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Ecuación de diseño para reactores intermitentes

En la mayoría de los reactores intermitentes, a medida que el reactivo permanece más tiempo en
el reactor, se convierte una mayor cantidad de este producto hasta que se alcanza el equilibrio o la
reacción se completa. En consecuencia, para sistemas intermitentes, la conversión X está en
función del tiempo para los materiales que reaccionan pasan en el reactor.

Si NA0 es el número de moles de A inicialmente en el reactor, entonces el número de moles totales


de A que reaccionan después de trascurrido el tiempo t [NA0X].

Ahora expresamos el número de moles de A que quedan en el reactor transcurrido el tiempo t, NA,
en términos de NA0 y X:

Por lo que

Cuando no hay variaciones espaciales en la velocidad de reacción, el balance molar para la especie
A en un sistema intermitente se obtiene mediante la siguiente ecuación. En la reacción global, el
reactivo A desparece; por lo tanto, multiplicamos ambos lados de la ecuación por -1 para obtener
el balance molar del reactor intermitente en la forma

En reactores intermitentes, nos interesa determinar cuánto tiempo se deben dejar los materiales
que reaccionan dentro del reactor para alcanzar cierta conversión X. Para determinar este tiempo,
escribiremos el balance molar, en términos de conversión, derivando la ecuación anterior con
respecto al tiempo y recordando que NAO es el número de moles de A presentes inicialmente; por
lo tanto, es una constante con respecto al tiempo.
En un reactor intermitente, la ecuación de diseño en forma diferencial es

A continuación se integra esta ecuación desde el límite de la reacción en el tiempo cero, momento
en el cual no hay conversión inicial (es decir, t = 0, X = O)
Ecuaciones de diseño para reactores de flujo

En un reactor intermitente, vimos que la conversión aumenta con el tiempo que pasa el reactivo
dentro del reactor. En sistemas de flujo .continuo, este tiempo suele aumentar conforme el
volumen del reactor aumenta, es decir, a medida que el reactor es más grande o más largo , los
materiales que reaccionan tardan más tiempo en fluir completamente dentro de éste y, por lo
tanto, más tiempo en reaccionar. En consecuencia, la conversión X está en función del volumen
del reactor, V. Si F AO es la velocidad de flujo molar de la especie A, alimentada a un sistema que
opera en estado estacionario, la velocidad molar a la cual la especie A reacciona dentro de todo el
sistema será F AOX.

La velocidad de alimentación molar de A al sistema menos la velocidad de reacción de A dentro del


sistema es igual a la velocidad de flujo molar de A que sale del sistema FA. El enunciado anterior
puede escribirse en forma matemática como sigue:

Reacomodando, se obtiene

La velocidad de flujo molar alimentada de la especie A, F (mol/s), es simplemente el producto de la concentración


AO

entrante, CAO (mol/dm3), por la velocidad de flujo volumétrico entrante, Vo (dm3/s):


Ecuación de diseño de un reactor CSTR

Recordando que el CSTR se representa por un modelo de mezcla perfecta, de modo que
no hay variaciones espaciales dentro del reactor. El balance molar de CSTR

Combinando a continuación FA en términos de FA0 y X.

Y combinando ahora las ecuaciones anteriores tenemos

Simplificando, vemos que el volumen del CSTR necesario para lograr una conversión
específica X es

Como en el reactor hay mezclado perfecto, la composición de salida del reactor es


idéntica a la composición del interior en el mismo, en tanto que la velocidad de reacción
se evalúa a en las condiciones de salida.
PFR (reactor de flujo tapón)

El modelo del PFR considera que el fluido se desplaza como tapón, es decir, sin
gradientes radiales de concentración, temperatura o velocidad de reacción. A medida que
los materiales que reaccionan entran y fluyen axialmente por el reactor son consumidos y
la conversión aumenta en toda la longitud del mismo. En seguida, expresamos la
ecuación del balance molar para la especie A en la reacción como sigue:

Para un sistema de flujo, FA se ha dado previamente en términos de la velocidad de flujo


molar alimentada FAO y la conversión X

Derivando

y combinando en la ecuación del balance molar se obtiene la forma diferencial de la


ecuación de diseño para un PFR:

A continuación, separando las variables e integrándolas con las fronteras V=0


cuando X = 0 obtenemos el volumen del PFR necesario para alcanzar una conversión
específica X:

Para realizar las integraciones en las ecuaciones de diseño del PFR, así como para
evaluar la ecuación de diseño del CSTR, es necesario saber cómo varía la velocidad de
reacción - rA con la concentración (y, por lo tanto, la conversión) de la especie que
reacciona.

Reactor empacado (PBR)

Los reactores empacados son reactores tubulares llenos con partículas de catalizador. La
deducción de la forma diferencial e integral de las ecuaciones de diseño para reactores
empacados es análoga a la que se realiza para el PFR.

La forma diferencial de la ecuación de diseño, debe usarse al analizar reactores que


tengan una caída de presión a lo largo de los mismos.
En ausencia de caída de presión, es decir, ∆P = 0, es posible integrar la ecuación con las
fronteras X = 0 en W = 0 para obtener

Esta ecuación puede emplearse para determinar el peso del catalizador W necesario
para alcanzar una conversión X cuando la presión global permanece constante.

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