Está en la página 1de 1

Dios te mira o ¿Qué te parece la

El Padre llama a la puerta buscando un hogar para su actitud de Dios?


hijo.
o ¿Tú le alquilarías una
- El alquiler es barato, de verdad –le digo.
-No quiero alquilarlo, quiero comprarlo –dice Dios. habitación de tu vida
-No sé si querré venderlo, pero puedes entrar y echarle a Dios?
un vistazo.
-Sí, voy a verlo –dice Dios. o ¿Cómo puede ser que
-Te podría dejar una o dos habitaciones. uno tengo más espacio
-Me gusta –dice Dios-. Voy a tomar las dos. Quizá deci- si pierde espacio?
das algún día darme más. Puedo esperar.
-Me gustaría dejarte más, pero me resulta algo difícil;
necesito cierto espacio para mí.
-Me hago cargo –dice Dios-, pero aguardaré. Lo que he “Mira que estoy a la puerta
visto me gusta. llamando. Si alguien escucha
-Bueno, quizá te pueda de- mi llamada y abre la puerta,
entraré en tu casa y cenare-
jar otra habitación. En rea-
mos juntos”. (Ap 3,20)
lidad, yo no necesito tanto.
-Gracias –dice Dios-. La to-
mo. Me gusta lo que he vis-
to.
-Me gustaría dejarte toda la Vengo a ti para que me
casa, pero tengo mis dudas. acaricies
-Piénsalo –dice Dios-. Yo no Antes de comenzar el día.
te dejaría fuera. Tu casa se- Que tus ojos se posen un mo-
ría mía y mi hijo viviría en mento sobre mis ojos.
ella. Y tú tendrías más espa-
cio del que has tenido nun- Que acuda a mi trabajo
ca. sabiendo
-No entiendo lo que me es- Que me acompañas, Amigo
tás pidiendo. mío.
-Ya lo sé –dice Dios-, pero ¡Pon tu música en mí
no puedo explicártelo. Ten- Mientras atravieso el de-
drás que descubrirlo por tu sierto de mi ruido!
cuenta. Y esto sólo puede
suceder si le dejas a él toda Que el destello de
la casa. tu Amor
-Un poco arriesgado, ¿no? Bese las cumbres de mis
-Así es –dice Dios-, pero pensamientos
ponme a prueba. Y se detenga en el valle de
-Me lo pensaré. Me pondré mi vida,
en contacto contigo. Donde madura la cosecha.
-Puedo esperar –dice Dios-. Lo R. Tagore
que he visto me gusta.

PJV ● Sacerdotes del Sagrado Corazón de Jesús

También podría gustarte