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UNIVERSIDAD MAYOR DE SAN ANDRES

FACULTAD DE MEDICINA, ENFERMERIA, NUTRICION Y TECNOLOGIA MEDICA


CARRERA DE NUTRICION Y DIETETICA
METODOLOGIA DE LA INVESTIGACION

UNIV.: JUAN VICTOR FALCON LIMA

HABITOS ALIMENTARIOS
(Resumen)

Toda persona adulta tiene costumbres que le fueron enseñados en su niñez, pues no se deja de
lado las costumbres alimentarias, aunque también influyen muchos factores como:

Cultura.- en las comunidades tienen diferentes costumbres alimentarias que les van inculcando a
sus niños esto se puede en los rituales, fiestas, religión están relacionados con su alimentación.

Economía.- cada familia depende de la economía que tiene, si tiene un buen nivel económico
adquirida productos de buena calidad y más al contrario los no tienen dinero obtendrán alimentos de
muy bajo costo y de menor calidad y esto influye mucho en un buen habito alimentario

Higiene.- al consumir cualquier alimento se debe lavar siempre las manos y lavar el alimento así se
puede evitar enfermedades.
El cuerpo necesita nutrientes para su funcionamiento como los carbohidratos, lípidos, proteínas,
minerales y vitaminas y es por eso que se debe conocer muy bien los alimentos que se consumen,
su producción. Los procesos industriales que pasa su clasificación, que alimentos son buenos y
cuales son malos etc. Estos conocimientos también es parte de un buen hábito alimentario.
En el caso del país de Uruguay la alimentación que tienen ellos tiene que ver mucho con su historia,
ya que eran grandes productores de bovinos, es por tal razón que consumen mucha carne, vale
mencionar que uno de sus platos es el asado acompañado de ensaladas, entonces ellos adquirieron
una costumbre que hasta ahora no se pierde.
Tener un buen habito alimentario mejora la calidad de vida hasta se puede prevenir y curar
enfermedades.
HABITOS ALIMENTARIOS
Introducción
El aprendizaje de los hábitos alimentarios está condicionado por numerosas influencias procedentes, sobre
todo de la familia (factores sociales, económicos y culturales), del ámbito escolar y a través de la publicidad.
En un principio, la familia desempeña un papel fundamental en la configuración del patrón alimentario del
niño, sin embargo, al alcanzar la adolescencia, el papel de la familia pierde relevancia y el grupo de amigos y
las referencias sociales se convierten en condicionantes claves de la dieta del joven adolescente. Esta etapa
es, por tanto, especialmente vulnerable a la influencia de ciertos patrones estéticos que pueden conducir a
alteraciones en la alimentación y como consecuencia de ello a la aparición de deficiencias nutricionales. Suele
observarse una falta de diversificación de la dieta, abuso de dietas de cafetería y una importante influencia de
factores externos sobre la conducta alimentaria. Además, modificar estos patrones alimentarios en la edad
adulta es una tarea complicada.
El nivel de conocimiento en temas relacionados con alimentación y nutrición es un importante determinante de
los hábitos de consumo alimentario a nivel individual. Es lógico pensar que cuanto mayor sea la formación en
nutrición del individuo, mejores serán sus hábitos alimentarios. Sin embargo, a medida que el individuo
adquiere autonomía para decidir comidas y horarios, los factores sociales, culturales y económicos, además
de las preferencias alimentarias, van a contribuir al establecimiento y al cambio de un nuevo patrón de
consumo alimentario de manera importante.
La adquisición de los conocimientos se considera positiva, en la medida que repercute y refuerza la práctica
alimentaria correcta mediante la creación de buenas actitudes hacia la alimentación saludable. Sin embargo,
no es suficiente que la información sea correcta, es necesario también que se produzca la modificación o
abandono de estos hábitos alimentarios insanos y erróneos, para poder conseguir una dieta sana y
equilibrada.
Desarrollo del tema
El cuerpo humano necesita de varios elementos para que pueda funcionar a la perfección, las vitaminas,
minerales, carbohidratos, proteínas y el agua, sin estos componentes el organismo no tendría un buen
funcionamiento, por esta razón es fundamental conocer la importancia de los mismos y entender que con la
falta de esto no habría un buen desarrollo intelectual y corporal del individuo.
La población mundial inicialmente lleva un ritmo de crecimiento lento, donde los habitantes inicialmente
contaban con suficientes alimentos para cubrir sus demandas alimenticias. Sin embargo, con el paso de las
décadas, las revoluciones y el desarrollo de la tecnología, este crecimiento empezó a ser cada vez mayor y a
darse con mas rapidez; situación que desencadenó un aumento en la demanda de alimentos, la cual, a pesar
de que ha crecido la producción y el suministro de alimentos a escala mundial no se ha logrado cubrir debido
a una distribución inequitativa, y sobre todo las características propias de cada país, ya que el clima, la
economía, la salud y la educación influyen en la condiciones de producción, ventas, preparación y
conservación de los productos alimenticios. Afectando así directamente la calidad y cantidad de los mismos.

Factores que inciden en los hábitos alimentarios:

Cultura:
Las personas miembros de grupos o comunidades culturalmente diferentes adoptan reglas y normas propias
de los grupos donde las pautas de la alimentación no están exentas de las mismas, por ejemplo lo que se
consume, como se cultiva, la forma de elaboración, la conservación y el manejo, y las ceremonias están
regidas por las culturas.
Cada sociedad decide que come o no come; además, todos los acontecimientos religiosos, rituales, sociales,
casamientos, bautismos, están relacionadas con la comida.

Economía:
El nivel económico de una familia o comunidad es también un factor que influye en el cambio de los hábitos
alimentarios. El hecho que la familia posea mayor cantidad de dinero, facilita la compra de ciertos alimentos a
los que no se tiene acceso sin recursos monetarios y viceversa, el hecho de no tener dinero obliga a adquirir
alimentos de menor costo o calidad.
El consumo de alimentos difiere mucho entre países desarrollados y en proceso de desarrollo; de manera
especial los alimentos de origen animal carne, leche y huevos.
Ambiente Natural:
El medio ambiente en el cual se desarrolla una población puede influir en la disponibilidad de los alimentos en
mayor o menor grado. El ambiente natural incide de manera notable en la agricultura. El clima y los cultivos
de temporada tienen influencia en las costumbres alimentarias y de manera especial en lugares donde los
métodos de preservación y almacenamiento no se encuentran muy desarrollados.

Seguridad Alimentaria:
Se habla de seguridad alimentaria cuando todas las personas tienen acceso material y económico a
suficientes alimentos, inocuos y nutritivos para satisfacer sus necesidades alimentarias nutricionales y sus
preferencias en cuanto a alimentos, a fin de llevar una vida activa y sana.
Hábitos alimentarios en Uruguay

Los hábitos alimentarios son parte de las características culturales de una región, país o zona específica,
cada lugar tiene una cultura alimenticia que vienen arrastrando desde hace mucho tiempo, cada sociedad
decide que quiere consumir y que no. La adquisición de hábitos alimentarios por parte de una comunidad o
región depende de varios factores que son primordiales para la adopción de tal o cual hábito como lo son la
cultura, el nivel económico y el medio natural.
En el consumo de alimentos influyen varios factores como el nivel de ingreso, el tamaño de las familias, la
educación, los hábitos alimentarios entre otros. El hábito alimentario está compuesto por las costumbres
alimentarias, las creencias y los conocimientos, los cuales reflejan el comportamiento de las familias ante los
alimentos. En síntesis, refleja la cultura alimentaria.
Los movimientos migratorios de grupos personas, mueven además costumbres, idiomas, fiestas, religiosidad
todas inciden directamente sobre los hábitos alimentarios.
Un factor decisivo en el mantenimiento y arraigo de los hábitos alimentarios en las familias es la madre. La
madre, en la mayoría de las culturas es la que se encuentra directamente ligada a la producción y
reproducción de alimentos para la familia.
Un poco de historia
La historia de la humanidad abunda en ejemplos de hábitos culturales implantados. Los dos platos
típicamente italianos, en verdad, no le pertenecen. Las pastas tienen su origen en China y la pizza tiene al
tomate, una planta americana (desconocida para Europa antes del siglo XV) como su ingrediente principal. La
base de la dieta británica y de los Países Bajos es la papa, una planta americana que cuando escaseó en
Irlanda provocó una gran inmigración de irlandeses a Estados Unidos. El caso de las vacas es similar. Los
grandes bovinos que hoy pueblan el territorio uruguayo, la pampa argentina y buena parte de Australia y
Sudáfrica son originarios de las praderas europeas. El territorio que ocupa Uruguay carece de metales
preciosos, razón por la que no le interesó al imperio español sino hasta el siglo XVII. La cosa empezó a
cambiar cuando se dieron cuenta que si Uruguay no tenía oro, podía tener vacas.
Fue Hernando Arias de Saavedra, más conocido como Hernadarias, el visionario que pobló la entonces
Banda Oriental con ganado. La primera introducción de vacas al Uruguay ocurrió en 1611, aunque hubo una
posterior y más importante en 1617 de 100 vaquillonas y algunos toros. Años después, en 1634, se
introdujeron otras cinco mil cabezas de ganado en el territorio uruguayo aún despoblado (Montevideo se
fundaría recién en 1726).
Durante gran parte de su historia, Uruguay fue una estancia ganadera, sólo habitada por unos pocos indios
charrúas. El hombre blanco pisaba suelo uruguayo de tanto en tanto, cuando cruzaba desde Argentina para
realizar rodeos y cuerear a miles de vacunos, desaprovechando todo el resto del animal. Con el paso de los
años, Uruguay se fue poblando de gauchos, hombres que andaban solos y a caballo, que cuando tenían
hambre, mataban una ternera, la asaban y el resto quedaba para los perros cimarrones. El hábito de la carne
asada, entonces, está en las raíces mismas de los uruguayos.
El asado
El asado es el plato típico de los uruguayos. Es tradicional que los domingos se reúnan familiares y amigos en
torno a una parrilla, para devorar kilos y kilos de asado. Con el asado se bebe mucho vino y se comen
grandes fuentes de ensaladas de lechuga, tomate, cebolla, zanahorias y otros vegetales que sosiegan los
ímpetus carnívoros y compensan la mala conciencia con bastantes fibras y vitaminas del otro reino
comestible. Claro que devorar un asado deja a todo comensal más que satisfecho.
¿Que consumen los Uruguayos?
En 1996 se efectuó una estimación de consumo aparente de alimentos a partir de los datos aportados por la
Encuesta de Gastos e Ingresos efectuada en el período junio 1994 - mayo 1995 en hogares urbanos de
Montevideo e Interior del país (localidades con población mayor de 10000 habitantes). En 1999-2000 se
efectuó otra estimación del consumo aparente de alimentos, estudiando población del interior urbano en
localidades de menos de 5000 habitantes, de menos de 900 habitantes y rural dispersa de todo el país.
En términos generales, en el primer estudio, se observó un suministro adecuado de alimentos en los hogares,
aunque existen segmentos de población que padecen restricciones y al mismo tiempo en los hogares con
mayor poder adquisitivo se observan consumos aparentes muy por encima de las necesidades.
Del análisis de los alimentos de consumo más frecuente se destaca en el grupo de cereales, que siendo los
hogares del interior los mayores consumidores de este rubro, consumieron en panificados y pastas,
variedades de menor costo que los hogares de Montevideo.
El consumo de carne es similar, pero en Montevideo se consume mayor cantidad de carne de ave (pollo
fundamentalmente), fiambres y embutidos.
En ambas zonas se consumen cantidades similares de leche fluida. No obstante en Montevideo se consume
mayor cantidad de yogur, leches cultivadas y quesos.
El consumo total de aceites y grasas es similar en ambas regiones geográficas.
En Montevideo se consume una mayor cantidad de frutas y verduras que en el interior. Las frutas de mayor
consumo son: cítricas, manzanas y bananas. Las verduras de mayor consumo son: acelga, ají morrón,
cebolla, espinaca, lechuga, tomate, zanahoria.
Uruguay y el consumo de carne: En asado, al horno, en guiso o con tuco, los uruguayos comimos casi 92
kilos de carne durante el año 2009 según el último informe del Instituto Nacional de Carnes.
La carne de vaca sigue siendo la preferida por los consumidores uruguayos seguida por la carne de cerdo y
pollo.
La cifra es elevada si se realiza una comparación con las manejadas por FAO en lo referente al consumo en
los países desarrollados como Estados Unidos donde se consumen 66.8 kgs por habitante y por año y en
vías de desarrollo como los asiáticos o del resto de Latinoamérica con 32.1 kilogramos de habitantes por año.
La carne bovina sigue siendo la preferida por los consumidores uruguayos, representando en el año 2009 el
63.5% del total de las carnes consumidas en el país, seguida por la carne aviar (20.7%), la porcina (9.4%) y
luego la ovina (6.3%).
Los kilogramos de carne expedidos desde las plantas de faena, los kilogramos de carne importada y el
consumo de la misma en establecimientos rurales (faena predial) son los componentes que arrojan la cifra del
consumo per cápita de carne bovina de 58.2 kgs/Hab/Año en el año 2009.
En el año 2009 se registró la cifra más alta de los últimos años en lo que refiere al consumo de carne bovina.
Los kilogramos de carne expedidos desde las plantas de faena (principal componente del consumo per
cápita), mostraron un incremento por quinto año consecutivo.
En Montevideo se observó un incremento del 6.7% en los volúmenes expedidos de carne bovina en el año
2009 con respecto al año anterior, luego de un descenso registrado en el período 2007/2008.
En el año 2009 de lo destinado al abasto, el 64% se comercializó en el interior del país y el 36.0% restante en
Montevideo. Dentro de Montevideo, las carnicerías tradicionales comercializaron el 48.3% mientras que los
supermercados el 51.7%.

Entrevista
El estudio se realizó a 10 personas durante los primeros días del corriente mes.
Los criterios de inclusión: tener entre 18 y 35 años, los mismos se encontraban en su lugar de trabajo o
domicilio.
Para la recolección de datos utilizamos un cuestionario de elaboración propia y autoadministrado, con
preguntas que recogen variables relacionadas con los hábitos alimentarios en el desayuno, almuerzo,
colaciones y cena.
También el tipo de alimentos que consumen con más frecuencia, y las variables relacionadas con los factores
que influencian su conducta alimentaria.

Resultados:
-En relación al desayuno, el 73% de las personas de nuestro estudio desayuna cada día, el 12% la mayoría
de los días, el 10,7% pocas veces y el 4,3% nunca desayuna.
El 91,1% de los hombres que desayunan cada día además toma algún alimento a media mañana.
En función del sexo, existen diferencias significativas en cuanto a la frecuencia del desayuno: a diario
desayunan más los hombres (81,6%) y no desayunan nunca las mujeres (5,4%).
En el desayuno los alimentos más frecuentados son la leche (35,2%), café, mate (34,1%) bollería (12,7%),
zumos naturales (9,1%), yogur (8,9%),
-En el almuerzo lo más consumido por las mujeres son los bocadillos (empanadas, tartas, croquetas, tortillas)
(71,9%), bollería (28,1%). En el caso de los hombres lo que mas consumen es carne, la misma la
acompañan con guarniciones: papas (38.6 %), ensalada cruda (28.7%), cereales (17.8%), ensalada cocida
(14.9%).
Otras comidas consumidas con mayor frecuencia durante el almuerzo fueron: churrasco, milanesas, guiso,
puchero, hamburguesas, asado y pastas.
-En la cena tanto hombres como mujeres las preparaciones habituales fueron café o té con leche y
sándwiches, churrasco, milanesas, guiso, puchero y sopas. El 3% de las personas entrevistadas omitieron la
cena.
Se constató un bajo consumo de hortalizas y frutas ¬más del 40% de los consultados no las ingieren
diariamente¬.

Entrevista sobre Hábitos alimentarios de los Uruguayos:

1) Sexo:
a) Hombre
b) Mujer

2) Rango de edad:
a) 18 años
b) Entre 19 y 30 años
c) Entre 31 y 35 años

3) ¿Realiza las 4 comidas en el día?


a) Siempre
b) Casi siempre
c) A veces
d) Nunca

En el caso que la respuesta no sea siempre, ¿cuales son las comidas que generalmente realiza?
• Desayuno
• Almuerzo
• Merienda
• Cena

4) En lo que se refiere a los alimentos consumidos en cualquiera de las 4 comidas principales.


a) ¿Cuál es la comida o las comidas que come con más frecuencia en el desayuno?
b) ¿Cuál es la comida o las comidas que come con más frecuencia en el almuerzo?
c) ¿Cuál es la comida o las comidas que come con más frecuencia en la merienda?
d) ¿Cuál es la comida o las comidas que come con más frecuencia en la cena?

4) ¿Cada cuánto come comida rápida por semana?


a) 1 o 2 días
b) 3 o 4 días
c) 5 o 6 días
d) Todos los días
e) No como comida rápida
5) ¿Come entre comidas?

a) Siempre
b) Casi siempre
c) A veces
d) Nunca

6) ¿Cada cuánto consume frutas u hortalizas por semana?


a) 1 o 2 días
b) 3 o 4 días
c) 5 o 6 días
d) Todos los días

7) ¿Qué toma durante el día?

8) ¿Qué clase de carne come usualmente?


Marque con una cruz la o las opciones elegidas.
 Hamburguesas congeladas  Cortes de carne  Cerdo  Pollo Pescado

9) Si come cualquier comida especial por su salud o por razones personales, anote de qué clase y cuánto
come.

10) ¿Se fija en las calorías que consume?


1. Siempre
2. Casi siempre
3. A veces
4. Nunca

Conclusiones
Los estilos de vida influyen en el estado de salud de la población, por lo cual la educación integral del hombre,
representa un componente determinante en su salud, pues influye de forma directa en su calidad de vida. Un
componente de los estilos de vida, son lo hábitos alimentarios.
El estado nutricional de un individuo está determinado por el consumo de los alimentos, que a su vez está
condicionado por factores como la disponibilidad de alimentos, la decisión de compra y por aspectos
interactuantes relacionados con el aprovechamiento biológico de los alimentos, además de factores sociales,
económicos, culturales y psicológicos. Todos estos elementos conforman las costumbres alimentarias de las
personas que son parte importante de su conducta humana, conjuntamente con las creencias, tabúes,
propagandas de radio, prensa y televisión, entre otros.
Un hábito se repite cuando es satisfactorio en algún aspecto: a los sentidos, a las emociones, a los valores y
a los principios, a la autoestima, al deseo de comodidad, a la interacción con los demás miembros del grupo
familiar, comunidad o nación y a las relaciones con el entorno físico y económico por lo cuál implica cierto
automatismo que está determinado por elementos conscientes.

Bibliografía
- Manual para la promoción de prácticas saludables de alimentación
en la población uruguaya.
-Encuesta Nacional de de los Hogares gastos e ingresos (2 0 0 5 - 2 0 0 6) realizada por el INE.
-Articulo en Internet del ECO SEMANARIO “Uruguayos comemos 92 kg de carne por año”.
-Articulo en Internet El País Digital, “Los Uruguayos se alimentan mal”.

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