Está en la página 1de 14

TRABAJO PRÁCTICO

AVERIA GRUESA

Integrantes:
Abascal Matías
Berzaghi Rolando
Greco Fernando
Olariaga Gonzalo
Pennisi Darío
Ramírez Ramón
Segura Darío

Derecho Marítimo
Concepto de avería:

El conjunto de bienes expuesto, en la aventura marítima, esto es, el buque y las mercancías que
transporta, pueden sufrir ciertos daños o soportar determinados gastos originados por las eventualidades
de la navegación.

Dichos daños y gastos, cuando son extraordinarios, se reconocen con el nombre de averías. En el lenguaje
corriente y en el derecho comercial la palabra avería significa los daños materiales que sufre una cosa.
Según la regla de York-Amberes: "Existe un acto de avería gruesa cuando, y solamente cuando, se ha
efectuado o contraído, intencional y razonablemente, algún sacrificio o gasto extraordinario para la
Seguridad común, con el objeto de preservar de un peligro a los bienes comprometidos.

El artículo 811 de nuestro Código de Comercio considera como averías gruesas o comunes a todos los
gastos y daños que se causen deliberadamente para salvar el buque, su cargamento o ambas cosas a la
vez de un riesgo conocido y efectivo. Por su parte, la Regla A de las de York y Amberes aprecia su
existencia cuando se ha hecho o contraído, intencionada y razonablemente, cualquier sacrificio o gasto
extraordinario para la seguridad común, con el objeto de preservar de un peligro las propiedades
comprometidas en una aventura marítima conjunta Según Blas Simone, las averías gruesas o comunes
son: " las pérdidas extraordinarias (daños o gastos) que afectan a la comunidad navegante y que se
reparten entre todos los titulares de los bienes que la integran (buque, flete y carga), si fueron realizadas
razonable y voluntariamente por el capitán

Artículo 824.- Serán averías gruesas o comunes, por regla general, todos los daños y gastos que se causen
deliberadamente para salvar el buque, su cargamento, o ambas cosas a la vez, de un riesgo conocido y
efectivo, y en particular las siguientes:

1. Los efectos o metálicos invertidos en el rescate del buque del cargamento apresado por enemigos,
corsarios o piratas; y los alimentos, salarios y gastos del buque detenido mientras se hiciere el arreglo del
rescate.

2. Los efectos arrojados al mar para aligerar el buque, ya pertenezcan al cargamento, ya al Buque o a la
tripulación; y el daño que por tal acto resulte a los efectos que se conserven a bordo.

3. Los cables y palos que se corten o inutilicen, las anclas y las cadenas que se abandonen para salvar el
cargamento, el buque o ambas cosas.

4. Los gastos de alijo o trasbordo de una parte del cargamento para aligerar el buque y ponerlo en estado
de tomar puerto o rada, y el perjuicio que de ellos resulte a los efectos alijados o trasbordados.

5. El daño causado a los efectos del cargamento, por la abertura hecha en el buque para desaguarlo e
impedir que zozobre.

6. Los gastos hechos para poner a flote un buque encallado de propósito con objeto de salvarlo.

7. El daño causado en el buque que fuera necesario abrir, agujerear o romper, para salvar el cargamento.

8. Los gastos de curación y alimento de los tripulantes que hubieren sido heridos o estropeados
defendiendo o salvando el buque.

9. Los salarios de cualquier individuo de la tripulación detenido en rehenes por enemigos, corsarios o
piratas, y los gastos que cause en su prisión, hasta restituirse al buque o a su domicilio, si lo prefiriese.

Página 2
10. El salario y alimento de la tripulación del buque fletado por meses, durante el tiempo que estuviera
embargado detenido por fuerza mayor u orden del gobierno, o para reparar los daños causados en
beneficio común.

11. El menoscabo que resultare en el valor de los géneros vendidos en arribada forzosa, para reparar el
buque por causa de avería gruesa.

12. Los gastos de liquidación de la avería.

Averías “Simples o Particulares”

Según el Art. 896 del Código Civil, una Avería es Simple o Particular, cuando un hecho o acto jurídico,
un daño, o un gasto, que sufre en buque o la carga, ocurrido durante el viaje desde su comienzo hasta su
finalización, excede de lo cotidiano, de lo normal.

Es importante resaltar los siguientes puntos para la comprensión del concepto:

 Una Avería Simple debe ser Extraordinaria.


 Una Avería Simple no debe ser Intencional.
 Una Avería Simple es toda avería que no está dentro del grupo de las llamadas “Gruesas o
Comunes”
 Los Gastos Simples a cargo del Buque no deben considerarse averías ya que son comunes a la
actividad.
 Los gastos por concepto de averías simples son soportadas por el dueño del buque o quien ha
pagado el gasto.
 Si una avería Simple se demuestra que es gruesa por ejemplo por su intencionalidad, quien ha
soportado el gasto tiene derecho a recuperar el importe pagado.

El Art 1319 del Código de Comercio ejemplifica con algunos casos las Averías Simples:

1. Los daños extraordinarios del buque o del cargamento ocurrido por casos de fuerza mayor,
accidente de mar, o cualquier acontecimiento que no se pudo prever u evitar.
2. Los gastos producidos por los daños nombrados en el ejemplo anterior.
3. Los gastos de los individuos de la tripulación como indemnización, sueldos, viáticos producto de
situaciones no contempladas dentro del viaje.
4. La reparación particular de los envases y gastos hechos para conservar los efectos averiados,
teniendo en cuenta que no sea producto de una avería Gruesa.
5. El aumento del flete y gastos de carga y descarga en el caso que el buque fuese declarado
innavegable durante el viaje.
6. Cualquier daño que resulte al cargamento por descuido o falta por parte del capitán o su
tripulación.

Es importante recalcar nuevamente casos que NO son Averías sino Gastos simples a cargo del buque:

1. Los pilotajes de costas y puertos


2. Gastos de lanchas y remolques (si por falta de agua el buque no puede emprender el viaje)
3. Derechos de anclaje, visita y demás llamados del puerto
4. Fletes de Lanchas hasta poner los efectos en el muelle (si no hubiese pactado otra cosa)
5. Otro gasto común a la navegación que no sea extraordinario o eventual.

Si bien los gastos generales y ordinarios de un viaje no son recuperables por el seguro, las averías
simples se vinculan al contrato de seguro y sus cláusulas. Estas cláusulas son reguladas por la ley de
navegación, sección V, que prevé el seguro de la avería simple sobre el buque (Art.431) y el seguro de la
avería particular sobre las mercaderías (Art 437 y sigs.).

Página 3
El artículo 608 de la ley de Navegación dice que las averías simples relativas al buque se rigen por la ley
de su nacionalidad, mientras que las averías simples relativas a la carga se rigen por la ley aplicable a su
respectivo contrato de transporte o fletamento.

Avería Gruesa

Es una perdida voluntaria, ocurrida en beneficio de todos los demás intereses en riesgo y es por eso
retribuida, con la contribución de esos intereses. A diferencia de la avería particular que es fortuita y
soportada por quien la sufra, este tipo de avería se refiere a una pérdida parcial provocada con el objetivo
de salvar una perdida de los intereses en riesgo.

También podemos definirla como todo daño o gasto deliberado pagado por quienes tienen interés en el
salvamento que se ha procurado y cuando se ha hecho intencionada y razonablemente algún sacrificio o
gasto extraordinario para la seguridad común, con el objeto de preservar de un peligro.

En la avería gruesa el sacrificio debe ser voluntario e intencional, en oposición a lo accidental. El daño
ocasionado a la propiedad y el gasto incurrido deben ser razonables. Si se trata de sacrificio, debe hacerse
prudentemente; si es de gasto, debe ser justo y razonable, ya que serán admitidas como avería gruesa
cuando cumplan con los requisitos de Averia Daños o Averia Gastos.

Avería Gasto

Es el desembolso o expensa que realiza el Capitán para la salvación o seguridad común. Participa de los
mismos caracteres señalados para las averías-daños, diferenciándose de las mismas en que no importan
destrucción o daños, porque no están a riesgo en la navegación.
Actualmente este tipo de avería constituyen la modalidad más común de las averías gruesas. Se
diferencian de los gastos ordinarios para realizar la navegación en que estos son extraordinarios.

Dentro de las averías gastos podemos mencionar como ejemplo los siguientes casos comunes:

 Arribada forzosa:

Son los gastos ocasionados para la seguridad común y los debidos a su posterior partida del puerto o los
de prórroga del viaje en caso de que el buque deba hacer reparaciones en otro puerto distinto,
Incluye los gastos de remolque, trasbordo, expedición, etc. (Regla X de York-Amberes).
Según la Regla XI se incluyen entre otros: gastos de consumo de combustible desde el momento de la
desviación hasta el momento de retomar su ruta.
Gastos de remolque, amarre, traslado a tierra, impuestos y contribuciones portuarias.

 Perdida de Flete:

Se considera tal cuando esta perdida ha sido ocasionada por una avería gruesa. (Regla XV).
Las otras reglas mencionan: las deducciones del costo de las reparaciones, el valor que se computara por
la carga perdida, mercaderías no declaradas o mal declaradas, etc.

 Asistencia y salvamento

 Gastos de alijo

Avería Daño:

Son todos los deterioros, roturas, pérdidas o destrucción voluntaria realizada para la salvación o
seguridad común en un buque incluyendo sus aparejos , accesorios, y provisiones..

Página 4
Como ejemplos comunes de las averías daños podemos mencionar entre otras:

 Echazón:

Es el caso típico de avería gruesa, es el hecho de arrojar mercadería al agua para salvar el buque o el resto
de la carga ante un peligro inminente.
Deben respetar un orden: si es posible los mas pesados y de menos utilidad y valor. Comenzando siempre
por los de mas peso y de menos valor hasta la cantidad y numero que fuese absolutamente indispensable.
Tiene que ser voluntario ya que si por ejemplo debido a un temporal un oleaje arrebata una mercancía
sobre la cubierta no hay echazón , por ende no hay avería gruesa

 Extinción de incendios:

Es el daño que sufre la mercadería o el buque por el agua utilizada para extinguir un incendio o por
cualquier otro método para apagarlo, como por ejemplo, inundar el barco.
No se considera avería gruesa el daño que resulta del incendio mismo, por la acción del fuego.

 Varadura voluntaria

Es la acción de encallar el buque en forma intencional (como toda avería) por razones de seguridad
común.

 Forzamiento de máquinas

Son los daños que se producen en los motores de un buque al tratar de desencallarlo.

 Daños causados a la carga por su descarga y recarga:

Son los daños o perdidas sufridas por la carga, combustibles o artículos de consumo, durante las
operaciones de su manipuleo (remoción, almacenaje, recarga), únicamente en el caso de que el costo de
estas operaciones sea consecuencia proveniente de una avería gruesa.

Estos ejemplos son suficientes para Ilustrar el concepto de avería, aunque las Reglas de York-Amberes
mencionan otros, de más compleja compresión. A su vez, algunos de sus aspectos más sobresalientes en
cuanto a las reglas para liquidar una avería son:

No son avería los gastos ocurridos debido a la prolongación de la duración del viaje, al estar inmovilizado
el buque, como por ejemplo, una "diferencia de cotización".
Cuando el suceso que dio lugar al gasto extraordinario sea consecuencia de dolo o culpa de alguna de las
partes, se podrá reclamar al autor.
La prueba de que un gasto extraordinario sea considerado como una avería deberá ser aportada por quien
reclama.
Deben tomarse los valores del momento y lugar donde termina la aventura.
Las partes tienen la obligación de remitir al liquidador la documentación justificativa del valor de las
mercaderías.

Además de las Reglas y la ley 20.094 de Navegación, también encontramos disposiciones reglamentarias
emergentes de esta ley, que conforman un verdadero derecho administrativo de la navegación en sus
distintas formas, ya sea marítima, fluvial o lacustre.
Finalmente otra fuente de legislación es el Reginave, “régimen para la navegación”, donde nos
encontramos con disposiciones administrativas, penales y procesales.

Avería gruesa: características esenciales

Requisitos para avería gruesa son:

Página 5
1) ACTO VOLOUNTURIO DEL CAPITAN:

Un hecho o acto voluntario y razonable del capitán que importe el sacrificio del buque o de la carga
-Como dice la regla “A” de york-Ambers: existe un acto de avería gruesa cuando y solamente cuando se a
efectuado o contraído intencional y razonablemente algún sacrificio o gasto extra ordinario para la
seguridad común, con el objeto de preservar de un peligro a los bienes comprometidos en una expedición
marítima.
-Es la condición primordial para que exista la avería gruesa:
Los daños causados fortuitamente por riesgos de la navegación en el buque “forzado” por el
tiempo(violencia del tiempo o del mar) o en el cargamento que transporta deben ser soportados por el
dueño de la carga que los sufre conforme a los principios generales del derecho.

Eje: la decisión de tirar la carga en una situación de varadura en caso de que el buque se escore hacía una
banda poniendo en riesgo la estabilidad del mismo y de su tripulación

2) PELIGRO COMUN :

El daño o gasto extraordinario debe basarse en el interés común.


-Es decir para la seguridad del buque y su tripulación
Eje: en caso que se ocasione un rumbo en el casco del buque y comience a hundirse poniendo en peligro
la tripulación y el buque decidir vararlo en la costa y así salvar el interés común.

3) RESULTADO UTIL:

-El gasto extraordinario o el daño producido deben haber dado un RESULTADO UTIL.
-deben ser motivados por un peligro cierto, sin que medie culpa de las partes interesadas.

OBLIGACIONES DEL CAPITAN AL PRODUCIRSE UNA AVERIA GRUESA

-El procedimiento y obligación del capitán es análogo a lo establecido oportunamente ante la ocurrencia de
cualquier avería que se produzca durante la expedición marítima.
-si la circunstancias lo permiten, convocar al consejo de oficiales.
-realizar los asientos correspondientes en el libro diario de navegación, tratando de indicar todas las
circunstancias que permitan esclarecer la índole de la avería
-al arribo del buque al primer puerto de escala formalizando la. Correspondiente “protesta de mar” y
ratificarla a la llegada al puerto de destino.
-la protesta de mar debe ser ratificada por los oficiales y tripulantes del mismo buque.

Fundamentos y elementos de las Averías Gruesas

Se trata de dos actos distintos de los cuales el llamado acto de avería común, ósea, aquel efectuado por el
capitán en las circunstancias especiales previstas en la regla A de york Amberes es el presupuesto del
segundo, de la contribución u obligación de los distintos intereses vinculados a la expedición de soportar
el sacrificio o gasto efectuado sobre las bases convenidas (todos ponen)

Y los elementos son:

a) Peligro: El buque navegando debe encontrarse en presencia de un peligro. Este peligro debe ser:
Real, es decir, debe existir, pues puede el Capitán, por razones varias, creer que hay peligro y en
realidad no haberlo. La existencia de este peligro debe ser juzgada por el juez con un criterio
subjetivo, es decir, el juez debe ponerse en la situación del Capitán en ese momento. Actual, el
peligro no debe ser ni muy remoto, de modo que no produzca sus efectos, ni muy cercano, porque
si es muy cercano carece de todo objeto el sacrificio. Por eso es muy criticable la definición que da
algún código cuando exige "inminencia" del peligro. Común, este peligro debe amenazar al buque,
flete o carga, porque si amenaza a uno solo, será una avería particular o simple y la indemnización
se haría en beneficio de uno solo

Página 6
b) Origen: En cuanto al origen del peligro, pregunta si hay avería gruesa, cuando a aquél ha sido
ocasionado por la culpa del Capitán u otras personas autorizadas. Al respecto hay dos teorías:
 La antigua teoría francesa sostiene que cuando el daño se ha producido por vicio propio del
buque o por culpa del Capitán (negligencia) no hay avería.
 La teoría inglesa, alemana y de los códigos modernos, establece el principio contrario:
aunque haya culpa en el origen hay avería gruesa. Se consagró este principio en la Regla de
Amberes de 1913 y pasó a la de York-Amberes de 1924 quedando plasmado en dicho texto.

c) Sacrificio: Debe ser extraordinario, porque si es ordinario de la navegación no hay avería gruesa.
El ejemplo de un gasto ordinario es el pago de sueldos a la tripulación, pero cuando los pagos
deben hacerse extraordinariamente, por ejemplo por una arribada forzosa, se convierten en avería
gruesa.

d) Interés o beneficio común: Que tenga un resultado útil, que si ese sacrificio, voluntario y
extraordinario, realizado en presencia de un peligro real, actual y común, no tiene resultado útil no
hay avería.

Liquidación de Averías: Proceso y compromiso

Producido en el curso de un viaje un gasto o sacrificio que reúna las características de avería
gruesa es preciso llevar a cabo un proceso especial tendiente a reglar las consecuencias económicas
emergentes de ese acto.

En la práctica, ante un hecho de esta naturaleza, es exigido a la llegada de las mercaderías al puerto de
destino, un depósito en efectivo o una fianza para la contribución que puede corresponder en la
liquidación respectiva, así como el respectivo Compromiso de Avería.

Hay que tener en cuenta que el transportador no puede retener a bordo la mercadería en garantía de sus
créditos, y si no se le afianza la contribución en avería gruesa, puede solicitar el embargo judicial de la
mercadería para obtener esa fianza y la firma del compromiso.

Si bien la normativa vigente fija la mencionada obligación de firmar un compromiso de avería por el
consignatario o recibidor de la carga, la legislación prevé que ello no tenga lugar. De todas maneras, debe
quedar claro que cierto uso y costumbre la firma de ese documento, lo normal es y será que él sea
extendido, conjuntamente con el depósito de una suma dada a la constitución de fianza suficiente, todo
ello con el objeto de responder al pago proporcional de la avería.

La firma del compromiso de avería podría implicar un verdadero reconocimiento de deuda, si bien esta no
reviste el carácter de deuda líquida, que sólo va a recibir con la liquidación que practique el perito. Esto
no excluye la posibilidad de insertar en el documento todas las reservas que se crean oportunas ni
tampoco la de impugnar el compromiso como la liquidación resultante, o la de discutir en juicio
correspondiente tanto la causa como el monto de la contribución.

Las operaciones destinadas a definir y evaluar la avería, estimar los valores llamados a contribuir y
determinar la porción de cada parte, constituyen el reglamento o liquidación de avería común, que puede
ser realizado de dos maneras: judicial o extrajudicialmente.

Página 7
PROCESO JUDICIAL

Podemos distinguir tres casos de actuación judicial dentro del régimen legal actual:

a) Cuando se firmó un compromiso de avería y se practicó la liquidación correspondiente


pero esta es impugnada.

Cualquier interesado puede en esta supuesto pedir en el plazo de cuatro años contados desde la fecha
de la firma del documento, el reconocimiento judicial de la liquidación o la realización de una nueva
liquidación, citando los demás interesados para que hagan valer sus derechos en cuanto a la
procedencia de la contribución y su monto. Si a criterio del tribunal el número de consignatarios es
demasiado grande, la demanda se notifica al trasportador y a tres de los consignatarios que reciban las
mercaderías de mayor valor, los demás son citados por medio de la publicación de edictos durante tres
días.

b) Cuando se firmó un compromiso de avería y no se practicó la liquidación


correspondiente.

Cualquier interesado puede en esta supuesto pedir en el plazo de cuatro años contados desde la fecha
de la firma del documento, para que se lleve a cabo la liquidación citando como en el caso anterior a
los demás interesados. La demanda debe notificarse a todas las partes interesadas, pero si el tribunal
estimara que el número de recibidores de la carga es excesivo, la notificación puede limitarse al
transportador y a tres de los recibidores de las mercaderías de mayor valor, los demás son citados por
medio de la publicación de edictos durante tres días.

c) Cuando no se firmó un compromiso de avería.

Cualquier interesado puede entablar demanda para obtener el cobro de las contribuciones
respectivas, dentro del plazo de una año contado a partir de la conclusión de la descarga en el puerto
en que terminó la expedición o la ventura que motiva la acción. La demanda debe ser notificada al
transportador y a tres de los consignatarios de mercaderías de mayor valor, citándose a los demás
mediante edictos que serán publicados durante tres días en el "Boletín Oficial" y en un periódico del
lugar. Reconocido y establecido el carácter de avería gruesa la liquidación se hace por peritos
liquidadores o designados por el tribunal, a propuesta de las partes o de oficio si ellas no formulan la
propuesta respectiva.

Cabe destacar que una demanda por designación de peritos liquidadores no da lugar a una acción
judicial típica, sino que pone en movimiento una actividad meramente administrativa. Los peritos
liquidadores deben cumplir su cometido depositando oportunamente su informe-liquidación en el juzgado
respectivo. Hasta este momento no ha existido proceso judicial ni interposición de una demanda formal.
El proceso se conoce con el nombre de proceso pericial, el cual tiene falta de contenido jurisdiccional ya
que se desenvuelve sin formalidades legales, pero con la facultad del liquidados de resolver cuestiones
legales. Estos desempeñan la función de verdaderos árbitros para decidir todas las cuestiones
concernientes a la liquidación y su reconocimiento.
Página 8
La liquidación aceptada por las partes interesadas en forma expresa o reconocida por decisión
judicial otorga acción ejecutiva a los beneficiarios. (Art. 408, ley de la navegación). La sentencia que recae
en cualesquiera de los juicios a que se refiere los tres supuestos antes mencionados, tienen el valor de
cosa juzgada (Art. 582, ley de navegación).

PROCESO EXTRAJUDICIAL

Llegado el buque a destino el Capitán o transportador requiere de aquellos obligados a contribuir la


firma de un documento denominado compromiso de avería, en virtud del cual las partes designan al
liquidador, obligándose los cargadores o consignatarios a pagar la cuota que resulte de la liquidación. De
esta forma se designa una persona (similar al perito arbitrador) que debe elaborar el instrumento de
liquidación. En este sentido es común que se consigne la obligación de firmar el compromiso de avería
correspondiente antes del retiro de la carga.

La liquidación del perito tiene las mismas características que la practicada por el designado
judicialmente en cuanto a su aspecto formal, las posibilidades de impugnación y a la naturaleza de la
acción. En este supuesto, la potestad del liquidador se basa en la convención de las partes,
manifestada mediante el compromiso de avería en el cual el conflicto de intereses se libra a la decisión
arbitral del liquidador.

Lugar en que debe practicarse la liquidación.

La fijación del lugar reviste importancia, porque a parte de previsión de las partes el régimen aplicable a
las averías gruesas será contenido en la legislación vigente del Estado en cuyo puerto se practique la
liquidación y prorrateo, salvo en cuanto a las condiciones y formalidades al acto de avería, que siempre
quedan sujetas a la ley de nacionalidad del buque.
La Ley de Navegación no impone un lugar en el que deba practicarse la liquidación, de manera que
las partes tiene plena libertad al respecto u pueden manifestarla en el documento que instrumento el
contrato de transporte, es decir, el conocimiento de embarque. A falta de tal acuerdo lo usual es que si el
viaje termina en el lugar prevista para la entrega de la carga, la liquidación se hace en dicho lugar, y si no
termina allí por resolución o frustración, se hará en el lugar donde termine el viaje.

(Agregar Art 404 LN y 580 LN)

Ley aplicable

Debemos distinguir entre acto de avería y contribución de avería. La naturaleza de la avería se


determina por la ley de nacionalidad del buque, que también rige los elementos, formalidades y la
obligación de contribuir. En cuanto a la legislación aplicable en materia: de liquidación y prorrateo de
la avería gruesa, la Ley de Navegación establece que es la del Estado en cuyo territorio se llevan a cabo
(Art. 607, ley de navegación).

Juez Competente

En materia del tribunal competente, las disposiciones legales vigentes en nuestro país, establecen
que, “son competentes los tribunales nacionales para entender en los juicios derivados de averías
comunes, cuando la aventura finalice o la liquidación y prorrateo se realicen en puerto Argentino”. La

Página 9
misma norma determina la nulidad de toda cláusula que atribuya competencia a los tribunales de otro
Estado. (Art. 615, ley de navegación), salvo que de conformidad al Art. 621 de la Ley de Navegación, los
residentes en el país, luego de producido el hecho, convengan a someterlo a juicio de árbitros o tribunales
extranjeros.

El liquidador de las averías

El objeto del ajuste o liquidación de la avería gruesa consiste en la determinación de la contribución de


cada uno de los elementos integrantes de la aventura marítima.
En términos Generales podemos decir que toda liquidación consta de varias partes y etapas.
Habitualmente se comienza haciendo una exposición resumida de los hechos que provocaron la avería
gruesa y de su calificación, para proceder luego a formar la masa acreedora, que es la suma de los valores
que deben ser resarcidos, y la masa deudora, que es la suma de los valores contribuyentes. A
continuación se obtiene un cociente, al relacionar ambas masas, cociente que aplicado sobre cada uno de
los valores de la masa deudora da por resultado el monto de contribución del buque, del flete y de la
carga.

La masa acreedora

Está constituida por el conjunto de créditos que representan los daños y gastos sufridos o incurridos
en beneficio común.

En cuanto al buque, si ha sido reparado, la suma a ser bonificada como avería gruesa será el precio
real y razonable del daño o la pérdida, aunque sujeto a las deducciones en concepto de "nuevo por viejo"
contempladas en la Regla XVIII de York-Amberes, de 1974. Si las reparaciones no se hubieren efectuado
se admitirá una razonable depreciación. Si el buque sufriera una pérdida total el importe admisible, será
el valor estimado del buque en buen estado, luego de deducir el costo estimado de las reparaciones que no
fueran averías gruesas y el producto de la venta si existiera.

En cuanto a la carga que se ha perdido o dañado como consecuencia del acto de avería, señalaremos
que la Regla XVI de York-Amberes, establece que el importe a bonificarse, será la perdida sufrida por el
propietario de la mercadería, tomándose por base el precio del documento o la factura comercial, en el
momento de descarga, o a falta de estos el valor al momento de embarque.

No integran la masa acreedora, las mercaderías sacrificadas que hayan sido cargadas sin
consentimiento del transportador (Regla XIX).

La pérdida del flete resultante del daño o pérdida de mercadería, será admitida como avería gruesa,
tanto cuando sea consecuencia de un acto de avería gruesa como cuando el

daño o la pérdida de la mercadería sean bonificadas como tal, pero del valor del flete bruto perdido se
deducen los gastos en que han incurrido los propietarios del flete para ganarlo, incluyéndose los
efectuados como consecuencia del sacrificio (conforme a la Regla XV de York-Amberes, de 1974).

Página 10
La masa deudora

La masa deudora esta constituida por todos los bienes salvados más todos los bienes que integran
la masa acreedora, pues, de no ser así, percibirían una indemnización integra sin contribuir, como los
demás, al pago de ella. La integraran por tanto, el buque, la carga y el flete, salvo que este fuese ganado a
todo evento, en cuyo caso quedaría al margen de la liquidación.

Está integrada por los valores de los elementos que forman la aventura marítima beneficiada en
común por acto de avería gruesa, es decir, el buque, el flete y la carga.

En general, la contribución debe hacerse sobre los valores reales netos de los bienes a la
terminación de la aventura, a cuyos valores se agrega las sumas bonificadas como averías gruesas,
excepto el valor de la carga que será el que tenga al momento de la descarga, el cual será acreditado como
anteriormente se dijo.

El buque contribuye según su valor en el estado en que se halle a su llegada (en estado de avería).
Para obtener el valor en estado de avería hay que deducir el costo de las reparaciones realizadas como
consecuencia del acto de avería gruesa.

La carga participa como hemos dicho precedentemente pero esta incluye el costo del seguro y el flete, a
menos que este no se halle a riesgo del propietario de la mercadería, pero son deducidos los derechos
de importación, las averías particulares, y en general todo gasto que el propietario de la mercadería
hubiera realizado para alcanzar ese valor contribuyente. La carga sacrificada también se incluye, pues
de otra manera su propietario se beneficiaría con una indemnización total de la expedición.

El flete concurre con su valor convenido entre el transportador y el cargador, previa deducción de los
salarios y gastos de manutención de los tripulantes que no se hubieran devengado para ganar el flete si
el buque y la carga se hubieren perdido totalmente en el momento de llevarse a cabo el acto de avería
común, siempre que hayan sido admitidos en avería común. El flete contribuye a la avería gruesa
solamente cuando está a riesgo del transportador y es ganado efectivamente o bonificado como avería
gruesa. Siempre con relación al flete, nos referimos a dos situaciones ajenas al contrato de transporte
sin fletamento, es decir, al documentado solamente mediante un conocimiento de embarque:
contribución del flete en el fletamento al tiempo y contribución del flete en el fletamento por viaje
(voyage-charter). En el fletamento a tiempo (time-charter) el valor del flete debido por el cargador al
transportador solo participa en la avería gruesa cuando la mercadería esta a bordo, cuando el flete esta
a riesgo del transportador y cuando esta convenido "por viaje"

con el cargador, pero nunca mientras el buque en lastre o este sin carga en sus bodegas. En el
supuesto de que un buque haya sido contratado para efectuar un transporte de fletamento, por un
viaje, el flete convenido no contribuye en avería gruesa mientras el buque navegue en lastre hacia el
puerto de carga y solo participa en las averías comunes que tenga lugar con posterioridad al día y hora
en que el buque está listo para recibir la. carga, según la carta de alistamiento aceptado por el fletador.

Página 11
No contribuyen los equipajes de los pasajeros y de los tripulantes, ni los efectos personales que no
hayan sido embarcados bajo conocimiento de embarque, ni el correo, ni las personas embarcadas a bordo.

Determinación de la contribución

Luego de conocido el monto de la masa acreedora y deudora, se relacionan ambas a fin de obtener
el cociente, que se proyecta sobre cada uno de los valores de la masa deudora, lográndose en
consecuencia la contribución de dichos valores y la determinación del saldo de ellos.

Un pequeño ejemplo de esto podría ser el siguiente:

La formula a utilizar, entonces es la siguiente:

X = M.A.

100 M.D.

MA = Masa acreedora

MD = Masa deudora

Si la masa acreedora registra un valor total de cuarenta y cinco mil pesos ( $ 45.000 ) y la deudora
de doscientos mil pesos ( $ 200.000 ), la formula de referencia se expresaría del siguiente modo:

Porcentaje de Contribución

Página 12
El porcentaje que obtenemos nos indicará cual ha de ser, en el ejemplo con el cual operamos, el
porcentaje o cuota de contribución que deberá soportar cada uno de los intereses vinculados a la
expedición. El 22,5 %, establecido en este ejemplo deberá aplicarse

sobre el valor asignado a cada uno de los intereses contribuyentes, de modo que se cubra el valor total
fijado a la masa acreedora.

La liquidación se lleva volcando los valores a una moneda estable. Los gastos y los daños se
calculan al tipo de cambio vigente en la fecha en que se efectúan, y los valores contribuyentes a las fechas
respectivas en que deben fijarse. El tema del tipo de cambio aplicable tiene gran significación sobre todo
durante períodos de inestabilidad en los mercados monetarios, ya que el resultado puede consistir en
beneficios y pérdidas para los distintos interesados.

Prescripción de la acción de avería

El plazo de prescripción de las acciones derivadas de la avería gruesa varía según se haya firmado o no el
compromiso de avería.

a) Ausencia de compromiso: La prescripción se opera en el plazo de un año a partir de la conclusión


de la descarga en el puerto en que concluyó el viaje. Esta norma es similar a la establecida por el
anterior artículo 852 del Código.

b) Existencia de compromiso de avería firmado: La prescripción se opera en término de cuatro años,


contados desde la fecha de firma del compromiso. En el caso de que una de las partes firmantes
accione judicialmente, se autoriza al tribunal a conceder un plazo suplementario de conformidad
con las circunstancias del caso y durante la vigencia de éste queda suspendido el término de la
prescripción.

c) Plazo de prescripción de la acción ejecutiva: En lo que concierne a la acción ejecutiva consagrada


por el Art. 406, el termino de la prescripción es de un año contado desde el reconocimiento de la
liquidación efectuada por la partes o por decisión judicial.

Las disposiciones brevemente expuestas importan la modificación que había informado recientes
decisiones judiciales en la materia. En efecto, a propósito del plazo de prescripción previsto por el Art.
852 del Código de Comercio y restando toda eficacia jurídica a la firma del compromiso de avería, nuestros
tribunales resolvieron que su otorgamiento no implicaba suspender o interrumpir el plazo de prescripción
de la acción, el cual debía computarse, por lo tanto, a partir de la conclusión de la descarga. El
angustioso término de un año, computado desde aquel momento, tornaba prácticamente imposible
concluir la liquidación, dada la complejidad que ella presenta. El actual régimen legal establece, pues,
una solución acertada.

Página 13
Como acotación a este tema debemos decir que en la realidad son contados los casos de avería
“gruesa” y por lo explicado, se ve claramente lo complicado de su liquidación. Por otro lado los que si son
muy frecuentes son los casos de avería “simple o particular”, por lo tanto el siguiente paso de esta tesis
será el desarrollo de un caso práctico de este tipo de avería.

Para la liquidación de este tipo de averías se tienen en cuenta las condiciones generales y
particulares de póliza, las cuales son entregadas al asegurado, al momento de contratar el seguro.

Como ya vimos en la parte de la tesis referido al “El Seguro”, se pueden contratar distintos tipos de
póliza, siendo la mas frecuente en empresas dedicadas a la importación y exportación de mercaderías, la
utilización de una póliza flotante.

En el caso que se va a exponer a continuación estamos en presencia de una póliza flotante, en la


que se convinieron las distintas pautas con las que contaría el seguro y en el que en caso de que se
produjera algún cambio en el viaje o ante el surgimiento de un nuevo viaje, es responsabilidad del
asegurado ir informando de los cambios a la Cía. Aseguradora.

El caso concreto que veremos consistió en una importación de mercaderías desde la India hasta
Buenos Aires, cubriendo el seguro tanto el traslado de la mercadería desde el Puerto de India hasta el de
Bs.As., como así también el flete que va desde el Pto. de Bs. As. hasta el domicilio de la empresa que
realizó la importación.

Página 14

También podría gustarte