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"AÑO DE LA LUCHA CONTRA LA CORRUPCION Y


LA IMPUNIDAD" 
ESCUELA DE EDUCACION SUPERIOR TECNICO PROFESIONAL
PNP IQUITOS

TITULO : CODIGOS DE JUSTICIA MILITAR POLICIAL


EN EL PERU (HISTORIA) 
CATEDRA  : CODIGO DE JUSTICIA MILITAR POLICIAL

CATEDRATICO : CRNL. (S) PNP. (R). PLAZA MEIER Luis


SECCIÓN  : 1ra 

ALUMNOS PNP  : E3. PNP. CHUMBE 


CHUMBE CURITIMA
CURITIMA,, Marcos
E3. PNP. ARBILDO MURAYARI, jean
MURAYARI, jean
E3. PNP. GONZALES ARIRAMA, Jesús
E3. PNP. CHUQUIVAL CALAMPA, Marco
E3. PNP. CORDOVA MORI, Enrique
E3. PNP. BERNILLA SANTIAGO, Luis

PROMOCIÓN: “ESPARTANOS” 

IQUITOS - PERU

2019 


 

DEDICATORIA

Con amor verdadero:

 A las personas que hic


hicieron
ieron posible
que nosotros llegáramos a donde
estamos; por su apoyo incondicional
y por creer en nosotros.

NUESTROS PADRES

AGRADECIEMIEN

Con un agradecimiento profundo: a nuestro

catedrático de esta asignatura; que nos solo

nos enseña derecho de la justicia militar

policial; sino que nos enseñó a valorar lo que

somos y lo que seremos, a llevar con

responsabilidad y actitud nuestra vocación

de servicio - cuidado humano.

CRNL. (S) PNP. (R). PLAZA MEIER Luis  .


 

PRESENTACIÓN 

Señor CORONEL:

fundamentalesEl para
presente
iniciartrabajo
iniciar monográfico
con éxito constituye
esta tercera uno
unidad en de losde
el curso elementos
Derec
Derecho
ho
de la Magistratura, en tanto, los autores lo han estructurado en el marco de la
formalidad y según los criterios filosóficos y científicos de la historia del mundo.

La investigación, por su propia naturaleza de investigación


bibliográfica ha condicionado nuestro accionar en revisar libros, en la cual nos
permitió reunir información para la realización de esta monografía.

 Atentamente

Los Estudiantes PNP


 

ÍNDICE
DEDICATORIA
PRESENTACION
INDICE
INTRODUCCION
EL FUERO MILITAR
1. Definición

2. Antecedentes
2.1. Historia del Fuero Militar Policial
2.2. Durante la República
2.3. El primer código de justicia
j usticia militar de lla
a historia
2.4. La Jurisdicción Militar en las constituciones de 1979 y 1993
2.5.  Nuevo código de Justicia Militar-Policial mejora la celeridad de los casos
2.5.
2.6. Justicia Militar integrada 
integrada 
3. NATURALEZA

4. MARCO CONSTITUCIONAL Y REGULACIÓN LEGAL

5. CONCLUSIONES

6. BIBLIOGRAFÍA


 

INTRODUCCIÓN
La justicia militar es una institución que tiene más de cinco (5) siglos de
existencia en nuestro país. Fue incorporada desde la conquista, permaneció
durante el virreinato y se ha mantenido a lo largo de nuestra vida republicana.
 A nivel constitucional, la justicia militar ha estado
estado presente siempre en la
Constitución histórica nacional. Ha sido contemplada, por ejemplo, en las
normas fundamentales de los años 1823, 1828, 1834, 1856, 1933 y 1979. La
actual Constitución de 1993 reitera la vigencia de la jurisdicción militar en su
artículo 139º, al señalar que “no existe ni puede e stablecerse jurisdicción
ar bitral”. Del mismo
alguna independiente, con excepción de la militar y la arbitral”.
modo, la Ley Fundamental ha delimitado el marco competencial de la
 jurisdicción militar en su artículo 173º, dentro del Capítulo XII referido a la
Seguridad y Defensa Nacional, asignándole la finalidad exclusiva de
administrar justicia penal militar policial cuando los miembros de las Fuerzas
 Armadas y Policía Nacional incurran
incurran en delitos de función. El fin de la justicia
militar policial es velar por que los efectivos de las Fuerzas Armadas y de la
Policía Nacional cumplan con orden y disciplina las funciones
f unciones que la
Constitución les ha confiado. En efecto, la Constitución, en sus artículos 163º,
165º y 166º, asigna a las Fuerzas Armadas y a la Policía Nacional las
trascendentales funciones de garantizar, en forma integral y permanente, la
defensa, independencia, soberanía, integridad territorial, seguridad y orden
or den
interno de la República. Para que estas funciones se cumplan en forma idónea,
resulta indispensable que se preserve el orden y la disciplina en las
instituciones armadas y policiales, lo cual se logra con la sanción de los delitos
de función en la jurisdicción militar policial. Los magistrados militares policiales
tienen conocimiento de la estructura, procedimientos y demás circunstancias
propias de las fuerzas del orden, de suyo complejas y que justifican
evidentemente la existencia de la justicia militar como jurisdicción
independiente y especializada. Cabe recordar que nuestro país se ha
caracterizado por tener un clima de violencia e inseguridad, que se agravó en
los últimos 30 años por el fenómeno del terrorismo y actualmente por las
convulsiones sociales internas y el narcoterrorismo. Por estas razones, es vital,
para la existencia y desarrollo de nuestra nación, contar con fuerzas del orden
disciplinado e idóneo.


 

EL FUERO MILITAR
1. Definición
El Fuero Militar Policial, previsto en el artículo 173° de la Constitución Política del
Perú, es un órgano jurisdiccional autónomo, independiente e imparcial. Es
competente únicamente para juzgar los delitos de función.
 A tenor de lo dispuesto en el artículo 139 numeral 1) de la Constitución Política
del Perú, constituye una jurisdicción excepcional e independiente del Poder
Judicial. Su competencia comprende exclusivamente el ámbito penal militar y
policial. En el ejercicio de sus funciones y atribuciones, el Fuero Militar Policial
se sujeta a los principios y garantías de la función jurisdiccional y al pleno respeto
de los derechos fundamentales de la persona.
Los delitos de función, de naturaleza y carácter militar policial son tipificados en
el Código Penal Militar Policial y son imputables, sólo y únicamente, a militares
y policías en situación de actividad.
El Fuero Militar Policial constituye una jurisdicción independiente del Poder
Judicial. Su función central es la administración de Justicia Penal Militar Policial,

en el ámbito
finalidad establecidocon
se relaciona porelley. El Fuero
Sistema deMilitar
DefensaPolicial por sudentro
Nacional naturaleza
de lay
independencia y autonomía que les reconocen la Constitución y sus respectivas
leyes.
2.- ANTECEDEN
ANTECEDENTES
TES
2.1. Historia del Fuero Militar Policial
El Fuero Militar Policial siempre estuvo unido a las Fuerzas Armadas y Policía
Nacional como su juez natural, encargado de la investigación y juzgamiento de
los delitos de función conforme a las normas constitucionales y al Código de
Justicia Militar. De ahí la
l a conocida frase que reza: "La Justicia Militar es como el

polvo
armadasen las botas para
y policía del soldado" porque
recordarles va a pulcritud
guardar todas partes con nuestras
y disciplina fuerzas
en todos sus
actos.
El historiador Jorge Basadre, en su libro
l ibro Historia del Derecho Peruano, comenta
que en la época Inca, parte de los preceptos morales y de justicia señalaba
sanciones severas -aunque no exclusivas- a los miembros del ejército inca. Al
principio de la Conquista y el Virreinato se aplicaron las leyes de los ejércitos
borbónicos y a partir del 22de octubre de 1768 entraron en vigencia las
Ordenanzas de Carlos III, en cuyo octavo tratado se hacía referencia a la justicia
militar. Estas ordenanzas durarían incluso hasta después de creadas las
repúblicas.

Durante la gesta emancipadora, Don Mariano Melgar y Valdivieso, poeta y héroe


independentista, fue Comandante de Artillería y Auditor de Guerra del Ejército


 

emancipador del Brigadier Mateo Pumacahua, razón por la cual fue declarado
patrono del Cuerpo Jurídico Militar.
2.2. Durante la República:
 Al producirse la independenc
independencia,
ia, durante un tiempo tuvieron vigencia las
ordenanzas españolas, pero al consolidarse la República, las distintas
constituciones que ha tenido el Perú han preservado el estatuto de la Justicia
Militar asignándole la gran misión de administrar justicia en el ámbito de su
competencia. La Justicia Militar ha sido siempre un capítulo importante en la
historia de la República, lo cual es evidente en el tratamiento dado a la
 jurisdicción militar en las diversas constituciones que rigieron en el Estado
Peruano.
La Constitución de 1823 mantiene las normas legales anteriores a la
independencia "hasta la organización de los Códigos civil, criminal, militar, y de
comercio". La de 1828 otorga atribuciones al Presidente de la República para
proveer "con arreglo a ordenanza a las consultas sobre las sentencias
pronunciadas por los juzgados militares", en su calidad de Jefe Supremo de las
fuerzas de mar y tierra, precisándose también en el Art. 148º que "El Congreso
dará las ordenanzas del Ejército, Milicia Nacional y Armada; rigiendo entre tanto
las que están vigentes". La Constitución de 1834 tiene especial relevancia por
sus alcances sobre Justicia Militar; así, por primera vez se establece en el Art.
110º, dentro del título referido al Poder Judicial: "Habrá también un Consejo
Supremo de Guerra, compuesto por Vocales y un Fiscal nombrados por el
Congreso.
La Convención Nacional expidió la Ley del 5 de junio de 1834 que fijaba la
composición del Consejo Supremo de la Guerra con tres generales o coroneles
de ejército, uno de igual clase de la armada, tres vocales de la Corte Suprema
de la República, y un fiscal letrado, presidido por el general de mayor graduación
o antigüedad y fijando igualmente sus atribuciones. Este Consejo fue instalado
el lunes 14 de julio de 1834, conforme al decreto de 11 de julio del citado año,
firmado por el Presidente Provisional de la República General de División Luís
José Orbegoso. Por decreto del 23 de septiembre de 1834, se nombró una
comisión integrada por Oficiales Superiores para la elaboración de un proyecto
de código militar. Sin embargo, en 1839, al expedirse la Constitución se
devuelven las facultades jurisdiccionales al Presidente de la República, respecto
a este tema. Las constituciones de 1856, 1860 y 1867 mantuvieron las antiguas
leyes en cuanto al ámbito castrense con algunas adecuaciones.
2.3. El primer código de justicia militar de la historia
 A finales del siglo XIX el Gobierno de Don Nicolás de Piérola emprende la
reorganización del Ejército, el año 1897, y para este fin contó con la colaboración
de la Misión Militar Francesa, dirigida por el Coronel Pablo Clement, quien


 

presentó un informe sobre la legislación militar, administrativa y reglamentos


militares, y subsecuentemente se nombró la primera comisión encargada de
redactar un proyecto del Código de Justicia Militar. Formulado este proyecto, el
10 de Diciembre de 1898 fue aprobado por el Congreso y promulgado el 20 del
mismo mes. El Código comenzó a regir 30 días después de la promulgación, o
sea, el 20 de Enero de 1899 y tuvo una vigencia de 40 años. En el Art. 156º de
la Constitución de 1920 se estableció: "La justicia militar no podrá por ningún
motivo, extender su jurisdicción sobre personas que no estén en servicio en el
Ejército, a no ser en caso de guerra nacional" Durante el siglo XX, la justicia
militar estuvo sujeta a los vaivenes y cambios constitucionales de la República.
En 1939 y 1950 entraron en vigencia nuevos Código de Justicia Militar. Trece
años después, en 1963, se promulga un nuevo cuerpo leyes que duró hasta
1980. La Constitución de 1979, en el numeral 1 del artículo 233º, establecía: "La
unidad y la exclusividad de la función jurisdiccional. No existe ni puede
establecerse jurisdicción alguna independiente, con excepción de la arbitral y la
militar. Quedan prohibidos los juicios por comisión o delegación". El artículo 282º
precisaba: "Los miembros de las Fuerzas Armadas y Fuerzas Policiales en los
casos de delitos de función están sometidos al Fuero respectivo y al Código de
Justicia Militar, cuyas disposiciones no son aplicables a los civiles, salvo lo
dispuesto en el artículo 235 (No hay pena de muerte, sino por traición a la Patria
en caso de guerra exterior). Quienes infringen el Servicio Militar Obligatorio están
sometidos al Código de Justicia Militar." La Constitución de 1993 ha tratado, en
semejantes términos, el asunto de la Jurisdicción Militar: "Artículo 139º.- Son
principios y derechos de la función jurisdiccional: 1. La unidad y exclusividad de
la función jurisdiccional. No existe ni puede establecerse jurisdicción alguna
independiente, con excepción de la militar y la arbitral.
2.4. La Jurisdicción Militar en las constituciones de 1979 y 1993
No hay proceso judicial por comisión o delegación." "Artículo 173º.- En caso de
delito de función, los miembros de las Fuerzas Armadas y de la Policía Nacional
están sometidos al fuero respectivo y al Código de Justicia Militar. Las
disposiciones de éste no son aplicables a los civiles, salvo en el caso de los
delitos de traición a la patria y de terrorismo
t errorismo que la ley determina. La casación a
que se refiere el artículo 141º sólo es aplicable cuando se imponga la pena de
muerte. Quienes infringen las normas del Servicio Militar Obligatorio están
asimismo sometidos al Código de Justicia Militar". Varios son los aspectos que
podemos resaltar de los artículos glosados. La meridiana claridad con que los
constituyentes se expresaron sobre la existencia del Fuero Militar, como una
 jurisdicción de excepción, con un estatuto propio, sujeto a los principios y
derechos de la función jurisdiccional y a los tratados que sobre DDHH ha firmado
f irmado
el Perú; igualmente, otros aspectos, no menos importantes, son los referidos a

la prohibición de juzgar civiles en el Fuero Militar y el juzgamiento de militares y


 

policías, en situación de actividad, sólo por


delitos de Función.
Salvo cuando imponen la pena de muerte porque entonces puede casar la corte
suprema, en los demás procesos de llevan adelante los tribunales militares son
un órgano jurisdiccional autónomo dentro del estado, pues tienen su propia
estructura organizativa, sus propias formas de proveer el personal que juzga, sus
procedimientos
manera diferentey su
quepropio código
el código de tipos
penal delictivos,
la misma que el
conducta muchas
mismoveces trata En
individuo. de
las normas concretas, entonces, la unidad y exclusividad de la función
 jurisdiccional que el inciso 1 del Artículo
Ar tículo 139 reclama para el poder judicial, no
existe dentro de la Constitución, al menos en este aspecto.
Los tribunales militares tiene competencia a para lo siguiente:
  Juzgar los delitos de función de las fuerzas armadas y de la policía
nacional.
  Los delitos cometidos por los civiles y desde luego p personal
ersonal cas
castrense
trense y
de policía por traición a la patria.
  Los delitos por civiles y perso
personal
nal castrense
castrense y de policía por terrorismo.
según determine la ley.
  Las infracciones de civ
civiles,
iles, pers
personal
onal castrense o polic
policía,
ía, co
contra
ntra la
lass normas
dl servicio militar obligatorio.
Por delitos de función debe entender aquellos que comete el personal de las
fuerzas armadas y de la policía nacional n el ejercicio de sus funciones y
normalmente por incumplimiento
incumplimiento o exces
exceso o en las mismas. Una denominación
más exacta sería la de delito militar. Así se evitaría caer en ambigüedades que
permitan sustraer de la justicia ordinaria a personal castrense que cometa delitos
comunes. En este sentido, una mejor opción constitucional sería establecer que
cuando la misma conducta pueda ser tipificada en el Código Código Penal y en el
Justicia Militar, la norma aplicable ser la primera y el juicio se llevara ante el poder
 judicial. La norma
norma existente es distinta y ssee presta a presiones de todo tipo, pues
sostiene que cuando se forme una contienda de competencia entre los tribunales
militares y el poder judicial, resolverá la corte suprema de justicia.
La interpretación sobre lo que es delito de función debe ser restrictiva y abarcar
solo aquellos casos que indiscutiblemente son asuntos castrenses o policiales.
De esta manera, se eliminaría el posible beneficio que el personal castrense y
policía pueda tener un tratamiento más benigno en los tribunales militares que
en los civiles, por delitos por los que quien no es miembro de las fuerzas armadas
o de la policía nacional, normalmente seria sancionado con penas más graves.
 Al propio tiempo, se crearía condiciones
condiciones d moralización muc
mucho
ho más afectivas.
 Al respecto, CESAR  AZABACHE (1995)  sostiene que “los llamados delitos
militares o delitos de función son en realidad casos de incumplimientos de


 

deberes castrenses, cuya especial sanción es garantizada por el ordenamiento


en aplicación del llamado principio de auto tutela institucional. Toda institución
organizada jerárquicamente
jerárquicamente debe po poder
der constreñir a sus subordinados a catar
las disposiciones de sus superiores. Las instituciones armadas no son una
excepción a esta regla, así que la constitución garantiza e en su favor, a través
de la justicia militar, la existencia de un cuerpo de normas que permiten castigar
toda falta cometida en el ámbito de las corporaciones armadas.”(p.165) 
El análisis de la jurisdicción militar en relación al marco constitucional vigente
revela dos situaciones relacionadas entre sí. De un lado, subsiste la tendencia
histórica de las Fuerzas Armadas a considerarse como un estatuto especial
dentro del Estado que demanda autonomía e independencia castrenses, aunque
naturalmente la Constitución diga y ordene lo contrario. Desde luego, esta
tendencia se acentúa cuando se producen rupturas del orden constitucional que
directa o indirectamente significan que los mandos superiores de las
instituciones castrenses adquieren poder político.
El fuero privativo militar tiene la finalidad de sancionar al personal militar que
comete actos que lesionan el servicio o la disciplina militar, y en tal sentido su

existencia seprivativa,
esta justicia justifica plenamente. Pero
ella tiene que serestablecida la naturaleza y necesidad
también independiente de
muy rigurosa
en su campo de acción.
Puede juzgar al personal militar en actividad o en situación de disponibilidad y al
personal civil sólo en los casos enumerados en el artículo que comentamos. Se
hace imperativo, por tanto, que se precise el concepto mismo de delito de función
para corregir drásticamente la tendencia de aplicar el concepto a situaciones que
clara-mente caen en el campo de los delitos comunes. Estos, cualquiera sea el
agente, deben ser juzgados por los tribunales ordinarios.
Sostienen al respecto GERARDO ETO, CÉSAR LANDA  y JOSÉ PALOMINO
MANCHEGO, en un bien cuidado libro-homenaje a DOMINGO GARCIA
BELAUNDE(1997), que “el ámbito de la jurisdicción militar, en estricto, no debe
ser lo militar, sino lo castrense; es decir, que se debe hacer una estricta
referencia al cuartel, campamento militar o a las relaciones de trabajo militares;
de modo que las vinculaciones extrañas a ellas no deben ser sometidas a la
 justicia militar, salvo que comentan los delitos de traición a la patria y de
terrorismo, de conformidad con el Art. 173 de la Constitución. En tal sentido, las
disposiciones legales con que se atribuyen asuntos o materias a la jurisdicción
castrense deben ser interpretadas restrictivamente” (p.462) 

Por lo demás, debe subrayarse que la justicia militar sólo es competente para
conocer las materias establecidas en el Código de Justicia Militar. La referida
norma, expedida el 24 de julio de 1980, regula exclusivamente los delitos y faltas

militares,
El sujeto aplicándoles las sanciones
activo este Código previstas
es el personal en ostenta
que el Código
la para cada tipo
condición penal.
de militar.

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Los civiles solo son considerados para el tipo de traición a la Patria en caso de
guerra exterior y por infracción en la aplicación de la Ley de Servicio Militar.
Sin embargo, la nueva Constitución como ya lo consignamos ha eliminado el
requisito de que la guerra sea exterior y ha añadido los casos de terrorismo que
la ley determine. La ley también especifica que la jurisdicción militar conoce los
delitos comunes cometidos en acto de servicio, cuando el agraviado e inculpado
son militares,
en casos aplicándoseles
de vacío, el Código las normas
autoriza del los
a que Código Penal
jueces común. Igualmente,
y tribunales militares se
remitan a las disposiciones de los códigos comunes.
En el contexto señalado, el delito de función tendrá que ser reformulado en su
concepción básica, para que sea entendido exclusivamente como delito militar;
es decir, que se refiere a inconductas graves atentatorias de los reglamentos, la
disciplina y la actividad castrense. Se evitaría así el abuso en el que se ha caído.
Por otro lado, la delimitación de lo que se entendería por delito militar evitaría
que las leyes a aplicar por los tribunales militares eliminen las disposiciones que
facilitan aplicar por remisión tipos penales provenientes del Derecho común. La
competencia de la justicia ordinaria no debe ser recortada, ni la militar debe

crecer más allá de lo que es su ámbito normal.


El criterio adoptado, por lo menos en las circunstancias en las que el problema
ha tenido significación, ha sido el opuesto al que defendemos.
Los casos de delitos de traición a la patria y de terrorismo fueron añadidos a
partir del golpe de Estado del 5 de abril de 1992, con gran aceptación de la
ciudadanía, que veía debilidad, temor y falta de medios de sanción en el Poder
Judicial frente a los agentes del terrorismo.
El fenómeno fue cierto, pero la respuesta pudo ser establecer tribunales
especializados, con procedimientos de seguridad, que al propio tiempo dieran
garantías al procesado de que sus derechos elementales podían ser cumplidos.
La decisión, empero, fue entregar estos juzgamientos a tribunales militares con
procedimientos que no garantizaban adecuadamente la defensa y que tuvieron
que ser posteriormente modificados por el mismo gobierno que los dictó.
Si se observa atentamente, la Constitución no manda que los delitos de traición
a la Patria y terrorismo sean procesados por los tribunales militares siempre, sino
sólo cuando la ley determine.
El último párrafo del artículo bajo análisis se refiere a las infracciones al Servicio
Militar Obligatorio. Estas han pertenecido siempre al ámbito castrense como
todos los aspectos técnicos y administrativos de dicho servicio. Es razonable que
estos casos sean resueltos en dichos tribunales.
2.5. Nuevo código de Justicia Militar-Policial mejora la celeridad de los
casos

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11
 

El Presidente Del Tribunal Supremo Militar-Policial, contralmirante Carlos Mesa


 Angosto, afirmó que el nuevo código de Justicia Militar-Policial, el cual entró en
vigencia este año, ha mejorado la celeridad de los casos que se presentan ante
esta instancia. 
instancia. “Con la aplicación del nuevo código de justicia militar, hoy en día
un proceso en el fuero castrense puede durar entre tres y cinco meses, es decir,
un tiempo considerablemente reducido, antes duraban un año como por el
ejemplo el caso del espía sentenciado Víctor  Ariza”, señaló en Nacional en la
Noticia. 

“Asimismo para la celeridad de los casos nosotros tenemos un nuevo proceso


acusatorio y aunque aún no se ha aplicado en Lima, se está aplicando en las
otras regiones, es decir básicamente la oralidad de los juicios. También se le da
mayor función a los fiscales que a los jueces, entonces los fiscales deben
mantener su acusación y defenderla durante su proceso”, agregó.
 agregó.  
Mesa Angosto explicó que el nuevo Código de Justicia Militar-Policial les da la
facultad de juzgar solamente a militares y policías en actividad y no a policías en
retiro ni a civiles, “no  vemos delitos de lesa humanidad”.  “En  el caso de los
terroristas que atacaron a los policías el día miércoles quien llevaría el caso sería

el Fuero Común porque no vemos casos de civiles”, añadió.


Implementaran más jueces y fiscales en el VRAE 
El Presidente Del Tribunal Supremo Militar-Policial informó que existen ONG
que quieren desestabilizar a las Fuerzas Armas. “El  año pasado habían
denunciado a una patrulla diciendo que había matado personas y habían
secuestrado a una criatura, este último para decir que violamos los Derechos
Humanos en  Ayacucho”. Pero que ahora ha ha salido la ley de Delito de Fuerz
Fuerza
a
donde se indica que todos los militares que comentan delitos por función serán
vistos en la Justicia Militar. “Tenemos  dos fiscales y un juez en el VRAE el
próximo año vamos a implementar más fiscales porque esos lugares son muy
amplios”, indicó.

2.6. Justicia Militar integrada 


 Asimismo el contralmirante Mesa Angosto señaló que el Ministerio de Defensa
creó el Centro de Altos Estudios en Derechos Humanos, “de donde salen los
militares con conocimientos en derechos humanos y no se cometan violaciones”. 
“Estamos  en una reestructuración total de la Justicia Militar ahora tenemos
integrado la Fuerza Aérea, Marina, Ejército y la Policía, con eso evitamos que se
diga que se cumplan ordenes de los institutitos por que los tribunales son mixtos.
En el Perú existían 12 zonas judiciales actualmente existen cinco, en Lima,
Iquitos, Chiclayo, Cusco y Arequipa integrados por miembros de los cuatro
institutos”, resaltó.

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3. Naturaleza
El Fuero Militar Policial por su naturaleza y finalidad se relaciona con el Sistema
de Defensa Nacional dentro de la independencia y autonomía que les reconocen
r econocen
la Constitución y sus respectivas leyes.

4. Marco constitucional y regulación legal


El Fuero Militar Policial se relaciona con el Sistema de Seguridad y Defensa
Nacional por las finalidades comunes que persiguen de garantizar la
independencia, la soberanía y la integridad territorial de la República y de
garantizar, mantener y restablecer el orden interno, dentro de la autonomía e
independencia que les reconocen la Constitución Política del Perú y sus
respectivas leyes.
La Justicia Militar es reconocida constitucionalmente como una jurisdicción que
actúa dentro del Sistema de Defensa y Seguridad Nacional del Perú.

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CONCLUSIONES
1. El fuero militar constituye
constituye una jurisdicción ex
excepcional
cepcional e independiente del
Poder Judicial. Su competencia comprende exclusivamente el ámbito
penal militar y policial sujetándose a los principios y garantías de la
función jurisdiccional y al pleno respeto de los derechos fundamentales
de la persona.
2. El Fuero Militar Policial siempre
siempre estuvo unido a las Fuerzas ArmArmadas
adas y
Policía Nacional como su juez natural, encargado de la investigación y
 juzgamiento de los delitos de función conforme a las normas
constitucionales y al Código de Justicia Militar.
3. El fuero militar por su naturaleza y finalidad se relaciona con el Sistema
de Defensa Nacional dentro de la independencia y autonomía que les
reconocen la Constitución y sus respectivas leyes.
4. La estructura orgánica jurisdiccional del fuero militar sson on El Tribunal
Supremo Militar Policial, que es el máximo órgano jurisdiccional del Fuero
Militar Policial, los Tribunales Superiores Militares Policiales que son
órganos jurisdiccionales de segunda instancia en su respectivo ámbito
territorial y Los Juzgados Militares Policiales que ejercen la acción penal
militar de oficio o a petición de parte, en los casos de delitos de función y
poseen autonomía e independencia en el ejercicio de sus funciones.
5. fiscalizar
El Órganoladeconducta
Control
Control de la Magistratura
Magistratura
funcional Militar Policial
y la idoneidad de losesVocales,
el encargado de
Jueces,
Fiscales y auxiliares del Fuero Militar Policial, y de aplicar las sanciones
disciplinarias correspondientes conforme a su Reglamento Interno. Así
también este será aprobado por acuerdo del Consejo Ejecutivo del Fuero
Militar Policial.
6. El Fuero Militar Policial tiene autonomía económica y administrativa.
Constituye un sector y pliego presupuestario, cuyo titular es el Presidente
del Fuero Militar Policial.

14  
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BIBLIOGRAFÍA

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proceso inquisitivo. En: HURTADO POZO, José (Director) y DOIG DÍAZ, Yolanda (Coordinadora).
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editorial de la Pontificia Universidad Católica del Perú y Universidad de Friburgo, 2002.

- BASADRE, Jorge. Historia de la República. Tomo II. Lima: Editorial Universitaria. 1983.

- COMISIÓN ANDINA DE JURISTAS. Derechos fundamentales e interpretación constitucional


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2001  – 2002.
 2002. Lima: Fondo editorial de la Pontificia
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Penal Militar. Anuario de Derecho Penal 2001 –
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