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SISTEMAS DE PROTECCIÓN
La razón de ser del sistema de protección se deduce del hecho de que cualquiera de
los elementos que compone el sistema eléctrico está sujeta a fallas, independientemente de
la probabilidad de falla o del costo del elemento en sí; igualmente, en el hecho de que una
falla afecta la calidad de servicio, mayormente a mayor tiempo la falla permanezca en el
sistema.
El objetivo principal de los sistemas de protección consiste en detectar la falla,
determinar su localización y retirar rápidamente del sistema únicamente la falla del sistema.
Los sistemas de protección actuales son más una protección a los sistemas que una
protección a los equipos por cuanto al actuar en la forma indicada evitan que la falla dañe
la calidad del servicio, mantiene al sistema en su más alto grado de uso y al mismo tiempo,
mejorar la continuidad de servicio a los usuarios.
Para cumplir con su objetivo principal los sistemas de protección realizan funciones
muy variadas, algunas de las cuales son los siguientes:
1. Retirar rápidamente del servicio la parte necesaria para despejar la falla con el objeto de
evitar que se dañe la calidad del servicio, como es el caso de un cortocircuito en cualquier
parte del sistema.
4. Impedir maniobras de operación que por error pueda cometer el personal de operación y
que afecten al sistema, como puede ser una orden de sincronización cuando no existe
condiciones para la misma.
5. Seccionar el sistema en los puntos más aconsejables para la repartición de carga frente
una pérdida de sincronismo.
Aparte de las funciones necesarias para cumplir con su objetivo principal, los
sistemas de protección realizan otra serie de funciones de tipo secundaria que debe realizar
como:
Sensibilidad: el sistema de protección debe tener la suficiente sensibilidad para detectar las
fallas que afecten al sistema.
Velocidad: el sistema de protección debe determinar con qué velocidad es necesario
despejar la falla y poseer la velocidad adecuada para hacerlo.
Confiabilidad: por cuanto las fallas que afectan el sistema se presentan con relativa poca
frecuencia.
Estabilidad: es necesario que el sistema de protección sea estable, para que frente a una
falla no se retiren innecesariamente elementos sanos del sistema.
Es evidente que para que el sistema de protección cumpla con estas características,
es necesario que las mismas las cumpla cada equipo individualmente. Un relé, por
ejemplo, debe ser capaz de operar con baja señal (sensibilidad); medir correctamente para
determinar la localización de la falla (selectividad); dar la orden de disparo al interruptor
para despejar la falla en el tiempo apropiado (velocidad); ser de construcción robusta y
simple, baja probabilidad de falla (confiabilidad); no dar disparo frente a fallas que no le
corresponden (estabilidad).
Transformadores de Medidas
Relés
Interruptor de Poder
Son los dispositivos destinados a conectar o desconectar (aislar) los equipos, ya sea
en forma voluntaria mediante los operadores o bien comandados por los relés. Su función
es conectar o desconectar los equipos de la fuente de energía del sistema de potencia.
Circuitos de Control
Falla: es la condición que impide continuar con la operación de uno o más componentes
del sistema eléctrico, por lo que deben actuar las protecciones para despejar (aislar) la parte
afectada con rapidez, evitando daños mayores.
Las fallas más comunes son los cortocircuitos que pueden ser: trifásicos, bifásico a tierra,
bifásico simple y de las perturbaciones: sobrecargas, oscilaciones, sobretensiones y
desequilibrios.
Los efectos de las corrientes de cortocircuitos son de una relativa gravedad, lo que
hace que se considere dos aspectos:
Los cortocircuitos monofásicos son los más frecuentes y crean esfuerzos en el sistema
eléctrico como en la estabilidad, no tiene tanta gravedad como ocurre con los cortocircuitos
trifásicos. Las tasas de fallas en sistemas de baja tensión son mayores que las que se
presentan en sistemas de alta tensión por la cantidad de elementos y equipos
involucrados.
2. Carbonizar los aislantes y provocar incendio por el calor producido por el arco.
3. Otros efectos producidos son los esfuerzos electrodinámicos (en las bobinas de los
transformadores), que pueden llegar a sufrir deformaciones, igualmente puede ocurrir a las
barras de las subestaciones.
Los relés son los elementos que reciben la información acerca de las condiciones de
operación del sistema eléctrico, desde los transformadores de medidas en forma de voltajes
y corrientes. Un cortocircuito produce variaciones de tales magnitudes que son detectadas
por los relés; los que pueden discriminar la anomalía causada. Esta discriminación en base
a los efectos de:
Variación entres las Diferentes Corrientes: cuando los cortocircuitos ocurren dentro de
ciertas zonas pequeñas o dentro de ciertos equipos, tales como transformadores,
maquinarias rotatorias o subestaciones, se produce una variación en la relación de las
corrientes de entrada y salida de los mismos, para ello se utiliza un tipo de protección
llamada Diferencial, basada en la alteración de la relación de la relación de las corrientes
de entrada y salida.
Cambio del Sentido de Equipo de Potencia: los cortocircuitos también originan cambio
en el sentido del flujo de potencia, que fluye hacia el punto del cortocircuito desde todos los
lados donde existen generadores; cosa que no ocurre en condiciones normales, se utiliza un
tipo de protección llamado Protección Diferencial y que sola opera para un determinado
sentido del flujo de potencia.