. <luda para quien,es en eLstos motment,os están forjando la nue-
(Muy bien! Aplausos) va conciencia so,cial ¿s 1¿ 'd,ernoc¡acia de América, pa{abras
.. .conciencia revoluci,onaria de Am,élii'ca qule aun espera que os dirijo tarnbié,n corno segura promesa de que hernos
Ia hora propioi,a en que pot obra del espíritu generoso d,eil de persisti,r en él esfuerzo liberador y aomo s'egura garantía,
pueblo, de su fir,me brazo y de su potente voluntad, retome además, de la absoluta licitud dle nuestras actitudes, sean
e[ camin'o d,e su efectiva emancipaci,ónr, ilevantanrd,o junto a el'l,as cuales fuere'n, . .
,la,s banderas triunfales en Ayacu,cho y l-as Piedras, tros sím- (Muy bien !)
bo,los nuevos derl trabajo en la paz, de lla Justicia abatiendo ..Contra ¡la reaodión que intenta inferiorizarno,s, lucha-
los privilegios antisociales y cerrando definitivamente el ca- mos; ,contra la fuerza ahogando el dere,cho, nos erguimro's;
nino, por e,l acatado imperio de'la ley, a todos los despotis- para defenderflos, rererr¡o hombres y cormo ,pueblo, del peligro
rnos: los de la fuerza y los de,l dinrcro ! r¡ue enrtraña la envilecerdora tolerancia con los directos o
(Muy bien I .dfllausos) indirectos beneficiarios del rnotin, el perju,ri,o y la traición..,,,
Señores: '
(Ovación)
El partido con cuya re'presentación me honro, e'l Partido .. . os 1o prometemos, forma'lnlente : seguiremos ergui-
Blanco R¿di,catl, n,o h,a queñido faltar a ,es,ta cita como no dos y ,seguirem,os lucha,ndo !
faltó a otras... (Muy bien I Gra¡rrdes aplausos)
(Muy bien ! Muy bien !) Tomamos es,ta reso;lución serena y reflexivarn,ente. No
.. . . oomo no faltó a otras, ,cruentas y 'dra'máticas para el Ia dlcta el odi,o, el destpe'cho ni la derrota. . . No la dicta el
civismo nacional. odio porque mal pode,m,os o,cliar qttienes, precisamente, somos
Pero la vida y la sangre de nuesüros sacrifícados no odiados por la ,genero,sidad de nuestro ideario políti,co y so-
tiene divisa, no tiene, por con,siguiente, precio: ta vidb y ),a cial; no Ia dilcta el despe,cho porque esta baja pasión no ani<la
'sangre en quienes saben luchar de frente y en campo abierto. . .
dé nues,tros sacrlficados se dier,on, como la d,e Brum,
(,Muy bien. Aplaursos)
óor la libertad y por la patria...
'(Muy bien ! Aplausos) No la d,iota la derrota, pofque nunca pudim,os sentirnos
...y más que,por la libertad y ior l,a patria: se dleron, l¡rás victoriosos en nuestras oonvi,cciiones democráticas que
rasr por la excdlsd dignificaición del hombrc ein Cu iriple cuando advertimos que, para vencernos, hay que lle,nar las
?.ño
I
RICARDO PA]SEYRO

cárceles de ciudaclanos dignos y susüituir por el voto espurio


e! Iimpio y auténtico sufragio de la soberanía I
(Muy bien ! Aplausos)
Ilustrres Delegados:
Id y decid a vuestros ptteblos que aquí vivimos el drama I
de nuestra angustia cívica actual; id y decidles que no es-
lamos vencidos ni con,quistados; que no lo está el pueblo LA CONCIENCIA REVOLUCIONARIA DE INDO
que en 1as hondas crisis de su ciucladarlía perso'nifica la vir- AMERICA
tud de sus arrestos definitivos en stls iluminados magnici'das.
:rquí Ortiz v Arreclondo, así como sol¡re la mersreta andina se X)l pronunclomlcnto «l<ll lf do Mnrzo do L8O7.,.

vergue la figura inmortal'de Httrtado cle Mendoza, personi- l¿ protcste popular nrlls altlvo, gnllarda y fecunda
Jicacion,es caba'les de la virilidad v 1a fibra cívicas resumi'das quo hayn presonclads nucstro pafs después do la
en la lírica definicrión de Díaz Mirón: guerra do la independencla. (De un discurso pro-
"Tres heroísm'os en conjunción: el heroismo del pensa- nunciado 'por €l Dr. X'ernaudo Gutiérrez el § do
rniento, el heroísmo del sentimiento y el heroísmo del co- Marzo del corriente año).
razón"1...
(Muy bi,en! Grandes y prolongados aplausos). Es este un lib,ro sin pretensiones. Nada hay más impre'
sionante, para los espíritus obs,ervadores y ref'1exivos, que la
presenoia de viejos do,cumentos que evo,can un hondb estre'
mecimiento de la vida en el pasado. Todo el m'érito de este
libro, s,i alguno tiene, ha dle consistir, pu€s, en el esfuerrzo
aplicaclo a re,coger 1o más fielmente posi'ble el latido de una
época que a las generaciones presentes tra de ser útil aus-
cultar.
E1 autor de este voltttnen se ha hallado fren'te a una
,documentación cuyo valo,r histórico le es dobrlemente signi-
ficativo: po¡que traduce ignorados he'roísmols pro'dig'aclos en
e,l silencio de un esfuerzo hasta ahora anónimo y porque el
,paciente y discip,linade s5rpíritu que nos los lesa, actúa aun
sobre el fluestro con la autoridad del ascendiente y la fac'
cinación que ejerce una potente voluntad en acción.
Dstán, sin embargo, bastante lejos los sucesos historia-
,dos como para que nuestra imparcialidad se re,sienta. Nue¡-
10 RICAJR¡DO PA,SEYR'O rLiA rC ONCIENCIA RIEVOI,ÜC IONARIA 1t

tra legítima debilidad filial ha de 'quedar y queda amplia- Los revolucionarios de 1897 n'o crear,on, Pues, la con'
,mente satislecha con la sola exhumación d'e la verdlad obje- ciencia revo[,r¡ciona¡ita drel n [¿ érpoca en qúe, actuaron.
tiva fluyendo, espontánea y libre, del irrefutab[e arChivo Fu€ro,n, en cambio, ;s,tts in ntos, hurnranos y falibles, sí;
que atesora, err emocionante y acabada síntesrirs, lasi intimi- ,i)ero qure saben cu'¡rplir la rnisión histórica de su generación
rlades d'e,l drama revolucionarió de 1897. con la ern€rgía afirnrrativa nrecesaria para que su perfil de
Nos proponemos, también, al orclenar más que escrilblr, luchado're,s se re'corte en la hlirstoria com'o un permaneÍte
este volumren, abrir cauce atltéutico ¿ la tradición rerT ¡ilu- ,ejemplo de ,civisimo. I
.'ionaria de nuestro pueblo' El drama fratrici'cla de 1897 debe Fué su mérito haber dado salida concreta al s;entimiento
ser reclamado en estos instatltes por todos los hombres, sin r.qrlsctivo apri,s,i,onado, como ahota, en la envoltura de defi-
<iistinción de p,artidos nti ideotrogías, como una tradición co- ni,ciones teó,ricas in'con'ducentes. No buscaron fórmulas ni
mún al es'píritu d.e libertad. rótulos para clasifiicar el esfuerzo, q17e es etn1.¡ridar'1o. Senci-
Si es verdad, en efecto, qtte la Revdlución dp 1897 fué, llamente lo dirigieron hacia el fin prorpuqsto Ia revolu-
porque, tamib,ién como alho'ra, la más
- cle las
prácticamente. organizada y llevarla a cal)o por un solo par- c,ión
-
id,e'a'l

tido, su sentido y su signifi'cado fueron los de tlna prote§ta soluciones alcanzadas sin que Ia mano fuerte y ru'cla del pue-
de la conrc,irencia na'cional revolucionaria. ,blo la .o'6¡lrque directamente, será, tian sorlo, un a¡rlazamie'nrto
Conciencia nacrional revolucionlaria que abre, desp'tlés, r1el e'stallido fata'l con que anuncia su presencÍa inconfundl-
un ,paréntesis a su ,expresión hasta el mo'm'ento actual, por- ble en las instituciones la aoción revotrucionaria'
que eI otro drarna fratricida el de 1904 no lleva, como "sufragio libte y hon'rudez ad'mirlistfativa" fueion los
- - Es un episodio prin,cipicrs arrimad'ore's de aque'lla revolución' Pucliéramcjs
es notorio, el ,s;ello ,cle la reheldía poptrlar.
trágico de nuestra his'toria, en el qure las pasiones desen'fre- aclrnitir, sin mayor esftterzo' que esa ftlé la gran banderá
,nadas, tan ci,egas oomo el mis'rno destino qu'e las enfrenta, ,corngrega,dora conlo en ta ¿dtla'li'dad son as'piraciones vehe-
des,atan ,su frenesí guerr,ero con la irr'esponsabilidad de Ia mentes y ostensi,bles <le la c,ittcladanía, frrente al derrumbe
nurbe que abre su seno para descargar el rayo.1904 es la firei- in'stituci,onal de Marzo, idéntico,s móüles más el grito reso-
za ciega dell e'mbrión r'evotrucio'niaiio que s'e hipertrofia en nante con ,que F,rancis.q ffi¿d,ero estfeme'ce' ye en 191O los
ulna so]a dirección: la de la violencia. ámbitos de Méjico:
Fué a'quel, precisamente, u'Ilo de los inevitables resul- ",Su,fragio libre y no reele'cción !".
taclos de 7a "paz ar'mada" oon que irqperceptiblemente todo Pero alhorldando en el conocirniento de la rnist'eriosa
es,pírit,u ¡evotruaionario degen'era en im'pulsivo arlhelo de inspiración que imptllsaba ,a 1os r,evdludionarios d,e 1897, des-
agfesión y de guerra. 'd,e
la organización 'de la empresa ca.lcada, en lo's lineamientos
, '. 1897, no. Esta es una revolución tregitimada en la' con' tiirectivos, en e.l modelo de la Revo ución Frances'a (el De-
cienoia ,cole,ctiva con tan profunda co,nvicción de su
justicia, úEgado de la Jun'ta de Guer,ra era el jefe supre'm'o de{ ejér-
decirse ella sea la causa sino, sencillamente' er cito), hasta la revelación de los detalles per'sonales íntimos
,ilógico y oibliga'do de un estado social' de sus principa,le:s gestores, los eleme'ntos más brillan'tés,
i LA C,ONCIENCTA REVOLUCION^RIA 13

t2 RICARDO PA,SEIYRO I

mentos de la Revol'uCión, de Ia profunda fuerza r,enovadora


capacitad'o,s y cultos d,e la burgue sía coetánea, fácil es entre- que palpitaba en la entraña sociall d,e la época con e1 ritmo
ver que e,l fon<Io de sus a,ct;itudes, de sus sacrificio's y de sus inconfundil¡rle de un fecundo latirdo de la naturaleza.
iluminadas abnegacione,s, está con'stituido por un fervor re- No por más valie,n'tes triunfaron en la misió,n de inter-
volu,cionario auténtico, fuente prodigiosa de los alumbra- pretar el arrhclo cole,ctivo, sitno por más e,spontáneo,s y deci-
mie,ntos populare,s que im,puilsan, Por los caminos de perlec- didos. Tuvicrou tanrl¡iótr a su favor la virginidad mental
ción y de justicia, a la humani,dad. emergente de la categórica dtelimitación de los antagonis-
Hoy, como e¡ 1897, tiene el país una conoiencia revo- ,rnos oporantes : hacer la 'revolución era luchar por la liber-
lucionaria. No la tuvo en el int'erregno de Paz qlue brin<ló la tad sin que pro,bl,emas coexist'e'nt'es o sul¡sidiarios interfi¡ie-
Constitución de 19L7. Las conquistas so'ciales solam'ente no s;en la clara n'oción del deber a cumplirs€.
dan aun, en las socieda,des de Indo América, fermentos srr- floy, no . .. La irrefutable conciencia revolucionaria que
.fri,cienternente crec,edores para d,etermi'nar 1a formaciórr de ,existe e,n e'l país I eue, como una boca apetente, exigirá,
un frente revolúcionario de clase. Todavía se proyecta sobre hasta quedar satisfecha, que su ciclo sea cumplido, flo en-
el Perú e inútit concita, su glo'rioso espectro, a la lucha de cuentra aun lo,s i.ntérpretes iluminados que la concreten en
c0ases, la figura inmo,rtal de José Carlos Mariirtegui I acción.
Del fond,o o,scuro del génesis raci:tl se mueven, ert la Inútil ha de s,er el intento de quienes pretenrdan re<lu-
coociencia cle los rev<rlucionarios cle 1897, los jugos de las cirla a fórrnulas preestablecidas, adosándoles alas artificiales
raíces amer,ic¿unas quc pugnan hac,i,a arriba en un in,stintivo para hacenla an'dar o, de contrario modo, se hagan la ilusión
a,la¡de de crecí,m,iento. Es el secreto de su carácter, de su de detenerla engril.lánd,ole los pies.
-iosu<le2, de su in,contenido impu's,o hacia adelante. Por eso Ni mayor desesperanza r-ri más triste rcalidad que las
llegan en el tiem,po; por eso realizan en el espacio. ó a'ctuatre's brindaba a la ItepÍrltlica la situaoión prevalente en

La divisa que in's,cribe el lema "su,frag'io libre y honra- 1897. Un gobennatrtc abso'tttista, un Parlameuto genufllexo,
dez adminirs,trativa" €s, porf, consiguien'te, sólo la envoltura una socieclad l.latirla victr¡riosanrente e,n sus redu,ctos m,ora-
cxterior de la vibración sagrada que galvaniza a los ho,m- Ies, urr p,ueblo v,encido de anternano p,o,r la resignación.
b¡es que hicieron la revolución de 1897. E{los la tra'dujeron Las mism,a's corrientes aclversas gravitando sobre el
en hechos, e'llos la transformaron en sorprendente actividad conglom,erado sociatl: corrurpci,ón, vena,l,:rdad, militarismo.
creador,a, e'llo,s la modefan en mronerdas para el tes'or'o revo-
Empres,a i,n'c'orrrce;hil>l,e pa,re,cía,,entonces, d,erspst¡rt rt
lucionario, en fusile,s para los sold,ad,os, en espaclas refulgen- Íiibra cívica; infun,dir sol)re el letargo colectivo, sobre el cru-
tes para los capitanes y caudillos de la legión libertadora. tlo materialismo triunfan,te, la idea d,esvatláda de la rectitud
Só1o así se e*p,li,ca la admir.able constancia 'de su es-
rnoral y el cle,sinterés !
fuerzo, una y otra vez ma,logrado, una y otra vez erguido Sin embargo, hem,os de ver cóm,o la conciencia rrevo-
cnte el obs,tá,culo. Ob,edecían, no a una conc,epción geomc- lucionaria se refugia ,en la conspiración y cómo, drntro de la
trizo<l'a de srns asrpiracion,es, ni a un programa úazado patt 'conspiración misma, iim'pulsa e i,lumina a sus intérpretes
rbjctlvar la cort,eza de la acción : eran' simple'mente, instru-
14 RICA,R,DO PASEYRO LA C'ONLC,LE{N,CtrA REV,OLüCIONARIA. l5

hasta la satisfacción práctica de la aspiradión in,mecliata : la Va, desd,e luego, «le Sa,rmiento ¿ Don Juan M,o,nta1,vo,
scción dire,cta contra el régimen liberticida, para comhatirlo d,e Montalvo a Rllanco Fornbon,a y de és,te a Mariiátegui, una
a é1 y para lanzar, sobre e1, rehaño d'e los inclifererntes y los sutil tral)azón crspiiritu;al rlue 1>ermitirría, a sirnp,le, vistá., pro-
egoístas, el de,creto inapelablle de los hechois. ye,ctar s,us srilrrctius rlc rcvr¡'ltrt:i<>narios auténticos de América
sobr,e una ntis,nrr línen en la hntnlla por la libertad.
Se enfren'tarl, lx¡r rlo pron,to, ¡r los cttatro clá,s,icos tipo,s
Cqn la publicación de este libro p,ers,eguirnos un fin con- d,e 1a,s <lictaduras arucricall,as : la fcrr,rlal, la mistica o emo'cio-
cr,eto por encinra de la satisfa,ciión que brinda la agr,adable nal, Ia millitar y la del rlinrero () s(,a, lxlr su or(lcn : la de Ro-
tare,a de compilar los do,cumenrtors que constituyen s,u mé- sas, Ia de Garcia Moreno, l¿r «lc (i<inlcn y h dc Le§uía.
dula: ese fin ers, como d'ecimos, recuperar para nuestra de- I Su pluma y sa voz han clebirrlo villrar, l)or eso, bajo el
rnocrarcia la concie,nci'a revolucionaria que e,s su fundamento. ,cielo de Armér,i,ca, con aoernto dive,rso.
El tipo de,l "nuevo afileriicano", del ciudadano de la de- El f ormidable 'busto de Sarmiento trasunta la recie-
,mocracia original que ,el ¿,mb,ient,e v e1 medio es'tá,n fo;jan<to dumbre del luohador autócto,no, hoplita criollo que abre paso
en tierrras de América, ése to,davía está escc¡ncli'd,o derntro de a la civitlizacjón b',landiendo sobre 1a cabeza del tirano la fuer-
sí miismo. za virgen de sus músc,ulos y el rayo pot,ente d,e su espíritu
"Las s,em,ircivilizacionres, a cuyos, t,ipos perteniecen casti indomable.
todos los prreblos m,ocleruos, 1>ues uingtr,no ha al,canzado a
La pluma de l\4ontalvo es, de co,ntrario moclo, daga da-
ver l¿ sitnultírnea, arrnónica y perfecta fl<rra,ciirn del inclns-
masquina cuyo pavón repujado 'luce la incrustación dorada
'lrialismo, el int,electuafismo y d,cl moratrismo, cuya sum,a
Ce una aristo,cracia, culturarl incon,fundible. Sol_rre el pctho del
culrr¡?nante sería la civilización o ideal sociológico, no fhan
icxtravag'an'te déspota qu,e Pulso "el solklado sobre el civril, el
pa.sado aún, especialmente en la Am,érica hispana, de lo que
frai'le solbre el sol'claclo, el vcrclugo,sobre el fraile, e.l tirano
Maeterlink llama la "edad de las generac,iones sacrifi,c¿das".
Sacrificada's po¡r su cleficiencia de edu,cación y de potancia "sobre el ,verdtrgo" é') po,ne, a su vcz, el nellejo mo,rtal de la
hoja cinoe,lacla <1uc sc hutlde, finailmante, en la carne del gro-
€conómica i po,r I,a relajarción de su potenOia jurídica al his-
tesco Cósar misti,co para partirl e el cora?Á,n.
teris,mo ,¿nárquico o a las pavuras del caudillaje, dre 1a. tira-
,Cuando en el destierro recibe
la nueva de que sus jóvenes
'nía orioila, de todas las forma,s del absofutis,mo".
La cita es de un¿ elocuencia sug.eridora. No os necesa- discípulos Andrade, Rayo, Moncayo y Cornejo, than apuñalea-
rio dete,nlerse para g{orsarla. do bajo las arcadas de su propio palacio al déspota teocrático,
Pero no habrá de inferirse d,e s;u exacüitud que pr.ledan exclama sin poder contenerse:
,«-rfrecerse como tipo,s r'epres'erntativos aquellos que, sobr.e el pluma lo mató I
-Mi jóvenes
rasto es,cen,ario de Ia "Erspaña niña" com,o la llama Rodó, "Estos conjurados come¡rta Blanco Fombona
-
que vibraron sus armas vengadoras contra el sombrío teócrata,
-
yerguen el bus,to dell "roussoniano práct,ico, a quien la civili-
,ación no ha entrado sino en forma de cultura intelectuaflf,. eran el verbo de Montalvo hecho carne, eran Ia doctrina de Mon-
l6 RICA,RDO ,PA.SEYRO LA OON]OITENC,IA, RIEVOI,ÜCION¡\RLA 17

talvo, armada con puñales, eran el espíritu de Montalvo con- Y llegamo,s, por fi,n, por el cauce de'l tienrpo, a de'sent-
vertido en centella". bocar en cl valle del Rimac, allí donde las fuerzas reaccio-
Conternplemos, ahora, el paisaje vetlcz'¡latlo, escenario narias rle la cnrltra revolución, finiquritada la era 'del mestizo
propicio en que se mueve, bajo el uniforruc drrratlcl, la figura étni,co, se concrctan, depuradas de su arras'tre centenario,
rsini,estra del déspota rnri'litar en su iniciación; tlegetrcrado, en la figur¿ nr(ntl(da y rep,ulida de Augusrto B. Leguía.
muy luego, en una tnezcla incoercible de entorchaclo de cuar- Perú es inextrausto emporio de riqueza. En la superficio
tel y oro im,peria,lista. y en el substlelo, cn la a,lta puna y en 1os val'les, la entraña
Juan Vicente G6mez llena las cárceles de ciudadanos ,gle,nrerosa de Ia tierra se abre como un seno fecundo para
libres y vende al país. Sin embargo, stt notoriedad rnavc¡r la brindar el venero inagotable de su savia o de su,s ocultos te-
obtiene s'racias a un volumen d,e polémica: "Judas Capito- soros.
,lino", editado en París en l9l2 y que 1o presenta al mundo
Aquel homlbre pe,queñito, d,e manos ve,lludas ejerció. en
'to,n la celebridad que merece, la oel,ebridarl del oprobio".
otros tiernpos, el oficio de corredor de una compañia extran-
Como Heine, que amenazó al rey de Prttsia d,ejarlo cru-
jera. Era un intermediario adrnirable en el arte de trasegar
cificado en s,u "Ger.mania". Blanco Fornbon¿ ilava ei crltz
de igno.m,inia con su "Jutdas" al tenebroso amo y señor de el dinero del bo,lsi,llo de los peruanos a los cof¡es fuertes del
rasca,cielos neoyorquino, asiento de Ia te,ntacular empresa.
Venezu.ela.
E1 oficio Ie afinó los srentirdos, pu[ió su vocación, perfeccionó
Blanco Fombona es, d'espués de Sarmiento y Montalvo,
su arte de prestidigitador interrnacional que transfor,ma en
el escritor, luchador y potlítico que más prodigio'sam,ente in-
dólares el ahorro y el s,udor del puerblo peruano.
terpreta los imperativos de la conci'encia revolucionaria de
nuestra América. Su acento en la polémica, en el apóstrofe, Cuatrdo llega, pues, a la ,pres'idencia de s'tr patria, lleva
en el emplazamie'nto supremo con que cas'tiga el rostro del consigo un lote formidable de conocim,iento's y de exp,erien-
tirano es, dice un co,merntarista, "el del araucan'o selvático". cia que le pernrit[rrán seguitr ejcrcienrdo, d,esde !a primer ma-
"El odio me ha he,cho cantar" di,ce en la intro'ducción de ,gistratura dc'l país, el ofi,cio de alto interrnediario que entre-
sus "Cantos d,e la prisión y de'l destierro". Pero es ,s,u voz. ga, ahora, el país nrisrno, a sus anltiguos princ.ri'pales de la
acaso, no por contemporáme'a, la traducción fi,el del al'ma de Quinta Avenida.
la Revolu'ción ? El experto corre'dor de seguTos só1o percirbe un cambio
Todavía no ! Grande y to,nante como un profeta; po1í- ,d,e decoración al pasar de su escritorio de co'mi,sionista al
grafo com,o un ensayista de'l renacimi'et:'t'o, como tln mos- despaoho guber,nativo. Después de las primeras fintas de ex-
quetero agresivo y se'nsua'!, e'st'e cruzado de la lil¡c'rtad de ,ploración advierte que el pueblo que gobierns no es muy d'i-
lnrlo Am,érica au,n enciende la anto'rcl'ra de su rcl¡clión en ferente a[ q,ue l,e colocal¡a pólizas. Le tour-a el putrso y no le
t'é,lites".
los candorosos conceptos de las clemo'cra'cias <lc tette ya. Fáoilrne,nte ha pencirbi;do que en stl conciencia se
ttLos pueblos son montes los gra'ndes ha apagado la chispa revolucionatia, \a de la reb,e'ldía, cu-
- d'i'ce; - Pero bierta por las cenizas que arras,tra la persirstente cultura an:
lrbolor lc crc,een encirn8"...
!

i8 RICARDO PASE]TRO
LA C,O¡.ICIENCIA REVO]LUCIONARIA t9
tisocia,l y desmoralizante que finca en los privi'legios del di- atribuyen los otros, y no a la l;uz del día, sino en la sor'didez
nero la razón de ser de la vida.
de los cofres que artesoran las ganancias mal habidas.
Leguía es así la más depurada person,ificación de,l d,ia- Han nacido defor,mados e,spi,ritualrn,ente, cump,liéndose
ból,ico nexo que nece,sit¿ I¿ expansión del imperia,lism,o amo-
€n €llos el salto atrás cle la degeneración atávica. Represen-
nedado para obedecer a s'u ley y cumplir s,u,s fines,. Es, más
tan, e,n la cv,olu,oión, el oscu,ro período que singulaiza a la
que ninguna atra cosa, Ia representación acabada del imptrl- preeminetcia <l,e'l merstizo que antes fué, racialmente, el ne-
so contra ¡evolucionario d,e nuestra época. Le'guía, como l,os xo entre Irrs,Paña y América y que hoy es, intelectual y ,so-
otros dictadores contempiorán,eo,s. dicta,rl,ores del dinero, no cialrnente, el instrumento de qúe se sirven los imtperialis-
pueden ser cotmprend,idos' en la definición de Blanco Fsnbo- mos dominantes para filtrarse y accionar, .vencer y corrom-
na, ctlando supone a lo,s ptteblos montes a los que los gran-
¡ler la con,ciencia revolucionaria latente et¡ e1 fo,ndo de la
des ár,boles ,1,e cr,ecen e'ncima. estructura americana.
Son, por el contra,rio, expre,sione,s negativas de su gran- E'l me,stizo, "fruto del ego indio y deil alma e,spañola",
deza. Corrno e,l g'urijarro que de,svía e,l curso del torrente, su traduce en sus rasgos físicos la ambigüedad de su mundo
infimo valor moral al,canza tam,bién a torcer el curso de espiritual. Per.o el a,luvión de las edades ha borrado de su
la historia. Cu,mpl,en su mis,ión repres'entan,do, quizá,s, un mo- ,frente e,l tirlde dis,tintivo y apaga, en los oj,o,s, el reflejo inci-
me,nto de la dlesviación del afma col,ectiva, pero su presencia dente de la fusrión. La armazón ósea, la envorltnra carnal
mo puerle tener para la historia otro significado gtre el de que la cub,re, las pro,porcion,es anatómicas y las medidas, fa-
traer a ,la superfiicie la forma hurna.na de tos ins,tintos anti- ciales no admiten, hoy, diferencias. Biológicamente ha des-
.social'es qr¡e se o,ponen al integra[ desenvolvimienrto del irn-
aparecido el eslabón racial.
pulso revolucionario. Moral y ét,icam,ente, no. El "mestizo intelectual" sobre-
Estos dictado,res del dinero sofl, en América, intele,c- rl,ada en ti,erras de América, arrastrado y no asim,itlado por
tualm,ente irre,sponsabtles,. Sus actos y sus res,olucíones no rl torbel'lino de la aivllización tran,s,for,madora.
obe<lecen a ninguna cons,trucEión mora,l. A no ser por los
El mestizo racial "es sensual, caprichoso, turbulonto,
efectos de sus inevitables violencias, serian sujetos a los traidor y no es un gran soñad,or ni un apasionado hornbre
que pudiera re6rresenitártsefes como a la entrraña menos nobl,e
rJe acción porque Ia votruntad hum,ana en é1 es confusa y os-
de la fisiología h,umana, re,curriemido, para la satis,facción de c'ura". De la fustiótr de,l indrio y el ers,pañol ha de surgir, en-
sus infe'rriores apet€ncias, a los más burdos mime,trirsmos del tonces, una p,sicologla catlculladora y torva: el ímpetu his-
instinto. pano se mezcla a la abuüa indi,a y pi,erde s,u pureza; y a su
Sorn astutos y cobard,e,s sin saberlo; sin qrrcrerlo, ade-
vez,, la astucia in'd[a enturbia str ingenua simplicidad a,s'imi-
'más, desde que las vi,rtudes y los vicios humanos no tienen
Jando la insidi¿ de la ambiaión conquis,tadora.
€n sus almas fronteras rr¡orales,. Como e'l dimero sim$lico, La emanrcipación de América tuvo por líderes a criotrlos
, se diría que carecen de la serdsaciór¡ afirrnativa de le csta-
puros: Sa,n Martí,n, Bolívar, Artigas, luChadores internacie
bilidad. Valen lo que un título ,buróátil, por cl velo¡ tluc lc nates.
n R,NCAIRJDO PASEYR.O
IJA OONCTIENTOIA REVO,LUCIOI'IARIA 2L

Contra eltors, contra su c[ara definición ética y política,


te el aplauso de la claque interna y el comentario elos;ioso
contra su o ra que prometía nuevos horizonte's a la apti-
de la opinión extranjera, ni más s'incera ni más honra'da que
turd positiva, se abÁ la cons[¡iración de la mediocridad sin
alas, de la arnbición sin rnéritos. Es e1 mestizo de allrra so-
la otra.
Fuera del Perú, la escena se repite. Si no [iay rique-
Iapada, traido,r, venal y amb'icioso, el que urde la conjura-
tión de los apetito's que obligan a Artigas, Bolívar Y San zas naturales que mercar, ha de haber, en cambio, reservas
'en ,los bancos del estado, activ'idades explo'tables de la loco-
Martín a m,orir, negadros y persegu'idos, en el des'tierro'
Desde entontces nuestra conci'enci'a revoluciona'tia se moción y el tran'sport,e, de[ tráfico marítirno o ftruvial, de los
serr¡icio,s públi,cos indispensables, que se transfor,man en el
e,clipsa o se corrompe temPorariamente. Mestizos étn'icos
pnecio so,nante y contante de la sin'iestra capitutlación.
todavia: Rosa.,s, Gar,cía Moreno .y Gómez, asoguran su es-
puria hegemonía con el Tazo em'ocional que sirve para anu- Esta es la vi,ctoria del rnestizo intelercttral, heredero le-
.dar, al símbo,1o del poder, el alrna de los p,ueblos. gítimo del otro, que m'alogra o traiciona etl esfuerzo detl ame-
IIoy, en cam,bio, que es e'l ci,olo d,el anre'stizo intelectual, ricano, puro de alrna y pensamiento, abriendo c¿rnino a Ia
conciencia revolu,cionaria de fre,nte y en camrpo abie'rto.
[egítimo heredero del otro, lo vemos surgir del fondo de lo¡
escenarios aborígenes, favorecido por las so'mlbras, pare
Como er1 otro que aprendió en 1a espe'sura de'l jara'l a
crearle paci ,n'cia y uñas a la am'bición, 'este me'stizo de ahora
arrebatar a sus auténticos suste'nrtadores, l'a antordha de la
aprende, tarnbién, a agazaparse cuando el empuj'e civi'liza-
revolución.
dor tro asedia. Po,le so,rdina a SuS p,asion,es y retrocede, en
Por eso desfiilan ante nuestros ojos, abiertos' hoy a la
una mimetizdción admirable d,e los movimientos dd'l tigre,
iuz, como somrbras de la historia des,tinadas a revelarnos la
Duscando, a la somlbra de lo's grande3 árrboles de la selva, la
estelilidad d,e ,su,s vid'as perturb,adoras, áridas com'o el de-
ventaja imfiune de la alevosía.
sierto, rís,pidas, duras, infecunidas, nega'ción' categórica del
A la sombra de las ¿lltas representaoione,s deil pensami,en-
fuego sagr'ado que itlumina a las verdaderas ceaciones de la
Revolución, crisol de Améric¿.
to revolucionrario a'merican,o, surgen' mraniobran y medran
,también esto,s alevo,sos ejemplare,s de la contra revolución.
Nad,a definimos ni cl,asifircamos al respe'oto, Ni aun in-
En Perú las riquezas' naturalles sirven al dictador mo-
telectualmente puede interpretarse como una abstrrda reac-
derno par¿ aserxtar su sdlio: el orro, eL cobire, e.l vanadio, él
ción "dhauvin,ista" la fijación del carácter erspe,cia'1ís'imo que
caf.é y el azúcar han de d,ar etl oro 'suficiente para c'omprar
,revisten, ,sin una excepción, nuestros dictadores del dinero.
Ias adhesionres neces'arias para el plan de perpetuación, Sa t'mtod,us operaradii" de tan so,rprendente afi-
Caraclerizan un
volverán dóciles to'd,os los rresortes del poder: el parlarnento,
nidad en los ante,cedentes y en lo,s re'sulta.dos que hay, por
üa pfensa, Ia justircia, lo,s patriotísi,rnos generales y lo,s inrco-
rntptibles co,¡oneles, . . Y e1 progrreso material erxcubre, en- fterza, qr.re estudiarlos co,mo clase y especie diferenciadas
6ror los rasgois canacterísticos que lo's as'enaeja y ha'sta lol
Éofiocs, la abyección del oprotrios'o cohecho': vías férteas, ca' ,solidariza según es notorio, en un frente común de recípro-
ftltGras, monutrlentos ¡ hasta esicuelas ! se instalan an-
- - ca asistencia.
I

22 RICA,RTDO PA.ISEIYRO LA CONCIENCIA R,EVO,LUCIONARIA 23

Nos lirni,tamos a exhibir, pu,es, a la luz de la opinión, c\nza a disolver el raudal clarificarl,or de la selección y la
esta verdad no del todo revelada a la apreciación del pue- c{ntura.
,blo: la fe,lonía y la traición, el gesto impúdico del gobernan- Proc,lamamos, pues, el debe,r de preparar a las genera-
t,e <le hecho, sirrlulador de democracia, y la venaliid'ad del rciónes presentes ,para la rectrpera,ción de su concienrcia re-
hierol'ante, universitar,io o no, que lo justitica o exaita, son volucionaria y la iclentifica,ción del nToderno ideario político
el fruto leg'ítimo d,e una i,m'pureza cle alma qtle debe tener, y social cou la tradición emancipadora. No sólo no hay en-
¡ror fuerz-,a, un or;sen clisociaclot en el amb,iente que forja tre aquil y ésta, distar¡cias insalva,b'les si,no que, pro{untdi-
Ia revolución emancipaclora de Anrérica, el más vasto escena- zando su conociuriento, se interpone únicamente entre uno
,rio geográfico c1,ue oÍrece. err 'la historia de la humanidad, y o,tra Ia disi,rnt¡la<Ia pres,encia de las cor,riontes co,ntra re-
,Ia uniforrne reitera,ción ctrel priLrcipio democrático. volu,cionarias.
Su quebra,ntamiento no es obra de los puehfos sino de No es, entonces, una afirmación sin sentirdo la que se
quieners los traicionan, dre qtaienes alteran el riir¡ro dado al alza en el s'ector rnás avanzado de la opinión m.undiaj.!, pro-
impu so inicia,l emancipador, cuya corrtinuaciór-r en el tienr- c'iamando la necesidad de no abandonar en manos de la re,ac-
po y el ,espac,o sólo poclría traducirsc l«:qi timarnetltc en más 'ción los límpidos estandartes qu,e tremolan, en, 1,a5 s,u/yas,
libertad y en más <lemocracia. los pueblos lanzad,os a la conqu,ista d,e sus libertades.
La tradi,ción t¡olivaria,na, sanmartiuiana o artiguirsta Thorez, secretario del Partido Comunista fnancé,s, pe-
pierde purc?a. por la i,m,pureza irredimible de quienes, en netrando el profundo senticlo de un vínc;ulo que no puede
vez de ser surs intérpretes son, »r'ecisamentc, sus ltegadores. ser negado sin nega¡se ia raiz nrisrna d,e doncl,e rccoge el
I,a sustitución adquiere contornos trágicos porque a la vista jugo vittal la co,n'c,iencia revol,ucionaria d,e s,u pueblo, a,oaba
de los asom'brados ojo's de América se ofrece ,el es'pectácu{o <le hacer es,ta stlgerentc rloc'raracir'¡n,:
,de la derrota práctica de sus imoulsores eu tanto triunfan, "Rec[,arnam()s para la clasc ottrera la here,ncia revoJu-
asidos a su¡s m:smo,s princiDlos. los elcmc:ntos que un sitno ciona,ria de los jacobirro5 y cle la Com,una de París. No Ie
rdes,con,certante destina a Dersoni fii'ai la caball reen,ca¡nación ¿ban,<lonaremos al enernigo la bandera tri.collor de la gran
dol e,spíritu contra revo uciou,ario. Revolución Francesa ni Ia Marsellesa, el himno de los sol-
Esa es la verdad concreta y simple que sul'ge del aná- dados de la Co,n,ven,ción".
lisis cual,itativo del atorhe, ilin,ado existir de la democr¿cia Y bien: reinvi¡dicamos nosotros para el ,esfuerzo que se
amerioana. La revolut:ión qr,c itltenta f iarla a nttestro su€- tisnde frente a las situacione,s clesnaturalizado,ras d,e nue,s-
Jo. no sótro no ha terminade. 5ino que esrá detcni,da por tra tra democracia, la nrisma con,ciencia revolucionalia que ani-
r¡lresencia d,e urn e'l,emento perturbaclor del claro y creciente ma a la gesta emanrcipadora, la qure diata las Instruccione,s
,pul'so con que sre ini'cia: la interferencia i,n,sirliosa tlel m,estizcr del Año XIII, la que e,ndie,nde el her,oísmo e,s'part,ano de los
,étn,i,co, antes, de'l mestizo intelectual, ahora, in,strttrmentos de Treinta y Tres, la que da el grito de "Libentad ,o Mruerte !",
l¡ contra revolución, brazos ciegos con que ejecuta su de- 'la c1,ue amer,az&, en nr/estro himno, con el ,puñDl dte .Bruto a
rlgn{o teaccionario el sedimento pslquico rque todavía no al- los tiranos y prolongándose en l¿ cumplida re,alización de
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?4 RI,OAIRDO PIA§EiYRrO 1897, BORDA Y TER,RA 25 ,¡

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ino, s, en gloriosas rebelliones, desa.ngní/r- ) Se seguía gobernando, pues, al pals e influyendo en los
las armando el brazo de ifu,minados m{S- ,actos más dive¡sos de s,u vida po'lítiea, con la exhibición
en drnenazad,ora de las bayonetas.
La ¡evolución de 1897 es, entre aquellas, rnanifestación Esos fueron los famosos "21 dias", propios del amlbien-
ca,tegórica de su genero,so aliento; e1 disparo de Avelino te qu,e ge,rminó la carxdidatura presid,encial de Borda.
Amedondo es, entre é'stos, concreta pulsación de s'u sxis- Se atribuyó su triunfo a la infl'trencia del doctor Herre-
tencia. ,ra y Obes, su predecesor, quien o edeciendo a la ley fatal
II que impu'trsa a todos los olrigar.cas, pnesumió con e,ste proce-
dimiento prolongar, de hecftro, s,u ascendiente personal en
¿Bordismo y terrismo
el gobier,no
.- El 1.q d,eMarzo de 1894 es,taba la AsamiMea Ge,neral Lo q,ue se exptrica, desde que al propio Itrerrera y Obbs
reunida pana proceder a la efeación de' n'uevo pre'sidente de le faillase erl plan de reform,ar la Oonstitución corr¡o medio
la Rbpública por cesar en su mandato el doc'tor J,rflio He- de salvar el imperdimento opu,esto a su acariciáda ree,trección.
rrera y Obes. Cuarenta años de,spués hern,os- visto córno, más afortu-
Fina'lizó es,e día, sin embargo, I f,o fué posible desig, rar Iferrera, Terra duplica su m'anrdato por el proce-
,nado que
al ciudadano que debía reemplazlar a'l d'octor Herrera y Obes. dimien,to expeditivo de la reforma cons'titrr¡cional qr.re a aquel
Presentes 85 tregisladores, don Al'ejandro Chucarro co'nts'igue le fa,llara.
42 votos, 40 don Tomás Gomensoro y I don José Marfa
Mrioz. Al nuevo preside,nte d,e los or'ientales, proc{amado su
triunfq no le basta el juramento prestad.o de respetar y ha-
Ninguno, pues, d,e los candidatos votado's albanza al
mínim,o de 45 sufragio,s necesario5 por precepto co'n'stittr-
cer respetar la Constirtución, sino que, con voz ernocionada
cional para s'er probüamado.
y solemne adenrán, agrega estas palabra's:
Hasta etl 21 de Mar'zo siguió sesiona,nrdo la Asarniblea "siento en est'e motnen,to verdaderamente histór,ico Pa-
General, efectu,ánrdo's'e durant,e ese tiempo ,40 votaciones s'tl- "ra mi la neces,idad su,prema de manifestarois que en ell des-
cesivas, obtenienldo en e{ rlltimo día citado 47 votos don Juan empeño de las funciones de'l car,go con que h,e siido i,nvestido,
Idiart'e Borda, i'ntegra,nte, dentro de la relativi'dad 'del tér- será m'i no'rte y no me guiará otra aspiración¡ qure bien
mino, del sector pailam,entario inldlependiente de la época. de la patria, e[ r'espeto más sincer'o por las pfes'c'ripciones
Durante los llamados "21 dias", que así se les conoce en de nuestro Código político que acabo de jurar y e1 fiel y
,exacto cumplim,irentb de la,s leye,s q,ue haya di,ctado o que
la historia, todos los hataltrdnes de [a guarnllción form'aben
en [a Plaza Consti,turci'ón,y sobre 1a catrle Sarandí, mtandados dice en virtud de su ,voluntad soberana la Flonorable Asam-
¡or los generales Miguel A. Navajas y Casimiro García, que blea Geneml".
Promesa igua[ a la de todos tros dtrigarcas en potencia,
hablan encaibezado como comarfdantes de batallones e1 mo-
tfn latorrista de Enero de 1875. qnc sienten ya, al pronunci,arla, el retozo anticipado de 'la
NICARDO PASEYRO
T897. BO&DA Y TERRA ü
26

taimada fruición con que han de quebrantar, después, el prQ-


sión presidencial oyendo las exhortaciorles edificantes del
jefe supremo {e,l ejér'cito, con'citándolos a la defensa de la
pio juramento.
,!-¡an'dera y <le la patr.ia con la mis,ma unción con que d,el
Al finalizar dl año 1894 circularon con ins,istencia vef-
siones de estallidos revolu,cionar,ios y d,e pronunciam,ientos
otro lado de lc¡s A,nrtles también Leguía rec[ama a sus gr-
rnilitares.
,neralesy coron,eles años antes el juram,ento sagrado de
defender ci sucln inca o perecer en la demanda.
Para destrtfir los rumores de revolución el nuevo go-
bierno vació en el clisé inmodificado de,l léxico c.ircurxs,tan- Con toclo, se prorduce en Noviembr,e de 1895 la prinrer
invasión de Aparicio Saravia, registrándose una sola ac-
cial, comú,n a tordos los situa,cioni'sr¡los sirni,larels, una comu-
nica,oión a los Jefes Políticos de la época, la que empezaba
ción de guerra que c,uesta a los revotrurcio,narrio,s 8 muertos
literailmente así:
y 10 her.idos. liué aq,uetl,lo sim¡llem,ente un "r'ai'il" y del
cual erl jef,e revo'lucionario saoó una de,cepcion,ante exp€-
"La autor,idad policial debe hacerse temer con seve- rr,iencia, co,m,o verentos más ad,elante, res,pecto a la colabo-
ridad inexorable deil malhechor que per,tur'be la tranquilí-
ración que podía esperar de las personalidades influyentes
dad y lleve tra ame¡aza y la alar,ma al seno pacífíco de r¡tres-
de su partid'o.
tros habirtantes".
En 1a estació,n ferroviari,a de San José fuer,on encon-
Firmaba la co,municación el ent,onces ministro de Cro' ,trados por la poiicía del régim,en varios envases ,contenieu-
bier,no, que lo ora Miguerl Herre'ra y Obes. Antes como
do ,bombas explosivas, localizándose la entonces Villa de
ahora era, pules, ,un mal,hecho,r para e1 crite¡io oficialista e'l
Dolores, como posible lugar de pro,cedencia.
ci,r-ldadano nebetrdje que perturba, no la paz 'del país, sino s'u
Saravia repasó l¡¡ frorttera brasi'reíra, la corrul«¡ci<in re-
propia tranqullidad y que trleva además, la dlarma y la ame-
voluciouaria c,r'sír l¡oco <l'eslrués y el gobierno bo«lis,ta si-
rraza, no ¿ l,os pacíficos habitantes, sino a '1os aproveChados
gtr,e disfr,utaudo tlc est;r ¡nanert un anrl¡ilent,e <Ie paz virgi-
detentadores del poder. riana, recuperaclo sin cnrplear,se mayornrente a forn'do para
Para d,estrurir, lu,ego, los rumores de pronunciamientos conrs,eguirtlo.
rnilitares, dl gdb,ierno bordrista echa mano, igualmente, al
otltrigado recursio de todos los regímenes ,de su calirdad, c'la- Lo que era et ,bordlgmo
se y origen: la dernostración ostensilble de qtre la laetza
mil'itar "esrtá con e1 su,perio,r goiLiierno". A travós <lel tiem¡ro y de u'na tencl,enciosa versión cle
A tal f,in, al cumplirse el primer año de su ,mandato los acontecimientos, la crónica ), la historia ptroyectan al
Idiarte Bonda 'dis,pon,e que en la noche del 2l d'e Ma¡zo dc presente la situacióu bordista como debatiéndose en una
1895, el ejénci,to deL5l;1", con los jefes a la caheza, ¡rcr fren- a,sf ixiante irnpopulariclad y hunrdriéndose, cada día, en el

te a s,u domicilio, ,porrtando hadhas encendidas. tembladeral de sus continuos e inredi,mibles des'a,ciertos.
Esta t'Marohe au ftrambeaux" ya no se estila, no es n€- Eltiemrpo sirnpliti,ca y la his,toria ordena, después, co-
t3ris en nuestros tiempos: basta y sobra Ia üsita periódica mo por decantación mecáni,ca, las s,ituaciones pdLíticas que,
dc fcfcs y oficiales, apretujados en los jardines de Ia ,man- como las presid,idas por Borrcla, m,eiecen, a pos,teriori, Ia
1897. BORDA Y TE.RR.A 29
28 RÍCARDO PATSEYR.TO

De otra manera habtía que adrmitir.se ante la inepcia


condenación universal de [a ciudadania. Por eso la tradi- total de un ofii,cialismo así, üna incapacidad mayor en el
ción oral, cqPia corrcegida, en estos ca'sos, de la escrita, va puebllo que no supe'ra et débll obstáqdlo opuesto a la recu-
enhebrando de generación en generación tan sólo los he- peración d,e su soberanía.
,clos cleterminantes de la sentencia de rep,udi'o ya dictada Se arguye que la sola adhesión de la Íuetza arrnada
por e1 sentido moral de la sociedad. es lo que permite a núestras oligarquias sobr'e'existir a 1os
A[ p,re's'e'nte, pú€s, se tie,ne d'el gob'ierno de Borda la embates de la opinión púbüca.
norqión equivocada de que natdta hizo por justificar su ra- Es,ta afirmación e,s parciatrm,ente exacta.
zó¡ de se,r, por 1'egitirnar su f,uocionarnitento y pr'e,stigiar Pero la iuerza armad,a rnirsma con ser, corno €s, de
su administrac,ión, una torpeza int,etrectuaf sorprendente en las organizacionet
De tal suerte que en el tierm'po tran's'ctlrrido desde eI políticas de Inrdo .América, sería sacudida en la propia sim-
27 de Ma\rzo de 1894 hasta ell 25 de Agos'ta de 1897, día en pli,cidad mental con que se complica en los gobiernor do
,gue es mu,erto e1 jefe de Es,tado, n,i éste ni sus colaborado- lrecho, si fne'nte a és,tos l¿ oposi,ción democrática re a1za,¡e
re,s no han he,cho o'tra cosa que rernovar a dianio las mani- como la voluntad total\zada de la nacióru
{estaciones de su inept,itutl g'ubernativa. Y no e,s así porque la experiencia y la observación
No la realiclad, sin
e,s e,sa embargo. mulestran que e,I poder descrecional erigiido sobre lar rui-
Funciona el Parfam'ento y llen'a, con tanta formal'idad nas de la legalidad, cuenrta con la adhesión franca, la ¡im-
,como el de aho'ra, sus corn'etidos; hay un ministenio que, pa!ía manifiesta o la neutralidad benevola de un elto por-
como el gabinete act,ua,l, se reúoe, delibera y acuerda; u'n ,centaje de la opinión ambient€ que refluye, por los cemi-
Po<lcr Juldicial ni má's ni meno,s celoso de sus fueros ju- nos del éx¡.to, a oobijarse a[ calor de{ nuevo so{ que s,e le-
que e[' presente i prenr5¿ de opositción tenaz y vant¿.
'rirsdiccionales 'dianos
,b¡i'llante en su p,rédrica demole'dora, enfrentada a No incurrinlos con e,sta figura en un tropo vrllgar. De-
,oficialistas bien e'scritos, cor;rectam'ente prresrentados, ade- fine ella, con exacti,ttrd gráfica, un estado 'ambiental qr:re
más; un pueblo, en fin, unánime en la exaltad¿ condenación es la vertdadera gangrena que descompone al orgamismo,'no
,del régrn'en q,ue 1o deshonra y otro pueblo sillenciosamente ya po:títicro, sino social, d,e nuestros puebflos.
resi'gnado a su desti,no, co,laborador vo[un'tario o a la fuer- No es "erl pd'líti,co" el vonatl y eI corrompidro. No es,
za del sistema imperante y de los homb'res .q'tle 1o e'rigen en ampoco, el partidro erl inadaptado y el incivil; no es, igrual-
gobierno. ;mente, tra,iidor y perjuro el cínico mandatari¡c que exhibe
A no engañarnos, ptres ! el i,mpudor de sus desdoblamientos como si f,u,eran esq,ue-
A no stlponer en la época prresente cosa hacede¡a la rnas morales del procie,so que exige la depurada fesultante
onganización eficaz de las frlerzas opositor'as frente a un d,e una concientc,ia hon,rada. ¡No I El mal es más hondo, más
adversario, el oficialirsm,o borrdista, que no ati'na a defen- trágicame,nte profunrdo.
dcfge, a justificarse, a l,ucürar para sobnevir¡irl
1897. BORDA, Y TERRA 3l I

.j0 RNCARDO PA/SI}YRO

Todos son así patriota,s, 'demócratas, obreiistas, desinte-


I-,a raíz está en el complejo social v no en e'l político. y libre's ,en 'su's proc['a'mas, actos, discursos y proyec-
re,sarlos
Nuestros particlos mucjho han hec'ho con haber recimentadr-r tos en tanto la patria, la demo,c,racia y los obre'ros son objeto
conceptos históricos integrales como los de nacionalidad y dia,riaiment'e de a'tentadlors y ne,gacion€'s q,ue sólo traducen la
ciudadanía; como los d,e gobie'rno y orposición. satisfacción de reacciones egoístas y la declinación del ver-
Pero nuestros gra.nldEs p'ant,i'do's tra'dicionales son per- dadero espiritu d'e li'bertad.
turbados en s,u evqlulción natnrral por la influencia contra No asombre, por tlo )tanto, que €n Agosto de 1895, al año
revo'.ucionaria, que no se sitúa, exclttsivalnente, en nin'guno y nreses de as,urnir fa p'r'esidencia Borda, arp'a'recie'se en [a
de los dos bando's sino que, como un virus migratorio, infecta pre,nsa de oposición de la cap'ita'l ell anunc,io 'siguiente:
a \a vez amrbo:s cam'pos de lucha. 'lClub Cdlo,rado,Rivera. Se invi'ta a ,los señore's socios
-
y a1 públirco para conferencia gue dará el señor don Fer-
,la
Blancos y cofiorados no tienen 'di'feren'ciación gené'rica'
Aparte de una leve coloración "liberal" en (rateria religiosa nando Sie,rra. La confere'ncia versará sobre el tema sig'uien-
que pupde advrerrtirse s¡ s'l p¿'rtiiklq '§srtrora'do, no puede o'vi- te: "El Partido Coloradro no' gobierna".
darse que s,u rcatlcl'i '1o 'ep'ónimo, Ven'an'cio Flores' embraza el H,a,ce apenas una srema,n¿,, sin emtbargo, qrue eil cflub na-

sstandar.te cle rla cruz, o,fendirlo el signo sagraldo por la here- cionalli,sta "Jrar. P. Salvañach" había 'siido as'altado por mar-
gía de ,un gobier'no rblanco, e[ de l]ernard'o lJ'e'rro' cianos de gorlirtla coflorada ante [a a'b'sorluta pas,ividad de [a
po,licfa.
No hay, puels, 'ulna deli'rnitación socia'l categórica que se' I
pare a los banrdos ¡ro[íticos ya vertehra<lo's' Ni 'uno' es li'beral I Alr,ede'dor de Borda como d€ otros pre'sidentes y de otras
situacione,s s'emejantes, se agnlpa' Pues, un conglomerado
'h

n,i .,1 otro cat<i'ii,co; ni avatrzadro és'te o reaccionario aque'l' Eur


{ político que no ,es, en sínte'si's, más que la tradtric''ción objetiva
fo¡ma 'la,rvacla, 'si acaso, 'existe urn agru'pam'ient'o de itmpul-
,de ,las osotlras fuerzas di,socia'«loras qu€ se oPonen a[ irnpe-
sioncs afines qure no salern de,l elstardo dnforme en que §e
1
I
agrúpan las ,colonias de infusorios eln la gota de agua'
f
,! ri,o depurado d,e [a justicia social.
Debajo dellas actit,udes de arnbos partldos son, Por con- I
¡
B'lancos y cofiorarlos sirven esa si,tuación. Más propio
.si¡¡uien,te, las {uerzas negativars derl rprogreso soc'ial las que se ¿
fuera designafle,s con' ila denorninaoión común a todos los
,rl*r.n, ,las c1u,e imp'onen [o's efectos 'de s'u oculto señorío' Y comtxmcntes de rla so,ciedadl que no rhan hecüro de sus vidas
asi, repet'imos' no es venal el 'p'dlitico 'sino el hornib're; no es construrccioucs artrtoniosas al se,rvicio del hien; ni han disci-
,traidor y perjuro ei funci,onario''sino'la 'personi'ficac'ión de los plinardo s,u,s ittstitltos. ni'ecltlcado'sus impu'lsos'más de lo npce-
ferimentos antisocial'es que rePr€rse'nta' sario para ,disitntr ar 1a permanente a'peilación de su presenEla'
Y e,l gobier,no ale Borrda rlo rۤr Por esa ca !sa, 'una ol'igar-
Alh.ededor de amtros han de agrupar§e, en consecu€ncia, quía ciega y ,torpe, covÍtfflo, cada dia más honda, su Propia
,los caract€res afine's, los apetitos com'ufles: 'los ignor'antes'
fosa. Es un gobi'erno esptr'rio, fpero q'ule, prrecisarnente, se de-
lanzatdos rdi¡ectamente y sin embozo, al logro de sus fimes; e's venal, pero brega por-
liende de ,la oscuridad de su ori'gen;
y flos ftrombres ilurstrarlos, in'strrumentos afinados de la reaE- que se le crea honrado; es pertttrbador del progreso. nega-
ción, nraestros ell el arte del disimulo y la hipocresía'
?') RICATRDO PA,§EIYRO 1897, BORDTA Y TE.RRA 33

ción de la pro,spteridad, ,pero thace obra y se ernrpeña en apa- rn,ular Ia fabricació,n local r1e bol'sas y Ls,e exirmió de to'do de-
r,ecer a los ojos ,dle ,la o,p'inión ace'lerando'el ritmo de1 progrerso rec,ho a la ilqpo,rtación de 'fibra vegetal destinada a la fa-
y volcanrdo sobre el rpaís e'l §uref;no ,de ,la abundanicia. bricación de pape'l; como asirnis,mo se au,tor,izó la devolución
Veamos sri con un breve resumen de'1,o que rhace a1 res- ddl im'puresto intern,o de cons,umo a 'ias fábricas nacionales
peoto podJe,mos trasmitir a nuestros lectores el s€'creto de por por la cantidad de cerveza q,ue exportasen.
qué esta ,Clase de situaciones no s,e dErrurnban a1 nacer, ni son La, Grandiosa Exp,osíción Interna'ciornal de Chicago
barriidas de un ,manotón ,po,r ,las recias y fundada's oposhiones brinda al situacionismo bordista magnífica oportunidad para
poprJlare,s que suscita'n. desrtacar .la eficiencia d,e su gobierno.
En 1895, ;ba;io eI gobie,rno de Borda, s'e i,nici¿n los estu- El jefe d,dl De,partam'ento de Premio,s, sección Artes Li-
dios para 'la constru:coi,ón derl Pue,r'to d'e Mon'tevideo. La em- h'erales, J. M. Gibb,o,ns, estamrpó en ,el álbum qu,e estaba a
presa Luther los inició de acuerdo a 'un rcontra.to ppr e:l cual la en,trad¿ derl pabellón, e'stas palabras:
el Estado le a,bonaría tras,urna de 110 mil pesos. Desempeña,ba "En rnedio de tordo lo 'rnás adelantado es,tá la pequeña,
el rninisterio, de F)omento entonces, do,n Juan José Castro, pero vig,orosa, gigant'e lJruguay".
curya ilustració,n no podía ser ,puesta en duda. I-a vicepres,idente de1 ,Congreso Generafl, Seoción Ednt
-Bajo el gobierno de Borda se construyero¡ fr Puente¡ en cación, b,aronesa de Wil,son, ,es,cribió esto, ortro,:
dl airo 1895 y 65 en 1896 ,contra 18 en ef año 1894. "I-oor arl l-Iruguay y a sus hijos que han invadido de
Se rreparan, ade,nr,ás, 314 caminos cn 1895 y D4 en' l§6 fleno ,el tlerrnoso 'caimin,o d,e la ilustraciórn y ef 'trabajo".
contra L24 'sn el año 1894, antes de iniciar'se dl nuwo go- Tra,nsportérno,no,s al amibiente y co,miprendamos que
bie¡no. k'albrian de ser inse,pa,rabtles el eú,ogio a[ Unuguay y [a co,n-
Es el gobierno de Borda eX qtre c¡ea dl Departamento sid,eración de q,ue su progr,esoy engrantd'e,cimi,e:nto eran obra
de ,Ganadería y Agricultura adscrito al Min'isterio de Fo- excilusiva de s,u gobierno.
firentro. La creación comrprendía tra ,refund,ición en un solo Tal ctral ocurre ahora.
organismo rde la Oficina de Inrmigración y Coloniza'ción, Es' Cufbierto ¿1 B¡¡r¡rréstito Uru'guayo por $ 7:834.900 para
auela de Agrircu,ltura de Toledo, Sección de Marcas y Señates tla fu,ndación drerl Banco cle tla República, éste empezó a fun-
y Oornisón Nacionaf d,e Avicu'ltura. ,cionar en, Octtrbr,e de 1896 De su tprirm,er Directorio forman
En 1895 se flevó a cabo lia Gran E>qlo'sición Nacional que pai'te José María Muñoz, Eduardo Roland,q José María
patrooinó tla Socierdad Rural. El gobierno prestigió el, acto y Irisarri, Federico Cap,uro, Diego Po,n's, Manuel Les'sa y
el ,Congre,so de Ganadería y Agric,url a, que s'e reunió en e[ J,uan Maza. Preside e] prim,ero de los no,rnbrados.
locail de la Exposición bajo [a ,pre,sidencia dr:l doctor Carlos Y por no ser ,menos que ell ,de ahora, tarnbién'el gobie,r-
María de Pena, votó i'miportantes ponentcias. no d,e Bo,rda anuncia un superávit, de lab,oratorio, en 'eil
En 1896 e1 gobie'rno de Botda aprtúeb'a los estatutos de presupuesto. Fln s,u n:,e,nsaje a [a Asarnbl'ea en 1895 s'e ,ufana
,la Refinería y Destiilbría de1 U'nuguay; r'ebaia el irqpues'to de que el ejer.oicio 1894-95 había cerradio con un 'défi'cit de
a la irnlportación de arrpi'lllera 'dél 25 olo a[ 10 olo para esti- $ 1:042.81. En ,carmbío -
agrega
-
pata el ejer,cicio surb-

3.
/

RICARDO PASEYRO 1897. EO.R,DÁ, Y TERR,A 35


3.i

s{§uiente presenta ,un pre,sup,u,esto de $ 13:645.000 con re- histórica de don Franois,co Bauzi y acorrdó al ,pintor Carlos
c'urrsos cafoulados po,r $ 15:350.000 o 'sea urr superávit de
Ma¡ia H,errera una rbe,ca d,e fXO pesos anuales para perfec-
cionar ,sus estudios en Etrr,opa.
$ 1:700.000.
Se sab,e, no ob,stante, a qué quedaron red,u,cido,s e,sos Y 'r.rni,endo [o bil,lo a 1o útil, el régimen b,orrdist¿ d'ispo-
saldos favorables de [a administración ! ne, tamibiién, nada me,nos q,ue po,r iniciativa de la Jefatr.ara
Otro dato esrtadístico des,conoertanrte [o o,frece [a cre- Política de Mont'evideo, [a rcreaci,ón d,e dos J'uzgados de Ins-
ciente niqueza del país bajo un goibierno 'de 'r,r¡ina. trucción para ,entender, como su noñbre [o úndica, exclusi-
En efecto, en 1895 denrrncian los conitribuyenrtes orien- várnrenrte en la instru,cci'ón de [o,s' sumarios.

titres un ca,pital de $ 138:733.1Ü y al, aío siguiente ese ca- La Asanr,blea bordista "6¡¡'s¡¿.112$" d arnbiente admi-
pital sube a 143:3D.920. nistrativo, estabtl,e,ciendo, que dl gobi'erno no ,po'día otorgar
El capital extranjero por sü pa¡te no huye, pues su- ,contratos de alqtri,ler o arrendamiento rpo'r rnayor tiempo que
mando en 1895 $ B7:A72.84A al año sig,uiente se fija en el ,corresPondtiiente al período pr'es,idencial del o'torgante en
norrnbre del Estado; ,o,tra ley d,i'ctó 'de'dlarañdo lpropie'da'cl ex-
$ 137:555.801.
Leyes, de juhiilaciones son, presentadas en 1896. El Dr. clusiva de los ibeneficiarios, el seguro de vida cubierto a fa'
Antonio Ma:,ia Rordríguez p,roy'e'c,tó la de tro,s enapleados ci- vor de los ,herederos, por o ,que ilo reslponde, en ningún caso,
vifes en general y e,l D,r. Eva,risto ,Ciganda para llos Inspec- a ilos cródritos ,qiue ,eL ca,usarnte dejara 'pendientes a su falleci-
tore,s y rraestros de Enseñanza P,rimaria,. Esta última fué rniento. Erra runt¿ ley tde'stinada a estimular el seguro de vida.
votada e'l rn'is.mo año que se ,presentó. fgualmiente es, aprobada otta inirciativa destinando 4
Es el gobiernor de B,orrda, ade,má,s, el que cede una ,cha- hectáreas d,e te'rrenors fiscate'sr en Punrta CarrEta para la
,aonstru,dción de la ,Cárrcel de Mujeres y Asilo CorreccionaX de
cra fiscal de ,márs de 10O hectáreas situada en Paysandú para
la f¡.rtldación de uía escudla agro-p,ecuaria. Menor,es.
En Marzo de 1896 se ,inau,guró ,el Instituto de Higiene I-Ina co,misión de señoras presidida poldloña Matifde Ba-
Experim,enthl, habiéndors,e contratado al ,efe,cto al doctor Sa- ño,s de Idiarte Blorrda, €srposa dol presidenrte, organiza sus-
narel1i, ,una ,eminenrcia rnfd,irca, al que se 'le paga un sueldo cripciones rpo¡rullare,s y kermeses con tal fin, recol'ectando ta
anrua,l dle fr mil francos y 4W pesos men'súa;les rpara gasto,s suma de $ 32.038.
de 'laboratorio. Era el Ur,qguay el prim'er país de América La Asamblea General bordista, a pedido de 'la Junta Eco-
qr:re plarrteab'a un estable,cimiento de su c'lase. nórnica 'd,icta la ley ,oreando 'd escu'do de armas de la ciudad
Por primera vez, tarnbirén, s,e apilican en el Río de [a de Montevideo.
PXata los ra¡ros Roentgen y corresponde ese ihonor al c¿te- E,l dorctor Alberto G6mez Rruano, director del Muse,o y
,drátirco rde Física, doctor Claudio Wi'llirman y a su ayudante, Biblioteca Pedagógi,cos, de'slpués, de un viaj'e a Estados Llini-
,dos obtiene autorizaci'ónr para adquirir cinco estaciones me-
el bac,hilller Angetl Maggiotro.
La legislatura bordis'ta votó también una subvenci'ón de teordlógircas : una f,ué destinada a Mercerdes, otta 'a Rivera y
tres ,mil rpesos a Ia librería Barreiro, casa editora de la obra las tre,s restanrtes quedan en [a ,capital. Poco des'ptlés la misrna
36 RICAIEDO PATSELYRO

1897. B,OR,DA, Y TER,RA 37


Asamblea bordista crea Ía Dirección General del Servicio Me-
teorológico Nacional.
Véase, en efecto, e,l tenror rde Jas ja,c,u[ator,ias palaciegas,
A su vez la Junta Ec,on,ólmica Administrativa, hechura
en esta ,rnuestra ,que extraelmos derl diario ofi,cial ,.La Na-
fiel dell régim,en y s,u máximo reipr,esentante (como ahora)
ción":
no qued¿ atrás y pro,cede a aflt impo,rtante reforrna en el
Laboratorio Químico Municipal, dividiéndolo en d.os seccio- 'Anrte la sonrisa bo,ndado,sa del Pr,esidente Idiarte Bor-
ries: tla qruírnica y la ibac,terioflógica. No pare,ci,endo poco [o da y su, amdbirlidad exquisita, no ray ni rpuerde hab,er ceños
hecho a favolde ,la saln¡id 1rutUli,ca, s,e dirige dle nuevo a rla
funrcidos ni la;bios apre,tald,os".
Asarr¡hlea para pedirle ,una le,y que reglamente el análisis d.e Y es, qror ventu,ra, ,menos optimisrta ,la prensa ofi,cial de
las su:stancias a{im,enticias y s,e apliquen sar¡ciones a lo,s co- enrto,nces que lla actuall para apreciar las ,cond,iciones del país
rnercianúes rrn oristas y ,mi,nror,is,tas que ,expenden mer¡cade- bajo el régi,men ?

rías no aptas ra erl cons,úmo. Leamos .atra vez "La Nación,,:


Ell Ejeicutivo bordista, por no, ;ser menos, resueilve favo- "Poco a poc,o irán saldándose los presnlpu,estos venci-
rable,mente una gestió,n rdel entonces Con,sejo Nacio,narl de dos y cuando esto se ha¡ra ve,rifi,cado, e,l tesoro nacio,nal, ile-
Higiene rpara que se de,olare obligatoria para ,los médicos la jos de estar agotado pres,enrtará el fenórneno de g,ua,rdar €n
denuncia de e'n,fermedades infercto co,ntagio,s,as; y lllevando reserva una s,uma por cierto no despreciable qure co,ntribui-
aun más allá ,su ,cel,o ,en la o,rganiza,ción de la [udha contra ,los rá a reilzar el crédito de la nación".
flagetlo,s, en 1895 refurnde e{ Consejo de Higiene públlica v Ia "En res,urnen en otra parte
J,unta de Sanidad Marítim,a en una sola corporació,n que es
- d.ic,e
neral económica ofrece - úa situación ge-
caracteres generales de firmezt,.
el atru,dido Consejo Naciona'l de Hi,giene. En cambio, véase respecto a ,la verd,adera situa,oión de
'
9oé ,rnás ?. . . H,emos espigado sobre la obra bordisita las ,finanaas y a, la, Ínanera cómo se saneaban, esrta revdla-
rnás salienite y sugerirdo,ra.. La entrmeración o,bjetriva, sin adi- ción lt¡eoha por un per,sonaje de ,la época, el doctor Car,los
tamentos tprestigiadores, irnp,r.e,siona, aun afhora, bastante María de Pcna, sobre la contratación de un emprés¡tito,
bie,nr. Es, ,el anverso de ,la rnedafla. Piénsese, ento,nces, en Ia uno de tanrtos, con que se expoliaba al país,
prensa oficiali'sta de ,la época glosando estas r:earlizacio,nes Dirigiéndose a[ cóneufi ingfés que inforrma sob,re el in-
positivas rdel ,gob,ierno,; imagínese, un rmomentq a fa claque cierto destino de un pnéstanao obtenido de la casa Baring,
y a I,os adtnira.idores €§pontáneo,s que tos hub,o, tarnbién de Londres, contesta aque,l,:
laborando y rnanfpulando ,estas - realidades y naúchas
-otras, "Nadie rnejor que los Baríng podrían informar al se-
cornl e,l ,estímulo de ,la p,rebenda o de,1 entusiasmo ver-
ñor cónsul solbre el rtrmibo de los 9 mirllones... Los,Barinrg
dadero y ,se deducirá que hasta 1as peores, oligarquías se tricieron el emlpréstito a 84 y ,medio por ciento y cobraron
apoyan, en nuestro m,edio, ern atgo que no es tan sólido co- adernás por comisiones, corretaje, etc. $ Sgg.4l4.& Se
¡no Ia fhor¡rada qpinión pniJbrlica; rpero que, cilrcunstanc,iafl- quedaron, pues con $ 2:055.4,14,&',.
mente qás ftr,erte o más há)bi,l, fa vence y la desplaza.
La impresión dorrninante en Montevideo es q,ue los di-
neros rp,útilicos no sólo se, adrministran mal co,rno res,ulta de
1807. BORDA. Y TER,RA 39
38 RICAJRDO PA.SX¡Y.R.O

oho sea por citar ,un solo ejen:iplo, el escandaloso "aÍfaire"


la prec,edente ,confesión de1 do,otor de Pena, sino que se de-
de la Adr¡r¡inistración Nacional de Cornbu'stib,les A[cohol y
rroshan y dilapidan.
Pontland?
No ,son ya "El Nacional" de Acevedo D'iaz ni "El Día"
En cuarenta años de evolución 'la olirgarrquia natíva na-
de Batlfle los órganos periordísticos que sostienen una fun- da lra aprendido, pues, en la aplicación de sus métodos de-
dada y lbril'lante campaña opositora al respe'c'to: la prensa predativos !
de carnpaña y ,otra de rnenos sigrrificación de la ,carpital mis-
ma, arrecian sus ataques a'l gobierno. y ahora: militarismo
Antes
Un diario de Salto, "La P,rensa", bajo el título de "Y
hablan de Santos!" dice por ejemplo, esto:
I-os resultados de la investigación co,rnetida a una "co-
"Er¡ sólo [,os úl,tirno's días del rnes anterior el honrado
m,isión de la lista rnilitar", arrojaron en Octurbre de 1896, la
don J,uan Idiarte Borda, Presidente detl Uruguay, ha inver-
exisúencia de dos rmi,l seiscientos treinta y seis jefes y oficia-
tido 190 mil pesos oro en la comapra rde propiedades.
les en e'l ejército de la Repúh1ica.
"Si sigue "aho,rra'ndo" ,con ta,l faoi'lidad, dentro de un Un periodista opositor hacier¡do núm'eros sobre la base
año s'erá rnás riico ,que Santos, de quien se dijo 'con raz6n,
de tafles, datos, sacaba en limrpio que, por cadt 37 cir¡dada-
que había vaciado las ar,cas Estado en s,u ,caja particular".
'del no,s hábiles que entonces hatría en el país, corresrponde un
"Montevideo Noticioso'1, r,efiriénrdose a los es'cánda,fos jefe u oficial r'evistando e'n el escalafón y ganando sueldo.
denunciados con rnotivo del alojamiento de pasajeros en la
Isla de Flores, hace una cruda pubtri,cación que encabeza con Se jus,tifica tamaña anorma{,idad teniendo en cuenta que
estos e'locuentes títdlos : es el ejército, antes y ahor4 fun'datnento pnincipal de estas
situaciones.
"Los piratas de ,la Is[a de Flores. Robando a 1os pa-
sajeros. quienes es la cárcel
- Un Gobierno co-
?
Arceptemos, pues, sin asornbrarnos, la realidad que nos
- ¿Paru
rrompido".
- pr'esenta la "cornisión de la üista m'i'litar" y ad,mitamos,
igua,knente t¿ ,mut,ua devoción con que ejército y 'oligarcas
El firnat de la publicación dice así, dirigién'dose a los go-
celebran sus nupcias, por medio de urna ,permanente exaación
bernantes bordis,tas, tal rcual, aunque en términos menos
al ,caudal púb[itco. No han d'e faltar, tamporco, cerernonias ri-
crudos, la prensa de oposición de actualidad se encara con
tuatres, juram,entos a la bandera, meda'llas alusivas u órde-
los representantes de1 régimen ante el descubrirniento de n,es de1 día de a[,tiso,ttante vo,cabular'io, como escritas sobre
escándalos adm'inistrativos similares' :
el tarnbor y bajo el retumbo electrizante de la batalla . . .
"El l-azareto produce noventa mil pesos 'mensuales. - Natura,l es,, por consiguiente, que la prensa o'ficia,l con-
Esltán ellos interesados en el 'nego'cio? No quisiéra-
'mos ,cre'er[o, por rnás ,que las apaniencias fo dan a entenderl'' signe fa noticia de que el 1.c de Marzo de 1895, fos jefes y
oficia'l,es del batallón 3.0 de Cazadores regafan al Presidente
No adrmite, el leictor, similit'urd sorprerlrdente entre la
de la República una medall¿ de oro con esta inscripción en
ciistencia I la demuncia 'de ese nego'ciado con 'la existen'cia
o1 ariverso:
y los términos en que e§ denunciado en nuestros días, y di-
T

+c RICA¡RDO PA§EIYRO 1897. EORDA. Y TE]RR,A 4t

"Al enér,gico y honrado Presidente rdon Juan Idiarte Un só'lo artículo suyo bas,taria, qaizá"s, para dar al1; ,pr,ese'nte
Borda, en, su pri,mer aniversario". voltrrnen el tono ,co,mlbativo que desea,mos no tenga en esta
Y natural es, en ,consecuer¡cia, que 4O años después ,se aprretada sintesis de una época gubernativa, tan parecida a
haya es,crito 'esta "orden de ,la Inspección General del Ejér- la actuall en lo administrativo, en lo ,político y en lo moral.
cito". Pers,iguiendo un fin diidáctirco y edu,cativo a la vez, al
"Nada ha de faltar en el reliev,e de alto ,mereoi,rniento estahlecer el paralelismo de Jas épocas no queremos para la
con qrue [a historia &ra de |uzgar a este gran ciudadano que de la oligar,quía bordista, Ia desventaja de s,er evocada bajo
gobierna a 'la Nacién, pero si unr detalle debiera comty'l'etar el asedio ,constante de una prensa viril que no le da al,ce y
su inm,ensa personalidad de estadista que sólo asrpira la fe- abre ,sobre sus construcciones, reales o ficticias, un fuego polé-
licidad y engranrdecimiento de su patria, este vil atentado mi,co 'dernoledor.
habría rubricado en forma magnífica al ,cabatrlero sin tacha". Bi,en es ,cierto qrue, entonces, la libertad de es,cribir no
Termina la "orderl", aludiendo a un próimo desfile suf¡ía Ia mengua legal y rnaterial de una legis;lación repre-
m,i,litar, di,ciendo que "el sus,crito espera que vosotros ,tra- si,va perrnanente. No exis,tía, en ,efe,cto, una ley de prensa
duzcais en vuestro porte mar,oial y en vuestra continencia destinada a coltrirbir y amedrientar por el procedimie,nto in-
la expresión de gratitud y adrhesión al Presidente de la Re- d'ire,cto de una arnenaza constante sobre lo que es la ftrente
pnilica". (Junio 3 de 1935). de producción del diario mis,mo; su taltlér. ,
A través de 4O años no só'lo se tocan, todavía, las cur- Y Ia clausura del taller de ,un diario .rnoderno, por la es-
yas máxi,mas de la rusti,cidad espiritual acusada Por riues- tructura especialísima <le ,su administración y costoso sos-
tros 'miüitares a sueldo sirviendo de ,sos,tén a las oliganquías tenirniento equivale, ¡rrácti,cam,ente, a la declaratoria de su
que desfhonran a la Repú1ica, sino que r¡i su mis,mo leqgua- nuina sin benefitcio p&tarlros ideales que rqpresenta o defiende.
je, inspirado en las ideas primarias de inferior incond'icio- Esrte fenóm¡eno de la gran pr€nsa actuall gue acepta sé
nalis'mo, ,se pu,le o rnodifica. coordicione su apari,ción a exigencias liberticidas del rpoder
Ni en tiempos, de Borda ni en tiemrpo,s de Terra cambia, des,bordado, no es exc0usivarnente americano.
pues, la absu¡da mentalidad de[ ej'ército: sumiso mastín Loyendo a Bar,thélemy en un comentario que dedica a
eahado a ,los pies del dueño. Ia situación de España bajo la dictadura de Pri,mo de Rive-
ra, encontramos esta opo,rrt'una alusión:
UI "La prensa está tan estrictamente amo¡dazada como en
Prensa y opinión Itaflia. Los diarios continúan apareciendor p€ro con ,prohibi-
ción de ftrablar de política. Losr redactores polí,ticos han sido
De exprofeso no ,hemos reprodtlci,do en esta lijera eve ,licen*ciados. La ,cens,ura es rinexorabie. Se léen las misrnas
eación del régimen bo,¡dista un sotro artículo de Acewdo rrlsas en un diario republ'icano, conserva.dor, monárquico o
Díaz, luchador de ügorosa pluma y acerado temPle qr¡e lle- liber¿I. La única protesta del rpriblico €,s permanecer fiel a
nó páginas ad'mirables del periodismo o'positor de la época. un diario deterrninado en razón d,e su bandera, aun cuando
RICA¡B'DO PASEYRO 189?. EORIDA Y TERR,A 43
42

Lsa bandera es,té momentáneamente arriada, e§perando ol


dia en dlesPtegars,e nuevamente"'
'El r,manece indilerentea este amordazatnielt.
to de I No se trleva a cabo ninguna tentativa de
diario clandestino".
Las palabras finales so'n éstas, qrle re'producimos üte'
ratrmente para que 'el ,lector aprecie en todo snr vigo'r el va-
1or ,ahocante de [as expresiones en la l'engua original:

m,ientto.
rCreemos, rpues, firme'meflte,qtle si la prensa oposit'ora
adopta una cómoda postura de resistencia pas'iva ante la de nuestros días sólo debiera afrontar en su lu'dha
con
,el
sagrada libertad que se tle cenoena. de perseou'ción y
a'bsolutis,mo político el riesgo personal 'la
No era esa, sin embargo, fla con'duota de la 'premsa es-
pañola ni la ddl pueb,lo que la leía, cuarenta años atrás' Re-
la venganza, el periodismo uruguayo 'cle la hora rati'ficaría
cuérdese, tan sólo, Ja figura apostólica de Nakens, el direc-
tor, propietari de "El Mo'tín", ura-
do y jamás p !lue, con redobl 'trle-
vándose consi óra Y el tal'1er, e la
hoja revolucio,na'ria, úroy aquí, mañana allá, lfenan'do los am-
biios de España, a pesar de ,la pequeí,ez de su presentación
tipográfica, con el eco de su propaganda inextinguible'
To'davía en tiempo,s de Borda 'el mayor peligro a correr
por la prensa opositora consis-tía en el riesgo personal 'del
periodista, expuesto al puñal a'levoso del as'esino por comi-
sión o al dis,paro anónimo hecho sobre seguro con un ar'ma naria.
policial, y desde fas rnismas so'mbras que pro'tegieron a los
matadores de Tomás But er.
Recordemos que la 'primer clausura de "El Nacional"
de Arcevedo Diaz se produce en 1895, a'l invadir, tamhién por
pri,rnera vez, Arlaricio Saravia, es decir, estando ya el país
conntllsiourado por la revolución' Debe constarse, a'demás' editoriales de "El Nacional"'
1

1897. BORTDA Y TERRA 45


ÁA RICA,RDO P.A.SE}YRO
vertebral, impidieron, sin embargo, que la conciencia revo-
Y b'ien, a p,esar de toda esa ventaja, qué mejor ambien- Iucionaria se arbries'e camino ni ,que el destino de r¡uestra
te tiene Ja oligarquía de ftroy sotbre la de ayer ? democracia se cumpliera e,n la total y armónica ,convivencia
de la inspiraci,ón que concibe y el brazo que eje'outa.
¿ Qué más hace este gobierno que erl que, como ya he-
,mos visto, req,uiere varias páginas de este volumen pa,r¿ B5 rque no trray oligar,quía, po,r bri,llante que sea, que no
contene,r una lijera enurneración de s,u obra en materia so'- se merezca urLa revolución; ni ante ningrin oligarca, por
cial, ,legislativa, ,cultural y e,conómica ? rnenos oligarca ,que quiera ,ser, ha de detener el pueblo el
Si ¿lguna diferencia existe habrá de confesarse que se rudo golpe de su ma,n,o vengadora.
anota a favor ,del bordismo y no del terrismo, el que por ac-
úuar en un rmedio superio,r al de 1895 y lp,or surgir su jefe IV
de ele,cciones ,li'bres y puras, cabe exigir,le, aun en la Perpe- Un ,revolucl,onarlo de lE97
tra'ci,ón de los, atentados de lesa sob,eranía, si no mayor,
cuando menos igual entereza en las actitudes, a 7a vez qae Don Antonio Paseyro, oriundo de Melo, llegó a Dolores
una deco,ración más inteligente aderezando Ia cambiante es- cúando tenía 18 años. Su padre, gallego de origen, p€ro €S-
cenografia de sus simullacio,nes democráticas. pañol de alma, des,empeña el consdlado de su ,país en Mon-
No es así, sin ,e,mbargo. Y a pesar de no ser así, la con- tevi,deo poco' des,pu,és de instalado en la capita'I oon el pro-
ciencia revolucionaria pudo ,concretar su anihelo contra Bor- pósi,to de ate,nder ,Ia ed,ucación de sus hijos, que pasan de
da en 1897 y no 1o pudo, en 1935, contra Terra. El 97 esta- la docena.
lla incontenible contra Borda ,y ese mismo aíto, adem'ás, pa- Es un hogar modelo el süyo, impregnado de la clásica
ga éste con la vida el permanente deiafío a la ci'udadanía austeridad de los de antaño. Don José Paseyro, en las frías
que irnpor,ta su gobierno. rnadrugadas de invierno, se levanta a rlas cuatro, de la maia-
La innegable brillantez y oportunidad de algunas de na, enciende la ,enorme y acogedora estufa y ,sentándose a
sus, iniciativas; Ja adihesión del ,clero y ,de las clases pudien-
la cabe,cera de la ,mesa, amp,lia y cordial, de'l comedor, toma
,Ia ,lección, a sus ltrijos, da un vistazo a 'los, deberes, corrige la
tes; Ia balxnza comercial favorable; la ayuda indirecta, pe-
.ro no menos eficaz, co,mo ahora, de 'los in'diferentes en ma- dicción de los que ini,cian lo,s primeros balbuceos de los idio-
,rnas adquiridos.
teria cívirca; el incienso diario que ls ,quema una prensa r,ui-
dosa y e,fectista, ni menos iliábil ni más to,¡pe que la que hoy Antonio, su décimo cuarto hijo, rebelde t la disci,plina
se organiza ,para exaltar las virtudes del "Excelentísinno Se- paterna ! ala del ,cotl,egio, pero ya armado de 'los, elementales
,conocirnientos para su edad 17 afios decide abandonar
ñor Presidente de ila Reglblica", su patriotismo, su bdtl- - -
,los ,estudios ,y ser em,pleado de rco,rnercio.
dad, su taitrento, su elocuencia, su austeridad, su prestigio;
ni las manifestaciones de adfhesión fraguadas con elementoB Poco ,dura, sin ,embargo, en su nuevo destino. Un buen
burocráticos lbajo la a,rnenaza de Ia persecución o e'l despido; día, agregado al ro,l rerglamentario, emlbarca como sirnple
nl e¡a pegejosa adherencia con que el ejército de llnea se rnarinero en un ,paylebot y destpués de s,eis días de navega-
rm¡lglme B estes situaciones y se convierte en su cotumna
r#

46 RICARDO PASEYRO \ 1897. BORDA Y TEA,RA 47

,ción a vela, dese'mbar'ca en Dolores' Tie'mpo después su Pa- l surc:rron sus aguas. Prodigio de Ia época se opera, en este
dre se ,traslada a esta villa y de 'potencia a p'ot'encia, no ya I olvidado rin,cón de la ltc.llúbliica, la trausformación fáustica
de padre a hijo, se plantea la explicación definitiva: el retor-
( de las encrgías mist,eriosas de la naturdleza y de los hom-
u'l hogu bajo el amparo de la autoridad paterna
o la bres incidiendo en una misma interse'c,ción 'de los caminos
"o
.-r.r.i,pa"ión y la l'uoha por sus cabales con la condición de la vida.
inapelabl,e rtre honrar el ape'llirdo que se lleva o irnpo'nerse'
de Don Antonio Paseyro tiene entonces 4O años de edad.
propia trnaflo¡ el desagravio vindicativo' Su fino perfil y su rporte delgado dan 'el seLlo característico
Don José Paseyro debió regresar solo a Mo'n'tevideo' de toda su vida: el vigor ágil y equilibrado que tras'ciende
,de sus actos y de sus ideas.
El austero es'pañol trae dibujado sobre la frente el ceño de
una l,unzarLte'PreocuPaci'ón. Dormina perfectamente varios idiomas. Con "monsieuP
Veinte años deslpués, en 1895, era la froy ciudad 'de Do- Dalb,our, técnico vinicutrtor de su "Adelia",
"51¿frlsqimiento
lores ,un vil,lorrio ,cayo ttazado urbano se extendía' des'pa- habla y se escribe en impecable francés; con "míster" Hu-
rramado y rústico aún, sobre el filo de la lo'ma que en suave rry, entendido en motores y encargado de sus rnáquinas tri-
pendien,te se eleva desde la costa del Sa'n Salvador hacia
el illadoras, dialoga en inglés correcto.
Sur. Las primeras familias de agri'cultores que pue{rlan la
sin pavimentar, arenosas en verano y en lnvler-
tCa'lles hoy florecie,nte Cañada de Nieto é1 las ha traíclo poniendo a
no intransitab,les, se hrunden' 'en el sile'n'cio <le aidea que cu- su al,can'ce los otros dos elernentos básicos de 'la producción
bre al caserio, recostado en tranquilo abandono sobre el dor- cuando se ,cuenta ya, con el trabajo: fa tierra y el capital.
,so ,de la loma. Ac1udl ,co,merciante e inclustrial progresista l-ra <lc rc'pre-
IJn buen día la quietud imp'erturbable de Ja ribera es ,sentar, tambión, en el ¡ilano dc la ciutladanía, la inr¡uietud fe-
interrumrpida por la fobril actividad del esfuerzo construc- cunda de ttn,a gencraciórr qtle no sc ,crln'forl¡a con el éxito
,del esft¡erzo aplicrlo a lits etmXlresas q'u'e sc 'destinan al ex-
tor que levanta, sobre la costa rnisma del río, e1 ttazado
,geomrétrico de un'a fábrica. Tres pisos de rojo 1¿d¡illo' un clusivo fin de ganar dinero.
,..r.o ,*"rallado de concreto y una' enhiesta y desafiante Personifica el tipo, ya casi 'desapare'cido, de la burgue-
chirnenea irru'rnpen, coimo Por arte de magia, de entre sía nativa revr¡l'ucionaria, subordinada en sus impulsiones
la
selva, todavía virgen, del San Salvador' '
I
,morales a la mis,ma preclcstina'ción con'que gerleraciones en-
A1 silbato de la fábrica, heraldo agudo y monoritmico teras ,han lu'c,hado, sin saberlo, dbedeciendo a 'las causas más
I

de llas hélices' l profundas de un dcterminismo histórico insondable.


ldel progr,eso, ,sigue pr,onto lel ruido augural
rprolo,ngan'do sobre tierra firme la cadencia runorosa
de sus La febril actividad comerciall y el medio rústico en que
,es,pirales de agua. a.ctúa no a\canzan a lborrar de las lecturas clásicas de un'a
Nadie estudió la aptitud del agro para proclucir el trigo' enseñanza m'edia, si no tan vasta como Ia actua"l, más den-
pero a'lzó sus paredes el molino; no estaba, tampoco' baliza- sa, la honda vibra,ción de belleza y de lucha'que dejan en su
,áo el curro <lel río, pero las proas, atrdaccs y triun'fadoras' espíritu.
48 RICAJRIDO PASEYRTO 180?. BOR.DA Y TERRA 49

Bn quel ,medio bravío del rmedioevo institucional, don res y princirpal cooperador de la Empresa patriótica que se
Antonio Paseyro s,e ha lanzado, ,co,rno é1 mis,mo expresa con lleva, fdlizmente, a ténnn:ino, tiene un puesto obligado en ,es-
esrpontáneo gracejo, campo traviesa 'fcon ,una cltuza er la ta modesta fiesta y lo invito a concurrir a ella'r.
mano para regrenerar el país"; ,o enfr'en'tándose individual- C.onf,igura, repetimos, el tipo de la burguesía nativa pro-
mente a polircías malevas o caudillos rurales ensoberbecidos, yeotado, ,por la fuerza. de su desrtino, hacia la conj,u,nción del
afftma'la s,u,perioridad viril del hom,bre culto imponiendo la plano idea! que hizo, tarnbién, de la tburguesía francesa del
prestancia indiscutihle de una sdlecta calidad personal. 93, un instrum,ento de liberación ail servicio de la demo-
Estpécimen ,esfumado de una de esas generaciones de sa- cracia. ,
crificio de que habla Maeterlink, trabaja y lucha, labora y Nian¡bición de mando ni de l,u'cro lo dinamiza. Tampo'-
guerrea, adrministra bienes materiales y baña su espíritu, co d éxito seduoe, pues, espíritu lógico y equilibrado, perci-
para des,cansar, en las' aguas de nrn Leteo cívico que le de- be que, en definitiva, la ,resultan,te matomática de las po-
t'uelve, para y li,rnpia, la i'magen de una patria más libre, tencias materiales en choq,ue es la derrota o el extertninio
digna y respetada. sobre el cruento carnpo de la acción.
Tiene la generosidad espontánea q,ue sólo alim,entan los rQué 'misteriosa mano guía, entonces, sus pasos? ¿Qué
grandes ideales. "Fué él
:.ra
- esrcribe el doctor D,uvimioso Te-
quien, dió el ejenaplo a la pluto'cracia del partido,
ocu,lta"l,uz iltlmina s'tr mardha? ,
- El fervor místico de rnu'chedumbr'es
,hipno,tizadas es un
aporrtardo lo's primeros, fondos con que la Junta inició sus
estado ambiental desconocido en l§7; no refulge, tafn-
trabajos".
poco, e1 resplandor romántico que brota de la divisa conci-
De inagotables energías, además, como corresponde al tadora de algin Cahatrlero Andante de la idea; ni la célula
destino que ctr,mple, Acevedo Diaz le advierte por carta ,que cdhesionadora acerca a los ho,mbres y cimenta el pensa-
no tiene dere,cfiro a enfer.mars,e: "Sé que está enfermo, 1o que miento. . . ¿tCuál es entonces, el ,misterioso proceso ,que efl-
siento por usted y por fa ,causa a que sirve con tanta dedi- ciende en inspiración y movimiento la vida de es,tos horrn-
cación y patrio,tisrrno. Nadie 'debería enfermarse en estos bres ?
días de pr,ueba".
Es sencillamente la conciencia revolucionaria que reco-
Modesto, f,undarnental,mente rnodesto, re,huye la exhi-
bra s,u per<lido imperio. La secreta ,corriente que viene del
bición y la primera fi{a en la adj,udicación de m,éritos, no só-
pasado sólo lra sido desviada en sü ourso porque, soberana
to por :u ;,a. raz6n temperamental, sino también por exigen-
cias de la auto disciplina,que se irmpone frente a la fácil exal- e invencible como una lluetzT de la vida misrna, no detiene
,tación de vacuas nomlbradías. No obstante esa modestia y jarnás su avance. Mientras acumula potencia para salvar el
,su na'tural rhuidizq el doctor GoJfarini, invitándolo a una ce' obstáculo, fuentes atorbellinadas asofnan a la ,superficie y
na de camaraderia a la que concurren Diego Lamas, Jose en oll¿s sacian su sed inferior la ambición de tnando, el in-
Núfre2, Duvimioso ferra, Carlos Maria Morales ¡ Jacobo Be- terés venatl, la sórdida lujuria de la dominación por el dine-
rra, etc,, le esorihe así: "Usted que fué uno de los iniciado- ro y para el dinero.
rF

1897. BORDA Y TERIIA 5t


50 RICARDO PATSEYRO

Pero cuando asoma en la aLcción, purificada por 1as sir- Per'enne caja de resonancia que rn'dltiplica la trascendencia
de situacion'es y acaeci,rnientos.
tes misteriosas de las edades y las civilizaciones, es el ma-
El doctor Goilfa¡ini hait¡ia aatuado en la sanidad del ejér-
nantial gen€roso de energías', de inspiraciones, de ejenr'pla-
cito aliado en la Guerra del Paraguay' Conoce '1os horrcres
riLadora abnegación que catacteriza al revdl'ucionario de
de las contiendas armadas allí donde el oropel refulgente de
1897.
la espada empalidece ante el ,bril,lo del más modesto instru-
Veamos, pues, para ejemplo y lección de las generacio-
mento de cirugía; allí, en fin, donde Ia gloria del triunfo
nes actuales, cómo conqpira, córno luc&ra, cómo obedece aI
c¡uento y la nota estridente de los bronces militares ceden
pr,odigioso sino que lo lanza sereno, discreto, sobrio, equili-
su emoción, alijera y frá§il, a la honcla sac,u<lida del espíri-
brado, sin la fiebre de enfermizos fervores ni la ilusión de
tu frente a los despojos palpitan'tes que sitmtbra el bestial
éxitos materiales gue sabe l¡¡'posibles, a la aoció'n directa, a
furor homicida del ho,mbre.
la revolución.
,{1 sacrificio.
El doctor Gotrfarini tipifiaa al s,ujeto bondadoso por na-
tura)leza y por reflexión. Su desinterés es abs'olut'o; su ge-
v
nerosidad, sin lí,rnites; su humanismo, regla constante en to-
dos los actos de su vida.
La Junta de Cuerra
Es pobre, Trabaia para vivir. El sus'tento diario 1o gana
En la calle Delensa ffi de la ciudad de Buenos Aires a brazo partido en el seno de una sociedad en la que es, por
sus sentimientos, dorblemente extranjero.
vivía el doctor Juan Angel Golfarini, ciudadano uruguayo,
,cuya casa era prácticarmente cobij'o fraterno de todos los No puede decirse de é1 que es un "burguési' sin extender
emigrados, orientales.
tal califi,cación al obrero mismo que se gana e'l pan diario
con el sudor de su frente.
Médico de ,profesión, su filan,trorp'ía era proverbial y su
generosidad a prueba de adversidades.
El título profesional es su único privilegio frente al
trabajador del taller o del que dorbla las espal'das en la cons-
Posición modesta y concurrido consultorio eran los elo-
tr'ucción agobiadora de la es,titba. Pero ese privilegio no es
cuentes extremos de la ecuación de 5u yida, consagrada al
medio de enriquecim,iento para é1, ni lo ern'ptrea tam'poco para
bien sin vanidad ni atuendo.
erguirse, conro sobre un pedes'tal de ab'alorio, por encirma de
Era, además, río por medio, un' testigo angustiado de sus semejantes.
la situación política de su patria. Es necesario recordar, pa- Es, un ,médico como tan'tos hubo, quízás, en la Conven-
ra darse una idea aproximada de 'la atmósfera que re§piraba
ción F¡an'cesa; un profesional de aquellosr m'isrrlos' talvez,
e,l doctor Gdlfarini, que en la capital vecina los sucesos ¡lo-
que integraron l,as logias secretas que irnpulsaron la ernan-
llticos uruguayos repercutían, entonces, en su rnedio y Ga !ú ,cipación de His,pano dnaérica; uno de esos anónirnros uni-
sociedad, conro si ftr'eran propios'.
vefsitarios,, acaso, que Bonvruevi'totr y Piatnistky eYocan en
La, prensa tarnbién participaba ardientemen'tc de 106
sus memo¡ias, c,urando con una mano a las víctimas del
vlivencs de nuestra vida de nación y de ptroblo; riendo una
52 RTICARTDO PAISTEIYRO
1897. B,ORDA Y TERRA 53
"knut" cosaco y encendiend.o, con la otra, la meoha dd
atentado escarmentador. lución se organiza a pesar de la voluntad en contrario ma-
Habrá des,medro, entonces, para s,u auténtico signifi- nifestada por la atrtori<lad oficial de s,u propio par,tido, que
cado, que recibiese lhoy ,ese extraordinario espécimen de la niega y hasta la certsura.
nuestra revolució,n, el sal,udo augural los puños en alto De tal pasta es ese m,édico compatriota, presidente de la
con que desfilan las mudhedumbresr en - la actualidad bajo -la J'un,ta de Gue¡ro gne re in,stata en su consultorio y allí se-
vibración candente de la revolución protretaria ? siona, trabaja y organizn.
Es¡ hay que reco,nocerlo, rntás revolucionario que nos- r,{quella fría tnr<le <lol mes, de Agoato de 1896 se han
otros, marxis,tas o no, con la sola acción de presencia de encon,trado e¡l el consultorio <lc la ,calle Defensa, el dueño
su vida! de ,casa, el rloctor Duvimio¡o Terra y Don Ant,onio Paseyro.
Quién sería, pro,yectada srtr existencia al momento, pre-
De los tres, el único "pdllticol es el doctor Terra. Su
sente, más obrerista que é1, sin decirlo; rmejor instrumento severo perfil tras,unta una estampo retocada del Incorrup-
de la li eración social, sin proclamarlo ? tible. Cáustico e incisivo, bajo la afa,bilidad aprarente del
ges,to y el tono, su lenrto parlar corre como un ácido co-
La visión de ,la guerra fratricida lo conmueve: ,,Soldad.os
sin familia y l,eales se,rvidores, es Io qtre necesita la emrpresa mentando los s,u,cesos y los hombres.
patriótica en que estamo,s e,m{peñados,,. Els dem,oledora y terrible su l,ógica; hay, adernás, como
Anhela, pues, el mínimo de desgar¡am,ientos al acome- una inconfundi;ble, vi,bración de virilidad en todos sus pen-
samien,tos,. La revol,ución ! Era Io que deseaba: hacerla,
ter la tarea de golpear, con e[ hierro, s,oibre la coraza militar
de l¿ oliganquía. arnasarla con s,us propias manos, moldearla entre sus dedos
Y no piensa en ella solamente cuando desgliega su ac- de artista de la acEión.
tividad prodigiosa en la organizaciín revolucionaria. Nun- Es el único de tros tres que apoya, sobre los otros dos,
planes de, futura prevalencia personal. Coinciden en é1, ,co-
ca, en ninguna de sus cartas o i¡r,strucciones aparece, jamás,
el nombre del oliganca. Ni menciona, tampoco, al bordisrno. rno tantas veces ocurre, la luoha por el ideal y la batatla por
La visión que lo inspira es más arnplia e impersonal desde su interés pol,ítico. Tanto que juz,ga a los homlbres simptres
instr,ume'ntos de uno y otro y él mismo s,ólo se recono€e
qtre ab,arca un estado espiritual y nro un accidente concreto
de la vida civica dq la patria. Es que se lanza a la acción como uno ,más, relevado en el empaque gerárquico, presi-
tlirecta, no sólo contra f¿ oligarquía sino, tanabién, contra la diendo y ordenando los aconrtecimientos.
parte 'del país postrada a s,us pies ! llan ;trablado largarnenrte 'los tres y se han entendido.
Su inspiraaió,n revolucionaria es Ia resultante de una
El espíritu, e[ cerebro y el brazo de la Revolución se han
arrnonizado.
reacci,ón ante un intolerahle gobierno y ante la inadmisible
pasividad del pueblo que la so,porta. Res,p,onde su conduota
'En el modesto consultorio de la calle Defensa tomó
impulso, aquella tarde, "la protesta poputar más altiva y gallardd
lguahncnte a un determin,ism,o tan indluctaible que, según
después de nuestras guerras de la independencia".
vGrcmos en acta de la J'unta de Guerra que preside, Ia revo-
189?. BORDA Y TER,RA' 55
54 R,,T,CAEDO PAJSEYRO

bién, para formar parüe de el'la al doctor Ed'uardo Acevedo


He aquí el acta de constitución de la Junta de Guerra
ütaz,
revolucionaria, que se instala, co,mo lo dice e[ texto, el 2 de
Presen'tes al acto los señores Antonio Paseyro y Dio-
Setiembre.
nisio Viera, quienes habían sido invitados teniendo en cuenta
Acta N.n 1
su in4)ortancia polític¿ y etr hecho de encontrarse acciden-
talmente en esta Capital, manifestaron que en s'u opinión
la ,resolución que se adopta debe recibir fa mejor acogida y
En la ciudad de Buenos Ai,res, Capital de la Repriiblica
desde luego aseveran que la recibirá 'del Departamento de
Ar,gentina, a los dos días del mes de Setiemhre de 1896, los
Soriano que rePresentan. - Firmado: Juan An'gel Gol'farini,
que suscriben, señores doctor Juan Angel 'Gotrfarini, Don
Rodolfo Vel'lozo, Jacobo Z, Berta, Antonio Paseyro, Duvi-
Rodolfo Veilüozo, do,otor Jaco o Z. Berra y doctor Duvi- mioso Terra, E. Accvedo Diaz, Dionisio Viera.
mioso Terra, bala la presidencia del doctor Go,lfarini, éste
dió cuenta del objeto de la reunión manifestando que el Así, con tan sencil'las palabras proemia'les, se prologa la
dootor Eduardo Acevedo Díaz, a quien se había citado, no acción for,m,idable del drama del 97.
haibía podido concurrir por tareas prenaiosas que lo retenían
De áquella reunión, sin trascendencia al parecer, cuya
én Montevideo, pe,ro que ya ,en ,conocimiento del objeto de finalidad encuentra en la sobriedad de expresión con que se
Ia reunión, adheríase a lo que en eilla se acordara; que ese explic¿ y documenta su objeto, el más elocuente adelanto
objeto era resolver l¿ actitud gue debiera asu,mir el Partido de lo que ha de sen el es,fuerzo realizadot destinado' a llevar
Nacional ante la situación política en que se halla Ia Repú- a cabo Ja ernpresa, sale ef irrlpulso humano que no se de-
blica Oriental. tietre, ni descansa, ni pide cuartel ni l¡o da has'ta que un año
Discutiendo el punto se convino en que, dada la afli- después, tamlbién en Setiembre, cristaliza victoriosamente la
gente anormalidad de tal situación, había llegado el caso preiga siernbra de energías que reclama la sustentación de
de apelar al ,recurso extrerno de la Revolución', que cons,ti- t¡ heroica causa.
luye un derecho de todo pueblo 'libre; que €stos son ilos YT
propósitos del Partido 'como lo ,manifiesta categóri'camente
por su órgano s¡ l¿,prensa y en las varias reunionesr públi- EL DERROTISMO OONTRA R.EVOLUCIONARIO
cas que han tenido lugar, y que en tal caso todos y cada uno
de los miembros de esa colectividad po)ítica tienen el deber AP¡nlclo Saravl¡ cn Montevilco
de pro,porcionar los medios materiales para el ejercicio de
ese derecho, sín otras aspiraciones que los impersonales de
Es interesante, para conocer las dificultades que la idea
scrvir [a causa que [ran decla¡ado ser la de sus afeociones revolucionaria debió salvar para abrirse camino, no perder
clvicas; que par,tiendo de esa creencia se con'stituyen en de vista esta realidad: en el pa,ís existe una fuerte corriente
coartra revplucionaria tan intensa que había ganado hasta al
Junta para proporcionar por todos los medios a su alcance
lo¡ clc¡nentos ,necesarios al fin indicado, . nombrando t¿tn- prdpio Directorio del Partido Nacignal, a c{rya colectividad
56 ILIC.A'RDO PA§DYB,O 1897. .BORDA Y TER,RA s7

pertenecen, sin ombango, los homrbr€s que se constituyen en \ "El 24 de Setiembre de 1896 partió el General de s'u es-
Buenos Aires en impulsadores del movimiento armado. tanch 1»lra Montevideo acornpañado del rpardo lermi[no
Ya en 1896 el Directorio nacionalista 'desautoriza al ti (üromlbre de su aonfianza) y yo, de la estancia de mi pad're,
propio A¡paricio Saravia, cuando este caudil'lo, trasladándose acorrlpañado de Eulogio Artirgas. A las 3 y 45 a. m. rne en-
a Montevideo, Ie pnopone a aquel invadir el pais po'r la contraba en el paso denominado "Pedro Juan" del Yí. Pase
f¡ontera. y le dejé la seña convenida, que era un gajo de 'rama verde
-'Ebte episodio de la presencia de Saravia en Montevideo en la ori,lla del agua, al lado izquierdo o deredho, esto es al
es po,co conocido, si no totalmente ignorado por la opinióar lado que debía e§perar el primero que pasase, al segundo. Al
del pres'ente. Dejemos, pues, la paiabr¿ a su acom'Pañante, aolarar el dia llegó el genera;l y seguimos viaje hasta el arroyo
Basilio Muioz, quien narra en una referencia de sus recuer- del Pescado, rlonde cañpaÍlos en un rPequeño montecito a
,dos revofucionarios en nuestro poder, la forma cómo el cau- la izquierda «lel paso. Marchamos de tarde y al dia siguien-
dillo fronterizo se trasladó a Montevideo y los términos en te (25) tomamos el tren de Nico Pérez a Montevideo en la
que se desarrdlla la audiencia que le concede el Dir'ectorio Estación Mansevil,lagra.
naci¡onalista. "Efl misrno día que llegamos a Mon'tevideo se hizo sa-
Dice así Basilio Muñoz: ber al Directprio por intermedio de Abelardo Márquez, que
". . .,L^ falta de conocimiento de ¡tuestros hombres y sus Saravia deseaba se reuniese rpara hablarle de un asunto 'de
ideas ,por parte def General Saravia fueron causa del f:aca- interés ,para el partido. ,
so de muohos de sus planes en aquel momento. Saravia en-
"Al día siguiente se reunió el Directorio, asistiendo Sa-
4avb a su sesió,n. Saravia expuso que el objeto de su viaje
traba a actuar con elementos' extraños; tenía, Pues, que so-
era conocer los propósitos de1 Directorio sobre los trabajos
meterlos a pr,ueiba primero, para saber en que forma podía iniciados, q,ue el partido estaba comlprometido a ir a la re-
utili,za¡los' después. Todo esto, aunque él no lo manifestaba, volu,ción y que él desealba se le dijera algo. Eil Directorio
sus preguntas y observaciones me 1o revelaban de una ma- 1.,
rn"¿nifestó que tenía Ia idea de hacer la revolución, Pero que
ner'a inequívoca que entraba en sus planes. toría que ar,bitrar recursos para hacersg dg los elementos
"saravia tiene el don de calar muy pronto a los hombres de que carecía un movimiento 'revolucionario en el país y
y de equivocarse m,uy pocas veces; tiene poca ins'truccrón, que era cuestión de tiernPo.
pero su viveza natural es Poco com'ún. 'nsaravia :
- Y qué.dhtiempo halbrá que esperar ?
!, no es posible precisarlo, puede
'Eonvencido Saravia que nuestros hombres no arbitra' "Berinduag.tre:
-
ser euestión de uno o más años.
ban elernentos para la Revolución; que fa carnpaña de "Iil
Nacional" estaba por terminar, temiendo que el espíritu re- "saravia: - Yocr€o que por fa'tta de tlnero no debe-
lolucionario desapareciera al desaparecer el órgano de pro- ¡)\
mos e'sperar tanto tiernpo. Yo pongo mis títulos de propie-
dad a disposición del Directorio; prefiero dejar a mi5 hijos
Paganda q,ue lo ha'bia trevantado, se decidió ir a
Montevidco
con cl propósito de oír la última palabra ddl Directorio. pobres y con Patria y no ricos y sin ella.
58 RICAT¡DO PA]SEY,RO 1897. EORDA Y TERRA 59

"El Directorio no aceptó y se limitó a protneter que ac- sittración de nuestro partido. Tiene un criterio muy c{aro
tivaría sus trabajos. para juzgar nuestras cosas y manifiesta inclinacione's radi-
"Alparicio se retiró indignado con la a'ctitud del Direc- cales, que juzgo 1io colocan en el rnejor terreno en la ludla
torio, poco rpatriota en sL1 concepto y dispuesto a ponerse en que se inicia; 1o ¿qsm'paña buena gente y su colaf¡oración'
camlpaña con la cooperación de algunos amigos de causa de no lo dude, será de resultados capitales.
la capital y otros de canrPaña". "fle conversado con é[ sobre el pasado movimienüo y a
Tal la versión que Basilio, Muñoz da, en 1o pertinente, la verdad, amigo, que parece iniposible que personalidades
de este episodio de tan'dlaras sugerencias para apreciar, a que estamo's acostuml¡rados a ver endiosar, tengan auclacia
su vez, la influencia de la corriente contra 'revolucionarla para jugar cou l,os intercscs dcl partido y con honrtbres co-
obrando sobre 1os trabajros en que está em'peñaóa 1a Junta mo Aparicio cle una tuallera rdpugnantc, por sólo un espíri-
de Guerra constituída en Buenos Aires en esa misma feoha tu de ne,cia vanidad persotral.
en que Saravia ofrece frustráneamente al proipio Directorio "Aparicio hul¡o de hacer pública manifestación dc la ma-
del ,partido, su concurso Pers,onal y el de su dinero Para or- nera indi,gna como fué colgado y no lo hizo en interés det
ganizar la revolulión. propio partido, Para no au'rnentar divisiones y causar tras-
rCabe admitir, además, que ya antes, dirigentes' naciona- tornos, como induda.biemente se hubieran producido si hu-
lis,tas com,prometidos a ayudarlo en la invasión del 95, no biera hablado. Pero según me lo ha dicho no tardará mtrcúro
habían curnplido su pa'labra como se des'prende de las re- en hacerlo y será un ,bien que 1o haga, pues es tiempo ya de
flexiones de Basiliro Muñoz sohre el desconocimiento qüe que dejemos de a,guan¡ut 6i5¡ificociot'ts5".
Saravia tiene de los horn'bres de su partido, antecedente que rEl va,lor de las opiniones vertidas por el doctor \ffirio
queda rplenamente ,confirmado en los términos de una carta Gil, no puede escapar a la,perspicacia del lector. Hay que
que el doctor Mario Gil dirige, desde Bagé, a don Antonio tener en ,cuenta que esos juicios, tan'acertados sobre la per-
Paseyro, con feaha Enero 29 de l§7, y en la qtue traza, sonalidad de Saravia, son emitidos en una época en que el
tamhién, en 'cuatro líneas, un fiel retrato de Ia personalidad caudil,lo no había establecido contacto aon las masas parti-
del caudillo y recio guerrero cuyo concurso se procura pa- darias que después lo re'conocen y aclaman oom'o a un jefe
ra la empresa. de condiciones exccpcionales. La silueta moral del futuro
Dicen así los párrafos de l'a carta del doctor Gil: jefe revdlucionario, trazada con cuatro palabras por el etni-
"...Aquí he oonversado larga'mente con el amigo Apa- sario de la Junta de Guerra, oorresponde exactatnente a los
ricio ee todo un hmnbre; creo que vale 'mucho' Es' an- ras,gos salientes del original. Fué la intuición de los cons-
- -
te todo 'caudillo, con todas las condiciones Para serlo, con pirad.ores de 1897 la que descubre en Saravia a un eficaz
¡us intenciones sanas y su desprendimiento de am'biciones ejecutor del designio revolucionario. Si posteriormente el
mczquinas, creo pres es servicios a la causa y será cauditrlo, "de poca instruoción", como dice Basilio Muñoz,
un¡ pcrsonalidad de ila en nüestras luchas políti- llena la escena nacional y su influencia política excede e le
c¡¡, Ticnc mudho ce de nuestiron hombres y de la edecuada aplicación que harbría de hace¡se de sus condicio-
Ii
1897. BORDA Y TEIrRA (¡I
60 nIcA,a/DO PATSXIYRO

turbaciones y a sacar el mayor partido posilble de los dos


nes de guerrero, culpa no es de los revolucionarios de 1897, principios básicos, comunes a todos los absolutismos : et
ni ddl numen civilista que los inspira y gaia. miedo y el interés.
rl-a justicia histórica empieza a abrirse camino lr su fa- En realidad, la oposición de 1897, 'como la actual, no só-
llo recti{ica el imlpulso in'controlado que supone resta'r' mé- lo tienen que hatrérselas, en el terreno de los hedtros, con un
ritos al recio guerrero, al estahlecerse que no fueron, preci- ejército disciplinado, una policia militarizada, un espionaje
sarn€nte, los más fieles intérpretes de los fines y los ideales
rnontado casi a la perfección y una justicia letrada cohibida
de la Revolución, aquellos que fomentaron la pree,minencia o mi,edosa.
ddl caudillisrno militar en perjuicio de l¡os educadores requi-
Más eficaz que todo cso cl situacio,nismo tiene, para
rimientos de la ciudadanía.
minar y frustrar la eficacia ¡rráctica dc la oposición, los mi-
Verdad es, en concreto, que el prropósito revolucionario llones del presupucsto público, el caudal del IJstado: 15 mi-
de Saravia arparece traicionado, en 1895, estorbado y sabo- llones en tiempos de Bortla, 100 millones en tiem'pos de Terra.
tead¡o un año despu'és, por figuras prominentes y por Ia má-
Ese es el oculto, andamiaje que da estabilidad a estas
xi,ma atrto,ridad de su partido. situaciones.
Los forjadores de la revolución de 7897 han de sortear,
Hoy esa fuerza sustentadora está multi'plicada al infi-
también, la acción subterránea del derrotismo anti revotu-
nito. Circula por el organis'mo físico, de la oligarquía com,o
cionario.
el misterioso fluido vítalizado'r que d¿ exisiencia artificial
Es el misimo fermento de cobardía, de renunciamiento a un cadáver, sin devolverle la luz intetior del espiritu.
o de resignación que deSpués de 1933 lastra a los partidos Bastar,á situarse a la puerta <ie cualquiera de nuesras
democráticos del país. No es, como se pretende, que la arc-
instituciones oficiales' y observar: miles de personas, Qü€
ción directa a ensayarse carezca de los elernentos impres- representan a otros talrtos ftrogares, desfilan a diario por las
cindi'bles que enfervorizan a las multi,tudes y las lanzan, co-
oficinas de las cajas de jubilaciones; miles y rniles concurren
mro hipnotizadas, a morir sotbre e1 camlpo de batalla o junto
a las ventanillas del Banco de la Reptiblica y de los banco§
a las b'arri,cadas humeantes, de la ciudad. particulares; ciento,s y cien'tos acuden a los ministerios, a
Antes como ahora la oligarquía es cornpensada en su los estudios de aibogados y escri anos asesores; sin contar,
ilicitud y en su imrpopularidad ,por la inercia de los inclife- además, los postulantes cuya situación está vinculada a la
rentes y la inadaptación de quienes están prá'cti'camentq in- aacesibílidad que perm,itan los entes industriales del Estado'
habilitaclos para 'cristalizar la única reacción posible ante la Ciérrense lo,s ojos y en un es,f'uerzo sobrehumano trátese de
subversión manipulada desde las alturas del poder. abarcar la extensión sin límites que cubre la influencia del
A las situaciones de hecho, además, no se lloga para fa- poder prirblico centrallizado en una sola persona, que l,o usa.
cilitar a ta oposición democrática s'us pl'anes y sus movi- para p,remiar al amigo y perseguir al advers'ario, aplicándo-
m¡Gntos, Su solo éxito material es motivo dc hondas per- le, 1o mismo farsaicas disposiciones funcionales que el bár-
lurhclone¡ cn 18 con'ciencia colectiva; aus derenvolvimien- baro y refinad¡o, código que crea el delito de dpinión. Reali-
lor portcrlorct ¡c des,tinan, fstalmcnte, o fornrentar cl¡s Per-
62 RTCARID,O PASEYRO 1897. EORDIA Y IIERRA 63

zado tal esfuerzo dedúzcase cómo no ha de ser casi omnipo- "Dignese saludar en nuestro nonlbre a los demás ami-
tente la voluntad del que manda y cómo esa enorm€ masa gos que tuvi,mos el gusto de conocer en ésa.
social a merced suya, aún cuando en un elevado porcentaje "De usied affrnos. Antonio F. Saravia, B. Muñoz, Ma-
-
sea antisi,tuacionista mel,la, en el humano interés de sus pro- nuel S. ,Chaves, N. Acevedo Diaz"
blermas vitales, el filo, cle otra manera mortal, de su oposi- Es evidente que e1 emisari,o, mhs calificado de Saravia
ción. es su hermano ",Ghiquito" y Basilio Muiloz el asesor de con-
Esa es la reailidad que en lB97 y en 1933 se oPone con fianza que traducirá al caudillo la irn'presión exacta de la
más éxito que la fuerza armada al estallido victorioso de la calidad y la trascenden'cia clel mo'virnieltto qtte se está ges-
Revolución. tando en Buenos Aires.
So,n problemas de planteo' y resoluciones si'milares' Va- Queda, por lo tantro,, plcnatrlcttte ratificado qttc la acción
mos a ver, entonces, cómo despu'és de1 fracaso de la inva- revolucionaria h¿r <lc «lcscnvolv«rrse al margen dc la autori-
sión rle Saravia en Noviembre de 1895, emisarios s11yos en- dad oficial <lel parti<ftr, cíltlsx por la cual Saravia se entiendd
clerezan sus pasos hacia Buenos Aires buscando 'contacto, directamente con la Junta de Gtterra rlue preside el doctor
alho,ra, no c¡on el Directorio clel Partido Nacional, que sabo- Golfarini.
J,
tea a la Revolución, sino con la Junta instalada recientemen- Pero, es que cuando la Junta .misma intenta posterior-
te en la capital vecina y que se dispone resueltamente a la ,mente atraer al Directorio para cooperar en 1os trabajos re-
acción. volucionario,s, otra vez la autoridad oficial del nacionalismo
Dice, en efecto, Basilio Mufroz, en sus ya citadas me- reÍhusa su colaboración y
adopta, resueltamente, una actitucl
morias, dando cuenta de la primer resolución de Saravia ai de franca condenación al movimiento.
repasar Ja frontera: Recttrramo,s 1>ara fttndar tan gravc itnputación a docu-
"De l¡os potreros cle Ana Correa resolvió el General rnentos irrccusrlllles ccrmo' solr l'as Actas Nos. 3, 4 y 10 de
mandar a su hermano ",Chiquito" a Buenos Aires a quien Ia Junta rcvolucionaria. Diccn textuallmente así:
tuye el honor de acompañar conjuntarnente con Benito Vi- "Ifn Bucnos Aires a, diez y seis de Setiembre de mil
ramontes y sus hijos Mariano y Santos y cuya misión es de oohocientos noventa y seis, leída y aProbada el acta de la se-
todos conocida". sión anterir.',r, ftteron aceptado's los borradores cle notas en-
'Confirmando lo prece'dente vamos
a reproducir un do- comendadas al scñor Acevedo Diaz, de que se habla en e1
cumento de nuestro a¡chivo que dice así: acta de la sesión del trece, resolviéndose que el doctor Te-
"Provincia de Santa Fe. Reconquista, Enero 6 de 1897' rra hiciera parte de la Co'misión que debe concurrir a I'a irl-
Señor don Antonio Paseyro. - Buenos Aires. vitación del Direc,to¡io del Partido Nacional.
"Anoche llegamos a rísta; reciba usted un fuerte abra- "Y no siendo para más el acto, se levantó 1a sesión sien-
ro dc cstos amigcls y correl'igionarios <1ttc lo rccorda'mos con do las 3 p. -.
- Juan Angel Golfarini, Rodollfo Vellozo, Ja-
rlnrpatla y cariño. coto Z, Berra, Eduardo Arcevedo Üazo',
18U7. BORDA Y TERITA 65
(4 RICATRIDO PASEYRO

"Esta resolución del Directorio, a todas luces irregular


"En Buenos Aires a veinte y cinco de Setiemt¡re de mil después de su invitaciónq la Junta, fué motivo de un cern-
odhocientos noventa y seis, reunidos los señores inscfiptos bio de ideas quE dieron por resultado depiorar su actitud y
al ,rnargen, el Presidente declaró abierta la sesién; leída d
proceder por sí solos a la rcalizaciín de Ih obra patriótica
acta anterior fué a,probada y fir,mada. empezaida".
"Después de un detenido' cambio 'de ideas, se resuelven "Y no siendo para tnás e1 acto,, se levantó la sesión
{os puntos siguientes:
siendo las diez yl treinta y cinco a. 111. -- J uan Angel Golfa-
"1.e Sol,icitar para el mism'o'día a las odho p' m' una rini, Eduardor Aceveclo Diaz, f). Tcrra, Jacolro Z. Berra".
- entre ldó, ciudadanos Mena y Núñez, quienes
conferencia El Acta N.n 10, cle feclha 25 tlc Octtrlrrc dc 1896, da cueu-
después de concet»ir y estudiar un plan general de guerra, ta, entre otros asutrt-«rs, tlc cst:r gravc irrcitlcrrcia clr la que
resolvetían cual de el'tro,s desempeíaúa la jefatura, evitán- aparece el I)ircctorio r¡l¡staculiziLn<lo pírlrlicarne nte los tra-
dose así las diferencias lque pudieran surgir. bajos rcvclluciouaritls :
"2.o Constituirse los miembros de la Jun'ta en propa- "' ' ' Iil scñor .l:'rcsirIctttc pttso c1r ct¡urr'citrtictrto tIc la
-
gandistas individuales y buscar toda clase de elem'entos pa-
Junta, -que había recibiclo ttu telegra'nra tlcl cloctor Accvedo
ia [a empresa, los misrnos que de'berán estar reunidos' en Díaz, pidiéndole una conferencia telefónica para ,las nueve
esta Capital, si fuera p'osiib,le, 'el diez del próximo p. m. de esta noche, y otro extenso, firmado por la gran
para proceder de'l veinte al treinta del mismo mes mayorí¿ de ilos corredactores de "El'Nacionail' y otros co-
zar definitivam,énte los elementos que han de invad rreligionarios en número de qtlince, solicitando iuterl>usiera
"3.a Solicitar del Departamento de Soriano para d
- su influenci a para que el cloctor Aceveclo Díaz si'leuciase el '

dia diez de Oictubre, los elementos pecuniarios reunidos y proceder del Directorio, con relación a su reciente mani-
ya o'frecidos. fiesto, peusando', aqttellos antigtls que e1 siler-rcio 1o salvaba
«,4.e
Entrar de lleno a fa laho,r y trabajo activo, dan- todo, uricnt¡¿5 rltrc 1a ¡lrotcstzt tro haría r¡tra cosa que pre-
- cohesión a los elementos, I aceptar, previa dis-
do unidad y sentar al partido divi«li<lo y claría taTvez lugar 'a un lance
cusión con los Jefes del movimiento invasor, un plan cua'l- personal.
quier¿ que facilitara el éxito de la enlpresa. "Los micml¡ros <lc la Junta por unanimidad fueron de opi-
"pn este estado el señor Acevedo Diaz,tecordó que de- nión quc por tl lrroluento dóbía accederse al pedido de los ami-
bía dejarse c,o,nstancia del resultado de su conferencia, acoln- gos, autorizanilo al tloctor Golfarini a proceder en tal sentido
pañado del señor Vellozo, cerca del Directorio del Partido; en su nombre".
la cual no había dado ningún resultado práctico, pues e'l Di- &iro todo, los clcrrotistrl,os, €1 clue sabotea a l,o's revo-
rec,torio, por deco'¡o propio, no 'podía reconocer a la Junta o'culta, bajo la apariencia de un infle-
lucionarios de 1897
de Guerra, a la que no obsta'culizatia en sus tralbajos, ha- xible respeto a los clctat,les formales del pr¡o,cedimiento, Ia
biéndose, en consecuencia, hedho cargo del activo y pasivo inquietud de sus indecisas conveniencias. No se sitúa con
dcl diario "El Naeion¿l''', devolviendo la noto gue, como cro' franrlueza en ningún extremo. Oscila, no entre el ibien y el
dencial' cerca ddl Directorio, había llevado".
t
66 III,CARDO PASIIYRüT I897. BOITDA Y T,E,RRA 67

mal, Ia justicia o la injusticia, sino entre las probabilidades la catrsa y hacen, dentro de su limitada eslera de talcs, cuan-
en juego. El haber conspirado contra el éxiqo, de la Revo- lo est¿l en sus marlois para ayudar a los conspiradores.
lución no habrá de impedirle, en cambio, sailir ileso de res-
Sin e,mbargo, no hay que exagerar 1¿ nota a ese respec-
ponsabilidades ni fracasará en su intento de ser e1 primero
to,. La "ayuda argentina" no surge, ni espléndida ni decisi-
cn Ia adjudica,ción de laureles y beneficios a la hora del va, de la copiosa y auténtica documentación a nuestro alcan-
triunifo.
ce. Fuera de un contingente de 50 entrerrianos que el doctor
VII Mason plomete armar y equipar (pcro con dinero de la Jun-
ta de Guerra) toda esa clramá.tica intimida<l con que se abre
La conspiración por dentro a nuestros o1'os la ltrc¡>aracirirr rlt,l rrrovitniento desde tierra
argentína, nos clicc rlrrr: rr,tcstros t:'niHlados Pasarron ruise-
Necesario es evocar en todos sus aspectos el medio en ria, tluc rlcbicrou ll:urirrs(,, rlrrranlt,rrtt: la virla mielltras 11e-
que se inicia y desarrolla la conspiración de 1992. A cuaren-
gaba la hora <lc ir':rl cncucntrr¡ r'lc la lrrucrte;que la lrrospi-
ta años de distancia la ima,ginación só,lo abarc¿ las líneas talirla<l argeutirr¿ fué corrlial, llclo ni un solo fusil. ni un so-
generales del erpisodio, su gestación y su feliz alumbramien- lo cartucho pasarorl a manos de la Revolución sin el ajuste
to, io,brando en el recuerdo conro una forrna estilizada de la correspondiente de su precio, exigirlio y pagado con puntrla-
conjura civil llevada a limitcs casi dc pcrfección. liclacl inexo,rable.
La realidad es otra ltien clistinta. Se desenvuelven, así, lo,s revolucionarios del 97 en el
Hemos visto, aunque lijeramente esbozadas, las dificul_ medio propio a üoda conspiración, favorecida, con respecto a
t'ades opuestas a la ernrpresa y r1ue surgen rlel propio campo lo que ahora ocurre, por la realidad de relaciones inte¡nacio-
revolucionario. No será imprescrnclil¡le meclir, entonces, la rales no reglarlas por el común es,píritu cle persecución que
magnitud de los o,bstáculos que se cruzan en el camino y hoy vinctrl¿¡ a los golticrnro,s soli<larizados err la tlefensa práe-
que provienen de la voluntad vigilante .v-- el permanente ace- tica rlcr lrts sitrraciones si¡uilares de <1uc srtrgen.
cho del espionaje y la poficía gubernistas. La solir invocaci<in «lcl rlerccho de asilo paralizaba en
La protección argentirla, tan encareci,da, no se traduce aqucll:r ólxrca totl¡¡ gcstión irrternacional clestinada a inter-
en positivo5 por parte de,l gobierno d.el r.ecino país,
acüors nar o, alejar', «lcl cetrtro ,dc sus actividades, a los emigrados.
clue curnple sin miramientos los debe¡es que le impone fa
Hoy, no. lil cinico descono;cimiento de la norma jurídica
neutralidad, pues, es sabido que sus cañoneras disuelven las dentro cle fronteras c.xticncle su influencia perturbadora más
concentraciones,revolucionarias y, realizan eniérgicas bati- allá de los lírnitcs intcruacionales y así conternplamos en cl
das en todos los parajes donde pueda refugiarse un contin- presen'te la negación def initiva de los sagrados f ueros tlue
gente o esqoúderse un armam,ento. la )egisla,ción y la costturrrbre acuerdan, como €sencia rn,srna
En cambio, es amplia y cordial la acogida que el puel>lo de su virtualidad, al clerec&ro <le asilo. Gorbiernos ds ¿".purio
ar,gentino dispensa a la idea revolucionaria. Porlíticos influ- origen se comlp,ensan, en sus enconos y en sus miedos, con
yonteñ y frrncionarios de a'guna gcrarcltría s;rrrllatizau con la recíproca violación de tratados cuya vigencia es sólo una
68 RICARDO PASEYRO
1E97. BORDA Y TIERN,A 69
mentira más de las can,ciilerías, prácticamente afectadas al
servicio de inferior menester pdlicial, fundado, en el trrteque Son cuatro líneas ,que comprenden todo un proceso psi-
de las víctimas de la perseQución política. coló,gico. Dicen así : "Amigo Paseyro: No he podido encon-
Cierto que, rpara los revolucionarios dei 97, es una 1lo- trar más barato, únicamente muy in'ferior, Lo que es más
sitiva ventaja no verse alejados del foco de la conspiración. urgente es el dinero para comprar el género' Adjunto la no-
Peno, como ahora, dos es,pionajes, el organizado desde aqtrí ta de lo que costará todo.- IJrán".
y el ordenado por las autoridades argentinas, traban sus "IJn par de botas.
movimientos y dificultan sus planes. "6 metros brin a $ 1.69 $ e.6o
Desde Florencio Sánchez, además, que en una "habi- "Corte y hechura " 6.00
tación" de emigrados se acuesta en el suelo y usa pa.ra clcr- "Dos camisetas " 5.30
mir a ,manera de cobijas, un raído sobretodo, y diarros viejos, "Lo demlts 1o, co'trtprarctnt)s lttaítal1a".
hasta la industriosa actividad de Felipe Péndo1a, fat¡ric¿rrte He arluí la estanrpa íntima tle un solclatlo ciudadano del
de uno,s ;bizcoc[ritos de especial factura, caben toclas las for- 97: a\ ¿d,quirir la ropa, <1ue qttizá lc sirva de mortaja, rega-
rnas de la resignación hero'ica con r.iue aquella gente aguarda tea hasta el ,centésimo sin que la visión del incierto v azaro'
la hora de mayores sufrimientos, <Ie más clo,lo,rosas y terri- so destino relaje los resortes de su rnedida sobriedad. Hay
trles privaciones. sin clucla, en el fondo de estas al'mtas, una reserva moral inex-
El espíritu de sacrificio es la lqy clue «lisciplina su estoi- pugnable que rhace de cada uno de esos sol'dados un cons-
ca conducta. Cuentau las crónicas de la gran guerra euro- ciente instrumento de la Revolución.
pea, que las reservas de retaguar,dia, antes de ser concluci-
(El Dr. Golfarini lha abran'donado totalmente, absorbido
das al frente, dpuran, en un rápido trago, las he'ces de la vi- por la tarea organizadora, la parte reproductiva de su con-
da. Condensan en tros días que preceden a la marcha todas sultorio méclico.
las ansias de vivir y las colman en un desesperado, gesto por ,Ell I)r. Duvimioso Terra tiene prácticamente clausura-
gozarlas todas de una sola vez frente a la eternidad de la do su estu<lio de abogaclo.
Muerte que, abier,tos los brazos, €slper¿ . . Des'rlc Ilagó cl Dr. Mario Gil escri,be:
Aquellos emigrados del 97 no proceden así. Soldado's, " . Lo quc es tirante para Mena y Para mí es la par-
tambíén, que aguardan la hora de afrontar el fuego, son te econónlica. Ya cstamos ago'tando los últimos recursos
sobrios y tacaños consigo mismos, pes,e a que cLlando se propios', pucs los (11¡e nos cntregó la Junta voló hace mucho
ausenten de la gran ciudad que brinda todos los placeres, tiempo. Ricardo Maz puede noticiar de algo y en la caÍrPa-
€s para avafizar hacia eI dolor i' úracia la muerte. ña del Brasil todo, es carisi'm,o.
Entre el montón de pequeños valiosos papclcs a llues,tra "Las carretas, notttás, de las mercaderías costaron 400
rnano, he aquí que encontrarlos una diminuta esquela¡ cm mitr reis, sin contar los gastos de manutención de Olano y 7
esta anotación al dorso escrita por el tlestirraturitl: "1897. compañeros y recarlos, etc. Yo ya estoy fundido y no sé si
J,ulián Urán. Gualegauychú. Febrero 6" a mi regreso al pasar por Santa Ana Luis Gil aguantará una
peahada.
70 RICARIDO PASEYRO 1897. BOTiDA Y TJEIRR,A 7r

",Si Viera está ahí que no üre escriba sotrre el estudiro, veinte bombas de espo'leta, como talladas a 'buril, escondien-
puesr temo oir calamidades, pero 5i ha podido co,brar algo y do la bruñida'redondez de sus forntas cntre las fragantes co-
tiene de rnás, me envíe algunos pesos. No picÍo a la Junta por rolas de jazmines y claveles, tulipancs y cándidros lirros ' .
que la supongo escasa".
Vamos demostrando con docurnentos que jamás pudo El barco crpedicionario
-
imaginarse verían la 7sz p'úb ica, la estructura de hierro de
aquellosr ,caracteres que forjan la Revo,lución en medio a ,la Vamos a ofrecer ahora ttrt tIt¡ctltllcntt¡ irltcresantísimo,
más deqo,trante escasez de recursos materiales. Vemos, igual- el que se refiere a la colttrataciírrl rlcl lrttrlttc rltte ha de servir
mente, erguido ¿l s5,píritu revolucionario sobre su propio para conducir a la gctrtc :t l;rs Isl:rs tlcll ['aratrít y, llegarlo
desvalimiento material, no flaquear un solo día, no retro- el caqo, a Ia ef¡n:rlicitilr rcvtiltlcit¡tlrtl'ia lt ticrr:t uruS:'aya.
ceder ante ninguna privación, ni dis,minuir la encendicla ins- A través cle st¡ lectnra ¡ro«lrít a¡>rccial'ce las dificultades
piración de su liama, ante ningún obstáculo,. ll a salvar para lllevar adclantc la "ctu'1>resa", collto repetida-
mente la llama el Dr. Golfarini. E,s rtna carta de éste que di-
Erplosiztos y flores ce así:
- "B,uenos Aires, 17 de Enero de 1897. Estimado Señor
Don Antonio Paseyro ha tenido ya que abaudonar, uo A. Paseyro: He puesto en conocímiento de la Junta las exi-
sólo sus negocios, sino lhasta el pais. Ausentado definiti- gencias del arrendatario del vapor, 'que ignoraba, como 1o
vamente, la amlplia casona solariega 'de Dolores presencia, ignoraba i,gualmente el Señor Gotuzzo, intermediario en el
una noche, a la oscilante luz de lámparas misteriosas, esce- alquiler del mis,mo.
na de brujería. "El vapor se arrcutló lisa y l'auarnente por 500 pesos
La dueña de casa, Doña Carolina Ferrari de Paseyro, por dos rneses, nl¿1s 100 ¡lura gastos de higiene, composturas,
asistida de dos fieles amigo,s, re,mueve las macetas del jar- li¡¡rpieza y as,eo.
dín, Ievantan, en vilo, las rplantas de tulipanes, claveles, li- "S/¡lo la licencia de viaje, carbón y personal quedó de
rios y debajo depositan algo que cubren, después, con el con- cuenta de la Jtrnta y eso a pagar a fin del mes.
junto inta,cto desprendido del envase. "El rccihc¡ dc k¡s sciscieutos pesos pagados adelantados,
Diez, veinte veces se rerpite la extraña operación, pro- así 1o dice.
yectán(o,se, en negros escorzosr sobre las paredes de 1os edi- "Qué viene, allr¡o'ra, a darnos cuenta de su contrato, etc?
ficios que cuadricu,lan el patio, las siluetas si,gilosas de la "[El Señor Gointo contestó' "pi6s no lquiere ir".
-
dama ysus so,lícitosr asistentes "Sea todo por el amor de Dios !
En el silencio de [a alta noohe reinan stra vez llas som- "Quoque tan<lern !
bras. Y en el jardín de la vieja casona de D'o'lores, bajo la tu- "La patria gol,pea ias puertas de los hombres de acción
pida red de madreselvas y enredaderas olorosas', al otro día y pensamiento y la Junta (o invita a concurrir al local cle sus
olcopan, e la revis,ación inquisidora de la policía bordista, sesiones, para ver de salvar 'las exigencias del arrendamiento
l
72 RICA.RIDO PASEYRO 1897. BORDA Y TERRA 73

rJel vapor, con los intereses bien entendidosr de la Junta. La Mori,r con uti,lidad,
-
sesión es a las 9 a. m.
Don Pedro Yelazco Gallego, figura consular de Mon-
"Lo esperamos, pues, a las 9 a. m. mañana lunes 18 de tevideo, pide, a su vez, que a un cuñado' suyo, Virgili,o' Crosa,
Enero. Angel Golfarini".
-Juan se le haga lucir y no se 1e lleve in'útilmente al sacrificio:
"Montevideo, Enero 19 de 1897.- Querido Antonio:
Una espad,a li,aianita
Por interrnediro de un ernptreado de la Casa de Arrufana, de
-
El jefe Juan Cabris' picle una es,pada de especiales con- ésa, he hecho, entregar dos cartas para n.ri cuñado, Virgilio
diciones: Crosa, por,que me dijeron que tú sabías donde estaha. Es-
"Amigo Paseyro: Por la presente saludo a usted y al pero, si eso es verdad, que le harás entrega de tlichas cartas
mis.mo tierrxpo paso a pedirle que se digne entregarle al por- !, si es 'posible, conseguirás que le escriba una vez al pa-
tador de ésta, ,que 1o es el ami,go Leandro L6Btez, 1¿ eSpada dre: cuatro renglones serán suficientes para dcjar contento
que me prometió. Deseo sea livianita y al mis,mo tiempo, ya al viejo.
sea usted ,o por medio de la Junta de Guerra me mande cua- "Si vas a hacer vida "activa", liévalo a ttt latlo y caso
trocientas o quinientas balas cle esa clase qtte adjunto, pues contrario, re,corniéndalo, a L1n bucn arni,gcr y dc confíanza
tengo una buena arma que me regalaron, y no tengo ni ba- para que lo haga lucir, pero no matrr torrtatucntc, Creo será
1as ni plata" . . . un buen soldado y de aquellos que no han de <lar vuelta cara".

Los entrerrianos Ordencs e instrucciona.¡


- -
Una carta pro,cedente de Gualeguaychú, de Don Enri- Veamos aho,ra estas rirdenes e instrucciorles del Dr.
que Maso,n, se expresa así: Juan An,gel ,Golfarini, ¡rresirlcnte cle la Junta de Guerra, que
"He recibido su apreciada dei 16 justamente con el giro funcionaba ert su consultoriro, mé«lico, Defensa 66 y dirigi-
valor de $ 800, importe lque t€ngo en mi poder. dasr a Don Antonio Pase'yro, domiciliado en la mis,ma calle,
"Me rhe puesto en caanpaña, pudiendo adelantar que Defensa 152 (altos). Estos documentos no necesitan comen-
Gualeguayohú, no quedará rezagado. Tengo ya gdquiridos tarios: sotr dc por sí bastante elocuentes para traducir, una
20 fusiles y carabinas Remington; un ar(n€, de repetición vez más, las trernenclas dificu,ltades que a diario se levanta-
(siete tiros) ; 500 cartuchos buena munición y 50 porta idem. ban contra los planesr revolucionarios. Esta carta lleva fecha
En todo esto he emipleado la cantidad de $ 316.00, trescien- 14 de Enero de 1897:
tos'diez y seis nacionales. "Sr. Don Antonio Paseyro.- Mi estimado amigo: Ante
'"Tengo ef propósito, y 1o voy a conseguir, de ,o'rganizar todo, ttn millón de disculpas.
una guerrilla de 50 hombres, corqpuesta en su mayoría de "Soldados sin familia, sin corfpro'misos, I lel es servido-
argentinos, que ¡será armada, 'rn'unicionada y remu'neradp res es lo que necesita fa empresa patriótica en que estamos
con los fondos que he recibido' por su intermedio'n. e,mpeñados.
74 RICARDO PASEYRO 1897. BORDA Y I]ER,RA 75

"No estarnos eu campaña, se tiene que contemporizar, En la Isla d,el Celbo


-
que sufrir y que transar.
",La salida del vapor debe efectuarse hoy y le rueg,o' ver Pero ya ins,talada la gente en la Isla del Cei,bo, su Dr-
al Sr. Coronel Núñez y destpués de entregarle mi carta, que ganización da mucho trabajo y no 'mel1or tacto impor.e la
usted o el querido Ricardo deben llevarle, inmediatamente, necesidad de tener levantada su tnoral sin mengua de la in-
insista efl'que se realice e1 viaje y regreso por el vapor, una clispensahle disciplina para el cas,o. Por eso posteriormellle
vez instalado el personal e imprimido el orden consiguiente. el Dr. Gol,farini vuelve a escribir prometiendo toma! "sericsr
Sin él ,se tocarán dificultades, talvez insuperahles, pues es y meditadas medidas". Si no se toman "la gente de ias [s-
difíci,l llegar al lugar ya e'legido y sólo conocido del Sr. Co- las será un verdadel'o fracaso".
ronel. Y como se desconfía de la lealtad cle algunos cletirentos,
"Tengo algunas ar.mas, las que unidas a las de usted y recomienda a dou Antonio Paseyro que "viva alerta, clcbe-
unas cuantas que debo recibir hoy, tendremos una guardia mos vig'ilar a esos elemento's". Agregando finalmellte csta
de honor, superior a la de su Pte. y arnigo de ' . . recomendación:
"La t¡,o partitla tlcl Corotlt:l tlrc ticlre corltrariado' Su "Ifrable al 'Coronel Lamas y a Berra, con verdatl y si'r
afmo. amigo y s. s. Juan A. Golfarini". miedos de que no se hagan cumplir sus órcleuesf'.
-
Angustia econónti'ca El toruoento de wn lt,ároe.
-
Posteriorrmente el Dr. Golfarini revela la angustia eco- Rafael Pqorls, cl valit:ttl.c jt'fc rcv,rlttciotlalio, hórr¡c «Ie la
nómica en que se ddbate la Junta de Guerra para llevar ade- Defelrsa tlc [)arysattrlir y t:tí«kr cl¡ 'l'rcs Atllo'lcs, tlcrscribe en
lante sus planes y da cuenta de la salida de un contigente re- csta elrrttetttc t:¿tt'tit lir vitllr rlc sncri[icio llcvada cn las Is-
voilucionario tptata la Isla del CeiJ¡o en esrtos términos: las :

"Bueno,s Aires, 20 de Enero de 1897. Sr. Antonio P¿- Citnr¡ratttcttto (icttcritl, I')tlero 24 clc 1897. Antonio
-Sr. por
seyro. Estimado amigo: Ayer salieron en el sucio "O'restes", Pas'eyro. Mi cstimado atnigo: Los sucesos que aqui
-
ocurrcn me mtlcvcl'¡ a cscri'bi'¡le y po'nerle de relieve las ne-
el ,Coronel, Ricardo, cinco patriotas muchachos a quienes ,e
les armó de facones y "la encantada encomienda". cesidades <1ue está Pasando' la gerte a mis órdenes.
"IIa,ciendo de tripas corazones aguanté el calor y l)rl - "Debo manifcstarle que al hacerlo no me dirijo a Vd.
curé tener contentos a aquellos amigos, cuyos servicio i y como más allegado a los miem,bros de la Jttnta, sino al ami-
sa,crificios só,lo, Dios y la Patria sab'rán agradecer' go, a fin de que a su vez Vd. induzca a los seirr-¡res del Go-
"Le envío un telegrama. Nfándeme la traducciótl, por- mité que traten de evitar las necesidades que paso a enumerar.
que conviene tra verdad de ella. Plata, plata, y plata, piden "En prirner lugar, la falta de cierto's elementos indis-
todroe I pensa,bles, como ser 1a carne, pues hemos pasado hasta dos
"Su amigo af'mo. S. S. Juan Angel Golfarini''. días sin probarla, y por otro ladro la gran cantidad de mos-
1S97. BOITDA Y'r¡iiittrA 77
76 NICAT¡DO PAISEYRO
de guerra en maros de los futuros revoluciro,narios, tuú 1o
qLlitos, cnteram,ente inevitable ha hecho qtr,e mucha gente que puso en la prensa situacionista de la época la nota más
se me enferme y me vea sin tener con qué atenderlos, pues aguda y procaz coutra los "couspiradores" y lo,s "dinatntte-
se carece en at¡so,luto de un solo remedio. ros" que se proponían derrocar, tan luego, al gobierno re-
"Estos días de lluvia no he tenido, donde aTojar a la gen- constructo,r de entonces.
te y sólo a los enfermos ,he poldido guarecer en el ranchito en Es interesante, sin embargo, establecer con qué sttge-
que se tienen las ,provisiones. A causa de eso la gente ha es- rentes vocabios los dirigentes revoluciotrarios lracían men-
tado sufriendo toda clase de penalidades. ción a esos elementos, sobre todio, a las rbourbas explosivas,
"Qo,mo Vd. comprenderá, mi amigo, no puedo estar ali- que 1o eran del sistema "Orsini", acciona<las a es1>oleta.
mentando a la tropa con puros porotos, (los que gracias a Ya vimos riuc cl cloctt¡r Golfarirli llama, a utr bulto en
Dios!, se,han concluido), pues ya La gente no quiere ni pro- que se rcnritc unr cantidarl «lc cllas, "crtcartttr[a c'trcotnieu-
barlps y ha llegado a tal I)unto que han preferido pasar sin d¿". f)lo,stcf iortuctttc, ctr aviso ¡lasnrlo a tlt¡n Atrtrtttio J'asey-
comer. Además una gran uarte de las provisiones que tengo ro, sc cxPfcsa así:
no pueclo utiljzarlas por falt¿ de carne. "Ayet siguier:on viaje las encantadas golonclriuas a las
"En fin, el Coronel Nírncz lo irrponclrá personahnente inmediatas órdeues del señor Gi1 y custodiadas por ei gue-
rie Ias nccesidades qlre pasxmos, y espero quc Vcl. 'se tomará rrero Martín Obando, quien usaba traje de paisano, Pero
algún interés a fin <le evitarlas. armado de espada y revólver para cuando, t¡,ontara a ca-
"Sin rnás lo saluda stl añ;go. Rafael A. Pons. ballo".
- El Coronel Núñez a su vez tanrbién reclama de clon An-
Eleruentos bélicos tonio Paseyro, erl estos t,órnrinos, sus "repucstos":
- "Queri<lo Pascyro: Muy ¡¿¡r<1c, a las 11 p. ur. salituos
Respecto a los sufrjmientos y penurias pasados en las de la casa dcl «lrr¡ctor Ct¡trfarini y por cso uo regresé, ptr€S
Islas del Paraná por los ho,m,bres que se estaban militari- indu<lalllcruc¡rtc ya ustcd dormía a esa hora.
zando par¿ la elqpresa, es documento de irrefutable elocuen- "I{:igaurc cl scrvicio de envolver e11 un diario mis re-
cia la precedente carta de1 bravo y experto jefe que queda | y enviárrnelos por el portador, que es
-mi hijo y
[ruestos
reproducida.
-
su humifde servidor.
l-.a razón de esa preparación previa con que se 'planea- "Luego andaré por allá. Su amigo. Núñe2".
-
ba Tanzat al combate a lo's revolucionariros, tiene str natural
expl,ircación en el hedho de que, por primera vez, ulla revo- Un cuestionario preví,sor
lución contaba con armamento moderno para la época: fu-
siles tle repetición y material explosivo. El pasaje de la gente a territorio uruguayo era asunto
En efecto, contaba la Junt¿ de Guerra con ftrsiles Máu- serio y arriesgado debido a la intensa vigilancia gubernista
ser y tubos de dinamita. El conoci¡niento que, forzosamente, sobre las costas de litoral.
tuvo por anticipado Ia satrapía borclista de esos Pertrechos
IIICANDO PASEYRO 1897. BOITDA Y TIERItA 79

Para burlarla o reducirla con el fin de facilitar e1 pasa- 3.n "Chapicuy" entre Fray Bentos y Colonia.
je <Je Ia cxpedición, he aquí el cuestionario extendido de pu- / 4.e "Vigilante" de Coloni¿ a Maldonado.
¡rlas ar1r12s que tienen toclos ellos son una ametralla-
ñro y letra de don Antonio Paseyro, y clue tenemos a la vis-
ta, que <Iebió contestarse y se contestó, pata Prevel' las Po- dora en la proa y de setenta a ochenta fusiles Máuser y los
sibles contin,gencias. que los tripulan, de jefe abajo, son 10 a 12.
Dice el cuestionario : "También le comunico a usted r¡tre Ia "Suárez" pasó
1.'- ¿Qué f:uerzas de líne¿ hay en el Departamento? con armas y gente lJruguay ¿rriba..
¿ En qué puntos se encuentran y en
2.0 qué se ocu- '1La policía del pue;blo sólo son 12 u 15 con el comisario
pan ?
- a la cabeza. Las arlnas, <¡rc llnerlcn tcncr l.lo pasarán de 100
3.' uerzas tuovilizadas (niilicias) hay ell el entre fusiles, cara,binas, y lanzas; los tiros cluc 1>treclen tener
- Qué ¿ f

Departamento ? no sé con fijez.a el nírmero.


4.n qué puntos estitn colocadas'? "Del Sauce a Casa.ltlanca hay trna guarcli¿ a cargo del
5.u
- ¿En se hace la vigiiancia en las oostas del Uru- capitírn Acosta, clue recorre rlía y nocrtre".
- ¿Cómo
guay y c1ué puntos están vigirlaclos ?
6.0 vigilancia se hace en las costas del Río lde- La claae tetegtafica
- ¿ Qué
gro y cuáles, son los vigilarlos ?
l)llntos Veamos ahora un documento valiosísimo, que demostra-
7.' -- iQué arlnanrento hay en la Jefzrtura y en e1 cuar- rá el meticuloso cuidadro, con que los dirigentes revoluciona-
1e. ? ¿Qtté arnram,euto hay en otros parajcs?
¡ios de 1897 prepararon la invasió,n y el pronunciamiento
8.0 ¿Qué clase <Ie vigilancia se ejerce de noche en la genera,l en todo el país.
-
ciuclacl . . . y qué p.o'siciones toman las tro'pas a esas horas ?
D,n efecto, la clave telegráf ica revolncionaria revela,
9.0 Respecto a caballadas sobre el lJruguay, a tlna )r
- cll¡¡ 561n, grau ¡nrtc dcl Proceso gestxtorio, de la conspira-
otra margen dei Río Negro: su situación? ciórr, dcs<lc (luc lx)r su cxtcnsi<irr y los numerosísimos pun-
tos, r¡uc alrarca, sn lcctura basta para apreciar las ramifica-
Un pacífico '¿ecino
ci«.¡nes y la trascen«lcucia clel movimiento.
Informando sobre los principales puntos, he aquí lo qrrc Iist¿l retlactarla dc puño y letra también de don Anto-
contesta un meritori,6 vs'gino de Palmira, don Bernardo Pé- nio, Paseyro, sienclo suyas, igualrnente, las enmendaturas y
rez, pacífico comerciante, al parecer: nlo'dilicaci<lrres quc su uso, prá,ctico determina. Está conte-
"Pasaré a informarle clel trayecto que recorrell los va- nida en siete hojas cle papel corriente de block, escritas a
porcitos de1 Resguardo en la costa del Uruguay. Son los si- ambos lados y comlprenden setenta y cuatro comunicaciones
guientes : cifradas.
l.e "Tangarupá" entre Salto y Paysanclú. Apréciese un ejemplo prá,ctico, en este despacho origi-
2.0 "General Flores" y "Yagttaró11" t'lltrc Fray Bentos i nal que tenemos a la vista y que tiene, al pie, la traducción-
y Pa.r'sandír. Dice así:
60 RICARDO PA,SEYRO 1897, BORDA Y TE}RRA 8L

"Quarahy, Energ 19 de 1897. - A Rodolfo Horne. De- "Maíta¡a carta" y que, nada menos, quiere decir: "IJr-
fensa 152. Buenos Aires. Encontré invernador hacienda g'e me remitan aparato telegráfico y tufros de dinamita".
fondos
- pedidos. Darío Rosas"'
en trozos. Necesito -
La tradución 'dei despacrho es 1a siguiente: Pseudónitttos
"A Antonio Paseyro. - Encontré homb'res y ar'rnas 'de En hoja aparte encontramos los nomibres figurados de
que habló Ignacio Mena. Necesito fondos pedidos' - Ma- jefes y dirigentes, de los ,que vamos a citar sólo alguno's por
rio Gil". su originalidad.
"Cándido Bernardo" es "General Arparicio Saravia".
Vamos a re'producir ahora otras fórmu'las de la clave "E. Fi'bradura" cs el doctor E<luarclo Acevedo Díaz.
que giran sobre esta misma palabra: "poder"' "Concepto López", el doctor Duvimi'oso Terra.
"Remítanme poder" quiere decir: "Aparicio está impa- "Gringo Fiel", el anagralna del doctor Juan A, Golfa-
ciente por invadir y sólo espera las armas y las municiones rini.
para hacerlo". Según re'ferencias, de la misma hoja los telegramas pro-
"Manclo poder". Traducción: "Regreso a ésa dejando cedentes de Bagé y Yaguarón deben ser firmados por "Ctuz
tod.o arreglado y p'ronto para lv aociótr al primer aviso de Hefirnanos".
esa Junta".
"Necesito pocler". Traducción : "It['o' puedo cttcorrtrar a La fijación de fechas
A,paricio, cuyo paradero ignórase". Nada más ingenioso que el procedimiento de la clave
La orden: "Invadan inmediatamente" ha de ser trasmi- para fijar la fecha del pronunciamiento. Reproducimos tex-
tida ptr este inofensivo aviso telegrá'fico: "Es'criban avisan- tualmente del documento que tenemos a la vista:
do estado asunto".
,Con variantes del verbro contestar, aludiendo a una po- Pedro, día 1.9; Juan, dia 2; Fcrnández, día 3; Rodri-
guez ,'día 4; Serapio, día 5; Manuel, dia 6; Ramón, día 7;
sible correspondenci¿ comerci'al, encontramos estas fórmu'
last: Justino, día 8; Ventura, dia 9; José, día 0.
Explicando la a¡rlicación de la clave, el documento cu-
"Espero contestación"' Traduc'ción: "Aparicio cuenta
yos detalles reproducimos, continúa así:
con elementos de guerra y hombres y espera orden Para
"Para de,cir, por ejemry>lo, que tendrá lugar el día 14, se
invadir".
telegrafiará en la fo'rma siguiente:
"suplico contéstem'e"' Traducción' "A'paricio, de acuer'
"Vea Pedro Rodríguez".
do con Mena es,peran las ¿rlrl&s y 1as órdenes de esa Junta
para invadir'¡. "Los amigos de la frontera, cuando estén prontos, 1o
Y, por cierto, que nadie podría sospechar la grave sig' avisarán con la misma clave. Por ejemplo, para decir que
nificación del contenido de un despacho concelbido en estos estarán prontos el día 15, harán un telegrama más o melros
otr'os términos: en esta forma:
82 RICARDO PASEYRO 1897. BOR,DA Y T'!lE}Rx,A 83

"Mando títulos por Pedro, Serapio". La carta está escrita en papel de block, tiene un mem-
Tal es, en inexpresivo resumen, lo que contiene ese va- brete tipográfico gue dice: "Estación Me'lclhor Romero". Y
iroso documento inédito y con cuyas secretas fó¡mu'las se abajo: "Ferro 'Carril Ensenada".
animó y dió impulso a la Revolución destinada a dar en tie- El tráfico de armas y otros imrple'mentos bélic'os de que
rra conr una de las tantas satrapias que 'han afrentado a la dispone la Junta ha de rhacerse en forma indrecta y tratan'
República. do que intervengan en é1 personas de confianza. Se explica,
pues, que se haya tenido que dar un rodeo hasta Estación
Acción iompersonal Melchor Romero, buscando segura expedición a 1o que se
reÍiere el autor de la carta y que dl lector rleducirá rrie 'qué
Fiemos advertido ya que en la nutrida documentacióm :¡c tra.ta con sólo léer la altlsión qtlc clr ella se (hace a Borda.

que tenemos a la vista, en su mayor parte de carácter per- Hc arlui la carta:


sonalísi,mo,, no encontramos una sola alusión al gobernante
"M. Romero,, Enero 23 tle 1897. - Señor don Antonio
Idiarte Borda quien, ptor f:uerza, era el representante máxi- Paseyrro. Buenos Aires. Mi estimado amigo: Hoy he re-
-
mo y autorizado del régimen imperante. cibido su muy grata carta y enterado de su contenido ten-
go el agrado de adjuntarle una carta de Porte, 6e¡¡ssrpon-
Centro y eje del sistema gubcrnativo, 1ógico hubiera si-
,rlo clue los cot.tspiraclorcs de 1897, en sus ,cartas o €n 'sus rliente ¿ un ,paQuete que hoy remito por encomienda a la Es-
tación 'Central, dirigido a su ho'mbre; y Dios quiera que st1
comentarios hubiesen dejatlo irnqlresos el apóstro'fe o la mal-
cdntenido sirva para darle e1 tiro de gracia al vasco don
dición contra el hom,bre qtle es' entonces, la personificación
]uan Idiarte Borda !
de todos los males que azotan a la República. "Con referencia a los otros artículos que me pide los
Por su parte, Idiarte Borda no rehuye las consecuencias tendré ,muy en cuenta y haré to<lo 1o' posible por ver si al-
de la tremenda culpa y como otros golbernantes de su laya, go más puetlo cons'eguirle.
aclelanta el pecho, ufano, para llamar a sí la responsa;bilidad "Quedando cotrro sicmpre a sus órdenes, tengo el agra-
presente e histórica del régitnen que preside. do de salurlarlo y descarlc fcliciclacl. Miguel V. Bardier'".
-
Es la eterna inconsciencia de estos Césares sin púrpu-
ra, trabajados por la mo'rbosa vanidad de ridícula y desbor- Arvnos ?oro la Reuolución
dada egolatría. Es interesantc o,bservar cómo los rev'olucionarios de

Sin ernib,argo, escrita con tinta violeta firme y estrera- 1897 obvian las dificultades opuestas al propósito de hacerse
da letra caligráfica, una carta hemos encontrado en la que de armamento.
el fir,mante ha,ce una alusión al "Vasco Icliartc Borda", la Ofrecerqos dos cartas de Antonio Defranqui, de Rosa-
única entre centenares de nuestro arohivo' ctr (luc $G nom- rio de Santa Fe, en las que se perciibe claramente el esfuer-
bra al repucliado gobernante y sc lc mnlrlice con frosc de zo realmente titánico, que realizan los conspiradores buscan-
fuego. do armas. También de una de ellas surge Ia desconcertante
&1 RICAR'DO PASDYRO
1897. BOR]UA Y TIE¡IRR,A 85
sospecha de ha,berse pfoducido una interferencia con propo-
sitos subversivos del ex-dictador Latorre quien, clesterrado et negocio de ,los dos mi1 fusiles, que seg,rin el encargadro'
en la Argentina, nunca abandonó definitivamente la idea de aquí es nego,cio realizado y vendrán a recibirlos mañana o
reconquistar su antigua influencia y tpoder en el país,. pasado.
"Rosario, Di,ciembre 17 de 1896. "Este señor tiene la creencia que esa compra es para el
- Querido Antonio:
AcaIba de estar conmigo la persona que ofrecí¿ los mil fusi- comité revolucionario nuestro; según tu telegrama no es
les y me mostró un telegrama en que le dicen que compran para nosotros.
hasta cuatro mil al ,precio de $ 35.50 convenido. Da el tele- "¿Quiénes, pues, son los compradores? ¿Serán cosas de
grama rcomo negocio rhedho. Latorre? ¿,Serán los descontentos c'on Borda allí en Mon-
"A mi me ,mostró una carta de la misma persona que tevideo, o será el gobierno nacional o,el provincial a fin de
hace el telegrama, en la cual le pedían que los, fusiles debian desar,mar a Ia oposición ?
ser con bayoneta y cartuchera, cluya no fué contestada y "El encargado aclui me asegura que Ja negociación se
según el telegrama de hoy parece que hacen el neg,ocio sin hace baj,o e'l concelpto que las armas son para revoluciona-
ese requisito. rios orientales.
"Ahora 'bien, este 5eñor me dice que haciendo el negc- "Veremos en qué queda este misterio.
cio aquí, los daría a[ precio de $ 33, incluso los mil tiros. "A otra cosa.
Que tienen disponibles dos mil, entre no, menos de 5ffi con 'rHe pasado y estoy pasando un mal rato.
m¿Chetes y una cantidad de bolsas para munición que irán. "Los 40 del comandante Baez ¡esultaron en mal estado
incluídas en el pre,cio de $ 33. y no se recihiero,n, así es que me veo en serios apuros para
'lCreen, pero no aseg'uran, que los machetes alcanzan comtpletar el número; sin e,mbargo, espero tenerlos prontos
a 800. para mañana.
"Me parecer pu€s, que si este negocio es para nuestra "Pueden contar con ellos, como cosa casi segura. Esto
Junta, es más conveniente hacerlo aquí por la rebaja que n,o le digas a Golfarini, pues de un modo o de otro los lileva-
hacen por las causas indicadas anterior'mente. remos,
"He quedado convenido en que espere contestación de "De vapores te diré algo mañana.
ustedes 'hasta mañana a las 12. Si no me avisan nada rlste- "Te saluda con cariño. A. Defranqui,".
des él hará el negocio con los de Buenos Aires. -
En otra carta de fedha 30 db Dicien¡,bre de 1896, De-
"Espe1ro, ,pues, que tan pronto como recibas ésta, me franqui cormunica: "tenemos prontas, limpias y arregladas
contestes telegráficamente, para darle respuesta a este lfr armas, entre ellas 50 con maclhetes, a;lgunas bolsas de
señor. munición, c_ananas, etc.
"Te saluda con cariño tu A. Defranqui".
- agroge - hay aquí uno
amigo,. "En cuanto a vapor con ca-
-
pacidad para 4O0 ,o 50 ho,mbres que haría el viaje a la Bo-
"Rosario, Diciembre 18 de 1896. - Querido Antonio: ca del Bravo ,,cargando la e*pedición en un punto cercano
Reci'bf tu carta / dos, telegramas. Esta,nros intrigados por al Rosario"
86 RICTA,RI)O rPA§EYRO 189? - r.9,35 87

VIII ción 'hásica, diluyéndose las energías propu,lsoras que pu-


dieran orientarlo y volverlo fructífero, en el mar sin orillas
1897 - 19¡15
de las presunciones optimistas.
No es por mera fruición detaltlista que hemos reprodu-
Los revolu,cionarios de l§7 martil,lan constantemente
s'obre esta necesidad: formar un núcleo ar,mado y discipli-
cido la documentación reveladora de algunas intimidades del
nado que sirvier¿ de ,base para un ejército ciudadano te-
proceso revolucionario.
niendo en cuenta que era imprescindible ,batir las formacio-
Nuestro propósito es, por el contrario, mostrar a las
nes mercenarias gubernistas, único sostén, antes como aho-
generaciones actuales que siemtpre han existido, oponiéndo-
ra, de las olígarquías.
se a la acción directa contra los reg'ímenes de faerza, las
misrnas dificultades prá,cticas y los mismos conflictos mo-
A eso, pues, se cncarniuaron sus esfuerzos, a ese fin se
c,oFcretaron todas sus energias.
rales.
Ilemos visto lijeramente fa conspiración por dentro.. . No se ltenó en Enero tan erlcmental previsión. No exis-
Desfilan ante nuestros ojos, ,moviéndo,se con tosuda per- tió, en el país ni fuera de é1, un solo foco cdhesionaclor que
sirviese de base, no ya para la formación de un ejército, si-
severan'cia, ,cada uno de aquellos hombres, como todos tra-
bajados por sus pasiones y thumanas reacciones, pero que
no par¿ ensayar una resistencia eficaz frente a un solo ba-
se trans'forman, instantáneamente, en una rigida voluntad
tallón gubernista.
al servicio de la Revolución, cuando les llega el turno de ac- Fuera de la sangrienta acción de Paso Mor,lán, un éxi-
tuar. to de la temeridad revolucionaria del que no se saca prove-
No se rha pa[rpado ahora, acaso, el mismo fenómeno ? cho alguno, no'se produce en el resto del territorio de la Re-
pública una sola concentración insurgente que cumpla la
¿No han surgido corrientes contra revolucionarias estan-
do, ya en mardha, la Revolución ? No se ha tropezad,o con etapa elemental y rudimentaria de toda revolución: embes-
infidentes y con traido,res, con simuladores o elsmentos to- tir, ,ludhar, ,clesplazarse derribando 1o que pueda derrlbar,
talrnente .in'capacitados, ,por su simplici'dad mental, para to- golpeando con mano dura cuando no le sea posible vencer el
da acción? obstáct¡lo.

Quizis el ambiente popular fuera, en 1935. mucho m,ás Repetiremos aquí un concepto ya expresado en otra
favorable a la Revolución que e¡ l§7. Pocas veces en el oportunidad.
país ha sido más totalizado el repudio al tági,men de gobier- Los caídos en Paso Morlán son ftré,roes en acción. So-
no im,perante, como el que se observa en el 'período 1933-35. bre sus frentes no se posa 'la palma de la sulblime pasividad
Hay, por consiguiente, una neta conciencia revolucio- del martirio. Soldados activos de una causa generosa, des-
naria en acción. Só1o resta encalzada y diriginla al objeto agravian prácticamente a la ciudaclanía ultrajada e indefen-
práctico que tornaría fecundo su estallido. sa muriendo luchando, disparando sus fusiles vengadores so-
Y esto es, precisamente, la falla fundamental del frus- bre el pecho .de Ia oli,garquía.
trado movímiento de Enero de 1935. Careció de organiza- Esa es la Revolrrción.
fJE RI'C.&RDO PA]SEYR.O 1897 - 1936 89

Al Norteuna columna de 600 hombres constituye el nti- ,Son razones suficientes para con,formar al más impla-
cleo mayor que se agrupa y pretende formaTizar un ejérci- cable de los inquisidores. Dejando de lado, porque ahora no
to. Sin embargo, el medroso y asustadizo temperamento de interesa, el grado de respo'nsabilidad que le corresponda se-
los ,observadores m'ilitares gubernistas la supone formada gún sea la expresión de hechos que establezca el veredicto
pó¡ tres mil ciudadanos en armas ! definitivo, es el caso de preguntarse: qué preparación, qué
El briliante cronista de la "División Cerro Largo" con- Olementos, qué organización, qué directivas regían el plan
firma el dato de que no pasaban de 150 los que tenían arrnas. revolucionario del otro partido que dió la consigna el 28 de
El movimiento de 1897 es objeto de un meticuloso cui- Enero?
<lado. Los 66n5,piradores tra,bajan de firme reunienáo ele- Como los hechos demuestran concluyentemente 9ue ese
mentos y tratando de que, por lo menos, por dos puntos partido al rno,mento de lanzarse a la acción directa no con-
npuestos se produzca la invasió,n: a1 norte Saravia y Mena taba con preparación, ni ele,mentos, ni organización, ni con
y por el sur, Lamas y Núñez. directivas eficaces para hacer Ia rev,olución, sería obligado
En 1935 la bizarria del jefe revolucionario, veterano de deducir que el éxito debió cifrar'lo en Ia eficacia con que
1897 tamtrién, 1o induce a internarse por la frontera b¡asile- acometiera 1a empresa el otro partido.
ra con media docena de amigos y escasos elementos. Zava' Y en últirno término, e,liminando incógnitas, podría lle-
Ia Muniz halbla del 'lparque de la Drivisión" dbjetivado en un g'arse a la conclusión, como f'o establecíó en su manifiesto
pequeño "Fo,rclt' clue sigue a la columna. final el jefe revolúcionario, que la verdadera causa del fra-
En 1897 se cortan líneas telegráficas, se obstruyen caso hay que buscarla en la deserción de algunos jefes mi-
puentes y no hay un sólo rincón señalad,o del país donde, litares gubernistas que no cum'plieron la palabra empeñada.
obedeciendo a una consigna estipulada, no se produzca ttna No trace,mos ningún carg'o, ni deseamos se dé a nues-
cor¡centración revolucionaria que ha de moverse, después, tno's juicios otro valor que el derivado de una dbservación
con rumbo anticipadamente trazad,o. objetiva de los hechos. Ilemos sostenido antes de ahora, que
En 1935 todo el ,país se conmueve al circularse la con- 1a o,posición porpular al régimen terrista es implaca'ble, en-
signa del alzamiento; pero no ,hay concentraci,ones, no hay conada, erizad,a de inextinguible agresividad. Pero la revo-
coordinación de movimientos y los ciudadanos, sin armas, lución que se merece y habria que hacerle aun no se ha lle-
han de contemplar, córno el gobierno no encuentra la di{r- vado' a cabo poryue una revolución es el fruto de un redu-
cultad de una sola línea telegráfica interrumpida, de una
cido número de voluntades realizadoras aplicadas a ese pro-
sola via ferroviaria cortada, de un sólo puente inutilizado.
pósito, trabajando en e,l silen,cio fecundo de la conspiración
Se argüirá: uno de los partidos comprormetidos no acu-
que excluye, desde luego, la olamorosa y Permaflente agita-
dió a la cita... Demos por admitido ,que ese partido no co-
laboró en la empresa revolucionaria por estas razo,nes: por- ción de grandes masas, cuánto m,ás gtandes más incondu-
que no quiso, porqEe no ptrdo o porque hubo confusión y no cent€s al fin prrictico de oponer la fierza sin organizar a la
se entendi€ron sobíe I fecha exacta del pronunciamientc, flrc¡za ya orgafli.zada.
RICARDO PA]SEYRO 180? - 10,85 9t
90

'Comprendemos que la ansiedad pública debe tener ttna


l'ara confiar en la reacción det mi'litar rgubernista, es
válvula de escape en estos casos y que los dirigentes respon- trecesario no conocer su mentalidad, su moral ni sus [imi-
sables lleguen, a plantearse la disyuñtiva suprema de "no ha- tados alcances intelectuales' Por 1o menos el militar con-
de oráneo no sólo por edad sino
cer nada" contra un régimen unánimemente repudiado o temlporáneo
"hacer algo", imperfecto, desorganiza'do y azatoso, con tal pror los amoral s que inducen, al uno, a la
dictadura y a I iciar la ilusión de un retorno
de dar satisfacción a la conciencia revolucionaria que pug-
a irracional preponderancia de clase, ese, por lo menos' es
na por hal,lar adecuada cristalización.
Pero aún asimismo anotamos en el movim'iento de Ene- un ser orgánicamente tallado para ofrecer' como dice Vaz
ro falta de adaptación a la táctica más eficaz de acuerdo a * Ferreira, la blandura pata atriba y la dareza para abajo'
las circunstancias y a los medios disponibles. Clpro que si El militar de 'antañ,o, el de Latorre y Santos, era un es-
péci dio a su servil al
uno de estos "medios" era la confianza y la esperanza pues-
tas en la promesa cle jefes militares gubernistas de ver que esPiritual e le Per-
mití o de valo disPues-
sus espadas contra quien las ihizo desenvainar en M de
1933, sin honra y sin honor, contra la ley, contra la sti- to a afrontar los riesgos de cualquier aventura' Llegaba el
mc¡mento de jugarse y se jugaba sin me'dir riesgos ni cal-
tución y contra el pueblo, bien pudo prescindirse, no ya de
<'fetalles, sino de la otganización fundamental del pronuncia- cular posibilidades. Hijo de sus impulsos, buenos o malos'
miento. no hurtaba el cuerPo al Peligro.
Permítasenos, sin enrrbargo, advertir que esa mism¿ El militar de antes hubiera requerido, para su mejor
racio-
conformació,n profesional, el freno de una disciplina
confianza en la reacción del militar gubernista es' no ya un
nalizada hasta la auto-inmolación como medio de encauzar-
error de detalle, sino básico e irreparable' Hasta FÑt razo-
1o por las sendas de la pcrfección cultural adecuada a la
nes de seguridad, no ya de moral cívica, el concurso del ejér-
época.
cito, hasta ahora sostén y cómplice de la oligarquía, debe Por ese 'proceclimiento Latorre y Santos no habrían dé-
ser cosa sufbsidiaria y tan sólo para tener en cuenta en la jado la impronta cle su garra cuartelera sohre las más luc-
organización del permanente fermento revolucionario que tnosas piginas de nuestra hi'storia política'
crea la situación terrista y todas cuantas, directa o indirec- En camibio, el militar actual, si algo requiere para de-
ta.mente, sean su continuación o s¡l oonsecuencia' volverle personalidad civil, para ponerlo a tono con las exi-
No exageramos ni nos colocamos en el extremo de una gencias culturales de la civilización y la 'democracia, ¡rara
de las realidades posi'bles, si afirmamos rotundamente que remodelar su espíritu anquil,osado por una disciplina anes-
de la situación a que arrastra al país el motín militar y po- tesiadora y e'l ritm'o automático de su vida burocratizada' es
licial de Marzo, no se saldrá 5ino por la depuración drástica la necesidad de arrancarlo de la inicua postración mental
que imponga un movimiento a fondo de las energías y los que lo transforma en un vientre con uniforme, sin que baste
impulsos del pueblo, haciéndose justicia por propia mano' a salvarlo de la dureza del concepto, la decen¿ de jefes y ofi-
92 RICARDO PASEYRO
1897 - 193s 93

ciales fieles a la Constitución y a la República que son a una de las tantas dificultades que deben salvar con perse_
ller- verancia y valor los conjurados:
seguidos, vejados o destituidos ante Ia indiferencia cobarrle
o el asentimiento córnplice de sus compañeros de armas. "En seguida se hizo pasar al señor paseyro para que
Es im'posible cerrar los ojos a esta evidencia. Confiar, diese cuenta de su misión a Gual,eguaychú. Explicó lo que
pues, en Ia cooperación del ejército de línea para restarrrar habí4 hecho y las dificultades con que había trope zad,o para
en la Repúrblica el r,égimen de la lega,l,idad y del orden, <le la reunir los homhres y las armas que había tomado la caño_
democracia y el sufragio auténtico, de cuya ex,periencia el nera argentina "Pataní".
mii,itar a sue,ldo ha deducido la inferioridad de su rol de má- En L897, pues, el mismo partido que en Enero de 1935
quina al servicio de quien le paga, para ,matar y hacersq se lanza al sacrificio supremo confiaclo en tla ,colaboraci,ón de
matar sin preguntar por qué, elementos de un ejército que es el único sostén de la oligar-
es incur¡ir en máxima cre-
dulidad. - quía, no toma en cuenta promesas ni ofrecirnientos formu-
Y la invidencia lpolítica en una empresa revolucionaria lados en igual sentido porque descarta que su procedencia
es tan perjudicial como el exceso de previsión. invalida fun'dame,talmente toda posibiliclad de realización.
En 7§7, ante ofrecimientos de una colaboración seme- Y ,en cambio, frente a la proposición concreta de la pro_
jante, la Junta de Guerra no tomó en cuenta las propuestas. rnetida alianza ad,versaria, lla,ma a,l seno de su
Junta de Gue_
La prueba la obtenemos del acta de Ia Junta correspon- rra a quien ha de ,darle cuenta de cómo, por sus cabales y
confiado en sus solos recursos, ha tenido que trabaja r para
diente a la sesión del 16 de Febrero, que dice así:
reatar el encadenamiento de la acción revolucionaria, brus-
"En la ciudad de Buenos Aires a diez y seis de Febrero camente interrumpido por la imprevisible intervención de
de mil odhocientos noventa y siete reunidos los miembros una cañonera argentina.
del Comiité Doctores Tomé, Herrera, ,Golfarini, Moratorio, Enfrentamos ambas actitudes, no con propósitos de
Botana, Terra, Berra y Morales, el señor presidente decla- crítica o censura, desde que ya ,hemos establ,ecido que sólo
ró abierta la sesión siendo ,la una y media p. m. nos guía, al escril¡,ir estas ,Sginas, el comentario olbjetivo de
"El doctor Herrera dió cuenta de una carta que había heohos que no por ignorarse, ocultarse o pasar inadvertidos
recibido del doctor Berinduague avisándole que se le halbía han dejado, por eso, de producirse.
visto en Montevideo para que se demorase el movimiento Para atender esas solicitudes de colaboración la Junta
hasta el 18, pues los colorados llamados independientes de- de Guerra debía alterar sus planes, modificar la organiza-
bían enviar al señor Jacobo Varela para tratar de llegar a ción y hasta postergar la fecha del pronunciamiento. Ad-
un acuerdo con el Comité. mitirlas era, por consiguiente, perder el control de la acción
('También prqpia para subordinarla a los vaivenes de una cooperación
leyó otra carta del doctor Aureliano Rodd-
guez Larreta comunicando que se hacian trabajos activo§ contiragente.

Dara que el General M,uniz se plegase a la Revolución,,. ¡


Y obsérvese además, una coinciden,cia impresionante
Y a renglón segui'do, ,conrsigna el acta esta referencia que surg'e de la lectura del acta reproducida; es el doctor
I

94 RICAR,DO PAISEYRO 1897. BORDA Y TEnnA 9S

Berinduagr:e quien escribe a la Junta de Guerra proponien- EI lector encontrará en ellas elegiremos las más elo-
do "que s€ demorase el movimiento hasta el 18, pues los co- cuentes la vibración viril que-galvaniza a los cruzadosn
-
lorados llamados independientes debían enviar al señor Ja- cxpresada en la objetividad de detalles que aún rhoy asomtrtair
cobo Varela para tratar de llegar a un acue¡do: con el Co- por la espartana tranquilidad con que se documentan sin
mité". presentir Ia educadora lec,ción de cosas que para las gene-
Ese doctor Berinduague e,s el mismo que en el mes de raciones actuales significa la exhumación, ¿ cuarenta años,
Setiembre del año anterior, en la sesión del Directorio ya ,de tan hondo sentjmiento republicano, servido con tan
sen_
descrita ,por BasiLio Mluñ.oz, niega ¿ Saravia en persona la cilla y admirable a,bnegación.
cdlaboración y el apcryo que el caudillo' reclama de aquelia
autoridad partidaria para llevar a cabo la ernpresa revolu- primerag dispoelcionec
cionaria. . . Acta N.'q 4. En la ciudad de Buenos Aires a seis de
La lección de los rhechos es terrible. F
-
ebrero de mil oohoocientos noventa y siete, reunidos en la
IX sala de sesiones los miembros de la Junta doctores Tomé,
Herrera, Golfarrni, Berra, Moratorio, Botana, Morales y
ORGANIZANDO LA EXPEDICION
ciudadanos G6mez y Gotuzzo, el señor Presidente declaró
Fuer<¡n instantes cle pro'funda emoción los vividos por abierta la sesión siendo las 5 y 30 p. m.
los revolucionarios al aproximarse Ia fecha señalada para Manifiesta enseguida el señor Presiclente que conside-
proceder a la invasiórl del territorio patrío. Pese a su apa- raba acto de estricta justicia incorporar ¿ la Junta al señor
riencia invulnerable, la coraza de aquellos formiclables lu- Ventura Gotuzzo y que proponía ,se ls dgsignase para el
chadores tenía un punto dÉbil sobre el corazón... puesto dc pr«r secretario, Flabieltcl<¡ sid«.r aceptada esta mo-
Cuánto más próxima la 'feclha, más irreal parecía la ción por urranimidad, se invitó al señor Gotuzzo a pasar al
ernpresa acometida. Se diría que el instante sqpremo de la salón de sesiones, quedando desde ese nlonrento incorporado
resolución los acerca,ba, más que a un hecho planeado v a la Junta.
calculado, a un sueño irrealizable. seguida se dió lectura a un telegrama del General
-En
No pretenderemos traducir aquí ese estado emocional Saravia manifestando que no se halla,l¡a pronto par¿ invadir
propio de los grandes espíritus, recios en la rega por el el día 1O del corriente )r que enviaba un comisionado.
ideal, pero cuyo fondo pro,fun'damente humano los traiciona leyó una car,ta del doctor Terra manifestando que
-Se
a1 percibir, sobre la sensible entraia, e1' calor de vida que se haJbía ernbarcado con destino a la Isla, donde se efectuaba
ellos mismos dan a il,as creaciones de su carácter y de su la concentración, S hombres y 190 fusiles, y que él partía
temrple. para Santa Fe a reunir nuevos elementos. Manifiesta tam-
Ninguna mejor traclucción de aquellas vísperas heroi- bién que el señor H. l. J. Sthaw, había cedido generosamente
cas, quela o,frecida por las Actas mismas de la Junta de el vapor para el trans,porte del referido contingente, debien.
Guerra que preside el doctor Golfarini. do Ia Junta pagar el carbón.
96 RICARDO PASEYRO
180f. BORDA Y TEI'RRA v7
dió cuenta de una nota del señor Antonio Paseyro,
.---Se
fectrada en Gualeguaychú, dando cuenta de que había en-
para embarcar la gente alli existente con destino a la Isla,
pues su estadía está causando serios gastos y dificultades de
contrado muy dispersos los elementos que en un principio
se habían reunido. Que esperaba, no obstante, tener dispo-
todo ,gÉnero. Se acordó contestarle tetregráfica,mente orde-
nando la rem'isión de ese contígente, ya sea en lanchas o
nibles dentro de b,reves días unos ciento y tantos hombres,
vapor a la Boca del Bravo donde lo esperará el vapor "rOres-
'pero que le era indispensable Para realizat esta operación,
se le remitieran quinientos pesos mln.; manifiesta adeniás tes" para trasladarl,o y conducirlo al punto de ,concentra-
ción.
hat»er en esa localidad 70 armas.
Se resolvió enviar la suma pedida por gir'o telegráfico' Mayor Lamas efpuso el plan de campaña que se
-El
le había encomendado, dando extensas explicaciones que la
--+Se resolvió que se al'quilase una sala en Ia calle Inde-
pendencia f§5, para instalar la Junta en ella. Junta oyó con verdadero interés. No pudiendo expedirse so-
bre tan difícil materia la Junta resolvió tener en cuenta el
informe del señor Lamas y atdoptatlo o modificarlo así que
Preparativos: el Plan de camPaña
los trabajos lleguen a su terminación.
Acta N.o 5. En la ciudad'de Buenos Aires a ocho de
-
Fel-¡rero de mil ochocientos noventa y siete, reunidos en el Yías férreas y Una
telegráficas. gertidn
desconcertante
-
del Ferro Carril Central del Uruguay.
local de sesiones los señores miembros de la Junta, doctores - Aprestos
Tomé, Herrera, Botana, Berra, Morales, Moratorio y se- Suerrero§.
ñores Góme z y ,Gotazzo, con asistencia del señor Mayor
Acta N.e 6.
Lamas. - En la ciudad de Buenos Aires, a nueve de
Febrero de mil ochocientos noventa y siete, reunidos los
El señor Presidente dió cuenta 'de que los señores Nata-
lio y Mancini le han comunicad,o por esquela que a conse- miembros de la Junta doctores Ton:Lé, Herrera, Berra, Bo-
cuencia de las modificaciones pedidas en los uniformes que tane, Moratorio, Morales y señores Gómez y ,Gotuzzo, el
se les, encargan no les es posiNe hacerlos por el precio con- scñor Presidente de,claró abierta Ia sesión. Se dió lectura del
venido y so icitan una bonificación de treinta centavos en acta de fecúra 6 de Febrero y fué aprobada. El señor Presi-
cada uno de ellos. dente hace salber a la Junta que se encuentra presente el
Eldo'ctor Golfarini agregó 'que posteriormente había señor D. Ramón Suárez con quien ,puede cambiarse ideas
arreglado con dichos señores que lo5 harian al precio antes sobre el mejor medio de inutilizar las vías férreas del centro
convenido, pero que en comrpensación no hatian el descuento de la República. Se lhace pasar a dictho señor y concedién-
estipulado del 5 olo. La Junta aceptó el arreglo celebraclo dosele la palabta, expuso: que el Gerente del Ferro Carril
por el doctor Golfarini. del Uruguay le haibía dictro que no había necesídad de que
lectura a una carta y un telegrama del señor los revolucionarios inutilizaran puentes y trozos de vía fé-
-,Se dió rrea, pues que estando cuadrillas de peones a distancias cor-
Ptseyro, de Gualeguaydhi, dando cuenta de estar Pronto
tas, podían ser intimadas para verificar esos trabajos, sin
98 RI,C,A,RIDO PA§T¡YRO 1897. BORIDA Y TPRRA 99

perjudi,car a l,os intereses del Ferro Carril; que al efecto y dijo: Que habiéndose nomlbrado al Coronel Lamas consejero
para obtener seguridad de que así se podnía hacer escri- de esta Junta en Io que se refería a los elementos bélicos y
biría al señor Gerente del Ferro Carril pidiéndole viniese a planes militares que debieran a(loptarse, era de opinión que
ésta para conferenciar con el señor Pfesidente y siempre se le invitara, a la sesión. Así se ¡esolvió.
que esto fuera posi le. Se apruelba el pensamiento y se auto- señor Pastoriza <la cuenta <le una ,comisión cerca
riza al ,señor Suárez ,pata escribir o entenderse personal,- -El
de Saravia y dice: que óste cuenta con 7ú fusiles Cam-
mrente con el Gerente. bleurs, 200 fusiles, .50 mil tiros y mil h<lnr,bres, necesitando
señor Millot, presente en la sesión, expuso tam- cinco ,mil pesos oro ¡rarn movi,lizarlos.
-El
bién que se comprometía a interrumpir las líneas telegráfi-
cas y férreas en toda la extensión Norte sobre el tlruguay, Que cl Coronel Mcna ticrrr, 500 firombres, pero necesita
pero 'que no podía estar pronto antes del 18 del corriente.
tanñién cinco mil pesos oro.
Se Ie pidió hicie¡a un presupuesto .de todo lo que fuera pre- El Glmité resuelve qrre no cncontrl,n(lose con el dinero
ciso, quedando en entregarlo al día si,guiente. para atender esos ,¡rdidos, por rnits justos (luc se rcconocen,
lectura de una nota del Comandante Chaves, no puede por el mom,ento accecler a ellos, es,perándose a gue
-Se da
solicitando cajas y clarines que necesita para el campamen- las entradas de dinero lo permitan.
to en la Isla. Se acordó remitirle cuatro tambores y dos
clarines. Se ajusta la máqfrlna

-Se da lectura de una nota de D. Justo González antn- Acta N.' ló.
ciando t¡aber embarcado 49 hombres para Ia Isla y solicitan- - Err l¿ ciudacl de Buenos Aires a veinte
do trescientos pesos para el segundo jefe de su Batallón. Se y uno tle Febrero <le mil ochocientos noventa y siete, reuni-
acordó concederle en virtud de que ,había entregado once dos los miemibrc¡s dc la Junta doctorcs Tomé, Herrera, Gol-
fusiles. larini, 'ferra, Bcrra, Moratorio, Botana, Morales y señor
da lectura de una nota del doctor Terra, comuni- Gómez cl scflor Presidente declaró abierta la sesión siendo
-Se
can«lo haber embarcado en Rosario 90 homrbres y 190 fusi- ,las l0 p. ,m.
tcs, y tliciendo que sigue para Santa Fe donde embarcará Ia Acto continuo se tomaron las resoluciones siguientes:
gente allll existente y 3m fusiles y 400 lanzas. Archívese. 1.0 Tomar un v¿por que con el "Orestes" transporte a

I-amas, Saravia y Mena


la Isla de Olivera los 139 hornbres que fueron traídos por
la cañonera "Paraná", más oohenta que hay listos en el co-
Acta N.r 10. E,n la
ciudad cle Buenos Aires, a diez de rralóq de la calle Cavia.
-
Fórcro dc mil ochocientos noventa y siete, reuni«los to¡ 2.' Ernvia¡ al doctor Terra al Rosario para que inter-
mlcmbro¡ «lcl Comitó doctores Tomé, Herrera, Golfarini, venga en el envío a l¿ Isla de la gente reunida y armada por
DGrr¡, Botona, Morntorío y Moralcs y tos ceflores Gotuz- el Coronel Baraldo y señor Ignacio Risso, haciéndo es un
ro y Günor, cl ¡ellor Precidcnte dccloró abiert¡ lr resión y giro por mil pesos mln.
RIC'AjR,DO PA,§EYRO
1897. BORTDA Y TEIR,RA 10!.
1m

3.0 Hacer telegramaa 'Carlos Alberto Antúnez y Aroz- gativa el doctor Tena, designando para ocupar o1 expresa-
tegui pidiéndoles contestación al telegrama enviado at Ge- do cargo al General Aparicio Saravia.
neral Saravia. pasó a tratar enseguida del nombramiento ele va-
-Se
rios dele;gados de la Junta en el ejército.
4.' Llamar al Coronel Núñez después que se instale en
la Isla de Oliveta l¿ gente que debe ir el lunes a fin de acor- EL doctor Herrera manilestó gue a su juicio' era el doc-
dar las últimas medidas relativas a la invasión. tor Terra el «lesignado para desempeñar ese cargo, que bas-
5.0 Tomar un vapor par¿ llevarla a cabo con las fuerzas bata con un delegado que llevase instrucciones precisas de
del Coronel Núñez y en caso necesario apoderarse de un va- la Junta.
por de la carrera que lleve handera oriental. Habiénclose adherido a esa indicación los señores pre-
6.0 Pasar a la Comisión Auxiliar recolectardora de fon- sentes fué designa<lo el doctor Dttvimioso Terra para des-
dos pidiéndole remita los que haya reunido, antes del 3 de empeñar el cargo de ddl,ega«lo de I¿ Junta <le Guerra en el
I\Iarzo próximo. ejército.
7.i Hacer gestiones para obtener la devolución de las resuelve que los secretarios «le los Jefes en cam-
-Se
p,aña sean asimilados a Tenientes Coroneles. En tal carác-
armas que tomó la cañoner¿ "Parani" a la expedición que
venía de Gualegua¡rohú. ter se designa en comisión a lros señores doctor Mario L.
B.o Mandar dos oficiales armeros a la Isla par¿ reparar Gil y Antonio Paseyro.
todas las armas. Enseguida el doctor Terra leyó un Proyec- resuelve también pasar nota al doctor Alberto Le-
to de manifiesto que deberí¿ lanzar la Junta dirigiéndose al -Se
rena de San José y Comandante Gotzález de T'rinidad ha-
país. cién,doles ver la necesidad imprescindiible de que el día que
se J,es in<lirrlue las fuerzas de San José y Flores se aproxi-
nlen a la costa con caballadas a proteger la expedición que
Lbe últimos toq¡¡es de úa organizasiín.
- E!
egoí'emo
de los sdinerados del partido rlcrbia salir rlc las Islas.
-.",Lhsegui<la se labró ttn acta que fué firm'ada por to-
Aicta N.e 17. En la ,ciudad de Buen,os Aires a veinte
y tres de Febrero-de mil ochocientos noventa y siete, reuni- dos los miemlbros tle la Junta, haciéndose solidarios del cré-
rlito pedido al Banco dc la Nación por l¿ suma de 15.000 pe-
dos los miem,l¡ros de la Junta doctores Tomé, Herrera, Gol-
sos monecla nacional, y qtle dice así: "Buenos Aires, Febre-
ferini, Terra, Moratorio, Botana, Moral,es y Coronel Lamas,
cl rcñor Presidente declaró abierta la sesión sien'do las nue- ro 72 de 1897. Reunidos los miemibros de la Junta cuyos
nom,bres se e{presan al mar,gen y que suscriben esta acta,
vo y cuarenta y seis ,p. m.
erl vista de su objeto sc abrió la sesión bajo Ia presidencia
Acto contínuo el señor Presidente ir¡dicó l¿ convenien-
del doctor Juan A. Golfarini. ,Se puso a consideración el es-
cl¡ do dorignar al general en jefe asi conro un representante
tado financiero de la Junta y las dificultades con que lucha-
dr lr Juntr cn cl ejército, Después de un crmll¡io dc ide¡s se
ba por falta de recursos pecuniarios debido en gran parte al
vot¡ rl t. nombrl un gencral en fefo lnterino o los efectos
egoismo de casi la totalidad de los horrlbres de fortuna del
dr lr tu¡rr¡ ¡cturl y ruult. ¡flrmrtlv¡ vot¡ndo por la ne-
RICA,RTDO PASEYRO 180?. BORDA Y TE,RRA 103
lü2

partido. Después de indicarse varios medios de salvar esta barco en las cercanías de la Agraciada la gente de Dolores
dificultad que no satisficieron a la Junta ,porque todos ellos podría acercar 100 caballos'
requerían un tiempo de que no puede disponerse, e1 docto,r Coronel Lamas manifestó, en vista de la carta que
-El
se había recibido del Comandante Gonzá|ez diciendo que no
Morales manifestó que a la altara a que habían llegado los
trabajos no era posib,le retroceder y que en consecuencia [a podía levantarse ihasta después de 48 horas de conocerse la
Junta derbía arbitrar los recursos que faltaban aunque p,ara invasión d.el General Saravia, que había conveniencia de oír
ello hubiese que hacer cualquier género de sacrificios. a los señores Pita y Rodríguez de San José'
El doctor Terra apoyó esta indicación y manifestó que Estos señores manifestaron quc p'otlían asegurar que la
Ia manera práctic¿ de realizar la idea indicada, sería que )a gente de San José estaría el día y cn cl sitio indicados con
los carba¡l,los necesarios para protegcr su desembarco'
Junta gestionase un préstamo de treinta mil pesos moneda
nacional en el Banco de la Nació,n, bajo la reslponsabilidad En vista clc esto se cottvitlo en tnantener las resolucio-
de todos los miemb,ros de la Jwta; que esa responsabilidad nes anteriores.
era de presumirse que no se volviera muy onerosa desde que No habiendo más asuntos que tratar se levantó la se-
todos los fondos ,que entrasen fuesen destinados a Ia amor- sión siendo las seis y treinta de la tarde.
ti:'zaci6n de dicho préstamo. Manifestó dicho señor que pa-
Saravia está pronto. lMédicos para Ia Revolución' La
ra facilitar Ia operación ofrecía un terreno de diez cuadras - -
situado en el Partido de Barracas al Sur, cuyas escrituras Gom,ieilónEiecutiva
pone a disposición de la Junta. Después de breve discusión
y aprob,ada dic[ra moción se encargó a los doctores Golfari- Acta N.o 19. En la ciudad de Buenos Aires a veinte y
-
ni, Berra y Morales de gestionar el préstamo. cuatro de Febrcro de mil ochocientos noventa y siete, reuni-
dos lo miembros rlc la Jurrta tloctorcs 'lonré, Ilerrera, Te-
No se modlifica el plan rra, Golfarini, 13errn, Mtlratorio, Ilotana, Imas, Morales y
scñorcs Gómcz, Gotur.zo, Snriüh y I(equena el señor Presi-
Acta N.o 18. En la ciudad de Buenos Aires a veinte .y dcnte dcclaró abierta [a scsión siendo las nueve y trein-
-
cuatro de Febrero de mil ochocientos noventa y siete, reuni- ta o. nt.
dos los míembros de la Junta doctores Golfarini, Terra, Be- El seftor Presidcnte lcyó dl telegrama ld'el General Sa-
rra, Morales y señores Smitfi y Requena, e1 señor Presiden- ravia diciendo estar pronto para invadir el primero, como se
tc dcclaró abierta la sesión siendo las cinco p. m. le había ordenado.
El señor Presidente dijo que el señor I{aedo tenía algo Propuesto enseguida quc se nomll¡rase una comisión
qUC cornunicar a la Junta. ejecutiva de tres miembros Para q re con plenos
poderes para tomar las últirnas di relativas a la
El ¡oñor Haedo dijo que la gente de Trinidad estdbe Lamas y Nú-
pró*ima invasión al mando de los
Dt0nt¡ y dcteeha ssber €l día de la irrvasióu, y si se había
gfmbl¡do rlgo rl plan. Que en caso de efectuarse el des,em- ñez.
,)

iu IU,CAN,DO PASEYRO
1897. BORDA Y T'ERRA 105

Se resolvió nombrar para formar esa Comisión ¿ los ,se_


ñcres do,ctor Golfarini, ,Coronel Lamas y doctor Morales. sanción se imponía, a fin de activar y ultimar los hechos a
producirse.
El doctor Terra propone se nomb,¡e una comisión pro-
visoria y se designa para formarla a los doctores Berra, Bo_.-. Ese pliego, proyecto de invasiones, fué arnpliado por los
tana y señor Requena. señores Coronel Lamas y doctor Morales, resolviéndose los
El señor Presidente da cuenta de que va una comisién puntos siguientes:
de médicos para incorporarse a las fuerzas del General Sa- l.? Elección de desemharco en Puerto Sauce, de acuer-
ravia, que se ha dado lo,s útiles necesarios al d.octor Save_ do con la Comisión del Departamento de San José, repre-
rio y pide se entregue algún dinero al doctor Vidal y Fuen- sentado en aquel acto por los señores Manuel Rodríguez y
tes para que haga telegramas comunicando Jo que ocurra en Pita, quienes bajo Ja m,ás formal promesa y de acuerdo con
la frontera. los comrpromisos anteriormente contraídos con la Junta se
Se votan 100 pesos oro co,n autorización para girar ma- comprometieron a aportar de mil a dos mil caballos en el
yor cantidad en caso necesario. lugar del desemibarco, sin otra excusa que el aviso dado dos
'dias antes del rpasaje de la im,po,sibilidad del heoho por fuer-
x za mayor,1o que de parte a parte se comunicaría y para cu-
La rCornilsión ,Ejecutiva. El juramento. Lugar de la yo e,fecto se convino la clave especiall telegráfica con dioho
invasión. - -
Se precipitan los acor¡tecimientos señor Pita, quien que,dó a la vez encargado de hacer prac-
- ticar la destrucción de vías férreas en lugares indicados, te-
Acta N.o 1. En Buenos Aires a veinte y cuatro de légrafos, telé,fonos y todo Io que imposibilitara a 1as fuerzas
-
Febrero de mil ochocientos noventa y siete, reunidos en el del gobierno para la movilidad de sus tro,pas.
local de sus sesiones la Comisión Ejecutiva de la Junta de
Quedó igualmente autorizado para llevar la pala;bra de
Guerra, nombrada en sesión última, compuesta por el doctor
orden al sefior Pampillón, convenida con el señor Smith, y
Jrran Angel Golfarini com,o presidente y los señores doctor con él o sin é1. El co,mpromiso cle reunir caballada al día si-
Carlo,s M.a Morales y Coronel Diego Lamas, el presiden-
guiente del desembarco, delbía ser un compromiso formal,
te declaró que de acuerdo ,con las prerrogativas y derechos dado quc de cse hccho depenclería en gran parte el éxito de
con que la Comisión ha,bía sido investida, lo primero que de-
la expedición ¡ realizar. Este punto fué aclarado y precisa-
bía hacerse, era el juramento y formal promesa de que todos
do en todo sentido, para que en ningún caso se alegara ig-
y cada uno de los rpuntos tanto en el orden político como fi- norancia respecto a la necesidad de su realización, debiendo
nanciero a ,que los primeros más de una yez estarían liga-
desde el arribo del señor Pita a San José empezar los tra-
do¡, debían ser de la másr a soluta reserva, con st fin de bajos en ese senticlo y rati,ficar el dia del desembarco que
¡rribar a resultados inmediatos y prácticos. desde ya se convino fuera...
n\¡l Oe resol,rríó. 2.u Se convino en telegrafiar al señor Gereral Aparicio
Eil doctor Golfarini presentó un proyecto general de
Saravi¿ en términos que no dejaran duda alguna de la fecha
lnvulono¡, quc cn general había sido ya estudiado y cuya precisa del mor':miento que debía se¡ simultáneo y combi-

':I;:;:#j7
(

16 RICARJDO PASEYRO I
1897. BORTDA Y TERRA LO7

flado, refor zandl lse envío telográfi'co por medio de un co- Enviar a ,las Islas los trajes militares cornprados.
misionado ad-lhoc que lo sería el señor doctor Alfredo vidat 8.e Encargar al señor Coronel Lamas de la organizaciín
y Fuentes, quien debiera trasmitir inmediatamente de trlegar de los servicios tetregráficos, destrucción ide vías, etc.
a cualquier punto de Río'Grande, telegrama al General Sa- 9.0 Ofbligación del traje militar en el ejército.
ravia y diariamente a nosotros en todo lo que se relacione 10.0 Plan comhinado, encomendado al señor 'Coronel
con el número de horflbres, armamento, etc., del General, a Diego Lamas.
cuyo e,fecto se autorizó al doctor Golfarini para convenir la 11.0 Tener en vista varios respetables extranjero5 para
clave con e1 doctor Vidal y Fuentes. comisionarlos a varios puntos del territorio Oriental.
Al doctor Vidal y Fuentes se le adelantaron 10 pesos 12.0 Nornbramiento de dos escribientes para la copia de
oro y se le autorizó a gitat contra la Junt¿ por los fondos actas, ,c,o,municaciones, arohivo, etc., de,biendo obtenerse úti-
,que necesitata para dar cumplimiento a su misión. I'es de escritorio, un libro para actas; uno para copia de no-
El mismo doctor lleva¡ia una nota para el señor Ge- tas y otro para copia de telegramas.
neral en Jefe en comisión y un fardo conteniendo el mani- 13.0 Obligación de firmar las actas y dar cuerrta al C<¡-
fiesto del Comité Revolucionario. mité de 1os traibajos en general y sólo en casos cs¡recialcs y
3.n Encargar al señor doctor Gol'farini de enviar al cam- a solicitud de los miembros del misr.rro, cn scsítin, sc lcs da-
pamento dos oficiales armeros para compoller y reParar 'llas ría 1o datos pedidos.
armas de la 2.a División. 14.0 Solicitar la cottt,pra rlt: ttlíts arlttltltlt:ttto, cr¡trto así-
5.o Comisionar al doctor Terra para apurar el envlo a rnismo 800 rccarlt¡s, crrcarg:itrrlrlst: «lt: csto al scí'tor Cor'onel
la Isla de los elementos reunidos en Rosario y Santa Fe, Lanras.
tanto en hom:bres como erl ipertrechos de guerra y a la vez t.5.0 ltr.slrlvr.r' l¡r f,rr lltít rlc r,rrl[trcr» rlc lits trollas, fortna-
autorización para tomar o contratar los vapores o vagón lirlarlt,s y ¡rt'ccirttt'irltrcr rk'l crisr), (rllcnrgírrrtlosc de ésto al se-
para el transporte de las tropas al territorio de la República, fior (-1lrottcl Lnrtrnr.
sin que esto obste a otros trabajos de la Junta en e1 mismo ll¡.', l,'ij¡u' ll¡rs sictc tlc la urairana y las siete y treinta
sentido. p. ttt, «lc lt tartle, llara las reuniones de la Junta.
6.e Ordenar al, señor Mongrell su inmediata partida al 17.', Obligacil¡n de dejar const,ancia, escrita y firmada,
llrrrgttay, llevan,do los elementos pedidos para la debida or- sictnpre que sea posible, de los compromisos contraídos.
ganizaci<in de la expedición del Uruguay, 18.0 Resolución de que la'2.a División l1eve Jos números
7.o Conprar 50 espadas para oficiales y 50 revtilvcres L, 2, 3 y 4, tanto la infantería como caba'llería y artillería,
pnre tos mismos ; cien r¡il carttlchos, rlt: cuya operación que- cuando la hubiere.
dó encargado cl doctor Morales, 19.0 Mandar confeccionat 4N municioneras, de alya
Comprar trescictttos nrachetes y .50 lirrrns ; 50 cinturo- operación se encargará el señor Gotuzzo.
ttt, 8m plret botine$ porn trotn¡ y 200 poloinel paro la mis- 20.o Encargar al señor doctor Berra de la adquisición
Glr d¡ cuys opcrocid¡n dcbc Gr¡cor¡{rr§e el doctor Berre' de números 3 y 4 en cantidad de 25O de cada clase'
108 RICAR/DO PATSEYRO
1E07. BORDA Y TEB,RA 109
2l.o Encargar al doctor Luis Santiago Botana de it
conlpra de cinc'o banderas nacionales para 'tros batallones; rnoral que los eleva, limpios y triunfadores, sobre el t,orren-
Sffi banderas celestes y blancas y 20'banderines para guías. te de miserias que fluye, en sentido contrario, bajo la super-
Z2.o Fijar desde ya, gue el Estado Mayor General no
ficie de todas ilas empresas humanas, por generosas y puras
que sean.
depende de los jefes de división sino del general en jefe y
clue si bien, mardha incor,poratdo por el momento a alguna de
Dice así la mencionada carta del doctor Golfarini:
"Buenos Aires, Febrero 27 de L897. Antonio
las divisiones que pasarán al litoral, su misión es asesorar o
Paseyro. Estimado amigo: Entraremos mañana - Señoren pleno
aconsejar las meclidas generales para el éxito de üa empresa.
No siendo para más el acto se levantó la sesión. carnaval público, ya que diariamente estamos en carnaval
político-social.
Con el agua al cuello. Una omocionada carta "Felizmente a mi edad, les cosas se toman ,como deben
^del - Co,lfarini
doctor tomarse, a mi juicio.
"Veo a 1os hombres y sigo los sucesos sin rnayor entu-
Antes de pasar a transcribir el acta de la Comisión Eje- siasmo y en el justo medio, segírn mis pobres alcances, pues
cutiva, correspondiente a la sesión del 28 de Febrero de al fin otra cosa no puede rhacerse.
1897, vamos a ofrecer ia reproducción de una ,carta rlel doc-
"Estoy tranquilo, hago más de Io que puedo y conozco
tor Gol,farini, escrita el día antes, ü de Febrero, y que tra- prácticamente la ingratitud ,humana. Hoy mismo he pres-
duce fielmente la hora angustiosa y espectante que vive la tado un rparticular y señalado servicio al partido y, sin em-
Revolución cuando tan poc'o tiempo falta para convertirse bar,go, he tenido un pe,queño disgusto con una de las perso-
en realidad. nas que aprecio, respeto y estimo.
Es el proceso oculto de todas las conspiraciones libera-
"Los hombres que no tienen aspiraciones políticas c,o-
rioras, la escondid¿ co¡riente adversa que pertur'ba e1 cuida-
mo yo, puede¡ en toclo momento, mirar cara a cara a los
do encadenamiento ,de l'os sucesos. Acaso se requiera mayor
postulantes a los ,puestos públicos y a las dádivas. yo des-
Í.ottaleza e§piritualr y más coraje físico para do,minarla que
precio y sigo adelante.
los necesarios para vencer los obstáculos surgidos del cam-
"Pr,ocurc que ,el señor Coronel Lamas se dé cuenta del
po francamente enemigo.
estado de las fuerzas, de su va!,er moral y material y proceda
Esas pequeñas grandes minucias son las que, en reali-
con verdad y con justicia, que el Cot'onel se dé cuenta de
dad, ponen a prueba Ia capacidad, el temp,le y el valor del re-
lo que alhí existe, pues de ello depende el éxito de nuestra
volucionario. .[-a carta del doctor Golfarini que vamos e
causa, pese a quien pese y salga e1 sol por Antequera.
ofrccer, revela il;a existencia de un escollo interno conspirsn-
"Las medias tintas nada pesan al fin y es necesario dar-
do fundementalmente, pese a su pequeñez y s su entidad
se el lugar que a cada cual le correSponde, sin miedo a na-
dorpreciable, contro el éxito ¡lc ta ceura; pcro ua carta
die ni a nada.
l¡mblán trarunto, prre honor de equellor cruzrdq dc la li-
"Estamos ya con el agua al cuelllo y nlo hay tiempo que
brrt¡rl, lr ¡rlrtcncí¡ dc un londo lncont¡min¡tlo tlc grandeza
perder. Usted mismo con calma, con respeto y con conside-
i10 RICARDO PA§EYRO 1897. BOBDA Y TERRA lll
ración debe procurar que nuestros soldados se den cuenta 'Tanto el doctor Go,lfa¡ini como el doctor Morales des-
«le su misión y en consecuencia que hagan ejelcicio, etc., ctc- pués de realizadas con toda felicidad las comisiones respec-
"ño puedo más ! livas y en momentos de emba¡car en la Estación Retiro los
"Su affmo. amigo y s. s. - Juan A. Golfariní". elementos de que disponia 1a Junta, se tuvo conocimiento de
que por orden del señor Presidente de la República, se man-
l¡oo últimoe toquee. Log expedcionarios so moviliza¡r daDan disolver los grupos que se encontraban en las Islas.
-
nunbo a su destino . Fué necesario servirse de estratagemas de toda clase
para despistar al sinnú'rnero de espías que se encontraban en
Acta N.e ?. En Buenos Aires a veinte y ocho de Fe- la Ejstación Retiro, vigilando no sólo los carro5 que habían
-
brer'o de 1897 reunidos los miembros seño¡es doctor Juan A. llegado con mercaderías sino también a todos y a cada uno
Gol,farini, doctor Carlos M. Morales y faltando por causa de los miembros del Partido Nacional que alli se encontra-
jtrstificada el Coronel Diego Lamas, el señor Presiden,te di- ban; lo que permitió al señor doctor Berra encararse con
jo: que siendo las siete y treinta p. m. quedaba abierta:ia tres de ellos y hacer que la policia de la Capital interviniese
sesión. con esos espías, quienes llevaban su insolencia hasta de se-
I-eída el acta de la sesión anterior, fué aprobada; se guirlo a todas partes y aún a imponerse de las conversa-
dió cuenta de que todas las resoluciones tomadas en la se- ciones del citado señor Berra.
sión anterior habían sido ejecutadas, mandándose a Concep- En virtud de lo e>cpuesto se resolvió:
ción del Uruguay todos los elementos de dinero y pertrechos l.r' Buscar dos o más locales espaciosos como para re-
indispensables para el éxito de la columna y pedidos por eI cibir las tro¡»as que vengan dc las Islas, buscando todos los
señor M'ongrell. elen¡ctttor a ohjeto dc <¡ue scan lo mejor posible tratados.
Habiendo llegado a conocimiento de la Junta, que no 2.r Cr¡¡¡¡i¡ionnr al rcflor Cotu'¿zo pa,ra, r¡ue inmediata-
era del todo satisfactoria la or,ganización de las fuerzas re- mcntc lolicru rtt el vrlpor "()reste$" y rlando aviso de la ac-
unidas en las Islas, se dispuso comisionar al señor Coronel titud del (iobicrnt¡ Nncionnl, prot:c«licra a la internación de
Diego Lamas con el doble ob'jeto de darles organización con- lar tropar cn tui Irlus rcs¡»cctivas, cambiarlas a otras, 5iem-
veniente e informar a la Comisión Ejecutiva de l¿ impor- pre <lc octtcrdo con el scñor Coroncl Lamas si lo enco,ntrase
tancia real y positiva de esa columna. en cl cantitro o en lus [slns y cn último caso salvar las ar-
Qucdó resuelto que el doctor Morall'es se encargase de mas, la munici(in, vcstuuri«¡s y todo lo que allí se tiene re-
tcunir to«los los elementos, armas, municiones, frenos, en trnido, procuran«lo ocultarlo rlo mcjor posihle, ,quedando au-
uns palobra, todo, lo que existiera én los depósitos para ser torizado para ,hacer uso y empeñar el crédito de la Junta
rGmitido cn el dla 28 a las Islas. para así dar fiel cumplimiento a sLl misión.
Quc el tloctor Gol'farini, cn com¡raflla tlel ¡efior Gotuz- 3.0 Resolvióse, además, tomar cn consideración en el
to, prt¡cureron lo$ fucili«lotle¡ ¡rnra la nrcjor remirión de to- dla próximo, con toda calma y meclitación, si debían o no
dor tot pcrttcshor tlc gucrrs ¡ ln l¡l¡, tentar embarcarse de nuevo todas las armas, municiones,
RICAIRIDO PA6SYRO
1807. BORDA Y TERR'A lls
112

€tc.r qu€ debier¿ haberse re'rnitido ayer a las Islas; fxres ese L¡ ftrdón. Lamac ldes€,mbarca en Puerto Sauco
-
emlbarque facilitaría en cualquier ¡nomento el trasbordo de YtNúñez en Conchilla¡
e[[as ,para remitirlas al punto que ss ¿s¡ime conveniente;
pues en ningún caso puede dejarse de curnrplir el com,promi-
Act¿ N.o 4.
- En Buenos Aires a los odho d,ías riC mes
de Lf¿rzo de mil odhocientos noventa y siete, reunidos los
so contraido de rcalizar en feoha fija el movimiento político señores doctores Go"lfarini, Morales y Botana se declaró
acordado. abierta la sesión siendo las siete y veinte p. m. El señor Pre-
4.0 Resolvióse i,gualmente artorizz¡ al doctor Terra pa- ¡idente dijo que antes de darse cuenta de los asuntos en-
tradoe, informarla que, debido a la intervención amistosa
ra avisar a la'Comisión de Minas, la fecha precisa del movi-
dcl ¡eñor Ramón García, él hobía efectuado algunas confe-
miento simultáaeo y combinado en toda 1a República; corno
rcncie¡ con pcrlonsc dc valle e importancia en el país, quie-
asímismo al señor Mongrell en e1. Uruguay y a todos los ie-
nc¡ h¡bl¡n f¡cllit¡do ol cmbarco de las tropss dc las Islas;
fes seriamente comprometidos en el movimiento y con los clemcnto¡ dc primcre filE reunidos equl, tanto en hombres
cuales se tenga clave convenida. Como cn artlculos bélicos, que fueron neces¿rios embarc¿r
5.0 Se reso'lvió solicitar del doctor Terra los transpor- con toda precipitación en los dfas tres y seis inclusive, del
tes pedidos o los trabajos realizados o a realizarse y que de- corriente ,mes, habiendo sido neces¡rio tomer embarcacio-
bían quedar terminados en el día de mañana. nce apropiadas para realizar ton importante operación.

6.0 Resolvióse igualmente indicar a1 señor Teniente Co-


Quc dcbido a elat medidas cl señor doctort')uvimioso
Terre y cl Coroncl Dlcgo L¡ma¡ ecoñpeñados de un grupo
ronel Juan H. Smitlh, la feoha precisa del movimiento, dán- dc uno¡ velnto corrollgion¡rio!, h¡l¡fan desembarcado €n
dole órrdenes de que estuviese pronto para m,arohar con las hc¡to Srucc ol dl¡ clnco como c¡taba convenido, con las
indicaciones que ya se le habían hechq debiendo tener la lucrr¡r d¡ Srn Joré y Porongos; habiendo tenido que aban-
gente preparada y con los elernentos indispensables para el dontr prttc do lr¡ municiones en el va,por "Ernestina R."
cuntplímiento de la comisión que debía deserrrpeñar. dcbldo I un ¡cto de cstrategia que tenía como base principal
gerrntlr l¿ defense de sus fuerzas para un caso de reem-
No habiendo más asuntos que tratar, se levanta la se-
barco, quc hubiera podido tener lugar, si dllas hubieran sido
sión a il'as nueve de la nodhe, habiéndose incorporado antes
fuertemente hostilizadas por las tropas del gobierno.
.de clausurarse la sesión en calidad de vocales de esta Comi-
. Expresó el señor Presidente, doctor Golfarini, que en
sión Ejecutiva, los doctores Jaco o Berra y Luis Santiago crranto a la expedición del señor Coronel José Núñez, ell¿ se
Botana, que habían sido nombrado,s miembros con enterio- tealizó recién el día siete en el muelle de Conchillas, en ias
ridad a esa fecha. Se autorizó al doctor Botana como B€cre- mejoreg condiciones y habiéndose sólo efectuado con alguna
tario de la Junta de Guerra para refrendar exclusiv&mellte precipitación ante l¿ necesidad de salvar el transporte "Will-
k¡¡ actos sucesivos. Juan Angel Golfarini. hei¡n'. De esta precipitación resultó la necesidad de aban-
-
1897. BORDA Y TER,RA 115
RICARDO PASEYITO
tt4
y pertrechos de guerra de muY La despedida fu,é intensa, tocante, sacudidora. Aquellos
donar algunos aartuchos hombres se abrarzaron con la edusión conteni'da que es Ja
poca imPortancia.
^ los días calma que precede a las grandes tem,pestades del espíritu.
Agregó el señor Presidente que 1as sesiones de
La enrrpresa ,que iban a acometer los que partían, no te-
anteriores sólo habían teni'do por objeto dar
cumplimiento a
interés e in- nia, en la historia, sino precedentes trágicos y escarmenta-
resoluciones tomadas, to<las ellas de verdadero
dores. La visión def Quebracho surgía, ahora, en toda su
mediato curnPlimiento. sangrienta elocuencia. Y del Queibracho para adelante tam-
No siendo para más el acto se levantó la sesión'
bién toda tentativa revolucionaria fué imp,lacablemente aho-
gada en sangre. El ejército de línea, disciplinado, fuerte,
La emoción de la desPedida
aguerrido, pertrechado, ametralló siempre con éxito aplas-
Ninguna descripción literaria suPera en realismo
ni
tador, a la ciudadania en armas.
resulta de l¿s ú ti-
aventaja en riqueza ie detalles a fl'a que En el instante de la partida los que quedan miden, re-
'm", ,.t", de la de Guerra revolucionaria y de la Co-
Junta cién, en toda la magnitud de su teme¡aria grandeza, eil gesto
para la
misión Ejecutiva que tomó las últimas disposi'ciones de los que cruzaban el río impulsados por una noble ideali-
invasión, y que dejamos reproducidas' dad cívica o atraídos, quizás, por e1 misterioso llamado de
sesio-
Adivinamos a aquello5 inspiraclos conspiradores' la muerte. . .
argentina o' ais-
nando en una modesta sala en la gran urbe Tiene, ,pues, ribetes de espartana emotividad esta otra
ciudadano' ca-
lados y reconcentrados en medio al tttmulto carta del cloctor Golfarini, que prolonga por escrito el apre-
indiferentes al bu-
minando como obsedidos por su idea fija' tedo alrrazo con que despidió al amigo que parte hacia lo
lficioso ajetreo de la catrle' «le¡t'onrlci«lt¡:
interior que
No hay otro mundo 'para ellos que el mundo "llucnort ,Airc¡, 4 r.lc Marzo <le 1897. Señor Antonio
I,es llcna la vida. Todo lo que no sea
la Revolución es ajeno para -
Prroyro, * Qucrid<l Antonio: Iistc salu«lo de hembra no lo
¡eivindicadora
ellos. No ven otra tu' que 1a gran llamarada rrthferó,
ni oyen otra voz que
que incendia¡á ilos caÍIpos de la patria' "Ltx tlntlor c¡tón tiratlos, la lucha se hará como corres-
conciencias'
la del categórico impeiativo que brota de sus pon«le, fiero cn ln pelca, generoso después de ella y mucho
lAlhora que la go""t civil ha estallado'
que es verdad
buscan-
má¡ trntlrndose de compatriotas engañados.
que soldados ciucladanos se internan, tierra adentro'
"Se le m,an«lan los tiros y la cadena.
áo el Choque con el ejército aguerrido y fuerte que sostiene
"Se le envía un ab¡azo de amigo y de compatriota que
a la oligaiquía, ahora sienten cómo que sus nervios se dis- sabe lo que vale y lo que puede ser queriendo.
-en
tlenrlcn ia flaci<lez que sigue a la hi'pertensión de le¡ cs- "En estos momentos gue pueden ser psicológicos para
gcctrtivas ¿niquila«loras' nuestra causa, séame permitido pedirle disculpas por il'as ge-
' Yo invotlieron I IIa salvado Úa Revolución el ob¡táculo
y de las ni¡lidades hijas de un buen deseo y desnudas de toda pre-
dol tlo, lr vlgllancio de las cañoneras srgent¡nst tensión ridícula: todo por la patria y para la patria.
nrt{l¡a bo¡dl¡t¡¡, llcrto¡ ooJbre ta co¡te I
r
116 RICARDO PASEYRO 1807, BORDA Y TERRA tt7

"Ha llegado el momento ansiado y si


responde e[ país, ?odos se trasladaron entonces a la referida embarca-
no dude un solo momento del éxito de nuestra causa' ción y al1í encontraron al coronel Lamas y al doctor Terra.
"salude al señor Coronel Núñez, un albrazo al doctor Bounement trata de explicar lio que sucede : las lluvias re-
y
Gil a1 señor Aroztegui, mis buenos amigos. tardaron los trabajos de descarga de su buque v, a'demás,
"El Coronel Lamas, como el doctor Terra y demás sus máquinas han sufrido un pequeño desperfecto y lleva
compañeros le dirán cómo se ha movido y trabajado su consigo la pieza que hay necesidad de reponer.
amigo. Terminada la explicación, el coronel l-amas, sin poder
'1IJn nuevo abrazo de su afmo. y S. S. Juan Angel contenerse, se pone de pie y asiendo del cuello a Bounement,
-
Golfarini". le dice con el más intimidante acento de que es capaz la
indignación humana:
El último obstácdo en tlerra argentina mismo vamos a salir en este va.por; en él lle-
-Ahora
garemos hasta Ia costa oriental y le aseguro que al primer
No habían sin embargo, todas las contraric-
alpurado, contratiempo lo hago arrolar al agua !
dades los expedicionarios, listos ya para embarcarse' El lu- ,Repuesto de la terrirb,le sorpresa Bounement le suplicó
gar fijado para 7a concentración er¿ Punta Lara' La Junta rnomentos desp,u,és al coronel Lamas que le dejase salir para
áe Gu.rr" había contratado directamente un práctico de ir en busca del "Wiilrlheimr'.
apellido L I transporte "Willheim"; pro-
La respuesta de Lamas fué tajante :
pieclad de con quien, a st7 vez, la Junta
para trasladar [a ex- no se mueve de aquí hasta que lleguemos a
ha,bía esti iciones -Usted
pedición a tierra uruguaya.
co¡tn oriental t
Debiendo estar el "Willheim" dispuesto y a la orden e[
§c lc cxigió, entonces, uno orden escrita a Bounement
día 4 de Marzo a las 10 de la mañana, el antes mencionado grrr cl crpitón «tcl "Willhcim"; aquel queda en tanto dete-
práctico Lungo 1legó a tiempo para comunicar a un miem- nldo cn lo cnmarlt¡ tlel "Leonor R." con centinela de vista.
b¡o de la Junta de Guerra, el doctor ¡4q¡¿il'es, que el trans- Dor horn¡ tlespués salió el "Willheim" remolbado por
porte no estaba listo ni a la orden. cl "flrnertinB R.", vapor que finalmente usó Lamas para
Según el doctor Morales, sus palabras fueron éstas : descmborcor cn Puerto Sauce.
hemos sido traicionados; el "Willheim" está Para apreciar el gravlsimo riesgo que en esos momen-
-!ss¡e¡'
al Puente de Barracas descargando'lana y con la tos se cernía sobre ta causa revolucionaria, baste saber que
¡trecado
máquina descomPuesta ! tas cscenas anteriormente relatadas tenian h.lgar ¿ bordo del
Requerido Bounement por el doctor Morales y el leal 'Leonor R.", fondeado frente a los Talleres de la compaíría
grlctlco Lungo, aquel los entera que el coronel L'ames y "La H.,latense", a pocos metros de la Prefectura marítima.
-u
compoñcrot cc encontraban ya a bor'do del vapotcito Tal fué Ia c?t¡s?, además, de que la expedición se divi-
t'Lonot R," dicra en dos, saliendo primero el coronel Lamas con 20 com-
) 1897. BORIDA Y TER,RA 119
!18 RIOARDO PASEYRO

vcnirle de que Núñez estaba a punto, de desistir definitiva-


pañeros y recién al día siguiente el coronel Núñez cotr el
fnente de hacer la concentración de ilbs fuerzas ante la po'
grueso de las fueraas. sibilidad de que, por lograrlo, su infantería quedase prácti-
La resolución de este jefe de desembarcar en Conchi- camente inutilizada.
ya
llas fué otra previsión salvadora, pues en Puerto Sauce Y la base efícaz de la
esa infantería era, precisamente,
estaba concentrada la escuadril'1a gubernista aguardando
el
Revolución y su ejército, por lo que su desmembramiento
resto de la exPedición a su mando'
hubiese significado malograr todos los sacrificios que im-
'puso adiestraia y prepararla en las Islas.
XI
El 13 de Marzo Don Antonio Paseyro dió alcance a-i
;LA BATALLA DE TRES ARBOLES coronel I-amas y advierte a éste que el coronel Núñez y su
gente están acampados próximos al Paso Navarro, sobre el
El e!ército revdlucionario fué ao'rprendido
Río Negro.
Desem{barcado Lamas en Puerto Sauce el 5 de Marzo' Su intervención es eficaz y contrarnarchando Lamas,
se apoderó de un tren de trocha angosta que hacía
el ser-
que ya [rabía vadeado el Río Negro, se opera al fin la con-
vicio lhasta las canteras situadas sollre el Arroyo Minuano'
junción de las dos columnas.
Con sus a,compañantes o'rganizó un convoy que trans- rCon Lamas marcha el doctor Duvimioso Terra, Dele-
porta, aldemás, dos vagones de armas' municiones y p€r- gado de la Junta de Guerra y autoridad suprema, en conse-
treChos. cuencia, de la Revolución, mismo dentro del ejército en
Poco después de llegar a este punto' se le incorporan campaña.
las fuerzas que mandan los jefes José F 'Gonzilez de
Flores
Hemos de constatar ya aquí la presencia de los prime-
y Marín, Batista y Bastarrica de San José' ros rozamientos entre los comandos de las fuerzas, de las
Inicia en seguida rápi'da mardha hacia el Norte' atra- primeras y recíproca5 inculpaciones respecto a los desajus-
vesando los departamentás de Colonia y Soriano
en la di-
tes advertidos en la otganización revolucionaria desde el día
rección indicada. que las expediciones inician su desplazamiento al abandonar
tas Islas de',ll Paraná.
Al esclarecimiento de todos esos Puntos tiende, pues,
csta comunicación que el Delegado de la Junta de Guerra
pasa fechada el 15 de Marzo,,dos días después de la incor-
poración de Núñez y dos días antes de la batalla de Tres
Arboles. Dice así:
Dclegación del Exmo. Comité Revolucionario.
'tCoata de de Porrúa, Marzo 15 de L§7. -
MoliXes
fo, al frente de un reduci'do contingente de comPañeros' se tler: H¡biendo asumido la representación del Comité Re-
dc¡trcó de la columna y se ProPuso darle alcance Para Pre-
IZQ RICA,RDO PASEYRO 1897, BOR,DA Y TIERRA t?t
volucionario desde fec,ha 3 del corriente, en todo lo que se )
destacar en consecuencia, la alta mo¡al civica y la capacidaa
refiere a las fuerzas del Ejército Nacional Revolucionarioo de reacción del ejército ciudadano enfrentando, entonces, a!
necesito que usted me pase un parte detallado de 1o ocurridt¡ ej,ército profesional de la satrapía bordista.
en las fuerzas revolucionarias que se hallaban en ilh Isla del Vamos a ceder la palabra ¿ dos actores en dicha acción.
Ceibo, desde esa fecha 'hasta el momento de su desembarco Veamos 1o ,c1ue en una minuciosa narración expresa Don
en el Puerto de ,Conchillas, Departamento de Colonia. Miguef, Cortinas:
"Esperando el cunrplimiento de esta or.den en el más "...El día 13, por haber sal¡ido que el coronel Núñez se
breve tiemlpo posible, tengo el agrado de saludar a usted a encontrab,a en el Paso Navarro, ctryo aviso llevó el señor
quien Dios guarde. D. Te¡ra. Antonio Paseyro, cl coronel Lamas ordenó marchar para
"Al señor -
Antonio Paseyro". ese punto <lon<le no5 incor¡loramos. Eran setecientos hom-
bres y lo acompañaban el c«rronel Martirena, comandante
El ejércitorevolucionario, pues, a dos días de una bata- Cicao y Gil.
lla decisiva, se nos presenta roído en su entraña por recelos "El día 14 se nos aproximó el coronel Galarza, man-
y cismas personales que se mani{iestan, tan luego, en las dando unas guerrll,las de rpoca importancia, las que fuerotr
altas representaciones del comando ! rechazadas por nuestras fuerzas causándoles tres bajas.
Destacamos esta circunstancia en los momentos actua- "El día 16 a las 9 p. *. llegamos al Arroyo Tres Arbo-
les como una provedhosa enseñanza paÍa los que suponen les. El ejército mardhó en l¿ noohe en dos columnas yendo
que un ejército ciudadano ,ha de ser una máquina prusiana, a la cabeza de la <leredha el coronel Go¡zález, y a la de la
pensando y accionando con la uniformidad que impone nive-
i2r.luiercta el coronel Lamas.
ladora disciplina de hierro. No ,habrá en este país 1o afir-
mamos rotundamente
-
una sola revollución más, aun fren-
'fA las 3 y media a. m. del dia 17 se tocó diana y a las
-
te a una o,ligarquía de la clase que.hoy sojuzga a la Reph- 4 o ensillar y no se ordenó montar a caballo y seguir marcha
blic¿, .1 se alimenta 1a ilusión de que los hombres que la ddbido B unB gran cerrazón.
hagan han de ser ángeles y no homlbres, precisamente, ani- "A las 5 y medi¿ de la mañana y estando completamen-
mados, sí, de la noble pasión de luchar por la libe¡tad; pero te tronquilos en nuestros fogones con los caballos de la
ta[llados, tambi,én, en la falible sustancia humana que los rienda, se sintieron unas tremendas descargas de fusileria
vuelve criaturas pasibles de las reacciones inferiores y rle que nos hacian los batallones 1.0 y 2.0 de Cazadores a 50, 60
Ios impulsos disasociantes que forman, fatalmente, el fondo y 7O metros de distancia, donde se habian colocado sin ser
de los más fecundos y ejemplarízado¡es esfuerzos colectivos. !entidos".
Es opinión admitida que en Tres Arboles los reyolu- [E§ evidente, por Io expuesto, que el ejé;cilo revolucio-
cionarios sorprendieron al fuerte ejér'cito gubernista, des- n¡¡io fué sorprendido en Tres Arboles. Al irrecusable tes-
pués derrotadq al mando de Villar. No es asl: Ja yerdad e3 tlmonio que precede agreguemos, ahora, la palabra del cr¡-
quc lucron los revolucionarios los soiprendidoc, debiéodose ¡oncl Núñez, quien describe así lo sucedido:
122 RICAR]DO PASEYRO I8,E7. BORIDA Y TERR.A lzt
". . .I{abíamos marchado en retirada evitando combate mente derrotado y des,heoho rpor las legiones ciudadanas del
con las fuerzas ddll general Díaz, qae a jazgar por las noti- pueblo armado en defensa de su derecho y su soberanía.
cias que se nos comunicaron' se encontraban del otro ladc¡ La superioridad del valor moral del so,ldado ciudadano
del Río Negro... y ya teníamos encima al general Viilar! quedó, así, definitivamente consagrada en Tres Arboles.
"sorprendidos en Tres AÍboles por el general Villar, Y el ejército de línea, sostén, hasta a'hora, de todas [as
desplegué rápidamente y en guerrilla la infantería a mis ór- oligarquías, al sentir tan duro castigo 5lsnt€, en sus propias
denes y se ernrpeñó [b lucha. carnes, que ha sido vengada úa carnicería del Quebracho.
"La gravedad de la situación fué inmediatamente com-
prendida ,por todos. Si el enemigo lograba forzar e1 Paso de XIT
Tres Arboles, nuestra ,completa derrota era inevitable y muy
LA DEFECCION DE NUÑEZ
pocos de nosotros hubiéramos sobrevivido a ella.
"El general Villar cometió el error de atacarnos de En la ,historia dc la llevolt¡ción dc 1897 es conocida "la
frente, pretendiendo fotzar el Paso en columna cerrada, con- defección dc Núirez" colno un episodio gravísimo que com-
vencido sin duda de que nos había sorprendido. promete, a fondo, la suerte del ejército invasor y de la causa
'ÍConfió demasiado en esa superioridad y en los efectos que defiende.
de una sorpresa a fuerzas irregul'l'ares, y eso 1o perdió. A su tiempo mucho se escribió al respecto bajo la can-
'rConseguimos réchazar todos los ataques que las fuer- dente reacción de las p,asio,nes que desató la inesperada con-
zas del general Villar llevaron a nuestras líneas. Mi infan- ducta del experto jefe de la 2.a División, la porción más
teria no retrocedió un 'paso ante las furiosas y repetidas discifllinada, útil y eficaz de las fuerzas en campaña.
cargas del enemigo, ni cedió un palmo de terreno' El más Hoy los documentos en nuestro poder nos permiten
leve movimiento de retroceso importaba el triunfo del gene- ¿firmar rotundamente estos dos extremos:
ral Vi'illar y la muerte de la Revolución, y se opuso lna teflaz 1.e
- Que el coronel Núñez,
víctima de su carácter v
resistencia. juguete de las intrigas inevitables en estos casos, defeccio-
"Los dos tratallones enemigos, que pelearon con mayor nó del ejército revolucionario e incurrió en injustificables
bravura el Urbano de Artigas y el 2.0 de Cazadores - actos de derrotismo.
-
estaban deshedhos y reducidos a un número insignificante de 2.e Que el doctor Duvimioso'Terra no sólo es total'
plazas". mente
-
ajeno, a la actitud de Núñez, sino que, como veremo§
Tales los histórico,s testimonios que prueban, si ya no más adelante, la censuró y condenó como perjudicial para l;t
fuera realidad admitida por todos los que están en los cier- causa revolucionaria.
tos antecedentes de esa sangrienta jornada, que aun con- ,Ofrecemos, en lprimer término, un documento inédito
tendo con la ventaja de la discip ina, el número, la organi- n¡ás. Es ,l,a protocolar comun,icación rdel coronel Núñez al
zeción y delll invalora' le factor de la so'r,presa, et ejército gtt- doctor Terra, por la que el primero PrePara ya el terreno
bernista, pese a la valetrtía con que se batió, fué práctica- prrs su separación del ejército. Dice así:
IA IIICANDO PASEYRO 18?9. BORDA Y TEA,RA
t25
"Cornanrlo d,e la 2.a División del Ejército Nacional. Al día siguiente, la 2.c División, ya desprendida rfel
"Cam,pamento en marcha, Marzo 3l de 1897. grueso del ejército, inicia su marcha- hacia Ariigas. ya
no
"Departamento de ,Cerro Largo. Rep. Oriental. son NúñeZ y su escolta, solamente, [os que se encaminan
en
"Señor Representante y Delegado de1 Exmo. Comité de ese rumbo.
Guerra Don Duvimioso Terra. Es el principio de la defección.
"El funcionamiento de las vías de transporte y comu- rEl ,Comisionado e la Junta de Guerra en la
villa de
nicación, el retardo de la concentración cle los elementos de Artigas, Don Ismael yelá,zqaez, en su memorándum pasado
la RevoLución, todo por falta de un plan preciso, son causas, a aquella, dice al respecto:
señor Delegado, que afectan rhond'amente la vida de la Revo- "El 17 recibimos nuevos y alarmantes telegramas de
lución en estos momentos, y si a esto agregáramos el grave Yaguarón dell ,señor paseyro y otros amigo5
decía que Núñez esta,ba con toda su División"n
tr" se noi
error de internarnos en el país sin organización, y 1o que es en'Artigas y
hacía todo género de exigencias al señor paseyro, qu"
peor, sin municiones, se habría dado muerte a la causa cuya .r"
defensa se nos con,fió, y esto sin co,ntar con otro peligro que el jefe interino del punto. Empezaiban no los síntomas,
sino
no es menos serio, el cle quedar a ipie en medio de las sierras. los arreglos r pa,rl. Ia disolución de las ,fuerzas,,.
"§l Ejército no tiene, como es notorio, las municiones Posteriormente, tratando con el propio Don fsmael
Ve_
que tácticamente corresponde¡ian a Ia dotación de un Ba- lázquez, Núñez le exige la entrega de mil
tpesos para corr-
tallón, y por consiguiente se encuent¡a inhabi.litado para prar 25.ffi0 tiros en Ia ciudad de yaguarón.
toda operación de guerra, e intentarla en tales condiciones "AI regresar a Artigas _ prosigue dl aludido C,omisio_
seria una verdadera avent(ra cuyas consecuencias desas- nado, señor Yelázquez varios amigos me pidieron que dc
cualquier modo se Ic diese - la cantidad
trosas no se harían €sperar, Exmo. Señor. pedida, en l¿ convic-
ción de que no era para munición i pero sí para librar
"Este es mi rhumilde juicio como soldado y lo someto al al co_
mercio de la imposición o contribución que se decía
ilustrado criterio de V. E. con la lealtad y )a sinceridad que desde el
día antes les iba a imponer, lo que yo no ,habría
me earacteriza. podido
n'Dios guarde evitar,
a V. E. José Núñe2,,. "Referente a Antonio paseyro, me dijo que clelbía ha_
-
El 14 de Abril, desobedeciendo órdenes expresas en con- berlo fusilado ,y que eso aún podía suceder,,.
lrario, el coronel Núñez, seguido de s a la violenta y extrema actitud por parte det coronel
localidad de Artigas, hoy Río Branco, con Núñez tenía su explicación en la inqueb¡antable
las atribuciones de jefe, especialmente resistencie
An_ opuesta por Don Antonio paseyro a ¡hacerle entrega yolun_
ionio Paseyro. taria de la p7aza.
Núñez conferencia con el doctor Terra y éste anuncra sobre este particurar, y mientras Núñez sitia materiar-
q¡e el jefe revolucio,nario a:bandonará Artigas y acampará mcnte a Villa Artigas con sus aguerridos contingentes,
en Corral d'e Piedra. ocu_
rlc una interesante incidencia reveladora de la enorme ten_
I

RICARDO PASEYRO 1879. EONDA Y TIER,RA tz7


126 \

sión existertte en campo revo'lucionario con motivo de los Uno de los aludidos, el más verborrágico, intentó jus-
insólitos procederes de'Jr jefe'defeccionado. ti{icarse y fandar su 'criterio. No pudo empezar, siquiera!
El contingente adicto a la causa está prácticamente Don Antonio Paseyro ordena que cuatro homhres pro-
acantonado dentro de la población, pronto a resistir por la cedan a detenerlos, disp,oniendo que, embarcados en un bote,
fuerza, pese a la inferio'ridad numérica y de recursos, aI in- sean de inmediato trasladados a la vecin¿ ciudad brasileña
tento avasallador de quienes 'deben ser considerados a la fe- de Yaguarón.
ot¡a desertores del ejército revolucionario. Fué así como el doctor Luis Alberto de Herrera y el
En las varias visitas que Núñez ha hecho, seguido de escritor Javier de Viana reciben, del jefe revolucionario, la
escaso acompañamiento, a la plaza, ha adve¡tido' claramente merecid¿ sanción a que se thacen acreedores por su derro-
[,as disposiciones tomadas, signo inequívoco para é1, de que tismo y su falta d'e fe ,civica.
no la ocuparía sin combatir. De ahi su exasperación y su El doctor Arturo Berro en su "D*posición sobre a'1,gu-
encono. nos sucesos d,el 97" dice, en 1o pertinente, lo que sigue:
Don Antonio Paseyro tenía instalado su alojamiento de "El doctor Terra tuvo la atención de invitarme a acom-
jefe en el Hotel de Don Pedro Bresque, que se convierte asi pañarlo ,hasta Artigas, adonde p,or motivos de urgencia se
en el centro de febril actividad. proponía adelantarse al ej,ército,, ,que iria más despacio.
f[Jna mañana, ya alto el sol, Don Antonio Paseyro ad- "En la maiana del 14 nos pusimos en camino por esa
vierte en un espacio li re situado al fondo del hotel, una vía con el Delegado del Comité y su escolta al mando del
agtomeración inusitada de oficiales y soldados que escuchan Comandante IJrán, entre otros Antonio Paseyro, Juan Gi-
con atención a dos personas que se alternan en el uso dre la rat, 'Máximo Cicao, Isabelino Canaveris, los jóvenes de He-
palabra. rrera, Vaz "ferra, Str¿lrez; Núñez se presentó allí dos días
Se arproxima sin ser visto, por detrás de un tabique dg después ,y sus infanterías acamparon cerca del Saladero del
madera que sirve de pared a un galpón, y presencia esta es- Tigre, a unas 20 cuadras del pueblo; él se alojó en un ran-
cena: oficiales y soldados escuchan las palabras de desalien- oho próximo a ese sitio".
to de los dos "oradores", empeñados en convencer a sus Refiriéndose a las f:uerzas de Nírñez, agrega e1 doctor
oyentes de que la Revolución está perdida, que la defección Arturo Berro:
de Núñez es su tiro de gracia y que la situación no tiene otra "La caballeria la formaban los escuadrones de Marti-
salida que la huida al Brasil o la diso{,ución de las fuerzas. rena de 100 ,hombres, de Batista de 100, de'Orgaz y Pampi-
Don Antonio Paseyro irrumpe, entonces, en el corro y llón de 50 j tla escolta del doctor Terra de 50; las infante-
vibrÁn<lole de indignación la voz, atnelazador el gesto y du- rías, constituidas entonces, por cinco batallones al mando
¡s¡ las expresiones, apostrofa a los <lerrotistas y recuerda a de los comandantes Baraldo, Tbledo, Carpi, Orué y Gonzá-
olicialc¡ y sol«lados cl deber de ser fieles a la causa y des- 7e,2, alcanzarían a 25O plazas y agregando alguna gente suei-
ptGc¡¡r t¡ coberde condtlcto dc <¡uienes tler proponen la huida tr, puede calcularse en ú0 lhombres el efectivo de aquelrtra
o l¡ rotin«ln rin honor, GoluEtna".
RICA,RDO PASEYRO {T70. BORDA Y TERR.T 129
ú8

Respecto a los iplanes de Núñe'2, ,prosigue así el doctor Lrs fuerzas revolucionarias que Por entonces operan a
Berro: ese altura del dbpartamento de 'Cerro Largo, son 1'as si-
señor Paseyro tuvo desde los primeros mo'mentos guientes:
"El
de llegado a aquella villa, 1a visión Clara de los planes secre- Columna Núñez 6ffi ihombres; División Cerro f,argo
tos de ese jefe; es así que recuerdo que habiendo ido de ma- 150; Escuadrón Amorin ñ; Escuadrón Muniz 50; Guarni-
fiana a la Receptoría, creo que el 16, me llamó aparte y me ción villa de Artigas 50.
reveló las Lgraves sospechas que le inspiraba la conducta de Pero no todo,s los jefes que integran la columna de Nú-
Núñez; me declaró de que estaba plenamente persuadido de ñez le siguen en su deserción. rCuando el contigente leal se
retira, también eludiendo el avance de Arribio, lo hacen en
que traicionaba a 'Jia Revolución y él consideraha todo per-
,dido si, de inmediato, no se procedía a prenderlo y a ponerlo número mayor a 350 lhornbres, pues abandonan a Núñez, en-

a disposición del General Saravia, nombrando entre tanto' tre otros jefes, Martirena, 'Orgaz y Pampillón, Cicao ¡'
Canaveris.
utr jefe interino que condujera a aquellas fuerzas hasta el
Cierto es en definitiva, que Núñez, en un gesto que f,a
Ejército Nacional.
historia no puede perdonarle, disolvió parte de su eficaz in-
"Me consta, aun más, que llegó hasta proponer la adop-
fantería y se internó, en la forma narrada, en el Brasil.
ción de esa medida a los jefes de su confianza sin que, des'
Por su culpa, pues, ,habría recibido la Revolución golpe
graciadamente, se pusiera en práctica".
Llega así el 25 de Arbril. Ya ha recibido Núñez la suma mortal a no nlcdiar el espíritu de sacrificio y la atbnegación
rin lllnitcr {s rtlttc da 1tt'ucbas cl ejórcito ,ciudadano en carl-
de $ 880 que Don Ismael Yé\íaquez le entrega por inter-
medio.de Don Ruperto 'Coirolo y D'on Rafael Medeiros' Nú- ¡nlll qun lttttltn ¡xrr ln tlctuocrnt:in y la lilberta<1.
ICrto {ilrorllo rlo l¡ tlefcct:irirt de Núrficz se vincula a
ñez firma el reclbo en que consta que está en su poder [a
suma indicada. ¡rorlhlo lttfluattr:l¡ tlol rloctor l)ttvitrtioso Tcrra solrrc el áni-
dia 25 Núñez se apodera de la balsa y los bo- lu¡r tlol vetorlno o lnr¡rulrlvo jefe.
El citado
tes <lisponibles en el cercano Paso de las Piedras, sobre
Ohrl, ttn ol)itnttte, ctt nuestro poder, una carta inédita
rlol dr¡ctor Tcrrr r¡uc l'cprcscnta, a nuestro criterio, valiosa
el Yaguarón, Embarca su infantería con las armas escon-
didas y trata de que crucen también el río gran cantidad ds
y cotrvlttcentc prueba de descargo respecto a la acusación
que re le formula.
caballos y una tro'pa de ganado cle 4oo novljilos que rcquisa'
El doctor Terra sabe, además, que a quien se dirige en
en su mayor parte, al cstanciero señor Galarraga'
tértninos tan categóricos como verá el lector, no ignora
La ,precipitación cotl 'quc Núñcz procura pasar al Brasi!
cuóles han sido los ocultos móviles y cuáles las secretas in-
re cxplica por la rpresencia, cl <Jía citado, ctt las proximidades
flucncias que rpudieron provocar el grave acontecimiento.
do villa Artigas, de las sv¡nzadas del ejército gubernista
quc manda Santoe Arrilbio.
Hc aqui la carta:
rl
130 RIC.ARDO PASEYRO 1897, BORÍI}A Y TERRA 131

"Buenos Aires, Agosto 3]|97' - Señor Antonio Paseyro' €scasez de recursos y medios para continuar Ia Iucha y a la
Reci,bí su carta por ' el que escribe y leí las dirigidas a angustiosa espectativa con que se vive en Buenos Aires res_
-Golfarini.
¡recto ¿ Ia suerte del ejército. Héla aquí:
"Mudho le agradezco la justicia que me [race y
por ello "Buenos Aires, N de Mayo de lS9Z. Don
[o felicito, pues, son po'cos los que tienen tal coraje en estos Antonio: Estamo5 buenos y contentos, a pesar- euerido
de las nove-
-que colre-
tiempos de achatamiento y de viles pequeñeces dedes de Núñez, rde la falta que tienen de munición, de ibue_
,nos. nas armas y de todo, en fin; pero en cambio nos quedamos
cuáll
"Mucihas veces he pensado en usted imaginándome admirados del valor, del sufrimiento y ahnegación de nues-
mortiificado se halla¡ía en esa olla de grillos, 'después de la tros lhermanos en la causa y en el honor del partido Na_
placer qué usted
bellacada que nos hizo Núñez, P€ro veo con cional.
lla-
a pesar ¿á to¿o ha logrado mantenerse en su rpuesto "Qué modo de estar contento5 y satisfechos tienen us_
que llegue
mando las cosas Por su nombre y trabajando para tedes !", dirá e1 amigo.
a feliz término la obra de la Revolución en la cual tiene pa- "Es una de esas tantas cosas ,que pasan en el espíritu
de los ltrombres como yo, ,que ya {han agotado la medida d,e
los sufrimientos, de los dolores, de las penas y de las con-
tinuas ,contrariedades de todos los momentos.
"Sepan que vivimos 4rensando en ustedes, reuniendo e,le-
1o sean. mentos, a rpesar de la tacañería de nuestros amigos, sabien-
"El doctor Go'lfarini, portador de ésta, es un'buen ami- do que hasta lhoy no hemos tenido ZS.ú, setenta y cinco i
mil pesos' oro argentino ! Con esta suma ,ib fr"y pái" .o*_ \
prar munición, que vale ZS y 30 pesos et.nlillai.
"Los amigos Pan y su ,hermano, buenos y siempre de-
reondo noticias y siempre entusiastas.
"Quiera ofrecer mis recuerdos a los amigos y usted un
de la presidencia de1 Comité «le Guerra y ya
sabe que haré
al objeto de su crea- ¡brezo de su affmo. amigo y S. S.- Juan Angel Golfarinr,,.
cuanto pueda P'ara 'qug éste responda
Queda pintada de mano maestra la situación de la cau-
ción.
ese temple de ll revolucionaria al 20 de Mayo de 1892, a los dos meses y
"Hasta la vista, querido amigo: siga con
alma excepcional que lo catactetiza' 'que
no está solo I $fr dlar del resonante triunfo de Tres A¡,boles. Tácticamen-
lü derrota seiía inevitable, pues 5i al ejército ciudadano
llegar cartas como las reproducidas, no llegan, en
lo¡ rlcmentos imprescindibles para continuar la gue-
tl¡unr posibilidad de éxito.
1879. EORDA Y TIE}R.RA r33
RICA"RDO PASEYRO
tt2
elavista que modela, yte en la matriz generadora, la subordi-
nación espiritual de su clase.
rPero algo brilla en su frente, límpido reflejo det! pasado,
que da luz propia a su personalidad.
Ni el ímpetu guerrero, ni el instinto de lucha, ni la 'he-
r,edada tr'adición de[ culto a, la gaapeza, alcanza a explicarla.
Los esdlavos no se Tanzan, voluntarios, a la muerte.
No se provoca el martirio punzante d'el tpobre rhogar
abandonado, expuesto a la miseria y a la venga¡za, por co-
rrer la aventura suicida de un instinto indomesticado, por
XTII dar satisfacción a las explo,siones de una barbarie ya excluí-
da de las determinantes esenciales de la propia personalidad.
EL EJERCITO REVOLUCIONARIO
Obreros Y gauchoe Bajo el régimen bordista en 1895, se agitan los obreroc
de Montevideo en una evidente actividad de clase. ,Se agru-
pan, primero, se sindican, 'después. Preside sus actividalfes
un visible rpropósito de mejoramiento.
Organizado,s, provocan las primeras hudl'gas.
Encabeza el movimiento el gremio de albañiles deter-
minando situaciones de violencia al impedir, por la fuerza,
qne sus ,compañeros quebranten ,la con'signa de no trabajar.
,La reacción gubernista no se frizo esperar ante la acti-
tud de los huelguistas. La Junta Eco,nómica Administrativa
de Montevideo se dirigió entonces al Poder Ejecutivo pi-
diendo se Ie retirara la personería jurídica a la "Sociedad de
Obreros Albañ?les y Anexos de Mutuo Mejoramiento". Pre-
vio 'informe favorable del Fiscal de ,Gobierno, se lhizo lugar
a la sanción solicitada. "La Sociedad de Obreros Albañiles
consigna el Fiscal en su vista rha desnaturalizado el
-objeto -
de su institución, a7 lratar con amenazas de impedrr
al tralbajo a los demás".
.rt la hudl/ga de albañiles aludida, siguen las de los obre-
?0¡ estibadores, za,lpateros, cocheros, guarda-trenes, carpin..
134 RICARDO PASEYRO 1879. EORDA Y TIERRA
135

teros, pintores, herreros, tipógrafos y hasta de vendedores "Aún cuando el hombre tenga conciencia d,e su existen-
de diarios. cia personal es, haga lo que ihaga, un inconsciente rnstru_
Motivo de estas huelgas: el muy humano y legítimo de mento ddtr trabajo de la historia y de la humanidad,,.
mejoramiento de los salatios y disminución de las horas de
trabajo reu€, €rl aquellos tiempos, no era hipérbole medirio
con la 'clásica jornada de "sol a sol".
Los tipógrafos conquistaron, ya entonces, el horario d'e
8 horas para el turno de día y de 7 horas para o1i de la noche' ,\ vantado ejemplo de una inmolación d'e la que, en primer
Por una rep'etición desconcertante cle la historia, hace término, aprovecha el ,obrero de la ciudad, testigo indiferen-
cuarenta años, ¡\tÍes, nos encontramos con el espíritu del te, sin embargo, como individuo y como slase, del drama
fratricida.
o,brero metropoli{ano en aptitud de asimilar, como el de aho-
,Seduce cada vez más a los espíritus, all.l nuestro tam_
ra, la conciencia revolucionaria y su interés de clase' bién' la construcción especulativa de la doctrina marxista.
Más tpreparado que el de campaña p'udo, ya entonces, Ningún fenómeno social escapa al molde deductivo de
realízar la fusión ideal por 1a que recobraría su equilibrio sus explicaciones ¿ posteriori. La Revolución Francesa cae
armónico Ia fórmulh perfecta: ¡ror Ia libertad política a la bajo sus leyes. La em4ncipación americana obedece, en ca_
justicia social. da uno de sus ciclos, a los apotegma5 inapelables de su con_
El proletariado, montevideano de 1897 no percibió, aca- cepció,n. La Revolución Rusa, incendio sin fronteras que
so, los términos exactos de la solución; pero no titubea, en ilumina al mundo moderno y lio envuelve en sus llamas, es la
,cam,b,io, el dbrero rural. Aquel ya ha ensayado, con éxito eclosión triunfal de1 tprincipio y Ia técnica, de la doctrina y
unas veces, las ventajas de la agremiación en las luchas por la táctica a cuyas condiciones se subordina su avance y con_
el salario y ha sentido, otras, en sus organizaciones, los solidación.
efectos d:e lla persecución legal y, sobre sus espaldas, la ac' ¡Sea!
ción contundente de los sables policiales. Pero fhace cuarenta años, sin exégetas ni teorizadores
Pero estalla la Revolución y el proletariado rural em- que desentrañasen la depurada directiva de su misión y su
puña el fusil, se improvisa soldado de la libertad; guerrea, destino, miles de proletarios del campo, cientos y cientos de
sufre fhambre, sed, frío, insomnios torturadores. Sin embar- tepresentantes de la rburguesía nativa, además, embrazan el
go, trasponiendo la frontera próxima, cesaria ¿| ¡¡¿¡¿iriol fusil o la úanza y desafían a la muerte enfrentando a las le-
pasándose a los ejércitos de la oligarrquia, hallara la segur'i'
i $ones gubernistas, no menos inconscientes y autómatas
dad y la abundancia que faltan en las legiones de la Revo- las que forman los cosacos del zar o los suizos que, en
lución. oscalinatas del palacio real, ametrallan al p,ueblo que des_
Leemos en un clásico: ü tas Tullerías.
136
RICARDO P.I§DYRO xtr, .EI§TüfDII^NTE RAVECCA 1,37

las páginas de la historia'


IndXinánclonos, Pues, sohre
xrv
cierta es la verdad básica del principio marxista; Pero
aso-

mándonos a la vida, para hacer justicia y para ser


justos' EI primcr atentado.
- EI
estudiante Ravecca
bástenos saber 'de quá lado de la trincher¿ flamea
el anhelo Difícil es, pasados cuarenta años, cuyo decurso com-
prende la más acdlerada evolución de los hárbitos sociales 7
políticos del país, devolver al lector, sin lagunas ni deforma-
ciones, la sensación ambiente ,que produce en Ia opinión eI
régimen de gobierno presidido por Idíarte Borda.
El paralelo de aquella situación con la actual, no por
miza. ,procedente en rlos lineamientos básicos del sistema, p,uede
Bástenos saber pues, no lo que quieren, sino lo que
no
traducir con fidelidad el fermento popular que envuelve a
quieren ! üna y otra.
No importa que el frio anáXisis marxista después de El asesinato de Tomás Butler en 1895 es un crimen que
transcurridos cuarenta años nos diga, con intelectual'menos'' crispa los puños de la ciudadanía independiente; pero es,
precio, que fué una burguesía descontenta 1a que organizó desde luego, el asesinato de Julio CésalGrauert en 1933,
ia revolución de 1897, ni que con el aPoyo del espíritu levan- llevado a caho por las policías terristas, un crímen mayor y
tisco de la montonera, guarecido en el alma de nuestros más indignante por las circunstancias agravadoras del deii-
gauchos, lhizo una guerra civil más, sin propósito construc- to que rodean al episodio.
tivo ni "contenido social"... tEn 1933 se dice por el diario de Terra, con el frío ci-
¡No importa ! nismo de la delicuencia prepotente, que Grauert y sus dos
¿Sabemos, a'rora, acaso, cuál es el signo
positivo de la acompañantes se han baleado entre sí d'entro del automóvil
ardiente y ale'ccionaclora oposición que levanta sus puños en que los sorprende la policía, al pretender, aquellos, agre-
amenazantes frente a la oligarquía terrista? dir a los rqpresentantes de [a autoridad.
¿Safbemos, acaso, si la 'totalización de esa vehemente En 1895 la prensa adicta a Borda sostiene con igual
aspiración demoledora es la vuelta al colegiado, la restaura- e¡lomó "que el joven Butler se ,había suicidad,o, para que sus
cián legalista, el socialismo de estado, la aplicación'de la di- correligionarios pudieran presentarlo como víctima del Par-
visa máxim,a: "todo el poder a los soviet"? tido Colorado". (Textual).
Nada sabemos de eso. iHoy la prensa es amordazada y no hay entre los pe-
Pero sabemos sí, que el pueblo re'pudia, con toda la rlodistas la solidaridad de que dan prueba en lSQí. ,Cuando
laerza de su honrada conciencia, esta situación, engendro ll año indicado el goibierno bordista intenta y tileva a la
politico en la cuadra de un cuartel y su proyecto - mo:daza, todos Ios periodistas de
que per políticos en auge, las peores ideo, excepción, naturalmente, de los turiferarios al
encarna ico al servicio de las peores del poder, protestan colectiyamene contra el aten-
reacciones antidemocráticas.
,t
138 RTCAR,DO PASEYRO T'T/ EÑTT'DTAAI'TIE RAVE}CCA
139

tado La protesta r,eúne las ,firmas de ,Eduardo Acevedo y | Ñecesario es aceptar, además, que el exceso rqpresivo
Miguel Alvarez por "El1i Siglo", José Batlle y Ordóñez, An- {c, Ia dictadura terrista, su mecánica insensibilidad ante los
tonio Bachini y Arturo Brizuela por "El Dia"; Carlos Ma- dcrechos que abate y las libertades que pisotea, es Ia ra,zólr
ría Ramírez y Carlos Búrmester por "La Raz6n"; luan l. fundamental de su supervivencia.
Buela por "El Telégrafo Marítimo"; Barón Dubard por Se hace preci5o encarar, entonces, al régimen ,que sur-
"L'LInión Francaise"; F. Odizini por "L'ftalia"; I.M. Den- ge el 30 de Marzo de 1933, no como [,o ,que pudo ser, sino
tone por "Montevideo Times". como lo que es.
El párrafo ,final de la altíva nota que los periodistas Si después del apañarse todo el poder por medio de un
mencionados dirigen a la Comisión Permanente de la época, golpe de inescrupulosa audacia, Gabriel Terra no amor_
dice así: Claza a la prensa libre, no destierra ni encarcela a los ciu-
"La dignidad ciudadana, tla civilización de nuestra pa- dadanos ,opositores, no limita o suprime el derecho de re-
tri¿ qusd¿n así comprometidas desde que en la dirección de unión, no incurre en los premeditados delitos que son la se-
Ios destinos públicos asoma todavía persístentemente la cuel¿ db[,igada de todos los regímenes erigid,os sobre los
tendencia tiránica y el espíritu estrecho de otras épocasl'. escombros de 1a ley y de la constitucionalidad, su reino ha-
En un frente único, pues, el periodismo nacional bajo bría sid,o efímero, aventado al nacer con la so,la amenaza de
el signo bordista procura la defensa de sus fueros, señala posarse, sobre su inestable edificio, ,la mano ruda y desagra_
con ¡palabra viril el atentado de lesa libertad ,que se comete viadora del pueblo.
al amordazarlo. Pero las medidas restrictivas y represivas del gobierno
:No encuentra, por supuesto, dl golpe motinero de Mar- de Borda llegan tarde ',para detener dli impulso a la accrón
dado a la conciencia revolucionaria de la época. ya la flamí-
zo de 1933 la misma unidad doctrinaria en el periodismo ac.
gera propaganda de Acevedo Díaz ha influído con eficacia
tual oponiéndose a sus desbordes liberticidas. ,
¡:ara formar el espíritu activo de la Revolución. En cambio,
En carrlbio, sobrenada el régimen bordista, aun en los Ios excesos liberticidas de Terra tienden a evitar el encau-
períodos más oscuros de su dominación, como sobre una red gamiento de la corriente revolucionaria, a destruir sus focos
sutilísima de intereses creados que le perrnite mostrarse a fu, organización, a envenenar [as fuentes donde ab,revan su
los ojos de sus contemporáneos sostenido por nutridos nú- red de justicia los pueblos oprimidos por Ja fuerza y humi-
cleos representativos de la opinión general. llados por la impune jactancia de los déspotas.
Si thay, por conrsiguiete, en el ,paralelo de los heohos No es posible, así, que corresponcla al ,paralelismo de
la s:militud impresionanrte que relaciona entre sí a todas hechos la misma reacción ambiente bajo Borda gue ba-
nuestras oligarquías, fuerzt es ad,mitir, tamrb,ién, que las lTerra. La realidad del desangramiento fratricida es una
reacciones de la opinión no son las mismas bajo Borda que de persistente sobrecogimiento para el atl'ma popular en
bajo Terra, ni tienen su mismo alcance, ni expresan un idén- , ¡tmósfera letal que bien sabe el díctador de 193J aca-
tico estado de espíritu colectivo. as'fixiar, aun triunfantes en el terreno de la lucha, r
110 RICAR,DO PASEIYRO Er¡ ESTUDIANTIE R"dvEcoa 141

las oligarqulas como la que él estructura, con adecuad¿s ro' ü,ltzo el crimen de lesa soberanía, se refugia, primero, en
,fccciones, sobre los modelos legados por la taimada atra- ¡l Cuartel de Bomberos y transforma, después, su d.omici-
bilis de Latorre y el desenfreno irreprimiUle de la dilapida- lio particular en una verdadeta foftaneza, custodiada por
ción santista. nutrida guarnición militar, cuidada por la policía secreta y
Borda, pues, ya ha apurado la angustiosa expectativa la implantaqión de servicios especiales de vigilancia, como
que precedió al conocimiento exacto de la estabilidad mate-- puede apreciar cualquier transeunte gue observe desde [r
¡ial de su gobierno ante la posible eficacia del empuje revo' calle, las garitas de cristal, la murltiplicación de los teléfo-
lucionario. Tres A¡boles, Arbolito, Cerros Colorados, Ce- nos de alarma I el apostamiento estratégico de centinelas
rros Büancos, Aceguá, son acciones de 'guerra que han l'le- instalados en los jardines de su residencia, en dgraciada
!
nado de luto al País, ,que han encogido el corazón de las ma- Cepurro.
dres uruguayas, Pero en cambio devuelven al oligarca la se- Vive desde entonces prácticamente secuestrado. Altere
guridad en el poder finalmente imbatible de los ejércitos radicalmente sus hábitos de vida. Y si alguna vez afronta el
profesionales a su servicio. aire de Ia calüe, ha de deducirse, como en aquel tragicómico
Cada dia que Pasa sin que las fuerzas revo['ucionarias episodio del pacífico cambista Sansone, que el simple ade-
¡nuest¡en que se han rehecho en condiciones de librar com- mán de sacar el pañuelo cuando pasa, cerca, el automóvil de
bate eon éxito al ejército gubernista, puede contarse como Sn Excelencia, es exponerse a los golpes brutales de la po-
un estímulo más gravitando sobre el ánimo del gobernante licía secreta escalonada con cautdlosa anticipación, en fiia
para dar sensación de firmeza inconmovible a la situacióll india, a todo lo largo del trayecto que ha de recorrer el je-
que preside. fe del estado.
Hace, por consiguiente, la vida normal a los mandata- ,Se explica su recelosa desco¡r^fianza, su medrosa y per-
¡ios de su geranquía en la época en que actúa' Todo lo con- man€nte 41arma, ante la esfinge que para él significa la con-
trario de 1o que se observa en Terra, que ignora,' en reali- ciencia revolucionaria en acecho, cuyas fuerzas no ha medi-
rlarl, el poder material de 1a revolución que Provoca, porque do aún con exactitud y cuyo espíritu indomable presiente en
esa revolución, él lo sabe, aun no se ha concretado en orga- la instintiva depresión que embarga a todo su ser en presen-
¡izacií¡ eficiente y porque, además, ignora si del seno Ce cia ddL pueblo.
la reacción revolucionaria ha de brotar o no el rayo fulmi' I Dg contrario modo, Borda ya ha aquilatado las fuerzas
nador que castigue su osadía. que lo cornbaten y si bien no ha podido aniquilarlas, las ha
Asl es como Borda vive, en el medio casi aldeano del ¡ vcncido rotundamente volviéndose cada vez más remoto e[
lfontevideo de 1897, en plena ciudad y no se oculta mayor- que pareció arylenazar, después de Tres Arboles, a
ncnt€ a los ojos del pueUl'o. Terra en 1933, elige, en carnbio' .gobierno.
con anticipación, la residencia apropiada a la, seguridad del St explica así en L8Pi7 1¿ presencia de Borda en las ca-
luturo oligarca: una quinta en las afueras, iindante, ade- Eu serena indiferencia ante la tragedi¿ que anonada al
más, con la sede de una legación extranjera' Cometido en ür despreocupación con que preside los actos oficiales
E[r I¡ST,üDIAII.IIIE
ln RICARDO PASDYRO RAV,ECCA
143

doo, ,la calle y el hogar. No hay, como ahora, un


y asiste a fiestas y ceremonias. La comprobación de tal in- elevado por-
GGatsjc .de opinión qu,e ignora hasta quien gobierna,
sensibilidad provoca en el pueblo de Montevideo el corn€fi- ni exis-
tl¡n los ¡efinamientos suntuario. qua hoy- permitán diluir,
tario acerbo, Ia indignada y muda protesta de su rebelión
en pasatiempos banales, [a atención que merecen
pronta a estallar. los graves
No es ese, sin embargo, el estado de espiritu de ese mis- ¡roblemas que afectan a 14 socieda d y a las libertadJ p,n_
blicas.
rno pue.blo cuarenta años después ante la extribición del m!e-
Rtpercute, pues, hondamente en ra conciencia colecti-
do terrista. Repudia a'l rgobernan,te; corea, cuando se reúne,
va, todo acontecimiento reracionado con ra existencia der
su negación irreductible en gritos de abominación y hasla
país. Se le comenta y se Ís interpreta con más celeridad
de muerte. Pero en la vida corriente, cuando observa el es- que
la que se empleó en conocérsele, desde que ninguno
pectácrllo del gobernante absolutista custodiado, en sus lar- de los
medios modernos que hacen vertiginoso el vivir,
gos y febriles insomnios, por el paso rítmico de los centt* altera, en-
tonces, el pausado ritmo de la mentalidad casi
nelas; cuando 1o vé transitar resguardado en blindado au- colonial que
gtaya y refleja los sucesos.
tomóvil ; cuando 1o presiente, en medio a la pompa vana de
,En un escenario así reducido, no sólo el
su poderío de autócrata, prisionero de atormentadores ¡e- nombre sino
celos y miedos invencibles, el buen pue{blo ríe por dentro
la silu'eta física der gobernante tenía que agrandarse en er.
multiplicado vaivén del rumor y la noticia,-girando,
regustando ing,enua satisfacción moral al advertir que quien como
en un círculo vicioso, alrededor de las preocupaciones
antes le traicionara con tan petulante arrogancia, ahora ['e domi_
nantes: la guerra, el ansia d,e paz, de justicia política,
teme y le huye. . . de
restauración de Ia confianza pública.
No es extraño, por consiguiente, que en 1897 la presen-
Cuando, pasa el coohe del presidente, detrás de las
cia del gobernante sobre cuyos hombros pesa toda t¿ res- ce_
loslas y llos visillos ,cientos de miradas se clavan,
ponsabilidad de una larga'y sangrienta guerra civil, provo- allá en el
case efl la conciencia popular la visión concreta del (rnico
fondo del clásico 'lcou,p,é,,, para localizar Ia figura vulgar y
obstáculo que se opone a la pacificación y la felicidad de lla
el rostro inexpresivo del mandatario. ,cuando asiste a ras
ceremonias, cuando cumple con los rituales del proto,colo
Reptiblica. en
actos al alcance de tlas mi¡adas del p,ue;b,lo, o1.os hay que
Es necesario transportarse, en imaginación, a aqu'ella se
cJ,;avan sobre su persona con la lividez relampagueante-de
época, medir la hondura terri,ble del infortunio que abate al la
pals mientras la camarilla dueña 'del poder 'ce,lebra los triun-
bja que busca el blanco vulnerable y mortal.
fos miÍ,itares de sus huestes en campaña y agota, en une in- Borda carece de la agudizada sensibilidad que permite
terminah,le succión, las fuentes del blenestar público.
otros sujetos esclavos de su mismo complejo, presentir la
ineocia {e[i peligro que amenaza a sus vidas. Lo adivi_
I-os acontecimientos transcurren en un medio ciudada-
Io vislumbran, lo olfatean hasta en el aire como un ras-
no reducido y sin complicaciones, Montevideo es 'la ciudad
visible gue mostrase, a sus sentido5 hiperestesiados, la
de ambiente aldeano, de vivir sencillq al ortremo que los
denunciadora.
sucesos políticos y Jos donaésticos llenan totalment'é con su
RÍCARDO PASEYBO
ICL ESTUIDIA"NTIE RAVE.CCA 145
r11
a nade teme' Y
\
dcplorar lo sucedido. Su serenidad y su valor fueron adrni-
no 'se cuida p?-t9o:
\ Aquel gobernante fisiológico de su tables".
I nada teme Porque
""""*"tt¿"¿"-
"q"tfiiUtio no vibra sino pa' Pero el alma sencilla de la ciudad ha reaccionado en di-
I vida le ha dotado d";;;;;ibilidad'que rección opuesta. Mientras en la mansión bordista se resta
ordinarias del ser'
ra ra satisfacción rde tal--apeterrci"s afinado' si el misterioso' trascendencia al episodio, una sutil onda electrizadora re-
dueño U" t[ 'ttnftitu
'Si fuese anima las fibras, acorchadas por dl,sufrimiento y la desespe-
\ qo" ü' ¿'" i'i'
n"ll " " " i -TT
mo
m a gn e ti s
y traduce' ::,:Jl ffi";'J'i:::
'":':',1;;:^';:;;
ranzÁ.t del pobre pueblo, y vuelve la vida al organismo co-
i.-ilsr¿,, gue recibe ""
del ProPto.-oe:
habría lectivo emhotado por la pesadilla sin fin de una irnpuesta
;':l;; 'rás anticiPadas resignación ante su propio infortunio.
qot'"'' €n un joven cuya Presencra
fijado la vista, 'o" li" domicilio parti- En el fondo de cada espíritu se ha encendido una nue-
re,petidamente cÁn el regreso a su
coincide va esperanza y los p,echos se dilatan aliviados de la tremen-
il;;;
*'- la Avenida 18 de Julio' da congoja que los oprimía y de que ahora se sienten libres
N; 1o vió ni lo oresintió' *t' de Marzo de 1897' pro- sin. saberse, ciertamente, por qué...
Fué así "o*o '''n'n"*'"-' "t de Atbolito v Tres
Ar-
ducidas va las t"d;;;;;lttio""' en
i;'"*n; gobernante Para penetrar Dos días después dell atentado es nutrida y numerosa
boles, al descender "1 él revólver en mano
¡outi"'" 'ob'" la concurrencia de estudiantes al aula de Geografía General
su'casa' mismo del
'qu"t del arma en el cuello
"""tnrtf
aplicar tt cano de la Universidad de Montevideo. IJna alada inquietud agi-
y alcanzaa ta a las cabezas juveniles, más erguidas que nunca aquella
'*t"llo""ena fué rápida v sorptendiu "-*:::::H;:':"rt mañana como si el ímpetu vital de los años mozos altivase
visibles es- las frentes en un gesto de fresca y candorosa arro,gancia.
;;';e quien 1o emPuña hace
no funciona n"' Apnoue.ha, entoncesn
tal Es la juventud radiante de la Repúb/-ica, lozana y fuer-
fuerzos rpara. movei".i
airi"r"aor.
lanzarse so'bre el te, prieta y jugosa como un racimo de vírgenes energías
o" del presidente para
circunstanci" "1""á" {ue se estrechan y eoTazan en la fraternidad sin som,bra del
joven agresor Y d'esarmarlo' llena ta casa noble ideal compartido.
o" toda la ciu d' Se la Han llamado a clase.
Cunde ""t:t;^;;;
J"l d" os dignatarios de El pelotón, otras veces desordenado y bullicioso, pene-
presidencial d" i;;;; "¡é"ito' explica 1o sucedi-
dipb;;;icos' y- a todos se les tra al salón esta vez con serenidad ,que oculta ell, latir apre-
iglesia, d" imbuído' quizás'
de

do: un *oot'"Ut'o*-t'*'
i" surado y víolento de los corazones que se salen del pecho.
"'toaiante con sü revól-
anarqutttJ ;;;'al la Se han sentado los estucliantes.
ideas
un'"'I y tenía' además' puesta
¡;ñor'Presidente
El profesor, don Faustino Sayagués Lasso, contagiado
ver, que era
d"""'vible de aquella inexplicable solemnidad que flota en la atmósfe-
baqueta a1 instante
""'lE. -ot"11' ^,^ ra obra d'e un desequilii- ra de Ia clase, ha ocupado su asiento también, erguido el
un hedho sin irnportaY", li^::i-;"J-;Á"ro
primero
Fresidente' es el "o busto e iluminada la faz por una oculta emoción que no ati-
brado' S' E' el;*;t'-§"ñor
146 RICARDO PASEYRO DL IISTUTDIANTE RAVTECCA 147

na a explicar de dónde viene y por qué desplaza así, esa ma- lcy, y la justicia del pueblo práctica y simplificadora; e[,
írana, al mecanizado ritmo de sus hábitos de profesor. prejuicio que admite sin horrorizarse que un déspota haga
IJn silencio profundo reina en la sala cuando el bedel derramar ríos de sangre por su culpa, por su ambición o su
abre el libro de asistencia para pasar lista. En aquel momen- mentalidad ,cavernícola y que, en cambio, desenrfund¿ 1s¿¿t
to parece que los corazones van a estallar. Húmedos y bri- las viejas y manidas admoniciones contra la violencia cuando
llantes los ojos, los alumnos esperan mirando sin ver, aten- ésta hace blanco en la alimaña responsal¡le del luto, tl,¿ mi-
to sólo el oído que ha de recoger, como la señal del triunfo seria o Ia esclavitud en que viva toda una nación.
de su destino y de su propia vida, el nombre del com'pañero ,Conflicto arduo e inquietante no fallado todavía a favor
ausente, . . del pueblo, pero que permite a hombres y sociedacles que
Antonio Ravecca ! r,epudian- el crimen ,político sin particularizar la justicia im-
-Juanun julbiloso batir de a[,as puebla, entonces, el ai-
rComo perativa de dlaras y exp,licables excepciones, beneficiar de
re elcctrizarlo de la sala. EI aplauso crece y ondula, levanta sus frutos, a'poyarse en sus consecuencias y hasta edificar,
vuelo y desciende, va, viene, se multip-ica y afina, sincroni- sobre la tumba misma del clés,pota sancionado, la construc-
zando la tumultuosa eclosión ,que ambriaga y exalt¿ a aque- ción ideal de un nuevo orden politico o de una nueva y me-
lla juventud. jorada institucionalidad.
De nuevo e11, silencio.
El profesor, digno y severo, ha sentido,sobre su frente xv
el suave roce de una caricia luminosa'que le devuelve, al ce-
sar, su perso;ralidad interior.
25 D,E ACOSTO. AVELINO ARREDOND,O
-
Con su voz de siempre, con su gesto ha;b tua], con el Aquel frustrado atentado tuvo la virtud contraprodu-
Iraterndl acento con que empieza todas las clases, habla y cente de reanimar, aunque sea en forma momentánea, la vida
dice sencillamente: de la camarill¿ dominadora.
proseguir con la última lección... Si el pueblo, gracias al gesto del ,estudiante Ravecca, se
-Debemos
No ha de permanecer más de 24 horas al frente de su encontró más cerca de sí mismo, tam;bién el clan oficial se
cátedra aquel improvisado e insuperado maestro de ciuda- amaíra para explotar lo que no sucedió en beneficio de su
danía. Su gesto, humano y comprensivo, provoca, como es decaída popularidad.
natural, la airada reacción de la oligarquia, la que por me- Es la maquinación habilidosa que urde invariablemente,
dio de un decreto, ,que pretende ser aleccionador, lo separa cn estas ocasiones, la parte que corresponde a la mentalidad
del cargo "porque no había sabido reprimir ese acto de glo- de eomediante en el 'complejo de todos los oli,garcas.
rificación del delito". ,Se tonifica, entonces, el bordismo; pero la reacción su-
El decreto lieva la firma de Idiafte Borcla, gerdicial que se observa en sus huestes inmediatamente des-
Se enfrentan así, una vez más, el convencionalismo jurí- ¡oés detL atentado es, también, la causa de su perdición.
dico sirviendo de apoyo al mandatario, de hecho fuera de la Iliunfos guerreros se itran agregado a la corona de mártir
AI¡EI/INO ARRIEDONDO t49

:4§ RICARDO PASEYRO


bre las más nobles y sensibles creaciones del espiritu. Y el
nuestro, felizmente, conserva intacta la ca,pacidad ds reac-
con que se aureola la cabeza del jefe de estado' Se pierde ción que, si bienr es la fuente de la aptitud para merecer las
to,Ja prudencia y hasta el último escrúpulo desaparece pare superaciones a que aspira, también es verdad que por esa
considerar, como cosa propia, 'el gobierno y el país' brecha entra el dolor ,y el cortejo de sombras que entene-
En tanto, la guerra civil se prolonga enlutando los ho- brece al mundo moral de las multitudes.
gares, arruinando a la cam,paña, dando la sensación de un IJna profunda emoción subterránea circula por todas las
diario y criminal desgarramiento. capas sociales del país en Agosto de 7897. IJne a todas las
El único horizonte abierto es el de ana paz que reite- gerarquias del ,convencionalismo, nivela todas las diferen-
¡adamente har- rechazado los revolucionarios por exigir, en cias, baña'a todas las allmas en la misma onda de decepción
su cláusula primera, poco menos que el sometimiento incon- y de amargura. Bajo la sumisa resignación que agobia a las
dicional. Y la Revolución que se siente moralmente victo- frentes, un ,cilicio moral tortura a los hombres y agudiza,
riosa, no se arredra, ahora, ante la inmensidad del nuevo sa- hasta el histerismo, la agotada resistencia de la mujer, cen-
crificio que requiere mantenefse y sobrevivir en el terreno tro ultra sensible de la tragedia que vive la República.
de la contienda armada. Só1o las alturas oficiailes están blindadas al sentimiento
"sufragio libre y ftronradez administrativa" es su ban- unánime que em'barga al pueblo. Allá arriba, entre unifor-
dera. No la arriará sino cuando sean cumplidos sus pro'É- mes dorados, pecheras almidonadas y blasones cancilleres-
sitos o no quede, ya, eÍt el glorioso ejército, el aliento nece- cos, el pequeño mundo oficial desliza, incambiado, su diario
sario para hacerla flamear sobre todas las adversidades y vivir. En fiestas y reuniones, a l,a gala varonil de <lipIomá-
sobre todas las intimidaciones de la prepotencia militar que ticos, ministros, generales y ,coroneles, se agregan los hom-
afronta, ahora tamibién, consciente de la dolorosa inmola- bros desnudos y los escotes m,armóreos de la mujer. De Ia
ción que le im'pone el deber. mujer del mundo oficial, ,que en las situaciones como la de
Años hace que el país no experimenta tl'a sensación dia- Borda, ignora es adorno inconsciente que enjoya con su
ria de una matanza entre hermanos en camPaña' No es igual' presencia y su perfume las antesalas del depotismo o del cri-
rnen. Mujeres de todas fas autocraqias, oiimpicas, embriaga-
das de dicha, sahumadas po,r las volutas impalpables del in-
cienso palaciego, mujeres sin personalidad, que desdeñan el
desaliño de las nobles pasiones populares y no presientenn
la sociedad entera.
siquiera, el úró¡rido sarcasmo de sus lucientes joyas paga-
Es algo parecido, aunque atenuado en sus rasgos sin- das ,con la sangre del pueblo, con et1, sudor del obrero, con la
griarizad.ores, a esta otra sensación con que crucifica su ti
&srrentura, el llanto y el hambre de otras mujeres.
vida la permanente amenaza del atentado 'en potencia que se I
I
cierne sobre la República desde el 30 de Marzo de 1933'
ú'

Sólo los pueblos fundamentalmente frívolos serían ca-


paces de escapar a los efectos de una constante presión so-
A'VIEILINO AR,RII}DONDO
150 RICARDO PASEYRO 151

cfiitan, sin embargo, su fe, ni apagan el fuego en que arden


un comercio de la ciudad que el joven Avelino
,B5 €r1
Arredondo (23 año§ de edad) cumplía celosa y eficazmente
su.s esperanzas de iluminado.
Su existencia, vulgar aparentemente, deslizada como
con sus deberes de emPleado'
,Cuando se 1o permitían sus tareas, encontraba un pla-
tantas otras tras el mostrador de un comercio, se consume,
lle- no obstante, en la ignorada fiebre de una permanente
cer especial en recorrer la ciudad a La deriva' dejándose
tensión mental. Mientras los de su edad y su oficio aturden
,r, po, un vago deseo amhulatorio que 1o sitúa' en las no- el ocio y, como todos, llenan curn¡Jl,idamente las etapas vul-
ohes montevideanas, lo' mismo frente a las luces
de las man-
en sombras de gares de su generacíón, de sus gustos y sus devaneos, Ave-
siones de lujo, que lo detiene ante el umbral
Iino se sustrae a la 'ley cíclica y reposa cuando los otros se
la vivienda obrera.
fatigan, medita cuando los otros ríen, es desdichado cuando
No se diría que bajo su faz bondadosa y de serenas 1í-
los otros son felices en la alocada li.ltación rle las fáciles
neas, una sensitrililad hiperestesiada recoge las más
sutiles
alegrías.
vibraciones del mundo exterior'
Qué hay atl,lá, en el for.rdo de su ser, que 1o diferencia de
Es callado y reflexivo' Su físico proporcionado trasunta los demás ? Y por qué esa misteriosa señal que singu'ariza
juventud
equilibrio y salud. Habla Pausadamente y pese a su a su individualidad, no le sube al rostro, no da realce a su
,ro di." una palabra de más, ni hace una sola reflexión sin
personar no presta autoridad a su palabra, no impone indis-
fundamento. To'da su persona se recorta como en un
marco
y de fr'an- cutible acatamiento a la generosa exaltación de su ideal de
de luz cuando sus ojos de un azul claro, expresivos justicia
co mirar, se posan serenamente sobre el interlocutor' ?

En i1a oscuridad de su origen, en el humild'e florecimien- Quién es él ? De dónde viene ? Hacia dónde encamina
sus pasos el secreto, destino que enlhebra, en el silencio de
to de sus años juveniles, é1 ha suplido la falta de instrucción
p"r, .oro."r y aprender con una enofme facultad intituitiva las horas, ll,as rutas de Ia vida?
hunde Abramos el alma de Avelino Arredondo y penetremos
que lo asoma' precozment e, a 7a pro'funda sima donde
sus raíces el árbol del bien y del mal' en ella. Bus,quemos una sola fealdad humana, una debilidad
por
Sin poder explicárselo, sin empeñarse' tampoco' culpable, un ímpetu no legitimado por la piedad y,el amor,
buscar una definición, siente 'que bul1en en su
cerebro allgo
y nada hallaremos. Que el escalpelo inicie, ahora, su misión
,como. las formas larvadas de una justicia mejor que no
así in.vestigadora. Estamos, acaso, frente a un enfermo o un
presentes' ni'"percibe en
surge, ,por cierto, de las realidades tqrado? No! La salud física circula por todo su organismo,
la conducta de los homlbres que pudiera¡ tealizarla'
io de malos humores, integralmente sano y puro. Su
Se sabe impotente y pequeño para acometer la
empresa
y sus órganos son un clarificado manantial de ener-
redentora. I-¿ inconmorriU. fitmeza de los obstáculos'
la
habrá de moverse' [á que derraman poderosa imantación sobre el cerebro
vastedad ilímite del escenario en que
te adaptado a un cráneo armonioso, a una frente
confusión de sus bellas imágenes interiores ante el
imperio'
y altiva sin ser desafiante.
frío y dog,mático, de los preceptismo's ambientes' no mar-
152 RICARDO PASEYRO AVif,]I/INO .§REEIDONDO r5r

Aquel mo'desto dependiente de comercio es la personi- el peso del egoísmo social y la imperfección deliberada de
ficación de la salud física y espirituatl. Su tendencia a la me- la ley.
ditación, su deseo de aislarse y pensar, su ansia indefinible Su primera reacción es la del ímpetu viril que se ade-
de justicia, se dirían misteriosos mensajes recogidos por la lanta, con el puño crispado, a castigar el rostro im'pasi,ble de
magnetizada esencia que es el f ondo inexplorado de su .la maldad victoriosa. Pero, dónde está su forma concreta?
destino. Cuál es su cumplida síntesis ? Quién puecle decirle sin equi-
Elespectáculo de la guerra civil 1o deprime y lo subleva vocarse : "deja caer aquí tu golpe reparador y justiciero" ?
al mismo' tiempo. Acude, en las thoras de a§ueto, a |la Esta- ,Sus ,fibras se estremecen toclavía con el recuerdo de
ción ,Central y presenci¿ la llegada de los heridos, doliente "aquella mujer que vino a Montevicleo a pie, descle Tacua-
carne humana que recogen las camillas y que dejan al pasar, rembó, con lo5 pies hechos pedazo's, acompañacla de sus dos
sobre una estela de sangre, la visión de rostros destrozados pequeños hijos, deslpués de haber perdido a stt marido en ta
ocultos entre vendas o el eco atormentado' derl jadeante hipar guerra y que no recibió socorro alguno del gobierno"...
de los que agonizan. Po'co a poco, por un íntimo proceso depurador, las som-
Y experimenta, luego, como la contracción espasmódica bras deformantes 'que ocultan a la intuición Ja 'localizaciín
de todo su ser ante el cuadro lacerante que la im¿ginación exacta del peligro, se esfqrman de su espíritu fuerte y tenaz.
le reproduce, allá en la lejanía de las sierras y de los campos, Y ,mentalmente sus ojos se vuelven hacia los brillantes sé-
cu'biertos con los despojos de f a carnicería humana; de otros quitos de la oligarquía, hacia ese mundo lleno de luz y de
hombres que 'yacen, tendidos bajo el sudario del cielo, lívi- alqgrías que contiene, dentro del país, ottT raza, seres dis-
dos, espectrales, retorciéndose entre coágulos de sangre. tintos, hombres de otra c.lase, mujeres indife¡entes a la mi-
Del fondo de su vida humilde, sensible y buena, se le- seriayalaorfandad.
vanta entonces, una voz desconocida, pero imperiosa, que le Fríamente el razonamiento entra, después, a consumar
ordena sobreponerse al sufrimiento físico de la piedad siri su obra determinativa. rcentro de aquel mundo diferente, eje
de aquel sistema que gira, imperturbable, del placer a la di-
reparación y suplir, con fibras de acero, las que se destem-
sipación, es un hombre como todos, exaltado a la condición
plrn y aflojan en presencia del dolor y de la muerte. de árbit¡o supremo del país por la adhesión fetichista a los
La piedad sin reparación ! Empieza a descubrir en la procedimientos forma{,es que dan el poder, pero no la auto-
oscuridad mental de su inexperiencia intelectiva que es Yana ridad; l,a fuerza y el mando, pero no la grandeza. de alma y
pasión la de la solidaridad que se emociona y no remedia; Ia perfección moral.
la del testigo' apenado ante el infortunio, pero que no tfa- Y ta voluntad, indecisa hasta entonces, toma rectamen-
duce en heohos compensadores la humana indignación que to Ja dirección ¿ que la impulsa la resultante inexorable de
provoca la vida ,feliz de los malvados prepotentes, mientras lu roble y humanizado instinto.
se hrtnden, cada vez más, en las som,bras de su no ser, §in 'r Cuando discurre los medios a emf ear para satisfacerlo,
una protesta, sin un estremecimiento, los que se doblan bajo le ,sotedad de su conciencia no se úza una sola voz con-
15+ RICARDO PASEYRO AVEIJINO A,RR,EDONDO t55

denato'ria. Y cuando tiene entre sus mAnos el arma ajusti- sible ytodopoderoso, la voz admonitiva de un flagelante
ciadora y la revisa y verifica su perfecto funcionamiento, no apóstrofe que termina de esta manera:
experimenta, tampoco, la sensación de alevosía que é1, sin "Han pasado ya. los tiempos de ardiente fe, y los pre-
embargo, descubre, tortuosa y sin perdón, en cada una de lados no se yerguen vencedores sobre los omnípotentes de
las órdenes coll que manda al fuego de la guerra civil a tan- la tierra; pero hoy a la hora del Te D,eum, culndo el señor
tos homtbres aquel otro hombre que tiene en su proPia in-' Idiarte Borda suba por las gradas de nuestra catedral, se
vestidura la facultacl decisoria de hacer cesar tla trágica oirá en los espacios la voz ahqgada de totlo un pueblo que
matanza. . le grita: "antes de ir a posar las rodillas en el almohadón
No pesa en su espíritu una sola partícula impura des- de terciopelo rojo, ve a purificarte de la sangre que ha hecho
prendida de1 acto ,que va a realizar. Todo es alado en el reco- y hace derramar tu ohsecada intransigencia,,.
gimiento interior de su alma ,cuando ya confía a la misma Flota en el aire de la ciudad algo así como urlo de esos
rnuerte la salvación del país. Desde este momento su volun- presagios que oscurecían, a los ojos de los ronranos, los más
tad y su brazo accionan inhibidos de la concienci¿ indiviclual cd,aros y diáfanos cielos,
que hace responsable üa conducta. Su voluntad y su btazo no rClara y diáfana era Ia tarde en que se ofici¿ s1 ¿¡¡r-
le pertenecen ya, fundida aquella en la eseneia inmortal de ciado Te Dreum. El sol inunda de lnz la plaza Constitución,
1a Justicia, re,gido éste por la volición soberana del pueblo. resplandece en las bayonetas de los soldados, se quiebra y
dora con fulgores extraños en ,el broncc de las l>anclas mi-
Para el 25 de Agosto de 1897 el gobierno había progra- litares.
mado como actos públicos en conmemo'ración de la histó- ,Sobre rla calle Sarandí, más o menos frente al Club Uru-
rica fecha, un Te Deum en la Iglesia Mattiz y un desfitle guay, se 'ha estacionado bastante pliblico, curioso5 o indi-
militar de las fuerzas de la guarnición. Otras fiestas de ca- ferentes que nunca faltan para decorar, con apariencia de
rácter palaciego sucederían a los mencionados actos ofi- pueb,lo, estas ceremonias de todos los gobiernos impopulares-
ciales. Poco después de la 1 y media de la tarde ]as bandas
La prensa independiente censura al oficialismo esa acti- ejecutan el Himno Nacional: había llegado el señor Idiarte
tud de menos'precio por la situación real que enluta y agobia Rcrda ,con escasa oo,mitiva, sus edecanes y varios jefes y
a la Repúb,lica. oficiales. Dentro del templo se habían tomado algunas dis-
Et día antes, martes 24 de -dgosto, "El Día Noticioso" posiciones que denunciaban erl, propósito de rodear de las
de Batlle destaca la desaprensión gubernista, señalando al m&yores garantías la vida del jefe de estado, como ser la
pueblo "el escándalo de semejante jolgorio mientras 1¿ gue- prohibición de que los hombres se situasen, como era ha.bi-
tra civil ensangrienta la campaíra y tantas madres lloran ,h¡aJ, en las alturas del coro.
sobre la reciente tumba de sus hijos". i. [.a ceremoni¿ religiosa fué llenada sin que se produjera
El mismo dia 25 de Agosto, en su diario "La Razón", anormalidad. Terminado, al fin, este primer núme-
Carlos María Ramírez llevanta sobre el gobernante, insen- de festejos oficiales, el señor Idiarte Borda y sus acom-
15ó RICARDO PASEYRO
AVEI/INO A,RREIDONDO t57

La crónica periodística de la época completa esta nítida


rdación de hechos con la narración posterior de la tremende
¡acudida moral que conmueve ¿ las esferas oficiales y al
ca era tamrbién muy escasa. sólo una cuarta parte de ilas pueblo mismo al difundirse h noticia de la muerte de Idiarte
-
personas que habían asistido al Te Deum formaban la co- Borda, Presidente de la República.. .
io*.r". El señor Idiarte Borda iba siempre tratquilo, casi Rodeado de su ejército, custodiado por su escolta, ctr,i-
sonriente. Llevaba a la derecha al ministro de Gobierno y dado por sus colaboradores, vigilado celosamente por todas
al señor Alcides Montero y a la izquierda al Arzobispo, con sus policlas, bajo la advocación, además, del dios cuya ayude
quien conversaba sosegadamente, tal' vez sobre 1a fiesta que acababa de impetrar de rodi,llas en el cercano templo, el oli-
se estaba realizando con tan poco éxito' No temería quizá garca desdeíroso y olímpicamente impasible ante los recle-
un acontecimiento siniestro. La tarde estaba magníficamen- mos del pueblo, cayó en medio de la calle, partido el corazón
por el certero disparo hecho por un modesto hijo de ese
te serena. La comitiva des'filaba junto ¿ un regimiento de
mismo pueblo, ejecutor predestinsdo de su alta y reparadora
artillería y lo's Guardias de Seguridad, colocados de trecho justicia.
en trecho, ocupalban el otro lado de la calle, cuya vereda pensé en huir, declara el tiranicida; sabía
"Yo nunca
no estaba, tampoco, muy cargada de gente' que iba a morir y estaba d,ispuesto a morir".
'Guardaban las espaldas la Escolta Presidencial'
"A mí no me ihubiera gustado tirarle de atrás", confiesa.
"La comitiva iba avanza¡d'o lentamerte en medio detl "No!... De atrás no le hubiese tirado... Yo quería hacedc
bullicio de las band'as militares; al enfrentar la cabeza de
la
fuego de frente, poniéndome delante de é1, como lo hice".
comitiva al Jockey Club, se produjo un gran sacudimiento' Sí ! Ha apartado, con el revólver empuñado ya, a dos
y en seguida, después de un segundo de confusión' el público personas tras de las cuales se oculta hasta el momento que
se desparramó en una carrera loca' la cabeza de rla cotnitiva está a su alcance. Da, después, dos
pasos y se planta, con tranquilidad desconcertante, frente al
mandatario.
'iEl señor Idiarte Borda me vió cuando tire ,Ie puse en-
frente, y comprendió mi intención; pero no tuvo tiempo ni
de moyerse... Hice fuego sobre el pecho, sobre la banda,
como lo había pensado".
I,,a práctica y simplificadora justicia del pueblo est{
hecha.
Todo lg que viene posteriormente, las amenazas de
sus lanzas de banderolas rojas". muerte contra el detenido, el proceso, la acusación fiscal y
lc defensa, el veredicto de los jurados y el farllo de la justi-
RICARDO PASEYRO AVELINO ATRREDONDO r59
158

píritus I,a emoción de ,la tragedia. El sobre-excitado funcio-


cia letrada, son exteriorizaciones subsidiarias, inferiores' hu-
nario 'policial, sintiendo como en su propio pe,crho el balazo
manamentefaliblesfrentealasustanciaciónldelacausaan.
te el tribunal inapelable de la conciencia pública' terrible, pesando, además, la responsabilidad que le alcanza
como guardador del orden público y garantía práctica de la
El mismo prevenido, si¡ razonarlo, con üa espontanet-
se sien- vida del gobernrante, ,está paraclo ahí, frente al v.i,ctimador,
dad ;propia de los instrumentos elegidos del destino'
juriclicas de su caso' al descompuesto el rostro por el do,1or y la ira, alterada su 'r¡oz
te sustiaído a las interpretaciones
en la celda' a la sim- que cobra tonalidades extrahumanas como si fuera la mis-
a[,arato d,e fuerza con que se le asegura
ma Némesis de las venganzas implacables Ia que hablase por
patía o la hos mo'
La perceP sensorial es' aho- suboca. i i:irflql
ra, la de una an'do ias sombras Ni así mismo cede la extrar¡rdinaria comflexión espiri-
tual del detenidc¡. Sin bajar la vista, mirando a los ojos al
que antes cerraban el horizonte del país y el de su Prop'la
hom re que tiens enfrente, tipica represcntación del do{or
vida.
días, lejos de oficial fuera de cauce, indefenso, solo, a merced de la dis-
Y la absoluta reclusión de los primeros crecional omnipotencia rlel pocler desborclado y de la pasión
aislarlo del mundo 1o aproxima, por encima de los muros
y
individual infrene, no le ha temblado la voz, no le hia trai-
Ios centinelas, a la región id'eal entrevista en la lejanía de
cionado la voluntad, no ha alterado su ritmo el armonioso
su pensamiento cuando vagaba, al azar, aislado del bullicio' latir d,ef corazón,
por las calles de la ciudad. Se siente más libre
El interrogatorio es un verdadero asedio y las pregun-
más conforme que cuando las fuerzas misterios
tas restallan como látigos intimidadores sobre su cabeza, que
dían en su voluntad frenaban su resolución o
no se abate, ,que no rehúye el careo, que permanece ergui-
da: la única firme y normal después que todas se desconcei-
taran, aturdidas por el golpe fatal e inesperado.
Con natural dignidad contesta a las preguntas y es un
elocuente contraste su tranquilidad y su dominio frente a
la inocencia' aqueltlas cabezas enloquecidas y a aquello,s interrogatorios
tirio con la tranqui'lidad amedrentadora de
denunciadores de la destemplada incoherencia mental que
los dicta.
Se diria que en la suprema instancia de afrontar las fu-
rias desatadas de la veflganza y de la ira, acudiera en su au-
xilio toda 7a fortaleza espiritual del pueblo de cuyo seno sa-
bierno".
Es necesario evocar las circunstancias en qué este diá- le para consumar la justicia que se r1e niega, para cumplir
la voluntad que, hasta ese instante, burla y escarnece Ia pre-
logo se desarrolla, en la soledad de un aposento y a la vista
potencia imp,une del que mandaba.
de guardias armados, vibrando todavía sobre todos los es-
160
RICARDO PASEYRO
E¡PITJ(}GI.O 161
I
i
país la mayoría de los miembros de dicho Poder en el ma-
Su fortaleza y su aplomo tienen, pues' una fuer-rte de nifiesto del 4 del mes de agosto, siendo entendido que se
¿limentació,n superíor a la limitada engrgía
que puede ge- incorporarán a, la legislación vigente las modificaciones ya
sin alarde, ante aprobadas por el Senado y los ,proyectos presentados a la
nerar la célula humana. cuando se yefgue,
cuan-
el peligro ; cuando af ronta, sin desafío, las amenazas; Cámara de Diputados sobre representación de las minorías
do habla, sin alterar la toz, a sus posibles verdugos;
cuan- por el sistema derl voto incornpleto en las elecciones de Jun-
de su gesto' su
do da, sin miedo ni disfraces, la explicación tas Electorales, rle Juntas Econ,ómi,co Administrativas y
valor, su serenidad y su heroica franqueza son las del pue- de Representantcs del Puel¡to. Esta cláusula, por la garan-
en su pro-
blo que se encuentra a sí mismo, vaciada su alma tía institucional de futuro que importa para el País, contrae
pio espíritu, reencarnado su brazo en el btazo firme y el el ,compromiso de incluir la reforma en las actuales sesiones
pulso seretto de Avelino Arredondo' extraor«linarias y gestionar su aprobación.
c) lil Poder Iljecutivo declara que erl nombramiento de
EPilogo jefes políticos recaerá en ciudadanos que por su significa-
ción y demás cualidades personales, ofrezcan a todos las
Dos semanas después deL gesto de Arredondo' el doctor más serias y eficaces garantias.
de paz destacado por el nue- d) Todos los orientales quedan en plenitud de sus dere-
José Pedro Ramírez, emisario
io gobierno presidido por don Juan Lindolfo Cuestas' depo- cfios civiles y políticos y se mandará sobresee. .s 1eda5 1as
sitaba en manos de éste las proposiciones del
ejército revo- causas políticas y militares.
lucionario. e) I-os jefes y oficiales dados de baja serán rePuestos
Las operaciones militares se habían suspendido mucho en 8us grados.
entes 'por obra de un armisticio concertado
entre las fuerzas f) Dl ejército revolucionario recibirí fa suma de pesos
beligerantes, armisticio que fué la iniciación práctica
de la 200.m con destino a gastos de pacificación.
pacificación del País' El disparo de Arredondo hal¡la herido de muerte, no ya
El 18 de Setiembre quedaron definitivamente firmadas al jefe visit¡lc de ls resistida oligarquía, sino a ésta misma.
las bases d'e paz, que eran las siguien'tes : En un artlculo de Batlle, de feCha 28 de Agosto de
a) El Partido Nacional renuncia a la luc[ra armada y 1897, sé juzga yr la trensformación notable que se opera en
en consecuencia el ejército revolucionario se pondrá
a las el medio político y social del país como consecuencia del
su liceucia-
órdenes del Poder Ejecutivo, cluien dispondrá trascendente acontecimiento.
miento y el de las fuerzas levantadas ,por el Gobierno
t-an Decía etlocuentemente Batlle:
los
pronto como tomen posesión de sus respectivos cargos ..."Qué tales actos no dbran más que sobre un hom-
nuevos jefes Políticos. brc el que cae y no pueden por tanto'extender su in-
- -
'b) El Poder Ejecutivo en su carácter de colegislador llucncia m^ás allá de su personalidad ? No se podría soste-
prestigiará y sostendrá ante el cuerpo legislativo la
refor- ,' lOt, rcriamente eso: su resonancia inmensa repercute en to-

ma electoral, a cuya sanción se ha cornprometido


ante el
- i_:wt -¿ -.--l-:í :.:-:,:-::1 !:T

162 RICARDO PASEYRO


DPII"OGO
163
das cabezas y, so'bre todo, en las que están más altas. Ade-
Señor don /nlon,itt l,tts¿y¡s.
más, ese hombre tiene siempre dos valores: uno indiviclual
LIi queritlo anrigo;
y otro social o politico, siendo este último el más grande. Tcrntittti. . .
Por otra parte, en los momentos en ,que todo el país espera
Iint, lti t: ttt, ( | t r t n'iln1.
una poderosa reacción hacia erl bien de la administración del
7'icrttlt. (,.t (lttt,,tt,rl!ttt tt.¡tttl tt lt,
señor Cuestas, y en que varios acto5 importantes autorizan far de la.r golond,rinas.
Cotnfrttttltt, :;iu t,tttl,ur!l¡t, .t4 inlrrt,¡ ttn ltt permanencia
tal creencia, no es fácil sostener esa teoríar'. en
cl ahtoc.
En campo revolucionario es más intensa la repercusión
[,o.¡ | j¡,¡¡¡
f,¡¡,¡ .tt'r¡tririln it lutltu, (utrtqut, .trt r¡tro lerueno.
prodtrcida. La inesperada ter,ce¡ía de Arredondo ha despeja-
I,ishtttto.r t'ttttitttttlot tt ltt ltttt,rt tlt,,\'i,tiltt I
do el horizonte y las gloriosas huestes articulan e imponen
l)¡,.¡(.¡¡1,, l'ilirhhlts; h .wlitltt.r,ión,
Ias condiciones de paz: han vencido! nl fitcnos, d,t: lmber
curufliio ltu.ttt t,l tiltinto itt,¡ttutlo cott ol dtlttt¡, i¡¡¡¡¡1,:slo
Pero se ha impuesto, acaso, en propias filas, l¿ profun- for el
lu»xtr \t tl rhti¡ttttt. l)u ltt.r iugrrililuir,s lut¡¡tt l.rled
da devoción civilista que inspira e ilumina a los autént;cos crr.ro omiso,
gestores de la Revolución? ltut.s.¡thiúo t1.r tl,ttt u folllitt "l o luttttr dtt kts circun.rtouciai,
s't (niltflc.'otro tttt cc,rtrrril, rr rry do (irr.srtún:
¿Se han colmado sus idea,les? ¿Iin nrcdio a aquel arre- rtt,ntttru mo-
nedu, dcsuloltt tlil uttrrudo u kt hurnn.
batado tremolar dc bancleras, dc Ias notas triunfalcs dc las IJn ul¡ruso u los tmioo.r ullt,rt):io,J dtt lo ltt.ro'ttt
dianas que saludan al sol dc la victoria alumbrando cl carn- 9,,) l)iai-
tión quc hun luclmilo co¡lo trutlo.¡, ol lriuttlrt
pamento de las heroicas legiones ciudadanas, no se alza, ltttr dt: ltrincifios
imfcr.rotnlr.s lt ltor 0l rttinodo dtt l¡¡ !il,,,r¡,rd
ol t:l ,,rdr,rr, ourrluo
también, como una duda punzante, la visión del futuro in- al th "l t fu frt.tlrt, ttu los lrulo,r y corrttdlost
otros t¡uc ellos pro-
cierto, de las nuevas luchas reclamando nuevos y dolorosos cOdut tytr sr ..ta.,,l.t !) ttt,(tsc, tt, .tu modo con
ltt sa,g* grnrro.
sacrificios ? .¡u s¡rtida.
Acevedo Diaz, genro animador de la Revolución, pre- ¡'l'odo soulln hut,no fas de Di,osl
siente la "tarea de Sísifo" a ,que está condenado el esfuerzo li.tltrt dtt:¡ lÍums s,¿,Ir(¡.r., .ru siempre afectísitno anoigo
reivindicador, concretamente triunfante,en esos momentos E. ACEI/EDO DIAZ.
por e1 denuedo cívico y la voluntad de hierro de los cruza- Bte¡os Aires, Setiembre 16197.
dos del 97.
Tiene tonalidades de patética dramaticidad esta carta FIN
de Acevedo Díaz con que cerramos el presente volumen.
Yoz clara y firme que se levanta entre ,la tumultuosa reso-
nancia del triunfo épico como el anuncio profético de lo
que ha de ser el atormentado destino de nuestra demo-
cracia:
INDICE

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A ruanorl do pr'ólo¡,,o 5
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Capftulo I I¿¡¡ (:()il(.lr!rr('¡¡¡ r'OvolÚl.lr¡nrtrll¡
tkt lnrlr¡ A mí:ri<::r t
" ll Ikrrrllsrrrr¡ y trtrrlsllo. . Lo qu0 ot.a ol bOf-
<llHrno. --- y ehor.a: rnllltarisnro, 2l
I
I' ^nter.
I¡1 I¡rc¡1r.ru y o¡tlnión 10
rr ly Un rcvolucionario dc 1A$7 . 45
rrv La Junta de Guerra, 50
,vr IXI derrotismo contr,a revolucionar.io. Apa.
-
ricio Saravia eD. Montevideo ........ 55
tl
VII La conspiración por dentro 66
tt
VIIL807 - 1035 8G
tt lX ()r'gollznudo la ox¡rcrli«:lór¡ . g4

X f¡r¡ (,'r¡rrrlsló¡r li)J<rcrrtlvl¡. ¡]l juramento,


-- -
i I¡uger d(, l¡r tnvaslón. -- se preclpltan
lr¡s ucorrtor:lmlentoB 10.1
XI I¡¡ l¡¿follo dt¡ llres Arl¡olos. trlI ejército
rovoluclonarlo fué sorprenalido
-
1I8
XII I¡a dofeecl6n do Núñez 723
XIII Dl eJérclto revoluclonario. Obreros y
I Sauchos 132
" XMI prlmer atentedo. El ,estudiante R&vecca 18?
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" XV 25 de Agosts. rlysli¡o Arreclondo l4I
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cisttto t' l'osislllo" .y tll I'o rltl
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43
t tu¡t'zisllt ".
" IUf)7". ----- l.iil, (1()ll(ii('tlt'ilL l'trvoltltrio-
Iutria dc Irldo Alllóricra.

Próximas a aparecer:

"I'IITIIRO". - Democracia lilleral,


socialisrno Y «rttrnttnisnlo.

" l(lN l'll I s I( ) NI ". -- I.i il, l)crscctrción

¡rolíliul.
"l)lrl \t^llz() A ltAll'l0'r. - Po-
collilltcir'rtt rltr tlisritl'stls liarla-
r: t't:t¿ t t'i tls.

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