Si eres director de alabanza sabes muy bien que la tarea que tenemos

no es facil. Sabes muy bien que cada domingo es distinto y el trabajo que
has decidido tomar no cualquiera puede hacerlo, y por ello, te felicito.

Por otro lado, es importante entender que siempre estaremos

aprendiendo y mejorando y a veces tenemos que recordar algunas cosas
que, si bien son básicas, con la experiencia acumulada toman un
significado aun mayor.

Por eso, aqui te presento algunos tips que me han ayudado a mejorar dia
a dia en esta tarea.

1. Prepárate.
Pareciera lógico pero si algo he aprendido es que los mejores momentos
en alabanza y adoración han sido cuando estoy 200% seguro de lo que
voy a hacer allá arriba.

Necesitas memorizar las letras de las canciones, los intros, los puentes,
las transiciones entre cada parte de la canción, memorizar las letras de
las canciones, cambios de tono, finales y sobre todo, talvez se me haya
olvidado: memorizar las letras de las canciones.

También durante la semana necesitas repasar mentalmente las

transiciones entre canciones. Piensa en los temas de cada canción y
analiza cómo se conecta el mensaje de una canción con otra. Piensa y
decide de antemano cómo las vas a conectar, si vas a repetir un coro o
un puente para poder transicionar, cómo vas a manejar el espacio que
hay entre 2 canciones que tienen tonos distintos, etc.

Yo sé que al final de cuentas tu puedes llegar con todo tu ‘script’ listo un

domingo y el Espiritu Santo puede cambiarte todo el plan y termines
haciendo algo completamente distinto, pero tambien entiendo que Dios
no te va a cambiar el plan si no tienes uno preparado, me explico?

En la medida en que estés preparado vas a subir el estándar alrededor

tuyo y tu banda solita se irá cuadrando a ese nivel de preparación.
2. Aprende un poco de todos los instrumentos 
Cada instrumento es distinto. La guitarra es un instrumento
ritmico/armónico, el piano es armónico/melódico, el bajo es
rítmico/armónico pero en otro rango, la batería es rítmica, etc.

Entender los roles de cada instrumento te va a facilitar las cosas cuando

se trata de arreglar canciones. Entender, por ejemplo, que el piano no
debe darte el ritmo de la canción te va a detener de pedirle al pianista
que haga ciertas cosas que al final van a ensuciar el sonido de tu banda.

También, entender cómo funcionan los instrumentos y cómo se deben

tocar aunque no sepas tocarlos, te va a ayudar a comunicarte con tus
músicos sobre ciertos arreglos o ideas que tengas. Por ejemplo, vas a
poder pedirle al baterista que cierre el hi-hat para cierta parte de la
canción y que lo abra en otra porque entiendes para qué sirve el hi-hat.

3. Conoce a tus músicos como personas primero y

como músicos después
Todas las bandas son distintas. A veces tendrás una banda que toca
contigo todas las semanas, otras veces tu bajista será distinto cada vez o
talvez nada mas eres tu en la guitarra y la muchacha que canta.
Cualquiera sea el caso, necesitas conocerlos como personas.

Necesitas saber cosas básicas: dónde nacieron, cuándo cumplen años,

hace cuanto viven en la ciudad, desde cuando conocen a Jesús, a qué
se dedican, qué les gusta comer, etc.

La gente responde a líderes que tienen un interés genuino por ellos. En

la medida en que ganes su confianza ganarás su respeto y podrás
empezar a hablar de tener un equipo. No pienses que tienes un ‘grupo de
alabanza’, tu tienes un Equipo de Alabanza. Necesitan sentirse a gusto
contigo, necesitan confiar en ti, que entiendan que estas ahí para trabajar
con y para ellos, que te interesan sus vidas mas que sus talentos.

Después de conocerlos como personas entonces conócelos como

músicos. Reconoce su estilo e influencia musical, reconoce las limitantes
de cada uno porque la suma de las  habilidades de cada uno será el
limite musical de tu equipo de alabanza.

Por ejemplo, si sabes que tu baterista no maneja bien ritmos latinos y el

pianista no sabe lo que es un E13(b9) evita intentar tocar ‘Me Haces
Feliz’ porque no va a salir bien y vas a provocar desanimo en tu grupo.

4. Facilita el éxito
Ya que conoces a tus músicos como personas y luego como músicos.
Reconoces las limitantes técnicas de tu equipo, sabes un poquito de
cómo funciona cada instrumento, tu trabajo es facilitar las victorias de tu
equipo.

Dales herramientas, imprime charts, cifrados, dales tiempo para ensayar

bien las canciones antes de estrenarlas, invierte en monitores, solo tú
sabes como puedes hacerle la vida mas facil a tu equipo.

Elige canciones que sepas representan un desafío musical pero que

sabes son alcanzables. Por ejemplo, si he acostumbrado a mi equipo de
alabanza a tocar canciones de Hillsong que son armónica y ritmicamente
sencillas, de vez en cuando mete una de las canciones más fáciles de
Israel Houghton pero comparadas con las de Hillsong son un poco más
dificiles.

Asegúrate de establecer que sabes que es una canción un poco más

dificil pero asegurate de transmitir seguridad en que se puede sacar la
canción y establece un limite de tiempo para sacarla bien. Anunciala y
ensayala durante 2 o 3 sesiones y avisa que la van a estrenar en tal o
cual fecha. Crea una expectativa.

Un equipo se forma con los triunfos y derrotas que como equipo

experimentan. Asegurate de crear esas oportunidades de triunfar.

5. Lee
Si eres director de alabanza tienes que recordar que eres precisamente
eso: ‘Director’. Lee sobre liderazgo, lee muchos libros de direccion de
equipos, historias de entrenadores de deportes, libros de direccion de
empresas, etc.

Autores como Jack Welch, Andy Stanley, Juan Vereecken, Dante Gebel,

John Maxwell, Bill Hybels, etc.

Lo que digo ahora es una opinión personal y tómala como tal: La mayoría
de los mejores libros de liderazgo que he leido no son escritos por
autores cristianos. En esta lista, estan la mayoria cristianos.

Todos los dias es una nueva oportunidad de aprender a dirigir. Cada

domingo o sabado que estas alla arriba empiezas desde cero. Cada vez
que tomas el micrófono estas frente a frente con Dios y tu trabajo es
facilitar a la gente a que tenga un encuentro con el. Ve y hazlo. Si estas
ahi es porque Dios cree en ti que lo puedes hacer. Ve y hazlo.