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Introducción

El presente documento trata acerca del matrimonio y el divorcio en la República


Dominicana en un marco legal, resumiendo así los puntos más importantes a la
hora de tomar una decisión. Abarca temas tales como los requisitos para
contraer matrimonio, causas por la que puede proceder un divorcio según la ley
1306-BIS, entre otras partes.
El hecho de que el matrimonio y el divorcio estén sujetos a leyes, es con el
objetivo de regular el debido proceso mediante normas ya estudiadas y
garantizar seguridad entre los cónyuges.
El Matrimonio.
El matrimonio en la República Dominicana es un contrato civil entre un hombre
y una mujer que han accedido libremente a casarse y que están en plena
capacidad de hacerlo.
Para contraer matrimonio en la República Dominicana, los contrayentes deben
haber cumplido una edad mínima reglamentaria (16 para el hombre, 15 para la
mujer), estar legalmente solteros, y deben otorgar su libre consentimiento para
la unión.  El no cumplimiento de uno de estos requisitos puede traer como
consecuencia la invalidación del matrimonio por parte de las autoridades
dominicanas.
En adición, los extranjeros que desean contraer matrimonio en la República
Dominicana deben presentar los siguientes documentos:

 Pasaporte original y copia de la página de la información biográfica de


dicho pasaporte;

 Copias de los últimos sellos de entrada

  Prueba de la residencia dominicana (si no es residente de la Republica


Dominicana debe pagar una tarifa adicional y debe presentar su tarjeta
de turista)

 Declaración jurada ante un notario público, afirmando su soltería y


elegibilidad para casarse; la declaración jurada luego necesita ser
legalizada en las oficinas de la Procuraduría General de la República.

 Copia de su certificado de nacimiento y traducción legal del dicho.

 Si es divorciado, copia del certificado de divorcio y traducción legal de


dicho certificado;

 2 testigos (no familiares).

En adición, las leyes dominicanas requieren que se haga una publicación del
matrimonio con antelación a la celebración de la ceremonia.
Tipos de matrimonios:
Los matrimonios en la República Dominicana caen dentro de una de dos
categorías:

 Matrimonios “Civiles” son aquellos en los que las partes registran


personalmente el matrimonio con la oficina del Registro Civil
correspondiente. La persona que oficia la ceremonia es un Oficial del
Estado Civil, usualmente un Notario Público. Está a opción de la pareja
celebrar o no una ceremonia religiosa por separado.

 Matrimonios “Canónicos” son aquellos llevados a cabo por la Iglesia


Católica Apostólica Romana.  Seguido a la ceremonia, la Iglesia asume
la responsabilidad del registro del matrimonio con las oficinas
gubernamentales correspondientes.
Los matrimonios celebrados en otras denominaciones religiosas diferentes al
Catolicismo Romano son legales y permitidos.  Sin embargo, solo la Iglesia
Católica Apostólica Romana tiene la potestad de registrar los matrimonios
directamente.  En el caso de matrimonios celebrados en otras denominaciones,
ambos contrayentes deben presentarse ante el Oficial del Registro Civil para
legalizar el matrimonio.  Los detalles respecto a este procedimiento se
especifican a continuación en la sección “Matrimonios Civiles”.
Matrimonios Civiles.
El matrimonio en la República Dominicana es un contrato civil entre un hombre
y una mujer que han accedido libremente a casarse y que están en plena
capacidad de hacerlo.  Para contraer matrimonio en la República Dominicana,
el hombre y la mujer deben cumplir con los siguientes requisitos:

 Las partes deben expresar su libre consentimiento para la unión;

 Los hombres entre 16 y 18 años de edad, o las mujeres entre 15 y 18


años de edad, pueden contraer matrimonio con el consentimiento de sus
padres.  El consentimiento debe ser por escrito y notariado, a menos
que la persona que deba dar dicho consentimiento lo haga mientras
asiste a la ceremonia; y

 Los hombres menores de 16 años y las mujeres menores de 15 años no


pueden casarse, aun con el consentimiento de los padres, pero el Juez
puede otorgar una dispensa por razones atendibles.
No se puede contraer matrimonio antes de la disolución de un matrimonio
precedente.
El Oficial del Estado Civil, al momento de la celebración del matrimonio, puede
dispensar a los contrayentes de cualquiera de estos requisitos por razones
atendibles.  Dicha dispensa debe hacerse por escrito explicando sus causas y
debe hacerse constar en el certificado y acta de matrimonio.
El Oficial llevará a cabo la ceremonia en presencia de las partes involucradas, y
de los testigos requeridos.  Durante la ceremonia, el Oficial del Estado Civil les
preguntará a los contrayentes, así como a los testigos y demás personas que
autoricen el matrimonio, si se ha celebrado algún contrato entre ellos, y en caso
afirmativo, que indiquen la fecha del mismo y el nombre del Notario ante quien
se efectuó.
El acta de matrimonio deberá contener los nombres y apellidos de los
contrayentes, su consentimiento, la declaración de que han quedado unidos
por dicho vínculo y la fecha del acto.  Este acto será firmado por el funcionario
actuante, por los contrayentes y testigos, y posteriormente se procederá a la
inscripción del matrimonio en los registros del estado civil correspondiente.
El matrimonio civil se disuelve por el divorcio o por la muerte de uno de los
cónyuges.
Matrimonio Canónico.
El matrimonio canónico celebrado por un sacerdote Católico Apostólico
Romano produce los mismos efectos legales que el matrimonio civil.
Como se especificó en la parte introductoria, el párroco es responsable de
enviar una copia textual del acta de su celebración al Oficial del Estado Civil
competente dentro de los tres (3) días que siguen a la celebración de dicho
matrimonio canónico, para que éste proceda a la trascripción del mismo en los
registros civiles de lugar.  Esta obligación se mantiene aun cuando el
matrimonio civil haya precedido al canónico.
Regímenes de propiedad matrimonial.
En principio, todo matrimonio de personas domiciliadas en República
Dominicana se presume contraído bajo el régimen de comunidad legal.  Por
consiguiente, cualquier otro régimen distinto del de derecho común, deberá ser
previamente acordado por las partes y probarse su elección ante el Oficial del
Estado Civil.  La ley dominicana dispone una serie de regímenes matrimoniales
y al mismo tiempo les permite a las partes, tanto escoger entre los regímenes
existentes como modificarlos contractualmente antes de celebrar el matrimonio,
e inclusive formular su propio régimen matrimonial con sujeción a los principios
establecidos en la ley.  Cuando las partes optan por un régimen diferente al de
comunidad (como el régimen de separación, explicado en la página 4), deben
hacerlo constar por escrito y ser aprobado por oficiales del gobierno
dominicano.
Los Regímenes de comunidad
1. Comunidad Legal:  Este es el régimen de propiedad más comúnmente
utilizado en la Republica Dominicana.  Se caracteriza por la presencia de tres
rasgos esenciales:

 La existencia de tres grupos de bienes: — Los bienes comunes, los


bienes propios de la mujer, y los bienes propios del marido.
Bajo el régimen de “comunidad legal”, todos los bienes muebles y gananciales
mobiliarios, así como los bienes inmuebles adquiridos durante el matrimonio,
son propiedad común.

 El poder del marido sobre la administración de la comunidad, el cual no


puede desconocerse ni restringirse mediante ninguna cláusula ni
convenio matrimonial; y

 La existencia de garantías para la mujer frente al mal manejo de los


bienes por parte del marido, tales como la acción en separación judicial
de bienes, el beneficio de emolumento, la hipoteca legal sobre los
inmuebles del marido y, por último, la renuncia a la comunidad.
Con relación al punto (a), conviene hacer notar que los “bienes
comunes” se subdividen en “bienes ordinarios” y “bienes reservados.” 
Los bienes ordinarios ingresan a la comunidad de acuerdo con las reglas
del Código Civil.  Los bienes reservados, por su parte, son bienes
producto del trabajo personal de la mujer.  Luego del matrimonio, los
bienes reservados generalmente continúan siendo administrados por la
mujer, pero legalmente son bienes comunes de ambas partes.
2. Comunidad Reducida a los gananciales:  Bajo este sistema se modifica la
composición de los bienes comunes, excluyendo las deudas respectivas de los
cónyuges (actuales y futuras) y su mobiliario respectivo (presente y futuro).
3. Comunidad Universal:  Entran en la comunidad todos los bienes muebles e
inmuebles, presentes y futuros. Los esposos pueden igualmente acordar bajo
este régimen que a la comunidad entrarán solamente sus bienes presentes o
sus bienes futuros.
NOTA:  Es posible que los cónyuges declaren que se casan sin ninguna de las
comunidades descritas anteriormente, eligiendo su propio régimen
matrimonial.  No obstante, hacer esto no le garantiza a la mujer el derecho de
administrar sus bienes ni de percibir los frutos que estos devenguen.  Los
bienes se consideran como aportados al marido para sostener las cargas del
matrimonio.  Sin embargo, los esposos pueden incluir en su acuerdo de bienes
una cláusula que le autorice a la esposa a recibir parte de sus ingresos para su
sostenimiento y necesidades personales.
Los Regímenes de Separación
En los regímenes de separación no existen bienes comunes, sino bienes
propios de cada uno de los cónyuges sobre los cuales cada uno mantiene la
administración, disposición y el disfrute.  No obstante, la mujer no conserva el
derecho de disponer sobre sus bienes sin el consentimiento de su marido, y en
su ausencia, sin permiso judicial.
Este régimen requiere como obligación que el esposo contribuya al
sostenimiento del hogar.  Mas aun, los bienes muebles se encuentran
confundidos, haciéndose indispensable la liquidación de los mismos en caso de
disolución del matrimonio.
La mujer responde con sus bienes de las deudas contraídas por ésta antes del
matrimonio, y de las que se originen como suyas durante éste.  También de las
deudas contraídas por ella o por el marido (en caso de insolvencia del otro)
para el sostenimiento del hogar.
Por su parte, el esposo responde con sus bienes de las deudas contraídas
antes o durante el matrimonio, y de las que se originen como suyas durante
este; igualmente de las deudas contraídas por la mujer como representante de
la unión conyugal.
Una variación del régimen de separación es el régimen dotal.  En el régimen
dotal la mujer, en lugar de contribuir a las cargas del matrimonio con sus
ingresos, entrega sus bienes o algunos de ellos a su marido, quien tiene la
administración y el disfrute de los mismos.
La mujer posee, fuera de los bienes dotales, bienes que no están afectados por
las cargas del hogar, llamados “bienes parafernales”.  La mujer mantiene el
goce y la administración de sus bienes parafernales, pero no puede
enajenarlos sin la autorización del marido, o en su defecto un permiso judicial.
El Divorcio.
Es la disolución del matrimonio, mientras que, en un sentido amplio, se refiere
al proceso que tiene como intención dar término a una unión conyugal.
En la legislación dominicana, ninguno de los códigos principales en material
Civil, como lo son: El Código Civil y el Código de Procedimiento Civil, tratan
sobre el proceso de divorcio, pues el divorcio está actualmente regulado en una
ley especial.
La base legal del divorcio en la República Dominicana está establecida en la
ley 1306 del 21 de Mayo de 1937, por lo tanto es esta Ley la que contiene
todas las disposiciones concerniente los diferentes procesos de divorcios. La
citada Ley consta de 43 artículos los cuales se dividen en capítulos, en total
son siete capítulos.
Causas de divorcio.
El Art. 2, de la Ley dispones las causas por las cuales puede proceder un
divorcio, estas son:
1. El mutuo consentimiento de los esposos.
2. La incompatibilidad de caracteres justificada por hechos cuya magnitud
como causa de infelicidad de los cónyuges y de perturbación social,
suficientes para motivar el divorcio, será apreciada por los jueces.
3. La ausencia decretada por el tribunal de conformidad con las
prescripciones contenidas en el capítulo II del título IV del libro primero
del Código Civil.
El adulterio de cualquiera de los cónyuges.
4. La condenación de uno de los esposos a una pena criminal. Párrafo.-.
No podrá pedirse el divorcio por esta causa si la condenación es la
sanción de crímenes políticos.
5. Las sevicias o injurias graves cometidas por uno de los esposos
respecto del otro.
6. El abandono voluntario que uno de los esposos haga del hogar, siempre
que no regrese a él en el término de dos años. Este plazo tendrá como
punto de partida la notificación auténtica hecha al cónyuge que ha
abandonado el hogar por el otro cónyuge.
7.  La embriaguez habitual de uno de los esposos, o el uso habitual o
inmoderado de drogas estupefacientes.
El divorcio por causa determinada.
La incompatibilidad de caracteres.
De acuerdo a la Ley la Incompatibilidad de Caracteres, como causa de divorcio,
debe reunir estas condiciones:

 La infelicidad de los cónyuges: La cual no es más que las


“desavenencias conyugales.

 La Perturbación Social: La cual no es más que el hecho de que las


personas, tengan conocimiento del estado de desavenencia existente
entre los esposos, y esto pueda crear una perturbación social.
La ausencia decretada por el tribunal.

 La ausencia decretada por el Tribunal, no es más que, un proceso


especial perseguido para obtener por parte de un tribunal, del último
domicilio del ausente, un decreto, para poder declararlo como tal.
 Las condiciones exigidas por el artículo 115 del Código Civil
Dominicano, para la declaración de ausencia son:
1.- Que el ausente se hubiere ausentado.
2.- Que no se hubiere recibido noticias de su paradero.
3.- Que haya pasado un tiempo no menos de cuatro años sin que se tenga
noticias del ausente.
El adulterio de cualquiera de los cónyuges.
El Adulterio de cualquiera de los Cónyuges, es una de las causales del
divorcio, PERO el Adulterio, es muy difícil de probar y prácticamente se debe
de encontrar a su pareja, en pleno acto sexual, pues el legislador Dominicano
ha entendido que acciones como por ejemplo llamadas telefónicas, tomarse de
las manos, mensajes de texto, no necesariamente es una prueba contundente
para probar un adulterio, por lo cual esto en la práctica presenta una dificultad
de poderse probar y sustentar un Divorcio, por esta causa.
La condenación de uno de los esposos a una pena criminal
Para poder alegar esta causal la Ley establece que debe de presentarse al
tribunal una copia de la sentencia y además una certificación expedida por el
secretario del tribunal, estableciendo que la sentencia adquirió la autoridad de
la cosa irrevocablemente juzgada.
Las sevicias o injurias graves
Las Sevicias o Injurias Graves, no son más que: los malos tratos, sean
verbales o corporales.
Abandono voluntario del hogar.
Para que pueda verificarse esta causal deberá de existir:
a) Un hecho material de abandono.
b) Que el abandono sea continuo.
c) Que el abandono sea voluntario.
d) Que el otro cónyuge le notifique al que ha abandonado, en forma auténtica,
su abandono.
La embriaguez habitual o el uso habitual o inmoderado de drogas
estupefacientes.
La embriaguez habitual o el uso habitual o inmoderado de drogas
estupefacientes, es otra de las causales de Divorcio, pero la Ley 1306-bis, no
establece ningún plazo específico, y solo usa la palabra “uso habitual”, por lo
que esta habitualidad establecida en la Ley es una noción que los jueces
apreciaran por ellos mismos de manera soberana.
El mutuo consentimiento.
El divorcio por mutuo consentimiento es el más común y el que se realiza con
más frecuencia en nuestra legislación.
En el divorcio por mutuo consentimiento, como su nombre lo dice, ambas
partes deben de estar de acuerdo, pero por desgracia no basta solo con esto
para que pueda verificarse este tipo de divorcio, y este divorcio está sujeto a 4
condiciones que son:
1. El consentimiento debe ser perseverante además de mutuo. Conforme
al artículo 26 de la Ley 1306-bis, el consentimiento mutuo y
perseverante de los esposos, expresado de la manera prescrita en la
presente ley, justificará suficientemente que la vida en común le es
insoportable.
2. Dos años de matrimonio. Conforme a lo establecido en el artículo 27 de
la Ley 1306-bis, los esposos deben tener, por lo menos, dos años de
haberse casado, además de que, si los esposos tienen más de treinta
años de vida común, no pueden obtener su divorcio por su mutuo y
perseverante consentimiento.
3. Edad de los esposos. El artículo 27 de la Ley establece además que el
divorcio por mutuo consentimiento no puede solicitarse si el esposo tiene
sesenta años de edad y la mujer cincuenta.
4. Estipulaciones Auténticas. El artículo 28 de la Ley dispone la redacción
de las estipulaciones, por medio de un acto auténtico, o sea, de un
contrato que se haga ante un notario.
El acto de estipulaciones auténticas debe contener las previsiones del artículo
28 de la Ley 1306-bis, dentro de las que podemos mencionar a nivel de
ejemplo:
1. A) La formalización de un inventario de todos sus bienes tanto muebles
como inmuebles, pero si los esposos carecen de bienes, es suficiente
mencionar que no obtuvieron bienes en común durante su matrimonio.
En caso de que los esposos estén casados bajo el régimen de
separación de bienes, no es necesario redactar el inventario sino hacer
referencia a este régimen adoptado.
2. B) En caso de tener hijos menores de edad, las condiciones en virtud del
cual uno de los cónyuges se quedaría con la guarda de los hijos.
3. C) Donde residirá la esposa durante el procedimiento.
4. D) El monto acordado como pensión alimenticia, y en fin cualquier otro
acuerdo al cual puedan arribar las partes.
De manera final, como puede verse la Ley de Divorcio es de suma importancia
para la legislación dominicana, pues esta Ley establece:
– Los procedimientos del divorcio por causa determinada.
– Los procedimientos del divorcio por mutuo consentimiento.
– Las medidas provisionales a razón de un proceso de divorcio.
– Los efectos del divorcio.
– En fin, todo lo relativo al divorcio en Rep. Dom.
Procedimiento a seguir para el Divorcio.
Sin importar la causa que se presentara ante el tribunal de Primera Instancia
del Distrito Judicial en donde resida el demandado, es el Tribunal que deberá
de conocer de la Demanda.
En el caso de que el demandado no tuviere residencia conocida en el país, se
llevará el proceso por ante el Juzgado de Primera Instancia del domicilio del
demandante. En el acto de emplazamiento, que deberá de ser notificado por un
alguacil, el demandante emplazará al demandado para que comparezca a la
audiencia en la fecha y hora que haya establecido el Tribunal.
En el caso de que el demandado no asista a la audiencia, igualmente se
conocerá la audiencia y una vez terminada la misma el Tribunal ordenará la
comunicación del expediente al Ministerio Público para su dictamen a partir del
cual el juez admitirá o no el divorcio, pronunciando públicamente la sentencia.
Conclusión
República Dominicana es uno de los países del mundo donde casarse o
divorciarse se hace de forma rápida, por esta razón nos visitan a nuestro país
turistas y extranjeros de todas partes del mundo, para aprovechar el fenómeno
jurídico procesal de la flexibilidad de nuestra leyes para romper el lazo
matrimonial de forma sencilla, aligerada y expedita.
Cabe destacar que los divorcios en República Dominicana han ido
incrementando con el pasar de los años, ya que, las cifras reflejan que en el
país se produce en promedio un divorcio por cada 2.4 matrimonios. La brecha
es cada vez más estrecha, pues al 2001 la relación era un divorcio por cada 2.9
matrimonios y al 2018 bajó a uno por cada 2.0.
Los matrimonios infantiles en nuestro país es un hecho ‘casi’ común, puesto
que las estadísticas hablan por sí solas. En el 2019 se registraron
51,938 matrimonios, lo que representa un 3.7% más con respecto al año
anterior, de igual forma hubo un aumento de un 5.4% en los divorcios
registrados para ese mismo año. De hecho, datos oficiales revelan que de 2010
a 2017, hubo alrededor de 322 mil matrimonios en la República
Dominicana, de los cuales solo un poco más de 300 corresponden a
menores de 18 años.
Contraer matrimonio en edades menores de 18 años no es muy recomendable
debido a que, por lo general, no hay una estabilidad económica que pueda
sobrellevar la relación, esto sin mencionar, los temas ligados a la educación,
madures de ambas partes, responsabilidades y un sin número de factores que
podrían conllevar al divorcio.

Bibliografía

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Wikipedia. (s.f.). WIkipedia. Obtenido de Wikipedia: https://es.wikipedia.org/wiki/Divorcio

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