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[Gran invalidez]

Una ayuda a personas que no pueden realizar


actividades laborales
Cuando un empleado se ve forzado a dejar su trabajo por problemas de salud,
la seguridad social le brinda una pensión por invalidez permanente, explicada como
una prestación que se distingue al empleado cuando, después de haber recibido el
tratamiento médico indicado y haber sido dado de alta por el doctor especializado,
muestra disminuciones anatómicas o funcionales severas, previsiblemente
definitivas que anulen o reduzcan su capacidad laboral.

De acuerdo a la gravedad del padecimiento, se especifican cuatro grados diversos


de incapacidad permanente, total, absoluta, parcial y gran invalidez. Siendo esta
última la más grave, ya que la persona necesita de apoyo para vivir con relativa
normalidad. Es el estado del empleado que tenga una incapacidad permanente y
como resultado de pérdidas funcionales o anatómicas, requiere la ayuda de otra
persona para las acciones más vitales de la vida, como desplazarse, vestirse, comer
o semejantes, detallado por la seguridad social.

¿En qué consiste la gran invalidez?

Se denomina gran invalidez al grado tope de incapacidad laboral que se distingue al


empleado que padece una lesión o una persona que le dificulta la realización
de cualquier tipo de trabajo o diligencia y, como resultado de pérdidas funcionales o
anatómicas, requiere la ayuda de alguien más para las acciones más vitales de la
vida como comer, bañarse, vestirse y desplazarse.

Tipos de incapacidad laboral

Antes que nada, se debe considerar que podemos reconocer dos tipos de
incapacidad laboral: La primera conocida como incapacidad laboral temporal,
distinguida como baja médica. La segunda se conoce como incapacidad laboral
permanente, puesto que es el estado del empleado que, luego de haber recibido un
tratamiento médico, muestra una lesión o enfermedad de gravedad que reduce
considerablemente o anula su capacidad laboral. Además, la incapacidad laboral
permanente, sea la causa originaria se ordenará con ajuste a los siguientes
grados:

- Incapacidad permanente temporal para el oficio habitual: Este grado de


incapacidad causa al empleado una reducción no menor al treinta y tres
por ciento en rendimiento habitual de su labor y no le dificulta ejecutar las
tareas básicas de su profesión.
- Incapacidad permanente total para la labor habitual: Es conocida por ser la
que le impide al empleado llevar a cabo su labor habitual, pero no le
dificulta realizar otra.

- Incapacidad permanente absoluta: Es conocida por se que impide por


completo que el empleado realice su labor u oficio.

Y por último, tenemos la gran invalidez. De la que estamos profundizando en el


presente artículo.

Tipo de pensión que acogerá un trabajador afectado por gran Invalidez

El empleado denominado como gran invalido podrá recibir una pensión indefinida
del cien por ciento de la base compensadora con una adición encaminada a
desembolsar a la persona encargada de su asistencia. La cuantía de dicha adición
será el resultado de añadir el cuarenta y cinco por ciento de la base mínima de
cotización actual a la hora del suceso que provoque la gran invalidez y el treinta
por ciento de la última base de cotización del empleado perteneciendo a la
eventualidad de la que proceda el estado de incapacidad permanente. Es
importante agregar, que en ningún caso puede ser menor al cuarenta y cinco
por ciento de la pensión recibida sin la adición por el empleado.

Requisitos:

Para recibir el apoyo por gran invalidez, la seguridad social establece unos
requisitos que se deben cumplir:

- Estar apuntado a la seguridad social y en estado de alta o parecido. Cuando la


incapacidad se origina por una enfermedad o accidente de trabajo, los empleados
tendrán el pleno derecho apuntados y en alta, aun cuando el trabajador haya faltado
en el cumplimientio de sus deberes.

-No haber cumplido la edad requerida para jubilarse, la cual es de sesenta y


siete o sesenta y cinco años. Si tienen treinta y ocho años, deben tener seis meses
cotizados. Exceptuando, si la incapacidad aparece después de la edad de jubilación
habitual y consistirá en una enfermedad laboral, si podría pedirse la gran invalidez.

- Tener envuelto un lapso de cotización mínimo que puede depender en función de


la edad del individuo y de la causa de la invalidez. Si la causa fue por un accidente
laboral o de una enfermedad no es obligatorio obedecer este requisito, mientras
que si la invalidez procede de un accidente no laboral o enfermedad corriente podrá
darse en diversos casos.
Dato importante:

En primer lugar, si la persona tiene menos de treinta y un años, deben tener al


menos la tercera del lapso cotizado entre la fecha que cumplió dieciséis años y la
del suceso causante de la pensión.

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