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ESCUELA DE PSICOLOGÍA
ASIGNATURA
Neuropsicología
FACILITADORA
Esther Lugo
PARTICIPANTE
Luis Alberto Amparo A.
MATRICULA
100040027
TEMA
El Cerebro Humano y Las Emociones.
FECHA
27-10-2021
INTRODUCCIÓN
El cerebro controla nuestras emociones. El sistema límbico es la zona del cerebro que
dirige nuestras emociones y nuestras sensaciones más primitivas: aquellas
relacionadas con la supervivencia (como por ejemplo el miedo y la ira) y con las
sensaciones del ser humano en torno a nuestro comportamiento sexual.
La amígdala ejecuta una respuesta rápida de todo el cuerpo que empuja a alejarse de
las posibles amenazas. ... “Una vez que detecta el peligro, la amígdala orquesta una
respuesta rápida de todo el cuerpo que nos empuja a alejarnos de la amenaza,
lo cual aumenta nuestras posibilidades de supervivencia”.
“La amígdala revisa constantemente toda la información que llega al cerebro a través
de los distintos sentidos con el fin de detectar rápidamente cualquier cosa que pueda
influir en nuestra supervivencia”, explica Feinstein. “Una vez que detecta el peligro, la
amígdala orquesta una respuesta rápida de todo el cuerpo que nos empuja a alejarnos
de la amenaza, lo cual aumenta nuestras posibilidades de supervivencia”.
La amígdala es la región del cerebro que procesa las emociones de miedo y, por lo
tanto, dispara todos los mecanismos de supervivencia. Es decir, la amígdala controla
las respuestas de huida que tenemos cuando sentimos miedo, ya sea al percibir algo
peligroso por nuestros sentidos o al recordar algo del pasado
Explica la relación entre la lateralización cerebral y las
emociones.
Es decir, una de las dos mitades del cerebro se vuelve dominante y asume
la función del hemisferio del lenguaje. En los seres humanos que aprenden a leer y
escribir, una de estas mitades debe tornarse dominante, es decir, convertirse en el
hemisferio que controla estas habilidades.
Por otro lado la amígdala anticipa una respuesta emocional ante estos estímulos
previamente detectados. La amígdala nos pone en marcha y nos prepara para este
estímulo (nos puede generar taquicardia, tensión muscular, aumento de la respiración,
dilatación pupilar, etc.).