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● Albert DeSalvo

Albert Henry DeSalvo (3 de septiembre de 1931 - 25 de noviembre de 1973) fue un criminal


estadounidense de Boston, Massachusetts, quien confesó ser el "Estrangulador de Boston",
el asesino de 13 de mujeres en el área de Boston. Su confesión ha sido objeto de
controversia y sigue habiendo debates sobre los delitos de DeSalvo.
DeSalvo nació en Chelsea, Massachusetts, hijo de Frank y Charlotte DeSalvo. DeSalvo
torturaba animales de niño y comenzó a robar en la adolescencia, frecuentemente
cruzándose con la ley. Cuando era joven, fue vendido como esclavo con su hermana a un
agricultor de Maine por nueve dólares. En noviembre de 1943, DeSalvo de 12 años de edad
fue arrestado por primera vez por robo. En diciembre de ese mismo año fue enviado a
Lyman School para Niños. En octubre de 1944, fue puesto en libertad y comenzó a trabajar
como repartidor. En agosto de 1946, regresó a Lyam School por robar un automóvil.
Después de completar su última sentencia, DeSalvo se unió al Ejército. Fue dado de alta
honorablemente después de su primera misión. Volvió a enlistarse, y, a pesar de ser
juzgado por una corte marcial, DeSalvo se retiró con honores.
Asesinatos con estrangulamiento
Entre el 14 de junio de 1962 y el 4 de enero de 1964, 13 mujeres solteras entre 19 y 85
años de edad fueron asesinadas en el área de Boston; sus asesinatos fueron atribuidos al
criminal bautizado con el nombre de El Estrangulador de Boston.
El 27 de octubre de 1964, un desconocido entró en la casa de una mujer joven en East
Cambridge haciéndose pasar por un trabajador de mantenimiento enviado por el supervisor
del edificio. Ató a la víctima a su cama, procedió a agredirla sexualmente y se fue de
repente, diciendo "Lo siento" mientras se iba. La descripción de la mujer llevó a la policía a
identificar al asaltante como DeSalvo y cuando su fotografía fue publicada, muchas mujeres
lo identificaron como el hombre que las había asaltado. A principios del 27 de octubre,
DeSalvo se hizo pasar por un automovilista con un problema en su coche e intentó entrar en
una casa en Bridgewater, Massachusetts. El dueño de la casa, Richard Sproles, tuvo
sospechas y después le disparó a DeSalvo.
DeSalvo no figuraba como sospechoso de estar involucrado en los asesinatos. Sólo
después de ser acusado de violación dio detalles de sus actividades como el Estrangulador
de Boston bajo hipnosis inducida por William Joseph Bryan y sesiones no inducidas por
hipnosis con John Bottomly. Inicialmente confesó a su compañero preso George Nassar;
después informó a su abogado F. Lee Bailey, que se hizo cargo del caso de DeSalvo.
Aunque había algunas incoherencias, DeSalvo fue capaz de citar detalles que no habían
sido hechos públicos. Por ello, fue juzgado por delitos anteriores, sin relación con robo y
delitos sexuales. Bailey utilizó la confesión de los asesinatos incluida en la historia de su
cliente en el juicio como parte de una defensa por demencia, pero el juez la descartó por
improcedente.
Prisión y muerte
DeSalvo fue sentenciado a cadena perpetua en 1967. En febrero del mismo año, escapó
con dos compañeros de prisión del Bridgewater State Hospital, lo que provocó una
persecución a gran escala. Tres días después de la fuga, llamó a su abogado para
entregarse. Su abogado envió a la policía para que lo arrestasen nuevamente en Lynn,
Massachusetts. Tras la fuga, fue trasladado a la prisión de máxima seguridad, conocida en
aquella época como Walpole, donde más tarde se retractó de sus confesiones como el
Estrangulador.
El 25 de noviembre de 1973, fue encontrado muerto apuñalado en la enfermería de la
prisión. Robert Wilson, que estaba asociado con la banda Winter Hill, fue juzgado por el
asesinato de DeSalvo, pero el juicio terminó con un jurado en desacuerdo. Bailey afirmó
más tarde que DeSalvo fue asesinado por vender anfetaminas en la prisión por menos del
precio establecido por el sindicato de reclusos. Los papeles de DeSalvo se encuentran en
las Colecciones Especiales de la Biblioteca Lloyd Sealy en el John Jay College of Criminal
Justice de Nueva York.

● William Heirens
William George Heirens (15 de noviembre de 1928-5 de marzo de 2012) fue un homicida
estadounidense confeso de haber perpetrado tres homicidios en 1946 (según la versión
oficial). Fue más conocido como "El asesino del lápiz Labial". Heirens posiblemente ha sido
la persona que más tiempo ha estado privada de su libertad, tras haber pasado 65 años en
prisión.
Su apodo se le adjudicó debido a que, en las escenas de sus crímenes, se encontraron
mensajes escritos en la pared con un lápiz labial.

Charles Einstein escribió una novela basada en la vida de Heirens, llamada The Bloody
Spur about Heirens (1953). Años más tarde, fue llevada al cine como While the City Sleeps
(1956), producida por Fritz Lang.

Heirens paso sus últimos años en el centro correccional de Dixon (Illinois), donde fue el
preso Nº C-06103. A pesar de que permaneció preso hasta su muerte, él se retractó de su
confesión, mencionando ser víctima de la brutalidad policíaca.

El 5 de marzo de 2012, Heirens fue encontrado muerto en su celda del centro correccional
de Dixon; fue trasladado al centro médico de la UIC, donde se le declaró oficialmente
muerto a las 20:45, hora de Illinois.

● Bobby Joe Long


Robert Joseph Long (Kenova, Virginia Occidental; 14 de octubre de 1953-Raiford, Florida;
23 de mayo de 2019), también conocido como Bobby Joe Long, fue un asesino en serie
estadounidense. Long secuestró, torturó y asesinó al menos a diez mujeres en el área de la
Bahía de Tampa en Florida en un período de ocho meses en 1984. Liberó a una de sus
últimas víctimas, Lisa McVey de 17 años, después de violarla y tenerla secuestrada durante
26 horas. McVey proporcionó información a la policía que les permitió localizarlo.

Violaciones:
Antes de los asesinatos en el área de Tampa Bay, Long había cometido al menos cincuenta
violaciones en Fort Lauderdale, Ocala, y el condado de Miami-Dade, que le dieron el
sobrenombre de "el violador de los anuncios clasificados". A partir de 1981, respondía a
anuncios clasificados de electrodomésticos pequeños, y si encontraba a una mujer sola en
su casa, la violaba. Fue juzgado y condenado por violación en 1981, pero solicitó un nuevo
juicio, que le fue concedido. Los cargos fueron retirados más tarde. Antes de que Long se
mudara a Florida, vivía en Long Beach, California, en el bloque 2500 de la avenida
Eucalyptus, donde alquiló una habitación a una mujer llamada Kathy. Salía con una chica de
17 años que vivía al otro lado de la calle de su habitación alquilada. Long comenzó
entonces a contactar mujeres a través del Penny Saver (un periódico gratuito que anuncia
artículos a la venta) y otros anuncios clasificados, y cuando encontraba a una mujer sola,
pedía usar el baño, sacaba su "kit de violación", violaba y robaba brutalmente a la mujer.
Estos delitos nunca fueron procesados por las autoridades locales de California.

Asesinatos:
Long se mudó al área de la bahía de Tampa en 1983. El condado de Hillsborough había
tenido un promedio de entre treinta a treinta y cinco homicidios por año en los años ochenta.
A partir de 1984 la tasa de homicidios se incrementó. Durante un período de ocho meses,
un asesino con un método único de atar, violar y matar a sus víctimas, y luego dejarlas en
posiciones y posturas explícitas, subió el promedio a un asesinato cada dos semanas. La
primera víctima fue descubierta en mayo de 1984, cuando la Oficina del Sheriff del Condado
de Hillsborough fue llamada a una escena del crimen donde se encontró el cuerpo de una
mujer desnuda.

Víctimas conocidas:
-Artiss Ann Wick - asesinada el 27 de marzo de 1984
-Ngeun Thi Long - asesinada el 13 de mayo de 1984
-Michelle Denise Simms - asesinada el 27 de mayo de 1984
-Elizabeth Loudenback - asesinada el 8 de junio de 1984
-Vicky Marie Elliott - asesinada el 7 de septiembre de 1984
-Chanel Devoun Williams - asesinada el 7 de octubre de 1984
-Karen Beth Dinsfriend - asesinada el 14 de octubre de 1984
-Kimberly Kyle Hopps - asesinada el 31 de octubre de 1984
-Lisa McVey - asaltada el 3 de noviembre de 1984; sobrevivió
-Virginia Lee Johnson - asesinada el 6 de noviembre de 1984
-Kim Marie Swann - asesinada el 11 de noviembre de 1984

Detención, juicio y condena


Long fue arrestado a la salida de un cine el 16 de noviembre de 1984, acusado del
secuestro y agresión sexual a Lisa McVey. La había interceptado cuando regresaba a casa
en bicicleta, la violó y la retuvo, pero luego la dejó ir, al no ser una prostituta, a las que
detestaba. Una vez obtenida la confesión del detenido, el interrogatorio se centró en la
oleada de crímenes sexuales sin resolver que había golpeado la zona de Tampa Bay desde
principios de año. Long acabó confesando ocho asesinatos en el condado de Hillsborough y
uno en el condado de Pasco. Fibras sobre muchos de los cuerpos analizadas por el FBI
resultaron proceder del automóvil de Long.

Su juicio recibió amplia atención de los medios de comunicación. En julio de 1986, fue
condenado a pena de muerte en la silla eléctrica.

Documentales
La historia de los crímenes de Long fue contada en: The FBI Files, archivos forenses,
sobreviví, escapé a mi asesino ( Crime & Investigation Network ), médicos asesinos en el
corredor de la muerte ( CBS ), el mal vive aquí, perfil de asesino en serie, los asesinos más
malvados del mundo "El violador de anuncios clasificados: Bobby Joe Long" (Reelz).

Películas
Créeme: El rapto de Lisa McVey (2018)
● Andréi Chikatilo
16 de octubre de 1936 Yabluchne, URSS (hoy Ucrania) - 14 de febrero de 1994 (57 años)
Novocherkask (Rusia)

fue un asesino en serie y caníbal soviético. Chikatilo es considerado el peor asesino en


serie de la historia de la Unión Soviética. Fue conocido como "el Carnicero de Rostov", "el
Destripador Rojo" y "el Destripador de Rostov" y cometió asalto sexual, asesinato y
mutilación de al menos 52 mujeres y niños entre 1978 y 1990 en la Rusia soviética, la
Ucrania soviética y el Uzbekistán soviético. Chikatilo confesó un total de 56 asesinatos, y
fue juzgado por 53 de estos en abril de 1992. Fue condenado y sentenciado por 52 muertes
en octubre de 1992; posteriormente, fue ejecutado en febrero de 1994.

Actividad criminal
El 22 de diciembre de 1978, Chikatilo mató por primera vez cuando tenía 42 años. Abordó
en la calle a una niña de nueve años de edad y la convenció para que se fuera con él a una
cabaña que poseía en las afueras de la ciudad. Sabía como hablar a los niños, él mismo
había sido maestro y tenía dos hijos. Una vez allí la desvistió con violencia.
Accidentalmente, le hizo un rasguño del que brotó sangre, hecho que le propició una
erección inmediata, estableciendo el vínculo fatal entre sangre y sexo. Luego, sacó un
cuchillo y se lo clavó a la niña en el estómago. Con cada puñalada notaba que se acercaba
más al orgasmo, por lo que no cesó de hacerlo hasta la eyaculación. Chikatilo había
intentado satisfacer su necesidad sexual movido por la esperanza de llegar a ser igual que
los demás.
Dos días después de este crimen, la policía encontró los restos de la niña en el río
Grushovka, y cerca de la cabaña de Chikatilo una gran mancha de sangre. Los policías
interrogaron al hombre, pero acabaron inculpando a otro agresor sexual, Aleksandr
Krávchenko. Chikatilo era, por las paradojas que marcaban sus actos, más dual que nunca.

Era un marido sumiso. Hacía todo lo que su mujer le ordenaba o casi todo. Ella solía desear
los placeres del lecho con más frecuencia que él, y eso los llevaba a frecuentes
discusiones, a que ella le recordase en todo momento lo taciturno e inerte que era. La
acusación de haber acosado sexualmente a sus estudiantes le costó el trabajo, pero
consiguió uno nuevo en una fábrica en la que tenía que estar viajando constantemente.
Este constante movimiento le ayudaba a escoger sus nuevas víctimas.

En 1981, se convirtió en funcionario de abastecimiento de una fábrica, y el trabajo, que lo


obligaba a recorrer una buena parte de la región, le proporcionaba la fachada perfecta. Tres
años pasarían antes de que Chikatilo asesinara por segunda vez. El 3 de septiembre de
1981 asaltó a su segunda víctima, llamada Larisa Tkachenko, prostituta de 17 años de
edad. La convenció de ir con él al bosque para tener relaciones sexuales, pero falló en el
intento por lo que ella se rio de él, esto lo enfureció, perdió el control, estranguló a la mujer y
eyaculó sobre el cadáver, mordisqueó su garganta salvajemente, le cortó los senos y en su
frenesí se comió los pezones. Luego, comenzó a lanzar aullidos mientras bailaba una danza
de guerra alrededor del cuerpo, dejó el cuerpo sin vida con un palo enterrado. En esos
momentos supo que volvería a matar. Los dos primeros asesinatos de Chikatilo tuvieron
cierto carácter fortuito. Es posible que, en ambos casos, sus intenciones fueran solamente
de índole sexual. Los gritos de terror lo excitaban, pero era el asesinato en sí lo que
presentaba para él el acto sexual supremo.
Su tercera víctima fue Lyuba Biryuk, fue raptada de un pueblo y fue acuchillada 40 veces en
el bosque. Le mutiló los ojos, y esto se volvería algo común en sus asesinatos, la firma
mortal de Chikatilo.

Chikatilo asesinó a otras tres personas ese año, y entre ellas se encontraba su primera
víctima masculina, Oleg Podzhiváev de 9 años de edad. El cuerpo no se encontró pero
Chikatilo afirmó ser el responsable y que le había arrancado los genitales. La prensa estaba
enloquecida con el asesino en serie, el modus operandi era siempre el mismo, sus víctimas
siempre se encontraban en los bosques, con indicios de violencia y sadismo, y en
ocasiones les faltaban miembros a las víctimas. Se trataba de niños, niñas y chicas jóvenes.
Entre ellos había muchos escapados de casa, pues se dejaban convencer más fácilmente y
agradecían su ayuda en el laberinto del sistema de transportes local, con el que no estaban
familiarizados.

El 11 de diciembre de 1982 Chikatilo se encontró con una niña de 10 años llamada Olga
Stalmachenok en un autobús a la casa de sus padres en Novoshakhtinsk y la persuadió
para dejar el autobús con él. Fue vista por última vez por un compañero de viaje, quien
informó que un hombre de mediana edad había llevado a la niña firmemente de la mano.
Chikatilo atrajo a la niña a un maizal en las afueras de Novoshakhtinsk, la apuñaló en más
de 50 veces alrededor de la cabeza y el cuerpo, le arrancó el pecho y le extirpan el intestino
inferior y el útero.

En 1984, el número de víctimas fue en ascenso llegando a 15 personas. Chikatilo los elegía
entre la multitud en estaciones ferroviarias y en paradas de autobús, y con algún pretexto,
los convencía para que lo siguieran a alguna zona boscosa. Una vez allí les infligía
numerosas puñaladas (entre treinta y cincuenta). Casi todas las víctimas sufrían la
mutilación de los ojos. A las adolescentes o chicas jóvenes les seccionaba los pechos o los
pezones, ya fuera con sus afilados cuchillos o con los dientes. El útero era extirpado con tal
precisión que todos los cirujanos de la provincia de Rostov pasaron a ser sospechosos en
potencia.

Mientras las violaba, se enfurecía tanto por llegar tan rápidamente al orgasmo que les
machacaba la cara a golpes. Para ocultar su impotencia, a veces, con la ayuda de una
ramita, colocaba el semen en la vagina de la víctima. En el caso de los niños, los atacaba
nada más hallarse a solas con ellos en el bosque: un golpe para aturdirlos con las manos
atadas y unos golpes de cuchillo poco profundos para establecer su dominio sobre ellos.
Posteriormente, los mutilaba a mordiscos, les cortaba los genitales o solamente extirpaba
los testículos, que guardaba a modo de trofeo. En algunas ocasiones realizaba estas
amputaciones cuando la víctima se hallaba aún con vida, aunque no consciente. En ninguno
de los casos se encontraron las partes del cuerpo seccionadas en las cercanías de la
escena del crimen.

Además practicaba actos de canibalismo. En sus declaraciones confesaría que le gustaba


tragarse las partes del cuerpo más blandas.

Primer Captura:
El Instituto Serbsky (en inglés: Serbsky Center) de Moscú diseñó el perfil de un hombre
ostensiblemente normal, probablemente casado, con un trabajo regular. Por el semen
hallado en los cuerpos de sus víctimas, se supo que su sangre era del grupo AB. El 14 de
septiembre de 1984, detuvieron a Chikatilo en el mercado de Rostov, pues en líneas
generales encajaba con la descripción del asesino, pero no pudieron demostrar nada más.

Chikatilo parecía un hombre respetable, y tras hacerle un análisis de sangre, esta resultó
ser de grupo A. Enseguida fue puesto en libertad sin cargos. Por esas alturas, los archivos
de la policía contenían datos de unos 26 500 sospechosos. Cuando apareció el cadáver
número treinta, los periódicos empezaron a dar noticias del posible asesino en serie,
quienes todos creían un retrasado mental, a pesar de que la policía no estaba de acuerdo.
Esto puesto que la amplia dispersión territorial del asesino indicaba que este disponía de un
vehículo, factor que en Rusia no era escaso.

Posteriormente, Chikatilo fue acusado de haber robado un rollo de linóleo de su oficina.


Siete meses después, con ese caso aún pendiente, fue arrestado por comportamiento
impropio en la estación de autobuses de Rostov y fue sentenciado a 15 días en prisión. La
policía creía que él era el asesino, así que compararon la sangre de Chikatilo con el semen
encontrado en los cuerpos de las víctimas e inexplicablemente no era el mismo tipo de
sangre. Fue sentenciado a un año en cárcel por el robo del linóleo, pero el juez simpatizó
con él y lo liberó antes.

El 17 de octubre de 1990 volvió a matar en un bosque cercano a la estación de Donlesjoz.

Captura y Confesión:
Este crimen absorbió a toda la policía local y a una fuerza antidisturbios de 100 hombres.
Pero dos semanas después, Chikatilo volvió a actuar, y esta vez fueron unos 600 detectives
los encargados de investigar a lo largo de la línea de los bosques, en donde montaban
guardia tres o cuatro oficiales en los apeaderos más aislados.
El 6 de noviembre de 1990, uno de estos detectives, un sargento llamado Ígor Rybakov, vio
surgir del bosque un hombre con traje y corbata. Mientras observaba cómo este se lavaba
las manos en la fuente advirtió que tenía un dedo vendado y una mejilla manchada de
sangre. Rybakov le pidió la documentación, no tenía motivos suficientes para arrestar a
Chikatilo, sin embargo, dejó constancia del incidente. Al día siguiente, se encontró el
cadáver de una chica en esa misma zona.

El homicida tenía que haber pasado por la estación, y el culpable no podía ser otro que el
sospechoso del informe de Rybakov. Lo arrestaron el 20 de noviembre, sospechoso de
haber asesinado a 36 víctimas, todos ellos mujeres y niños. Su esperma, aunque no su
sangre, sí era AB.

El fiscal general de la provincia de Rostov emitiría una orden de detención contra Chikatilo,
efectiva a partir del 20 de noviembre de 1990. Ese mismo día fue retenido por la KGB,
mientras este con paso lento y senil decía "¿Cómo pueden hacerle esto a una persona de
mi edad?". En los interrogatorios, afirmó que simplemente era un ciudadano normal, que no
había cometido ningún tipo de delito, y que era objeto de una persecución absurda por parte
de la policía. De destacar que Andréi Chikatilo llevó a los detectives de la policía de Rostov
al lugar donde yacían 3 cadáveres que aún no se habían descubierto. Tanto la detención de
Chikatilo, como la macabra búsqueda de los restantes cadáveres fueron filmadas.

El 27 de noviembre prometió que estaba dispuesto a aportar pruebas de sus crímenes si no


continuaban atosigándolo con los interrogatorios que le recordaban los detalles, y dos días
después se derrumbó ante un psiquiatra a quién acabó confesando 52 asesinatos.
Posteriormente, guio a los investigadores a los distintos lugares con la esperanza de que el
número de muertes lo convirtiera en un "espécimen de estudio científico".

Juicio y ejecución:
Chikatilo fue acusado de 53 asesinatos agravados, muchas de sus víctimas fueron
emasculadas vivas. Los psiquiatras del Instituto Serbsky, no obstante, lo veían como un
sádico prudente que no sufría ningún trastorno que pudiera impedirle ver que sus actos
estaban mal, que eran actos premeditados. Por esa razón, en octubre de 1991 se dieron a
conocer sus conclusiones, diagnosticando que el asesino estaba «legalmente cuerdo». El
juicio de Andréi Chikatilo se inició en abril de 1992 y duraría hasta octubre de ese mismo
año. Éste, con la cabeza rasurada, presenció su juicio desde un cubículo de metal para
mantenerlo a salvo de la multitud enfurecida. El primer día deleitó a los fotógrafos
esgrimiendo una revista porno, pero más tarde, abatido, se quitó la ropa y meneó su pene
gritando: "Fíjense qué inutilidad. ¿Qué piensan que iba a hacer con esto?"
Los jueces no dudaron en anunciar el veredicto que habían nominado: el 15 de octubre de
1992 fue sentenciado a la pena de muerte, y ejecutado de un tiro en la nuca en la prisión de
Rostov del Don el 14 de febrero de 1994.

● Dennis Nilsen
Dennis Andrew Nilsen (Fraserburgh, Aberdeenshire, Escocia; 23 de noviembre de 1945-
Yorkshire del Este, Inglaterra; 12 de mayo de 2018) fue un asesino en serie y necrófilo
británico.
Hijo de Olav Nilsen (noruego) y de Betty Whyte (escocesa), Dennis tuvo una infancia muy
dura debido al desastroso matrimonio de sus padres y al alcoholismo de su padre. El
matrimonio solo duró siete años y tras el divorcio todo seguía como antes; nada había
mejorado la vida del pequeño Nilsen, quien tenía dos hermanas más que vivían con sus
abuelos, al igual que él.

Cuando Nilsen tenía seis años, su abuelo falleció, Andrew Whyte. Debido a su corta edad
no fue informado de su fallecimiento, pero su madre, fanática religiosa, llevó al pequeño
Nilsen a ver el cadáver de su abuelo, lo cual le creó un gran vacío emocional que lo
marcaría de por vida. Cuando tenía ocho años, Nilsen fue a nadar a la playa, y estando a
punto de ahogarse, fue rescatado por un chico, quien supuestamente se excitó sexualmente
con él y se masturbó sobre Nilsen, encontrando este una sustancia blanca en su estómago
al despertar de su desmayo.

Si bien la mayoría de los asesinos en serie tuvieron una infancia plagada de problemas,
como la crueldad hacia los animales o piromanía, hay que resaltar que Nilsen tuvo una
infancia bastante pacífica. Los mayores problemas de Nilsen derivaron de las vivencias que
tuvo que presenciar y de las muertes de las que escapó, como la de su abuelo o la de un
hombre que se había ahogado en un río. Ver los cadáveres lo marcaría de por vida. Desde
su juventud, Nilsen tuvo una clara orientación homosexual y, de hecho, quedó impresionado
una vez con el torso desnudo de su hermano; fantaseando, intentó explorarlo, pero descartó
inmediatamente la idea.

En 1961 se alistó en la armada británica, donde aprovechó la soledad de su cuarto para


colocar un espejo frente a su cama y fantasear con que era un cadáver, por los que sentía
adoración. En 1972 dejó la armada para trabajar como empleado de vigilancia, pero duró
poco tiempo y entró a trabajar en una agencia de trabajo, donde permaneció hasta su
arresto.

Murió en 2018 en su celda a la edad de 72 años.

Primeros crímenes:
En 1978, conoció a un joven en un bar y le invitó a su apartamento, donde mantuvieron
relaciones sexuales. A la mañana siguiente, Nilsen se despertó y al ver a su compañero de
cama durmiendo, se dio cuenta de que ya faltaba poco para que se vistiera y se fuera. En
ese momento, Nilsen tomó una corbata y lo estranguló para luego ahogarlo en agua y
observar su cadáver. A la mañana siguiente, Nilsen bañó el cadáver y lo llevó a su cama,
donde mantuvo relaciones sexuales con él (necrofilia). Luego guardó el cadáver bajo el
suelo entablado de su habitación. Siete meses después, juntó los restos y los quemó en una
hoguera.

Así, Nilsen asesinó a 14 hombres, estudiantes, indigentes o parejas suyas, a quienes


estranguló, ahogó, descuartizó y tiró sus restos por el desagüe.

Arresto, juicio y sentencia:


A principios de 1983, los vecinos de Nilsen no aguantaban el olor que salía de sus cañerías,
y al estar atascadas, llamaron a un fontanero, quien encontró carne humana putrefacta
flotando en las tuberías del edificio, por lo que llamaron a la policía. Tras una larga
investigación, la policía llegó a la conclusión de que podrían provenir de la casa de Nilsen,
un funcionario de 37 años. Un día en que Nilsen regresaba del trabajo, vio a tres hombres
ante su puerta. El astuto oficial de policía Peter Jay respondió a la pregunta de Nilsen sobre
por qué la policía estaba interesada en él, diciéndole terminantemente: «Muéstrenos los
otros cuerpos, Nilsen», a lo que Nilsen sorprendentemente respondió «sí, pasen; están en
el armario y en el baño». Cuando le preguntaron cuántos había matado, Nilsen respondió
«15 o 16, no me acuerdo». Fue arrestado de inmediato. Según el oficial Jay, el asesino
admitió que si no lo hubieran arrestado en ese momento, no habría dejado de asesinar a
jóvenes.

Finalmente, el 4 de noviembre de 1983, Nilsen fue juzgado por seis asesinatos y otros dos
intentos de homicidio, y fue sentenciado a cadena perpetua con un mínimo de 25 años de
encarcelamiento.

Años después se le imputó y posteriormente demostró una muerte adicional, la de su


primera víctima, un muchacho de tan solo 14 años. Por ello, Nilsen volvió a ser condenado,
sin optar a la libertad condicional.

● Issei Sagawa
Issei Sagawa nacido el 26 de abril de 1949) en Kōbe, Prefectura de Hyōgo, Japón, y
durante sus años escolares fue un estudiante destacado. Estaba obsesionado con las
mujeres occidentales, y mientras estudiaba literatura en inglés en la Universidad de París se
sintió atraído por una alumna de nacionalidad holandesa.
Es un criminal japonés culpable de asesinato y canibalismo cometido contra Renée
Hartevelt.

Crímen:
Issei Sagawa estuvo un tiempo recluido en prisión en Francia por el homicidio de la
estudiante holandesa Renée Hartevelt, quien estudiaba en La Sorbona en París. El 11 de
junio de 1981, Sagawa estaba estudiando literatura de vanguardismo. Invitó a la mujer a
cenar en su casa con la pretensión de conversar sobre literatura. Después de la llegada de
la estudiante y de que ella rechazase sus proposiciones, él le disparó por la espalda en la
nuca con un rifle de calibre 22. Ella había sido elegida debido a que el asesino la
consideraba "hermosa y saludable", todo lo opuesto a lo que él era, ya que se consideraba
"débil, feo e insignificante" y él deseaba "absorber su energía". Sagawa atribuye esta
tendencia caníbal a un sueño de su infancia donde veía a su padre y su madre servir a su
hermano menor como comida en una olla.

Después de dispararle, procedió a desmembrar el cuerpo para poder ingerirlo. Comenzó por
los glúteos de Renée. En entrevistas posteriores, Sagawa dijo que se sorprendió al observar
que la grasa humana tenía un color semejante al maíz. Durante los dos días siguientes,
continuó comiendo varias partes del cadáver y describió la carne humana como "suave y sin
olor", como el atún. Después de ese tiempo, metió los restos del cadáver en dos maletas
viejas y, en su intento de deshacerse de los restos en el Bosque de Boulogne, un parque a
las afueras de París, fue detenido por la policía francesa.

Tras un análisis psicológico fue declarado demente e idiota y juzgado como tal, por lo que
fue recluido en el hospital psiquiátrico Paul Guiraud de París. «Desde hacía tiempo tenía
ganas de comérmela», llegó a decir al magistrado que lo juzgó.[2] Pasados unos meses,
Issei contrajo una enfermedad, que no era más que una inflamación intestinal y que fue
diagnosticada erróneamente por los médicos como una encefalitis avanzada. El veredicto
del equipo médico le vaticinó unas pocas semanas de vida. El padre de Issei, hombre
poderoso y con muchas influencias, consiguió que el caníbal moribundo fuera trasladado a
Tokio, donde fue recluido en una institución psiquiátrica de la cual salió en poco tiempo
pues el psiquiátrico era solo una excusa para poder hacer que Issei pudiera escapar de las
leyes francesas y no acabar en las cárceles de Francia. El gobierno francés no se opuso al
traslado, pues al fin y al cabo, quedándole pocas semanas de vida, lo veían como un simple
adelanto del trayecto.

De modo que Issei fue trasladado al hospital Matsuzawa de Tokio. Y, como era de esperar,
no murió. Vive como una persona normal y, actualmente, necesita una silla de ruedas,
aunque su hermano cuida de él.[3] El asesino caníbal confeso no tiene ninguna causa
pendiente en Japón y en Francia se retiraron todas las causas contra él, debido a que su
padre engañó al gobierno francés diciendo que su hijo acabaría en un hospital psiquiátrico,
cosa que al final no sucedió.

Después de su liberación:
Actualmente Sagawa vive en Yokohama como una persona normal y, a veces, aparece
como comentarista invitado en programas del medio del espectáculo. También escribe
revisiones para restaurantes y en 1992 apareció en la película de Hisayasu Satō llamada
Uwakizuma: Chijokuzeme como un voyeurista sadosexual. Él admite que todavía tiene
fantasías caníbales, pero que ya no desea llevarlas a cabo con mujeres occidentales. Sin
embargo, su preferencia sexual es hacia las mujeres asiáticas, las cuales considera más
atractivas.

Además de los libros escritos referentes al homicidio perpetrado, Sagawa escribió el libro de
comentarios Shonen A en 1997 sobre el asesino en serie de niños en Kōbe de 1997,
cuando un niño de 14 años llamado Sakakibara Seito y apodado "Shōnen A" ("Muchacho
A") asesinó y decapitó a otro niño.

Su historia inspiró en 1981 la canción de The Stranglers llamada "La Folie", en 1983 a los
Rolling Stones con el tema "Too Much Blood" y en 2004 a la banda de brutal death metal
estadounidense Cannibal Corpse en su pista "Decency Defied".

En 2016 la dramaturga y directora española Angélica Liddell estrena su obra "¿Qué haré yo
con esta espada?", inspirada en el crimen de Sagawa y en el atentado yihadista de la sala
Bataclán.

En 2017 se produjo el documental «Caniba», dirigido por Lucien Castaing-Taylor y Verena


Paravel, que narra la historia del caníbal Issei Sagawa.

● Luis Alfredo Garavito


Luis Alfredo Garavito Cubillos (Génova, Quindío, 25 de enero de 1957) es un pederasta,
asesino en serie de niños y agresor sexual conocido como «La Bestia»,«Alfredo Salazar» o
«El Monstruo de Génova», entre otros apodos; Según los informes de la Fiscalía General de
la Nación, Garavito asesinó a 172 menores de edad. De estos, «138 tienen fallo
condenatorio, 32 están en instrucción, uno en apelación y uno está para sentencia». El
organismo judicial cree que fueron más víctimas debido a sus propias confesiones ya a que
a mediados del mes de agosto de 2003 admitió haber asesinado a otras 28 personas: 23
niños y 5 adultos. Entre estos últimos, se encuentra un limpiabotas. Con esto, la cifra de
crímenes sería de 627 personas. Sin embargo, se cree que Garavito pudo asesinar a 300
personas o más, entre niños y adultos.
Además de cometer asesinatos en Colombia, admitió haberlo hecho en el exterior, más
específicamente en Ecuador y Venezuela. Según la Fiscalía General de la Nación,
organismos judiciales y la prensa especializada, Garavito es el «segundo homicida en serie
del mundo». En 2001, fue sentenciado a 1853 años y 9 días de cárcel, la condena más alta
de la que se tenga registro en Colombia, aunque posteriormente fue conmutada a 40 años,
por su colaboración en la identificación de otros asesinos seriales y buen comportamiento.

Según su propio testimonio, en su infancia vivió la falta de afecto y maltrato físico por parte
de su padre y de otras personas cercanas.[61] Fue víctima de abuso sexual en 1970, a los
13 años de edad, por una persona muy cercana a su familia.[61] Es el mayor de siete
hermanos, hijo de Manuel Antonio Garavito y Rosa Delia Cubillos. Estudió hasta quinto de
primaria en el Instituto Agrícola, en el corregimiento de Ceilán, cerca de Tuluá, Valle del
Cauca. Su cédula fue expedida en Trujillo, Valle del Cauca. Como muchas familias en
Colombia, también fue víctima del conflicto armado, ya que Luis Alfredo Garavito Cubillos y
su familia fueron desplazados por la violencia de la guerrilla y el ejército. Desde ese
momento comenzó a padecer muchos ataques de ira, paranoia y psicosis, debido a las
fuertes golpizas y torturas que le causaba su padre, entre ellas ser quemado con velas, ser
cortado con navajas de afeitar, hasta ser atado a un árbol para ser golpeado con el estuche
de un machete o un palo macizo durante horas, incluso en una entrevista afirmó que su
propio padre se acostaba a dormir con el, mientras presuntamente lo violaba. A los 14 años
fue echado de su casa por su madre, debido a que intento acorralar a un niño de 5 años
para violarlo, según el, fue a esa edad que descubrió que tenía una fuerte atracción sexual
hacia los niños, lo que lo lleva a convertirse en un pedófilo y “admite que cuando tortura a
un niño siente más placer sexual”. Según el documental de Guillermo Prieto La Rotta en
2006 para el canal RCN televisión, en 1991 Luis Alfredo Garavito Cubillos ordenó a unos
sicarios asesinar a la persona que abusó sexualmente de él. Empezó sus crímenes a la
edad de treinta y cinco años en 1992, y fue capturado a los cuarenta y dos años de edad,
en 1999. Su actividad criminal duró del 4 de octubre de 1992 al 22 de abril de 1999.
Cometió delitos en varios departamentos de Colombia: Valle del Cauca, Boyacá, Meta,
Quindío, Risaralda, Cundinamarca, Nariño, Huila, Caquetá, Antioquia y Caldas, y en 1998
cometió crímenes en Ecuador.En 2016 Jon Sistiaga le hizo una entrevista para el programa
de televisión Tabú; la entrevista se encuentra en YouTube y está publicada desde el 22 de
abril de 2016.Relató que tenía como profesión vendedor ambulante y vivía de eso.

En 2001, a sus cuarenta y cuatro años de edad, fue designado por las autoridades como un
asesino en serie, pero no ha sido el único que ha existido en Colombia.También están
Daniel Camargo Barbosa, Nepomuceno Matallana, Pedro Alonso López, Manuel Octavio
Bermúdez Estrada y Luis Gregorio Ramírez Maestre, entre otros que aparecen en el libro
del escritor colombiano Esteban Cruz Niño Los monstruos en Colombia sí existen (2013).

Su condena se cumpliría hasta el año 2039 con edad de ochenta y dos años, pero lo más
probable es que salga de la cárcel en el año 2023 en libertad condicional o casa por
cárcel,a la edad de sesenta y seis años, porque se cumplirían las tres quintas partes de su
pena máxima de cuarenta años de cárcel, que serían veinticuatro.Tendría rebaja de penas
por buen comportamiento, colaboración con la justicia, sentencia anticipada, confesión,
trabajo y estudio. No obstante, la Fiscalía colombiana intenta evitar su excarcelación
prematura.

En Ecuador fue condenado a 22 años de cárcel.

En el documental de Discovery Channel del monstruo de los cañaduzales (Manuel Octavio


Bermúdez Estrada) un investigador dice que Luis Alfredo Garavito Cubillos les dio pistas de
cómo atrapar el asesino en serie (21, 23 o 34 niños) del Valle del Cauca, que actuó entre
1999 y 2003.

El documental de Discovery Channel del año 2002 describe la vida del asesino antes de su
captura, sus víctimas, vida familiar, su confesión y su situación actual.

En el 2010 el programa de radio "Internight Paranormal" de los 40 principales conducido por


José Miguel Sánchez y Mauricio Calvo realizó un especial llamado "Mentes Criminales".
Mauricio Aranguren escribió un libro llamado El gran fracaso de la Fiscalía. 192 niños
asesinados. Captura y confesión de la Bestia.

Milton García Tinoco fue acusado y estuvo preso por delitos de Garavito.También Pedro
Pablo Ramírez alias Pechuga

En el 2020, el programa Los Informantes del canal Caracol, relató el testimonio de William
Trujillo, una de las pocas víctimas sobrevivientes junto a John Iván Sabogal y Brand Ferney
Álvarez

Se sabe que en 2006 intentó suicidarse dentro de la Cárcel de Valledupar, golpeando su


cabeza contra las rejas de su celda. Está aislado de los demás internos de la cárcel y tiene
seis horas de permiso para poder usar un teléfono.

El 10 de marzo de 2020, Garavito fue diagnosticado con Leucemia y según varias fuentes
su enfermedad estaría cada vez agravandose.

captura:
El jueves 22 de abril de 1999, en una zona rural de Villavicencio, Meta, fue capturado
cuando salía, al final de la tarde, de un potrero en la periferia de esta municipalidad. Horas
antes, Garavito había raptado a un menor al que pretendía abusar sexualmente y luego
asesinar. Un indigente que se encontraba en la zona escuchó los gritos de auxilio del menor
y se acercó. Al ver la escena, atacó a Garavito con piedras obligándolo a huir. El indigente
liberó al niño, el cual pudo llegar a una vivienda donde lo auxiliaron y llamaron a la policía
nacional. Después de que el niño contó lo ocurrido, se inició la búsqueda por una brigada
con múltiples efectivos policiales en la zona, usando vehículos oficiales, taxis y particulares
recorriendo la zona. Varias horas después, el hombre salió del monte caminando y fue
identificado por el niño e interceptado por los policías.
En ese momento fue capturado y conducido al comando de policía donde manifestó
llamarse Bonifacio Morera Lizcano. Con ese nombre se inició la investigación penal sobre la
presunta tentativa de acceso carnal sobre el menor.
En junio de 1999, el equipo interdisciplinario del CTI de la fiscalía, conformado por
miembros de esta institución provenientes de nueve departamentos, incluyendo miembros
del DAS, Sijín y Óscar Armando Díaz Beltrán, psiquiatra de Medicina Legal de Cali y asesor
permanente del equipo, evaluaron los casos y establecieron que el sospechoso principal
enmarcado por el equipo de Armenia y dirigido por el doctor Álvaro Vivas Botero, era Luis
Alfredo Garavito. Al intervenir otras secciones, como el análisis realizado por el morfólogo
de Buga Carlos Hernán Herrera Jaramillo, principal promotor de la investigación del
fenómeno, y la presentación del fiscal Fernando Aya de Villavicencio sobre el caso Morera
Lizcano, permitieron establecer que ya se sabía que era el asesino serial y también que ya
estaba capturado desde semanas atrás.

El jueves 28 de octubre de 1999 la fiscal Lily Naranjo y el investigador Aldemar Durán


indagan a Garavito, quien desconocía la investigación que sobre sí se cernía, y se le
interroga sobre otros casos, indagatoria que duró cerca de 8 o 9 horas, durante las cuales el
asesino terminó confesando los homicidios sobre los que se le había preguntado,
incluyendo el caso de Santa Bárbara en Palmira (Valle del Cauca), los tres niños de
Génova, el caso Tunja y el caso Villavicencio, entre otros. Terminada dicha indagatoria, el
CTI de la fiscalía en asocio con psiquiatras de Medicina Legal establecieron la realidad
probatoria que certificó el esclarecimiento del hecho. En los meses siguientes Garavito
empezó a contar la secuencia de homicidios y empezó a indicar la ubicación de cuerpos
aún no hallados.
Gracias a las pruebas recogidas por la Fiscalía y a su posterior confesión, se estableció que
Garavito Cubillos es responsable no sólo de la muerte de un menor de Tunja en el año 1996
(el niño se llamaba Ronald Delgado Quintero y tenía once años de edad, y estando en la
capital de Boyacá se hizo pasar como discapacitado usando muletas y gafas), sino también
del homicidio de tres niños de Génova y de otros 172 crímenes cometidos contra menores
en 11 departamentos de Colombia. Luis Alfredo Garavito, según los psicólogos, efectúa
ataques sexuales contra menores de edad, pues de infante fue tratado con mucha represión
por parte de su progenitores y fue víctima de ataques sexuales por personas que en
confianza eran allegados a la casa materna, eventos que le marcaron y se agravaron con el
paso de los años hasta que empezó a perfilar su predilección sexual por infantes. Años
después de estar agrediendo sexualmente, asesinó al primer niño en Jamundí, Valle del
Cauca, en octubre de 1992, cuando se registra su primer homicidio.

● Fritz Haarmann
(Hannover, 25 de octubre de 1879 – id. 15 de abril de 1925) fue un famoso asesino en serie
alemán, ejecutado a causa del asesinato probado de 24 adolescentes alemanes, si bien se
le atribuyen más de 100 víctimas.
Fritz Haarmann, conocido como El carnicero o como el Vampiro de Hannover, nació en
dicha ciudad alemana. Provenía de una familia desestructurada: sus padres eran
alcohólicos y protagonizaban escandalosos enfrentamientos que llegaban a la agresión
física. La madre de Haarmann trataba a su hijo como si fuera una niña y le llegó a vestir con
ropa femenina. Esto encolerizaba a su padre, que le golpeaba con saña cuando lo veía de
esta forma. Este ambiente provocó que sus hermanas abandonaran pronto el hogar familiar.
Se ha apuntado en algunas ocasiones que acabaron siendo prostitutas. Sus víctimas
siempre fueron adolescentes varones por sus tendencias homosexuales.
Historia criminal
Con 17 años, Haarmann fue fichado por la policía por acosar a adolescentes. Sin embargo,
no fue hasta 1919, cuando contaba con 40 años, cuando comete su primer crimen. Su
víctima fue Friedel Rothe.

El modus operandi de este psicópata, considerado en vida como uno de los mayores
asesinos en serie de la historia, era siempre el mismo. Acudía a la estación de autobuses
de Hannover, donde había decenas de chicos esperando trabajo. Allí les engañaba
prometiéndoles trabajo y comida.

Los llevaba, de uno en uno, a una buhardilla que tenía en el barrio de Calenberger
Neustadt, a espaldas del río Leine. Allí, según su propia confesión, los violaba y, de un
mordisco, les seccionaba la carótida y la tráquea. Todo este macabro ritual lo llevaba a cabo
con su amante, Hans Grans.

Lo más truculento de la historia estriba en que, una vez muertos, deshuesaba a sus
víctimas y vendía sus trozos de carne asegurando que eran de cerdo o de caballo (de ahí el
apelativo de carnicero). Regalaba los huesos de sus víctimas asegurando que eran de
caballo, si bien su tamaño y su blancura despertó las sospechas de los vecinos de
Hannover. Fue por esto que acabó por arrojar los huesos al río Leine.

Acción de la justicia
El 17 de mayo de 1924 unos niños localizaron una calavera en el río. Las autoridades
ordenaron el dragado de éste y encontraron numerosos restos óseos. El cerco se fue
estrechando en torno al asesino y el 22 de junio de 1924 fue detenido. Haarmann confesó
sus crímenes. Admitió haber matado y practicado canibalismo con unos cuarenta niños.

El 15 de abril de 1925 fue decapitado por orden del juez. El carnicero de Hannover no pidió
clemencia, aunque insistió en que un ser desconocido tomaba posesión de su cuerpo y le
incitaba a matar. Su última voluntad fue que se escribiera en su lápida: "Aquí yace el
exterminador". Su compañero de tropelías, Hans Grans, fue condenado a cadena perpetua,
pero se le conmutó por 12 años de cárcel. Estuvo preso en un campo de concentración
hasta el final de la Guerra Mundial. Luego se cambió el nombre, se casó y falleció en la
ciudad de Hannover.

● Erzsébet Báthory
La condesa Erzsébet Báthory de Ecsed (en húngaro: Báthory Erzsébet, ˈbaːtoɾi ˈɛɾʒeːbɛt)
(Nyírbátor, Hungría, 7 de agosto de 1560 - Castillo de Čachtice, actual Trenčín, Eslovaquia,
21 de agosto de 1614), castellanizado como Isabel Bathory, fue una aristócrata húngara,
perteneciente a una de las familias más poderosas de Hungría. Ha pasado a la historia por
haber sido acusada y condenada de ser responsable de una serie de crímenes motivados
por su obsesión por la belleza que le han valido el sobrenombre de la Condesa Sangrienta:
es la mujer que más ha asesinado en la historia de la humanidad, con 650 muertes.Uno de
sus antepasados fue Vlad Tepes, ‘El Empalador’.
Nació en el seno de una de las familias más antiguas y adineradas de Transilvania: los
Erdély. Sus padres, los condes Ana y Jorge Báthory, eran primos. Su abuelo materno fue
Esteban Báthory de Somlyó y su tío materno fue Esteban I Báthory, príncipe de Transilvania
y rey polaco entre 1575 y 1586. El escudo de armas de su familia consiste en tres dientes
de jabalí de plata sobre un campo de gules. Entre el resto de los familiares se encuentran
un cardenal y varios príncipes. Su infancia transcurrió en el castillo de Csejte y antes de
cumplir los seis años sufría ataques de lo que se puede considerar hoy en día epilepsia.
A los once años fue prometida con su primo Ferenc Nádasdy, conde (anteriormente barón),
de dieciséis años. A los doce años pasó a residir en el castillo de su prometido y nunca tuvo
buena relación con su suegra, Úrsula. A los quince años, el 8 de mayo de 1575, se casó
con Ferenc Nádasdy que para entonces contaba con 20 años de edad. El joven conde no
estaba mucho por allí: la mayor parte del tiempo estaba combatiendo en alguna de las
muchas guerras de la zona (empalando a sus enemigos), lo que le mereció el apodo de
"Caballero Negro de Hungría". Existe un registro epistolar en el que Ferenc y Erzsébet
intercambiaban información sobre las maneras más apropiadas de castigar a sus sirvientes,
lo cual era normal entre los nobles de la Europa del Este de la época. Las posesiones de
esta pareja de nobles húngaros eran enormes, y se requería además un férreo control sobre
la población local, de origen húngaro, rumano y eslovaco.
Ferenc e Isabel apenas se veían debido a las actividades guerreras del primero, así que no
fue hasta 1585, diez años después de su matrimonio, que la condesa tuvo a su primera hija,
Ana, y en los nueve años siguientes dio también a luz a Úrsula y Catalina. Finalmente, en
1598, alumbró a su único hijo varón, Pablo.

En 4 de enero de 1604, el Caballero Negro de Hungría, como se conocía a Ferenc por su


fiereza a la hora de combatir, murió de súbita enfermedad tras una de sus batallas y dejó
viuda a Isabel, que contaba con 44 años. Es aquí cuando comienzan, según sus
acusadores, sus crímenes. Para empezar, despidió a su muy odiada suegra del castillo,
junto con el resto de la parentela Nádasdy; las sirvientas a las que esta había protegido
hasta ese momento fueron llevadas a los sótanos y allí recibieron por fin los castigos que,
según Isabel, merecían.

Acusación y juicio
Es por esta época que empiezan a escucharse rumores de que algo muy siniestro ocurre en
el castillo de Čachtice. A través de un pastor protestante local, llegan historias de que la
condesa practica la brujería (explícitamente, la magia negra), y para ello utiliza la sangre de
muchachas jóvenes —una acusación muy popular en la época, similar a las que se
realizaban en contra de los judíos y disidentes. El rey Matías II de Hungría ordena a un
primo de Isabel, el conde palatino Jorge Thurzó —enemistado con ella—, que tome el lugar
con sus soldados y que realice una investigación en el castillo. Dado que la señora de
Báthory carecía de fuerza militar propia, no hubo resistencia.

Según la investigación del conde Thurzó, hallaron en el castillo numerosas muchachas


torturadas en distintos estados de desangrado, y un montón de cadáveres por los
alrededores. En 1612 se inició un juicio en Bitcse (Bytča en eslovaco). Isabel se negó a
declararse inocente o culpable, y no compareció, acogiéndose a sus derechos nobiliarios.
Quienes sí lo hicieron, por la fuerza, fueron sus colaboradores. Juan Ujváry, el mayordomo
(conocido como Ficzkó),[3] testificó que en su presencia se había asesinado como mínimo a
37 "mujeres solteras" de entre once y veintiséis años; a seis de ellas las había reclutado él
personalmente para trabajar en el castillo. La acusación se concentró en los asesinatos de
jóvenes nobles, pues los de las siervas carecían de importancia. En la sentencia todos
fueron declarados culpables, algunos de brujería, otros de asesinato y los demás de
cooperación.

Todos los seguidores de Isabel, excepto las brujas, fueron decapitados y sus cadáveres
quemados; este fue el destino de su colaborador Ficzkó. A las brujas Dorotea, Helena y
Piroska les arrancaron los dedos con tenazas al rojo vivo "por haberlos empapado en
sangre de cristianos" y las quemaron vivas. Una burguesa de la zona acusada de
cooperación, también fue ejecutada. Katryna, que con catorce años era la más joven de las
ayudantes de Isabel, salvó la vida por petición expresa de una superviviente, aunque recibió
cien latigazos en el cuerpo.

Prisión y muerte
Pero la ley impedía que Isabel, una noble, fuese procesada. Fue encerrada en su castillo.
Tras introducirla en sus aposentos, los albañiles sellaron puertas y ventanas, dejando tan
sólo un pequeño orificio para pasar la comida. Finalmente, el rey Matías II de Hungría pidió
su cabeza por las jóvenes aristócratas que supuestamente habían muerto a sus manos,
pero el primo de esta le convenció para que retrasara el cumplimiento de la sentencia de
por vida. Así es que la condenaron a cadena perpetua en confinamiento solitario. Esta pena
implicaba también la confiscación de todas sus propiedades, lo que Matías venía
ambicionando desde tiempo atrás.

El 31 de julio de 1614, Isabel, de 54 años, dictó testamento y últimas voluntades a dos


sacerdotes de la catedral del arzobispado de Esztergom. Ordenó que lo que quedaba de las
posesiones familiares fuese dividido entre sus hijos.

El 21 de agosto de 1614, uno de los carceleros la vio caída en el suelo, boca abajo. La
condesa Isabel Báthory estaba muerta después de haber pasado cuatro largos años
encerrada, sin ni siquiera ver la luz del sol. Pretendieron enterrarla en la iglesia de Čachtice,
pero los habitantes locales decidieron que era una aberración que la "Señora Infame" fuera
enterrada en el pueblo, y además en tierra sagrada. Finalmente, y como era "uno de los
últimos descendientes de la línea Ecsed de la familia Báthory" la llevaron a enterrar en la
cripta de la familia Báthory en el pueblo de Ecsed, en el noreste de Hungría, el lugar de
procedencia de la poderosa familia. La localización de su cuerpo hoy es desconocida.[4]
Todos sus documentos fueron sellados durante más de un siglo, y se prohibió hablar de ella
en todo el país.

Dos años después, las hijas y el hijo de Isabel fueron finalmente acusados de traición por el
apoyo de su madre a la guerra contra los alemanes; Anna Báthory, una prima de la
condesa, llegó a sufrir tortura por este motivo en 1618, cuando contaba 24 años, pero
sobrevivió. Finalmente la mayor parte de la familia Báthory-Nádasdy huyó a Polonia;
algunos retornaron después de 1640. Un nieto sería ejecutado en 1671 por oponerse al
emperador alemán.

Los Archivos Nacionales de Hungría conservan abundante documentación sobre ella,


particularmente cartas personales y actas del juicio. Sin embargo, sus míticos diarios, al
igual que su retrato original, se hallan en paradero desconocido.

● José Antonio Rodríguez Vega


José Antonio Rodríguez Vega, apodado el Mataviejas (Santander, 3 de diciembre de 1957-
Topas, 24 de octubre de 2002), fue un asesino en serie español que acabó con la vida de al
menos 16 mujeres de edades comprendidas entre los 60 y los 93 años en Santander, entre
agosto de 1987 y abril de 1988.
Rodríguez Vega nació en Santander (Cantabria, España). Vega comenzó su carrera
criminal agrediendo sexualmente a mujeres hasta el 17 de octubre de 1978, cuando fue
arrestado y condenado a 27 años de prisión. Sin embargo, gracias a su encanto, consiguió
que todas sus víctimas menos una le perdonaran, lo que en el Código Penal Español
anterior al de 1995 eximía de la responsabilidad penal en ciertos delitos. Esto, unido a su
buen comportamiento en prisión, hizo que sólo pasara 8 años en la cárcel. Puesto en
libertad en 1986, fue abandonado por su mujer. Vega volvió a casarse, esta vez con una
mujer epiléptica. Era considerado como una persona muy educada, trabajador y un buen
marido por todos sus conocidos y vecinos.

El 19 de mayo de 1988 fue arrestado mientras paseaba por la calle Cobo de la Torre. Tras
su detención confesó sus crímenes.

Crímenes
El 6 de agosto de 1987, Vega entró en la casa de Margarita González (82 años), a la que
asfixió, llegando incluso a hacer que la mujer se tragara su dentadura postiza.[1] Unas
semanas más tarde, el 30 de septiembre de 1987, Carmen González Fernández (80 años)
fue encontrada muerta en su domicilio. Vega fue acusado de su asesinato. En octubre de
ese mismo año, Vega asesinó a Natividad Robledo Espinosa (66 años).

Vega no volvió a matar hasta enero de 1988, cuando Carmen Martínez González fue
encontrada muerta en su casa. En abril de 1988, asesinó a Julia Paz Fernández (66 años).
Fue encontrada desnuda.

La identidad del resto de las víctimas no llegó a ser revelada.

Juicio y sentencia
Su juicio comenzó en 1991 en Santander. En el momento de su arresto, confesó los
crímenes, pero a la hora de declarar ante el juez afirmó que las mujeres habían muerto por
causas naturales, que él las dejaba simplemente inconscientes.

Rodríguez Vega fue diagnosticado como psicópata. Sus asesinatos eran premeditados y
bien organizados, ya que identificaba a su víctima y la observaba hasta que se familiarizaba
con cada aspecto de su rutina. Cuando sabía cuáles eran sus necesidades, se hacía pasar
por reparador de televisores o albañil, y se ofrecía a acompañarlas, visitarlas, arreglarles
cualquier desperfecto, todo ello con el fin de ganarse su confianza y poder entrar libremente
en sus casas. Ha sido descrito como un asesino en serie que tomaba trofeos de cada uno
de sus crímenes. Cuando fue arrestado, la policía encontró en su casa una habitación roja
en la que guardaba los trofeos que arrebataba a sus víctimas, que iban desde pequeños
televisores a rosarios o flores de plástico. El alcance de sus crímenes no se esclareció
hasta que la policía mostró una grabación de esta habitación a los familiares de mujeres
ancianas muertas por asfixia. Las familias de las víctimas identificaron objetos que
vinculaban a Vega con sus familiares.

José Antonio Rodríguez Vega fue sentenciado a una pena de 432 años de prisión (una
pena conmutativa en América de 1.672 años de prisión).

Muerte
Vega se encontraba cumpliendo condena en la cárcel de Topas, en Salamanca. El 24 de
octubre de 2002 fue apuñalado por dos reclusos del centro, al parecer por incumplir dos
"leyes" de los presos, ser un violador y trabajar de chivato para los funcionarios de prisiones
. Fue enterrado en una fosa común al día siguiente; sólo acudieron al entierro los dos
enterradores.

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