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Carlos Salinas de Gortari

(Ciudad de México, 1948) Político mexicano, presidente de la República entre


1988 y 1994. Hijo del senador y secretario de Estado Raúl Salinas Lozano, que
fue Ministro de Industria y Comercio de su país, y de Margarita de Gortari,
presidenta y fundadora de la Asociación de Mujeres Economistas de México,
Carlos Salinas de Gortari se licenció en Economía por la Universidad Autónoma
de México en 1969 y completó su formación en Harvard con un doctorado en
Economía Política y Gobierno.

Siguió la estela política de su padre y con 18 años ingresó en las filas del PRI,
donde rápidamente sentó las bases de una meteórica carrera política. Comenzó a
trabajar en la Secretaría de Hacienda en 1971 y, una década después, fue el
responsable de diseñar la campaña electoral de Miguel de la Madrid, quien, tras
lograr una abrumadora victoria en los comicios de 1982, le nombró director del
Instituto de Estudios Políticos y Sociales y, después, secretario de Programación y
Presupuestos.

En octubre de 1987, el PRI presentó su candidatura a la presidencia de la


República para las elecciones de julio de 1988 y, tras una larga campaña electoral
en la que encontró sobre todo la oposición de sindicatos y líderes del movimiento
obrero que recelaban de su programa económico, Carlos Salinas de Gortari logró
la victoria y se proclamó presidente de los Estados Unidos de México para el
sexenio 1988-1994. Durante la ceremonia de investidura, celebrada el 1 de
diciembre, anunció los asuntos principales de su agenda política, entre ellos la
reducción de la deuda externa, el incremento de los niveles económicos del país y
la lucha contra la corrupción y la violencia.

Salinas impulsó la cooperación comercial con los países vecinos. Con los del sur,
Colombia y Venezuela, suscribió un acuerdo en 1989 para constituir a corto plazo
una zona de libre comercio; también con los gobiernos centroamericanos estudió
la viabilidad de establecer un área comercial libre en la zona y, finalmente, con los
vecinos del norte, EE.UU y Canadá, anunció en 1991 el inicio de conversaciones
con idéntico objetivo. El proceso negociador fraguó en diciembre de 1992 con la
firma del Tratado de Libre Comercio (TLC), que entró en vigor el 1 de enero de
1994 y estableció un mercado común en los estados de América del Norte.

En política interior, su gestión estuvo marcada por el amplio programa de


privatización de empresas públicas que reportó a las arcas estatales unos
ingresos de 13.000 millones de dólares, la reforma educativa, la devaluación del
peso para contener la inflación y la reducción de la deuda externa.

Salinas también comprometió su mandato al ejercicio de una profunda reforma en


su partido y, en el último año de su presidencia, tuvo que hacer frente a una
insurrección armada en el estado de Chiapas.
El 1 de enero de 1994, el movimiento indigenista y campesino autodenominado
Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) se levantó en armas contra el
Gobierno de México en protesta por la política neoliberal del presidente Salinas y,
durante varios días, la revuelta fue duramente reprimida por el Ejército. El clima de
violencia y las críticas, internas y externas, que recibió el Ejecutivo por la
contestación militar a las reivindicaciones campesinas colocaron al Gobierno en
una crítica situación que el presidente trató de resolver con el anuncio del alto el
fuego y la tramitación de una Ley de Amnistía para los involucrados en la revuelta.

Celebradas las elecciones presidenciales el 21 de agosto de 1994, Salinas cedió


el bastón de mando de la República al nuevo candidato del PRI y vencedor de los
comicios, Ernesto Zedillo. Veinte días después del relevo presidencial se desató
en el país una crisis financiera que colocó a México al borde de la suspensión de
pagos. Los portavoces del Gobierno entrante endosaron la responsabilidad al
Gobierno saliente, y las relaciones entre Salinas y su sustituto se deterioraron
bruscamente.

En 1995 Salinas abandonó el país sumido en una complicada crisis política y


personal, atacado por todos los medios políticos que antes habían aplaudido sus
decisiones ejecutivas. A la grave situación económica del país tras su mandato, se
unió la acusación contra su hermano Raúl Salinas de Gortari como supuesto autor
intelectual del asesinato, en septiembre de 1994, de quien entonces era su cuñado
y secretario general del gobernante Partido Revolucionario Institucional (PRI),
José Francisco Ruiz Massieu.

El procesado fue condenado a 50 años de cárcel, aunque el ex presidente de


México mantuvo la convicción de que el juicio fue una trampa política. Tras
abandonar México y permanecer varios años en Dublín, donde se dedicó a
estudiar las circunstancias del desarrollo nacional y los efectos de la globalización,
entre otros temas, regresó de su exilio en 1999 e hizo pública su retirada de la
política.

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