Está en la página 1de 2

Factores comunes en psicoterapia.

Los factores comunes en psicoterapia son relevantes en el proceso psicoterapéutico,


debido a que contribuyen al cambio y mejoría de los pacientes. Lambert (1992, citado en
Duncan & Miller, 1999) en su investigación de revisión, concluyó que las distintas terapias
pueden alcanzar metas similares a través de procesos diferentes. De esta forma, los resultados
de su investigación reportan que el 40% de la varianza de los resultados se debe a factores
extraterapéuticos; el 30% a los factores terapéuticos comunes; el 15% a las técnicas o
modelos y, por último, el 15% al efecto placebo o esperanza del paciente. A continuación, se
detalla cada factor de la varianza:

Alianza Terapéutica: La alianza terapéutica es uno de los factores más importantes


en el cambio, ya que permite que el paciente continúe en terapia (García & Schaefer, 2015).
Según Bordin (1970, citado en Corbella & Botella, 2003), la alianza terapéutica supone el
encaje y colaboración entre el paciente y el terapeuta, que tiene tres componentes: acuerdo
en las tareas; vínculo positivo y acuerdo en los objetivos.

Las investigaciones en psicoterapia han establecido que la alianza terapéutica


aumenta cuando se trabaja en congruencia a los objetivos y metas de los pacientes, y de
acuerdo con la motivación que tienen para el cambio (Pacheco, s.f.).

Factores extraterapéuticos: Las investigaciones han dado cuenta que el paciente


es el único y más potente contribuyente en los resultados en psicoterapia (Duncan & Miller,
2001). De esta forma, los factores extraterapéuticos se refieren a las fortalezas y recursos del
paciente, a sus creencias respecto al cambio, así también, de cualquier aspecto de él y de su
ambiente que contribuya a su recuperación (Miller & Duncan, 2000).

Tallman y Bohart (citado en Hubble, Duncan & Scott Miller, 1999) refieren que es
sumamente importante demostrar interés genuino por lo que el paciente ha hecho o está
haciendo para sacar ventajas al cambio. Una forma para obtener información de esto, es
consultarle por los cambios entre-sesiones, pues esto permite que el paciente se dé cuenta de
los cambios como consecuencia de sus propios actos.

Es importante considerar en los factores extraterapéuticos, la “teoría de cambio” de


los pacientes. Esta se refiere sobre las nociones que los pacientes tienen sobre la formación
y solución de los problemas. Es así que Duncan y Moynihan (1994, citado en Duncan &
Miller, 2001) aseveran que utilizar la teoría de cambio de los pacientes facilita una relación
favorable, aumenta la participación de ellos, y por consiguiente, favorecen los resultados
positivos.

García y Schaefer (2015) plantean en su libro que, para potenciar los factores del
paciente, resulta importante explorar y validar las variaciones o excepciones de su situación
y/o problema. Por tanto, el terapeuta debe estar atento a la novedad, es decir, a los cambios
que va generando el paciente. Lo importante es que el paciente logre vincularse con los
cambios positivos, permitiéndole así reconocer sus recursos y fomentar su percepción como
agente de cambio.

Técnica y/o modelo: Queda en evidencia que ninguna psicoterapia es mejor que
otra, por lo tanto, se sugiere considerar la perspectiva que las técnicas y los modelos ayudan
a promover y potenciar otros factores comunes (extraterapéuticos, relación, expectativas)
(Hubble et al., 1999).

Efecto placebo: La investigación corrobora la importancia de la esperanza y las


expectativas de los pacientes en el proceso psicoterapéutico. Algunas formas que el terapeuta
puede facilitar la esperanza y las expectativas del cambio puede ser por medio de: formar una
alianza terapéutica, identificar metas, incorporar fortalezas de los pacientes en el tratamiento
y dar un énfasis a la posibilidad (Hubble et al., 1999). En síntesis, lo importante es que las
intervenciones sean creíbles para el paciente.

Por lo señalado en este apartado, queda en evidencia la importancia de reconocer


los factores comunes en psicoterapia, ya que estos contribuyen a entregar una terapia
adecuada a cada persona. Asimismo, de lo necesario que es identificar y que el paciente
visualice los recursos que posee, pues estos serán de utilidad dentro y fuera de la sesión,
potenciando y fomentando el cambio terapéutico.

También podría gustarte