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ENSAYO DE FEDRA

Esta historia gira en torno Fedra cuya pasión exorbitante la condujo a su propio fin.
la obra Fedra de la mitología Griega se puede evidenciar el amor y placer enfermizo
de esta mujer por su hijastro Hipólito. Según lapostura sobre el “Placer y felicidad”

Por lo anterior se puede afirmar que Fedra ante puso el placer ante la razón; pues
a mí parecer, sin importar que Hipólito fuera su hijastro quiso desahogar en él la
pasión que sentía por su esposo.

También se pude decir que el deseo esclaviza,por lo tanto Fedra ante el rechazo de
Hipólito pierde la razón, se humilla, no le importa su dignidad y prefiere que la vea
como su esclava y no como su madre, creyendo que esa es su felicidad dejándose
llevar por el deseo; pero esto no es así, según mi punto de vista la felicidad no se
mide por cuanto se está entregado a otra persona, sino que es feliz quien para sí
mismo larazón se convierta en la fuente de la felicidad y ejerza un juicio moral
estable en el que la prioridad no siempre sean los sentimientos.

La razón es que Fedra se enamora intensamente de su castísimo hijastro, Hipólito,


quien no le corresponde con el mismo sentir y esto anticipa un desequilibrio personal
de emociones encontradas.

Sin embargo la manifestación de las pasiones más carnales convierte las almas de
estas dos protagonistas en un campo de batalla entre lo que es correcto y lo que no
lo es. No obstante, los motivos que catalizan este sentimiento trágico dependen del
contexto en el que se desenvuelven desde el punto de vista de una sociedad.

La relación entre Fedra e Hipólito se da en términos cercanos que se ejemplifican


en los comentarios de Pedro a cerca del poder de intercesión que puede tener Fedra
sobre la vida personal de Hipólito (cuando conversa con él sobre el matrimonio a
petición de Pedro) e incluso cuando Hipólito la invita a pasar un día junto a él en el
campo. No obstante, Fedra lucha contra su pasión y deseos carnales.

Al final nos damos cuenta de que Fedra conoce lo que es correcto, pero es incapaz
de ponerlo en práctica. En su situación esto incrementa el sentido de pesimismo
ocasionado por la idea fatalista que se mencionaba antes, de que todo está
destinado por los dioses y ya no queda nada que los mortales puedan hacer para
remediarlo por mucho que lo intenten o traten de reprimirlo.

El remordimiento y los sentimientos de culpabilidad son infundados en el interior de


Fedra como parte de sus acciones erróneas y anti-cristianas. Además de su fracaso
rotundo ante el desprecio de Hipólito.

Al final esta se siente arrepentida por haber enemistado con su hijo Hipólito. Por
eso decide contar toda la verdad mediante una carta y ofrecer su vida como
sacrificio mediante el suicidio para así obtener el perdón de los dos hombres y la
absolución divina de su pecado.

A lo largo de todo el desarrollo del drama, podemos apreciar cómo Fedra sucumbe
ante un final trágico. Lo cierto es que la muerte significa un sacrificio propio.

En conclusión el placer y la felicidad se pueden ver como caminos distintos debido


a que la razón no siempre genera placer; y el placer no siempre alcanza los frutos
de la felicidad, haciendo que el ser humano se encuentre en una dualidad de
comportamientos como en el caso de Fedra que opto por saciar sus placeres
pensando que esto la haría feliz, pero se encontró con la realidad que sus placeres
no podían ser saciados dejándola con un sin sabor y sentimiento de culpa frente a
sus deseos carnales.

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