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Instituto Politécnico Nacional

Escuela Superior de Ingeniería Química e


Industrias Extractivas

Departamento de Formación básica


Academia de física
Electricidad y magnetismo

Nombre de la alumna:
• Pérez Rasgado Viky

Profesora:
• Pedro Héctor Arciniega López

Trabajo de investigación:
• “Aceleradores de partículas”

Ciclo escolar:
• 21/2

Grupo:
• 1IM18

Fecha de entrega
• 15/06/2021
ÍNDICE
Definición .............................................................3
Introducción histórica...........................................3
Componentes de los aceleradores de partículas 5
Fundamentos físicos que lo conforman ...............7
Acelerador Van de Graff y su funcionamiento .....8
Principales equipos asociados con un laboratorio
de Van de Graaff .................................................8
Aplicaciones ........................................................9
Bibliografía ........................................................10
Aceleradores de partículas
Definición
Un acelerador de partículas es un dispositivo que utiliza campos
electromagnéticos para acelerar partículas cargadas a altas velocidades, y así,
hacerlas colisionar con otras partículas. De esta manera, se generan una multitud
de nuevas partículas que -generalmente- son muy inestables y duran menos de un
segundo, esto permite estudiar más a fondo las partículas que fueron desintegradas
por medio de las que fueron generadas. Hay dos tipos básicos de aceleradores de
partículas: los lineales y los circulares. El tubo de rayos catódicos de un televisor es
una forma simple de acelerador de partículas.
Los aceleradores de partículas se asemejan, en cierta forma, la acción de los rayos
cósmicos sobre la atmósfera terrestre, lo cual produce al azar una lluvia de
partículas exóticas e inestables. Sin embargo, los aceleradores prestan un entorno
mucho más controlado para estudiar estas partículas generadas, y su proceso de
desintegración.
Ese estudio de partículas, tanto inestables como estables, puede ser en un futuro
útil para el desarrollo de la medicina, la exploración espacial, tecnología electrónica,
etcétera.

Introducción histórica
Uno de los descubrimientos científicos más importantes para la humanidad fue el
ocurrido en el año de 1896 cuando el físico francés Henri Becquerel descubrió el
fenómeno conocido como radiactividad y que consiste en la propiedad que poseen
algunos átomos (tales como radio, polonio y torio) de emitir energía
espontáneamente. En estudios posteriores se determinó la naturaleza de esta
energía, consistente en la emisión de partículas y fotones, y se usaron las primeras
letras del alfabeto griego para designarlas como radiación: alfa, beta y gama. La
radiación alfa consiste de partículas monoenergéticas, con carga eléctrica positiva
y se identificaron como núcleos de helio. La energía de estas partículas se refiere a
energía cinética y estas partículas son emitidas con gran velocidad. La radiación
beta esta constituida por electrones tanto con carga positiva y negativa. Los
electrones con carga positiva se les llaman positrones. A diferencia de las alfa las
partículas beta no eran monoenergéticas y son emitidas con distribución de
energías con valor cero hasta un valor máximo. La radiación gamma no tiene carga
eléctrica y son ondas electromagnéticas, al igual que los rayos X, la luz visible, la
violeta, etc.. Como es sabido cuando esta radiación interacciona con la materia
presenta la característica de fotones.
Ernest Rutherford y sus colaboradores Marsden y Geiger en el año de 1911
utilizaron una fuente de partículas alfa como proyectiles para comprobar la teoría
sobre la estructura de la materia propuesta por Thompson, también conocida como
el modelo atómico del pastel.

En este experimento se utilizó una pequeña fuente radiactiva de radio de 7 mg, la


cual emitía partículas alfa a una razón de 6 millones de partículas por segundo. Se
colimó un haz de partículas alfa para bombardear una delgada película transparente
de oro. El experimento consistió en determinar cómo eran desviadas estas
partículas en función del ángulo θ.
Si la teoría de Thompson era correcta, se esperaba observar que la mayoría de las
partículas alfas fueran desviadas
ligeramente con respecto a la dirección de incidencia, debido a que la masa de los
proyectiles era mayor que el de las partículas constituyentes de los átomos, ya que
en esa época se consideraba que los átomos estaban constituidos solo por protones
y electrones. El resultado sorprendente que se encontró fue que una partícula alfa
de cada diez mil era rebotada a ángulos grandes. En un libro de física, Feynman
menciona una analogía para recalcar lo sorpresivo de estos resultados y dice:
"puede compararse a la sorpresa que tendría una persona que disparara balas
con un rifle a una almohada llena de plumas y encontrara que algunas de las
balas rebotaran hacia él "
La conclusión a la que llegaría el que está disparando, es que dentro de la almohada
además de plumas esta contiene objetos muy masivos tales como balas de cañón.
La única forma de explicar los resultados de los experimentos de Rutherford fue la
de suponer que la mayor parte de la masa de los átomos de oro estaba concentrada
en un pequeño volumen, al cual se le llamó el núcleo atómico y fue así lo que dio
origen al modelo nuclear de los átomos.

Es importante recalcar que el principio del procedimiento utilizado por Rutherford y


colaboradores en este experimento es el mismo que se utiliza rutinariamente en
muchos de los laboratorios equipados con modernos y complejos aceleradores de
partículas. El estudio del núcleo atómico tanto en el ámbito teórico como
experimental dio origen a una nueva rama de la ciencia llamada la física nuclear y
el estudio experimental de estos sistemas se hizo inicialmente estudiando las
colisiones de los núcleos con proyectiles producidos por fuentes radiactivas. Las
limitaciones que tuvieron los primeros físicos nucleares eran que disponían de
pocas fuentes radiactivas y también estas eran poco intensas, por lo que los
experimentos eran muy largos y tediosos. Otra limitación fue que los
experimentadores no podían seleccionar el tipo de proyectil y su energía tampoco
la podían variar adecuadamente. A pesar de todas estas limitaciones usando
fuentes radiactivas se obtuvieron los siguientes importantes resultados: a) el
descubrimiento del núcleo atómico, b) el descubrimiento del neutrón, c) se lograron
observar las primeras reacciones o transmutaciones nucleares en las cuales
intervino el hombre parcialmente, d) se determinaron algunos radios nucleares, etc.

La necesidad de disponer de instrumentos para generar proyectiles con los cuales el


experimentador pudiera controlar el tipo de partícula (protones, deuterones, alfas, etc.) así
como su energía y flujo de estos (corriente eléctrica) fue lo que originó el invento de esos
instrumentos a los cuales se les llamó aceleradores de partículas. La satisfacción de
construir el primer acelerador de partículas para bombardear núcleos y producir la primera
reacción o transmutación nucleares controlada totalmente por el hombre provocó una
carrera para lograr este objetivo entre algunos de los científicos de la primera década de
este siglo. Esta carrera duró 20 años y los ganadores fueron los ingleses Cockcroft y
Walton, quienes, en el año de 1932, fueron los primeros en construir el primer acelerador
de iones positivos, con el que generaron un haz de protones de bajas energías y lo usaron
para bombardear isótopos de litio 7Li. El resultado de este bombardeo fue producir la
primera transmutación nuclear hecha totalmente por el hombre. Por este evento Cockeroft
y Walton recibieron el premio Novel de Física en 1933. Actualmente, este experimento se
puede producir y llevar a cabo en tres horas y es uno de los experimentos didácticos en el
curso de Física Nuclear Experimental, en la Facultad de Ciencias de la UNAM.

Componentes de los aceleradores de partículas


Después de la construcción del primer acelerador, en la misma década de los 30,
se inventaron otros tipos de aceleradores tales como el ciclotrón, los aceleradores
lineales y los aceleradores tipo Van de Graaff. Debido a que los primeros
aceleradores de partículas se construyeron con el fin de estudiar experimentalmente
la estructura del núcleo atómico, por medio de colisiones las que podían originar
transmutaciones o reacciones nucleares, fue la razón por lo que al hablar de un
acelerador se asociaba automáticamente con un laboratorio de física nuclear. La
importancia de estos instrumentos de física nuclear es similar a la del telescopio en
astronomía o al microscopio en bacteriología. Actualmente el uso de los
aceleradores se ha extendido a otras áreas de investigación básica como la física
atómica "el mundo de los electrones" y en las partículas elementales. Los
aceleradores en medicina se usan tanto en los departamentos de radiología, para
destruir tumores malignos, como para producir radioisótopos que se utilizan en el
diagnóstico de enfermedades (medicina nuclear). El uso de los aceleradores en
aplicaciones tecnológicas es muy variado y el más conocido es en las industria de
los semiconductores y de la núcleo-electrónica, las cuales se usan un tipo especial
de aceleradores conocidos como “implantadores” con los que es posible producir
los "chips electrónicos", circuitos integrados, etc

El uso de aceleradores en Ciencia de Materiales ha sido, tanto para modificarlos


por la técnica de "implantación de iones" como para su caracterización elemental
a través de Técnicas de Análisis de Origen Nuclear (retrodispersión de
iones,reacciones nucleares, fluorescencia de rayos x, etc.).

Los parámetros más importantes que caracterizan a un acelerador son: el tipo


de partículas que pueden acelerar, el flujo o número de estas y su energía cinética.
El número de partículas que produce un acelerador es relativamente fácil de medir
ya que el haz de partículas da origen a una corriente eléctrica y su intensidad se
expresa en amperios o submúltiplos de esta unidad. Un acelerador que produce un
haz de baja corriente, por ejemplo, de un microamperio, equivale a un flujo de
6.2x1012 partículas/seg, lo cual da una idea del gran número de partículas si se
compara con las producidas por fuentes radiactivas.
Los aceleradores son instrumentos relativamente complejos y su diseño y
construcción requiere de alta tecnología e intervienen muchos campos de la
ingeniería. Una forma de clasificar los aceleradores es por la energía de los
proyectiles y los de alta energía o superaceleradorores están instalados, por
ejemplo en algunos laboratorios nacionales de los EUA, tal como, en Los Alamos,
BrookHaven, FermiLab y en Europa en el CERN.

Elementos básicos son:


1)Fuente de voltaje
2)Fuente de iones (en el
esquema es un filamento)
3)Electrodos
El principio de funcionamiento del cualquier tipo de acelerador se basa en la
interacción de los campos eléctricos producidos por fuentes de voltaje sobre la
carga eléctrica de las -partículas generadas en la fuente de iones y esta es la razón
por la que no se pueden acelerar partículas neutras.

Fundamentos físicos que lo conforman


Ecuaciones de Lorentz
Todos los aceleradores se rigen por las ecuaciones básicas
del electromagnetismo desarrolladas por Maxwell. Sin embargo, existe una
ecuación muy sencilla que sirve para definir las fuerzas que actúan en cada tipo de
acelerador. Esta es la ecuación o ecuaciones (cuando se usan de forma separada)
de Lorentz. La ecuación puede escribirse de forma básica como:

Donde:
𝐹⃗ =Es fuerza que sufre la partícula cargada dentro del campo electromagnético
𝑞 =Es la carga de la partícula cargada (-1
para el electrón +1 para el positrón, y
mayores para núcleos pesados)
𝐸⃗⃗ =Es el valor del campo eléctrico
𝐵⃗⃗ =El campo magnético
𝑣⃗ =La velocidad de la partícula

La ecuación se traduce en que la partícula


recibe una aceleración que es proporcional a
su carga e inversamente proporcional a su
masa. Además, los campos eléctricos empujan a la partícula en la dirección del
movimiento (el sentido dependerá del signo de la carga y del sentido del propio
campo eléctrico), mientras que los campos magnéticos curvan la trayectoria de la
partícula (solo cuando el campo magnético es perpendicular a la trayectoria),
empujándola hacia el centro de una circunferencia cuyo radio dependerá de la
magnitud del campo magnético, de la velocidad que posea la partícula en ese
momento y de su carga y masa.

En resumen, los campos eléctricos aportan cambios en el módulo de la velocidad


de la partícula, acelerándola o desacelerándola, mientras que los campos
magnéticos la hacen describir trayectorias curvas sin modificar su módulo (esto no
es exactamente así, ya que las partículas perderán energía por la radiación
sincrotrón, pero sirve como primera aproximación)
Acelerador Van de Graff y su funcionamiento

El generador de Van de Graaff, es un aparato electrostático creado por Robert Van


de Graaff y que utiliza una cinta móvil para acumular grandes cantidades de carga
eléctrica en el interior de una esfera metálica hueca.
Ahora bien se describen brevemente los principios de operación de los aceleradores
tipo VDG, los cuales se pueden dividir en:
a) Generación de alto voltaje V.
b) La producción de iones
c) Aceleración de iones positivos.
Las componentes de todos los aceleradores VDG son esencialmente las mismas y
para hacer una presentación de estas, en la figura 7 se muestra un esquema de las
partes que constituyen un acelerador como el VDG de 0.7 MV

Principales equipos asociados con un laboratorio de Van


de Graaff
Los componentes principales del laboratorio del acelerador VDG de 0.7 MV del
Instituto de Física, se muestran esquemáticamente en la figura 6. La mayoría de las
componentes son análogas a las del laboratorio de 5.5 MV, en cambio si hay algunas
diferencias con respecto al acelerador de electrones de 2 MV. Estas componentes son:
a) Acelerador de partículas.
b) Líneas o tuberías de acero evacuadas para transporte del haz.
c) Sistema de vacío (Bombas mecánicas y de difusión o turbomolecular, o bomba criogénica
etc.).
d) Electroimán selector de energía del haz.
e) Rejillas aisladas eléctricamente para regulación de la energía del haz.
f) Sistema de estabilización electrónica de alto voltaje.
g) Lentes eléctricas o magnéticas (dipolos o cuadrupolos) para enfocar el haz en el blanco.
h) Cámara de blancos o de experimentación.
i) Jaula de Faraday para integrar la corriente del haz.
j) Detectores de partículas.
k) Electrónica modular de pulsos eléctricos asociada a los detectores.
l) Analizador multicanal de altura de pulsos y la computadora asociada con la adquisición
de datos.
j) Detectores de partículas.
k) Electrónica modular de pulsos eléctricos asociada a los detectores.
l) Analizador multicanal de altura de pulsos y la computadora asociada con la adquisición
de datos

Aplicaciones
Las principales aplicaciones de los aceleradores de partículas en medicina e
industria es el tema de la conferencia que la directora del sincrotrón ALBA de
Barcelona, Caterina Biscari, ofrece en el Aula Magna del Centro Cultural La Nau de
la Universitat de València, el martes 8 de abril a las 19 horas, dentro del ciclo
organizado por el Instituto de Física Corpuscular (IFIC, CSIC-UV) con motivo de la
celebración en Valencia de la 37 International Conference on High Energy Physics
(ICHEP). El acto será retransmitido por MediaUni

El desarrollo de los aceleradores de partículas ha sido impulsado por la física de


altas energías en su búsqueda de instrumentos más potentes y precisos para
investigar la estructura de la materia. Así, se ha desarrollado la capacidad de
obtener haces de partículas y de fotones de energías y características específicas,
capaces de interaccionar con la materia y sondearla en profundidad.

El Gran Colisionador de Hadrones (LHC) es quizá el ejemplo más conocido de un


acelerador de partículas, el mayor y más potente que existe actualmente en el
mundo. Operado por el laboratorio europeo de física de partículas (CERN), permitió
el descubrimiento de una nueva partícula elemental, el bosón de Higgs, que revela
un nuevo campo de fuerzas en la Naturaleza que explicaría el origen de la masa en
el Universo. Unos 200 científicos y técnicos españoles participan en sus cuatro
principales experimentos, entre ellos 40 del Instituto de Física Corpuscular en el
experimento ATLAS.

Sin embargo, la mayor parte de los aceleradores de partículas se usan hoy día en
industria y medicina, como por ejemplo en la producción de radioisótopos y en la
radioterapia. Bajo el título “Aceleradores, máquinas para servir y descubrir”, la
conferencia de Biscari ofrecerá una panorámica sobre los proyectos actuales más
importantes en física de altas energías, junto con una breve descripción de las
aplicaciones más interesantes de los aceleradores.
Caterina Biscari (Modica, Italia, 1957) es licenciada en Ciencias Físicas por la
Universidad Complutense de Madrid y Doctora cum laude en Física en la Università
degli Studi de Nápoles. Desde 2012 es Directora de la Fuente de Luz de Sincrotrón
de 3ª generación ALBA, en Barcelona, que empezó a operar en 2012. Ha
desarrollado su experiencia profesional en el campo de la física de aceleradores.
Tras un período de tres años trabajando en la División de Protón-Sincrotrón del
CERN, ha trabajado desde 1985 hasta el 2012 en el Laboratori Nazionali di Frascati.

Biscari ha participado en el diseño, construcción, puesta a punto y operación de


diferentes aceleradores de partículas, como el colisionador electrón-positrón
DAFNE (Frascati) o el CTF3 en el CERN. También ha participado en la instalación
italiana de terapia del cáncer con hadrones CNAO (Pavia). Es fellow de la European
Physical Society (EPS) y miembro de su comité ejecutivo.
En la medicina nuclear, por ejemplo, se usan los aceleradores de partículas para
producir radioisótopos (átomos con núcleos inestables) de varios elementos
químicos. Las partículas son enfocadas en haces y disparadas sobre los tumores
de cáncer, causando estragos en el sistema de autorreparación de su ADN, el cual
es especialmente vulnerable a la radiación.
La terapia de protones viene cobrando popularidad porque a diferencia de los
fotones en los rayos X, los protones depositan su mayor energía al final del camino
y mueren dentro del tumor, causando menos daño en los tejidos sanos que yacen
a lo largo de la trayectoria. Se usa para tratar tumores oculares, de próstata, de la
base del cerebro y de la columna, entre otros. La terapia de electrones se prefiere
para tumores superficiales como cáncer de la piel, mientras que la de neutrones
rápidos se ha aplicado con éxito contra tumores de las glándulas salivares.

Bibliografía
• Antón, Juan Luis; Andrés, Dulce Mª; Barrio, Javier (2009-05). Física 2º Bachillerato.
Editex
• Fernández-Vidal, Sonia (1 de julio de 2016). La puerta de los tres cerrojos. Editorial
Océano
• Dr. EDUARDO ANDRADE. (2020). ACELERADORES DE PARTICULAS. Nucleares
UNAM. http://www.nucleares.unam.mx/~bijker/emfn/Andrade.pdf
• IFIC. (2017, 21 septiembre). Las aplicaciones de los aceleradores de partículas, a
debate en La Nau. Instituto de Física Corpuscular.
https://webific.ific.uv.es/web/content/las-aplicaciones-de-los-aceleradores-de-
part%C3%ADculas-debate-en-la-nau
• Ángela Posada-Swafford. (2018, 29 mayo). Partículas prácticas para un mundo
acelerado. Todo es ciencia. https://todoesciencia.minciencias.gov.co/aceleradores-
de-particulas

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