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ISSN: 0325-8203
interdisciplinaria@fibercorp.com.ar
Centro Interamericano de Investigaciones
Psicológicas y Ciencias Afines
Argentina
ALAM, FLORENCIA
LA CONSTRUCCIÓN INTERACCIONAL DE NARRATIVAS DE FICCIÓN ENTRE NIÑOS
DE DISTINTAS EDADES. UN ESTUDIO CON NIÑOS DE POBLACIONES URBANO
MARGINADAS
Interdisciplinaria, vol. 32, núm. 1, junio, 2015, pp. 31-49
Centro Interamericano de Investigaciones Psicológicas y Ciencias Afines
Buenos Aires, Argentina
FLORENCIA ALAM**
*Trabajo realizado en el marco de los proyectos Aspectos lingüísticos y cognitivos del proceso de alfabetización de grupos
en riesgo por pobreza: Niños, jóvenes y adultos analfabetos y minorías étnicas (PIP 2009-2011 Nº 112-200801-00834) del
Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) y Aspectos lingüísticos y cognitivos del proceso de
alfabetización de grupos en riesgo por pobreza: Niños, jóvenes y adultos analfabetos y minorías étnicas (PICT 2539/2010)
de la Agencia Nacional de Promoción Científica y Tecnológica (ANPCYT).
**Doctora en Educación y Licenciada en Letras. Becaria Doctoral del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y
Técnicas (CONICET). E-Mail: florenciaalam@gmail.com
Ávalos 1655, (C1431DPE) Ciudad Autónoma de Buenos Aires, Argentina.
urban populations in Buenos Aires (Argentina) with tools of the Conversational Analysis (Good-
produced together. Recent research (Gardner & win & Heritage, 1990) to account for narrative
Forrester, 2010; Rosemberg & Menti, in press) performance. Results showed that while the 12-
suggests the need to link the study of child year-old children tended to adopt in most cases
development and performance with the micro- a tutor role, the 4-year-old assumed a storyteller
analysis of interaction. As these studies point out, role. The narrative roles adopted by the children
the concepts developed by Conversation analysis show that children from different ages can
(Goodwin & Heritage, 1990; Sacks, Schegloff & negotiate narrative co-construction. However, in
Jefferson, 1974) and Interactional Sociolinguistics some cases both children adopted a storyteller
(Gumperz, 1982) allow to study in detail the role. In these situations the asymmetric relation
processes through which children and their between the 12-year-old and the younger child
partners construct shared meaning in interaction. led the older child to impose his narrative not
The narratives, elicited from a sequence of letting the 4-year-old to narrate.
images, were video recorder and transcribed. The The microanalysis of the interactional se-
data corpus consist of 33 narratives produced by quences showed that the roles adopted could
dyads of 4 and 12 year-old children. A qualitative change during the interaction. This role change did
analysis was performed that combined the not occur randomly, but responding to the se-
Constant Comparative Method (Glaser & Strauss, quence of actions in which each participant anal-
1967; Strauss & Corbin, 1990) with tools from ysed the contextualization cues (Gumperz, 1982)
Interactional Sociolinguistic (Gumperz, 1982) provided by the other and acted according to them.
and Conversation Analysis (Sacks, Schegloff & The analysis of the exchanges showed the com-
Jefferson, 1974). This analysis allowed the gener- plexity of the interactional process with regard to
ation of a system of categories that identified the the construction of the stories, in which it is not
narrative roles assumed by the participants possible to comprehend the actions of one
(Goodwin, 2007) and how these roles were participant without referring to the actions of the
negotiated in the interaction. Findings showed other (Goodwin, 1984).
that children adopted narrative roles that were The relevance of studying the narratives
configured from a juxtaposition of information produced by young children interacting with older
from different semiotic fields -verbal, gestural and children lies in the results of previous studies
proxemic-. 4-year-old children adopted roles of (Stein & Rosemberg, 2012) which reported that in
storyteller or audience, and 12-year-old children urban marginalized populations interactions be-
assumed roles of tutor, storyteller or audience. tween children of different ages can lead to
The tutor role was characterised by the initiations learning and child development.
of the sequence employing elicitations. Also,
tutors used different types of interventions Key words: Interaction between children; Interac-
-feedback, expansions and repairs- to scaffold the tional construction; Narrative roles; Microanaly-
narrative elaborated by the young children. The sis of interaction; Urban marginalised populations.
body position, as well as the gaze of the tutor was
directed to the story-teller and/or to the images, and
also in some cases to the researcher. The storyteller
role was characterised by giving verbal information
about the narrative. The body position, as well as
the gaze of the storyteller was directed principally INTRODUCCIÓN
to the audience and/or to the images. Finally, the
audience role was characterised for showing El estudio del proceso interaccional de
interest in the narrative through different signals construcción de una narrativa entre niños de
such as gaze direction to the storyteller, and a body distintas edades cobra especial importancia
position close to him and to the images. These en el marco de investigaciones recientes
results show the productivity of articulating the (Gardner & Forrester, 2010; Rosemberg,
psycholinguistic perspective (Nelson, 1996, 2007) 2002; Rosemberg & Menti, en prensa) que
que los niños recurren en la interacción con el interacción no recibía la mirada del narrador
objeto de alcanzar la comprensión mutua y su atención estaba focalizada en otras acti-
(Gumperz, 1982). vidades.
Si bien algunas investigaciones han em- Goodwin (1984) mostró a través del aná-
pleado una metodología conversacional para lisis de las acciones que llevaba a cabo cada
analizar los modos de negociación que des- uno de los participantes, que la narración no
pliegan los niños en las interacciones con era solo realizada por el hablante, sino a par-
otros niños, estos trabajos se han centrado en tir de una negociación entre todos los parti-
interacciones entre niños de la misma edad, cipantes de la interacción. En efecto, la ma-
tanto en conversaciones espontáneas (Kee- nera en la que el narrador articulaba su habla
nan, 1979) como en el contexto escolar (Gar- y se posicionaba corporalmente permitía di-
cía Sánchez, 2010; Hamo & Blum-Kulka, ferenciar segmentos y funcionaba de guía
2007; Unamuno, 2008), o en situaciones de para las acciones que llevaban a cabo los par-
juego (Goodwin, 2006; Goodwin, C., Good- ticipantes. A su vez, la dirección de la mirada
win, M. & Yaeger-Dror, 2002; Migdalek & de la audiencia y las acciones que ésta reali-
Rosemberg, 2013). zaba funcionaban como indicadores para el
Pocas investigaciones han adoptado una narrador de la atención que estaba recibiendo
perspectiva conversacional para estudiar las su relato, y de esa manera podía estructurar su
interacciones entre niños de distintas edades. narrativa.
Éstas analizaron las interacciones en contex- Como señalan tanto Goodwin, M. (1997)
tos escolares de tutoría (Alam, Stein & Ro- como Goodwin, C. (1984, 2007), la elección
semberg, 2011; Rosemberg, Alam & Stein, de las acciones por parte de los receptores
2014) o los recursos discursivos empleados tiene consecuencias en la narrativa. Debido a
por los niños en la construcción de una narra- ello, el análisis de las estructuras participati-
tiva (Alam & Rosemberg, 2013). Hasta el vas durante la conversación tiene relevancia
momento no se han encontrado investigacio- para la comprensión de la producción narra-
nes que hayan estudiado el proceso a través tiva. La atención a los detalles referidos a
del cual niños de distintas edades negocian y cómo los receptores actúan en la conversación
construyen una narrativa en interacción. Sin permite entender las narraciones en términos
embargo, los estudios que desde el análisis de de eventos de habla construidos dinámica-
la conversación analizaron narrativas produ- mente. A pesar de que un hablante pueda pro-
cidas en interacciones entre adultos, han mos- poner una forma particular para que su dis-
trado la importancia de atender a la construc- curso sea recepcionado, los receptores tienen
ción interaccional de los relatos (Goodwin, C. múltiples formas de actuar a partir de lo que
1984, 2007; Goodwin, M., 1997). escuchan. En este sentido estos autores pos-
Así por ejemplo, Goodwin (1984) estudió tulan la necesidad de reconceptualizar la no-
la organización interactiva que se desplegaba ción de autoría en las interacciones, propo-
entre los participantes durante la narración de niendo como unidad de análisis los marcos
un evento por parte de uno de ellos. Utilizan- participantes (Goodwin, C., 2003; Goodwin,
do un registro fílmico de una cena en la que M., 2006). Este concepto alude a la organiza-
participaban cuatro adultos, Goodwin ana- ción de la interacción como resultado de las
lizó los roles narrativos que adoptaba cada acciones del hablante así como también del
uno de los participantes a partir de sus accio- oyente o los oyentes.
nes y de las acciones que realizaban los otros. Las narrativas infantiles han sido amplia-
Identificó un rol de narrador, un rol de au- mente abordadas por una serie de estudios
diencia-destinatario, que se caracterizó por que, desde una perspectiva psicolingüística y
ser a quien el narrador se dirigía y por man- sociocultural (Nelson, 1996, 2007), se han fo-
tener la mirada dirigida al narrador, mos- calizado en las narrativas producidas en si-
trando así su atención, y un rol de audiencia- tuaciones de interacción niño-adulto (Fivush
no destinatario, que si bien participaba de la & Haden, 2005; Fivush, Haden & Reese,
2006; Haden, Haine & Fivush, 1997; Melzi, de negociación y construcción de una narra-
2000; Sparks, Carmiol & Ríos, 2013, entre tiva de ficción elicitada por medio de una se-
otros). Los resultados de estos estudios mos- cuencia de imágenes a díadas de niños de 4 y
traron que los adultos utilizan estrategias para 12 años de barrios urbano-marginados de la
andamiar la producción de las narraciones Provincia de Buenos Aires (Argentina).
infantiles, ayudándolos a organizar los relatos
causal y temporalmente, como así también a
construir evaluaciones en relación al evento MÉTODO
narrado.
Algunas de estas investigaciones han estu- CORPUS
diado los diferentes estilos maternos de in-
teracción (Fivush, 2007; Reese, Haden & El corpus de datos analizado incluye 33 na-
Fivush, 1993). Así por ejemplo, Melzi y Caspe rrativas elicitadas por medio de una secuen-
(2005) se focalizaron en los estilos maternos cia de imágenes a 33 díadas de niños y niñas
de interacción durante la producción de rela- de 4 y 12 años. La conformación de cada dí-
tos de ficción a partir de un libro de imágenes. ada se realizó al azar.
En su estudio compararon los relatos produ-
cidos por 31 madres peruanas y estadouni-
denses en interacción con sus hijos de 3 años. PARTICIPANTES
Se identificaron en las madres dos estilos di-
ferentes, un estilo narrador, en el que la madre Los niños que participaron en este estudio
narraba con poca participación del niño, fo- viven en poblaciones en situación de pobreza.
calizándose en los eventos que presentaban las Se trata de poblaciones caracterizadas por la
imágenes y un estilo constructor, en el que la presencia de viviendas precarias, pequeñas y
madre co-construía el relato con el niño, in- con infraestructura insuficiente. Las familias
cluyendo experiencias del niño y conoci- que las conforman son migrantes recientes o
miento sobre eventos generales. La compara- descendientes de migrantes provenientes de
ción entre los dos grupos mostró que las provincias del norte de Argentina o de países
madres peruanas, en su mayoría, adoptaban un limítrofes y/o cercanos, principalmente: Bo-
estilo narrador y las madres estadounidenses livia, Paraguay y Perú. En su mayoría, son fa-
adoptaban un estilo constructor. milias numerosas cuya transición al medio ur-
Las investigaciones mencionadas, lleva- bano local se caracteriza no sólo por la hi-
das a cabo con poblaciones de sectores me- bridación de pautas culturales de origen sino
dios, se han focalizado en el impacto de la también porque su vida cotidiana transcurre
interacción de la madre en el desempeño na- en situación de indigencia y pobreza extre-
rrativo del niño pequeño tomando como re- ma.
ferencia el modelo predominante en las fa-
milias de estos sectores sociales, que
considera a la díada madre-niño como el nú- MATERIALES
cleo del desarrollo. Sin embargo, otros tra-
bajos que estudian el aprendizaje infantil en Las narrativas se elicitaron a partir de una
grupos indígenas y urbano-marginados secuencia de imágenes que recuperaba el con-
(Rogoff, 1993, 2003; Rosemberg, Stein & texto de un evento, en este caso fue una visita
Alam, 2013; Stein & Rosemberg, 2012) han a un museo etnográfico, al que todos los ni-
señalado que en estos contextos culturales las ños habían asistido conjuntamente.
interacciones entre niños tienen una impor- La secuencia de ilustraciones cuenta la
tante relevancia para el desempeño y el desa- historia de dos niños, uno grande y otro pe-
rrollo de los pequeños. queño que van de visita a un museo, allí los
Es por ello que el que el objetivo del es- dos niños observan los objetos, el niño más
tudio que se informa fue analizar el proceso grande se detiene a mirar una vasija y el pe-
así como también en algunos casos a la in- Como se pone de manifiesto en el ejemplo
vestigadora. Por su parte, se consideró que 1, Emir, el niño mayor, conduce a través de
un niño mayor o pequeño asumía el rol de preguntas, gestos deícticos y el pasaje de las
narrador cuando aportaba de forma verbal in- imágenes, la narrativa. Emir inicia las se-
formación sobre la narrativa. La posición cuencias a través de una elicitación – turno 1,
corporal y la mirada del narrador se dirigían bueno \ quiénes son ellos/; turno 5, qué está
principalmente a la audiencia y/o a las imá- haciendo Ariel/ -, a las que Ariel responde
genes. Por último, se consideró que un niño, proporcionando la información solicitada -
ya fuese de 4 ó 12 años, adoptaba el rol de turno 2, ºAriel y Facuº\; turno 6, ºmirando la
audiencia cuando no aportaba información máscaraº\- y que luego Emir retroalimenta a
verbal a la narrativa, sino que señalaba inte- través de una repetición de la emisión produ-
rés en el relato de su compañero a través de cida por el pequeño -turno 5, al museo\-.
diversos indicadores tales como el manteni- Cabe señalar que cuando Emir repite las emi-
miento de la mirada al narrador, una posición siones de Ariel lo hace dirigiendo la mirada a
corporal próxima a él y a las imágenes, así la investigadora -turno 3, 5, 9 [mira a IN-
como asentimientos relacionados con la na- VESTIGADORA]-. Es posible que estas re-
rrativa. peticiones no solo sean utilizadas como un
Se presenta un ejemplo en el que es posi- modo de retroalimentación, sino también para
ble observar el rol de tutor adoptado por el dirigirse a la audiencia. Esto podría deberse
niño mayor y el rol de narrador adoptado por a que Ariel utiliza un volumen de voz muy
el niño pequeño: bajo (marcado en la transcripción por los sig-
nos º º) y no dirige la mirada en ningún mo-
mento a la investigadora. Emir, a través de es-
Ejemplo 1: Ariel (4 años) y Emir (12 años) tas repeticiones en un volumen más alto y de
{Ariel está apoyado contra el respaldo de la dirección de la mirada, construye a la in-
la silla, mira hacia las imágenes o hacia Emir. vestigadora en audiencia de la narrativa que
Emir se encuentra inclinado hacia Ariel y ambos elaboran. Cabe señalar que el tutor
apoya los brazos sobre la mesa, alterna la establece esta distribución de roles (tutor-
mirada entre Ariel y la investigadora. Las Emir y narrador-Ariel le relatan el cuento a la
imágenes se encuentran frente a Ariel} audiencia-investigadora) al principio de la
1 EMIR: bueno \ quiénes son ellos / interacción. En efecto, antes de comenzar la
2 ARIEL: ºAriel y Facuº \ secuencia presentada en el ejemplo 1, Emir le
3 EMIR: Ariel y Facu \ adónde están en- propone a Ariel contarle juntos el cuento a la
trando/ investigadora. En este sentido, y teniendo en
[mira a INVESTIGADORA] cuenta que la tarea solicitada es justamente
[mira a ARIEL] relatarle el cuento a la investigadora, la repe-
4 ARIEL: ºal museoº \ tición de las intervenciones poco audibles de
[mira a EMIR] Ariel, sumado a una dirección de la mirada
5 EMIR: al museo \ ((pasa la hoja)) qué está que muestran hacia quién está dirigido el re-
haciendo Ariel/ lato, pueden entenderse como un intento del
[mira a INVESTIGADORA] niño mayor por llevar a cabo la tarea. Este in-
[mira a ARIEL] tento debe ser entendido teniendo en cuenta
6 ARIEL: ºmirando la máscaraº \ que el niño pequeño proporciona determina-
[mira a EMIR] das pistas de contextualización -un tono casi
7 EMIR: y Facu/ inaudible y la no dirección de la mirada a la
[mira a ARIEL] audiencia- que se podrían interpretar como un
8 ARIEL: ºmirando una vasicaº \ deseo de no participar.
[mira a EMIR] En otras situaciones en las que, al igual
9 EMIR: una vasica \ que en el intercambio entre Ariel y Emir, el
[mira a INVESTIGADORA] niño mayor adoptaba un rol de tutor y el pe-
queño un rol de narrador, era el niño pequeño Candela la que manipula el libro -turno 4,
el que construía a la investigadora en au- ((pasa la hoja))- y la que construye el rol de
diencia, alternando para ello la mirada entre audiencia en la investigadora, a través de la
el tutor, a quien respondía las preguntas, y la dirección de la mirada al final de sus inter-
audiencia a quien le dirigía el relato, tal como venciones -turno 2, turno 6, [mira a INVES-
se muestra en el fragmento de intercambio TIGADORA]-. Por su parte, Cristian, a dife-
entre Cristian y Candela: rencia de Emir, no dirige en ningún momento
la mirada a la investigadora. En este sentido,
las acciones de Emir o de Cristian, deben en-
Ejemplo 2: Candela (4 años) y Cristian (12 tenderse en relación con las acciones de Ariel
años) o de Candela, y lo mismo de modo inverso.
{Cristian está sentado de costado en la si- Esta negociación entre los participantes, que
lla dirigiendo su cuerpo a Candela. Candela no se da a través solo de las intervenciones
se encuentra de frente a la mesa y alterna la verbales, sino a través de una compleja red de
mirada entre Cristian, las imágenes y la in- campos semióticos que incluyen tanto lo ver-
vestigadora. Las imágenes se encuentran bal como la mirada, la posición corporal, el
frente a Candela} volumen de la voz y el uso de los materiales,
1 CRISTIAN: para vos Candela qué están permite que los niños construyan una narra-
haciendo ellos/ tiva colaborativa.
[mira a CANDELA] En algunas interacciones fue posible ob-
2 CANDELA: observando\ servar cambios durante la interacción en los
[mira a IMAGEN] roles adoptados por los niños. Así por ejem-
[mira a INVESTIGADORA] plo, se encontró que en ocasiones los niños
3 CRISTIAN: observando la máscara la va- mayores adoptaban en un primer momento un
sija \ rol de tutor y luego, a medida que avanzaba
[mira a CANDELA] el relato dejaban que el pequeño continuase
4 CANDELA: ((pasa la hoja)) solo, adoptando así un rol de audiencia.
5 CRISTIAN: y acá / ((señala al personaje))
qué está haciendo /
[mira a CANDELA] Ejemplo 3: Sebastián (4 años) y Erica (12
6 CANDELA: se le ocurrió una idea para años)
asustar al hermano \ {Erica se sienta con el torso dirigido a Se-
[mira a INVESTIGADORA] bastián, y éste a su vez se dirige corporal-
[mira a CRISTIAN] mente a Erica. Las imágenes se encuentran
[mira a INVESTIGADORA] entre ambos niños}
7 CRISTIAN: una idea\ y el hermano ((se- 1 ERICA: a dónde entraron/
ñala al personaje)) sigue viendo la vasija \ 2 SEBASTIÁN: al museo \
3 ERICA: y qué vieron/ ((señala la máscara))
Como se muestra en el Ejemplo 2 Cristian 4 SEBASTIÁN: una vasija y una máscara \
adopta un rol de tutor que se pone de mani- [mira a ERICA]
fiesto en el inicio de las secuencias, -turno 1, 5 ERICA: ((pasa la hoja))
para vos Candela qué están haciendo ellos/; 6 SEBASTIÁN: ((se incorpora en la silla y
turno 5, y acá / ((señala al personaje)) qué acomoda el libro))
está haciendo/- y en la retroalimentación de 7 ERICA: y el nene qué pensó/
las respuestas de Candela, en las que expande 8 SEBASTIÁN: los dos ((señala a los dos
sus intervenciones -turno 3, observando la personajes)) estaban mirando la vasija \
máscara la vasija\; turno 7, una idea y el her- [mira a ERICA]
mano ((señala al personaje)) sigue viendo la 9 ERICA: pero el chiquito ((señala al chico))
vasija\-. Sin embargo, a diferencia del inter- qué pensó/
cambio entre Ariel y Emir, en este caso es 10 SEBASTIÁN: que:: podí::a-
11 ERICA: ((señala la máscara)) que Erica cambió la hoja -turno 6-, luego
12 SEBASTIÁN: ((señala la máscara)) aga- participa en el pasaje de la hoja junto con
rrar la máscara \ Erica -turno 14- y hacia el final del relato, es
13 ERICA: y lo iba a asustar al más grande el niño pequeño el que pasa la hoja. Este
no/ ((comienza a pasar la hoja)) cambio en el manejo del material, que puede
14 SEBASTIÁN: sí ((agarra la hoja y acom- interpretarse como una demostración de ma-
paña el movimiento de ERICA)) yor autonomía del niño pequeño, también
15 SEBASTIÁN: y agarró la máscara \ puede verse en el inicio de las secuencias,
16 ERICA: agarró la máscara \ mientras que las primeras secuencias son to-
17 ERICA: ((pasa la hoja)) y qué pasó/ das iniciadas por Erica, en el turno 15 Sebas-
18 SEBASTIÁN: lo asustó el más chiquito\ tián inicia la secuencia -y agarró la máscara-
y el nene se asustó\ ((agarra la punta de la Cabe señalar que el niño al iniciar la se-
hoja)) cuencia lo hace utilizando el conector aditivo
19 ERICA: ((agarra la punta de la hoja)) “y”. Esta elección podría deberse a un in-
20 SEBASTIÁN: ((agarra la hoja y la pasa)) tento por marcar una continuidad con lo dicho
21 SEBASTIÁN: y después se murieron de anteriormente. Sin embargo, si se observa
risa\ que Erica inicia las secuencias de la misma
[mira a INVESTIGADORA] manera -turno 3, y qué vieron/; turno 7, y el
22 ERICA: {ríe} nene qué pensó/- es posible pensar que la
23 SEBASTIÁN: porque era él \ ((señala al adopción de un inicio similar al de su com-
chico)) pañera, sumado a la mayor participación en la
[mira a INVESTIGADORA] manipulación del material, podrían estar mar-
24 ERICA: porque era él \ ((señala al chico)) cando un cambio en los roles narrativos, ya
[mira a SEBASTIÁN] no entre tutor y narrador, sino entre narrador
25 SEBASTIÁN: ((pasa la hoja)) y acá la y audiencia.
chica lo reto porque tocó la- ((señala la más- Sin embargo, Erica vuelve a iniciar la se-
cara)) al chiquito la señora ((señala a la cuencia siguiente -turno 17, y qué pasó/- y a
maestra)) lo reto porque toco esto \ ((señala manipular el material. Cabe señalar que la
la máscara)) pregunta con la que inicia la secuencia es
[mira a INVESTIGADORA] distinta a las preguntas anteriores. En efecto,
mientras que las preguntas anteriores -turnos
1, 3, 7- son preguntas que focalizan, o bien a
En el intercambio que se presenta en el través del pronombre -adónde entraron/- o
Ejemplo 3, Erica adopta un rol de tutora, del verbo empleado -y qué vieron/ y el nene
inicia las secuencias por medio de preguntas qué pensó/- un aspecto particular de la ima-
-turno 3, y qué vieron/- y gestos deícticos gen, o bien a través del uso de gestos deícti-
-turno 11, ((señala la máscara))-, que se cos que proporcionan la respuesta -y qué vie-
apoyan en las imágenes para elicitar el relato ron/ ((señala la máscara))-, la pregunta de
por parte de Sebastián. Asimismo, la niña-tu- Erica en el turno 17 es una pregunta general
tora retroaliementa las respuestas del niño sobre la imagen que no proporciona guías
pequeño -turno 16, agarró la máscara-, pi- verbales o no verbales. En este sentido, si
diendo en algunos casos mayor información bien la niña mayor inicia la secuencia, fun-
-turno 9, pero el chiquito qué pensó/-, o agre- cionando así como una tutora, no propor-
gando la que el niño no proporciona -turno ciona el mismo nivel de ayuda que en las
13, y lo iba a asustar al más grande- y ges- otras secuencias. Es posible pensar que de
tiona los tiempos del relato a través del pa- este modo Erica está evaluando y/o estimu-
saje de las hojas -turno 5, ((pasa la hoja))-. lando la autonomía de Sebastián para narrar
A medida que avanza el relato, Sebastián sin su ayuda. En efecto, en las secuencias si-
comienza a participar en el pasaje de las ho- guientes -turno 18 a 25- Sebastián narra de
jas, primero acomodando el libro una vez forma autónoma, manipulando las imágenes
9 CAROLINA: estaba tan concentrado que El Gráfico 1 pone de manifiesto que los ni-
dijo y yo lo voy a asustar a ver qué hace \ ños mayores adoptan en mayor medida un rol
[a IMAGEN][mira a SABRINA] de tutor (52%), en segundo lugar un rol de au-
{Sabrina agarra la hoja y comienza a levan- diencia (27%) y en menor medida un rol de
tarla. Carolina apoya el dedo pulgar sobre la narrador (21%). Por su parte, el Gráfico 2
hoja} muestra que en la mayoría de los casos los ni-
10 CAROLINA: =((agarra la hoja y la ños pequeños adoptaban un rol de narrador
pasa))= (88%) y en muy pocos casos de audiencia
11 SABRINA: =((agarra la hoja y la pasa))= (12%).
12 SABRINA: y se pu- ((señala la máscara))
13 CAROLINA: se puso la máscara \
14 CAROLINA: ((agarra la hoja y la pasa)) DISCUSIÓN
15 SABRINA: = lo asustó =
[mira a INVESTIGADORA————-] El análisis de la construcción interaccional
16 CAROLINA: =y y lo= asustó al her- de las narrativas puso de manifiesto que para
mano \ lograr conformar una narrativa los niños
adoptaban diferentes roles narrativos (Good-
El Ejemplo 5 muestra un intercambio en win, 1984) que se configuraban y se nego-
el que ambas niñas adoptan el rol de narra- ciaban a partir de una red compleja de infor-
dora sin llegar a negociar la construcción mación de distintos campos semióticos que
conjunta del relato. La falta de acuerdo se incluía tanto lo verbal como la mirada, la po-
pone de manifiesto a través de varias pistas sición corporal, el volumen de la voz y el uso
de contextualización: la manipulación del li- de los materiales y objetos presentes en la si-
bro que da cuenta de un control de los tiem- tuación (Goodwin, C., 1984, 2007; Good-
pos del relato, la superposición de turnos - win, M., 1997).
turno 15 y 16,= Sabrina: =asustó=, En consonancia con el análisis de las na-
Carolina: =y y y lo= -, la interrupción del rrativas entre madres y niños llevado a cabo
turno -turnos 12, Sabrina: y se pus- -, y la di- por Melzi y Casper (2005) se identificaron
rección de la mirada. En efecto, mientras para los niños mayores, roles de narrador y de
que Carolina, la niña mayor, dirige la mirada tutor. Sin embargo, a diferencia de dicho tra-
a Sabrina, a quien busca ubicar así en el lu- bajo, en el estudio realizado también se iden-
gar de audiencia, la niña pequeña elude la tificó un rol de audiencia. Es posible que esta
mirada y la dirige a la investigadora. Un tu- diferencia se debiera a que, como sostienen
tor no exige que la mirada esté dirigida a él, Hamo y Blum-Kulka (2007), las interaccio-
sino al objeto foco del aprendizaje, pero un nes entre niños, aún cuando sean entre dis-
narrador sí lo hace. En el intercambio anali- tintas edades, presentan una estructura más
zado, Sabrina rompe esta regla mostrando su igualitaria que entre adultos y niños permi-
rechazo a ser ubicada como audiencia. Al tiendo que los niños mayores no siempre asu-
hacerlo, el tercer participante, la investiga- miesen un rol conductor como el de narrador
dora, cobra especial importancia, en tanto o tutor, dejando lugar para que el niño pe-
que le permite a la niña pequeña construir queño narrase de forma más autónoma.
otra audiencia para ubicarse ella misma en el El análisis cuantitativo de los roles adop-
lugar de narradora. En este sentido, es im- tados por los niños mostró que los niños pe-
portante destacar que las interacciones aquí queños adoptaban en la mayoría de los casos
analizadas no son entre dos participantes, roles de narradores y los mayores, roles de tu-
sino entre tres, ya que aún cuando sus inter- tores. En los casos en los que los mayores
venciones verbales sean mínimas y se reduz- adoptaban un rol de tutor, la interacción asu-
can a proponer la tarea y darla luego por fi- mía la forma de la secuencia tripartita propia
nalizada, la investigadora cumple un rol de del discurso escolar señalada por Sinclair y
audiencia. Clouthard (1975). En efecto, los tutores ini-
ciaban las secuencias, generalmente a través en estas situaciones era a través de la direc-
de elicitaciones, los pequeños respondían y ción de la mirada. En efecto, los niños peque-
luego los mayores retroalimentaban sus res- ños no miraban al narrador, dando a entender
puestas. que no asumían el rol de audiencia que el
El análisis de las interacciones puso de niño mayor buscaba otorgarles. Como señala
manifiesto diferencias entre los intercambios Goodwin (1984), en determinados grupos
en la dirección de la mirada, la manipula- culturales una de las reglas principales entre
ción de las imágenes y la posición corporal narradores y audiencia es la reciprocidad de
aún cuando los niños asumieran los mismos la mirada, si el hablante mira al receptor éste
roles. Así por ejemplo, se encontró que en al- debe devolverle la mirada. En este sentido, la
gunos casos los niños que asumían el rol de falta de reciprocidad en la mirada puede cons-
tutor dirigían la mirada tanto a la investigado- tituir un indicador de la no ratificación del rol
ra-audiencia como al niño narrador y pasaban asumido por su interlocutor.
las hojas del libro, mientras que en otros ca- Aunque los conceptos desarrollados en es-
sos era el niño-narrador el que manipulaba el te estudio pueden permitir la comprensión
material y construía la audiencia a través de de otras situaciones de interacción, los resul-
la dirección de la mirada. Como se puso de tados no son generalizables en tanto que se
manifiesto en el análisis, estas diferencias analizaron pocos casos. En este sentido, en in-
respondían a las acciones provistas por los vestigaciones futuras sería interesante am-
otros participantes y eran negociadas en la pliar la muestra.
interacción. En este sentido es posible pensar La mayoría de las investigaciones que es-
las diferencias en función de lo que Goodwin, tudiaron las interacciones entre niños se fo-
C. (2003) y Goodwin, M. (2006) denominan calizaron en el resultado de la interacción y
marcos participantes y no como acciones ais- no en el proceso de negociación que desplie-
ladas de cada uno de los participantes. gan los niños en la interacción (Coll, 1991;
El microanálisis de las secuencias interac- Doise et al., 1975; Fawcett & Garton, 2005;
cionales permitió mostrar que los roles adop- Forman & Cazden, 1984; Mashburn et al.,
tados podían cambiar a lo largo de la interac- 2009; Mugny & Pérez, 1988; Roselli, 1999).
ción. Así por ejemplo se identificó que en El aporte del estudio realizado reside preci-
algunos casos los niños mayores comenzaban samente en el análisis que se realiza del pro-
asumiendo un rol de tutor y luego, hacia el fi- ceso de negociación a través del cual los ni-
nal del intercambio, adoptaban un rol de au- ños adoptan distintos roles narrativos que les
diencia. En otros casos se encontró que al co- permiten construir una narrativa de ficción.
mienzo del intercambio el niño mayor La importancia de conocer el modo en el
adoptaba un rol de audiencia y durante el re- que niños de diferentes edades construyen
lato cambiaba a un rol de tutor. Como se mos- una narrativa en interacción puede ponde-
tró en el análisis, el cambio de rol no se daba rarse apropiadamente si se considera en el
de forma aleatoria, sino que respondía a la se- marco de las investigaciones antecedentes
cuencia de acciones en la que cada partici- que destacaron la importancia de la interac-
pante interpretaba las pistas de contextualiza- ción para el desarrollo narrativo (Fivush &
ción (Gumperz, 1982) provistas por el otro y Haden, 2005; Fivush et al., 2006; Haden et
actuaba en función de las mismas. al., 1997; Melzi, 2000; Sparks et al., 2013).
En algunos casos tanto el niño mayor En efecto, estos trabajos realizados en situa-
como el niño pequeño asumían roles de na- ciones de interacción niño-adulto, mostra-
rrador. En estas situaciones la relación asi- ron que los adultos andamian a través de va-
métrica entre el niño de 12 años y el pequeño riadas estrategias las narrativas infantiles. A
generaba que el niño mayor impusiese su re- diferencia de las invetigaciones menciona-
lato no dando lugar a que el niño pequeño na- das, en el estudio que se informa los niños no
rrara. Uno de los modos que utilizaban los ni- interactuaban con un adulto, sino con un
ños pequeños para señalar su falta de acuerdo niño mayor. La relevancia de analizar las
narrativas producidas por niños pequeños en laron la importancia de las interacciones en-
interacción con niños mayores reside justa- tre niños en comunidades indígenas (Rogoff,
mente en los resultados de investigaciones 1993, 2003). En este sentido, en investiga-
previas (Rosemberg et al., 2013; Stein & ciones futuras sería interesante ampliar la
Rosemberg, 2012) que señalaron que en po- población en estudio a otros grupos socio-
blaciones urbano-marginadas, como la del culturales a fin de contemplar eventuales di-
presente estudio, las interacciones entre ni- ferencias socioculturales en la producción
ños de distintas edades pueden dar lugar al de narrativas entre niños de distintas eda-
aprendizaje y el desarrollo infantil. Asi- des.
mismo, otras investigaciones también seña-
GRÁFICO 1
ROLES ADOPTADOS POR LOS NIÑOS MAYORES
ANEXO 2
CODIFICACIONES EMPLEADAS EN LA TRANSCRIPCIÓN
García Sánchez, I. (2010). Serious games: code- Gumperz, J. (1982) Discourse strategies. Cam-
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