República Bolivariana de Venezuela

Ministerio del Poder Popular para la Educación

Coche – Caracas

Una Vida Difícil

Integrante: Yuderlis Cedeño

Grado: 6to – Sección: C
Plantel: U.E.N.B. Mary I. Márquez
Edad: 12
Parroquia: Coche
Teléfono: (0414) 9088957
 Había una vez en un pueblo llamado Pedraza donde vivía una señora, que se
llamaba Laura, vivía en una casita de barro y estaba embarazada, esperaba una niña.

El esposo de la señora se había ido luego de enterarse que Laura estaba esperando
una bebe de él, las dejo abandonada, Laura sufría mucho porque tenía que trabajar para
poder alimentarse y tener a su bebe sana, a veces cuando Laura no se podía levantar de la
cama porque se sentía muy mal, una vecina llamada María le ayudaba a arreglar su casa, le
cocinaba, le planchaba y le lavaba su ropa.

Pasaron los meses y llego el día que la señora Laura tanto esperaba, el nacimiento
de su hija, que iba a llevar por nombre Nayleth. A Laura le comenzaron a dar dolores de
parto y al día siguiente a las 2:00 am de la madrugada nace su bebe hermosa y sana. A los
tres días la dieron de alta con su bebe, al llegar se fueron para la casa de la vecina para
enseñarle la nueva integrante de la familia, María estaba muy alegre porque después de
tanto sufrimiento, Laura al fin había tenido a su bebe.

Fueron pasando los años y Laura conoce a una persona de la cual enamora, el
nombre de aquel hombre era Iván. Laura e Iván se casaron y todo iba muy bien por los
momentos.

Luego que Laura se casó con Iván, María decidió irse a donde su familia que vivía
en Valencia porque pensó que dejaba a Laura en buenas manos con su esposo y con su
familia.
 A través de los años la hija de Laura se hizo mayor y en un inesperado momento
Laura se enfermó y estaba muy grave, la habían referido al hospital Pérez Carreño en
Caracas, Iván estaba en la academia Militar y no sabía, nada de su mujer. Pasan cuatro días
y Laura no se mejora porque resulta ser q su enfermedad estaba muy avanzada porque
tenía cáncer.

Los médicos le dijeron a la hija de Laura que su mama estaba muy grave y en
cualquier momento podía fallecer y no podía hacer más nada, entonces Nayleth comienza a
llorar desesperadamente y sale del hospital y se va a avisarle a su padre, al cual llama y no
le contestaba el celular. En la noche como a las 9:20 pm lo vuelve a llamar y le contestó,
Nayleth llorando le informa lo que le estaba pasando:

Iván - Por qué no me habían avisado?

Nayleth - No quería que te preocuparas papá, pero me toco decirte porque estoy sufriendo
mucho, te necesito papá por favor ven lo más rápido que puedas.

Iván: - Okey hija yo te aviso a lo que este en el Aeropuerto.

Al día siguiente recibe a su padre y lo abraza y en seguida se van al hospital para ver
cómo sigue Laura, entran, y Laura no podía hablar de la felicidad que tenia de ver a sus dos
amores de la vida. En ese mismo momento Laura llama a Nayleth y le pide que se acerque
un momento mientras que su papa sale a comprar un café, Laura le dice con baja voz a su
hija que ya no le queda mucho tiempo de vida por eso quería aprovechar este momento para
decir sus últimas palabras.
Nayleth - No digas eso mami, tú te vas a mejorar

Laura - Claro que no hija, yo sé que no podre conocer mis nietos por eso quiero decirte
todo esto: Cuídate, sigue estudiando, quiero que seas una profesional y luego que tengas tu
carrera, tu casa, puedes tener tus hijos, que le puedes dar la educación que ellos necesitan,
vive lo que yo no pude vivir hija no quiero que sufras como sufrí yo a tu edad, por eso te
digo que estudies para que no seas como yo que no tuve la oportunidad de estudiar. Y el
día que quieras conocer a tu verdadero padre, ve a esta dirección: Avenida Guzmán Blanco,
Calle 18, Casa 03, allí encontraras a tu padre, porque todo este tiempo antes que me
enfermara estuve averiguando sobre tu padre para que cuando llegara este momento no
dijeras que nunca te di la oportunidad de conocer a tu papá, cuando te encuentres con él,
quiero que le digas que todo este tiempo que pasó, no le guarde rencor a pesar que nos dejo
abandonadas en aquel ranchito cuando yo estaba embarazada de él, dile que todavía le
estoy dando la oportunidad para que te conozca porque él nunca se acordó que tenía una
hija, que más bien Iván tu padrastro fue el que me ayudo en todo y te crio. A Iván dile que
gracias por todo, que lo quiero mucho y aunque no vaya a compartir todo lo que quisiera,
desde el cielo los voy a cuidar, a ti hija, y a Iván, los quiero.

En ese momento fallece Laura y Nayleth llorando le da un beso a su madre y no

paraba de llorar. En ese momento entra el esposo de Laura y la hija le dice que se nos fue,
Iván sale corriendo y no puede soportar que Laura se haya muerto, los enfermeros lo sacan
del cuarto, Nayleth le dice a Iván que se valla a la casa. Al otro día se estaban vistiendo
para ir al velorio y Nayleth tenía los ojos hinchado de tanto llorar, fueron en la noche, se
terminó todo y se van para la casa.

Pasó una semana y Nayleth estaba un poco mejor, Iván ya se tenía que ir a la
academia y se despide de Nayleth.

Pasa un año y Nayleth se gradúa en Licenciada en Educación Especial, en ese año que pasó
no supo más nada de Iván, ella reúne y se compra su propia casa, conoce una persona con la
cual decide formalizar su relación, al año después se casa y quiere tener un hijo, se hace
unos exámenes, ella muy feliz espera al otro día que le den el resultado.
 Llega el día y la prueba la sale negativa porque no puede tener hijo, ella llorando
sale del hospital muy adolorida y se va para una plaza a desahogarse, en ese mismo instante
un niño como de 9 años le pregunta - ¿Por qué lloras?, ella le dice, - no por nada bebe, ¿y tú
mamá? y él le dice: - no tengo mamá, - entonces con quien vives? - Con nadie, vivo en la
calle, mi mamá me abandono a lo que nací - ¿y cómo te llamas? - Me llamo Manuel, - que
bello nombre, ¿quieres comerte un helado? – Sí. – vamos para comprarlo.

Llegan a la heladería y piden los helados, se comen el helado y Nayleth le dice: -

¿qué te parece si vamos de compra? - si vamos. Entonces Nayleth le compro zapatos, ropa
y le compro juguetes, el niño estaba muy contento y agradecido con ella, Nayleth le
pregunta al niño: - ¿Tienes hambre? Y el niño le contesta ¡sí!, ella le dice: - vamos para mi
casa. Lo invita a pasar y le da de comer y le dice q se bañe y al llegar la noche lo acuesta.
En las siguientes horas llega su esposo y le pregunta a Nayteth: - ¿Y de donde salió ese
niño que está allí durmiendo? - Se llama Juan, lo invite a la casa porque es un niño
abandonado y lo he estado pensando, lo quiero adoptar, el esposo le dice: - pero lo acabaste
de conocer eso no es así de fácil amor, tu no sabes si él dice la verdad que no tiene mama. -
Los niños no dicen mentiras, yo le creo y como no puedo tener hijo lo quiero adoptar y voy
a hacer todo lo posible para darle el amor de madre que no tiene y si tú estás de acuerdo
darle el amor de padre que tampoco tiene. - ya va Nayleth ¿cómo es eso que no puedes
tener hijo? - no puedo tener hijos, me hice la prueba y me salió negativa y eso me duele
mucho que no pueda tener hijo, a lo que su esposo Cristian dice: - está bien mi amor, te
comprendo, primero conozcámoslo bien y hacemos los papeles para la adopción, ¿te
parece? – Ok.

Pasan los meses y Juan es un buen niño, ya Nayleth y el esposo están en el

procedimiento de la adopción y todo, va muy bien, le dijeron que en un mes, viendo el
progreso del niño, si sale bien, se puede quedar con su nueva familia.

Pasa el mes y todo sale muy bien, todos alegres ponen a estudiar a Juan y es muy
buen estudiante, un buen hijo y vivieron felices por siempre.
 FIN

MORALEJA: Nayleth aprendió que no hay que darse por vencida así las cosas se vean muy
difíciles, hay que seguir adelante y estudiar para ser alguien en la vida y tener derecho a ser
libre, derecho al amor y al cariño como Laura aunque su esposo la dejo abandonada con su
bebe ella no le guardo rencor y siguió adelante con ayuda de su única vecina que era como
la hermana que Laura nunca tuvo.