Está en la página 1de 5

ÁREA 3: EVANGELISMO JUVENIL Y ACTIVIDADES COMUNITARIAS

3.1 DIRIGIR DOS PROYECTOS DE EVANGELISMO EN UN GP, PUNTO DE


PREDICACIÓN O EN LA IGESIA CON EL CLUB O UNIDAD:

SEMANA SANTA:

Se organizó a los conquistadores en responsabilidades distintas, cada noche durante


una semana, los invitados fueron en mayor cantidad niños y adolescentes pues se
ayudó al ministerio del menor a realizar el programa antes del programa de los adultos.
CLASE BÍBLICA:

Se dirigió las clases bíblicas durante los sábados por la tarde y algunos domingos por
la mañana antes de las clases regulares, se dividían por edades, se entregaba el
material impreso, se encargaba a los consejeros por grupos para la dirección de los
estudios, se realizó los estudios con los conquistadores adventistas y no adventistas.
3.2 Planear y dirigir un proyecto comunitario de acuerdo con las necesidades de
su región.

Se organizó con los conquistadores recolectar productos alimenticios, prendas


de vestir y medicinas, se realizaron visitas a algunos ancianos del vecindario
alrededor de la iglesia, se les entregó los presentes y se oró con ellos y sus
familias, se realizaron más visitas posteriores a esas mismas personas.

3.3 Leer los capítulos 1 y 2 del libro Servicio Cristiano y presentar tu opinión
con respecto a la lectura en una página.
Dios escoge a los instrumentos humanos con defectos y tentaciones a llevar el
mensaje a sus semejantes, aunque la decisión parezca equivocada, en su gran
sabiduría Dios utiliza, trasforma, educa, inspira, dirige y protege a las personas que
deciden dar su vida para cumplir la comisión encomendada, la cual ni aun los ángeles
pueden hacer más que apoyar a esos agentes de esperanza.

Cada uno está llamado a ser un representante de Dios en el lugar en donde este,
reconociendo que su vida y esfuerzo dependen de la dirección de Dios para mostrar
amor genuino a sus semejantes; es necesario un comportamiento correcto con
principios sólidos para dar a conocer lo justo y eso debe estar unido al servicio que se
ofrece a atender las necesidades de los demás, cada uno en un ministerio especial
debemos cooperar con Dios y con los miembros de la iglesia para demostrar
verdadero interés personal, encontrar la felicidad en ayudar a otros a encontrarla

Debemos enseñar a las personas que la confianza en Dios no es vana, que debemos
prepararnos para enfrentar las dificultades de la vida que nos preparan para el regreso
de Cristo y el juicio venidero, debemos ser luz en todo aspecto de nuestra vida, que
las personas vean que el ser cristianos es una gran bendición. Cuidemos que nuestra
falta de consagración desanime no solo a los que desean conocer de Cristo, sino
también a los que desean proclamarlo. Una vida trasformada es la mayor predicación
del poder de Dios.

Los jóvenes deben ser capacitados desde su niñez para que reconozcan sus
responsabilidades en la salvación de las almas, utilizando las habilidades que Dios les
otorga al servicio de su obra y no al enaltecimiento propio, que consideren el carácter
integro como una meta a alcanzar, que vean en su salvador el mejor ejemplo de vida,
que sus anhelos y esfuerzos se alineen a los divinos, que en una cooperación se
esfuercen con los miembros de la iglesia así como con los de su generación a realizar
actividades que ayuden a la proclamación del evangelio, que cada joven se entrenen
con la convicción de ser fieles y que sus vidas servirán a otros para acercarse a su
salvador. Que cada joven entienda que se prepara para continuar la obra evangélica
y que deberá preparar a otros después de ellos a continuar lo encomendado; cada
uno debe encontrar su lugar en esta obra y dar lo mejor en ello, motivando a que otros
lo hagan aún mejor siguiendo los fundamentos correctos; mientras más conozcan a
su salvador en una comunión constante, más desearan trabajar para él.

También podría gustarte