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Las palabras sinónimas son aquellas que tienen un significado igual o parecido pero que
se escriben de distinta forma. Estas palabras se suelen utilizar tanto en lengua hablada o
escrita para evitar repeticiones.
Si quieres seguir aprendiendo lecciones similares a Qué son las palabras sinónimas , te
recomendamos que entres en el módulo Gramática de la asignatura Lengua española.
Las palabras antónimas son aquellas que tienen un significado opuesto o contrario. Estas
palaras pueden ser diferentes en cuanto a su forma o parecidas si se añaden prefijos para
formarlas. Los prefijos que se utilizan para formar algunas palabras antónimas son los
siguientes: a-, anti-, des-, in-, i- o im-.
Además, si queréis practicar con este tipo de palabras, podréis realizar los ejercicios
imprimibles con sus soluciones que os he dejado en la web.
Si quieres seguir aprendiendo lecciones similares a Qué son las palabras antónimas , te
recomendamos que entres en el módulo Gramática de la asignatura Lengua española.
Si quieres seguir aprendiendo lecciones similares a Qué son las palabras polisémicas , te
recomendamos que entres en el módulo Gramática de la asignatura Lengua española.
Imagen: Slideshare
Índice
Esta palabra a partir de la cual se forman las diferentes familias de palabras en español
recibe el nombre de palabra primitiva que es siempre la base de toda familia léxica. De
esta forma, podemos decir que la palabra primitiva contiene todos los rasgos
significativos necesarios que luego, poco a poco y de diversas maneras, comparte con el
resto de de palabras para dar lugar a la creación de la familia de palabras.
Estas palabras que comparten características semánticas con la palabra primitiva reciben el
nombre de palabras derivadas, que son todas aquellas palabras que, pese a compartir
algún rasgo semántico con la palabra primitiva, contienen algunos matices que aportan mas
significación al propio significado de la palabra primitiva.
Siguiendo con el ejemplo anterior, una vez establecida la palabra primitiva, que en este
caso es el verbo "confiar", tenemos una serie de palabras que derivan de este mismo verbo
y que conforman, junto a él, una familia de palabras. Algunas de las palabras derivadas son:
"confianza", "desconfianza", "confiado", "confiada", "desconfiado" o "desconfiada".
Así, otro ejemplo sería la familia de palabras de "caja", que es la palabra primitiva en este
caso, a partir de la cual podemos encontrarnos todo tipo de palabras derivadas que añaden
algún matiz o cambio de significado con respecto a la primitiva. Son las siguientes: "cajón",
"cajita", "encajar", "cajero", "cajetilla", "cajoncito", "cajoncillo", "cajonera", "encajonar".
Con este ejemplo podemos observar que las modificaciones experimentadas por las
palabras derivadas llegan, en muchas ocasiones, a cambiar por completo el significado, ya
que no es lo mismo una "cajetilla" que una "caja". Sin embargo, dentro de la idea que
implica la palabra "cajetilla" sí encontramos rasgos comunes con el significado primitivo de
"caja".
Además, si queréis profundizar más en este tema y practicar con las palabras primitivas, os
he dejado unos ejercicios imprimibles con sus soluciones para que los podáis realizar en
casa y corregíroslos vosotros mismos.
Índice
Veámoslo con un ejemplo: la palabra "fruta" es una palabra primitiva porque no deriva
de ninguna otra, por decirlo de otra forma, es la palabra que posee el mayor contenido
semántico, que se mantiene igual y no cambia ni se modifica. A partir del término "fruta",
podemos encontrar distintas palabras que mantienen con esta una relación de proximidad
semántica, puesto que tienen en común alguno de sus rasgos significativos. Por
ejemplo, "frutería" es el lugar donde se vende y se compra la fruta, "frutero, -a" es la
persona que se encarga de comprar y vender la fruta, "frutal" es el árbol a partir del cual se
obtiene la fruta, etc.
De esta forma, para saber si una palabra pertenece o no a una determinada familia léxica, lo
que debemos hacer es fijarnos en su significado y ver si, a partir de él, podemos
relacionarla con la palabra primitiva.
La mayoría de las palabras que conforman una familia de palabras se han formado a partir
de distintos procesos de creación de palabras, como la sufijación o la prefijación, entre
otros. Por tanto, resulta fundamental saber distinguir la palabra primitiva sobre la cual han
actuado estos procesos de creación lingüística para dar lugar a más vocablos.
Así, algunas de las palabras que pertenecen a la familia de palabras de "mar" son las
siguientes: marea, marejada, mareaje, marinero, marino, marina, marítimo,
marítima, marejadilla, maremoto, mareógrafo, marinería, marinesco, marinesca, marear,
mareante, submarino, submarinista, marinar, maricultura, ultramarino, pleamar, bajamar,
marine, marisma, marola.
Estas son las palabras pertenecientes a la familia léxica de "mar", puesto que comparten
algún rasgo semántico que nos permite relacionarlas directa o indirectamente con el mar.
¿Se te ocurre alguna otra palabra que forme parte de la familia de palabras de "mar"?
¡Anímate y compártela con nosotros!
Para formar palabras derivadas podemos hacer dos cosas: añadir algo antes de la palabra
(prefijo), después (sufijo) o ambos (prefijo y sufijo). Esto lo veréis mucho mejor en el
próximo vídeo dónde explico las partes de las palabras derivadas.
Además, si necesitáis practicar más con este tipo de palabras podéis hacer los ejercicios
imprimibles ocn sus soluciones que os he dejado en la web.
Si quieres seguir aprendiendo lecciones similares a Qué son las palabras derivadas , te
recomendamos que entres en el módulo Gramática de la asignatura Lengua española.
Hay que tener en cuenta que una palabra solo puede tener una única raíz o lexema pero
puede tener más de un morfema.
Esta explicación la entenderéis mucho mejor si véis el vídeo ya que os daré ejemplos en los
que podréis ver los lexemas y morfemas de diferentes palabras.
Mediante sufijos como "-ísimo", el cual, como es lógico, concuerda en género y número
con el adjetivo original: guapo - guapísimo / guapa - guapísima / guapos - guapísimos / guapas -
guapísimas.
Es importante que sepas que no se considera correcto utilizar el adverbio "muy" al mismo
tiempo que el sufijo "-ísimo": *Muy listísimo, en vez de muy listo o listísimo.
No obstante, no todos los adjetivos en español siguen fielmente las dos pautas anteriores. A
continuación te detallamos, a través de varios ejemplos, cuáles son los adjetivos más
comunes que presentan alguna variación con respecto a la formación del superlativo.
Cerca - cerquísima
Pronto - prontísimo
Lejos - lejísimos
Hay una excepción a esta regla que debes conocer: los adverbios que terminan en "-e",
forma el superlativo a través de la terminación "-ísimo": tarde - tardísimo.
Otros prefijos que también sirven para crear superlativos adverbios y adjetivos son "archi-",
"requete-" o "extra-":