USO DE LA RETÍCULA EN UN PROYECTO GRÁFICO

El uso de la retícula ha sido ampliamente discutido en el campo del diseño gráfico, ya que
para muchos esta herramienta es útil para ubicarnos en el espacio y establecer un orden;
para otros la retícula es un instrumento que limita la creatividad del diseñador y frena un
buen trabajo. Samara (Timothy, 2004) menciona que desde la antigüedad las
civilizaciones ya utilizaron una estructura para realizar sus edificaciones y construir
templos y ciudades; lo cual es una práctica que se asemeja mucho al uso de la retícula;
pues tener una estructura es inherente a los seres humanos.

En ese sentido, “en la modernidad la retícula es un sistema octogonal de planificación que

parcela la información en fragmentos manejables. (Timothy, 2004, pág. 8). Las ventajas
de utilizar este sistema en un proyecto gráfico son numerosas. La primera y más defendida
por los simpatizantes de su uso es que la retícula permite al lector encontrar de manera
sencilla la información ya que sitúa los elementos en el espacio de manera adecuada.

Otro de los argumentos es que la retícula facilita el orden y claridad tanto en los textos
que se usan en los diseños como en las imágenes. “La simplicidad minimalista de la
retícula contrasta con la superficie cinética y cambiante del entorno multimedia”
(Timothy, 2004, pág. 9). Por ello, entre los beneficios de usarla está la adaptación a los
distintos medios donde se presentan los proyectos de diseño. Ya no sirven únicamente
para los medios impresos, sino que la virtualidad también permite dar a conocer un
proyecto y su buen uso y eficaz impacto en el público pueden lograrse gracias al buen uso
de la retícula.

No obstante, (Timothy, 2004) hace un recorrido por las diferentes corrientes de diseño
que se han forjado a lo largo de la historia, para comprender como el uso del espacio y la
simetría en la retícula fueron tomando lugar en los proyectos gráficos y al mismo tiempo
fueron de gran debate entre los creativos que defendían o se oponían a su uso. En cuanto
a cómo contribuye el uso de la retícula a la narrativa visual se puede mencionar que
“cualquier diseño implica la resolución de una serie de problemas tanto a nivel visual
como a nivel organizativo (…) el uso de la retícula permite que un diseñador pueda
maquetar cantidades ingentes de información en un tiempo sustancialmente corto.”
(Timothy, 2004, pág. 22). Esto quiere decir que al mismo tiempo que se pone gran
cantidad de información a disposición del público se lo hace de una manera atractiva;
ubicando adecuadamente cada letra e imagen en el espacio para que la información sea
clara y comprensible.

Existen varios tipos de retículas, ya sea de columnas, de manuscrito, modulares, entre

otras; pero todas cuentan con una organización parecida que cuenta con líneas de flujo,
zonas espaciales para destacar información, marcadores y márgenes. A continuación,
tenemos el ejemplo del Manual de Identidad Corporativa INECO; en el cual se observa
el correcto uso de la retícula.

En este manual encontramos un ejemplo de cómo construir gráficamente una marca.

Como se observa, se hace el uso de la retícula para ubicar en el espacio la tipografía que
conforma la palabra: ineco. Esto permite ubicar las letras de manera que haya espacio
suficiente entre cada una. Su tamaño resulta adecuado para la vista del lector y es fácil de
comprender y visualizar. En conclusión, el uso de la retícula aporta muchas ventajas y
beneficios a un proyecto gráfico pues permite que el trabajo sea ordenado y que se
cumplan los objetivos deseados para llegar al público.

Bibliografía:

Ineco. (s.f.). Manual de identidad corporativa.

Timothy, S. (2004). Diseñar con y sin retícula. Barcelona: Editorial Gustavo Gili.