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La Biblia en el libro de Habacuc 3:2 nos dice: “Oh Señor, aviva tu obra en medio
de los tiempos, en medio de los tiempos hazla conocer;” Si hay algo lo
suficientemente poderoso para cambiar una nación, es un Avivamiento. Pero qué
es:
Avivamiento revitaliza, trae autoridad, alista, entrena, llena de poder de Dios, trae
arrepentimiento, hambre por su presencia, trae fuego al corazón, pasión,
convicción, y disposición para ser usado por Dios.
Aquí trataremos de sintetizar como el Espíritu Santo se estuvo moviendo con gran
poder en diferentes lugares en el mundo desde 1700 hasta la actualidad.
Podemos señalar siete grandes avivamientos en la historia a partir de 1700;
partiremos de las fechas proporcionadas por Neil Anderson en su libro “Ríos de
Avivamiento.”
Este se llegó a conocer en 1727 en Alemania y fue la raíz del Avivamiento en Gran
Bretaña así como en E.U; hacía énfasis en predicar el evangelio. En esta época
Dios usó a hombres como John Wesley, George Whitefield, Thedore
Frelinghuysen, Johanathan Edwards, John Knox, este Avivamiento influyó por casi
5 décadas, los historiadores creen que el de Avivamiento salvo a Inglaterra de vivir
lo ocurrido a Francia en la Revolución Francesa.
En este mover de Dios, podemos ver a grandes hombres de Dios llenos del
Espíritu Santo, con manifestaciones poderosas de milagros. Dios uso a siervos
como: Jeremiah Canphier, John Alexander Dowie, Evan Roberts, Esteban Jeffrey,
María Woodworth Etter.
7. Avivamiento actual.
Dios se está moviendo en el mundo con poder y gloria como en: Estados Unidos
en la Iglesia de Asambleas de Dios de Browsville, en Pensacola Florida con el
pastor John Kilpatrick; considerada como una de las iglesias más avivadas del
mundo en estos momentos, donde la presencia de Dios es tan fuerte, que 4
millones de personas de todo el mundo han venido para estar en ese lugar
Dios está usando a grandes lideres y hombres de Dios para llevar el Avivamiento
a todo el mundo, entre ellos podemos citar a: Wes Campbell, Alberto Mottesi,
David Yonggi Cho, Luis Palau, Carlos Anacondia, Claudio Freidzon, Morris Cerulo,
Dante Gebel, John Kilpatrick, Ralph Mahoney, Cindy Jacobs, Victor y Cris
Richrads, Neil Anderson, Josué Irión, John Bevere, Benny Hinn, Cash Luna, Joe
Rosa, Larry Hill, Sergio Scataglini, etc. ¡El próximo, puedes ser tú! Sólo, depende
que le creas a Dios.
Escritura Y EnseÑanza
En 1832, el fuego del avivamiento comenzó a desvanecerse y Finney asumió un
pastorado en Nueva York. En 1835, el recién fundado Oberlin College (Ohio) lo
invitó a ser su primer profesor de teología. Finney tenía cuarenta y tres años de
edad y estaba agotado. En gran necesidad de descanso y con el sentir de que
estaba ocurriendo un cambio en el ambiente espiritual, aceptó. Por el resto de su
vida se dedicó a dictar clases en Oberlin y a conducir campañas en varios lugares,
como en Nueva York, Boston, e Inglaterra.
A su favor se dirá que Finney también motivó las aplicaciones sociales del
evangelio. Finney, Mahan, y sus seguidores fueron algunos de los primeros líderes
en el movimiento que abogaba por la abolición de la esclavitud. También asumió
una firme postura contra la orden masónica.
La TeologÍa De Finney
Finney fue un muy franco pelagiano. Sus otras creencias teológicas, que ya
hemos mencionado, revelan su repugnancia a la preparación teológica. Un
historiador resume así la teología de Finney: "El concepto de que un hombre no
regenerado es gobernado por una naturaleza caída no tenía sentido... Una
decisión de la voluntad, no un cambio de naturaleza, era todo lo que se requería
para ser convertido... Si la conversión era el resultado de la decisión del pecador,
y si era responsabilidad del predicador inducir esa decisión... entonces cualquier
medida que llevara al inconverso hacia el punto de una instantánea y absoluta
conversión tenía que ser buena".11
Fortalezas De Finney
Los muchos puntos fuertes de Finney explican la manera poderosa en que Dios lo
usaba. Una de sus fortalezas era su vida de oración. Era un hombre que oraba
intensamente y por largas horas, una disciplina que necesitan los pastores. Finney
pensaba que podía producir avivamiento mediante ciertos métodos, pero su vida
de oración fue el mayor factor contribuyente. A menudo pasaba horas en oración,
tanto antes como después de sus reuniones de avivamiento.
Su segunda fortaleza era la gran unción del poder del Espíritu Santo que
descansaba sobre él. Cuando predicaba, los oyentes solían quedar en completo
silencio. Luego llegaban a un profundo, prolongado, y penetrante sentido de
pecado, lo cual resultaba en una gran conversión a Cristo, algo que por medios
humanos era imposible explicar.
La tercera fortaleza de Finney era su ética laboral. Cuando conducía una campaña
trabajaba dieciséis horas al día, siete días a la semana. Después de tan intenso
esfuerzo, cada verano pasaba varias semanas en Nueva York, en la granja de sus
suegros, para recuperar las fuerzas.
Debilidades
Finney también tuvo debilidades que limitaron un prolongado servicio a la Iglesia, y
en ciertos casos provocaron mucho daño entre los de poco criterio.
Su segunda debilidad, que tiene mucho que ver con la primera, era la elevación de
la razón por encima de la revelación. Finney exigía que muchos misterios bíblicos
fueran traducidos a fórmulas racionales humanas. Finney luchaba por "ajustar las
verdades del cristianismo a un tan armonioso sistema de pensamiento que no se
violara los dictámenes de la razón — observa Murray — . Esto, como muchas
veces dijo, era (después de la conversión de almas) la gran meta de su vida".16
Finney no podía aceptar misterios, como la congruencia de la soberanía de Dios y
la responsabilidad del hombre.
LeCCIONEs
Podemos aprender muchas lecciones de la vida de Finney. Primero, Dios se
complace en usar vasos imperfectos. Dios perfeccionó su poder mediante las
debilidades de Finney (2 Corintios 13:4). Esto debiera alentar a cada pastor. A
pesar de las imperfecciones de Finney, Dios se complació en hacerlo su
instrumento. A pesar de nuestras imperfecciones, Él se valdrá también de
nosotros.
Charles H. Spurgeon, conocido como “el príncipe de los predicadores” entre los
evangélicos.
Es el predicador más leído de toda la historia. Sus mensajes escritos llenan 63
volúmenes. Llegó a tener la congregación más grande existente para sus tiempos,
y durante su vida, se estima que predicó a más de 10,000,000 personas. Para
1865, se vendían sus mensajes impresos semanalmente a más de 25,000
personas, y se llegaron a traducir en más de 20 idiomas.
¿cuál fue el secreto de su éxito?
El mismo lo atribuía a la unción del Espíritu Santo en su vida. Dijo:
“Constantemente es mi oración que sea el Espíritu quien me guíe aun en las
partes más pequeñas y menos importantes de los servicios...”
Publicado por Marcelo Contreras.
Esto es lo que significa avivamiento: la iglesia que está por morir, vuelve a vivir.
Pablo dice que esto iba a suceder "después de mi partida", o sea, muy pronto.
Apenas que los apóstoles ya no estaban allí, ¡la iglesia empezó a desviarse!
¿¿Podría esta apostasía llegar hasta tal punto que los lobos lleguen a gobernar la
iglesia??
Piénsalo bien. Los historiadores protestantes nos dicen que esto ya sucedió hace
muchos siglos, en los tiempos de Lutero. Fue por eso que la Reforma fue
necesaria - la iglesia católica romana estaba gobernada por "lobos".
Ahora, si esto sucedió en la iglesia romana, ¿por qué no podría suceder también
en las iglesias evangélicas? Yo digo que estamos en camino a esto; muchos
líderes evangélicos ya están muy influenciados por las ideas del anticristo. (Vea
"¡Infiltración!".)
(Vea sobre este tema: "Los secretos de la iglesia temprana", por Andrew Strom; y
las "95 tesis sobre el estado de las iglesias evangélicas".)
Entonces, por más extraño que parezca: Los avivamientos vienen cuando la
iglesia tiene necesidad de ellos; cuando la iglesia está por morir.
Pero se necesita cumplir una segunda condición, para que haya avivamiento:
Un número suficiente de cristianos debe abrir los ojos. Deben darse cuenta de la
triste condición en que vivimos, y clamar al Señor por avivamiento.
"Clamó en mis oídos con gran voz, diciendo: Los verdugos de la ciudad han
llegado, y cada uno trae en su mano su instrumento para destruir. ...y llamó
Jehová al varón vestido de lino, que tenía a su cintura el tintero de escribano, y le
dijo Jehová: Pasa por en medio de la ciudad, por en medio de Jerusalén, y ponles
una señal en la frente a los hombres que gimen y que claman a causa de todas las
abominaciones que se hacen en medio de ella." (Ezequiel 9:1-4)
¿A quiénes señala Dios de esta manera? Nota que no era suficiente "no participar"
en las abominaciones de la ciudad. Además de esto, era necesario "gemir y
clamar" a causa de las abominaciones.
Para nosotros como cristianos, "Jerusalén" significa la iglesia. Es necesario que
algunos cristianos empiecen a "gemir y clamar" por las abominaciones que se
cometen en la iglesia. El Señor busca a intercesores que tengan los ojos abiertos
para ver el estado verdadero de la iglesia, y que clamen por un avivamiento.
Todos los avivamientos de la historia empezaron con la oración ferviente de
algunos cristianos.
Ezequiel continúa:
"Y a los otros dijo, oyéndolo yo: Pasad por la ciudad en pos de él, y matad; no
perdone vuestro ojo, ni tengáis misericordia. Matad a viejos, jóvenes y vírgenes,
niños y mujeres, hasta que no quede ninguno; pero a todo aquel sobre el cual
hubiere señal, no os acercaréis; y comenzaréis por mi santuario. Comenzaron,
pues, desde los varones ancianos que estaban delante del templo." (Ezequiel 9:5-
6)
¿Qué es un avivamiento?
Hasta ahora podemos comprender que un avivamiento tiene todo que ver con
volver a una relación correcta con Dios.
Resultados de un avivamiento
La iglesia vuelve a ser lo que debería ser según la enseñanza de los apóstoles.
El problema es, que muchos cristianos quieren ver estos resultados y creen que
esto "es" avivamiento; pero no están dispuestos a pagar el precio que cuesta.
Entonces intentan hacerlo ellos mismos, a manera humana. Por eso tenemos hoy
tantas imitaciones de "avivamiento", que casi nadie sabe todavía qué es un
avivamiento en verdad.
La iglesia vuelve a ser lo que debería ser según la enseñanza de los apóstoles.
Solo una advertencia: Los pioneros de los avivamientos pasados, casi siempre
fueron perseguidos por los líderes de sus propias iglesias. Jesús y los apóstoles
fueron perseguidos por los líderes de las sinagogas. Los reformadores fueron
perseguidos por los líderes de la iglesia católica. Los anabaptistas fueron
perseguidos por los reformadores. Wesley fue perseguido por la iglesia reformada
de Inglaterra. Etc.etc...
Avivamiento personal
Esto tiene que empezar con cada uno de nosotros; contigo y conmigo. Antes de
ver un avivamiento "en lo grande", necesitamos experimentar un avivamiento
personal, en nuestra propia vida.
El avivamiento en las islas Hébridas comenzó con un joven, quien en una reunión
de intercesión se puso de pie y leyó del Salmo 24: "¿Quién puede subir al monte
de Dios? ¿Quién puede estar en Su lugar santo? El que tiene manos limpias y un
corazón puro; que no elevó su corazón a vanidades, ni jurado falsamente..." - Y
entonces este joven cerró su Biblia. Y mirando al ministro y a los otros líderes, dijo:
"Me parece nada más que engaño, estar orando como estamos orando,
esperando como estamos esperando, si nosotros mismos no estamos en una
relación correcta con Dios." Y entonces levantó sus dos manos y oró: "Dios, ¿son
mis manos limpias? ¿Es mi corazón puro?" Después cayó de rodillas y no pudo
decir nada más.
Un buen punto para empezar sería que le pidas a Dios: "Señor, manda
avivamiento, y comienza conmigo." Y después pregúntale al Señor: "¿Son mis
manos limpias? ¿Es mi corazón puro?" - Si estás lo suficientemente desesperado
por la necesidad de avivamiento, recibirás respuesta.
REVISTA RHEMA
EL AVIVAMIENTO EN GALES
Por Fernando Sosa
Evan Roberts fue uno de los jóvenes escogidos por el Espíritu Santo para ser un
canal de bendición y avivamiento sobre Gales, un pequeño principado de las Islas
Británicas, y así conmocionar al mundo de su tiempo.
Una de las cosas que más me ha maravillado de este avivamiento iniciado en
1904 es que fue con jóvenes y niños, tal vez el de más edad entre todos era el
propio Evan Roberts, de solo 26 años.
Cuando tenía 13 años empezó a ir a las reuniones de oración, y por trece años no
se perdió ni una de ellas, hasta que el Señor lo visitó.
Dios le dio visiones y sueños. Uno de ellos era que 100.000 personas se volverían
al Señor Jesús en arrepentimiento. En otra ocasión vería la boca del infierno
tragando a miles, por lo cual oró al Señor pidiendo que por un año tapara la boca
del infierno. Por los registros históricos tan impactantes en ese año, creo que Dios
se lo concedió. Pero lo mejor de esto fue la visita que el Señor Jesús le hizo en
varias noches: la gente veía luz en su rostro y temblor en su cuerpo por esta
visitación.
Según puedo analizar, Evan Roberts concibió del Espíritu Santo. Tuvo tal
conocimiento de la Tercera Persona de la Trinidad que grandes personajes de su
tiempo viajaban para verlo y oírlo predicar. No había ninguna organización:
simplemente había dirección del Espíritu. Parecía que Él había venido sobre Gales
y había tomado el control de ese país. Las reuniones duraban cuatro o cinco
horas. La presencia de Dios era sublime y los grupos de oración estaban llenos,
así como las iglesias.
Lo extraordinario es que las cantinas cerraban por falta de clientes, quienes,
arrepentidos de sus pecados, ya no asistían. Las cárceles quedaban sin presos
porque no había delincuentes durante esos dos años que duró el avivamiento. Los
estadios de fútbol quedaban vacíos porque los deportistas estaban predicando de
Jesucristo en algún barrio. Algunos llamaron a este avivamiento «el Pentecostés
más grande que Pentecostés».
Los artistas y músicos famosos estaban entre el pueblo, entonando himnos.
Sencillamente, los cielos se habían abierto para esa nación y eran, prácticamente,
los ríos del trono de Dios fluyendo sobre la gente de Gales.
Dan Roberts, hermano de Evan, tenía solo 20 años, así como Sidney Evans,
amigo de ellos -quien a la postre fue su cuñado al casarse con su hermana Mary.
Mary formaba parte del grupo de «cantoras», las que tenían entre 18 y 22 años,
usadas grandemente en cánticos nuevos e instantáneos, del Espíritu.
EMBAJADORES:JOVENES Y NIÑOS
Evan Roberts, joven minero con escasa educación, nació el 8 de junio de 1878 en
una casa pequeña y modesta, la misma que el siglo siguiente estaría siendo
visitada por miles de turistas y cristianos fervientes, quienes, curiosos, querían ver
dónde los cielos fueron abiertos algún día y por si, tal vez, pudieran probar un
poco del cielo que empezó en esa humilde casa.
Una de las características de Evan Roberts es que aceptó apasionadamente al
Señor Jesús desde muy chico. Su único deseo era servirle y predicar: esto parecía
consumirlo. Por años buscó una relación íntima y profunda con el Señor, orando
fielmente por una visitación del Espíritu de Dios.
¿Cómo comenzó? Los historiadores lo definen como "La gran reunión de
Blaenanerch". Fue el jueves 29 de septiembre de 1904, cuando diecinueve
jóvenes y Evan Roberts asistieron a la reunión. Caminando hacia ella, empezaron
a cantar: "Está viniendo, está viniendo el poder del Espíritu Santo. Lo recibo, lo
recibo, es el poder del Espíritu Santo."
Estando en la reunión, Evan Roberts empezó a sentir dolores de parto. En ese
momento el Espíritu Santo le habló, diciéndole: "Esto es lo que necesitas."
Inmediatamente, él gritó: "¿Doblégame, oh Señor!"
Después de pasar un tiempo en la reunión, el Espíritu Santo le dijo que lo hiciera
públicamente. Con lágrimas sobre sus ojos y mejillas, Evan empezó a gritar:
"¡Doblégame! ¡Doblégame...! ¡Dobléganos!"
En ese momento el Espíritu Santo intervino sobre él de una forma tan penetrante
que desde esa noche la cruz y la salvación de las almas serían el principal
enfoque del avivamiento.
Después de esto, en una noche tuvo una visión de todo Gales siendo levantado al
Cielo. Entonces, comentando a su amigo Sidney, dijo:
MANIFESTACIONES
* Gritaron en agonía.
* Hubo arrepentimiento profundo.
* Lloraron con remordimiento.
* Hubo gozo del Espíritu Santo en ellos.
* La gente estaba en éxtasis por la cercanía de Dios.
* Los servicios de oración estaban llenos de gente desde las primeras horas de la
mañana, por no poder dormir por la presencia de Dios sobre ellos.
* La gente gritó: «¡Estoy muriendo!», por el peso del Calvario sobre el alma.
* Había entusiasmo desbordado.
* La oración y al alabanza continuaban por horas, prologándose hasta la mañana
siguiente.
* La nube de gloria reposaba sobre las reuniones. La gente que venía de lugares
lejanos no quería regresar, por la gloria de Dios que estaba ahí. Los comercios de
alimentos se vaciaban porque la gente que había venido de largas distancias
determinaban que no volvería a sus hogares: sentía la Gloria de Dios y no la iba a
dejar.
* Hubo una explosión de adoración, oración y alabanza, alcanzando cimas
espirituales increíbles.
* La gente comenzó a profetizar.
* El alcoholismo fue dejado; las bebidas quedaron en las tabernas sin ser tocadas
cuando la convicción y el temor de Dios venía sobre ellos.
* Ola tras ola del Espíritu Santo afectó a la sociedad; el tema de la gente era Dios.
Las apuestas en los juegos y la obsesión por ellos prácticamente desaparecieron.
En esta visitación parecía que nadie le interesaba las distracciones del deporte o
entretenimientos de su tiempo, porque la gente ahora estaba apasionada por el
Señor. Dicen los historiadores que, al parecer, la nación hubiera sido convertida
en un día, y no sólo convertida sino transformada. Las cartas que se enviaban
unos a otros parecía que llevaban la misma presencia del Señor: cuando eran
leídas por inconversos, estos se salvaban y empezaba un mover del Espíritu
Santo también en ellos.
* La gente caía al piso, tocada por el Espíritu Santo.
* A la gente le temblaba todo el cuerpo por la presencia de la gloria de Dios.
* Todos los esquemas y patrones puestos por el hombre en la iglesia fueron
derribados; asimismo, todos los principios de crecimiento de la iglesia fueron
borrados por la presencia del Espíritu Santo.
* La santidad y la obediencia fueron enfatizados, deseando siempre levantar y
darle gloria al nombre de Jesús.
* Había impulsos del Espíritu Santo, haciendo que, a una, miles de personas se
levantaran al unísono para adorar espontáneamente con cánticos nuevos. Había
ocasiones en que la gloria de Dios brillaba con tanta intensidad sobre el púlpito
que los predicadores huían de él o caían vencidos totalmente. Otros no
soportaban el resplandor de la gloria de Dios que venía sobre las reuniones.
* Habiendo muchos grupos de oración o de estudio en diferentes partes de la
ciudad, la gente salía al mismo tiempo para cantar o entonar alabanzas, como si
fuera dirigida por un director invisible, hasta la madrugada.
* Los periódicos, en lugar de sacar escritos de casos malos, empezaron a relatar
lo que ocurría en las reuniones.
* La multitud caía simultáneamente de rodillas para estar así por un lapso de dos
horas.
* En algunos lugares, los ministros de capillas intercambiaban púlpitos con la idea
de romper el denominacionalismo.
* La influencia del Espíritu era a veces tan poderosa que hombres fuertes
palidecían y temblaban. Había efectos tan abrumadores sobre hombres y mujeres
que a veces se deshacían en profundo llanto y sollozo. A veces, pecadores
tremendos caían golpeándose el pecho.
* Había gente que expresaba: "La gente se ha vuelto loca por la religión."
* Había espontaneidad en todo, así como un "desorden" divino.
* Las reuniones políticas fueron pospuestas, porque los miembros del parlamento
estaban en las reuniones de avivamiento.
* Las compañías teatrales desistieron de ir a Gales porque ya nadie asistía a sus
espectáculos.
* En sólo dos meses se reportaron 60.000 nuevos convertidos. Esta noticia salió
en los periódicos.
* Los convertidos a Cristo caían al suelo, atormentados con tal desesperación que
pedían a gritos la misericordia de Dios, como si tuvieran un dolor físico.
* Cuando la gente quería retirarse de las reuniones, a las 2:00-3:00 de la mañana,
los nuevos convertidos no podían irse porque continuaban cantando, orando y a
veces riendo incontrolablemente, hasta que las reuniones de oracion se extendían
hasta el amanecer.
Al escribir esto de Gales me emociono mucho, porque pienso que en estos últimos
años hemos saboreado parte de lo que aquí describo. ¿Cuál ha sido la diferencia
en nuestro tiempo de visitación del Espíritu Santo en nosotros? La diferencia
radica en que Gales supo, admitió y creyó que era el tiempo de su visitación;
entonces los galeses la recibieron.
Hoy tenemos manifestaciones fuertes del Espíritu Santo pero no las creemos, ni
las admitimos. Creo que el Espíritu Santo tiene aún mucho trabajo por delante.
Cada vez que leo la historia del avivamiento en Gales, mi espíritu dice: "Sí, Señor;
viene este tiempo en que tú intervendrás, pasando por encima de todo patrón o
estructura y solo tú puedes cambiar la sociedad y el corazón del hombre."
He tenido el privilegio de poder ver algunas manifestaciones del Espíritu Santo en
este tiempo, las que se asemejan a lo acontecido en Gales, y me atrevo a decir
que la máxima opositora del mover del Espíritu Santo es la gente cristiana. No
tanto el inconverso, porque cuando este cae al piso, tocado por el poder del
Espíritu Santo que lo redarguye y lo trae a los pies de Cristo, se levanta con un
tremendo gozo de Dios. Me ha tocado ver gente que viene a Cristo y, junto con
eso, recibe el gozo del Señor o el vino del Espíritu Santo, cayendo fulminada o con
gran llanto y compungida con gran quebranto.
He podido observar la gloria de Dios manifestada en nuestras reuniones y oír que
en muchas partes está sucediendo y brotando este mover del Espíritu Santo más
rápido de lo que había pensado. Asimismo, he visto congregaciones hermosas en
Puerto Rico, Estados Unidos, Costa Rica, Argentina y Canadá, mientras escucho
que en diferentes partes del mundo está sucediendo lo mismo.
Este mover del Espíritu Santo no es exclusivo de ningún hombre, En el
avivamiento galés Evan Roberts fue usado grandemente por Dios. Él fue un
pionero, punta de lanza para su generación; pero en ese tiempo muchos otros
corrieron de un lado a otro, llevando ese fuego de avivamiento, aunque cuando
Evan Roberts se escondió, el fuego se apagó. Esto quiere decir que los hombres
siervos de Dios que Él utiliza en un principio son importantes para seguir
manteniendo la flama y avivarla aun más. No quiere decir que el Espíritu Santo se
detuvo, aunque ciertamente sí lo hizo en Gales, pero brotó en 1906 en la Calle
Azuza, en Los Angeles, California, EE.UU., a través de James Seymore, Grank
Bartíeman y Smale, en una pequeña sesión de gente de color. Ellos mismos
referían continuamente su entusiasmo a Evan Roberts, cuando perseguían la
llenura del Espíritu Santo, hasta el grado de repartir 5000 folletos en Los Angeles,
titulado El avivamiento en Gales.
Pienso que la temperatura espiritual del siglo XX se inició y se elevó en Gales con
Evan Roberts, aumentándose aun más en Azuza, y yendo por todo el mundo
hasta el día de hoy.
Al finalizar este siglo y comenzar inclusive un nuevo milenio, creo que la Iglesia,
en su toda generalidad, está otra vez "baja de grados", espiritualmente hablando,
con un poco de fuego por allí y otro por allá. ¡Qué bueno que el Espíritu Santo está
poniendo más fuego cada año que pasa! Según creo, a principios del siglo XXI
Dios conmoverá otra vez no sólo una parte de la Tierra con su Espíritu, sino que
todo el Planeta conocerá de un derramamiento sin precedentes del Espíritu Santo.
¡DOBLEGANOS, SEÑOR!
Tengo 42 años al momento de escribir esto y 20 sirviendo a Dios, pero una de las
cosas que le he pedido al Señor, y que es la que me apasiona, es que quiero ver
aun más allá de lo que hoy he visto. Anhelo disfrutar más de sus manifestaciones
y de la gloria de su presencia.
En verdad, me siento privilegiado de poder ver hoy su mover; y aunque ha sido
grande y sorprendente, sé que va a ser mayor en los años por venir.
Aun los historiadores seculares respetados dicen que a través del ministerio de
Juan Wesley, sus ayudantes y convertidos y el Gran Despertar sobre Inglaterra
que resultó, Inglaterra fue librada del terrible baño de sangre que caracterizó la
Revolución Francesa que ocurrió dos años antes de la muerte de Wesley. Se dice
que durante su ministerio, viajó más de 400,000 kilómetros a lomo de caballo (una
distancia equivalente a dar diez vueltas alrededor de la tierra sobre el Ecuador), y
predicó más de 40,000 mensajes.
La verdad es que si uno se pone a leer sus mensajes hoy día, diría que no había
nada en ellos como para provocar emoción. Y sin embargo Dios los usó para
llevar a miles de personas al Señor. No era la palabra; era el poder de Dios sobre
la palabra.
“Supimos que muchos se ofendieron al oír los clamores de aquellos sobre quienes
descendió el poder de Dios; entre ellos un médico, quien dijo que podría tratarse
de un engaño o falsedad. Hoy una de las primeras personas en clamar
misericordia fue una mujer a quien dicho médico conocía por años. Al verla llorar,
le pareció increíble que fuese la misma persona. Se acercó a ella y observó todos
los síntomas; vio que por la cara le corrían gruesas gotas de sudor y se
estremecía hasta los huesos. Al ver eso, no supo qué decir, pues quedó
convencido de que no se trataba de ningún engaño, ni tampoco de ningún
desorden natural. Mas cuando su cuerpo y alma fueron sanados en un instante, el
médico vio el dedo de Dios en lo que le había ocurrido a la mujer”.
Declaraciones de Wesley:
Wesley creía que los Dones del Espíritu eran para nuestros tiempos. En una carta
escrita en junio de 1746, declara: “No recuerdo de ninguna Escritura donde se nos
enseñe que los milagros debían confinarse a la edad apostólica o cualquier otro
período de tiempo. Es cierto que San Pablo dice que las profecías y las lenguas
cesarán, pero en ningún momento dice que estos milagros cesarán antes de que
cesen la fe y la esperanza…”
En una ocasión, otro ministro le preguntó cómo hacerle para lograr que mucha
gente viniera a escucharle. La respuesta de Wesley fue:
“Si el predicador está ardiendo, los demás vendrán para ver el fuego.”
Además de sus mensajes de gran poder, fluía en los dones del Espíritu Santo. El
libro “La Vida de Charles Spurgeon”, por Russell H. Conwell dice lo siguiente:
“probablemente ningún hombre en Inglaterra o América en este siglo (XIX) ha sido
el instrumento de sanidad de tantas personas como lo fue el Sr. Spurgeon… miles
de casos de enfermos fueron sanados en respuesta a oración, entre ellos,
parálisis parcial, reumatismo, aflicciones mentales y fiebres contagiosas. El se
consideraba como mero agente del poder Divino, y decía que no era merecedor
del don de la sanidad”.
“Necesitamos hombres ardiendo al rojo vivo, que irradien el fuego con tan intenso
calor; que no podamos siquiera acercarnos sin sentir que nuestros corazones se
están quemando; hombres como relámpagos lanzados de la misma mano de
Jehová, despedazando estrepitosamente cada cosa que se opone en su camino,
hasta que llegue a su blanco; ¡hombres impulsados por la Omnipotencia!”
“Es el poder extraordinario de Dios, no el talento, lo que trae la victoria del día. Es
unción espiritual extraordinaria, no poder mental extraordinario, lo que
necesitamos. Puede ser que el poder mental llene una capilla, pero el poder
espiritual llena a una iglesia con angustia del alma. Puede que el poder mental
reúna una congregación grande, pero sólo el poder espiritual llenará las almas.”
En cuanto al gozo (para los ingenuos que creen que la risa santa es algo nuevo):
“Creo, en mi corazón, que hay tanta santidad en una carcajada que en un llanto, y
que en ocasiones, la risa es mejor. Porque puedo gemir, pero a la vez estar
murmurando y estarme afligiendo y llevando pensamientos amargos contra Dios,
mientras que, en otro momento, puedo reír de sarcasmo en contra del pecado y
así dar evidencia de una santa sinceridad en la defensa de la verdad” (Su
Autobiografía).
En un mensaje titulado “El Gran Avivamiento” (Marzo 28, 1858) Spurgeon dijo que
el avivamiento es como un huracán, que trae caos dondequiera que va: “…llega,
como un huracán celestial, arrastrando todo lo que tiene por delante… y hay llanto
y gemidos en las reuniones… pero los convertidos son muy sinceros. Jamás
habrás visto semejantes personas. Algunos los llaman fanáticos, pero es un
fanatismo santo.
Siguiendo acerca de las críticas: “Es sólo a un árbol lleno de fruto al cual los
hombres avientan piedras”.
Dwight L. Moody.
Este hombre, cuya educación formal fue el equivalente al quinto año de primaria,
fundó tres escuelas de renombre. Sin educación teológica, reestructuró el
cristianismo de la Era Victoriana y sin radio o televisión, alcanzó a 100 millones de
personas, viajando más de cien millones de millas durante su carrera
evangelística. Todo comenzó cuando este vendedor de zapatos inició una escuela
dominical que llegó a ser la más grande de Chicago. Así que él ya tenía cierto
éxito cuando conoció a dos ancianitas, quienes le informaron: “Hemos estado
orando por ti… ¡necesitas poder! ¡Necesitas poder!”
Dice Moody: “Mi reacción inmediata fue: ¿Por qué mejor no oran por los perdidos?
¡Yo pensaba que ya tenía poder! Tenía la congregación más grande de Chicago, y
había muchas conversiones. Pero ante la insistencia de ellas, por fin me animé a
preguntarles exactamente a qué se referían cuando decían que yo necesitaba más
poder.”
Cuando les preguntó, ellas le contestaron que lo que él necesitaba era el bautismo
con el Espíritu Santo. Fue entonces que él les pidió que no sólo oraran por él, sino
también con él.
Relata Moody: “Al escuchar y orar con ellas, derramaban su corazón para que yo
pudiera tener la plenitud del Espíritu Santo, y comencé a reaccionar. Entró en mí
una intensa hambre espiritual, que hasta entonces había sido desconocida para
mí. Comencé a llorar como nunca antes. El hambre aumentó. Verdaderamente
sentí que ya no quería vivir si no podía tener ese poder para su servicio”.
Poco tiempo después, un día él estaba caminando por Wall Street en Nueva York,
y en medio de la actividad y bullicio de esa céntrica calle, su oración fue
contestada; el poder de Dios cayó sobre él mientras caminaba, al grado que tuvo
que correr a la casa de un amigo y pedirle si le podía permitir estar a solas en una
habitación. En esa habitación permaneció por horas; y el Espíritu Santo vino sobre
él llenando su alma con tanto gozo que por fin tuvo que pedirle a Dios que
detuviera Su mano, para que no muriera en ese instante por el gozo tan
desbordante. Salió de ese lugar con el poder del Espíritu Santo sobre él, y a partir
de allí comenzó sus poderosas reuniones evangelísticas.
¿Ven cómo El vino en Pentecostés? No es carnal orar que Él venga otra vez y que
el lugar tiemble. Creo que el Pentecostés sólo fue un día para servirnos de
muestra. Creo que la Iglesia cometió este lamentable error de decir que
Pentecostés sólo fue un milagro que no volverá a repetirse”.
En segundo lugar, Dios soplaría, en el momento más oscuro, aliento de vida en los
corazones de unos pocos individuos. Empezarían a buscar Su rostro, y resultaría
un avivamiento de oración. Luego el Espíritu Santo mostraría a los hombres y
mujeres la necesidad vital de la dependencia absoluta en Dios.
Dios salvó a Gran Bretaña del caos social y político en el siglo XVIII por medio de
un avivamiento espiritual. Él usó a dos jóvenes predicadores y evangelistas
dedicados a su causa para el bien de la nación y para su gloria. Ellos fueron Jorge
Whitefield y el famoso Juan Wesley.
¿Por qué tal decadencia moral y social? Inglaterra había tenido su oportunidad
espiritual, pero la generación previa a Juan Wesley se había tornado cínica,
indiferente, escéptica a Dios y a la Biblia.
"El clima no era a favor de nada, pero sí en contra de todo lo sagrado y lo bueno
entre nosotros", escribió el obispo anglicano de Bristol en 1751. Otro escritor
decía: "Entre la gente culta y los dirigentes de la nación, ni uno en cien parece
actuar de acuerdo a los principios religiosos. La mayoría los descarta
enteramente, y confiesa no creer en la revelación de Dios. No es mejor la situación
entre el vulgo, particularmente en las poblaciones grandes".
"Extrañamente conmovido"
Martín Böhler, más joven que los hermanos Juan y Carlos Wesley, fue el
instrumento de Dios para ayudarlos a nacer otra vez. Böhler era alemán, del grupo
llamado "los moravos". Él estaba convencido de que los Wesley, aunque sinceros,
dedicados y sacrificados, no eran aún hijos de Dios. Martín Böhler argumentó con
ellos. Como testimonio les presentó a cuatro personas recientemente convertidos
cuya transformación era dramática y discutió las grandes doctrinas de la salvación.
Pero Juan y Carlos se resistían. Persistían en la triste y común noción de que hay
que hacer obras de caridad y amor para estar en la gracia de Dios.
Quizá Böhler nunca soñó que esos jóvenes hermanos que él llevó a los pies del
Maestro, llegarían a ser hombres de Dios que ganarían a miles y miles para Cristo.
"Soy un tizón arrebatado del fuego" -repetía Juan Wesley insistentemente- y la
llama encendida en su alma lo movilizaría para encender llamas multiplicadas en
un despertar moral y espiritual casi sin paralelos en la historia. El impacto de ese
avivamiento cambió el curso de la historia, aunque en aquel momento aún no se
percibía tal cambio. "¡Quiero reformar la nación!"
Juan Wesley fue lo que Dios quiso que fuera; primordialmente y sobre todo, un
gran evangelista. Wesley sacudió a su primera congregación inmediatamente
después de haber recibido a Cristo. El tema de su primer mensaje fue "La
salvación por fe". De esa manera, a la edad de 34 años, dio el trompetazo que
inauguró el gran avivamiento evangélico del siglo XVIII en Inglaterra y que luego
se esparció por todo el mundo conocido. ¿Necesitaba la iglesia tal renovación
espiritual? Lamentablemente sí. Los predicadores carecían de ardor y pasión por
las almas. "Sus sermones eran secos, metódicos y sin emoción. Entregaban con
calma insípida sus mecánicas composiciones", declaró un historiador. Con razón
Wesley ansiaba un avivamiento en la iglesia.
La pasión dominante
El Dr. Campbell Morgan afirma en uno de sus libros: "La indiferencia en el mundo
es mayormente el resultado de falta de pasión en el púlpito". A Whitefield y Wesley
no les faltaba pasión. Uno de los biógrafos del evangelista dice: "No bastaba
deplorar la condición de su era; el moralismo enfermizo del púlpito de aquellos
días tenía que ser reemplazado por una apasionada proclamación de la verdad
cristiana evangélica dondequiera que hombres y mujeres la escucharan, sin hacer
caso de los formalismos eclesiásticos". Y este siervo de Dios era apasionado por
los que vivían sin Cristo y sin esperanza y les predicaba la redención por la sangre
de la cruz.
Un fuego ya inextinguible
Predicar al aire libre era una novedad en aquellos tiempos. Wesley, siempre
cuidadoso de la etiqueta, el decoro y la corrección, sintió timidez ante tal
sorprendente perspectiva. Whitefield lo presentó ante una multitud y su texto
bíblico aquel primer día resultó ser profético. Comenzó con Is. 61:1-2: "El Espíritu
de Jehová el Señor está sobre mí, porque me ungió Jehová; me ha enviado para
predicar Buenas Nuevas a los abatidos". Y así fue, ya que empezó a predicar las
buenas nuevas a los pobres y así continuó durante más de 50 años,
profundamente consciente de su debilidad pero raramente incitado, a menudo bajo
tensiones pero siempre seguro sobre un fundamento firme. "El fuego se ha
encendido en la nación -clamó Whitefield- y sé que todos los demonios del infierno
no lo podrán apagar".
Con tales palabras se lanzó Wesley. Juan Telford declara: "Deliberadamente dio
sus años a la gente humilde. Pasó sus días entre los pobres. El se propuso atraer
las masas a Cristo, y a ese fin fue fiel por más de medio siglo". A los 82 años de
edad Juan Wesley pudo afirmar que el número de los que fueron llevados a Dios
por el evangelio durante el avivamiento, había sido mayor que el de cualquier
época similar después de la de los apóstoles.
El plan que delineaba Juan Wesley cada año para sus labores, era sistemático y
siempre guiado por el Espíritu Santo. Salía en viajes misioneros a través de su
nación con objetivos bien marcados y rutas detalladamente planeadas ante Dios.
"Dondequiera que vea unos mil hombres que corren hacia el infierno, los detendré
si lo puedo hacer, y como ministro de Cristo les rogaré en su nombre que se
vuelvan y se reconcilien con Dios", le respondió a un crítico. Y luego, en una nota
de 'sarcasmo santificado' para con su acusador, agregó: "Si yo no los frenara, si
dejara que uno solo cayera al pozo cuando pudiera haberlo salvado del eterno
fuego, no creo que Dios aceptaría mi ruego en aquel día final: '¡Es que, Señor, el
difunto no pertenecía a mi parroquia!'" ¿Dieron resultado tantos viajes, luchas,
ataques, burlas y violencia física a manos tanto de la chusma como también de
personas distinguidas? ¿Permanecían firmes muchos de los que se convertían en
sus campañas y reuniones masivas? Juan Wesley respondía con un resonante:
"¡Sí!" Al concluir su vida, había en Inglaterra, (sin contar Irlanda, Gales, América y
otros países) 72.000 que firmemente y fielmente caminaban en la nueva vida con
Cristo, y eran miembros activos de una congregación local.
¡Qué ritmo agotador llevaba! Wesley cubrió unos 400.000 kilómetros, distancia
semejante a 10 vueltas del globo por el ecuador, la mayor parte a caballo. Bajo
lluvias torrenciales, en los inclementes inviernos británicos con nieve y escarcha,
una tremenda potencia interna lo llevaba siempre adelante. Predicó 40.000
sermones y escribió más de 200 libros, muchos de ellos al marchar sobre su
caballo. ¡Por cierto que fue un hombre con una pasión que lo consumía por el bien
de los demás!
Compañeros de viaje
Wesley siempre viajaba acompañado por otros hermanos en la fe. De esta manera
entrenaba, capacitaba y enseñaba a los centenares de predicadores que surgieron
tras él. La mayoría eran jóvenes recién casados. Al igual que San Pablo y el Señor
Jesús en sus tres años de ministerio terrenal, trabajaban en equipo.
Repetidamente exhortaba a sus predicadores con estas palabras: "No tenéis otra
cosa que hacer sino salvar almas; por consiguiente, emplead vuestro tiempo y
gastad vuestras energías en esa obra. Lo que os debe preocupar no es el predicar
muchas veces, sino el salvar a tantas almas como os sea posible, y hacer todo lo
que esté a vuestro alcance para edificarlos en la santidad sin la cual ninguno verá
al Señor". Con tal espíritu, ¡con razón la nación fue sacudida!
El mensaje de Wesley
¿Cuál fue el gran mensaje que salvó a Inglaterra y reformó a la iglesia inglesa? La
proclamación inequívoca, persistente, apasionada y llena del Espíritu Santo de las
verdades básicas de la Biblia: el arrepentimiento y la fe en nuestro Señor
Jesucristo. También la conversión, el nuevo nacimiento en el Espíritu, controlada
por Cristo quien mora en el corazón del cristiano por la fe. Wesley enfatizaba la
santidad escritural como lo hicieran San Pedro (1 P. 1) y San Pablo (1 Ts. 4 y 5).
La santidad no era mera doctrina para él, ni su amor un mero modo de vivir; eran
el único camino a la madurez y la estabilidad cristiana.
Los métodos empleados por Juan Wesley fueron asimismo objeto de burla y
"profundísimos análisis sicológicos". Lo llamaban "vil" por predicar a los pobres en
sus barrios y cantar y predicar al aire libre en parques, esquinas y terrenos
baldíos. En una palabra, por usar métodos novedosos. Ante tales difamaciones,
Wesley respondió: "Estoy dispuesto y me someto a ser aun más vil y a ser necio
por amor a Cristo". En su libro 'Apelando a los hombres de razón y religión' escrito
en 1745 afirmó: "Yo no tenía otro fin sino éste: salvar a cuantas almas me fuera
posible".
Los nuevos convertidos y los jóvenes predicadores que querían seguir sus pisadas
necesitaban auxilio inmediato. Wesley los reunía en grupos después de predicar;
su plan de conservación demandaba una disciplina que él consideraba
indispensable y bíblica. "Cuerpo y alma hacen al hombre", -argumentaba- "el
Espíritu y la disciplina hacen al cristiano".
Dios guió a Juan Wesley a desarrollar una organización altamente detallista para
cuidar de los recién convertidos. A los 60 años, después de visitar una población
donde nada se organizó para disciplinar a los convertidos y consecuentemente
éstos se desbandaron y enfriaron, Wesley escribió: "Me convencí más que nunca
de que predicar como un apóstol, sin paralelamente unir y entrenar en los caminos
de Dios a los nuevos, es meramente dar a luz hijos para entregárselos al asesino,
o sea, al diablo". Los indisciplinados entre nosotros no tendrían cabida en una
sociedad de los tiempos de este avivamiento. Si alguno de los escritores
modernos trataran a sus hijos físicos como pretenden cuidar de los bebés
espirituales, estarían presos por negligencia criminal.
El historiador Wood afirma tras laboriosa investigación que Wesley tenía un solo
propósito con sus 'sociedades metodistas': el cuidado de las almas, el cultivo de la
vida de Dios en los recién convertidos. En su día, la Iglesia Anglicana su propia
denominación y los pastores de la misma, estaban dormidos. Nada les interesaba
la condición moral y espiritual de la comunidad. Vivían existencias materialistas y
egoístas.
Hay evidencia que Wesley, al formar estas sociedades, clases bíblicas o células,
tenía en mente despertar en la Iglesia Anglicana una sana envidia que la
reformara y movilizara. Nunca fue su intención establecer otra denominación más.
Más tarde ello resultó inevitable. "No existimos para formar una nueva secta sino
para reformar a la nación y en particular a la iglesia, y para esparcir la santidad
escritural en toda la tierra", escribió. Y agregó: "Los Metodistas deben esparcir
vida entre todas las denominaciones" y luego lacónicamente continuó "hasta que
ellos mismos se tornen una secta separada".
El mismo clamor
¡Qué visión le impartió Dios! ¡Qué poder y unción del Espíritu Santo! El y sus
discípulos fueron hombres ordinarios usados en proporción extraordinaria. Se
afirma con toda propiedad aún por historiadores no cristianos que este
avivamiento salvó a Inglaterra de una revolución sangrienta y destructiva. Gracias
a ese gran despertar espiritual y moral, años más tarde la Palabra de Dios llegó
también a países latinoamericanos. El impacto tuvo repercusiones internacionales.
La evangelización del mundo entero en nuestro día, comenzó en esas raíces
vivientes y vigorosas.
La Biblia en el libro de Habacuc 3:2 nos dice: “Oh Señor, aviva tu obra en medio
de los tiempos, en medio de los tiempos hazla conocer;” Si hay algo lo
suficientemente poderoso para cambiar una nación, es un Avivamiento. Pero qué
es:
Avivamiento revitaliza, trae autoridad, alista, entrena, llena de poder de Dios, trae
arrepentimiento, hambre por su presencia, trae fuego al corazón, pasión,
convicción, y disposición para ser usado por Dios.
Aquí trataremos de sintetizar como el Espíritu Santo se estuvo moviendo con gran
poder en diferentes lugares en el mundo desde 1700 hasta la actualidad.
Podemos señalar siete grandes avivamientos en la historia a partir de 1700;
partiremos de las fechas proporcionadas por Neil Anderson en su libro “Ríos de
Avivamiento.”
Este se llegó a conocer en 1727 en Alemania y fue la raíz del Avivamiento en Gran
Bretaña así como en E.U; hacía énfasis en predicar el evangelio. En esta época
Dios usó a hombres como John Wesley, George Whitefield, Thedore
Frelinghuysen, Johanathan Edwards, John Knox, este Avivamiento influyó por casi
5 décadas, los historiadores creen que el de Avivamiento salvo a Inglaterra de vivir
lo ocurrido a Francia en la Revolución Francesa.
En este mover de Dios, podemos ver a grandes hombres de Dios llenos del
Espíritu Santo, con manifestaciones poderosas de milagros. Dios uso a siervos
como: Jeremiah Canphier, John Alexander Dowie, Evan Roberts, Esteban Jeffrey,
María Woodworth Etter.
7. Avivamiento actual.
Dios se está moviendo en el mundo con poder y gloria como en: Estados Unidos
en la Iglesia de Asambleas de Dios de Browsville, en Pensacola Florida con el
pastor John Kilpatrick; considerada como una de las iglesias más avivadas del
mundo en estos momentos, donde la presencia de Dios es tan fuerte, que 4
millones de personas de todo el mundo han venido para estar en ese lugar
Dios está usando a grandes lideres y hombres de Dios para llevar el Avivamiento
a todo el mundo, entre ellos podemos citar a: Wes Campbell, Alberto Mottesi,
David Yonggi Cho, Luis Palau, Carlos Anacondia, Claudio Freidzon, Morris Cerulo,
Dante Gebel, John Kilpatrick, Ralph Mahoney, Cindy Jacobs, Victor y Cris
Richrads, Neil Anderson, Josué Irión, John Bevere, Benny Hinn, Cash Luna,
Ricardo Rodriguez,Joe Rosa, Larry Hill, Sergio Scataglini, etc. ¡El próximo, puedes
ser tú! Sólo, depende que le creas a Dios.
EL AVIVAMIENTO EN GALES
Evan Roberts fue uno de los jóvenes escogidos por el Espíritu Santo para ser un
canal de bendición y avivamiento sobre Gales, un pequeño principado de las Islas
Británicas, y así conmocionar al mundo de su tiempo.
Cuando tenía 13 años empezó a ir a las reuniones de oración, y por trece años no
se perdió ni una de ellas, hasta que el Señor lo visitó.
Dios le dio visiones y sueños. Uno de ellos era que 100.000 personas se volverían
al Señor Jesús en arrepentimiento. En otra ocasión vería la boca del infierno
tragando a miles, por lo cual oró al Señor pidiendo que por un año tapara la boca
del infierno. Por los registros históricos tan impactantes en ese año, creo que Dios
se lo concedió. Pero lo mejor de esto fue la visita que el Señor Jesús le hizo en
varias noches: la gente veía luz en su rostro y temblor en su cuerpo por esta
visitación.
Según puedo analizar, Evan Roberts concibió del Espíritu Santo. Tuvo tal
conocimiento de la Tercera Persona de la Trinidad que grandes personajes de su
tiempo viajaban para verlo y oírlo predicar. No había ninguna organización:
simplemente había dirección del Espíritu. Parecía que Él había venido sobre Gales
y había tomado el control de ese país. Las reuniones duraban cuatro o cinco
horas. La presencia de Dios era sublime y los grupos de oración estaban llenos,
así como las iglesias.
Dan Roberts, hermano de Evan, tenía solo 20 años, así como Sidney Evans,
amigo de ellos -quien a la postre fue su cuñado al casarse con su hermana Mary.
Mary formaba parte del grupo de «cantoras», las que tenían entre 18 y 22 años,
usadas grandemente en cánticos nuevos e instantáneos, del Espíritu.
EMBAJADORES:JOVENES Y NIÑOS
Los periódicos locales anunciaban que toda la comarca parecía estar bajo una
fuerza espiritual extraña, y que no había indicios de que esta la soltara.
Creo que en este avivamiento galés el Espíritu Santo liberó una de las mayores
demostraciones de poder que jamás país alguno haya experimentado. Se decía
que cuando alguien entraba a Gales y daba su primer paso sobre esa tierra, sentía
algo extraño y diferente que no podía explicar.
Evan Roberts, joven minero con escasa educación, nació el 8 de junio de 1878 en
una casa pequeña y modesta, la misma que el siglo siguiente estaría siendo
visitada por miles de turistas y cristianos fervientes, quienes, curiosos, querían ver
dónde los cielos fueron abiertos algún día y por si, tal vez, pudieran probar un
poco del cielo que empezó en esa humilde casa.
En ese momento el Espíritu Santo intervino sobre él de una forma tan penetrante
que desde esa noche la cruz y la salvación de las almas serían el principal
enfoque del avivamiento.
Después de esto, en una noche tuvo una visión de todo Gales siendo levantado al
Cielo. Entonces, comentando a su amigo Sidney, dijo:
«Vamos a ver el avivamiento más poderoso que Gales
haya conocido, y el Espíritu Santo está por venir ahora.
Debemos estar listos; debemos ir por todo el país, predicando.
Entonces, en ese momento le dijo, gritando:
El motor que impulsó este avivamiento no fue una doctrina o una organización o
personalidad humana, sino el Espíritu Santo, moviendo sus poderosas alas y
excitando su nidada en Gales.
MANIFESTACIONES
Al escribir esto de Gales me emociono mucho, porque pienso que en estos últimos
años hemos saboreado parte de lo que aquí describo. ¿Cuál ha sido la diferencia
en nuestro tiempo de visitación del Espíritu Santo en nosotros? La diferencia
radica en que Gales supo, admitió y creyó que era el tiempo de su visitación;
entonces los galeses la recibieron.
Hoy tenemos manifestaciones fuertes del Espíritu Santo pero no las creemos, ni
las admitimos. Creo que el Espíritu Santo tiene aún mucho trabajo por delante.
Cada vez que leo la historia del avivamiento en Gales, mi espíritu dice: "Sí, Señor;
viene este tiempo en que tú intervendrás, pasando por encima de todo patrón o
estructura y solo tú puedes cambiar la sociedad y el corazón del hombre."
He tenido el privilegio de poder ver algunas manifestaciones del Espíritu Santo en
este tiempo, las que se asemejan a lo acontecido en Gales, y me atrevo a decir
que la máxima opositora del mover del Espíritu Santo es la gente cristiana. No
tanto el inconverso, porque cuando este cae al piso, tocado por el poder del
Espíritu Santo que lo redarguye y lo trae a los pies de Cristo, se levanta con un
tremendo gozo de Dios. Me ha tocado ver gente que viene a Cristo y, junto con
eso, recibe el gozo del Señor o el vino del Espíritu Santo, cayendo fulminada o con
gran llanto y compungida con gran quebranto.
Pienso que la temperatura espiritual del siglo XX se inició y se elevó en Gales con
Evan Roberts, aumentándose aun más en Azuza, y yendo por todo el mundo
hasta el día de hoy.
Al finalizar este siglo y comenzar inclusive un nuevo milenio, creo que la Iglesia,
en su toda generalidad, está otra vez "baja de grados", espiritualmente hablando,
con un poco de fuego por allí y otro por allá. ¡Qué bueno que el Espíritu Santo está
poniendo más fuego cada año que pasa! Según creo, a principios del siglo XXI
Dios conmoverá otra vez no sólo una parte de la Tierra con su Espíritu, sino que
todo el Planeta conocerá de un derramamiento sin precedentes del Espíritu Santo.
¡DOBLEGANOS, SEÑOR!
Querido amigo, este mover sobrenatural de Dios está aquí ahora. No es que Dios
no lo pueda hacer más adelante, pero pudiera ser que te pase por encima o que
esta ola te golpee y salgas revolcado por ella, haciéndote ella misma alejar.
Hoy el Espíritu Santo nos está dando más sensibilidad, más discernimiento a su
mover, para que cuando Él realice algún movimiento, inmediatamente lo podamos
captar y meternos en su río.
El Espíritu sólo puede dar a luz lo del Espíritu, y hoy está sucediendo. Muchos
Rroberts» se levantarán con dolores de parto, dando a luz las cosas del Espíritu.
Atte
Anhela su presencia
Aquí en el testimonio de David hay una promesa maravillosa para usted y para mí.
Podemos estar seguros que Satanás quiere destruirnos, molestarnos, y derribar a
todo al que ama al Señor. El enemigo hará todo lo que está en su poder para
arrastrarnos a su pozo de desesperación, confusión, culpa y condenación.
¿Tiene usted algunos “perseguidores” satánicos que están viniendo contra usted
ahora mismo?
¿Tentaciones abrumadoras? ¿Pruebas? ¿Cargas financieras? ¿Problemas
matrimoniales o familiares?
Lea el Salmo 68:1-4 y vea lo que Dios ha prometido hacer por usted si tan sólo
confía en él. Usted puede proclamar estos cuatro versos ahora y durante todo el
año. Memorice estos versos, párese firme en ellos, y Dios hará huir a sus
enemigos.
En el libro de Judas, leemos de un día futuro tan malvado y vil, y que Dios vendrá
con sus santas decenas de millares para hacer juicio por todas las obras impías.
Judas profetizó que los hombres se entregarán a sus deseos sucios de lujuria,
siendo burladores, sensuales, “que espuman su propia vergüenza” (Judas 13).
Esto se refiere a una sociedad de fornicadores corruptos que van “en pos de vicios
contra naturaleza”, lo cual se refiere a la rampante homosexualidad.
Hoy día, América no es la única nación que ha quitado los límites morales. El
derrumbe moral está en todo el mundo, y se está volviendo muy evidente que
Satanás está vomitando las abominaciones del infierno sobre la humanidad. Este
es un tiempo, se nos advierte en las Escrituras, cuando el diablo tratará de seducir
a los elegidos de Dios.
Judas miró hacia adelante, en esos tiempos viles, malvados, y vio algo más, algo
muy inspirante y milagroso. En medio de toda la inmoralidad y degradación en
aumento, él vio un pueblo “llamados, santificados en Dios Padre, y guardados en
Jesucristo” (Judas 1).
Que esta oración del apóstol Pablo sea su oración y mía en los tiempos malos y
turbulentos que tenemos por delante: “El Señor me librará de toda obra mala, y me
preservará para su reino celestial” (2 Timoteo 4:18).
Avivamientos
La vida cristiana de la gente raras veces va más allá del nivel espiritual del pastor.
Es imprescindible que el alma del pastor esté en el Espíritu – humilde y ferviente.
Gritería, entusiasmo y buena administración no pueden sustituir por la obra del
Espíritu Santo en el alma.
Tal vez se pregunta, ¿debemos comenzar una serie de reuniones cuando parece
que no hay mucho interés en las cosas espirituales? Yo digo, a mí me parece que
desde que hay reuniones con el fin de despertar interés en la templanza, o la
política, igualmente debemos tener reuniones para despertar interés en verdades
espirituales. En todo caso, el fin es el de aplicar la misma ley mental, o sea que lo
más a menudo llamamos la atención a la mente de un asunto lo más probable es
que su voluntad estará movida actuar. El Espíritu Santo obra en el alma de
conforme a las leyes mentales. Por eso, es lógico que si de continuo hablamos de
la obra de Cristo, el Espíritu Santo tiene más facultad para obrar. Desde que el
evangelio de Cristo es el tema más sublime que puede ocupar la mente de la
gente, es aun más razón por aplicar esta ley en llevar a cabo reuniones
especiales. Así podemos fijar las mentes de la gente sobre este tema.
En una serie larga de reuniones espirituales hay algunos peligros serios que el
pastor debe tratar de evitar. Hago mención de los siguientes:
Cuando estas dos cosas suceden en la vida de las personas, entonces no hay
mucho más por qué preocuparme. Entonces no me importa tanto si tienen un
programa de "construir un local" y un Instituto Bíblico y todo lo demás. Cuando
estas dos cosas suceden, lo demás ya no es tan importante. Necesitamos darnos
cuenta de que cambiar muchas de las cosas "externas" que tratamos hasta ahora,
por sí mismo lograría muy poco. Es como reordenar las "cajas" por afuera. Es
como hacer un odre nuevo, pero olvidarse del vino nuevo que debería entrar.
Entonces es tiempo para hablar sobre este VINO NUEVO de Dios. Esto es lo que
significa un verdadero avivamiento.
Algunos de Uds. ya habrán leído acerca de estos "dos secretos". Pero aun así, por
favor lea este artículo, porque voy a aplicarlos en una manera que va más allá de
lo que escribí en el pasado.
Las dos preguntas claves que trataremos en este capítulo son: 1) ¿Cómo alcanzo
un estado de avivamiento personal?, y 2) ¿Cómo llegamos de allí a un estado de
"avivamiento corporativo"?
Estas dos cosas han sido el secreto de innumerables avivamientos por todas las
épocas - y yo creo que así será nuevamente. Por eso no hay NADA más
importante para discutirlo ahora.
Puedo afirmar que toda la historia confirma las palabras de Frank Bartleman. Y
también puedo decirle que si Ud. quiere llegar a un verdadero estado "avivado",
entonces el arrepentimiento PROFUNDO es una de las claves.
Lo que encontramos a menudo es que los cristianos dejaron atrás muchos de los
pecados "obvios", tales como mentir, robar, adulterio, etc. Pero hay otras cosas en
sus vidas, de las que saben que no son correctas. El tratar con estas "otras cosas"
puede ser la clave para una intimidad mucho más grande con Dios.
¿Sabía Ud. que Dios ABORRECE todo pecado, y que si Ud. se acerca más a
Dios, entonces Ud. en su corazón aborrecerá el pecado igual que El?
Entonces seamos "prácticos" en esto. Esto es lo que Ud. necesita hacer para
tratar con estas cosas a un nivel PROFUNDO: Primero, tome un tiempo con Dios
a solas. Ud. necesita un tiempo a solas, en un lugar apartado, con El. Segundo,
pida y busque a Dios para que El "alumbre con Su luz" en el corazón de Ud. Que
El le muestre cada cosa inmunda, sea falta de perdón, lascivia, hablar de otras
personas detrás de sus espaldas, manteniendo rencor, pequeñas mentiras
"blancas", etc. Pida a Dios que El le muestre como EL SE SIENTE acerca del
pecado. Pídale que El alumbre las profundidades de su ser, y le muestre las cosas
que Ud. necesita confesar y renunciar y pedir perdón. En algunos casos, Ud.
necesitará ir adonde un hermano o una hermana para pedirle perdón o hacer
restitución. Asegúrese de que el arrepentimiento alcance el NIVEL MÁS
PROFUNDO posible. Confiese a Dios cada pecado específicamente, renuncie a
él, y pida a Dios que El le purifique. En muchas personas, son estos así llamados
"PECADOS MENORES" que les impiden avanzar.
Esta es otra cita acerca del tema, por Evan Roberts, del avivamiento en Gales:
"Primero, ¿hay algún pecado en su pasado con el cual Ud. no trató honestamente,
no lo confesó a Dios? Arrodíllese de una vez. Su pasado tiene que quedarse atrás
y ser limpiado. Segundo, ¿hay algo en su vida que es dudoso - algo de lo cual Ud.
no puede decidir si es bueno o malo? Renuncie a ello. No debe haber ni la sombra
de una nube entre Ud. y Dios. - ¿Perdonó Ud. a todos - TODOS? Si no, no espere
perdón por sus pecados..."
Note que esos cristianos fueron realmente ENSEÑADOS a "luchar" con Dios de
esta manera. ¡Y ellos simplemente fueron y lo hicieron! En los inicios del
avivamiento de Gales en 1904, Evan Roberts enseñó a los niños de un lugar
llamado Moriah que oren esta sencilla oración: "Envía el Espíritu a Moriah, por la
causa de Jesucristo." Más tarde, él desarrolló este mismo concepto para sus
reuniones generales. Fue vital que la gente clamare a Dios para que envíe Su
Espíritu sobre ellos.
Ahora, antes que Ud. pueda "luchar" con Dios en oración, Ud. necesita hacer esto:
1) Sea DESESPERADO para ver que Dios sea GLORIFICADO en la tierra; 2)
Limpie sus "manos" y su "corazón" para que pueda verdaderamente entrar a la
sala del trono de Dios; 3) Clame a Dios para que El derrame Su "Espíritu de
oración" sobre Ud; 4) Alimente Su "fuego" en su corazón, para que Ud. pueda
"agonizar" en oración ante El. 5) Al orar, sea muy específico al "luchar" con Dios
para que derrame Su Espíritu sobre USTED o sobre un grupo específico. - Todos
nosotros necesitamos esta plenitud fresca.
Si Ud. puede hacer estas cosas sencillas, entonces HOY es el día que Ud. puede
empezar a "luchar" con Dios en oración. No lo postergue. Esta podría ser la clave
para que Ud. sea transformado por un "avivamiento personal", y llegue a una
comunión mucho más profunda con Dios.
EN RESUMEN:
Entonces, mis amigos, todo lo que puedo hacer es instarles que vayan a un lugar
silencioso y se entreguen al arrepentimiento escudriñando sus corazones, y a la
oración "agonizante", hasta que Ud. experimente una verdadera VICTORIA en su
vida cristiana. Todos necesitamos ser llenos de Su Espíritu otra vez y otra vez.
Desde que tuve 17 años, puedo atribuir casi todas las victorias espirituales en mi
vida a estos dos secretos de avivamiento. Ellos realmente han revolucionado mi
vida.
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