Está en la página 1de 222

RODOLFO CARLOS BARRA

Pro!, de Derecho Y Ciencia Polftici'I Adrnlnímnth'. tn la.


FliIcultad de Oettccho y Ciencias po!iticR9 de la Universidad
Católica Argentina

Contrato
de
obra pública
Tomo 1
Parte general. Consorcios.
Concesión de obra pública

Editorial Abaco de Rodolfo Depalma


BUENOS AlRES
Se ha dicho muchas tieces que la construccidn es madre d e in-
dustrins, sin duda a cawa del gran efecto mdtiplicador que esta
actioidad tiene sobre el conjunto de la economia de un pa's. Si
esto es asi, y en orden a seguir con la figura genealdgica, la$
construcciones carrespondientes al sector pdblico pueden consi-
derarse como la hermana mayor de todo ese proceso. No es dste
el lugar para &tar datos estadisticos, generalmente farragosos, y
sobre 10s q u 10s juristas tenemos, quizcis equivocudamente, inuy
poca e s t i m . Pero de to& maneras la experiencia comdn nos
muestra con signos inequitiocos la gran incidencia que el deno-
minado sector priblico tiene sobre esta drea de la econonda, coma
tambign e n las restantes, segdn la impronta, buena o mala, del'
mundo mo3ern0, tanto per la cantidad meramente material de las.
obras que encara como p m su calidad e importancia en el plan@
de la infraestructura de la economia general.
Esta circunstancia, de por si, coloca al contrato de obra p6-
blica en un lugar pritiilegiado para el estudio del jurista, en par-
ticular el adminishutiuista, pues, mris alld de cualquier otra con-
sideracidn., se trata, para el jurista, de asumir una responsabilidad
suya e ituklegable: acceder cognoscititiamente a u n fendmena eco-
ndmico cuya regulacidn y explicacidn juridica no siempre se en-
cuentran a la altura de su debida importancia.
La afinnacidn anterior no supme despreciar el esfuerzo que-
sobre el tema se ha hecho desde 10s distintos planos de las fuentes
del'saber juridico. Por d e pronto es necesario reconocer la labor.
del legislador, que, tannto en el orden nacional como prooincial,
ha sabido sancionar cuerpos ZegisIatitios cuya sabiduria y pru-
dencia juridica se encuentran demostradas por la extramdinaria
antigiiedad, en la mayoria de 10s casos, de esas leyes, en urn
tiempo en el que la mutacidn del orden norrnatiuo se presenta realidad juridica, aunque a ceces no se le preste la atencidn de-
como una constante quiz6 exagerada. bida. Nuestro derecho adm<nistratiuo precisa de estudios compa-
Fundamentalmente es destacable la tarea de la Administra- rados, pero no sdlo con respeeto a1 derecho ertranjero, sino, fun-
cidn Pliblica, que tambidn ha colaborado generosamente en esta damentalmente, con relacidn a nuestro derecho provincial, m u -
actioidad n o m i t u l , con una labor reglamentaria expresada tanto chas veces m& rice y siempre m h cercano.
en decretos como en 10s llamados pliegos de contratacwnes, que Por el mismo mottvo se tratd d e prestarle especial atencidn
son, sin duda, la ancha base de la regulacidn positioa de este im- a las normas e m & de la Administracidn Pliblica, tanto a aque-
poitante instituto juridico. llm que surgen de reglamentos generales, corno a las emmadas
No ha sido ajena a este proceso esclarecedor, por strpuesto, de determinados pliegos y contratos en particular, pues es aqui
la actividad de la iurirprudencia, tanto judicial c m adrninistra- donde es posible encontrar la regulaeidn juridiea ''vim" adapta-
tiva, cuyo conocimiento es indispensable e n orden a reconocer la da, en cada cmo, a una realidad que por su propia naturdeza
saliio que nutre la aplicacidn pra'ctiea, es decir, la vida de la ma- precisa de u n seguimiento constante y t a m b s n particularizado.
teria objeto de este estudw. Con la misma finalidad de inoestigacidn se recurrid, en este
Por dtimo, p r o siempre primera e n jerarquia, cabe recono- libro, a la cita y ana'lisis de la legislacwn extrenjera y de la opi.
cer la labor de la doctrina nacional, a traois de 10s grandes maes- nidn de autores & distinta nacionalidad, tanfo e n orden a posibi-
tros que ha tenido y tiene nuestro derecho administratiw, doctri- litar una cmpnracidn con nuestras instituciones como para apro-
nu oolcada en estudios crrya riqueza conceptual 10s convierte en oecllar experiencias alenas euyo conocimiento es, naturalmente,
insustituibles para quien, con o sin experieneia previa, quime indispensqble p r a encarm eualquier elaboracih cientifica.
adentrarse e n el seno de esta parte tan importante de la realidad La obm es tambidn fruto de la experieneia personal del autor,
juridica contemporcinm. obtenida a traob del ejercicio projesiond en la materia objeto
Pero el jurisfa, como tambidn ocurre e n el c a m p d e las otras de estos estudios. Ello ha sido una especial oportunidad, ojal6
ciencias, tiene la obligacidfl de seguir trabajando, de seguir inuesti- no desaprovechada, para poder realizar argumntaciones y afir-
gando, aun con el riesgo de no llegar a ningzin nuevo conoeimiento maciones doetrinarias que no giren en el vacio de la m r a es-
o d e equiwcar el camino o, inclwo, de caer en la superficialidad peculacidn intelectual, sino, y esa; fue la intencidn, que resulten
repetitioa. Nada estd de m*is e n el continuo avance que el hom- coherentes con lo que ocurre en la prict~ca, pues e'ste es el dato
bre realiza en orden d conocimiento d e Ia oerdad. Decian 10s principal a ser tenido en cuenta en el plum del conocimiento ju-
escol&ticos que el fin es l o primer0 en la inteneidn y lo 6ltimo ddico, no pmque Ia realidad se presente c m o una poderosa di-
en la ejecucidn. Por eUo es desde ya positivo el someternos, en uinidad cuyos mandatos deban ser seguidos sin discusidn, sino
la intencidn, a ese fin de bzisqueda honesta y desinttresada d e la porque, incluso, para cambiar la realidad es indispensable conocerla.
oerdad, y aunque en la ejecucidn podamos fracasar, otros sbbrdn Agradezco finalmente la colaboracidn prestada p m mis asis-
extraer consecuencias positiom d e nuestros errores en la medida tentes en la docmcia, 10s abogados Ma& Angela C a z a n i , Angel
que e'stos se encuentren bendecidos pol. una sincera b u e m f e in- Alberto B. Bianchi y Ricardo Ottonello, a quienes exhort0 a que
telectual. contintien sus inoestigaciones y tambie'n, por qud no, me sigan
E n su estructura b&ca este libro pretende partir del orden ayudatuio, pues ninglin trabajo enriquece m& a su autor que
juridico positivo de nzlestro pais, que, como se dijo antes, tran- aquel que se r e a l h en commidad, partkipando de una misma
sits por la legislacidn nacional y provincial, teniendo e n cuen- pasidn por la ciencia estudioda y, en definitiua, por u n mismo
ta la naturalem eminentemente local del derecho adminbtrativo. amor y espiritu de subordinacidn a la verdad.
Por esa razdn se ha . tratado de considerar m u y especialmente a la
legislaciin de obrm p6blicas provincial, que tiene, sin duda, apm-
tes importantes, adenu's de conformar el primer dato de nuestra
INDICE GENERAL

CAP~TULO
~ M E R O

EL CONTRATO ADMINISTRATIVO

1. Existencia del contrato administrativo . . . . . . . . . . . . . . . .


2. El contrato zdministrativo en la relaci6n de justicia dis-
tributiva . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
3. El rbgimen exorbitante .............................
4. Inexistencia de 10s denominados contratos privados de la
Administracibn .....................................
5. Los contratos celebrados por las empresas de propiedad
del Estado ....................... ... ..............
6. Tesis negatoria de la sustantividad del contrato adminis-
trativo. Crftica ....................................
7. El principio de la mutabilidad del contrato adrninistrativo
8. La intangibilidad de la remuneraci6n del contratista par-
ticular .............................................
ELEMENTOS DEL CONTRATO
ELEMENTOS D E L CONTRATO
D E OBRA POBLI'CA D E OBRA POBLICA

10. Trabajo pliblico y obra piiblica. Distinci6n con otros ins-


titutos ............................................ 63 23. Procedimiento contractual administrativo . . . . . . . . . . . . .
11. Contrato de obra piiblica. Principios bisicos. Elemen- 24. Doctrina de 10s actos coligados ......................
tos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 68 25. Procedimiento contractual y naturaleza del contrato de
obra publica .......................................
Sujeto
12. Locatario o comitente ............................... 71 Objeto
13. Empresas comerciales-industriales del Estado . . . . . . . . . . 73 26. Cosas muebles e inmuebles . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
a ) Sociedades de economia mixta .................... 75 27. Diferencia con el contrato de suministro ...............
b ) Empresas del Estado ............................ 77 28. El caricter "extensivo" de la obra piiblica .............
c ) Sociedad an6nima con participaci6n estatal mayoritaria 77 29. Propiedad de la obra piiblica . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
d) Sociedad del Estado . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 78 30. El contrato de consultoria ...........................
e ) Otros tipos empresarios . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 101
14. Entes binacionales .................................. 108 Finalidad
15. Entes privados ..................................... 113
31. Contrato de obra piiblica y bien c o m h
16. Sujetos auxiliares de la adrninistraci6n publica . . . . . . . . . 116
a ) Objeto principal del contrato ..................... 123
b ) Comlin intenci6n de las partes .................... 124
c ) Partes involucradas ............................... 128 32. Generalidades ....................................
d ) Calificaci6n de la relaci6n contractual .............. 129
Otros elementos
33. Elementos comunes con el act0 administrativo .........

ELEMENTOS D E L CONTRATO
D E OBRA POBLICA
(Continuacibn) CAP~TUWV

SISTEMAS D E EJECUCION
Locador o constructor ...............................
17.
18.
19.
20.
Requisitos generales. El inversor extranjero .......... 161
Reqnisitos especiales ................................
Consorcio de empresas .............................. 168
0- 2J6))- 34. Sistemas d e ejecuci6n. Distinci6n conceptual ......... 263

21. La "uni6n transitoria de empresas" de la ley 19.550 (ref.


ley 22.903) ........................................ 198 35. Ejecuci6n par administraci6n . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 265
22. Cesi6n del contrato y subcontrataci6n ................ @ 36. Ejecuci6n por contrato de obra pliblica ............... 270
54. Relaci6n concedente-concesionario . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Ejecucwn indirecta 55. Relaci6u concedente-usuario . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .. . . . .
56. Relaci6n concesionario-usuario . . . .. . .. . . . . .. . .. . . . . . ..
.................................................. ..... J I . Tasa de peaje.
t--
.
Naturaleza .. . . . . . . . . . .. . . .. . . . . . . ..
37. Delegacibn iuterorgLnica . . . . .. . . . . . . . . . . . .. . . . . . . . . . . 58. Remuneraci6n del concesionario-constructor . . . . . . . . . . .
38. Delegaci6n interadministrativa e institutional . . . . . . . . ..
59. Las llamadas "modalidades de la concesi6n" . . . . . . . . .. .
39. Delegaci6n transestructural . . . . . . . . . . . . .. . . . . . . .. . .. ..
60. Mantenimiento de la ecuaci6n economicofinanciera . . . ..
40. Delegacibn transestructural por contrato de obra piiblica 61. Extinci6n del contrato. Remisi6n . .. . . . . .. . . .. . .. . . ..
41. Delegaci6n transestructural por concesi6n de servicio pii- 62. Concesi6n de obra piiblica por contribuci6n de mejoras . .
blico . . . .. . . . . . .. . . . . . . . . . .. . . . . . . . . . . . . . .. . .. . . . . . . fj3. La naturaleza tributaria de la contribuci6n de mejoras ..
42. Ejecuci6n de obras pliblicas a travbs de la concesi6n de
64. Rkgimen juridico . . . . . . . . . . .. . . . . . . . . . . . . : . . . . .. . . . . .
senicio phblico. Diferencia con la concesi6n de obra
, . 65. Modalidades de ejecuci6n . . . . .. . . . . .. .. .. .. . . . . .. . . .
publica . .. . . . . .. . . .. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
43. Propiedad de la obra . . . . .. . . . . .. . . . . .. . .. . . . . .. . . .
66. Rkgimen de pago .. . . .. . . . . . . .. . . . . .. . . .. .. . .. . .. . . .
44. Relacibn concesionario-constructor . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
.. .. .. .
67. La falsa concesi6n . .. . . .. . .. . .. . . . . . . .. . . . .. .

CONCESION DE OBRA POBLICA POR PEAJE

45. Concesi6n de obra ~iiblica. Concepto general. Clasifi-


. , . . .. .. . . . . . . .. . . . . . . . . .. . . . . .. . . .. . .. . . . . . ..
CdClOn .. 305
46. Concesi6n por delegaci6n propia. Remisi6n . . . . . . . . . . . 308
47. Concesi6n por delegaci6n impropia. Clases . . . . . . . . . . . 310
48. Concesi6n de obra piiblica por peaje. Procedimiento de
selecci6n del contrafista . . . . . . . .. . . . . .. . . . . . .. . . . . . . . 311
49. Concesi6n por peaje y contrato de obra piiblica . .. . . . . 315
50. Estructura economicofinanciera . .. . . . . . . . .. . . . . . . . . . . . 322
51. La ecuaci6n economicofinanciera . . . . . . . . . . . .. . . . . . . . .. 323
52. Financiacibn de la obra. Garantias del concedente y na-
tnraleza del contrato . . . . .. . . . . . . . . . . .. . . .. . . . . . . . . .. 331

CONCESION DE OBRA POBLICA POR PEAJE


(Continuacih)

.53. Tasa de peaje y remuneracibn del concesionario. Rela-


ciones juridicas comprometidas . .. . . . . .. . . .. . . . . .. . . . . 341
EL CONTRATO ADMINISTRATIVO

1. EXISTENCLA
DEL CONTRATO ADMINISTRATWO

La realizaci6n del bien c o m b , causa final del Estado y raz6n


exclusiva de todo su accionar ', puede ser realizada a travks de
distintos medios, ya sean materiales o juridicos.
Par snpuesto que esta actividad estatal tiene como tkrmino
necesario a la comunidad sobre la cual el Estado asienta su exis-
tencia. De esta manera, en rasgos generales, puede afirmarse
que ningrin cometido estatal podri ejecutarse sin la participacibn
directa o indirecta d e 10s miembros de tal comunidad.
Sin embargo, en un sentido estricto, lo comrin es que el Es-
tado cumpla sus cometidos tomando las necesarias decisiones en
el Bmbito exclusivo de su organizaci6n, y luego imponiendo esta
decisi6n a sus sribditos mediante el ejercicio, tambikn y necesaria-
mente exclusivo, del poder.
Los slibditos o administrados obedecerh la decisi6n estatal,
ya sea voluntariamente -sin que interese, a estos efectos, si psico-
16gicamente tal obediencia es debida a la conformidad del admi-
nistrado con respecto a la justicia de la decisi611, o es motivada
por el temor a la sauci6n- o bieu forzada por el ejercicio efec-
tivo de l a coacci6n.
Es decir que la decisibn estatal se lleva a la practica a traves
d e 10s administrados -salvo que tales decisiones no excedan del

Barra, R. C., Principbs de derecho admlnlst~atloo,dbaco, Buenos Ai-


res, 1980, ps. 38/43,
dmbito interno de la organizacibn estatal- con o sin el concurso derecho phblico y de derecho piivado; civil, comercial, laboral,
voluntario de aqudlos. administrativo, etc., y tantas otras clases, especies o categorias
Pero existen otros supuestos en 10s que, por la propia natura- identificadas por la doctrina.
I
leza del cometido a ejecutar, por imperio constitutional o legisla- El contrato del Estado es una especie del ge'nero contrato, que
tivo, o por una elccci6n de prudencia politics, el Estado precisa
iI se caracteriza por ser celebrado por, a1 menos, un sujeto estatal.
del concurso voluntario de 10s administrados para que htos asu- ! Intentando una clasificaci6n superficial del contrato del Es-
man obligaciones determinadas, cuyo cumplimiento el Estado va- i tado, kste puede dividirse en contratos regidos por el derecho ph-
lor6 como necesarias para la realizacibn del bien comliu.
Dentro de este sector de situaciones juridicamente considera- blico y contratos regidos por el derecho internacional. Dentro
das se encuentran 10s denominados "contratos del Estado". de la primera categoria se encuentran 10s contratos administrati-
No es &sta la ocasi6n para analizar la discusibn doctrinal vos, que identifican a toda una amplia gama, quizi la mis im-
que se plante6 acerca de la posibilidad ontol6gica de la existencia portante, de acuerdos de voluntades que celebra el Estado o un
d e 10s "contratos del E s t a d ~ " ~encontrindose
, hoy casi uninime- ente descentralizado estatal para el cumplimiento de una activi-
mente admitida la vigencia del instituto contractual en el Bmbito dad materialmente administrativa. Estos contratos estarin regi-
d e la actuacibn estatal y, en particular, la existencia de contratos dos directamente por el derecho administrativo cuando hayan sido
I
regidos por el derecho phblico. celebrados en ejercicio de la funci6n administrativa (en consecuen-
Sobre el particular coincido con Dromi en cuauto a que el cia, por la Administracibn Phblica centralizada o descentralizada)
contrato "es una categoria abstracta y genbrica, una de aquellas o bien el derecho administrativo 10s afectari de manera supletoria
figuras juridicas que en sentido estricto significa, como seiiala Lau- cuando la contrataci6n se deba a1 ejercicio de la funcibn legisla-
badere, 'un acuerdo de voluntades generador de obligaciones"'. tiva o judicial '.
El contrato es, entonces, un instituto juridic0 ge'nero, que se de- Cabe todavia distinguir (siempre dentro de lo que aqui in-
termina y existe en uu plano menor de abstracci6n (ya que el
teresa) entre 10s contratos administrativos prupiumnte dichos, que
contrato en cnncreto es ese determinado acuerdo de voluntades
son aquellos celebrados por el sujeto estatal con un sujeto privado,
celebrado entre dos sujetos) a travhs de distintas especies: de
y 10s contratos interadministrativos, en 10s que ambas partes con-
tratantes tienen la calidad de sujeto phblico 5.
2 Entre otros, Marienhoff, M. S., Tratado d e derecho ndministrativo, t. Cnmo se verA mis adelante, excluyo la categoria de contratos
111-A, ps. 20/37, Abeledo-Perrot, Buenos Aires, 1970; Diez, M. M., ~ e r e c h o privados de la administrddn, por cuanto no admito la existencia
odministratioo, t. 11, ps. 436/458, Plus Ultra, Buenos Aues, 1965; Escola, H.
J., Tr& integral d e 10s contmtm administrotitios, t . I, ps. 34/68, Depalma, de contratos que, aun cuando celebrados por un sujeto estatal, se
Buenos Aires, 1977; Be~caitz,M. A,, Tea'a general de 10s contratos adminir- encuentren regidos por el derecho privado, lo que es la razbn
trotioos, ps. 154/187, De~alma,Buenos Aires, 1980; Garrido FaUa, F., Tra-
tado de derecho odministratioo, t. 11, 32/41, Instituto d e Estudios Politicos,
Madrid, 1974; JCze, G., Principios generoles del derecho administratiuo, t. 111,
4 Sobre la diferencia entre actividad y funcidn, ver Barra, R. C., ob.
ps. 313/319, Depalma, Buenos Aires, y Sayaguer Laso, E., Trntodo d e dme-
cho administratioo, t. I, ps. 532/533, Montevideo, 1974. cit., Principios.. ., ps. 141/145.
3 Dromi, J. R., Contratos de la administracidn, JA, Doctrina, 1974, ps. ..
cossagne, ob. cit., Los contratos. . quien 10s caracteriza por laa si-
guientes notas: "a) excepcidn a1 requisito d e la licitacidn phblica en el pro-
6131623; tambiCn Cassagne, J. C., Los contratos d e la Administracwn Pirblica,
ED, t. 57, p. 793. IEn el mismo sentido, Guaita, A,, Los cmtratos & la ad- ceso de seleccidn; b ) inaplicabilidad d e multas o sanciones pecuniarias a en-
j minidracidn pdbIica en la legislocidn espn&, "Revista Intemacional d e Cien- tidades estatales; c ) un particular sistema d e solucidn d e conflictos, y d) no
cias Administrativas", val. XLVI, 1980, nQ 1, p. 63: ". . .no puede decirse rige el principio d e la estabilidad del act0 adrninistrativo cuando las entida-
que el contrato administrativo sea civil, pues el contrato no es una figura des se hallan en una esfera d e gobierno (national o provincial), lo cual ten-
esencialmente civil, sina prapia de la teoria general del derecho, y el con- d r i aplicaci6n con respecto a 10s actos d e ejecucidn dde un contrato interad-
trato administrativo se nutre de &ta con el mismo 'derecho' que el civil". rninistrativa".
22 CONTRATO DE OBRA PÍlBLlCA EL CONTRATO ADMlNISTRATIVO 23

doctrinaria que se esgrime para justificar la existencia de tal ca- miento del derecho administrativo; as! lo señala el art. 49 de la
tegoría ". citada ley española, "Los Con tratos cuyo objeto sea la ejecución
Como Se verá en los párrafos siguientes, los contratos admi- de obras y la gestión de servicios públicos del Estado, asi como la
nistrativos se encuentran sometidos a un régimen jurídico especi- prestación de suministros al mismo, tienen el carácter de adminis-
fico, que na es otro que el impuesto por el derecho público a tra- trativos y su preparación, adjudicaciÓn, efectos y extinción se re-
vés de la regulaci6n establecida por el derecho administrativo. girán por la presente ley y sus disposiciones reglamentarias y, su-
Se afirma así la tesís de la sustantividad del contrato adminis- pletonamente, por las restantes nOrmas del derecho administrativo.
trativo cOn relación al civil 7, lo que supone reconocer la existencia En defecto de este último serán de aplicación las normas del de-
de Un derecho administrativo de la contratación, COn principios y recho privado· 9.
normas propias y específicas, distintas a las del derecho civil. Comentando esta norma, sostiene Rivera Ysern que, "El de-
En el derecho comparado esta sustantividad del contrato ad· rechoadmimstrativo regulador de los contratos del arto lQ nO es
ministrativo fue expresamente reconocida por la ley española de simplemente un conjunto de disposiciones positivas. Es, además,
Bases de Contratos del Estado, que en su arto 19 establece la um- un conjunto de principios generales que deben ser extraídos del
dad de régimen jurídico según el siguiente texto: "Los contratos ordenamiento administrativo, principios que SOn inmanentes al
que celebre la Administración del Estado con per>'Onas naturales contrato administrativo, informadores y vertebradores del mismo.
o jurídicas Se ajustarán a las prescripciones contenidas en la pre- Las deficiencias y lagunas de la ley de contratos del Estado han
sente ley y en sus disposiciones reglamentarias'., sin perjuicio de de suplirse mediante una nec'Csaria labor doctrinal y jurispruden-
las excepciones que se anuncian en el arto 29, cial que debe acudir a esa fuente de inexplotadas posibilidades
En consecuencia, el contrato administrativo encuentra sus tantas veces, cual es el ordenamiento juddico administrativo. Al
fuentes, principios y regulación normativa en el propio ordena- derecho privado s6lo podrá acudirse cuando el ordenamiento ju-
rídko administrativo no ofrezca solución. Pero este recurso al
d.erecho privado conlleva una supletoriedad no de primer grado,
u En contra, Marienhoff, ob. ciL, Trawdo ...• t. m-A, ps. 44 Y ss.;
Cassagne. ob. cit., Los contratos... Aun así, no siempre el pretendido so· smo de segundo, ya que en primer término se ha tenido que acudir
metimiento a normas del derecho privado imI'orta un decidido apartamiento al ordenamiento jurídico~administrativo» 10.
del sistema de derecho público, al menos {'-'TI lo que ti )a competencia jurisdic~ Esta sustantividad del contrato admimstrativo, es decir su
ciona} se refiere, Así el Tribunal Supremo español ha señalado que ~'El cri-
terio delimitador de la competencia entre la jurisdicción contenciosoadminis-- sujeci6n al régimen jurídico específico de derecho administrativo,
tratlva y la civil no es el objeto, sino la ffnalidad del contrato. Por ello que~ Se destacará a partir de los fundamentos a desarrollar en los si-
dan sometidos a la primera contratos cuya n¡¡turaleza sea privada y privadas guientes párrafos.
las normas que lo regulen. si son instrumentales a fines de obra o servicio
público", "Revista de Adminístradón Pública" nQ 90. p. 232, Cuesta ima- Resta señalar, siguiendo a Marienhoff ", que todo contrato
gínar un contrato de la Administración que no sea instrumental Ha fines de administrativo es sustancialmente un acto administrativo hilateral
ohra o servido público", Entonces, en ¿qué medida podrá estar regulada encuadrado en la categorla del llamado "acto administrativo nego:
por normas privadas y hasta dónde será correcto afirmar que SU naturaleza cio juddico". .
es privada?
1 Armo Ortiz, G" Contratos del Estado 11 common law en el Estudio,
P,ólogo del libro de Monedero Gil, J.!., Doctrina del contrato del Estado,
p. 10, Instituto de Estudios Fiscales, Madrid, 1977. Ariilo Ortiz demuestra • ¡!>íd.
que aun en el derecho inglés y el norteamericano, oontrariamente a la su- , 1ft Rivera Yse~. E., La, interpretación del oontrato adminlstr<Jtluo, p. 41,
puesta sujeción de) contrato del Estado al régimen de1 ooinmon 14w, aquéllos Instituto Careía Ovledo, U mversidad de ScviUa. 1971.
se encuentran sometidos a principios iusadministlatívos de similar contenido 11 Marienhoff. ob, cit,. Tratado,." t. lll-A p. 40, también Cassagne
que el regulado en el derecho continental. oo. cit.. Los contratos... La Corte Suprema d: Justicla de la Nación h~
8 "Ley de bases de contratos del E<itado", Boletín Ofici.1 del E<itado, admitido la existencia del acto administrativo de "estructura bilareraf' en
Madrid, 1916. "S. A Metalmecánica e/Nación Argentina", Fallos 296-672.
Como act0 bilateral, tanto su emanacibn como su contenido Estos bienes, el bien privado y el bien comlin, reconocen una
se deben a la coincidencia de voluntades de dos sujetos de dere- diferencia cualitativa, ya que como lo afirma Santo Tomis de
cho (en este caso, la Administracibn-Estado y 10s administrados), Aquino " . . . el bien com6n de la ciudad y el bien singular de una
reflejindose esta bilateralidad tanto en la formacibn como en 10s persona no difieren s61o como lo mucho y lo poco, sino seglin unn
efectos del contrato l2. diferencia formal. . ." ya que ". .. la razbn del bien com6n y del.
Por su estructura, siempre siguiendo la terminologia propues- bien singular es distinta, asi como es distinta la razbn de todo y
ta por Marienhoff, pertenece a la categoria "acto negocio juridico", parte" Esta diferencia es, ademis, una distincibn jerhrquica,
caracterizado porque 10s efectos del act0 o contrato no 10s deter- puesto que el bien del todo prevalece sobre el. bien de la parte,
mina exclusivamente el derecho vigente, como ocurre con 10s me- en la medida que la parte no podrh alcanzar sus fines propios (se--
ros actos administrativos (p. ej. el otorgamiento de un beneficio g6n le corresponde por su naturaleza), sino en virtud de la salutl
previsional), sino el propio act0 o contrato administrativo 13; aun del todo.
cuando sometido a la regulacibn normativa pertinente. Por consiguiente, en el contrato administrativo se encuentran
en juego intereses distintos y desiguales, lo que impone que su r6-
gimen juridico se construya "en funci6n de esta desigualdad", c o - ~
$ 2. EL CONTRATO AnMINISmTIVO EN L A GESTI~N mo sostiene Benoit I6, destacando el caricter esencial de esta de-.~
DE JUSTICIA DISTRIBUTIVA sigualdad: "ESIO es tanto mhs importante, cuanto que del mismo
mod0 que entre particulares se busca la igualdad, cuando se tra-
Entre las razones expuestas por las tesis negatorias de 10s con- ta, por el contrario, de las relaciones entre la Administracibn y un
tratos administrativos (ver la bibliografia enumerada en nota 2 ) particular cocontratante se desea entonces la desigualdad. No se
se encuentra la que trae en su apoyo la desigualdad existente en- trata -sigue diciendo Benoit- de una desigualdad comprobada
tre las partes contratantes: el Estado, titular del poder a1 servicio o aceptada, sino de una desigualdad ~roclamadacomo necesaria.
del interks p6blico, no puede igualar este interks a la medida del De hecho, la opinion phblica no admitiria que 10s intereses de la
interks privado de 10s particulares; por consiguiente no puede existir Administracibn se situaran en el mismo plano que 10s del particu-
entre ellos contrato alguno por la ausencia de uno de sus requisitos lar con el cual contrata; la igualdad sorprenderia, como la desi-
fundamentales, cual es la equivalencia juridica de las voluntades. gualdad entre particulares" 'I.
Pero esta postura doctrinaria no aprecia que el contrato ad-
ministrativo es, precisamente, el coutrato de la desiguuldad.
En efecto, cuando la Administraci6n Pliblica contrata con un caracteriza a1 bien c o m b seglin las siguientes notas: a) expansive: pues er.
particular, el objeto de ese contrato se ve afectado por dos br- el bien de todas las "partes" o sectores que integran el todo comunitario;
denes de intereses: por un lado, el inter& del administrado, un b) distributiuo: como consecuencia de lo anterior, el k e n c o m b s610 se
realiza cuando se distribuye entre 10s miembros d e la comunidad. Realiza-
bien de naturaleza privada que, en esencia, no trasciende de la ci6n y distribucibn del bien c o m h son s61o dos aspectos d e una misma reali-
esfera de su propia conveniencia; por otro lado el interks de la dad; c ) indeterminodo: pues alcanza a todos 10s bienes d e arden temporal,^
Administracibn Phblica, que no es otro que la realizacibn directa cualquiera fuere su naturaleza, susceptibles d e satisfacer las necesidades hu-
e inmediata del bien com6n14. manas generadas en la vida camunitaria social; d ) subsidkrio: pues s610 tie-
ne como objeto aquellos bienes qur? no pueden ser alzancados o satisfechos,
o no deben ser gestionados por las agrupaciones intermedias entre el hom-
12 Marienhoff. ob. cit.. Tratado.. .. t. 11.. -us. 2291233. bre y el Estado o por 10s hombres en su actuaci6n individual.
13 Ibid., ps. 402/403.' '5 Santo Tombs d e Aquina, Suma teoldgica, 11-11, 58, 7, a.2.
1 4 Am~liaren Barra, Princimos. . ., . m.
. 46/49. TambiCn, sobre 10s as- l R Benoit, F.-P., El derecho administrativo francks, p. 717, Institute de-
pectos vinculados con la relaci6n entre el bien cornfin, la justicia distributiva Estudios Adrninistrativos, Madrid, 1977.
y el derecho pliblico, ver 10s caps. I, I1 y IV. En el Cap. 5 ps. 43146, re 1; Ibid.
Ahora bien, la relaci6n contractual, como toda otra relaci6n medida del acto justo seri la estricta igualdad ariim&a 2z, 1
d e alteridad que suponga "el reconocimiento de una pertenencia igualdad de cosa a cosa.
ajena, de una propiedad, de la dependencia de algo con respecto a Esta es la virtud de la justicia que rige en 10s contratos dl
alg~ien'"~,se encuentra regida por la virtud cEe la itsticia, seghn derecho comlin, pues el act0 jnsto de esta especie de justicia r
la cual ". . . uno, con constante y perpetua voluntad da a cada encuentra regido por el derecho privado.
cual su derecho" 1°. En la justicia distributiva, en cambio, el objeto del acto ju!
Es decir que toda relaci6n juridica supone una relaci6n de to consiste en la parte del bien comlin que, como carga o beneficil
justicia, pero esta relaci6n de justicia ser& distinta s e g h sean 10s le corresponde a cada uno de 10s miembros de la comunidad 2,
sujetos de la misma, su objeto y la medida del acto jnsto. Por consiguiente, necesariamente, el Estado seri sujeto en est
relaci6n de justicia, ya que es el hnico que puede realizar y di!
Asi, la justicia particular (no interesa aqui analizar la deno- tribuir el bien comhn. Ademis asumiri siempre (desde esta per!
minada justicia general, legal o del bien comhn) se clasifica en pectiva) el caricter de sujeto pasivo, ya que kl es el obligado
conmutatiua y distributit-a: "Como ya se ha dicho, la justicia par- la distribucibn de las cargas y beneficios comunitarios de acuerd
ticular se ordena a una persona privada, que respecto de la co- con las exigencias de la justicia distributiva. El sujeto activo (df
munidad es como la parte al todo. Ahora bien, toda parte puedc jando de lado la relacibn interadministrativa) seri el particula
ser considerada en un doble aspecto: uno, en la relaci6n de parte o administrado en cuunto es miembro de la curnunidad, y como ta'
a parte, a1 que corresponde en la vida social el orden de una per- sujeto a la distribuci6n del bien c o m b .
sona privada a otra, y este orden es dirigido por la justicia con- Se trata, entonces, de una relaci6n juridica ( y como tal un
mutativa, consistente en 10s cambios que mutuamente se realizan relaci6n de justicia) basada en la desigualdad, puesto que es de
entre dos personas. Otro es el del todo respecto de las partes, sigual el interks que cada parte pone en juego -ya se ha vistm
y a esta relacibn se asemeja el orden existente entre la comunidad que el interks phblico es de superior jerarquia que el privado-
y cada una de las personas individuales; ese orden es dirigido por y porque son desiguales 10s mismos sujetos intervinientes en la re
la justicia distributiva, que reparte proporcionalmente 10s bienes laci6n. En efecto, por la misma exigencia de realizaci6n del bie
comunes. Por consiguiente, son dos las especies de justicia: la c o m b , cuwa de las c a w del EstadoZ4,Qte se encuentra dota
distributiva y la conmutativa" 20. do con el atributo del poder, atributo que le es connatural y del q u
el Estado no se puede despojar tanto como que en ninghn moment1
La justicia conmutativa es, entonces, la justicia de la igual-
dad 21, en ella tanto el sujeto acreedor como el deudor son pri-
oadas, porque privado es el objeto del acto justo, es decir el o 10s 2 2 "Entonces -dice Santo T o d s con respecto a la justicia conmuta

bienes que se someten a1 intercambio. En estas condiciones, la tiva- es precis0 igualar cosa a cosa, de suerte que cuento Bste tenga de ma
en lo que le corresponde, otro tanto debe restituir aquhl en lo que le per
tenece. Y de este rnodo se realiza la igualdad s e g h la medida aritrnhtica.. .'
2 3 Welty, ob. cit., p. 99: "La justicia distributiva es aquella especie d,
justicia que obliga a repartir 10s bienes y las cargas proporcionalrnente entn
18 Casares. T. D.. Inr itsticia y el derecho, Abeledo-Perrot, Buenos Ai- 10s miembros de la comunidad". Para un mayor desarrollo del tema, ve
res, 1974, p. 23. Barra, ob. cit., Cap. IV.
24 Las causas del Estado, en la concepci6n tomista, son cuatro: la cau
19 Santo Tom& de Aquino, Suma teoIdgicg 11-11. 58, 1
sa eficiente, cual es la naturaleza social del hombre; la causa fonal, el po
20 Santo T o d s . Suma teddgica, 11-11. 61, 1 .
der; la causa merial, que se encuentra en la poblaci6n y el territorio; y 1;
21 Welty, E., &tecimw s o c k , Herder, Barcelona, 1962, p. 244, define
causa final, el bien c o m h . Recordemos que para la escolistica reahta e
a la justicia conmutativa como aquella que "inclina a1 hombre a dar a sus
fin es la causa de las causas. Por consiguiente, el bien comdn o causa fina
sernejantes, iguales en derechos, lo que les pertenece hasta su completa can- del Estado es la raz6n que justifica la existencia de las restantes causas 1
celaci6n". elementos.
Si el derecho privado es la normativa que rige la relaci6n de
y, cualquiera sea la forma juridica con que acthe, ~ u e d erenun- ~justicia conmutativa, es al derecho pliblico que le corresponde re-
ciar a ser Estado, es decir a ser poder ptiblico. For via de ejem-
:gular la relacibn de justicia distributiva
plo, la situacibn es aniloga a la imposibilidad que tiene el horn- De lo expuesto, de manera muy sintetizada, pueden extraer-
bre de renunciar a la racionalidad, pues en ninguna circunstancia se las siguientes conclusiones:
puede dejar de ser hombre. a ) s610 a1 Estado le corresponde la realizaci6n y distribucibn
Pero esta desigualdad no es absoluta, es decir, no impide el .del bien comlin, siendo kste su fin exclusivo y excluyente;
ajuste de las prestaciones reciprocas, puesto que sin tal ajuste se- b ) la realizacibn y distribucibn del bien comlin la ejeccta el
ria imposible la realizacibn del act0 justo, con lo cual no habria, Estado a travks de distintos medios instrumentales, entre ellos, me-
en el caso, relaci6n de justicia y, por lo tanto, tampoco existiria .diante el establecimiento de relaciones juridicas con 10s adminis-
relacibn juridica. trados y recurriendo a la tkcnica de la descentralizacibn o personi-
En la relacibn de justicia distributiva el justo medio se esta- ficacibn juridica de distintos servicios estatales;
blece conforme a una equivalencia proporcional. Asi lo ense5a c ) estas relaciones juridicas se encuentran sometidas a las
Santo TomBs: ". . .en la justicia distributiva no se deterrnina al me- exigencias propias de la vutud de la justicia distributiva;
dio seglin la igualdad de cosa a cosa, sino seglin la proporci6n d e d ) las relaciones de justicia distributiva se encuentran regi-
las cosas a las personas, de tal suerte que en el grado qne una per- .das por el derecho pliblico; ya que kste es el que otorga la regu-
sona exceda a otra, la cosa que se le dk exceda a la que se dk a lacibn apropiada y adecuada a las peculiares caracteristicas del
la otra persona, y por esto dice Arist6teles que tal medio es se- contenido y medida del acto justo wrrespondientes a dichas re-
gGn la 'proporcionalidad geomktrica' la que determina lo igual, laciones.
no cuantitativa, sino proporcionalmente . . ." 2 5 . Estas conclusiones me han permitido definir, con el adecuado
Seg6n se ha analizado en otro lugar 2 6 , esta "proporcibn d e desarrollo argomental, cuya reiteracibn escapa al coiitenido de es-
las cosas a las personas" deb& ser valorada comparativan~ente,es -ta obra, la relacio'n juridica administrativa como "el vinculo in-
decir, seglin como se asignen tales cosas a esas otras personas. tersuhjetivo que se establece para la realizacibn del bien comhn
Lo seiialado en el pBrrafo anterior supone que frente a cada de acuerdo con las exigencias de la justicia distributiva, generando
concreta relaci6n de justicia distributiva, que serB llamada relacidn un intercambio proporcional de prestaciones reciprocas entre el
especifica, se produce la necesaria presencia de otra relacibn, real sujeto deudor -la Administracibn Pliblica centralizada y descen-
o bipotktica, que llarnamos relucwn virtual. tralizada- y el sujeto acreedor -el administrado-, suponiendo
.un vinculo de comparaci6n con relaciones virtuales y la preexis-
Entre la relaci6n especifica y la relaci6n virtual se establece
tencia accesoria de relaciones interorg6nicas e interadministrativas
el vinculo de comparacidn, que permite establecer entre el sujeto
y sometido a un rkgimen juridico exorbitante del derecho privado,
acreedor de la relaci6n especifica y el sujeto acreedor de la re-
sistematizado en el derecho pliblico" 28.
laci6n virtual la equivalencia proporcional, que requiere, preci-
Ahora bien, el contrato administrativo, no cabe duda, es una
sarnente, de la existencia de situacioues eqnivalentes o compara-
especie del genero relacibn juridica administrativa; de aqui su re-
bles, en el reparto de las cargas y beneficios del bieu comlin.
:gimen juridico especifico, rkgimen de derecho pliblico, como con-
Este vinculo de comparacibn es el que establece la medida del act0
secuencia de su sometimiento a la relacibn de justicia distributiva.
just0 en la relaci6n de justicia distributivaZ7.
Podria argumentarse, en contra de lo seiialado en 10s pirra-
:fos anteriores, que el contrato administrativo, como cualquier otro

Z V a n t o Tombs, Suma teoMgica, 11-11, 61, 2.


2 8 Barrn, ob. cit., Principios, p. 120.
2R Zbid., p. 127.
27 Ibid.
9' Zbid., p. 172.
contrato, es una simple conmutaci6n, pues a trav6s de 61 el Estado
no distribuye el bien comhn, sino s610 intercambia prestaciones
determinadas con su cocontratante.
Esta objeci6n queda refutada por lo siguiente: Para la doctrina, sin duda mayoritaria, que admite la distin-
ci6n entre contratos administrativos y contratos civiles de la Ad-
a ) el contrato administrativo es un mero recurso tkcnico a
ministraci6n, regidos por el derecho phblico 10s primeros y por el
travks del cual el Estado cumple con su cometido propio y espe-
derecho privado 10s segundos, es una especial preocupaci6n y
cifico de realizacibn y distribucibn del bien comhn;
motivo de largas e inacabadas discusiones doctrinarias el deter-
b) esta realizaci6n del bien comhn queda demostrada por la minar cuil es el criterio diferenciador entre una y otra categoria
razbn de que el Estado no puede asumir obligaciones que no se contractual.
encuentren vinculadas con el cumplimiento de sus fines, seghn las
circunstancias de tiempo y lugar que el propio Estado valorar? en Si bien la cuesti6n tiene importancia en aquellos paises (p.
su decisi6n estrictamente politics; ej. Francia) donde seglin sea la calidad del contrato le corres-
ponderi la jurisdicci6n administrativa o judicial comlin para re-
c ) si el objeto del contrato siwe a1 bien comlin, observado solver 10s litigios que tales contratos susciten, no es asi en nues-
desde la perspectiva estatal, tambikn s i n e a la distribuci6n de ese tro caso.
bien comhn, desde la perspectiva de 10s administrados, ya que a
En nuestro derecho, con una linica jurisdicci6n, la judicial, tal
trav6s de la tkcnica contractual (en 10s contratos de contenido pa-
discusi6n pierde su importancia, por lo menos prictica, ya que
trimonial, que son 10s hnicos que pueden dar lugar a la objeci6n
en la realidad ambas categorias se encuentran sometidas a la
que aqui se rebate) el Estado actlia como agente de promocibn
misma jurisdicci6n y a un r6gimeu juridic0 similar.
del desarrollo econ6mico y de distribuci6n de la riqueza social;
En esto radica, precisamente, la dificultad en encoutrar el
d ) lo mismo puede afirmarse sobre cada contrato determi-
criterio diferenciador: simplemente porque la diferencia no existe.
nado, que, cualquiera sea el mecanismo de contrataci6n que se
utilice, deberi recaer en el administrado que mis lo merezca, Pero, sin perjuicio del anilisis que se hari en el parigrafo
comparativamente valorado con respecto a otros administrados, siguiente, el hecho es que en la bhsqueda de tal criterio diferen-
de manera que la riqueza social distribuida a travks de ese con- ciador la doctrina ha116 el concept0 de "cliusula exorbitante", a
trato beneficie a quien resulte acreedor del acto justo, medido partir de la cual fue posible (con total independencia de su apli-
s e g h la regla proporcional o comparativa propia de la justicia caci6n a1 instituto contractual) desarrollar un mktodo de interpre-
distributiva. taci6n y sistematizaci6n del derecho administrativo 31 y, por con-
siguiente, del contrato adrninistrativo.
Estas notas regulan y condicionan el intercambio de bienes
en el contrato administrativo, de modo que la conmutaci6n que En realidad, reitero, fue la jurisprudencia francesa (en su
se opera en cada contrato en concreto queda sometida a las exi- bhsqueda de una regla delimitadora de la competencia judicial y
gencias propias de la distribucibn. administrativa) la que estableci6 que es posible reconocer en un
contrato la adopci6n por parte de la administraci6n de un proce-
Por esto, el autor brasilefio Tito Prates da Fonseca pudo dimiento de derecho pliblico (contrato administrativo) cuando,
afirmar que "la caracteristica del contrato phblico hillase en la
entre otras razones, dicho contrato se somete expresamente "a un
finalidad de la convcnci6n y en la igualdd proporcional, y no
pliego de cliusulas y condiciones generales que formulan la ma-
cuantitativa, aritmbtica, de 10s derechos de las partes" 3 0 .
yoria de las reglas que estAn fuera de la brbita del derecho pri.
vado" o cuando el contrato esti relacionado "con el funciona-

30 Citado POT Marienhoff, ob. cit., Trotado.. ., t. 11-A, p. 30. 31 Bam3, ob. cit., Principios.. ., ps. 1481152.
EL COr-..'TRATO ADMINl'i'IRATIVO 33
,32 CONTRATO DE OBRA P~CA

les apartamientos del régímen del derecho civil que en definitiva


miento de un servido público, de tal modo que, por la misma na- seguirá ímperando (por lo menos por vía suplet~ria) sobre eí
turaleza de este servicio público, el contrato implica necesaria~ resto del contrato en cuestión, De esta manera se niega la sus-
mente el régímen del derecho público" 32, tantividad del régimen contractual dc derecho público,
Queda así lanzada la doctrina de las cláusulas exorbitantes del Admitir, en cambio, la sustantividad del contrato administra-
,derecho privado, tanto explicitas como implícitas, derivadas ne- tivo (como se ha hecho en supra, § 1) significa descartar la doc-
cesariamente del fin de interés público al que sirve el contrato. trina de las "cláusulas exorbitantes". En realidad, si sólo se trata
El error de esta doctrina, como es fácil apreciar, parte de d~ regímenes jurídicos distintos, es tan exorbitante el derecho plÍ-
. considerar al contrato administrativo como un régimen de excep- bhco respecto del privado Como el derecho privado respecto del
ción a las normas civilistas de la contratación: cuando l. Ad- público.
ministración Pública contrata debe hacerlo de la misma rranera La doctrina de la "cláusula exorbitante", por lo menos en su
como lo hacen los particulares, es decir despojándose de su poder exposición tradicional, se encuentra rechazada también por des-
y sometiéndose a la regulación del derecho civil; excepcionalmen.
tacados autores franceses.
te, cuando razones determinadas la impulsan a apartarse de ese
régimen, puede pactar el régimen de derecho público (cláusulas Así, Denoi! nO duda en afirmar que la noción de cláusula o;mr-
bitante del derecho común es n • • • una de las nociones más radi~
explícitas) o tal régimen vendrá impuesto por la misma natura·
calmente falsas que jamás hayan obstaculizado nuestro aparato
leza del objeto contractual (cláusulas implícitas),
Pero? en ambos casos) se tratará de meras cláusulas o parcia-

32 ]éze, Principios . . '. t. lII, p. 32S. da de elementos exorbitantes externos a las cláusulas mismas de dicho con-
Este criterio se ha mantenido casi inalterado hasta nuestros dias. Así trat,o. pero susceptibles de ejercer sobre él una ínfluencía indirecta. A pro-
De Labaudére, A., en su exposición Contratos de la administración, caracte- pÓSIto de 'contratos celebrados por el establecimiento público Electricité de
res y diferencias. brinda.da en el Primer Congreso Internacional de Derecho France Con productores aut6nomos de electricidad, el Consejo de Estado ha
Administrativo, Mendoza, 1978, publicada en "Contratos Públicos", de la juzgado que serían administrativos en raz6n del ~régimen exorbitante de
Universidad Nacional de Cuyo, Universidad de Mendoza y Asociación Ar- derecho común', al que el decreto del 20 de mayo de 1955. qne se ooupa
gentina de Derecho AdmiIlistrativo, ps. 38/53, Mendoza, 1980, indicó que de ellos, los somete. Este texto hace obligatoria, en efecto, la celebración
'«Ia jurisprudencia sostiene hoy en día dos criterios, Los mismos son alter- de tales conITatos y da competencia al ministro para resolver sobre ciertIJS
nativos. La. presencia de uno de los dos basta para hacer que un contrato desacuerdos (Consejo de Estado, 19 de enero de 197~ ~Société d'exp}otation
sea administrativo. El primero es el de la participaoión directa del cocon~ électrique de la rhiere du Sanf)",
. tratante en la ejecución del servicio público; el segundo, la presencia en el A modo de s(ntesls. concluy6 (p. 43)!
contrato de clánsulas exorbitantes o, en forma mÁs general, de element~ "Al término de este análisis del criterio del contrato administrativo se
exorbitantes" (p, 40). Aclaró el autor que el primer criterio no s610 se ~uede destacar como observación general, que la jurisprudencia administra-
refiere al contrato de concesión del servicio públiCO, sino que tiene un al~ tIva ha marcado, sobre casi todos los puntos, una sen~ible tendencia. a exten-
cance general, de manera qne permite calificar como administrativos a los de~ la categoría del contrato administrativo en relación con la del derecho
_contratos de empleo "cuando hacen participar directamente al agente en la pnvado, ya se trate de la interpretaci6n de la ley (por ejemplo contratos de
ejecución del servido público" (p. 41) y también 10s contratos que la Ad~ ocupación del dominio público); de la presencia de una persona públlca en
-ministracl6n celebra con particulares como consecuencia de su política eco- el contrato (jurisprudencia sobre los contratos de sociedades de economía
n6roica intervencionista. En estos casos ".,. la jurisprudenia admite amplia- mixta); de la participación del cocontratante en la ejecución de un servicio
mente en la actualidad que tales contratos son administrativos porque ha(.'Cn públ~co (jurjs:>~dencia sobre contratos de locaci6n de servicios y de inter-
participar al cooontratante en la ejecución del servicio público y constituyen vencl~n econormca); de la cláusula exorbitante (noci61l misma de cláusula
una de las modalidades de tal ejecución" {p. 41}. Con relaci6n al concepto exorbItante y agregado del criterio de elementos exorbitantes) el Tribunal
·"elemento exorbitante'~, que se agrega al tradicional de '(cláusula cxorbitan~ de Conflictos y el Consejo de Estado marrífiestan, como pued~ constatarse
te", el autor señaló (p, 43): una propensión a adrn4tir cada vez en mayor medida que 105 contratos d~
"En efecto, recientemente el Consejo de Estado ha juzgado que un Con- la Administración pertenecen a la categorla de contratos administrativos,"
~trato de la administración puede resultar administrativo debido a la presen~
34 CONTRATO DE OBRA PÚBIJCA EL CONTRATO ADMINISTRATIVO 35

jurídico 33, destacando que esta doctrina "descansa, en definitiva~


U
El modelo es, entonces, el régimen iurl.dico exorbitante, en
en una negativa de tomar conciencia de la e\ístencía de un régi~ tanto que representación concreta de las exigencias de la justicia
men contractual de derecho público" 04. En la acertada conclu- distributiva, definitoria de una especial categoría de relación ju-
sión de Benoit, lo que distingue a los tipos de contratos ..... es el ddica, en el ámbito del derecho administrativo.
régimen general al que están sometidos: régimen del Código Ci- El contenido concreto que este modelo significa es advertido
vil en general para los contratos de derecho privado; régimen a través de la observación eropÍrica de la regulación de cada ins-
general de derecho público ... " para los contratos de derecho ad- tituto del derecho administrativo. Los datos así obtenidos se pro-
ministrativo.<t No son -continúa díciendo- las cláusulas del con- yectan por vía inductiva hasta la formulación de principios ge-
trato las que le dan su carkter, sino el régimen general al que nerales (p. ej. ejecutoriedad del acto administrativo y principie>
está sometido, es decir, precisamente, las reglas que van a aplicarse
de la decisión ejecutoria de la administración pública) cuya co-
en aquello que no está regido por las cláusulas expresas del con-
rrección se valora según la conformidad o disconformidad con las
trato, o en contradicción, incluso~ con las cláusulas cuando éstas
exigencias de la justicia distributiva abstractamente consideradas
infringen las disposiciones del régimen general consideradas por
(atribución del órgano administrativo de hacer cumplir por sí
los jueces como imperativas, como sucede, por ejemplo, con el
las decisiones que generan y distribuyen el bien común).
régimen de indemnización de las sujeciones imprevistas" 35,
Por último, del principio se obtienen por via deductiva la"
No existen los contratos "privados de la Administración" -se-
normas de aplicación para aquellos institutos cuya observación
gún se argumentará en el parágrafo siguiente -, por consiguiente
empírica demostró la ausencia de tal regulación (p. ej. decisión
no hay necesidad de encontrar ningún criterio diferenciador entre
ejecntoria aplicada a un determinado tipo de contrato adminis-
una y otra categoría de contratos: todos los contratos que celebra
la Administraci6n Ptiblica, centralizada o descentralizada (inclu- trativo). También en este caso se valorará la corrección de la
yendo a las empresas comerciales o industriales de propiedad del solución a la luz de la justicin distributiva, pero esta vez en la
relación jurídica 'Concreta.
Estado), se encuentran regidos por el derecho administrativo.
La afirmación anterior obliga a descartar la doctrina de las Pero el 11UIdelo no es s610 un cuerpo de principios generale•.
"cláusulas exorbitantes", que, además de nO estar basada en su· Por el contrario, supone cOnstruir, sobre la base de los datos ob·
ficientes criterios científicos, es írmecesaria. servados en la realidad, una especie de "maqueta" constituida por
Pero partiendo de dicha doctrina (tan generalizada entre los la representación de los elementos más importantes de esa reali-
autores) como fuente de inspiraci6n, es posible construir un mé. dad~ así como también la representación de las relaciones más
todo dc interpretación, no sólo de los contratos administrativos, importantes que vinculan a esos elementos entre sí.
sino de todo el derecho administrativo, globalmente y en cada La maqueta, figura o modelo - en definitiva, la representa-
una de sus instituciones 36, ción intelectual de la realidad empirica- así construida es utili-
Este método de interpretación se basa en considerar el con- zada como dato de comparación con los distintos fenómenos he-
cepto de "exorbitancia" como un 11UIdelo del sistema, propio y es- terogéneos que la realidad empírica puede exhibirnos.
pecifico del derecho administrativo. . '. C~ando ~1 .fenómeno, en sus elementos y relaciones más sig-
Dlficahvos¡ cOlOclda cou el modelo construido, dicho menómeno po-
33 Oh. cit., El derecho ~ .. 1 p, 728.
drá ser calificado como perteneciente al modelo y regido por los
M ¡bid., p. 730. principios generales (régimen jurídico) que le otorgan orden y
s, lbid., p, 731, sentido a ese modelo.
M Amplíar en Barra, oh. cit., Principios ... ? ps. 148/152. La. cooslde-
ración del derecho a.dministrativo como un "régimen jurídico exorbitante"
Elaborado así el modelo (régimen jurídico exorbitante) ob-
se encuentra también desarrollada por Cassagne, J. C. en El régimen exor- tenemos: .a) el derecho administrativo como sistema global; b) su
bitante y "'" garantlas IÚlI administrado, ED, t. 82, p. 929. comparaCión, desde esta perspectiva, y por lo tanto su diferencia-
36 CONTRATO
DE oBRA P ~ B U C A

ci6n con otros sistemas juridicos globales; c ) la comparaci6n de Como parte integrante del rbgimen juridico exorbitante, y por
cada instituto del derecho administrativo entre st. consiguiente inherente a1 modelo construido segi~n lo expuesto
Se logra asi, irente a una realidad empirica, compleja y di- anteriormente, existen las siguientes garantias en favor del admi-
ficilmente manipulable como esquema mental, atento las modi- nistrado, siempre en la sola enumeraci6n de las principales: a )
ficaciones que sufre el derecho administrativo seghn la evoluci6n exigencia del debido procedimiento legal (en sede administrati-
de las relaciones entre el Estado y la sociedad, entender a1 Gere- va); b ) respeto del principio de igualdad; c ) exigencia de la es-
cho adrninistrativo y a sus institutos en particular (p. ej. 10s con- tricta vinculaci6n a la ley en la actuaci6n de la Administraci6n
tratos admiuistrativos) como un sistema sencillo y coherente, s610 Piiblica; d ) respeto por la intangibilidad de la remuneracibn del
tributaiio de su propio modelo y sin ni~lguna referencia con el contratista particular, en 10s contratos administrativos 3s.
derecho privado. POI otra parte, en aplicaci6n de estas prerrogativas y garan-
Como he sostenido en otras ocasiones 37, el modelo rdgmen tias, cada instituto o cada relaci6n juridica en particular ( p , ej.
juridico erorbitante 110 puede ser estudhdo s610 desde la pers- cada contrato en concreto) reconoce especiales "modulaciones" o
pectiva de la Administraci6n Piiblica, sino que corresponde tam- "cliusulas" que s610 pueden ser interpretadas teniendo en cuenta
biBn analizarlo desde la perspectiva del administrado. su inscrci6n en el modelo antes desarrollado, p. ej. la imperativi-
De esta manera se configura a1 rkgimen exorbifante romo un dad del procedimiento de selecci6n del contratista, la necesldad
sistema juridico global integrado por dos subsistemas comple- de motivar el act0 administrativo, etcktera.
mentarios: las prerrogatiuas de la Administraci6n Piiblica y las
garantias de 10s administrados, ambas vinculadas por uil equili-
brio proporcional inspirado en la virtud de la justicia distributiva. 9 4 INEXISTENCUD E I*)$ DENOMINADOS WNTRATOS
Asi, corresponde consjderar a las garantius como cl limite y PNvAms D E LA AOMINISTRACI~N
compensaci6n de las prerrogativas. A la inveisa, 13s ?n'errogu2i-
oas pelmiten salvar el obst&culo que a la prosecuci6n del bien
La relaci6n Estado realizador del bien corntin-justicia distri-
comi-n podria oponer el interks del bien particular desvinculado but&-derecho pliblico, segi-n lo expuesto en el $ 2 de este ca-
d e su punto de referencia comunitario.
pitulo, lleva a la necesaria conclusi6n (ratificada por la realidad
Las prerrogativas ~rincipales -por cuanto de ellas se deri- del contenido de la relaci6n jnridica, mas alli de la cacrichosa
van otras como sus necesarias consecuencias- en beneficio de
denominaci6n que la ley o 10s autores le otorguen) de que toda
la Administraci6n Phblica son las siguientes:
relacibn juridica entre el Estado y sus shbditos tiene como e x t i ? -
a ) la presunci6n de legitimidad de sus actos; b ) el principio
s'ivo, direct0 e inmeaiatd fin el realizar el bien comun;' que por
de ejecutoriedad; c ) el principio de actuacibn coactiva; d ) el rk-
consiguiente dicha relaci6n juiidica es aplicaci6n de la justicia
gimen privilegiado de sus bienes; e ) el rkgimen procesal. privile-
distributiva, y, p r lo tanto, se encuentra regida por cl derecho
giado; f ) el rbgimen contractual privilegiado, de donde derivau,
publico, y, en su caso, el sector de kste que denominamos derecho
! entre otras: potestad de direccibn y control, potestad de modifi- administrativo 3 9 .
caci6n unilateral, potestad sancionatoria, potestad rescisoria uni
\ lateral. Par consiguiente, la Administraci6n Phblica, centralizada o
descentralizada, no puede -por repugnancia de naturaleza- es-
-. ...--..- -
..
Barra, ob. cit., Priwipios.. ., ps. 1521156; tambibn en La intang&
bilidnd de Ea remuneracidn del controtista particular en 10s contrdos ndmi- 38 Ampliar en Barra, ob. cit, Principws.. ., ps. 156/168; en Cassag-
nistratir;os, ED, t. 62, p. 727. Dromi tambi6n analiza unitar~amente las .,
ne, oh. cit., El rdgimen exorbitante. . y en Dromi, ob. cit., Prewogrrtiws . . .
prerrogativas y garantias en Prerrogatiuns y garantios d m a ~ r a t i o o s ,Univer- 39 La hlndamentaci6n dde esta afirmacibn se encuentra en Barra, ob.
sidad del Norte Sznto Tom& de Aquino, dos tomos, Buenos Aires, 1979. Cit., Principws. . ., principalmente en 10s capitdm I a1 VI.
tablecer con 10s administrados relaciones que se encuentren regi- tractual no tiene otra misibn, otro destino, otro sentido, y otro
das por el derecho privado. fin, que cumplir con la finalidad misma del dicho servicio, y
Asi he sostenido que no existe "acto privado de la adminis- que no es otra que una finalidad phblica. Y tal finalidad ph-
traci6n2' (como categoria distinta del act0 administrativo) ni tam- blica no mira, ni puede mirar, a la utilidad privada o particular
poco, obviamente, el "contrato privado d e la Admini~traci6n"~'. d e 10s individuos, sino a la utilidad comhn, cuya misi6n de re-
Esta afirmaci6n encuentra el apoyo doctrinario de Dromi4', parto y distribuci6n esti regulada por el derecho pliblico.
quien defiende la existencia de un "rkgimen juridic0 unitario re- "No se nos escapa que lo contractual reposa sohre la idea
gulador de la actividad administrativa contractual", que no es del intercambio de bienes y prestaciones, y que lo justo en 10s
otro que el determinado POI el derecho pliblico.
intercambios es un asunto primariamente de conmutaci6n: si se
En el mismo sentido que el iudicado en 10s pirrafos anterio- tratare de una conmutaci6n entre sujetos con intereses privados
res, el destacado administrativista chileno Eduardo Soto Kloss o particulares, no cabe duda que se regiri por el derecho privado.
h n d 6 su critica a la tesis "privatista" con argumentos d e indiscu-
tible validez, cuya transcripci6n se impone realizar: "Pero como en la contrataci6n administrativa se trata de un
intercambio finalizado en si a1 bien no privado sino pliblico,
"Contratos admiiistrativos y contratos civiles de la adminis-
tracibn, ,jdos categorias diferentes? No cl.eemos que racional- comlin y no particular, pues que una de las partes es el Estado-
Admiuistraci6n, cuya r a d n de ser y de existir y de obrar es esa
mente sea ello posible sostener, si queremos ser consecuentes
con las bases primordiales del ordeu politico y la idea de bien utilidad comlin, pliblica, resulta que dicho intercambio -que no
deja de ser tal porque una de las partes sea el Estado-Adminis-
comhn que ello conlleva, por una parte, y con la idea misma de
contrato, por la otra, idea que en el campo pliblico ha venido traci6n- ha de estar regido por lo justo correctivo, pero, igual-
a reencontrarse con sus fuentes originarias y fundantes, perdidas mente, finalizado a dicho bien c o m h , esto es por lo justo que
por una civilistica tefiida, desde hace unos siglos, de racionalismo regula a dicho bien comlin, y ello es el derecho pliblico (supra-
individualista. En efecto, si toda la actuaci6n de la Adminis- ordenador, directivo, distribuidor). D e alli que creamos que la
traci6n estQ finalizada por el derecho a la obtencih del bien tal distinci6n no tenga justificacibn muy racional, por cuanto las
de la comunidad, tambikn lo esti su actividad juridica, no s610 relaciones en que participa el Estado, si se mira a su verdadera
unilateral (donde nadie duda), sino obviamente su actividad ju- configuraci6n (que la da la prerrogativa de 10s fines), son re-
ridica bilateral. Si esta actuaci6n contractual es un medio de laciones supraordenadoras, de bien comlin, de reparto y distri-
obtener el bien comlin, en cuanto concreta satisfaccibn de nece- I buci6n, y para ello existe una regulaci6n juridica especifica, ade-
sidades pliblicas (directa o indirectamente), resulta que se tra- 1 cuada a esa naturaleza, que no es otra que el derecho pliblico.
duce en un medio de ejecuci6n o funcionamiento (la ejecucibn Y aun cuando acthe para cumplir sus fines a travks de la via
misma o la modalidad, el funcionamiento mismo o una modalidad) contractual, esto es sobre la base d e intercambios, se trata de
de un semicio pliblico (cualquiera sea su rkgimen jurldico ad- intercambios finalizados, lo cual hace que tambikn el fin que
ministrativo), y ello esti directamente ligado, vinculado a la uti- ordena tal contratacibn sea un fin pliblico, colectivo, de bien co-
lidad comlin, la cual es regulada directamente por el derecho ph- mlin, y, por lo tanto, dichos intercambios sean regulados por el
blico. ! derecho p6blico.
"Sea que la vinculacibn a la ejecuci6n o funcionamiento mis- "Pretender aplicar, entonces, una regulaci6n diferente es tra-
mo del servicio pitblico (cualquiera sea su rkgimen) sea directa tar a desiguales en forma igual, y ello es injusto, ,jEs posible
o meramente indirecta, en cada uno de esos casos la actividad con- sostener, entonces, que el Estado, que la Administraci611, puede,
en verdad, estar sometido a1 derecho de 10s privados? kNo pa-
40 IW rece, mQs bien, una via hacia la inequidad? Porque, dc6mo tra-
$1 Dromi, ob. cit., Cmtratos de lo administracwn tar igual a desiguales? &No seri, acaso, una cu6a politica en el
I
corazbn del derecho para favorecer a ciertos intereses particda- del modelo, de tal manera que ese contrato no se llevaria a cabo.,
res, privados? *'" sin la inclusi6n de tales elementos, dicbo contrato pertenece a1
Si bien estos argumentos son suficientemente convincentes, modelo y por consiguiente se encuentra regulado, informado y
como ya se ha dicho, un gran sector doctrinario continlia insis- estmcturado par el rkgimen juridico propio del modelo: en el
tiendo en esa supuesta existencia de 10s "contratos civiles dc la caso el rkgimen juridico contractual del derecho pliblico o I&--
Administracibn". gimen juridico "exorbitante".
De esta manera, frente a concretas situaciones de hecho que Puede? tomarse como ejemplo, a estos efectos, 10s contratos
puedan presentarse, resultari necesario demostrar el sometimien- celebrados por la Administracibn de 10s paises anglosajones, sobre
to a1 derecho phblico de un determinado contrato. 10s que tradiciooalmente se afirmb su caricter privado. Sin em-
Aquf cobra importancia la utilizaci6n del modelo "rkgimen bargo, a poco que se 10s examine detenidamente se decubriri
exorbitante", seglin lo analizado en el parhgrafo anterior. que se encuentran regulados por un rkgimen juridico, en lo sus-
En efecto, construido el modelo contrato administrativo y tancial, de similares caracteristicas que las que presenia el mo-
por consiguiente identificados sus elementos mhs importantes jun- 2elo contrato administrativo continental.
to con la representacibn de las relaciones mis determinantes que Es esto lo que afirma Guaita: "las reglas comunes a todos los-
vinculan a esos elementos entre si, se obtendri a1 instituto del contratos de la Administracibn se explican sencillamente por la
contrato adrninistrativo en su consideracibn como sistema globaI, presencia de ksta, pues todos sus contratos, aun 10s privados, en
su comparaci6n y diferenciaci6n con otros institutos contractuales Gltimo tknnino, contemplan intereses pliblicos, sirven fines admi-
y su comparaci6n con otros institutos del propio derecho admi- nistrativos.. .; no sblo existen 10s contratos administrativos, sino.
nistrativo. Esto podri aplicarse tanto para el instituto contrac- que lo que no existe en puridad es contratos de la Administracidn
tual administrativo en general como con respecto a cada tipo o total o completamente privados, pues aun en 10s asi llamados en
especie de contrato administrativo en particular. Asi, a la vez la ley de Contratos del Estado, preparaci6n, competencia y adju-
que el modelo contrato administrativo, en abstracto, podri obte- dicaci6n tienen siempre naturaleza adrninistrativa, tienen sn pro-~
nerse, por ejemplo, el modelo contrato adrninistrativo de locacibn pia sustantividad . . ." 43.
de obra o contrato administrativo de obra pliblica, seglin el caso. En el ya citado estndio de Ariiio Ortiz '4 se demuestra cbmo
Una vez construido el modelo contrato de obra phblica, por tambikn en 10s paises anglosajones, aun cuando sin total rectmo-
ejemplo, no habri mis que comparar ese modelo con el deter- cimiento expreso, se ha avanzado en favor de la admisibn de
minado contrato de locaci6n de obra, cuya naturaleza juridica la sustantividad del contrato administrativo, sometido a un rk-
resulta necesario interpretar. Si sus elementos plincipaIes y las gimen juridico de derecho p&blico.
relaciones deterrninantes que vinculan a esos elementos entre si Arifio Ortiz se pregunta si 10s contratos administrativos cons-
coinciden con el mode10 o "maqueta", el contrato interpretado tituyen realinente una categoria distinta de 10s contratos de de-
seri, indudablemente, un contrato de obra phblica. recho comlin o si les son aplicables las normas de kstos.
Por supuesto que este trabajo interpretativo deberh reali- Toma como objeto de su estudio 10s contratos del derecho:
zarse sobre cada conhxto en particular, no resultando posible anglosajbn y dice en primer lugar que en Inglaterra poco o casi
efectuarlo ahora imaginariamente. nada se ha escrito sobre el tema, por lo cual, en teoria, el con-~
Pero es posible afirmar que descubierta en un determinado trato del Estado se regiria por las disposiciones del derecho co-
contrato la existencia determinante de 10s elementos constitutivos mlin, pero en la prictica, y debido a la ausencia de legislacibn

.
4 2 Soto Kloss.. E.. La contratocidn ndmittistratioa. Un r d m a Im 43 ..
Guaita, A., en ob. cit., Los controtos dz la odministracidn, . p. 85.
fuentes cldsicas del contrato, "Revista de Derecho P6blico", Santiago de 44 "Contratos del Estado y common law", en ob. cit., Doctrim del con-
Chile, 1977, ps. 102/103. h t o del Estado.
sohre el particular, son 10s propios contratos 10s que se encargan Para demostrar este liltimo aserto, Ariiio Ortiz recorre la prhc-
de reglamentar extensamente las condiciones, convirtikndose asi -tica contractual y jurisp~dencia norteamericanas y observa que
en un cuerpo normativo mis o menos definido, de creciente in- pese a la aparente identificacibn total alli existente entre el
fluencia iuspublicista. contrato phblico y el privado, lo que tebricamente constituiria
el resguardo mhs eficaz d e 10s derechos del contratista frente a
Por su parte, en 10s Estados Unidos ha sucedido un f e d - 10s abusos de la administracibn, Bsta, en definitiva, se ha ido arro-
meno de crecimiento cicl6peo de la contrataci6n estatal, princi- gando una serie de prerrogativas que la colocan en un plano to-
~ a l m e n t ea partir de la dkcada de1 40. Ello ha dado como re-
talmente distinto a1 del particular contratante. Cita como ejem-
sultado la existencia de un gran nhmero de regulaciones especi- plo de ello cuatro privilegios estatales: a ) el empleo habitual de
ficas, las que, homologadas por algunos pronunciamientos judi- la cliusula de reserva de revocacibn; b ) el principio, sentado ju-
ciales, han determinado un alejamiento paulatino entre el conha- risprudencialmente, de que las concesiones se deben interpretar
to privado y el contrato phblico. Asimismo han aparecido 10s
en favor del pliblico; c ) el reconocimiento en todo momento del
denominados Board of Contracts Appeals, que a partir de la dB-
.eminent domain del Estado, que el autor traduce como facultad
cada del 60 se han convertido en verdaderos tribunales adminis- expropiatoria, y d ) el notable desarrollo del poder de policia
trativos especiales, cuyas decisiones s610 admiten una limitada (police power).
revisi6n por 10s Tribunales ordinarios. Su importancia es tal, que
Con10 conclusi6n dice: "El gobierno (se refiere a1 inglBs y a1
la doctrina que emerge de sus decisiones ha selvido para que
norteamericano) tiene siempre el poder de alterar sus contratos
fuera tomando cuerpo una nitida distinci6n entre el contrato del
cuando ello sea necesario para el bnen gobiemo de la colecti-
Estado y el del derecbo comlin. En opini6n de Donald Frezen vidad. Tal es en definitiva el contenido de la executive necessity's
(citado por Arifio Ortiz) la doctrina de 10s Board "ha establecido doctrine del derecho inglBs o del principio del governmental efec-
las bases para el posterior desarrollo de un derecho sustantivo tiveness de la jurisprudencia nnrteamericana", por ello afirma tam-
de la contrataci6n del Estado, que se aparta del derecho comJn bikn que "el baz de obligaciones y derecbos de un contrato del
de 10s contratos". gohierno de 10s Estados Unidos nada tiene que ver en la mayoria
Destaca Arifio Ortiz que este fen6meno ha tenido lugar a ,de 10s casos con el modelo tipico del contrato p r i ~ a d o " ~ ~ .
pesar del natural rechazo que el mundo anglosajbn posee respec- En su opini6n ello deviene, en definitiva, de la diferencia
to de las teorizaciones, y a pesar tambikn del apego a la fuerza sustancial existente entre la naturaleza de una contrataci6n estatal
mitica de 10s principios del Common Law. y la del contrato de derecho privado, que se finca fundamental-
En base a estas preliminares indagaciones, este autor extrae mente en que aquBlla esth ordenada a nna finalidad de satisfac-
cuatro conclusiones en cuyo derredor gira su trabajo: ci6n directa e inmediata de un interks pliblico.
1) El contrato privado nunca ha sido marco adecuado para Por lo tanto, en definitiva, frente a la imposibilidad de so-
las relaciones del Estado. meter el Estado a1 derecho comlin, este autor encuentra plausible
2 ) Ello ha sido asi, incluso en aquellos paises en que se el esfuerzo de buscar una legislaci6n especifica para las contra-
proclam6 una total sumisi6n a1 contrato privado. taciones del Estado, hnico medio de evitar el arbitrio judicial que
3 ) Desde todo punto de vista es conveniente que el con- puede tornarse perjudicial para 10s particulares contratistas.
La publificaci6n del derecho administrativo anglosajbn es,
trato del Estado posea su propia regulacibn, la cual no es de
por lo demis, una situaci6n generalizada que abarca todo el Qm-
dominaci6n sino de liberaci6n y garantia.
bit0 de la actuacibn administrativa de las naciones cuyo derecho
4) La experiencia indica que el contratista del Estado esti reconoce tal origen. h i , Charles Debbasch, a1 analizar la influen-
mAs indefenso en 10s paises del Common Law que en aquellos
e n 10s que existe una regnlaci6n especifica del contrato adminis-
trativo. 45 Ob. cit., p. 46.
sobre el particular, son 10s propios contratos 10s que se encargan Para demostrar este liltimo aserto, Aririo Ortiz recorre la pric-
de reglamentar extensamente las condiciones, convirtikndose asi -tica contractual y jurisprudencia norteamericanas y observa que
en un cuerpo normativo mis o menos definido, de creciente in- pese a la aparente identificacibn total all! existente entre el
fluencia iuspublicista. contrato phblico y el privado, lo que te6ricamente constituuia
el resguardo mis elicaz de 10s derechos del contratista frente a
Por su parte, en 10s Estados Unidos ha sucedido un f e d -
10s abusos de la administraci6~1,ksta, en definitiva, se ha ido arro-
meno de crecimiento cicl6peo de la contrataci6n estatal, princi-
gando una serie de prerrogativas que la colocau en un plano to-
palmente a partir de la dkcada del 40. Ello ha dado como re-
talmeute distinto a1 del particular contratante. Cita como ejem-
sultado la existencia de un gran nimero de regulaciones especi-
plo de ello cuatro privilegios estatales: a ) el empleo habitual de
ficas, las que, homologadas por algunos pronunciamientos judi-
la cliusula de resewa de revocaci6n; b ) el principio, sentado ju-
ciales, han determinado un alejamiento paulatino entre el contra-
risprudencialmente, de que las concesiones se deben interpretar
to privado y el contrato piblico. Asimismo han aparecido 10s
en favor del plihlico; c ) el reconocimiento en todo momento del
denominados Board of Contracts Appeals, que a partir de la d6-
.eminent domain del Estado, que el autor traduce como facultad
cada del 60 se han convertido en verdaderos tribunales adminis-
expropiatoria, y d) el notable desarrollo del poder de plicia
trativos especiales, cuyas decisiones s610 admiten una limitada
(police power).
revisi6n por 10s Tribunales ordinarios. Su importancia es tal, que
Como conclusi6n dice: "El gobierno (se refiere a1 inglbs y a1
la doctrina que emerge de sus decisiones ha servido para que
norteamericano) tiene siempre el poder de alterar sus .contratos
fuera tomando cuerpo una nitida distinci6n entre el contrato del
cuando ello sea necesario para el buen gobiemo de la colecti-
Estado y el del derecho comhn. En opini6n de Donald Frezen
vidad. Tal es en definitiva el contenido de la executive necessity's
(citado por Aririo Ortiz) la doctrina de 10s Board "ha estahlecido
doctrine del derecho inglks o del principio del governmental efec-
las bases para el posterior desarrollo de un derecho sustantivo
tiveness de la jurisprudencia norteamericana", por ello afirma tam-
de la contrataci6n del Estado, que se aparta del derecho com6n
bikn que 'el haz de obligaciones y derechos de nn contrato del
de 10s contratos".
gobiemo de 10s Estados Unidos uada tiene que ver en la mayoria
Destaca Arifio Ortiz que este fen6meno ha tenido lugar a .de 10s casos con el modelo tipico del contrato p~ivado"'~.
pesar del natural rechazo que el mundo anglosaj6n posee respec- En su opini6n ello deviene, en definitiva, de la diferencia
to de las teorizaciones, y a pesar tambikn del apego a la fuerza sustancial existente entre la naturaleza de una contrataci6n estatal
mitica de 10s principios del Common Law. y la del contrato de derecho privado, que se fiuca fuudamental-
En base a estas preliminares indagaciones, este autor extrae mente en que aqu6lla estA ordenada a una finalidad de satisfac-
cuatro conclusiones en cuyo derredor gira su trabajo: ci6n directa e inmediata de un interks pliblico.
1) El contrato privado nunca ha sido marco adecuadp para Por lo tanto, en definitiva, frente a la imposihilidad de so-
las relaciones del Estado. meter el Estado a1 derecho comin, este autor encuentra plausible
2) Ello ha sido asi, incluso en aquellos paises en que se el esfuerzo de bnscar una legislaci6n especifica para las contra-
proclam6 una total sumisi6n a1 contrato privado. taciones del Estado, hnico medio de evitar el arbittio judicial que
puede tornarse perjudicial para 10s particulares contratistas.
3) Desde todo punto de vista es conveniente que el con-
trato del Estado posea su propia regulacidn, la cual no es de La publificacidn del derecho administrativo anglosaj6n es,
dominaci6n sino de liberaci6n y garantia. por lo demis, una situacibn generalizada que abarca todo el h-
bit0 de la actuacibn adrninistrativa de las naciones cuyo derecho
4) La experiencia indica que el contratista del Estado esti
reconoce tal origen. Asi, Charles Debbasch, a1 analizar la influen-
mis indefenso en 10s paises del Common Law que en aquellos
en 10s que existe una regulaci6n especifica del contrato adminis-
.trativo.
anteriores, estas excepciones parecen ser tan numerosas que real-
miento en cualquier tiempo con notificacihn previa (cliusula 44).
mente le quitan sentido a la idea del rkgimen excepcional.
La autoridad tiene tambikn atribuidos determinados poderes nor- En definitiva, t a m b i h en el derecho anglosajhn las contra-
rnalmente ejercitables s61o por un arquitecto o ingeniero. Esto in-
taciones del sector phblico han dejado, en la realidad, d e recono-
cluye el poder de otorgar extensiones de plazo (cliusula 28), de cer modulaciones excepcionales a1 rkgimen del derecho c o m h ,
dar instrucciones en cuanto a1 costo de 10s principales items (clhu- para configurarse wmo un verdadero instituto sustantivo y perte-
sula 3 8 ( 4 ) ) de decidir quk sumas deben ser pagadas a1 contratis- neciente a1 derecho phblico.
ta (cliusula 41(1)) y resolver cualquier disputa acerca de 10s cer-
tificados provisionales (cliusula 4 2 ( 3 ) ) . En cuanto a esto liltimo,
la autoridad seri parte en la d i ~ p u t a " ~ ~ .
$ 5. LOS CONTRATOS CELEBRADOS POR LAS EMPRESAS
Como se ve, aun en un derecho de tan diferente origen y tra- DE PROPIEDAD DEL ESTADO
dici6n que el nuestro, 10s contratos del Estado se someten a1 mis-
mo modelo "exorbitante", sin duda porque el r6gimen juridic0 del El modern0 Estado de la Procura Existencial 61 utiliza como,
derecho administrativo es el que se ajusta a la naturaleza de tales uno de sus instrumentos para la realizacihu del bien comhn la
contrataciones, por mis calificativo de "privados" que se les quie-
ra otorgar.
Precisamente, para corregir esta confusa calificaci6n de "pri-
citado por Pugliese, F. P., I contrani delle ammin~razirmifederali negli S b .
vados" en muchas ocasiones se recurri6 a considerarlos como ex- ti Uniti D'America, Dott A. Milani, Padova, 1974, p. 109, nota 44:
cepciones a la regla general del cuntract h w , en especial cuando "It is conceded by defendant that under ordinary principles of contrad
el sometimiento a1 derecho comhn pudiese significar una contra- law an offeror may withdraw his offer, not under seal or for a consideration,
dicci6n con una public policy Como se ha visto en 10s pirrafos at any time before acceptance, and that his right of revocation e d t s even
though the offeror agreed to keep the offer open for a time certain. DB
fendant contends, however, that this rule does not apply here, either because
of regulations pursuant to which plaintiff's bid was submitted, or becaw-
49 Uff, oh. tit., Construdion law, ps. 118/119: "One notable feature
government contracts constitute a well recognized meption to the general
of the form is the very wide powers given to the 'Superintending Officer" rule".
" . . . It is apparent from in this case that if these regulations [ASPR.~
(S.O.), to whose satisfaction the work must be carried out. He is empo-
wered to give instructions in regard to variations, discrepancies between con- 23031 are controlling, the attempted withdrawal by plaintiff of its bid wa;
tract documents, removal and replacement of work or materials, the order without legal effect. Plaintiff contends that the regulations do not control,
of execution of the works, hours of working, suspension of work, replace- and that the application of them in this case would enforce a penalty upon
ment of workmen, opening up the work, making g o d defects after comple- plaintiff, and create out of the transaction a contract, where the fundamental
tion, emergency work, use of materials excavated from the site, and \ny elements of a contract are lacking.
other matter as to wich it is necessary or expedient for the S.O. to issue 'Where there is no mistake, unreasonable delay, or the like, there can
instructions, directions, or explanation, (clause 7 (1)). Other powers are exer- he no injustice in holding the bidder to the conditions of the Invitation for
cisable directly by the employer ('the authority'). Thus the authoricy may
Bids. (30 Ops. att'y Gen. 56, 64). If, on the other band, the bidder bas:
employ other contracton should the contractor fail to comply with an ins- the right of withdrawal in all cases, innumerable frauds could be perpetrated.
kuction of the S.O. (dame 8); and may determine the contract in case of against the United States by the parties engaged in the bidding.
various defaults or insolvency (clause 45) or corruption (clause 55) or with- 'There is no evidence that plaintiff's attempted revocation was due to
out default at any time on notice (clause 44). The authority is also gi-
any of the above factors. Accordingly, we hold that plaintiffs attempted
ven certain powers normaly exercisable only by an architect or engineer. revocation was ineffective, and that a valid contrad was constituted upon
These include the power to give extensions of time (clause 28), to give timely acceptance by the government, under the facts and circumstances of
directions as to prime items (clause 38 (4) ), to decide s u m to be paid this case".
6 1 Bma, oh. cit., Ptincipiar. . ., p. 49 y ss., con citas de Forsthoff,,.
to the contractor (clause 41 (1) ) and to determine any dispute as to in-
terim certificates (clause 42 (3) ). As to the latter provision, the authority Trdado d e derffiho odminirtrdioo y Sociedad i n d w W y odminiphacidn
will he a party to the dispute". ndblica.
6 0 Asi lo ha planteado la Court of Claims en el caso "Scott vs. U.S.",
intervenci6n en la vida econ6mica a travks de empresas comercia- Por tal motivo, a las empresas comerciales-industriales del Es-
les e industriales de su creacibn y propiedad. tado les corresponderi una personalidad juridica de derecho ph-
La naturaleza juridica de estas empresas, que no s610 actlian blico, serin personas ptiblicas 54, y las relaciones juridicas que en-
en el campa de 10s servicios pliblicos, sino tambikn en la presta- tableu con 10s administrados (obviamente tambikn las que enta-
ci6n de otros servicios y obtenciirn de bienes de muy variada in- blen con otras personas phblicas) estarin regidas por el derecho
dole, ha sido harto discutida por la doctrina '=. administrativo.
Sin embargo, no es ~osibledejar d e apreciar que cualquiera Si ecto es asi en el orden de 10s principios, la personalidad
pliblica de estas empresas es mucho mis perceptible en el orden
sea la tipologia juridica a la que estas empresas pertenezcan (em-
prsctico o de regulacihn juridica concreta.
presas del Estado de la ley 13.653, sociedad de economia mixta
d e la ley 12.962, sociedad an6nima con participaci6n mayoritaria Asi el anilisis de las regulaciones legales que crean estos tipos
estatal de la seccibn VI de la ley 19.550, sociedad del Estado de la ernpresarios, seglin lo enumerado en pirrafos anteriores, demostra-
r i ficilmeute que 10s mismos se corresponden con el "modelo"
ley 20.705, y otras regulaciones especiales como la Empresa Fe.
o "maqueta" del instituto persona phblica que puede ser construi-
rrocarriles Argentines de la ley 18.360) rehnen idknticos requisi-
do siguiendo el mktodo de interpretacibn dcl rdgimen juridico eror-
tos que 10s enumerados por la doctrina para cararterizar la ad-
bitante (supra, $ 3 ) , y que en particular sus contratos tambikn
ministracihn descentralizada 53, es decir el sector de la Adminis-
coinciden con el modelo de contrato administrativo o contrato so-
tracihn Pliblica que incluva aquellos servicios o complejos or- metido a un rkgimen juridico exorbitante.
ginicos estatales que fueron dotados por el propio Estado de per-
Por lo tanto es posible afirmar que 10s contratos que celebran
sonalidad juridica independiente.
las empresas de propiedad del Estado, siempre que tal caricter
Por lo demis, en el orden de 10s principios, la creaci6n de de propietario no sea resultado de una accidental intervenci6n es-
estas empresas por parte del Estado no puede responder a la tatal o por inversiones realizadas siguiendo, entre otras razones,
necesidad de satisfacer fines de lucro, es decir fines de naturale- una politica de fomento, son contratos administrativos. Asi lo esti
za privada, que son ajenos a la realidad estatal, sino, por el con- reconociendo el mismo legislador, cuando, por ejemplo, a1 regular
trario, tal creaci6n encuentra su exclusivo fundamento en una de- el contrato de consultoria mediante la ley 22.460 anuncia, en el
cisi6n orientada a la consecuci6n de determinados objetivos de fundamento de la ley, que con la mismas busca satisfacer ". . . l a
politica econbmica y social, previa~nentedefinidos por el Estado. necesidacl de un ordenamiento para la mencionada actividad en a s
Por consiguiente, estas empresas, que no son m&s que una relaciones con 10s diferentes dmbitos estatales que necesiten la con-
forma de actuacibn estatal, no tienen otro fin que el del Estado tratacirin de servicios de consultoria" (el subrayado es agregado).
mismo: el bien comlin. Asi, con ese fundamento, el art. lo de la ley citada dispone: 'La
presente ley rige la promoci6n y contrataciirn de servicios de con-
Como se ha expuesto en sup?@, $ 2, la naturaleza distributiva
sultoria que bajo la forma de locacihn de obra intelectual o de
del bien cornfin hace que, en las relaciones juridicas en que kste
servicios requiera la Administraci6n PGblica cacional, sus depen-
est& en juego, dichas relaciones se rijan por la virtud de la justicia dencias, reparticiones y entidades ?utArquicas o descentralizadas,
disttibutiva, a la que corresponde nn rkgimen de derecho publico. las empresas y bancos del Estado, las sociedades del Estado re-
Obviamente, en la relaci6n juridica de derecho phblico s610 podri gidas por la ley 20.705 y las sociedades de cualquier naturaleza,
.ostentar el caricter de persona juridica pliblica aquella que asu- con participaci6n estatal mayoritaria, a las empresas consultoras
m a la posici6n de distribuidora del bien comlin. privadas".

62 Ver, sintesis en Barra, ob. cit., Principias.. .. p. 184.


" Ibid., ps. 190/192.
63 IM,ps. 180/184
funcionamiento de la Administracibn, que conviene no perder de
vista a1 eujuiciar estas cuestiones contractuales 58.
A partir de esta concepci6n, y traicionando la original moti-
vacibn, va a iniciarse el proceso de "sustantivaci6n" del contrato
Eduardo Garcia de Enterria y Tomis Ram611 Fernindez 55 administrativo, es decir, el considerarlo sometido a un regimen
han sostenido una aguda critica a la que ellos llaman "doctrina juridico propio y especifico, lo que se agrava a partir de la con-
sustantivadora del contrato administrativo". cepci6n del derecho administrativo por el criterio material del
servicio plihlico, originado en la escuela de Burdeos y que encon-
Parten estos prestigiosos autores espaholes de considerar que
tr6 su especial mentor en Gast6n Jkze: todo el derecho adminis-
histirricamente (en el derecho franc6s y en 10s distintos regimenes
trativo se explica como un derecho especial de 10s servicios plibli-
juridicos que ban encontrado en aquel su fuente de inspiraci6n)
cos, compuesto de reglas exorbitantes del derecho comlin surgidas
la distinci6n contratos administrativos-cnntratos privados "comien.
e impuestas por y para la gesti6n de 10s servicios pliblicos. A
za siendo una distinci6n que juega exclusivamenrt: en el plano pro-
partir de aqui no se tardari en afirmar "que si 10s Tribunales ad-
cesal y que carece de toda trascendencia en el plano material o ministrativos son competeutes para conocer de 10s contratos admi-
sustantivo"b6. Asi, el contrato celebrado por la Administraci6n
nistrativos, ello es porque se trata de aplicar un rkgimen especial;
era considerado como un tipico "modo de gesti6n" sometido a1 es decir, el rkgimen priblico de 10s servicios pliblicos"60.
derecho privado, distinguikndolo de esta manera de 10s actos d e
Sin embargo, a partir de que con posterioridad a la segunda
autoridad o de imperium. en donde encontraba su primera sistema-
posguerra se comprueha la posibilidad de proceder con normali-
tizaci6n el derecho administrativo. Por ello, "a todo lo largo del
dad a la gesti6n privada de 10s semicios plihlicos, "comienza enton-
sigh XIX, tanto la ley como la doctrina y la jurisprudencia, lo mis- ces a advertirse que esta diferencia de naturaleza y esa diversi-
mo en Francia que en Espafia, serin muy conscientes d e que la dad de rkgimen de 10s contratos administrativos y de 10s contratos
rinica singularidad de 10s contratos administrativos es una singu- privados que se predica como algo axiomAtico dista mucho de ser
laridad de rkgimen jurisdiccional, que no afecta en ninglin caso tan radical como se pretende, y se advierte tambikn que este modo
ni a su naturaleza ni a su regulaci6n de fondo, que siguen siendo de enteuder el problema tiene muy poco que ver con el plantea-
las propias de toda cuesti6n civil" Por ello agregan 10s auto-
miento original del mismo, que era un planteamiento puramente
res comentados: 'la distinci6n contratos administrativos-contratos pragmitico, limitado a1 tema procesal" 6'.
privados es, pues, exclusivamente en su origen una distinci6n a
A partir de este anilisis hist6rico del problema, aue es co-
efectos jurisdiccionales y no sustantivos" 5 8 , mientras que esta dis- rrectisimo, 10s autores comentados creen descuhrir la "naturaleza
tinta distribucibn de competencias jurisdiccionales se encontraba artificial" de la diferencia entre 10s dos tipos de contratos, sin ad-
basada en puras razones pragmiticas que aconsejaban que 10s liti- vertir que se trata simplemente de un desarrollo propio del caric-
gios nacidos de 10s llamados "contratos administrativos" -en parti- ter, precisamente evolutivo del derecho administrativo, tan influi-
cular 10s referidos a obras y servicios prihlicos- fuesen radicados do, de manera directa, por las circunstancias politicas, sociales y
en 10s tribunales en lo contenciosoadministrativo, "porque estos tri- econ6micas de cada kpoca.
bunales son mis ripidos y expeditivos y porque conocen mejor el
Es cierto que en un momento inicial de esta evoluci6n no
se encontraba, doctrinariamente, la distincibn de naturaleza entre
10s dos tipos de contratos. Pero no debe olvidarse que esa era una
66 Garcia de Enterria, E., y Femhdez, R, Curso & derecho admi-
nistrativo, t. I, ps. 5741587, Civitas, Madrid, 1980.
66 o b . cit., p. 575. 68 Ob. cit., p. 576.
67 Ob. cit., p. 575. 8o Ob. cit., p. 576.
68 Ob. cit., p. 576. Ob. cit., p. 579.
4poca "primitiva" en el desarrollo del derecho administrativo y que
pretaci6n rigurosa que en muchos casos pueden conducirlos a la
e s la evoluci6n de este derecho -con una sustantividad que no
nulidad total o parcial; b ) tales prerrogativas se utilizan o tienen
puede serle negada sin poner en crisis toda nuestra materia y
su aplicacibn en el seno de la relacidn furidica establecida por la
sin contradecir la realidad que nos muestra el derecho positivo
Administracibn, de manera que no son connaturaIes a la Adminis-
d e paises con tradiciones culturales e institucionales comunes a las tracibn sino a las relaciones juridicas (entre ellas, las contractuales)
nuestras- la que provocb la concepci6n del contrato admiuistra-
de las que la Administracibn forma parte. Es decir, en abstracto,
tivo, dentro del marco del derecho administrativo, como sometido sin considerar una relaci6n juridica determinada, tales prerrogati-
a una tipicidad juridica propia, sin perjucio d e reconocer su obli- vas ( y las garantias del administrado, como ya se ha visto) sim-
gada dependcncia d e 10s principios genc-rales del institute contrato
plemente no existen. Por lo tanto, pertenecen mhs a1 contrato (en
como concepto juridico gendrico y no exclusivo del derecho pri-
este caso) que a la propia Administracibn y son suficientes, por su
vado. En este sentido, Garrido Falla, comentando la aplicacibn
entidad y efectos, para darle a1 contrato no s610 una "modulacibn"
a1 contrato administrativo del principio civilista del contrato lez diferenciadora del contrato civil, sino una "personalidad" juridica
inter pnrtes "afirma que "cuanto menos evolucionado aparezca el
rkgimen juridico-adrninistrativo de un deterrninado pais, la apli- propia, un rkgimen juridico sustancial, tipico y caracteristico. Aun
asi, y por ello mismo, es cierto lo afirmado por 10s autores citados
caci6n del principio referido seri tanto mas rigurosa" ", lo que en cuanto a que la presencia subjetiva de la Administraci6u es un
es lo mismo que decir que cuanto menos evolucionado aparezca el
requisite sine qua non del contrato adrninistrativo 6 5 . ES qne sin
rkgimen juridico-administrativo d e un determinado pais, mds se Adrninistracibn Phblica no hay relaci6n juridica administrativa
confundird el re'gimen del contrato administrativo con el contrato
y por lo tanto n o puede haber contrato administrativo. Pero se
d e defecho privado, o tambikn, serd m& ddificil reconocer la sus- trata de la Administracibn Phblica en un sentido real y no mera-
tantividad d e fe'gimen juridic0 del contrato administmtivo. mente formal, centralizada y descentralizada, incluyendo a las em-
Por ello, la evolucibn doctrinaria, quiz& por caminos no muy presas comerciales-industriales del Estado, tal como se expuso en
acertados, fue construyendo, sobre la realidad normativa y juris-
el parigrafo anterior. En ciertos casos, ademis, la relacibll ju-
prudential, esta tesis del contrato administrativo que hoy puede ridica administrativa, y en particular el contrato administrativo.
expresarse con el concepto (engafioso en el nombre, pero certero se originarhn en la presencia de un suieto vrioado auxilim de la
en su sentido) de contrato sometido a un rdgimen juridic0 exor- administracidn, bajo la tkcnica de la 'delegacibn transestructural
bitante. de cometidos 6T.
Sobre este punto Garcia de Enterria y Fernandez critican la
La sustantividad del contrato administrativo, por otra parte,
doctrina basada en ]as prerrogativas d e la Administracibn, como
no depende tampoco de la ubicaci6n metodolbgica que el legisla-
tipificadora del contrato, por cuanto tales prerrogativas pueden I
estar pactadas en 10s contratos privados o bien no son propias del dor haya decidido para su regulaci6u positiva. Asi, nbtese el caso.
por ejemplo, del Cbdigo Civil etiope de 1960, que en su titulo
contrato administrativo, sino connaturales a la posici6n de supre- j1 XIX regula 10s contratos adrninistrativos. Sin embargo, ya en el
macia que siempre ostenta la Administracibn en la relacibn juri- I
primer articulo de ese titulo, el 3.131, establece que "Los coutra-
dica 63, es decir que son atinentes "a1 plano de ejercicio de 10s de-
tos celebrados por el Estado o por las otras personas administrati-
rechos, no p~.opiamenteal fondo de 10s mismos" 0 4 .
Sin embargo, no puede dejar d e notarse que: a ) tales pactos !
vas estin sometidos a las disposiciones del presente c6digo.. .",
per0 en su inc. 20 establece que "Las disposiciones del presente ti-
en el derecho privado deben ser expresos y sometidos a una inter-

82 Garrido Falla, ab. cit., Trotado.. ., t. 11, p. 101.


I tulo complementan esas disposiciones (generales) a las cuales sus-

Garcia de Enterria y Fernindez, R., ob. cit., ps. 581/586 s& Ob. cit, PS. 586/588.
63
84 ob. cit., p. 583. . ..
Barra, ob. cit., Plincipios. Cap. Vl, p. 170.
87 Barra, ob. cit., Principbs. . ., Cap. VII, ps. 228 y siguientes
tituyen cuando el contrato presenta las caracteristicas de un con- De acuerdo con lo expuesto en pirrafos anteriores, 10s efectos
trato administrativo", lo que importa el reconocimiento de la sus- del principio de la mutabilidad generan beueficios y cargas para
tantividad del contrato independientemente del cnerpo de normas las dos partes contratantes y no s610 para la Administraci6ra"'.
en las clue fue ubicada su concreta regulaci6n. Como se veri mds adelante, en virtud de este principio, el contra-
tista particular podri imponer a la Administracibn variaciones en
la situaci6n econ6mico-financiera del contrato, a 10s efectos de
mantener inalterada la relacibn de justicia distributiva que ese con-
$ 7. EL PRINCIFIO DE I
.
& MUTABILIDAD DEL
CONTRATO ADMINISTRATIVO trato supone.
Esta mutabilidad del contrato administrativo convierte en in-
El principal efecto deI rkgimen exorbitante connatural a 10s aplicable para 61 ciertos principios que s6lo se explican en funci6n
contratos administrativos es el pincipio d e la mutabilidad del con- de la inmutabilidad del contrato de derecho civil, por ejemplo, la
trato 6 8 . teoria de la imprevisi6n.
Con ello, el contrato administrativo se aleja de la rigurosa fle- En efecto, en la nota 69 se ha serialado a este principio como
xibilidad de 10s contratos de derecho privado, caracterizada por la una excepcibn a1 rigorism0 propio del contrato de derecho comhn.
regla del contrato lex inter-paqtes ". Pero si la regla no existe, la excepci6n pierde soporte 16gico: la
Esto no importa un total abandon0 de 10s efectos del acuerdo excepcidn vive por, para y en funcibn de la regla, no existe sin
d e voluntades que dio vida a1 contrato. El principio de mutahili- ella.
dad encontrard sus propios limites en el objeto del contrato y en De aqui que no se pueda aplicar esta teoria fuera del dmbito
la finalidad que motiv6 la contrataci6n: la satisfaccibn de un con- propio de 10s contratos civiles y sblo en las situaciones que el
creto interes pfiblico, por parte de la Administracibn y el bene- derecho privado la admite.
ficio econbmico previsto por parte del administrado. La mutabilidad del contrato administrativo determina una
Respetados estos limites, el contrato administrativo aparece, gran distinci6n de regimen juridico con respecto a 10s contratos
a lo largo de su ejecuci6n "como un sistema en cierto sentido civiles, que exige tomar precauciones cientificas en el momento de
viva" 0' decidir la aplicacidn a ellos de principios juridicos que le son ex-
trarios 72.
La aceptacibn y aplicacibn del principio d e la mutabilidad de
68 Garrido Falla, ob. cit., p. 104: ". . .la doctrina del contrato admi-
nistrativo se apoya como en una de sus ~iedrasangalares en la ~osibilidad
de su mutacibn".
89 En el modem0 E s t ~ d oSocial de Derecho, presidido por la idea de 51 Garrido Falla, ob. cit., p. 105: ". . .la mutabilidad del contrato ad-

la justicia social en el m r c o de la comunidad organizada como plasmaci6n ministrativo ofrece una doble vertiente: de una parte es una consecuencia
del ius umiandi que se reconoce a la Administracih; de otra, resulta de la
concreta de la cosmovisi6n humaniata-cristiana, esa regla se ve sometida a
importantes excepciones Asi, por ejem~la, las teorias o principios "de la admisi6n de una serie d e teorias encaminadas a explicar, en beneficio del
impre~isi6~"(art. 1198, C6d. Civil); del "abuso del derecho" (arts. 1071, contratista, la adaptacih del contrato a las circunstancias sobrevenidas". En
2513 y 2514, C6d. Civil); del "vicio de lesi6n subjetiva" (art. 954, Cid. Ci- realidad la mutabilidad del contrato -para las dos partes- siempre es con-
vil) y, en especial, a travis de lo que Llambias denomina "expansi6n del secuencia de circunstancias sobrevenidas que obligan a incorporar a1 contratc
principio de equidad" o "penetraci6n de la equidad en el derecbo positivo aspectos no decididos con anterioridad. Pero esto no justifica la pretensi6n
vigente", tal es el caso, entre otms, de 10s arts. 907, 1089, 1316, 1638, 3477, de explicar esta regla de la mutabilidad con instihltas privatistas.
etc. (Llambias, J. J., Tratndo de Derecho C i d . Parte Generd, Aphdice, 7 V o b r e el particular, Barra, R. C., El rdgimen de 10s moywes costos
ps. 10/12, Buenas Aires, 1969). Pero es importante destacar que dstas son en la Obra Pliblica Y la Teoria de in Impreoisidn, ED, 54-719. En ese lugar
s61o excepciones, que s610 en circunstancias extraordinarias o muy especiales se resaltan las diferencias esenciales de concept0 y regimen juridico, que
pueden derogar las reglas del pado sunt s e r u m f a y del contrato l a inter- impiden confundir la teoria de la imprevisi6n receptada por nuestro art.
partes. 1198 del Gdigo Civil y el regimen de la variacinn de castas de la obra phblica
70 De LabaudBre, citado por Garrida Falla, ab, cit., p. 105.
tal como se encuentra regulado en las leyes 12.910 y 15.285.
56 CONTRATO
DE OBRA P ~ B L I C A

10s contratos administrativos supone un mayor desarrollo del de- Pero este derecho a la intangibilidad de la remuneraci6n no:
recho administrativo, en especial como sisterna juridico capaz de se manifiesta s61o ante las modificaciones a1 contrato dispuestas
explicarse a si mismo, sin perjuicio de reconocer la unidad del or- por la Administraci6n cocontratante, como es el caso de las zltera-
den juridico y sus consecuencias. Por esa raz6n, Garrido Falla, ciones del proyecto que produzcan aumentos o reducciones de cos-
a1 destacar el alejamiento del contrato administrativo de la fhrmo- tos o trabajos contratados (arts. 29, 30, 37 y 38, ley 13.0fX) o 10s
la del contrato lex interpartes seiiala que ". . . cuanto menos evolu- perjuicios producidos por la suspensi6n de la obra dispuesta For
cionado aparezca el regimen juridico-administrative de un deter- el coxitente (art. 34, ley 13.064).
rninado pais, la aplicacidn del principio referido sera tanto mas Por el contrario, tal principio se aplica tambikn ante supues-
rigurosa" 7 3 , conlo fue ya citado. tos extraiios a la administraci6n comitente, como, por ejemplo, la in-
demrrizaci6n por las cargas materiales imprevistas 16; por 10s da-
iios provocados por el caso fortuito o fuerza mayor "; por el hecho-
$ 8. LA INTANGIBILWAD DE LA REMUNERACI~N del principe o act0 de 10s poderes pljblicos por el hecho tec-
DEL CONTRATIST.4 PARTICULAR noldgico nuevo
Resulta tambibn una consecuencia necesaria del principio de
El rQgimen exorbitante del contrato administrativo tiene, en la intangibilidad de la remuneraci6n -y no una aplicaciou de la
lo que a 10s benkficios del contratista privado se refiere, su prin- teoria de la imprevision, propia de 10s contratos civiles- el reco-
cipal expresi6n en el principio de la intangibilidad de la remune- nocimiento de la variaci6n de costos, tal como lo receptan las leyes
~acidn74. 12.910 y 15.285 para 10s contratos de obra pliblica.
Este principio es la exacta contrapartida de la otra regla ya El principio de la 'intangibilidad de la remuneraci6nn plantea
analizada: la mutabilidad del contrato adrninistrativo. una cuesti6n todavia indefinida doctrinariamente: &La adminis-
Esta relaci6n ha sido explicada por la doctrina con suficiente traci6n cocontratante toma a su cargo todo el ilea drl contrato o
claridad: "Existe, pues, en el contrato administrativo una pro-
porcidn entre las obligaciones del cocontratante y su remuneraci6n.
Asi, la Administracidn, en la medida en que tiene derecho a hacer 78 Diez, ob. cit., ps. 551/555.
que varien esas obligaciones, ha de hacer que automiticamente 17 Ley 13.064, art. 39. Explica Ganido Falla, ob. cit., p. 116, que
en el contrato adrninistrativo ". . .la fuerza mayor tiene una significacibn
varie la remuneracibn para restablecer el equilihrio del sistema, peculiar que a menudo ha pasado inadvertida: no es causa justificante del
con el objeto de que la resultante sea constante. Este fen6meno incumplimiento del contrato por parte del contratista privado, sino causa
es el que se conoce con el nombre de ecuaci6n financiera o equili- determinante de una indemnizaci6n a su favor".
brio financiero del contrato" 76. 78 Debe distinguirse el "becho del principe" d e 10s actos del comitente
estatal. E l primero es un act0 o decisibn del Estado en sentido lato, aieno
a1 contrato, aunque pueda ocasionalmente referirse en forma exclusiva a ese
Ob cit., p. 101. Lamentablemente este autor no alcanza a distin- contrato o ese contratista privado exclusivamente. El segundo, en cambia, es
guir totalxente la teoria d e la imprevisi6n de la mutabilidad del contrato un acto o un hecho emanado del propio comitente y es regulado por el r6gi-
ad&nistrativo a favor del contratista ( ~ s .112/114). En realidad, el 16- men indemnizatorio del mismo contrato; se trata d e una situacwn contractd.
gimen juddico-adminirtr;tivo resiente su evoluci6n tanto a1 serle aplicadas ' 8 La Procuracibn del Tesoro de la Nacibn (Expte. 15.829/75, Secre-

Ins reelas civilistas como las exce~ciones-tamhi&n civilistas- a tales reglas. taria de Estado d e Transporte y Obras Pfiblicas, dictamen del 18/7/75) ha
;a Diez, ob. cit., ps. 5 3 ~ 5 3 8 . reconocido recientemente como indemnizables dos "mayores costos de inge-
7 5 Diez, oh. cit., p. 530. Tambikn Garrido Falla, ob. cit., p. 1 1 2 nieria y fabricaci6n de estructuras metAlicas debidos a1 hecho tecnol6gico
quien sostiene que la idea del equilihrio financiero "supone que toda altera- nuevo". Si bien esta causal puede ser suhsumida en la de "alteraciones a!
ci6n contractual provocada par la administraci6n basada en exigencias de proyecto", pensamos que guarda cierta independencia conceptual con ella,
inter& oGblico acarrea necesariamente un derecho a indemniucibn a favor pareciendo hacer referencia a razones totalmente ajenas a la comitente es-
del contratista que venga a compensarle del perlmcio econbmico que la t%tal, provocadas tanto por la evoluciirn tecnolb@ca coma por una mejor
modlficaci6n le ha irrogado". decisi6n acerca d e la tecnologia elegida para la prestaci6n a cumplir.
puede sostenerse que para el contratista particular el contrato ad- competir de acuerdo con las bases fijadas por la propia Adminis-
ministrativo es tambikn "a riesgo y ventura"? tracibn.
Por lo expuesto a lo largo del presente trabajo es posible De aqui que a1 redactar 10s pliegos licitatorios y contractuales
afirmar que la administracibn comitente toma totalmente a su car- el comitente estatal debi6 analizar cuiles eran las condiciones eco-
go el dlea del contrato, salvo la que provenga de la mala y cul- n6micas y tkcnicas que iban a permitir la eficaz y justa ejecuci6n
pable gesti6n empresaria del contratista particular durante la eje- del contrato. Luego, al realizar la selecciirn, analizb tambikn cuil
cuci6n del contrato. era el oferente que mejor se ajustaba a tales condiciones.
Debe recordarse que estamos en el imbito de la justicia distri- La vida del contrato qued6 asi fijada -como fotografiada en
butiva, es decir la que establece una relacibn proporcional entre el prospectiva- en ese momento crucial de la contratacibn adminis-
Estado -en cuanto que es gestor de 10s intereses comunitarios- trativa. Alli rigi6 el principio de igualdad, per0 para mantener
y, en este caso, su cocontratante privado. su vigencia siempre, durante la vida real del contrato y no s610
Los distintos ileas que pueden afectar la estructura financiera durante su vida programada.
del contrato (particularmente su costo de ejecuciirn) imponen pa- La igualdad licitatoria se proyecta, asi, en una especie de ul-
ra el contratista particular un mayor esfuerzo financiero, una car- tractividad, hacia el futuro, convirtikndose en un permanente pun-
ga suplementaria que implica cumplir para la Administraciirn una to de comparacwn en la ejecuci6n del contrato. Permite compa-
prestacibn de mayor valor real que el que efectivamente aquklla rar cargas y beneficios asumidos por el adjudicatario con 10s pre-
paga. Con esto se quiebra la igualdad proporcional que esti en tendidos por 10s demis oferentes, pero d e una manera dinimica,
la base del contrato administrativo, puesto que el mayor valor se mis alli de las meras necesidades de la selection y mis cerca de
encontrari soportado s610 por el contratista particular. Dicho de las apremiantes exigencias de la justicia distributiva.
otra manera, la comunidad, representada por el Estado, se bene- Resultaria violado, entonces, el principio de la igualdad si se
ficia recibiendo una prestaci6n con mayor riqueza incorporada a obliga a1 cocontratante particular a asumir mayores cargas y me-
expensas exclusivamente del cocontratante concreto. nores beneficios que 10s que se tuvieron en cuenta al comparar
El principio de la intangibilidad de la remuneracidn, en cam- su oferta con la de 10s anteriores oferentesS1. Resultaria tambikn
bio, mantiene inalterada la relacibn de justicia distributiva, pues distorsionado el principio de igualdad si se pretende trasladar a1
permite que toda la comunidad -incluso el mismo cocontratante
particular en cuanto que contribuyente- soporte por igual en
8 1 La Procuracih del Tesoro d e la Nacibn ('Expte. 10.261/74, Secre-
estricta igualdad proporcional, la carga representada por el ma- taria de Estado de Programaci6n y Coordinaci6n Econbmica, dictamen del
yor valor que afecta a1 objeto del contrato. 13/8/74) ha sostenido expresamente esta postura, aun cuando con una le-
Debe advertirse tambikn que, siendo consecuencia el contra- jana referencia a la teoria d e la imprevisibn. Al admitir la validez de la
modificacibn de f6rmulas de reaiustes no representativas de las reales va-
to aclministrativo de un procedimiento de seleccibn de contratista,
riaciones de costos, la Procuracibn del Tesoro se plant& la posible objecibn
regido fundamentahente par el principio de igualdad, la Admi- que ". . .de adrritirse la soluci6n proyectada se estaria alterando contratos
nistracibn tuvo oportunidad -y debi6 hacerlo- de valorar en ese logrados en licitaci6n y, de este moda, podria haher perjuicios para terceros
momento cue1 era la mejor oferta de las que se presentaron a (10s oferentes no adjudicatanos), ya que se afectaria gravemente el principio
de iguoldod. Par mi parte, entiendo que con la modificacibn de las cliu-
sulas de reconocimiento no se pretende acordar un beneficio gracioso a las
80 Si bien Diez, oh. cit., p. 531, afirma que "el principio del equili- empresas contratistas, sino que tal reforma seria el resultado d e la necesaria
brio financiero no constituye una especie d e seguro del concesionario contra aplicacibn d e 10s principios juridicos y disposiciones legales pertinentes, frente
10s deficit eventuales d e la explotacibn", el tratamiento que hace del tema a circumtanciar sobrevinientes e impreoistns a1 contratar. En idhntica situa-
lo acerca a la concepci6n de Garrido Falla (ob. cit., p. 113) quien admite cibn, pues, se hubiesen encontrado todas las firmas presentadas a lss licita-
que la "comim afirmacibn d e que el contrato administrativo se realiza a ciones respectivas y, por lo tanta, no existe vialacibn de la igualdad que
'riesgo y venturd se encuentra en quiebra". debe regir el procedimiento" (la hastardilla es del texto).
Nadie puede discutir que este es n n principio exorbitante del
contratista las malas previsiones tkcnicas o financieras de 10s lie-~ derecho comlin.
gos, p. ej.: la inclusibn de cliusulas de reajustes alejadas d e la
realidad de la plaza, prevista o imprevista.
En este sentido suelen pactarse en 10s contratos de obras pli-
blicas cliusulas de reconocimiento d e la variation de costos sobre
la base de f6rmulas paramktricas, lo cual se encuentra admitido La evoluci6n de la doctrina administrativa ha permitido no
por el art. 30, apart. c ) , decreto 3772/M, reglamentario de la ley s610 reconocer la existencia de contratos celebrados por el Estado
12.910. Estas fbrmulas son en realidad un mero sistema de apli- (es~ecificarnentepor la Administraci6n Pliblica), sino tambikn de-
caci6n d e la ley 12.910, que busca evitar el normalmente engorro- linear para ello un rkgimen juridic0 tipico y distintivo respecto
so trimite de la verificacibn de la real variaci6n de costos. Asi, d e 10s contratos celebrados por 10s particulares y regidos por el
lo que las partes quieren es a p l i c a ~la ley 12.910 mediante las $61- derecho comlin.
mulas pactadas, pero nunca renunciar a la aplicacibn de tal ley, Sin embargo sigue siendo una necesidad cientifica continuar
que por lo demis es irrenunciable seglin la doctina de la Procu- avanzando con fa1 distincibn, con el prop5sito de precisar mejor sus
raci6n del Tesoro 82. efectos e implicancias.
La concepcibn del contrato administrativo dentro del imbito
Cuando la fbrmula no es representativa -en mis o e n menos,
de la justicia distributiva -garantizada por un rkgimen d e dere-
a favor o en contra d e la Administracibn- de la real variacihn d e
cho pliblico, exorbitante del derecho comliu- serviri para cola-
costos, causando u n perjuicio econbmico importante (lo que se
borar con tal avance. Tambibn tiene esa finalidad y el mismo
valorari de acuerdo con la magnitud del cdntrato) para cuales-
fundamento el definitivo abandon0 de la err6nea construcci6n de
quiera de las dos partes, debe retornarse a la aplicaci6n estricta
10s contratos "de derecho privado de la Administracih", ya que
de la ley, ya sea mediante la modificacibn de la f6rmula e n c'ues-
ti6n o por l a verificaci6n docurnentada de 10s costos. Es cierto, kstos en nada difieren de 10s llamados "contratos administrativos
propiamente dichos".
q u e 10s defectos de las f6rmulas pueden ser originales, es decir
ya existentes a la fecha d e publicaci6n de 10s pliegos. Pero en Por liltimo, seri tambikn un avance adecuado a las actuales
eaigcncias del estado social de derecho reconocer que el "rkgi-
estos casos la Adrninistracidn dehe hacerse responsable de su pro-
men exorbitante" es un sistema integral que alcanza -en benefi-
pia torpeza y prever que, d e acuerdo con la legislacibn en vigor,,
deber6 admitir las reclamaciones de su futuro contratista para que cios y cargas- a la Administraci6n y a 10s administrados. Aceptar
esta postura permitiri explicar ciertos derechos del contratista par-
se le reconozcan las variaciones de costos no satisfecbas por las.
ticular con fundamentaciones de derecho administrativo sin recu-
i6rmulas contractuales. Es que t a m b i h en este caso, de no ad-
rrir a concepciones civilistas, generalmente fuentes de confusibn.
mitirse el principio expuesto, se estaria castigaudo a1 contratista
que formulb la mejor oferta, en comparacibn con el resto de 10s.
oferentes.
Igualdad proporcional frente a 10s antiguos oferentes e igual-
dad proporcional frente a1 resto d e la comunidad; se trata en de-
finitiva del respeto al principio de la igualdad como base del un-
puesto y de las cargas phblicas consagrado por el art. 16 d e nues-
tra Constituci6n National.
ELEMENTOS DEL CONTRATO
DE OBRA POBLICA

$ lo. TR-ABAJOP ~ B L I C O Y OBRA PGBUCA. DISTINCII~N


W N OTROS INSTCIVTOS

Nuestra legislaci6n en materia de obras pliblicas -tanto en:


el orden nacional como en el provincial- parte d e definir, o me--
jor, describir, el concept0 de obra pliblica, para luego, en el resto
del articulado, regular el rkgimen del contrato de obra p6blica1.
Esto es correcto, ya que si bien obra ptiblica y contrato de-
aha pdblica son conceptos evidentemente diferentes (uno es una
realidad existente; el otro es un medio juridic0 instrumentahnente
utilizado para obtener esa realidad), lo cierto es que la mayoria.

1 Por ej., ley nacional 13.064, que define la obra pliblica en su art. 10,
y en el art. 39 establece: "En caso d e sue el Estado resuelva reabzar obras.
pliblicas por intermedio de personas o entidades no oficiales, proceder& con-
forme a lo establecido en la presente ley", para luego, en el resto del ar-
ticulado, regular todo lo atinente a1 contrato de obra p~iblica, desde la a c - ~
tividad administrativa interna, preparatoria del llamado a licitacihn, hasta la
extincih del cantrato. En el mismo sentido, la ley 593 de la provincia.
de Miiones, que define la obra pdblica en sus arts. 1 0 , Z0 y 49, para, a
partir del art. 64 regular el conhato de obra pliblica; tambibn la ley 1864~
de la provincia de Jujuy; la ley 38 de la provincia de La Pampa y el resto
de ks legislacianes provinciales, con muy pocas variantes. El mismo cri-
terio sigue el mis reciente proyecto de ley de reformas a la iey nacionaJ
de obras pliblicas, el proyecto SETOP, que dpfine y describe la obra pli-
blica en sus arts. 1' y 2p, para comenzar a regular el cantrato de obra-
pdblica (en su etapa preparatoria de estudios, proyecto y financiacibn) 1-
partir del art. 89.
64 CONTRATO
DE OBRA P ~ B L I C A ELEMENTOS
DEL CQNTRATO DE OBRA P ~ B L I C A 65

de las obras p6blicas, y quiA todas las de importancia, se ejecu- nuestra legislacibn otorgue el mismo e a t 0 conceptual a1 trabajo
tan contratando la labor de un tercero administrado (generalmen- piblico y a la obra piblica sin distinguir entre ambos 4.
te una empresa constructors), es decir mediante la celebraci6n del Para destacar la diferencia entre las dos nociones -trabajo
contrato de obra phblica entre la Administraci6n Phblica comi- pbblico y obra phblica- puede seiklarse, siguiendo a Roehrssen &.
tente y el administrado constructor. que el trabajo phblico puede no crear una res nova, sino s610 con-
Con el mismo criterio, y par las mismas razones, este estudio servar o modificar una obra phblica ya existente. Por ello el
esti dirigido fundamentarmente a1 anilisis del contrato de obra "trabajo pliblico" es una noci6n de contenido mis vasto que la de
phblica, sin perjuicio de resultar conveniente dedicarle algunos pA- "obra pliblica", de tal manera que puede afirmarse que el primer^
rrafos a la noci6n d e obra ~liblica,habida cuenta de que ksta es,
precisamente, el objeto mediato del contrato que nos ocupa. 4 Por ej., ley 6080 de la provincia d e C6rdoba: "Es obra pfiblica a
La doctrina 2 distingue dos conceptos: el trabaio ppliblico y la 10s efectos de la presente ley toda const~cci6n0 trabajo que se realice por
obra ppliblica. El primer0 representa la serie de operaciones tbc- cuenta de la provincia.. ."; ley 5402 de la provincia d e Entre Rios: "Se
nicas y juridicas destinadas a la obtenci6n de una obra phblica. consideran obras pbblicas y se someter6n a las disposiciones de la presente
ley tados 10s estudios, proyectos, construcciones, conservaciones, instalaciones,
Se identifica tanto con el proceso constructivo de una obra phblica trabajos, obras en general que realice la provincia.. ."; ley nacionai 13.064:
como con las operaciones juridico-formales destinadas a su concre- "Considbrase obra ptiblica nacional toda construcci6n o trabajo o selvicio
ci6n. Desde esta perspectiva, la nocidn de trabajo ptlblico debe de indutria.. .". En cambio, el proyecto SETOP, si bien otorghdole el
alcanzar no s610 a la ejecuci6n en si misma de la obra en reali- mismo tratamiento, parece distinguir coneeptualmente entre tmbajo y obra.
zaci611, sino tambien a sus operaciones accesorias. Asi, serA tia- Asi, en el art. 10 establece: "Se consideran obras pbblicas sometidas a las
disposiciones de la presente ley las que realice el Estado nacional.. .", mien-
bajo phblico la ejecuci6n de la consultoria destinada a una futura tras que en el art. Z0 agrega: "El concepto obra pfiblica comprende las obras
obra (incluyendo 10s estudios de prefactibilidad y factibilidad, es- de construccibn y 10s trabajos similares que emprenda la Administraci6n. . .",
tudios de suelo, ingenieria Msica y de detalle, planos, pliegos dc aclaraci6n que no tendria sentido si el alt. 19 no se refiriese a la obra ter-
condiciones generales y particulates y pJiegos de especilicaciones minada. Con mejor tbcnica legislativa, en Espafia el Reglamento General
d e Contratacih del Ektado evita definir la obra pbblica, ocupdndose s610
tkcnicas, etc.), el servicio de direcci6n de obra, la fabricacibn de del contrato de obras, el que necesariamente regular6 el trabajo priblico o
elementos o materiales destinados a una obra phblica individuali- proceso de ejecuci6n de una obra pbblica. Dice el art. 55 deI citado cuerpo
zada, etcktera. Como se veri mas adelante, esta interpretacibn normtivo: "Se considerarh expresamente comprendidos en el presente ti-
amplia del concepto "material" de trabajo phblico esta relaciona- t d o 10s contratos de obra sue tengan por objeto: 1 - La constmcci6n de un
him que tenga naturaleza de inmueble, tales como.. .; 2 - La realizaci6n
da con la interpretaci6n amplia o extensiva del concepto juridico d e trabajos s u e madifiquen la forma o sustancia del terreno o del subsuelo,
de obra pliblica, contrato de obra phblica y regimen juridico de la como.. .; 3 -La reforma, reparacibn, conservaci6n o demlici6n de 10s de-
obra phblica. finidos en 10s pdrrafos anterior-. . .". Por el contrario, para citar s610 al-
El contrato de obra phblica, en cambio, tiene como objeto gunos ejemplos dei derecho comparado, el Reglamento General de Licita-
ciones y Contratos de Obras Pbblicas del Peni, aprobado por Decreto Su-
regular la ejecuci6n del trabajo phblico para la obtenciin de una perior no 36 del 6-10-61 (texto publicado por la Cdmara Pemana de la
obra phblica determinada. For consiguiente, como lo afirma Es- Construcci6n en julio d e 1975), establece (art. 102): "Considbrase obra
cola 3, toda obra phblica es necesariamente el resultado de un tra- pbblica, afecta a las disposiciones de este Reglamento, toda constmcci6n o
bajo phblico, por cuanto no existen obras phblicas originadas en tnbajo que se efectbe, directa o indirectamente, parcial o totalmente, con
fondos del Estado o con fondos particulares, pero cuya ejecuci6n sea en-
la acci6n de la naturaleza, sino que Qstas son siempre el resulta60
cargada a1 Estado". &
( la doctrina italiana tambibn se reconoce la distin-
de la labor humana. Esta natural vinculaci6n ha provocado que ci6n; asi Roehrssen, G., I laoori pubblici, UTET, Turin, 1971, ps. 5/8, nd-
mite que ". . .le nozioni di opera di lavora sono tra lor0 distinte, ma che cio
nonostante, fra esse esiste una connezione, anche molto estretta", r d s ade-
2 De LabmdBre. A,. Trait4 6limentnire de droit administratif, nQ 190; lante destaca sue: "Possono aversi lavori di carattere pubblico che vengona
5ayagu.h Laso, E., ob. cit., ps. 88/87. avolti su opere, le quali non hanno el medessimo carattere. . ." (p. 7 ) .
s &cola, H., Tratodo. . ., t. 11, p. 175. Roehrssen, oh. cit., ps. 60/61.
66 CONTRATO
DE OBRA P ~ B L I C A

es el concepto principal, el qm iun'dZcamte determinu el con- ceso de elaboracwn o transformacidn d e elementos ya existentes,
trato, que, teniendo como contenido u objeto la ejecuci6n de un que se realiza conforme a una determinada tbcnica constructiva
trabajo phblico, seri contrato de obra phblice, en el sentido juri- (todo ello se engloba en el concepto de trabajo pliblico, corno ya
d i c ~del tArmino, aunque no concluya en una obra pfiblica propia- se seiial6). La obra phblica es siempre la cosa terminada, el re-
mente dicha. sultado de la labor creadora del hombre.
Asi, como se veri .a lo largo de este estudio, la legislaci6n d e Pero no toda obra es una ohra ptiblica. Esta calificacibn de
obra pliblica regula la ejecucidn del trabajo ptiblico y no in obra piiblica es cons,ecuencia de la intervencibn deterrninante de un su-
en si misma. El verdadero objeto del contrato es l a realizaci6n jet0 picblico en su etapa d e ejecucidn (por si mismo o encomen-
de un trabajo pliblico que concluya en un resultado (obra nueva dindola a terceros) y en la recepcidn del resultado terminado.
o reparaciirn o modificaci6n de la existente) que sirva a un fin de La obra es priblica porque la construye un ente pliblico (aunque
inter& pliblico, lo que no quiere necesariamente decir que, una vez puede no ser pagada con fondos pliblicos, a1 menos directamente)
final~zadoel trabajo, dicha obra integre el patrimonio phblico. y porque una vez terminada, ingrese o no a1 patrimonio de un
Sobre este problema se volveri mis adelante, aunque creo opor- ente pfiblico (ver infra Cap. IV, $ 29), seri deslinacla a1 iin de iu-
tun0 dejarlo desde ahora planteado pues indica el verdadero con- terks phblico (satisfaccibn del bien c o m h ) que justifica su reali-
tenido del estudio a realizar; ello aun cuando por razones tradi- zaciirn.
cionales y de armonia con la legislaci6n y docbina habitual se De tal manera es posible dcfinir la obra pliblica corno el
seguiri mencionando a1 contrato de obra pliblica, en lugar del resultado corporal de un proceso de fabricacidn, imtalacwn, mon-
contrato de trabajo phblico, que deberia ser su verdadera deno- taje, construccwn o elaboracidn fisica o intelcetual, soltientodo di-
minaci6n. reeta o indireetamente con fondos piiblicos o a f e d o s a la dis-
De acuerdo con lo expuesto en el pirrafo anterior, necesaria- posicidn de un ente picblico, destinada a seruir directa o indirec-
mente la expresibn obra pliblica da idea de un resultado normal- tamente a un cometiclo pliblieo y cuya eiecucidn es de competen-
mente dirigido a la creacibn de una res woaea partir de un pto- cia de urn ente priblico.
Dado que la obra phblica es el objeto del trabajo priblico, este
liltimo seri el procedfmiento te'nzico y juridieo destb~adoa la ob-
6 Conf. Spota, A. G., Trotodo de Iocaci6n & obra, vol. I, p. 316, De- tencidn de una obra ~ b l i c a .
palma, Buenos Aires, 1975: "En consecuencia, el contrato d e obra que es-
tudiamos tendri por objeto una cosa en el sentido del art. 2311, es decir, un El anilisis detallado de esta defiuici6n seri realizado, por
objeto material, mueble a inmueble, ya sea que deba fomarse ex noao, ya razones de rnktodo, a1 estudiar 10s elementos del contrato de obra
sea que s6)o se k + t e de la reparaci(m, modificacihn, ampliaci6n o conser- phblica. Cuadra, entonces, ahora linicamente rernarcar que sblo
vacibn de obras ya hechas. Aun cabe dentro d e este contrato un .objeto ., ,,
puede denominarse obra pGblica a la cosa resultante de un proceso
que pareciera ser antitCtica con la real~zacibnd e una obra: es la defnolrcron .
Como sea, el concepto de obra siempre supone la existencia d e algo nuevo de elaboracibn y siempre que dicha elaboraci6n haya sido deci-
que antes d e su ejecucibn no era tal -inclu.o la cosa demolida- y asi es dida, en el imbito d e su competencia, por un ente pliblico.
aunque el proceso de ejecuci6n no suponga la transformacik de materias
primds ya existentes, sino tamhien cuando se trata del ensamble de elernen-
tos, simples o complejos, que D u d a n tener una utilidad en si mismos (p. ej.,
maqumarias, cafierias), pero que toman una nueva utilidad como resultado materia prime o comunque, mediante impiego di materiali, che nella realiz-
de una combinaci6n tbcnicarnente dispuesta, asi lor procesos de montnje o zazione dell'opera perdono sostanzislrnente la loro individualit&; si B par-
de instalaciones industria!esU. En este sentido, Morozzo Della Rocca, F., lato di appalto di montaggio con riguardo alla f o r ~ a z i o n e di un sisiema
L' appalto nella giurisprudenm, ps. 76/77, Edizioni Cedam, Padova, 1972, unitario attraverso l'unione di pezzi gia predispasti da terzi e fomiti dal
sfirma que: "I1 concetto di opera C s b t o peraltra meglio precisato ed ela- committente a tale scopo e si C rilevata che la noviti del risultato raggiunto
borate attraversa el ricbiamo di varie figure ad esso riconducibili. Si C attraverso l'attiviti dell'appaltatore lo caratterizza come appalto d'opera, pur
pailitn ad erempio, di appalti di costruziane con riferimento alla ipotesi, se non importi trasforrnazione di materie prime; si C osservato che carattere
frequentissima, di creazione d i una res nova mediante trasformazione di di novit.4 presenta anche il resultato di un appalto di modificazioni".
ELEMENT~S
DEL CONTRATO DE OBRA P ~ B I Z C A 69
68 CONTRATO
DE OBRA P~JBLICA

LegisIativo y Judicial) ejecutari Ia obra sin recurrir a Ia contra-


Lo expuesto no puede inducir a conlundir la obra phblica
taci6n con terceros administrados. Son &as las llamadas "obras
con otras "cosas" que tambien son tratadas por diversos institutes por administracidn", en las cuales el brgano o ente estatal asume
del derecho administrative, por lo siguiente: directamente la responsabilidad de la realizacibn de Ia obra uti-
a ) Cosas del dominio pfiblico: el dominio pliblico es fuuda- lizando su propio personal, maquinarias y materiales ", sin per-
mentalmente uu rbgimen juridico a1 que se encuentran sometidas juicio de 10s contratos de trabajo (personal obrero), de loraci6n
detcrminadas categorias d e bienes (no s6lo corn) que por su na- de servicios (p. ej., 13 direccibn de obra) o de surninistro (mate--
turaleza pueden ser afectdos a1 uso cmrin. La obra phblica no
riales) que pueda eventualmente celebrar. Ademis, la obra pue-

i
necesariamente debe estar afectada a1 uso comhn, pudiendo per- ' de ser tarbi6n ejecutada mediantc un conirato interadministrativo

I
tenecer al denominado "dominio privado" del Estado o de otro de obra phblica en el que comitente y constructor serBn personas
ente pliblico. AdemBs, 10s bienes sometidos a1 dominio phblico pliblicas, si bien este contrato se regiri, en lo substancial, por la
pueden ser de origen natural o artificial, lo que no ocurre con la
obra pliblica, que es slempre product0 del trabajo humano.
b ) Cosas adquiridas or expropkcidn: la expropiacibn es s610
misma ley de o b ~ a spilblicas, aunque sin aplicaci6n de las prerro-
gativas y garantias propias del regimen juridic0 exorbitante.
Con relaciin al contrato de obra pliblica propiamente dicho
/
!
un medio compulsivo de adquirir el dominio por parte del Estado
(ya se verh la incidencia de lo aqui tratado sobre otros posibles
u otros entes phblicos y, excepcionalmente, por personas privadas.
sistemas de ejecucibn de la obra pliblica), 6ste debe encontrarse
La cosa (tambiBn pueden ser expropiados bienes) expropiada per-
sometido a determinados piwipios b&cos, que sou deducibles de
tenecia, antes de su expropiacibn, a1 Bmbito de propiedad de 10s
administrados, pudiendo tener uu origen natural o artificial. La la misma naturaleza del contrato, como una estricta derivacibn del
rkgimen juridico exorbitante a1 cue dicho contrato se encuentra
linica relacibn existente eutre ambas figuras es que puede ser
sometido.
necesario expropiar determinadas cosas (p. ej., inmuebles) a 10s
efectos de construir una obra pliblica. Seghn lo resuelto en la XIV Reuni6n Anual de Abogado d e
c ) Cosas afectadas a la prestacibn de un servicio p*lico, tan- la Cimara Argentina de la Construcci6n y Empresas Asociadas
to si el servicio lo presta el Estado o un concesionario. Estas CO- estos principios son 10s siguientes:
sas y bienes afectados a un servicio pliblico tienen un regimen lo)Realizacibn de la obra conforme a 13 finalidad de bien
juridico especial clue no coincide con el aplicable a la obra pG- comiln que ella debe satisfacer, lo que supone:
blica, ni tampoco con 10s elementos definitorios de Bsta, tal como a ) respeto por las prerrogativas del comitente estatal en cuan-
se expuso en p8rrafos ante~iores. Puede ocurrir que una obra ph- to a la direcci6n y control de la ejecucibn de la obra;
blica se afecte a la prestacih de nn servicio phblico (incluso eje- b ) mutabilidad del contrato en cuanto a sus caracteristicas
cutado por un concesionario), pero estas cosas tendrkn asi dos de ejecuci6n y proyectu sin alterar la identidad del objeto con-
calificaciones juridicas: obra phblica y cosa afectada a un servicio tratado;
phblico, sin superposicibn (ver infra Cap. V, 9 41).
c ) rescindibilidad del contrato por culpa del contratista o por

g 11. CONTRATO DE OBRA P~BLICA. BASICOS.


PRINCIPIO~ hfo, F. F., Rdgimen legal de las obrm pdblicos, p. 67, Depalma, Bue-
ELEMENTOS
; nos Aires, 1966. "Mediante este sistema (adrninistracih o economia) la
i obra se realiza sin contrato de construcci6n. El Estado se convierte en su
coma se secalb en el parhgrafo anterior, las obras ~hblicas i proPio empresario, cargando con todos 10s riesgos que puednn derivarse, E~
efecto, no aparece el contratista iesponsable de la obligaci6n de resultado
son ejecutadas habitualmente a travks d e la figura del confiat0 ! cuyo objeta es la obra".
de obra Pfiblica. Excepcionalmente, la Administracibn Phblica !
Citado P O ~Barra, R. C., en Pmtw para la futura ley nocjonolde
(es prkcticamente irnposible que esto lo puedan hacer 10s pocleres ptiblicas, ED, t. 73, P. 863.
razones de interks pliblico, indemnizado en este caso un porcen- b) modificaciones al contrato superiores a la relacibn por-
tual del lucro cesante. centual que se fije legal o contractualmente;
c) incumplimiento de la comitente en cuanto a la entrega de
20) Obligatoriedad de la aplicacibn del Rkgimen Legal de la
terreno, replanteo de la obra, provisibn de materiales y/o docu-
Obra Pliblica para la Administracibn centralizada y descentrali-
mentacibn tkcnica u otras prestaciones a las que se hubiera com-
zada, incluyendo expresamente las empresas comerciales y/o in-
prometido, mAs all& del plazo fiiado legal o contractuaImente;
dnstriales en las que el Estado o sns entes descentralizados tengan
d ) error esencial del proyecto;
preponderancia de capital y/o poder de decision, cnalqniera sea
e ) suspensiones o paralizaciones d e obra, totales o parciales,
su naturaleza o tipicidad juridica.
por causas no imputables a1 contratista cuando Bstas excedan del
30) Uniformidad de rbgimen legal en todo el territorio de la
plazo previsto legal o contractualmente, sin perjnicio del derecho
Rephblica, facilitando la adhesibn de 10s Estados provinciales.
a obtener la prbrroga contractual que corresponda.
4Q) Seleccionabilidad de contratistas particulares, lo que su- 70) Reconocimiento de la excepcibn por incumplimiento con-
pone garantizar 10s postulados de:
tractual en favor de ambas partes contratantes.
a ) ignaldad de tratamiento, previa acreditacibn de capacidad
En orden a definir el contrato de obra phblica, seis son 10s
y calificacibn por 10s registros pertinentes y sin perjuicio de la elementos esenciales qne deben ser analizados: el sujeto, el obje-
preferencia del empresario nacional; to, el procedimiento, el fin, el plazo y el precio, sin perjuicio de
b) publicidad de todo el procedimiento de seleccibn, a tra-
10s restantes elementos previstos como esenciales -tanto para el
vbs del correspondiente sistema de vistas e impugnaciones; acto como para el contrato administrativo- p r la ley 19.549, de
c ) concurrencia, consagrando la exigencia del correct0 trata- procedimientos administrativos.
nliento y control por parte de 10s oferentes.
5") Intangibilidad de la remuneracibn del contratista parti-
cular frente a:
a ) variacibn de 10s costos del mercado;
b ) deterioro del beneficio a causa de la depreciacibn mone- Sujeto
taria;
c ) dificultades materiales imprevistas;
d ) caso fortuito o hecho del "principe" o del comitente que
-generen un increment0 en 10s costos sin impedir la ejecucibn del I
El contrato administrativo -en este caso el contrato de obra
contrato;
e ) modificaciones al contrato p r error de proyectos o deci-
I pliblica- es una especie del gknero relacidn juriclicu miministrati-
I
didas por autoridad competente; ua, cuya definicibn fue expuesta (ver supra Cap. I, 5 2 ) .
f ) hecho tecnolbgico nuevo que mejore la calidad y benefi- De acuerdo con dicha definicibn, el locatario o comitente de
cie la ejecucibn de la obra; la obra deberA siempre ser un snjeto estatal, requisito indispen-
g) depreciaci6n de la remuneracibn por demora en la certi- sable para otorgarle el carActer de phblica a la relacibn juridica
ficacibn y/o pagos. y, por ende, al contrato d e que se trate.
60) Rescindibilidad del contrato por parte del contratista, con Nada obsta a que la calidad de comitente resulte asumida
derecho a indemnizacibn porcentual del lucro cesante, en 10s ca- por el brgano legislativo o el judicial -siempre con impntaci6n
sos de: juridica a la persona Estado nacional o provincial- por cuantn
a ) incumplimiento de la comitente en la emisibn, aprobacibn siempre se estari frente a un contrato administrativo de obra ph-
p/o pago de las certificaciones pertinentes en 10s plazos previstos blica -contratad0 en ejercicio de la funci6n legislativa o jndi-
legal o contractualmente; cial, respectivamente, p r o ejecutando actividad administrativa-
de Obras Pliblicas y de Contabilidad y sus respzctivas reglamen-
que se regiri por las normas de contra_taci6n que "posea" cada
taciones".
6rgano supremo constitutional, sin perjuicio de la aplicacibn ana-
lbgica o supletoria, seglin el caso, de la ley de Obras Pliblicas.
De acuerdo con lo expuesto, la calidad de locatario o comi-
tente de un contrato de obra pliblica, asi como tambibn el some-
timiento de ese contrato a la ley de obras phblicas (en el orden
nacional, la ley 13.064 y demis normas complementarias y regla- En el Bmbito de la Administracibn Pliblica, el comitente o -
mentarias), corresponderi a la Administracibn Pliblica centrali- locatario de la obra puede ser la Administracibn centralizada
zada y descentralizada, con las presiciones que se harin en 10s -tambi&n con imputaci6n juridica a1 Estado- o cualquiera de
pirrafos siguientes. 10s entes que conforman la Administracidn descentralizada.
E n cnanto a la Municipalidad de la Ciudad de Buenos Aires, En este punto surge el interrogante de si pueden ser loca-
por decreto 1800 del 31 de marzo de 1969, el pliego de Condicio- tarios de un contrato de obra phblica las empresas comerciales o
nes Generales para Obras Pliblicas (reformado parcialmenle por industriales de propiedad estatal, en especial aquellas que un im-
el decreto 7204 del 11 de diciembre de 1 x 9 ) expresamente dis- portante sector doctrinario califica como de personalidad privada.
pone (art. 40) la aplicaci6n supletoria de la ley 13.064. Sobre el particular cabe la remisi6n a lo expuesto en supra
En este sentido (aunque con una redacci6n defectuosa) el Cap. I, $5. Por consiguiente, a1 quedar afirmada la personalidad
proyecto de la ley de Obras Pliblicas de la Secretaria de Estado pliblica de las empresas de propiedad del Estado (aun de pr*
de Transporte y Obras Pliblicas (a60 1197) establece en su ar- piedad parcial, pero dominante, como qued6 indicado) no puede
ticulo 10: "Se consideran obras pliblicas sometidas a las disposi- ser cuestionada la calidad de contratos administrativos de obra
ciones de la presente ley las que realicen el Estado nacional y la pliblica referida a las locaciones de obra que aquellas celebren.
Municipalidad de la Ciudad de Buenos Aires por intermedio de Pero 6sta es s610 una afirmacibn doctrinaria, de manera que
sus entes centralizados, descentralizados o autBrquicos, cualquiera corresponcle analizar la situaci6n desde el punto de vista del de-
sea el origen de 10s fondos que se empleen". recho positivo.
El art. lode la ley 13.0fi4 excluye de su imbito de aplicacibn E n general, las distintas leyes de obra pliblica nada indican
a las Fuerzas Armadas. Asi, las construcciones militares se regi- sobre el particular, obligando, entonces, a realizar una interpre-
r i n por la ley especifica de la materia, la 12.737, reformnda par taci6n integrativa que inevitablemente remite a aquellas razones
la ley 20.455. Corresponde destacar que el rkgimen de contra- doct~arias.
taciones de las Fuerzas Armadas, en 10 que aqui interesa, esti Asi, por ejemplo, el art. 10 de la ley nacional 13.064 exige,
constituido, ademis de la antes citada, por la ley 20.124 y su para calificar a la obra como pliblica, el que se pague "con fon-
reglamentaci6n por decreto 3961/73, con mis las distintas normas dos del Tesoro de la Nacibn".
de aplicaci6n para cada una de las tres armas. Asi, en el caso La expresibn "fondos del Tesoro de la Nacibn" fue interpre-
del Ejkrcito, la reglamentaci6n jurisdiccional esti dada por el de- tada en forma amplia, entendibndose que comprende ". . .tanto
creto 4027/73, aplicindose fundame~~talmente las Bases Generales 10s fondos del presupuesto de la Administracibn centralizada co-
de Licitacibn y Contratacibn de Obras aprobadas por resoluci6n mo descentralizada. incluidas entidades autirquicas y empresas
del comandante de Ingenieros, en enero de 1974. De conformi- del Estadd', como lo seiial6 un ya clisico dictamen de la Procu-
dad con lo establecido en el art. la de la ley 130fi4, el art. 20 del raci6n del Tesoro de la Naci6n $. De manera que, aunque siem-
citado pliego dispone: "Subsidiariamente y para todo lo que no
estk previsto en las bases y pliegos mencionados, o en la regla-
mentaci6n de la ley de Construcciones Militares, regirin las leyes "Dihenes 92-74, citado par Mo, ob. cit., R k g i m o l . . ., ps. 56/57.
74 CONTRATO DE OBRA PÚBLICA ELEMENTOS DEL COXTRATO DE OBRA PÚBLICA 75
pre en virtud de una interpretación doctrinaria y jurisprudencia!, las sociedades del Estado, a las sociedades de economía mixta y
la ley 13.064 incluye dentro de su regulación todo el sector de a las empresas del Estado, cuando alguna dlsposici6n legal así lo
la Administración descentralizada, dentro del cual se considera, determine o lo resuelvan sus órganos competentes', dejando libra-
a su vez) a las f'mpr-eSflS y sociedades estatales. da una cuestión tan importante a lo que decidan futuras leyes su-
Dentro de las legislaciones provinciales puede, en cambio, en- ponemos que especiales, o, y esto es absurdo, a la voluntad d~ las
contrarse en algunos casos Una mayor concreción sobre el punto. ~r~plas empresas estatales, que podrán así elegir el régimen ju-
Así, por ejemplo la ley 3734 de la provincia de San Juan, que en ndlCo de sus contratos en cada caso según les convenga. De más
su art. 19 , en lo pertinente dice: "Se consideran Obras Públicas ... está deCIr la grave inseguridad jurídica que esto implica, además
que realice Ja provincia por intermedio de sus reparticiones cen- del tremendo desacierto desde el punto de vista de la técnica le-
tralizadas o descentrali.,adas, autónomas o autárquicas, empresas gislativa.
o sociedades anónimas estatales o mixtas ... ~:t. Una redacción Esta misma impresici6n se presenta en el citado provecto de
igual puede encontrarse en el arto 19 de la ley 681 de la provin- le: originado en la Secretaría de Estado de Transporte 'y Obras
da de Neuquén; arto 19 de la ley 593 de la provincia de Misio- Pubhcas de la Nación (año 1977). Mientras que en su arto 1Q
nes; art. 19 de la ley 3744 de la provincia de San Luis'; arto 19 de se la d:clara aplicable para el Estado Nacional, la Municipalidad
la ley 3079 de la provincia de Corrientes 1.. También el arto 19 de la CIUdad de Buenos Aires y "sus entes centralizados (en reali-
de la ley 6351 de la provincia de Entre Ríos (qlle interesa por lo dad no son entes, sino órganos), descentralizados o autárquicos"
relativamente reCÍente de su sanción: 3 de abril de 1979) que in- (bastaba ~on ~tilízar la expresión, "descentralizados", pues la des-
cluye a las ¡'empresas estatales o mixtas~>, o como en el caso de centralIzaCIón mc1uye la autarqma), en su último artículo nor-
la ley 76 de la provincia de Salta, que considera como obra" pú- mativo, el 109, textualmente dispone: "Las disposiciones de la
blicas (art. 1Q): "... a) las obras que ejecute la Administración presente ley serán de aplicación optativa para las empresas del
provincial por sí nlisma o por intermedio de sus reparticiones au- Estado, sociedades anónimas con participación mayoritaria estatal
tárquicas ... ; d) las industrias estatales provinciales o municipa- sociedades del E~tado y sociedades de economía mixta en las que l~
les productoras de mercandas de primera necesidad o los ser- mayoría del capItal pertenezca a aquél. En el supuesto de que
vicios públicos de suministro de energía, transportes y comunica- no optare por el régimen de la presente ley, sus nono. s serán de
ciones y todo otro de finalidad pública, como además la provisión aplicación supletoria en aquellos aspectos no contemplados en sus
e instalación de máquinas, material fijo y elementos permanen- estatutos o reglamentos de contratacionesn •
tes de trabajo. __ ". Considerando el problema desde la legislación que regula los
En algún caso - y es precisamente la ley de sanción más re- destIntos "tipos~' jurídicos en que se encuentran organizadas estas
ciente, 8 de febrero de 1980- se nota una imprecisión timida, ·empresas, la situación tampoco ofrece la suficiente claridad. Vea-
como si no hubiese existido en el legislador una decisión defini- mos los distintos supuestos 11:
tiva al respecto. Tal es el caso de la ley 4416 de la provincia de
Mendoza, que en su art, 19 , luego de declarar aplicable su régimen a) Sociedades de eCMomía mixta. - Se encuentran regidas
a las obras "... que realizare la provincia y sus municipalidades,
por sí o por intermedio de sus entes centralizados, descentraliza-
dos O autáquicos .. _, agrega: "También será aplicada en esos ,1,1 En ~a. obra ya cítada~ Princípíos .. ", cap. VI. en espeeial parág. 35,
-anahcc el reglmen legal particular de cada empresa de propiedad estatal~
caSos a las sociedades anónimas de capital mayoritario estatal, a de~ostrando, que cada una de ellas, en sí mismas, importan un régimen ju-
rí~ICO exorbitante, lo que exterioriza su personalidad pública, Remito tam-
blen a ese estudIo en cuanto a las razones de "eficiencia" «comercialidad
1;) La misma redacción la utiliza e) proyecto de texto único de la ley
d~ .:-us ac:o~(> o "incorporación de su cuerpo normativo al CÓdigo dé Comer-
de obras' públicas aprobado por e1 Consejo lnterprovinciaJ de Ministros de ~O.' ha~th!a~mente. esgrimidas por los autores que prl)f:enden justificar el
Obras Púhlícas e.I.M.O.P., en su arto 10, edición del CIMOP, 1970. rogullen )UndlCO pnvado que les atribuyen a estas empresas.
76 CONTRATO DE OERA ptBLICA
ELEMENTOS DEL CONTRATO DE OBRA PÚBL1CA 77
por el decreto ley 15.349/46 (ratificado por ley 12,962), el que nada
de un contrato administrativo de locación de obra cuyo término
establece acerca del problema en análisis,
análogo más próximo será, naturalmente, el contrato de obra pú'
Sin embargo, en su artículo 2Q declara) con muy mala técnica blica.
legislativa, ya que este tipo de definiciones no corresponden al
legislador y, en todo caso, resulta inútil que las haga 1>, que este b) Empresas del Estado, Regidas por la ley 13,653, con
tipo de sociedad " .. , puede ser persona de derecho' público o de sus modificatOrias, las leyes 14,380 y 15.023. En este caso si bien
derecho privado, según sea la finalidad que se proponga su cons· en la redacción original de la ley 13.65,.1 se exdula a las ~mpresas
titución", No se aclara en la ley - y tampoco es un critelio prin· .del Estado del régimen de la ley 13.004, la ley 15,023 declaró a
cipista o doctrinario fácil de establecer- qué tipo de finalidades la ley de Obras Públicas aplicable supletoriamente con respecto
impondrá la calidad de persona pública o de persona privada. No a lo que dispusiera la propia ley 13,653, la ley de creación de la
obstante ello, en el ar!. 1Q de la citada ley se establece que las empresa o su estatuto,
sociedades de economía mixta serán aquellas «. , . que tengan por En la práctica, esa aplicación supletoria se transformó en di.
finalidad la satisfacción de necesidades de orden colectivo o la im· recta, ya sea porque dichas normas nada regulan sobre la materia
plantación, el fomento o el desarrollo de actividades económicas", o pOl'que es el caso general, en los mismos reglarnentos de contra-
1

todos ellos fines públicos perfectamente explicables desde la pers· taciones o pliegos para contratos determinados de esas empresas
pectiva del papel subsidiario del Estado. Esto permite concluir en se establece expresamente la aplicaCión de la ley 13,004 y de las
que siempre las sociedades de economía mixta serán personas. restantes normas que conforman el régimen legal de la obra pÚo
públicas y por consiguiente sus contratos se encontrarán regidos blica
por el derecho administrativo; en el caso, la ley de Obras PúbHcas.
De esta manera) aun quienes sostienen que las personas pú~ c) Sociedad aTlÓn;1YI<k con participación estatid mayoritaria,
blicas también pueden celebrar contratos privados (posibllidad - Regulada por la sección VI de la ley 19,550, esta norma nada
indica sobre el particular, de manera que, de aceptarse la natura-
que negamos en S'!¡pra, Cap. 1, § 4), drberán admitir que, de des·
leza jurídica pública de estos entes, la solución será la misma que
cubrir en un determinado contrato de locación de obra, celebrado·
la planteada para las sociedades de economía mixta, Tarr,bién
como locataria por una sociedad de economía mixta, la existencia
como en el caso de estas sociedades, de nada valdrá argumentar
de cláusulas exorbitantes conformadoras del denominado régimen en el sentldo de la incorporación de sus respectívos cuerpos nor-
i"rmico exorbitante (ver supra, Cap, 1, § 3), ese contrato será ~ativos en el Código de Comercio, ya que como lo ha dicho Merld
un contrato administrativo, y por ende un contrato de obra pública. el lugar que una institución jurídica ocupa en la ley no prejuzga
En este caso nada obstará a que se aplique la ley 13.004 de mane· el lugar que al L'Ontenido de esa ley corresponde en la sistemátic'a
ra directa, de acuerdo con la interpretación de la expresión "fondos jurídíca"13, lo que puede comprobarse con s6lo prestar atención
del Tesoro de la Nación" a que hemos hecho referencia más arri- a~ hecho que, por ejemplo, en nuestro derecho positivo instítu-
ba. Pero aun cuando se interprete que e! pa trimonio de las so- ClOnes Como el dominio público se encuentran legisladas dentro
ciedades de economía mixta escapa de aquel concepto (sin duda del Código Civil, sin que por ello nadie pueda dudar de la natu.
generosamente comprendido), tampoco habrá obstáculo en la apli- raleza jurídico·pública del mencionado instituto, Tampoco in.
cación analógica de la ley de Obras Públicas, por cuanto se tratará teresa la actividad materialmente comercial o industrial que pue-
dan cumplrr tales sociedades, ni el mismo carácter de sacie<úul
q~e algunos pretenden como un concepto específico de! derecho
12 En este sentido sefl.ala Merkl, A,} Teoría general del derecho admi-
nistra.tivo, p, 107, Editora Nacional, México, 1980: « ••• La separaci6n del pnvado, Con respecto a lo primero, la materialidad de la activi-
orden jurídiCO en secciones diversas no es tarea que incumbe al ordenamien-
to del derecho, sino al conocimiento del mismo".
13 Ob. cit .• p, 107,
.
dad no define su rkgimen juridico, sino que, por el cort.lailo,
.' es
de obra s e r h tambikn contratos administrativos, regidos por 10s
principios generales de esta rama del derecho y analbgicamente
la estructura de la norma, en la que se plasma la especial virtud
(o supletoriamente, seglin el caso) por las normas que regulan
de la justicia aplicada en la relacibn juridica, la que determina el
el contrato de obra piiblica, que es el tkrmino anLlogo m& apro-
rkgimen ( y por lo tanto el sistema) de derecho a qne determinado
piado para ello.
instituto se encuentra asignado. En lo que hace a1 concepto de
Esto, sin duda, se veri confirmado por el anAlisis de cada
so&edud, kste no tiene por qu6 ser una "propieclad" exclusiva del contrato en concreto, en donde se podrit verificar su sometimiento
derecho privado. Por el contrario, asi como existe el tkrmino
a1 re'gimen jt~ridicoexorbitante tipico de 10s contratos adrninistra-
genkrico contrato, expresivo de una determinada realidad juridica, tivos 16.
que se especifica en 10s contratos pricados y 10s contratos pGblicos,
Asi tamhien lo reconoce Linares, quien luego de comprobar
expresivos, a su vez, de la distinta estructura qne la relacibn ju-
la naturaleza piiblica de estos entes seriala que: ". ..celebran con-
ridica contractual asume conforme cual sea la relacibn de justicia tratos administrativos s610 cuando contienen ellos clAusulas exor-
que ella contenga, asi tainbihn existe el concepto genkrico sociedad bitantes expresas o cuando su estatuto impone procedimientos de
y sus especies pricada y priblica. contratacibn con licitaci6n pliblica, en cuyo caso 10s actos del pro-
Puede que la doctrina dominante no accpte este argumento, ceso de contratacibn son tambikn administrativos y por lo tanto
pero ya hemos visto (supra, Cap. I, 5 1 y citas de la nota 2 ) que rigen 10s requisitos de validez del act0 administrativo" '6.
durante mucho tiempo se rechaz6 la existencia de contratos pii- Podemos, rdpidamente, comprobar lo expuesto con algunos
blicos utilizando, precisamente, el argumento de que el concepto ejemplos.
contrato era propio y especifico del derecho privado. El Cinturbn EcoI6gico Area MetropoIitana, Sociedad del Es-
tad0 (CEAMSE) llam6 a licitacibn nacional e international para
d ) Sociedad del Estado. - En el caso de estas "sociedades", la ejecuci6u del proyecto, construcci6n, explotacibn y manteni-
la ley 20.705, en su art. 6Q, las excluye expresamente de la al~lica- miento de una ruta de vinculacibn entre 10s accesos Norte y Oeste
ci6n de la ley de Obras Piiblicas, lo mismo que con relaci611 a 12s con Ia Capital Federal, cuya fecha de apertura estuvo prevista
leyes de Contabilidad y de Procedimientos Administrativos. Ya he para el dia 30 de abril de 1979.
tenido ocasihn de demostrar que estas sociedades se eucuentran, El pliego de bases y condiciones que rigid la citada licitacibn
quizis con caracteres m6s nitidos que en 10s casos analizados en y posterior ejecucibn de la obra es un ejemplo tipico de contrato
10s phrafos anteriores, sometidas a1 re'gimen iuridica exorbitaaie reglamentario sometido a un r6gimen juridico exorbitante, en este
caracteristico del derecho administrativo, asi como tamhibn del caso pricticamente igual a1 previsto por las normas que rigen el
escaso efecto prictico de la pretendida exclusi6n del rkgimen de contrato de obra piiblica y por 10s pliegos generalmente usados por
la ley de Contabilidad y de la ley de Procedimientos Adminitra- la Administraci6n para realizar este tipo de obras, con la diferencia
tivos 14. de un sensible aumento de intensidad de las prerrogativas de la
Con respecto a la ley de obras piiblicas, no puedk ignorarse comitente y una atenuacidn de las garantias del contratista.
que, por expresa disposici6n nornlativa, aquklla no les resulta de
aplicacibn. Pero esto no puede ser interpretado en un sentido.
:5 Asi 10 ha analizado la jurisprudenda: En autos "EMACO S.A.C.I.F.I.
absoluto. y otros c/Banco Nacional slnulidad de resolucibn", en fallo del 19 de agosto
En efecto, de aceptarse la naturaleza juridica-phblica de estos de 1882 (causa nU045), la Sala IV de la CNAP Fed. Cont. Admtvo., sos-
entes, se deberit tambii.n admitir la calidad de administrativos de. tpvo: "El conkato que nos ocupa lo califico coma locaci6n de obra regido
par kl derecho administrativo por contener cliusulas exorbitantes.. .", admi-
10s contratos que celebren. En ese caso, sus contratos de locacibn
tiendo en consecuencia Ja aplicacibn supletorja de la ley 13,064.
l6 Linares, J. F., Lar sociedodes &l E m d o unipetsomles, LL del 3 L ~
de octubre de 1981.
14 Barra, ob. cit., Principios.. ., ps. 207/214
CONTRATO DE OBRA PÚBLICA
ELEMENTOS DEL CONTRATO DE onRA PÚBLIC-o\. 81
80

Analizando algunos aspectos en particular se puede apreciar tínción COn la facultad prevista por el arto 1638 del Código Civil
cómO la comitente se reserva sus prerrogativas de direccÍón y con~ será analizada en oportunidad de examinar los Inedios de extin~
trol en los arts. 20, 21 (a través del cual puede poner en práctica ción del contrato de obra pública.
el llamado ius varían di ), 22 (prerrogativa de ordenar al contratista A pesar de lo expuesto, en el arto 39 se dispone solemnemente
el despido y reemplazo de su personal), 34 (destrucción y recons- que el contrato se regirá, con carácter supletorio al pliego, por
trucción de trabajos), etcétera. El ejercicio del ;1.1.$ varíandi o "las nOrmas del Código Civil, del Código de ('.A)fUercio y de las
prerrogativa de modificación unilateral del contrato queda reser-
vado en los arts. 35 y 42, entre otros, mientras que en el arto 79 fundada de las razones que invoca para observar la orden recibida. La
establece el régimen de penalidades de oficio y ejecutorias (art. observación del Contratista a cualquier orden impartida por la Inspección
82) previendo un régimen recursivo en benefjc~o. del ;~ntratista de Obra no exime a aquél de su cumplimiento si ella fuera mantenida, El
(art. 80). En los arts. 87 y 88 regula un . sevenlnmo reglmen. de Contratista estará obligado a aceptar las modificaciones en los trabajOS que
le fueran ordenados por la Inspección de Obra, siempre que esas órdenes
rescisión contractual por culpa del contratIsta, tambIén de afielO
le sean dadas por escrito y no alteren las bases del Contrato.
y ejecutorio, mientras que en el arto 93 establece nada menos que Art, 22. - Re¡:;resentante técniCO. Personal, Reemplazo. 1. - Un Repre-
la revocación unilateral del contrato por la comitente' 7 cuya dis- sentante Técnico designado por el Contratista deberá encontrarse permanen-
temente en obra dedicado exclusivamente a la Dixeeción de los Trabajos.
Tal Representante Técnico deberá ser un profesional competente especialista
17 El pliego cita.do establece: Art. 20. - Cumplimiento de ~CIS ~~ en ingerueria vial, debidamente matriculado, y estará debidamenle autorizado
dones de la; sociedad. :El Contratista deberá cumplir y atenerse estnctame~te y facultado para actuar en nombre '1 representación del Contratista y todos
a las instmcciones y directivas impartidas por la Sociedad sobre cualqmer sus octos obJigsrán a éste.
cuesti6n relaciow.da o concerniente a la elaboración del Pla!l de Trabajos, del II. ~ El Contratista empleará solamente aquel personal, ayudantes téc-
Proyecto DefinitlVO y a la ejecución de las ohras. respecto de lo cual la nicos, capataces, encargados, etc., con conocimientos, pericia '1 experiencia
suficiente en sus especialidades competentes para ejecutar o supervisar las
Sociedad tuviera derecho a hacerlo.
Expresamente la Sociedad se reserva el derecho a dar. todas las instruc- tareas a su cargo.
ciones y directivas necesarias al Contratista sobre cualqUJer as~nto concer~ III, - La Sociedad o su InspeCción de Obra podrán impugnar '1 exigir
niente al Plan de Trabajos, el Proyecto Definitivo y los trabajOS de cons- al Contratista el inmediato retiro del emplazamiento en fanTIa permanente
trucción del camino; con el objeto de obtener la mós pronta habilitación de del Representante Téenico o de cualquier persona empleada por el Contra~
la totalidad o de parte de la traza al tránsito verucular. tista () por cualquier subcontratista. que a sólo juicio del CEAM&E observara
El Contratista recibirá tales instrucciones y ditectivas únicamente de b. mala conducta, fuere incompetente, negligente o que por cualquier causa
Sociedad o de la Inspecc~6n de Obra. perturbare los trabajos. La persona retirada de obra liO podrá ser nueva-
Art. 21. _ Inspección de obra. La Sociedad designará uno o más pro- mente empleada en relación con el Contratista.
fesionales o técnicos para que ejerzan la Inspección de Obro. Arl. 84. - Retiro de 1n.ateriales inadecuados. Reconstrucción de trohajO$
La correspondencia oficial entre la Inspección de Obra '1 el Contratista mal realizados, La Inspección de Obra estará autorizada para ordenar el
se realizará exclusivamente mediante notas colocadas exclusivamente en los retiro del emplazamiento de materia1es inadecuados y su reemplazo por los
libros de "'Directivas al Contratista" y ~'Pedid()s del Contratista'" a partir del de calidad indicada para el caso; también podrá disponer )a remoción y re-
momento en que quede aprobado el· Proyecto Definítivo. Tales libros ten~ ejecución en forma correcta --a pesar de eualquier ensayo previo- de cual~
drán hojas por duplicado y debe:r.in encontrarse permanentemente en obra. quier trabajO que a exclusivo juicio de la Inspección de Obra no estuvíera
El representante técnico del Contratista deberá. notificarse de toda directiva acorde con la calidad de los materiales y de la ejecución de las obras esta-
dentro de las veinticuatro (24) horas de SU libraml.ento. Toda orden expe~ blecidüs por las especificaciones técnicas aplicables.
dida por la Inspección de Obra se entenderá que ha Sid~ dada en un. todo Art. 35. _. Ritmo de trabajo, Incremento por orden de la Sociedad, Tra-
de acuerdo con lo estipulado en el Contrato y el Contrahsta queda oblIgado bajo n;;Jr.rumo. 1. - Si a juicio de la Sociedad o de la Inspección de Obra el
a su inmediato cumplimiento. rI~~o .~e ejecución de las obras fuera demasíado lento para asegurar la ha-
Cuando fC'1 Contratista considere que cualquier orden impartida no se blhtaclon de las mismas en el plazo fíjado o dentro de su prórroga -cuando
ajusta a Jos términos del Contrato, podrá. al notificarse de la misma, mani. ésta ,hubiere procedido por alguna de ]as causas específicamente previstas--
festar por eserito SU disconformidad con ena.. sin perjuicio de presentar -d~~l­ pudran ordenar al Contra.ttsta la adopción de absolutamente todas las medi~
tro del plazo de veinticuatro (24) horas improrrogables, ante la InspecclOn das legal y técnicamente pOSibles a fin de acelerar al máxhno la marcha
de Obra y por intermedio del «Libro de Pedidos", una reclamación clara y de los trah:~jos. La. Sociedad o su lnspeccí6n de Obras podrán dar las iruJ~
a 10s fundamentos mismos del Estado de Derecho, pues el sor-
demis leyes de derecho privado que pudieran corre~~onder", agre- prendente pliego sigue diciendo: "Los oferentes, por el solo he-
gando: "queda expresa y absolutamente excluida la aplicaci6n to-
cho de su presentaci6n a este concurso y licitaci6n renuncian ex-
tal o parcial de las leyes de obras phblicas, de concesi6n de obras presa y formalmente a realizar impugnaciones de cualquier natu-
pfiblicas, de contabilidad y demis normas de derecho administra-
tivo de cualquier naturaleza o jurisdicci6n". Esto, simplemente, raleza a1 proceso del concurso y licitaci6n y sns resultados". Con-
secuentemente con esto, en el segundo pLrrafo de su art. 68 esta-
mereceria la calificacibn de poco serio si no fuese por su agravio

de las obras proyectadas de acuerdo con el Pliego de Especificaciones T&-


trucciones ob~igard Contratista a adoptar cualquier clase de medida para nicas, que pudiera disponer la Sociedad o la Inspecci6n de Obra.
incrementar el ritmo de trabajo sin necesidad de esperar que se produzca Art. 79. -Pemlidodes pot incumplimientos del contratirtn. El incum-
el vencimiento del fijado para com~letar la consmcci6n, de! camino plimiento de cualquiera de las ohligaciones a cargo de quien resulte Con-
o las pr6rrogas que pudiuan corresponder, y cuando a su solo luiclo ,r;sulte tratista dari lugar a la aplicacibn de las siguientes penalidades se@n el caso:
necesaria tal aceleracidn en 10s trabajos para garantizar la hahilitsc~on en a ) Por no terminar la construccibn de la obra lista para su completa
tkrmino. habilitaci6n en el plazo fijado en el art. 90, con mis las ampliaciones que
11. Las instrucciones que imparta la Sociedad o su Inspecci6n de Obra pudieran corresponder a1 mismo, se aplicari una multa par cada dia d e
a fin de incrementar el ritmo de los aabajos no ser6n susceptibles de ser demora de tres millones de pesos ( $ 3.000.000,-) durante 10s primeros se-
impngnadas, xecurridas o de cualquier forma obietadas, sea judicial o extra- senta (60) dias de atraso; dicha multa diaria se elevari al dohle de la suma
judicialmente, y el Contratista, par la sola firma del Contrato, acepta coma referida para 10s siguientes sesenta ( 6 0 ) dias y asi sucesivamente el monto
condici6n
..-~ ~~-~ del mismo que la Sociedad o su Inspecci6n ~ u e d a nejercer la fa- diano de la multa a aplicar se duplicari cada sesenta (60) dias de atraso
cultad que este articulo les reconoce. y hasta la total finalizaci6n de las obras.
111. EI contra&ta no requerir reajustes de ninguna naturaleza, b ) Por cualquier otro incurnplimiento a ottas obligaciones contractuales,
ni invocar costos de cualquier especie, por el increment0 en el el Contratista seri penalizado con multas de doscientos cincuenta mil pesos
-" .""trlhains disnuestos.
A - 1". --.= Tal incremento lo serin sin perjuicio de las pe- ($ 250.000,-) hasta tres millones de pesos ($ 3.000.000,-) por cada in-
nalidades par demora establecidas en este Pliego. fracci6n y de acuerdo con k gravedad de la misma. En caso de r e i t e r m
IV. Los trabajos podrhn proscguirse tanto de dia como de noche cuan- las infracciones o incumplimientos, se duplicari la penalidad en cada rein-
do fuere necesario para la termiuaci6n de las obras en el plazo fijado. La cidencia, siempre que Cstzs tengan lugar durante un aria computado desde
ejecucidn d e 10s trabajos, aun durante la noche, ~ d r ser i dispuesta par la la i-ltima infracci6n similar.
Sociedad o su Inspecci6n cuando el Contratista no adopte tal determinacibn Todos 10s montos de las multas precedentemente indicados ser6n in-
y ello resulte necesario para aumentar el rihno de ejecucibn, resultando tam- dexados a1 momenta de su efectiva aplicacidn y tomando coma base el in-
bibn a este su.puesto plenamente aplicable lo dispuesto precedentemente en dice de precios mayoristas no agropecuanostotal del mes de febrero de 1979.
este mismo articulo. En la even~alidadde efectuarse trabajos nocturnes, Art. 80. -Descorgo. Recurso ante el directorio de CEAMSE. Dentro
el Contratista deberi suministrar iluminacibn suficiente para permitir el de las cuarenta y ocho (48) horas de notificada la aplicaci6n de una multa
avance de 10s trabajos y el acceso a1 emplazamiento con la mayor segumdad el Contratista podri efectuar su descarga. De ser admitido el mismo, la
y sin peligro para personas y bienes. El alumbrado deberi ser a satisfac- penalidad quedari total o parcialmente sin efecto s e g h lo que resuelva la
ci6n de la Inspecci6n, la que estarA autarizada para impartii instrucciones Sociedad. En caso de no admitirse total o parcialrnente el descargo, el Con-
a1 respecto. tratista podri interponer recurso de apelacibn dentro del quinto (So) dia de
Art. 42. -Anplk?cidn de los o h . L a Sociedad ~ d ordenar d a1 Con- notificado el rechazo del mismo y directamente ante el Directorio de la So-
tratista la ampliaci6n d e las obras, siernpre qup, tal ampliaci6n sea de la ciedad; tal apelaci6n ante el Directorio no tendri efectos suspensivos.
misma naturaleza que 10s trahajos contratados, y hasta un costa no mayor An. 82. -Forma de efectivizar las multas Una vez aplicada la mul-
del veinte par ciento (20 % ) del valor de las obras originales, indexado a1 ta, la Sociedad intimar.4 al Contratista a su pago dentro de las cuarenta y
momento de solicitarse la ampliacibn. En este supuesto las partes de c o m h w h o (48) horas, bajo apercibimiento de afectar la garantia de ejecucidn o
acuerdo convendr.4n las rnodificaciones al Contrato que resulten necesarias. de mantenirniento y explotaci6n, s e g h el caso, a de retener el importe
indexado de la multa del primer pago que deba realizar a1 Contratista l a
Se entiende por ampliaci6n de las obras, Gnicamente la construcci6n
Sociedad par cualquier concepto, pudiendo CEAMSE adoptar cualquiera d e
de mayor longitud de caminos o nuevos distribuidores e intercomunicadores.
las dos altemativas a su criteria.
En ningim caso se considerari ampliaci6n de la obra a 10s trabaios relacio-
nados con detalles de terminaci6n. con medidas de seguridad y todo tip0
-
A*. 87. Resolucidn del conhcto por inc~rn~timiento de ins obligocio-
de trabajos complementaries necesarios para asegurar el buen funcionamiento nes del controtista. El Contrato se resolver; autorniticamente de plena de-
blece: "La resolucidn d e la Sociedad (CEAMSE) e n cuanto a la el art. 72: "Si con posterioridad a la adjudicaci6n se originare
adjudicacidn de la licitaci6n serB absolutamente privativa, discre- a l g h desacuerdo o impediment0 de cualquier naturaleza que obs-
cional y definitiva, no p d i e n d o ser objeto de impugnacidn ni taculizare la formalizacidn del contrato mediante su firma, quedarB
recurso de naturaleza alguna, consecuentemente, tal decisi6n no de pleno derecho sin efecto alguno la adjudicaci6n y la sociedad
generara responsabilidad de clase alguna para la misma". Pero podrB optar por seguir las tratativas con 10s demss oferentes q u e
lo peor es clue ni siquiera la adjudicacibn genera derechos. Dice a su criterio sigan en orden de prelacidn o dejar totalmente sin
efecto la licitaci6n sin que por ello 10s oferentes tengan derecho
a reclamo o indemnizaci6n alguna". Ya no es s61o la pretensi6n
recho por decisibn exclusiva de la Saciedad, debidamente camunicada a1 de evadirse del derecho administrativo; el sistema creado ests per-
Contratista en forms frhaciente, en 10s siguientes casos:
o ) Cuando el Contratista no cumpla con lo estahlecido en cuanto a la mitiendo (por supuesto que en la intencidn, pues judicialmente
constitucibn d e la Sociedad Andnimn especial, su capital, la proporcionalidad
del m i s m respecta de las inversiones realizadas; prestacibn, reajuste y au-
mento de las garantias y d e 10s seguros, y mora en el pago d e las primas intimar previamente a1 Contratista por el termino d e quince (15) dias ca-
d e 6stos. rridos o el mayor plaza que estime conveniente, a fin de que subsane o
b ) par grave atraso, no justificado, en la preparacibn Y presentaci6n del regularice el incunqlimiento de que se trata, sin perjuicio de las multas que
Proyecto Definitive, sus planos y dem6s documentos complementaries,, o en resultaren aplicables y de 10s recursos o acciones que Iegalmente pudieran
las rxodificaciones a introducir al mismo a en la formulacidn o ejecuc~on del coiresponder n la Sociedad contra el Contratista, todo bajo apercibimiento
Plan d e Trabajas. Se entenderi por atraso grave el superior a 10s cuatro de proceder a la resolucibn si no diere cumplimiento a la intimacibn.
( 4 ) meres. La declaracibn d e resolucidn por culpa del Cantratista traeri apare-
C) po1-incumplimiento del plazo fijado para la realizacibn del proyecto jada In pirdida de la garantia respectiva sin perjuicio de las multas apiica-
y la c ~ n ~ t r u c c i bdel
n camino hasta su habilitacidn total. das con imputacibn a la m i m a .
d ) Por interrupci6n en la ejecuci6n dde las obras, sin causa justificada En el supuesto d e resolucibn por incumplimiento del Cantratista, la
a juicio de la Sociedad, por el plaza de treinta (30) dias corridos o en dis- Sociedad tomar6 inmediata posesibn de todas las obras y sus instalaciones
tintas ocasiones que sumen un total de sesenta ( 6 0 ) dias alternados. complementarias en el estado en que se encuentren y se resarcird d e 10s
e) Por in~~rnplimienta inmediato de las instrucciones impartidas para faltantes, defectos y falencias que se encuentren, a costa de las garantias.
acelerar el ritmo de 10s trabajos d e construccibn. sin perjuicio de las acciones judiciales que correspondan.
f ) Por graves y reiteradas neglipendas en el cumplimiento d e sus obli-
gaciones o prestacibn deficiente o abusiva del servicio. Art. 93. - Revocan'dn unilateral del contrato por la sociedod. Eo cual-
g ) Por ocultar, deforrnar, desvirtwr de cualquier forma, la inforna. quier momento la Sociedad podr6 decidir la revocaci6n unilateral del Con-
cibn respecta del monta d e lo recaudado en cancepto d e tarifa por circu- trato, dejando sin efecto el mismo por razones de oportunidad y convenien-
lacibn de vchiculos y par cualquier clase de maniobra que se realice ten- cia, s e g h decisidn discrecionalmente adoptada no ohstante la correcta ges-
diente n demostrar una recaudacibn menor de la realmente produc~dl. tibn del Contratista.
h ) Por grave descuida en la conservacibn del camino. En este supuesto la Socjedad tomar6 posesibn dde Jas ohms y d e d s
i) Por cesidn tctal o parcial del Contrato sin previa aprpbaci6n d e la instalaciones complementarias una vez efech~ada la pertinente liqnidacibm
Sociedad. seghn lo que seguidamente se dispone Y canceladas que sean totalmente las
j ) por hnberse producido cinco (5) o mQs reincidencias en infraccio- sumas que d e ella sureen:
nes que hayan dado lugar a la aplicaci6n de multas durante el lapso de a ) Se reembolsar!~n a1 Contratista el total de las sumas efectivamente
un (1) nrio. invertidas en el proyecto Y construccidn del camino a1 tiempo transcurrido
I:) Por desohediencia, reticencia u ocultamiento reiterados a1 efercicio para las etapas d e explotaci6n y mantenimiento, debidamente reajustadas por
d e las atribuciones d e la Ins~eccibno d e la Auditoria. indexacibn y con mis los intereses devengados basta ese momento y dedu-
1 ) Par abandon0 del Cantrato cuando, sin causa justificada, deje de ciendo 10s pagos que ya pudiera haber realizado 1% Snpipaaa
-~~
prestsr servicios de explotacibn y mantenimiento durante d s de veinticuatro b ) AdemQs, se abonar6 a1 Contratista en concepto d e lucro cesante
( 2 4 ) horas seguidas, con retiro de su personal y desatencibn d e las presta- una penalidad equivzlente a1 veinte ( 2 0 ) por ciento del importe del reinte-
ciones a su cargo. gro calculado seglin lo dispuesto par el apartado anterior.
c ) Las s u m s liquidadas segim lo establecido precedentemente ser6n
Art. 88.-Forma y efectos de la resolucidn par culpa del contmtista.
La decisibn que declare la resalucibn del Contrato por culpa del Contra- abonadas a1 Contratista dentro d e un plaza no mayor a 10s ciento veinte
tista seri potestativa de la Sociedad. Esta padri, si lo quisiere, optar por (120) dias.
clusiones coincidentes con lo expuesto en 10s pbrrafos anteriores:
nada de esto tiene valor) que estos "feudos administrativo~"'~se 1) Algunas normas y priucipios de derecho pliblico que se
evadan del derecho, ahora sin aditamentos. coordinan con la ley 20.705 deben aplicarse antes que las leyes so-
Independientemente de este ejemplo extraido de la realidad bre sociedades an6nimas.
concreta es importante apreciar c6m0, en un anaisis general y 2) Si el Estado nacional quiere conceder plena independen-
abstracto, el ente de contralor de estas sociedades ( y de las em-
presas de propiedad estatal, en general), la Sindicatura General de
Ernpresas Pliblicas, valor6 la naturaliza juridica de estas socieda- a) No hay limite alguno para que el Estado, mediante ley del legisla-
dol; reduzca la autonomia de las sociedades del Estado a1 infinito, incluso
des del Estadol*, de lo cual fbcilmente se podran exb-aer con- alterando sus derechas subjetivos. Esta reducci6n podri ser politicamente
errbnea, pero no por ello ilsgitima. Podri ser repentina o podrA ser gradual.
1s Sobre expresi6n, ver Bnrra, ob. cit., Principios-. ., P. 214, Con b ) Respecto de 10s reglamentos, cabe seiralar que kstos, para impo-
cita d e Aritio Ortiz, La ndrninistrncidn institucionol, Madrid, 1972, p;' 2%. nerse a las sociedades del Estado, no deben violar ninguna ley del legislador
1 8 Sindicahrrn general d e empresas pirblicas, informe acerca d e Las so- (ley formal), que confiera derechos subjetivos a las sociedades del Fstado.
ciedades del Estado, su dgimen y su grado de autonomia", abril de 1980. S610 por ley formal pueden alterarse sustancidmente esos derechos.
~1 texto complete se publica a continuacibn; en cuanto a1 s u m l i o trans- c ) Por Gltimo, ni las leyes formales ni 10s reglamentos que rwtrinjan
cripto m& arriba, es obra d e Bianchi, A. la autonomia d e las sociedades del Estado pueden afectar derechos subjeti.
1. ~ ~ t ~ ~ Eld tema ~ ~ del~ presente
i d ~ estudio
. es el relativo a1 grad0 vos adquiridos por terceros que tienen relaciones jufidicas con tales socie-
de aut~nomia libertad juddica que tienen las sociedades de la ley 20.705 dades.
creadas por el Estado Federal, frente a 4ste. Nos ocuparemos s61o d e las El principio que venimos analizando es de una enorme importancia
llnipersonales, tipo que utiliza la Nacihn para las sociedades d e la j u r i s 9 - Porque a1 tiempo que explica por qu6 no es inconstitucional ni ilegitima
..-.. del
"{An - .. Ministerio de Economia, y que son las controladas par la Sindoa- la legislacibn por leyes del legislador y reglarnentos mzonables que reshin-
tura General d e Empresas Pdblicas. jan la autonomia de las sociedades del Estado, justifica que esa intromisi6n
ley 20.705, en s~ art. 29, establece que: "Las sociedodes del Es-
superior puede calificarse de necesaria, mixime en tiempos de emergend,
tado ser unipersmwles t~ se ~oneterdn,en su conrtihrcidn Y funcwna-
econ6mica como 10s actuales. Si el Estado Nacianal quiere conceder plena
miento, n los normas que regulan ins sociedndes andninirm, e n c u n t o pueren independencia a esas sociedades, no tiene mas remedio que privatizarlas o
compatibles con los disposicirmes de la presente ley.. .". recurrir a las sociedades con participacih estatal mayoritaria con efectiva
Con esto se quiere decir que lo primer0 que debe apl~carse, a un caso presencia de accionistas privados, si bien estas liltimas no estin excluidas
dado. es la ley 20.705 y subsidiariamente las leyes sobre sociedades an6- d e cierta regulaci6n par el Estado. centrnl
- ---- .
nimas.
11. La ubicacidn de lar empresos en la mgunizncidn administmtiva. Es
Pera es claro que el recurso a las segundas no debe hacerse simple- evidente que l a Administracidn actual ha adquirido en cuanto a hpo de
rnente porque la mera literalidad d e la ley 20.705 no resuelva el caso o empresas utilizadas como lntegrantes descentralizadas d e ella, una gran va-
situacibn. Tambikn algunas normas y principios de derecho pliblico que nedad suscitada por el uso d e formas tradicionales como 10s entes a u t i r
se coordinan con esa ley deben aplicarse antes que las leyes sobre socieda- quicos Y fomas nuevas como las empresas del Estado de la ley 13.653, las
des anhnimas. sociedades de economia mixta (decreto-ley 15.349/46, ratificado por ley
~ ~ lejemplo,
~ las ~ normas
, referentes a la cornpetencia Iegislativa
12.962). las sociedades anhnimas con participaci6n- estatal mayoritaria (le-
a la del poder Ejecutivo establecidas por la Constitucihn Y ley de Minis- yes 17.318 y 19.550, arts. 308 al 314), y las sociedades del Estado (ley
~ i ~ s pliblico, el d e que 10s entes des-
te,ios.y, entre los ~ ~ i ~ cd ei derecho
20.705).
centralizados, incluso las sociedades del Estado, no tienen un minim0 de 11-
bertad juridica a autonomia oponible a la legislacibn del Congreso, o quien
La Administraci6n esti integrada asi por la Administraci6n central n d s
a la reglamentacihn del Poder Ejecutivo. Ello a dife-
todos 10s entes d e propiedad del Estado, per0 entre esos Stirnos s61o lo.
hags sus veces, entw autirquicos y las empresas del Estado d e la ley 13.653 forman, con
de lo que ocurre con las sociedades an6nimas privadas Y los,parti-
la Administracidn central, la "estmctura administrativan que figura en el
culares, quienes tienen en cambio una esfera de libertad minima &an-
Presupuesto General de la Naci6n (ley de Contabilidad, articulo 4 9 ) .
queah~e d &tad0 en merit0 de la garantia d e razonabilidad d e :1 Asi, pues, sblo algunos d e esos entes integran la estructura d e la Ad-
leyes 28 de la Constituci6n). Las entes descentralizados no gozan as1
ministraci6n: 10s entes autirquicos y las empresas del Estado d e la ley 13.653.
de esfera de "derechos naturales", como la qne tienen las sociedades
Las otras, si bien integran la organizaci6n estatal, se hallan en m a zona
an6nims privadas los ciudadanos, la que no p w d e ser invadida nrediante
s i s lindera entre la Administracidn centralizada y 10s sujetos o empresas
leves irrazonables del legislador. yrivados.
De alli entonces que:
ELEME~lOS DEL C-UNTRATO DE OBRA ptBLICA
CONTRATO DE ()BRA PÚBLICA
88
, d' que príva~ socíedades privadas son controladas por su accionista mayoritario._
1 sociedades del Estado no tiene maS reme 10 1 4) Las sooiedades del Estado se encuentran dentro del dere-
cía a as ' 1 'ociedades con participación estata mUH
tizarlas o renlInr a as ~ . ", . . cho administrativo común porque el origen de Su patrimonio es
f ' enc1'a de accionistas pnvauo~. estatal. l)of(lue se encuentra dentro de la organización adminis--
yoritaria con e ectlva pres t cuantiosas inversiones-
3) Las empresas estatales represen an 'd d ' 1 e 1.- trativa, porque están sujetas a un control público, porque están
. más intensl a oe O qu ;)
y deben ser controladas con tanta o

cional de la Administración (Bartolomé Florini, Manual de derecho admi-


contro] sin embargo, les resta a las em- nistratl¡;;o~ t, I, ps, 162/3, Buenos Aires> 19(8), a la postura académica que
Esa pertenencia estatal Y ese • t t les aunque no formen
, 1 ácter de entes no esaa • el 1 niega camcter estatal a las empresas y sociedades con las cuales el Estado
presas de la zona gns e ca r .. 1 AdlIlinistración centraL Cuan o as
cumple fines que no serían los que deberla cUlnplir (Miguel S. Marienhoff,
arte de la "estructura forxnal de a al' dos" o de "organismos des-
P (Jos lo Tratado de derecho administ1'atioo, t. r. p. 352 y ss.~ Buenos Aires, 1965);-
leyes hablan en genera l d e "entes descentr 'ed d del Iza
Estado (ley 20.70, 5)
la doctrina ha tratado de ubicar y conciiíar con los principios tradicionales
centrallzados". están incluidas las SOC.l a ~_Á' t ] p_ 297).
D h d" 8f1'ativo uo:.mumu;o, . , lo que en verd"d ahora ocurre y es que el Estado compra, vende, fabrica,
Roberto Dromi, eri!C o a m11U 1 Administración central Y los entes
presta servicios) ejerce monopolios o entra en competencia. y eso 10 hace
En un campo interrnedío entre ~ tales cuantiosas inversiones del E,s--
con las formas que se le ocurre, ya seau las existentes dd derecho público
privados, represe?":an, esas empre..~~ ;a: como tales constituyeron uno de
{} de! privado o inventando nuevas que, a SIl vez, generan otros diferentes.
tado, fueron deflCltanas algun.as, ~ ., n' y deben ser controladas con tanta
los grandes yacimientos de la mflac:~. d~ privadas sen contIoladas: por sU IV, Las sociedades del Esfado se encuentran en la organización admi--
O más intensidad de lo que las SOCl a nístrativa. Desde este último punto de vista parece razonable iniciar el
aeeionísta mayoritario. 1 "o'n de las sociedades del E$- análisis desde la óptica de Í'~i{}rini, descartando todo intento de clasificación
. " nsiderarnos a eueS... '--_ y tratando de de:n:l:Qstrar que el ente que nos interesa. la sociedad del Es-
En esta f>.xpOS1C lOn ce . l~' No debe pensarse, sin emtrdr-
tado respecto de las unipersonales e)oste~n es. II . gan no sean aplicables a las tado, se encuentra dentro de Ia constelación organizativa, mostrando sus re-
go que las conclusiones a las que aqUls:e d ~ suspenso el estudio del laciones Con el Poder Ejecutivo NacionaL
so~iedades del Esta.do pluriperSOIlales. ~Ja _F.ll La eliminación en coniunto de todas las clasificaciones para este tra-
tu' lmente de valor practico, bajo se impone también si se advierte que, entre las dos: posturas extremas
lema. ya que carece ac a 1 20705 reguló el fnnciom~-
]n, Las Sociedade.s del Estado, L. dey " ., de "Sociedades del señaladas, los autores argeutinos dan la suya propia, califíeando de confusas,
"d" b '0 la enommaclOn moompletas o faltas de rigor ciellUfioo a las otras al no coincidir luego con
miento de un nuevO ente ¡un \eo, a l . a empresa para desarro-
\ ."''''CiÓll consiste en un 1 conclusione.., particulares en temas espedficos ·-por ejemplo, al tratar d
Estado" cuya primera carac en...... d" u'blico y en la cua
, d' 1 m relales () e SetV1CI0 p funcionamiento público O el control.
llar actividades in ustn3 es. eo _e, ( ]0)
. , 'taJes pnvados art. ' . 'd Lo expuesto no signífíca descartar la ya clásica y aceptada distinción
no pueden partICipar c a p l . , d 1 Estado en empresas regl ~
La transformación de vanas E¡mprlesll5d e fe 'da. por el art, 9Q de la ley, entre entes públicos estatales y no estatales {Enrique Sayagués Laso¡ Tra-
> , d emo con la aCu. ta con I-" . I tado de derecho odministfanoo> t. I, p. 175L pero elJo impoue también la
por ese regtmen, e acu 1 dal pero sujeta..'i al tipO genera
y la creación de otras nuevas por, eY e:: inmediatamente la necesidad inferencia l6gica e irrebatible de que no puede darse el supuesto contrario,
da
de las Sociedades del Ebiado, trajO a p . 1 si se trata de entes re- razón por la cual los entes estatales no pueden ser del derecho privado
de preox:isar su verdade~a ~turalelza ~~ ;n €s;le~:, directivos deben ser con- (Agustín A, Gordillo, TrakJ.do de ikrecho admin1'stratíno, t. l, p. XI-9 y
bibliografía citada en nota 4 (3). En otras pruabras. ", .. todas las entida-
gido5, por e1 derecho pnbhco úbr
o e pnva o y
uál es su autonOIlllrt.
,
siderados funcionarios pICOS, y C . 1 ley no regula la totalidad des estatales son síempre públicas, aunque puedan en ciertos casos ... estar
,, , nta completa porque a 1 pareialmente regidas por el derecho privado, .. " (Agustín A. Gordillo, ídem)
La cuesbon se prese artículos y' porque a
fu' . nto en sus escasos nueve • 1 o". "igualmente cabe concluir que todo ente estatal es p6blico, ya que no
del régimen Y nctOnamle > do en la clasifirn.ciÓn y ubicación de os
existirán entes estatales privados .. :» (Manuel Mada Diez, Manual de de-
doetrina no se ha pu~t? de, acner ara desarrollar sus actividades em-
distintos entes qne nühza el Ej.•s,tado t'~ de ,: esas actividades son funeio- recho administrativo~ t. I~ p. 147, Buenos Aires, 1977),
al '"q 'era sobre a cues tOn J • d d d V, El derecho público y el derecho privado, Eliminado el intento de
presad e .. , y nI S1 \H de sí deben ser tra.tadas como activi a es e
nes de ese Estado, Y. por en "' j t como la presencia de un comer- formular nna clasificación y, en consecuencia, de tratar de ubicar las Socie.
la. Administración pública o Slmp emen e : d dades del 'Estado en algún lugar de esas clasifieacione.'), debe también adop-
, d t 'al más semejante al prwa o. '6 tarse como pnnto de partida la idca de que carece de sentido el distinguir
c1ante o un m us n " uita toda importancia a la cuesti n
Desde la postura relativIsta ~'7 q conjunto de incompletas, Y afir- entre la capacidad de derecho público y la capaCidad de derecho privado.
de las elasificaciones, a las que e ,1 lca en \ les de lo que en esencia ~'On Superada por razones históricas la necesidad de formular la doctrina
61 s trata de formas lllstrumen a 6 f de la doble personalidad del Estado~ porque en el Estado de Derecho no·
ma que s o e d 1" pertenecientes a la organizad n un-
diversos tipos de escentra lZ2.ClOnf'..5, -
ELEMENTOS DEL CONTRATO DE OBRA PÚBLICA 91
CoNl'RA'1'0 01: OBRA l?ÚIlUCA
'.90
,subordinadas a determinadas directivas comunes a otros orgaIlis~ no d5)1 Al
d encontrarse
1 ;¡..
las sociedades del E st a d o d entro del cam-
,,_ ,e . eree 10 a"mwlstratiYo, les resultan aplicables la
moS públicos, porque sus autoridades son designadas por el Po- y pnnClplOs de ese derech s normas
der Ejecutivo Nacional y porque, en defínitiva 1 sus actividades tie~ rrogativas propias del Ést~d:a que pueden ac'tuar con las pre-
nen un contenido de fin público, aunque. mediato si se quiere, ~ujetas a los deberes y oh!' . y que, como contrapartida, están
. 19aclOnes que esa situación de 't'In'yt"L,oio
ya que el hecho de que el Estado las realice prueba que han sido Impone. " '00--

,consideradas como fines de ese Estado,

son.a actúa en el ámbito específico que esas ramas b


"hace más falta la nOCIón del Fisco, los autores comenzaron a fO:rIDular la aplican el derecho comercíal o el industrial o 1 cu reno Es así como
_distinción de la doble capacidad y no pocos estatutos o leyes orgánicas de quier otra rama, siempre que ell.o e laboral o el minero o cual-
entes públicos afirnlan que la persfma creada tiene c-'lpacidad para actuar atribuciones que las norma'" le se encuentre dentro de la dimensión de
'd ". reconOzcan O imputen
PI an específicamente. o que no se lo im"
. en el derecho público y en el privado.
A poco que se detenga en ello, surge el sinsentido de la distinción, ya Lo que interesa de-..stacflr es que al enc tI' d
,que la. capacidad, como el derecho, es una sola, y si se la tiene lo es para ..derecho admjplstrativo le resu]t an ap¡.lcabJ es jon arse entro
as normas y ,del..campo
d del
actuar en cualquier campo del derecho, salvo limitaciones legaJes de las ,d erech o, que pueden actuar co 1 pnnClplOS e ese
como contrapartida, están snjeta~ :s l!r~~g~tivas pr~Pias. del Estado y que,
eapacidades reíativas por oposl('ión (l las absolutas.
Pero decir que un ente tiene capacidad de derecho público y de de- éi6n de privilegio impone. e eleS y ob gaclOnes que esa situa"
recho privado es' 10 mismo que decir, por efemplo, que tiene capacidad de VII. La casuística aplicable a las sociedade.s eL t
,derecho minero o de derecho penal o de derecho comercial. La. persona trar que se encuentran las sociedad i e Estado. Para demos~
jurídica es siempre una sola y lo mismo su capacidad, no importa que actúe recho administrativo nos rero',.ti m es dé) ~ta~do den tró del campo del de.,
.1 -"'_ t ' re os a a reau ad ' rid' 1
en las más diversas fo:n:nns y realizando distintas clases de relaciones. 'iJe seiiatar nOrmas que le resultan a líe bl lU lea aetua > tratando
Ocurre, además. que la clásica distinción entre derecho público y ,de su capacidad y la ch"eunsta ' : a es y de donde resulta el limite
luern de la organización adm~~:tiv.a~ que no son personas independientes
privado tiene hoy limites impreclSOS Y difíciles de trazar,
Si ello se mantiene por razones didácticas, es razonable pOrque resulta
todavía útil para esos fines, pero pretender de esa distiñción una división neces~ol~ra~:~ ~.7~~s~°tr:~~aet tidiluc~dar pOr completo el tema y se hace
tajante que impida a un ente actuar en un campo si se lo ubica en el otro) La ley 20,705 establee po ,e ente que crea.
na sirve a la realidad de lo que acontece y complIca más que ayuda a la fado se someterán en su c~n:~t s,: articulo 2!? que la.<¡ sOéiedades del Es-
I

'regulan las sociedades anón' UCIan y funcionamiento a las normas que


interpretación, posiciones de esa ley, .mas, en cuanto sean oompatibles con las di~
En la actualidad dos son los grandes campos del derecho c()Jt:\ún que
.cubren a todas las personas Y resulta imposible que no los alcance en al- Pero es obvio --<,omo se dro- .
guna parle de su vida jurídica: el campo del derecho común civil y el disposiciones "expresas" de 1 1 que esto no qmere decír sólo con l;1s
a prt'.ser)te ley sino tamb" ,
pjos d e derecho público impHcito J' ' f ' len con electos prlnci..
argentino. Por ejemplo, pese al s s~:n:o r~ en~ ley y en el orden jurídico
campo del derecho común administrativo.
VI. Las sociedades del EsÚldo se eneuenln'" dentro del derecho ad-
ministrativo, L~s sociedades del Estado se encuentran dentro del derecho una. de estas sociedades no pued t bl e a ley 20,705 el estatuto de
administrativo común porque el origen de su patrimonio es estatal, porque comercialización de cOCa o d Je es, a ec~r que ella deberá dedicarse a la
se encuentran dentro de la organización admimstrativ8, porque están sujetas ,de Mendoza !tin consenti~entoe d os és~mue les del gobiemo de la provincia
a un control público, porque están subOrdinadas a determinadaS' directivas El mero silencio de la leve 2();~t5 lo .
-como sup1e t ori
os edla ley '1 ' . \A au
que puede d nza1 a aplicar esos prmClplOS
'
C¡)lJ1uneS a otros organismos públicos, porque sus autoridades son designa-
sobre sociedades anónimas. o esp azar la aphcación de normas
da.s por el Poder Ejecutivo Nadonal y porque, en definitiva. sus actividades
tienen un contenido de fin público, aunque mediato si se quiere, ya que Dado que se ha concretado 1 á'
el hecho de que el Estado las realice prueba que han sido consíderadas co- sociedad del Estado l.miperson 1 en ~.~: Chca~ y en el orden nacional, la
se mencionarán debe 8 !?XI l:¡tlntas entIdades que más adelante
mo fines de ése F..stado, careciendo de interés determinar si esOS fines son tiene • reconocerse que la denominación de "soci-.lad" nada
o no esenciales porque el límite es difuso y depende de las circunstancias que ver COIl su estructura 1 eu
.cepto de "sociedad" l...as fi y con« o que signIfica en derecho el oon~
políticas, económicas y de las necesidades concretas. n Ciedad de ooo'~ . " guras, del contrato consigo mismo". de la ..SO"
Aclaramos desde ya qu.e el hecho de que esas saciedades se enCl"u;ntte
<de la doctrina : le~~la:;:~'ares, n~ obstante ,haber sido aceptadas por parte
,dentro del ca.mpo del derecho administrativo en nada impide que de acuerdo
,contrato ni de sociedad. extranjera, son flguras que no tienen nada de
con su capacídad y el tipo de actividad que realicen actúen aplicando normas
.Y relaciones de distinúlS ramaS del derecho que aparecen cuando la per-
92 CONTRATO
DE OBRA P ~ B L I C A

ley 13.653, sino por la ley 20.705, con algunas formas de sociedad
6) La denorninaci6n de "sociedad", nada tiene q ~ v svci. con anbnima.
la estructura de las sociedades del Estado y con lo que significa 8) Las socicdades del Estado constituyen patrimonio de afec-
en derecho el concept0 de "sociedad." taci6n a una empresa econbmica, con responsabilidad limitada y
7) Las sociedades del Estado, de caracter uuipersoilal, no eon algunas formas d e sociedad anbnima: certificados nominativos
son tales, sino simplernente empresas estatales no regidas por la

Es decir, d e una mera empresa estatal en sentido lato, paralela a la tipica


L~ tesis de que puede heber, por voluntad del legislador, cOntratos
mciedades d e un solo socio, constitwe uno d e 10s mas de la Jey 13.653 y sus i.efomas. (Juan Francisco Linares, El recurso de
consigo mismo
gruesos elTores de ciencia juridica que conoce el sislo xx. Se debe ese error
a la falta de %nsibilidad de a l g ~ n o s distinguidos juristas hacia aspects
. . . - -.
olzada contra actos de socieddes del Estodo y ohm. LL. 5/12/79 n 1 I
=.
- 1 .
Sr trata entonces, para el autor mencionado> de empresas estatales des-
centralizadas cuya remisi6n a1 rCgimen de 1as sociedades anhimas abarca
fundarnentales de la Teoria de Derecho.
~~l puede hitblarse del contrato consigo mismo o d e la celebracibn aspectos no esenciales d e estas liltimas. De la misma manera la sociedad
del Estado es tratada c o r n un tipo de descentralizaciin con un rkgimen
de un contrato social "ae uno", cuando en esas situaciones no eriste inter- distinto a1 ente autkquico (Manuel Maria Diez, Manuol de Derecho Admi-
ferencia de conducta de dos m k sujetos, necesaria para que h y a relaci6n m'strtrdko, t. I, p. 143) y definida como "un ente descentralizado que reali-
julidica. ~ ~ del bcontrato
~ consigo
~ mismo
r o de socidad d e uno es coma za una actividad d e tip0 comercial o industrial, organizado bajo un r6girnen
hablar de matrim~nioc~nsigomisn~o o d e pleito consigo mismo Porque el juridic0 privado predominante (civil, comercial, laboral, etc.) . . ." (Jmd Ro-
legislador pretenda implantarlos. A veces el uso del nombre d e "sociedad i berto Dromi, Derecho Administrntioo Ec-o, t. I, p. 297).
mipersonay encubre figuras n u e ~ a sd e limitacibn d e responsabilidad aunquy ! ..
Nos encontramcs entonces ante un ente d e tipo empresario que se ubica
mal nonlbradas, es d e lamentar que no se a s i p e a estas figuras iun- 1
i
dentro de la gran categoria d e entes descentralizados y que no es una sa-
dims un nornbre que evite confusiones. i. cjedad comercial, aunque en parte se rija poi- la ley 19.550. Por supuesto

ii:
L~ sociedad de uno es no s61o un sinsentido ontoligico
-picaflar" "autom6vil'., sin0 tambiCn un sinsentido lbgico co- que la deicentralizaci6n es d e caricter miximo medido en consideraci6n a1
denominar alejlrniento que tiene desde el punto central -Pod- Ejecutiv- y en con-
mo ''circulo cuadradd' o "bipolaridad de tm solo polo". i sideiaci6n a que se encuentra elomida expresamente d e la aplicaci6n de cier-
p,, lo pronto, nuestra ley d e sociedades 19.550 prohibe la sociedad
tas y dcterminadas normas de cadcter administrative coma lo son la ley de
a n h i m a de un SOIO ~ o c i o(ver arts. lv y 94, inc. 8S Y lo w e dice uno de
$us
a 73).
Isaac Halpexin, Sociedades andnimos, Bs., As, 1975, Ps. 7 l r obras ~Gblicas, la ley d e pracedimientos administrativos y la ley de conta-
bilidad (ait. 6-de la lev 20.705).
~~b~ recordarse lo dicha por el "justice" Douglas, d e la Suprema 2 ) L a s sociedades del Estado son entes estatales porque su pabimo-
torte de los ~ s t unidos: ~ d ~ "En ~ toda la aplicaciin del derecho ' "nunca nio es estatal. Es 4ste un dato importante y, awn m b , la propia ley 59.705
El prohibe la participacibn d e capitales privados (art. 19).
existi6 una fuente m b grande d e fraude que la ' o n e m n c o w o r d o n .
alto magistrado se refiere, tlaro est& a los resultadas -no a lo imposible- El doto de pertenencia resdta esencial y siendo el Estado uno solo, todo
de la pretendida saciedad de una. Establecido para las sociedades an6ni- su patrin?onio es estatal y no ~ u e d eadmitirse Ia posesiin d e patrimonios que
se administren como cosa pnvada, exento de 10s conboles que impone cons.
m.as de la ley 20.705 el slstema, no cabe contra ellas la critica, d e sus con-
secuencias pricticss, pero si afirmar que no son, las unipersonales, sociedades titucionalmente el regimen re~ublicano.
an6nimas ni sociedades a secas. 3) Las sociedades del Estado se encuentran dentro d e la organizaci6n
De mado entonces que las sociedades del Estado, d e caricter wiper- adrninistmtiva.
sonal, no son tales, sino simplemente empresas estatales no regidas por la En primer lugar porque la organizaciin estatal supone un tado, un con-
ley 13.653, sino por la ley 20.705, con algunas formas d e la sociedsd an6- junto, y nada puede quedar fuera d e ella, salvo que no pertenezca a1 a t a d o .
nima: directolio, certificados norninales, y "asamblea de uno" (Halperin, ob. En regundo lugar porque tienen cabida prictica dentro de esa organi-
cit., ps. 71 a 73; Ruben Segal, Sociedodes del Estado, LL, t. CLVI, p. 1423; zaci6n: !a icy 21.800, que disolr?b la Corporaci6n d e Empresas Nacionales,
Jose Ignacio Romero, Sociedades del Estado, en JA, Doctriua 1975, p. 631). dispusc en el art. ZV transferir las empresas que estaban incorporadas a la
De lo que tratan, pues, esas sociedades es de un paVimonio de afec- C.E.N. ". . . a la juriadiccion del Ministerjo d e Economia conforme a1 ane-
taci6n a una empresa econdmica, con re~~onsabilidad limitada, y con algu- xo s u e forma parte integrante de la presente ley. Las empresas a 6 trans-
nas formas d e la sociedad anbnima: certificados norninativos d e capital y feridas conservarin su individualidad juridica y la autonomia funcional que
6rgano de gobierno y fiscalizaci6n. Se trata en shtesis de empresas esta- corresponde a su estructura legal".
tales con algunas caracteristicas d e la sociedad anbnima, pero sin su esencia.
94 CONTRATO
DE OBRA P ~ B U C A

y que no es una sociedad comercial, aunque en parte se rija For.


de capital y 6rgano de gobierno y fiscalizacibn. Se trata, en sin- la :ley 19.550.
.-..-,de emmesas estatales con algunas caracteristicas de la so-
tesir. 10) Si bien es cierto que, dadas las formas estructurales que
ciedad anbnima, pero sin su esencia. les han sido atribuidas, las sociedades del Estado estkn sujetas
9) La sociedad del Estado es un ente de tip0 empresari* a un r4gimen juridico con predominio casi absoluto del derechw
que se ubica dentro de la gran categoria de entes descentralizados

4 ) L a s sociedades del Estado estin sujetas a directivas y limitacianes


E,, lo que respects a las sociedades del Fstada, y conforme a ese anexo,. que emanan del Pcder Ejecutivo, o de la ley, y que corresponden a1 sector
se en el organigrama de la Administracibn, fuera de nivel ]as S i p e n - ~hblica.
tes empresas: En primer lugar las politicas a cmplir se las fija el respective mi-
par intermedio de la Secretaria de Fnergia: Y.P.F., A. Y E.E., Gas deL nisterio y ello surge d e la ley 20.524, de Ministerios, en cumplimiento de la
Estado. cual tambih se le apmeban sus eshcturas y, par tintemedio de la Secretaria
par intermedio de la Secretaria de Transporte y Obras P6blicas: Aero- de Fstado de Hacienda, se lw fijan anualmente 10s niveles financieros de in-
lineas Argentinas. gresos, gastos y necesidades de financiamiento, limitindose en forma expresa.
posteriorrnnte se cre6 camo sociedad del B t a d o la empress Casa de 10s niveles de endeudamiento.
~~~~d~ ley 21.622, funcionando en la 6rbita de la Secretaria de Hacien- POI decreto nV 326/77 se establece la forma en que se actualizan 10s
da, luego a la Administracibn Servicios Electricos ex CIAE, en la Secreta- crditos y deudas que vinculan entre d a las empresas del Estado y organis-
ria de ~ ~ ~ ~seg lei aplicb a , idintico rCgimen (ley 22.061). mas del Estado y ello se aplica a las sociedades del ,Estado, debiendo sorneter~
L~ restante sociedad del E ~ t a d ode caricter nacional en funcionamiento, a una autoridad superior administrativa la conciliaci6n de cuentas en caso d e ~
de
kgentina Televisors Color LS 82 Canal 7, se encuentra en discrepancia, lo que se completa, por decreto nQ 797/77, por el cual deben.
la secretaria de Inforrnaci6n P6blica de la Presidencia de la Naclon. aceptar bonos de compensaci6n de deudas, de aceptacibn obligatoria.
L~ afirmcibn de que las sociedades del Estado se ballan dentro de la, Por ley 19.241 estin obligadas a depositar tcdos sus fondas en ban-
organizaci6n administrativa fue tambiin eepresada por la Procuracibn del cos oficiales.
'resarode la Naci6n en dictamen del 15 de diciembre de 1977 Y con rela- Sus conflictos interadminis~ativos entran dentro del rCgimen de la
ci6n a Y.P.F., sociedad del Estado, a prophsito de sentar el criterio de que ley 19.983 y son decididos par la Procuraci6n del Tesoro de la Naci6n o eel.
esas sociedades se hallan incluidas dentro de las disposiciones de la ley 21.630 Pcder Eiecutivo Nacional, s e g h el caso.
qne impone el Sistema de la Reforma Administrativa. Dijo en esa ocasibn Deben cumplir con el Sistema Autodtico de la Funci6n Kblica, d e
la Procuraci6n que ". . . si bien es cielto que dadas las formas estructurales conformidad a1 decreto n9 1396/79.
que les han sido atribuidas.. . estin sujetas a un rigimen juridico con pre- ' h s sociedades del Estada se encuenhan incluidas en la ley 21.890
dominio casi absoluto del derecbo privada en t d o lo que se refiere a su or- qw regula las funciones y atribuciones de la Fscribania General de Gobiemo
ganizacibn, funcionamiento y actividades externas, tambiin lo es que deben Y sus bienes inmuebles se escrituran a su nombre con el agregado de "Estado.,
considerarse de aplicaci6n a su respecto ciertas n o r m y principios de dere- Nacional Argentino" (decreto no 914/79).
cbo pdblico no incompatibles con las finalidades de su creaci6n. Fs que
* Por ley 21.550 (mdificada por ley 21.981) deben requerir la con-
-aun con el mis amplio grada de descentralizacihn- en &ma instancia in- formidad del Ministerio de Economia para nuevas canstrucciones o adquisi-.
- la organizaci6n administrativa del Estado'. (Actuacibn 24747, Cde.
tenran
-
2 Presidencia de la Nacihn):
ci6n de bienes que comprometen ejercicios futuros y con intervencibn de la
Secretaria de Planeamiento (decreto nO 3218/78).
E~ c u a n t ~a los t i p s de actos juridicas que estin autorizados a emitir
' Aplican ]as leyes de prescindibilidad (art. 19, ley 21.274, y sucesivas.
10s Directarios, o empleados con atribuciones suficientes, cabe seiialar que pr6rrogas).
pueden ser tambiCn administrativos. La son:
Se encuentran obligadas a someter a la Secretaria General de la Pre-
a ) L~~ contrato$ que contienen cliusulas exorbitantes a1 derecho, priv?'
sidencia de la Naci6n todas las medidas que se propongan adoptar con rela--
do -v. que
. tanto son adrninistrativos- y 10s actos juridicos de apllcaclon
ci6n a 10s descartes en sus archivos (decreta nV 232179)
de esos contratos a 10s cacontratantes. ' Las sociedades del Estado se encuentran sujetas. -2.a las normas gene-~
b ) Los actos dictados en el procedimiento d e conhataci6n por via de rales que se dictaron por decreto np 993/79 para aplicar el margen de flexi-
la licitacihn o concurso, si en su estatuto figura una cliusula s e g h la cud en bilidad salarial y nomas posteriores en idintico sentido.
esas contrataciones deben seguirse los procedimientos de la licitacibn o con- * Para movilizar transitoriamente la disponibilidad en efectivo de re-
curso. cursos prapios deben contar con la previa conformidad de la Secretaria d e
C) bSactos de policia del senicio cuando esas sociedades prestan ser Estado de Hacienda -ley 21.981, art. 13.- y par la misma ley --art. 22- se:
vicios p&bIicos.
96 CONTRATO
DE OBRA P ~ B L I C A
tirna instancia integran la organizacibn adrninisttativa del Estado
privado en todo lo que se refiere a su organizacibn, funciona- (opinion de la Procuraci6n del Tesoro citada por el trabajo).
rniento y actividad externas, tambikn lo es que deben considerarse 11) De acuerdo con lo dispuesto por la ley 21.383, inc. a )
de aplicacibn a su respecto ciertas normas y principios de derecllo
p&blico no incompatibles con las finalidades de su creacibn. Es
resulta posible que la Fiscalia Nacional de Investieaciones Ad-
--~- -
ministrativas investigue la conducta de 10s directivos y empleados
que -aun con el grado rnhs amplio de descentralizacibn- en 61- de las sociedades del Estado.

les impone a algunas contribucihn con destino a1 Financiamiento de em- nimo control iuridico, thnico y econ6mico. Mhxime cuando el presupuesto
gaciones a cargo del Tesaro Nacional. d e la Naci6n no incluye a las sociedades del Estado en su estructura.
cuando realizan ~ o n t ~ a t ode s locacihn de inmuehles se encuentran so- La breve historia en la Rep6blica de las distintas formas de descenha-
metidas a1 &men del decreto n9 1000179, art. 2'. lizacidn arhitradas hasta ahora pur d Estado para apartane del cldsico ente
4 L~~ contratos de hansporte de agua 10s deben efectuar Con autArquico, antes que una corruptela, ec la plena dernostracibn dde yue es i m
d e matriculo nacional (ley 18.250, art. 10, inc. f ) . posible crear tipos de emprwas que sean como bloques errantes en el mar de
&ta lista es iucomp~etay no se agota la enumeraci6n PO' razones de las sociedades privadas del pais. Ni con las empresas del Estado de la ley
brevcdad 13.653 ni con las sociedades de economia mixta del decreto-ley 15,349146,
5) L~~soc~edadesdel Estado estin somebdas a un t ~ p od e control ad- ratificado par ley 12.962, ni con las sociedades de la ley 11.318 se lo 1 0 ~ 6 .
nrinistrativo. Por 6ltim0, cuando se dicth la ley 20.705 ya estaba vigente la ley 20.558
E~ efecto, las sociedades del Estado de caricter nacionaf,existentes que establecia la conducci6n superior y el control de todas las empresas en
a la fecha, con excepci6n ddela que se dedica a1 servicio de televislqn, se, en- ]as cuales el Estado tuviere propiedad o mayo& de capital accionano (aru.
cuentran en jurisdiccidn del Ministerio de Economia Y POT tal razan suletts 29 v. De .alli yue 10s autores de la ley 20.705 no se ocuparan en llegat a es-
12).
al control de la Sindicatura General de Empresas P(lblicas segun su4;e,de1 re-
i
de la ley 21.801 que instituye una sindicatura de caricter publlco mu- !F tablecer en eUa ciertos recaudos de control por cuanto confome lo prescript0
misamplio de mayores alcances que la sindicatura ~ n v a d ade las sy- en su art. 89 las participaciones del EFtado Nacional integraban el patrimonio
ciedades an6nimas (Eduardo M. ~oIemann, El sindico en las ewresm Po- [: d e la Corporacibn de Empresas Nacionales y tenia atlibuciones de "conduccidn".
blicas, LL, t. 1978-D, p. 1091). Hoy ese control pi-blico calificado ha sido sustituido por otro menor
por el poder Ejecutivo Nacional ejerce el C O ~ * O ~ d e tutela a travhs d e la Sindicatura General de Empresas Pfiblicas creada par ley
mediante el recurso de alzada legislado m el art. 98 his del decreto 21.801, que no incluye la "conducci6n". Los sindicos de esas sociedades no
no 1759112 reformado por el decreto nV 3700178. son independientes sino funcionarios de la referida sindicatura (ley 21.801,
a), ?sulta ,Po- arts. 80 y 10).
~e acuerdo con lo que dispone la ley 21.383, art.
sihle que la Fiscalia Nacional de Investigaciones Adminiseatwas mvestlWe I ) Los integrantes del directorio de las sociedades del Estado son de-
la conducta de sus directivos y empleados. signados par el Poder Ejecutivo o previa su conformidad expresa.
L~ m!,nilna franquia posible debe compadecerse con cierta minima Par- Si bien par la aplicacidn de las normas de las sociedades an6nlnas se
ticipaci,jn ddecontrol ~egislativo,reglamentaria, y hasta Y par medlo de Ins- .. "convoca" a una "asamblea" que resulta en definitiva ma asamblea "de
trucciones. Es cuestihn de prudencia el determinar el grad0 de esa PartLC>- uno" y revela atro capricho lingiiistico similar a1 seimlado para el concepto
pacihn. ~~~i juega el princlpi~seiialado en Cap. I de sue estas socledades de "saciedad", la verdad es que a esa "asamblea" concurre un representante
no pueden opener E S ~ ~un~ imbito
O intangible minima de autonoria. del Estado con instrucciones precisas y propone la designaci6n del directo-
~i incluso el control quisiera suprimirse, seria necesalio We S e refor- ria en las personas que fueron elegidas con anterioridad para esos cargos.
mars la ley 20.105 otras, mediante disposiciones cateah.ncas. minuciosas Y En el estatuto de Agua y Energia ElCctrica se dispone par el art. 99
c~aras; que lo se dictara un decreto reglamentaria de la ley 20.105 (decreto n' 3907/71) yue 10s directores serin propuestos por 10s Comandos
en ta] sentido. y asi siempre cabria la duda de su efectiva v*genc:a na Y el Ministerio de Economia, pero a rengl6n sseguido se erpresa textualrnente
s610 ante prbticas inveteradas tambiCn ante nuevas necesidades reales de que las designacjones o las remociones s e r h sometidas a consideracidn ddel
vigilancia ~ o n s t a ~ tpor
e la Administracibn central. Presidente de la Naci6n con anterioridad a -- la issmhl-n
-.--,
T ~ ]vez una po]jtica de sinceramiento en dicho sentido sea necesaria
~

Para Gas del ,EEtado, el art. 99 de su estatuto (decreto no 1.444118)


para evitsr rozarnientos entre las sociedades del Estado y ]as autondadw de dispone en forma similar para la propuesta d e 10s directores y advierte que
pero mientras no se la adopte, la cuestidn es asi: la lihertad in- esa propuesta ". . .sed sometida a la consideracibn del Presidente de la Na-
,[dica de entes esti subordinada siempre en cielto grad0 no ~610a un ci6n con anterioridzd a la asamblea".
control politico del gobierno central -via de la Secretaria de m a d o - Y POr Casa de hloneda (creada par ley 21.622) tiene un estatuto (decteto
leves, reglamentas, inrtrucciones y fiscaIizaciones, sino tarnbihn a un mi-
12) Si bien por aplicacibn de las normas de las sociedades designacibn del directorio en ilas personas que fueron elegidas con
anterioridad para esos cargos.
anbnimas las sociedades del Estado convocan a una "asamblea", -
13) Las sociedades del Estado reguladas por la ley 20.705
que results en definitiva una asamblea de uno, reveladora de un
capricho lingiiistico, la verdad es que a esa asamblea concurre un son personas phblicas estatales e integran la Administracibn Ph-
representante del Estado con instrucciones rec cis as y propone la blica nacional, aunque en un grado de mixima descentralizacibn.

p,.475/17, modificado decreto n9 1.725/79), cuyo art. 8"mpone di-


rectamente que los integrantes del directorio serin @designadas POI el Po* En 10s considerandos del decreto no 808/79, que tmnsformd a Aeroli-
~ j ~ National ~ ~ y agrega
t i que ~ si ~ esas personas . . .se encontrasen eJer- neas Argentinas en sociedad del Estado, se expresa que dicha empresa es
ciendo cargos pdblicos, solicitarin se les acuerde licep.cia sin goce de " . . . l a principal ejecutora de la politica aerocomercial que determine el
sueldo en 10s mismos". Poder Eiecutivo. . .".
~1 a*. 90 del estatuto de Yacimientos Peholiferos Fixales (aprobado La ". . .prestaci6n del servicio pdblico de abastecimiento de hidrocar-
decreto nq 1.080/77), referirse a la designacihn de! directorio seaala buros gaceosos en todo el 6mbito y en cualquier lugar del pais.. ." es el
que -. . .las propuestas de designacidn o remocitn.. . seran sometidas a , ? objeto de Gas del Estado (art. 50 del estatuto).
comideraci(m del presidente de la Nacibn, con anterioridad a la celehraclon En el mensale que acompafia a la ley 22.061, que aplica a la Admi-
nistraciun de Servicios Elkctricos ex CIAE el rhgimen de la sociedad del
de la asamblea".
E~ el case de Argentina Televisora Color LS 82 Canal 7, dispone Estado, se dice que ello es necesario porque corresponde ahora a1 &tad0
art, 9e de su estatuto (ley 21.969) que: "El presidente y el vicep!esidente prestar el servicio ptblico que antes ". . .se llevaba a cabo dentro de un
del directorin ser$n designados POI el Poder Ejecutivo National.. . . regimen de empresas nrivadas. ~ ~''
~~- . . .

8 ) sociedades
~ ~ del~d st ado tienen por objeto fines ptblicos. El decreto nV3.907/77 (modificado por decreto no 668/78) a p e b a
~ ~ d ~ ~del ~ abjeta~ concreto
d i para
~ el ~cual t fueron
~ c:e,adas
~ ~ Y ~ t ~ la transformacidn de Agua y Energia Electrica en Sociedad del Estado y
que consiste en actividades de tipo comercial, industrial o de se-clos,, las luego de manifestar en sus considerandos que el tip0 societaria que se adop-
sociedades del Estado, de manera similar a lo que oculle con otros tLPos ta ". . .asegura un absaluto contml de gesti6n y auditoda por el F t a d o Na.
de entes estata~es, se mantienen dentro de la organizacidn oficial POWue cional, a trav& de la propiedad de la totalidad del capital social, el poder
esos objetos atienden, aunque de manera indirecta o mediata, a fines ptblicos. decisorio en las asambleas ordinarias y extraordinarias y la designacibn de
srnnecesidad de discutir en teoria 10s que serian fines yenciales y no 10s integrantes del directolio y de la Comisibn Fisiscalizadora.. .", determina
esenciales del Estado, ya que ello es un asunto puramente pollt1c0 Y su obieta en el art. 59 del estatuto manifestando que tiene a su cargo la
prestacibn del servicio pliblico de electricidad, realizar 10s studios y pro-
.. --
tural, la realidad demuestra que en una u otra forma ,se i u t l f ~ ~laa creac~bn
7
,I man+enimiento de
.------~-~ empresas porque de algun mod0 pa'ticipan en yectos de las obras de regulacitn y de riego, administrindolas, y efectuar
el inventario y evaluacibn de 10s recursos hidricos en 10s rios y atros cursos
la actividad de gobiemo. de agua, sus cuencas y demds fuentes de alimentacih, utilizables con fines
mo es lo que ac~rrtece,y parece inlitil pretender que "0 forman Qarte
de bebida, riego y aprovechamiento energetico, reformado luego en parte
de la organizacihn administrotiva porque se dedican a materias Yue no de-
berian integrar los fines del %tado y, p ~ rtal motivo, negarles finalidad Para conciliarlo con las funciones de la Secretaria de Recursos Hidricor.
Argentina Televisora Color LS 82 Canal 7 tiene a su cargo la presta-
ptblica. cibn y explotaci6n de1 servicio de utilidad general de televisihn, emjtiendo
E~ el mensaje que acornpa66 el proyecto de la ley 21.800, diio el Mi-
nisterjo de ~ c ~ ~ ~ enm fecha i a , reciente, que " t a s Secretarias de m a d o in- con la caracteristica y frecuencia que se le asigoara, no en concesi6n sina
risdiccionales del Ministerio de Economia son las resljonsables de elaborar como organizacitn estatal que tiene a su cargo un servicio en forma directa,
formular las politicas sectoriales de sus respectivas areas. A su vez, las hecho que se repite en las anteriores empresas mencionadas que preshn un
empresas del ~ ~ que t actlian
~ end su jurisdiccihn
~ son instrumentos fun&- senicio ptblico.
mentales en la ejecucibn de tales politicas.. .". El estatuto de Y . P . F . , sociedad del Estado, aprobado pot decreto
10s casos particulares se advierte en 10s estatutos 0 en 10s no 1.080/77 dice que ". . .sera ejecutora de la politica petrolera national.. ."
s i se Y luexo concreta el objeto de su actividad.
mensajes considerandos qUe explicitan la motivacibn del act0 constitutive.
1.-"
-. . -.. ~- de inter& piiblico, las finalidades ptbblicas o el obietivo phblico
ralnnes VIII. Las sociedades del Estado y las prerrogaticm estatales. LO di-
~

cho prueba acabadamente que las sociedades del Estado reguladas por la
que ems sociedsdes tienen.
casade ~ , , ~desarrolla
~ d ~ coma objeto principal (art. 1" inc. a), de ley 20.705 y existentes en el orden nacional, son personas ptblicas estatales
"fabricar el dinero circulante, especies valoradas, ,instrumen- e integran la Administraci6n Pfiblica Nacional, aunyue en un grado de m ~ .
su estatuto)
t~~- ,.
" ~de control
t ~ d oNacional"
recandacibn documentacitn especial sue 1equ-a el Es- dma descentializacihn ----..
Como tales, est6n sujetss a 10s principios y a las n0rm.s del derecho
ELEMENTOS
DEL CONTRATO DE OBRA P ~ B L I C A
101
personas i~idividualesque realizan o contribuyen a que se lleven
14) Los directives de las sociedades del Estado son funcio-
a cabo esas funciones son funcionarios phblicos.
narios phblicos, En efecto, si aqukIlas se encuentran dentro del
cuadro organizativo de la Administracidn y tienen a su cargo, I
d e algGn modo, Ia concretizacidn de finalidades del Estado, las e) Otros tipos empresarios. - Como es el caso de la Empresa
I En efecto, si aqubllas se encuenfran dentro del cuadro organizativo
de la Administraci6n y tienen a su cargo, de alghn rnoda, la concretizaci6n
pfiblico administrative, sin ptrjuicio d e que no se 1es aplique aqueuas, 9Ye
de finalidades del Estado, ]as personas individuales que redizan o c o n e -
taxati~amente determina su rbgimen legal y que utilicen en sus r,elaclon,es
juridicas normas propias de la actividad especifica comercia1 0 lndustrlal buyen a que se lleven a cabo esas funciones son funcionarios phblicos.
que tienen a su cargo y en tanto y en cuanto no se oponga a ell0 alguna I Todo indica asi que es legal, funcional y justo considerar a los direc-
disoosici,5n de carictex general didada para la Administracibn Y w e es tivos Y altos empleados (Ie estas empresas societarias de la ley 20.705, no
como meros directores a empleados d e una sociedad an6nima plivada, sino
alcance.
~1 formar parte de la Administracibn y ser entes estatales, eiercen en como agentes piblicos -si se quiere pueden llamarse funcionarios piblicos--
algunos cases prerrogativas que no se limitan necesariamente a1 Qmblto d e de caricter sui gkneris y q a e no estahan regimentados por el Estatuto del
ejecuci,jn de los contratos, que se vinculan a la pasjbilidad d e la crea- Perswal Civil d e la Naci6n (decreta-ley no 6.666/57). Se trataria del mis-
ci,5n unilateral de d e b e m y vinculos obligacionales ( P I ei., Agua Y Energia mo sistema que el de las empresas del Estado. (Sobre tales empresas, ver
est; facultada a impone= multas y sanciones por infracciones a regla- Dromi, ob. cit., Derecha nrdmini@tico econdmico, t. I, p. 283).
mentaciones que dicte aplique sobre servicios d e energia e l h i c a 0 d e No existe unanimidad ni en las definiciones legales ni doctrinarias ar-
riega en modo semejante G ~ Sdel Estado con relaci6n a envasamiento Y gentinas sobre lo que es un funcionario o empleado phblico (ver Rafael
transporte de gas, fabricacibn y d e artefactos, etc.); a la presuncih de Bielsa, Derecho ndministrntiuo, 5a ed., t. 111, ps. 4, 24; Miguel S. Marien-
validez legitimidad de sus actos, a1 principio de la e~ecutorledad Y a ,Ias hoff, Tratado de derecho admjnistrotivo -reimpresi6n 1 9 7 L , t. III-B, p. 14,
ya mencionadas de los contratos, no gozando en camblo d e Premogatlvas pjrr. 834; Manuel Maria Diez, Derecho administratiuo. t. 111. n. dQ.9.I
procesalespOrque lo dispone el rhgimen legal de demandas contra la
- , = . --- ,.
Se presentan como concordes las datos definitorios minirnos siguientes:
~ ~ ~ i & ,tratindose
, de un case en que el Estado demuestra Y manifiesta el a ) prestan servicios personales; b ) en colaboraci6n con el Estado; c )
modo cbmo seran ejercidas sus prerrogativas d e caricter procesd en forma obligatoria, una vez aceptado el cargo.
~ h no~ deben~ ser confundidas con ]as "llamadas cliu-
i prerrogativas
~ Queda como discutible si 10s serricios deben ser remunerados o no, y
sulas porque el regimen exorbitante es propi0 t a m b i b del de- si la prestaci6n puede ser forwsa. -~~~
recho pfiblico se encuentra pox encima de la cliusula d e la especie, cons- Con tal supuerto, el director de nna sociedad del Estado es un agente
tituyendo un juridico general que, por lo demis, incluye Prer"Xatlys pliblico poxque efectlja sus prestaciones en virtud de una designacibn hecha
garantias (juan Cassagne, El regimen exurbitante Y garafltlas por el Estado a travhs d e su representante en la asi llamada "Asamblea Or-
del administrodo, ED, t. LXXXII, p. 934). dinaria" de la Sociedad, y su actividad son el servicio piblico o actividades
por ello, tal coma lo seiiala el autor citadq "el equilibria que debe industriales o comerciales que interesan a1 Estado. Entrarian asi los refe-
presidir las situaci~nes subjetivas (activas y pasivas) W e vinculan r e c i ~ r a - ridos directores en las definiciones d e Marienhaff, Diez, Dromi, Bielsa.
a la ~ d ~ i ~ iphblica ~ t ~con~ el~ administrado
i 6 ~ r e v i e r e que, junto Su "status" juridic0 no seria el del Regimen de la Funcidn P6blica
a la prerrogativa estatal, se configure un justo Y sdlido sistema d e garantias (ley 22.140) ni d e ningin otro vigente.
que cornpensen de a l g h mode las situaciones de sujecidn en .que se halls
En ese sentido, como enseda Dromi, 10s directores y altos empleados
el administrado frente a las potestades piblicas . de las sociedades del Estado son agentes pliblicos a1 igual que 10s adminis-
&tin, sin sometidas a normas dictadas PO^ el legislador Y
tradores de las empresas del Estado (JosB Roberto Dromi, Derecho odmink-
reglamentos especificos que no afectan a las sociedades anhimas ~1ivada.s~ trotieo econdmico, t. I, p. 321).
asi reducida su autonomia en la medida e n que lo iuzguen necesano
Debe destacarse que esa relacinn d e servicio, en la redidad nacional,
las autoridades superiwes del pais; ello sin que puedan oPoner a se presentn a travCs de una variedad d e regimenes normativos y par ello
esfgra de libertad juridica minima intangible (ver Cap. 1). na resulta excluyente la circunstancia de que tales funcionarios no se en-
E~ consecuencia d haber considerado a las sociedades del Estado
cuentren dentro del rhgimen d e la funcidn phblica d e la ley 22.140.
dentro de] camPo publico, es dable exigir de eUas la obligacidn de r a p e a r
Dicho regimen excluye, adem& de 10s ministros, a 10s secretaries d e
las garantias sustantivas y adjetivas d e 10s partlculares. Estado, subsecretarias y equivalentes, a 10s diplomiticos, militares, personal
1 ~ L~ . directives d e l m sociedndes del Estado son Nmwnarios PB
blicos. sin pretender baber agotado el tema, resulta carolario forzoso d e 10 gundad, docentes, y a '10s miembros integrantes d e 10s cuerpos cole-
s, las autoridades superiores d e las entidades juridicamente descentra-
ex~uestoQue los directives d e las saciedades del Estado son funciondos
s, 10s funcionarios designados en cargos fuera d e nivel en 10s organis-
102 CONTRATO DE OBRA PÚl3LICA
ELEMENTOS DEL CONTRATO DE OBRA PÚBI.lCA. 103
FerrocarrHes Argentmos} ' q ue tiene regu]a d o su Propio y exclusivo
18300 2 °. tablecido por la ley 13.064, pOr ejemplo, en cuanto al íus variandi;
régimen en la ley. 1 stableee que "en sus re 1aClOnes
.
El art. 15 de la citada ey ~ . < exclusivam8nte por "Alt, 49. - Ferrocarriles Argentinos tendrá derecho en las coo-
dídones y predos pactados u:
lo q uc llevaría a conSl erar como tUS~prlva as
terceros Ferrocarrz 'Zes Argent,nos se reg<ra'd . d
con 1 : -ad "
el derecho pnG o, celebra, "a) Disminuir hasta el diez por ciento (10 %) de cada ren_
a las contrataciones de obra que. d interpretación lltilízado en glón o del total licitado, pudiendo ejercer este derecho hasta el
. t r'e el crlterlO e · G al momento de la adjudicación. Sn las contrataciones de obras, este
Pero ! de acep, a s rápido examen d eI Reglamento ener
los párrafos antenores, un F" ocarriles Argentinos, apTo~ porcentaje será de Un veinte por ciento (20 %) < ob]¡gándose el
.
de ContratacIOnes· de la Empresa d erresidente nos muestr.a que contratista a ejecutar los trabajos adicionales y aceptar las modifi-
I ., 6809f71 e su pr
bado por reso UOlOn . . " , de1 r é'
ste reglamento gunen es _ mciones o redUcciones que le ordene el inspector de Obra, pu-
en nada sustancial se dIferenCIa e
,liendo en este caso hacerse uso de dicho derecho tanto al mOmen_
to de la adjudicación, cuanto durante la ejecución del pertinente
contrato;
-"-~~-_ .. -. d·d n convenciones
mos centrahzados y e 1 p eJ$onal compren l o e colectivas
'blí de
b "b) Aumentar hasta el diez por ciento (10 %) de cada ren-
. ..
tra aJo. 11 ede dudarse que se trata de funcionarios
e yapu tienen
cos.
glón o de] total licitado, PlIdicndo ejercer este derecho tanto al
1~ n~turalexa
De t'Odos e ü) no pu d" d a dos razones: porqu "
e ley na los incluye aten len o 'al (diplQmáticos, rromento de la adjudicación como durante 'la ejeCUción del perti.
:li;:;~;ne::,j;':;~'~~ ;~~~~dad, doc~!~~ ~J~~q~: sde~~~=s, e~bligaciones y
Ocune qu , . adaptado. su eSPeGI . I la je,arqu!.
nente contrato, prorrogando el plazo de CUmplimiento en forma
" .d ' ue se Jos sotneta a un Sl.
proporcional al aumento,
nupr .e q el caso del resto. e los exceptuados
esta,,,hdad, qued es enumere determinados casos etu; b't de la Ad- "Para las contrataciOnes de obras, dicho porcentaje Se elevará
al vcinte por ciento (20 %), debiendo el contratista ejecutar los
E! hecho e que se hallan también dentro de .m! o 'rubito de
¿emuestra que ese. case. se el articulo 1" define el gran el trabajos adicionales de conformidad con las instrucciones que le
.,
minislraclOn, ya
que la. norma en
d 1 Poder N . al- ydluego
Ejeeutivo ,aclOn ilo en sea imparta el inspector de obra",
~
3 licaClón -dependenClas
a , 'd d
f erOn cons! era os e
e
29 determiM taxativamente qUI n;sd

OJ»o encontran ose
están exceptuados e e ,0, "
dentro de ese gran amblto y,
. mente exc1m.d os.
En cuanto a la prerrogativa rescisoria:
"Art, 53. - Ferrocarriles Argentinos podrá rescindir los con.
por a 1'gu
que 1 na de las razones apuntadas,d "do
1
neceSUha C'.OD"'.... colectivas .,requiere
en conven..,.,.
tratos sin necesidad de trámite ni sentencia judicial, y sin recur_
so ~Igllno por parte del adjudicatario:
del personal compren 1 , la autorízaClOn con-
cont~m ~2140
E caso 'd de este trabajO, pero . eral
otro análisis, ajeno al
f 'da en el aft. 52 de la ey . para incorporarlos .al régimen gen
"a) En caso de muerte, incapacidad física, concurso o quiebra
~9 l~ $Ocieda~es
en, dicativo de la política futora. ausencia de texto legal ex-
de] adjUdicatario, salvo que a solicitud de los llerederos, represen_
~
es In X Conclusión, En definitiva, l?ese la ley 20.705, 'las
P
reso y. pese a 10 dispuesto por amen1lo son entes
d el fd e d e <krecho administratltJo
'dd
tante legal o sindico. el organismo contratante decidiera Continuar

~e;o:::n 0":;;; d~ la adrojnistric~:r d~;~~~!;;lZ:d~,jnistrativoS, trami~bli~~~:


d ' te-ntes en el or en e era, . d Pueden e.5as SOCIe u (>,$ la contratación en las Dlismas condiCiones estipuladas. En caso
de que Ferrocarriles Argentinos decida no continuar dicho contrato,
c~so:
d'ct r nctos adrnmLStratJvos> cee d 1 liCitación y CDnCutsos p no podrá Ser demandado por indemnización alguna;
de contrataci6n según norma't ne a "normas que estable.""n tal r::;o-
este último cuando su estatuto, COt::m~iénde acuerdo con normas te J- "b) en caso de hechos dolosos, culpa o negligencia grave del
adjudícatario;
ce~~:i::~~lo.
re
pO;u s~~~O~~';,,¡:ct~:e:te al Es;:~o'd:i I:~enso::~~d.;u:n~ma:
del Esta.do es menor que "e) por falta de cumplimiento a las cláusulas contractuales;
las e m p r e s a s , . bl'
prjY<lchs, ' d los oontmto..'l de ob11I pu lea que ce-
"ef) por transferencia total o parcial del contrato Sill autoriza_
:}o Ver nuestro trabaJo acerca e, la 3 lkabilidad de. la ción del organismo contratante, o cuando el COntratista sin dicha
lu. Empresa Ferrocanl"les ArgentlUos
n
h~ ley na~
~clonal
] b , Y 1.v "Revista ArgenuHll autorización se asocie o su bcontrate con terceros;
ra ooedimientos administranvos en a de De-
de pr
recho Administrativo..., n·1) 6, noviembre de 1973.
"e) en los contratos de obras, cuando el contratista se exceda
del plazo estipulado para la iniciación de los tr..bajos, o cuando
fico que reaIizan sea de todo punto incompatible con las reglas
la ejecuci6n sea realizada con tal lentitud, d e mod0 que la parte de aquella.
ejecutada no corresponda a1 tiempo previsto en 10s planes de tra- "A estos efectos deberhn elaborar pliegos de clhusulas p a n
bajo y a juicio del organismo contratante no puedan terminarse en la contratacibn de obras y snministros, adaptando las reglas de la
10s plazos estipulados, Ferrocarriles Argentinos tendrh en estos ca- legislaci6n presente a1 carhcter que ostente las referidas empresas
sos derecho a optar por la rescisibn o a exigir que el contratista y entidades y Ias peculiaridades de su funcionamiento.
ponga 10s medios necesarios para que 10s trabajos alcancen tal rit- "Estos pliegos deberin ser informados por la Junta Consulti-.
mo de ejecucibn que puedan completarse dentro del plazo de ven- va de Contrataci6n Administrativa a trav4s de la Direcci6n Ge-
cimiento contractual; neral del Patrimonio del Estado, antes de su aprobaci6n por el
"f) cuando el contratista interrumpa 10s trabajos o abandone Consejo de la respectiva entidad".
las obras por plaza mayor de ocho (8) dias en tres-(3) ocasiones, Como la validez de esta norma -que indudablemente con-~
o cuando el ahandono o interrupcibn sea continuo pol. el tbrmino feria caricter administrativo a la ~ o n ~ a t a c i bde
n obras y snmi-
de un mes, salvo fuerza mayor o caso fortuito debidamente acre- nistros celebrada por las empresas de propiedad estatal- fue
ditado a exclusivo criterio del organismo convatante; cuestionada por el Consejo de Estado, el 25 de noviembre de 1975
"g) en 10s demhs casos establecidos en esta reglamentaci6n". se sancionb el decreto 3410, nuevo Reglamento de Cbntratos del
La rescisi6n de 10s contratos efectuada par Ferrocarriles Ar- Estado, que en su disposicibn transitoria 2' establece lo siguiente:
gentinos seri comunicada a 10s adjudicatarios personalmente o me- ". . .]as empresas nacionales, aquellas entidades en las cuales
diante telegrama colacionado con indicaci6n de las causas que la la participacibn del Estado sea mayoritaria y 10s entes p6blicos
motivaron. que se rigen por el derecho privado en sus relaciones con terce--
N6tese tamhien la importante limitacibn en 10s derechos del ros se sujetarh, en materia de contrataci6n de obras y suminis-~
contratista en caso de rescisibn por culpa de la comitente: tros, a sus normas administrativas especiales y a las que puedan
"Art 54. - Cuando un contrato fuera rescindido por culpa de dictarse sobre rbgimen juridic0 de la empresa pliblica, aplichn-
la empresa, el adjudicatario tendrh derecho a que se le reconoz- dose en su defect0 10s principios de la presente legidacibn, salvo
can en concept0 de gastos directos e improductivos y como linica que la naturaleza de la operacibn a realizar sea incompatible con^
y total indemnizaci6n hasta un mhximo del veinte por ciento aqu6lIos.
(20 % ) del total contratado o que falte curnplir y aquellos mate- "En particular procurarhn respetar en su actuacibn, a1 objeto.
riales que fueron incorporados hasta d momento de la rescisi6n. de conseguir un comportamiento homogbneo en todo el sector pli-
serhn pagados una vez que el contratante determine su valor co- blico, 10s siguientes principios:
rriente en plaza al momento de su incorporaci6n, si no existieren "a) la rigurosa preparaci6n de 10s proyectos, especificaciones:
otros elementos concretos de su valor, sin lugar a reclamacibn al- y pIiegos de 'condiciones que sirvan de soporte a1 contrato me-
guna por lucro cesante, por intereses de capitales requeridos para diante 10s oportunos asesoramientos tkcnicos y juridicos;
financiaciones, ni por ninglin otro wncepto". "b) La celebraci6n de 10s contratos respetando, como regla ge-
En el derecho comprado la situaci6n tiene caracteristicas d e neral, 10s principios de publicidad y concurrencia, y
tratamiento similar. Asi, por ejemplo, en Espafia el anterior Re- "c) la iuclusi6n de clhusulas en 10s contratos que estimulen al.
elarnento
" de Contratos del Estado (decreto 3354/67) en su art.- empresario a un correct0 cumplimiento y que salvaguarden el in-
398 establecia: ter& de la entidad en 10s casos d e incumplimiento.
"Las empresas nacionales y 10s entes p6blicos que se rigen "Incumbe a 10s Consejos de Administraci6n de las indicadas
por el derecho privado en sus relaciones con terceros d e b e r h empresas y entidades cuidar del cumplimiento de 10s principios.
preparar y adjudicar 10s contratos de obras y suministros que ce- qne en este precept0 se establecen e interpretar las dudas que:
lebren conforme a la legislacidn de contratos del Estado, salvo suscite su aplicacidn.
oue sus normas constitutivas lo prohiban o la naturalem del tra-
ELEMENTOS
DEL CONTRATO DE OBRA P ~ B L I C A
107
A ) Empresas pliblicas que gestionen s e ~ c i o spitblicos:
"Cuando el volumen de coutrataci6n lo justifique, 10s Conse- a ) contratos administrativos:
jos de Administracibn deber&n aprobar inshucciones y pliegos ge- - contrato de obra pitblica,
nerales para la contratacibn de obras y suministros por la empresa - contrato d e suministro,
.o entidad, adaptando 10s principios de la presente legislaci6n a1 - contratos de contenido patrimonial, de prkstamo, dep6sit0,
caracter que aquellas ostentan y a las peculiaridades de su fun- transporte, arrendamiento, sociedad y cualesquiera otros cuando
cionamientd. concurra en ellos alguna de estas circunstancias;
En gran rnedida la norma transcrita (quiz& con mejor t6c-
- que asi lo declare la ley,
nica legislativa) responde a1 espiritu que anima a nuestro art. - c,ue est6 directamente vinculado a1 desenvoIvimiento re-
--- -.. nrovecto
1 0 9 del r - ~ , . citado. E n definitiva, este tip0 de
SETOF,. va
gular del servicio pitblico.
disposiciones quiere significar lo siguiente: - que revista caracteristicas intrinsecas que hagan precisas
a ) reconocimiento implicit0 de la naturaleza pitblira del ente una especial tutela del inter& phblico para el desarrollo del con-
v de su insercibn en la estructura organizativa de la Administra- trato.
ci6n Pitblica;
- Contratos de consultoria y locacibn de servicios.
b) sin perjuicio de lo anterior, reconocimiento de la especifi- El ordenamiento aplicable a estos contratos serd el sieniente:
cidad de la gestibn cumplida por dichos entes y la necesidad de - Normas generales suficientemeute flexibles, tanto de tipo
aue cuenten con una legislacibn especial apropiada a las carac- procedimental como substantivo.
teristicas de tal gestibn, - Reglamentos d e cada empresa y pliegos de cada contrato
c) reconocimiento del carhcter pliblico o ius-administrative e n particular.
d e 10s contratos que celebran ( y de su rkgimen juridic0 en gene- - Supletoriamente, el ordenamiento general de las empresas
ral), por lo que esa legislaciirn especial deberA respetar 10s prin- pliblicas.
cipios basicos de la contratacibn administrativa (p. ej., 10s corres- - En defect0 del mismo, el ordenamiento contractual esta-
pondientes a la seleccionabilidad del contratista estatal, 10s que tal y el derecho administrative general.
permiten garantizar el predominio del inter& pitblico sobre la VO-
luntad contractual de las partes, etc.) y, en su caso, la a~licaciirn b ) Los restantes contratos, siempre segitu Rivero Ysem, de-
berian tipificarse como privados aunque sometidos al derecho ad-
supletoria o analbgica de las pertinentes normas del derecho ad-
ministrativo (lo que en realidad 10s transforma en contratos de
ministrativo; todo esto con especial Anfasis en 10s ontratos de
ebras y suministros, sin duda por la trascendencia politica, juri- derecho pfiblico) en lo que se refiere a la preparacibn, competen-
dica y econbmica de estos contratos. cia, adjudicaci6n de tales contratos, con competencia jwisdiccio-
En una excelente sintesis conceptual, Rivero Ysern formula nal de 10s Tribunales Contenciosoadministrativos.
10s siguientes criterios orientadores para la regulacibn normativa B) Empresas pitblicas que gestionan fines de politica eco-
de la actividad contractual de la empresa pliblica, a la que 41 n6mica de interks general:
define como "un ente public0 dotado de personalidad juridica que,
-
a ) Contratos administrativos:
bien incrustado en la organizaci6n administrativa tradicional, o - 10s de obra publica;
.bien dependiendo de un ente creado a1 respecto, gestiona servicios - 10s asi calificados por la ley;
pitblicos o realiza fines de politica econ6mica de inter& gene- - 10s de contenido patrimonial, d e prkstamo, depbsito, trans-
ral"~". Esos "criterios orientadores" son 10s que siguen: porte, arrendamiento, sociedad y cualesquiera otros, siempre que
revistan caracteristicas intrinsecas que hagan precisa una especial
21 Rivero Ysern, E., Los co~lfratos de Gas smpresm ~jblicm estntoles, tutela del inter& pitblico para el desarrollo del contrato;
en la obra conjunta "La ernpresa pi~blicaes~aiiola",p. 349, en especial ps. - 10s de consultoria y locacibn d e s e ~ c i o s .
.381/387,Institute de Estudios Fiscales, Maddd, 1980.
son personas publicas (del derecho internacional, aunque vincu-
El ordenamiento aplicable para estos contratos es el mismc ladas a 10s gobiernos nacionales respectivos por la asignaci6n d e
que el desarrollado para las empresas phblicas que gestionan ser- personal, fondos, etc., segiin lo establezcan las norrnas internas
vicios phblicos. d e cada pais y el tratado que les dB origen) que tienen como fi-
b) Los restantes cqntratos deberian considerane privados,.
per0 con la misma salvedad que en el caso anterior, lo que, en
Es cierto que estas organizaciones intergubernamentales (asi han sido
nuestra opinibn, 10s convierte en contratos del derecho adminis- .denominadas par la doctrinal presentan diferencias con 10s Estados.
trativo, confirmando asi la unicidad de rkgimen juridic0 que para Por ejempla, bay opiniones discrepantes en lo que hace a establecer si
estos entes hernos predicado en una ocasibn anterior ". 10s referidos organismos (en adelante 10s identificarh con la sigla 0 1 ) son
wjetos del derecho intemacional o 'personas' intemacionales. La mayoria
d e 10s autores sostienen que sblo algunos son personas intemacionales, y nada
mis que en ciertos aspectos cuya determinaci6n dependeria bisicamente d e
sus estatutos (v. Seyersted Finn, "Objective International Personality of In-
tergovernmental Organizations", publicado en "The Indian Journal of In-
La realidad geogrifica de nuestro pais impuso la necesidad ternational Law"., IV, 1- R- -R-4 1,.
Aunque la referida atribuci6n d e personalidad, en la prictica, depen-
de realizar obras phblicas de aprovechan~iento comiin con otras' d e r i d e la 'lex fori'.
naciones fronterizas, en particular grandes obras para la utiliza- De todos modos, hay alghn acuerdo en reputar que las alndidas dife-
cibn de la energia hidroel8ctrica, puentes y ob-as vias de comuni- rencias tienen poca o ninguna importancia en lo que ataiie a la caMicaci6n
juridica de las relaciones extemas de las 01.
cacibn, etc. Estas obras se encuentran emplazadas ~arcialmente~ Para aclarar el punto, en las posibles relaciones de la: entidades refe-
en territories de las dos naciones en cuestibn, y de ahi la necesi-. ridas suele distinguirse entre: a ) las intemas que se dan entre 10s Estados
dad de que tales proyectos sean encarados en combn por 10s dos que las componen, sus 6rganos. funcionarios, etc.; b ) las intemacionales, con
o mis paises involucrados. otros Estados o personas del derecho intemacional, y c ) 1,s externas, con
Para ello se recurrib a la tbcnica (no novedosa en el derecho. pa~ticulares, sean personas de existencia ideal o visible. Estas se someten
generalmente a tribunales nacionales, a tribunales intemos (propios) del
internacional) de constituir entes de caricter binacioral, con la organism0 (si 10s tuviese) o a tribunales arbitrales.
principal campetencia de llevar adelante el emprendimiento de Sobre este liltimo t6pico se ha conceptuado que cuanda una 01 con-
qne se trate, tanto en su etapa de estudios y proyecto, como el trata con un particular la relaci6n se hallari regida por el derecho interno
(estatuto) de la 01, si act116 como tal, o por principios generales del dere-
posterior llamado a licitacihn, contratacibn y ejecucibn. cho, si actu6 como particular, que no pneden confundicse con el derecho
No es &ta la ocasibn para efectuar un anilisis acerca de la internacional p6blico. Salvo que d e 10s tkrminos del contrato surja que el
naturaleza juridica de estos entes 23, pero no cabe dnda de que. vinculo se ha colocado en la esfera del derecho local.
A raiz de tal orden de relaciones extemas con particulares las 01 pue.
den comprar, contratar trabajos, recibir donaciones, demandar o ser deman-
22 Barre, R. C., ob. cit., Principias. . ., ps. 188/218. dadas ante cortes nacionales y cortes arbitrales, etchtera.
22 sobre el particular ver el extensamente fundado dictamen del en- Seyersted sostiene el punto d e vista d e que las relaciones externas ju-
tonces procurador d e la Cimara Federal d e Apelaciones, Dr. h l i q u e s. re gestionis de las 01 son regidas por el derecho local ('*Aplicable Law
Pctracchi, in re "Saier S R L , c/Comisi6n TCcnica Mixta de Salto Grande", in relations between Intergovernmental Organizations and Private Partiesv,
LL, 1979.~.489. TambiCn ver el trabajo d e Carlos M. Giuliani Fanrouge, Recueil des cours, de la Academia d e Derecho International d e La Hays,
acerca del status d e un ente binational, en LL, 1980-A-909. P 463), sin embargo, seiiala las divergencias doctrinarias d e tres modemos
nictamen del sr. Procurador de la Cdmara Federal de Apelacioner, en autores.
~

autos "Saier S.R.L. c/Comisi6n TBcnica Mixta d e Salto Grande : Uno d e ellas: Mann, F. A. (en su obra The P~operLaw of Cmtrocts
. c ~ s t aees asocia~i6n de los Estados argentino Y uruguayo, sin fines cncluded by International Persow) establece el mismo principio de gue
comerciales (en el sentido jusprivatista del tCrmino), que tiene un estatuto 10s contratos entre una persona internacional y un particular son, como regla,
escrito, incluido en un tratado entre las nomhradas naciones, suns
que analogia
fue in- gobemados POI el sistema d e derecho local elegido por las partes (v. The
corporado al derecho patrio por la ley 13.213, y que guarda 81, British Year Book of Internntiod Law, XXXV-1959, cap. I, punto I, p.
con la mis vieja de esa especie: la Comisidn Central para la Navegaci6n 4 1 ) . Sin embargo, y a panir d e las soluciones concretas que se dieron n
del Rin en Estrasburgo (aiio 1815).
Estos entes estin regidos por el derecho intemacional, que-
nalidad el cumplimiento de un cometido administrativo (es decir,. en el caso puede calificarse de derecho intmnucionol admtn.kfra-
propio de la funcibn administtativa) que, por las circunstancias. tivo, habida cuenta de que 10s tratados (fuente del derecho in-
mencionadas, no puede sino realizarse con el concurso d e ambas ternacional) que 10s originan son de la especie de 10s trutados 0,.
naciones y en beneficio de las respectivas comunidades. contienios administrativos, en opasici6n a 10s llamados tratacEos po-
_L__
liticos. Segliu la doctrina 24, hay tratado adminirtratioo "cuando.
los cases que cita, Mann concluye que, en ocasiones, podri$ Ser ventaioso.
mediante la conclusi6n del mismo el Estado pretende cumplu-
aplicar a1 contrato el derecho intemacional. mejor sus fines administrativos internos y satisfacer 10s intereses
C. Wilfred Jenks, en su libro The Proper Law of Internatioml O W - . de sus slibditos", como, por ejemplo, 10s tratados comerciaIes, de
nixotims no se limita como Mann al Ambito contractual en el que impera
la voluntad de las partes, sino que se hace cargo de ohas situacioner iuri-
navegacibn, aduaneros, pastales, etc. Sin duda cabe incluir en
esta lista a los tratados para la ejecuci6n de obras comunes, ya
dicas de las 01 para cuyas soluciones remite a1 derecho internacional p6-
blico, a los principios generales del derecho, al derecho admirustrativo inter- sea par el lugar de emplazamiento o bien por sus efectos directos
national, sl derecho dom6stico de las 01 y a1 derecho personal de las 01,. e inmediatos. En carnbio, 10s tratados politicos no pretenden el
annoue., camo bien se5ala Seyersted (p. 463), sin definir las relaciones que foment0 o cumplimiento de un fin o una actividad administrativa
existiiian entre estos diversos conceptos.
podria interesar para el "sub examine" lo que expresa Jenk en Ps. en particular, sino "el primer deber del Estado, su propia conser-~
184 165: '.A for services concluded by an internabo- vacibn", como es el caso d e 10s tratados de alianza, d e garantia,
rial boay corporate with a person not in its service presents a special Pro- etchtera.
blem. on the hand ~ u c ha person, possibly an architect, a doctor, an Por el contenido de estos tratados administrativos, una vez
engineer or a ~olicitor, has not accepted the special relationship the. introducidos en el derecho local a trav6s del procedimiento pres-~~
intematiollal hody corporate which govern its relations with Persons
=*ice on the basis of the international administrative law; he is not sub~ect cripto por el art. 67, inc. 19 de la Constitucibn National, se con-
to its instmctions or administrative control and, subject to any special con-
hactual arrangements, his obligations towards it are governed by professional
etiquette rather than by international rules. On the other hand, s u ~ ha marchandises f i n e importance considkahle, des architectes, des entrepre-~~
is entering into a personal relationship with the intematlonal neun qui vont Wifier des batiments, et ceci en w e de I'activit.4 propre de
hody corporate which differs in character from an ordinary commercial con- I'organisme" (v. p. 486 de la obra de Seyersted cit. en segundo tbrmino).
tract which must he assumed to have been concluded in accordance with piensa que se hallan regidos, en principio, por el derecho internacional ph-
commercial usage. ~t may be debatable in such a case whether the blico, aunque la organizacibn puede cantractualmente elegir el derecho local.
international body corporate has contracted on the basis of the law familiar Es visible pues, que mnchos autores proponen la distinci6n entre actor
to the professional man or the professional man on the basis of pnnciples iure imperii y jure gestionis como pauta interpretativa que lleva a la
which have heen envolved or adopted by the international body corporate. canclusi6n de que 10s primeros son materia del derecho intemacional pli.
where joint profession~lservices are given by professional men with diffe- hlico, y 10s segundos del derecho local sue correspandiese por aplicaci6n de.
rent nationalities and domiciles it may be desirable that uniform rules sh",uld~ normas de derecho intemacional privado.
be applicable. The whole question would appear to be one of m:entlon: Quizi valga la pena repasar que el origen de dicha disfinci6n se re-
if the intention of the parties cannot be qlearlp deduced from the clrcL>ms- monts, en el derecho intemacional positive, al caso "Serbian Loans", fallado.
tances it may desirable, if the matter is of sufficient practical i m ~ 0 T n c e por la Corte Permanente de Justicia Internacional, en el cual se declar6:
to fustify raising it, to include an appropiate provision in the contract . Cualquier contrato que no sea un contrato entre Estadas en el cual se ha-
~ i ~ posici6nt i asume
~ ~ Henri Battifol en sus Froblimes des contrflcts llen en iuego ms capacidades como sujetos de derecho internacional, ests
prices int-timur (Universiti de Paris, Institut des, %utes Etudes In- fundado en el derecho local de alghn paid'.
ternational-, .9 fascicules publi& par I'Association des etudes lntematlonales. Empero, tal teoria ha sido hoy casi sustituida por la de la sujecibn a1
1961-1962, ps. $1/106) que distingue entre 10s Estados Y las 01. :Us con-^ derecho internacional ~hbll"coen 10s dos casos (gesti6n o imperio) siempre,
Mienwas qne para 10s Estados admite la presuncibn de dlcha que las partes Sean sujetos de derecho intemacional phblico (V. Schwanen-
01
tratos con particulares se rigen por el derecho local, para berger, George, A nonuol of i n t e r m t h l law, London, 1960, t. I, p.
admisibilidad a 10s contratos ordinaries o audiares, POI e~emplo, enhega de 142). Ambas teorias son, por cierto, igualmente referibles a 10s organism-;
equipo de oficina, o de trabajo. como el demandado en autos"^ ..
E~ para ~ t r *c~asede contratos, relatives a1 eiercicio de 2 4 Merkl, oh. cit., Teoria general. . ., p. 164
r..,,;,,,, & la orpanizaci,jn, tales como "foumisseurs qui vont livrer
,112 CONTRATO DE OBRA PÚBLICA
E LEMENTOs
i DEL CONTRATO DE OBRA PÚBLICA
113
vierten en fuente del derecho administrativo interno 25 con ámbito
de aplicación en todo el territorio de la Nación, conforme con la
jerarquía nonnativa establecida en el arto 31 de la Constitución
Disposiciones Contractual 1
B,
ca~le. Todas las euestiOl~::S :~l~::: d se estableció: "Ley apU-
esten contempladas expresamente a as con el contrato, que no
Nacional. le.. quedarán sometidas ,uplcto' en t los dlocumentos contmctua_
Todas estas razones nos permiten concluir en l. indiscutible blica Argentina o de la Re' /b'1~mendel a as leyes de la Repú-
'calificación de obra pública con relación a los contratos de obra ] d pu wa e Paraguay , '
ugar onde el contratista h ' . ' segun sea el
celebrados por estos entes, a tal efecto., ," (art, 4,2.09):a constItUIdo Un domicilio especial
Otro punto a definir será el de la legislación que rija esos
Por lo demás el resto de las disposiciones
·contratos (en cuanto a la jurisdicción para dirimir las eventuales eión contractual ~onfonna n tí ' de la documenta-
--contiendas que se produzcan entre las partes contratantes, ver el una estructura y COn di u.. plCO contrato administrativo, COn
fallo citado en la nota 23), para lo cual habrá que estar a lo que tra 1ey 13,064, SpoSlClones muy simllares a las de nUes-
'disponga el respectivo tratado de ereaojón del ente o de los que
,'se formalicen con referencia a las obras a ejecutar.
§ 15, ENTEs PRIVADOS
Como principio general puede afirmarse que la relación ju-
rídica entre el ente binacional y el locador de la obra estará re- Corresponde analizar si el contrato de
gida por el tratado o tratados pertinentes y por las restantes nor- ~er, c,elebrado, en carácter de comitente por obra pública puede
mas que en su aplicación se dicten, en especial el Reglamento de Jnndlca de naturaleza privada, ' Una persona física o
Contrataciones del ente y los pliegos Iicitatorios. Supletoria (sí ---,---
está previsto en el tratado) o analógicamente regirá la legí,lación conv,eniO, las Altas Partes Contratantes se eom . ••
de obras públicas (o la general sobre contratos administrativos, cornUlt, .,
. el aprovechami"'nto
'" bidrOel é '
eUico el prometteron
' . a realizar en
Ctones de navegabilidad d ¡ , p ' , • me)orarruento de las condi_
según el caso) del lugar de celebración del contrato o, si el con- enoaranaalaalt dI"~
e:ventualmente, la atenuaciÓn de 10s efecto Ura e a 1513 Yaciretá y,


trato se celebra en la sede del ente, declarada extraterritorial por Clones producidas por crecidas enr d' . s" depredadores de las inunda_
el tratado, del Jugar donde se ejecuten las obras objeto del con- tas Partes Contratantes COnstituyen a: l?anas. A estos efectos <' •• .las Al.
I una elltidad bíni'lcional llamad y'. ;gua1dad de derechos y obligaCiones
"trato. Si estas obras se desarrollaran en territorio de ambos paí- . . con caña"'I'd cl "d' f '
y a dmimstrativa.,.» (art. IIIa1 j acuetu
"y : ; '" a Jun lea, manciera
! ses (siempre en defecto de previsión del tratado, Reglamento de
Contrataciones o pliego) serán de aplicación los principios comu-
~~rgia Eléctrica de la Argenth..a ) aCJretá se:-a. cO~St:ituida por Agua y
tTlcldad del Paraguay, COn igual ~r~: la ,:dnumstraCJ&: Nacional de Elec.
f nes de ambas legislaciones, y en caso de diferencia o contradic- las nonn~s ert"ablecidas en el pr:ente ~ac~~ en el capItal y se regirá por
ción, la norma que le resulte más beneficiosa al administrado, mentos dIplomáticos vigent 1 ra 0, sus Anexos y demás instru
En el art XIX 1 es y os, q~e se acordaren en el futuro"" (art IIlO)-
f Nada obsta, por supuesto, a que en cada caso en particular d el pliego citada en el texto, se estáblece.e~<era1 .0, f ~d~mento de la' norma
" , COmo pnnClpio g ,,¡;,.

1
J se adopten variantes sobre los principios generales antes expues- ~tá, con l'elnci6n a las personas físicas ',~ jUrisdlCClón aplicable a Yaci-
tos, aunque manteniendo siempre su esquema fundamental. Tal tma o en el Paraguay será la de 1 0. r1 Jeas domiciltadas en la Argen-
ch;dad de Asunci6n, r~spectivamente a ~u Ji de Buenos Aires o la de la
:¡ es el caso, por ejemplo, del contrato para la ~Construcción de las tratante aplicará su propia legislaci6~ ,tal efecto, cada Alta Parte Con-
., Obras Civiles Principales", Proyecto Yacíretá, cuya licitación fue del presente Tratado'~ A s remendo en cuenta las disposiciones
H
llamada por la Entidad Binacional Yaciretá 26, En el Pliego de de 1975, emanada del Conse~o vd:' tao!: .
~esoJ~ción n? 8, del 14 de enero
Regl,l1l'1ento Interno de dicho t lmmistraclón de Yaciretá, se aprobó el
duración y sede del ente S" eón e, e dque, además de ratificar el ob¡'eto
' . > uS rganos e gob:e >
20 [bid, 152, ClOnamlf;mto y el régimen cont bl ' . ' mo y nOrmas pará su fun-
2-6 La Entidad Binacional Yaciretá fue creada en virtud del Tnttado un Régimen de Contrataci6n :e ~ y }I~anclero> estableció (Título Tercero)
~de Yaciréfá ~~rito por la República Argentina y la República del Para~ naciones, donde establece la no rm e;lc1os y Obras, AdquiSiciones y Enaje-
guay el día :3 de diciembre de 1973 y ratificado por ley 20$46 de la Re- de contratistas, destacándose las a v:. para el procedimiento de selección
.pública .Argentina y 433 de la República del Paraguay. En virtud de tal d?st:jas de las Altas Partes Contr;t:e:tlones para la protección de las jn~
publ¡cá, su reglamento de pTOCed" es y la regla general de la licitación
lmxentos y condiciones para la adjudicación.
Por supuesto, me estoy refiriendo aqui a entes que no for- ducen a1 dmbito del sector pliblico la calidad de sujeto locatario
man parte de la Administracibn descentralizada, teniendo en cuen- del contrato d e obra pfiblica.
ta que en 10s parAgrafos anteriores fueron calificadas como p6bli- El art. 1Qde la ley 13.064 tambikn exduye de su Qmbito nor-
cm determinadas personas juridicas (sociedades del Estado, etc.) rnativo, por cuanto no constituyen obras pliblicas, aquellas efec-
que la doctrina califica como privadas. Se trata, entonces, de en- tuadas con subsidies. El subsidio es u n medio de foment0 que
tes cuyo patrimonio no es estatal (ni siquiera parcialmente) y en pertenece a1 gknero de las subvenciones, es decir aquellas que
10s que el Estado no integra sus 6rganos d e direccibn o de for- abarcan "todo tip0 de auxilio econ6mico direct0 o indirect0 otor-
maci6n de la voluntad d e la entidad. gad0 por la Administraci6n", seglin el concept0 amplio admitido
A priori puede afirmarse que en la medida que el contrato por Garrido Falla 28.
administrativo supone, obviamente, la existencia de una relaci6n Precisamente el fomento es un instituto del Derecho Admi-
juridica administrativa y dado que ksta s610 puede reconocer co- nistrativo que, con la finalidad de buscar la obtencibn d e fines
mo sujeto distribuidor del bien comlin a una persona pliblica (ver pliblicos a travks d e la actividad privada, s610 convierte en ius-
supra, 5 12) no puede una persona privada ser comitente o lo- administrativa la relacihn de fomento propiamrnte dicba, es de-
cataria d e un contrato administrativo de obra p6blica. Esto es cir la que se establece entre la Administraci6n Pliblica y el bene-
asi dado el carQcter de instrumento para la realizaci6n y distri- ficiario del medio de fomento, pero, por su propia naturaleza,
buci6n del bien c o m b que caracteriza a todo contrato adminis- mantenimiento en el Qmbito juridic0 privado del mismo beueficiario,
trativo (ver supra, Cap. I, $ 2), ya sea de atribucion o de colabo- a la actividad fomentada y las relaciones juridicas a que ksta dk
raci6n 27. lugar. Se trata de un medio de intervenci6n administrativa en
La misma ley 13.064 en su art. 1" indica (aunque no lo la economia que no implica la transferencia de la actividad d e
inter& pliblico a1 Bmbito estatal; simplemente orienta la actividad
sefiale expresamente) que el carQcter de locatario en la obra pli-
de 10s particulares sin emplear la coaccibn ( a diferencia de lo que
blica s61o puede corresponder a una persona pliblica, al calificar
ocurre en materia d e policia) y sin gestionar directamente dicha
como obras pliblicas a las que son ejecutadas "con fondos del Te- actividad, en contraposici6n con la gesti6n directa de determina-
soro de la Nacih". Las legislaciones provinciales y el proyecto
dos servicios pliblicos (aun en la indirecta, a trav6s de concesio-
SETOP (ver citas e n supra, $ 13) con mucha mayor claridad re- nario, puede afirmarse que la actividad en si misma se encuentra
transferida a1 sector pfiblico) o con la asunci6n de detenninados
2.i Cassagne, en Los contratos & la ndministracidn vliblica, ED, 57- medios de producci6n mediante las empresas comerciales-indus-
793, distingue acertadamente estas dos categarias de contratos segim a triales de propiedad estatal. Por ello el fomento ha sido definido
quien corresponds la realizacihn d e la prestaci6n principal (la que califica como "aquella actividad administrativa que se dirige a satisfacer
a1 contrato). Asi, 10s contratos de atribuci6n s e r h aquellos cllya presta-
ci6n principal es ejecutada por la Administraci6n (p. ej.: la concesi6n d e indirectamente ciertas necesidades consideradas de carQcter plibli-
uso del dominio pGblico) y 10s d e colaboraci6n harin referencia a aquellos co protegiendo o promoviendo, sin emplear la coacci6n, las acti-
contratos donde la prestacidn principal correspande a1 administrado, como vidades d e 10s particulares o de otros entes pliblicos que directa-
ocurre con la obra p6blica o el suministro. & una ocasihn anterior -Lo
mente las satisfacen" 29.
intangibilidad de la remvnerocin del contratista particular e n 10s contrutos
odrninistmtivos, ED, 62-717, nota 13- serial6 que ". . .todo contrato admi- Por lo d e m h , 10s fondos entregados a travks del subsidio in-
nistrativo tiene coma finalidad principal satisfacer el bien comim -aun a gresan a1 patrimonio del beneficiario, quien pagar6 en el futuro
trav4s del beneficio particular d e un administrad* ya sea que la prestaci6n la obra con fondos que ban deiado de ser "del Tesmo d e la Na-
principal y determinante del contrato se encuentre a cargo del administra-
do -contrato d e colaboraci6n- a de la Administracibn -contrato de ahi-
buci6n-. Lo que ocurre es que la propia terminologia --colaboraci6n Y
atribucih- mueve a canfusi6n, par lo que deberia ser reemplazada par otra 28 Garrido Falla, ob. cit., Trdodo. . ., vol. 11, ps. 317/322.
rnis adecuada". 29 Ibid., p. 308.
cibn". Asi tarnbikn la misma obra, una vez ejecutada, integrarA 10s contempla de manera directa (p. ej.: art. lo de la ley 13.W).
el patrimonio de la persona privada que pag6 su precio, lo que por las normas aplicables a 10s contratos de obra phblica.
en principio la. excluye de la calificacibn de obra pliblica, seglin Tal es el caso dcl concesionario de senicio ~ h b l i c oen rcla-
lo desarrollaremos mhs adelante. ci6n con las obras que mande ejecutar que reconozcan esa rela-
ci6n directa e inmediata con el senicio concedido y que, aun
cuando no tengan esa relacibn, Sean susceptibles dc reversi6n por
la administraci6n concedente a1 tkrmino (normal o anormal) de la
concesi6n (sobre el particular ver infra, Cap. V, $ 4 3 ) .
En estas condicioncs, el contrato se encontrarh soxetido bi-
Bajo esta denominaci6n la doctrina 30 cngloba distintas ila- sicamente a1 mismo ~e'gimenjuridico exmb;tante -prerrogativas
ses de entes privados- incluso personas fisicas- que apoyados del comitente y garantias del constructor- que caracteriza a todo
en distintos titulos j~ridicos realizan cometidos piiblicos -es de- contrato administrative.
cir que han sido asumidos como tales por la Administraci6n P6- Idkntica situaci6n ocurre con 10s llamados entes de autoad-
blica- sin perder o modificar su personalidad juridica privada. ministracidn (ver referencia en supra, nota 31), quienes tambikn
reciben la competencia de ejecutar cometidos pliblicos, aunque 6s-
En otra ocasibn 31 he explicado este fen6meno a travks de la
figura de la "delegncidn transestructural de conetidos", que per- tos no constituyan estrictamente un servicio p6blico. A ellos se
aplican 10s principios indicados en 10s pirrafos anteriores.
mite al ente privado tonlar el lugar del sujeto piiblico en la rela-
Es necesario destacar que Bsta no es una posicidn admitida
ci6n juridica administrativa, lugar que este irltimo hubiera ocupa-
ni por la doctrina mis autorizada 32 ni tampoco por la prktica
do de no mediar tal delegation transestructural (en infra, Cap. V ,
habitual.
se estudia la delegaci6n como u11 sistcma de ejecuci6n de las
o b u s p6bIicas). Sin embargo, corresponde insistir en las siguientes notas:
a ) el ente privado delegado (concesionario de un servicio pii-
Dc esta manera, en el marco de la delegaci6n y en lo que
blico o gestor de determinados cometidos piiblicos, p , ej., asisten-
resulte esencial para el cumpiimiento del cometido pliblico dele- ciales) ocupa, accidentalmmte, el lugar que le pertenece a la Ad-
gado, la relaci6n juridica entablada por cstos entes (clue, insisto, ministracibn Phblica por titulo propio (responsabilidad politico-
siguen siendo privados) estarA regida por el derecho administra- juridica en la prestacion del cometido, cuyo anilisis excede el
tivo, salvo en aciucllo que se muestre como esencialmente contra- marco de este libro);
dictorio con la naturaleza juridico-privada del ente ( p . ej., nor-
b) el papel del ente pivado delegado estA, en consecuencia.
mas sobre competencia, estabilidad de su personal, relaci6n je-
limitado en el tiempo, ya sea por expiraciirn del tkrmino de la
rhrquica con otra persona u 6rgano estatal, etcktera). ,
delegaci6n o por decisi6n unilateral del delegante, cuando razo-
En estas condiciones, 10s contratos de locacidn de obra que nes de interks piiblico asi se lo aconsejen;
celebren estos entes en calidad de locatarios o comitentes de esa
obra -siempre que tengan una relacion directa e inmediata con
el cometido pAblico delegado- tendrhn la naturalew del contra- s2 Para Marienhoff, Trotado.. ., t. III-B, p. 588, cuando el concesio-
nario es una persona privada ". . .sus actos no son 'administrativos', sino de
to dc obra piiblica y se regirin anal6gicamcnte, ya que la icy no
derecho ~rivado,regidos pot el derecho c o r n s . "S610 10s agentes pitblicoJ
-funcionarios o empleados- emiten actos administrativos". Consecuente-
mente califica (p. 591) a 10s contratos celehrados entre el concesionario y
30 hlarienhoff, M. S., Tratodo.. ., t. 11, Cap. IX, ps. 188/200; aessi.
10s terceros coma de derecho privado. AI analizar el "elemento snbjetivo"
R . , Itzstituciones de Derecho Admidstratiw, Bosch Fdit., Barcelona, 1970, del contrato de obra pitblica (p. 512) afirma: "En el 'contrato de obra p6-
t. I, zp. 111, 158/178. blica', propiamente dicho, una de las partes debe ser, indefectiblemente, el
31 Barra, R. C., Prirrcipios.. ., Cap. VII, a1 que remito. Estado u otra persona juridica pitblica 'estdol.. . .".
ELEMENTOS DEL CONTRATO DE OBRA PÚBLICA 119
CONTRATO DE OBRA PÚBLICA
118
Lo mismo ocurre con los numerosos casos en que la Adminis-
c) las obras ejecutadas se pagan con fondos públicos, ya sea
tración, a través de distintos mecanismos jurídicos, hace partici-
por considerarse así a los aportes compulsivos que deben efectuar
par en el contrato, en la calidad de comitente, a personas privadas
sus miembros (afiliados o no) O por la tarifa abonada por los
tan~bién representativas de sectores comunitarios con interés en
usuarios, o por el valor de rescate que abonará el concedente, de
la realización de la obra en cuestión.
acuerdo con los términos del contrato, o como indemnización, al
Aun cuando en algunas ocasiones la Administración na se
extinguirse la concesión, o bien como subvención durante el des-
presente formalmente como el verdadero comitente de la obra, el
arrollo de la misma, como medio para solventar las obras;
d) estas obras pertenecen (ya veremos bajo qué título jurí-
dico) al patrimonio de la Administración delegante. Aun cuando resu e!!a) por la Corte Suprema de Justicia en sentencia del 22-5-79 (t. CLXXVI,
p. l 5 6, que se transcriben a continuación:
se considere que las obras son propiedad nel delegado basta el
momento de producirse el rescate y consecuente reversión de los Sentencia del Juzgado Federal Contenciosoadministrativo de
Primera Instancia n 9 1
bienes; no cabe duda de que en todos los casos dichas obras ne-
cesariamente pertenecerán al delegante en ese momento, dentro de Buenos Aires, julio 7 de 1977.
y VISTA!
las condiciones fijadas en el acto o contrato que otorgue la de-
Para resolver esta causa "Pe tersen, Thiele S. A. c!Inst. de Servicios
legación. Sociales para el Personal Ferroviario si ordinario", expte. 3900/77 y
Desde esta perspectiva no puede dudarse de que nO existe una CONSIDERANIX> :

verdadera diferencia de naturaleza entre el contrato de obra ce~ 1 9 ) Demanda la actora con ]a acciÓn entablada se condene al institu-
to de Servicios Sociales para el Personal Ferroviario al pago de la suma de
lebrada por el ente privado delegado y el contrato de obra cele-
$ 965.789,63, la devolución de las pólizas y cartas fianzas indicadas en los
brado por la Administración Pública, sin perjuicio de los matices p~tos a) a h) de fs. 267 vta., la indemnización de daños y perjuicios su-
y también diferencias sustanciales, que en algunos aspectos im~ fndos por su mand:mte y el importe correspondiente a depreciación mone-
pondrá la distinción subjetiva entre ambos comitentes. taria, con imposición de costas. Funda la competencia del Tribunal en el
En ambos casos se presentan idénticas razones que justifican apartado IX de su escrito de inicio (fs. 296/297 vta.).
Corrido traslado de la acción promovida (fs. 299 vta.) y notificada
el sometimiento del contrato al régimen exorbitante en tanto que que fue (fs. 302), se presenta a fs. 305 la demanda interponiendo recursos
modo jurídico de selección del conrratista, contratación, ejecución {l~ revocatoria y apelaCiÓn, en subsidio, contra el auto que admitió el in-
de los trabajos, recepción y pago de la obra, prerrogativas del co- cldente de consignación de obra. Amén de ello y en uso de las facultades
mitente, responsabilidades, etc.; es decir modo jurídico de reali- que -~ice- l~ acnerda el arto 347, inciso 19 del Código Procesal opone la
eXCepción de mcompetencia de jurisdicción por las razones que seguidamente
zar una obra pública, cuyo desarrollo es materia de este libro. expone.
Por supuesto que en el caso de los entes de '~cogest~n admi- Analiza, en ese sentido, la naturaleza jurídica de la entidad de su re-
nistrativa" (ver remisión en nota 31) la aplicación de la legisla- presentada sosteniendo que .<:e trata de una persona de derecho públiCO con
ción de obras públicas es directa, ya que aquéllos no son otra capacidad _para actuar pública y privadamente (ley 18.290 y mensaje que
la acampanó). Aduce que como consecueneia no forma parte de los cua-
cosa que entes descentralizados de la Administración pública que dros de la Administración Pública, ni como organismo centralizado o des-
admiten la participación en sus órganos de dirección de entidades centralizado, careciendo sus decisiones del carácter de actos administrati-
privadas representativas de distintos sectores de la comunidad. vos. Cita al respecto un dictamen de la Procuración General del Tesoro
Así lo ha decidido la jurisprudencia, precisamente partiendo del y a Marienhoff (t. 1, ps. 352 y ss.).
..Mirma después que el Instituto cuenta para el desenvolvimiento de su
análisis de la estructura, composición orgánico-subjetiva, situa-
aCh:ldad con fondos propios que no se hallan incluidos en el presupuesto
ción patrimonial y finalidad del ente en cuestión 33. n~cl~nal; que, P?r ~Ilo, no, le son aplicables las normas de la ley de obras
~u~llCas, cuyo amblto esta determinado en el arto 19 (ley 13.064). Por
u~tImo? .que la argumentaciÓn de su contraria adolece de un error, pues las
33 Es interesante examinar los distintos pronunciamientos recaídos en dlsPosl.clOnes . de la ley mentada no remItan aplicables de su propio ámbito
la cuestión de competencia suscitada en la causa "Petersen, Thiele S. A. de vahdez, SIlla de su incorporación por vía contractual en lo que es com-
c/Instituto de Servicios Sociales para el Personal Ferroviario", en definitiva
ejemplo del tipo de caso planteado y de la metodologia que aqui
anblisis de la real situaci6n contractual ~ e r m i t i r iapreciar el pa-
se propone para su anhlisis.
pel determinante de aqu6lla en la formaci6n y vida del contrato.
Algunos de estos planes se estructuraron mediante un com-
En estos casos no cab& sino calificar a tal contrato como d e obra
plejo contractual que debe ser interpretado teniendo en cuenta
pliblica y sujetarlo a la legislaci6n respectiva.
el objeto principal de toda la negociacibn y la comin intenci6n
Asi ha ocurrido con algunos planes de vivienda social llevados
de las paites.
adelante por el Banco Hipotecario Nacional, como es el caso del
Previamente corresponde recordar que dicho complejo con-
entonces llamado "Plan 17 de Octubre", que puede tomarse como

no estatales, lo que no implica de ninghn modo caer en la teoria d e la doble


~ a t i b l econ la naturaleza d e la demandada. Pide asi se haga logar a la personalidad del Estado, ya definitivamente desechada en la doctrina moder-
excepci6n articulada, con costas. na: "el Estado es siempre persona phblica, ente d e derecho phblico, con fi-
Corrido traslado a la actora d e la excepcihn referida (fs. 316 vta.) Y nes phblicos, aun cuando penetre en la esfera d e las relaciones en que se
con su contestacihn en tiempo propio (fs. 319/331), w e d a n 10s autos en mueven 10s entes o las personas privadas" (vCase SayaguCs Laso, ap. cit. p.
:&do d e resolver el punto (fs. 332). 161, nota; Villegas Basavilbaso, ps. 161/3; a e z , Manuel M., Derecho Adminis-
2Q) A modo de ordenamiento ck las cuestiones propuestas a decisibn trativo, t. I, p. 69; Marienhoff, Tratado, p. 362; Gordillo, Agustin A,,
del Tribunal, corresponde poner de resalta que la primera d e ellas consiste Derecho Adtninistratiuo, t. I, XI-9; ncta; Canasi, Jog, Derecho Administm-
en la excepci6n de incornpetencia articulada par la accionada; reciCn enton- tivo, t. I, Bs. As., 1972, p. 20; Dromi, lnstituciones de Derecho Adminirtro-
ces -y en su cas- procedere el anilisis del incidente de comignacihn d e tico, p. 57 y ss., entre otros).
obra planteado a fs. 294 (apartado VII del incisa) y expresamente resistido Sentado ello, la idea de la personalidad 6ninica del Estado es aplicable,
por la demandada. Cabe, por fitima, destacar que a fs. 333/336 obra la entonces, a todas sus entidades descentralizadas: Bstas por el solo hecha de
respectiva contestacibn d e la demanda. formar parte del Estado adquieren un indudable carbcter phblico, en tanto
Como bien se apuntara en autos, el Imtituto en cuesti6n, creado por ley todo lo que hace a su creacihn y supresihn, cornpetencia, fomaci6n dde vo-
18.290 ("Case Adla XXIX-B, p. 1463), como continuador de la Direccihn luntad, etc., estar.4 siempre regido por el derecho plihlico. Ad se ha pro-
General de Asistencia y Previsihn Social para Ferroviarios (art. lo, ley cit.), nunciado, por lo dembs, la Procuraci6n del Tesaro (vCase Dictimenes, t. XC,
tiene el caricter de "persona juridica de derecho phblico, con capacidad p. 169; t. LXXXIV, p. 1 3 3 ) : "no debe interpretarse.. . que a1 actuar en la es-
para actuar phblica y privadamente" (conf. art. 29). Y en efecto, en el fera del derecho privado las entidades autirquicas pierdan, par ello, su persona-
mensaje que acornpa56 su Qanci6n se habla d e "persona d e derecho ptblico lidad juridica de derecho phblico, que k s la linica sin desdoblamiento que
no estatal, pues si bien las ~restaciones que se deben hrindar se relac~onan poseen y que no les impide en absoluto adquirir derechos y conaaer obli-
por su naturaleza con el curnplimiento de un servicio a la comunidad, no gaciones que estarin regidos, seghn carresponda, por el derecho phhlico o
corresponden exclusivamente a funciones propias d e 10s organismos del Es- por el privado".
tado" (vCase Adla, op. cit. p. 1464).
Pero debe tenerse especialmente en cuenta que, en canjunta, se observa
Esta introduccihn impone el anilisis de 10s entes estatales y 10s entes en este tipo d e entidades una neta prevalencia dp' derecho phblico sobre el
phhlicos. Ninguna duda se abriga de sue, en todo caso, estamos en pre-
privado; asi: "mientras que un ente estatal sigue siendo phblico a pesar d e
sencia de una verdadera entidad descentralizada, como organism0 separado estar parcialmente regido por el derecho privado, un ente no statal, que en
de la administracihn central, dotado d e ~ersonalidad juridica propia, con ca- principio pudiera ser considerado privado, debe ser considerado un ente ph-
pacidad para estar en juicio y constituido por 6rganos propios que ,&xpresan blico, cuando esti regido por el derecho phblico en una medida importante"
la voluntad del ente. Pero yendo aim mis alli de esta primera noclon, cabe
(vCase Gordillo, op. cit. XI-14), d e donde se ha determinado la prevalencia
- 10s dos conceptos enunciados, pese a que corrientemente se 10s uti-
distinmir del hltimo en casos de -~rnnflirtn
liza como sin6nimos. ~

Hechas estas aclaraciones, puede colegirse que nos hallamos en pre-


En efecto, si hien en la doctrina traditional se identificaban ambos (ph- sencia de una entidad d e carbcter p6blico (conf. art. 20, ley n9 18.290) no
- blico y estatal) no lo son ahoia desde que existen entidades no estatales re-
estatal (como lo explica el mensaje citado), pero con caracteristicas particu-
guladas, sin duda alguna, por el derecho phblico.. .& "personas colectivas
que indudablemente no son estatales, que no pertenecen a la administracihn lars. En efecto, este tip0 de organismos -se 10s ha dado en l l a m r "aso-
ciaciones dirigidas"- se encuentran destinados a prestar deteminados ser-
phhlica, sea porque el legislador las cre6 con este caricter, sea porque su
propia naturaleza resulta incompatible con la calidad estatal. No obstante vicios sociales o asistenciales dentro del gremio del personal de un servicio es-
tatal, con una participacia'n eststal en el control y direcci6n del ente (art.
dichas instituciones en todo o en parte se regulan por n o r m s de derecho
49, ley cit.). Puede agregarse a ello que si bien no estatal, su capital es en
phblico. . ." .(con; SayaguCs Laso, Enrique, Trotado de &echo adminis-
trati-~o, ps. 174/175). De alli que personas o entes phhlicos puedan ser parte de 10s afiliados o asociados; en el caso del art. 14 -per0 si pliblicas,
a ) Objeto principal del contrato. - Evidentemente el objeto
tractual se encontraba intcgrado por un contrato d e locacibn d e p~incipaldel contrato consiste en la construcci6n de viviendas (es-
obra celebrado entre dos entidades privadas y un contrato d e mu- to liltimo se inscribe dentro de las finalidades pliblicas que son
tuo celebrad~por el Banco Hipotecario Nacional con la locataria
de cometido legal del Banco Hipotecario Nacional). Las demAs
de obra (Ilamada "entidad intermedia") y de la cual es fiador condiciones contractuales, incluso las del contrato de mutuo, son
solidario el locador d e obra. Sobre ambos, y por expresas d i s p - simplemente instrumentales para aquella finalidad.
siciones contenidas en distintas normas contractuales, rigen 10s
pliegos licitatorios emanados unilateralmente del Banco Hipoteca-
rio Nacional. Asi, puede bacerse el siguiente analisis: "El Institute estari sometido exclusivamente a la competencia de la justicia
nacional, pudiendo optar por la justicia ordinaria de las provincias en caso
un de derecho phblico-- tampoco pueden ser asimiladas a l?s de ser actor en iuicio. . .".
sociedades de economia mixta, pues pese a que existe una copaflicipaci6n Distinto es, en cambio, determinar -aclarado que es la federal la com-
-tatal, ello lo es a los fines de un adecuado control para asegurar la continui- petente- si lesulta la justicia civil y comercial o la contenciosoadminist~ativa
.dad y permanencia de la institucibn. la que debe entender en el problema. En este sentido, el plenario citado
39) ~ ~ t ~ b lal atinente
~ ~ i d a ~la naturaleza juridica d e la instit~1ci6n par la actora, si bien no acertado para definir la competencia d e la justicia
accionada, corresponde volver sobre el problema inicial, esto es si el Tribu- contenciosoadministrativa de la ordinaria, es correct0 en tanto se le aplique
nal es com~etente para conocer de la controversia: problems w e , precisa-
~~~ ~
para dilucidar cuestiones suscitadas entre las dos ramas del m i s m fuero.
mente, motiva la presente resoluci6n. Aun a Bste poede agregarse: "Corresponde definir el tema d e la competencia
para ello conviene dejar previamente sentado que conforme a1 sistema federal civil Y comercial o contenciasoadministrativa, con arreglo a la natu-
de gobierno adoptado n ~ e s t r aConstituci6n Nacional se impone la coexis- raleza de la norrna objetiva que debe aplicarse d e manera preponderante para
tencia de,,tl-o del ~ ~ de dos
t 6rdenes~ d judiciales
~ distintos: el federal -We la decisibn del caso concretu" (CNFederal, en pleno 9/5/74, in re "Tipote
ejerce una cornpetencia limitada a 10s supuestos enunciados en 10s arts. 100 -
c/Naci6n Arrrentina")
101 de ordenamientu fundamental- y el provincial en cambia. En concreta, significa que dehe decidirse si estamos frente a un verda-
ejerce la denominada competencia comhn y comprende el conocimiento de dero contrato de obras phblicas - e n cuyo caso el Tribunal es competente-
tados las asuntos respecto de 10s cuales no existe daegacibn, express (art. o ante un contfato de locaci6n de obra civil -del que debe conocer la jus-
Ind r N..I.
A, , De lo dicho se infiere que la competencia de la l u s t ~ c ~federal a ticia federal civil y comercial-. Sin embargo, no dehe olvidarse que "el con-
t.s de "ercepcibn" y limitada a esos supuestos. bat0 d e obra pdblica constituye, en suma, un contrato d e locaci6n de obra
H~ de tenerse, asimismo, presente que la justicia federal de la Capital .del C6digo Civil, con las modalidades propias que le imprimen 10s principios
lkderal competente en raz6n de la persona o d e la materia (conf. y noimas del derecho administrativo que la gobiema". CNFederal, sala Cont.
~ ~ l cddjgo b ~t. I ,, p. 47 y ss.; Palacio, Dmecho Procesd Cioil,
~ ~procesal, Adm. n" 1, 23/11/71, "O.S.N. c/Storer y Cia. SRL", en cuanto que: "El con-
t. 11 p. 514 s.); ~ i ~ i & n d el~ sprimer0
e contemplado par las disposiciones trato de obra ptiblica es sustancialmente una locaci6n de obra. Con acierto
contenidas en 10s arts. 29, inc. 6 7 ley 48; art. 111, incs. 30 y d e la ley 1893 se dijo que el contrato d e obra pdblica es el correlative d e la locaci6n de
41, in=. a ) de la ley 13.998; aunque esta hltima refirikndose en especial a obra del derecho civil" (vhase Marienhoff, op. cit., t. 111, p, 548).
la cornpetencia de la judicia federal en lo civil y comercial. Y es as1 que En lo q m aqui importa, la distinci6n fincar& sustancialmente en las
resulta competente en las causas que versen sobre negocios particular- de notas Y modalidades propias del derecho adrninistrativo -ya se dijo-- o en
c6nsules o vicechnsules extranjeros y en todas aquellas en que la Nacihn 0 las tan mentadas cl&usulas exorbitantes del derecbo comdn. En esa inteligen-
un recaudador de sus rentas sea parte. cia, de la mera lectura de la primera phgina del pliego de bases y condicio-
E~ tbrminos, el caricter mismo de persona de derecho phblico del nes que integraba la contrataci6n de marras se observan: ". . . Cuando se
que esti investid= la entidad demandada -y de la que no es dahle ,dudar-, d u d e indeterminadamente a 'la Ley: debe entenderse que es la ley nacional
hace que la materia aqui controvertida sea de competencia federal, alena, POI de obras phblicas 13.084.' y despuk ". . .los casos no previstos en este
tanto a la comhn u ordinaria. Asi se ha pronunciado la Excma. Corte Su- diego se resolverdn par aplicacihn d e la ley nacional d e obras ptiblicas
prema de Justicia en numerosos pronunciamientos: "de conformidad con 10 13.604. En caso d e silencio de la misma se aplicarin 10s principios ge-
establecido en 10s arts. 100 d e l a Constitucihn Nacional y 29, inc. BV, d e la ley nerales del derecho administrativo. . .". Ello shlo y sin perjuicio de las res-
48, corresponde a la justicia federal y no a la ~rovincialconocer de todo juicio €ante pautas que apunta acertadamente la actora a fs. 296/97 vta., imponen
promovido contra una entidad nacional.. . (vkase Fallos 70:384) coma que claramente la competencia de este Tribunal Contencioso Adminishativo.
a la presencia de un inter& nacional corresponde, en t & m ~ n o sgenerales, Por lo demis, conocida pero no menos conveniente parece apuntar la
la competencia d e la justicia nacional" (Fallos 276:222:273:6, entre otros). tradicional doctrina de la Corte Suprema, en donde lo que se cuestiona m,
Es, por otro lado, lo que consagra el art. 26 de la ley de creaci6n del ente: en el cam, la competencia del juzgador para conocer del problema; ha
....-,-_.
.,.-,.--~_ ~.""'~~-

ELEMENTOS DEL CONntATO DE OBRA PÚBLICA 125


CO~"'I'RATO DE OBRA FÚBLlCA
124
Sin ambargo, resulta indiscutible que, en 10 que hace a esta
'
'ntenci6n de !as partes, - Sin duda que .la . in- relación jurídica concreta, las tres partes han tenido en mira un
b) e omun' l I d 1 obJ' eto pnnClpal
tención de las partes debe valorarse a a uz e , . hecho dctenninante tal cual es la construcción de viviendas,
del complejo contractuaL ha tenido una intenciÓn Desde este punto de vista, los tres contratantes han asumido
Cada una de las tres partes en juego determina en su in- distintas posiciones según cuál fuera el grado de intervención que
articularizada que en las constructoras se ", han querido tomar en la relación jurídica, Mientras que la cons-
p , " , la entidad intermedia por el serVICIO a sus 50- tructora y la entidad intennedia han buscado responsabilizarse por
teres empresano, "al la finalidad de uti-
, para el Banco Hipotecarlo NaclOn en
CIOS y . .' "
lidad comunitaria que Justifwa su e:x1stencla.
todas sus entidades descentralizadas¡ por el solo hecho de formar parte de
él, adquieren un carácter públíco en todo lo que hace a su creación, supre-
l' competente cabe atenerse a la sión. competencia, formación de voluntad, eto.- toda vez que la demandada
d 1"cho asi: .... , para decidir
f d
cuál es: e luez ., bl 'd
t d la aCClOD enta a a",
"( doctrina de no es estatal por no formar parte del Estado,
ley que se invoca como un amen o e
Fallos 277; 420; 2.79:95; 28i:97~ e~trt otr~S;t~ d:
P r todo lo expuesto y uni-
obra pública -tal que las
do al art. 55 de la ley regu ato~l'd e dC~ resolverse la cuestiÓn traída por
Arguye que su mandante es una entidad de derecho público no estatal
·que podría ser encuadrada dentro del concepto de "asociaciones dirigidas»,
Acepta que si bien estos entes públiCOS podrían ser privados, se los considera
partes han sup]etoria~ente ~eml.tl o- ~~ite y con costas, públicos por estar regidos en medida importante por este derecho, pero se
la demandada, desestímá.ndose SIn más ortunidud habida cuenta lo apresura a serlalar que la sola determinación de su naturaleza jurídica no de-
f'inalmente. cabe tener pre~ente partidr~ su op 1 act~ respectO del inci- temlina el derecho aplicable, toda vez- que en sus reJacionc\s con terceros
re.<;uelto a fs. v"18• )as mam'festriClOUes
T' ve as 'mísmo
por a pOI contestada In d e-
pueden actuar ajustándose al derecho privado o al derecho púhlico.
dente de consignación de obra. engase, aS! •
Expresa que la dilucidación del derecho aplicable debe efectuarse en
manda en tiempo y forma. atención a la relaeión jurídica existente entre las parteS'. Al respecto sefiala
A mérito de lo expuesto~ quc la aplicación de la ley 13,064 deviene' por la voluntad de las partes que
RESUELVO; , articulada por el Instituto ~sí lo estipulan, pero que ello no implica que sean aplicahles todas sus djs~
1'?) Rechazar la excepción de incompetencIa Juan Octavio Gauna, juez. posiciones, ya que algunas -entre las que cita el arto 47- son incompatibles
de SerVicios Sociales patá el Personal Ferroviario. con la propia naturaleza del Instituto que siempre ha considerado que ca-
federaL rece de hs atribuciones propias de las entidades estatales,
Dictamen. d .,h! ,nroc"raam
.... Fi.scal de Cá1nara
n-Que la competencia federal en razón de las personas se rige por
EXCMA, C!..MARA: que informan la decisión apelada, qne encuentran. jas disposiciones contenidas en Jos arts, 41, jnc. a) de la ley 13,998, y 111,
COlnparto las Tazones ley 13,064 y en la doctrina d. Fallos: 286,45, y incisos 39 y 59 de la ley 1893, atribuyéndosela expresamente la última nor~
apoyo en el art. 55 de la m~ citada en "tOO3S aquellas causas en que la Nación o un recaudador de
otros, . d 1 elante no imponen. a mi juicio. sus rentas sea parte»,
Por ello, y porque los agr¡aV}.os e aI? que corresponde confirmar la As:í la.s cosas, y pese a ser conteste en ello tanto el señor juez de prime-
la revisión de lo resuelto por e a qtW, OpinO ra instancia como el apoderado del recurrente, conviene dejar sentado que el
sentencia de fs. 341/348, Fiscaüa~ 12 de octubre de .197'1. Instituto de Servidos Sociales para el Personal Ferroviario es una. persona de
·derecho púbJíco no estatal (att. 2,9 de la ley 18,290 y, especialmente en forma
, J , la Sala 1 de la Cámara Federal de expresa., exposición de motivos acompañando el proyecto de ley) que man~
SentenCffl
Ut; ' d ' '.J _.t' ' tiene sus relaciones con el Poder Ejecutivo Nacional por intermedio de la
Apelaciones en l.o Ccntem:ioson mtn111<rrn.'Vo
Secretaría de Estado de Promoción y Asistencia de la Comunidad (3rt. l Q
Buenos Aires, 13 de diciembre de 1917.
del decreto 3985/89),
y VISTOS: CONSIDERANDO: • e a conocimiento del TribUIlal En estas condicioncs¡ poco importa entrar a considerar características
I - Que las presentes actuaciones ~len; d 1 1 stituto de Servicios So~ que resultím comunes a los entes piibl:icos~ sean eUas estatales o no (!.-'reaciÓp
en virtud del recurso deducido por el ap lera o 1e ., n del señor ¡'uez a qw
"F .ario contra a reso uClOn por ley, fin de utilidad general, existencia de potestades o prerrogativas
ciales para el Personru errovJ . uesta fundamentando su de- públicas, grado de control estatal}, centrándose el meollo de la cuesti6n en
l '
que rCCIlazara a e.xcep ción de incompetencla
d d h o pque
úblico . inviste )a enti'd ad d e~
cisión en el carácter de persona e eree o
mandada y en que el vehicuJo que une a as par es
t t es un contrato de obra
la Ímposibil¡dad de extender analógicamente la competencia federal en ra-
zón de la persona (de por sí restrictiva y excusable) cuando una de las
partes no es la N ación (cualquiera fuere la forma jurídica que ostente en el
pública (fs. 3411846), moria) de fs, 35{)/353 que el juez parte caso concreto). sino una persona de derecho público no estatal¡ que por
Sostiene la recurrente en ¡SUd ~e lidad única del Estado y de que
de un principio equivocado -e e a persona
forma similar a la intervenci6n del comitente estatal en 10s con-
la construcci6n de las obras, cada una en su posicidn juridica, el tratos de obra plibIica.
Banco Hipotecario Nacional s61o ~retendi6financiarlas. NO obs- Reitero que si el objeto principal del contrato es la cons-
tante ello, como se ver& mAs adelante, se expresa la intenci6n del trucci6n de viviendas en deteminadas condiciones, la intenci6n
Banco Hipotecario Nacional de garantizar la finalidad comunita- principal de las partes, en lo que interesa a la existencia de este
ria de las obras y el buen uso d e 10s fondos que d~spusopara tal negocio juridic0 complejo, se sintetiza en la construccidn de esas.
financiacibn, todo ello mediante su intervenci6n en la vida del con- mismas viviendas.
trato de locaci6n de obra (no ya en el contrato de mutuo) en

I--Que en la demanda entablada por la firma "Petersen, Thiele y


tanto no a los cuadros de la Administraciirn Pliblica conforme a
Cruz S. A " contra el Instituto d e Servicios Saciales para el Personal Ferro-
las normas vigentes sobre organizacibn administrativa (Conf. Dicthmenes viario se origina en el llamado a licitacih dispuesta por la demandadat
de la Procuraci6n del Tesoro de la N a c i h , Afio 11, vol. 5, ps. 30 y siguientes). -contrataci6n directa n9 11/72- para la ejecucidn d e la obra Ampliaci6n
Siguiendo este hilo, este Tribunal entiende que, por via de principio, Consultorios Externos y Guardia del Policlinico Ferroviaiio Central de esta
no dendose en el caso un inter& nacional que lo justifique, ni pudi6n- Capital Federal. Seglin el contrato suscripto enke ambas partes (is. 16/19)
comprometer tampaco en atenci6n al arigen del pa-imonio del lnstrtuto la obra debia realizarse d e acuerdo con la documentaci6n que simi6 de base
demandado (art. 14, ley 18.290) la res~onsabilidad patrimonial del d st ado, a la mencionada contrstacibn directa y que se integraba con el Pliego Tipo
no corresponde a la justicia federal la dilucidaci6n del presente pleito. NO
d e Bases y Condiciones para la contrataci6n d e Obras (art. 29, inc. b del
empece a tal conclusf6n la ci~runstanda qme el art. 26 de la ley 18.290 citado contrato) el que figura agregado a fs. 23/65 baio el rubro de: "Mi-
exprese que el Instituto estar& sometido exclusivamente a la Justicia Nacianal, nisterio d e Bienestar Social - Secretaria d e Estada d e Promoci6n y Asis-
toda vez que ello de por si tampoco decide la jurisdiccihn de este fuero, tencia de la Comunidad - Instituto d e Servicios Sociales para el Personal,
ya que en la Capital Federal todos 10s tribunales revisten ese carkcter, salvo Ferroviario (ley 18.290)" previ6ndose en dicho &go que las referencias a.
10s de faltas municipals. la ley alli contenidas se deben entender referidas a la ley nacional de obras
I I I - @ ~ lo expuesto en el considerando anterior resulta aplicable pliblicas 13.064 (art. 2%) Y estipulindose tambiCn qque "10s casas no pre-
tambiCn para descartar que el contrato d e locaci6n d e obra celebrado entre vistas en este Pliego se resolverin por la aplicaci6n d e la ley nacional de
las partes -ampliaci6n de 10s consultorios externos y guardia del Policlinico obras pdblicas 13.064. En caso de silencio d e la misma se aplicarhn 10s
Ferroviario Central- pueda ser calificado coma de obra pliblica tada vez principios generales del derecho administrativo" (art. 39).
que -maguer que por voluntad contractual las relacioner de las pades se Que el Instituto demandado tiene carhcter d e persona juridica de de-
rijan par las disposicianes de la ley 13.064-- lo que caracteriza a la obra recho pliblica, con capacidad para actuar piiblica y privadamente, habihdose
piiblica es que sea contrntada por el Estado -directameote o por delegac creado par ley 18.290 como continuador de la Direcci6n General de Asis-
ci6n- y pagada con 10s fondas de Cste. Los que carecen del l i l t i m d e estos
tencia y Previsi6n Social para Ferroviarios. Su objeta plincipal es la pres-
caracteres, ejecuci6n con fondos del Tesoro de la Nacibn, son obras de uti- tacidn de servicias m6dica-asistencialer y otrm de benefido social a1 per-
lidad pliblica, no propiamente obras piiblicas. En este sentido la Procura-
sonal en actividad y en pasividad de la actividad ferroviaria y afines, coor-
ci6n Nacional del Tesoro ha dictaminado que "las obras contratadas por un dinando la ejecuci6n de rms objetivos can 10s planes que en materia de salud
ente no estatal no son contrntos de abra ~ h b l i c a , par aplicaci6n anal6gica
apruebe el Pcder Elecutivo" (art. 1 3 ) . En la nota a1 P d e r Ejecutivo acom-
del principio legal que excluye a las obras realizadas por subsidias .Y par no paiiando el prayecto de ley 18.290 se consign6 que dentra del campo asis-
tratal-se en tales cams del empleo d r fondos del Tesoro nacional" (t. 90, p. 55, tencial "constituye uno de 10s objetivos d e la Revolucibn Argentina arbitrar
citado por h4o: RQgimen kgul d e las obrns phblicus, ed. Depalma, 1976, 10s medias para ordenar y sirtematizar en forma coberente lo referido a las
p. 6 1 ) . Obras Sociales y a las prestaciones a cargo de ellas. A tal fin compete a1
Por tanto, s merit0 de lo expuesto, corresponde revocar la sentencia Estado propiciar la a e a c i h de nuevas entidades en 10s distintas campos
apelada y, en consecuencia, declarar la incampetencia del fuero federal pa- sociales, asi como tambiBn adecuar a un todo arghnico las ya existmtes"..
ra entender en el presente pleito, el que deberi ser dilucidado por 10s tn- TambiCn se destac6 que para el cumplimienta de 10s objetivos mencionados
bunales ordinarios en lo civil de la Capital Federal. Las costas por su orden
la ley proyectada prev6 que el Instituto de Selvicios Sociales para el Per-.
en ambas instancias, en atenci6n a que en las ~articularidades del caso la sonal Ferroviario actuari con el cadcter d e persona d e derecho pliblico no.
actora pudo creer que le asistia derecbo a litigar en este fuero. estatal.
AS^ SE ~ESVELVE El articulo 49 d e la ley en examen estahlece que el gobierno deI Ins-
Registrese, notifiquese y devuBlvase a primera instancia, a sus efectos. tituto esti a cargo de un Consejo d e Administracidn integrado por un pre-
Valerio R. Pica - Alberta E. Azcona (en dkidencia). sidente, un vicepresidente y siete vocales, todos ellos en representaci6n del:
Disidencia del Dr. Azcona:
c ) Partes inooluwadas. - Como ya fue dicho, las partes in- Nacional s610 tiene la intervenciirn consentida por las partes. Se
volucradas son tres, cada una de ellas con una posici6n juridica trata siempre de la intervenci6n de un tercero que, a1 menos for-
distinta en el negocio juridic0 complejo. malmente, no concurrib a integrar el acuerdo d e voluntades.
Hay un rolo contrato de locacibn de obra suscrito, y en k l En el contrato de mutuo, en carnbio, hay tres partes: mu-
s61o se encuentran presentes dos partes: la locadora, que es la tuante, rnutuario y garante.
empresa constructora, y la locataria, que es la entidad intermedia.
En este contrato de locaci6n de obra el Banco Hipotecario d ) Calificacwn, de la relmidn contractd. -
No cabe duda de
que la relaci6n contractual debe ser analizada a partir d e la in-

Estado, y ocho vocales en representaci6n dde las asociaciones sindicales con


personeria gremial, 10s que serin designados por el Poder Ejecutivo en la Federal. EUo asi porque de las circunstancias mencionadas resulta que se
'forma que determine la reglamentacih. E6 decir, que la totalidad de 10s esti en presencia d e una obra en que se encuentra comprometido el inter&
miembros deI Cansejo es designadz por el Poder Eiecutivo y que actha en nacional (Corte Suprema, Fallos 273-16), correspondiendo entender a la
representaci6n del Estado una mayoria dentra del citado Conseio. Justicia Nacional en lo Contenciosoadministrativo Federal, en atenci6n a que
El articulo 13 de la ley exime de todo im~uestoo contnbuci6n nacio- las nonnas de aplicaci6n preponderante para resolver el litigio serin, confor-
nal provincial y/o municipal a los inmuebles d e la entidad, sus operaciones me a lo ya expresado de caricter administrativo y en especial las d e la ley
propias y 10s actos de sus representantes y a~oderados. Como recursos el d e Obras Priblicas 13.064.
art. 14 prevk 10s aportes mensuales del personal comprendido y contribucio- A cste respecto resulta claro que la norma del art. 26 d e l a ley 18.290,
nes mensuales de 10s empleadores, entre otros ingresos; estando fiiados par en cuanto prevC que el Instituto estad sometida exclusivamente a la com-
la ley 10s aportes y cantribuciones mencianados, siendo el Poder Ejecutivo petencia de la Justicin Nacional, no se refiere exclusivamente a la Justicia
.quien podrb autorizar la modificaci6n de dicbas cotizaciones. local de la Capital Federal desde que admite que en las provincias el Ins-
Para el caso d e disoluci6n del Instituto d e Servicios Sociales para el tituto p o d 6 optar par la iusticia ordinaria en caso d e ser actor en el juicio.
Personal Ferroviario, dispone el art. 22 de la ley 18.290 que el destino de Por ello, corresponde confirmar la sentencia d e fs. 3411346, declarin-
10s hienes que posea a esa fecha seri establecido por el Poder Ejecutivo, con dose en consecuencia la competencia del fuero federal para entender en el
ercepci6n de 10s aportados por las entidader gremiales Uni6n Ferroviaria Y iuicio, el que deberi ser sustanciado y resuelto por el Sr. Juez Nacional en
La Fratemidad, 10s que serin reintegrados a esas organizaciones. la Cnntenciosoadministrativo. Costas por su orden conforme con 10s fun-
El decreto nV985/69, reglamentario d e la ley 18.290, dispuso que el damentos de la mayoria.
Instituto mantendri sus relaciones con el Poder gecutivo Nacional por in- AS^ SE RESUELVE
termedio de la Secretaria d e Estado de Promoci6n y histencia d e la CO- Registrese, notifiquese y devuelvase a primera instancia a ms efectos.
munidad y se facult6 a1 Ministerio d e Bienestar Social para designar a1 pre-
Sentencia del Jt~zgndo Nncional de Primera Imtntlcia Cioil no 7
sidente y ~ i c e ~ r e s i d e n tdei
e Cnnseio, como asimismo que designarian dos
vacales cada una de las Secretarias d e Estado de Promoci6n y Asistencia de Buenos Aies, 10 d e agosto d e 1978.
AlPrOS Y VISTOS Y CONSDDEXANrn:
la Comunidad y de Transporte y uno cada una d e las Secretarias d e Estado
I - Por recibidos.
d e Seguridad Social y de Salud Phblica, y la Empresa Ferrocamles Argen-
11- En autos la empresa "Petersen, Thiele y Cruz, Sociedad Anirnima
tinos. Aqui es dable s e s l a r que el art. 16 d e la ley 17.271 menciona d e Construcciones y Mandatos" demanda a1 "Instituto d e Servicias Sociales
entre 10s asuntas d e competencia d e la Secretaria d e Estado aludida, "eie-
para el Personal Ferroviario" por cumplimiento d e las obligaciones derivadas
cutar la politics del Estada en materia d e asistencia social contemplando
del contrato de const1ucci6n celebrado enke ias partes, consistente en la
las situaciones individuales y colectivas (inc. 16)".
obra de "Ampliaci6n Consultorios Externos y Guardia del Policlinico Fe-
11-Que asi planteada la cuesti6n, y Q bien es ciedo que el Instituto
rroviario Central". Le fue adjudicada pot el "Instituto" (como en adelante
demandado tiene capacidad para achlar ~ h b l i c a y privadamente, toda vez
se designari a la entidad accionada) a la actora, mediante la Contrataci6n
que "las prestaciones que se deben brindar se relacionan por su naturaleza Directa nu 11/72, y d e acuerdo con el contrato suscripto entre las partes (fs.
con el cumplimiento de un servicio a la comunidad", aunque no correspon-
16/19) forman parte del rnismo el "Pliego Tipo d e Bases y Condicjones
dan exclusivamente a funciones propias de 10s organismos del Estado (nota
para la ContrataciLn de Obras", las "Cliusulas Especiales", el "Pliego de
del Puder Ejecutivo mencionada), lo cierto es que en el caso sub ewmine
Condiciones Tecnicas", el "Pliego de Condiciones Tecnicas Particulares" y
la natwaleza de las obias en cuestihn, asi como tambikn el regimen d e la
el "RCgimen de Acopio y Variaciones de Costo" (fs. 23/65, 66/71, 72/75 y
ley nadonal de obras p6blicas a que se encuentran sometidas canducen a la
76/95 en copia, documentacidn original cn legajo separada).
conclusi6n de que tal c o r n lo entienden el Sr. Juez o quo y el Sr. Procu-
rador Fiscal de CQmara (fs. 365), el asunto es d e competencia de la Justicia La demanda fue iniciada ante el Juzgado Nacional d e Primera Instan-
130 CONTRA ro DE OBRA PÚBUCA ELEMENTOS DEL CONTBATO DE OBRA PÚBLICA 131

trinseca dependencia de los contratos de locaci6n de obra y de Esta sÍtuación complica la calificación que debe otorgársele
mutuo. a la relación contractual, ya que si el contrato principal es el de
Si tanto el objeto principal del complejo contractual como obra y en ';',te ambas partes Son privadas, toda la relación COD-
la cOmún intención de las partes ha sido la construcción de vi- tractual deberá calificarse como de derecho privado.
viendas, no puede negarse que el contrato principal es el ,de lo- Sin embargo, en la realídad de la relación de las partes todo
cación de obra, mientras que el contrato de mutuo es solo un expresa el papel preponderante del Banco Hipotecario Nacional,
instrumento para el primero, es decir, en definitiva. accesorio tanto en la decisión de la construcción de determinados inmuebles
de aquél.
14.773), asIgnándole el carácter de "persona jurídica de derecho público con
cía en lo Contendosooomínistratívo ni¡ 1 y rechazada por su titular la ex- ~apaci~ad, para actuar pública y privadamente'~ (art. 2Q• ley cit.). Ei ob-
cepción de incompetencia opuesta por la demandad~ (fs. 341/(46), la Jeto •pnnc~pal del ente es. según dicha ley, "la prestación de servicios médi-
decisión es revocada por la Sala 1 de la Cámara Nacional de Apelaciones en coaslstenc:a!es y otros ,de beneficio social, al personal en a<.;tividad y pasividad
lo Federal y Contenciosoadmjnístrativo {fs. 366/370) que declara la com- de la achvldad. ferroVlarla y afines, a su propio personal y a) que desarrolle
petencia de la justicia nacional en lo civil para conocer del asunto, por cuyo tareas en relaCIón de dependencia en entidades sindicales de fa mencionada
motivo el expediente se remite a este fuero, y pQr sorteo de la Exma. Cáma- actividad Y afines) extensivos a su grupo familiar primario. coordinando la
ra, al JuzgAdo a mi cargo) Secretaría nQ 15. _. ejecución de esos objetivos con los planes que en materia de salud aprueba
IU Como entiendo que, nO obstante el pronunciannento por mayoría el Poder Ejecutivo"" (art. 39).
dictado por la Exma. Cámara en lo Federal, la pretensión deducida es ajena ,En el decreto 3985/69) reglamentario de aquella ley, se señaln que las
a la competencia del fuero civil. dispondré la devolución de los autos a fin relaclOnes con el Poder Ejecutivo Nacional serán mantenidas por intermedio
de que el conflicto negativo -....f;.\ el Tribunal que ordenó la remisión insiste de la Secretaría de Estado de Promoción y Asistencia de la Comunidad en
en su postura- sea decidido definitivamente. . mérito a lo previsto en el artículo 16 de la ley 17.271, que entonces estabiecia
Parece conveniente puntua1[zar que el principio general en esta matena la competencia particular de la referida Secretaría de Estado.
es que todo juez es competente para decidir aCerca de su competencia y <fIa , Asimismo, en el mensaje que acompaña la elt.'Vación del proyecto con-
no puede serIe impuesta por otro de igual o superior grado, salvo que se ve~~do en ley 18.290~ se destaca que la entidad creada tendna el carácter
trate de una decisión dictada por la Cámara de quien depende (com. J. Ra~ de persona de derecho público no estatal" (distinción que no aparece en el
mi,o Podetti, Tratado de l,z compe/encia, 2' oo" ps. 364/365). Y s610 se lle- ~exto del. art. 2 9 ), reconociéndose que las prestaciones que se deben brindar
ga a la fijación preclusiva del punto que hace Y'd imposible discutir la com~ se relacWTIafl. por su naturaleza con el cumplimiento de: tm Sflrvicio a la ccr
petencia en lo sucesivo "por resolución del tribunal que debe: dirimir un 11WJ1,t'drJd~', aunque no eorresponden a funcíones propias de los organismos
conflícto positivo o negativo de competencia planteada entre distintos fueros del Estado.
o circnnscripd6n territorial" (Pndetti, íb. íd.). El régimen en cuestión establece la partiCipaci6n en la conducción del
Si bien es cierto que los conflictos de competencIa entre jueees naciOM ~te. de rep.re.s~ntantes ?e las entidades gremiales interesadas y del sector
nales de primera instancia "serán resueltos por la Cámara de que dependa el pubbco, pOSIbilItando aH la adecuación de '1as decisiones del Instituto con
juez que primero hubiese conocido (art, 2 9, ley 17.116. que sustituy6 el in- Jos crjterios que en el área de la salnd, bienestar y promoción se fijen por
ciso 7'> del artículo 24 del decreto~ley 1285/58), tal dlsposiciOO no resulta el Estado~~ (ver mensaje ya referido).
aplicable al sub examine, ni la decisión ya aludIda de la Exilia. Cámara Fe- En tal sentido se dispone que «el gobierno del Instituto estará a cargo
deral y en lo Contendosoadministrativo resolvió en forma defínitiva el punto, de un Consejo de Administración integrado por 1 presídente, 1 vicepresidente
Es que «debe tratarse de conflictos directamente planteados entre jueces de y 7 v?caJes, todos eUos en re:presentación del Estado} y 8 vocales en repre-
primera instancía, de manera que si ha mediado intervención de Cámara con sentaclán de las asociaciones sindicales con personería gremial. los qM serán
respecto a las deci8iones dictadas pen' cualquiera de aquellos, la decisi6n de df'~~flado3~ po'r el Poder Eiecutivo en la forma que determine la reglamenta-
la contienda incumbe a la Corte Suprema» (conf. Lino E. Palacio, Derecho ción, ASl surge del articulo 4<:>, de la ley 18.290, y de conformidad Can
procesal civil, t, 11, p. 582, y jur1spmdencia citada en nata 89). ésta, el PresIdente y Vicepresidente serán designados por el Ministerio de
IV _ Expuestas las razones que me autorizan a no aceptar la rermSlOn Bienest~ Social, dos vocales pOr cada una de 1as Secretarias de Estado de
de los autos, paso a fundamentar mi dedaraci6n de ineompetencia, partiendo PromOCIón y Asistencia de la Comunidad y de TranSportes v uno por cada
del análisis de la naturn.1f'2a del ente aquí demandado. una de las Secretarías de Estado de Seguridad Social y de Salud Pública y
Al respecto, cabe precisar que la ley 18.290 crea el "Instituto de SelVi- ~ la Empresa, Ferrocarriles Argentinos (art. 29. decreto-ley 3985/(9). AsÍ-
cías Sociales para el PeTIiona 1 Ferroviario>~. como organísnto contInuador de la rntSmo, se preve que la Secretaría de Estado de Promoción y de Asistencia
n
"Direcci6n General de Asistencia y Previsión Soda! para Ferroviarloo (leY de la Comunidad deSignará a los vocales representantes de las entídades gre-
para vivienda, la aprobacibn de 10s proyectos res~ectivos, la fi-
1 citaciones de Obra) del Banco Hipotecario National, que cons.
n a n c i a c i ~ ,la selecci6n y adjudicacibn de la empress construe- tituyen verdaderos reglamentas administrativos, de igual caricter
tors, inspecci6n de 10s trabajos, certificacibn y pago, pl-errogativas que 10s pliegos que fundamentan la mntratacibn en las obras .p',
de modificacirjn y rescisi6n unilateral, recepci6n de ]as 0bi-a~~ et- blicas.
I
cbtera. I De ahi entonces que la relaci6n entre Ias partes del contrato
par lo demhs, el contrato de locaci6n de obra se encuentra de locaci6n de obra resulta inescindible d e su referencia con la
sometido a 10s pliegos ("Plan 17 de Octubre" y General Para Li-
! presencia del Banm Hipotecario Naciona].

afectadas de c o n ~ b u i ra la formaci6n d e su patrimonio mediante el pago d e


miales. a cuvo efecto Bstas le elevarin una terna par cada cargo a cubrir
(a* 3 9 del 'referido decreto).
En cuanto a1 rdgimen patrimonial, 10s recursos dcl Instituto han d e pro-
aportes y contribuciones); d) lar autoridodes estatales eiercen un contrdor
intemo sobre rn actiddad, vigilando el Estado su duecci6n y administraci6n;
e ) sus recursos provienen principalmente d e aportaciones de las personas in-
venir, pdncipalmente, de 10s aportes y contribuciones obligatorios del personal coreoradas al r6eimen.
beneficiado y de sus empleadores, y que trathdose d e jubilados o pensio- VI- La aparici6n d e este tip0 de entidades obliga a realizar,una nueva
nadas la contribucibn ppatronal estari a cargo de la Caja Nacional de Pre- interpretacibn de las normas atributivas d e competencia, a fin d e resolver
visi6n para el Personal del Estado (arts. 14, 16 de la ley citada). Para el
adecuadamente a quibn col~espondedecidir 10s conflictos en que aquCllas in-
caso de disoluci6n del ente se dispone que el destino d e 10s bienes que PO- tervienen camo actoras o demandadas.
sea a esa fecha serri e.stabb& por d P&r Ejecutiuo, con excepci6n d e 10s
La primern reflexi6n que se impone gira en torno d e la trascendencia
aportados por las entidades gremiales, que seran reintegrados a dstas (art. 22). del ente, que excede el mero inter& particdar, comprometiendo 10s intereses
Desde atro &ngulo, tambien se estahlece que 10s inmuebles de la en- generales del Estado (ver mensaje que acompaii6 la ley y las referencias
tidad, sus operaciones propias y 10s actos d e sus representantes y apoderados, del IV Considerandnl
- ~ ~ ,~ . -~--.~.
estin eexentos de todo i m p u s t o o contribuci6n nacianal, provincial y munici- Resulta aplicable, entonces, el principio seg6n el cual a la presencia
pal (art. 13) y que, ante el incumplimiento del pago d e 10s aportes y con- de un inter& nacional carresponde, en t4rminos generales, la competencia de
tribuciones obligatorios, el Instituto extender& certificados d e deudas CuYO la justicia federal (con. CSN, Fallos t. 273, p. 16; t. 276, p. 222, entre
cobro podr& peneguirse por la via de la ejecucidn fiscal (art. 19). otros). Tal principio encuentra, por lo d e d s , un concreto apoyo en el caso,
Se prev6, asimismo, el estahlecimiento por el Poder Ejecutivo d e un 16- en el articulo 26 d e la ley 18.290 que en la Capital Federal somete a1 Ins-
gimen d e auditoria integral (art. 27). tituto erclusivamente a la Justicia Nacional. Una adecuada interpretacibn d e
Por liltimo, en el articulo 26 d e :a reitersda ley 18.290, se dispone que ese texto legal, conforme a 10s fines en que aparece inspirada (CSN, Fallas
"el Imtituto a t a d smn&do mclruicamente a la Justick Nocirmal, pudiendo t. 272, p. 219; t. 277, p. 213, etc.), lleva a sostener que con tal denorninaciin
optar por la justicia ordinaria en las provincias, en caso d e ser actor en jui- el legislador ha querido referirse a la luxticia Federal, distinguiendola de la
cio"; y que "el Presidente absolver& posiciones en juicio en la forma esta- justicia "ordinaria", a la cual se refiere con relaci6n a 10s conflictos provin-
blecida en el articulo 407 d d C6digo Procesal Civil y Camercial de la Na- ciales. De lo contrario, la norma resultaria sohreabundante e innecesaria.
ci6n, no estando obligado a comparecer personalmente". Advidrtase, por lo dem.43, que la dactrina acerca del carbter igualmente
V - Las circunstancias mencionadas ~recedentemente indican que nos nacional de 10s jueces de la Capital Federal s61o ha permitido desplazar hacia
encontramos ante una entidad que reviste el carhter d e persono juddica PU- 10s trihunales ordinaries juicios cuyo conocimiento correspondia a 10s tribu-
blica n o estatal, concept0 advertido por Michoud y elaborado por la doctrina nales federales, condicionando tal desplazamiento a la existencia de norma
a partir d e Sayagu6s Laso (TvatadD de dmecho admmirtratioo, t. I, 4* ed., expresa que asi lo dispusiera, requisite que en el caso no concurre.
ps. 173 y s.;hliguel S. Marienhoff, Tratado de &echo odminirtratiuo, t. 1, VII-Para decidir la competencia del fuero federal en lo contencioso-
ps. 348 y ss.; Juan Carlos Cassagne, Derecho administrativo, t. I, ps. 226 y administrativo, sdmase a lo expuesto la circunstancia de que en la cuesti6n
ss.: Uictdmenes de la Procuracidn del Tesoro, v d . 3, ps. 9 y ss. ,y vol. 5, de fondo que se ventila tienen aplicaci6n prevaleciente normas de derecho
ps. 30 y siguientes). plihlico administrativo.
Como tal, el Instituto demandado no pertenece a 10s cuadrw d e la Ad- En efecto: el propio "Pliego Tipo Bases y Condiciones para la Contra-
ministracidn ndblica. conforme a las narmas vigentes sohre organizacibn ad- taci6n de Obras" cuyas cl4usulas constituyen parte integrante del contrato
pero
ministrativa, s; encuentra regulado, en todo o en parte, por n w de de construcci6n (conf. art. 29 del mismo) resulta que por voluntad expresa d e
derecho p4blic0, concurriendo claramente, en el caso, las siguientes caracte- las partes, la contrataci6n se ha sujetado a la Ley Nacional de Obras Pli-
risticas propias d e este tip0 d e entidades: a ) su creacf6n ha sido efectuada blicas 13.064, debiendo aplicarse supletoriamente 10s principios generales de1
por ley; b) persigue fines d e inter& priblico o de utilidud g m o l ; C) gem derecho administrativo (arts. 2V y 3 9 ) ; es decir que el contrato se encuentra
de ciertas prerrogativas de poder pdblico (asi, la obligaci6n de las personas
dentro del mismo rkgimen del llamado "Plan 17 de Gctubre", la
Doctrinariamente, en estas condiciones, el contrato no puede
figura contractual se aproxima mucho mhs a1 szabsidio -express-
ser sino calificado de administrativo, en especial si se admite el
mente excluido de la ley 13.064, seghn el texto del art. lo- que
criteria interpretativo de las cliusulas exorbitantes.
Dentro del contrato administrativo su principal figura ana- a1 contrato de obra phblica. Esto ocurre en 10s casos en que el
lbgica, la mis cercana, es el contrato de obra phblica. constructor ejecuta la obra con fondos aportados por el B. H. N.
Debe destacarse que en no todas estas contrataciones se si- (con garantia hipotecaria), pero en terrenos de propiedad del pri-
mero y para ser enajenados a terceros en las condiciones fijadas
gui6 la misma metodologia. Asi, existen casos en que, si bien
por el banco en mkrito de su crkdito hipotecario. En este caso,
las prerrogativas del banco pueden
- explicarse como emanadas de
A

sujeto al regimen de exorbitancia que establece la referida ley. Ndtese tam- la misma relaci6n foment0 y no como propias del comitente de
bien las clAusulas propias del contrata de obra phblica, que se desprenden d e la obra phblica. Asi lo interpret6 la jurisprudencia 34, lo que in-
esas "Condiciones Tipom y de las "Clbusulas Especiales" y "Condiciones Tec-
nicas Particulares", acerca del control de la obra, facultades del comitente,
rkgimen d e multas, etc. Y si bien es cierto que la obra no se rediza con iuicio de las normas que en aefinitiva resulten aplicables a1 caso (cf. Fallas:
fondos del Tesoro de la Naci6n (uno d e 10s requisites que marca la ley 13.064 277:420, entre otros).
para aplicar su regimen) d e cualquier mcdo, el propio Instituto se ha suie- Opino, por ello, que ha d e decidirse la situaci6n procesal declarando la
tado a sus disposiciones. competencia de la justicia federal.
Se admite ademis que la contrataci6n y realizaci6n de o b r d~ e acuer*
con la ley de obras p6blicas no parece constituir un proceder alslado y CX- Sentencia de la Carte Supremo de J h h de h Nacidn
cunstancial de la demandada: cualquier otra obra a efectuarse por terceros Buenas Aires, 22 de mayo d e 1979.
debe bacerse sujeta a ese regimen normativo pues asi lo impone el propio AUTOS Y wsms:
"Reglamento Tipo" que el ente estaba obligado a dictar por impefio de 10 De conformidad con lo dictaminado por el Sezior Procurador General
previsto en el articdo 80, inciso c) de la ley d e su creaci6n. interino, cuyos fundamentos se dan por reproducidos en raz6n de brevedad, se
A ella cabe agregar la norma del articulo 55 d e la ley 13.064 que ex- declara que la justicia federal en lo contenciosaadministrativo es la competen-
presamente establece la competencia d e la justicia federal en lo contencioso-
t e para entender en esta causa. En consecuencia, remitansele 10s autos y
administrativo en "tadas las cuestiones a que dB lugar la aplicacinn e inter- haease saber en la forma de estilo a la Cimara Nacional d e Apelaciones en
pretacih de 10s contratos de obra phblica".
Par estas consideraciones y lo previsto en 10s articulos 40 y 79 del C6- -
lo Civil. Adolfo R. Gabrielli. - Abelardo Rossi. Emilio M. Daireaux. - Pe-
dro J. Frias. -Elias P. Guastavino.
digo Procesal y 2 4 primera parte, d e la ley 17.116, RE.SUELV~:
De la lectura de estos pronunciamientos judiciales surge que el anflisis
10) Declarar de oficio la incompetencia del fuero civil para entender de la nnturaleza del ente ha sido el que ha incidido en nmyur medida para
en 10s presentes autos. . . Perez Cod&, juez".
resolver la cuesti6n, en particular el voto del Dr. Azcona y el fallo del Dr. PA-
Didamen del Procurador General d e la Naci6n rez Cortks, correspondiendo tambikn destacar la perspectiva adoptada por el
SUPAEMA CORTE:
Dr. Cauna al detenerse a considerar la naturaleza del cantrato en d mismo,
Surge de las constancias de autos que tanto la iusiicia federal en 10 argumentos que son vblidos para apoyar lo expuesto en el texto en relacibn
contenciosoadministrativo cuanto la nacianal en lo civil, a travCs de las res- con 10s supuestos d e 'delegaci6n transestmctural de cometidos".
34 Ad fue resuelto por la Cimara Nacional d e Apelaciones en lo Fede-
pectivas C h a r a s , ban declarado su incompetencia para entender en la litis.
Corresponde, por ende, a V. E. dirimir el conflict0 negativo de comper ral Contenciosoadministrativo, Sala I, en fallo del 7 de agosto d e 1980, re-
tencia asi planteado, en funci6n de ser el h i c o organism0 supelior jerbquico caido en autos "Inmobiliaria Lamaro S. A. c1Banco Hipatecario Nacional",
comhn capaz de resolverlo (art. 2 4 inc. 79, del decreto-ley 1 2 W 5 8 , mcdi- cuya narte pertinente puede leerse a continuaci60:
ficado por la ley 17.116). ". . .Siendo ello asf, no se compadece con tal sistema pretender carac-
Tada vez que la actora invoc6 en su demanda fuentes de caricter fede- teriznr esos vincdos IimitAndolos a considerarlos como mn conhato de obra
ral -1eyes 12.910, 13.064, 18.290 y 19.549, a fs. 286 vta. y 295 vta./2_97 vta.-, phblica, pues las peculiaridades que 10s singularizan impiden dicha simpli-
no s61o en cuanto a la personalidad de la accionada sino tambibn en lo que ficacinn.
ataiie a diversas clAusulas del contrato d e locaci6n de obra celebrado entre En efecto, tanto del an6lisis de 10s tCrminos del convenio subscrito cuan-
las partes, y aunque con referencia a este liltimo cit6 incluso nonnas del to de 10s preceptos reglamentarios que lo complementan surgen circunstan-
C6digo Civil, estimo que la anterior invocaci6n basta para atribuu el pleito cias que de por si suponen una diversidad incompatible con 10s elementos
a la competencia del fuero federal en lo contenciosoadministrativo, sin per- que integran aqukl.
136 co-~o DE OBRA P ~ B L I C A EIEMENTOSDEL CONmATO DE OBRA P ~ B L I C A 137

dica qne, sobre este particular, 10s principios genemles tienen un La Wsprudencia ha tenido ocasi6n d e tratar otros cases de
reducido de apIicaci6n, adquiriendo gran importancia 19 simjla~naturaleza con metodologias y resultados en los que coin-
via casuists de interpretaci6n del institute. ciden 10s pirrafos expuestos m& arriba 36.
-

Mas all& de la discusihn de si una construccihn del tipo de la aqui Queda por verse si las tres obras levantadas por Inmobiliaria Lama-
analizada implica la satisfacci6n de un servicio pi-blico, entendiendo mmo r6 S. A. encuadran en el concepto de obra pliblica.
tal que se bate de aquello que le esti atnbuido como competencia propia, Coma resulta de las escrituras de instrumentacihn de 10s creditos, el
lo cierto es que sin necesidad de atarse a una deteminada definici6n del Banco concedi6 bstos a la actora para ser aplicados sus importes a las tres
compromiso asumido cabe analizar sus alcances a partir de las reglas que construcciones comprometidas, a erigirse en terrenos de propiedad de esta
ambas parts coincidieron en aplicar para de alli extraer las consecuencias i-ltima. Los prktamos se han hecho efectivos a favor de una wnpresa par-
que este pleito entonces se derivan. ticular, que constmy6 para si y no para el Banco, sin que autorice a desmentir
Consiguientemente, se impone dilucidar la discrepancia a la luz de las esta. afirmaci6n la situaci6n preeminente de este dltimo frente a la actora.
cliusulas del contrato de rnutua hipotecario y de constituci6n del gravamen No puede pensarse, entonces que los edificios construidos por la actora
y de 10s textos de la ley de fond0 que rigen la materia. Establece el a d i g o renstan el car&cter de obra phblica, pues eran erigidos por nn particular so-
Civil en su articdo 1493: "Habra locaci6n (de obra) cuando dos partes se bre terrenos de su propiedad para enajenarlos en su momento en las condicio-
obliguen reciprocamente, la una. . . a ejecutar una obra.. . y la otra a pagar nes que fijaria el banco, conforme habia quedado acordado entre 6ste y la
por esa obra.. . un precio determinado en dinero". Luego, 10s adculos 1629 actora. 'Uso Pi-blico', htilidad comhn', 'utilidad phblica', 'inter& gene-
a 1647 se ocupan de este tipo de locacihn. ral', o conceptos sirnilares aparecen en las diversas definiciones para se6alar
h escrituras traidas a la causa, que instrumentan un prhstamo inicfal la finalidad de toda obra pliblica, que evidentemente tiene por destinataria
para cada obra y sus respectivas ampliaciones, dan cuenta de que 10s pres- inrnediata a la comunidad. Ello no ocurre con las tres obras Uevadas a cab0
tamos han sida otorgados a favor de la actora, "de conformidad con el DOT Lamar6 S. A.
Plan '17 de Octubre', ex Plan 'V.B.A.', como aporte fincnciera para la cons.. No es posible, por lo tanto, calificar a los contratos traidos a la causa
trucci6n d e viviendas destinadas a la venta en calidad de vivienda propia Y como de locacihn de obra pi-blica".
permanente de 10s interesados en adquirirlas, cocheras y locales de negocio, 35 Ver a continuaci6n 10s distintos pronnnciamientos recaidos en autos
a edificarse en el inmueble que se da en garantia de este prhstamo, las sue "Schirato, Gino c/Estado Nacional (Ministerio d e Cultwa y ,mucaci6n y
deberin construirse de acuerdo con 10s planes y especificaciones tbcnicas Cooperativa Escolar 14", Expte. 3830/77:
obrantes en el expediente rnencionadu". En ellas tambi6n se expresa que
'la deudora declara en forma expresa que el Banco Hipotecario Nacional in- Sentencia del Juzgodo Federal en lo Contencioso Administratiuo
terviene en esta operacihn como mero agente financier0 y por lo tanto es ajeno & Primaa Instancia N9 1
a toda controversia que pudiera surgir por la compraventa de las unidades, asi Buenos Aires, 30 de octubre de 1980.
Y VISTA:
como tambiCn de que las inspecciones que el Banco realice son al Goico efecto
de verificar las inversiones realizadas, no significando sustituir ni compartir las Para dictar sentencia. . .
resnnnsabilidades
---,- oue cornneten a la deudora como titular del dominio, di- Se presenta el actor promoviendo demanda contra el Estado Nacional
(Ministerio de Cultura y Educacih) y la Cwperadora Escolar de la Escuela
~ ~~~

rectores d e obra y/o empresas constructoras ni a 10s organismos que otorgan


las aprobaciones o certificadas finales. . .". no 14, Distrito Escolar nQ 15, por la suma de $ 428.023,89 la que en m&
Una confrontacihn entre las cl&usulas de las referidas escrituras de o en menos resulte de la prueba con actualizaci6n a la fecha del pago e in-
mutuo hipotecario y las normas del Cbdigo Civil en materia de locaci6n de tereses, en concepto de daiios y perjuicios por la rescisi6n ilegal de un can-
obra, descarta la posibilidad de que con tales inshumentos se baya dado trato de obra pi-blica. Impetra tambih la restitucihn de tres pagarbs por un
forma a una locaci6n de ese tip, aun forzando la interpretacibn de 10s textos. importe de $ 41.470,52, entregados como garantia del contrato.
La actara otorg6 a1 Banco Hipotecario Nacional un poder irrevocable Explica que el 2 de junio de 1973 celebrd con la demandada a travbs
cuyas cliusulas le privaron del derecho a ejercer por si buena parte de las de la Cooperadora Escolar citada, un contrato de obra phblica para la modifi-
atribuciones que le eran inherentes como titular del dominio sobre 10s tres cacih Y ampliacihn de la escuela nq 14, convinibndse como precio de la obra
inmuebles de que se trata. Pero esta abdicacibn, que emerge de un acuerdo la suma de $ 829.410,51, la cual debia ejecutarse en el plam de 12 meses
de voluntades con todas las caracteristicas de un contrato de adhesibn, no a partir de la fecha de iniciaci6n de 10s trahajos.
resta fuerza a lo pactado por las partes. Son obvias las razones que ban Aclara que 10s pagos 10s realiwria la Cooperadora mediante certifi-
influido para que la actora confiriera un chmulo tan amplio de facultades cados mensuales y de acuerdo con el Plan de Trabajos Pliblicos para cada ejer-
a favor del Banco. cicio, convini6ndose el reconmimiento de mayores costos, segim el rkgimen
En conclusihn, nada autoriza a admitir que 10s textos contractuales de- de la ley 12.910.
finan, en f o r m ostensible o encubierta, un contrato de lmaci6n de obra. Refiere que 10s trabajos se iniciaron el 15 de junio de 1973, teniendo un
Es importante destacar el proceso argumental que han se- contenido doctrinal ha partido de considerar 'kl crecimiento pro-
guido las sentencias dictadas en el caso citado en la nota anterior, gresivo de 10s cometidos administrativos frente a la complejidad
a fin de llegar a la conclusi6n que estimo justa y realisia. Nbtese de la vida contemporAnea" y la insuficiencia de la llamada Ad-
c6mo el seiior juez de Primera Instancia, en un fallo de meduloso ministraci6n centralizada para enfrentar y satisfacer esas nece-
sidades sociales. Esto llev6 a la Administracidn a la utilizacibn

ritmo normal hasta el mes de diciembre, pues ya en enero de 1974 el r i m men de convenio del art. 29 de la ley 16.727, modificado por ley 17.764, re-
d e trabajo comenz6 a disminuir poryue la demandada no liquidaba 10s mayo- glamentada por decreto 5633167 no permite inferir vinculaci6n alguna entre
res costos en un momento que el casto d e la construcci6n habia aumentado en el contratista y el Estado Nacional, ya que su rol se limita a transferir a la
forma extraordinaria, para ya en febrero d e 1974 lIegar a agotarse su capacidad Cooperadora 10s aportes convenidos, encargindose ella de la concertaci6n del
para seguir financiando la obra y a pesar d e sus continuos reclamos no se contrato, por lo que el E t a d o es ajena a la relaci6n.
le liquidaban 10s mayores costos. Frente a la defensa opuesta contesta la demanda en subsidio negando
Hace mencibn yue el 10 d e mayo d e 1974 reclam6 en el libro de 6rde- todos Y cada *no d e 10s hechos invocados por la accionante y deja planteado el
nes de servicio en 10s terminas yue transcribe sin que la direcci6n de obra le caso federal.
refutara.
111) A fs. 142 se presentan los seikres Eloy, Jose Capurro y Roque Mi-
Dice que reci6n en julio de 1974 se comienza a pagar 10s mayores COS~OS,
guel Rienzi en representacibn de la codemandada Cooperadora Escolar de la l?.-
pero en dosis homeopiticas, puntualizando las cifras que se le pagaron.
cuela n u 4 del distlito escolar n' 5 en su caricter d e presidente y vicepresi-
S e k l a que 10s mayores costos se le abonaron a mis de un afio d e co-
dente de la misma.
menzados 10s trabaios, reteniendosele un 10 %, yue s610 correspondia se le En primer tkrrnino, postulan la excepci6n de falta de legitimacibn mani-
retuviera en 10s certificados d e obra, como que la suma global yue se le
fiesta para obrar d e su parte. Para ello se remite a las terminos empleados
pagara de $ 110.844,55 al 30 d e actubre de 1974 correspondfa a 10s mayores por la actora en su demanda en cuanto a ella respects.
costos de 10s certificados de obra no 1 a1 7, cuando a ese tiempo ya tenia Recbaza que POI razones procesales baya debido ser codemandada, ya que
aprobado el certificado n9 16 c~rres~ondiente a trabajos realizados hasta se- estima yue si la accionante esperaba su participaciin a fin de que aporte
tiemhre d e 1974.
elementos para una justa decisibn, otro era el camino para su intervencibn
Pasa luego a considerar un hecho a1 cual le otarga 5 a n relevancia re-
en autos.
lacionado con instrucciones dadas por el aryuitecto Lemole, d e la Direcci6n Hace referencia yue su propia naturaleza d e asociaci6n civil le impide
Nacional de Arquitectura Educational (DINAE), dependiente del Ministerio llegar a ser comitente d e una obra pbblica, considerando, adem&, que nada
~.
de C~rltura v Educacibn.. v
~
. que
- dieran camo resultado a cuatro dias de SU tiene que ver con el Estado Nacional por ser ajenos a su estructura organiz*
reclamo en kl Libro d e Ordenes de Servicio que presentara una lan nil la a tiva ni siquiera con aquellos entes con autarquia oponible.
la Coaperadara conteniendo 10s montos de 10s certificados de obra y mayores Sequidarnente pasan, con caricter eminentemente supletorio, a contestar
costos del n? 1 al 10, colocanda al pie de la lan nil la el monto de 10s trabaios la accibn instaurada, negando todos y cada uno d e 10s hechos articulados en
que faItaba realizar, s e g h el presupuesto y haciendo un d l c u l o provisorio de la demanda con la sola aceptaci6n de ayuellos que sean objeto de expresa
10s
~~- mavores
~~,costos oor dichos trabaios, . . estim6 en un 71 % del monto,
que reconocimiento.
seghn presupuesto d e 10s trabajos pendientes de ejecuci6n.. .
En el capitulo VI titulado "Derecho", explica la accionista en largas con- . .,.14) Hasta aqui las pretensiones del actor en cuanto a 10s rubros
sideraciones por qu6 el Estado Nacional (Ministerio de Cultura y Educaciin) cretos peticionados, por lo q u e debe pasarse a1 tema d e las excepciones d e
es responsable de 10s dafios y ~erjuicios sufridos, destacando en su anilisis fslta de acci6n opuesta por el Estado nacional y d e falta de legitimaci6n m-
que estima que la Coo~eradora no es responsahle en tanto ha actuado POI nifiesta para obrar interpuesta por la Cooperadora Escolar d e la Escuela n? 14,
cuenta del Estado, pero justifica yue por razones procesales se ha visto obli- del Distrito Escolar 15, a fin de precisar si eldste alguien yue se haga res-
gada a demandarla. ponsable de 10s reclamos acogidos en 10s considerandos precedentes.
Sostiene la ilegalidad d e la rescisi6n efectuada &tu proprio por la A fin d e dilucidar el tema en tratamiento, novedoso por cierto, cabe aden-
demandada por las razones que explica en el a d p i t e 3. trarse en la naturaleza de la relaci6n contractual, con el objeto de esclarecer
Deja planteado el caso fedeml. la titularidad y l o titularidades d e esa relaci6n, lo que lleva a un terreno pla-
11) Corrido el traslado pertinente se presenta a fs. 58 el Estado Nacio- gado de obsticulos y oscuridades interpretativas atento las particularidades es-
nal (Ministerio de Cultura y Educaci6n) oponiendo excepciirn de falta de ac- pecificas d e la contrataci6n, nomatividad imperante en la misma y deficien-
ci6n y contestando subsidiariamente la demanda. cia e imprecisibn terminol6gica en la cuesti6n.
Explica con relaci6n a Ia falta de acci6n que impetra, reiterando lo ex- En efecto, iuegan en el caso distintas leyes. Por un lado ha de co-
presado en las actuaciones administrativas, que las obras regidas por el r6gi- menzarse puntualiwndo que por ley 16.727 se cre6 un fondo escolar pema-
140 CO-TO DE OBRA P ~ B L I C A ELEMENTOS
DEL CONTRATO DE OBRA P~BLICICA 141

Pero, paralelameute, s e p r o d u c e u n desarrollo de las "asocia-


de u n a v a r i e d a d de tkcnicas i n s t r u m e n t a l e s ( l a Administracibn
c i o n e s intermedias" de d i s t i n t a n a t u r a l e z a y finalidad, e n si mis-
"descentralizada" -entre la que s e d e s t a c a n 10s e n t e s c o n come-
m a s a p t a s para c u m p l i r c o n aquellos c o m e t i d o s que, si b i e n han
t i d o comercial o industrial-, el "fomento", etc.) que han "pu-
a d q u i r i d o l a c a t e g o r i a de phblicos, la Administracidn les confiere,
blificado" actividades que a n t e s e r a n t i p i c a m e u t e privadas.

de la ley 17.271 (competencias particdares para los comandos en jefe de las


nente cam0 cuenta especial en jurisdiccidn del entonces Ministerio d e Edu- Fuerzas Armadas y las Secretalias de Estado), donde en el capitulo corres-
a c i d n y Justicia, administrada por el titular d e la cartera, con el objeto de pondiente a la Secretaria d e Estado de Cultura y Educacibn, en su punto
aplicarse erclnsivamente a la atencibn de las necesidades d e 10s edificios de 4 se manifiesta que entenderi en la planificacibn, proyecto y co~struccibnde
los establecimientos educativos, por lo que a tal efecto el ministerio y cada 10s edificios requeridos por 10s servicias d e su jurisdiccidn y realizan trabajos
uno de los organismas descentralizados .bajo-. su..jurisdiccibn
,
podrin eejercer 10s
~

de consemaci(m, modificaci6n y ampliacibn de edificios existent- o de aque-


derechos y atribuciones que consagra la ley lY.Uti4. 110s que sean constmidos con participacibn ddirecta d e 10s cuerpos intermedios.
Por su articulo 29 la ley 16.727 estipula que 10s crkditos del fondo se Dentro de tal tesitura encontramos tambiCn la ley 17.034, que en parti-
aplicarin, entre otras cosas, para la construccibn, ampliacidn, conservacibn y l o cular concede al Conseio Nacional d e Educacibn la posibilidad de concurrir
remodelacidn de escuelas, mediante convenios o consorcios con cooperadoras a con organismos oficiales (nacionales, provinciales y municipales), instituciones
cooperativas escolares, etcktera. de bien comi-n y cooperadoras escolares a la realizacidn de obras de ampliaciirn
Las recursos con que se formari el fondo provienen de las distintas nor- y refaccibn de 10s locales ocupados por sus establecimientos educacionales
mas que menciona el art. 39, incluido el presupuesto national, debiendo el ad- hasta un monto miximo de $m/n. 1.500.000 con cargo a las partidas especi-
ministrador del fonda determinar anualmente las ~rioridadesa que se aplfca- ficas d e su presupuesto de rentas generales o cuentas especiales, repitiendose
rin 10s recursos, conforme con las que resultasen de un planeamiento organl- en gran parte de las normas anexas a1 art. 14 preceptos ya sefdados prece-
co de las canstrucciones escolares, elevando el proyecto al Poder Ejecutivo para dentemente, a lo que debe agregarse que en esta ley las entidades suscripto-
consideraci6n e inclusibn en el plan d e Obras y Trabajos Xblicos (ar. 4'). ras del convenin deben rendir cuenta documentada mensualmente de 10s aportes
Par su parte, el decreto reglamentario 5633/67 en su articulo 3P estable- que el Consejo retilice camo que las mismas formu1ar.h toda la dacumentacibn
ce que la Direcciirn General de Arquitectura y Trabajos Phblicos de la Se- tCcnica indispensable d e la obra a realizar (planos, proyectos, especificaciones,
cretaria de &tado d e Cultwa y Educacibn ---a ese momento hay una nueva presupuestos, apellido y titulo de 10s profesionales que dirigiwan y fiscalizaran
eatrvctura seri el organisma tkcnica-administrative de aplicacibn la obra, plazo de ejecucibn etc.).
d e la ley 16.727.
- . .15O) El repaso d e toda esta normatividad nos enfrenta con el fenbmeno
En las normas anexas a1 art. 'iO se estipulan las entidades con quienes
de la participacih de 10s particulares en la Administraciirn Pi-blica que es un
p e d e n celebrarse 10s convenios autorizados por la ley como tambikn
tema que se ha situado en el centro del debate iuspublicista d e 10s i-ltimos arias.
clase d e aportes se efectuarin, descargando la elaboracidn d e la documentacibn
tecnica en las entidades que celebren el convenio. Asimismo se determina s u e En efecto, el crecimiento progresivo de 10s cometidos administrativos
la direccihn de cada establecimiento educativo seri la encargada d e la fiscali- frente a la complejidad de la vida contemporinea evidencib que sir10 la Ad-
zacibn integral de las obras, sin perjuicio de la intervencidn directa de la Di- ministracidn central no podia enfrentar tal diversidad de desafios, por lo que
recciirn General d e Arquitectura y Trabajos Xblicos, siendo responsable junta- surgib la necesidad de la creacibn de otras entes institucionales a fin de cum-
mente con 10s representantes de las entidades no oficiales de la correcta plimentar actividades especificas con caracteres propios. Es la parici6n de la
aplicacidn d e 10s aportes hechos por l a Secretaria de Estado de Cultura Y Edu- "Administracibn descentralizada", pero donde el Estado permanece siempre
caci6n. como titular de esta nueva irea de actividades, sin perjuicio de 10s problemas
En el punto 11 del anexo se prevB que si por causas no imputables a la planteados en cuanto a su caracterizacibn a1 recurrirse a figuras del derecho pri-
Secretaria d e Estado o su Direccibn General de Arquitectura y Trabajos Pb- vado, el cnal tambiCn se inserta en el funcionamiento propio d e este tipo de
blicos las obras no se pudieran continua1 o se suspendieran par un lapso ma- entidades. La cantidad de las tkcnicas es, como se sabe, muy extensa y varia-
yor de treinta dias el organism0 tomari inmediata posesibn de ellas y d e todos : ble (entidades authquicas institucianales, ennpresas del Estado, sociedades del
10s bienes y elementos existentes en las mismas y d e las sumas d e dinero no Estado, sociedades con participacibn estatal mayoritaria, d e economia mixta,
invertidos, p d i e n d o iniciar las acciones legales que correspondan. etc., en el caso d e nuestro pais).
La ley 17.764 modificatoria de 10s dos primeros articulos d e l a ley 16.727 Este "nuevo feudalismo" administrative afirma cada vez mis la presencia
en nada varia lo sustancial de las normas transcritas, salvo cuando en el ir- activa del Estado y produce un fenbmeno creciente de puhlificacidn d e las ac-
ciso f ) del art. 2P hable d e las obras y trabajos que se realicen mediante tividades hasta ayer tipicamente privadas, por lo que comienza a diluirse la
convenios o consorcias con participacibn directa d e 10s cuerpos intermedios Sean ,divisi6n categorial entre materias pi-blicas y privadas.
gubemamentales o privados, adecuando asi su redaccibn a las estipulaciones POI su palte, aquella complejidad de la vida social ha forjado en el seno
ELFXENTOS
DEL W N ~ A T O DE OBRA P ~ B L I C A 143:.

atendiendo a1 "movimiento especifico de la dinimica social", co- -dice el Dr. Gauna- la Administracibn Piiblica transfiere el ejer-
mo seiiala el Dr. Gauna en el fallo comentado. Esta es la par- cicio del cometido en favor del ente privado", pero conservando
ticipacibn de 10s particulares ( a travbs de las asociaciones inter- la titularidad juridica, o responsabilidad funcional, con respecto
medias) en "las funciones administrativas tipicas". "En concreto a tal cometido.

Despues de otros trimites referidos a problemas tecnicos del proyecto


mismo de la sociedad un fen6meno paralelo d e desarrollo d e las asociaciones de ampliaci6n del local escolar, se llega a1 Convenio de Colaboracibn nV 0639/
como protagonistas d e la participaci6n social, basta pensar en las asociaciones CNE/169 enbe las autoridades del ente cooperador denominado en tal ins-
vecinales, d e consumidores, ecol6gicas, culturales, etc., aparte d e las propia- trumento "Entidad intermedia" y la Direccibn Nacional d e Arquitectura Edu-
m n t e profesionales que con raigambre privada se publifican tambikn, en la cacional, 14 de abril de 1971 (folio 57, exp. 2729) en 10s t6rminos de las
medida que tienden a incidir en el mejoramienta del inter& general a par- leyes 16.727, 17.764 Y decreto 5633. A su vez el director naciond de Arqui-
tir d e sus propias aspiraciones. Esto nos lleva a constatar la coexistencia de tectura Educational por disposici6n no 44/DNAE/72 decide autorizar "ad re-
una actuaci6n pliblica y privada (social) en que se entremezclan 10s intereses ferendum" de la Superioridad la ejecuci6n de las ohras, aprobar la documen-
especificos d e esas asociaciones con el inter& general del cual la Administra- taci6n tecnica a nivel anteproyecto y fijar el aporte total del Estado Nacional,
ci6n es gestora, existiendo puntos d e coincidencia entre fines privados (socia- todo lo cual es finalmente ratificado por el seiior ministro de Cultura y Edu-
les) y phblicos, lo que deriva en una relaci6n reciproca que oscurece 10s as- caci6n mediante la resolnci6n n'? 200 del 10 d e febrero d e 1972 (folio 63,
pectos funcionales y orghicos de lo que anteriormente fue con claridad el exv. 2729).
sector phblico y el sector privado. La Administraciirn debe abrirse al medio . . .179) Asi se Uega, en concreto, a1 contrato de marras (constancias agre-
social, atendiendo a todo movimiento especifico d e la dinimica social. Asi gadas en carpeta de prueba documental d e la actora),, del cual, y a 10s efec-
emerge la participaci6n d e 10s particulares y/o asociaciones civiles en ]as fun- tas del anilisis que se esti realizando, surge que entre la Cooperadnra Esco-
ciones administrativas tipicas, no ya mmo un fenbmeno accidental o inegular, lar n* 14 y la empresa Schimto se conviene en celebrar un contrato adm'nds-
sino impulsado desde el propio Estado como una colaboracibn o a ~ u d aa1 trativo da obru ptiblicu (lo escrito en bastardilla pertenece al Tribunal).
cumplimiento d e fines pliblicos, bajo control d e la administraci6n, excluyendo Se lee, asimismo, en el articulo tercern del contrato, referido al sistem
de esta caracterizacibn participativa a aquellos particulares que se relacionan de contrataci6n e importe, que se pacta un regimen d e ajustes basado en la
con la Administraci6n por via del contrato a trav& d e una remuneracibn como aplicaci6n d e la ley 12.910, lo que robustece ahn mis sue se ha celebrado
contraprestacihn. un contrato d e obra pliblica. Como para que no quede ninguna duda, en el
. . ,160) Teniendo presente lo ~untualizadoprecedentemente debe anali- articulo 49 se inselta erpresamente el art. 48 de la ley 13.064.
zarse la documentacibn atinente al problems en cuertidn para la cual en pri- A su vez d e las bases generales para la licitacibn (folio 5, carpeta d e prue-
mer lugnr debemos remitirnos al expendiente administrative nO 16.972/69, ba documental actora) se desprende del punto 1.1.3. que lo que no est6
iniciado por la Asociaciirn Cooperadora d e la Escuela no 14 del Conseio Es- previsto por el pliego quedal5 sometido a las disposiciones de la ley nacio-
colar 15, en donde el folio 11 luce un titdado "Modelo d e Solicitud d e Suhsidio nal 13.064 (de Obras Pliblicas), del deneto-ley 23.354/56 (ley de Con-
seglin ley 17.034", por medio del cual se solicita de acuerdo con 10s tdrminos de tabilidadl, sus reglamentaciones y demis disposiciones concordantes.
la ley de marras nueve millones de pesos moneda nacional, con el objeto de
llevar a cabo las obras d e ampliacibn del edificio escolar citado. La nota estA En el punto 1.6.11, "Ejecucibn de la obra con arreglo a su fin", se
consigna expresamente el art. 40 d e la ley 13.064, repitiendose la menci6n d e
firmada por el presidente y secretario de la Asociaci6n Caoperadora, la di- la ley 13.064 en el apaltado 1 . 9 sobre modificaciones y ampliaciones, cian-
rectors d e la escuela y el inspector tecnico sectional. dose tambibn en el art. 38 d e dicha norma y en el punto 1 . 1 0 . 5 el art. 48
Al folio 17 abra informe del director nacional de ArquitecNra Educacio- de la ley de obras phblicas con respecto al paga de certificados y los a&. 49
n d , quien hace saber que a fin de que 10s trabajos a realizarse puedan ser a 55 en materia d e rescisi6n del contrato (punto 1.13.1).
encarados poi- alguna d e las modalidades regidas par el decreto 5833167, re-
Asirnismo, en el pliego d e "Cliiusulas Tdcnicas" (folio 30, carpeta de
glamento d e la ley 16.727 (Fondo Escolar Permanente) debera celebrarse eI
pmeba documental actora) se establece en el art. 29 que las diferencias d e
respective convenio de colaboraci6n por parte de la Asociacibn Cooperadora,
costos producidas por las variaciones de 10s precios d e la mano de abra, ma-
debiendo la misma manifestar su expresa conformidad para asumir la confec-
teriales, combustibles, transportes, etc., serin reconocidos por la cooperadora
ci6n de la documentzcibn t4cnica del proyecto, la direccibn dde 10s trabajos Y
escolar con arreglo y limitaciones de la ley 12.910 y demis legislaci6n, con-
la idministracibn de 10s fondos que se asignen, asi como tambien indicar b
contribuciirn econirmica que sportaria la comunidad.
En cumplimiento d e ella, la cooperadora y la directora de la escuela
aceptan tales obligacianes y se comprometen a contribuir con el 20 % del total
.
secuente, concordante y/o reglamentacibn de aplicaci6n.
. . ,139) Con todo lo hasta aqui repasado debe alcanzarse la precisibn que
se husca para concretar la titula~idad y/o titularidades d e la relad6n con-
del costo d e las obras a realiiarse (folio 29, expte. 2729, agregado al 18.972). kactual, objeto d e la misma, y responsabilidades consecuentes.
Este fenbmeno, en 10s t6minos de la sentencia de Primera desoinclllada de dicha organizacwn.. .", por lo que cabe denomi-
Instancia, adquiere su expresibn instrumental en la figura de la narla "delegacidn transestructural".
delegacibn ". . .qm en lugar de dame dentro de la organizacidn ad- El contenido de tal delegaci6n es acotado para el caso con-
minktratiua, escapa de 6sta y se instala en wnn estfuctva ajena, creto en el fallo de la Sala 111 de la Cdmara de Apelaciones en lo

Vamos a comenzar con el abjeto del contrata -que surge con claridad Sin embargo, y a pesar d e lo erpresado en el juicio, el Estado Nacional
del art. l e del mism*. Este se celebra con el prop6sito d e ejecutar todos plantea, lisa y llanamente, que nada tiene que ver con la relaciirn contrac-
10s trabajos inherentes a la madificaci6n y ampliacih de la escuela nQ 14 tual que, a1 dificultarse en su eiecucibn, ha derivado en el presente litigio.
del Distrito Escolar 15 y que d e acuerdo con las cliusulas particulates com- Frente a ello, y siguiendo el hilo del anilisis, si se ha considerado r*
prende la canstrucci6n de un primer piso con locales para cuaho aulas y zooable el encuadramiento en la ley 13.064, norma s e insist<- permanen-
sanitarios, un segundo piso con locales tambibn para cuatra aulas, con locales temente invocada, debemos colacarnos en la hip6tesis d e quienes pueden ser
sanitarios, escaleras, construcciirn de hall de entrada, etcbtera. comitentes en un contrato de obra pbblica. La respuesta generalizada es
Es decir, que 10s trabajos estin referidas a un bien artificial pertene- que unicammte puede ser el Estado u otro ente d e derecho p6blico.
cienta-a1 domini6 pirblico estatal (una escuela p&blica) .a fin d e mejorarlo De alli que no seria posible que el comitente fuera un particular (ver
y am.pliarlo. Dicho local escalar sirve para cumplimentar el servicio p i r b k ~ asimismo art. 3 O de la ley 13.064). En el juicio, 10s que suscriben el deno-
co d e enserianza primaria prestadd por 91 prop.iid Estado, poi lo que no cabe minado "contrato administrativo de obra pirblica" son 10s representantes de
duda que el contrata, con abstracci6n d e quien sea el comitente, tiene una la "Asociaci6n Cooperadora 'Nuestros Niks"', d e la Escuela no 1 4 del Dis-
clara finalidad pirblica, pues hace directamente a un cometido estatal con trito Escolar 15 "Vicente Carmelo Gallo", es declr, una simple asociaci6n civil
alcance d e inter& general y directamente vinculado al bien c o m h y, ade-- en 10s tCrminos del art. 46 del C6digo Civil (ver Estatutas a fs. 117/123),
m h , porque el bien inmueble d e que se trata en si mismo, est6 afectado a por tanto persona privada que toma el papel de comitente en la relacih.
un fin de utilidad general. Como ~ u e d edenotarse, el tema ha alcanzado su grado rneximo de con-
Desde esta perspectiva teleol6gica aparece como discreto y razonable fusibn, el contrato, si bien con dificultades, puede enmarcarse dentro d e
caracterizar al contrato como administrativo. 10s lineamientos clisicos del contrato administrativo y aun denho del con-
Empero surge otro interrogante. Este contrato administrativo, ies de texto d e la ley 13.064, asi incluso lo entendieron las partes a1 especificar
obra phblica? concretamente que celebraban un "contrato administrativo de obra pirbli- 1
Sabido es las discrepancias existentes entre la nocibn docbinaria d e di- can, pero el comitente resulta una persona ~ r i v a d a ,lo que indudablemente
cho contrato y la que fluye d e la legislncibn argentina. Mientras que la choca con el principio general de que irnicamente puede ser comitente el Es-
doctrina sostiene en forma aparentemente uninime que tanto la noci6n de tado u atro ente de derecho pirblico.
obra pirblica, como el contrata d e obra pirhlica, deben tener una finalidad . . ,190) Sin embargo, la justa bptica del ~ r o b l e m ano puede vislumbrarse
o destino d e bien combn, la ley argentina (13.064) erige salarnente que sea teniendo en cuenta las nociones tradicionales y situaciones comunes, pues
financiado con fondos del Tesoro Nacional, sin referuse a la finalidad. como se seiialara en el considerando 15, existe toda una nueva actitud en la
En el caso, y cnmn surge de la ley 16.727, el Fondo Escolar Perma- sociedad contemporinea en cuanto al rol de la Administracih, su relacih
nente se forma can 10s recursos producidos par las leyes que se consignan con 10s particulares, el papel protag6nico de las asociaciones o cuerpos in-
en su art. 30, lo que en definitiva evidencia que las asignaciones que se reali- termedios, el entrecruzamiento d e lo pliblico y lo grivado que ha trastacada
zan por parte d e dicho fondo a las abras de remodelaciirn o ampliaci6n d e sensiblemente la concepcibn originaria del derecho adndnistrativo todo y del
10s locales escolares provienen del Tesaro Nacional. contrato administrativo en particular (conf. Vadel, Georges, Droit odminis-
'rotif, ps. 237 a 240 y 765/766; De Labaudhre, AndrC, Manuel de droit
A esos efectos existe imputaci6n presupuestaria (ver folio 58 vta. del
odnlinistratif special, ps. 176/177; Bassols Coma, Martin, Corwidmanones
expediente administrativo 2729, agregado a1 16.972) e intervenci6n del Tri-
sobre 10s conoenios de colnboracidn de la Adminirtracwn con 10s patticula-
bunal de Cuentas de la Naci6n (ver folios 59 vta. y 60 .&a. del mismo ex-
res para el fmnento d e nctioidade~ econdmicas pri~wdos de inter& pCblico,
pediente). Consecuentemente, aunque no alcance el aporte del Tesoro Na-
"Revista de Administracibn Phblica", lnstituto dc Estudios Polit~cos, Madrid,
cional a1 100 % del costa del contrato, pues aqui concurre con un 80 % ya
nV 82, eneio-abril, 1977).
que el 20 % restante lo obla la cooperadora escolar, lo cierto es que existen
fondos del Tesoro Nacional en juego con singular preponderancia sobre el Este fen6nxno de "participaciirn" de 10s administmdos en las funciones
total, por lo que no es irrazonable encuadrar la relaciirn incluso dentro de la Y actividades de la Administracibn Khlica requiere todavia una explicacibn
terminologia de la ley 13.064, sin perjuicia d e que, como se destacara, esta orghnica y sistemitica que la realidad legislativa y aun d o c h a r i a no ha
norma y su legislacitn complementaria, ley 12.910, est6n permanentemente explicitndo suficjentemente. De ello se trata.
invocadas en la documentaci6n contractual coma se seklara. L a asociaci6n cooperadora --aqui demandada- tiene entre 10s fines que
nacional en el negocio juridico -contrato de obra- que dio mo-
Contenciosoadministrativo, como "una asignaci6n de responsabili-
dades limitada a la elaboraci6n y curso del contrato". Asi, en tivo a las actuaciones, el que no puede ser considerado como un
el pronunciamiento de la Corte Suprema de Justicia d e la Nacit-n, tercero en dicha relaci6n. Antes bien, el Estado (Administracidn
confirmatorio de 10s anteriores, se destaca la presencia del Estado Phblica) incide en esa relacidn juridica ".. .por deIegaci6n d e

le marca su estatuto cubrir, en la medida de sus recursos, las necesidades de


/ cales aptos pertenecientes a1 dominio pbhlico del Estado para su normal y
la escuela, dotindola de 10s elementos que permitan hacer mis eficaz el des- mejor desenvolvimienta es, sin lugar a dudas, sin psibilidad d e confusi6n.
arrollo d e la enseiianza. Todos 10s objetivos tienden a ese mejoramiento d e un cometido estatal tipico. No rige para el Tribunal en el tema el principia
la escuela. , de subsidisriedaa del Estado en esta materia. En el caso no se trata de un
A eUo deben unirse 10s prop6sitos y alcances d e las normas comentadas j instituto d e ensesanza privada a1 cual se esth subsidiando. Ef una escuela
j phblica, Y todas las mejoras que se realicen en su edificio se incorporan a
del Fondo Escolar Permanente, que atribuyen a1 Ministerio d e Cultura Y ese bien phblico, no queda para la asociaci6n cooperadora ni para ninguno
Educacih y sus organismos descentralizados el ejercicio de 10s derechos Y de sus miembras o socios. Pretender lo contrario es ratificar un enriqueci-
atribuciones que consagra la ley 13.064 y legislacih correlativa, con el ob- miento del Estado en desmedro d e esos particulares que bnicamente han de-
jeto, entre otros, d e construir, ampliar, conservar y / o remcdelar las escuelas cidido colnborar con 41, ayudindolo a gestionar un cometida que es propio
mediante convenios a consorcios con cooperadoras con participacidn directa del Estado y no de la cooperadora escolar.
de 10s cuerpos intermedias gubemamentales o privados.
. . .20) Pam el Tribunal existe entonces una verdadera delegacibn, que en
Es decir, que el Estado acepta que colaboren con 61, en el cumplimiento lugar de darse dentro d e la organizaci6n administrativa, escapa d e &a y se
de actividades que le son propias especificas, personas privadas. en una estructura ajenn, desvinculada de dicha orqanizaci6n. A1 de-
Se trata en la especie, de aprovechar las aspiraciones de esas entidades clr d e Barra, si bien no refirikndase a este tema concretamente, se esti en
privadas para, utilizando sus estructuras, que le apoyen en una tarea o co- presencia d e una autorestibn administrativa que opera a trav& d e una de-
metida claramente estatal. Iryci6n trmsesMctura1 (conK Bar~a.R d o l f o C , RCndpkx de denrho d
Asi estas entidades se cncargan de toda la documentacinn tbcnica in- i minivtrotioo, p. 247).
dispensable de la abra (planos, proyectos, presupuestos, estimacibn de costos ! En el caso se ha efectuado un traspaso de un deber funcional de la Ad-
totales, etc.), ponen 10s profesionales que dirigirin y fiscalizarin la obra Y j ministraci6n a una entidad privada, per0 que es propio del Estado y perte- '
otras obligaciones que posibiliten la construcci6n, mejora o ampliaci6n de que : nece a st* conjunto d e atribuciones (campetencia). Asi se explica que la
se trate. El Estado se libern de toda esta complicaci6n, su aparato bilrxri- asociacibn cooperadora, ente d e derecho p~ivado,pueda ejercer 10s derechos
tico no es distraido en el problema y d e esa manera se canaliza ese afin
participative que la entidad privada time con relaci6n a su objeto esencial:
la escuela.
i y atribuciones d e la ley 13.064 que se le otorgara por las normas del Fondo
Escalar Permanente a1 Ministerio de Cultura y Educacidn y sus organismos
I descentralizados.
Es decir que la ejecuci6n d e un cometido administrativo tipico se tras- Las mismas normas tamhien autorizaban que tales atribuciones pudie-
pasa a una asociacihn que por su propia naturaleza q u i e ~ ecolaborar en la ran delegarse por convenio o consorcio a atras entidades (en el caso, coope-
gestidn d e esa funcidn administrativa. radoras o cooperativas escolares, cuerpos intermedios en la terminologia d e
E n la
.~
~~~~
medida oue la asociaci6n coooeradora asume esa realizacibn, es
~
A
la lev 17.764.
claro que su accionar se aleja de la 6rbita privada para adentrarse en la pb- Tan e? asi que la competencia es del Estado, que la Direccihn de Ar-
blica, con tcdos 10s matices que la aproximaci6n d e las dos 6rbitas produce. quitectura Educacional del Ministerio citado observb el proyecto, plante6 sus
.. .
No es que cambie la naturaleza juridica de la personalidad de la enti- pautas, resew6 para si la supervisibn, inspecci6n y contralor tanto en 10s as-
dad, sino que la -ma realiza una actividad bivalente, la que le es propia pectos tCcnicos como administrativos (ver punta 4 . 3 . de las Normas Com-
y la que asume en s u afin d e colaborar con la Administracibn en el cum- plementarias y d e interpretacibn del Rhgimen de Convenios a1 folio 162 d e
plimiento de fines que en definitiva les son comunes. &to acarrea una du- la carpeta de prueba documental actora).
p h i d a d de regimen juridico, o mejor dicho, en la aplicacih d e un regimen Es mds, como no podia ser d e otra manera, y como se seiialara, no s e
de derecho p6blico a ciertas relaciones juridicas que van a vincular a la en- recurriria ni a la titularidad del bien inmueble ni a su aeber o cometldo
tidad con terceros, y a la asociaci6n con la Administracibn. funcional (administrativo), ya que d e acuerdo con el punto 11 d e las normas
En concreto, la Administracibn Pbblica transfiere el ejercicio del come- anexas a1 articulo 29 del decreto 5633/67, en caso de que las obras no s e
tido en favor del ente ~ r i v a d o(en el caso, el d e ampliar la escuela), per0 pudieran continuar o se suspendieran por un lapso mayor de 30 dias, la Di-
no puede aceptsrse que estC renunciando a la titularidad del mismo. recci6n de Arquitectura Educacional dehe tomar inmedlata posesiiin de 10s
Asegurar el servicio de la ensehnza ~ h b l i c aprimaria, dotAndola de lo- trabaios Y de tndos las bienes y elementos existentes en las obras v las sumas
CONTRATO DE. OBRA PÚBLICA EI..EMENI'OS DEL CONTRATO DE OBRA PlrBLICA. 149
148
facultades a través de las entidades intermedias, correspondiendo investigaci6n realizada sobre los aspectos sustanciales del verda-
su responsabilidad por la forma de, financiar l~ obra, J?"r su des- dero negocio jurídico;. que no se agota en el contrato de obra ce~
tino y por el contralor que ejercena de los bIenes, aSl como por lebrado entre la "entidad intermedia" (delegado) y la empresa
las atribuciones que poseia ... » constructora. En esa relaci6n se refleja el papel de la Adminis-
Necesariamente, en los tres fallos analizados se destaca la

de dinero no invertirlas, pudiendo iniciar las ac-GÍones legales que oorrespondan


I ~~-;~-r-e-n-d-e,
I
el actor ha demandado bien al Estado Nacional, ya que de
acuerdo con los razOnamientos desarrollados aparece como el verdadero comi-
(Ia bastardilla es del Tribunal). Es decir, se reton:m. como en toda deb~a~ tente en la relación ~oJ1tTaclua]. Y si bien también ha traído a juicio a la
ción la competencia que e,,> propia del delegante. Umcamente se pueden m· asociación cooperadora su proceder no puede sel' observado, ya,que la ambi~
terponer acciones legales en el orden nadonal ~'i se es titular ~e un d~recbo güed.ad e imprecisión de la documentaCión contractual, y la singularidad de
-subjetivo. En consecuencia, no puede haber muchas dudas sobre qUIén es la relación entre la Administración y la entidad intermedia pudo llevarlo a.
entender que su citación a juicio era necesarja.
el verdadero titular de la relación contractuaL
Asimismo como puede pensarse que se está en presencia de una mera En consecuencia. debe rechazarse la falta ,de acción interpuesta pQr el
locación de obra del derecho privado, si por ley el admimstrador del Fondo Estado Nacional Debe acogerse la falta de legitimación pasiva impetrada
Escolar Permanente anualmente debe determinar las prioridades a qu~ se por ]a Asociación Cooperadora Escolar "Nuestros Niños" de la Escuela nI? 14
;aplicarán los reúurSos, conforme con las que resulten de un planeam1ento del Distrito Escolar n9 15 "Vicente G Gallo", con costas en el orden causado
orgánico de las construcciones escolares, debiendo elevar el proyecto al Po- atento lo explicitado en el párrafo precedente. Juan Octavio Gauna, juez.
der Ejecutivo para su consideración e inclusi.ón en el Pl~l de o:r~s ~ Tra- federal' ,
bajos Públicos \ Jo. bastardilla pertenece al Tnbunal) (con!, art. 4 t.n fme de
Sentwcia de la Sala IfI~ CámMa Federa~ de Apelaciones
la ley 16.727). I d'
Consecuentemente se ha operado una delegación, obs.érvese que a 15- en lo Contenciosoadministrativo
posición of} 44/72 de la Dirección Nacionnl de Arquitectura Educacio~al
(folio 59 del exp. administrativo n 9 2729, agregado al nO 16,972) autonza En Buenos Aires, a 21 de mayo de míl novecíentos ochenta y uno reu-
la ejecución de las obras encomendándola a la entidad intermedia al efecto, nidos en acuerdo los señores jueces de la Cámara Nacional de Apela~iones
Encomienda la ejecución, aporta fondos del Tesoro Nacional ~ ~? 80 % del en lo Contenciosoadministrativo Federa!, Sala lII, para resolver sobre los
monto total del presupuesto de obra. aceptando que la aSOClo.oon coopera~ reéUrsos interpuestQS .a fs, 2.96 y 297 contra la sentencia de fs. 211/29-3 en
dora concurra a la atención de las obl"as con un 20 'Yo. autos "Schirato, Gino e/Estado Nacional (Ministerío de Cultura y EducaCión)
La Administración ha obviado, mediante la delegación por convenio con y Cooperadora Escolar de la Escuela ni,) 14. Distrito EscoJar n9 15~'. y plan-
la. "entidad intermedia". una serie de res~onsabilidade~: com~ pr.~para.r la teado al efecto como tema por decidir si se ajusta a derecho el pronuncia-
documentación contractual, llamar a licitacion, etc. La comurudnd ~ en sen- miento recurrido, el doctor Senestrari dice:
tido lato específicamente los socios de la Asociación Cooperadora Escolar de 19 ) Que el señor joez a que hizo lugar. con costas por su orden. a la
la Escuei::t n Q 14 la. ayudan en la medida de sus posihili~ades con un~ ."su~a falta de )egitimacíón pasiva opuesta por la Asociación Cooperadora de la
de dinero'~. Las obras quedan para el delegante; el bIen del ~olInntO pu~ E.-muela n" 14, Distrito Escolar nl! J 5, codemandada eñ autos rechazó la falta
bUco de] ¡,:Stado se ha acrecentado en sus posibilidades "f~síca~'! todo con de acción planteada por el Estado Nacional y. haciendo ln~arl con costas, a
el fin de mejorar el servicio público de enseñanza pTÍmaria públIca. la demanda, dispuso que este último abonase al actor -como contratista de
Frente a todo ello no puede el Estado (posición que ha adoptado en una obra para modificar y ampliar el edificio de la citada escuela- el im~
el litigiO) pretender ser ajeno a todo el tema de la relación contra.ctual y s~ porte de distintos certificados de obra, mayores costos, diferenc'ias de mayo-
implicancias litigiosas traspasándole la responsabilidad a las sufnoos asOCIa- res costos, el fondo de reparo descontando de certificados de mayores costos
ciones cooperadoras escolares. Ello aparece como un abuso que no se corrJ« y de obra y el monto de un certificado adicional. Aparte de ello ordenó
"padece con ]a íusticía y equidad con que debió encararse el problema en también el magistrado el resarcimiento del lucro ceSante y el retr:tegro al
sede .administrativa y debe el Tribnnal ha}, juzgarlo, actor de tres pagarés subscritos en garantía del 5 % del contrato, Todo
Puestas en elaro las oscuridades que impedian abordar la identiflcaci6n lo cual. a raíz de haber declarado c1 juzgador que desulta arbitrarla la resCÍ~
del comitente y su respol1sabilídad, no cabe duda que Schirato en su con- SIDn de la antedicha obra por parte de la. ya citada cooperadora escolar
dición de contratista 00 puede estar sometido en su relación con el delegado a instancias de la Dirección Nacional de Arquitectura Educacional del M1:
(cooperadora) a un régimen juridico distinto del qne mantendría con el de- nisterio de Cultura y Educación.
legante (Estado) -leyes 13.064 y 12,91ú-- de no haberse operado la delega- 2Q} Que la mentada cooperadora escolar recuITió por haberse impuesto-
ción (convenio). costas pOr su orden al admitirse )a fa.Ita de legitimación pasiva que opuso, en
facultades a trav&s de ]as entidades intermedias, corres~ondiendo investigaci6n realizada sobre 10s aspectos sustanciales del verda.
su responsabilidad por la forrna de financiar la obra, Par su des- dero negocio juridico, que no se agota en el contrato de obra ce-
tino el contralor que ejerceria de 10s bienes, asi corn0 Po1 lebrado entre la "entidad intermedia" (delegado) la
las atribuciones que poseia. .." constructors. En esa relaci6n se refleja el papel de la ~ d ~ i
~ ~ ~ ~ ~ en 10s
~ tres
, . fallos
i ~analizados t ~ la,
~ ~ se~ destaca i f
Par ende, el actor ha demandado bien a1 Estado Nacional, ya que d e
de dinero no invertidas, p d i e n d o iniciar las acciones legales qtze cwrespondon acuerdo con 10s razonamientos desarrollados aparece camo el verdadero comi-
(la bastardilla es del Tribunal). Es decir, se retoma coma en toda del5ga- tente en la relacinn contractual, y si bien tamhiCn ha traido a juicio. a la
ci6n la competencia que es propia del delegante. Onicamente se pueden in- asociacidn cooperadora su proceder no puede ser observado, ya que la ambi-
terponer acciones legales en el orden nacional si se es titular de un derecho giiedad e imprecisi6n d e la documentaci6n contractual, y la singularidad de
subjetivo. En consecuencia, no p e d e haber muchas dudas sobre qui6n es la relaci6n entre la Administraci6n y la entidad intermedia pudo llevarlo a
el verdadero titular d e la relaci6n contractual. entender que su citaci6n a juicio era necesaria.
Asimismo, como puede pensarse que se esti en presencia de una mera En consecuencia, debe rechazarse la falta d e acci6n interpuesta por el
locaci6n de obra del derecho ~ i i v a d o ,si por ley el administrador del Fondo Estado Nacional. Debe acogerse la falta de legitimaci6n pasiva impetrada
Escolar Permanente anwlmente debe determinar las prioridades a que se par la Asaciaci6n Cooperadora Escolar "Nuestros Ni5os" d e la Escuela nQ 1 4
splicarin 10s recursos, canforrne con las que resulten d e un planeamiento del Distrito Escolar nQ 15 "Vicente C. Gallo", con costas en el orden causada
arginico d e las construcciones escolares, debiendo elevar el proyecto a1 Po- atento lo explicitado en el pirrafo precedente. Juan Octavio Gauna, juez
der Ejecutivo para su consideraci6n e inclusi6n en el Plan d e Obras y Tra- federal
taios Priblicos ( l a bastardilla pertenece a1 Tribunal) (conk. art. 4V in fine d e
la 'ley 16.727). ' Sentencia de la Sala III, C h a m FederoZ de AlpeIaciones
Cansecuentemente se ha operado una delegacibn, obsbrvese que la dis- en lo Contenciosoadministratitio
posici6n n U 4 / 7 2 d e la Direcci6n Naciannl de Arquitectura Educacional
(folio 59 del exp. administrative nQ 2729, agregado a1 nV 16.972) autoriza En Buenos Aires, a 21 de mayo de mil novecientos ochenta y uno, reu-
la ejecuci6n de las obras encornendindola a la entidad intermedia al efecto. nidos en acuerdo 10s seiiores iueces d e la Cimara Nacional de Apelacions
Encomienda la ejecuci6n, aporta fondos del Tesaro Nacional en un 80 % del en lo Contenciosondministrativo Federal, Sala 111, para resolver sohre 10s
~ ~
- .
monto total del Dresu~uesto de obra, aceptando que la asociaci6n coopera- recursos interpuestos a fs. 296 y 297 contra la sentencia de fs. 271/293 en
dora concurra a la atenci6n d e h s obras con un 20 %. autos "Schirato, Gino c/Estado Nacional (Ministerio d e Cultura y Educacibn)
La Administraci6n 11s. ohviado, mediante la delegaci6n por convenio con y Cooperadora Escalar d e la Escuela no 14, Distrito Escolar nQ IS", y plan-
la "entidad intermedia", una serie de re~~onsabilidades,como preparar la teado a1 efecto c o r n tema par decidir si se ajusta a derecho el pronuncia-
docurnentaci6n contractual, llamar a licitacibn, etc. La "comunidaC en sen- miento recurrido, el doctor Senestrari dice:
tido lato, e ~ ~ e c i f i c a m ~ n10s
t e socios de la Asaciacibn Cooperadora Escolar de 1" Que el se6or juez a que bizo lugar, con costas par su orden, a la
la Escueln n9 14 la ayudan en la medida de sus posibilidades con una "suma falta d e legitimaci6n ppasiva opuesta por la Asociaci6n Cooperadora d e la
d e dinero". Las obras quedan para el delegante; el bien del dominio pii- Escuela n' 14, Distrito Escolar no 15, codemandada en autos, 1ecbaz6 la falta
blico del Estado se ha acrecentado en sus posihilidades "fisicas", t d o con de acci6n planteada por el Estado Nacional y, haciendo lugar, con costas, a
el fin de mejorar el servicio piiblico de ensefianza primaria p6blica. la demanda, dispuso que este Gltimo abonase a1 ador --carno contratista d e
Frente a t d o ello no ~ u e d eel Estndo (~osici6nque ha adoptado en una obra para modificar y ampliar el edificio d e la citada escuela- el im-
el litigio) pretender ser ajeno a todo el tema de la relaci6n contractual Y sus porte d e distintos certificados d e obra, mayores costos, diferencias de mayo-
implicancias litigiosas traspasindole la re~~onsabilidada las sufridas asocia- res costos, el fondo de reparo descontando de certificados d e mayores costos
cianes cooperadoras escolares. Ello aparece como un abuso que no se com- Y de obra y el monto d e un certificado adicional. Aparte de ello, orden6
pndece can la justicia y equidad can que debi6 encararse el problema en tambibn el magistrado el resarcimiento del lucro cesante y el reintegro a1
sede administrativa y debe el Tribunal hay iuzgarlo. actor d e tres pagarCs subscritos en garantia del 5 % del contrato. Todo
Puestas en claro las oscuridades que impedian abardar la identilicacidn lo cual, a raiz de haber declarado el jmgador que desulta arbitraria la resci-
del camitente y su responsabilidad, no cabe duda que Schirato en su con- si6n de la antedicha obra por parte d e la ya citada caoperadora escolar,
dici6n de contratista no puede estar sametido en su relaci6n con el delegado a instancias de la Direcci6n Nacional d e Arquitectura Educacional del Mi-
(cooperadora) a un regimen julidico distinto del que mantendria con el de- nisterio de Cultura y Educaci6n.
legante (Estado) -]eyes 13.064 y 12.910- de no haberse operado la delega- 29) Que la mentada cooperadora escolar recurrib par haberse irnpuesto
ci6n (convenio) costas par su orden a1 admitirse la falta d e legitimacibn pasiva que opuso, en
152 CONTRATO
DE OBRA P ~ B L I C A

modificaci6n y variaci6n de la obra, resemadas par la Adminis- tuida por dos sujetos privados, uno de ellos actlia como delegado
traci6n; por su actuaci6n en todo lo tocante a la certificacibn y de la Administracibn Pbblica, ejecutando cometidos pliblicos que
recepci6n de 10s trabajos, etcktera. conforman el contenido de dicha delegaci6n. La relaci6n ser&
En consecuencia, si bien la relaci6n juridica aparece consti- entonces de derecho publico (contrato de obra pbblica) y por

dependencia, visto aquel convenio autoriz6 "ad referhndum de la Superiori-


renunciado a ser su titular, lo que se conobora por la circunstancia de haber
dad': la construcci6n en la Escuela 14, Distrita Escalar 15, de esta Cap~tal,
la Direcci6n d e Arqnitectura Educacional mantenido para si la facultad de
de ocho aulas en dos plantas, dos patios cubiertos de 100 metros cuadradas
supervisar, inspeccionar y controlar 10s aspectos tecnicos y administrativos
cada uno, instalacicnes sanitarias para docentes y alumnos, las colrespondien-
d e la obra y porque eventualmente est6 capacitada para iniciar las acciones
tes comunicaciones verticales, la remodelaciin del comedor y el reacondicio-
judiciales corres~ondientes, lo que importa reasurnir en ese supuesto la com-
petencia antes delegada; n ) que el administrador del Fondo Escolar Perma- namiento de todas las instalaciones sanitarias que ya existian. En la misma
oportunidad se aprobd el anteproyecto de obra y se estableci6 el aporte del
uente es quien establece las prioridades en el empleo d e 10s recursas, por
media de un proyecto que el Poder Ejecutiva utiliza para concretar el Plan Estado Nacional. Lo a d dispuesto se ratific6 a fs. 6 3 (mismo agregado) por
el Ministexio de Cultura y Educaci6n en su cardcter d e administrador del
d e Obras y Trabajas Xblicos (art. 49, in fine, ley 16.727); 6 ) que no se
compadece con la justicia y q u i d a d que el Estado ~ r e t e n d aser ajeno a la "Fondo Escolar Permanente" (ley 16.727).
relaci6n contractual antedicha, creada en su beneficio, y que pretenda hacer A fs. 417 de la "carpeta 1238" (adjunta a1 citado expte. 16.972) obra
recaer la responsabilidad sobre las cooperadoras escolares. el "contrato adrninistrativa de abra p6blica" que la cooperadora escolar -co-
demandada- y el actor convinieron en celebrar (el 2 d e junio de 1973), una
40) Que en el mismo aspecto, en sus agravios aduce el representante
estatal: 1) que no cabe incluir el contrato d e autos en el sistema de la ley de cuyas cliusulas (la 3a) remite a1 sistema d e ajustes de la ley 12.910, en
13.064 por cuanto su art. 19 exceptGa 10s celebrados con subsidios, a cuyo tanta que en otra (7*) se prevC que la inspeccibn por 10s directares de obra,
efecto se6ala que esa caracteristica enhibe el convenio con la asociaci6n coope- lo seria sin perjuicio d e l a ejercida por 10s agentes d e la Direcci6n Nacianal
radora; 2 ) que el contrato administrative requiere como condici6n ineludible d e Arquitectura Educacional, "aceptando el contratista su jurisdicci6n asi
la participaci6n directa del Estado o d e una persona juridica estatal; 3) que coma 10s servicios de la rnisma".
la delegaci6n d e aquCl necesita ser expresa para resultar vilida, es decir, 69) Que la ley 16.727, modificada por la 17.764, previ6 en su art. 29
que medie ley que la autorice y determine sus alcances (con. art. 30, ley que 10s crkditos del "Fondo Escolar Permanente", creado por su a r t 10, se
19.549); 4 ) que la licitati6n no habria existido en el caso sino en apariencia, aplicarian a ". . . f ) Obris y trabajos que se reaiicen, mediante convenios a
ya que la cooperadora contratante eligi6 discrecionalmente a la empresa Schi- consorcios, con participacibn directa de 10s cuerpos intermedios, sean guber-
rato; 5 ) que el Estado no tuvo en ese contrato mis intervenci6n que la ele- namentales a privados". A su vez, el decreto 5633/77 estableci6 en las nor-~
mental que no ~ u d odeclinar en resguardo d e su ~atrimonioy del control mas anexas a su art. 29, que las entidades intermedias (gobiernos provinciales
del presupuesto; 6 ) que el hecho d e haberse remitido el contrato de marras y municipales, reparticiones de ambos, asociaciones cooperadoras o coopera-.
a determinadas aspectas d e la ley 15.064 no lo convierte en un contrato d e tivas escolares) formularian toda la documentaci6n tkcnica de la obra par
obra pi-blica can fuerza vinculante para quien no lo subscribi6; 7 ) que el realizar, con menci6n -presando su valor- de 10s materiales, mano d e obra
Estado suele realizar trabajos c o r n 10s que motivan estos awtos en forma e inmuebles con que se conhibuyese, y acompaiiando acta de donaci6n de 10s
directa a indirecta, pero sin necesidad d e recurrir a cooperadoras', por lo bienes aportados y compromiso de subscribir en sn caso, la correspondiente-
cual, cuanda contratan estas hltimas, no comprometen la responsabilidad de escritura (punto 7O de dichas normas anexas). Mensualmente a en las eta-
aquC1. pas que se determinasen, ias entidades intermedias deberian rendir cuenta
5') Que a fs. 57 d e las actuaciones nO 2729 (agegadas a las no 16.972, documentada d e su gestibn, aparte de la cuenta final treinta dfas despuds de
tambikn ppor cuerda) obra el "convenio d e colaboraci6n" subscrito por la concluida la obra (idem, punto 40). La direcci6n de Csta se estableci6 co-
cooperadora demandada en autos y que el 1 4 9e abril d e 1971 acept6 la rresponder a cada establecimiento, sin perjuicio d e la intervencibn ministerial
Direcci6n Nacional d e Arquitectura Cducacional del Ministerio de Cultura y par medio de la Direcci6n General d e Arquitectura y Trabajos P6blicos o d e
Educaci6n (lac. cit., in fine). En dicho acto, que se encuadr6 en las leyes quien eUa designase (id., punto 69). La responsabilidad por la fiscalizaci6n.
16.727 y 17.764 y en el decreto 5633167, mediante expresa referencia a ellos, y correcta aplicaci6n d e 10s aportes estatales y d e 10s particulares incumbe
la cooperadora -"entidad intermedia" adhirib al rCgimen d e convenios a a la Direcci6n d e cada establecimiento educativo y a 10s "representantes d e
que se refieren 10s arts. 19 y 29 del decreto citaao y acept6 colaborar en las entidades no oficiales" (id., punto 99). Si por causas no imputables a la
trabajos y obras con arregla a sus posibilidades y con sujeci6n a alas normas Secretaria d e Cultura y Educaci6n ni a su Direcci6n General de Arquitec-~
anexas al citado art. 20. A fs. 59/60 de las mismas actuaciones la antedicha turn y Trabajos Pi-blicos las obras no se pudieran continuar o se suspendiesen
154 CONTRt\.TO DE aERA PÚBLICA ELEMENTOS DEL CONTRATO DE OBRA PÚBLICA 155
ello el Estado no podrá eludir su responsabilidad subyacente a te la participación de las agrupaciones de administrados más di-
,dicha relación jurídica y emergente de la misma. reotamente interesadas en ellas, utilizando generalinente las figu-
En el derecho positivo provincial se ha receptado esta mo- ras de la subvención o subsidio típicas del régimen de fomento,
dalidad para llevar a cabo la ejecución de obras públicas median- .aunque en la mayoría de los casos se establece la sujeción del

por un termino mayor de treinta días, dicho organismo tOlnarÍa inmediata I del nombre que las partes 1e hubiesen asignado; sino de su real contenido y
posesión de ellas y de todos sus bienes y elementos. así como de las sumas
.de dinero no invertidas, "pudiendo iniciar las acciones legales que correspon-
dan" (íd., punto 11).
I de los efectos qne Je resulten jurídicamente imputables, pero precisamente,
lo substancial del que en el caso se cuestiona -conforme a lo que antes se
señaló y al análisis hecho por el a quo-, conduce a admitir legitimatio ad
Cabe por último señalar que el punto 12 del mismo anexo al aft, 29 C(lusam pasiva que ei Estado dosconoce, máxime por estar previsto expresa~
del deCreto 5633/77 disponía que "Cuando las entidades no oficiales referi- mente que dentro de este tipo de contrato tiene la Admhúsuación legítimatlo
-das en e1 punto 1, no sean personas juridicas, los firmantes del convenio od caUS(lm activa (punto 11 de las normas aneXas al art, 29 del decreto
serán personalmente responsables de su cumplimiento", 5633/(7), lo qne da sustento normativo a la antedicha inferencia, toda vez
7°) Que tales nOrmas legales y reglamentarias configuran un sistema que ambos aspectos constituyen el anverso y reverso de lo que se presenta
muy especial de satisfacer las necesidades ediJicías del &tado en su acción 1. ·como necesario efecto del papcJ que juega el Estado en estos COntratos.
cultural, El autorizar que obras que se incorporan al dominio público o 11) Que de acuerdo con lo dicho. las nOrmas aplicables configuran un
qne de otra manera benefician a aquél, Se contraten por medio de asoclacio~ régimen que es expreso en cuanto se aparta del típico contrato administrati-
nes civiles cuyo patrimonio no las revela con una adecuada aptitud para ese VO~ al permitir que asociaciones privadas que sírven a intereses públicos
tipo de negocios jurídicos (confr, los estatutos de la codemandada: fs. 1 del (confr. fs. 116) puedan asumir en forma especial la gestión de eHos en be-
citado expte, 16.972), no puede entenderse sino como una a.."ignación de res- neficio directo del Estado en su acción cultura!, el que debe por consiguiente
ponsabilidades limitada a la elaboración y curso del contra.to, 10 que en el -estando a las duras y a las maduras-, asumir el riesgo de esa forma an6~
, caso de las cooperadoras escolares se justifica atendiendo a que constituyen mula de gestión en su provecho.
-pueden serlo- el instrumento más apto y expeditivo para verificar las ne- Por 10 hasta aquí expuesto se impone confirmar el fallo de primera ins~
cesidades del medio en que actúan y encnar su adecuada satisfacción. Ello, .tanda en cuanto desechó la defensa de fúlta de acci6n opuesta por el Es-
una vez superadas sus limitaciones patrimoniales, lo que precisamente cons- tado Nacíonal... Carlos Rooolfo Senestrari, Juez de Cámara; José Héctor
tituye el fin que jushfica el eJfc~pcional sistema que aquellas normas arbi- ':;'.1eehan, Juez de Cámara; Roberto M:ario Mordeglia, Juez de Cámara,
traron.
a'?) Que, sin embargo, llevar ese régimen hasta sus últimas aparentes
Sentencia de la Corte Suprema de JusticU¡. de la Nación.
consecuencias, importa contrariar dicho fín -en punto a unir la responsabi- Buenos Aires, 15 de abril de 1982.
lidad financiera del Estado con la capacidad de ge.$tión de las entidades in~ Vístos los autos: ~'Recurso de hecho deducido por la demandada en la
termedias- con el inadmisible resultado de liberar a aquél de sus responsa- ·causa Scrurato, Cino e/Estado Nacional (MjnísterÍO de (''u(tura y Educación)
bilidades en un ámbito propio de su actuar específico, admitido como está y Cooperativa Escolar de la Eseuela n Q 14 (Distrito Escolar n« 15)", para
por el recurrente en sus agravios, que trabajOS como el de autos los sueie '¿ecidir sobre su procedencia.
realizar su mandante por sí o por contrato, cuando los estima necesarios. CONSIDERI\NOO:
fW) Que tratándose de obras con fondos y destinos públicos. ejecutadas
19 ) Que contra el pronunciamiento de la Sala III de la Cámara Nacio-
con control administrativo y técnico estatales, la desViación del fin de la ley,
nal de Apelaciones en lo Contenciosoadminü,i:ratívo Federal, que al confirmar
por vía de desligarse su beneHciaTÍO de la responsabilidad que eventualmente
la sentencia de primera instancia hizo lugar a la demanda contra el Estado
acarreare su ejecución, importaría también, como premisa inadrrtisibJe" fj;m*
)..1acional por resarcimiento de los daños y perjuicios derivados de la resci~
buír al legislador haber urdido 1a consagración de verdaderos te.staferros. ya
sión ilegal de un contrato de obra pública y a la excepción de falta de le-
que no otra cosa constituirla asignar a las cooperadoras escolares -sufridas o gitimación pasiva planteada por la Asociación Cooperadora de la Escuela
no, pero sin la solveneia nec-esaria- una responsabilidad final que no esta- .0 9 14 del Distrito Escolar no? 15, aquél dedujo el recurso extraordinario cuyo
rían en condiciones de asumir pese a que puedan ser capaces de gestionar los rechazo origina esta presentación directa (fs. 324/30; 271/93; 3..'34/45; 346,
.'
respectivos contratos con una máxima dedicación y con menores gastos ad- de los autos principa]es agregados por cuerda y fs. 1/14).
ministrativos, aspecto éste que no es, por otra parte, el único ni el último
2,<» Que existe en autos cuestión bastante para su examen en la instaneia
,de los beneficios que al Estado reporta el actuar de aquéllas.
.del art, 14 de la ley 48, toda vez que se encuentran controvertidos e! alcance
10) Que es exacto que las consecuencias de un contrato no dependen y la inteligencia de normas de CArácter federal y la decisión es contraria al
contrato a1 rkgimen legal de la obra phblica, configur6ndose asi presente decreto-ley 10s estudios y proyectos, la ejecuci6n y sewi-
el instituto de la delegacibn transestructural. cios de: . .. b ) Las obras que ejecuteo 10s particulares subvencio-
Asi es el caso d e la ley 76 d e la provincia de Salta, que en nados por el gobierno provincial destinadas a un fin phblico o
su art. 10 establece: "Quedan incluidos dentro del rbgimen del a un servicio administrativo de la provincia o d e las municipali-
dades".
Tambikn la ley 6351 de la provincia d e Entre Rios, en su
derecho que en ellas funda el recurrente, por lo que corresponde declarar art. lo dice: "Se consideran obras phblicas y se someteran a las
procedente el recurso extraordinario.
-1 30) Que la apelante tacha d e arbitraria la sentencia que la condena a
responder por la rescisi6n del contrato, pues afirma que su vinculaci6n con el
dispsiciones de la presente ley.. . que realice la provincia por
intermedio d e . . . por concesiones a terceros o por entidades de
mismo se limit6 a la entrega del subsidio que le fuera solicitado y a1 posterior
t control d e la ejecucih de 10s trabajos, aspectos a 10s que no podia renunciar
en raz6n del resguarda que debia ejercer d e su patrimonio y del presupuesto j
nacional, sin que d e tales circunstancias correspondiera inferir, coma lo habia j d e 10s fandos que se les entregaran, para lo cual debian rendir mensualmente
hecho el a quo, que el contrato celebrado tuviera el cardcter de administra- j cuenta documentada de su gestidn, sin que aquello importara la desvincula-
tivo de obra piblica, toda vez que el Estado Nacional no palticip6 directa- ; ci6n del Estado, que se reservaba para si 10s derechos d e supervisibn, ins-
mente en su formaci6n ni se demostrh que hubiera existido de su parte de- peccihn y contralor tanto en el aspect0 tkcnico cuanto en el administrativo,
legaci6n d e competencia en 10s ttrminos que exigia el art. 39 d e la ley 19.549. I asi camo tambikn la posibilidad d e iniciar las acciones legals que correspon-
4') Que para faciliar el esclarecimiento del tema que se debate conviene i dieren cuanda, por causas que no le fueran imputables, se suspendieran o se
recordar la finalidad del ardenamiento juridic0 a~licablea1 caso, de donde j paralizaran 10s trabajos contratados (conf. normas anexas al art. 2 del decreto
se sigue que con el prop6~ito de dar soluci6n al deterioro sufrido por 10s ;i no 5633/67, puntos 9, 7, 4, 11, normas complementarias y d e interpretaci6n
1.3, 3 . 1 y 4.3).
edificios escolares, por ley 16.727 se "re6 en el imbito nacional el Fondo
Escolar Permanente, para cuya utilizaci6n se ide6 un sistema a1 que se ca- 7 9 Que, en el casa, se cumplieron con todas las etapas legales referidas,
racteriz6 camo novedoso a nuestra legislacibn, pues autorizaha a1 Ministerio . sin que 10s argumentos del recurrente alcancen a enervar 10s fundamentos
d e Cultura y Educaci6n, en cuya 6rbita se manejaria aquel fondo, a hacer i del fall" --que esta Corte comparte- que lo condujeron a travhs del anelisis

Ii
uso d e 10s derechos y atribuciones de la ley 13.064 y a requerir la cnlabora- de los hechos e interpretaci6n del contrato y las normas citadas a declarar
ci6n de las entidades intermedias yirblicas -pravincias y mnicipalidads- responsable a1 Estado Nacional por la rescisi6n ilegitima del vinculo contrac-
y ~ r i v a d a s-cooperadofas y cooperativas escolares- para lograr una admi- tual. Ello asi, p u e s l s i ~bien es cierto que el acuerdo se formaliz6 entre la
nistraci6n directa y igil, a fin d e subsanar las dificultades de la anterior nor-
Asociaci6n Cooperadora y el actor, no lo es menos que aqutlla ohr6 gestio-
mativa y lagrar el objetivo perseguido (conf. Diario de Sesiones d e la C i -
mara de Senadores, t . 111, aiio 1964, p. 1956, y art. 2e, ley citada). nando intereses ajenos, recayendo el objeto del convenio sobre la mejora de
un bien del dominio pirblico, posibilitada par el aporte emanado d e manera
50) Que no surge d e la letra ni del espiritu de las leyes 16.727 y 17.764, preponderante del Tesoro Nacional, con imputaci6n presupuestaria e inter- --A

y asimismo del decreto n0 5633/67 que las reglamentb, ni de las normas ane-
venci6n del Tribunal d e Cuentas.
xas, complementarias y de interpretacidn que a aquel efecto se dictaron, que
el Estado Nacional fuera, como pretende, un tercero en las relaciones con- 80) Que, en las condiciones serialadas, se advierte que por delegaci6n
tractuales que se farmalizarian; antes bien, resulta claro que actuaria por expresa emanada de las leyes que regularon la materia, la cooperadora esco-
delegaci6n d e facultades a travks de las entidades intennedias, conespondien- , lar asumi6 una gesti6n de conformidad con el especial sistema que se adopt6
d o su responsabilidad por la forma de financiar la obra, por su destino y : para ayudar a la accidn del Estado en uno de sus fines especificos, como lo
por el contralor que ejerceria de 10s bienes, a d cam0 por las atribuciones ! es el velar por la educaci6n primaria, sin que la responsabllidad que se le
que poseia, sin que aparezca como razonable extender la misma a dichas 1 atribuye erceda el marco de una razonable interpretacihn de las normas en
entidades en tkrminos que exceden 10s limites impuestos por las propias I juego, mdxime cuando la pretendida lesi6n aal derecbo de propiedad que in-
!
normas. i voca el apelante s610 derivaria d e la actuaci6n d e sus propios agents.
69) Que tal conclusi6n se impone, pues las asociaciones cooperadoras I Por ello, y habiendo dictaminado el Sefior Procurador General, se de-
que adhirieran a1 convenio de colaboraci6n se obligarian a realizar la fisca- clara procedente el recurso extraordinario y se confirma la sentencia en re-
j
lizaci6n duecta de 10s trabajos, a confeccionar la documentaci6n ttcnica in- ! curso. Con costas. Notifiquese, agrkguese la queja al principal y dewhl-
dispensable, a contratar 10s materials, la mano d e obra, mediante llamado ; vanse. Adolfo R. Gahrielli - Abelardo F. Rossi - Bias P. Guastavino - G -
a iicitaciones piblicas y privadas, a la vez que responderian frente a la Di- sat Black - Carlos A. Renom.
:recci6n General d e Arqnitectura y Trabajos Phhlicos d e la correcta aplicaci6n
bien phblico, cualquiera sea el origen de 10s fondos que se in- vencionadas a ejecutarlas por administracibn con control de la
viertan" 3a. Direccibn de Obras P l i b l i c a ~ " ~ ~ .
La ley 6021 de la provincia de Buenos Aires, dice e n su La ley 38 de la provincia de La Pampa tenia, en su art. 20,
art. lo: 'Todas las construcciones, trabajos, instalaciones y obras. una similar redaccibn que la misma norma de la ley formosefia.
en general que ejecute la provi~lciapor intermedio de sus repar- Sin embargo, por ley 809 se agreg6 el requisito de que tales "cons-
ticiones, por si o por medio de personas o entidades privadas, con trucciones o instalaciones deber6n ingresar a1 patrimonio provin-
fondos propios, de aportes nacionales, municipales o de particu- cial, excepcibn hecha con: a ) . ..las que se emplacen en inmue-
lares, se someter6n a las disposiciones d e la presente ley"37. bles pertenecientes . .. a cooperativas de servicios pIiblicos o bien
En okos sistemas legales, en cambio, se destaca m8s la fi- a entidades de bien phblico con personeria juridica".
gura del fomento, sin expreso sometimiento del contrato -cele- La ley nacional 13.064, por su parte, en el art. 3e coutempla
brado por el administrado beneficiario de la medida de fomento expresamente la posibilidad de que el Estado recurra a la figura
con el constructor- a 10s tkrminos de la legislacibn de obras p6- de la delegacibn transestructural para la ejecucibn de obras ph-
blicas, sin perjuicio, claro est6, del control ejercido por la Admi- blicas, estableciendo el sometimiento del contrato a lo regulado..
nistracibn concedente del beneficio. en la misma ley: "En caso d e que el Estado resuelva realizar obras
Tal es el caso de la ley 1864 de la provincia de Jujuy, q u e pliblicas por intermedio de personas o entidades no oficiales, pro-
establece en su art. 8'2: "Cuando la provincia acuerde subsidio o ceder6 conforme con lo establecido en la presente ley".
subvencibn para una obra, ksta quedar6 sometida en su construc- Cabe aclarar que la intencibn del legislador a1 redactar este-
cibn a la fiscalizacibn de la reparticibn tkcnica respectiva". E l articulo fue diferente a la indicada en el p6rrafo anterior. En
mismo texto se encuentra en el art. 6'2 de la ley 70 de la provincia realidad, lo que quiso el legislador fue seiialar que el Estado po-
de Formosa, si bien en sn art. 2? considera obra pliblica a aquella dia ejecutar el trabajo pliblico por si mismo, por el sistema deno-
que la provincia "garantice o subvencione". El art. 70 de esta ! minado "por administraci6nW, es decir sin contratar con ningIin
liltima ley establece: "Cuando la obra la ejecuta el subvencionado, i administrado en caIidad d e constructor o ejecutor del trabajo. En
Qste someter6 la aprobaeibn del contrato de construccibn a1 Poder i el caro que asi no lo hiciera, contratando con terceros, la ejecncihn
Ejecutivo, sin cuyo requisito no se pagar6 la subvencibn. EI de la obra quedaba sornetida a lo dispuesto en la misrna ley
pago de la subvencibn se ha16 en partes proporcionales a la obra
ejecntada d e acuerdo con el cor~trato,mediante la correspondiente
certificacibn formulada por la reparticibn respectiva. En caso q u e
la provincia se haga cargo de la ejecucibn de la obra subvcncio-
I
II
13.064 ",
Sin embargo, es necesario recordar que una cosa es la in-
tencibn del legislador y otra lo que la ley establece. Normalmen-
te 10s dos aspectos coinciden, pero d e no ser asi, cuando el texto
nada, con el compromiso d e un aporte del subvencionado, seri ne-
1 legal no admite otra interpretacibn y es claro en sus thminos,
t
cesario se deposite aqukl en la Tesoreria General antes de que se ! debe estarse a lo que el mismo precepta.
i
autorice la licitacibn. Podr6 autorizarse a Ias instituciones sub- i Ahora bien, el texto del art. 30 de la ley 13.064 se encuentra
i redactado de una manera que perfectamente permite otorgarle
36 Con una similar redaccibn, la ley 3744 d e la provincia de San Luis 1 ambos alcances (que no son contradictorios entre si): el Estado
(art. 1V); la ley 3734 d e k provincia d e San Juan (art. l o ) ; la ley 593 d e
la provincia d e Misiones (art. 1 0 ) ; ley 687 d e la p~ovincia d e Neuquin
(at. l V ) ; ley 3079 de la provincia de Corrientes (art. 19).
i puede contratar la ejecuci6n de las obras con terceros, y tambikn

37 Con una similar redaccibn, la ley 2555, d e la provincia del Chaco 3S TambiBn, con una redaccih similar, la ley 2092 d e la pravincia de-
(art. lo);la ley 5188, de la provincia de Santa Fe (art. l V ) ; la ley 95, de la Santiago del Estera, arts. 10, 4' y 59.
provincia de Tucumin (art. 1 9 ) . " 9 e r Mo, ob. cit., Rdgimen legal de las obros ptlblicns, ps. 70/71.
que el Estado puede delegar en terceros la "realizaci6n" d e la
obra, quienes, entonces, actuarin como comitentes de la misma
en el contrato de obra que celebrari con su ejecutor material o
constructor. En ambos casos, el contrato se encontrari regido por
la ley 13.064.

ELEMENTOS DEL CONTRATO


DE OBRA POBLICA
(Continnaci6n)

En principio podria afirmarse que el anilisis de la figura del


locador o constructor de la ohra no tiene la misma importancia
que el estudio detallado de la figura del locatario o comitente.
En efecto, es la naturaleza pliblica de este hltimo la que especifi-
ca a1 contrato como institituto del derecho administrativo, como
contrato de obra pLiblica en el caso. De todas formas, a la in-
versa, cabe destacar que en el constructor, a 10s efectos de indi-
vidualizar el contrato de obra priblica propiamente dicho, debe
exigirse la calidad opuesta: necesariamente tiene que revestir
el caricter de persona privada, ya que de lo contrario se estaria
j en presencia de un contrato interadministratiw d e obra priblica,
i con consecuencias importantes con respecto a la situaci6n juridica
de las partes en la relaci6n ius-administrativa.
i
i Sin perjuicio de ello, la figura del cocontratante de la ad-
ri: ministraci6n en un contrato de obra pliblica nfrece algunas carac-
teristicas que reqnieren nn anilisis mis particularizado.
E
i,
i.

La calidad de locador o constructor en un contrato de obra


phblica puede ser asurnida por toda persona fisica o juridica pri-
trativo, rnhs que como una condici6n emergente de la calidad del
vada que se encuentre obligada a realizar la obra encomendada constructor.
por la Administracibn a cambio de un precio en dinero, y que
En cuanto a la capacidad necesaria para ofertar y celebrar
reirna, ademhs de 10s requisitos generales de capacidad regidos
el contrato de obra pliblica, ksta deberi ser valorada con arreglo
por el derecho civil, 10s requisitos especiales erigidos por el de-
a las normas de derecho privado que Sean aplicables a ese efec-
recho administrativo para este t i p de contratacibn. i to3, pues en este sentido el derecho administrativo, como no po-
En nuestro derecho puede ser una persona fisica o juridica, i dia ser de otra manera, no establece reglas especiales para regular
sin necesidad (si bien en el segundo caso seri una situacibn na- la capacidad de Ias personas.
tural) de que organice su actividad en forma de empresa. Por supuesto, pueden ser sujetos cocontratantes de la Admi-
En otros regimenes juridicos, en cambio, esta 6ltima caracte- nistraciivn en un contrato de obra pliblica tanto personas nacio-
ristica tiene una importancia determinada para la calificacibn d e nales como extranjeras, si bien estas liltimas con 10s requisitos
la naturaleza jwidica del contrato. E n el derecho italianol, por que se establezcan seglin el procedimiento de seleccibn de con-
ejemplo, se distingue el contrato de trabajo subordinado (nues- tratista seguido para la formalizaci6n del contrato.
tro tipico contrato de trabajo) del contrato de trabajo autinomo, El tratamiento de la inversiivn extranjera esth regulado en la
en el que el deudor asume la obligacibn de cumplir con un de- ley 21.382, con las reformas introducidas por la ley 22.208. Esta
terminado resultado mediante el desarrollo de una actividad de norma cousidera inversor extranjero a "toda persona fisica o juri-
trabajo sin dependencia con respecto a1 acreedor. dica domiciliada fuera del territorio national, titular de urn i n ~ e r -
Este contrato de trabajo aut6nomo puede pertenecer a dos sidn de capital extraniero, y a las cmpresas locales d e capital ex-
categorias fundamentales, segiin que el deudor produzca el re- traniero.. ." (art. 2" ap. 2) que es '%da empresa domiciliada en
snltado mediante el prevalente desarrollo de su propia energia el territorio de la Reptiblica, en la cual pzrsonas fisicas o juridi-
de trabajo o bien mediante la organizaciivn y direccibn del trabajo cas domiciliadas fuera de 61 sean propietarias directa o indirecta-
de otros, es decir mediante una organizacibn empresaria. El pri- mente de mds del 49 % del capital o cuenten directa o indirecta-
mer caso se trata del contrato de obra, mientras el segundo es el mente con la cantidad d e uotos necesorios para pretialecer en las
contrato de uppalto, que existe cuando "una parte asume, con asambleas de accionistas o reuniones d e socios" (art. 29, ap. 3 ) .
organizzazione dei mezzi necessari e gestione a proprio rischio, En sentido estricto, la inversibn de capital extranjero a 10s
il compimento di un opera o di un servizio verso un corrispettivo efectos de la ejecucibn de contratos de obra no se encuentra
in danaro", como lo establece el art. 1655 del Cbdigo Civil italia- comprendida por el r6gimen de la ley 21.382,, rigikndose por 10s
no. En el appaltatore no se reguiere, entonces, la actividad per- tbrmiaos de su propio contrato. Sin embargo, conforme lo auto-
sonal ni por ende ninguna calidad profesionalz, s610 se exige riza el art. 18 de la ley citada, el inversionista (que a la vez puede
su carhcter de organizaciivn empresarial. ser ejecutor de la obra) puede optar por someterse a1 regimen
En nuestro derecbo el concept0 de contrato de obra pfiblica de dicha ley, en orden a gozar de sus especiales garantias referi-
engloba las dos figuras del contrato de obra y contrato de appzlto, das a la repatriacibn del capital y beneficios, con lo cual deberh
con importantes limitaciones en cuanto a la asuncibn del liesgo inscribir su inversibn en el registro creado para tal fin. En este
por parte del constructor (que en el derecho italiano esG, en rea- caso, tal inversibn requerirh la previa aprobacibn del Poder Eje-
lidad, tambibn muy Iimitado), p r o esto dltimo como comeruen-
cia del regimen juridic0 exorbitante propio del derecho adminis- 3 ESCOIR, ..
ob. cit., T ~ d a d ointegrd. . t. I, p. 309, Cianflone, ob. cit.,
P. 220. La "Ley de Bases de Contratos del Estada': en Espafia, establece
~ r e pubbliche, Dott. A. Giufre Editore,
I cjanflone, A,, ~ h ~ p o dli t V
en su art. 99 que "Estin facultados para contratar con la Administracibn las
personas natutales y juridicas, espaiiolas o extraojeras que, teniendo plena
Milin, 1981, ps. 3/6. capacidad de obrar.. .".
2 Ibid, p. 31.
cutivo nacional, si de acuerdo con lo establecido en el art. 40 se nes deseen contratar con la Administracibn pdblica son de orden
efectha, entre otras razones, en 10s siguientes sectores: defensa y penal, econbmico, discipliuario y Atico 4 .
seguridad nacional; prestaci6n de servicios p6blicos postales, de En este sentido, a titulo de ejemplo, cabe citarse el art. 26
electricidad, gas y telecomunicaciones; radioemisoras y otros me- de la ley de Obras Piiblicas de la provincia de Mendoza, 4416,
dios de comunicacibn; energia; educacibn, siempre que (estimo que establece una inhabilitaci6n para ofertar en el procedimiento
es la interpretacibn correcta) se trate de nn contrato de conce- de seleccibn del futuro contratista de obza piblica, relativa a
si6n de obra piiblica (ver infra, Cap. VI), ya que de lo contrario aquellas personas fisicas o juridicas ". . .cuanclo alguno de sus
el caricter meramente esprhdico y accidental d e la inversibn, dependientes, apoderados, profesionales, socios o miembros de sus
suponiendo que ksta se lirnita a1 capital de trabajo para la simple brganos directivos sean funcionarios o tkcnicos que hayan inter-
ejecucibn de la obra, torna innecesario el resguardo de la previa venido en la preparacibn de 10s pliegos o llanlado a la licitaci6n
autorizacibn por el Poder Ejecutivo. de que se trate, o que tengan entre sus funciones la facultad d e
decidir en cualquier instancia las cuestiones que puedan surgir
de la presentacibn de las propuestas hasta la ndjudicacibn final.
Lo mismo ocurriri cuando parientes hasta el segundo grado d e
ronranguinidad o afinidad de dicbos funcionarios o tbcnicos sean
proponentes, miembros de 10s drganos directivos de Bstos, desem-
Como se dijo en pirrafos anteriores, para poder asumir la pefien funciones ejecntivas para ellos, o tengan participaci6n en
calidad de contratante de la Administracibn, en particular en un 10s resultados de la obra citada. En 10s casos en que se trate de
contrato de obra p6blica, ademis de 10s requisitos generales de obras llamadas a licitaci6n durante la gestibn de 10s funciofiarios
capacidad para obrar, el sujeto contratante debe reunir requisi- o tkcnicos, la prohibici6n se extender& basta un a60 despues de gue
tos especiales, aunque no referidos a su capacidad, regulados por kstos hayan cesado en sus funciones . . . Tampoco serin conside-
la legislacibn administrativa. radas las propuest~sde personas fisicas o juridicas cuando aque-
Estos requisitos han sido estudiados, por lo general, forman- 110s que tengan algunz de 12s vinculaciones citadas en el primer
do parte de las condiciones que deben reunir 10s oferentes que perrafo de este articulo Sean legisladores, gobemador, mini-? d L 0s 0
concurren a un procedimiento de seleccibn de contratistas. Sin subsecretarios, respecto del imbito del gobiemo provincial. o con-
embargo, ante las dudas doctrinarias acerca d e la obligatoriedad cejales, iuteudentes o secretaries respecto de la municipalidad de
de la Administracibn (centralizada o desceutralizada) de contra- que se trate".
tar previo procedimiento de seleccibn, creo importante destacar En el orden nacional no existe legislaci6n general sobre la
estos requisitos como exigibles en cualquier caso, aun en el su- materia, por Io que habri que remiiirse a las regulaciones esta-
puesto del contrato por libre eleccibn, sin perjuicio de 'que para blecidas en 10s pliegos que rij211 cada uno de lcs procediiliieritos
cada contrataci6n en particular y en cada tip0 de procedimiento de selecci6n en concreto. Para las contratacioncs de suministro
existan requisitos especiales regulados por las nomas respectivas. de rnateriales o servicios destinados a obras piiblicas nacinoales,
Estos requisitos especiales esthn establecidos en las distintas en cambio, seri de aplicaci6n supletoria lo establecido en el
legislaciones para regimenes nacional, provinciales y mnnicipales Reglamento de Contrataciones del Estado, regulado por el Zeire-
de obras piiblicas, t a m b i b en las normas que regulan la inscrip to 5720/72, conforme lo dispone el art. 39 de esta reglamentacibn.
ci6n en 10s distintos registros de contratistas, y en general ofre- En su inciso 4?, reglameztario del art. 61 de la ley de con-
cen gran semejanza entre si.
Las calidades para participar en 10s procedimientos de se- Fiorini, B. A., y Matz, I., Licitacidn &blica, Abeledo-Perrat, Buenos
leccibn, y por consiguiente 10s requisitos que deben cumplir quie- Aires, 1972, p. 91.
Por razones de orden administrativo se suele excluir a 10s
tabilidad, el Reglamento de Contrataciones del Estado establece culpables por la rescisi6n de contratos administrativos, en algGn
quc no podrin iuscribirse en el Registro de Proveedores del caso a 10s oferentes que se han retirado mis de dos veces de la
Estado: concnrrencia con pkrdida de la garantia, o bien a 10s adjndica-
a ) las sociedades e individualmente sus componentes y/o tarios que no concurren a suscribir el respectivo contrato. Es co-
miexbros del directorio, seg5n el caso, que estkn sancionados de mhn la exclusi6n de 10s deudores del Fisco.
acuerdo con 10s incisos 18 y 19 (suspensibn en el registro) asi Como I En relaci6n con las prohibiciones d e indole ktica, se impide
!
--.. - -.
tamhibn - - 10s cbnyuges
w , de 10s sancionados, cualquiera fuera el Ca- la participaci6n de 10s funcionarios pliblicos, generalmente alcan-
ricter con que pretendan inscribirse; zando esta prohibici6n a 10s parientes hasta el tercer gmdo, y el
b) 10s sucesores de firmas que estkn sancionados cuando exis- cbnyuge, y por una duraci6n que llega hasta un aiio despuks del
tieran indicios suficientes por su gravedad, precisibn, y concor- egreso del funcionario por cualquier causa.
dancia, para presurnir quc media en el caso una simulaci6n con el A lo expuesto cabe agregar las limitaciones contenidas en las
fin de eludir 10s efectos de las sanciones impuestas a las antece- leyes 18.875 y 22.460 en cuanto a la vinculaci6n de consultores o
soras; empresas consultoras con empresas contratistas de obras phblicas,
c) 10s corredores, comisionistas, y en general 10s interme- por lo que, de darse tal vinculaci611, ksta seri un impedimento
diarios; para participar en procedimientos de selecci6n y, por ende, ser
-
d ,) 10s agentes del Estado y las firmas integradas total 0 par- parte de un contrato de obra pliblica.
cialmente por 10s mismos; En el derecho comparado eaisten similares regulaciones. Asi,
e ) las empresas en estado de convocatoria de acreedores, en el antes citado articulo 90 de la ley espaiiola de Bases de Con-
quiebra o liquidaci6n; tratos del Estado se excluye a quienes se encuentren comprendidos
f ) 10s inhibidos y 10s concursados civilmente; en algunas de las siguientes condiciones:
g ) 10s representantes a titulo personal de firmas establecidas 1 ) Haber sido condenados mediante sentencia firme o estar
en el pais; procesados por delitos de falsedad o contra la propiedad.
h ) 10s condenrdos en causa criminal. Sin embargo la Con- 2) Estar declarados en suspensi6n de pagos, incursos en pro-
taduria General de la Naci6n acordar la inscripci6n si, en cedimiento de apremio como deudores del Estado o de sus orga-
virtud de la naturaleza de 10s hechos, las circunstancias en que se nismns aut6nomos o haber sido objeto de sanci6n firme en dos
cometieron o el tiempo transcurrido juzgare que la condena no es o mhs expedientes tributarios por defraudaci6n. En este Gltimo
i n ~ m p a t i b l econ la condici6n de ~roveedor del Estado; caso, la prohibici6n de contratar tendri una duraci6n de 5 aiios
i) 10s deudores rnorosos del Fisco, declarados por autoridad a partir de la fecha en que sea firme la sanci6n del likimo ex-
competente. pediente.
Siguiendo la sintesis que hace Fiorini sobre el tema en ani- 3) Haber sido sancionado con carhcter firme mediante acuer-
lisis 5 puede afirmarse que el impedimenta por razones ena ales es do del Consejo de Ministros, por infracci6n administrativa en ma-
general contra 10s condenados por la justicia criminal, y en algu- teria de disciplina del mercado. La prohibici6n de conbatar ten-
nas legislaciones tambibn contra 10s procesados. dri una duraci6n d e 5 aiios, a partir de la fecha en que sea
Las prohibiciones de naturaleza econ6mica excluyen a 10s firme la sanci6n impuesta.
quebrados, concursados civilmente e interdictos. En alglin caso, 4)Haber sido declarados en quiebra o en concurso de acree-
romo se vio en 10s pirrafos anteriores, tambikn se excluye a quie- dores, mientras no fueren rehabilitados, o insolventes fallidos en
nes se encuentran en estado de convocatoria de acreedores. cualquier procedimiento.
5 ) Haber dado lugar, por causa de la que fueren declara-
dos culpables, a la resoluci6n finne, durante 10s 5 aiios anteriores,
de cualquier contrato que hubieren celebrado con el Estado, sus que demuestre fehacientemente la naturaleza de la asociaci6n,
responsabilidades de las partes y sus porcentajes de participaci6n
organismos aut6nomos, o las entidades locales.
en la misma".
6) Formar parte del personal a1 servicio de la Administra- Esta introducci6n del tkrmino consorcio en el marco norma-
ci6n del Estado, de la administraci6n local, de 10s organismos
tivo nacional, juntamente con su admisi6n como figura juridica,
autbnomos o de las empresas pbblicas.
se vio empafiada por lo dispuesto en el art. 30 de la ley de Socie-
7) Las empresas o sociedades de las que formen parte las dades 19.550: "Las sociedades andni~nasy en comndita por ac-
autoridades incompatibles con arreglo a1 decreto ley del 13/5/55 eiones sdlo pueden formar purte de sociedarles por acciones" con
y dem4s disposiciones aplicables. lo que, teniendo en cuenta que gran parte de las empresas cons-
8 ) No hallarse debidamente clasificadas, en su caso, con nrre- tructoras de mayor tamaiio se encuentran constituidas con10 so-
glo a lo dispuesto en esta ley. ciedades andnimas, se impediria la formaci6n de estos consorcios,
La ley comentada sanciona con la nulidad de pleno derccho 10s que ademds no estarian reconocidos como tales pot cuanto la
a aquellos contratos que se celebren con aquellas personas que ley de Sociedades adopt6 el criterio de la tipicidad (art. lQ),
"carezcan de la capacidad de obrar necesaria o que est6n incursas fulminando con la nulidad ". . .la constitucidn de una sociedad
en cualquiera de las prohibiciones del presente articulo". de tipos no autorizados por la ley.. ." (art. 17).
Pero esta normativa -aplicable a1 caso s610 en el supuesto..
de que se admita que el consorcio es un contrato de sociedad,
lo que qued6 resuelto (por la negativa) con la ley 22.903- no
irnpidi6 que la prictica consorcial continuara, la mayor parte de
Es una prictica habitual en nuestro medio, y por cierto in- las veces impulsada por 10s propios pliegos licitatorios, incluso en
ternacionalmente, que la ejecuci6u d e las obras sea encarada For licitaciones nacionales, que permiten expresamente, y en ocasio-
un conjunto de empresas que, aunque cada una de ellas se orga- nes exigen, la constituci6n de consorcios de oferentes y de futuros
nice juridicamente bajo formas societarias, no constituyen una contratistas.
nueva sociedad distinta de las que integran dicho conjunto em- En algunos casos se trat6 de sortear expresamente la dificul-
presario. tad generada por la ley 19.550. Asi, para 10s llamados contra-
Esta prictica no fue receptada en la ley de Obras Pliblicas na- tos de riesgo para la exploraci6n y explotaci6n de hidrocarburos,
cional, ni tampoco esti prevista en su actual proyecto de ley de la ley 21.778 establecib en su art. 24: "'Excepttime de lo dis--
reformas. Si, en carnbio, fue contemplada por otros cuerpos le- puesto en el art. 30 d e la ley 19550 10s contraos de nsociacidn,
gislativos, de alguna manera vinculados al contrato que aqui se sociedades accidentales y toda otra form d e oincdacidn o par-
analiza, independientemente de su reciente regulaci6n pot la ley ticipacidn que celebren las sociedades andnimas o en comndita
22.903, que incorpor6 esta figura juridica a la ley de Sociedades POTacciones -sea entre.si o con empresar estatales- cofz el
19.550, en sus arts. 377 a 385. obieto de desa~rollartareas de exploracwn y explotocidn de hidro-
Asi, la ley 18.875 sugiere la idea del consorcio cuando obliga, carburos".
en su art. 8" a las empresas del exterior que concurran a licita- Como se ve, en el caso arriba citado, el legislador no utilizi,
ciones internacionales, a ". ..asoeiarse con empresm locales, y el tkrmino consorcio, aunque identifie6 claramente la instituci6n.
siempre que sea posible, con empresas locales de capital inter- Si lo hizo, en cambio, la ley de Consultoria 22.460 (sobre la natu-
no.. .". Su decreto reglamentario 2930/70, aclara que esa aso- raleza del contrato de consultoria, ver Cap. IV, g 30), que lleg6,
ciaci6n es un consorcw, a1 reiterar que las empresas del exterior incluso, a elaborar la primera definici6n legal del consorcio, si
tendrin la obligaci6n de asociarse con empresas locales, afiadien- bikn s610 referida a1 contrato de consultoria. En su art. 20, ap..
do que "la entidad contratante exigiri a1 consorcio asi integrado 4?, la icy entiende por consorcio a "toda asociacidn accidental o en
ELEME~O S
DEL CONTRATO DE OBRA P ~ B L I C A 171

participacidn de firmas consultoras o de f i m a s consultoras con nacionalidad utilizan el tkrmino joint venture como indicative de
consultores o de dos o mds consultores entre si para llevar a cab0 un instituto distinto que el consmcio, tema que se analizari mis
tareas de consultoria". Mis adelante volveren~os sobre esta de- adelante) la ley 584 del 8/8/77, reformada por la ley 1 del
finicibn, destacando ahora que el art. 6° de la ley comentada se 3/1/78, introdujo 'l'istituto del raggruppamento delle irnprese per
refiere a "10s consorcios que se constituyan para redizar un de- la participazione agli appalti e per la esecuzione delle opere
terminado trabajo. . .", mientras que en el art. 9? inicia una re- pubbliche", lo que permite "il collegamento temporaneo di piir im-
gulacibn legal del consorcio, estableciendo: "Lm finnas consd- prese in funzione del compimento di un'opera, nella esecuzione
toras y 10s consultores podrdn constituirse en consorcio con. el della quale ciascuna conserva la propia individualiti" y se
objeto de prertar uno o mds servicios determinados de consultoria.
Las firmas y 10s consultores consorciados serkn solidariamente res- 6 Astolfi, A,, I1 contrato di joint centure, Dott. A. Giufre Editore, Mi-
ponsables por la cdidad y exactitud de la totalidad de las ta1ea.q Mn, 1981, p. 141; tambiCn Cianflane, ob. cit., L'Appalto ..., p. 239. La
ejecutadas y tambidn por todos 10s aspectos contractuales. El ley 584 --que busca la adecuacidn a1 derecho italiano de la Directiva NP 305,
consorcio no tendrd modificacidn en su constitvcidn hasta la fi- del 26/7/71 d e la Comunidad Econ6mica Europea- regula el instituto de
la siguiente manera:
nalizacidn de 10s trabajos contratados, salvo autorizacwn erp'esa
Art. 20.-Sono ammesse a presentare offerte per gli appalti di cui alla
de la contratante". presente legge, nonchk per appalti in genere di opere pubbliche eseguite a
En el derecho comparado la figura tambikn ha sido admiti- c,.m della amministmzioni e degli enti puhblici, dei 1610 concessionari o do
da. La ley espafiola de Bases de Contratos del Estado establece cooperative o consorzi ammessi a contrihuta a concorso finanziario deUa
Stato o di enti pubblici, imprese riunite che abbiano conferito mandato co-
que "La AdministraciCIn tambibn ~ o d r icontratar con agrupacio- llettivo speciale con rappresentanza ad una di esse, qualificata capogruppo,
nes de empresarios que se constituyan temporalmente a1 efecto. la yuale esprime I'offerta in nome e per conto proprio e delle mandanti,
Dichos empresarios quedarin obligados solidariamente ante la nonchC consorzi di cooperative di produzione e di lavoro regolati dalla legge
Administracibn y deberin nombrar un representante o gerente 25 giugno 1909, n. 422, e dal regio decreta 12 febraio 1911, n. 278, e suc-
irnico de la agrupacibn, con poderes bastantes para ejercitar 10s cessive madificazioni e integrazioni.
In casa di licitazione privata, di appalto-concorso o di trattativa privata,
derechos v cumplir. las obligaciones que del contrato se deriven" l ' i ~ p r e s a invitata individualmente dal soggetto appaltante ha la facolti di
(art. 10). presentare offerta o di trattare per sk e quale capogruppo di imprese riunite,
A la vez, el art. 27 del Reglamento General de Contrataciones ai sensi del comma precedente.
(siempre con referencia a la legislacibn espafiola) regula a1 con- Possono sltresi essere ammesse alle gare o alla trattativa di cui a1 pre-
sorcio d e la siguiente manera: "Cuando varias empresas acudan cedente comma imprese riunite o che dichiarino d i volersi riunire ai semi del
prirno comma del presente articolo, le quali ne facciano richiesta al sogget-
a una licitacibn constituyendo una agrupaci6n temporal, cada uno to appaltante, sempre che sussistano i requisiti previsti dalla presente legge.
de 10s empresarios que la componen deberi acreditar su capacidad Art. 21. - Salvo quanto prescritto dagli art. 14, 17 e 18 dela presente
de obrar conforme establecen 10s articulos anteriores. Para que legge per gli appalti di cui all'art. 1, ciascuna delle imprese riunite deve es-
sea eficaz la agmpacihn frente a la Administraci6n bastari que en sere iscritta nell'albo nazionale dei costruttori per la classifica corrispondente
el escrito de composici6n se indiquen 10s nombres y circunstancias ad un quinto dell'importo dei lavori oggetto dell'appalto; in ogni caso la som-
ma degli importi per i quali le imprese sono iscritte deve w e r e almeno pari
d e 10s empresarios que la suscriban, la participaci6n de cada uno all'importa dei lavori da appaltare.
de ellos y que se designe la persona o entidad que durante la vi- Salvo quanto disposto ddl'art. 2 della presente legge, per gli appalti
gencia del contrato ha de ostentar la ~ l e n arepresentacibn de todos di cui all'art. 1, B consentito indicare nel bando o avviso di gara ovvera,
ellos frente a la Administracibn. Si la agrupacibn estuviese cons- quando si ricoxa a trattativa privata, nel capitolato speciale di appalto, parti
tituida por empresas espafiolas y extranjeras, el gerente deberi dell'opera scor~orabili,la cui esecuzione pub essere assunta da imprese man-
danti che siano iscritte nell'albo nazionale dei costruttori per categoria e
ser espaiiol". classifica conispondenti alle parti stesse.
En el derecho italiano, en materia de consorcios empresarios L'offerta delle imprese riunite determina la loro responsabiliti solidale
para la ejecuci6n de obras (en realidad algunos autores de esa nei confronti del soggetto appaltante. Tuttavia, per le imprese assuntrici
ELEMENTOS
DEL CONTRAM DE OBR4 P ~ B L I C A 173

Tambien en Francia se h a regulado por ordenanza No 67-821


caracterizan por configurar una uni6n de empresas (impress riu-
y decretos 68-109 y 68-630 el groupement d'intddt dconomique y
nite) que "abbiano conferito mandato colletivo speciale con rap-
presentanza ad una d i esse, qualificata capogrupo, la quale espri-- 'en Portugal 10s agrupvlmentos complementares de emypresm, seg6n
me l'offerta in nome e per conto propio d e della mandati" (art. ley del 4 de junio de 1973 sin perjuicio del gran desarrollo que
.el instituto ha tenido en el derecho estadounidense, a1 que luego
20).
En el Brasil, el instituto est& previsto y regulado expresamen- se h a d referencia.
En Francia, especificamente para 10s traoaux publics, 10s
te en la secci6n IV del decreto 86.025, del 22 d e mayo de 1981,
titulada, precisamente "Consorcios". Asi, su art. 14 estahlece que: Cahiers des clauses Administratives Generales, como 10s Ca-
hiers des Prescriptiolls Colnmunes prevkn la contrataci6n con
"Desde que prevista no edital, admite-se a participaczo em conco-
g~rcposde empresas, e n forma conjunta y solidaria, para la reali-
rrencia ou tomada d e precos, d e pessoas fisicas au juridicas reuni-
das em cons6rcio3' ?. zaci6n de obras de especial complejidad. En estas regulaciones se
destaca especialmente la figura del mandatario, que asume no s6-
lo responsabilidades en nombre de cada una de las empresas agru-
delle opere indicate nel secondo comma, la r e ~ ~ o n s a b i l iBt j limitata a quella padas, sino tamhien responsahilidades directas, aunque traslada-
derivante dall'esecuzione delle opere di rispettiva competenza, ferma restan- bles a1 resto d e las empresas. Puede afirmarse que esta figura
d o la responsabiliti solidale dell'impresa capogruppo.
Art. 22. - I1 mandato conferito all'impresa capogruppo dalle altrz im- del mandatario permite superar 10s posibles problemas derivados
prese riunite deve risultare d a scrittura ~ r i v a t a autenticata. La procura re-
Iativa b conferita a chi legalmente rappresenta l'impresa capogruppo. 11
mandato i: gratuito e irrevocabile. La revoca del mandato per giusta causa $ 10 0 consbrcio d e v e d relacionar-se com o objeto da licita~io,n5o
non ha effetto nei confronti del saggetto appaltante. .sendo permitida a participacio d e pesoas ou empresas que n i o apresentem a
Al mandatario spetta la rappresentanza esclusiva, anche processnale, de- necessiria aptidio, a critk~iada Administrago.
le imprese mandanti nei canfronti del soggetto appaltante per tutte le ope- § 2O 0 nGmero d e consorciados ser& fixado no ato de sua constitui~io,
que servirA para instmir o pedido inicial d e habilitagio preliminar B conco-
raziani e gli atti d i qualsiasi natura dipendenti dall'appalto, anche dopo el
callauda dei lavori, fino alla estinzione di ogni ragpollo. I1 sogsetto appal- rr&ncia ou i inscrigio no registro cadastral d e habilita~zopara tomada de
I
tnnte.
. - ~. . nub far valere dirett~mente le responsabiliti facenti capo
tuttavia.
~ ~ A i precos.
5 39 A personalidade juridica, a capacidade thcnica e a idoneidade
alie imprese mandanti. i financeira da cada consorciado s e r h verificadas indivadualmente, importando
I1 rapporto di mandato non determina di per sk organizzazione o asso- i
t a recusa d e um, na inabilitagio d o consbrcio.
ciazione fra le imprese riunite, ognuna delle quali conserva la propria auto-
nomia ai fini della gestione e degli adempimenti fiscali e degli oneri sociali. § 49 A critkrio da Administra~io,a admisdo do consbrcio poderA ser
definida pela soma de pontos atribuidos a cada um dos consorciados, desde
Art. 23. - In caso di fallirnento dell'impresa mandataria avvero, qualola
1: que prevista esta condicio no edital.
si tratti di impresa individuale, in caso di morte, interdizione o inabilitazione
dcl suo titolare, il soggetto appaltante ha facolti di proseguire il rapporto § 5' Nos consbrcios integrados por pessoas fisicas ou juridicas, nacio-
nais ou estrangeiras, caberi, sempre, a brasileiro a lideran~ae a representa-
di appalto con altra impresa che sia costituita mandataria nei modi previsti
5io do cons6rcio.
dal nrecedente art. 22 e che sia di gradimento del soggetto appaltants me-
desimo, ovvero di recedere dr.ll'appalto. Art. 16. - E vedado i pessoa fisica ou juridica consorciada participar,
simultaneamente, d a r e s m a licitacio, isoladamente ou como integrante de
In caso di fallimento di una delle imprese mandanti ovvero, qualora si
outro consbrcio.
tratti di un'impresa individuale, in caso di morte, interdizione o inabilitazione
Art. 17.-A constitui~io d e cons6rcio importa no cornpramisso t h i t o
del suo titolare, l'impresa capogruppo, ove non indichi altra impresa suben-
dos consorciados d e que n5o t e r i 3 sua c o n s t i t ~ i ~ 2ou
0 Composi~Boalteradas
trante, in prosseso dei prescritti requisiti di idoneiti, B tenuta alla esecuzione,
ou modificadas, sem a prkvia e expressa anu&ncia da Administra~io, at8 o
direttamente o a mezzo delle altre imprese mandanti.
7 La misma ley efectlia una regulacibn del instituto:
cumprimento do objeto d a licita$io, mediante termo de recebimento.
Art. 15. - A c o n d i t u i ~ i od e consbrcios, para os fins deste decreto, obe- Art. 18. -Aos consbrcios aplicar-se-50 subsidiariamente, no que couber,
as disposis6es do Decreto no 73.140, d e 9 de novembro de 1973, n5o revo-
deceri no que couber, ao disposto nos arts. 273 e 279 da Lei no 6404, de
gades expressamente por este decreto.
15 d e dezembro d e 1976, devendo os cantratos de consbrcio ser arquivados
Citado por Bonvicini, D., Le jolnt oentures, tecnica giuridica e p r m
na Junta Comercial ou registrados n o Cartbrio d e Registro d e Titulos e DO-
si societaria, Dott. A. Giufre Editore, Milbn, 1977, p. 77.
cumentos, conforme a natureza das pessoas consorciadas.
174 CONTRATO
DE OBRA P ~ B L I C A

del no reconocimiento de ~ersonalidadjuridica en el agrupamien- de esa norma, asi como tambikn la grave sancibn contemplada en
to empresario, fundamentalmente a1 concederle un papel que exce- su art. 17. El consorcio no es una socieokl, por lo tanta las socie-
d e la mera representacibn de intereses ajenos, para situarlo, como dades por acciones p o d r h constituir vilidamente estas uniones
se dijo, en la calidad de responsable direct0 ante la Administra- consorciales, lo que ahora esti autorizado por el art. 377 de la ley
ci6n comitente, sin perjuicio de la responsabilidad solidaria que 19.550, siempre que cumplan con 10s requisitos que caracterizan
se mantiene en el resto de las empresas que forman el grupo '. esta figura, distinguikndola de la sociedad comercial. Obviamen-
te, si ocultos bajo el manto del consorcio pueden descubrirse 10s
La admisibn por el derecho argentino del instituto "consorcio",
a travks de las normas resefiadas en 10s phrrafos anteriores permite
encauzar su a d i s i s y tratamiento por carriles distintos de la fi- 39 Le mandataire commun assure la liaison et la coordination des en-
gura de la sociedad comercial, con el importante efecto prictico, treprises entre elles, et la liaison entre les entreprises et le maitre d'ouvrage
aun antes de la reforma de la ley de Sociedades, de convertir en et le maitre d'oeuvre. C'est par son intermkdiaire que sont adresses aux
entreprises les ordres de I'administration et les rCsewes ou ~Cclamations des
inaplicable a1 caso la implicita probibicibn contenida en el art. 30 entreprises au maitre d'ouvrage et au maitre d'oeuvre, ainsi que leurs situa-
lions et mimoires qu'il d e son visa ou les demandes d'agr6ment de sous-
trait&.
Q Montmerle, J., Passrrtion et execution des marches d e traoaur publics-
En cas d e contestation, c'est le mandataire commun qui reprksente
Cornmentoire des cahiers des clauses admin*<<atioes gknerales, Editions Eyro- chaque entreprise, pour I'application de l'article 50 d u C.C.A.G., et Q d e f a ~ t
Iles, Paris, 1966, ps. 49/51. d'accord amiable accept6 par l'entreprise intbessee, le mandataire cammun
..Ci:ni:ralment, le marchi: est pass6 avec une entreprise dCterminBe, mais, doit informer cette dernihxe, en m e de I'application Cventuelle des articler
d'une faGon assez frkquente, les march& importants sont conclus avec plu- 51 et 52 du C.C.A.C.
sieurs entreprises qui s'engagent conjointement et solidairement Cet enga- - - - -. ..
4p Le calendrier d'execution Ctabli au cours d'une p i r i d e pripara-
gement a pour effet d'obliger chacune des entreprises personnellement pour toire, fixe en particulier le dClai gkMral d'exkcution des travaux de toutes
le tout, nonobstant la rkpartition entre elles des travaux, qui a pu &re indi- les entreprises, dblai dont le depassement est sanctionnb par l'application des
qus dam le march&, si certaines entreprises deviennent dCf'dlantes, I'autre p6naliti:s de retard, dont le mandataire commun doit indiquer la repartition
ou les autres. den~eurkesin honis, ont l'ohligation de ~ousuivrerex&cution du
entre entreprises, au maitre de l'ouvrage, B dhfaut de quoi e l l s lui sont
marche, et d e le mener B son terme. ( . . . )
tatalement imput6es.
En mati& d e travaux de bstiment, la pratique a tout d'abord Ctabli,
50 Le mandataire comlmn joue Bgalement un r3le important, s'agis-
puis ghnBralisC, l'attribution des travaux i des entreprises dites groupkes.
sant de I'organisation matCrielle et collective du chantier et la gestion du
I'Claboration juridique d e ce mode d'attribution s'est ensuite faite dans diff8-
rents cahiers des charges, puis dans le Cahier des Prescriptions Communes
compte dit comnte . u. r m t n .
6 p Chaque entreprise, A laquelle I'exemplaire unique prCvu par les
applicables aux marches de travaux de batiment de l'Etat (Fasc. 02). ( . . . )
textes riglementant le nantissement, est remjs, peut nantir sa part de tra- '
Ce mode d'attribution des travaux est a p p r u necessaire, en raison de vaux; par l'intermkdiaire d u mandataire commun, elle constitue sa part de
la diversite des travaux, que necessite la construction d e bstiments, et d e la cautionnement et recoit directement, au compte ouvert B son nam, le prix
necessiti. d'assurer une meilleure coordination et liaison des diffhrentes en-
de ses travaux.
treprises, chacune plus sp6cialement chargee de l'exbcution des travaux du
79 Le C.P.C. BBtiment Fasc. 02 met d e lourdes responsabilit&s A la
corps $&tat qui correspond i sa sp6cialitC. ( . . .)
charge du mnndataire com.mun.
L'kconomie gknkrale d e la convention d'entreprises group6es est la
suivante: Aux termes de ?article 3240: "Pendant la d u d e des travaux, e t jus-
qu'B la reception definitive incluse, le mandataire commun est solidairement
10 Les diffkrentes entrepiises dbsirecses de concourir signent une lettre
responsable avec chacune des entreprises, pour les travaux qu'elle execute
d'accord, dkignant et babilitant, I'une d'entre elles (gknhralement I'entrepri- au titre de son marchd".
se de gros oeuvre) qui, agrkke par la mzitre d e l'ouvrage, groupe les propo-
D'autre part, aux telmes d e Yarticle 6. 52: "En ce qui conceme le
sitions de ces entreprises et les transmet sous la forme d'nne soumissiOn ri.glement d u march6 de chaque entreprise, le mandataire commun conserve
d'ensemble. sa responsabilit6 solidaire avec cette entreprise jusqu'B la liquidation dhfini-
29 Cette soumission, remise en autant d'exemplaires qu'il y a d'entre-
priser, comporte obligatoirement une decomposition d u prix total, resultant
8%
-~
tive des comotes".~ ~

question de la d6faillanc.e soit d'une entreprise, soit du manda-


de I'addltion des propositions des diffkrentes entreprises, en autant d e postes
n-~ i i lv, a d'entre~risesintkresskes, avec, en regard d e chaque poste, le nom taire commun, fait I'objet de I'article 3.7 d u C.P.C. Bstiment. Elle sera
Ctudiee ult8rieurement.
de rentreprise et le montant de ses travaux
176 CONTRATO DE OBRA PÚBUCA
EI..EMENTOS DEL CON'TnATO DE OBRA PÍ;BLICA
177
elementos que identifican la sociedad comercial, la prohibición
tructiva, p, eL preexiste, es contemporánea y precederá al con-
del art. 30 de la ley de Sociedades retomará su plena VIgenCia. .
Sorcio. Los consorciados continuarán compitiendo entre st aun
Esta conclusión tiene importantes efectos prácticos, ~ parti-
cular en cuanto a la rapidez y sencillez de los actos constitutivos durante la vigencia del consorcio (aunque no, por supuesto, con
respecto a la obra objeto del consorcio), Ellos no buscan aso-
del consorcio (un simple contrato celebrado por instrumento pn-
ciarse) sino ejecutar una obra, la que) por diferentes razones, no
vado sin necesidad de inscripción y autorizacíón alguna) > sin per-
juici~ de sus efectos impositivos cuyo análisis escapa al contenido pueden encarar con exclusividad, Más que la unión de esfuerzos
de esta obra, para ejecutar la obra (lo que lo acercaría a la r4fectio socíetatis) ,
los consorciados buscan dividirse la obra entre sí, ya sea en una
Pero, por sobre todo, tal distinción encuentra razo~es cie~tí­
ficas determinantes, cuya demostraci6n surgirá del propIo análiSIs división plena (por sectores O espeCialidades) o relativa, realizan-
de la figura consorcial, aunque desde ya pueden destacarse tres do todo el trabajo conjuntamente, pero distinguiendo los cometi-
notas de singular importancia distintiva: dos a realizar por cada empresa, como tal, consorciada. Por ello
la aftectio societatis, en todo caso, aparece después. Lo que cada
al Inexistencia de affectío socíetatis: éste ha sido calificado consorciado quíere es ejecutar la obra, es decir que su objetivo
como el "elemento esencial" del contrato de sociedad '0, la que
principal es ser contratista de un contrato de obra y no miembro
". "debe entenderse comO la voluntad o intención de asoCla~se
que encierra con mayor o menor acento~ de acuerdo con el tipo de una sociedad; luego) por conveniencia empresaría, necesidad de
societario~ la voluntad de colaborar en forma activa en ,la emp~es~
hecho (falta de capacidad, equipo suficiente, capital de trabajo,
común (lo que lleva ínsito el deber de lealtad del SOCIO), el am- ctc, o porque así lo impone el pliego licitatorio o la ley, se unirá
mo de concurrir al álea propia de la actividad negocIal, todo ello COn otros competidores (no socios) para ejecutar la obra, esa obra
y nada más, en común.
desarrollado dentro de un marco de igualdad jurídica, pues en la
relación societaria no existe subordinación por parte de alguno de El jurista francés Jean Guyénot 13 señala, precisamente, que
los contratantes (socios) hacia el o los socios" ". Si bien en su COn respecto al "grupo de interés económico" reconocido por el
aspecto aparente estos caracteres podrían predicarse del conSOTw deree~lO francés, la affect'io societatis '<. .. no es suficiente para ca~
clo la diferencia estriba en la mtencionalidad psíquica 12 hacia racteflzar el consentimiento de una persona que conviene con otras
do~de estas notas están orientadas, En realidad, en la socieda? constituir Un GlE.,," (grupo de interés económico), En cam-
la affectio socíetatis es plena, pues se da dentr? del negocl~ jun- bio, en estas agrupaciones aparece, como elemento esencial de la
dico, actuando como un motor esencial en la VIda de la SOCIedad, vol~ntad de los concurrentes a formarla, el animus cooperandi que,
Así) en la sociedad, la affectio 80cietatis es un elemento ~r.esu~ segun el autor citado, es identificable Con el antiguo consortí"m
puesto, en el sentido de previo O precedente, a toda la ac~vldad entre hermanos, del derecho romano, caracterizados por el iWJ
que luego desarrollará la sociedad como tal. En el ~oIlSorclo, en jraternitatis, según el Digesto de Justiniano, que reconoce en cada
cambio los consordados no buscan encauzar su actiV1dad lucratI- participante "una voluntad sostenida y activa de obrar, tanto en
va a tr~vés de una unión socíetaria. Su actividad propia, la cons- provecho de los otros como en el propio, en la prosecución de su
i~terés persona!", Por ello el consortium "." puede no materia-
lizarse en el reparto o acumulación de beneficios obtenidos o eco-
1f1 Zaldívar, E.) Cf.Uldernos de derecho societario, Macchi, Buenos
A'lres. 1973}p' BÓ.
nonúas realizadas, pero trasciende en resultados que, obtenidos
. Soctedodes cCtm6'fciales, Depalma, Buenos
0, Halpenn l 1.

Aires, 1964, p. 49, def conjuntamente, penniten hacer fructificar la actividad económica
11 Zaldívar, oh. cit,> p, 81; Halpenn (ob. cit' 1 p. ~), la . me com,? de cada miembro, injertada sobre la de agrupación que él an;-
"la voluntad de colaboración activa. jurídicamente iguahtaria e mterúsada .
12 « • . • fundamentalmente es un factor de carácter ~qUiCO, .antes que
material", CFed. Rosario, LL, 81-751, citado por :Halpenn. ob. Clt., p. 48,
:nota nQ '9. , ,1:3 Cuyénot, L La práctica de los grupos de interés ccon6mico: La Cons-
tItución, LL, diario de! 1-7-83, de quien son las citas en el texto,
nueva persona juridica, un nuevo snjeto de derecho, ni siquiera
ma con 10s otros, independientemente de la suya", aspecto kste
a 10s efectos del contrato d e obra para el cual, exclusivamente,
que se deberi tencr rnuy e n cuenta a1 analizar el objeto del con-
sorcio. se constituy6. La personalidad juridica sigue perteneciendo ple-
Para Astolfi, e n el mismo sentido y refiri8ndose a 10s contra- namente a 10s consorciados, quienes se vinculan entre si y con el
tos de joint uenture (cuya relaci6n con lo que en la prictica comitenie mediante relaciones juridicas que luego se examinarin
argentina se denomina consorcio sera explicada m6.s adelante) no mis en detalle. Par supuesto, no cabe asimilar esta situaci6n a
corresponde subsumir esta figura en el esquema societario, ya las sociedades accidentales o en participacidn, exceptu-da de la
que esta posici6n ". . .no tendria en cuenta la circunstancia d e que calidad de sujeto de derecho por la propia ley de Sociedades (art.
la convenci6n del contrato d e joint venture esti motivada, en la X l ) , ya que aquel t i p societario (si asi puede calificirselo) es
generalidad d e 10s casos, e n la propia voluntad de Ins contraym- oculto respecto de los tercerosle, lo que no ocurre con el con-
tes de convenir en una relacidn de colaboracitn que quiere ex- sorcio.
cluir la relacibn social" ". La carencia de personalidad juridica del co~rsorcio tambikn
Esta posici6n doctrinaria ha quedado incorporada a1 derecho ha sido reconocida en el derecho comparado. Asi cabe citar el
srgentino, ya que el Gltirno pirrafo del art. 377 de la ley 19.550 informe 49/72, de la Junta Consultiva de Contrataci6n Adminis-
expresamente afirma que 10s consorcios (alli llamados uniones
trativa (Espaiia): "Respecto de la primera cuestibn, entiende esta
transitorias de empresas) "no constituyen sociedades". junta que 10s preceptos de la ley de Contratos ciel Estado y d e l
L a diferencia entre aquellas nociones de affectio societatis y Reglamento General d e Contrataci6n (arts. 23 y 24) . . . son con-
animus cooperandi puede ser sutil, pero existe. D e todas rnane-
cluyentes en el sentido de la carencia de personalidad juridica de
ras, el mismo concept0 de la affectio societatis es sutil, sin perjui-
las agrupaciones temporales. La terminologia utilizada, el rkgi-
cio de que ha servido a 10s jueces y a 10s juristas de gran utilidad
men interno de la agrupacihn, el mecanismo de las responsabili-
para constmir en torno de 61 10s basamentos d e la teoria del con-
dades y 10s requisitos formales constitutivos dG aquklla ponen de
ixato de sociedad.
b ) Personalidad juridica: el art. 2'J de la ley 19.550 afirma relieve, sin lugar a dudas, que nos hallamos ante una comunidad
que "La sociedad es un suieto de derecho con el alcance fijado a e interesadZ.de ~ c a r i c t e r circunstancial, que se sustenta en l a
en esta ley". Esta norma importa conferirle a la sociedad nwr- personalidad juridica d e los participes, vinculados por su respon-
cantil el data de la personalidad juridica, aunque lin~itadn a los sabilidad solidaria frente a la Administracibn. L a figura del ge-~
alcances que le fija la misma ley de Sociedades. En este sentido, rente linico constituye, en fin, una exigencia con el doble ohjeto
dice Zaldivar 1 6 "son personas societarias mercantiles, regidas co- de facilitar las relaciones de la agmpaci6n con el 6rgano de con-
mo tales por nuestro derecho, aquellas domiciliadas en nueitro trataci6n y d e impulsar a un funcionamiento unitaxio y coordina-
territorio nacional que se originan en relaciones juridicas de na-
turaleza societaria o asociativa que hayan adoptado uno cualquie-
'"ldivar, ob. cit., p. 145. La jurisprudencia ha seiialado: "Ls rela-
ra de 10s tipas organizativos contemplados por la ley o en rela- cibn asociativa meramente interna, no exteriorizada frente a terceros, consti-
ciones societarias de hecho que tengan por ohjeto el desarrollo h ~ s enata caracterizante d e la sociedad Sn participncibn" in re "Estudio inge-
de una actividad rnercantil, con excepci6n d e las sociedades acci- niero Alfiedo van Lacke y asoc. S.R.L. y otros c/Artayer, Marcos E. y otrd',
dentales o en participaci6n que no generan el efecto personalidad". CXCom., Sala C, abril 7/1982, ED del 7/8/82. E n el misrno fallo se dijo:
"La circunstancia d e que uno d e 10s constituyentes d e una sociedad ncciden-
Ahora bien, corno se veri mis adelante, el consorcio no es una tal o en participacibn sea una sociedad andnima, supuesto vedada por el art.
30 d e la ley 19.550 es suficiente causal d e nulidad, en razdn de mediar trans-
gresidn de una d e las condiciones d e validez del acto constitutive, y dicha
1 4 Astolfi, A,, El contrato intemacional de joint venture, Deuqlma, Bue- sancidn debe ser declarada d e oficio por 10s jueces, atento su carActer d e
nos Aires, 1981, p. 7.
nulidad absoluta".
1 5 Ob. cit., p. 140.
d o de las empresas agrupadas"'7. E n cambio, en el derecho mantiene invariado mientras no se modifique el contrato 2 2 . Se
francbs, la norma que regula 10s grupos d e interks econ6mico trata d e una cifra ideal, que se contabiliza en el pasivo d e la so-
10s ha dotado de "personalidad moral y plena capacidad juri- ciedad, siendo insusceptible de distribucidn entre los socios, sin
dica" '8.
modificaci6n del contrato social. Ello se debe, explica Zaldivar,
E n el derecho argentino la cuesti6n ha sido definida por el a que es "una garantia para 10s acreedores de la sociedad, quienes
y a citado bltimo pirrafo del art. 377 de la ley de Sociedades Co- se encuentran amparados, en tal sentido, por diversas disposicio-
merciales, que afirma te~minantemente que estas "uniones transi- nes de la ley d e Sociedades (art. 13, incs. 3?, 31, 32, 68, 71, etc.)" 23.
torias de empresas" fio son sujetos de derecho. "El interks juridic0 del capital social -agrega Zaldivar- se pre-
c ) Carencia de capital y patrimonio diferenciado: en el art. senta, especialmente, en las sociedades en las que ciertos arocia-
2312 del C6digo Civil se establece que ". . .el conjunto d e 10s dos pueden limitar su responsabilidad (casos de comanditas, so-
bienes de una .persona constituye su patrimonio.. .". Esta "uni- ciedades de capital e industria, de responsabilidad limitada y por
versalidad juridica de sus derechos reales y de sus derechos per- acciones), lo cual no implica que tal interks no exista tambikn en
sonales", que como lo indica Vklez Sirsfield en la nota a1 articulo las sociedades con responsabilidad colectiva, ya que en &stas, si
citado caracteriza a1 patrimonio de una persona, "es la persona- bien 10s acreedores tienen acci6n contra 10s socios personalmente,
lidad misma del hombre puesta en relaci6u con 10s diferentes ob- advikrtase que previamente deben ejecutar 10s bienes de la socie-
jetos de sus derechos", segbn la acertada aclaraci6n del legisla- dad (ley de Sociedades, art. 56 y cone.)" 2 4 . Nada d e esto ocu-
dor en dicha nota. Ahora bien, si existe esa intima relacidn entre rre en el consorcio empresario, como se veri en 10s pirrafos que
patrimonio y persona, resulta una inmediata conclusi6n la impo- siguen. Es que en el consorcio no hay aporte en el sentido ju-
sibilidad del consorcio empresario de ser titular de patrimonio ridico-societario del tkrmino. G u y h o t explica c6mo en el grupo
alguno, puesto que carece de personalidad. El patrimonio es uno de inter& econ6mico el "aporte de 10s miembros se metamorfosea
de 10s atributos de la personalidad, de la que carece el consorcio. ~ ~ ". . .ya no es esenciahente contabili-
a1 ser t r a s ~ e n d i d o " pues
Por el contrario, la sociedad, en tanto que sujeto d e derecho, po- zado por su valor mercantil o creador d e riquezas valuables en
see un patrimonio propio, diierenciado del que pertenece indivi- dinero, sino en funci6n de su utilidad para la realizaci6n del ob-
dualmente a sus socios; se trata del patrimonio social o "conjunto jeto. .." del consorcio, el q u e es el mismo "conjunto de 10s bienes
d e relaciones juridicas de las que es titular el ente s~cietario"'~. apnrtados por 10s miembros". Asi, afirma G u y h o t que ". ..el
L o mismo cahe sefialar del capital, el que es un elemento aporte no esti concebido y efectnado en funci6n d e un valor fi-
especifico del contrato d e sociedadZ0. Por supuesto que, en el nanciero, sino del servicio que presta como medio destinado a
caso del consorcio, si resulta incapaz de poseer patrimonio propio, funcionar activamente e n el crisol que constituye el G I E (grupo
tampoco puede ser titular de capital alguno. Ademis, .el capital de interks econ6mico). Y prosigue: "En el sentido del derecho
social resulta del aporte de 10s socios, lo que es d e la esencia del d e las sociedades no pesa sobre 10s miembros una ohligaci6n le-
contrato de sociedad; "sin 61 -dice Halperin- no hay sociedad gal de aportar, en cambio (si) n m obligaci6n funcional resultante
ni socio, y le distingue d e otros negocios juridicos" El valor del GIE, sin la cual n o se podria poner por ohra ningbn medio
del conjunto de 10s aportes constituye el capital social, que se que le permitiera realizar el objeto q u e ellos han convenido", pues

17 Citado por Moreno Gil, O., en Contratos adminirtratiuos (Legislacibn 22 Halperin, ob. cit., p. 51.
y Jurisprudencia), Ministerio de Hacienda, Madrid, 1918, p. 190. 23 Ob. cit., p. 206.
18 Guybnot, J., ob. cit. 24 Ob, cit., p. 206.
19
20
Zaldivar, ob. cit., p. 205.
Halperin, ob. cit., p. 45.
" Cuyinot, J., La pradica de 10s gmpos de inter& ecadmico: El ob-
ielo del catrato d e gmpo. Los apwtes ar medios efectuodos por 10s miembros,
21 Ob. cit., p. 50. LL, diario del 11/8/83, d e quien son las citas que siguen en el texto.
ioint venture. Q u i d la nota m&s disiintiva -no en nuestro de-
estos aportes ". . .s61o presentan inter& cuando pueden ponerse recho, insisto- entce consorcio y joint oenture es que al primer0
en obra para alcanzar un resultado especifico". se le atribuye personalidad juridica, pues generalmente se reserva
Por lo a n t e s expuesto es que se p e d e aqui afirmar que el esa denomlnaci6n para las uniones entre entes pfiblicos con el
consorcio tiene por objeto, mhs que la realizacidn del fin mediato objeto d e prestar un determinado servicio pliblico o encarar, como
querido por sus miembros ( p , ej., la ejecuci6n de una obra publi- comitentes, la ejecuci6n d e una obra de inter& comlin.
c a ) , la estricta cooperaci6n y complemento de capacidades entre
Asi, a1 consorcio -ente pbblico- no se lo considera como
10s consorciados, lo que justifica la antes citada frase de G u y h o t
un ente de gestidn, sino como una persona, por lo menos un 6r-
por la que identifica a1 objeto del contrato de constituci6n de un
GIE con el "conjunto de 10s bienes aportados por 10s miembros". gano con subjetivaci6n '' en la medida de la competencia que le
Queda planteada, entonces, la tarea de definir la naturaleza fuere otorgada. Afirma Stancanelli que lo que caracteriza a estos
entes ( d e gesti6n) es que su actividad "resulta ser satisfactoria
juridica del consorcio de empresas y enumerar sus principales ca-
racteres. respecto d e una esfera de intereses substanciales que permanecen
fuera de su propia 6rbita"". Entonces, el consorcio (pliblico o
Previamente corresponde aclarar que en esta obra se utilizar&
a d m i n z a t i v o , no privado) 'parece constituir una hip6tesis de en-
la expresi6n consorcio -que es la que ha predominado en nues-
tra practica y legislaci6n- como similar a otras expresiones usua-
les en el derecho extranjero, tales como "agrupamientos tempor&- '' b n nuestra obra Pn'ncipios & derecho administmtiuo, Cap. VI, ps.
neos de empresas" 2 e o, especialmente, con la expresi6n inglesa i
173/180, hemos desarrollado el tema d e las "figuras juridicas subjetivas",
partiendo d e la idea de que ". . .el tema de la persona juridica en el derecho
pliblico debe ser replanteado, ya que ha sida un instrumento utilizado en el
za Los autores reconocen la impresici6n d e estas denominaciones. Asi derecho administrative de un mndo nuevo que conserva bien poco de la raz6n
Pallatino, hf., en la publicaciOn conjunta "Le n o m di adeguammnto alle di- de ser por la que durante siglos fue utilizado en el derecho privado", seglin
rettioe C E E in m t e r i a di appnIti d i laooe publici", Giuffre Varese, 1979, p. expresidn del jurista espariol A r i k Ortiz. Las "figuras juridicas subje-
181, nata n9 2, afirma: tivadas" son, en apretada sintesis, (Irganos o complejos organizativos que go-
"Si ~ r s ail termine di 'aasociazione temporanea di im~rese' perch6 oramai z.in de alguno de 10s atributos de la personalidad, pero no d e todos, sin llegar
entrato nel linguaggio corrente (si veda la nota successiva), ma soprattutto a poseer la plenitud de la ~ersonalidad,pero susceptibles de recibir una cierta
nerche
=- l'istituto cosi I. cualificato daUa medesima legge no 584, agli alt. lQ
imputaci6n juridica.
e 4" ad esempio.
''Si tratta tuttavia di tin termine inesatto, certamente non coerente, come ~tancanelli, G., en su obra Los consorcios en el derecho adminirtratitio,
si vedr8, proprio con la disciplina intema che del raggruppamento dettano gli Estudios Administrativos, Escuela Nacional d e Administraci6n Pliblica, Ma-
articoli qui commentati. drid, 1972, p. 71, seriala: "Creemos que el problema bay que plantearlo en
"Naturalrnente la qualificazione formale, ancorch6 contenuta nel corpo 10s tCrminos siguientes: no diciendo que el ente es, simultAneamente, drgano
della medesima legge, non i: elemento che possa modificare o compromettere Y persona juridica, porque entonces sus actos serian atrihui5les contempor&-
i termini della dibattuta questione della natura giuridica deristituto, natura nearnente a si mismo y a1 Estado, con verdadera controditio i n terminis. Se
estremamente incerta, como si vedri. Tuttavia da un legislatores 'tecnico', debe, en cambio, atender, ante un ente de esta naturaleza, no a la actividad,
come quells delia legge n. 584, ci si poteva e doveva attendere un maggiore sino a coda uno de sus actw por separado, para concluir que Cstos serin atri-
rigore terminologica. Purtiappo, come si B gi8 visto nel commento delle altre buibles, unas veces al Estado y otras a si mismos. C6mo esto sea posible se
norme dells Iegge, l'approssimazione terminologica e notevolissima, e non sem- explica teniendo en cuenta la relatividad de la posici6n de la dependencia
pre essa, come non lo i: in questo caso, pub essere giustificata -ma si tratte- administrativa: nada impide que sea considerada por el ordenamiento juri-
rebbe comunque di un alibi- con la necessiti dell'adeguamento formale alle d i c ~como centro de imputaciones juridicas y por tanto como persona, res-
narme della Direttiva comunitaria. E da osservare, como notazione di con-
pecto de algunos actos, y tan s6lo como 6rgano en relacidn a ohos, con la
tarna, che I'originario disegno di legge (n. 652, presentato dal Governo alla
consecuencia de que la actividad de su titular seri entonces directamente
Camera il 23 ottobre 1976, qui pubblicato nell'AVpendice con la relativa Re-
atribuida al Estado".
lezione) non menzionava, nei citati articoli -pe~ch(: elaborati in modo diver-
so- il termine 'associazione temporanea d i emprese', mentre la Relazione 28 Stancanelli, ob, cit., p. 78.

parlava correttamente d i ' r a g ~ p p a m e n t odi imprese',


Por entender que esta distincibn es extrafia a nuestra prhc-~
ie instrumental que actha a1 servicio de 10s intereses propios de
tica y legislaci6n mantendremos el tbrmino wnsvrcw como deno-
.os distintos sujetos asociadoi' 29.
minaci6n del agrupamiento temporal d e empresas sin personalidad
El problems, como en todo el derecho administrativo, radica
juridica y sin6nimo del concept0 extranjero de joint venture, sin
$n una cuesti6n de competencia, del grado de competencia asig-
olvidar que, en el campo pliblico, es posible encontrar consorcios
nado a1 6rgano que puede llegar a otorgarle la subjetivaci6n ju- formados por entes phblicos, p. ej., municipalidades, con persona-~
ridica. Por eso dice Stancanelli que "el consorcio actha ejercien-
lidad juridica plena o, a1 menos, con un cierto grado de subjetivi-
Jo una competencia suya propia, si bien a1 servicio de intereses dad generada en su atribuci6n de competencia.
substanciales ajenos" 30, cosa que ocurre con cualquier ente per-
En definitiva, lo que aqui se propoue es denominar comorcio
teneciente a la Administraci6n Pliblica descentralizada. ".
de e7npresas lo que en la prftctica intemacional se denomina joint
El joint venture, en cambio (siempre con la terminologia uti-
uenture. Asi, no esti de m b , entonces, hechar un rftpido vistazo.
lizada por 10s autores extranjeros), carece de personalidad juridi- sobre el instituto joint venture, puesto que ello permitiri aclarar~
ca, lo que permite distinguirlo (seghn esos autores) del consorcio importantes aspectos de nuestro consorcio.
(incluso del formado entre entes privados), si bien reconociendo
Dicho instituto furidico -el joint ue&Te- ha tenido en 10s
la cercania de ambos institutos 3 2 .
idtimos a6os un importante desamollo en funci6n del creciente
proceso de integraci6n industrial en orden a la realizaci6n d e in-
29 Ibid., p. 81. Aclara Stancauelli (P. 78), que "~xaminando r n i s de- versiones cuya importancia econ6mica o complejidad tkcnica re-
:alladamente esa relacihn dde instrurrientalidad ~ u e d ecbservarse que constitu- quiere la integraci6n de recursos complementarias par parte de
ye un fen6meno consistente en que el cuidado d e intereses de un sujeto queda dos o m b empresas 33. Esta posibilidad de integrar recursos com-
a cargo de un sujeto diverso: d e t e r ~ n a d o sintereses, aun cuando siguen Per-
teneciendo a un sujeto, son confiados al cuidado d e otro sujeto cuya actividad
se dirige exclusivamente a este fin. Trasladindonos al campo de 10s entes
solvono dal richiamare le diversi motivazioni che militano a kvore di questa
pGblicos y considerando la relaci6n d e instrumentalidad como relacihn entre
conclusione. Valga solo ricordare la capaciti giuridica del consorzio, la fun-
"no de ellos y el Estado, pademos afirmar s u e Bste, mediante la creacihn de zione perseguita dal fondo comune ed il regimene della responsab~litB, per
un ente instrumental, alcanza determinados fines propios que permanecen aver conferma dell'inesatezza di quelle interpretazioni che, muovendo dalla
taler aun desouCs del nacimiento dzl ente a cuyo cuidado se confian".
~ ~

constatazione circa la possibiliti d i utilizzare lo schema consortile per perse-~


30 Ob. "it., P. 82.
guire finalit; comuni alla 1-elazione d i joint venture, hanno awicinato le
31 Barra, Principios. . ., Cap. VI, ps. 172 y ss.: ". . .la calidad d e su-
fattispecie e ritenuto applicabile a1 conbatto d i joint venture la disciplina
jet0 deudor en la relacihn juridico-administrativa la tienen tanto la Adminis-
tracihn PGblica centralizada como la descentralizada. Estas son dos tbcnicas
que hacen a la estructura organizativa de la Administrazibn F'hblica, comple-
consortile".
..
33 Astolfi, ob. cit., I1 conhatto..
..
p. 1; Bonvicini, ob. cit, Le joint oen-~
ture.. p. 3 y ss., explica que "I1 temine joint venture.. .I si collega diret-~
mentBndose con la tkcnica d e la desconcentracihn. Siguiendo la distinci6n
tamente ad un fenomeno gi8 noto nella storia delle origini del diritto socie-
empleada entre otros autores por Cordillo, la centralizocwn implica que las
tario inglese. L'espressione appare, infatti, per la prima volta nel Regno
facultades de decisihn estin reunidas en 10s 6rganos superiores d e la Admi- Unito per indicare le organizzazioni dei leggendari Merchant Venturers o
nistracibn; la desconcentvaci6n, quz la competencia para resolver en forma
definitiva en detenninados procediroientos fue atribuida a hrganos inferiores, Gentlemen Adventurers, per il commercio d'oltremare. Come noto, le c o m -
pagnie dei mercanti rappresentavano, i n arigine, strumenti di colonizzazione
pero siempre dentro de la misma organizacibn o del mismo ente estatal; la ed esercitavano funzioni politiche per la Corona che concedeva loro, con la
descentmlizaci6n significa que la competencia se ha ztribuido a un nuevo personalit5 giuridica (charter of incorporation), poteri d e govern0 e di pro-
ente separado de la administracihn, dotado de personalidad juridica propia y
constituido por hrganos propios, centralizados y desconcentradas que expresan tezione degli interessi inglesi e privilegi monapolistici. Nel corso del secolo.
xvn le compagnie manifestarono la tendenza a trasformarsi da sh.umento p u b
la voluntad de ese ente".
blico a strumento privato e cosi ad esercitare in proprio un'attiviti commer-
32 Astolfi, ob. cit., I2 controtto.. ., sefiala como ejemplo el cansarcio
entre caoperativas, el que es "un nuovo soggetto giuridico deliberatirio del- ciale per conto dei partecipanti. Pur nelle differenze organizzative derivanti
dai diversi charters o incorporation, neUe joint stock companies dell'epoca gli
Yappalto, unico contraente ed unico responsabile verso I'Amministrazione''. associati riunivano merci per venderle altremare (od acquisatvano le mede-.
En la p. 323 insiste: "Le argomentazioni gii svolte escludono con evidenza
sime in comune per rivenderle dl'asta al ritomo delle navi) e provvedevano.
la sussumibiliti della fattispecie nel tipo consorzio con attiviti estema ed as-
plementarios -y no la de realizar la totalidad del objeto societa- En caxbio el ioint venture corporation es nna nueva sociedad
rio, de cada una de las empresas agrupadas, en comhn- es el .de capital con personalidad juridica, constituida para favorecer un
primer indicio esencial en orden a caracterizar la figura, ya sen preexistente contrato de joint centure. Tiene, entonces, una fun-
cuando se dirige a la realizaci6n d e inversiones conjuntas o a la
ejecuci6n de obras de complejidad tal que hace necesaria la parti- ci6n que no requiere formalidad especial alguna para su constituci6n, no li-
cipaci6n de empresas y de recursos o especializaciones que, para mita la responsabilidad de 10s socios, carece de personalidad juridica y nor-
ese caso, resultan complementarias. El dato de mayor importan- malmente es d e duraci6n indeterminada. En este aspecto es lo contrario de
cia, entonces, es que, en cualquier caso, el contrato d e joint uentu- las llamadas incmporoted companys. Conf. UFF, ob, cit., "Conrtructim law",
p. 31 y ss.: "The word campany embraces anybody of persons combined for
re (consorcio para nosotros) satisface la exigencia de varias em- a common object, whether incorporated or not. But it can also be used . . .
presas para participar directamente en el logro de un resultado in the narrower sense of an incorporated company, as opposed to a partner-
econ6mic0, manteniendo cada una de ellas su propia personalidad .ship. . . T h e essential feature of a limited share company is that it exits as
y autonomia juridicas y operativas y asumiendb -enhe ellas, aun- a separate entity, distinct from its shareholders . . . a or firm is
an unicorporated body of persons combined for a common object. While
que no frente a1 comitente, donde la responsabilidad es in toturn- the inc:xporation or disolution of a company is an unequivocal act, it can he
la obligaci6n
- d e cumplir con las prestaciones comprometidas en el .difficult to determine whether or not a partnership exists.. . The essential
.contrato consorcial 34, feature which distinguishes n partnership is the carrying an of a business in
En el derecho anglosaj6n la expresi6n abarca dos categous common with a view to profit . . . A partnership is not a separate legal entity.
It is owned by the partners in common, and each partner except a limited
de agrupamientos empresarios: el joint venture propiamente dicho partner, is liable for the firm's debts".
o unincorporated venture y el joint uenfxre corpmation. The New Encyclopaedia Britannica (Micropaedia V. VII), define a1
Esta diferencia tiene gran importancia en orden a1 problema partnership de la siguiente forma: Partnership, voluntary association of two
de la personalidad juridica d e la uni6n empresaria. Asi, la pri- or more persons for the purpose of managing a business enterprise and sharing
its profits or losses. In the usual partnership, each general partner has full
mera categoria ha recibido habitualmente el mismo tratamiento que power to act for the firm as he thinks best in carrying on its business; thus,
la paenership 3" que carece d e personalidad juridica partners are at once propietors and also agents of thier copartners. Not only
is each partner individually liable to third persons for the obligations he incurs
ad una ripartiziane periodica degli u d i in proporzione ai conferimenti, per lo for the firm, but he is equally liable for obligations incurred by his copartners
pi6 alla fine della singola s~edizione (adventure). Talora l'impresa, sopra- when they are acting within the scope of the firm's business.
descritta assumeva carattere prettamente occasionale, destinata camera a1 If a partner has paid or been required t o pay creditors of the firm from
singolo affare ed alla singola spedizione: in alcune associazioni mercantili, his personal assets, he mxy expect his partners to contribute on an equal or
infatti, gli 'avventurieri', doPo la divisioni dei profitti derivanti dalla vendita some other agreed-upon basis. If this copartners have become insolvent,
.delle merci e la liquidazione d i un compenso (commitment fee) agli admi- however, this remedy to the problem of unlimited personal liability may turn
nistratori della compagnia, erano libeii di participare ad altre spedizioni o, out to he inadequate. The alternative of restricting a liability to
third persons on a pro rata basis ar of limiting it to the property held in com-
34 kstalfi, oh. cit., p. 38. mon never gained foothold in the common law. Unlimited personal liability
35 Bonvicini, ah. cit., p. 137. AJn asi, teniendo en cuenta s u e el con- has been one factor restricting the partnership form of business to small en-
trato de jdnt uenture se caracteriza por tener un objeto limitado a la ,~eali- 'terprises.
zaci6n de un especifico negocio, en base a un acuerdo d e corta duration, se Unlike the corporation, the partnership is generally regarderd merely as
admitia en 10s Estados Unidos su diferencia con la pirtnership. Asi, en el an aggregation of persons doing business under a common name and not as
precedente Aiken Mills vs. U. S., la jurispmdencia se6a16 que el joint venture a legal person separate and apalt from its shareholders. The implication of
no era mAs que "a special combination of two or more persons who, in some this is that the earnings of the partnership will be taxed only as personal carn-
specific venture, seek a profit jointly without any actual partnership or a cor- ings of the partners. Although corporations are usually organized to have
porate designationu. TambiCn se lo caracteriz6 como una partnership limi- perpetual elistence, partnerships may he dissolved at any time upon withdra-
tada en su alcance y duraci6n, en Ross vs. Willett: "a joint venture is a li- wal of a partner and hy operation of law upon the death of a partner. Dissa-
mited partnership: no limited in a statutory sence as to liability but as to lution may be avoided by issuing transferable shares, hut this device is not
scope and duration'' (ambas citadas por Astolfi, ob. cit., ps. 55/56, nota 62). feasible except by a large organization, in which, as in the case of a corpo-
8 6 E el derecho anglosaj6n, recordemos, la partnership es una asocia-
ration, operating control can be centralized in a board of managers.
terioridad al act0 de adjudicaci6n. D e esta manera, si bien el
ci6n instrumental con respecto a1 primer acuerdo, y su raz6n d e adjudicatario es el consorcio -0 mejor, cada uno d e 10s oferentes
ser estriba e n la necesidad de evitar la responsabilidad solidaria consorciados, en tanto gue iormando parte de tal consorcio-, el
d e 10s socios, natural del contrato de ioint venture. El joint w n - contratista pasa a ser la nueva sociedad, sin perjuicio del mante-
ture corporation aparece asi como una cobertura hacia terceros, a nirniento de la responsabilidad solidaria y directa d e 10s consorciados,
fin de garantizar a1 co-venturer la limitaci6n de su responsabilidad De estos antecedentes del derecho comparado pueden extra-
personal 37. erse las siguientes conclusiones: a ) el joint venture no es una so-
Se h a definido a la joint uenture corporation como la "organi- ciedad, ci siquiera una partnsrship propiamente hablando; b ) tan-
zaci6n corntin que reviste la forma d e la sociedad por acciones Y to no es una sociedad, que cuando quiere dksele 10s caracteres
que es poseida por otra sociedad" 38, de manera que se la ha ca- de tal es necesario recurrir a la constitnci6n de una figura poste-
racterizado como una "corporation de iure" (personalidad y res- terior y accesoria, una sociedad ex profeso, el joint oentwe corpo-
ponsabilidad distinta d e 10s socios) y una "partnership d e facto". ration, que alin asi, bajo la figura de la close corpwdion, no al-
(carencia de personalidad y responsabilidad solidaria y directa canza a tener todos 10s atributos de una verdadera corporation,
d e 10s socios) 30. POI supuesto que esta sociedad, que podemos p. ej., de una sociedad por acciones.
denominar accesoria, ha sido tratada con gran recelo por parte de Ahora bien, &mo ha sido delineada esta figura en nuestro
10s autores y la jurisprudencia, admitikndosela finalmente, aun- derecho?
que con importantes limitaciones con relaci6n a1 rkgimen societa-
Ya se ha visto que en el orden legal, la primera regulaci6n
rio comGn, e n particular con respecto a1 n h e r o de accionistas y
la transferibilidad de las acciones. Por ello, la joint wnture tor- que coutempl6 10s principales aspectos de la institucidn fue la
ley 22.460. de consultoria, que equivocadamente la define en su
poration ha sido denominada close c o r p o ~ a t i o n ~ ~ .
art. 20, np. 4, como una "sociedad accidental o en participacidn",
Es importante tener e n cuenta lo expresado en 10s pirrafos
lo que es inexacto, pues segGn lo expuesto en 10s pirrafos anterio-
anteriores, por cuanto en la prictica local existe una fuerte ten-
res nuestro consorcio -como el joint venture del derecho com-
dencia, manifestada a travks d e 10s $iegos licitatorios, de exigir a parado- no posee ninguno d e 10s atributos societarios.
10s mnsorciados Ia consiituci6n d e una sociedad an6nima con pos-
De mayor utilidad resultan, en cambio, las disposiciones d e 10s
arts. 60 y 90 de la citada ley: a ) el consorcio se constituye pam
37 Astolfi, ob. cit., ps. 13 y 47/50. realizar uno o m i s trabajos (servicios de consultoria para esta ley)
38 Bonvicini, ob. cit., p. 181.
deternzinados; b ) solidaridad de 10s consorciados frente a todos
30 Bonvicini, ab. cit., p. 183, tamhien recuerda que en el precedente
estadounidense "Jackson vs. HaaperS se sintetizir este fenbmeno, desde el pun- 10s efectos del contrato principal celebrado con el comitente; c)
to -. vista de 10s ca-ventuteres, como
.. de inter seses and a ~orporation la integraci6n del consorcio es inrnodificable mientras no concluya
as to the re$ of the world". con la ejecuci6n del contrato principal, salvo autorizaci6n expresa
4 0 Astolfi, oh. cit., p. 52, explica que la iuris~mdencia estadounidense del comitente.
ha hecho posible el "mantenimiento delle peculiarit& della relazione di joint
venture nell' amhito di una struttura societaria ed a cio, contribui anche il La prictica administrativa, a travks de 10s pliegos licitatorios
progressive riconocimento, in sede legidativa, della figura deUa close corpora- aport3 tnmbikn datos para la regulaci6n de este instituto:
tion quale tipo d e socjetA a base personale, con un numero ristretto di azio-
nisti, direttamente impegnati nella gestione sociale, le cui azione non sono
a ) Se admite la participaci6n e n el procedimiento licitatorio y/o
liberamente trasferibili" y cita a Israels en The Close Corpmation and the conio posterior contratante a "consorcios d e empresas" (proyecto
lot*, quien define la close comoration corno "an enterprise in corporate Yacireti, coutrato Y -CI, vol. A- en adelante Yacireti) o "empresas
form in which management and ownership are substantially identical. As a
integradas en consorcio" (Subterrkneos de Buenos Aires, concesi6n
result of that identity the participants consider themselves parbers and seek de la red de subterrAneos, pliego bisico, en adelante Subterrineo)
to conduct the corporate affairs to a greater or lesser extent in the manner
of a parhle~ship". Como se ve, se trata de una coppmde en la forma, pero. "grupos de empresas" o "sociedades accidentales de dos o m i s fir-
una partnership en la realidad.
mas" (ENACE, Central Nuclear Atucha 11, pliego A, obra Gruc- catario deberi, dentro de 10s 15 dias de notificada la adjudicacibn,
sa, parte civil, en adelante, Atucha). constituir en Buenos Aires una sociedad an6nima que s,- r i consi-
b ) Cada uno d e 10s consorciados deberi presentar l a totalidad derada, a todos 10s fines del contrato, mmo el concesionario. El
d e la documentaci6n que se exige del oferente individual (Yacire- (no se entiende d m o un oferente individual puede constituir una
t i , 1.12.C; Subterrineo, 4.3). sociedad an6nima manteniendo el principio d e identidad entre
c) Los consorciados deberin unificar el domicilio y la per- adjudicatario y contratista) o 10s oferentes que dehan constituir
soneria (Id. fuente citada en el punto anterior). una sociedad au6nima serin ante la municipalidad garautes soli-
d ) Deberi tarnbikn ser acompaiiado a la oferta el contrato darios lisos y llanos pagadores con renuncia a 10s beneiicios de
consorcial, en el que conste (Yacireti, 1.12.C): divisibn y excusibn por todas las obligaciones del concesionario~
"1. El compromiso expreso d e responsabilidad principal, so- emergente del contrato, debiendo firmar la correspondiente ga-
lidaria e ilimitada de todas y cada una d e las empresas asociadas rantia simultineamente con la firma d e la contrata por la socie-
durante el proceso de licitacibn, la ejecucion total de la obra, el dad anbnima concesionaria y en el mismo instrumento. Hasta
cumplimiento de todas las obligaciones del contrato (de obra), 1 tanto se apruebe y registre debidamente, la sociedad a n h i m a
su responsabilidad patronal, su responsabilidad frente a terceros I concesionaria actuari como sociedad en formacibn, siempre con la
y a todas las demis obligaciones y responsabilidades legales y con- i
i garantia de 10s oferentes en la forma arriba establecida. Los
tractnales. ! oferentes serin garantes solidarios, lisos y llanos pagadores d e to-
"2. El compromiso de mantener la vigencia del consorcio a. das las obligaciones asumidas por la sociedad andnima concesio-
asociacibn por un plazo no menor del fijado para la terminaci6n naria hasta el momento de constituirse en forma definitiva dicha
de las obras y, en todo caso, hasta que se hayan cumplido todas sociedad an6nima concesionaria. En ese momento seri la socie-
las obligaciones emergentes del contrato ( d e obra). dad anbnima coocesionaria la responsable principal de todas las
"3. El compromiso de mantener la composici6n del consorcio: obligaciones asumidas . . . , sin perjuicio de la garantia que otor-
o asociacibn durante el tkrmino fijado en el iuciso anterior, asi guen en el act0 de la firma de la contrata 10s oferentes, en 10s
como tambikn d e no introducir modificaciones en 10s estatutos de plazos convenidos y su ejecucidn, d e acuerdo con 10s proyectos
las empresas integantes que importen una alteracibn de la respon- aprobados, asi como tambikn sn responsabilidad por 10s defectos
sabilidad, sin la aprohacion previa de Yacireti. o vicios :ocultos que dichas obras puedan presentar".
"4. El compromiso d e actuar ante Yacireti durante ese lnismo
Se prevk, ademis (numeral c ) , que "las acciones serin nomi-
lapso, exclusivamente bajo la represeolacibn unificada que se re-
oativas, no endosables, y su transferencia deberi ser previamente
quiere en este numeral. . .".
notificada a la municipalidad" (no aclara si la concedente podria
En algunos casos se exige o se permite la constitucibn dc uoa
oponerse a tal transferencia).
sociedad por acciones, posterior a la adjudicacibo, sin' perjuicio
de la subsistencia de la responsabilidad directa y solidaria de !os I,os contratos consorciales, a su vez, por lo comlin r e h e n
consorciados. El pliego de Subterrineo, en el numeral 4.9 exige 10s siguientes elementos principales 41:
que "cada adjudicatario (es que la adjudicacibn a un consorcio
supone, de por si, que hay varios adjudicatarios: todos 10s con.or- 4 1 Astolfi, A., ob. cit., El contrato intemacional de joint uenture, enu-
ciados) deberin constituir una sociedad anbnima cuyo objeto so- mera como "eiementos generalmente recurrentes en 10s contratas internacio-
cial especifico seri el cumplimiento de las obligaciones emergen- nales d e joint tienture" a 10s siguientes: a ) un aporte d e recursos camplemen-
tes del contrato". En el pliego de condiciones d e la hlunicipa!; tnrios; b ) mandato a la empresa cabeza d e gmpo; c ) exclusi6n d e responsabi-
lidad solidaria (lo que en nuestro derecho n o ocurre por ser una exigencia
dad de la Ciudad de Buenos Aires para la constmccibn por conce- comi-n en 10s pliegos licitarios, convirti4ndose la responsabilidad solidaria en
sibn de obra pliblica d e las autopistas 25 de Mayo y Perito More- favor d e la comitente d e la obra en una caracteristica propia del "consorcio':);
no sr establece (numeral 1.6): "El oferente que resultare adjudi- d ) constituci6n d e un fondo d e gesti6n; e ) constitucih d e un comiti: d e g e s
a ) la voluntad de constituir el consorcio, con el reconocimien- peciales de 10s consorciados para afrontar necesidades extraor-
to de la plena solidaridad ante el comitente, sin perjuicio de la dinarias de caja.
delimitacibn de responsabilidades entre las partes; Corresponde sefialar que el contrato consorcial podri prever
b ) sin perjuicio de la solidaridad, las partes p e d e n tam- la exclusi6n de algirn consorciado, voluntaria o como sancitn, no obs-
bikn definir, juntamente con sus aportes de ejecucibn (personal, tante que este 6ltimo continuari solidariamente obligado ante la
direccibn, maquinarias, etc.), la constitucidn de un fondo c o m h comitente, sin perjuicio de lo que pueda preverse por las partes,
para satisfacer las necesidades de caja; con10 se veri m b adelante. No ocurre lo mismo, en cambio, con
c) administracibn del consorcio; suelen establecerse tres 61- la posibilidad de incorporar un nuevo consorciado, pues esto con-
ganos: trariaria el principio de identidad entre el adjudicatario y el con-
1) el Consejo de Direccibn, integrado por todos los consor- tratista. Este punto debe tener el mismo tratamiento que la
.cistas, con un nirmero de votos conforme a la participacibn de cada cesi6n y subcontratacibn de obra (infra, 9 22), la que s610 es vi-
uno. lida frente a la comitente si ksta la autoriza. Ademis, lo que es
2) la Empresa Lider, que es aquella cuya presencia es deter- mis grave, la falta de autorizacibn puede traer aparejada no s6lo
minante para la obtenci6n de la adjudicacibn, o bien la que eje- la inoponibilidad de la existencia del nuevo consorciado ( o cesiona-
cuta la mayor parte de las prestaciones camprometidas con la rio, o subcontratista), sino la rescisi6n del contrato de obra por
comitente, quien asnme la representacibn del consorcio frente a culpa del coutratista.
la comitente y frente a terceros y designa a1 director de obra. En Con todos estos elementos es posible intentar una caracteri-
ocasiones, sin perjuicio del papel especial de la Empresa Lider en zacibn del consorcio de empresas:
el Consejo de Direccibn, si se constituye una sociedad anhima a ) Es un negocio juridic0 "se~cial", por cuanto esti al ser-
accesoria a1 consorcio (joint ventwe corporation) Qsta es la que vicio de otro anterior, que es su objeto y finalidad. En efecto,
asume la representacibn del consorcio hacia el exterior; t el consorcio (en lo que aqui interesa) no se explica sino en fun-
3) la Direccibn de Obra, que si es unipersnal se confuude cibn, primero, de la preseutacibn de una oferta en una determinada
con el representante tkcnico de l a contratista, quien supervisa y licitaci6n, y, luego, si esa oferta es beueficiada con la adjudica-
dirige la ejecuci6n de 10s trabajos de acuerdo con las instruccio- cibn, la ejecucibn de la obra contratada con el comitente principal.
nes que reciba de la Empresa Lider. Es un contrato accesorio del primero (contrato de obra), por con-
El contrata consorcial contempla tambibn, como es Ibgico, las siguiente su suerte depende de la validez y subsistencia deI con-
sanciones mutuas para 10s supuestos de incumplimientos y proce- trato principal. El consorcio, como realidad juridico-material, es
dimientos para resolver ]as disputas entre 10s consorciados, sin un medio para la realizaci6n de una obra ( d e otro contrato); en
perjuicio del reglamento iuterno que regula 10s aspectos de de- si mismo no tiene fin de lucro, pues 10s consorciados pretenden
talle (pero cruciales en la re1at:ibn consorcial) referentes a la com- lucrar con su propio esfuerzo auuque accidentalmente, dentro del
plementacibn y coordinacibn de 10s consorciados en la ejecucibn consorcio; no tiene vida propia, en defintiva, sino una vida abso-
de las obras (lo que dependeri de que la obra sea o no divi- lutamente ligada a1 contrato principal.
sible), organizacibn del paiiol y depbsito de maquinarias, conta- b ) Desde este punto de vista, el consorcio no es mis que una
bilidad intema, asignacibn de personal, etcktera. parte del mime contrato de obra, ello sin perjuicio de que 10s
Por supuesto el contrato no podri dejar de contemplar cbmo consorciados puedan regular sus relaciones con la libertad nego-
se distribuirin 10s beneficios, asi como tambikn 10s aportes es- cia1 consagrada por el art. 1197 del C6digo Civil, pero con 10s li-
mites impuestos por el contrato de obra principal.
ti6n o de una sociedad 6rgano; f ) adquisici6n a titulo originario, pro quota, Esta consideracidn del contrato consorcial en el marco del
del fruto de la inversibn o del ~ o r r e s ~ o n d i e n ta1
e contrato convenido con el
comitente; g ) previsihn de una cl&usula cornpromisoria para resolver 10s con-
contrato de obra permite analizar a1 primero desde dos perspec-
flictos entre 10s consorciados (ps. 51 a 86). tivas. Como ya se dijo, entre 10s consorciados se celebra un ne-
ELEMENTOS DEL CONTRAro DE OBRA P'ÚRLICA 195
194 CONTRATO DE OBRA PÚBLICA

obra es directa y plena, sin importar los acuerdos internos (no


godo jurídico amparado por el amplio marco del arto 1197 del
Código Civil. Pero el aspecto más importante es su carácter ser- conocidos por el comitente) de los mismos consorciados, que s610
vicial con respecto al contrato de obra, de tal manera que ello tendrán validez entre si. Esta solidaridad, qne es ID habitllal en
convierte en parte necesaria del contrato de consorcio al mismo materia de obras públícas, deberá ser establecida expresamente
comitente de la obra J pues en ese contrato consorciaI no podrá en el 'contrato de obra. De lo contrario regirá el principio de la
pactarse ninguna estipulación, que> por compron~lCter la co:recta no solidaridad establecida en el arto 381 de la ley 19.550.
ejecuci6n de los trabajos contratados o las garantías del comItente En contra del principio establecido en el nuevo art. 381 de la
no sea aceptada por este último. N 6tese que el contrato cons~r­ ley de Sociedades Comerciales, entiendo que corresponde soste-
cial forma parte de los documentos que los oferentes - consorCla- ner la regla de la solídaridad frente al comitente de la obra (sal-
dos- deben presentar en el proceso licitatorio, el que será valo- Vo pacto expreso en contrario, que deberá ser aceptado por el
rado juntamente con los restantes antecedentes a los efectos de comitente), pues responde mejor a la naturaleza de la institución.
decidir la adjudicaci6n, y que, precisamente, es aceptado por la Nótese que en el contrato de obra pública la admisión del con-
comitente con el acto de adjudicación. La adjudicación, entonees, sorcio se justifica por la complementación de capacidades y res-
relaciona al comitente Con el consorcio, lo hacen formar {k'1rte, ponsabilidades de los ejecutores de la obra, lo que difícilmente
desde su posici6n jurídica, del conjunto de derechos y obligaciones será divisible. El mismo interés público comprometido en el
que surgen de ese acuerdo_ Esto no significa que el comitente contrato no admitirá esta división, que además carece de utilidad
pueda tomar parte de ninguna decisión o actividad que haga a la práctica y será, en todo caso, fuente de conflictos.
vida interna del consorcio~ pero sí que, al aceptar el contrato con- e) El contrato de obra se caractcl'Ízará por tener un comitente
sordal en el acto de adjudicación, como se dijo antes~ asume tam- .mico y un constructor o contratista plural y solidario, pero será
bién él -el comítente- sus consecuencias en lo que corresponda. siempre el mismo contrato de obra.
Por ejemplo, y esto tiene especial significación, la cláusula de ex- f) Los bienes aportados serán de propiedad de los consor-
clusión por sanción de algún consorciado no podrá ser impedida por ciados individuahnente, según su aporte, sin perjuicio de que exis-
el comitente, en la medida, insisto, que dé su aceptaCIón de tal tan bienes adquiridos en com.m bajo e! régimen del condollÚnio.
regulación al adjndicar la oferta. Sin embargo, por cfecto del con- g) Las obligaciones asnmidas frente a terccros (no el comi-
trato de obra, y se destaca aquí la íntima L'Omplementación e in- te:lte) pesarán sobre quien las asuma, sin perjuicio de! traslado
jerencia de los dos contratos, esta exclusión (que el comitente nO interno de esa responsabilidad y salvo que la obligación haya sida
podrá impedir) no eliminarle la responsabilidad solidari~ del ex- asumida en nombre y por cuenta de cada uno de los consorciados
cluido frente a dicho comitente, salvo que éste lo autonce expre- en virtud de la existencia de un poder otorgado en tal sentido,
samente (la eximici6n de la solidaridad) o ello se haya pactado que puede estar contenido en el mÍSlno contrato consorcial, con
expresamente en el contrato de obra. excepción de aquellos negocios jurídicos que requieran poder es-
D) N o es una sociedad, y la posibilidad de existencia de una pecial y de determinadas formas de emisión (p. ej., escritura pú-
sociedad posterior (joint venture corporation) es un elemento m- blica) .
trascendente y no esencial al negocio jurídico: ni can res~cto a; h) La quiebra de uno de los consoreiados no importa la res-
contrato de obra principal, ni con referencia al conSorclO en SI cisión del contrato de obra principal 42 en la medida que ello no
mísmo. Esta «nueva""'" sociedad tendrá, en todo caso, efectos con
relación a terceros distintos del comitente de la obra (p. ej., pro-
42 El .art. 68 del Pliego de C1áu.<iulas Administrativas Generales para la
veedores), aunque con las limitaciones en materia de excl~sión Contratación de Obras de! Estado, ley de ('A)ntratos del Estado, España, dis-
de responsabilidades de los socios, que son inherentes a su calidad pone: "Cuando alguna de las empresas que forman parte de una agrupación
de sociedad gestora. temporal quede comprendida en alguna de las circunstancias previstas en los
d) La solidaridad de los consorciados frente al comitente de la números 4. 5 y 6 del arto 151 del Reglamento General de Contratación (muer-
afecte sustancialmente las garantias que benefician a1 comitente de la to la hace responsable exclusiva y sujeta, por ende, a las penali-
dbra. dades previstas, que pueden llegar hasta la rescisi6n parcial del
i ) Rendici6n de cuentas entre 10s consorciados, seglin lo pac- contrato;
tad0 en el contrato y, supletoriamente, conforme lo establezca la b ) frente a terceros la responsabilidad es ilimitada y solida-
legislaci6n pertinente. ria si la obligaci6n fue contraida por el Comitk de Direcci6n o por
Completando lo expuesto cabe citar por su importancia co- la empresa mandataria de todos 10s contratantes. Si una de las
mo aporte al estudio del tema, que la Subcomisi6n de Asesores empresas se obliga por sf, sin invocar la representaci6n de 10s de-
Legales de la Cimara Argentina de la Construcci6n, en el Sim- mBs, s610 ella es responsable. Si una de las empresas se obliga
posio sobre Agrupamientos Empresarios, celebrado en la ciudad invocando la representacibn de las demis, o del consorcio, sin
d e C6rdoba 10s dias 28 a1 30 de noviembre de 198043 aprobtr la estar facultada para ello, se aplican las reglas del C6digo Civil
siguiente configuraci6n de 10s caracteres del contrato consorcial: sobre mandatos.
P u ~ mPRIMERO: Se denomina contrato de colaboraci6n y PUNTOQUINTO: Ila organizaci6n del consorcio y las restantes
coordinaci6n empresaria no societaria, o contrato de consorcio de relaciones entre sus miembros serin regidas por el acuerdo mnsor-
empresa, a la convencibn por la cual dos o mis personas fisicas cial, el que no podri:
o juridicas se comprometen a realizar en comhn una actividad, a ) limitar la libertad de actuacidn de 10s consorciados fuera
obra o s e ~ c i oque se caracterice como un negocio determinado, del Bmbito estricto del negocio que origina el consorcio;
concreto e individualizado. b ) habilitar a1 consorcio para la realizaci6n de otros negocios
Pmm SEGUNDO: El consorcio definido en el punto anterior no distintos a 10s que justifican su actuacih.
es sujeto d e derecho. Carece de patrimonio propio, no tiene fin
PUNTOSEXTO: LOS estados contables y rendiciones de cuentas
d e lucro en si mismo y no es sujeto de obligaci6n fiscal alguna.
PUNTO TERCERO: El contrato consorcial se caracteriza por: emitidas por quien tenga la facultad de administrar el consorcio y
respecto de la actividad de &te barin plena fe a 10s efectos im-
a ) 10s contratantes conservan su individualidad juridica y au- i

tonomia de gesti6n; positives, tanto en el orden nacional como provincial y municipal,


sin perjuicio de la verificaci6n de la documentaci6u que 10s res-
b ) el consorcio tendri un objeto referido a un negocio con- palde a realizarse en el lugar previsto en el contrato consorcial.
creto, determinado, individualizado y temporal;
En la misma reunibn, el doctor Horacio Oyuela produjo, con
c ) el tiempo que demande cumplir el objeto propuesto sa-
la aceptaci6n de 10s asisteutes, el siguiente informe, que transcri-
fialara la duraci6n del contrato.
PUNTO CUARTO: Responsabilidad: Corresponde distinguir en- bo en su parte medular:
tre las empresas contratantes y frente a terceros: "La vinculaci6n que nos ocupa constituye un fendmeno tras-
a ) entre las empresas la responsabilidad surge del confrato, es cendente en la actualidad empresaria y de efectos importantes en
individual y mancomunada. Cada contratante asume ciertas obli- el proceso de la produccibn y ejecuci6n de obras. Por lo tanto,
gaciones exigibles a todo lo largo de la relaci6n. El incumplimien- y atendiendo a razones de buena tkcnica juridica, corresponde dar-
le el lugar que le corresponde trasladando a la ley escrita, como
tantas veces, una figura que la realidad y la prictica tienen ya
te, extinci6n de la personalidad juridica, declaraci6n d e quiebra o de suspen- delineada con claridad, aunque presente distintas variantes.
si6n d e pages), la Administraci6n estad facultada para exigir el estricto cum-
plimiento de lzs obligaciones pendientes del contrato a las restantes empresas "En tal tesitura, optamos por el contrato de 'consorcio', que
que formen la agrupaci6n temporal o para acordar la resoluci6n del mismo". se reconoce cuando dos o mis empresas -constituidas o no hajo
4 3 Cont6 con la presencia de 10s abogados ZavaUa, Oyuela, JuliQn del forma societaria- se vinculan temporalmente con el objeto de
del Campo, Palmero, Morera, Babino Garay, Maraggi A c u ~ ,G a ~ c i aRajo y realizar sus principales fines, o determinada irea de su actividad,
Barra, miembros de la citada subcomisi6n d e Asesores Legales d e la CQmara
consemando su independencia juridica y bajo una direcci6n hnica.
Argentina d e la Construcci6n.
sas". Se reitera que en esta obra se mantiene el thmino "con-
"La denominacibn 'consorcio' se propone, por ser la mis usa-
sorcio" por ser el m i s utilizado en la prictica nacional y ademas
d a en nuestro medio, sin desconocer su significado polivalente en
por resultar mis representativo de la individualidad y diferen-
otros paises y sistemas juridicos.
"Este contrato encuadra en la categoria de 10s contratos de ciacibn del instituto juridico. En definitiva, si bien el consor-
cambio, por oposicihn a Ins denominados asociativos. Esto lo ex- cio es por naturaleza una uuibn transitoria de empresas, no toda
reuni6n transitoria de empresas es necesariamente un consorcio.
eluye de las fonnas societarias tipificadas en la ley 19.550 y de las
asociaciones reconocidas por el Cbdigo Civil, para situarlo en el Tambihn en el derecho comparado, seglin ya fue destacado
c a m p de 10s eontratos comerciales. m i s arriba (p. ej. art. 20 de la ley italiana 584, que regula la
"Dentro de l a categoria indicada, el vinculo que analizamos adecuaci6n del prccedimiento d e adjudicaci6n d e 10s "appalti d i
presenta 10s caracteres de 10s contratos parciarios, en especial el laaori pubblici" a las directivas d e la Comunidad Econ6mica Eu-
d e asunci6n de un riesgo en el proceso productive. ropea), se suele utilizar la expresi6n "associazione t e m p r a n e a di
"Caracteres. Pueden s e ~ l a r s e10s siguientes: imprese", lo que es asimismo criticado por la doctrina: "si tratta
"a) contrato de cambio; tuttavia di un termine inesatto, certamente non coerente . . . , pro-
" b ) d e naturaleza mercantil; prio con la disciplina intema che del reaggruppamento.. ." qne
regula la misma ley 584 4 4 . ES tambikn criticable la incorpra-
"c) plurilateral: pueden intervenir varias empresas, su nfi-
mero no esti limitado ni encaja en la bilateralidad clisica. Todas
y cada una de las empresas asume obligaciones respecto de las
.,
cibn de esta figura e n la ley de Sociedades, pues el consorcio o
unibn transitoria de empresas" no es, como la misma ley lo de-

demis y adquiere derechos frente a las demis; clara, nna sociedad. De ahi que, metodolbgicamente, no se com-
prenda el porquk de su inclusi6n en ese text0 normativo.
"d) aleatorio: lo distingue la asuncibn d e un riesgo en el pro-
ceso productive; El art. 377 establece muy claramente el caricter "servicial"
" e ) no reciprocidad: las prestaciones no son reciprocas, en el
sentido del sinalagma cl8sico; estin sujetas a las alternativas y
..
del contrato d e consorcio, a1 sefialar que el mismo se constituye
para el desarrollo o ejecuci6n de una obra, servicio o suministro
necesidades de la actividad emprendida; concreto". El contrato consorcial podrin celebrarlo las socieda-
" f ) oneroso: cada contratante se vincula para lograr un fin des constituidas en la rephblica y 10s empresarios individnales do-
lucrative, direct0 o indirecto; miciliados en ella, asi como tambikn las sociedades constituidas
" g ) no formal: puede celebrarse por escrito o verbalmente. en el extranjero, las que deberin, a tal efecto, cumplir con 10s
E n el primer caso esti desprovisto de solemnidades; requisitos que, para el ejercicio habitual en el pais d e 10s actos com-
" h ) de duracibn limitada: el t i e m p que demande cumplir la prendidos en su objeto social, o para establecer sucursal, asiento o
actividad propuesta sefiala la duraci6n del contrato. cualquier otra especie de representacibn permanente, estahlece
"Prueba. Puede probarse por cualquier medio de prueba de el art. 118, pirrafo 30 de la ley de Sociedades Comerciales. Na-
10s contratos. En nuestro rkgimen juridico se aplican 10s articu- turalmente, para la ejecnci6n del contrato de obra pliblica 10s
10s 207 y siguientes del Cbdigo de Comercio." consorciados deberin tambikn estar inscriptos en el Registro Na-
eional de Constructores d e Obra Pliblica, seglin las exigencias de
la reglamentacibn del mismo y d e 10s pliegos de cada licitaci6n
en cuesti6n.
Como novedad, el art. 380 d e la ley de Eociedades Comercia-

Como ya fue dicho, la reciente reforma d e la ley d e Socieda- 41 Pallotino, M., en la publicaci6n conjunta Le norme di ndegwrmento

des Comerciales 19.550, establecida por ley 22.903, regula el ins- alle diretiice C E E in moteria di appalti di laoori pubblici, Giuffre, MiMn,
1979, p. 181.
tituto del consorcio, a1 que denomina "nnibn transitoria de empre-
les obliga a la inscripcibn del contrato consorcial y del documento 10) Las condiciones de admisibn de nuevos miembros.
en que se designa a1 representante del consorcio (si es que esta 11) Las sanciones por incumplimiento de obligaciones.
designacibn no esti incorporada a1 mismo contrato consorcial) en 12) Las normas para la confeccibn de estados de situacibn,.
el Registro Pliblico de Comercio, disposicibn que tiende a prote- a cuyo efecto 10s administradores llevarAn, con las formalidades
ger 10s intereses de terceros que ~ u e d a ntener relaciones con el establecidas por el Cbdigo de Comercio, 10s libros habilitados a
consorcio, otorghdole a kste la publicidad debida. nombre de la unibn que requieran la naturaleza e importancia de.
El consorcio, que como lo establece el art. 377 de la ley de la actividad comlin.
Sociedades no es ni sociedad ni sujeto de derecho, se constituye El art. 379 prevk la designacibn de un representante comlifi
a travQ de un contrato celebrado por instrumento public0 o pri- de todos 10s consorciados cuyo mandato no podri ser revocado
vado el que, seghn el art. 378, debe expresamente regular y prever: sino mediando justa causa, la que debe ser valorada .y decidida
1) El objeto con determinaci6n concreta de las actividades por el voto de la mayoria absoluta d e 10s consorciados.
y 10s medios para su realizaci6n. Esta mayoria, en cambio, se convierte en nnanimidad cuan-.
2 ) La duracidn, que serb igual a la de la obra, servicio o do se trata de adoptar cnalquier otra decisibn, salvo que el con-
suministro que constituye el objeto. trato consorcial establezca lo contrario (art. 382), pudihdose
Estas disposiciones ratifican el caricter "servicial" del con- fijar distintas clases d e mayoria para distintos tipos de decisiones.~
trato de consorcio y su esencial vinculacibn con el contrato (de Como ya fue dicho, seglin el articulo 381 la solidaridad entre
obra en lo que aqui interesa) para el cumplimiento del cual se 10s consorciados no se presume, principio que es criticable, seglin
constituye. las razones (confirmadas por 10s antecedentes del derecho com-
3) La denominacibn, que sera la de alguna o algunos o de parado) expuestas en 10s parrafos anteriores. No obstante, en
todos 10s miembros, seguida de la expresibn "unibn transitoria el contrato consorcial, para las relaciones entre 10s socios, o en el
de empresas". contrato principal para el cumplimiento del cual el consorcio se
1
4) El nombre, raz6n social o denominacibn, el domicilio y constituye, podri establecerse la responsabilidad ~ o l i d a r i a ~la.
~,
10s datos de la inscripcibn registral del contrato o estatuto o de que, en el segundo caso beneficiari exclusivamente a1 comitente
la matriculaci6n o individualizacibn, en su caso, que corresponda de la obra o contratante del servicio o suministro, independien-
a cada uno de 10s miembros. En caso de sociedades, la relacibn temente de lo que ocurra en la relacibn entre consorciados y frente.
de la resolucibn del 6rgano social que aprob6 la celebracibn de a otros terceros. Asi fue tratado en otras legislaciones, como en
el caso de la ley italiana 584, que en el art. 21 establece: '?l
la unibn transitoria as1 como su fecha y nbmero de acta.
offerta delle imprese riunite deterrnina la loro responsabilia so-
5) La constitucibn de un domicilio especial para todos 10s
lidale nei confronti del soggetto appaltante".
efectos que deriven del contrato de unibn transitoria, tanto entre
las partes como respecto d e terceros. El art. 383 establece otro prinripio importante: la quiebra
de cualquiera de 10s consorciados, o la incapacidad o muerte de
6) Las obligaciones asumidas, las contribuciones debidas a1
10s empresarios individuales, no va a provocar la extinci6n del.
Fondo Comlin Operative y 10s modos de financiar o sufragar las
actividades comunes en su caso. contrato consorcial, el que continuari con 10s miembros restantes
si es que 6stos acuerdan la forma de hacerse cargo de las presta-
7) El nombre y domicilio del representante. ciones del comitente.
8) La proporcibn o mktodo para determinar la participa-
No obstante este principio legal, debe recordarse que el co-
cibn de las empresas en la distribucibn de 10s resultados o, en
su caso, 10s ingresos y gastos de la unibn.
9) Los supuestos de separacibn y exclusibn de 10s miembros *j Conf. Cassagne, J. C., Los cmorcios o uniones transitor& de em-.
y las causales de disolucibn del contrato. ED, del 20 de octubre de 1983.
:?:esus en la cotltratecidn ndininirtrativa,
mitente, a1 adjudicar el contrato de obra luego del correspondien- prictica de las exigencias de la justicia distributiva, en particular
te procedimiento de seleccibn, ha tenido en cueuta la conforma- haciendo uso del 'vinculo de comparaci6n" que, dentro de la es-
ci6n del consorcio como tal, es decir con la totalidad de sus in- tructura de esa especial relaci6n de justicia, permite determinar el
tegrantes, en funci6n de sus cualidades individuales y con la nueva alcance de la "igualdad coma medida", elemento esencial en toda
calidad o competencia para ejecutar la obra que surge d e la relaci6n regida por la virtud de la justicia 46.
complementacibn de 10s consorciados. En la ocasi6n pertinente se expondri y desarrollari en qu&
Por ello no puede irnponkrsele a1 comitente la obligaci6n de medida el procedimiento de selecci6n de contratista transmite sus
continuar la obra con un consorcio cuya integraci6n puede conver- efectos sobre el resto de la vida de la relaci6n contractual, en la
tirse en diferente d e la que se tuvo en cuenta en el momento de ,que, potencialmente, la presencia "virtual" de las restantes ofertas,
decidir la adjudicacibn, principio que vale no s610 para el su- no beneficiadas con la adjudicacibn, no puede ser descartada.
puesto de la quiebra o incapacidad de uno de 10s consorciados, Como uno de 10s requisites mis determinantes para decidir
sin0 tambikn en lo que tow a cualquier otra forma de modifica- la adjudicaci6n es la "persona" del oferente (normalmente se tra-
ci6n de la composici6n del consorcio por admisi6n d e nuevos t a d de personas juridicas sobre las que se vaIorar6 su experiencia,
miembros, o exclusi6n o modificaci6n de 10s miembros existentes. antecedentes tGcnicos, correcci6n en la ejecuci6n de otros con-
Sin embargo, en aquellos supuestos en que puede demos- tratos, certificaciones emanadas del Registro de Constructores,
trarse que la exclusi6n de un consorciado (par cualquier razdn, :solvencia patrimonial y financiera, etc.), no cabe dudas de que
cualquier alteraci6n posterior, no rigurosamente justificada, en la
incluyendo su quiebra) no afecte la capacidad y solvencia del
consorcio en si mismo, el comitente no podri negarse a continuar persona del contratista importari una grave contradiccibn con la
con la ejecuci6n del contrato, ya que careceria de causa para regla de la comparaci6n que presidib todo el procedimiento de
i selecci6n del contratista.
ello. Aun asi, el comitente principal mantendria su poder de
veto en relacibn con la incorporaci6n de nuevos consorciados, por En definitiva, por la via de la cesi6n del contrato, e incluso
aplicaci6n de los mismos principios que rigen en materia de cesi6n de la subcontrataci6n total o parcial del mismo, se puede llegar a
y subcontrataci6n del contrato, que se veri en el parigrafo si- burlar la exigencia legal del debido procedimiento de seleccibn
guiente. previo a la contrataci6u. Por tal motivo, las normas que regu-
La ya citada ley italiana 584 otorga, por ejemplo, una opci6n Ian el contrato de obra pliblica han tratado a la cesi6n y subcon-
en favor del comitente que, en caso de quiebra de la empresa trataci6n con un criterio absolutamente restrictivo.
mandataria del consorcio, podri admitir la designaci6n de otro Asi, el art. 23 de la ley 13.064 textualmente dispone: "Finna-
mandatario o tener por resuelto el contrato. En cambia, si la do el contrato, el c a t ~ a t i s t ano padrd transferirlo ni cederlo, en
quiebra es de una de las empresas mandantes (el resto de .las con- toclo o en parte, a otra persona o entidad, ni asociarse para su
sorciadas), la responsabilidad por la parte del fallido es asumida .cumplirniento, sin autorimidn o aprobacidn de autoridad cmnpe-
por la empresa capogruppo (art. 23). tente", llegando a sancionar la cesi6n o subcontrataci6n no autori-
zada con la resoluci6n del contrato por culpa del contratista, con-
forme lo dispone el art. 50, inc. d ) de la misma ley.
Una disposici6n sernejante esti contenida por el art. 19 de
la misma ley, aun cuando referida a una situacibn anterior a la
contrataci6n: el articulo autoriza la cesidn de 10s derechos emer-
Como se veri mis adelante, el contrato d e obra del sector gentes de la calidad de oferente o adjudicatario, sujeto a la apro-
pliblico es, salvo raras excepciones, resultado de un procedimien-
to de selecci6n del contratista particular en el que la Administra-
ci6n comitente ha seleccionado la mejor oferta en una aplicaci6n 46 Barra, ob. cit., Princi&s.. ., ps. 120/123.
E ~ ~ ~ w rDEL
r o CON'IRATO
s DE OBRA P~BLICA 205

baci6n de la "autoridad competente" que, a falta de previsi6n mente, la ejecuci6n material de la obra quede a cargo de un su-
expresa, no puede ser otra que el 6rgano competente para adju-~ jet0 distinto del contratista.
dicar la oferta. Esta aprobacibn seri siempre exceptional, y las. El mismo principio d e ejecucibn personal del contrato 48 tor-
causales que justifiquen la pretendida cesi6n deberin ser analiza- na invilida tal subcontrataci6n de no contar con la expresa au-
das restrictivamente por el 6rgano con competencia para resolver. torizaci6n de la comitente. En este sentido, la situaci6n es id&
La norma dice que el cesionario deberL ofrecer, "por lo menos",. tica que en el caso de la cesibn, si bien en el subcontrato la rela-
iguales garantias -se refiere a la garantia de oferta, pero, si ci6n contractual original se mantiene inmodificada, en la medida
la adjudicaci6n ya fue efectuada, se puede interpretar que el le- que dicho subcontrato origina simplemente un vinculo contrac-
gislador esti pensando en la garantia del contrato (art. 21, ley de tual de derecho privado entre el contratista principal y el sub-
Obras Pliblicas nacional) y tambiQn en 10s requisitos de calidad y contratista, sin efectos sobre la comitente, ni aun en el caso de
solvencia personales del oferente-, lo que indica que la Adminis- expresa autorizaci6n, ni tampoco en 10s casos en que, por la natu-
traci6n tiene derecho, por motivos fundados, a exigir una me- raleza especial de la obra, la subcontrataci6n esti autorizada en
jora de la garantia ofrecida por el cedente. 10s misrnos pliegos licitatorios, admitiendose la nominaci6n del o
Corresponde destacar que el supuesto en examen se refiere 10s subcontratistas en la oferta.
Aun en estos casos la relacibn contractual principal ~610al-
a la cesi6n o transferencia de la situaci6n juridica del contratista
canza a1 contratista que result6 tal por haber sido adiudicada su
en la relaci6n contractual (la que puede ser total o parcial), de
.oferta, provocando s610 el derecho d e la comitente a exigirle que
manera que el originalmente contratista queda sustituido en for-
ma tambikn total o parcial, en su calidad de constructor en el ponga en prictica el subcontrato indicado en aquella oferta. Pero
contrato. Distinta es la situaci6n de la cesibn del crQdito del
1 no hay relaci6n juridica entre Administraci6n y subcontratista.
contratista por el pago del precio de la obra, tema que se exami- ,
I
Para Cianflone el caricter personal del contrato de obra pli-
blica impide a1 contratista transferir a otro su posici6n contractual,
nari mis adelante.
i asegurando asi la inmutabilidad del sujeto contratante. Con el
Ante la clara disposicidn de la ley, la cesi6n s610 seri vilida ! mismo sentido, la prohibici6n del subcontrato (subappzlto) en-
de ser expresamente aceptada por la Administracibn, no bastando cuentra su raz6n en la necesidad de impedir que el cumplimiento
para ello la mera notificaci6u. La iuvalidez de la cesi6n. efec-~ del trabajo pueda generarse en la acci6n d e una persona distinta
tuada sin la aprobaci6n de la comitente, alcauza tambibn la rela- del contratista 48.
!
ci6n cedente-cesionario, puesto que tal coutzato de cesibn, por asi i
En definitiva, el contrato de obra pliblica puede caracteri-
I
disponerlo la ley, se encuentra condicionado a la expresa autori-
zaci6n administrativa. De lo contrario, se trataria de un contrato.
con obieto probibido. ii zarse por el hacer (ver inf~a,Cap. IV, g 2 5 ) , a pesar de que Bste,
en sf mismo fungible, no excluye que la calidad de la persona
seleccionada en el procedimiento licitatorio pudo ser determinante
Si la cesi6n es aceptada por la Administracibn, el cesiouario del consentimiento del comitente 6 0 , lo que de por si excluye la
se substituye a1 cedente en todos 10s derecbos y obligaciones emer-
gentes del contrato de obra pliblica, si bien la comitente puede
i
subordinar su autorizaci6n al mantenimiento de la responsabili- 4s rbid.
Cianflone, ob. crt., ps. 248/247.
dad del cedente 4T. 6o MOIOZZO Della Rocca, F., LhppoIto neUa giunsprudolq Cedam, Pa-
La subcontrataci611, en cambio, no sustituye la figura del coil-. dua, 1972.. -D. 32:
"11 fatto che I'adempimento richieda di regola una organizzazione d i tipo
tratista principal, sino que simplemente hace que, total o parcial-. imprendiotoriale non L. senza rilevanza per quanto attiene alla assunzione della
qualit; di parte nel nesso contrattuale, dal momento che la capacitA professio-
nale e produttiva deli'appaltatore pub essere hen determhante per la scelta
47 Diez, oh. cit., Derecho adminirtrtioo, t. 111, p. 49. che il committente fa della sua persona: su quella capacith, prima che su
posibilidad de la cesi6n o subcontrataci6n, salvo la expresi61: del. Asi, por ejemplo, la ley de obras phblicas de NeuquBn, 687,
y su decreto reglameutario 108/72 (Pliego General 'linico de Bases
consentimiento positivo del mismo comitente, decisi6n que queda
y Condiciones para la Contrataci6n de Obras Pliblicas):
librada a su exclusiva voluntad sin posibilidad de revisi6n judicial,
"5.1.43 No puede el contratista efectuar subcontratacibn ni
salvo arbitrariedad manifiesta, la que deberi ser interpretada en
sentido restictivo. Pero ahn, no debe olvidarse, tal consentimien- asociacihn alguna sin la previa autorizacibn de la Administraci6n.
Esta autorizaciirn no exime a1 contratista de sus responsabilidades
to de la Administracibn comitente deberi ser excepcional, pues
no queda librado a la voluntad de la Administraci6n phblica el ( L e y art. 43).
violar las reglas de la justicia distributiva que privaron en la elec- "5.2.43 1. El contratista pediri por escrito la autorizaci6n para
subcontratar en cuya solicitud darh el nombre del subcontratista,
ci6n de la oferta mis conveniente durante el procedimiento de
selecci6n del contratista. la forma de contrataci6n y las referencias de aqukl, debiendo ser
Por ello, distintas normas reguladoras del contrato de obra personas de probada capacidad, a juicio exclusivo de la Adminis-
phblica condicionan detalladamente la posibilidad de autorizar tracibn, de acuerdo con la naturaleza de 10s trabajos. Deberh acom-
paiiar, asimismo, copia con certificaci6n d e firmas por escribano
la cesi6n o el subcontrato.
pliblico del contrato respectivo.
"Los subcontratistas se ajustarin estrictamente a Ias disposicio-
ogni altro elemento patrimoniale, egli pub infatti fondare le sue aspettative nes contractuales que rijan para la ejecuci6n de la obra para el
di esatto adempimento. contratista, no creando a la Administraciirn obligacibn ni responsa-
La normale fungihilit& del facere dedotto in ohhligazione non esclude
affatto, percih, che l'identiti o la qualiti della persona dell'appaltatore pos-
bilidad alguna.
sano evrere determinanti del cansenso del committente. Anche rispetto alla "2. En caso de autorizarse la co-asociaci6n de empresas, la
persona del committente pub trovare applicazione la comune disciplina del- Administraci6n estableceri las condiciones en que admitiri la mis-
I'errore (articolo 1349, n. 3, Cod. Civ.), ma k certo che essa presenta maggiore ma, quedando 10s asociados obligados solidariamente hacia aquk-
interesse in relazione alla persona dell'appaltatore.
I1 legislatare semhra, peraltro, avere dato in via generale rilevanza all'inte- Ila ( R e g . a f t . 43).
resse del committente alla irnmutabiliti della persona dell altro contraente, non "5.1.44 La Administracibn puede autorizar Ia transferencia o
solamente ponendo un limite alla facolti dell'appaltatore di sostituire altri a sC cesi6n del contrato, siempre que se cumplan 10s siguientes re-
nella esecuzione dell'o~era o nella prestaziane del servizio, ma anche riservando quisitos:
all0 stesso committente facolti d i recess0 in caso di morte dell'appaltatore hen
oltre i limiti dell'nrt. 1671, Cad. Civ. Di qui l'ipotesi che la fiducia caratterizzi
~ ~~
a ) que el cesionario, inscrito en la especialidad correspon-
il contratto d'appalto. diente en el Registro de Constructores y Proveedores de Obras
E particolarmente in relazione a1 divieto di suhapprtlto (art. 1656, Cod. Pliblicas tenga capacidad disponible suficiente;
Civ.) chc la giuri~~rudenza si B talara posta il problems della rilevanza del- b ) que el cedente haya ejecutado no menos del 30 % del
I'intuitus persona nel contratto d'appalto. Non sono mancate decisioni, in
cui si 1: parlato esplicitamente di contratto stipulate appunto intuitti personae,
monto del contrato, salvo causa debidamente justificada;
ma non semhra che da tali affermazioni possano essere desunti elementi in c ) que el cesionario sustituya las garantias de cualquier na-
favore di un orientamento giurisprudenziale in tal senso fuori dei Limiti deUe turaleza que hubiese presentado o se le bubiesen retenido a1 ce-
specie decise. Allo stato si pub dire solamente che in difetto di autorizzazio- dente ( L e y a f t . 44)".
ne del cammittente a dare in suhappalta l'opera od il servizio promessi Pap-
paltatore non potre neppure utilmente cedere il cantratto, nC conferirlo in
Tambikn la ley de la materia, 4416 de la provincia de Men-
societi; come non potri trovare luogo h d e m ~ i m e n t o da parte di un terzo doza:
(art. 1180, Cod. Civ.), posto che il divieto di suhappalto sembra presupporre ''Art. 33. - La Administraci6n podrh autorizar la transferencia
la deduzione in contratta di un interesse del creditore ad ottenere l'adempi-
mento dall'appaltatore e soltanto da lui. Si veda in proposito la sentenza o cesi6n del contrato en casos debidamente justificados. El ce-
della Suprema Corte no 2437 del 27 ottobre 1961, nella quale il prohlema
sionario deberh reunir condiciones similares a las del cedente, que-
della opponihiliti a1 committente del conferimenta del contratto di appalto dando kste solidaria y mancomunadamente responsable.
in una societi di persone B stato risolto palesernente sulla base della afferma- "Asiinismo el contratista podri subcontratar parcialmente la^
zione del carattere fiduciario del rapporto".
208 CONTRATO
DE OBRA P ~ L I C A

obra, previa autorizacibn de la Administracibn, lo que no le exi- Y taabien la ley de obras phblicas 6351 de la provincia de
miri de sus responsabilidades, tanto contractuales como laborales, Entre Rios:
impositivas y previsionales, ni estableceri relaci6n directa entre "Art. 43. - No puede el contratista efectuar subcontratacibn ni
10s subcontratistas y la Administracibn, salvo lo dispuesto en el asociacibn alguna, sin la previa autorizaci6n de la Administracibn.
pirrafo anterior. Esta autorizacibn no exime a1 contratista de sus responsabilidades.
"En 10s casos que por sus caracteristicas 10s considere convenien- "Art. 44. - La Administracibn puede autorizar la transferencia
te, la Administracibn podr& exigir en 10s pliegos que determinados o cesibn del contrato siempre que se cumplan 10s siguientes re-
subcontratistas estin inscritos en el Registro de Const~ctores. quisitos:
"Cuando por razones exclusivamente tkcnicas la Administracidn a ) Que el cesionario, inscripto en la especialidad comespon-
s e vea obligada a la ejecucibn de trabajos por contratos separados diente en el Registro, tenga capacidad disponible suficiente.
o por subcontratistas seleccionados en licitaciones por ella exigi- b ) Que el cedente haya ejecutado no menos del treinta por
das, siempre que el adjudicatario sea impuesto por la Administra- ciento (30 %) del monto del contrato, salvo causa debidamente
cibn, el contratista, sin perjuicio de su responsabilidad por la con- justificada.
duccibn de la obra general, quedari eximido de responsabilidad
par las demoras, incumplimientos, deficiencias y perjuicios que se c) Que el cesionario sustituya las garantias de cualquier na-
originen por dicho motivo, teniendo derecho a que la Administra- turaleza que hubiese presentado o se le hubiese retenido al cedente".
cibn le indemnice 10s gastos improductivos y 10s perjuicios que se Del mismo modo la ley 76 (decreto-ley), d e la provincia de
origiuen por causa del cumplimiento deficiente de aqubllos". Salta:
Asi, la ley 286 de la provincia de Rio Negro: "Art. 56. - Firmado el contrato, el contratista no podri trans-
"Art. 39. - El contratista de una obra, si el ministerio lo acep- ferirlo n i cederlo, en todo o en parte, a otra persona o entidad, ni
ta, podri hacer transferencia de su contrato mediante 10s siguien- asociarse para su cumplimiento sin autorizacibn y aprobaci6n de
tes requisitos: autoridad competente.
a ) Que el cesionario inscrito en la especialidad correspon- "Podrh autorizarse la transferencia ~610como excepcibn y en
,diente en el Registro de Licitaciones tenga capacidad tbcnico-fi- casos plenamente justificados, siempre que el nuevo contratista
nanciera suficieute para la totalidad del contrato original y que r e h a , por lo menos, iguales condiciones y solvencia tkcnica, fi-
el saldo de dicha capacidad supere el mouto de obra que falta nanciera y moral".
ejecntw. El proyecto de ley de obras pliblicas d e 1977 incorpora una
b ) Que el cedente haya ejecutado, al tiempo de la cesibn, no regulacibn similar:
menos del treinta por ciento (30 % ) del monto de 10s trabajos.
"Art. 35. - La Administracibn podrh autorizar la transferencia
c ) Que si existiere financiacibn bancaria, el crbdito se encon-
trare cancelado. o cesi6n del contrato en casos debidamente justificados. El ce-
sionario deberi reunir iguales o mejores condiciones que el ce-
d ) Que el cesionario, presente documentos que sustituyan a
las garantias de cus.lquier naturaleza que hubiera presentado o se dente.
le hubiere retenido a1 contratista cedente. "Art. 36. - El contratista podrh subcontratar parcialmente la
"A 10s efectos de lo previsto en el inciso c), toda institucibn obra, en cuyo caso deberh ponerlo en conocimieoto de la Admi-
bancaria o de crLdito esti obligada a presentarse dentro de 10s nistraci6n, lo que no lo eximirb de sus responsabilidades ni esta-
quince (15) dias de otorgada la financiacibn al contratista para blecerh relaci6n contractual directa entre 10s subcontratistas y la
una obra, denuncihdola al ministerio y a la Contaduria General Adrninistraci&n, salvo Io dispuesto en el articulo 41. En 10s casos
de la provincia. La no presentacihn en tkrmino eximirQ de las que, por sus caracteristicas, lo considere conveniente, la Adminis-
,exigencias del inciso c)". tracibn podri exigir en 10s pliegos que determinados subconba-
210 CONTRATO
DE OBM P~TBLICZ
tancial del contrato, de orden pliblico, que "no se sustenta en la
tista.: -
. . estkn inscritos en el Registro Nacional de Const~uctoresde
mpral o antecedentes del tercero que concurre a ocupar el lugar
Obras Piiblicas 51". cedente, sino en 10s contenidos d e inter& plibIico qne tienen 10s
Es por estas razones que, dentro de 10s por kl llamados "Ele- I contratos administrativos" ".
mentos Esenciales de la Contractualidad Administrativa", Fiorini Sin embargo, este principio no es absolnto y queda sometido
destacaba en primer lugar a la "incesibilidad", a1 contrario de lo
aue ocurre en el derecho ~rivado. En el campo del derecho ad-
& ~

ministrativo, en cambio, y particulknente en la contratacibn ad- ( 3 ) The Contractor shall make good any loss suffered or expense in-
ministrativa, el principio de la incesibilidad es un elemento sus- curred by the Authority by reason of any default or failure, whether total or
partial, on the part of any sub-contractor or supplier".
5 1 E n el derecho camparado se han elahorado similares regulacianes,
En la legislaci6n espafiala, el Reglamento General d e Contratacibn del
Estado establece:
por ejemplo, en el derecho inglBs las General Conditios of Goverment Con-
"Articulo 182.-Los derechos dimanantes .de un contrato d e ohras po-
tracts for Building an Civil Engineering Work (edicidn setiembre de 1977)
drin ser cedidos a tercero siempre que las cualidades personales o tkcnicas
establecen:
del cedente no hayan sido razbn determinante de la adjudicacibn del con-
-. 11)
"30 ~, The Contractor shall not sub-let any part of the Contract with-
trato (articulo 58 L.C.E.). El cesionario quedari subrogado en todos 10s
out the previous consent in writing of the SO.
derechos y ohligaciones que correspondian a1 cedente. Articulo 183. Para
(,2 .) In every case of sub-letting in connection with the Contract the
que 10s adjudicatarios puedan ceder s u derechos a tercero deherin cumplirse
Contractor shall enter into a sub-contract which, in addition to the power to
determine referred to in Condition M ( 6 ) shall include: 10s siguientes requisitos:
1. Que la Administracidn autorice expresamente y con carkter previo
( a ) a provision to the effect that from the commencement to the com-
la cesih~.
pletion of the subcontract all things for incorporation belonging to the person
~~ ~

2. Que el cedente tenga ejecutado a1 menos un 2 0 par 100 del presu-


who enters into the sub-contract which are brought on the Site in connection puesto total del contrato.
with the suh+ontract shall vest in the Contractor suhjzct t o any right of the
3. Que se formalice la cesidn en escritura pliblica (art. 58 L.C.E.).
Contractor to reject the same; Articulo 184. Salvo que el contrato disponga lo contrario o que d e su na-
(b) such provisions as may be necessary to enable the Contractor to turaleza y condiciones se deduzca que la obra ha de ser ejecutada directa-
fulfil his obligations to the Authority under the Contract, including the obli- rnente par el adjudicatario, podri Bste concertar con terceros la realizacibn
eations of the Contractor under Conditions 3 ( 2 ) , 4(4), 13(2) and (31, 35, de determinadas unidades d e la obra (art. 59 L.C.E.). Articulo 185. La
51, 56, 57 and 58; celebracih de 10s subcantratos estari sometida a1 cumplimiento de 10s si-
( c ) such provisions as will impose on the person who enters into the
guientes requisitos:
sub-contract liabilities similar to those imposed on the Contractor by Condi-
1. Que se dB conocimiento por escrito a la Administracibn del sub-
~ ~

tions 27, 38, 55 and 59; and contrato a celebrar, con indicacidn d e las partes d e oh& a realizar y sus
I d ) a provision to the effect that no part of the sub-contract work shall condiciones econdmicas, a fin de que aquklla lo autorice previamente, a no
he fuither sub-let without the consent of the Contractor. ser que el contrato facultase ya a1 empresario a estm efectos.
( 3 ) In the case of a sub-contract which involves the execution of work 2. Que las unidades de obra s u e el adjudicatario contrate con terceros
on the Site. the Contractor shall also include provisions similar to those in no erceda del 50 por 100 del presupuesto total d e la obra principal, salvo
condition l l ~ ( 1 )and (2).
que se haya autoriz?do expresamente otra cosa en el contrato originario (art.
(4) Without perjudice to the obligatians of the Contractor under any 59 L.C.E.). Articulo 186. Los suhcontratistas quedadn ohligados s61o fren-
-.the
nf .~ nrovisians
~. of the Contract, the Contractor shall, whenever so requested
r~ ~~

te a1 contratista principal, que asumiri, por tanto, la total responsahilidad de


by the Authority, take such action as shall b e necessary to secure that a la ejecucibn de la obra frente a la Administracidn, con arreglo a1 proyecto
person who bas entered into a sub-cont;act complies with and performs all aprohado par la misma como si 61 mismo la huhiese realizado".
obligations imposed upon him pursuant to paragraph (2) of this Condition. 5' Fiorini, B. A., Derecho aZminirtra!iuo, Abeleda Perrot, Buenos Aires,
31 (1) No person against whom the Contractor shall make rearonable
1976, t. I, ps. 605/607. Continha diciendo: "Las relacianes de inter& p i -
objection shall he employed as a nominated sub-contractor or nominated sup- blico Y d e derechos pi-blicos de estos contratos no quedan a merced de la
plier upon or in connection with the Works.
(2) T h e Contractor shall he responsible for any sub-contractor or sup- voluntad y dispendio del particular que concurre para la contratacibn. Los
intereses Y derechos pliblicos no pueden ser motivo de operaciones de ena-
plier emplayed by him in connection with the Works whether he shall be
nominated or approved by the Authority or the SO, or shall be appointed by jenacidn lucrativa o no lucrativa de un particular. La custodia que perma-
nentemente tiene el poder administrador no puede permitir la enajenacibn d e
the Contractor in accordance with the directions of the Authority or the SO lo que entrega, pero que mantiene siempre hajo su control".
or othenvise.
a la autorizacibn de la Administracibn comitente, la que no pue-
de actuar con arbitrariedad, ya que en tal caso el administrado
podria recurrir a la justicia para que se reconozca su derechos3.
En cambio, la subcontratacihn, si bien en principio tambien
subordinada a la necesidad de previa autorizacibn por parte de
la Adrninistracibn comitente, no se encuentra sometida a un rk-
gimen prohibitivo tan absoluto como la cesihn. En este caso
(subcontratacihn) se tendriu en cuenta los antecedentes del po-
sible subcontratista j 4 , teniendo en cuenta, en especial, qne, salvo
pacto en contrario, se mantendri inalterada la plena responsabili-
dad del contratista principal frente a su comitente. ELELVENTCIS DEL CONTRATO
En el derecho franctis el tratamiento es similar al resefiado
DE OBRA PCJBLICA
en 13s phrrafos anteriores: la cesi6n y la subcontratacibn del eon-
trato se encnentran probibidas, salvo expresa autorizacibn de la (Continuacibn)
Administracibn comitente, que siempre es discrecional. E n cier-
tos casos de subcontratacibn, estando ello expresamente pactado,
el subcontratista, si bien no establece ninguna relacibn juridica di- $ 23. PROCEDIMIENTO
CONTRACrL.4L ADMINISTRATIYO
recta con la eomitente, tiene derecho al pago direct0 del precio
de su ~restacibn,siempre que en el contrato ~rincipalo en un Como ya se ha visto, el contrato administrativo es uno de 10s
adicional a1 mismo se lo identifique expresamente, seiialindose la modos juridicos con que cuenta la Administracihn P6blica para
naturaleza, cantidad y precio de sus trabajos y siempre, lbgica- realizar sus cometidos propios.
mente, que esta previsibn se encuenhe consentida por el contra- Ahora bien, toda la actividad juridica de la Administraci6n
tista principal jj. transcurre a travks de un mecanismo procesal, pues el procedimiento
en el derecho administrativo es el medio elaborado por la ley
para garantizar el regular cumplimiento de 10s fines de interks
1
i
p6blico que justifican tal actividad, como tambikn proteger el
interks de 10s mismos particulares o administrados, que encuentran
en el procedimiento uno de 10s instrumentos que el derecho p6-
blico pone a su alcance en orden a un cabal respeto de las exi-
gencias de la justicia distributiva l.
Debe considerarse, asimismo, que toda actividad de la Ad-
ministracihn Pliblica, como la actividad de 10s otros dos 6rganos
superiores del Estado (Legislative y Judicial), constituye, como
lo sefiala Benvenuti el desarrollo del ejercicio de un poder, ejer-
5 3 En este punto la opini6n d e Fiorini es aparentelnente contraria, pues
dice: "La autarizaci6n, en este cam, es potatad de la Adrninistracibn P6blica;
en caso de s u e Bsta se opusiere n o podri concurrirse ante el Poder Judicial Conf B q u e r a Oliver, J. M., La seleccidn de contratistos, Institute d e
para que resuelva la incidencia" (ob. cit., p. 606), pero pienso que jal ,cn- Estudios Politicos, Madnd, 1963, ps. 14/15.
terio no p e d e ser tan absoluta como para dejar d e lado del control pdlclal Benvenuti, F., Appunti & diritto amminirtvativo, Cedarn, Padova,
10s posibles cams de manifiesta arbitrariedad administrativa. 1959, p. 117, quien concluye: "Ogni funcioni si estrinseca in un procedimento:
54 Fiorini, ob. cit., Derecho odministreino, p. 607. la funzione legislativa si rende evidente nel procedimento legislative; la fun-
55 Montrnerle, J., ob. cit., Possotion et execution . . ., PS. 70/72. zione giurisdizionale nel procedimento giurisdizionale; la funzione esecutiva si
clla se regulen cuestiones sustanciales como el rbgimen de validez
cicio que este autor denomina con la expresidn "funcibn". A su del acto adrninistrativo, su nulidad, la competencia del drgano,
vez, la funcion, siempre para el autor indicado, se exterioriza co-
las bases de la descentralizacibn administrativa, etc. Sin duda, el
m a un conjunto de momentos sucesivos a travks del cual se trans- act0 administrativo es el resultado d e un procedimiento, la etapa
forma el poder en un a c t ~final d e a~licacibnconcreta. A esta
final de dicho procedimiento, y asi es tratado en nuestra legisla-
forma de exteriorizacidn de la funcidn se la denomina procedi- cibn y en la generalidad del derecho comparado.
miento. Lo mismo ocurre con el contrato administrativo, tarnbikn re-
Es que, como lo sefialaba Hauriou, "la Administracibn es un gido, aunque analdgicamente, por la ley 19.549, conforme lo dis-
mecanismo, le falta conciencia sensible; esta conciencia central se pone el i;ltjmo phrrafo d e su art. 70. Aqui esti la gran diferen-
suple par la multiplicidad de formalidades que hacen participar i cia (entre otras) con el contrato del derecho privado; "el contrato
en el proceso de la operacibn a varios funcionarios que se fisca- !
I (adrninistrativo) -corn0 lo indica Fiorini- es un act0 phblico
lizan mutuamente" 3. administrativo y 10s actos de ejecutoriedad, drdenes, modificacio-
Asi, "el procedimiento adrninistrativo es simultineamente el
: nes, rectificaciones, revocaci6n, anulacidn, sustitucibn, subrogacion,
i
cauce formal de la serie de actos en que se concreta la actuacibn etc., el poder administrador deheri hacerlos s e g h el procedi-
administrativa para la realizacibn de un fin -como lo indica la miento que rija sabre este particular. Aun en el supuesto de que
Exposicibn d e Motivos de la Ley de Procedimiento Administrativo no estuviere estahlecido en 10s instrumentos contractuales, el prin-
Espafiola- y garantia juridica d e 10s admini~trados"~. cipio del debido proceso, que es el comportamiento de razonabi-
Precisamente por esto es que nuestro legislador denomin6 a lidad que rige toda la actividad adrninistrativa, receptado poi la ley
una de las ]eyes vertebrales de nuestro derecho administrativo de Procedirnientos Administrativos en el art. lo.inciso f ) , deberi
(ley 19.549) Ley de Procedimientos Administrativos, aunque en aplicarse en forma inexorable. La ley regla el debido proceso,
con m i s raz6n deberi ser aplicado en 10s supuestos de actos ad-
ministrativos que deciden sobre incidencias d e la ejecucion del
estrinseca nel procedimento amministrativo". Sobre el concepto de funcibn I
y su relaci(m con el procedimiento, ver tambiin Bana, R. C., ob. cit., Princi- acto contractual. Tbdo esto debe ser de acuerdo con las normas
p i o s . . ., ps. 141/145. procesales d e las leyes especiales, seghn el bltimo apartado del
3 Citado por Baquera Oliver, oh. cit., p. 14, nota nQ 7. TamhiCn Ben- art. 70, o por analogia si fuera ello p r ~ c e d e n t e " ~ .
venuti, ob. cit., en nota anterior, ps. 1111118: i De acuerdo con el art. 7? ap. d ) de la ley d e Procedimientos
.Di solito si osserva a riguardo di quest'ultirno che esso B una conseguen-
Adrninistrativos, el procedirniento es un "requisito esencial" del
za del fatto che l'ilmministrazione & un organism0 complesso e che non &
quasi mai un solo soggetto fisico che provvede alla concretizzazione del po- act0 adrninistrativo, y por lo tanto del contrato administrativo.
tere. Questa ragione non B per6 esauriente. La necessitei di estrinsecazione En tanto que requisito esencial es un elemento constitutivo,
forniale della funzione corrisponde ~iuttostoad una esigenu d i garanzia per- lo que en materia contractual adquiere especial signification.
ch& tale estrinszazione in una serie di atti procedimentali consent&, con la
En efecto, mientras que en el act0 administrativo, por su pro-
puhblicitA di questi atti, il controllo dei cittadini --e in particolare degli in-
teressati- sull'esercizio del potere". pia naturaleza, el procedimiento es necesariamente antecedente
4 Boquera Oliver, ob. cit., p. 15, nota nP 8. Tamhiin Gssagne, J. C., al dictado del act0 (que es su culminacidn, como se sefial6 mis
Derecho administrotiw, Aheledo-Perrot, Buenos Aires. 1982, t. 11, ps. 375/378, arriba), en el contrato el procedimiento es la colurnna vertebral
quien distingue entre proceso y procedimiento: ". . .el procedimiento admi- de la relacidn juridica que en 41 se origina, pucs no s61o debe
nistrativo constituye la forma o el cauce formal d e Ia funci6n administrativa
(en sentido material). El concepto de proceso resulta rnis adecuado referido considerarse a1 procedimiento de seleccidn de contratista, a travbs
i
a1 cauce formal de la funcibn jurisdiccional, entendida Bsta como la soluci6n del cual la Administracibn da forma y contenido a su voluntad
d e controversias (en sentido amplio) con fuerza d e verdaa legal". TambiCn 1
Gonzilez Pkrez, J., Cmnmtarios n lo ley de procedimientos odministratioos,
Civitas, Madrid, 1977, p. 70. Lo caracteriza camo "el cauce formal d e la ! '
V i o r i n i , B. A,, Derecho udminirtratitio, Abeledo-Perrat, Buenos Aires,
funcibn administrativa" y utiliza la siguiente figura: "el procedimiento es a 1976, t. I,p. 603.
la funcibn administrativa lo que el acueducto a1 agua que por el mismo corre". j1:
de contratar un objeto determinado con un sujeto tambikn deter- que el t4rmino proceso supone que la satisfaccibn de las preten-
minado, sino tambikn por su propia naturaleza, al procedimien- siones que en 41 se hacen valer serin dirimidas por un 6rgano im-
to por el cual transcurre la relacibn contractual, que no culmina parcial e independiente. El proceso tiene asi una naturaleza ne-
con la celebracibn del contrato, sino con la extincibn del mismo cesariameute jurisdiccional, tanto en sede administrativa (cuando
por la causal que corresponda. la Adnlinistracibn ejerce actividad de esa clase) como judicial,
Asi, el act0 final del procedimiento no es el contrato, sino, caracterizada por la resoluci6n de nn conflicto intersubjetivo de
en la extincibn normal, el cumplimiento de su objeto. derecho por un 6rgano independiente de las partes y con fuerza
Es por ello que el procedimiento continb siendo un elemcnto de verdad legal.
esencial (es decir, forma parte de su naturaleza propia) durante En carnbio, el procedimiento administrativo, si bien mante-
toda la vida de la relacibn contractual. niendo elementos comunes con la estructura dinimica del proceso
De aqui, que mis que de contrato administrativo corresponda (por ejemplo: a ) que cada una de las actuaciones que lo confor-
hablar de procedimiento contractual administrativo. man estkn vinculadas casualmente entre sf, de tal mod0 que cada
Deutro del procedimiento contractual administrativo se pre- una de ellas suponga a la anterior y la riltima -a la q.m se dirigen
sentan, asimismo, dos subespecies perfectamente diferenciables, no to&- suponga a todm las anterimes; b) que cada una de las ac:~
obstante que ambas constituyen e integran una misma realidad tuaciones produzca, directa o indirectamente, el impulso hacia la
institucional. Asi es, posible distinguir el procedimiento genitico siguiente; c ) y todo ello en virtud de que la conexibn entre todas~
del procedimiento funcional. las actuaciones radica en la nnidad del efecto juridico principal
El primero se refiere a la etapa de formacibn del contrato y y determinante a que se encuentran orientadas), constituye el cau-
se resume principalmente en la actividad procedimental interna de ce formal de la actividad administrativa, tanto en lo que respecta
la Administracibn, tendiente a formar su voluntad contractual a la formacibn de sus decisiones como tambikn a la actuacibn de
(anilisis de la necesidad y presupuesto, decisibn acerca del 6r- las mismas. Es decir que en el procedimiento administrativo no
gano competente, intervencibn previa del brgano de control, etc.), se busca resolver un conflicto conforme a derecho, sino tomar una
y tambikn en el procedimiento de seleccibn del contratista. decisibn conforme a derecho y luego ejecutarla con la misma su-
El segundo, el procedimiento funcional, ya se iuserta en la jecibn.
didmica del contrato en si mismo, su ejecucibn, extinci6n, efec- Estas diferencias se reflejan en las distinciones de las notas
tos, etcktera. principales que hacen a1 rkgimen juridico del proceso jurisdiccio-
Pero, corresponde insistir, ambas subespecies pertenecen a nal y del procedimiento administrativo.
una 6nica institucibn: el procedimiento contractual administrati- Siguiendo a Cassagne 7, se advieite que:
vo, de manera que -y en esto reside el efecto mAs singular del a ) el proceso jurisdiccional se encuentra basado en el prin-
instituto estudiado- la validez de la segunda depende de la va- cipio de la preclusibn, apareciendo como etapas que una vez cum-
lidez de la primera. plidas no pueden reabrirse poi- el juez ni las partes. En el pro-
Lo expuesto en este punto se comprenderi mejor al conside- cedimiento administrativo ello no ocurre, admitikndose el infor-
rar las diferencias existentes entre el procedimiento administrativo malismo como criterio rector en la sustanciaci6n de 10s trimites
y el proceso jurisdiccional. procesales;
De las distintas posicioues doctrinarias que se han expuesto b) en el proceso jurisdiccional la instituci6n de la cosa juz-
sobre el particulars, y siempre, se reitera, dentro del margen de gada (formal y material) le atribuye a la sentencia una inmuta-
arbitrariedad que suelen tener 10s nombres otorgados a la realidad bilidad prkticamente absoluta; en el procedimiento administra-
que nos circunda, consider0 apropiada a aquella que concluye en tivo ello como regla general no acontece (sin perjuicio de la es-

<,
Ver Cassagne, J. C., ob. cit., Derecho administ~dtw,t . 11, ps. 375 y ss. 7 Ob. c ~ t ,Derecho administrotmo, t 11, ps. 379/380.
t
218 CONTRATO
DE OBBA P ~ B U C A

tabilidad que posea el act0 en sede administrativa) pues la de- .cedimiento en cuesti6n. D e esta manera 10s actos que se van su-
cisi6n final puede ser luego revocada a favor del administrado o cediendo, antecedentes del acto final, no pueden ssr impnguados
en contra del mismo (revocaci6n por oportnnidad); con independencia de este hltimo.
c ) el procedimiento administrativo es dirigido y coordinado En cambio, la teoria d e 10s "actos separables" reconoce la in-
por una de las partes principales: la Administracihn Phblica. E n dividualidad juridica d e cada nno de 10s actos del procedimiento
el proceso jurisdictional, el juez o el tribunal administrativo que y, en consecuencia, su impugnabilidad independientemente de la
ejerce funciones jurisdiccionales interviene en el proceso como un impuguaci6n del act0 final.
6rgano ajeno a las partes d e la controversia. No puede caber duda d e que esta hltima afirmaci6n doctri-
En definitiva, y esto es su principal caracteristica, como lo naria es la m8s correcta, tanto desde un punto de vista estricta-
afirma Cassagne "el procedimieuto no es un acto complejo, sino mente cientifico (no es esta obra el lugar mAs adecuado para
un complejo de actos, cada uno de 10s cuales posee individualidad estudiar sus fundameutos e n profundidad) como par una razbn
juridica propia, sin perjuicio de ballarse relacionados con 10s de- d e justicia, que es el fin a1 que deben aspirar todas las concep-
m i s actos con 10s cuales tiene una viuculaci6n comhn en d r i t o ciones juridicas (ya se ver8 la importancia de esta doctrina en
a la obtencihn d e la finalidad de inter& phblico que persigue la materia de 10s procedimientos de selecci6n de contratista y de
Administraci6n" emisi6n de la certificacibn durante la ejecucibn d e la obra).
De todas maneras resulta oportuno aclarar alghu aspecto de
esta doctrina de 10s "actos separables", que puede resultar htil
5 24. D O ~ N DA
E LOS ACTOS COLEGIADOS
para el fin de esta obra.
Por d e pronto no debe creerse que la consideracibn de 10s
El considerar al procedimiento como un "complejo de actos"
actos del procedimiento como "separables" significa otorgarles nna
a t r a v b de 10s cuales se realiza la actividad administrativa tiene
independencia absoluta con relaci6n a1 act0 principal objeto de
uua gran importancia juridica, de trascendencia particular e n ma-
teria contractual, y coloca la cuesti6n en el marco de dos solucio- dicho procedimiento. Si fuese asi, el procedimiento perderia su
nes distintas que han provocado un sustancioso debate doctrina- coherencia interna, la necesaria unidad causal que deiermina su
rio 8 : la "teoria del todo indivisible" o "de la incorporaci6n" y la estructura, y, por lo tanto, desapareceria como tal.
"teoria de 10s actos separables". La independencia predicada, en lo que hace a su individua-
Por la primera se sostiene que la totalidad d e 10s actos que lidad juridica, es relativa y no absoluta. En cierto sentido el act0
se emiten durante el desarrollo de un procedimiento administra- precedente se incarpma a1 act0 final, por cuanto este hltimo no
tivo se incorporan a1 act0 final, que es el que se tuvo principal- tendria razhn de ser sin el primero. Pero, a la vez, el act0 pre-
mente en vista -0bjetivo principal- a1 iniciar y realizar el pro- cedente es susceptible de producir efectos juridicos propios, en el
procedimiento y por el procedimiento, pero no por ello en desme-
8 Ibid., p. 381. La consideracibn del contrato celebrado por la Admi-
dro de esa independencia que hemos calificado como relativa.
nistraci6n Priblica u otras personas piblicas como una consecuencia de una El act0 precedente vive asi como una doble vida: interesa
serie de actos administrativos antecedentes es admitida incluso por aquellos por si mismo, pero siempre dentro del procedimiento y como re-
que s61a aceptan la existencia del contrnto privado de la Administracih; asi ferencia al acto final, al cual se incorpora, cumpliendo asi con su
Bardusco, A,, La struttura dei controtti delle ~ubbllcheamministrziai, Giu-
fre Edit., IvfilAn, 1974: "I1 contmtto della pubblica arnministrazioni, che pure
destino natural. Es act0 separable y es act0 incorporado, Bsta
B negozio di natura privata, dipende di norma per la sua nascita da atti o da es la originalidad del procedimiento administrativo.
serie di atti di natura amministrativa.. ." Por esa razhn es preferible, siguiendo a la doctrina italiana
8 Ver Boquera Oliver, bh. cit., La seleccwn de contratistas, ps. 182/200;
Dromi, J. R., La licitacidn ptlblicn, Astrea, Buenos Aires, 1977, ps. 4231428.
aunque refiriendo y restringiendo el tQmino a1 imbito del pro-
I
antecedente, lo cual ha sido aceptado por la doctrina extranjeran
cedimiento administrativo, hablar de actos coligados (atti ammi-
y tambikn por la nacional 12. Por supuesto que si el act0 ante-
nistratitii collegati) l o , en lugar d e actos separables.
cedente fue impugnado, con resultado negativo para el adminis-
El act0 antecehnte coligado es aquel que posee efectos pro- trado agraviado, el act0 consecuente no podria ser impugnado por
pios, pero que no se agotan en si mismos, sino que son suscepti- la misma raz6n, sin perjuicio de 10s casos en que es posible re-
bles, como imposici6n de su propio objeto, de incidir en el con- visar la coza juzgada administrativa.
tenido y efectos del act0 coligado consecuente. Este 6ltimo es el
El rkgimen de 10s actos coligados, asi como tambikn su in?-
act0 susceptible de ser incidido en su contenido y efectos p r el portancia prictica, puede comprenderse mejor si se lo compara
act0 antecedente. En ambos casos se utiliza la palabra "suscep- con otros actos que son emitidos durante el procedimiento admi-
tible" por cuanto no necesariamente se produciri la incidencia nistrativo, con cierta bascendencia a 10s efectos impugnativos.
referida, sino que es de la naturaleza propia del procedimiento
Por de pronto deben ser excluidas de la comparaci6n las
administrativo ofrecer la potencialidad de que tal incidencia ocu-
"medidas preparatorias, informes y dicthmenes" que, aunque sean
rra en la prictica.
de requerimiento obligatorio y efecto vinculante para la Adminis-
El efecto juridic0 rnhs importante de 10s actos coligados es
traci60, no son recurribles, conforme lo establece el art. 80 del
su doble impugnabilidad:
. - pueden ser impugnados tanto el ante-
reglamento de la ley nacional de Procedimientos Administrativos
cedente como el consecuente, por las mismas razones, siempre
(19.549), decr. 1759/72. La raz6n es muy sencilla: kstos no son
que no medie cosa juzgada administrativa, si bien ksta, en deter-
actos administrativos, por cuanto no producen efectos juridicos di-
minados supuestos, podria ser revisada por la Administraci6n.
Precisando rnhs el concept0 anterior, y con un sentido pric-
tico, la situaci6n generada por este tip0 de actos es la siguiente: l l hagola, ob. cit., p. 82: "Or B manifesto il collegamento, 0, si piace,

el act0 antecedente que provoca un agravio a1 derecho del admi- il riferimento d i questi ultimi atti ai precedenti. Qhesti costituiscono il pre
suposto dei secondi. La giurispmdenza ha insegnato che con l'impugnativa
nistrado puede ser impugnado administrativa y judicialmente, por dell'ultimo atto amministrativo della catena d i collegamento, si pub procedere
las mismas vias y condiciones que si tratara de un act0 definitivo, altresi alln impugnativa degli atti che con lbltimo sono in collegamento".
pues es un acto definitivo, aunque coligado a1 act0 consecuente. Tambien en Espaiia, Gonzilez PBrez, J., El principio d e la buem f e en el
Esto lo distingue del act0 "interlocutorio" y del de "mero trhmi- derecho adminirtrotioo, Madrid, 1983, ps. 122/123:
te", cuesti6n sobre la que se volverh rnhs adelante. En conse- "No es correcta la doctrina iurisprudencial referida a determinados actos,
que, sin distinguir en orden a la validez d e 10s mismos, declara que la no
cuencia (y dejando tambikn en suspenso la cuesti6n acerca de la impugnacihn d e Ins mismos impide la impugnacibn d e 10s ulteriores. Asi,
distinci6n eutre derecho subjetivo e inter& legitimo, lo que sera respecto d e 10s pliegos d e la contratacibn administrativa. Pero una senten-
examinado mis adelante), el act0 antecedente puede ser impugna- cia del 9 d e mayo d e 1975 (Ponente: Ponce d e Lebn), a1 establecer la dis-
do a travQ del recurso jerirquico o el de alzada, y en las condi- tincihn, viene a sentar la correcia doctrina; a1 decir: '. . .sin que tampoco pue-
d a sostenerse la aplicacibn a este caso d e la reiterada doctrina iurispmdencial,
ciones procesales pertinentes impugnado judicialmente, lo que n o d e que la aceptacibn d e las condiciones del pliego y el consentimiento pres-
seria posible de tratarse d e actos preparatorios, de mero trhmite tado a la convocatoria impiden la impugnacihn ddel concurso, pues este poder
o interlocutorios. .de atraccihn vinculante s61o puede admitirse cuando eldsta una adaptacik
Pero, por tratarse de un act0 coligado que, en este sentido, a la normativa aplicahle, mas no en cambio cuando s e g h svcede en el pre-
sente supuesto, se incurre en omisiones o defectos sustanciales que afectan
se incorpora a1 act0 consecuente, la falta de impugnaci6n del mis- su validez, ya que entonces se est6 por encima d e 10s intereses personales y
mo no le otorga firmeza, puesto que puede ser impugnado con- ello obliga tanto a1 Ayuntamiento que convocb el concurso como a quienes
juntamente n a travks del act0 consecuente, en la medida que el a 41 acuden y por consiguiente su enmienda o correccibn no depende d e la
o uno de 10s vicios de este Gltimo Sean consecuencia del act0 voluntad d e las partes, sino del propio juzgador, que ha d e revisar 10s actos
de la Administracibn para asi velar por la integridad y pureza d e la a c b -
ci6n de la misma"'.
lo ver ~ ~ U., Gli~ atti a?n~ninMrritioi,
~ ~ l Jnvene
E. ~ Edit.,
, Nhpoles, Cassagne, ob. cit., Derecho odministrativo, t. 11, p. 381, aunque sin
1964, ps. 81/83. .I
identificar claramente a1 "acta separable" carno acto definitive.
f
ELEMENTOS
DEL CONTRATO DE OBRA P ~ B L I C A 223

rectos sobre terceros, y de ahi que con muy buen criterio la nor- posibilidad recursiva mucho mis amplia que los interlocutorios
ma arriba citada 10s llama 'inedidas" y no actos. (ademis de no ser estos iiltimos susceptibles de ser atacados en
En cambio, el art. 84 del mismo cuerpo normativo, a1 regular el act0 definitivo), e incluso abren la via \de la revisi6n judicial.
el recurso de reconsideraci6n admite la interposici6n de ese re- Por ello, en caso de duda, deberh calificarse al acto como cohigado,
curso contra 10s actos "interlocutorios o de mero trimite" que le- pues esto es lo que mis conviene a1 derecho de defensa de 10s
sionen un derecho subjetivo o un inter& legitimo. Asimismo, el administrados.
art. 87, ap. a), prevB la posibilidad de interponer recurso de ape- En definitiva, la doctrina de 10s actos coligados, incluso en-
laci6n contra el acto que deniegue la reconsideracibn planteada tendiendola como una manera especial de plantear la ya conocida
contra 10s actos interlocutorios o de mero trhmite, pero queda construcci6n doctrinaria de los "actos separables", se agrega a1
excluido el recurso jerhrquico, y por lo tanto el recurso de alzada sistenia de garantias que, dentro del regimen juridic0 exorbitante
en 10s casos de entidades descentralizadas, y tambien la impug- a1 qne pertenecen 10s contratos administrativos, beneficia a1 co-
naci6n judicial, ya que de acuerdo con lo dispuesto par el art. 23 contratante particular.
de la ley 19.549 esta impugnaci6n ~610es procedente contra 10s. Asi, por ejemplo, frente a1 instituto del precedente adminis-
actos definitivos o asimilables. trativo que es, como es sabido, un importante instrumento en la
En el proceso judicial se considera "sentencia interlocutoria" protecci6n del principio de igualdad de 10s administrados frente
a las que resuelven cuestiones que requieren sustanciaci6n (art.
1 a la ley y frente a1 actuar administrativo, derivado de las exi-
1G1 del C6digo Procesal Civil y Comercial de la Nacidn), es de- gencias de la justtcia distributiva. N6tese que, a1 respecto, se ha
cir, previa controversia d e partes. En cambio, 10s "providencias afirmado que a1 cuntrato administrativo en si mismo no Ie es
simples", equiparables a 10s actos de mero trimite en el proce- aplicable la doctrina del precedente, por la rnisma raz6n de ex-
dimiento administrativo, son aquellas que s61n tienden a1 "des- clusividad y originalidad obligacional, nacida de cada acuerdo
arrollo del proceso u ordenan actos de mera ejecuci6n" (art. 160) voluntario, que cada contrato guarda con respecto a otros, aun
sin requerir sustanciaci6n previa. de su misma especie. Pero esto no se puede predicar de 10s
Si bien providencias simples y actos de mero trhmite son con- actos coligados que, tanto en la etapa de selecci6n del contratista
!
ceptos equiparables, no ocurre lo mismo con las sentencias y actos coma en el momento de la ejecuci6n misma del contrato, confor-
interlocutorios, pues estos hltimos, en el procedimiento adminis- man la rcalidad juridica de tal acuerdo de voluntades. Asi lo
I
trativo, no requieren previa controversia de partes, por cuanto. I ha sefialado reciente~nenteel espafiol Diez-Picazo l 3 :
en tal procedimiento no hay, estrictamente, partes contrapuestas. I
1 "Al contrato administrativo en si mismo considerado no se Ie
Por ello el tkrmino act0 interlocutorio debe reservarse para aquel puede aplicar la doctrina del precedente. Un contrato adminis-
que s610 produce efectos juridicos sobre el trhmite del procedi- I
trativo, como contrato que es, en nada puede afectar a 10s demis
miento, per0 no sobre el fondo, p. ej., medidas de prueba. contratos de la Administracidn ni ser afectado por ellos, a causa

1
En mnsecuencia la principal diferencia que existe entre 10s de la eficacia relativa de 10s contratos. Para 10s que no son parte,
actos coligados y los actos interlocutorios es que 10s primeros pro- todo contrato es res inter olios acta. Incluso en el caso de que el
ducen efectos juridicos, siempre "separables", dentro del proce- que contrata con la Administraci6n se sienta comparativamente
climiento, pero incidiendo sobre el fondo del derecho del admi- I
agraviado con respecto a otros contratantes de esa misma Admi-
nistrado ( p . ej., admisi6n de una mejora de oferta en el pro- i nistraci6n, no se puede aplicar la doctrina del precedente; todo
cedimiento de selecci6n del contratista estatal); en cambio, el
acto interlocutorio s610 produce efectos procesales, sin incidir di-
rectamente sobre el fondo de la cuesti6n debatida (p. ej., rechazo
de una medida de prueba).
j
I
contrato esth basado en un acuerdo de voluntades, de modo que

Como se ha visto m6s arriba, 10s actos coligados ofrecen una i '8 Diez-Picazo, L. M., La doctrim &Eel precedente odrninistmtivo, "Re-
vista de Administracibn Pliblica", nQ8, Madrid, p. 32.
I
el locatario de la obra (dueiio, propietario, comitente, patrocinado,
wlenti non fit iniuria: quien ha cousentido, en principio, no pue- cliente), se ohliga a pagar un precio determinado, o deterrnina-
de reclamar. ble, en
"En este punto es necesario hacer una precisi6n. Una cosa es La consideraci6n de la locaci6n d e obra como contrato de
que la doctrina del precedente no pueda ser aplicada a1 dontrato resultado, fundamentalmente, permite distinguirla de otra figura
administrative en si mismo considerado, a1 puro acuerdo de volun- afin, la locacihn de servicios, caracterizada por ser un contrato
tares, y otra cosa bastante diferente es que si deba aplicarse a d e medws.
aquellas actuaciones unilaterales de la Administraci6n conectadas Asi, se sostiene que: a) mientras en la locaci6n de obra la
en el contrato (decisi6n d e contratar, ejercicio del ius wiandi, nota principal es el dare, en la de servicios es el facere; b) por
rescisi6n, etc.). Estas actuaciones unilaterales conectadas con el consiguiente, en la locaci6n de obra lo que interesa es el resulta-
contrato no son, en definitiva, sin0 actos adrninistrativos. Se tra- do, de aqui que el riesgo empresario se encuentre directamente
ta con esto simplemente de hacer el debido uso de la teoria de relscionado con tal resultado: si el mismo no es alcanzado, el
10s actos separables." precio no se percihe; en cambio, en la locaci6n de s e ~ c i o s como
,
obligacihn de medios, el locador no promete un resultado sino
su fuerza de trabajo, y asi sera pagado en la medida en que ponga
diligentemente 10s medios a disposici6n del locatario, indepen-
dientemente de si el resultado es o no no alcanzado; c) en la locaci6u
de obra, sin perjuicio del control del locatario, la realizacibn de
Precisamente esta caracteristica "procesal" del contrato ad- 10s trabajos destinados a la obtenci6n del resultado corren por
ministrativo, y por lo tanto del contrato de obra phblica, justifica exclusiva cuenta del locador sin uinguna sujeci6n a directivas o
el anelisis de la naturaleza de este contrato desde el marco del instrucciones del locatario, y sin asumir responsabilidad por 10s
"elemento" procedimiento (lo que podria ser criticado desde el medios empleados, siempre que el resultado alcanzado sea eficaz;
punto de vista metodol6gico), habida cuenta de que el procedi- en :a locacibn de servicios el locador debe actuar conforme a las
miento es el dato que mas incide en la determinacibn, identifim- instrucciones del locatario, ann cuando no exista subordinaci6n
ci6n y anLlisis de la naturaleza juridica del contrato de obra juridica, ya que el objeto de la prestaci6n son 10s medios y no el
phblica. resultado: s610 la eficacia de 10s medios debe ser jnzgada, pero
Este contrato fue habitualmente asimilado a1 institute civil una eficacia en si misma, aunque no necesariamente productora
de la locacibn de obral*, es decir, como un tipico contrato de de un resultado htil, bastando que sea razonablemente capaz de
resultado. hacerlo la.
Desde esta perspectiva, Spota define a la locaci6n de obra Pero en el caso del contrato d e obra pfiblica la situacihn es
como el contrato “par el cual una de las partes, denominada lo- diferente, pues puede afirmarse que este contrato participa de 10s
cador de obra (empresario, constructor, contratista y, en su caso, caracteres de las dos figuras antes analizadas, la locacibn de obra
profesional liberal, autor, artista), se compromete a alcanzar un y la locaci6n de servicios.
resultado material o inmaterial, asumiendo el riesgo tkcnico o Ya se ha visto que en realidad seria mLs apropiado hablar
econ6mic0, sin suhordiuaci6n juridica, y la otra parte, denominada d e trabajo pGblico que de obra phblica (supra, Cap. 11, 5 10).
Es que la obra pfiblica, en tanto que cosa terminada, no interesa
como categoria juridica. Asi, por ejemplo, una ruta es una obra
1.1 Mo, ob. cit., R4gimm legd. . ., p. 27; Marienhoff, ob. cit., Trata-
d o . . ., p. 526, parAg. 1115; Escola, ob. cit., Tratado integral.. ., p. 196, pa-
rAgrafa 138; Bielsa, R., Principios de derecho administratioo, Depalma, Bue- 15 ..
Spota, ob. cit., Tratado. . Vol. I, p. 8,
nos Aires, 1968, p. 209: "Pox su estructura juridica, el contrato de obra pit- Spota, ob. cit., Tratodo. . ., Vol. I, ps. 48/54.
blica es substancialmente contrato de locncidn & obro".
phblica en cuanto es el resultado de un trabajo pliblico, per0 co- seiiala enfiticamente que el facere forma parte integrante de la
mo tal, una vez terminada, al derecho le interesari y la regulari prestaci6n, por cuanto es debido, por el constructor, en obl3ga-
como cosa del dominio pliblico y no como obra pliblica. El re- tione lo. Es decir, el locatario es acreedor no s610 de la cosa ter-
sultado del contrato d e obra pbblica no tiene un tratamiento ju- minada, sino del procedimiento constructiw.
r i d i c ~diferenciado de 10s institutos juridicos a 10s que esa obrn Por supuesto que la puesta a disposici6n de 10s medios no
perteneceri: dominio pliblico, dominio privado, bien afectado a puede considerarse como un elemento aut6nomo del contrato, ni
la prestaci6n de un sewicio pbblico, etcktera. siquiera a 10s efectos del cumplimiento parcial del mismo. Si
Juridicameute, lo regulado hajo el nombre de regimen juri- bien el facere esti insert0 en el esquema causal del negocio juri-
d i c ~de la obra phblica es el trabafo pbblico destinado a su ob- dico, lo es desde una posici6n funciomlmente subordinada res-
tencibn, especialmente cuando el mismo es llevado a cab0 a tra- pecto del resultado. Por ello el precio s610 es debido contra la
v&s de un contrato admiuistrativo celebrado con un administrado entrega de la obra (sin perjuicio de 10s pagos provisionales) por-
constructor. que en ese momento locador y locatario tienen la oportunidad de
En realidad, como lo sexiala Cianflone, la expresi6n promesa saldar sus respectivas obligaciones.
de un resultado (dpica de la locaci6n de obra) debe matizarse Por esta raz6n no es correcto considerar, simplemente, a1 con-
con la expresi6n promesa de produccidn de un ~ e s u l t a d o ' ~ .N6- trato de obra pliblica como un contrato de ejecuci6n diferida.
tese que la caracteristica d e la funci6n econ6mico-juridica del Es que la actividad que el contratista despliega con el fin de la
contrato no es la obtenci6n de un opus considerado en si mismo produccibn del opus forma, como se dijo antes, parte del esque-
(de lo contrario podria ficilmente confundirse con el contrato ma causal del negocio, es la misma ejecuci6n del contrato
de suministro, como ya se veri), sino la obtenci6n de un opus o Sobre el facere, y no s610 sohre el resultado, se van a des-
resultado que debe ser obtenido de una determinada manera por plegar todas las prerrogativas de direccibn y control del comi-
el constructor. Por eso el facere, en nuestro contrato, es tan im- tente; es precisamente en esta ocasibn, en el trabajo ptiblico co-
portante como el dare; 10s medios puestos a disposici6u del lo- mo elemento esencial del contrato, donde este se "administrati-
catario o comitente caracterizan a1 contrato tanto como el re- viza" en su pleno sometimiento al denomiuado rkgimen juridico,
sultado a obtener. exorbitante (ver supra, Cap. I, 5 3).
Los medios puestos a disposici6n del comitente, como se se- Ahora bien, este trabajo pbblico no puede desligarse de su
iia16 en el pirrafo anterior, no son extraiios a la estructura del naturaleza procesal administrativa, conforme lo seiialado en el
negocio y tampoco pueden ser s6lo valorados en fuuci6n del re- parigrafo anterior. Cada paso del mismo, desde el comienzo de
sultado, como en la tipica locaci6n de obra (donde la impugna- la actividad interna de la Administraci6n tendiente a decidir el
ci6n de la calidad del resultado puede basarse en la mala dispo- llamado a licitacibn, son s610 etapas de un procedimiento unite-
sici6n de 10s medios, pero lo que se cuestiona es al resultado y rio, dirigido a su acto final, que es la recepci6n definitiva de la
no 10s medios), sino, por el contrario, intrinsecos a1 mismo. Co- obra y la emisi6n del certificado final d e cierre de cuentas.
mo dice Cianflone, el constructor no esti obligado a entregar al Como en todo procedimiento, la emisi6n de 10s actos anterio-
comitente un bien considerado en si mismo, producido de cual- res a1 que lo finaliza son s610 actos de instancia o de impulsibn,
quier modo, sino que lo debe entregar en cuauto resultado de un sin caricter definitivo, sino con una valoraci6n totalmente subor-
proceso prodnctivo que el mismo comitente debe conducir '8, y
I Q Ibid., p. 8.
17 Cianflone, oh. cit., rappappolto. . ., p. 7. 2Q Ibid., p. 8. "Nell'appalto, tuttavia, adempimento non si ha, come
1 3 Ibid., p. 7: "L'appaltatore non C tenuto a prestare a1 committente un invece nel lavoro suhordinato, con il semplice svolgimento della sola attiviti
hene considerato in sC, in qualunque modo e da chiunque prodotto; ma lo e man mano che questa viene spiegata; ma unicamente in quanta l'attiviti
deve prestare in quanto risultato di un process0 produttivo che egli stesso consegua il resultato promesso ed a1 momento in cui questo sia conseguito".
debe condurre". TambiCn p. 44.
ELEMENTOS DEL CONTRATO DE OBRA PLTBLICA 229
228 CoNTR<\ TO DE OBRA PÚELICA

dinada al acto final. Pero estos actos de instancia, en sí mismos Es que si lo detenninante del contrato no sólo es la obra en
exigibles, son capaces de producir efectos jurídicos de por sí sí misma, sino también el trabajo público, resultará indiferente
_ conforme a la doctrina de los actos coligados y la relación entre que la obra tenga calidad de cosa mueble o inmueble: en cual-
acto antecedente y acto consecuente - los que serán valorados;
¡
quier caso y en tanto que el resultado de un trabajo público, la
por ejemplo, en orden a su impugnabilidad, según su carácter o cosa elaborada será una obra pública 22.
no de irremediables con relación a los derechos de las partes. Se verá más adelante (infra, § 27). que este elemento del tra-
Más adelante se verá la notable trascendencia jurídica que tiene bajo Pllblico será también el dato diferenciador más importante
esta cuestión ahora simplemente anticipada. con el contrato de suministro, En este último caso, cuyo objeto
Baste en este momento señalar que el elemento procedimien, ha de ser necesariamente una cosa mueble, la contratación no
to, en el contrato de obra pública, no se encuentra sólo en la tra- pone su énfasis en el procedimiento de elaboración, sino en la tra·
mitaci6n destinada a la selección del cocontratante particular, siuo dición de la cosa, de conformidad con lo contratado. Por el con-
en todo el curso de ejecución del contrato de obra pública, y por trario el régimen legal del contrato de obra mira mucho más al
ello es el elemento esencial de su naturaleza jnrídica. trabajo público que a la obra terminada, lo que permite afirmar
que la naturaleza de esta última resulta indiferente.
En el derecho positivo argentino, la gran mayoría de las le-
Objeto yes de obras públicas adoptan Un criterio amplio, que permite
inferir que estas legislaciones aceptan la calidad de obras públicas,
§ 26. COSAS MUEBI..FS E lNMUEBLES tanto con respecto a las cosas inmuebles como a las muebles, sin
perjuicio de que en alguna de ellas este criterio amplio se encuen-
De acuerdo con lo señalado en los párrafos anteriores, el ob- tre expresamente establecido.
jeto inmedilrto del contrato de obra pública es la realizaci6n de Tal es el caso del arto l0 de la ley nacional 13.064, que roo-
UD trabaio público, según UD procedimiento regular, establecido
por la ley específica y por el régimen jurídico de los contratos ad·
art. 11?, al expresar 10 que debe considerarse por obra pública, lo hacen en
ministrativos, conforme a los príncípíos generales del derecho ad· forma tan amplia y genérica que no es posible advertir exclusiones fundadas
ministrativo (régimen jurídico exorbitante). en el carácter de mueble o inmueble",
Pero el objeto mediato, es decir, aquel que va a ser el resul- La jurisprudencia ha señalado: "Son tres los elementos de la obra pú-
tado del trabajo pnblico, es la obra pública terminada. blica: el subjetivo, o sea la realización de la obra por parte de la colectividad
pública, directa o indirectamente; e] objetivo, que es la realización para sa~
Esta distinción permite adherir con mayor énfasis a la doc- tisfacer una finalidad de interés general; y el mobiliario o inmobilialío. que
trina y la jurisprudencia nacional, en CUánto a que el o.bjeto del es el objeto sobre el que se realiza la obra"; "Obra públíca son los bienes
contrato de obra pública puede constituir tanto uua cosa mueble muebles o inmuebles, que se ejecutan con un fin de utilidad general, sea por
como una cosa inmueble 21,
, el Estado, directa o indírectamente, sea pOr un particular", ambas citas; CFed .•
I
Cív. y Com., nov. 13(961, LL, 130-661; DI, Derecho Público, Z, VIlI-39.
I La Procuración del Tesoro de la Nación se ha expedido en el misma
21 Marieuhoff, ob, cit., Tratado .. '. t. IIT-B, p, 520. Escola, ob. cit., sentido: "Aunque la ley no lo diga, el oontrato de ohra pública es una Ieca-
Tratado íntegral.. <, t. II, p. 206; Diez, ob, cit., Derecho administrativo. t. d6n de obra, que puede referirse tanto a objetos muebles como inmuebles {;
nI, p. 31; Mo, oh. cit., Régimen legal. " 1 p. 99, quien hac:e una breve refe~ a cosas inmateriales y puede contratarse conviniendo en que el que la eje-
rencía histórica de la cuestíón en nuestro derecho positivo: "Recordamos que cuta ponga 5610 su trabajO O su industria, o que también prOvea la maLerÜt
el carácter inmobilíano de las obras que nos ocupan ha sido sostenido con prindpa)", PTN, Dictámenes, nQ 9, ps. 310/311.
firmeza y .coutiuuidad por la doctrina y jUrlspnldencja francesa. La vieja 22 Así lo ha dicho la jurisprudencia: <'Todas las ccmstrucdones mate-
ley 775, a pesar de estar inspirada en los pliegos franceses para la construc- riales que ejecute el Estado, en sus bienes p{lblícos o en I:US bienes pl'ivados...
ci6n de puentes y <:aminos, nada decía al respecto, y nuestra ley actual 13,064 son, en el sentido genériCO de la e.xpresión, una cbra p{tbHca'~, CSN~ mayo SI
ha seguido, evidentemente) igual orientaci6n. Además, ambas leyes, en el \146, LL, 42.820; DI, Derecho Público, VIlI·S9.
ELEMf.:NTOS DEL CO~TRATO DE OBRA PÚBLICA 231
2ao CONTRATO DE OBRA PÚBLlCA

,idera "obra pública nacional" a "toda construcción o trabaio o Lo mismo ocurre con la ley 3Cf79 de la provincia de Corrientes,
sermcio de induttria", sin aclarar si deben ser ejecutadas sobre en su arto 19, lo que queda ratificado en su arto 49 que e;rtablece:
cosas muebles o inmuebles. Si bien el decreto 19.324/49, acla-
·Cuand I
O as obras deban efectuarse ' éstos deberán
en inmuebles,
ratorio de la nonna antes citada, parece referirse en su arto 19 ser de propiedad del comitente de la misma ... ", indicando la
,ólo a obras inmuebles, no cabe duda de que, por su misma re- posibilidad a contrarío 8en81i de que la obra sea mueble 25.
,dacCÍón la enumeración que realiza es simplemente enunciativa, En otros casos, las legislaciones son restrictivas, admitiendo
por lo ~ue nO limita de ninguna manera el sentido genérico que s610 como obras públicas a aquellas construidas sobre inmuebles.
cabe atribuirle al art. 19 de la ley de la materia 23. Esto es lo que ocurre con la ley 76 de la provincia de Salta,
En cuanto a la legislación provincial, la ley 6021 de la pro- que en su arto 1Q incluye dentro del régimen de esa ley a " ... las
vincia de BuenOS Aires se refiere en su arto 19 a "Tooas las cons- obras que ejecute ( ... ) en inmuebles del dominio público yío
trucciones, trabajos} instalaciones y obras en general", mientras privado provincial o municipal ...", con lo que se infiere que
que el arto 19 de su reglamentación (ambos ordenados como art. sólo admite la obra inmueble.
1-I-I-1 del Código de Obras Públicas) aclara que: "Entiéndese También permite la misma interprettIción la ley 38 de la pro-
por construcciones, trabajos, instalaciones Y obras en general, a vincia de La Pampa, que en su urt. 59 dispone: "Las obras públi-
efectos de lo dispuesto por el arto 1Q de la ley: la ejecución, con- cas deberán construirse en inmuebles de propiedad del Estado ... ";
servación, reparación o mantenimÍento de bienes muebles o in~ y con una redacción similar la ley 6080 de la provincia de Córdoba,
muebles que estén directamente afectados a una obra pública, que en su arto 39 establece que "Toda obra pública deberá ejecu-
n tarse en terrenos del Estado ... " .
.cualquiera fuera ef sistema de ejecuci6n •
La ley 5188 de la provincia de Santa Fe también admite en En cuanto a la ley 1864 de la provincia de Jujuy, es termi-
su arto 1" una concepción amplia o genérica acerea del objeto del nante en cuanto sólo admite las obras inmuebles: en su arto 1Q
trabajo público: ~rodas las construcciones, refacciones, instala- establece: "Designase obra pública a los efecto; de aplicación
ciones, trabajos y obras en general ..." 24. También la ley 95 de de esta ley, toda obra ejecutada sobre un inmueble por cuenta
la provincia de Tucumán se refiere a " .. , toda construcción,
de la provincia ... ~~.
trabajo o instalación ... " (art. 1Q), aclarando el arto 1Q de su El proyecto de ley nacional sigue al respecto un esquema
decreto reglamentario nO 225/63, que su alcance es con respecto simílar al implementado por la ley correntina y las legislaciones
citadas en la nota 25.
tanto a cosas inmuebles como 'muebles.
Así, mientras que en su arl. 29 manifiesta un concepto gené-
rico: "el concepto obra pública comprende las obras de cons-
23 La nOrma citada (art, 19, decreto 19,324/49) establece: "Los con-
trucción y los trabajos similares que emprenda la Administra-
ceptos 'construcción', 'trabajo' o "servIcio de industria' utilizados en el arto
19 de la ley 13.064 de obras públicas, comprenden lns siguientes tareas, cual- ción ...••, en su arto 4° utiliza la expresión: "Cuando la obra pú-
qniera sea la autoridad o agente del servicio que las ejecute y el carácter blica haya de efectuarse en un ínmueble .. ,", indicando entonces
civil o militar de las mi~mas, la posibilidad de realizar obras públicas muebles.
"Construcciones: obras viales, diques~ edificios, construcciones espeCiales En el derecho comparado la tendeneia más generalizada es
para obras y servicios púhlicos, líneas telef6nicas y telegráficas, aer6dromos,
monumentos, perforaciones, replanteos, plantaciones, etc., y todo otro tra~ considerar sólo como obra pública a aquellas que reconozcan el
bajO principal o suplementario inherente a la materia, carácter de inmuebles.
"Trabajos: obras de ampliaci6n, reparación y/o conservación de bienes
jnmuebles y dragado, balizamiento y relevamiento, etcétera.
"Servicio de industria: organizaci6n e instalación de servicios industria- ~5. Con redacción similar, arts. lQ y 4Q de la ley 593 de la provincia
les (v.gr.: talleres> fábricas, usínas, etcétera)", d~ MISIOnes. ley 687 de la provineia de 0Jeuquén, ley 3734 de la prov1n~
24 Con redacción similar, el arto 1 9 de la ley 2.555 de la provincia dei cm de San Juan, ley 3744 de la provincia de San Luís. ley 4416 de 1a provincia
Chaco, mt, H' de la ley 533 de la provincm de Chubut, art. 1'> de la ley d~ ~endoz.a, ley 6351 de la provincia de F..ntre Ríos, ley 2092 de la pro-
vmCIa de Santiago del Estero, reformada por ley 3444.
286 de la provincia de Río Negro.
Asi, en Francia se afirma la necesidad del carkter inmobilia- doctriua 28, siguiendo las pautas legislativas, esti conforme en
rio de la obra phblica, conforme lo sefiala De Labaudkre: "De cuanto a1 caricter inmobiliario de la obra phblica.
todas las condiciones esigidas (para que se configure la nocibn Tambikn, siempre a titulo de ejemplo, cabe citar la ley meji-
de "tramil public") ksta es la mhs estricta. Los trabajos mobi- cana de obras phblicas, del 30/12/80, que en su art. 2 0 establece
liarios no pueden ser trabajos pliblicos, cualquiera fuere la im- que regula lo relativo a ". . . todo trabajo que tenga por objeto
portancia y el volumen del bien mueble (por ejemplo, navio, han- crear, construir, conservar o modificar bienes inrnuebles .. .".
gar mbvil de avi6n. . .)." Aclara el autor que, a pesar de que la Sin embargo, cabe destacar que esta caracterizacibn de la
jurisprudencia ha adoptado las pautas del derecho civil para de- obra phblica viene m5s impuesta por razones hist6ricas y tradi-
finir la cosa inmueble, incluyendo entonces en tal caricter 10s in- cionales, receptadas por el derecho positivo, que por motivos que
hagan a la naturaleza misma del concepto de obra phblica.
muebles por destino o accesibn (lineas telefbnicas, cables subma-
rinos, etc.), lo que de por si es un concepto restringido, en al- Asi lo reconoce ~oehrssen29, quien afirma que la distincibn.
entre obra inmueble y obra mueble "non trooa fondamento razio-
gunos casos se le otorga un caricter bastante amplio, "es asi -dice
nale nella natura delle cose" y es sbIo una categoria creada por el'
De Labaudkre- que el Consejo de Estado amplib la responsa-
legislador que "non attengono certo dllintrinseca essenza delle co-
bilidad de las obras phblicas en un caso en que un poste de
se e delle opere". El autor admite las razones histbricas que jus-
seiializaci6n. . . estaba simplemente afirmado en el suelo" 26.
tifican la distincibn, especialmente de orden tkcnico, e incluso
En el derecho espafiol el Reglamento General de Contrata- admite la conveniencia de no variar, todavia, la estructura juri-
ci6n del Estado limita expresamente el rkgimen del contrato de dica de tal distincibn "struttura la quale k la risultante di un lun-
obra pliblica a aquellas que tengan un objeto inmueble, a1 consi- go period0 di evoluzione che ancora non pub dirsi superato".
derar (art. 55) como tal contrato a 10s que tengan por objeto: "1) pero destaca que "anche se qualche sintomo di superamento o di
La ~ n s t r u c c i b nde un bien que tenga naturaleza de inmueble, avvicinamento pu6 essere rilevato da un attento osservatore" 30.
tales como carreteras, ferrocarriles, puertos, presas, canales, edi- En definitiva, si bien es cierto que con relacibn a1 punto que
ficios, fortificaciones, aer6dromos, bases navales, monumentos, ins- se esti analizando deberi estarse a la voluntad del legislador,
talaciones varias y otros anAIogos; 2) La realizacibn de trabajos cuando kste defina con claridad la cualidad de mueble o inmue-
que modifiquen la forma o sustancia del terreno o del subsuelo,
como dragados, sondeos, prospecciones, inyecciones, etc.; 3 ) La
23 Roehrssen, G., ob. cit., I1 hood pubblici, ps. 47/48: "Che le opere
reforma, reparacibn, conservaci6n o demolici6n de 10s definidos en pubbliche debbano consistere in cose immobili 6 affermazione comune nella
..
10s pkrrafos anteriores .??. dott~ina,ma 6 anche afferrnazione la quale non trova dimostrazione de parte
El mismo criterio es seguido en el derecho italiano, donde la della dottrina stessa". Tambikn Cianflone, ob, cit., L'appalto. . ., p. 71.
Oh. cit., p. 51.
30 Ibid., p. 51. Dice Roehrseen, p. 50, siguiendo el concepto esewial
de frobaio prihlico que se utilizi, supra, pa&. 7 del texto,
2 6 De LabaudCre, A,, ob, cit., Trait4 BlJmentaire de drmt alministratif,
"Sotto el primo profilo a noi sembra cbe concettualmente non potrebbe-
parig. 496. TambiCn Auby y Ducos-Ades, Droit adminirtratif, Precis Dalloz, ro escludersi dalla nozione di opera pubblica (se tale i: la cosa creata dal-
1979, p. 457: "Le travail (public) doit d'autre part prCsenter un caractere in- l'uomo ed appertenente ad un soggetto di diritto pubblico) le cose mobili
mobiliar c'est Q dire porter sur un inmeuble", y define el trahajo plihlico como create anch'esse da!lo sforzo umano ed appartenenti ad un soggetto pubblico:
"le travail immohilier exkcut8 dans un bfit d'int6tet ghneral par une personne in una nozione del genere potrebhero benissimo rientrare non soltanto le
publique ou pour son cornpte". strade, le case, le dighe, ecc., ma anche talune c.ose che hanno carattere mo-
27 La doctrina espaiiola tarnhi6n acepta sin discusi6n el caricter nece- biliare, come le navi, le aeronavi, le automobile, o qudsiasi altra macchim..
sariamente inmobiliario de la obra pliblica. Cabe citar, entre otros, Garcia Nei riguardi di ambedue queste categorie di cose si pub riscontrare l'esistenza
Ortega, P., Los controtos del Estndo, "Ministerio de Obras PGhlicas y Urba- tanto dell'elemento sostanziale e primordiale ( c o n creata dall'uomo) quanto
nism~", Madrid, 1977, p. 63; Garcia de Enterria y Ram6n Fernbndez, ob. l'elemento estrinseco e formale che caratterizza la pubblicitQ dell'opera ( a p - ~
cit., Curso de derecho administrotiuo, t. I, p. 610. partenenza ad un soggetto pubblico)".
I
ble que deheri tener la cosa construida para ser considerada una La distiuci6n entre 10s dos t i p s contractuales se ha estable-
obra pliblica -y ya se ha visto que en nuestro pais, salvo ex- cido fundamentalmente a partir del proceso de elaboracibn de la
cepciones, el legislador se ha inclinado par un criterio amplio- cosa que puede ser objeto del contrato de suministro o de obra
no cabe duda de que es labor de la doctrina, fundamentalmente, pliblica, lo que es una prueba m L del papel preponderante que
cumplir el papel de "atento observador" que indicaba Roehrssen el procedimiento -en este caso, procedimiento tbcnico y juridico-
y descubrir en la naturaleza misma del instituto juridico 10s elemen- adquiere en la contratacibn administrativa.
tos que puedan resolver esta cuestibn, cuya importancia prictica, ,
r Asi la Procuracibn del Tesoro de la Naci6n ha establecido:
en lo que hace a la calificacibn del contrato y su rkgimen juridico, / "Nos encontramos freute a un contrato d e obra pi-blica cuando la
es indudable. / provisibn de que se trata esti constituida por maquinarias de
De ahi el acuerdo con la doctrina nacional que, con unani- i especial construccidn y c a r a c t ~ m de , las que debe presen-
midad, reconoce la posibilidad del carhcter tauto mobiliario como tarse un prototipo que comprenda 1% especificm'anes te'cnicas, y
inmobiliario de la obra pliblica. 1 aprobado 6ste deberbn conrtdse 10s restantes conforme al mjsmo,
j encontrBndose previsto en 10s pliegos respectivos, la in.specidn du-
rante la fabkaci6n, tanto del prototipo como de 10s equips en
i, Con esta doctrina, la Procuracibn del Tesoro deslindb
en dlversos casos 10s dos tipos contractuales, siguiendo el prin-
cipio que afirma que "Sin perjuicio de la calificaci6n que pueden
El carhcter tambi6n mobiliario d e la obra pliblica plantea
asignar las partes a un contrato, si del texto de este i-ltimo se in-
la necesidad de establecer diferencias entre el contrato asi nomi-
nado y el contrato de suministro, que se caracteriza, precisamente, fiere con evidencia que la intencibu de aqukllas fue la de celebrar
por tener como obieto la tradicibn de una cosa mueble, en favor un convenio diferente, le serin aplicables las normas que deben
de una persona pliblica. regir el correspondiente tip0 de acuerdo"33.
La calidad de cosa mueble como objeto del contrato de De acuerdo con la doctrina expuesta mAs arriba, la cosa mue-
suministro es en general destacada por la doctrina, de aqui que, ble, para ser objeto de un contrato de obra pi-blica, tiene que ser
coincidiendo con Escola, pueda definirse a este contrato adminis- construida de acuerdo con especificaciones t6cnicas y caracteristi-
trativo como aquel "por el cual la administracibn pliblica obtiene cas definidas previamente por la Administracibn comitente en 10s
la provisibn de cosas muebles, mediante el pago de una remune- pliegos respectivos.
racibn en dinero" 31.
trato de suministro y ajena a la compraventa (criterio objetivo); en segundo
31 &cola, H. J.. ob. cit., Trntndn integral. . ., t. 11, p. 505, quien reali- tkrmino, un criterio que hemos venido a denominar subjetivo, cual es la in-
za una extensa cita d e autores. Cabe agregar que Marienhoff, oh. cit., Tra- determinaci6n inicial del objeto de las prestaciones y su concrecibn en con-
todo.. ., t. III-B, p. 651, destaca que la doctrina es uninime en cuanto a1 sideraci6n a factores d e carhcter subjetivo; finalmente, la especial intensidad
carscter de cosa mueble como objeto del contrato de suministro, cosa mueble con que el elemento temporal influye en la causa del negocio, convirtikndose
que puede ser fungible o no fungible, consumible o no cansumible, d e en- de elemento accidental en factor predeterminante del mismo.
tregas sucesivas o cantinuadas o de entrega h i c a (P. 653). Otros autores "Partiendo de estos criterios puede, como decimos, definirse el contrato
exigen, como elemento esencial para la categorizaci6n del contrato d e sumi- d e suministro como aquel acuerdo d e voluntades en virtud del cual una de las
nistra, que Ins entregas sean sucesivas. Asi, el espairol Rivera Ysem, J. L., palte, suministrante, se compromete a asegurar a la ctra, suministrando, la
en El contrnto ndministrotioo de suministro, Inst. Garcia Oviedo, Sevilla, 1976, satisfaccibn de una necesidad duradera mediante entregas sucesivas de bie-
p. 77, afirma lo sipuiente: nes muebles, cuya cuantia va a deteminarse en funci6n d e las necesidades
"El cantrato d e suministro es, a nuestro modo de ver, una categoria ju- del adquirente sobrevenidas en la fase de ejecuci6n del contrato".
ridica unitaria y aut6noma que alcanza esta autonomia y sustantividad a tra- 3% Dictimenes, 113-333, Erpte. 15.085168, Comando en Jefe del EjBr-
v& de un proceso d e delimitacibn con la compraventa, en el que como crite- cito, 21/5/70.
rios distintos aparecen: de un lado, la nota d e periodicidad propia del con-
236 CONTRATO DE OBRA PÚBLICA ELEMENTOS DEL CONTRATO DE OBRA PÚBLICA 237

Esta idea se presenta también en la doctrina de los autores,. realidad se contrata indisolublemente unido a la obra terminada.
indicando Escala que "... no obstante la identidad posible de Por el contrario, en el suministro el objeto del contrato es la
su objeto, el contrato de obra pública y el de suministro se dis- cosa, que puede estar o no fabricada en el momento de celebrar
tinguen en cuanto se comprueba que en el primero el contratista -el contrato 37, pero que, en todo caso, no es su proceso de fabri-
promete un resultado y debe ejecutar la obra con arreglo a los -cación o elaboración lo que interesa a los efectos de celebrar el
planos, pliegos, especificaciones, etc., que forman parte del con- .acuerdo de voluntades.
trato y han sido preparados por la Administración Pública, mien- En consecuencia, no parece definitorio, a los efectos de la dis-
tras que en el suministro lo que se provee son cosas que están en tinción a que se está haciendo referencia, que la cosa mueble,
la naturaleza o que han sido fabricadas por el hombre, pero en para ser obra pública, nO sea ni consumible ni fungible 58.
este último caso por propia cuenta del contratista"34. En idéntico' Precisamente, en el contrato de suministro se busca la ad-
sentido Diez señala que e... el contrato de obra pública com- quisición de una cosa mueble que, con o sin obligación de fabri-
porta una obligación de fabricar, -de hacer, de obtener un resul- cación por parte del suministrador, sea de oferta usual en el mer-
tado en el cual el pago de la obra supone un control efectivo de 'cado, es decir, tenga la característica de producto estándar.
la fabricación" 85. En el decreto 5720/72, que configura el Reglamento de Con-
La Procuración del Tesoro de la Nación ha hecho un intere- trataciones del Estado, se establecen distintas nOrmas que indican
sante resumen de las características diferenciadoras: la característica apuntada en el párrafo anterior. ASÍ, en el inc.
"Son circunstancias relevantes que distinguen al contrato de:'- 30, reglamentario del arto 56 de la ley de Contabilidad, se regulan
obra pública del de suministro: a) si en la contratación de cosas los requisitos mínimos que debe contener todo pedido de contra-
futuras la realización de éstas depende de la persona que contrata tación (en materia de suministros) con anterioridad al llamado
y no de un tercero; b) si hay prestación de la actividad 'humana ·a licitación pública_ Entre ellos, en el ap. b) se señala: "estable-
como totalidad de la realización; e) si la obra no está hecha, es cer, respecto del objeto motivo de la contratación, si los elemen-
decir si la obligación es de hacer y se persigue un resultado; d) tos deben ser nuevos, usados, reacondicionados, cantidád, especies
si a quien hace el encargo le interesa el proceso interno de fabri~ y calidad, de conformidad con la terminología calificativa usual
cación, los detalles técnicos, vigilando y controlando cómo se' en el comercio, ajustadas cuando corresponda a las normas IRAM,
realizan; e) si los objetos deben ser construidos especialmente de Farmacopea Nacional Argentina, etc."; de tal manera que el pe-
acuerdo a especificaciones detalladas que se verificarán; f) si el dido de contratación de un elemento con características no usua-
encargo se refiere a una cosa determinada, que no se destina al les en el comercio resulta siempre una excepción que debe ser
comercio en generar~ a6, justificada expresamente, como lo señala el ap. c) de la misma
Como se ve, en todos los casos predomina la idea de que en el norma: "dar fundamento a las razones que justifiquen la solicitud
suministro, aun cuando la cosa sea fabricada, la Administración
se desentiende del proceso productivo, mientras que en la obra
pública, no sólo no se desentiende de aquél sino que lo define
I 37 En su sentencia del 1 de diciembre de 196-7, el Tribunal Supremo
·de España --citado por Moreno Gil en ob. cit., Contratos administrativos, p.
en sus más importantes aspectos (proyectos, planos, especific-acio~ ·485- estableció la siguiente jurisprudencia: "Mientras ]a obra contratada
nes técnicas, etc.). Cabe aquÍ insistil, pues es lo que justifica está siempre pendiente de ejecutar, el suministro es tal independientemente
·de que la cosa a entregar esté o no fabricada o ejecutada en el momento
esta distinción, en que la obra pública es siempre el resultado de ,del contrato".
un proceso de elaboración, pues, precisamente, es eso lo que en 38 En contra, Marienhoff, ob. cit., Tratado ... , t. III-B, p. 519.
La ProcurDción del Tesoro ha dicho: "Dos caracteres definitorios del

34 Escola, ob. cit., Tratado integral. .. , t. 1I, p. 198.


,
! contrato de rnministro son: a) el objeto de la prestación es consumible, fun-
gible, o que debe darse o prestarse periódicamente; b) el objeto del contrato
!I:5 Diez, ob. cit., Derecho administrativo, t. 1I1, ps. 141/142. se entrega directDmente y se paga según peso, mlmero y medida"; ~'Dictá­
3P, Dictámene.~> n? 9, p. 311. menes", n Q 9, p. 313.
ELE~MEXTOS
DEL CONTFL4TO DE OBRA P ~ B U C A 239~

d e bienes o sewicios que difieran de 10s comunes o que signifi- asegnrar la buena calidad, conforme con las condiciones del con-
quen restringir la concurrencia de oferentes". trato, del bien que adquiere, per0 no indica que sea voluntad de
Esto no obsta a que 10s pliegos de bases de cada licitacibn aquklla determinar imperativamente las caracteristicas o condicio-
deban determinar '. ..las caracteristicas, especificaciones y cali- nes que deberd respetar el proceso de elaboracibn de la cosa a
dades minimas de 10s elementos que se liciten. .", sin perjuicio suministrar, por cuanto, precisamente, lo que la Administracibn
de evitar que tal detalle importe violar el principio de la concu- compra es un bien de caracteristicas comunes en el mercado. Por
rrencia a1 beneficiar a un solo oferente, tal como lo establece el el contrario, como ya se dijo ut supra, en la obra pliblica, a la Ad-
ap. b ) del inc. 32, y tambibn en el inc. 46. ministraci6n comitente le interesan tanto el proceso de elaboracibn
Sin embargo, conforme lo regula el ap. b ) del citado inc. 46, como la cosa terminada, de tal manera que el objeto del contrato
se admitirin "tolerancias" sobre aquellas caracteristicas y especi- se refiere a estos dos elementos, con igual grado de importancia,
ficaciones detalladas en 10s pliegos, tolerancias que ". . .serdn, en y no s61o como una relaci6n de medio a fin (ver supva, g 25).
principio, las miximas compatibles con las necesidades funciona- Aun en 10s sistemas juridicos en donde no se reconoce la obra
les y la naturaleza y caracteristicas del articulo licitado, que sean pliblica mueble ha surgido la necesidad de distinguir el suminis-
habituales en raz6n de la modalidad de comercializaci6n o fabri- tro del contrato de obra pliblica en ciertos casos especiales, como
cacibn del mismo". Esta "habitualidad" en las caracteristicas del por ejemplo el contrato de suministro-fabricaci6n seguido de obras
product0 o sus modalidades de comercializacibn o fabricaci6n es complementarias de instalacibn y puesta en funcionamiento.
el elemento que siempre esti presente en el contrato de suminis- En el derecho espafiol, donde, mmo se ha visto, la adquisi-
tro, salvo excepciones que deben estar debidamente justificadas, cibn de cosa mueble es siempre contrato de suministro, aun cuan-
tal como lo exige la littima parte d e la nonna antes transcrita: do aqublla deba ser especialmente elaborada, el concept0 de con-
"La no aceptacibn de tolerancias cuando razones cientificas o t6c- trato de suministro es mds amplio que el analizado en 10s pirra-
nicas -que deberin wnstar en las actuaciones que den origen fos anteriores, seglin su regulacibn legal 38.
a1 pedido de precios- exclnyan su psibilidad, deberi constar en
las cldusulas particulares". 3-1 Reglamento General d e Contrataciones del Estado, arts. 237 y
Por el mismo motivo establece el inc. 47 que ". . .siendo las 240, caracteriza a1 suministro de la siguiente forma:
especificaciones (ya se vio que las habituales en el comercio) "237. - A 10s efectos de la Ley d e Contratos del Estado y el presente
Reglamento, se considerara contrato de suministro la compra d e bienes mue-
de la oferta lo fundamental y las muestras lo accesorio, la no pre- bles por la Administracihn en la que concurra alguna d e las siguientes ca-
sentacibn de kstas no seri causal de rechazo de la oferta cuando racteristicas:
ksta se ajuste a 10s requisitos". 1. Que el empresario se obligue a entregar una pluralidad de bienes,
Lo sefialado no impide, en el contrato de suministro, que la de farma sucesiva y par el precio unitario, sin que la cuantia total se defina
con exactitud a1 tiempo d e celebrar el negocio por estar subordinadas las
Administraci6n comitente ejerza sus prerrogativas de control so- entregas a las necesidades de la Administraci6n.
bre los distintos aspectos que hacen a1 cumplimiento contractual 2 . Que se refieran a bienes consumibles o d e ficil deterioro por el uso.
de su proveedor, en especial cuando el contrato es de 10s llamados 3. Que la cosa o cosas que hayan de ser entregadas pot el empresario
de suministro-fabricacibn, donde la cosa a proveer debe ser ela- deban ser elaboradas con arreglo a caracteristicas pculiares fijadas previa-
rnente por la Administracibn.
borada por el suministrador. Asi lo indica el inc. 99: "Cuando la Las restantes adquisiciones de bienes muebles se regirin por la Ley
contratacibn se refiera a articulos a manufacturar, 10s adjudicata- del Patrimonia del Estado (art. 83, L. C. E.).
rios facilitarin a la dependencia contratante el libre acceso a sus 238.-El contrato de suministros se regular& por las normas contenidas
locales de producci6n, debiendo proporcionar todos 10s datos y en el presente titulo Y, en su defecto, POI las referentes a1 contrato de obras.
antecedentes que requieran a fin de verificar si la fabricaci6n de Na obstante lo dispuesto en el parrafo ante.rior, a 10s contrams de fa-
bricaci6n a que se refiere el apartado 3 del articulo precedente, se aplicaran
aquellos articulos se ajnsta a las condiciones pactadas". Esta es directamente las normas generales y wpeciales del contrato de obras que el
una mayor garantia de la Adminiskacidn comitente en orden a 6rgano d c contrataci6n determine en el conespondiente pfiego de bases.
Asi -y por las particularidades del caso puede admitirse que
esta doctrina es tambikn aplicable a nuestro derecho cuando la
cosa suministrada no es fabricada "a pedido", pero luego es ne-
cesario su montaje o instalacibn- frente a1 supuesto de que la em-
presa contratista "ademis de la fabricaci6n y suministro d e 10s
equipos de telecomunicaci6n debe realizar una serie d e obras ci-
viles preparatorias y completar despubs la instalaci6n y puesta a
punto de aquellos aparatos", la Junta Consultiva de Contratacidn
Administrativa, partiendo d e lo establecido en el art. 240 del Re-
glamerto General de Contrataciones (citado en la nota anterior),
se5ai6 que en el caso ". . .las obras, seglin se deduce de la docu-
mentacidn remitida, no puedeu reputnrse 'accesorias', siuo 'esen-
ciales', para el funcionamieuto del complejo, ni tampoco las ex-
presadas obras tienen el caricter de 'subsiguientes', como las ti-
picas d e montaje, sino previas y simultineas al suministro del p a -
terial, con el prop6sito de que constituya, una vez concluidos 10s
trabajos, u n todo unitario, inmueble e indivisible", por lo que
" . . .con independencia del mayor valor que pueden tener 10s equi-

239. - E n relaci6n con determ.nados tipos d e suministro se tendrin en


cuenta 18s siguientes reglas:
a ) Se regular.6n par este titulo 10s contratos d e elaboraciim y fabricaci6n
d e bienes muebles aun cuando la Administraci6n se obligue a aportar total o
parcialmente 10s materiales precisos y tambibn 10s d e conservaci6n o repara-
ci6n de bienes muebles en general.
b) Las adquisiciones de semavientes se regularin por el presente titulo
sin perjuicio de lo que establezcan sus normas privativas.
c ) Se regirin aasimismo por este titulo las adquisiciones d e equipos y
sistemas para el tratamiento d e la informaci6n, sus distintos dispositivos y
programas y en su defecto, por sus normas administrativas especiales.
d ) Los contratos d e suministro que se celebren por conhataci6n directa
con empresas extranjeras, y su objeto se fabrique o proccda d e fukra del te-
nitorio national, se atemperar.6 la presente legislaci6n sin perjuicio d e lo
que se convenga entre las partes, de acuerdo con las normas y usos vigentes
en el comercio international.
240.-Aun cuando el rmpresario deba realizar obras accesorias de ins-
talaci6n y montaje de 10s bienes, se considerari el contrato como de sumi-
nistro siempre que tales operaciones constituyan una abligaci6n impuesta en
10s correspondientes pliegos de bases.
POI el contrario, cuando a juicio del tirgano de contrataci6n, dado el
tiempo que precise la ejecuci6n de la obra subsiguiente y el porcentaje que
represente en el precio total deba cansiderarse la obra como elemento prin-
cipal y el suministro como accesorio, se regular.6 integramente el negocio por
el titulo I1 del presente libro".
pos sobre las obras civiles y de montaje, lo importante es el con-
junto totol, en suma, la instalaci6n, la obra completa, el result&
firncional deseado pol. la Adrninistra~idn"~~. Esta configuraci6n
del objeto del contrato como "instalaci6n unitaria" lleva a conside-
rarlo como contrato d e obra pliblica y no d e suministro.

$ 28. EL CAR~CTER "EXTENSIVO" DE LA OBRA P~JBLICA

Es una afirmaci6n doctrinaria41, ademis de contar con B$yo


legal, que el contrato d e obra pliblica tiene un carhcter "extensi-
vo", es decir que su rbgimen juridico se aplica a otros contratos
o relaciones juridicas no contractuales (celebrados o establecidas
con sujetos distintos a1 constructor de la obra en cuestidn) que en

concept0 de las obras pi-blicas, asi como tarnbibn a las adquisi-


ciones de maquinarias, mobiliario y elementos destinados a las
construcciones, trabajos y sewicios de industria.. . hasta su habi-
litaci6n integral".
-+
si mismos tendrian una regulacidn juridica distinta por constituir, ,
precisamente, otro tip0 juridico contractual.
En nuestro derecho el ya citado decreto 19.3W49, a1 ac arar
10s alcances del art. 10 de la ley 13.064, establece en su art. 2'J:
"A las adquisiciones y expropiaciones de inmuebles y sus media-
neras les alcanzan todos 10s efectos correspoudientes a1 carkcter y

Similar regulaci6n se repite en las legislaciones provinciales,


por ejemplo, la ley 6021, de Buenos Aires, que en su art. 20 es-
tablece que: "La provisi6n, adecuaci6n o reparaci6n de miquinas,
aparatos, instalaciones, materiales y elementos pennanentes de tra-
bajo o actividad que sean accesorios o complernentarios de la obra
qne se construya quedan incluidos y sujetos a las disposiciones
d e esta ley".
A la vez, el art. 20 de la ley mendocina 4416 indica: "Queda-
r i n incluidos en las disposiciones d e la presente ley, el transporte
d e personas o cargas en general, la adquisicibn, arrendamiento,
provisibn, adecuaci6n y reparaci6n de mhquinas, equipos, aparatos,
artefactos, herramientas y demis elementos destinados a utilizarse,
I
T7

4 0 Jurisprudencia citada por Moreno Gil, ob. cit., Controtos adminis-


trativos.. ., ps. 1154/1158.
4 1 Marienhoff, ob. cit., Trotado.. ., t. 111-B, ps. 535/540.
l
consumirse o incorporarse a una obra p6blica determinada hasta tad0 funcional deseado por la Administraci6n", de acuerdo con la
su habilitaci6n integral". doctrina jurisprudencial transcrita en el parigrafo anterior.
El art. 79 de la ley 1864, de la provincia d e Jujuy, lo mismo En cuanto a lo establecido en el art. 20 del decr. 19.324/49,
que e n la ley 38 de La Pampa, entre otras, establece que: "La pro- transcrito m8s arriba, cabe comentar que las cosas muebles a las
visi6n e instalacibn de miquinas, material fijo y elementos penna- que se refiere son alcanzadas por el concepto "extensivo" de l a
nentes de trabajo o actividad que Sean accesorios y complementa- obra pliblica siempre que su adqnisici6n se haya concretado con
rios de la obra que se construye quedan inclnidos y sujetos a las anterioridad a la "habilitaci6n integral" d e la obra, es decir el
disposiciones de esta ley". comienzo d e su utilizacibn para el destino para el cual fue cons-
Esta misma linea fue seguida por 10s proyectos legislativos truida. Este momento no necesariamente debe coincidir con las
existentes en la materia. Asi, fundamentalmente el art. 20 del pro- recepciones provisoria o definitiva, aun cuando pueda tener in-
yecto del Consejo Interprovincial de Ministros de Obras Pliblicas fluencia sobre ellas, como se veri a1 analizar estos institutos.
(CIMOP, a60 1970) establece: "Quedan incluidas en l a disposi- Las normas comentadas colocan tambikn en la misma situa-
nes de la presente ley la adqnisicidn, provisibn, arrendamiento, ci6n a las "adquisiciones y expropiaciones de inmuebles y sus me-
adecuaci6n o reparacibn d e miquinas, eqnipos, aparatos, artefac- dianeras". Esto no qniere decir que en tales casos el rbgimen
tos, instalaciones, materiales, combustibles, lubricantes, energia, juridic0 del contrato de obra phblica desplace las respectivas
herramientas y elementos permanentes de trabajo o actividad que regulaciones contenidas en el C6digo Civil y la ley de expropia-
efecthe la Administraci6n con destino especifico a obras phblicas". ciones.
El proyecto de ley nacional d e 1977 tambikn sefiala en su En el supuesto d e la expropiaci6n seri inevitable cumplir con
art. 20: !
la exigencia constitncional (art. 17 de la Constituci6n Nacional)
"El concepto obra pbblica comprende las obras de construc- de la previa calificaci6n de "utilidad phblica", establecida por ley
ci6n y 10s trabajos similares que emprenda la Administracidn in- I del Congreso, y la tambibn previa indemnizaci6n. Los dem8s re-
cluido en cuanto fuera pertinente a la adquisicibn, el arrenda- quisitos y procedimientos expropiatorios estarin tambikn regula-
miento, la adecuaci6n y reparaci6n de inmuebles, el transporte y dos por la ley U499, ya que la ley de obras pliblicas no prevb
la provisi6n d e miquinas, equipos, aparatos, instalaciones, mate- una regulaci6n adecuada a la naturaleza del instituto expropiato-
riales, lnbricantes, energia, herramientas y en general de 10s bie- rio. El caricter "extensivo" d e la obra pfiblica queda reducido,
nes y cosas destinados a ntilizarse, consumirse o incorporarse a en este caso, a las exigencias previas qne debe cumplir la Admi-
las obras hasta su habilitaci6n definitiva". nistraci6n antes de licitar una obra publica, esto es prever la ne-
Es evidente qne estas normas estin suponiendo que la ad- cesidad de contar con el inmueble en el proyecto de la obra y
quisici6n de cosas muebles, o su arrendamiento, no van a con- en su presupuesto (art. 40, ley 13.064) teniendo en cnenta tam-
vertirse en inmuebles por accesibn, al incorporarse a la obra, pues bikn que, seglin lo dispone el art. 70 de la misma ley, "no podrd
d e lo contrario serian naturalmmte obra phblica y no en virtud llamarse a licitacidn ni adjtldicarse obra alguna, ni efectuar in-
del caricter extensivo d e este contrato. aersiones que no tengan crddito legal".
AdemAs, incluyendo la contratacidn de servicios, el imbito Lo mismo cabe decir con respecto a la adquisici6n de inmue-
propio de la normativa transcrita m i s arriba n o puede sino re- bles por la via del contrato de compra-venta y a 10s derechos y
feruse a contratos celebrados con snjetos distintos que el cons- obligaciones emergentes de la medianeria, ambos regidos por el
tructor d e la obra, o bien cuando la Administraci6n constrnya ella C6digo Civil, sin que en nada pueda incidir sobre ellos la ley
misma esa obra. D e otra manera, de ser contratados con el 13.064 ( d e lo contrario el decr. 19.324/49 estaria modificando a1
mismo constructor, formarian parte indivisible del contrato de C6digo Civil, lo que es juridicamente imposible), salvo con rela-
obra, como un conjunto total o una unidad inseparable del "resul- ci6n a lo s e ~ l a d oen el pirrafo anterior.
ELEMENTOS
DEL CONTRATO DE OBRA P ~ B U C A 245

cunstancia con la condici6n de que en caso de disoluci6n el valor


de la obra realizada sea reintegrado en parte proporcional a la
inversi6n efectuada o que la obra y el temeno pasen a ser pro-
A1 definir la obra pliblica (supra, Cap. 11, $ 5 10 y 11) se ha piedad de la provincia de acuerdo con lo que reglamente el Poder
destacado que la misma, la cosa terminada, debe integrar el pa- Ejecutivo", indicando el art. 4p del decreto reglamentario que "En
trimonio de una persona juridica pliblica. 10s casos en que la obra se construya en inmuebles de propiedad
Esto esti dentro del orden 16gico conceptual, pues ma1 po- de personas juridicas de existencia posible, 10s mismos deberAn es-
dria caracterizarse como obra ptiblica a una msa que integrase tar libres de todo gravamen y se deberi celebrar un contrato por
el patrimonio de una persona @&a. escritura pliblica ante el Escribano General de Gobierno, en el que
Por lo tanto, y siguiendo con un proceso racional 16gic0, si se establecerh el procedimiento a seguir en caso d e disoluci6n de
el contrato de obra phblica tiene como objeto (obligacibn d e re- la sociedad o resoluci6n del contrato".
sultado) la construccihn de una obra phblica, no podria existir Una regulaci6n semejante se encuentra en el art. 4e de la ley
contrato de obra pliblica si la cosa construida no puede ser ca- 4416 de Mendoza, art. 40 de la ley 6351 d e Entre Rios, art. 40 d e
lificada como tal. Ya se veri mis adelante quk matices pueden la ley 687 de Neuqubn, etcktera.
hachsele a esta afinnaci6n.
En otras legislaciones provinciales, en cambio, se establece
La ley 13.064 nada indica sobre el particular, si bien a1 ex-
expresamente la exigencia de que la obra pase a ser de propiedad
cluir de su Ambito (art. 10) las construcciones, trabajos o ser-
de la Administraci6n comitente.
vicios de industria "efectuados con subsidios", esti dejando d e lado
a por lo menos uno de 10s casos en que la obra no va a integrar Asi, la ley 6080 de la provincia de C6rdoba considera en su
el patrimonio pliblico. Sin embargo, cabe aclarar que la ley no art. lo obra phblica a la ejecutada 'por cuenta de la provincia o
se refiere mAs que a las obras ejecutadas mediante subsddios (ver en virtud de concesiones especiales.. ., siempre que lo ejecutado
supra, Cap. 11, 4 15), mientras que en la legislaci6n provincial el ingrese a1 dominio phblico o privado del Estado". La misma con-
punto se encuentra mejor regulado de acuerdo con lo vista en dici6n es exigida por el art. 20 d e la ley 38 de La Pampa, y otras.
supra, Cap. 11, § 16. normas provinciales.
El proyecto de 1977 (SETOP) tampoco se refiere expresa- En realidad, para aclarar mejor el problema planteado, es
mente a1 tema considerado, si bien el texto de su art. 49 para las necesario recordar la distinci6n entre trabajo ptiblico y obra pLi-
obras inmuebles esth limitando la calidad de obra pliblica a aque- blica (ver supra, Cap. 11, 10 y Cap. IV, $ 23 y 25), reiterando
Ila de propiedad de una persona phblica, cuando establece: "Cuan- que toda obra pliblica es, necesariamente, el resultado de un tra-
do la obra pliblica haya de efectuarse en un inmueble, b t e debera bajo pliblico, pero no todo trabajo phblico debe concluir necesa-
ser propiedad de la Administraci6n o estar sujeto a un rkgimen riamente en una obra phblica 42, en un sentido restringido del
d e derecho phblico. Excepcionalmente, por razones de interbs concepto.
general, podrh efectuarse en inmuebles sobre 10s que la misma Desde este punto d e vista, no resultarh admisible sostener que
tenga posesi6n o ejerza derecho real de senidumbre o d e uso, pueda existir obra p6blica -en cuanto que cosa terminada- en
por cualquier titulo". el patrimonio de un particular. En este sentido debe ser com-
Lo mismo ocurre con la ley 6021 de la provincia de Buenos partida la critica hecba por J6ze a la vieja doctrina del Consejo
Aires, que en su art. 40 dispone: "Las obras pliblicas deberin cons- de Estado que, partiendo de calificar a la obra pliblica como uoa
truirse en bienes que sean de propiedad de la provincia o en 10s obra de ldilidad general, le reconocia tal carhcter, por ejemplo, a
que 6sta tenga posesihn o dispooga del uso. Tambien podran obras efectuadas en un templo, aun despuks de la separaci6n de
ejecutarse cuando el propietario sea la Nacibn, una municipalidad
o una instituci6n con personeria juridica, pero en esta dtima cir- 42 Conf. Cianflone, ob. cit., L'appdto.. ., ps. 75/76.
la Iglesia y el Estado 43. Tampoco es necesario que la obra, para § 16, tambikn habrh trabajo pliblico si el comitente del mismo es
merecer el calificativo de pliblica pertenezca a1 dominio pliblico, una persona privada actuando en el dmbito de la delegacibn
ya que puede estar incorprada a1 llamado dominio privado de transestructural de cometidos. En este caso, tambikn habri obra
un ente pliblico 44. Per0 si es indispensable la titularidad phbli- pliblica, conforme se sefialarh rnhs adelante.
ca, bajo cualquier rkgimen juridico, para que la cosa tenninada En realidad, como se ha visto antes, nuestra legislaci6n regula
pueda denominarse una obra pliblica 4 5 . Las obras pri& de el trabajo ptiblico mucho rnhs que la obra pliblica, de ahi que
utilidad general no son rnhs que eso, obras privadas de utilidad pueda calificarse de contrato de obra pliblica (ante la cnnfusi6n
general, aunque parezca una verdad de perogrullo. habitual de t8rminos) a aquel que, celebrado por un comitente
Pero puede ocurrir que la obra privada sea el resultado de pfiblico o uno privado par delegaci6n transestructural, tenga por
un trabajo ptiblico, es decir ser resultado de una wntrataci6n en objeto la ejecucibn de un trabajo pliblico, aunque el mismo con-
la que participa una persona pliblica, en tanto que comitente del cluya en una obra privada.
trabajo, y realizado bajo un mod0 juridico que llamamos procedi- I Esta interpretaci6n, en definitiva, no hace mhs que reflejar
miento phblico (es decir, sometidn a un rbgimen de derecho pli- 1 lo que ocurre en la realidad, ya que es habitual que el Estado (el
blico) de ejecucibn. De acuerdo con lo visto en supra, Cap. 11, Estado propiamente dicho o cualquier ente descentralizado) re-
curra al contrato de "obra pliblica" para ejecutar obras que, en
43 JCze, G., ob. cit., Principios genernks.. ., t. 111, p. 358. Correspon- i cuanto tales, una vez finalizadas van a pertenecer a1 patrimonio
d e aclarar que la critica d e este autor apunta mis a la necesidad de vincu- d e 10s particulares. La caracteristica de este mod0 de gestibn de
lar la obra phblica, para que sea tal, con el "funcionamiento de un servicio t 10s cometidos phblicos -ya que el Estado no emplea este proce-
pitblico" que con el problems tratado en el texto. Escola, ab. cit., Tratndo 1
integral. . ., t. 11, p. 169, afirma ". . .todo trabaja phblico debe estar enca-
dimiento para beneficiar a1 particular, sino para satisfacer un fin
minado, para ser realmente tal, a la satisfacci6n d e un fin de utilidad general, d e utilidad general- es que el ente estatal se convierte en comi-
d e bien c o m b , siendo &ta la nota que m b contribuye a caracterizarlos. tente de la obra, con la calidad de locatario en el contrato res-
Pero para el cumplimiento de esta condici6n no es imprescindible, en cambia, pectivo, el que se celebra mediante 10s clhsicos procedimientos
que estos recaigan sobre bienw del dominio p6blicq ya que pueden reali-
zarse sobre bienes del dominio privado administcativo e incluso del dominio
de seleccidn del contratista estatal, se ejecuta bajo la direccibn del
de 10s particulares, coma ocune en el casa de tcabajos ordenados par la au- comitente pliblico, quien paga la obra (con o sin reembolso pos-
toridad administrativa sobre inmuebles privados por razones d e seguridad o terior) y la recibe. El tercero administrado, propietario final de
para evitar un peligro inminente. Pero el fin de utilidad general no debe la obra, normalmente no participa en ninguna de las instancias de
confundirse con el fin de servicio phblico, cuyo sentido es m+ restringido gestibn de aquklla y, en algunos casos, ademhs de estar obligado
y queda desbordado por aquCl".
4 4 Conf. Marienhoff, ob. cit., Trotado.. ., t. 111-8, p. 510; De LabaudCre,
a soportar la ejecuci6n de la obra aun en contra de su voluntad,
ob. cit., Tmith dlimentaire.. ., ps 517/518. Este autor expli,ca, tambiCn, asume la carga de destinar l a obra a1 fin de utilidad general pre-
(ps. 503 a 505) que a partir del caso "Effimieff", decidido par el Consejo visto y, eventualmente, pagar a posteriori su precio, seglin las con-
d e Estado el 28 de marzo d e 1955, s610 se consideran trabajos pi>blicos 10s diciones fijadas o pactadas por el Estado.
ejecutados por cuenta de una persona phhlica, no adquiriendo aquel califi-
cativa 10s trabajos inmobiliarios ejecutados con un fin de utilidad general, Desde este punto de ::;ta, el instituto encuentra una induda-
pero por cuenta de una persona privada. ble inspiraci6n en la figura del fomento, y desde alli debe inter-
45 Conf., Cianflone, oh. cit., L'appolto ..., p. 75. "Se, pertanto, non prethselo. Sin embargo -y esta es la diferencia con 10s medios
pu6 qualificarsi pubblica l'opera cartruita dallo Stato o altro ente pubblico
ma di proprietb del privata (ricostruzione di edifici dannqgiati dalla guerra)
clLsicos de fomento-, en este caso, ademhs de la relacibu que se
si C pure a1 di fuori della nozione di opera pubblica, quando essa sia cos- establece entre la Administracibn y el administrado beneficiario,
tcuita dal privato e poi, acquisita dallo Stato o altro ente pubblico, destinata aquklla celebra tambikn un contrato de obra con un tercero, el
a1 soddisfacimento d i interessi pubblici. Alla nozione di opera pubblica C constructor de la obra, quien se encuentra en una situacibn juri-
percio essenziale che essa sia realizzata dallo Stato o altro ente pubblico. E
dica idkntica que la que hubiese asumido en el comhn contrato
necessario cia4 cbe da una parte sia il risultato di un lauoro pubblico e che
sia, dall'altra proprieti dello Stato e altro ente pu,bhlico". d e obra pliblica. Este nuevo contrato, entonces, en cuanto que
destinado a la ejecuci6n de un trabajo pfiblico, debe ser regido tamente por el EAM/78 y pagadas con fondos del ente, de origen
por 10s mismos principios y normas que el contrato de obra pu- fundamentalmente pitblico, aun cuando se previ6 la participacibn.
blica. Es un contrato d e obra pfiblica, aunque la futura obra de fondos privados (art. 14).
terminada integre el patrimonio privado. El art. 70 de la misma ley 21.349 autorizaba la ejecuci6n d e
Esto es lo que ocurrib con algunas de las obras ejecutadas por "remodelaciones y mcjorns. . ." en bienes de propiedad de terceros
el Ente Auttirquico A4undia1 1978. Esla entidad descent~alizada, "preuiendo que en el futuro se iba a ccmvenir" su destino final,
ubicada en jurisdiccibn de la presidencia de la Nacibn, fue creada y en su caso las tasaciones y formas de transferencias definitivas".
pot la ley 21.349 a 10s efectos de la organizacibn del XI Campeo- La reglamentacibn de la ley 21.349, por decreto 18W/76, r e - ~
nato de FGtbol por la Copa Mundial de la F.I.F.A., declarado de formado por el decreto 1261/77, distinguib, con relacibn a 10s
interks nacional por el art. 10 de la ley antes citada 4e. trabajos a ejecutarse en propiedades de terceros, 10s recuperables
Entre sus cometidos se destacaba el ".. .aprobar, proyectar, por el EAM/78 -sobre los cuales 10s clubes tendrian prioridad
contratar, ejecutar, financiar por cuenta propia o de terceros obras para su adquisici6n o, e n caso contrario, se acreditarian a la pro-
de infraestructura. .. ", necesarias para la celebraci6n de la com- piedad del Estado, quien dispondria sobre su destino final-,de
petencia. 10s no recuperables, por acceder definitivameute a1 hien inmue-~
ble de propiedad del tercero. En estos casos se debia convenir
Estas obras, ejecutadas muchas veces en popiedades dc ter-
con 10s terceros, propietarios de las obras ejecutadas y pagadas
ceros, fueron contratadas bajo el regimen de la ley 13.064, direc- por el ente, el monto de la deuda resultante y sus condiciones de:
pago, conforme a las pautas establecidas en la reglamentaci6n +.'
4 8 El art. 39 d e la ley 21.549 disponia: "El Ente Autirquico Mun- Es decir, fueron obras privadas, con un fin de utilidad general
dial 1978 tiene por misi6n plantear y/o replantear las politicas especificas
relacionadas con el evento; coordinar la labor de 10s distintos entes y orga-
nismos que entendieran en el tema, operar como control de gestihn; supervisar 47 El decreto 1261/77, modificatorio del anterior 1820/76, en su parte
las areas descenbalizadas; suscribir y/o refrendar canvenios; aprobar, pro. pertinente dispuso:
yectar, ejecutar, financiar pox cuenta propia o de terceros obras de infra- "AdjcuIo 1 0 -Incorpbrese, a continuacidn del Gltimo pirtafo del art. 19.
estructura y/o la prestaci6n de servicios relacionados y realizar toda otra del dec. 1.820 del 2 5 de agosto de 1976, el siguiente texto.
tarea necesaria tendiente a1 cumplimiento del objetivo". ConsidBrese com~rendida entre las facultades arriba enunciadas, la d e - ~
En cuanto a su reglamentaci&n, el art. 10 del decreto 1820176, es- leeadbn a oue hace referencia el art. 29 de la lev 13.064 v las emereenter ~~

tableci6: d e la ley li.910.


"El Ente Autirquico Mundial 1978 time por objeto esencial materiali- -
Art. 2Q MModifiquese el texto de 10s arts. 29, 89, 10, 11, 18, 20,. 21, 22,.
zar la participacibn del Estado nacional en las tareas y responsabilidades 24, 26, 27 y 28 del dec. 1.820 ya citado, 20s que quedaldn redactados en la
emergentes de la organizacihn y realizacibn del XI9 Campeonato. de FGtbol siguiente forma:
por la copa Mundial de la Federacidn Intemacional de Football Association Ad. .?-En relacihn con 10s arts. 29 y 17 de la ley 21.349 modificada
(F.I.F.A.) 1978. A tales fines y en cansonancia con 10s a*. 3° y 10 de la pot la ley 21.474, el Ente como organism0 autArquico en la jurisdiction de la
ley 21.349, el Ente gozari de plena capacidad, pudiendo realizar toda clase Presidencia de la Nacibn, tendrh a su cargo la administracihn de 10s recursos.
de actos juridicos y operaciones que se relacionen direda o inditectamente con que le sean asignados; proceder& a su recaudacidn y percepcidn ditecta y
dicho campeonato, por cuenta propia, de terceros a asociados a terceros, de- dispondri su inversidn y pago, conforme a1 presupuesto de gastos y a1 c&lculo
dicindose a la ~ealizacibn y/o supewisih y control de gesti6n dde la infra- de recursos que someteri a la aprobacihn del Poder Ejecutivo nacional. Di-
estmctura deportiva, abarcando tanto la construcci6n de estadios nuevos como cho presupuesto comprendera, asimismo, las partidas de gastos necesarios para
la remodelaci6n de 10s ya existintes; la infraestructura d e comunicaciones; la su desenvolvimiento, estando facultado el Ente para fijar las afectaciones d e
generaci6n de seiial de televisibn en 10s estadios; 10s trabajos y previsiones acuerdo con la programci6n presupuestaria, las necesidades de su propio
referidos a medidas de seguridad; la verificacibn y adaptacibn dde 10s medios desenvolvimiento y el cumplimiento de sus finalidades y a efectuar las mo-
de transportes; las previsiones en materia de alojamientos; la participaci6n en dificaciones en su presupuesto que se cren conveniente, incluidas las compen-
la organizacihn y fiscalizaci6n del evento deportivo, asi como la realizacihn saciones a realizar en 10s crbditos que se financiarin con el aporte del Tesora
de todas las operaciones, actas, contratos civiles y comerciales necesarios para nacional, sin alterar el monto total del presupuesto aprobado, asi camo tam-
el cumplimiento del objeto". bibn a transferir a1 ejercicio siguiente 10s saldos no invertidos a1 cierre de.
ELEMENT~S
DEL CONTRATO DE OBRA P ~ B W C A 251

resultantes de un trabajo ~liblicoejecutado en virtud de uu con- ejecutada, importan las obras realizadas por 10s concesionarios d e
trato de obra pliblica celebrado con un ente estatal y pagador servicios pliblicos, 10s concesionarios de obras pliblicas y, en ge-
con fondos pliblicos. L a obra ejecutada, natwalmente, fue de neral, par todos aquellos que actljan en el marco de la delegaci6n
propiedad del tercero administrado, ajeno a1 contrato de obra transestructural de cometidos, conforme se lo estudiari en infra,
pliblica, quien contrajo una deuda con el Estado por las mejoras Cap. V, $. 39.
hechas en su propiedad. dPo&ia el particular haberse negado En definitiva y desde la perspectiva antes analizada, resulta
a la ejecuci6n de tales trabajos en su propiedad? Sin duda que indiferente determinar si el resultado de un trabajo ptiblico (que
si, pues la realizacibn de un torneo deportivo no puede justificar es, este liltimo, el objeto inmediato de todo contrato o relaci6n
la irnposici6n de cargas o restricciones a1 dominio de 10s parti- juridica "de obra pliblica") integrari o no el patrimonio de un
culares. Sin embargo, el cuestionamiento es meramente tebrico, ente publico. Es que la obra pjblica en sentido lato (es decir,
pues en el caso d e tal oposici6n el Estado hubiese podido expro- objeto de un trabajo publico) no tiene un regimen jur(dico de-
piar el inmueble, cumpliendo para ello con 10s requisitos estable- terminado, o dicho de otro modo, Ia cosa terminada objeto de un
cidos en la Constituci6n Nacional. trabajo p6blico no tiene un rkgimen juridico diferenciador del
Un supuesto especial, con relaci6n a la propiedad de la obra que le corresponde en virtud de otros institutos del derecho ad-
ministrativo o del derecho comlin, como ya fue destacado mhs
arriba.
cada uno d e ellos. Queda, asimisma, facultado el Ente para modificar el
presupuesto correspondiente a1 plan analitico de trabajos pfiblicos. Dice Villar E z c ~ r aque ~ ~"La obra pliblica no es, en sin-
Art. 8 p - En cuanto a1 destina final d e las obras d e infraestructura a que tesis, mhs que el objeto de un peculiar contrato administrativo,
hace mencihn el primer phrrafo del art. 79 de la ley 21.349 mcdificada por que desaparece como tal, a1 concluir la relaci6n contractual. Cier-
la ley 21.474, serAn de propiedad del Estado nacional, que las incarporarh tamente qne no toda obra publica implica, de suyo, la existencia
a la jurisdiccihn que estime conveniente, con especificacihn de las normas para de un contrato, ya que la ley de Contratos del Estado regula
su afectacihn y "so.
precisamente 10s supuestos de ejecuci6n directa de obra por la
Art. 10.-En el caso de 10s remcdelaciones y meforas a introducirse en
bienes de propiedad de terceros, una vez finalizados 10s trabajos y conocido
propia Administracibn. Sin embargo, este solo hecho no des-
el costo definitive d e 10s mismos, se proceder$ a determinar la deuda resul- virtlia el trasfondo de 10s argumentos expuestos. La obra pi-bli-
tante, abservindase al efecto las modalidades y mecinicas acta ad as en 10s ca es algo que tiene un comienzo y un fin determinados.. ." Y
convenios celebrados y a celebrarse con las entidades propietarias d e 10s bie- agrega: "En todo caso, lo que distingue la obra pliblica, como
nes en tales condiciones.
En el caso de bienes recuperables no incluidos en la deuda de referen- caIificaci6n juridica otorgada a un deteminado objeto.. . es la
cia, ellos serhn reintegrados a1 Ente en consonancia con el art. 79 del pre- perentoriedad de tal calificaci6u. Cuando la obra (sea de la
sente. teniendo 10s clubes prioridad para su adquisici6n si se resolviera su clase que sea) ha concluido, deja de operar la categoria de la
enajenacihn. 'obra pliblica' para pasar a ser un simple bien demanial". Jwi-
La deuda que en definitiva se establezca, comenzari a contarse a partir dicamente, entonces, la obra pliblica (cosa terminada en sentido
de 10s noventa (90) dias corridos desde la finalizacihn del evento y se can-
celari y garantizare en la forma establecida en 10s convenios celebrados o que lato) seri un bien del dominio public0 en algunos casos, o, en
se celebren, sin perjuicio de percibir montos cancelato+os antes de aquella otros, un bien del dominio privado del Estado o de otro ente pu-
fecha. El Ente cuenta con tcdas las facultades necesarias para fijar las bases b l i c ~ ,e incluso, en otros supuestos, un bien de propiedad parti-
y condiciones d e reintegro d e deudas. cular, como ya se ha visto.
Los fondos que el Ente invierta en las remodelaciones, meioras y bienes
adquiridos e instaladus en 10s estadios aludidos, se afectarQn transitorismente Pero, en todos 10s casos, su elemento conceptual juridico ca-
a los creditus previstos en el inc. 61 del presupuesto general del Ente. Con-
cluido el evento se proceder& a1 reajuste final de las registraciones contables
practicadas con arreglo a la real inversi6n de 10s crhditos Y en concordancia
con 10s convenios firmados o a firmarse con las entidades deportivas res- 48 Villar Ezcurra, 3. L., Serckio priblico y tdmicar d e coneridn, "Cen-
pectivas". tro de Estudios Constitucionales': Madrid, 1980, ps, 54/55.
$obre la base de "anteproyectos y presupuestos globales", ya sea
lificador seri su calidad de resultado de ese procedimiento d e
a titulo provisional, a la espera de que se "preparen y apruebeu
ejecuci6n de derecho administrativo llamado trabajo phblico.
10s documentos definitivos", o bien porque la conttataci6n futura
Es por ello que, juridicamente, lo que interesa seri la noci6n
( y por consiguiente las bases de comparaci6n en el procedimiento
d e trabaio pliblico y no la de obra phblica, pues ksta existiri
licitatorio) llevard incluida la preparaci6n del proyecto. Asi lo
siempre que sea el resultado de un trabajo phblico, cualquiera
dispone el art. 9Qdel proyecto de ley SETUP, imponiendo el mis-
que sea el rkgimen juridic0 que en definitiva le corresponds a la
mo requisito del caricter exceptional del caso y la exigencia de
cosa terminada. Ello no quita que, desde la perspectiva de la
la "autorizaci6n previa de la autoridad competente.. .", lo que
titularidad de la obra terminada (de 10s particulares o de un ente
no serA necesario ". . . cuando la indole tkcnica de la obra lo con-
pliblico) e incluso desde la perspectiva de su regimen juridico
lleve implicitamente".
concreto (del dominio pitblico o del dominio privado del Estado,
afectada o no a la prestaci6n de un servicio phblico), las dife- En estos casos no cabe duda de que la elaboraci6n del proyecto
rencias sean importantes, lo que justifica la distinci6n entre obra forma parte de la prestaci6n del contratista, incluida dentro del
phblica en sentido estricto (de propiedad phblica) y obra priva- mismo contrato de obra pliblica y quedando sometida a la regu-
da (de propiedad privada), resultado de un trabajo phblico, q u e laci6n general de este contrato. Precisamente, en ciertas condi-
denominamos obra phblica en sentido lato. ciones, esta posibilidad da lugar a un especial sistema de selec-
ci6n del contratista particular, donde se licita la confecci6n del
proyecto y ejecucibn de la obra -que 10s italianos llaman appd-
to-concorso-, tomindose en cuenta para le decisihn de la lici-
t a c h , corno elemento preponderante, la calidad y factibilidad del
Como se veri mas oportunamente, es de la responsabilidad proyecto. En nuestro derecho este sistema se utiliza fundamen-
de la Administraci6n comitente la realizacibn, antes de iniciar el talmente en el contrato d e concesi6n de obra phblica (infra, Caps.
procedimiento para la selecci6n de su mcontratante, de 10s estu- VI y VII), aun cuando puede ser tambikn empleado en el con-
dios y proyectos que s e ~ r i nde base para la futura ejecucibn del trato de obra tipico.
trabajo phblico (art. 4" de la ley 13.064). Este principio es tam- Lo importante de destacar en este momento (10s aspectos
bikn receptado por la legislacibn provincial, como es el caso del que hacen a1 procedimiento de selecci6n del contratista serin ana-
art. 50 de la ley 6021 de la provincia de Buenos Aires,, art. 30 de la lizados en el lugar oportuno) es que en 10s supuestos autorizados
ley 1864 de Jujuy, art. 11 de la ley 38 de La Pampa, art. 3Qde por la ley, segliu lo visto mis arriba, la elaboraci6n del proyecto
la ley 76 de Salta, etcetera. y la ejecuci6n de 10s trabajos forman parte del mismo contrato
De la misma manera el punto es considerado en el, derecho de obra pitblica, constituyendo, por lo tanto, su objeto 5 0 .
cornparado, como es el caso del art. 20 de la ley d e Contratos d e Pero puede ocurrir que Ia Administracidn contrate la ejecu-
Estado de Espafia, asi como tambikn en 10s derechos francks e ci6n del proyecto (con o sin la posterior realizacidn de la direc-
italiano 49. cidn tkcnica de la obra) con terceros independientes del contra-
S610 en casos excepcionales, como lo dispone el antes citado tista de aquklla, tal como lo presk el art. 4Q de la ley 13.064: "Se
art. 4Q de la ley 13.064, podri autnrizarse el llamado a licitacidn podrh llamar a concurso para la elaboracidn de proyectos y acor-

48 COnf. Auby y Ducos-Ader, ob. cit., p. 473: "Le project de travail


est ktabli par les services techniques de I'administration en cause.. ."; Car- $ 0 Conf. Raebnsen, ob. cit., I laowi pbblici, p. 427, que al referirse
nevale, C., y Trotta, G., "L'Appalto, Rasegna di Giurisprudenza Commenta- a1 "appalto-concoiso" sefiala: "In tal caso, peraltro, la progettazione non
ta", Dott. A. Giufre Editore, Mildn, 1978, p. 554: "1 progetti sono general- acquista un carattere di autonomia, ma ai incorpora, per cosi dire, nel siste-
mente predisposti dagli uffici tecnici dell'amministrazione che ha il compito ma contrattuale e ne fa parte integrante".
di eseguire Popera pubblica".
254 CONTRATO
DE OBRA P ~ B L I C A

dar premws que se consideren justos y estimulantes, asi como sultoras laborales. . ." (art. lo,ap. c) regulando en distintas partes
contratar proyectos directamente en casos especiales". de su articulado previsiones especificas para el contrato de con-
Estos convenios eran tratados como contratos de obra pli- sdtoria a 10s efectos del rQgimen del llamado "compre y contrate
/ blica "por accesoriedad". Asi, Marienhoff enumera en tal ca- nacional". Pero, tal como se sefial6 antes, este contrato no tenia
un tratamiento juridic0 cspecifico, de manera que cuando se tra-
ricter a 10s contratos celebrados entre un administrado y la Ad-
:
.I
ministraci6n para realizar 10s trabajos de estudio y proyecto de
las obras, en tanto que tareas preparatorias de una futura obra
taba de contrataciones de estudios o proyectos destinados a la
posterior ejecucion de un contrato de obra pliblica recibia la
pfiblica, y 10s celebrados entre la Administracihn y 10s profesio- misma regulacibn juridica que kste conforme a la doctrina deI
nales de la arquitectura o de la ingenieria para que kstos dirijan carbcter "extensivo" de la obra pliblica. Con la ley 22.40, en-
y vigilen las obras durante su ejecuci6n51. tonces, se establece una regulacibn propia y antbnoma para este
Asi esti tratado el punto en la legislacibn provincial. Tal es el contrato, que pasa asi a tener la categoria de contrato nominado
caso de 10s ordenamientos que autorizan estos t i p s de contrataciones y tipico dentro del derecho administrativo.
someti6ndolas a1 r6gimen de la misma ley de o6ras pliblicas; co- La ley 22.460, no ohstante, contiene disposiciones que tienen
mo el art. 10 de la ley 2555 del Chaco, art. 5'J de la ley 95 de alcances sobre el rkgimen del contrato de obra pliblica. Asi, su
Tucumin, art. 7? de la ley 3079 de Corrientes, etc. Entre ellas, y art. 11 limita muy severamente la psihilidad del sistema con-
sn texto vale como ejemplo, el art. 7"e la ley 6351 de Entre tractual del "appalto-concorso", a1 que se hizo referencia en 10s
Rios dispone: "Previa resoluci6n fundada, la Administracibn po- pirrafos anteriores, a1 establecer que: "La con.tratacidn de obras
d r i contratar el estudio, proyecto, direccibn, inspeccibn, en con- que incluyon la preparacwn de su proyecto sdlo podrd lleoarse
junto o separadamente, conforme a las disposiciones de esta ley a cab0 en casos excepcionales mediante resolucw'n del ministerio
y lo que la reglamentacibn establece. Dicha contratacibn se ha- competente que deberh dictarla en cada caso y previo dictamen
r i mediante concurso de anteproyectos o antecedentes. Los plie- te'cnico justificato~o. La resolucidn y el dictamen deberdn pw-
gos y las respectivas bases fijarin 10s requisitos pertinentes". blicerse en el Boletin Oficial. Queda e x c e p t d a de este rhgi-
En el orden nacional, sin embargo, la situacih, en cuanto men la contratacwn de la cunstruccidn de buques y aeronaoes
a la calificaci6n wmo obra pliblica de este tip0 de contrataciones, que incluyan la preparacidn de sus correspondientes proyectos.
en la actualidad merece un tratamiento diferente. En 10s casos de contratacw'n de obra y proyecto, si 20 firma o el
En efecto, la ley 22.460 (B. O., 6/4/81) regula el rkgimen cmsulto~a quien s e le encomiende el proyecto fic~ran.: extranje-
de la "contrataci6n de servicios de consultoria" (art. l o ) , creando TOS,se exigirb la nuixima participacio'n posible de consultores o
una nueva figura contractual autbnoma: el contrato de co~sul- firmas consultorus locales".
toria. Asimismo, nuestra legislaci6n prohibe la existencia de vincu-
10s de dependencia o relaci6n societaria entre 10s consultores o
Segljn el propio texto de la ley, se entiende por "sercicio dc
las firmas consultoras y las empresas constructoras contratistas de
consultoria a to& prestacwn de servicios profesionales, cientifi-
obras pliblicas. Asi, el art. 15 de la ley 18.875 dispone que "Los
cos y tdcnicos de nioel universitario cumplidos bajo la f o r m zle
profesionales locales y las f i r m d e ingenieria y consultoria lo-
locacio'n de obra intelectunl o de servicios y realizada por firmas
cales, incluidos en el presente rigimen., deberdn tener absoluta
consultoras o consultores" (art. 2" ap. 1).
independencia de relacibn con empresas prmeedmas o fabrican-
En realidad, en nuestro derecho el contrato de consultoria tes de equipos, contratistas d e obrm phblicas o sociedades finan-
estaba ya preanunciado en la ley 18.875, que incluye dentro de cieras que p e d a n camprometer la objetividcwl de su iuicio", mien-
su regimen a las contrataciones "con. profesionales y firmns con- tras que el liltimo pirrafo del art. 80 de la ley 22.460 dispone que
"Los cunsdtores, las firmas consultoras, sus socios y 10s profesio-
51 Mnrienhoff, ab. cit., T ~ a t a d o. ., t. 111-B, ps. 5371538. nales interb5nbntes en contratos de servicio de consultoria no.
-256 CONTRATO
nE OBRA P ~ B L I C A

deberhn tener relecidn d e dependenda con ningum de las onti- laciones ocasionales que no generan comunidad de intereses per-
dades mencionadas en el art. 1 9 ni tampoco estar vincula& di- manentes, como es el caso del consorcio de empresas, seg6n lo
recta o indirectamente con las empresas que fimneien, eje'cllten,, visto en el Cap. III, $20.
,provean o Sean destinatarias del objeto d e servicio". La autonomia reconocida a1 contrato de consultoria no sig-
~ C u k les el alcance de esta limitacibn? Por de pronto es nifica que, supletoria o analbgicamente, seghn el caso, se apliquen
mis amplio que el que parece surgir de la hltima norma trans- para su regulaci6n normas y principios relativos a1 contrato de
cripta. La relaci6n no debe tenerla, la firma consultora o con- obra piiblica.
sultor, no &lo con la empresa que va a ofertar o contratar el su- Asi lo indica la propia ley 22.460 al establecer, en su art. 17,
ministro, obra o s e ~ c i oa que se refiera el objeto del contrato la aplicaci6n d e las leyes 12.910 y 21.392 para resolver las cues-
de consultoria celebrado, sino con ninguna empresa de esas ca- tiones relativas a la variaci6n de costos y a la actualizaci6n por
racteristicas o especialidades, estk o no en condiciones concretas mora en 10s pagos, respectivamente, las que son normas expresa-
de ofertar o contratar en ese caso determinado. La raz6n es mente sancionadas para regir sobre el contrato d e obra phblica.
obvia: aun cuando la empresa vinculada dsistiera, o no pudiera En el mismo sentido, el art. 27 de la ley 22.460 admite la juris-
participar, por ejemplo, en esa concreta licitacibn, siempre seria dicci6n del Tribunal Arbitral de la ley 12.910, que tiene compe-
tencia sobre las cuestiones relativas a la variaci6n en el contrato
competidora (en la actividad general) de las restantes oferentes,
d e obra piiblica.
situacibn que podria afectar o incidir de alguna manera en la
"objetividad" del "jucio" de la consultora, tal como lo seiiala el El proyecto de ley SETOP, del aiio 1977, contempla expre-
art. 15 de la ley 18.875, que por lo demis i m p n e una prohibici6n samente lo mencionado en el pirrafo anterior, a1 disponer en su
de caricter general y no particularizada. art. 12: ' l a contrataci6n de estudios previos justificativos, pro-
Con relaci6n a1 grado a naturaleza de vinculaci6n prohibida, yectos, direcci6n de obras, inspecci6n o tareas de asistencia tkc-
ksta debe limitarse a la relaci6n de dependencia (en el consultor nica se regirh por las leyes especificas que traten a1 respecto y,
persona fisica) por el condicionamiento psiquico que esa situa- supletoriamente, por las normas de la presente ley, en cuanto
cibn de subordinaci6u podria traer aparejada, y a la relaci6n so- fueran compatibles con la naturaleza de tales trabajos". De la
cietaria, cualquiera sea el tip0 de sociedad, pues en tal caso ha- misma manera regula esta cuesti6n el art. 11 de la ley 959 de
bria intereses propios en cuesti6n. Por razones &ticas tambiku Formosa, vigente desde el 18 de noviembre de 1980.
,debe excluirse la relaci6n societaria en una tercera sociedad, aun En el derecho comparado la soluci6n es la misma. Asi, en
cuando ksta no tenga las caracteristicas descriptas en la norma, Espaiia, la contrataci6n con empresas consultoras se encuentra
pues la comunidad de intereses existente entre 10s socios, aunque regulada por una norma especial, es decir no incorporada a la
no influya directamente sobre la consultoria a realizar, puede ley de Bases de Contrataciones del Estado y su Reglamentacibn,
predisponer en favor del socio psible oferente o competidor en que es el decreto 1005 del 4 de abril de 1974. En su art. 10
la futura contrataci6n objeto de ese servicio de consultoria. Debe establece: "Los contratos d e asistencia que se celebren por la
tenerse en cuenta que el consultor esti definiendo aspectos esen- Administracibn del Estado o sus organismos aut6nomos con em-
ciales que van a constituir el objeto de 10s futuros pliegos o con- presas consultoras o d e servicio se regularin por las normas de
tratos, y en ocasiones redactando la totalidad del mismo pliego. este decreto, y supletoriamente por las disposiciones que la le-
Por ello es 16gico exigirle la misma situaci6n objetiva y subjetiva gislaci6n de contratos del Estado dedica a 10s de naturaleza ad-
de irnparcialidad que a1 funcionario que realiza idkntica activi- ministrativa, en especial las referents a1 contrato de obras" 5 2 .
.dad, cuando tales estudios y documentaci6n emanan de la Admi-
nistraci6n Pliblica. 62 "Contratas del Estado", publicaci6n del Boletin Oficial del Estado,
Por la misma raztn, la limitaci6n no puede alcanzar a re- ps. 425/432.
r -

ELEMENTOS DEL CONTRATú vE OBRA PÍrnLICA 259


258 CONTRATO DE OBRA PÚBUCA

juicio de la aplicación supletoria o analógica de principios y nor-


mas del derecho privado cuando asi sea necesario y no repugne
a la naturaleza propia del contra too Pero esto último es una
Finalidad cuestión de integración de la ley y no una valoración acerca de
la naturaleza del contrato, que se explica por los principios enun-
ciados más arriba.
§ 31. CONTRATO DE Ol3RA PÚ1\LICA y BIEN COMÚN

Como se ha visto en el Cap. l, la orient~ción doctrinaria que


Se sigue en esta obra parte de considerar al derecho administra- Plazo y precio
tivo, y por lo tanto a los principios reguladores de los contratos
regidos por esa disciplina, como un sistema jurídico estructurado
sobre la base de las exigencias de la virtud de la justicia distri- § 32. GL'NERALIDADES
butiva, cuyo objeto es el "derecho del otro" a la parte del bien
común que como carga o beneficio~ le corresponde.
7
nado que estns dos elementos del contrato de obra púhlica
De ahí entonces - y esto es coherente con la afirmación acer- se encuentran principalmente vinculados con la ejecución del tra-
ca de que el bien común es el fin exclusivo y excluyente del Es- bajo público, resultará más conveniente estudiarlos en la oportu-
tado " - que todo contrato administrativo no pueda tener otra nidad en que se analice toda la etapa de ejecución del contrato
finalidad que la realización y distribuci6n del bien común, con- y no en este momento.
forme COn las exigencias de la justicia distributiva. Este es el Sin embargo, cabe señalar aqu! una particularidad del con-
fin del contrato, su elemento teleológico, y lo. e.s de todo contrato trato en examen que lo diferencia notablemente del contrato civil
administrativo, entre ellos el contrato de obra pública. A partir de locación de obra.
de esta base es que se estructnra su régimen jurídico de derecho Si bien ambos contratos son onerosos) en el contrato civil
público, al que hemos llamado "régimen jurldíco exorbitante", podda no haberse pactado expresamente el precio de la obra.
con los alcances vistos en supra, Cap. l, § 2 y § 3. Pero en ese caso, y siempre que la prestación del locador se co-
Por ello no se pueden más que rechazar las afirmaciones doc- rresponda c'On "su profesión o modo de vimr", según la expresión
trinarias que, suponiendo que el Estado pueda perseguir fines que emplea el arto 1627 del Código Civil, de acuerdo cOn la mis-
distintos que sus "fines públicoS"7 elaboran una construcción que ma norma se entenderá que las partes "ofustaron el precio de
les permite concluir en la existencia de un contrato de obra pú- costumbre, para ser dderminooo por árbitros".
blica regido por el derecho privado (cuando el Estado persigue Lo mismo ocurre con respecto al plazo, ya que de acuerdo
fines que no se corresponden cOn sus «funciones esenciales o es- COn el arto 1635 del mismo código, ante falta de pacto expreso
pecificas"), lo que, además de una contradicción terminológica, sobre el punto se entenderá "que el empresario debe concluirla
parece ser una contradicción lógica G4. en el tiempo razonablemente necesario, según la calidad de la
La finalidad del contrato de obra pública es la satisfacciÓn obra., pudiendo en tal caso el locatario exigir que ese tiempo SfiJ.
del bien común, prudentemente valorado por la autoridad públi- designe por el juez".
ca, y de ahí su "sustantividad" como contrato del derecho admi- En cambio, estas ausencias de previsiones expresas no son
nistrativo regido, exclusivamente, por el derecho público, sin per- posibles en el contrato de ohra pública. En efecto, teniendo en
cuenta las previsiones de los arls. 49 y .19 de la ley 13.064, previn
al llamado a licitación (o cualquier otro procedimiento de se-
5\1. Barra. oh. cit., Principios ... , Cap, 1, en especial, p. 38 Y siguientes.
5~ En contra, MarienhoH, ob. cit., Tratado .. ' t t. In-B, ps. 521/525. lección del contratista) la Administración comitente debe contar
con el "ye-puesto respectivo" (art. 4°), indicando el art. 70 que Como su procedencia resulta evidente, serhn tambikn ele-
"no podrd llamarse a Iicitacidn ni adiudicurse obra dguna, ni efec- mentos esenciales del contrato de obra pliblica, ademis de 10s
twrse inversiones que no tengan crddito legal". Esta es una ya analizados, 10s restantes enumerados en el citado art. 7 O : esto
obligaci6n de la Administracidn que tiene importantes efectos so- es la cmnpetencia del brgano que convoca a licitacidn, del que
bre el contenido de las ofertas a presentar por los interesados, adjudica y del que contrata (elemento que tambikn se encuentra
pues el presupuesto de la obra, con el respaldo del "crddito le- impuesto por el art. Z0 de la ley 13.064); la cmrsa, que se refle-
gal" respectivo, ya esti indicando lo que la comitente esth dis- jari en 10s antecedentes de hecho y de derecho que justifican el
puesta a considerar como precio del contrato, sin perjuicio de lo llamado a licitacibn y posterior decisi6n acerca de la adjudica-
que resulte del procedimiento de licitaci6n. Por lo demis, el ci6n; la motiuaczin, en tanto que expresi6n de la causa y la fina-
art. 21 de la misma ley define claramente que en el contrato de- lidad y la f o m (art. So ley 19.549), ya que el contrato de obra
ber.4 estar expresado el precio del mismo, al sefialar que ser.4 phblica tambikn se deberi manifestar "expresamente y pot escri-
obligaci6n del contratista constituir una garantia de cumplimien- to", cumpliendo con 10s demhs requisitos establecidos en el citado
to del contrato "por un 5 70 del monto del conuenio". art. 8'. La necesidad de la forma escrita en el contratn de obra
Con relacidn a1 plazo, la necesidad de que kste se encuentre pliblica se encuentra tambikn impuesta en el art. 21 de la ley 13.0M.
expresamente pactado, surge tambikn del proyecto y presupuesto
de la obra, ya que el crkdito legal con que cuenta la comitente
es para ser invertido en un determinado period0 de tiempo. Asi-
mismo, el art. 35 de la misma ley 13.064, a1 regular las conse-
cuencias de la mora del contratista en el cumplimiento de su
prestacibn, seriala que "las ahnorm en la terrninacidn d e 10s
trabajos con respecto a 10s plazos estipulados.. .", lo que indica
claramente la necesidad de fijar el plazo de ejecuci6n en el con-
trato. Esto queda confirmado ante la obligatoriedad por parte
del oferente de presentar, juntamente con su propuesta, el "plan
d e trabajo", conforme lo establece el art. 70 del decreto 3772/64,
del cual resultari directamente el plazo total de ejecuci6n del
contrato.

Otros elementos

De acuerdo con lo establecido en el p h ~ a f ofinal del art. 70


de la ley 19.549, de procedimientos administrativos, 10s contratos
"que celebra el Estado ( . . . ) se regircin por sm respecticas leyes es-
peciales, sin perjuicio de la aplicacidn aanalgica de las nomas de1
presente titulo, si ello f w a procedate".
SISTEMAS DE EJECUCION

En el tema en examen se produce una dificultad terminolb


gica sobre la que conviene tomar nna decisi6n en este estado del
desarrollo de la obra. Precisamente, 6sta serh s61o una toma de
posici6n y no una aclaraci6n conceptual con pretensitm de verdad
cientifica, pues en este t i p de cuestiones las terminologias que
adoptamos 10s autores tienen tantas razones a favor como en con-
tra, y por lo tanto la decisibn tiene mucha mhs base en una elec-
ci6n ocasional que en razones de verdadera profundidad cientifica.
En este sentido pueden confundirse, par lo menos, bes con-
ceptos: procedimientos de seleccibn del conbatista, sistemas de
ejecuci6n y sistemas de contratacibn.
Con respecto a1 primer0 de esos tkrminos, en realidad, no
deberia producirse ninguna confusi6n. Como se veri en el lugar
oportuno, se trata del instituto que estudia las distintas vias o
sistemas procedimentales que utiliza la Administracibn para ele-
gir a1 administrado mis apto en orden a la realizaci6n de- la obra
u objeto contractual de que se trate.
Los sistemas d e ejecucibn, en cambia, pueden hacer referen-
cia a distintos aspectos de la contrataci6n administrativa. Par de
pronto, en lo que se refiere a1 trabajo pliblico, pueden plantearse
distintos sistemas de ejecucibn, o mdtodos c&ructiuos. Este es
un prohlema tkcnico, aunque de gran trascendencia juridica, co-
ma se veri mAs adelante, que no se corresponde con el aklisis
de la teoria general del contrato administrativo de obra priblica.
En cambio, y asi seri utilizado en este estudio, desde un Directos: en 10s que el titular de la competencia realiza por
punto de vista m i s estrictamente juridico, el t6rmiuo "sistemas d e si mismo o manda a ejecutar por terceros una obra pfiblica (tra-
ejecucibn" esti haciendo referencia a la d i d a d de 10s &jetos que bajo p6blico). Asi tendremos:
interuienen en la ejecucibn de la obra piblica, y, por consiguiente, a ) sistema de ejecuci6n par adminktraci6n; b ) sistema de.
a la naturaleza del instituto juridico utilizado para la formaliza- ejecucibn par contrato de obra phblica propiamente dicho.
ci6n de la relaci6n juridica cuyo objeto es la misma ejecuci6n d e Indirectos: en 10s que el titular de la competencia delxga en
la obra. No utilizamos el t k m i n o "sistemas de contrataci6n", en u n 6rgano o sujeto distinto el cometido de ejecutar la obra o.,
este caso, ya que, como se veri seguidamente, aquella clasifica- trabajo, ya sea por kste mismo o a travks de la contrataci6n con
ci6n (sistemas de ejecuci6n) engloba un supuesto de ejecuci6n u n tercero constructor. La delegacidn puede ser:
sin contrato. a ) interorgiuica; b ) interadministrativa; c ) institutional; d )
La clasificaci6n seglin 7 0 s sistemas de contrataci6u" tiende, transestructural.
en cambio, a hacer referencia a las distintas formas de valorar La delegacidn transestructtnal puede, a su vez, clasificarse
el precio de la obra, ya sea, bisicamente, par ajuste alzado, uni- en:
dad de medida o coste y costas. a ) por contrato de obra pliblica; b ) por concesibn de s e ~ c i o .
Hecha esta aclaracibn, es posible clasificar a 10s sistemas de phblico; c ) por concesibn de obra pliblica (delegacibn propia e -
ejecuci6n seglin la relaci6n del sujeto titular de la competencia impropia )
con el trabajo pliblico (ver supra, Cap. IV, 9 29). Corresponde
aclarar que, por las razones dadas en la remisibn antes indicada,
puede existir contrato de obra pliblica aun cuando la obra eje-
cutada no pueda clasificarse como tal e n un sentido estricto, por
no pertenecer, una vez finalizada, a1 patrimonio estatal, si bien
continnari siendo una obra de interks pliblico. Lo importante,
entonces, es determinar quikn es el titular de la competencia para
ejecutar el trabajo pjblico y, a 10s efectos de esta clasificacibn,
En este caso la Administraci6n titular de la competencia (61-
analizar su grado de relaci6n tanto con la ejecuci6n material del
gano o ente descentralizado) dispone por si misma de 10s medios
trabajo como tambikn, en 10s casos en que 6ste exista, con el
tkcnicos, materiales y humanos a 10s efectos de la realizacibn del
contrato o instrumento juridico destinado a efectuar esa ejecuci6n.
trabajo pliblico 2.
En consecuencia, 10s sistemas d e eiecuci6n se clasifican en I :

--la c o n c e s h (di sola cmtruzione, o di costruzione e di eserc~zio);


1 Mazzone, M., I sirtemi di eseclrzkme deUe m e pubblkhe e la cars=
pet il memzogiomo, J. Sapi edit., Roma, 1978, clasifrca 10s sistemas de eie-
- --
-la dekeazwne arnministrativa intersoeeettilm:
--la soslituzione".
cuci6n de la siguiente forma (ps. 3 / 4 ) : Aubv... .1. M... Ducos Ader.. R... oh, cit . DroU odrninfitrat~f.
.. -D 477:
"La nostra legislazione sui lavori pubblici distingue, essenzialmente, i "L'administration dispose de diffdtents procddds pour arsurer I'em'cution.
sistemi di esecuzione dei lavori e delle opere pubbliche in direni ed inditetti. de ses traoaux publics.
Sono sistemi diretti: I1 est traditionnel A cet 6gard de distinguer trois procidbs: la rigie,
-l'esecuzione in ecoflomio, nelle fome dell'ammdnirtrazwne ( o economio rentreprise ou march6 de travaux publics, la concession de travaux publics".
di~effettn)e del c o t t h o ; 2 Diez, M., ah. cit., Detscho ndminiPtratiuo, t. 111, p. 24. La ejecu-
-I'esecuzione a reg&; ci6n por administracibn es lo que tradicionalmente en el derecho frands se
-l'esecuzione medionte appolto; ha llamado la rigie, ver Auby y hcos-Ader, oh. cit., p. 477:
-I'affidamto in semo proprio. 'Dans la rigie, I'adminismtion ex6cute elle-&me le travail en utilisant~
Sono, invece, comunemente qualificati indirctti i sisterni di esecuzione son personnel et ses moyens matiriels, notarnmeot des matikres premiilres;
attuati attraverso: qu'elle achkte directement d des fournisseurs".
En consecuencia, en lo que se refiere a1 trabajo phblico en si pesar de aquel "desliz" de tkcnica legislativa) el rkgimen plincipal
:mismo, en este caso no existe contrato de obra phblica. Sin em- y la regla general en la ejecucibn de las obras phblicas.
bargo, por lo ya expuesto (ver W a , Cap. IV, $ 2 8 ) por el ca- El proyecto de ley SETOP (1977) establece, en su art. 5?,
ricter expansivo de la obra phblica se considerarhn contrato de que 'Zas obras phblicas se realizarhn por contrato, por adminis-
obra phblica las compras d e materiales que haga la Adminis- traci6n o por combinacibn de ambos sistemas", y, concretamente,
tracibn ejecutora de la obra, asi como tambikn la compra o al- regula las obras por administracibn de la siguiente Iorma:
quiler de equips, por lo menos en la medida de su afectacibn ''Art. 15. - Son obras por administracibn aquellas que ejecu-
a ese trabajo phblico. taren por si 10s entes y organismos mencionados en el Articulo 10,
En cambio, seri un contrato aut6nomo la eventual consul- empleando el personal, 10s materiales, e q u i p s y hel~amientaspro-
toria que la Administracibn pueda adquirir de una empresa pri- pios. Se ajustarin a las normas de la presente ley, y supletoria-
vada, lo que tambikn puede incluir la misma direccibn de obra. mente a la ley de Contabilidad, seghn se disponga en la regla-
No obstante ello, a este contrato de consultoria siempre le serhn mentacibn.
aplicables, por via supletoria o analbgica, las reglas del contrato "Art. 16. - Para la ejecncibn de la obra, la Adrninistracibn
d e obra phblica (ver supra, Cap. N ,$ 3 0 ) . podrA:
En el supuesto que la Administraci6n "subcontrate" trabajos "a) Celebrar contratos de trabajo, individuales o por equipos,
parciales o especiales, kstos serhn considerados verdaderos contra- limitados en sn duracibn a1 tiempo de ejecucibn de la obra.
tos de obra phblica (es decir, incluidos en la figura que se men- " b ) Contratar la provisibn de materiales, artefactos y elemen-
cionari en el parigrafo signiente), en la medida que respondan tos necesarios.
a las caracteristicas y elementos esenciales d e estos contratos. "c) Adquirir y arrendar 10s e q u i p s necesarios y convenientes.
Por consiguiente, y esto es importante destacarlo, para celehrar ' d ) Contratar partes de la obra, conforme a las disposiciones
estas ma1 llamadas "subcontrataciones" la Administraci6n deberA que se dictan en el capitulo correspondiente a modalidades de
cumplir con 10s procedimieutos de seleccibn previos (contratacibn contratacibn.
directa, licitaci6n phblica, etc.), todo ello conforme a 10s requi- "e) Realizar todos 10s actos necesarios hasta la terminacibn
sitos y procedimientos previstos, en el orden national, en 10s arts. de la obra".
4O a 21 de la ley 13.064. En este sentido tambikn, la ley 6080 de la provincia de C6r-
La misma ley- 13.064 distingue, aunque no expresamente, en- doba ha legislado el punto de la siguiente manera (art. 6O): "Con-
tre ejecucibn por administraci6n y ejecucidn por contrato de obra sidkrase obra por administracibn aquella que realice el Estado
pliblica. Esto puede advertirse p r la integracibn de sus arts. por intermedio de sus oficinas tkcnicas adquiriendo 10s materia-
10 y 3?. En el primer0 de ellos define 10 que dicha ley consi- les y empleando el personal, equipos y herramientas necesarios.
dera como "obra pdblica nacionol", con el solo requisito de su Toda obra podri ser realizada por administracibn cuando me-
pago con "fondos del Tesoro de la Nacidn", mientras que en el diare alguna de las siguientes circunstancias:
art. 39 aclara que ' E n caso de que el Estado resueloa renlizar "a) cuando la licitacibn, repetida dos veces, fuese declarada
obras ptiblidas por i n t e m d w de personas o entidades no - o f M desierta; b ) cuando por evidente urgencia o necesidad imperiosa
les (lo que, en contrario, supone la posibilidad, copno regla gene- no fuere imposible esperar el resultado de la licitacibn; c ) cuando
ral, de ejecutar la obra por administracibn o por via de relaciones se trate de trabajos o de obras de reparacibn o conservacibn que
interorghnicas o interadministrativas) procederci conform con 16 se ejecutaren por las administraciones de reparticiones para las
establecido en la presente ley". Por supuesto que, a partir del cuales se determinan, en el presupuesto anual, el gasto y el pek-,
art. 4O hasta su art. 56, la ley s610 regula aspectm que interesan sonal correspondiente; d ) cuando por la naturaleza de la obra no
a1 contrato de obra pliblica propiamente dicho, lo que demuestra se pueda realizar en forma completa el proyecto correspondiente.
,que kste es ( y lo fue tambikn en la intencibn del legislador, a "Para poder realizar obras por administracibn que no entren
en las situaciones comprendidas en 10s incisos a), b), c) y d), e1 putarse en este rubro, a 10s efectos de determinar 18s posibilida-
Poder Ejecutivo deberi solicitar autorizaci6n legislativa. des de designaci6n de personal temporario, las retribuciones del
'Toda obra que se autorice a ejecutar por administraci6n de- personal permanente que se afecte a 10s trabajos. El personal
beri contar con la siguiente documentaci6n, except0 en el caso temporario designado para una obra cesari indefectiblemente a1
del inciso d ) : t6rrnino de 10s trabajos.
"a) planos generales y detalles; b ) c6mputos m6tricos y pre- 'Zas retribuciones del personal permanente se atenderin con
supuesto total; c) memoria descriptiva; d) tQmino de iniciacibn las partidas correspondientes del presupuesto de gastos, y la del
y terminaci6n de 10s trabajos; c) plan de ejecucibu de las obras, personal temporario con imputaci6n a1 credit0 de la obra.
indicando el costo total de 10s materiales, equipos, herrarnientas "Las adquisiciones y contrataciones d e items de obra o ser-
y mano de obra. vicios se deberin realizar de conformidad con las normas respec-
"Podri prescindirse d e esta documentacibn en las obras cuyo tivas de esta ley.
monto no exceda del indice nueve (9), conforme a las previsiones
"Art. 138. - La documentaci6n correspondiente a las obras
de la ley anual de presupuesto". Esta norma es eucomiable en
cuanto regula, y por consiguiente limita, la prerrogativa estatal par administracibn constark de:
de realizar obras por administracibn. Sin embargo, es criticable "1. Memoria descriptiva.
por cuanto su limite es demasiado amplio, ya que todos 10s supues- "2. Planos generales y de detalle.
tos de justificacibn que enumera pueden ser contratados con 10s "3. C6mputo m6trico.
admiuistrados por la via de la licitaci6n privada o la coutratacitn "4. Presupuesto detallado y total.
directa, que la misma ley prevb en sus arts. 5? y 8O.
"5. Plan de ejucihn, con la indicaci6n de la fecha de iui-
La ley Orghnica de Municipalidades de la Provincia de Bue-
ciaci6n, plazo y monto de ejecucion mensual.
nos Aires, decreto ley 6769/58, reformado por ley 8613, regula
la materia con mayor detalle: art. 135. - "Considbrase obra por "En el caso de las obras de monto inferior a doscientos mil
administraci6n aquella en que la municipalidad toma a su cargo pesos ( $ 200.000) se podrh prescindir de 10s recaudos exigidos en
la direcci6n y ejecuci6n de 10s trabajos por intermedio de sus 10s puntos 1, 2, 3 y 5, cuando la naturaleza de 10s trabajos lo
organismos, asi como tambien la adquisicibn, provisi6n, arrenda- permita.
miento, adecuaci6n o reparacibn de miquinas, equipos, aparatos, "Art. 139. - Las obras par administracibn serin ejecutadas
instalaciones, materiales, combustibles, lubricantes, energia, herra- bajo la direcci6n de un profesional dependiente de la municipa-
mientas y dernis elemeutos necesarios afectando personal muni- lidad o contratado a1 efecto, que seri el encargado responsable de:
cipal o contratando mano d e obra.
"a) que 10s trabajos se efectlien cumplidamente en cuanto a
"El Departameuto Ejecutivo queda facultado para resolver l a
fonna y tiempo, y de instar la ejecucibn de 10s actos necesarios
realizacibn por administracibn d e cualquier obra pbblica munici-
pal cualquiera sea a1 monto del presupuesto oficial de la misma. a ese fin;
"Ademis, si se desechan propuestas de una licitacibn o no se "b) elevar todos 10s meses, dentro de 10s prirneros diez (10)
hubieren presentado, se podri encarar la ejecuci6n de la obra por dias del mes siguiente, un informe sobre el cumplimiento del plan
administracibn. de ejecuci6n y un balance d e inversiones, asi como tambibn ele-
"El personal que componga la mano de obra deberh ser el var, en 10s plazos que correspondan, 10s demis informes ilustra-
que reviste en la municipalidad. En el caso que sea insuficiente tivos de la marcha de la obra.
se podri designar personal temporario. El gasto que demauden "A este profesional se le podrA asignar uua caja chica para
las seiialadas designaciones no podri ser superior a1 crbdito pre- gastos menores".
visto para mano de obra en el presupuesto oficial, debieudo com-
act0 (en este caso, 10s actos inherentes a la promoci6n, celebra-
5 36. EJECUCI~NPOR CONTRATO DE OBRA PGBLICA ci6n y ejecuci6n del contrato) por el delegante, sin que sea ne--
cesario recurrir para ello a la figura de la avocaci6n, ya que el
Este, como se ha visto, es el sistema ~rincipaly regla gene- titular de la competencia sigue siendo el mismo 6rgano delegante,
ral para la ejecuci6n de obras phblicas. aunque ella es ejercida, en virtud de la delegacibn, por el dele-
En kl la Administracibn contrata con un administrado nor- gado. La delegacibn, en todos 10s casos, es un instituto de ex-.
malmente organizado bajo la forma empresaria, y previo proce- oepci6n que requiese estar autorizado expresamente por una
dimiento de seleccibn, la ejecuci6n de un trabajo phblico bajo un norma 4.
rkgimen juridic0 de derecho administrative conforme a lo esta- En lo que aqui interesa, la misma ley 1 3 . M estabfece u n a ~
blecido por las normas legales y reglamentarias y las prescrip facultad genkrica de delegaci6n en favor del Poder Ejecutivo, a1
ciones de 10s pliegos de condiciones. disponer su art. 2? que "La f a c d t d e s y obltgackmes 9ue esta-;
A1 estudio de este sistema de ejecuci6n de la obra pi-blica, blece la presente ley pod~cinser delegadas por el Poder Ejecutivo
como lo ha hecho el legislador, estari dedicada la mayor parte de en autoridad, organismo o funciowio legalmente autorimdo".
este libro.
El proyecto SETOP, en cambio, contiene en su art. 3Q una
autorizaci6n para delegar concebida en tkrminos mBs genkricos:
"Cuando la presente ley menciona a la Adrninistraci611, debe en--
tenderse por tal 10s 6rganos que tengan asignada competencia
Ejecucion indireeta legal en la materia.. . 10s que podrin delegar sus atribuciones y~
deberes en dependencias que se encuentren capacitadas por su
estructura funcional".
En supra, Cap. 11, $ 16, a1 estudiar la figura del comitente. Este tip0 de delegacibn, coma sistema de ejecuci6n de la.
privado del contrato de obra pi-blica se analizb el instituto de
obra pi-blica, no guarda, como requisito estricto, la necesidad de
la delegacidn que en realidad explica todos 10s sistemas de eje-
la existencia de una relaci6n jerBrquica entre delegante y dele-
cuci6n indirecta. Corresponde, entonces, la remisi6n a dicho pa-
rBgrafo para la consideraci6n de la fundamentaci6n de este tema gad0 (es tambikn discutible que bste sea un requisito del insti-.
que, por razones metodolbgicas, alli fue adelantado, sin perjuicio tuto de la delegacibn en el Bmbito de la organizaci6n adminis-
de la profundizacidn que se h a d en 10s parigrafos siguientes. trativa en general), ya que tal delegacibn podria vincular dos
6rganos de igual jerarquia, aun cuando, claro esth, nunca el de-
legante podria ser de inferior jerarquia que el delegado. Asi es
posible que la competencia para ejecutar una determinada obra~
phblica pueda ser transmitida por delegaci6n del h b i t o de un
Este tipo de delegacibn, en su mecBnica mas habitual, con- miuisterio a otro, en especial cuando el delegado goza de una
siste en la transferencia, poi- parte de un 6rgano a otro, de 10s especial idoneidad para tal cometido, conforme con la composi-
cometidos que la norma atributiva de la competencia otorga a1 ci6n de su estructura funcional, tal como ocurre, en el orden na-.
primer0 u 6rgano delegante. Como lo sefiala Cassagne 3, se tra- cional, con el Ministerio de Obras y Servicios Phblicos (segi-n.
ta de una tkcnica trausitoria de distribuci6n de atribuciones, en la denominaci6n de la ley 22.520, vigente en el momento. de esta.
cuanto no produce una creaci6n orginica ni impide el dictado del redacci6n).

3 Cassagne, J. C., ob. cit., Deracho administrdiuo, t. I, ps. 245/248


ciones intersubjetivas tambibn se explican por la necesidad de
aprovechar la mayor idoneidad del delegado a 10s efectos de Ile-
var adelante la ejecuci6n de una obra phblica y, a veces, por
Sustancialmente las dos figuras son idbnticas, lo que justi- razones de indole econ6rnica o financiera. Pero, a diferencia con
fica su tratamiento en comlin. En ambos casos no se trata de el 'as0 anterior, la delegaci6n intersubjetiva produce una nueva
la delegaci6n operada en el seno de una misma persona juridica imputaci6n subjetiva primaria con relaci6n a las consecuencias
pliblica (que es el caso analizado en el ~ a r i g r a f oanterior), sino, juridicas del procedimiento de selecci6n del contratista y del pos-
por el contrario, vincula a dos personas phblicas distintas, siem- terior contrato de obra phblica que se celebre.
pre entendiendo por "phblicas" a aquellas que, de rnanera gene- Asi, en la delegaci6n interorginica, la irnputaci6n seri siem-
ral, pueda afirmarse que pertenecen a1 "sector estataY5. pre sobre la misma persona pliblica en la que amhos brganos, de-
La diferencia entre 10s dos tipos -interadministrativa e ins- lcgante y delegado, se encuentran estructuradas.
titucional- radica, exclusivamente, en que en el primer caso am- En cambio, las delegaciones intersubjetivas -interadminis-
bas personas phblicas -delegante y delegado- pertenecen a la trativas e institucionales- trasladan la imputaci6n juridica de to-
misma estructura administrativa institucional, caracterizindose es- do el procedimiento contractual del delegante a1 delegado, aun
to por estar sometidas a una com6n autoridad superior -p. e;., cuando la obra siga ( y asi seri en todos Ins casos) perteneciendo
.el Poder Ejecutivo Nacional- y regirse por el mismo cuerpo de a1 patrimonio del delegante y aun en 10s casos (pues podria no
derecho positivo bisico, como son las normas de derecho adminis- ser asi) en que la obra se paga con 10s fondos del mismo dele-
trativo, que en nuestro pais tienen naturaleza local. Asi, por gante. Es decir, la delegaci6n no es un mandato, ni una gesti6n
ejemplo, seri delegaci6n interadministrativa la que se produzca de negocios, ni uua representacibn sin mandato, ni ninguna otra
entre dos sociedades del Estado, pertenecientes jurisdiccionalmen- figura afin del derecho privado, pues en este caso (es decir, la
te a la Administracihn Phblica nacional, puesto que ambas se delegaci6n como figura tipica del derecho pliblico) lo que esti
encuentran sometidas a la autoridad del Poder Ejecutivo Nacional en juego es el instituto de la competencia. Frente a esto, el dele-
( o bien de un determinado ministro del Poder Ejecutivo) y am- gado ejerce un cometido para el cual es competente en virtud
bas se rigen por las mismas normas bisicas del derecho adminis- del act0 de la delegacibn, aun cuando -y h t a es la pasticula-
trativo nacional. ridad de este instituto- la titularidad d e la competencia conti-
En cambio, la delegaci6n institucional ocurrirh cuando de- nria siendo del delegante, quien puede retomarla en cualquier
legante y delegado pertenecen a distintas esferas institucionales, rnornento y recibir asi la imputaci6n de las consecuencias juridi-
sin autoridad y sin normas comunes, siendo el ejemplo mis sen-
cas que se generen a partir de ese momento y tan~biBncon rela-
cillo de este caso la relacibn d e delegaci6n que se establezca
ci6n a las anieriores, desligando a1 delegado, siempre frente a1
.entre dos provincias, o enise una provincia y una persona phblica tercero administrado, de toda responsabilidad por 10s actos y he-
de otra provincia.
chos realizados mientras se encontraba en eiercicio de la compe-
Corresponde destacar que estas figuras, que de manera ge- tencia delegada.
nkrica podriarnos llamar delegacidn interwbietiua, han sido ya
Por tal raz6n se dijo en 10s phrafos anteriores que la nueva
-aceptadas por la doctrina local y tambikn la comparada, como
imputaci6n subjetiva es primaria o inmediata, ya que mediata-
ocurre en Espafia y en Italia, especialmente por la relevancia que mente, potencialmente, el delegante no escapa a esa imputabili-
.en estos paises se le otorga a 10s entes de administracibn local 8.
dad juridica que re actualizari cuando cese la delegacibn o, in-
Como en el caso de la delegaci6n interorghnica, las delega-
cluso, cuando el delegado (lo que siempre serir una situaci6n ex-
cepcional) no pueda afrontar por si mismo las responsabilidades
5 Ampliar en Barra, ob. cit., Principios.. .. ps. 172/219. inherentes a su actividad frente a1 tercero administrado. Esto
8 Cassagne, ob. cit., Derecho ndminnStrdiuo, t. I, p. 247. es asi por cuanto la delegaci6n no es mis que una mera tbcnica
d e organizaci6n administrativa, lo que no puede perjudicar 10s vks de una relacibn interorginica o interadministrativa simple, es
derechos de 10s terceros administrados cuando estos se encuen- decir, sin delegacidn. Esta relaci6n de fidm'n habe que el affi-
tren amenazados por una insanable situacibn d e incumplimiento datario, e n todo aquello que se refiera a la obra pLb1ica en cues-
del delegado. Esto justificari, por ejemplo, la citaci6n del dele- ti6n, se "introduzca" en la estructura del affidente, como si estu-
gante como tercero en un juicio entre el administrado contratista viese asumido por ella O. Asi el affidatarw es un mero instru-
y el delegado, ya que, es evidente, la causa es comhn y la sen- mento material de una actividad y no uu receptor de una deter-
tencia puede tener efectos sobre el mismo delegante. Pero por minada competencia.
existir tal delegacidn no se podria demandar directameute a1 de- Lo sefialado, como el autor a1 que se sigue lo expone en las
legante, par lo menos hasta q u e la delegaci6n subsista juridica- notas anteriores, es una caracteristica del affidemnto en sentido
mente. propio, ya que pueden existir figuras de affidamento impropio
No debe confundirse la delegacidn, tanto interorginica como que se confunden con la delegaci6n.
interadministrativa o institucional, con la figura del afficfumento En realidad no siempre es sencillo distinguir esta figura del
(confianza) que el derecho italiano analiza como un sistema d e uffidamento propiamente dicho -que en nuestra prictica admi-
ejecuci6n directa 7. nistrativa puede eucontrarse en relaciones interorginicas (donde
Segin Mazzone, en este sistema se confiere el encargo - a no hay problemas de imputacidn juridica, pues siempre se tra-
u n ente priblico o a u n 6rgano u oficio del mismo ente phblico- tar& de la misma persona pliblica que act6a como comitente d e
d e ejecutar total o parcialmente la obra sin que el ente, drgano o la obra) y dificilmente en relaciones interadministrativas- y la
"ufficio", 'hffidatarid' asuma la titularidad de la relacibn juridica delegaci6n. La misma doctrina italiana no es uniforme en cuanto
constituida con el administrado, de manera que siempre la res- a esta distinci6n. Asi Roehrssen'o, distingue a1 affidamento d e
ponsabilidad queda en cabeza del -affidante" y no del "af$ida- la sustituci6n: e n el primer caso el ente originariarnente titular
tario" 8 . de la competencia inviste a otro sujeto, en todo o en parte, del
La principal diferencia entre las dos figuras es que en el ejercicio d e "sus poderes o de sus funciones", por lo que hay
affidamento no hay transferencia de competencia, que es lo ti- verdadera delegaci6n; en el segundo caso, en carnbio, el ente
pic0 de la delegacibn, sino el mero encargo de la ejecucibn ma- public0 competente se limita a utilizar la gesti6n de lor uffici
terial del contrato d e obra (incluso en su faz preparatoria), a tra- tbcnicos d e otro sujeto phblico para una parcial ejecuci6n de la
obra (p. ej., proyecto y direcci6n) sin trasladarle la titularidad
del contrato de obra. Cianflone. en carnbio. distineue a1 "affida-
,,
u
7 Mazzone, M., oh. cit., I dstemi. . ., p. 3. mento-delegaci6n0 del affidamento-encargo": en el primero, siem-
8 Mazzone, oh. cit., I sistamt.. ., p. 34:
"Nella sua accaione tecnica, poi, l'affidamento --seconpo la Corte di
pre sobre la base de una autorizacidn legal, se transmite de un
Cassazione designa due distinte figure: l'una (qualificata d i hffidamento ente a otro la incumbencia, comprensiva de 10s poderes y facul-
impropn'o' o 'mero offidomento'), esattamente coincidente con la delegazione tades (competencia) de ejecutar una obra; en el segundo caso
amministrativa intersoggettiva, in quanto i due rapporti -sotto il profilo for- s610 hay un encargo meramente material relativo a la ejecuci6n
male e sostanziale- sono fra loro perfettamente identici; l'altra (qualificata
d i 'affidamento in smso proptio') caratterizzata dal conferimento dell'incarico
-ad enti pubblici o direttamente ad organi ed uffici statali o di altro ente
pubhlic* di curare l'esecuzione (in genere, parziale) dell'apera, senza per& 9 Mazzone, oh. cit., I sistemi. . ., p. 42: "Questa situazione... consis-
che l'ente o l'ufficio o organo affidataio assuma la titoladti dell'esecuzione tendo sostanzialmente nell'assunziane temporanea e precaria dell'ente o uffi-
stessa; e senza che esso sia legittimato ad agire in nome proprio, sicchC del- cio affidatario nella struttura dell'ente affidante", y p. 46: ". . .la sostanza
rattivita di quest'ultimo risponda in via esclusiva e diretta il soggetto affi- del fenomeno C quello di hcwporazione, nel significato di inserimento, as-
dante e non l'affidatario. sunzione (ovviamente, ternporanei e precari) dell'ufficio o ente stessi nella
Nell'affidamento in senso proprio l'attivith, in sostanza, A compiuta strwttutura dell'ente affidante".
.
dall'affidatario nelE'ambito &lto competenu, delroffidonte. .". '0 Roehrssen, G., oh. cit., I Iaoori pubblici, p. 445.
de una obra, de manera que el ejecutor real de la misma -mero Centrales El4ctricas, sociedad anbnima, con nn consorcio de em-
instrumento material- pasa a formar parte temporalmente de la presas privadas.
organizaci6n del ente pliblico affidante .'l ENACE es una sociedad an6nima en la que el socio mayo-
Las dificultades terminol6gicas, con consecuencias interpre- ritario es la Comisi6n Nacional de Energia At6mica (entidad au-
tativas, han hecho que excluykramos la figura del affidamento tbrquica que actria en jurisdicci6n de la Presidencia de la Nacibn),
de la clasificacidn de 10s sistemas de ejecucibn de Ia obra pliblica. qne es la propietaria de la Central Nuclear Atucha I1 -es decir,
En definitiva, para el administrado contratista lo que interesa es la obra no es de ENACE- y quien provee 10s fondG con Ins que
la imputacibn subjetiva del negocio juridico, es decir la identifi- se paga al contratista, si bien estas dos circunstancias no estdn
caci6n juridica de la persona de su cocontratante phblico. Por expresadas en la documentaci6n contractual.
ello, para 41, el affidamento, en la medida en que no transfiera El contrato, como se dijo, esti celebrado por ENACE, quien
esa imputacibn juridica, carece de relevancia, importando s61o en no aclara, en principio, el cardcter con que achia. Su cldusula
el dmbito interno de la estructura organizativa de la Administra- primera establece que "ENACE encomienda a 'el contratista'. . .",
y, en todo el contenido del contrato, es ENACE la que aparece
ci611 Pliblica. En cambio, dado que la delegacibn, a1 transmitir
ejerciendo 10s cometidos propios del comitente d e la obra: ins-
el ejercicio de la competencia, ubica frente a1 administrado un
peccidn, certificacibn, pago, aplicaci6n de sanciones, decisi6n d e
nuevo sujeto contractual, ksta si tiene verdaderos efectos juridicos
recisibn, recepcibn de la obra, etcktera.
sobre el cocontratante pivado.
Este mismo papel es el acordado a ENACE por el pliego de
Lo antes expuesto no le quita interks a la figura del affida- condiciones generales, donde no se menciona en ninglin momen-
mento, pues no serin raros 10s casos (siempre bablando de rela- to a la Comisi6n Nacional de Energia Atbmica, la que implicita-
ciones interadministrativas) en que resultari dificil determinar mente se encuentra excluida como parte en 10s eventuales proce-
si lo que hay es affidamento o delegacibn, dependiendo, entonces, sos arbitrales y judiciales que se planteen como consecuencia de
la correcta soluci6n interpretativa de uu acabado conocimiento de posibles divergencias que acaezcan, seglin el texto de 10s arts. 16
las dos figuras. d d pliego y 22 de la contrata.
Asi, por ejemplo se presenta el caso del contrato para la eje- Ahora bien, el art. 23 de este liltimo documento textnalmen-
cuci6n de la "Obra gruesa parte civil de la central nuclear Atu- te dice:
cha 11" celebrado por ENACE, Empresa Nuclear Argentina de "ENACE S. A. deja constancia que suscribe este contrato en
nombre y por cuenta d e la Comisi6n Nacional de Energia At6-
mica. Tambikn deja constancia que la Comisibn Nacional d e
11 Cianflone, oh. cit., L'appolto ..., ps. 113/114:
Energia At6mica ha autorizado a ENACE S. A. a ejercer 10s de-
". . .ajfi&rnento, nel senso di delega, con il quale, sulk base di una
norma di legge, I'ente pubblico affida ad un altro ente pubblico il compito rechos y acciones emergentes de este contrato, asi como las fa-
(compresi i relativi poteri e facolt&) deUa esecuzione dell'opera (ad es., gli cultades para intervenir y decidir en forma definitiva todo lo
affidamenti della Cassa per il Mezzogiorno ad organi dello Stato o ad aziende referido a la interpretacibn, ejecuci6n y aplicaci6n de1 conh-ato y
autonome dello Stnto o a1 Corpo Forestale dello Stato: art. 138 commi l V a
49 del t.u. approvato con d p r . 6 marzo 1978, n. 21&); cualquier otra cuestihn o reclamaci6n de 'el contratista'. Por lo
". . .aftidamento, intesa nel senso d i incarico merarnente esecutivo di tanto, 'el contratista' deberB dirigirse exclusivamente a ENACE
alcune o di tutte le incombenze relative alla esecuzione dell'opera, da parte S. A. para presentar y decidir con ella cnalquier tema relacionado
dell'ente pubblico competente agli uffici tecnici di altro ente pubblico o di- con las obras".
rettamente ad altro ente pubblico (che di solito i: quello cui l'opera interessa) Por de pronto, en el context0 de la contratacibn, cabe ex-
che acquista la figura di semplice strumento di esecuzione, venendo tempo-
raneamente a far parte anche dell'organizzszione dell'ente pubblico affidante cluir la figura del mandato, a pesar de la expresi6n "en nombre y
(ad es., la regione che utilizza organi o uffici statali o d i altri enti pubblici) por cuenta de. . ." que se utiliza en la primera parte de la cl&usula
mediante l'istituto della codipendenza o del rapport0 organic0 improprio". transcrita. Precisadente, en las restantes normas contractuales,
278 CONTRATO DE OBRA Pl;BLICA SlSTEMAS DE E JECUCI6N 279

se le confiere a ENACE un papel que no se ajusta a los caracte- peCCÍóo de Agua y Energía Eléctrica y aprobado p<lr el cote)
res de la situación jurídica típica del mandatario. Por lo demás, y pago de los trabajos y otros créditos del contratista. Esto fue
el mandatario, estrictamente, no "ejerce derechos y acciones", ni incluso, expresamente establecido en el contrato de obra a teno;
tampoco decide en forma definitiva cuestiones que pueden ser ¿el t~xto de su c1á~sula 5.6: "Los certificados de obra y facturas
esencÍa]es para la situación jurídica de las partes, ni tampoco re~ -báS1c~s y de rea]llste- una vez conformados y aprobados por
cibe una "autorización" por parte del supuesto mandante, pues la provlDcla de La Pampa y 'La empresa' (A Y EE) serán abo-
la relación mandante-mandatario tiene su núcleo eu el convenio nados por la citada provincia en los plazos y condiciones estable-
representativo, trascendiendo esto la mera autorización, CIdos en la cláusula ... ", Hasta aquí parecería que la figura vin-
Tampoco puede hablarse de affidamento, en la medida que culan~e entre el Ente provincial y la provincia, p<lr un lado, y
existe una clara traslación de la imputación jurídica desde la A Y EE, por el otro, es la del affidamento (n6tese que el convenio
CONEA hacia la ENACE. que :incula a a~b.as partes no es un rnandato 0, por lo rnt'JIOS,
La redacción de esa cláusula parece estar indicando, a pesar no !lene contemdo representativo). Sin embargo, hay algunos
de sus imprecisiones técnicas, la presencia de la figura de la de- elementos que permiten calificar esa relación como de "affida-
legación, con su efecto característico propio: la generación de una ,:",nto-delegació~" que, en definitiva, se reduce a Una delegación
imputación jurídica subjetiva primaria en la persona del delega- lIsa y llana. A~l, se estableció en el contrato que la ley que iba
do, y secundaria o subsidiaria en la persona del delegante. a regir la relaCIón de las partes era la nacional 13.064, y que a
También es posible encontrar en nuestra práctica adminis- los efectos de la jurisdicción judicial el domicilio de la comitente
trativa figuras contractuales complejas, en las que aparecen iba a ser el de "La empresa" (A y EE), fijándose la competencia
elementos propios del affido.rnento junto con las notas determi- de los "Tribunales de la Capital Federal", lo que indiea la cali-
nantes de la delegaci6n, casos éstos que podrían ser calífíeados dad de "parte", por propio derecho, de A y EE, ya que de lo
como de "aftUL:zmento impropio" o "affidamento-delegación", se- con?"a~io correspondería la competencia, irrenunciable, de la ju-
gÓn lo expuesto más arriba, risdICCIón contenciosoadministrativa de la prOVincia de La Pam-
Tal es el caso del contrato para la fabricación, transporte, pa, t~~o lo cual demuestra la existencia de una "imputación pri-
montaje y puesta en servicio de compuertas y ejecución de las mana en la empresa del Estado nacional. Pero, a la ve," en
obras civiles complementarias, relativo al Sistema de Aprovecha- el convenio entre los dos entes públicos, que foonó parte inte-
miento Mútiple del río Colorado, provincia de La Pampa. Este grante del contrato de obra, se pactó: "A y EE deslinda toda
contrato fue celebrado por una empresa privada y Agua y Ener- responsabilidad respecto de los mayores costos y atrasos en los
gía Eléctrica, actuando ésta "por cuenta y orden de la provincia plazos de ejecución de los trabajos, emergentes de la falta de
de La Pampa", como se aclara en la misma introducción del res- pago de los certificados por el Ente, quien toma a su cargo
pectivo contrato de obra pública, el que a la vez se celebró "ad- todos los gastos, daños y perjuicios que se deriven de esta situa-
referéndum de su aprobaci6n por el gobierno de la provincia de eíón "', 10 que está indicando, por lo menos, la existencia de una
La Pampa - Ente provincial del do Colorado". La relación entre ""imputaci6n secundaría>~ en quien) sin duda asumió la calidad
Agua y Energía Eléctrica y el Ente provincial fue establecida de "delegante". '
(con carácter previo a la formalizaciÓn del contrato de obra pú-
blica) p<lr un convenio que, sustancialmente, encomendó a Agua
y Energía Eléctrica la ejecución de lodo el procedimiento con- § 38. DELEGACI6N INTERADMINISTRATrvA E INSTlTUC.10NAL
tractual - comprendiendo la selección del contratista dirección
técnica e inspección de la obra y las restantes prerrogativas del ., Ya fue estudiado en supra, Cap. II, § 16, la llamada "delega-
comitente público - mientras que el Ente provincial se reservó Clon transes.trnctural de cometidos", corres¡xmdlendo aquí sólo re-
lo relativo a la certificación (el certificado era emitido p<lr la ins- cordar slntehcamente que esta institución) participando de las
280 CONTRATO DE OBRA PÚBLICA SISTEMAS DE E JEGUCIÓN 28I

características sustanciales y definitorias de la delegación como público, no pueden ser delegadas. Tal aplicación analógica ten-
técnica de organización administrativa, tiene la particularidad de drá efectos imIXJrtantes ya que, entre otros aspectos, sería así
transmitir el ejercicio de la competencia pública a una persona aplicable para la institución sindical la obligación de contratar
privada, es decir que se encuentra fuera de la estructura estatal .. previo llamado a licitación pública (o el procedimiento de selec-
y de ahí su nombre de "transestructuraY'. ción que corresponda en el caso) y de adjudicar a la oferta más
conveniente, todo esto sin perjuicio de la necesaria intervención
de contralor estatal, lo que también es un efecto propio de la
§ 40. DELEGACIÓN TRANSESTRUGrURAL POR CONTRATO figura de la delegaci6n.
DE OBRA PÚBLICA En supra, Cap. 11, § 16, se han analizado casos que aparen-
temente encuadran en este instituto de la delegación transeshuc-
Esta figura comprende una cantidad no homogénea de su- tural aunque, como alli se señaló, la complejidad de las figuras
puestos, de muy variable estructuración práctica en cada relación jurídicas adoptadas en esos ejemplos puede muy bien generar la
contractual concreta, pero que guarda una característica común: duda acerca del correcto encuadre de la relación en estudio es
un particular, en razón de diversos títulos jurídicos, contrata con decir si se trata de un verdadero contrato de obra pública' ce-
un tercer constructor la ejecución de una obra que sirve y está lebrado a través del instituto de la delegaci6n transestructural,
afectada directa e inmediatamente al cometiao público que le fue o bien si el verdadero comitente público directo es el Estado, que
delegado. eligió un mecanismo técnico jurídico que sólo aparentemente lo
En estas condiciones, y en virtud de los efectos propios de desvincula con el constructor de la obra, cuando en realidad lo
la delegaci6n transestructural, la relaci6n establecida entre esos que ha querido el Estado-Administración en tales casos na fue
dos sujetos privados es una relación regida sustancialmente por el delegar, sino simplemente dar una oportucldad de partici'pación a
derecbo público, por el régimen jurídico del contrato de obra determinadas asociaciones de administrados.
pública en el caso, aun cuando con una notable atenuación del
régimen jurídico exorbitante (ver supra, Cap. 1, § 3) el que será
de interpretación restrictiva, debido a la ausencia, en tal relación § 41. DELEGACIÓN TRANsESTRUCTURAL POR CONCESIÓN
DE SERVICIO PÚBLICO
contractual, de un sujeto público.
Tal puede ser el caso, por ejemplo, de la construcci6n de un
centro de asistencia hospitalaria cuya contratación le es encomen- La concesión de servicio público es quizás el caso más típico
dada a una asociación profesional de trabajadores en cumplimien- y tradicional de delegación transestructural de cometidos admi-
to de los cometidos de "obra social" que le fueron delegados. nistrativos 12, tanto que históricamente, en lo que aquí interesa,
N 6tese que es el instituto de la delegaci6n el que produce la
consecuencia jurídica analizada más arriba, resultando indepen- 12 Nuestra jurisprudencia, aunque sin precisar el concepto, ha utilizado
diente e indiferente para ello el hecho de que la obra se pague con la figura de la delegación para calificar distintos aspectos de la concesión.
fondos propios del sindicato (aun cuando, de todas maneras, se- Así:
rían fondos recaudados compulsivamente, en virtud de la misma "La concesi6n es un acto legislativo en cuya virtud el Estado hace
delegaCión de facultades en una empresa para la debida reaJización de un
delegaci6n) y que la obra tenninada ingrese al patrimonio sin- servicio público, dentro de los límites prefijados, determinando las condicio-
dical. nes de tiempo, forma y elementos de la construeción y explotación, privilegios
Como hasta el momento nuestro derecho positivo no ha re- y exenciones otorgadas a la empresa, derecnos y ventajas reservadoS' por el
gulado la figura en cuestión, la relación contractual se regirá Estado para sí o para detenninadas manifestaciones de la vida nacional"
(CNFed., sala contenciosoadministrativo, diciembre 30/963. Puerto del Ro-
anal6gicarr.ente por la ley de Obras Públicas, excluyendo siempre sario S.A. e/Gobierno nacional.) Rev. La Ley, 114-674.
la aplicaci6n de prerrogativas que, por ser connaturales al poder "La concesión es un acto de gobierno que tiene por fin organizar
fue uno de 10s medios juridicos principales para la ejecuci6n de ,en favor de terceros administrados, de determinados cometidos
obras pliblicas. Asi destaca Villar Ezcurra que es en el periodo administrativos llamados, precisamente, "servicio pliblico" 14, obli-
que se abre a partir de 1845 (legislaci6n Bravo Murillo) "cuando gan a extremar las distiociones, especialmente considerando que
la idea de servicio pliblico adquiere un matiz categorial y se une la finalidad antes perseguida a traves de la concesi6n de servicio ph-
directamente a1 objeto de la obra pliblica". Durante ese periodo, blico seglin lo expuesto en el parrafo anterior, esti mis perfec-
y tambikn al amparo de la ley General de Obras Pliblicas de tamente lograda a travks de la figura de la coucesi6n de obra
18T7, en Espaiia como en otros paises del continente, ". . .el ser- pliblica y sin necesidad de introducir elementos ajenos a este
vicio pliblico no es sino la apertura a1 aprovechamiento general liltimo instituto.
de una obra pliblica: carreteras, puertos, pantanos y ferrocarriles De todas maneras es necesario recordar permanentemente
se configuran primordialmente como una obra pliblica que, a su este comlin origen hist6rico -de la concesidn de servicio phblico
terminacidn, s e abre a1 aprovechamiento general. Las tarifas de y de la concesi6n de obra pliblica- asi como tambikn la igual-
construcci6n del servicio phblico subsiguiente son s610 un habil dad esencial de naturaleza juridica -delegaci6n transestructu-
procedimiento para que pueda construirse la obra pliblica sin que ral-, por cuauto es el que explica 10s numerosos elementos y
la Administraci6n tenga que abonar nada como contrapartida. regulaciones juridicas comunes que ambas figuras reconocen.
"Ahora bien, la obra pliblica, que en sus comienzos era con- Es asi que para alglin importante sector doctrinario se pre-
fundida con el servicio pAblico, debe ser necesariamente delimi- fiere en las concesiones de obra y de semicios prescindu de la
tada de este liltimo concepto. El origen de la vinculaci6n es figura juridica "concesi6n" para recurrir a otra mas estricta como
claro y ya ha quedado puesto de manifiesto: se trataba de realizar es la de "acto organizativo". Asi Giaunini entiende por atto or-
una politica de obras pliblicas que ocasionase un minimo de gasto ganizzativo aquel por el cual la administracidn contiere ". . .la
para la Administraci611, acudiendo para ello a la cesibn a 10s titolaritli di un proprio ufficio" a un administrado, el que, por
particulares de la explotacibn de la obra, como coutrapartida de ello, queda legitimado para ejercitar potestades atribuibles a la
la inversibn realizada por 10s mismos en su ~onstrucci6n"'~. misma adrninistraci6nl5. Como se ve, esta es una figura muy
Sin embargo, la evoluci6n que ha sufrido el concepto juri- cercana a la aqui denominada delegaci6n transestructural, enten-
d i c ~de servicio pliblico y su carActer instrumental con respecto diendo que nuestra terminologia se acerca mis a la expresi6n de
a la regulaci6n y regimen juridico de la concesi6n (delegacibn), la realidad del fenbmeno juridico que se encierra en aquellos
"'atti o~ganizzativi".
un servicio pkblico de inter& general, pese a 10s aspectos contractuales que
Desde esta perspectiva, Mazzone explica la concesi6n ad-
quepa reconocerle y el concesionario no puede modificar las condiciones de
aquala por convenio con terceros, ni alterar 10s superiares derechos del Es-
1 4 Bal~a,R. C . , Hocia una interpretacidn restrictioa del concepto iud-
tado concedente para realizar el servicio d e cuya delegacibn se bate" (CS, no-
viembre 28i963. Gobierno nacianal c/provincia d e Mendoza). Rev. La dico d e servicio p6bJic.ico, LL, 1982-B-363, donde, luego de partir de la fun-
Ley, 114-50. damentacibn politico-social del servicio phhlico, en una consideracibn preju-
ridica, se identifica a1 servicio p6blico "como rCgimen juridico d e la conce-
"Es atribucibn del poder administrador revocar o declarar caduca la si6n de servicio pkblico". Para el estudio d e esta figura juridica, ademis de
concesibn de un sewicio pihlico, porque el concesionario actiia como un 10s tratadas generales d e derecho administrativo, ver la ohra antes citada
delegado del Estado, mientras que en 10s contratas de derecho comiin esa de Villar Ezcurra; y, entre otras, Arixio Ortiz, C., Las tarifas de 10s serviclos
atribucibn pertenece a 10s jueces". (ST Misiones, Sala 111, julio !24/970.-Pinto,
pciblicos, Institute Garcia Oviedo, Univenidad de Sevilla, 1976; Dominguez-
J. E.). Rep. La Ley, XXXI, 253, sum. 8.
Berrueta de Juan, M., El incumplimiento a la concesidn d e sertiicio pdblico,
Sobre la delegacibn en la concesibn de sewicio p6blic0, ver Trimarchi, Edit. Montecorvo, Madrid, 1981; Zuelli, F., Serm'zi pubblici e nttidtd i m
F., Profili orgonizurtioi deIIa concessione d i pubblici servizi, Giuffrk Edit., prenditdle, GiuffrC ,Fdit., Milin, 1973; Trimarchi, F., Profili nganizzatioi
hlilkn, 1967, ps. 102/111. delln concessione di pubblici seroizi, GiuffrC Edit., Milin, 1967; D'Alberti, M.,
13 Villar Ezcurra, J. L., ob. cit., SerOiCios phblicos y tdcnicas 02 cone- L e c m e s s i m i oministmtitie, Jovene Edit., Nkpoles, 1981.
zidn, ps. 52/53. 15 Citado por Mazzone, oh. cit., I sistemi di esecuzione.. ., p. 54, nota 9.
rninistrativa como expresidn y desarrollo de una potcstad juri- Como toda la actividad estatal es ajena a la libertad nego-
dica pitblica '6, ejercida por el concesionario en virtud de lo que cia1 del mercado, encontrindose sometida a un regimen de de-
aqui entendemos por act0 de delegaci6n transestructural, el que recho pliblico -incluso su actividad industrial o comercial- l 7
a la vez de transferir el ejercicio de una determinada competencia es obvio que el concepto de servicio pliblico nada aportari a1
administrativa, que se hari valer frente a 10s terceros admiuis- ri.gimen general de derecho administrativo en el que se desen-
trados, cnnstituye en el concesionario (delegado) derechos frente vuelve la actividad general y las prestaciones que hacia el pit-
a la Administracibn regulados por el mismo act0 de delegaci6n blico efectlia la Administracibn.
o bien por el contrato que se formalice entre las partes, lo que Es debida a ella la propuesta d e abaudonar, si no la nocibn de
analizaremos mis adelante. servicio pliblico, si su estructura tkcnico-juridica orientada a la
regulacibn de determinadas actividades estatales.
En cambio, cuando en virtud de un acto o un acuerdo con-
$ 42. EJECUCI~N
DE OBRAS P~TSLICASA TBAVIk D E LA tractual de delegaci6n (p. e ~ . ,la concesi6n) la prestaci6n del
CONCESI~N DE SERVICIO P ~ B U C O . servicio es transferida en favor de determinados administrados,
DWEREWCKA
CON LA CONCESI~N DE OBRA P ~ I J C A este concepto tkcnico-juridic0 del servicio p(iblico mantiene toda
su utilidad. Aqui si es necesario distinguir la habitual y natural
regulacijn privatista de la actividad de 10s particdares -siempre
En el trabajo citado en la anterior nota 14 desarrolli. una
dentro del orden de la libertad negocial del mercado- de la
interpretacibn restrictiva del servicio pliblico en cuanto institute
cumplida en virtud de la delegaci6n transestructural, cuyo con-
del derecho administrativo que supone regular una determinada tenido u objeto es la prestacibn de bienes o servicios a1 mercado
actividad prestadora de bienes y s e ~ c i o sa1 pitblico conforme
en benelicio de una determinada calidad jun'dica de personas,
a un r6gimen juridico especial. Claro que no toda actividad pres-
llamadas usuarios, lo que provoca la publicatw de la actividad
tadora de bienes y servicios a1 pliblico es un servicio pi-blico.
cumplida por el particular delegado. Debe prestarse especial
Este es un concepto tkcnico-juridic0 que se aplica a aquellas ac-
atenci6n a1 punto relativo a la calidad juridica de 10s usuarios
tividades de prestaci6n que el Estado, por razones de bien comlin,
pues envuelve un problema juridico de singular trascendencia: na-
decidi6 "sacar" de la esfera de la libertad negocial del mercado,
turaleza de la relaci6n concesionario del senicio-usuario. De
y someterla a una regulacibn publicists.

1% Mazzone, ob. cit., p. 55, entre otras notas de la concesibn, enumera gamento della Sfera giuridica di soggetti estranei all'amministrazione pubblica,
a las siguientes: attuato mediante il conferimento di facolti e poteri; pih in particolare, pub
"-neUa sua accezione tecnica, la concessione designa pih. che un atta dirsi che con la cancessione questi soggetti sono legittimati ad esercitare in
nmministrativo tipico, una categoria di atti mediante i quali la pubblica am- nome proprio attiviti d i cui la stessa amministrazione pubblica C titolare
rninistrazione persegue lo scopo di provvedere alla gestione indiretta di de- (concessione di servizi) o a utilizzare beni per loro natura sottratti alla lihera
terminate attiviti ~ u b b l i c h edi cui B titolare (concessione di s e ~ z i )o di disponibiliti dei privati (concessione di beni);
consentire che beni pubblici, d i cui essa ha l'esclusiva disponibiliti, formino i l concessionario non subentra nella titolariti del diritto del concedente,
oggetto di uso, utilizzazione e godimento particolari d a parte di singoli (con- ma o acquista sapra taluni beni pubblici soltanto speciali diritti privatistici di
cessioni d i beni); natura reale o personale (concessioni di beni); o acquista il diritto di eserci-
-oggetto della concessione sono, pertanto, attiviti e heni di natura pub- tare in nome praprio attiviii e funziani che sono preragativa dell'amrninis-
blica; attiviti e beni cioA che, essendo risenrati all'amministrazione pubblica e trazione pubblica (concessioni di servizi);
quindi estranei alla sfera di disposizione dei privati, non possono formare -Le concessioni non hanno mai effetto traslativo, ma sempre costitutivo;
oggetto di atti di autonomia privata (pih esattamente, oggetto delle concessio- -il conferimento di poteri e facolti ha carattere ternporaneo e precario,
ni di beni non A tanto il bene in se stesso, quanto un'utiliti che il bene B con conseguente possibiliti di revoca".
idoneo a dare); l 7 Cabe reiterar la rernisi6n a Barra, ob. cit., Phncipios de &?echo od-
--effetto tipico e fondamentale della concessione 8, in generale, l'allar- :min!stratiao, en particular, ps. 188/219.
acuerdo con la doctrina de la delegacibn transestructural, tal re- de s e ~ c i opublico", o, mejor, como el rhgimen juridico de la
lacibn seri, indudablemente, de derecho phblico. Asi tambikn actividad de 10s administrados realizada en virtud de la delega-
lo afirma parte de la doctrina, como, eutre otros, Rivero Ysern, cibn transestructural administrativa, y cuyo cometido es la pres-
"la situaci6n de 10s usuarios efectivos de 10s servicios pliblicos in- taci6n de bienes y servicios requeridos por 10s administrados en
dustriales y comerciales (se refiere a 10s otorgados en concesibn) general, aunque considerados segbn su estatus juridico d e usua-
es, por tanto, una situaci6n de derecho administrative. Afirmar rios. De esta manera se destaca el valor del s e ~ c i ophblico.
su caracter juridico privado es una ficcibn perjudicial que ~610. como tQcnica juridica de garantia en beneficio de 10s usuarios.
puede conducir a contradicciones". Es que, sigue diciendo este Estas consideraciones son litiles para comprender mejor el tema
autor, ". . .la actividad del concesionario permanece nbjetiva e in- que nos ocupa. Asi, cuando la obra pfiblica cuyo destino es ins-
trinsecamente phblica y no se transforma porque sea efectuada trumental para la prestacibn de un selvicio phblico, es construida
por un sujeto privado, mediante una actividad privada. La ac- pot encargo del ente estatal prestador del servicio pliblico, habrA
tividad conserva todas sus caracteristicas propias y se presenta~ un contrato de obra pliblica propiamente dicho, con una aplica-.
con una estructura y disciplina inmutables: en otras palabras, con cibn plena de la ley 13.064 y de las restantes normas que hacen
las mismas caracteristicas objetivas que cuando es ejercitada por a1 rkgimen juridico de la obra pbblica.
un sujeto de derecho phblico". Por ello es que no debe olvidarse,
como muy grificamente lo sefiala Rivero Ysern, que "10s usuarios la apreciacibn jcdicial frente a las circunstancias del caso concreto y la g r a - ~
de 10s servicios phblicos son administrados, no ~lientes"'~. vedad del inter& pliblico, en ese caso, comprometido.
En este caso -delegacibn, concesibn- la tkcnica del servicio En este sentido hay casas en que la norma juridica precis* expresa-
mente el alcance de la expresi6n servicio ~liblico,limitendola para la cali-.
phblico aparece en toda su especial significacibn y alcances "ga- ficacibn de determinadas actividades. Asi, por ejemplo, el C6digo Penal en
rantisticos" en beneficio de 10s usuarios '9, por ello he considera- su art. 190 bis cantempla '. . .La seguridad de un tren, de un alarnbre-carril'
do 20 a1 servicio pliblico "como el rkgimen juridico de la concesibn de otro media d e transport8 tmestre dmtinak a1 uso ptiblico.. .'; el art. 191
se refiere a las '. . .in.~alaciones destinodos al servicio phblico d e aguos co-
rrientes. . ., rnedios rLr transpwte destinodos al frso pliblico. . .'; el art. 193
18 Rivero Ysern, E., La proteccidn del usuorio de 10s serdcios pirblicos, se refiere a '. . .media de transpork pliblico de posajeros. ..', y el art. 1 9 4
"Revista d e Administracibn Nblica", Madrid, 1978, no 87, p. 205, en par- sanciona a1 que '. . .impidiere, estorbnre o entorpeckwe el normal fum'orn-
ticular, parigs. 234/235. miento de 10s transpwtes par t i m a , agua o aire o 10s seroicios phbl:.cos de
19 Zuelli, ob. cit., p. 9, Seroizi pubblici e aniuitd imprenditoriale, iden- comunicacwn, de prouirwn de agua, de electricidad o d e mtancias ener-
tifica a1 servicio pliblico como un "complesso di prestazioni garantite ai pri- gdticos . . . '.
vati". En otras casos le otorga un misrno tratanliento a la actividad de ser-
20 Ob. cit.. Hacia urn int-etm'dn restrictioa del concepto juridic0 de vicio pliblico y a las simples actividadw industriales. Asi, el art, lQ del
serdcio priblico: decreto-ley 879/57 se refiere a 10s conflictos colectivos de trabajo que afecten
"VI. El seroicio phblico c m o r d g i m iuridico d e la concesidn d e ser- a 'anpresos u wganismos &6 Estado que v e s t e n servicios phbl$cos, servicios
uicio niblico. -No se trata. el indicado en el subtitulo, d e afirmacibn tauto- d e inter& pdblico o desarvolh entioidodes industddes o c m r c i a l e s . . .'.
lbgica. Simplemente quiere decir que el concepto juridico del servicia p& En cambio, otras normns se refieren a 10s senricios p6blicas sin dar
blico debe ser estudiado desde la perspectiva de su ejercicio par el particular ninguna aclaracibn, como por ejemplo el art. ' 1 de la ley 17.183.
concesionario mis que como un regimen julidico que regula una d e las mo- Cuando hay impresicibn normativa, entonces, la calificacibn de una
dalidades de prestaci6n directa por parte de la Administracibn publica. actividad como servicio pliblico sblo podr& basarse, antes que en 10s llamados
Seglin lo expuesto en pirrafos anteriores no eldste una diferencia sus- 'caracteres del servicio publico' que, como vimos, son comunes a toda la ac-
tancial d e regimen juridico entre el que corresponde a la llamada actividad de tividad estatal, en las pautas interpretativas enunciadas en 10s pirrafas ante-
servicio pliblico d e la Administraci6n pliblica y el que corresponde a la restante riores: titularidad d e competencia exclusiva en favor del Estado ('publica-
actividad de prestnci6n de bienes al mercado que realiza la misma Adminis- tio') y posibilidad d e ser concedido su ejercicio a 10s particulars (deleoacibn
traci6n pliblica. Simplemente, sobre un mismo rhgimen juridico bbico es- transestructwal) sin mengua d e 10s atributos esenciales de poder estatal.
tructurado coma un sistema d e prerrogativas de la administracibn y garantias POI consiguiente, el dato determinante para caracterizar a una actividad'
del administrado la intensidad de la aplicacidn de tales prerrogativas y ga- como servicio pliblico es que ella, siendo d e titularidad estatal, pueda ser
rantias dependeri, ants una eventual ausencia de expresa previsibn legal, d e ejecutada por 10s particulares bajo un determinado rCgimen julidico (conce--
Pardahente distinta es la situaci6n de las obras ejecutadas Precisamente, en este caso, el objeto del contrato es la actividad
o mandadas ejecutar por el titular (delegado) de la concesi6n de d e prestacibn (bienes o servicios) del concesionario en favor de
.un servicio pliblico, ya que aqui su contrato de obra, si bien b6- 10s usuarios, actividad que, o por su naturaleza, o para nn mejor
sicamente sera tambiQn un contrato regido por la legislaci6n de o rnis eficaz cumplimiento, requiere de la construccibn de una
.obras pliblicas, tendri destacables aspectos y matices diferencia- obra mueble o inmueble.
bles en su regulacibn juridica. En algunas legislaciones se distingue, precisamente, cuando
Pero antes de continua1 avanzando en este estudio es nece- la concesi6n del servicio comprende la mera ejecuci6n de Qste, o
sario distinguir tambieu la figura analizada con la llamada "con- bien, con caricter accesorio, la ejecucibn de obras afectadas a1
cesibn de obra pGblica", distincidn, a veces, demasiado sutil te- mismo. Asi, el art. 114 del Reglamento de la Ley de Regimen
niendo en cuenta la gran cantidad de caracteres comunes que son Local espafiola establece: "1. - Los servicios de competencia de
identificables en ambas figuras. las entidades locales podrin prestarse mediante concesibn admi-
En la concesidn de servicio la construccibn de la obra seri nistrativa.. .; 2. - La concesibn podri comprender: a ) la cons-
siempre instrumental con respecto a la prestacidn misma del ser- truccibn de una obra o instalaci6n y la subsiguiente gestibn del
vicio y siempre, claro esti, que Qste requiera de tal construccibn. servicio a que estuvieren afectadas, o b ) el mero eiercicio del ser-
vicio phblico, cuando no requiera obras o instalaciones perma-
nentes o estuvieren ya establecidas".
si6n d e servicio pliblico) que es lit3 para garantizar que las prestaciones a En cambio, en la concesibn d e obra piiblica (en cualquiera
:lo3 administrados que corresponden a esa actividad concreta, serin realizadas
con predominio d e las exigencias del inter& pliblico sobre las demandss d e
d e las dos categorias que mas adelante se analizarin) el objeto
las reglas d e la 'libertad d e mercado'. Obviamente esto dltimo no se pre- del contrato es, siempre, la realizacibn d e la obra en si misma,
cisa predicarlo, como dato epecifica, d e la actividad diretamente desplegada bajo este particular sistema de ejecuci6n discrecionalmente deci-
por el Estado, pues estas garantias del pdblico inter&, no sujetas a la liber- dido par la Administracidn. Es decir, la concesi6n se justifica y
t a d negocial propia de las 'leyes del mercadd, son d e la naturaleza propia
d e la actividad estatal en general y a e la actividad d e la Administracihn ph- se define por la ejecuci6n de la obra sin que exista ningGn ser-
blica en particular. vicio que prestar bacia 10s terceros usuarios, o si lo hay, Qste seri
Por ello resultan acertadas ]as consideraciones que hate Zuelli acerca en beneficio direct0 de la concedente -aunque iudirectamente
.del servicio pdblico: 1) el servicio pdblico es un instrumento idhneo para beneficie tambien a 10s usuarios- y siempre con caricter instru-
garantizm prestacianes, 2 ) el elemento subjetivo es irrenunciable en orden a
la cnlificacihn d e servicio pliblico (publicatio), 3 ) las nociones exclusiva- mental o accesorio a1 contrato de construccibn, p. ej., en la con-
mente objetivas del servicio pliblico (por el tipo d e actividad) son insuficien- cesi6n de obra pGblica para una autopista por peaje, la obliga-
tes, el servicia p6blico se especifica como una 'disciplina qualificante, in ci6n del concesionario de atender la iluminacibn de esa via de
quanto elemrnto garantistico nell'interesse dei beneficiari'. E insiste en que
trinsito, realizar tareas de mantenimiento sobre la misma obra,
'seivizio pubblico 1. essenzialmente un'attivita idonea a garantire' prestazioni
ai cittadini'. etdtera.
La actividad del particular concesionario queda asi sometida a un re- Si bien la distinci6n de ambas figuras juridicas (concesi6n
gimen d e derecho pitblico con plena vigencia d e 10s llamados 'caractbres del de servicio pGblico y concesi6n de obra pliblica) puede tener
servicio pitblico', es decir, can importantisirnas lirnitaciones al principio d e la
libertad d e aomercio, bajo un severo control d e la administraci6n concedente significaci6n frente a algunas situaciones particulares -especial-
(que n o puede ser confundida con las regulaciones d e policia, aun bajo 10s mente cornparando la situacibn juridica del concesionario de ser-
medios dc permisos y autarizaciones) y sujeta a la posibilidad del rescate d e vicio phblico, atendiendo a1 complejo de relaciones que establece
la concesihn.
con la concedente, 10s usuarios, su personal, sus proveedores y el
No esti de rnis insistir en que la concesi6n s61o pravaca la tl-anferen-
cia en favor del concesionario del regimen d e derecho pliblico a1 que esti constructor de la obra, frente a la situaci6n juridica mis simple,
sometido tado ente pdblico, con sus prerrogativas y cargas d e respeto a lm del concesionario de obra phblica- fundamentalmente y en lo
garsntias del administrado-usuario. Esto es lo tipico d e la delegacibn trans- que respecta a las relaciones juridicas nacidas de la eshicta cons-
est~vcturald e cometidos, segtin sus caracteres enunciados m& aniba".
290 CONTRATODE OBRA P ~ B L I C A

trucci6n de la obra, 10s dos casos pueden recibir un tratamiento miento de la expropiaci6n, curnpliendo, claro esti, con 10s requi-
semejante, y asi seri hecho en 10s parigrafos pertinentes. sitos constitucionales y legales que regulan este instituto 21.
Esta psici6n es la seguida por 10s principales autores na-
cionales 2 2 y por la jnrisprudencia, aun cuando se reconoce que
extinguido el contrato de concesi6n, pero mantenida su presta-
ci6n a travks de la directa gesti6n estatal, la Administraci6n con-
cedente tiene una "excepcional facultad" de ocupar 10s bienes
Mientras en la concesiqn de obra pliblica, wmo se veri mis afectados a la prestaci6n de tal servicio para asegurar la conti-
adelante, no pueden existir dudas en cuanto a que la titularidad nuidad del mismo, es decir el curnplimiento de nno de sus ca-
de la obra es del concedente desde el momento misrno en que racteres esenciales. Es que, se sostiene, si bien el concesionario
se principia su ejecucibn, en la concesi6n de servicio pliblico, en es propietario de 10s bienes por 61 aportados a1 servicio, conforme
carnbio, el hecho apuntado de constituir la ejecuci6n de la obra a las reglas del derecho civil, estos bienes se encuentran en una
un aspecto accesorio o instrumental del contrato principal de pres- "situacibn juridica diferencial", que limita su libre dispsici6n en
taci6n del servicio puede provocar confusiones que es precis0 tra- aras de asegurar la mencionada continuidad en la prestaci6n del
tar de aclarar. servicio
El problema no puede tener una regulaci6n diferente con
relaci6n a1 de la titularidad de 10s bienes afectados a la presta-
21 Marienhoff, M. S., ob. cit., Tratadu.. ., t. III-B, ps. 630/838.
ci6n del servicio phblico, el qne, a la vez, guarda especial vin- 22 Bielsa, R., ob. cit., Pvincipios. . ., ps. 118/119; Diez, M. M., ob. cit.,
culaci6n con el tratamiento que deba dirsele a estos bienes una Derecho adminishotico, t. 111, ps. 288/290 y 295/305; Escola, H. J., ob.
vez extinguida, por cualquier causa que sea, la concesi6n. cit., Trotado integral. . ., ps. 133/139. TambiCn Sayaguhs Laso, E., Tratado
de derecho odministmtioo, Montevideo, 1974, t. 11, p. 15.
Naturalrnente, no existiendo norma de orden pliblico que rc- Z U s i sin re, "Bartolasedi, H., s/amparo", decidido por la Chmara Fe-
gule esta cuesti6n (como efectivarnente no la hay) la soluci6n deral d e Mendoza el 21 de febrero de 1914, La Ley, t. 154, p. 119, con nota
del tema debe estar sometida a lo que las partes han pactado en de Fiorini, B., Las bienes de ins concesiones de seroicio pliblico, donde el
el contrato de concesi6n o bien en lo dispuesto p r el act0 ad- autor sostiene una posici6n semejante a las antes citadas. En el caso "Bar-.
tolasedi. . .", el Tribunal sostuvo:
ministrativo que atribuyc la delegaci6n el que, para gozar de efi- "No existe confiscacirjn de bienes, de la empress prestataria de un ser-
cacia, debe ser expresarnente aceptado por el interesado. Tra- vicio de radiodifusibn, si el Estado, que no discute la propiedad de 10s mis-
tindose de nna cuestifin de tanra trascendencia sobre el rkgimen mos, ha dispuesto usar 10s mismos a efectos de proseguir brindando tal ser-
econ6mico-financier0 de la delegacibn, es 16gico que el punto vicio (en el caso se habia vencido el thrmino de la concesihn y se habria pro-
ducida una causal de caducidad a1 no pagarse la licencia); no siendo el am-
quede sometido a la libre disposici6n de las partes. , paro la via idhnea para proteger derechos aparentemente dnerados, si exis-
~ P e r oquk ocurre cuando las partes -delegante y delegado- ten otros medios administrativos y judiciales.
nada han dispuesto sobre el particular? El Estado tiene una excepcional facultad, como concedente, para ocu-
par 10s bienes de las Empresas que se hallen afectadas a1 senicio phblico, sin
Para Marienhoff, 10s bienes aportados por el concesionario que ello implique -1bgicamente- desconocer 10s derechos patrimoniales que
para la prestaci6n del servicio "son propiedad privada del mis- alega la ex concesionaria 10s que podran ser satisfechos, en su caso, en un
mom, incluso las rnejoras -construcciones e instalaciones- que juicio de otro tipo o naturaleza distinto del previsto por la via del amparo.
hubiere introducido en dependencias del dominio pliblico cuyo Siendo el concesionario propietario de 10s bienes afectados a1 servicio.
pbblico, tiene respecto de ellos un derecho de propiedad cornbn, regida por
uso le haya sido facilitado por la Administraci6n concedente. Por un derecho civil, pero en cuanto dura la afectacibn de la propiedad a1 servi-
ello, una vez extinguida la concesibn, estos bienes seguirin perte- cio pGblico, ella esta en situacibn juridica diferencial: tiene una limitaci6n
neciendo a su due60 y s610 podrLn pasar a1 patrimonio del con- respecto de la libre disposicihn de esos bienes fundada en la necesidad d e
cedente previo acuerdo de partes o bien mediante el procedi- asegurar la continuidad del servicio.
La facultad de ocupar 10s bienes del prestatario es h a facultad excep-
292 CONTRATO
DE OBRA P ~ L I C A

Sin embargo, entiendo que no debe tomarse una posici6n tan entendida corno delegaci6n transestructural de cometidos, y a1
terminante, pues siempre seri uecesario distinguir las situaciones rkgimen econ6mico-financier0 a1 que usualmerite la concesi6n s e
particulares d e cada concesi6n, a 10s efectos d e analizar el rk- sornete.
gimen d e 10s bienes afectados a su prestacitn una vez concluida Asi, el espaiiol Arimany Lamoglia, en un interesantisimo es-
aquella, naturalmente ante supuestos d e ausencia normativa o tudio 2 5 , analiza el problema d e la situaci6n que tiene la Admi-
contractual 2 4 . nistraci6n respecto de 10s bienes sujetos a reversi6n en la conce-
Incluso nuevos anilisis d e la cuesti6n han llevado a algunos si6n d e servicio phblico, examinando primeramente cuiles han
autores a sostener una psici6n diametralmente diferente d e la sido 10s criterios doctrinarios que se han dado respecto de la ti-
expuesta en 10s ~ i r r a f o santeriores, posicibn doctrinaria que, a tularidad de aquellas instalaciones.
mi entender, se ajusta m i s a la naturaleza de la concesi6n, El primero de eUos sostiene que dicha titularidad corresponde
a la Administracibn. Para ello se basan en argumentaciones ta-
les corno que la afectaci6n de un bien a un servicio general es u n
cianal, que adr ria equipararse a una simple tenencia u ocupaci6n d e los elemento con virtualidad suficiente para integrarlo dentro del do-
bienes afectados, justificada par la ineludible necesidad de asegurar la con- minio pGblico, sin perjuicio d e la compensaci6n q u e la parte pri-
tinuidad del servicio".
El caso tratado en el fallo arriba citado tambiCn sirvib de base a1 tra- vada reciba por la financiacibn de dicho bien. E n segundo lugar
bajo d e Cassagne, J. C., Elrtincidn de Ias concesiones otorgadan para la ex- se ha dicho que las concesiones de sewicios phblicos que requie-
plotacidn de catwles de teboisidn, ED, t. 51, ps. 973/977, donde afirma la ren inmovilizaciones previas se asimilan a las concesiones de obras
necesidad de deslindar la situaci6n vinculada a la propiedad de 10s bienes, pbblicas, de modo que las instalaciones surgidas de las mismas
d e la cuestibn relativa a que Cstos sigan afectados a1 servicio piiblico a efectos siempre serin consideradas como tales, es decir corno dependen-
d e garantizar la cantinuidad de la prestacibn. Sobre lo primero, el autor
sigue la postura de Marienhoff y admite la factibilidad de la ocupacibn es- cias administrativas. En tercer lugar, otro dato que ha permitido
tatsl precisando que estos bienes se encuentran en una condicibn que afirmar la titularidad dominial de la Administraci6n ha sido el
". . .no obstante su caricter exceptional, se halla insita en la naturaleza del propio efecto reversional, que hace que 10s bienes ya pertenecen
servicio pliblico que se presta, d e una cliusula exorbitante implicita en la
relacibn juridica crm el concesionario que traduce l a prerrogativa estatal de
a la Administracibn durante la concesibn porque alghn dia rever-
disponer las medidas necesarias para no interrurnpir la continuidad d e la tirin indefectiblernente a su patrimonio.
prestaci6u". Cita en a p y o d e esta primera opini6n numerosas cliusulas
TambiCn Grecco, C. M., en .4proximncidn a1 rdgiikn jutidico & 10s del ordenamiento juridico espafiol, tales corno la regulaci6n de las.
bienes privados afectados d seruicio pLblico, "RCgimen de la Administracinn
Piiblica", no 62, naviembre d e 1983, ps. 7 a 30, considera que la afectacibn concesiones de autopistas, de ferrocarriles, etcktera.
(O acto d e asignaci6n) d e los bienes al servicio pGblico 10s coloca en una El segundo criterio que Arimany Lamoglia expone, afirma
situacibn juridica especifica, frente a la cual coresponde "la superacibn de
las categorias dogmbticas del derecho privada" (p. 13). El autor concluye
en que deben adoptarse los siguierltes criterios interpretativos:
fCrreas" de las "concesiones d e distribucibn de energia elCctrica", indicando
a ) la consideracibn bisica d e que el destino de ciertos bienes a deter-
las soluciones distintas segGn una y otra y seglin tamhiCn !a naturalaa d e
minados fines de inter& comiin que trascienden y superan 10s meramente in-
dividuales provocan la news:dad d e un regimen juridico especial; b) la pri- 10s bienes en cuestitn. En su anhlisis admite que cuando las instalaciones,
en particular las inmobiliarias, ". . .tienen un valor durable y conservan s u
macia del act0 d e afectaci6n por sobre cualquier titulo privado; c ) la in-
embargabilidad d e los bienes afectados o bien la inadmisibilidad de la reali- utilidad durante mucbisimo tiempb . . ., por el s6lo hecho de finalizar la
concesibn, el concedente tend&, d e pleno derecho, la disposici6n y el go-
zacibn material del emzarga cuando ella puede originar la interrupci6n del
c e . . ." d e aquellas instalaciones, sin perjuicio de soluciones particulares para
servicio; ch) la inoponibilidnd a la Administracibn de las enajenaciones o
el caso d e muebles y de "abastecimientos".
constitucibn d e gravimenes celebrados sin la intervenci6n d e la Administra-
2 5 Arimany Lamoglia, E., Situacibn iuridicn de la Administracidn res-
cibn, independientemente de las soluciones que la legislacibn sectorial deter-
mine p a n casos concretos". pecto de 10s bienes sujetos a reaerswn en la concesidn administratioa de ser-
24 G n f . JCze, G., ob. cit., Principios generdes.. ., t. VI, p. 343. El
dcio publico, "Revista d e Administracibn Pliblica", n9 92, maya-agosto d e
1980, hiladrid, ps. 153/183.
autor (ps. 3431356). distingue, por via d e ejemplo, las "concesiones de vias
la titularidad de 10s bienes en favor del concesionario, sin p r - dos gravimenes reales independientes: a ) el gravamen restituto-
juicio de la reversibn que pende sobre ellos. rio (sujeci6n de 10s elementos a reversi6n) y b ) el gravamen de
Seglin exta corriente, el dato de la afectaci6n carece de su- afectaci6n a un servicio pliblico.
ficiente virtualidad para prejuzgar la titularidad pliblica de un Naturalmente, habri bienes que por su propio regimen ju-
ridico pertenecerin a la Administraci6n (Estado) concedente, co-
bien; existen bienes adscritos a un fin pliblico, cuya titularidad
es privada, de forma que ambos extremos -titularidad y afecta-
ci6n - estin disociados.
i mo ocurre con todos aquellos que por disposici6n legal pertenecen
a1 domiuio pfiblico. Esta situaci6n cobra especial significacibn
A pesar de ello, la incidencia que la afectaci6n de 10s bienes en aquellas concesiones que requieran de la construcci6n de 10s
a1 servicio pi-blico tiene sobre el rkgimen juridic0 de Bstos per- bienes enumerados en el inc. 70 del art. 2340 de nuestro C6digo
mite sostener que, si bien dicha adscripci6n no determina sin mis Civil, como se veri mis en detalle a1 tratar la concesi6n de obra
la propiedad administrativa de tales elementos, en cambio, si im- pliblica.
plica la atribuci6n de un derecho real sobre ellos en favor de la La naturaleza misma d e la delegaci6n transestructural obliga
i a coincidir con la postura de Arimany Lamoglia que precedente-
Administraci6n, constituido en garantia de la actividad phblica
desarrollada a travks de 10s mismos y que puede incluirse entre mente fue expuesta de manera sintktica.
10s denominados derechos reales in faciendo. Dehe tenerse presente que el concesionario act6a por cuenta
Seiiala el autor citadn que algunas normas positivas reconocen d e la Administracibn, en cumplimiento de cometidos que son pro-
validez a esta segunda postura, tales como 10s arts. 55 y 75 de la pios de ksta, per0 cuyo ejercicio ha delegado en favor del con-
ley General de Obras Pfiblicas de 1877 y el art. 128 de la ley cesionario por razones de discretional decisi6n estatal.
i
de Aguas de 1879, al igual que algunas decisiones de 10s tribu- 1 E n el marco de la delegacibn, entonces, la actividad misma
esti "publificada" ( d e ahi 10s derechos pi-blicos subjetivos que le
nales. !
Para resolver esta controversia, segGn Arimany Lamoglia, es asisten a 10s usuarios con respecto a distintos aspectos esenciales
preciso determinar el alcance de la cliusula reversional, que a que lracen a la prestaci6n del servicio), y por ello el delegado
su juicio consiste en que el concesionario no s61o se obliga a
enajenar la propiedad de 10s bienes a1 llegar el dia convenido,
i no es mis que un gestor que, en condiciones rigidamente regla-
mentarias, lleva a cab0 la prestaci6n del servicio que, a estos
sino que, de hecho, la esti transmitiendo ya -aunque a tkrmi- efectos, simplemente fue "sacado" de la estructura administrativa.
no- desde 10s primeros momentos de la relaci6n concesional. Esta situaci6n tiene que incidir necesariamente sobre el 16-
La llegada de la fecha estipulada implica, sin mis, el paso auto- gimen econ6mico de la concesibn, que deja de ser, desde esta
mitico del derecho de un ~atrimonioa1 otro, sin que a tal efecto perspectiva, una actividad a riesgo y ventura del concesionario,
sea preciso efectuar un act0 de transmision, ya verificado con pues ello no lo admite su caricter basicamente reglamentario. El
anterioridad. concesionario s610 asume el hrea de su propia capacidad empre-
De tal suerte, el concesionario no asume una simple obliga- saria (la correcta organizaci6n de 10s medios empresarios para
ci6n de entregar 10s bienes a1 llegar el dia sefialado, sino que me- una eficaz y rentable, en las condiciones dadas, prestaci6n del
diante la realizaci6n de una serie de actos con trascendencia ju- servicio), per0 nada mis. Por ello su derecbo al equilibrio de la
ridica real establece sobre 10s mismos un gravamen restitutorio ecuaci6n ewn6mico-financiera (cuya aplicaci6n desarrollada se
en favor de la Administracibn, que queda de manifiesto por dos verh a1 estudiar dicho rkgimen en el contrato de obra pliblica) y
motivos: 1) el automatismo de la reversi6n (aceptado por el Con- por ello este particular rkgimen juridico-econ6mico de 10s bienes
sejo de Estado y por el Tribunal Supremo y 2) la cliusula que se afectados a la ejecuci6n del s e ~ c i oconcedido.
inscribe en el Registro de la Propiedad. En estas condiciones puede afirmarse que todos 10s bienes
Como conclusi6n de su trabajo, este autor sostiene que sobre afectados a la prestacibn del servicio son abonados a travBs de la
10s bienes afectados a una concesibn recaen, durante su vigencia, tarifa a cargo de 10s usuarios, sin perjuicio d e las distintas ayudas
de contenido econ6mico que la Administraci6n puede otorgar en de usuarios, por la naturaleza del semicio, o porque es mono$-
beneficio del concesionario. lico, etc.) del cual participa. la Administracibn mediante el in-
En este sentido ( y sin entrar a analizar la polkmica doctri- greso de sumas predeterminadas o segrin un porcentual calculado
naria que se ha planteado en torno de esta cuesti6n) caincido con sobre ese excedente, o en general, sobre la totalidad del benefi-.
Garcia de Enterria 2 6 en afirmar la naturaleza tributaria o, en cio empresario. Pero n6tese que inchso en este caso el conce-
sentido genbrico, de exaccibn priblica (aunque no se trate de un sionario se encuentra garantizado por el equilibrio de la ecuacihn
impuesto en sentido estricto) de la tarifa, por lo que, como lo econ6mico-financiera, de tal manera que si la tarifa -por cual-
sostiene el autor citado, ellas pertenecen primariamente a1 erario quier circunstancia, con excepci6n de la culpa del concesionario-
priblico y no a1 concesionario, si bien la Administracidn ha de- no genera, no s61o el mencionado excedente, sino que tambikn
legado en kste su recaudaci6n y gesti6n dentro del rkgimen eco- pierde su capacidad retributiva, el concesionario se .mantiene en
nomico-financier0 de la concesi6n. su condici6n de acreedor de la Administracibn, pues no pierde el
Es asi que la tarifa tiene, en orden a la retribuci6n del con- derecho a que se le pague la gesti6n encomendada. De lo con-
cesionario, un sentido meramente instrumental, tal como es ins- trario, en una hip6tesis mixima, sn gestibn podria convertirse en
trumental la misma relaci6n concesionario-usuario dentro del es- absolutamente gratuita en beneficio de la Administracibn, lo que,
quema juridico de la delegaci6n. evidentemente, no es la intenci6n de las partes a1 acordar esta
relaci6n juridica.
Es qne la relaci6n principal, en tanto que base del institu-
to juridico, es la relaci6n Administraci6n-usuario, s610 que, recu- De esta manera, es inexacta la clasificacibn doctrinaria ( y en
rriendo a la figura de la delegaci6n transestructural, la Adminis- algunos casos legal) que se hace de la concesi6n, tanto de ser-
traci6n establece esta relaci6n a travks del delegado o concesio- vicio pitblico como de obra pitblica: gratuita, onerosa o subven-
nario. Por lo tanto, a1 menos para el concesionario, la tarifa no. cionada. En la relaci6n concedente-concesionario la relaci6n es-
es el "precio" que le paga el usuario como contraprestaci6n del siempre onerosa, pues la Administracibn siempre debe pagar el
sewicio, sino un medio de pago elegido por la concedente para servicio que le presta su delegado. Lo demis serin modalida-
saldar la gesti6n del concesionario, medio de pago que la Admi- des especiales de cada contrataci6n, pero nunca la esencia del
nistraci6n impone ( d e aqui su natnraleza de exacci6n pitblica) a negocio juridico.
determinados tsrceros que son 10s usuarios. Es decir, la tarifa Desde esta perspectiva la tarifa, dentro de su composicibn,.
tiene naturaleza tributaria para la Administrasibn y para el usua- incluye una parte destinada a pagar las inversiones en obras o en
rio. Para el concesionario, en cambio, es s610 un medio de per- bienes de uso que el concesionario afecta a la prestaci6n del ser-
cibir el precio de su gestibn, pero cuyo verdadero deudor no es vicio. Y si la tarifa es, en realidad, el precio qoe paga la Ad-
el usuario sin0 la propia concedente. ministracibn en favor del concesionario, quiere decir entonces que
Esto es asi aun en la llamada concesi6n "onerosa", que es la concedente, con ella, ya ha pagado tales bienes, que se incot--
aquella en la que el concesionario debe realizar un pago en fa- poran asi a su patrimonio desde el momento mismo de su afecta-
vor de la concedente, elemento que hace a la decisibn de otorgar ci6n a1 servicio. Mgicamente, esto s610 puede sostenerse con
la concesi6n, y que se funda en la presuncibn de que la tarifa respecto a 10s bienes de necesaria afectaci6n a1 servicio y no
no s6lo seri retributiva de la actividad de concesionario, sino con respecto a otros que el concesionario pudo incorporar a
que va a rendir un plus (generalmente derivado de la cantidad su explotaci6n para tornarla mas eficaz, con, seguramente, una
expectativa de mayor rentabilidad. Sobre estos bienes es indu-
dable que, a1 no ser esbictamente pagados por la tarifa (conside-
2% Garcia de Enterria, E., Sobre la notrrrclezo de lm tasm y las tarifas
rindola segrin la estructura de la ecuaci6n econ6mico-financiera
de 10s serdcios priblicos, "Revista de Administraci6n P6blica", n'? 12, Madrid,
1953, citado por Ariiio Ortiz, G., en ob. cit., L a tarififas de 10s serdcios p l - contractual, pues desde una perspectiva genkrica siempre van a
blicos, ps. 102/103, qiuen n~anifiesta su opini6n contraria. ser pagados, al menos parcialmente, por la tarifa en la medida
en que b t a se confunde con el total giro empreiario) el concesio- dente a1 final de la concesi6n por acuerdo libremente debatido
nario asumib un pleno riesgo comercial, que no corresponde sea con el concesionario", como lo dice Vedel en el lugar ya citado.
garantizado por la Administracibn concedente. Por la misma ra- En cuanto a las obras que el concesionario debe ejecutar -0,
2613, tampoco corrcsponde que esta filtima se enriquezca con la normalmente, contratar su ejecuci6n- va de suyo que serhn in-
incorporaci6n de estos bienes a su patrimonio. .dispensables para la prestacibn del servicio ( p r ejemplo, las obras
Desde esta perspectiva, es posible seguir el criterio de cla- civiles -thneles- en el servicio phblico del transporte subterra-
sificacibn utilizado p r VedelZ7, con relaci6n a 10s bienes vincu- neo), y en estas condiciones serin necesariamente pagadas por la
lados con la concesi6n, aunque con algunas precisiones termino- tarifa, por lo que deben considerarse "bienes de retorno", aun
l6gicas. cuando no perteneciesen a1 dominio phblico.
Asi es posible distinguir: En algunos casos concretos, en 10s qne por la magnitud de
-Los 'bienes de retomo" o sujetos a reversibn, que son di- las inversiones a realizar no era prudente cargar la totalidad de
rectamente amortizados a travks de la tarifa y, por lo tanto, son su costo a la tarifa pagadera por el concesionario, se distinguii, la
de propiedad del concedente, aunque afectados a1 concesionario "tarifa usuario" de la "tarifa contractual", o bien se garantiz6 es-
-mientras subsista el contrato de concesi6n. Extinguido Qte, estos pecialmente Ia retribuci6n del concesionario en el supuesto que
bienes revierten directamente al concedente, sin el pago de com- l a tarifa-usuario fijada por la Administracibn no fuese retributiva
pensaci6n o indemnizacibn alguna. Por el contrario, el concesio- del servicio.
nario deberA indemnizar a1 concedente en el supuesto de que Asi, en el Programa INLAP 1, realizado por la provincia de
tales bienes se hayan dasado total o parcialmente, tornindose Buenos Aires para el otorgamiento en concesi6n del s e ~ c i op ~ i -
ineptos para su destino, o no se encuentren en el estado de cou- blico de abastecimiento de agua potable, desagiies cloacales, in-
semaci6n debida. dustriales y pluviales de 10s partidos de La Plata, Berisso y En-
-Los "bienes de recuperaci6n", que son aquellos que no han .senada (proyecto no ejecutado) el pliego d e condiciones aprobado
sido directamente amortizados con la tarifa del servicio, pero por ley 9779 obligaba a1 concesionario a realizar la remodelacibn
igualmente se encuentren afectados a la prestacibn de kste, y en .de las obras existentes y ejecucibn d e las obras nuevas para la
el orden econ6mico global del giro empresario incorporados a1 correcta prestaci6n del servicio concedido.
esquema tambik? econ6mico de la concesibn. Estos bienes per- La retribuci6n del concesionario iba a ser a travks de la ta-
tenecen a1 concesionario, peso sujetos a la carga de afectacibn rifa correspondiente a1 servicio de abastecimiento de agua p t a -
a la concesi6n, por lo cual, a1 tkrmino de ksta, el concedente pue- ble, en la que debian ". . .agregarse todos los costos fijos y va-
de adquirirlos del concesionario a un precio previsto en el con- ~iablespor todo concepto" (art. 1 . 5 . 3 ) . En su art. 1.5.4 dicho
trato o al que emerja del acuerdo de voluntades ( o a falta de ella pliego establecia que:
por irbitros o en un proceso judicial), pero con la caracteristica "El cobro de 10s servicios a1 usuario serA realizado p r el CO-
que el concesionario no puede oponerse a tal adquisici6n. Por mitente de acuerdo con la lectura de medidores por 61 efectuada y
lo demLs, el concesionario debe mantener esos bienes en el mismo segin la plitica tarifaria que a1 efecto determine, que podri coin-
.estado de conservacibn y utilidad que el mencionado en el caso cidir o no con las tarifas acordadas con la Concesionaria.
anterior. "Si esa no coincidencia llegase a provocar alteraciones impor-
-"Los bienes propios (fondos, instalaciones accesorias 'fuera tantes de la demanda, la parte afectada podri requerir una re-
de la concesi6n') son pura y simplemente propiedad del conce- negociaci6n que tienda a paliar tal efecto".
sionario y s610 pueden ser adquiridos p r la colectividad conce- En el caso de la "Concesibn de la Red de Subterrineos de la
Ciudad", a cuya licitacidu Ham6 la Municipalidad de la Ciudad
27 Vedel, G., Derecho admitlirtratioo, Edit. Aguilar, Madrid, 1980, ps. d e Buenos Aires, las obras civiles a realizar quedaban excluidas
7221783. del rkgimen tarifario, ya que iban a ser pagadas por un mktodo
de medici6n y certificacidn igual a1 de un contrato de obra pi]- nes afectados a aquella prestacibn, que permanecen asi, en cud-
blica propiamente dicho (art. 11.3.2.1, Pliego de Condiciones quier supuesto, en el patrimonio del concesionario, sin perjuicio
Legales y Econ6micas). Pero lo relativo a1 equipamiento e ios- d e las distintas prerrogativas de la concedente en aras d e la nor-
talaciones (corno tambien todo lo relativo a la explotaci6n en si mal prestaci6n del servicio, tal como lo sefialara Cassagne en el
misma) iba a ser umortizado "de acuerdo con la tarifa por pasa- trabajo citado en la nota 23.
jero transportado que deberi cotizar el oferente y que se denomi- De todas maneras, no cabe duda de que la cuestibn exige de
nari tarifa coutractual" (art. 11.3.2.2). La cantidad de usua- un suficiente tratamiento legislative que, sin caer en un excesivo
rios estaba garantizada por el concedente, asi como tambikn b t e cuadro reglamentarista que irnpida a la Administracidn la redac-
se reservaba una participaci6n sobre 10s beneficios, emergente de ci6n de pliegos que se ajusten a las particularidades d e la situa-
una cantidad de usuarios en exceso del minimo garantizado. In- ci6n concreta, establezca principios generales que, por lo menos,
dependiente de ello, el concedente se reservaba el derecho de fi- obliguen a que la docurnentaci6n contractual se expida sobre este
jar la tarifa a1 usuario, de la que el concesionario era un mero importante aspect0 del regimen juridico-econirmico de la contra-
recaudador, recibiendo luego su pago por un sistema do com-
taci6n. Asi lo hace el ya citado Reglamento de la Ley de Rk-
pensaciones.
gimen Local espafiola, que en su art. 115 distingue las distintas
Esto quedaba asi regulado de acuerdo con el principio gene- situaciones en que quedarin las obras a cargo del concesionario:
ral establecido en el art. 1.11 del pliego bisico.
"Art. 115. - En toda concesi6n de servicios se fijarin las cl&u-
"El valor de transporte por pasajero y recorrido que perci-
birin 10s Concesionarios seri convenido con la Municipalidad de
i sulas con arreglo a las cuales se otorgare, que serin las que se juz-
guen convenientes y, como minimo, las siguientes:
la Ciudad de Buenos Aires.
"En lo que hace a la tarifa a1 pliblico, la Municipalidad de la
Ciudad de Buenos Aires determinari la misma a so solo criterio.
I
i
"laServicio objeto de la concesi6n y caracteristicas del mismo.
"23 Obras e instalaciones que bubiere d e realizar el concesio-
nario y quedaren sujetas a reversidn, y obras e instalaciones a su
"Los ingresos resultantes de dicha tarifa serin recaudados por i
cargo, pero no comprendidas en aquklla.
10s Concesionarios y peri6dicamente conciliados con las compen- ! "3a Obras e instalaciones de la Corporaci6n cuyo goce se en-
saciones econ6micas establecidas en 10s contratos". I tregare a1 concesionario.
En ambos pliegos licitatorios se establecia, tambikn, un sis- i "48 Plazo de la concesi6n, segiin las caracteristicas del servi-
tema de c&lculo de la amortizaci6n de las inversiones computables. I
cio y las inversiones que hubiere de realizar el concesionario, sin
en la tarifa, que fijaba el eventual valor de pago a cargo de la i
II. que pueda exceder d e ciucuenta a6oos.
concedente en beneficio del concesionario en el supuesto de ex-
"5a Situaci6n respectiva de la Corporaci6n y del concesionario
tinci6n del contrato de concesidn, anticipada o no. Este rhgimen durante el plazo de vigencia de la ooncesibn.
ser& estudiado a1 analizar las causales y efectos de l a . extinci6n "6a Tarifas que hubieren de percibirse del pkblico, con des-
del contrato de concesi6n de obra piiblica. composici6n de sus factores constitutivos, como base de futuras
Naturalmente, lo expuesto sobre el rhgimen tarifario y el' revisiones.
rkgimen de 10s bienes en la concesi6n de servicio pliblico (que "7a Clase, cuantia, plazos y formas de entrega de la subven-
coma se vio son dos aspectos intimamente vinculados) no tend& ci6n a1 concesionario, si se otorgare".
aplicaci6n en aquellos supuestos en que por la especial modali- En nuestro derecho, y en lo que hace a la concesi6n de obra
dad del servicio (generalmente los vinculados con el llamado, phblica, la ley 4392 de la provincia de San Luis -ley de priva-
transporte colectivo, el de taxis, y alglin otro supuesto) la tarifa tizaci6n de inmuebles destinados a actividades turisticas, que re-
se independiza totalmente del rkgimen econirmico-financier de la gula la concesi6n de obra pliblica "como sistema de privatiza-
prestaci6n del servicio y por lo tanto no pnede imputarse (en la ci6n perif6rican- en su art. 24 in fine, establece:
relacibn concedente-coucesionario) a la amortizaci6n de 10s bie- "A1 vencimiento del plazo fijado a la concesiirn, las obras con
sus instalaciones y equipos revertirin a1 Estado provincial, en como en estos casos el rkgimen exorbitante debe interpretarse de:
normal estado de conservaci6n y funcionamiento". manera restrictiva (ver supra, Cap. 11, $ 16), s61o se deberin
En el mismo sentido, seglin se analizari en el siguiente ca- iuterpretar como virtualmente vigentes, incluso contra pacto ex-
pitulo, el art. 70 de la ley 17.520 (concesi6n d e obra phblica "por preso en contrario, la prerrogativa o garantia que sea, en el caso
peaje") entre 10s demis aspectos que necesariamente deberbu ser concreto, el necesario correlato de la garantia o prerrogativa ex-.
considerados por el contrato de concesibn impone: ". . .las obli- presamente pactada.
gaciones reciprocas a1 tkrmino de la concesi6n. . ." y ". . . las cau- De esta manera, si el contrato en concreto exhibe una total'
sales y las bases de valuaci6n para el caso de rescisi6nm,previsio- ausencia de regulaciones propias del rkgimen juridico exorbitante,.
nes que indudablemente se estin refiriendo, entre otras situacio- s610 se considerarin como elementos virtualmente vigentes aque-
nes, a1 rkgimen de reversi6n de 10s bienes concedidos. 110s que directa e inmediatamente afecten a1 inter& phblico (no
ya a1 inter& de las partes contratantes) se&n lo que defina, siem-.
pre sobre el caso concreto, la Administracibn deIegante o el juez
de la causa.
Todo ello, claro esti, sin perjuicio de 10s casos en que el'
En supra, Cap. 11, $ 16, a1 analizar la relaci6n juridica entre propio legislador le ha impuesto a1 delegado (en este caso, con-
el delegado ejecutor de la obra (lo que supone una anterior re- cesionario) las mismas obligaciones que hubiese tenido la Ad-~
laci6n con la Administracibn Pliblica bajo la figura de la delega- ministracibn en el supuesto de ejercer la cornpetencia en cuesti6n
de manera directa. En estas hi@tesis, debe tenerse en cuenta
ci6n transestructural de cometidos) y el constructor de la misma,
se sostuvo que dicha relaci6n (que normalmente serb contractual) que la obligaci6n de la Administracibn, cuando ella actha hacia
se encontrari sometida bisicamente a1 mismo rkgimen juridico el exterior, tiene como correlato derechos de 10s administrados, por
ejemplo en materia de selecci6n del contratista estatal, como se
exorbitante que caracteriza a todo contrato administrativo, apli-
cindosele en forma analdgica, en consecuencia, la legislaci6n per- veri mis adelante.
tinente que regula a1 contrato de obra pliblica. Asi sucede con el rkgimen de 10s denominados "compre" y
"contrate nacional", establecido en decreto 5340/63 y en la ley
Mbs alli de la remisi6n que se efectlia a aquella parte d e
18.875, respectivamente. Ambos cuerpos normativos, en sus ar-
esta obra, es posible efectuar algunas precisiones y aclaraciones.
ticulo primero le imponen a1 coucesionario de sewicios pbblicos
Como se ha visto (supra, Cap. I, 9 3) el rkgimen juridico exorbi-
tante es una integralidad, que supane una aplicaci6n arm6nica la misma obligaci6n que pesa sobre el Estado nacional (Admi-
de sus distintas instituciones o elementos companentes. En con- nistraci6n centralizada y descentralizada) de ". . .adqnirir exclu-
sivamente materiales, mercaderias y productos de origen nacional,
secuencia, la ausencia de algunos de tales componentes, frente a
siempre que el precio sea razonable" (art. lo,decreto 5340163)
la preseucia de 10s restantes, exige la inmediata recomposici6n de
y de ". . .contratar con. empresas constructoras locales o prmee-.
la armonia del sistema, reconociendo la vigencia virtual del ele-
dorm de obras y sen;idos locales.. ." y ". . .contratar con profe-
mento faltante, pero connatural a1 mismo sistema. Tal es lo que
siondes y f i r m s consultoras locales.. ." (art. lo,ley 18.875) den-.
ocnrriria con uu contrato d e obra pliblica que eliminara determi-
nadas prerrogativas estatales. Naturalmente tal cliusula se ten- tro de las regulaciones fijadas en ese cuerpo legaL
dria por no escrita (salvo que se tratase de una mera restriccidn
o reglamentacibn), por cuanto resultaria contraria a1 rkgimen
exorbitante que hace a la esencia misma del contrato adminis-
trativo.
Esto tambikn es predicable de 10s contratos de obra cele-
brados por el delegado estatal con un tercero constructor. Pero,
CAP~TWW VI

CONCESION DE OBRA FTJBLICA POR PEAJE

$ 45. C O N C E S IDl3
~ NOBRA P ~ B Z I C A . CONCEFTO
GENERAL
Cusnrwcr6~

Dentro de 10s sistemas de ejecuci6n par delegaci6n transes-


tmctural, la figura que m i s se destaca es, sin duda, la concesi6n
;le obra pi-blica. Es asi que en la actualidad muchas de las
grandes obras pliblicas cuyo uso sea susceptible de ser tarifado,
son ejecutadas a trav6.s de este sistema de ejecuci6n indirecta
par las ventajas de t i p presupuestario y organizativo que genera
e n beneficio de la Administracibn responsable (titular d e la com-
petencia) de la ejecuci6n de la obra.
Dcsde la perspectiva de la delegaci6n transestructural la con-
cesitrn de obra pliblica paede ser definida (seglin el mktodo des-
criptivo) como el sistema de ejecucwn indirecta d e una obra pi-
blica a t m d s del dual el cuncesionario o delegado reeibe del
concedente o delegante el qcrcicio de la competencia adminis-
tratica de contratar con u n tercero constructor la r e a l i m w n de
esa obra pdblica y, por si mismo o pw un tercero, efectwlr las
operaciones necesarias para el buen mantenimiento y erplotacidn
d e la misma, quedamdo el pago de todas las inuersiones requeri-
das para la constrllccidn, mantentmiento y explotacidn, tmnbie'n
delegado en el concesionario, quien reeibe, asimismo, el cometido
de percibir 10s ingresos por la explotacio'n de la obra, para desti-
CONCESI~N
DE OBRA ~ 6 ~ 1 - I POR
C A PEAJE 307

narlos a amortirar la inoersidn hecha y a satisfacer su beneficio' indispensable para hacer efectiva, dentro de ciertas bases, la re-
empresario, que puede o 110 ser participado con el delegante1. muneracibn de 10s capitales puestos a contribuci6n d e la ejecu-
Esta consideracibn del contrato de concesi6n de obra phblica cibn de la obra pbblica". En esta norma se destaca con claridad
como una especie de la figura de la delegaci6n ha sido admitida I la presencia del act0 administrative de delegacibn, con su finali-
eryresameute por nuestro derecho provincial, como es el caso de dad principal orientada a1 sistema econ6mico financier0 de la es-
la ley 1864/48 de la provincia de Jujuy, que en su art. 116 expre- tructura contractual. Luego, el art. 117 establece que una v a de-
samente dice: "La concesibn de obra pliblica es un act0 juridic0 cidida la ejecuci6n de la obra "por el sistemm de la concesibn" tanto
que consiste en delegar en un concesionario aquella parte de la el procedimiento licitatorio como, debe entenderse, la ejecnci6n del
autoridad del Estado o de sus cuerpos administrativos, reputada contrato quedarhn regidos por las disposiciones de la misma ley
de Obras Pliblicas provincial.
1 Mazzone, M., ob. cit., I sistani di esecuzione.. .. p. 78, dice que la
nota fisonnmica esencial d e este instituto es quc "un saggetto (il concessio-
Sin embargo, razones d e indole prhctica han desdibujado un
tanto el instituto de la delegaci6n en sentido estricto; eliminando
nario) B legittimato verso i terzi a compieri, in nome proprio e in sostitu- la distinci6n entre la figura del concesionario y del constructor,
zione di un soggetto pubblico (il concedente), ogni necessaria incombenza de tal manera que este rjltimo (concesionario-constructor) es fren-
connessa alla realizzazione di un'apera pubblica rientrante nelle attribuuoni te a la Administracibn Pbblica y con relaci6n a la ejecuci6n d e
di questhltimo". Cianflone, ob. cit., Cappalto. . ., ps. 174/175, destaca cla-
ramente el elemento "delegaci6n" insito en este tipo d e figura: la obra, un simple constructor (como en el contrato de obra ph-
"La nozione di concessime di costruzione e di eserciao B gii nota e blica propiamente dicho), quedando su papel de delegado redu-
qui se ne parla prchi: nan B mancato chi ha concepito questa come un ne- cido a 10s aspectos financieros de la operaci6n -en su calidad
gozio mkto (ovviamente, quando il concessionario non sia una istituzione de gestor de 10s crQditos necesarios para soportar las inversiones
pubblica) co~nprendente un appalto (per la costruzione delSopera) ed una a realizar- y a su situaci6n juridica frente a 10s usuarios obli-
concessione (per la gestione del servizio). Con questo tip0 di concessione
lo Stato o altro ente pubblico (soprattutto territo~iale) concede ad un altro gados a1 pago de la tarifa o tasa por el uso o aprovechamiento
soggetto, privato o pubblico, che rimane fuori dalla sua organizzazione e de la obra.
che percil non diventa suo organo, l'esercizio di un servizio pubblico di sua <
I Asi, en supra, Cap. V, $ 34, se ha distinguido a la concesi6n
competenza. I1 concesionario campie gli studi, compila il progetto delle
opere necessarie ( q a n d a questi compiti l'arnmmistrazione non riserbi a s& ? de obra pljblica en dos especies: la concesi6n por delegacidn pro-
o nan ne formi oggetto di nltra concessione) e a propria cura e a proprie spese I
1
pia y la concesi6n por delegacidn impropia, respondiendo cada
provvede nlla esecuzione dei l a ~ o r i ,direttamente (quando nan sia una isti-
tuzione p~thblica) o mediante appalto, e successivamente alla gestione del
1 una de ellas a las caracteristicas sumariamente adelantadas en 10s
pirrafos precedentes. Aun asi, coma se veri en el Cap. VII, $ 67,
servizio. La arnministrazione enercita, nella esecuzione, solo una generica
vigilanza. Autorizza, perb, gli studi, approva il progetto e le eventuali va- existen en la prictica nacional contratos de obra phblica ma1 Ila-
rianti, esesue il collaudo dell'opera. No conisponde alcun prezzo ma at- mados concesi6n, en 10s qne, dado que la tarifa par el uso o aprove-
tribuisce a1 conce~ionariosolo dei contributi; autorizza pe1.b il co?cessionario chamiento de la obra es pagado directamente por el comitente d e
a devolvere a proprio beneficio i proventi dell'esercizio, la cui durata viene la misma, s610 es posible encontrar 10s elementos caracteristicos
calcolata in modo da cansentirgli la reintegrazione delle spese ed un con-
gruo utile. del contrato de obra pbblica propiamente dicho, sin que exista
Dagli elementi espasti gid si scorgano le differenze tra questo tipo di ninghn tip0 de delegacibn, sino exclusivamente una modalidad
concessione e l'appalto. Con la prima, l'amministrazione sostituisce a si: il especial de pago.
term (istituzione puhblica o soggetto privato) nello espletamento di un com-
pito di carattere pubblica, compreso quello relativo alla costruzione dell'opera
La doctrina italiana deuomina a la aqui identificada como
(indiretta a diretta), che rientra tra le sue funzioni. I1 concessionario, cio8, concesibn por delegaci6n propia concesidn de construccidn y de
si pone a1 posto dell'amministrazione nell'adempimento di un servizio pubbli- ejercio d e la obra, figura que se encuentra babitualmente confun-
co prowedendo a quanto k necessario per il suo impianto e per il suo eser- dida con la concesi6n de servicio pliblico, en el caso en que Qsta
cizio. Egli B un Sostituto' dell'amministrazione che, perseguendo un fine di
lucro ed agendo in nome proprio, attua nel contempo un fine dewamminis-
necesariamente lleve incorporada la obligaci6n del coucesionario
trazione".
j de disponer la ejecucibn de una obra esencial e indispensable para
~ N C E S I ~DE
N O E M P~BLICAPOR PEAJE 309
la prestaci6n del servicio. En cambio, la coficesi6n por delega- Desde esta perspectiva, la situaci6n del concesionario guar-
ci6n impropia (con las aclaraciones que mis adelante se harin) da una gran similitud con la que le corresponde a1 concesionario
es llamada concesidn de sola constmcidn, en la cual "un suieto del servicio pliblico obligado a ejecutar, en el marco de su con-
pliblico o privado es legitimado para ejecutar una obra pliblica
trato de concesi6n, una determinada obra pliblica afectada a la
d e competencia del Estado o de otro ente pbblico" 2 , indepen-
dientemente de la prestaci6n de cualquier servicio pliblico. En prestaci6n de ese servicio. En uno y otro caso, el concesionario-
delegado no es el constructor d e la obra, sino el que ocupa el
este liltimo caso, concesi6n de sola construcci6n, la figura es iden-
lngar (en el contrato de oonstruccibn) del comitente pliblico, qne
tificada, en la doctrina italiana, con el appalto3, resultando
es el verdadero titular de la competencia en lo qne hace a la
". ..implicitamente obligatoria la ejecncibn de 10s trabajos por realizaci6n de esa obra pbblica.
parte de la empresa que resulte concesionarian4.
Nosotros mantendremos la denominacibn sugerida en 10s p i - En consecuencia, sin perjnicio de las diferencias derivadas
rrafos precedentes -delegaci6n propia y delegaci6n impropia- del objeto principal del contrato (prestaci6n del servicio o cons-
por considerarla rnis representativa de la realidad de las mlil- trucci6n de la obra, respectivamente), que pueden provocar im-
tiples relaciones que nacen a partir de estas figuras juridicas y portantes consecuencias con relaci6n a1 rkgimen juridic0 general
rnis coherente con la metodologia ntilizada en el resto de la pre- de cada uno de ellos, la compleja relaci6n concedente-concesio-
sente obra. nario-constructor no ofrece sustanciales distinciones en ambos ti-
pos de concesiones, por lo que cabe remitirnos a lo desarrollado
en supra, Cap. V, $9 43 y 44.
En cnanto a la relaci6n concesionario-constructor, las leyes
$ 46. CONCESI~N
POR DFXXGACI~NPROPIA. REMISI~N
de concesi6n de obra pliblica "por peaje", 17.520, para el orden
nacional y 9253, para la proviucia de Buenos Aires, efecblan una
Como se ha visto en 10s pirrafos precedentes, en esta espe-
importante declaracibn, aplicable a1 caso aun cuando del context0
cie de la concesi6n de obra pliblica es donde se da de manera
de ambas normas pueda afirmarse que el legislador tuvo en cnen-
mis plena la figura de la delegaci6n transestrnctural, con 10s
ta la aqui llamada "concesi6n por delegaci6n impropia", rnis qne
efectos que le son propios.
el instituto analizado en este parigrafo.
Asi, el art. 4Qin fine de la ley 17.520, como tambikn iguaI
2 Mazzone, M., ob. cit., I sistemi di esecuzione. . ., p. 56/58. articulo de sn similar provincial, establecen que: "en todos 10s.
3 Ibid., p. 67, Vermiglio, G., ab. cit., Concessioni autostradali .... PS. casos deberdn respetarse, en cuanto a la etapa c l e construccidn, las
229 y ss., niega la plena identificaci6n de la cancesi6n d e sola construcci6n n o w legales establecidns para el wntrato de obra pliblica en:
con el oppalto, ya que reconace en esa figura (como la destacaremos mis
adelante en el texto) 10s elementos de la por nosotros denominada "delega- todo lo que sea pertinente"., agregando la ley provincial: ". . .ex-
ci6n". Vermiglio reconace que la ~osicidn mayoritaria de la doctrina es en cluy6ndose las variaciones de precios", cuesti6n que queda sujeta
favor de la identificacibn plena (entre otros, cita a Zanobini), pero sefida a lo regulado especificamente en 10s pliegos licitatorios.
como Cianflone, que en la cdici6n de 1950 d e Cappaldo di opere wbbliche
"negava ogni sostanziale differenza funzianale e strutturale Ira concessione De esta manera, queda claro que la relaci6n concesionario-
di costrudane ed appalto . . . nell'ultima edizione della atessa opera, Milano, constructor quedari regida, bisicamente, por la legislacibn de
1971 - e pero di diversa opinione" (p. 229, nota n'? 7 ) . La distinci6n la obras pliblicas. Para sentar principios coherentes debe entender-
mantiene Cianflone en la ~dicihn que manejarnos nosatros (Milano, 1981). se qne ello no es s610 "en cuanto a la etapa de constrnccibn", sino
ps. 177/188, lo que annlizaromas d s adelante. Tambikn es partidario d e la
distinci6n Roehrssen, G., ob. cit., I loooti. . ., p. 460. tambikn, y ello es de fundamental importancia, durante la etapa
4 Mazzone, ob. c i t , I sistemi.. ., p. 68, s e k l a que, incluso, el aspirante de seleccibn de la empresa constructors, pues es aqui donde se
a resultar concesionario debe encontrarse inscripto en el "Albo Nazionale dei deberi tener rnis en cuenta la necesidad de proteger tanto el
Costiuttori" ( n u e s t ~ oRegistro de Constructores de Obras P~iblicas) por el interks pliblico (a1 conbatar con nna empresa apta para realizar
importe y la especializaci6n adecuada. eficazrnente una obra, que se paga con fondos provenientes del
pliblico y que integra el patrimonio del ente phblico concedente) las inversiones comprometidas en la obra y, en algunos casos,
y el interks privado de las empresas constructoras, que, como se con incidencia sobre las perspectivas de beneficio empresario, con
veri al analizar el procedimiento de selecci6n del contratista es- o sin participacibn de la Administracibn.
tatal, tienen derecho a la competencia o concurrencia a traves de Fuera de esta especial regulaci6n, que sin duda contempla
la seleccidn de la "oferta rnis conveniente". un aspect0 muy importante del contenido dei negocio juridico, el
resto de la relacibn contractual comitente-constructor no guarda
mayores diferencias con respecto a la existente en el contrato de
obra phblica propiamente dicho y de aqui que se le apliquen a
$ 47. CONCESI~NPOR DELEGACI~N IMPROPIA. CLASES este contrato (concesi6n de obra phblica) 10s mismos principios
juridicos y el mismo rkgimen legal que el relativo a1 llamado con-
La aqui llamada concesibn por delegacibn impropia guarda, trato de obra phblica propiamente dicho, sin perjuicio de las va-
en realidad, rnis similitud con el contrato de obra pliblica propia- riantes impuestas en lo que hace a la estructura econirmico-finan-
mente dicho que con la figura de la concesi6n de obra pliblica ciera del contrato.
en la que, de manera plena y terminante, un administrado es de- Fundamentalmente por 10s efectos que generari en dicha
legado en el ejercicio de la competencia propia del comitente de estructura econbmico-financiera y por la distinta calidad de 10s
la obra, seghn se vio en 10s parigrafos anteriores. administrados (terceros en la relaci6n comitente-constructor) obli-
En la concesidn por delegacibn impropia, el comitente d e la gados primariamente al pago, la concesi6n de obra pliblica (por
obra continb siendo la Administraci6n Pliblica y el delegado no delegaci6n impropia) se clasifica en concesidn por peaje y con-
es rnis que el constructor de la misma -sin perjuicio de 10s cesidn por contribrrcidn de mejoras6.
subcontratos que pueda formalizar, aunque con mayor libertad La primera engloba a todos 10s sistemas en qne la remune-
que en el contrato de obra pliblica, coma se veri rnis adelante-, racidn del constructor se encuentre parcialmente vinculada (ya se
quien s610 recibe la transferencia de la potestad phblica de re- veri por quk se utiliza el termino "parcialmente") a 10s resultados
caudar 10s fondos necesarios requeridos para la inversi6n en la de la explotacibn de la obra pliblica, centrindose su principal apli-
construccih y para solventar su propio beneficio empresario. cacibn en la construcci6n de las grandes obras viales. En la
Puede afirmarse que, salvo aspectos no trascendentales, el segunda, concesibn por contribuci6n de mejoras, el precio de la
sefialado en el pirrafo anterior es el hnico supuesto de verdadera obra seri primariamente pagado por sus principales y directos
delegacibn, pues las restantes prerrogativas pliblicas que pueden beneficiarios, y no por todos sus usuarios, de manera que la re-
vincularse tanto con la construcci6n de la obra como con su us0 muneraci6n del contratista se independiza del uso o producci6n
( p . ej., la policia de trinsito en una autopista cnya construcci6n de la obra, qnedando basada en una determinacidn objetiva de
se contratb seglin este sistema) quedan (por lo menos en la le- la relaci6n entre el costo de la obra y el beneficio empresario,
gislaci6n y en la prictica nacional) en cabeza de la autoridad con la capacidad contributiva de determinados administrados. No
administrativa competente en cada caso, si bien es cierto que la obstante ello, por razones pricticas tambikn en este hltimo cam,
concesionaria puede, circnnstancialmente, beneficiarse con ciertas
prerrogativas pliblicas. como la expropiatoria, en 10s tkrminos de 5 Marienhoff, ob. cit., Trot& ..., t. 111-B, p. 530: "Con a c i e ~ ose
la ley 21.499. i
dijo que es el mod0 de iemuneracibn lo que distingue el conbato de obra
No obstante ello, esta limitada delegacidn mantiene su im- phblica de la concesidn de abra pliblica (cita a Waline y a Garrido Falla)
y que la concesidn de obra pliblica no es otra cosa que un contrato de obra
poltancia dentro de la estructura econbmico-financiers del contra- pliblica donde el empresario es remunerado en una forma particular.. .".
to. En definitiva, como serit destacado en 10s parigrafos siguien- Tambikn Escola, ob. cit., Tratado integral. . ., t. 11, p. 302; Diez, ob. cit.,
tes, la delegacibn, en este caso, no es mis qne un medio instru- Derecho administmtivo, t. 111, ps. 126/127.
mental para facilitar una determinada forma de financiaci6n de Marienhoff, ob, cit., T r a t d o . . ., t. 111-B, p. 530.
CONCESI~N
DE OBPA P ~ B U C A POR PEAJE 313:

se habla d e erplotacwn de la obra, no resultando de mayor im- citaci6n que puede concluir en un verdadero concurso de pro-
portancia la profundizaci6n de la distincibn, sin perjuicio de CO- yectos vinculado necesariamente a la posterior licitaci6n del con-
incidir con la acertada critica de Marienhoff '. trato.
Asi, la ley 9254 de la provincia de Buenos Aires, a1 igual q u e
la ley nacional 17.520, aunque la primera con uoa mejor estruc-
tura, distingue clarameute 10s dos sistemas baio 10s cuales puede
seleccionarse al contratista d e una futura concesi6n de obra p6-
blica.
La concesi6n de obra phblica por peaje, en tanto que dele- En st1 art. 3e establece que el contrato, cuando su proyecto.,
gaci6n impropia, es el sistema de ejecuci6n de una obra phblica se deba a iniciativa del Estado provincial, deberi ser celebrado
en virtud del cual la Administraci6n titular de la competencia previa licitaci6n pliblica. Este principio es imperativo (aunque
para ejecutar tal obra phblica contrata con un tercero la cons- la ley utiliza el tkrmino 'podri"), con dos hnicas excepcioues: l a
trucci6n de la misma, asi como tambikn lo inherente a su conser-
primera la establece la misma ley (art. 30, ap. b ) de la ley 9254
vaci6n o mantenimiento durante un lapso determinado, difiriendo
y art. 4" ap. b ) , de la ley 17.520) y ocurre cuando se decida
el pago del precio del contrato para el momento de explotaci6n
de esa obra phblica. Asimismo, el precio de la obra, en cuanto otorgar la concesi6n a un ente phblico o a una sociedad con
a su pago y cantidad o monto, sufre dos tipos de determinaciones capital estatal (que tambi&n es un ente phblico, naturalmente),
relativas: desde un punto de vista subjetivo, el precio sera pa- caso en el que est& permitida la contrataci6n directa. Se ad-
gad0 por 10s usuarios de la obra; objetivamente, el precio se ver& vierte aqui la posibilidad de la figura de la delegaci6n propia,
directamente afectado por el resultado de la explotaci6n de la en la que la Administraci6n competente delega a un ente des-
obra, desvinculindose relativamente de 10s costos inherentes a su centralizado, de la misma o distinta jurisdicci6n administrativa,
ejecuci6n. 5 el encargo de ejecutar la obra bajo el sistema de concesi6n. Pero
muy dificilmente el delegado (estatal en el caso) sea a la vez el
Se aclara desde ya, aunque m h adelante se volveri sobre el
constructor de la obra, por lo que contratara con un tercero ad-
tema, que estas determinaciones son sblo relativas, por cuanto
ministrado la ejecuci6n de 10s trabajos, rigiendose este contrato
ni el deudor u obligado al pago del precio del contrato es, en
por la ley 13.064 o las respectivas leyes provinciales de obra ph-
sentido estricto, el usuario de la obra, ni el monto de ese prccio
blica y respetando, tambibn, la regla general de1 previo proce-
depende ineludiblemente del resultado de la explotaci6n de la
dimiento de licitaci6n phblica.
obra pues, por la naturaleza del contrato, la inversi6n soportada
por el constructor no pod& ser dejada de reconocer (cuando n o La segunda excepci6n a la regla de la licitaci6n phblica, aun-
est4 cubierta por la explotaci6n) por la Adrninistracidn Phblica, que no la prev4 la ley de concesi6n, es la licitaci6n privada,
a cuyo patrimonio la obra se incorpora. "cuando realizada una licitaci6n no haya habido proponentes o
En cuanto a1 procedimiento de selecci6n de contratista, en no se hubiesen hecho ofertas convenientes", como reza el art. go,
la contrataci6n de obras phblicas por peaje es posible la existen- ap. e ) de la ley provincial 6021 y, con redacci6n similar, el art. 90,
cia de una etapa previa de discusidn d e las bases de la futura li- ap. i) de la ley 13.064. Entiendo que las otras causales que da-
rian lugar tambMn a la aplicaci6n del procedimiento de la lici-
taci6n privada, seglin lo establecido en las leyes citadas, no son
7 Ilbid., p. 529: "En este Gltimo supuesto (contribuci6n de mejoras) no aplicables a1 contrato de concesi6n d e obra phblica. Se trata, en
hay explotacidn alguna de la obra por parte del concesionario, pues la obra
ambos regimenes normativos, d e causales excepcionales -situa-
pasa a poder del Estado --quien se recibe de ella- tan pronto como es reali-
zada a terminada, sin aguardar a que el concesionaria obtenga que 10s ad- ciones imprevistas o de urgencia, reserva por razones de seguri-
ministrados le efectfien el pago; Cste se gestiona posteriormente". dad del Estado, capacidad especial en el constructor, bajo mon-
CONCESI~N
DE OBRA PGBLICA POP. PEAJE 315

to- que en ninglin caso pueden justificar la ejecuci6n de una regirin la futura licitaci6n y contrato para la concesi6u de obra
obra bajo el sistema de concesi6n de obra pliblica. pliblica de que se trate. En este caso, lo 6nico que la Adminis-
El art. 40 de la ley provincial 9254 (como el art. 40, ap. c ) de traci6n acepto con relaci6n a la sugerencia original del adminis-
la ley 17.520, en el orden nacional) contempla un supuesto ab- trado proponente fue la decisibn de realizar una determinada obra
solutamente distinto. En este caso la iniciativa de realizar la pliblica (cuya ejecuci6n la Administraci6n podria ni siquiera haber
obra por el sistema de concesi6n por peaje parte de una empresa .considerado antes de la presentaci6n de la propuesta) y la con-
-privada, quien lo propone, junto con 10s estudios y proyectos ne- veniencia y factibilidad del sistema de concesi6n por peaje para
cesarios, incluyendo las bases para el llamado a licitaci6n, a la .ese caso.
Administraci6n competente. Los proyectos de 10s concursantes competirin con el del pro-
Se inicia aqui un procedimiento de negociacibn directa en- ponente original, quien, inclusive, podria renunciar a su propuesta
tre el proponente y la Administracibn, la que, finalmente, decidirh ,original y concurrir en un pie de igualdad con 10s otros partici-
entre llamar a licitaci6n pi-blica con las bases propuestas por el pantes, pues no hay disposici6n alguna que le prohibaesta elec-
ci6n, aunque en este caso perder6, sin duda, su derecho de pre-
administrado ( y con las modificaciones surgidas de esas tratati-
ferencia. Precisamente, el oferente original, si mantiene dicba
vas previas) o bien convocar a un concurso pliblico para la pre-
propuesta, conserva en el concurso de proyecto su derecho de pre-
sentaci6n de proyectos.
ferencia, tanto es asi que las normas comentadas disponen que se
Naturalmente, la Admiuistracih podr& tambikn decidir la podrh contratar (la concesi6n) directamente con 61, salvo que se
no ejecuci6n de la obra, o bien su realizaci6n por el sistema de presentaran mejores ofertas. En este bltimo supuesto, la Admi-
contrato de obra p6blica propiamente dicbo, dado que de ninguna nistraci6n podrh convocar a licitaci6n pliblica o privada (segi-n
manern se encuentra obligada por la propuesta presentada por que estime que podri baber nuevos oferentes, o que s61o licitarin
el administrado, que no es mhs que una sugerencia comercial que 10s que participaron en el anterior concurso, a 10s que se deberh
puede ser total o parcialmente desechada. Claro que, de admi- invitar especialmente) y adjudicari la oferta mis conveniente res-
tirse la propuesta, la Administraci6n deberi respetar, a1 decidir petado el derecho d e preferencia del ganador del concurso de
la adjudicaci6u en la futura licitaci6u pliblica, el derecho de pre- proyectos, sobre cuya propuesta se realiz6 esta convocatoria a li-
ferencia en el administrado que propuso el proyecto original, ya citaci6n pi-blica o privada.
que si bien la ley no lo establece expresamente para este caso, De mis esth decir que el concurso de proyectos a que se hizo
ello surge de su context0 y de un elemental deber de buena fe. ~efereuciano es independiente de la licitacibn posterior, es decir
Pem dqu6 ocurre con este derecho de preferencia en el supuesto no origina ningi-n coutrato distiuto que el de concesibn a1 cual
de que la propuesta sea s6lo admitida parcialmente? Para re- se refiere, ni ninglin otro derecbo en 10s concursantes, indepen-
solver esta cnesti6n habri que estar a la naturaleza de las modi- ,dientemente del derecho a que se realice una correcta selecci6n,
ficaciones introducidas y a la participaci6n del administrado en mhs que el de preferencia para aquel cuyo proyecto fue selec-
las mismas. Si tales modificaciones no son esenciales con rela- cionada.
ci6n a1 proyecto original, o bieu si la participaci6u del adminis-
trado fue determinante en la elaboraci6n de tales modificaciones,
el derecho de preferencia subsiste. Se da aqui la misma raz6n $ 49. CONCI?SI~N POR PEAJE Y CONTRATO DE OBRA P ~ B U C A
de buena fe que la mencionada en el caso anterior.
Como fue dicho antes, la Administraci6n podrh optar por El anhlisis de las diferencias y puntos de contact0 entre estos
convocar a un concnrso pliblico para la presentaci6n del proyecto dos coutratos es una cuesti6n de especial importancia, pues ayu-
(que se regiri par las reglas de la Iicitacibn pliblica en lo que re- dari a determinar la verdadera naturaleza juridica de esta con-
.suite pertinente) cnyo objeto seri la redacci6n de las bases que cesi6n por delegaci6n impropia.
CONCESION
DE OBRA P ~ B L I C APOR PEAJE 317

En nuestra priictica administrativa, mas all& de la excesiva


En la doctrina italiana, como ya se ha anticipado (supra, parquedad de las ya citadas leyes 17.520 y 9253, pueden encon-
$ 45), se distingue la concesibn de "construcci6n y ejercicio de la trarse elementos que confirman el anilisis hecho por el destacado
obra" de la "concesi6n de sola construcci6n", siendo esta liltima la autor italiano.
que miis se asemeja a la aqui llamada concesi6n por delegaci6n En el aiio 1977 la Municipalidad de la Ciudad de Buenos
impropia. La principal semejanza radica, precisamente, en que Aires llam6 a licitaci6n pliblica (que en este momento es un con-
en ambas (concesibn de sola construcci6n y concesi6n par dele- trato adjudicado y formalizado y en plena ejecuci6n) 'para la
gaci6n impropia) el concesionario es el ejecutor material de la concesi6n de obra ~liblica por el sistema de peaje . . . para la
obra, aunque en la figura italiana el sistema de pago (que nor- construcci6n, conservaci6n y explotacibn de la obra Autopista
malrnente sera diferido) puede independizarse de la explotacidn 25 de Mayo (AU 1 ) y Autopista Perito Moreno (AU6)" (art.
d e la obra. 1 . 1 . 1 del Pliego de Condiciones del Contrato, PCC).
Esta referencia a la doctrina italiana permite analizar, auu- Entre las obligaciones del concesionario, que a la vez es el
que mAs no sea sumariamente, la posici6n adoptada por Cian- constructor de la obra, se encuentra la de presentar a la muni-
flone, quien ha efectuado un importante estudio de la cuesti6n. cipalidad, para su aprobaci611, el plan de trabajos, proyecto defi-
Este autor parte de considerar, como el punto principal de nitivo y otros planos constructivos, 10s que ~610podrAn utilizarse
las similitudes entre el appalto y la cuncessime di sola costwio- en obra, previala aprobaci6n expresa o tacita por parte de la
ne, el hecho de que en ambas figuras la actividad del cocontra- concedente (art. 11.2 y complementarios). La municipalidad de-
tante d e la Administracibn se centra ~rincipalmente en la cons- signs en obra a su propia Inspecci6n de Obra, estableciAndose que
trucci6n de la obra, lo que provoca que, en lo que respecta a la "el concesionario deberii cumplir y atenerse estrictamente a las
ejecuci6n misma de la obra, el papel del concedente (en parti- instrucciones y directivas de la Municipalidad sobre cualquier cues-
cular con relaci6n a las prerrogativas de direcci6n y control) sea ti6n relacionada o concerniente a las obras . . . el concesionario
igual que en el caso del appalto *, lo que en nuestro derecho se recihira esas instrucciones y directivas bnicamente de la Munici-
encuentra expresamente previsto en el liltimo pirrafa del art. 4° palidad o de la Inspecci6n" (art. 2 . 3 . 1 ) . La correspondencia
de la ley 17.520: "En todos 10s cmos debercin respebse, en cunflto. entre la Inspecci6n de Obra y el concesionario se realiza a travks
a la etapa de construccwn, las normas legales establecidas pam! de 10s libros de "Ordenes de Servicio" y de "Pedidos del Conce-
el contrato d e obra pliblica, en todo lo que sea pertinente". sionario", emanados, estos liltimos, del representante tAcnico del
Sin embargo, Cianflone insiste en mantener la distinci6n ya concesionario, y "toda orden de servicio se entendera dada den-
que la concesi6n supera, en si misma, el contenido del acuerdo tro de lo estipulado en el contrato y queda obligado el conce-
constitutivo del appalto, encontrbndose en la primera otras obli- sionario a cumplirla de inmediato" (art. 2.3.2). Otras disposi-
gaciones colaterales y adicionales, en gran p a ~ t ede riaturaleza ciones del PCC establecen que "El concesionario estari obligado
instrumental, que sou extracas a1 contrato de uppalto propiamen- a aceptar las modificaciones en 10s trabajos que le fueran ordena-
te dicho. Esto lo hace calificar a la concesi6n de sola construc- 40s por la inspecci6n de Obra, siempre que esas 6rdenes le sean
ci6n como una "figura hibrida" en la cual es identificable un as- dadas por escrito y no alteren las bases del contrato" (art. 2.3.2);
pecto principal y prevalente qne la asemeja con el appdto, a1 'Za h4unicipalidad o la Inspecci6n tendriin facultades para im-
cual, secundariamente, se le nnen elementos de derecho pliblico pugnar y para exigir a1 concesionario el retiro inmediato del em-
tipicos de la estructura organizativa que caracteriza a las con- plazamiento (de la obra) del representante o de cualquier otra
cesiones administrativas %. persona empleada por el concesionario o cualquier subcontratis-
ta, que a su juicio observara mala conducta, incornpetencia, ne-
gligencia o que por cualquier otra causa fuera considerado in-
8 Cianflone, A,, ob. cit., L'appnlto.. .. p. 178 deseable. Dicha persona no podrii ser nuevamente empleada en
g Ibid., p. 183.
,
CONCESI~N
DE OBRA P ~ B L I C A POR PEAJE 319.

relaci6n con esta concesibn" (art. 2 . 3 . 5 ) . Siempre en orden a. a ponerlas en prllctica en cualquier momento sin necesidad de
asegurar estas prerrogativas de direccibn y control reservadas por esperar a1 final de 10s trabajos" (art. 11.18.2).
la concedente, se establece que "En 10s plazos y forma que indi- Las obras contratadas pueden ser tambibn ampliadas "hasta
que la Municipalidad el concesionario entregarh a la Inspecci6n un costo no mayor del 20 % del valor de las obras originales.. ."
de Obra la informaci6n q u e se le requiera con relacibn a1 perso- (art. 11.22. l ) , previendo tambikn el contrato un sistema de re-
nal y nimero de las distintas clases d e obreros y empleados, asi cepci6n d e las obras en el que la municipalidad con la asistencia
como tambikn del equipo que a ese momento emplee en cone- de la inspecci6n cornprueba que "las mismas se ajustan a 10s pro-
xi6n con el contrato. . . " (art. 11.12. I ) , como tambikn que "Todos yectos y demis especificaciones tkcnicas. . ." (art. I1.20.3), cum-
10s materiales y la ejecuci6n de 10s trabajos deberin ser de l a plido lo cual la concedente fijari la fecha de habilitaci6n de las
calidad prevista en el contrato y acordes con las instrucciones antopistas
impartidas a1 respecto por la Municipalidad o la Inspecci6n d e Naturalmente, todas estas disposiciones, mis all6 d e cualquier
Obra. . ." (art. 11.13.1); "La Municipalidad y la Inspeccibn d e argumentacibn doctrinaria, tienen su razbn de ser fundamental:
Obra, asi como cualquier persona autorizada por ellas, tendriu a la concedente, duefia d e la obra y gestora del interbs pitblico,
acceso permanente a1 emplazamiento, a 10s obradores y a todos le interesa mucho m i s la correcta ejecucibn de la obra (magni-
10s talleres y lugares donde el trabajo pudiere hallarse e n prepa- tud, calidad, utilidad para semir a1 destiuo fijado) que las alter-
racibn y el concesionario prestari toda su ayuda para facilitar nativas que podrin producirse durante su explotaci6n. Esto, so-
el uso de este derecho de acceso" (art. 11.14.1). Tambikn se bre lo cual se volverh mlls adelante, es lo que obliga a establecer
deberi solicitar la autorizaci6n d e la Inspecci6n "antes d e pro- en el pliego, que luego tendri jerarquia contractual, uu cuidadoso,
ceder a1 hormigonado de 10s distintos elernentos estructurales" sistema de control en cuanto a la bondad de la ejecuci6n de 10s
(art. 11.15.1), y "La Inspeccibn durante la ejecucibn de las obras trabajos, independientemente de la incidencia que esta circuns-~
tancia tenga sobre el resultado econ6mico de la explotaci6n.
estari autorizada para ordenar el retiro del emplazamiento d e
materiales inadecuados y su reemplazo por 10s indicados en su Precisamente por lo expuesto, e n el caso analizado, se quiso-
antes que nada contratar con un constructor, con antecedentes su-
caso, asi como tambikn la remoci6n y reejecuci6n correcta, a pe-
sar de cualquier ensayo previo, de cualquier trabajo que, a juicio ficientes en la ejecuci6n d e obras d e similar importancia, que-
de la Inspecci6n d e Obra no estuviera acorde con 10s materiales dando 10s antecedentes relativos a la calidad d e concesionario
propiamente dicl~o,relegados a un plano de menor importancia.
y calidad d e ejecucidn previstos en el contrato" (art. 11.16.1).
Asi surge claramente d e la lectura del pliego para el "Con-
Se prevkn tambikn plazos para la termiuaci6n de las distin- cnrso nacional e internacional de mbritos, titulos y antecedentes.
tas etapas de las obras, establecibndose penalidades en caso de in- para la precalificaci6n d e proponentes a la licitaci6n", para la
cnmplimiento. Pero tambikn en esto se manifiesta una impor-
concesi6n d e la obra analizada.
tante prerrogativa en el concedente.
En este concurso, por el cual se habilit6 a 10s interesados a
"Si el ritmo de ejecuci6n de las obras fuera, a juicio de l a ofertar en la licitaci6n propiamente dicha, se establecieron dis-
Municipalidad o de la Inspecci6n d e Obra, demasiado lento para posiciones como las siguientes: "El proponente deberi enumerar
asegurar la habilitaci6n de las mismas en el plazo ofrecido pre- y describir 10s trabajos d e la especialidad realizados en 10s 61ti-
visto o dentro del plazo prorrogado par alguuo d e 10s motivos mos cinco aiios. .. Se tendrin especialmente en cnenta (y no
contemplados en este pliego, la Municipalidad por si o a indica- e.;clusisamente en cuenta) 10s trabajos contratados conforme a1
ci6n de la Inspecci6n d e Obra impartiri las instrucciones nece- sistema de peaje" (art. 11.1.3.1); "El Proponeute deberi demos-
sarias para acelerar la marcha de 10s trabajos. Las medidas que, trar su competencia tkcnica mediante la presentacibn de cons-~
a tal fin, ordene la Municipalidad no serin recurribles. L a Mu- tancias que acrediten. .. que ha ejecutado trabajos de anllloga
nicipalidad podrh adoptar tales medidas y obligar a1 concesionario importancia y naturaleza d e 10s que se licitan, presentando una-
CONCESI~N
DE OBRA P ~ B L I C A POR P E A J E 321

n6mina de su personal profesional tkcnico y d e conducci6n de


I tema se encuentra estructurado en funci6n d e otra base o presu-
obras.. ." (art. 11.1.3.2); "Se consignari en una planilla un lis- 1 puesto del negocio juridico, que es la delegacidn transestructurd.
tad0 del equip0 y elementos mecinicos que el oferente dispondri Nos encontramos asi frente a una realidad juridica que es
para la realizacibn de 10s trabajos.. ." (art. 11.1.3.5). mucho mis que una simple caracteristica diferenciadora: se trata
Contrastando con estas ( Y otras que no importa transcribk) de la naturaleza misma del contrato. Es que la Administracidn
exigencias de antecedentes directas coma empresa constructors ca- Pliblica, titular de la competencia, quiso transmitir en cabeza de
pacitada para l a ejecuci6n de una obra d e la importancia de la un administrado determinadas, aunque limitadas, prerrogativas.
licitada, para la calidad d e operudor de la obra durante su pe- I En algunos casos serh la confecci6n del proyecto definitive de la
riodo de explotaci611, el pliego es mucbo menos exigente: "Si el obra (lo que es excepcional en el contrato de obra pliblica), en
proponente no tuviera antecedentes e n trabajos por el sistema d e otros casos la calidad de expropiante d e 10s inmuebles sobre 10s
peaje, debcri acreditar febacientemente que recibiri el debido que se ejecutari esa obra, excepcionalmente ciertas competencias
-asesoramiento para encarar este aspect0 d e la obra.. .' (la bas- policiales, per0 siempre el cometido d e gestionar la financiaci6n
iardilla es agregado, art. II.1.3.2., i n fine. Claro que, el pliego d e la obra y d e percibir de sus usuarios el pago de un tributo
lo indica muy bien, se trata de un aspecto de la obra (es de SU- direct0 y exclusivamente destinado a1 pago del valor d e la obra
poner que quiso decir contrataci6n), de gran importancia, es cier- (incluyendo el costo d e financiaci6n y el beneficio empresario),
to, pero no el mhs importante, porque el mis importante no es aunque no necesariamente compensatorio d e ese valor. En estos
!
sino la correcta ejecuci6n de la obra, coma ya fue dicho. dos Gltimos aspectos, generados a partir d e la delegaci6n trans-
Naturalmente que otras licitaciones para ejecutar obras pli- I estructural de cometidos, es posible encontrar la raz6n y sentido
! del contrato de concesi6n de obra pliblica (tanto en la delega-
blicas par el sistema d e concesibn por peaje pueden tener regu- j
laciones diferentes, per0 muy dificilmente descuiden este aspecto I ci6n propia coma en la impropia): la necesidad de la Adminis-
fundamental de la construcci6n de la obra, a1 menos si se respeta I tracidn, por razones d e organizaci6n interna y por razones presu-
lo establecido en el art. 4? in. fine d e la ley 17.520, que fue puestarias, de transferir esos cometidos a1 sector privadolO. Bas-
transcrito mAs arriba. t e considerar que, aun cuando la concedente (p. e;., el Estado na-
En este estado es posible volver sohre el anilisis d e la rela- cional) avale la financiaci6n obtenida por el contratista-concesio-
ci6n entre el contrato de concesi6n d e obra pliblica y el contrato I nario, que es el caso habitual, 10s riesgos contingentes no se con-
d e obra pliblica. En ambos contratos el objeto principal y de- tabilizan en el presupuesto general. Asi se tendri una fbcil y
terminante es la ejecucidn de la obra, es decir la ejecuci6n del ripida idea de la gran flexibilidad que este sistema le otorga a
trcltxijo pirblico (ver supra, Cap. 11, § 10) que conducirb a la la Administraci6n para ejecutar obras pliblicas sin verse limitada
obra terminada. Esta realidad liga ambas figuras con lazos por trabas presupuestarias, muchas veces impuestas por 10s orga-
muy fuertes pudikndose predicar de la concesi6n de obra. pliblica nismos internacionales de crkdito pliblico.
todos 10s elementos principales que haceu a1 contrato d e obra pli- Claro que estas consideraciones no independizan absoluta-
blica, particularmente en lo que respecta a l a etapa de ejecuci6n mente a1 contrato de concesi6n de obra plblica por peaje, con-
en si misma.
L a principal diferencia reside en el pago de la contrapresta-
10 Veimeglia, G., ob. cit., Concessioni autostradali. . ., p. 133:
ci6n en favor del constructor, ya que en la concesi6u kste se pro- "I1 ricorsa a110 strumento della concesione i: dettato dalla esigenza di
duce por una 7775 instrumental (ya se ver& la trascendencia de con- non addossare a1 hilancio il carico ed il rischia della operazione finanziaria;
siderarla de esta manera) especifica e incomparable con el sis- si i: inteso sostanzialmente irtituire delle gestioni fuori bilancio trasferendo
tema d e retribuci6n y pago en el contrato de obra phblica. a d wn terzo l'obbligo di prowedere a1 finanziamento a mezzo prestiti delle
opere programmate (alla societi dell?RI o a terzi che n e facciano richiesta
Pero aunque este sistema retributivo se hate s61o d e una via per la realizzazione di quelle residue autostrade di pi& rnarcato interesse
instrumental, n o es simplemente un dato accesorio, pues tal sis- locale)".
CONCESI~N
OE OBRA P ~ B L I C APOR PEAJE 323

virtikndolo en un tipo contractual desvinculado del rLgimen el concesionario-constructor percibe su remuneraci6n tambikn en
juridico de la obra p6blica. Por el contrario, es parte de ese relaci6n directa con el avance de la obra, si bien, dentro del es-
regimen juridico (lo que hay que recordar en el morrento de quema formal-instrumental del contrato aparece como si dicho
resolver conflictos e interpretar normas contractuales) y como constructor pagara l a obra con fondos propios (aunque obtenidos
tal, sblo una subespecie de 10s sistemas de ejecuci6n de las obras de 10s terceros prestamistas) que recupera con el producido d e
pliblicas, tal como surge de la clasificacibn expuesta en supra, la explotaci6n de la obra o de 10s pagos efectnados por 10s ad-
Cap. V, $34. ministrados beneficiarios de la obra en cuestibn.
MAS adelante se analizari en profundidad este importante
punto. De todas maneras, aun desde su perspectiva meramente
instrumental, queda claro que el mecanismo d e financiacibn d e
la obra, en el sistema de concesi6n, forma pade de 10s elernentos
En el parigrafo anterior se ha visto que, por su naturaleza esenciales del contrato, siendo una de sus caracteristicas m4s.
misma, la concesidn de obra por peaje (tambMn en el caso de sobresalientes.
contribuci6n de mejoras) se caracteriza por la delegacibn en el
concesionario del cometido de gestionar la financiaci6n de la obra
-es decir la ohtenci6n de 10s recursos econ6micos requeridos $ 51. LA E C U A C I ~ N ECONOMICOFINANCIFRA
para afrontar las inversiones necesarias para su ejecuci6n- y de
percibir de 10s usuarios de la misma ( o de 10s beneficiarios. en el La trascendencia de la modalidad apuntada en 10s parigrafos
caso de la contribucibn de mejoras) el tributo, generalmente fi- anteriores hace que lo que se ha dado en llamar en la prhctica
jado de manera unilateral, par el mismo concedente. "la ecuaci6n economicofinanciera" de la concesi6n sea uno de 10s
Esta caracteris6ka impone una importante diferencia con presupuestos de la contrataci6n.
relacibn a la modalidad de pago habitual en el contrato de obra La misma ley 17.520,en su art. 39, se refiere a la cuesti6n
pliblica. Mientras en estc liltimo el pago de la remuneracibn del (aunque con relaci6n a las modalidades de la concesi6n -gra-
constructor se realiza, como se verh en el lugar oportuno, en re- tuita, onerosa o subvencionada- que serin analizadas mis ade-
laci6n directa con el avance d e la obra, en la concesi6n dicha lante), seiialando que se deberi considerar la relaci6n enhe el
remuneraci6n se percibe, en principio, con el producido de la nivel medio de las tarifas previstas con el "vale?. econdmico medw
recaudacibn de 10s tibutos ingresados por 10s usuarios o benefi- del seraicio ofrecido", del que aqukllas no podran exceder. Li-
ciarios y, por lo tanto, a posteriori de la finalizaci6n de la obra, mitado asi el valor de la tarifa, se analizari tambiBn "la rentaM-
sin perjuicio de las modalidades particulares que pueda preverse lidad de la obm, teniendo en cuenta el trdfico presunto, el pago
en cada contrato: anticipos efectuados por el concedente; pagos, de la amortizacidn d e su costo (de la obra), de 10s intereses,
tambikn aoticipados, de 10s beneficiarios (en la contribucihn de beneficio y d e los fastos de conservaci6n y d e explotacidn" (art.
mejoras), etcktera. 3O, inc. 20, ley 17.520). De manera similar se encuentra redac-
Esta circunstancia hace que, de manera mucho mas marcada tad0 el art. 29 de la ley 9254 de la provincia de Buenos Aires.
que en el contrato de obra pbblica propiamente dicho (donde la En este texto legal se encuentra entonces la descripci6n del
financiacibn es un aspect0 del costo que tiene que tener en cuen- contenido de la ecuacibn economicofinanciera en la concesi6n de
ta el con:tructor), en la concesibn el esquema financier0 del con- obra p6blica: la explotaci6n de la obra, en un determinado nivel
trato se convierta en uno de 10s elementos deteminantes del de uso y a una tarifa dada, debe permitir, en el nhmero de aiios
negocio juridico. por 10s que se otorga la concesi6n, afrontar 10s vencimientos de
Pero, es importante aclararlo, esta caracteristica es mbs una las cuotas de capital e intereses de 10s prhstamos por 10s fondos
apariencia instrumental que una realidad sustancial. Es decir, invertidos en la construcci6n, solventar 10s gastos de conservacibn
CONCESI~N
DE OBRA P ~ R U C A POR PEAJE 325

y explotaci6n y generar un razonable beneiicio empresario. Es tante y corroborado, o m&s bien complementado, por 10s oferentes
comlin que esta ecuaci6n econ6mico-financiera integre el conteni- Esto es lo que ocurri6 en la ya citada licitaci6n para la cons-
do de las ofertas en la licitacibn respectivan, sin perjuicio d e su trucci6n por concesi6n de las autopistas 25 d e Mayo y Perito
reelaboraci6n o ajuste en la medida en que se determinen nuevas Moreno, donde la administracibn municipal habia elaborado u n
variantes una vez formalizada la contrataci6n de la obra. primer proyecto tkcnico de la obra, incluyendo toda la informa-
Naturalmente que una buena planificaci6n de una futura ci6n tbcnica relativa a su factibilidad (fundamentalmente estu-
obra pliblica por concesibn por peaje requiere de la existencia de dios sobre la magnitud de trinsito) y determinado el valor d e la
esta ecuacion -que 10s italianos llaman "proyecto financiero" tarifa y su f6rmula d e reajuste, debiendo s610 el oferente (ade-
(piano finenziario) -, ya sea bsta elaborada por la concedente o mhs de acreditar sus antecedentes, como ya se sefialh) indicar el
por 10s postulantes a la concesi6n, es decir que este documento nlimero de aiios de la concesi6n, es decir el tiempo d e amortiza-
debe fomar parte d e la documentaci6n licitatoria o debe estar ci6n de las inversiones, incluyendo 10s costos de conservaci6n y
contenido en la propuesta de 10s oferentes. Esto es asi aun en explotaci6n, el reinteg~o de 10s valores devengados por las ex-
10s casos en que tal proyecto financiero no figure en la docu- propiaciones realizadas (que fueron llevadas a cab0 y pagadas
mentaci6n licitatoria ni se exija a 10s oferentes. D e todas mane- las indemnizaciones por la misma municipalidad), el beneficio
ras estari implicitamente elaborado por la Administraci6n lici- empresario y la participaci6n del concedente sobre 10s ingresos
provenientes de la explotaci6n. De esta manera, complementan-

11 Tal es el caso del "Pliego de bases, condiciones generales y particu-


lares para la licitaci6n de la construcci611, conservacibn y explotacibn d e la terno. En este caso, la financiacibn deberi ser expresada en d6lares esta-
autopista: Accesa Oeste a la ciudad d e Buenos Ares por el sistema de la dounidenses.
ley 17.520", elaborado por la Direcci6n Nacional de Vialidad en el a50 1980, 5 . 2 . 7 . 1 . 2 . El Comitente se compromete a obtener del Banco Cen-
que sirvi6 d e base para el llamado a licitaci6n para la adjudicaci6n de la tral de la RepSblica Argentina la se~uridadnecesaria para transferir 10s im-
concesi6n indicada (no adjudicada a1 mamento de esta redaccibn) cuya porter que pudieren requerir para abonar las abligaciones contraidas par el
parte pertinente se transcribe a continuaci6n: Concesionario en el exterior.
"5.2.6. El volumen de la inversi6n total d e la autopista, que seri Asimismo, el Concesionario d e b e d dar cumplimitnto a las normas deI
calculado mediante la agregaci6n d e las siguientes partidas: costos de estu- Banco Central d e la RepSblica Argentina u organismos competentes sobre
dios t&cnicos, econ6micos, financieros y contables; costos d e proyectos, costos aportes transitorios de capital extranjero (ver Circular RC 703).
d e construcci6n de la obra e instalacidn para s u funcionamiento; costos d e las 5 . 2 . 7 . 2 . El Plan econ6mico financiero citado contendri bisicamente
ampliaciones, si correspondiere, rnencionadas en el punto 5 . 2 . 4 . de esta lo siguicnte:
Base; costos d e inspeccibn, direcci6n y administraci6n de obra; costos finan- 5 . 2 . 7 . 2 . 1 . Presupuesto de la inversi6n total, segSn lo descripto en
cieros e impositivos durante el period0 d e construccibn; y en general costos
d e todas 10s bienes y servicios, cualquiera fuera su naturaleza que sea ne- i el punto 5 . 2 . 6 . de esta Base Quinta, discriminado por rubros y por aiios.
5 . 2 . 7 . 2 . 2 . El presupuesto d e gastas d e administraci6n. explotacibn
cesario constmir, adquirir o contratar por estar directamente relacion'adas con I y mantenimiento, discriminado por mbro y por aiio.
las construcciones e instalaciones que sean necesarias realizar para la babili- I Se incluui coma gasto, 10s costos del seguro que cubra la destruccibn
total o parcial d e la autopista por todo riesgo, incluidos 10s de caso foltuito
t a c i h de la autopista en las condiciones de este pliego. I
El volurnen aparectri desconipuesto, anualn~ente, a 10s efectos qae ! o de fuerza mayor.
procedan y especialmente a 10s de constituci6n d e fianzas d e construcci6n y Se incluirin tambit-n 10s montos a abonar a1 Comitente seghn lo esta-
a 10s de desembolso de capital social, sin perjuicio d e lo previsto en el blecido en la Base Cuarta, punto 4 . 3 . .
Titulo I - "De la saciedad concesionaria", del Pliego d e Cliusulas Par- 5 . 2 . 7 . 2 . 3 . Un esquema financiero; 10s proponentes d e b e r b efectuar
ticulares. su presentaci6n formal en las planillas que integran el Anexo 11. pudiendo
i
5.2.7. Un plan econ6ir:ico-financiero del oferente e n el que se con-. ! acompa5ar toda otra documentaci6n que estimen canveniente. El esquema
creten 10s aspectos relativon tanto a1 capital social coma a la financiaci6n de corresponderi a1 periado comprendido entre la entrada en vigencia del con-
las inversiones y a las garantias d e su real efectividad. trata (fecha de notificacibn a1 oferente del decreto de adjudicacibn de la
5.2.7.1. La preparaci6n d e este plan se efectuari con arreglo a las
siguientes normas generales:
i concesibn) y el fin de la concesi6n.
5 . 2 . 7 . 2 . 4 . Monto d e 10s recursos ajenos y proporciones respecto a1
3 . 2 . 7 . 1 . 1 . La financiaci6n de la inversi6n podri ser de origen ex- total de la inversibn,
!
trativo, mas que como una condici6n emergente de la calidad del
vada que se encuentre obligada a realizar la obra encomendada
constructor.
por la Administracibn a carnbio de uu precio en dinero, y que
En cuanto a la capacidad necesaria para ofertar y celebrar
rehna, ademas de 10s requisitos generales de capacidad regidos
por el derecho civil, 10s requisitos especiales exigidos por el de-
! el contrato de obra phblica, ksta deberi ser valorada con arreglo
i a las nomas de derecho privado que sean aplicables a ese efec-
recho administrativo para este t i p de contratacibn. I pues en este sentido el derecho administrativo, como no po-
En nuestro derecho puede ser una persona fisica o juridica, i dia ser de otra manera, no establece reglas especiales para regular
sin necesidad (si bien en el segundo caso sera una situacibn na- la capacidad de las personas.
tural) de que organice su actividad en forma de empresa. Por supuesto, pueden ser sujetos cocontratantes de la Admi-
En otros regimenes juridicos, en cambio, esta liltima caracre- nistraciirn en un contrato de obra phblica tanto personas nacio-
ristica tiene una importancia determinada para la calificacibn d e nales como extranjeras, si bien estas hltimas con 10s requisitos
la naturaleza juridica del contrato. En el derecho italiano', p r
que se establezcan seghn el procedimiento de seleccibn de con-
ejemplo, se distingue el contrato de trabajo subordinado (nues- tratista seguido para la formalizacibn del contrato.
tro tipico contrato de trabajo) del contrato de trabajo autbnomo, El tratamiento de la inversibn extranjera esti regulado en la
en el que el deudor asume la obligacibn de cumplir con un de- ley 21.382, con las reformas introducidas por la ley 22.208. Esta
terminado resultado mediante el desarrollo de una actividad d e norma considera iuversor extraujero a "toda persona fisica o jud-
trabajo sin dependencia con respecto a1 acreedor. dica domiciliada fuera del territorio nacional, titular de una inuer-
Este contrato de trabajo autbnomo ~ u e d epertenecer a dos sidn de capital extranjero, y a las empresas locales de capital ex-
categorias fundamentales, seghn que el deudor produzca el re- tranjero .. ." (art. 2P, ap. 2) que es 'Otoda empresa domiciliada a
sultado mediante el prevalente desarrollo de su propia energia el territorio de la Repliblica, en la cual personas fisicas o juridi-
de trabajo o bien mediante la organizaciirn y direccibn del trabajo cas domiciliadm fuera de dl sean propietaria directa o indir~cta-
de otros, es decir mediante una organizacibn empresaria. El pri- mente de mds del 49 % del capital o cuenten directa o indirecta-
mer caso se trata del contrato de obra, mientras el segundo es el mente con la cantidad de votos necesarios para preualecer en las
contrato de appalto, que existe cuando "una parte asume, con mambleas de accionistas o reuniones d e socios" (art. 24 ap. 3).
organizzazione dei mezzi necessari e gestione a proprio rischio, En sentido estricto, la inversiiru de capital extranjero a 10s
il compimento di un opera o di un servizio verso un corrispettivo efectos de la ejecuciirn de contratos de obra no se encuentra
in danaro", como lo establece el art. 1655 del Cbdigo Civil italia- comprendida por el rbgimen de la ley 21.382, rigikndose p r 10s
no. En el appaltatore no se rcquiere, entonces, la actividad per- tkrminos de su propio contrato. Sin embargo, conforme lo auto-
sonal ni por ende ninguna calidad profesionalz, s610 se exige riza el art. 18 de la ley citada, el inversion.ista (que a la vez puede
su caricter de organ?racibn empresarial. ser ejecutor de la obra) puede optar por someterse a1 rkgimen
En nuestro derecho el concept0 de contrato de obra piiblica de dicha ley, en orden a gozar de sus especiales garantias rcferi-
engloba las dos figuras del contrato de obra y contrato de appzlto, das a la repatriaci6n del capital y beneficios, con lo cual deberi
con importantes limitaciones en cuanto a la asuncibn del riesgo inscribir su inversi6n en el registro creado para tal fin. En este
p r parte del constructor (que en el derecho italiano esG, en rea- caso, tal inversiirn requeriri la previa aprobaci6n del Poder Eje-
lidad, tambikn muy limitado), p e r ~esto liltimo como consecuen-
cia del rkgimen juridic0 exorbitante propio del derecho adminis- .
3 Escoln, oh. cit., Trotado integral. ., t. I, p. 309, Cianflone, ob. cit.,
p. 220. La "Ley de Bases de Contratos del Estado", en Espaxia, establece
ell su art. 97 que "&tin facultados para contratar con la Adrrrinistraci6n las
1 Cianflone, A,, L'appalto di opere pubbliche, Dott. A. Giufre Editore,
personas natnrales y juridicas, espaxiolas o extranjeras que, teniendo ~ l e n a
Milan, 1981, ps. 3/6. capacidad de obrar. . .".
2 Ibid., p. 31.
cutivo nacional, si de acuerdo con lo establecido en el art. 4e se nes deseen contratar con la Administracidn phblica son de orden
efectda, entre otras razones, en 10s siguientes sectores: defensa y penal, econ6mic0, disciplinario y Qtico4 .
seguridad nacional; prestacidn de servicios phblicos pastales, de En este sentido, a titulo de ejemplo, cabe citarse el art. 28
electricidad, gas y telecomunicaciones; radioemisoras y otros me- de la ley de Obras Pliblicas de la provincia de Mendoza, 4416,
dios de comunicacidn; energia; educacibn, siempre que (estimo que establece una inhabilitacidn para ofertar en el procedimiento
es la interpretacibn correcta) se trate de un contrato de conce- de seleccibn del futuro contratista de obra phblica, relativa a
sibn de obra pitblica (ver infra, Cap. VI), ya que de lo contrario aquellas personas fisicas o juridicas ". . .cuando alguno de sus
dependientes, apoderados, profesionales, socios o miembros de sus
el car6cter meramente esporidico y accidental de la inversidn,
suponiendo que ksta se limita a1 capital de trabajo para la simple brganos directivos sean funcionarios o tkcnicos que hayan inter-
venido en la preparacibn de 10s pliegos o llamado a la licitaci6n
ejecucibn de la obra, toma innecesario el resguardo de la previa
de que se t1-ate, o que tengan entre sus funciones la facultad d e
autorizacibn por el Poder Ejecutivo.
decidir en cualquier instancia las cuestiones que puedan surgir
de la presentacidn de las propuestas hasta la ndjudiracibn f i ~ a l .
Lo mismo ocurriri cuando parientes hasta el segundo grado d e
consanguinidad o afinidad de dichos funcionarios o tkcnicos sean
proponentes, miembros de 10s brganos directivos de kstos, desem-
Como se dijo en pirrafos anteriores, para p d e r asumir la peiien funciones ejecutivas para ellos, o tengan participacibn en
calidad de contratante de la Administracibn, en particular en un 10s resultados de la obra citada. En 10s casos en que se trate de
contrato de obra pcblica, ademis de 10s requisitos generales de obras llamadas a licitacidn durante la gestibn de 10s funcionarios
capacidad para obrar, el sujeto contratante debe reunir requisi- o tkcnicos, la prohibicibn se extended hasta un aiio despuks de que
tos especiales, aunque no referidos a su capacidad, regulados por &stos hayan cesado en sus funciones . . . Tampoco serjn conside-
la legislacibn administrativa. radas las propuestns de personas fisicas o juridicas cuando aque-
Estos requisitos han sido estudiados, par 10 general, forman- 110s que tengan algunn d e las vinculaciones citadas en el primer
do parte de las condiciones que deben reunir 10s oferentes que pirrafo de este articulo sean legisladores, gobernador, ministtos o
concurren a un procedimiento de seleccibn de contratistas. Sin subsecretarios, respecto del imbito del gobierno provincisl. o con-
embargo, ante las dudas doctrinarias acerca de la obligatoriedad cejales, inteudentes o secretarios respecto de la municipalidad de
de la Administracibn (centralizada o descentralizada) de contra- que se trate".
tar previo procedimiento de seleccibn, creo importante destacar En el orden nacional no existe legislacibn general sobre la
estos requisitos como exigibles en cualquier caso, aun en el su- materia, por lo que habri que remitirse a las regnlaciones esta-
puesto del contrato por libre eleccibn, sin perjuicio de 'que para blecidas en 10s pliegos que rijen cada uno de 10s procedimientos
cada contrataci6n en particular y en cada tip0 de procedimiento de seleccibn en concreto. Para las contrataciones ile surninistro
existan requisitos especiales regulados por las normas respectivas. de materiales o servicios destinados a obras pliblicas nacionales,
Estos requisitos especiales e s t h establecidos en las distintas en cambio, serA de aplicacibn supletoria lo establecido en el
legislaciones para regimenes nacional, provinciales y municipales Reglamento de Contrataciones del Estado, regulado por el Secre-
de obras phblicas, tambien en las normas que regulan la inscrip to 5720/72, conforme lo dispone el art. 3Q de esta reglamentacibu.
cibn en 10s distintos registros de contratistas, y en general ofre- En su inciso 49, reglamentario del art. 61 de la ley l e con-
cen gran semejanza entre si.
Las calidades para participar en 10s procedimientos de se- Florini, B. A., y Matz, I., Licit&& piblica, Abeledo-Perrat, Buenos
leccibn, y por consiguiente 10s requisitos que deben cumplir quie- Aires, 1972, pp.91.
Por razones de orden administrative se suele excluir a los
tabilidad, el Reglamento de Contrataciones del Estado establece culpables por la rescisi6n de contratos administrativos, en algGn
que no podr6n inscribirse en el Registro de Proveedores del caso a 10s oferentes que se han retirado mis de dos veces de la
Estado: concurrencia con pkrdida d e la garantfa, o bien a 10s adjudica-
a ) las sociedades e individualmente sus componentes y/o tarios que no concurren a suscribir el respective contrato. Es co-
miexbros del directorio, s e g h el caso, que estkn sancionados de m6n la exclusi6n de 10s deudores del Fisco.
acuerdo con 10s incisos 18 y 19 (suspensi6n en el registro) asi como ! En relaci6n con las prohibiciones d e indole Btica, se impide
tanybibn 10s cbnyuges de 10s sancionados, cualquiera fuera el ca- la participaci6n de 10s funcionarios pliblicos, generalmente alcan-
ricter con que pretendan inscribirse; zando esta prohibici6n a 10s parientes hasta el tercer grado, y el
b ) 10s sucesores de firmas que estbn sancionados cuando exis- dnyuge, y por una duraci6n que llega hasta un a50 despuks del
tieran indicios suficientes par su gravedad, precisibn, y concor- egreso del funcionario por cualquier causa.
dancia, para presunlir que media en el caso una simulacibn con el A lo expuesto cabe agregar las limitaciones contenidas en las
fin de eludir 10s efectos de las sanciones impuestas a las antece- ]eyes 18.875 y 22.460 en cuanto a la vinculacinn de consultores o
soras; empresas consultoras con empresas contratistas de obras pliblicas,
c ) 10s corredores, comisionistas, y en general 10s interme- i por lo que, de darse tal vinculaci6n, ksta seri un impedimento
diarios; 1i para participar en procedimientos de selecci6n y, por ende, ser
d ) 10s agentes del Estado y las finnas integradas total o par- parte de un contrato de obra phblica.
cialmente par 10s mismos; En el derecho cornparado eaisten similares regulaciones. Asi,
e ) las empresas en estado d e convocatoria de acreedores, en el antes citado articulo 9" d e la ley espaiiola de Bases de Con-
quiebra o liquidaci6n; tratos del Estado se excluye a quienes se encuentren comprendidos
f ) 10s inhibidos y 10s concursados civilmente; en algunas de las siguientes condiciones:
g) 10s representantes a titulo personal de firmas establecidas 1) Haber sido condeuados mediante sentencia firme o estar
en el pais; procesados par delitos de falsedad o contra la propiedad.
h.) 10s condenados en causa criminal. Sin embargo la Con- 2) Estar declarados en suspensibn de pagos, incursos en pro-
taduria General de la Naci6n podr& acordar la inscripcibn si, en cedimiento de apremio wmo deudores del Estado o de sus orga-
virtud de la naturaleza de 10s hechos, las circunstancias en que se nismos aut6nomos o haber sido objeto de sanci6n firme en dos
cometieron o el tiempo transcurrido juzgare que la condena no es o mis expedientes tributarios por defraudaci6n. En este hltimo
incompatible con Ia condici6n de ~roveedordel Estado; caso, la prohibici6n de contratar tendri una duraci6n de 5 alios
i) 10s deudores morosos del Fisco, declarados por autoridad a ~ a r t i rde la fecha en que sea firme la sancibn del hhkimo ex-
competente. pediente.
Signiendo la sintesis que hace Fiorini sobre el tema en an&- 3 ) Haber sido sancionado con caricter firme mediante acuer-
lisis 5 puede afirmarse que el impedimento por razones ena ales es do del Consejo de Ministros, por infracci6n administrativa en ma-
mneral contra 10s condenados par la justicia criminal, y en algu- teria de disciplina del mercado. La prohibicibn de contratar ten-
nas legislaciones tambibn contra 10s procesados. && una duraci6n de 5 aiios, a partir de la fecha en que sea
Las prohibiciones de naturaleza econ6mica excluyen a 10s firme la sanci6n impnesta.
quebrados, concursados civilmente e interdictos. En alghn caso, 4)Haber sido declarados en quiebra o en concurso de acree-
como se vio en 10s parrafos anteriores, tambib11 se excluye a quie- dores, mienh-as no fueren rehabilitados, o insolventes fallidos en
nes se encuentran en estado de convocatoria de acreedores. cualquier procedimiento.
5 ) Haher dado iugar, por causa de la que fueren declara-
dos culpables, a la resolnci6n firme, durante 10s 5 aiios anteriores,
que demuestre fehacientemente la naturaleza de la asociaci6n,
de cualquier contrato que hubieren celebrado con el Estado, sus
responsabilidades de las partes y sus porceutajes de participaci6n
organismos aut6nomos, o las entidades locales.
en la misma".
6) Formar parte del personal a1 servicio de la Administra- Esta introducci6n del tkrmino consorcio en el marco noima-
ci6n del Estado, de la administraci6n local, de 10s organismos tivo nacional, juntamente con su admisi6n como figura juridica,
aut6nomos o de las empresas pliblicas. se vio empaiiada por lo dispuesto en el art. 30 de la ley d e Socie-
7 ) Las empresas o sociedades de las que formen parte las dades 19.550: "Las sociedades andnimas y en comndita por ac-
autoridades incompatibles con arreglo a1 decreto ley del 13/5/55 eiones sdlo pueden formar parte de sociedarles por acciones" con
y demhs dispsiciones aplicables. lo que, teniendo en cuenta que gran parte de las empresas cons-
8) No hallarse debidamente clasificadas, en su caso, con arre- trnctoras de mayor tamaiio se encuentran constituidas como so-
glo a lo dispuesto en esta ley. ciedades an6nimas, se impediria la formaci6n de estos consorcios,
La ley comentada sanciona con la nulidad de pleno derecho 10s que ademis no estarian reconocidos como tales p r cuanto la
a aquellos contratos que se celebren con aquellas personas que ley de Sociedades adopt6 el criterio de la tipicidad (art. lo),
2.
carezcan de la capacidad de obrar necesaria o que e s t h incursas fulminando con la nulidad ". . .la constitucwn de una sociedad
en cualquiera de las prohibiciones del presente articulo". de tipos no autorizados por la ley. . ." (art. 17).
Pero esta normativa -aplicable a1 caso s610 en el supuesto..
de qne se admita que el consorcio es un contrato de sociedad,
lo que qued6 resuelto (por la negativa) con la ley 22.903- no
impidi6 que la prictica consorcial continuara, la mayor parte de
Es una prictica habitual en nuestro medio, y por cierto in- las veces impulsada p r 10s propios pliegos licitatorios, incluso en
licitaciones nacionales, que permiten expresamente. v en ocasio-
ternacionalmente, que la ejecuci6n d e las obras sea encarada por
L
. ,
nes exigen, la constituci6n d e consorcios de oferentes y de futuros
un conjunto de empresas que, aunque cada una de ellas se orga-
nice juridicamente bajo formas societarias, no constituyen una contratistas.
nueva sociedad distinta de las que integran dicho conjunto em- En algunos casos se trat6 de sortear expresamente la d f i u l -
presario. tad generada por la ley 19.550. Asi, para 10s llamados contra-
Esta ~ r i c t i c ano fue receptada en la ley de Obras Pliblicas na- tos de riesgo para la exploraci6n y explotaci6n de hidrocarburos,
A

cional, ni t a m p c o esti prevista en su actual proyecto de ley de la ley 21.778 estableci6 en su art. 24: "Exceptliase de lo dis-~
reformas. Si, en cambio, fue contemplada por otros cuerpos le- puesto en el art. 30 d e la ley 19550 10s contratos de asociacidn,
gislativos, de alguna manera vinculados al contrato que aqui se sociedades accidentales y t d a otra f o r m de vinculacidn o par-
analiza, independientemente de su reciente regulaci6n por la ley ticipacidn que celebren las sociedades andnirna o en comndita
22.903, que incorprh esta figura juridica a la ley de Sociedades por acciones -sea entre .sf o con empresm estatales- con el
19.550, en sus arts. 377 a 385. obieto de desarrollar tareas de exploracidn y explotacidn de hidro-
Asi, la ley 18.875 sugiere la idea del consorcio cuando obliga, carburos".
en su art. 89, a las empresas del exterior que concurran a licita- Como se ve, en el caso amba citado, el legislador no utilizh
ciones internacionales, a ". ..asociarse con empresas locales, y el tkrmino consorcio, aunque identific6 claramente la instituci6n.
siempre 9ue sea posible, con empresa locales de capital inter- Si lo him, en cambio, la ley de Consultoria 22.460 (sobre la natu-.
n o . . .". Su decreto reglamentario 2930/70, aclara que esa aso- raleza del contrato de consultoria, ver Cap. IV, 4 30), que lleg6,
ciaci6n es un consorcio, a1 reiterar que las empresas del exterior incluso, a elaborar la primera definicibn legal del consorcio, si
tendrin la obligacibn de asociarse con empresas locales, aiiadien- bi6n s61o referida a1 contrato de consultoria. En su art. 2O. ap.
do que "la entidad contratante exigirh a1 consorcio asi integrado do, la Icy entiende por consorcio a 'toda asociacwn accidental o en
participacidn de firmas consultoras o de finnas consultoras con nacionalidad utilizan el tkrmino joint venture como indicativo de
consultores o de dos o mcis consultores entre si para llevar a cabo un instituto distinto que el consorcio, tema que se analizarb mirs
tareas de consultoria". Mbs adelante volveren?os sobre esta de- adelante) la ley 584 del 8/8/77, reformada por la ley 1 del
finicibn, destacando ahora que el art. 6'J de la ley comentada se 3/1/78, iutrodujo 'l'istituto del raggruppmento delle imprese per
refiere a "los consorcios que se constituyan pa?a redizar un de- la participazione agli a p p l t i e per la esecuzione delle opere
pubbliche", lo que permite "il collegamento temporaneo di pi6 im-
terminado trabajo. . .", mientras que en el art. 9'J inicia una re-
nulaci6n legal del consorcio, estableciendo: "Las firmas consul- prese in funzione del compimento di un'opera, nella esecuzione
" della quale ciascuna conserva la propia individualitC6, y s e
toras y 10s consultores podrdn constituirse en consorcio con. el
objeto de prestar uno o mds servicios determinados de consultoria.
Las firmns y 10s consultores consorciados serhn solidariamente rcs- 6 Astolfi, A,, I1 contrato di joint centure, Dott. A. Giufre Editore, Mi-
poniables por la cdidad y exactitud de la totalidad de las tareac .
E n , 1981, p. 141; tamhihn Cianflone, oh. cit., L'Appalto. ., p. 239. La
ejecutades y tambie'n por todos 10s aspectos contractuales. El ley 554 - q u e busca la adecuaci6n al derecho italiana d e la Directiva N o 305,
consorcio no lendrd modificacidn en su constitucio'n hasta la fi- del 26/7/71 de la Comunidad Econdrnica Europea- regula el instituto d e
la siguiente manera:
~nalizacidn de 10s trabaios contratados, salvo autorizaci6n eervesa
~

Art. 20. -Sono ammesse a presentare offerte per gli appalti di cui alla
de la contratante". presente legge, nonchb per appalti in genere di opere pubbliche eseguite a
En el derecho comparado la figura tambien ha sido admiti- cum della amnlinistrazioni e degli enti pubblici, dei 1610 concessionari o dn
da. La ley espafiola de Bases de Contratos del Estado establece cooperative o consorzi ammessi a contrihuto o concorso finanziario dello
Stato o di enti pubblici, imprese riunite che abbiano conferito mandato co-
que 'La Administraci6n tambibn podrs contratar con agrupacio- Ilettivo speciale can rappresentanza ad una di esse, qualificata capogruppo,
nes de empresarios que se constituyan temporalmente a1 efecto. la quale esprime l'offerta in nome e per conto proprio e delle mandanti,
Dichos empresarios quedarin obligados solidariamente ante la nonchh consorzi di cooperative di produzione e d i lavoro regolati dalla legge
AdministraciCin y deberbn nombrar un representante o gerente 25 giugno 1909, n. 422, e dal regio decreto 1 2 febraio 1911, n. 278, e suc-
cessive modificazioni e integrazioni.
bnico de la agrupaciCin, con p d e r e s bastantes para ejercitar 10s
In caso di licitazione privata, di appaltosoncorso o di trattativa privata,
derechos y cumplir las obligaciones que del contrato se deriven" l'impresa invitata individualmente dal soggetto appaltante ha la facolta di
(art. 10). presentare offerta o di trattare per sh e quale capogruppo di imprese riunite,
A la vez, el art. 27 del Reglamento General de Contrataciones ai sensi del comma precedente.
(siempre con referencia a la legislacibn espaiiola) regula a1 con- Possono altresi essere ammesse alle gare o alla trattativa di cui a1 pre-
sorcio de la siguiente manera: "Cuando varias empresas acudan cedente comma imprese riunite o che dichiarino di volersi riunire ai semi del
prin~ocomma del presente articolo, le quali ne facciano richiesta al sogget-
a una Iicitacibn constituyendo una agrupaci6n temporal, cada uno to appaltante, sempre che sussistano i requisiti previsti dalla presente legge.
de 10s empresarios que la componen deberb acreditar su capacidad Art. 21. - Salvo quanto prescritto dagli art. 14, 17 e 18 dela presente
de obrar conforme establecen 10s articulos anteriores. Para que legge per gli appalti di cui all'art. 1, ciascuna delle imprese riunite deve es-
sea eficaz la agmpaci6n frente a la Administracihn bastarir que en sere iscritta nell'alho nazionale dei castruttori per la classifica corrispondente
el escrito de composici6n se indiquen 10s nombre's y circunstancias ad un quinto dell'importo dei lavori oggetto dell'appalto: in ogni caso la som-
ma degli importi per i quali le imprese sono iscritte deve essere almeno pari
de 10s empresarios que la suscriban, la participacibn de cada uno all'importo dei lavori da appaltare.
de ellos y que se designe la persona o entidad que durante la vi- Salvo quanto disposto dall'art. 2 della presente legge, per gli appalti
gencia del contrato ha de ostentar la plena representacibn de todos di cui all'art. 1, I: consentito indicare nel bando o avviso di gara avvero,
ellos frente a la Administracibn. Si la agrupaci6n estuviese cons- quando si ricona a trattativa privata, nel capitolato speciale d i appalto, parti
dell'opera scorporabili, la cui esecuzione pub essere assunta da imprese man-
tituida por empresas espaiiolas y extranjeras, el gerente deberb danti che siano iscritte nell'albo nazionale dei costruttori per categoria e
ser espafiol". classifica conispondenti alle oarti stesse.
En el derecho italiano, en materia de consorcios empresarios L'offerta delle imprese iiunite determina la lora responsahilit& solidale
para la ejecuci6n de obras (en realidad algunos autores de esa nei confronti del soggetto appaltante. Tuttavia, per le imprese assuntrici
ELEME......'TOS DEL CONTRATO DB OBRA PÚBLICA 173
CoNTRATO DE OBRA PÚBUCA
172
También en Francia se ha regulado por ordenanza NO 67-821
caracterizan por configurar una uni6n de empresas (imprese ~ y decretos 68-109 y 68-630 el groupement d'intérét économique y
nite) que "abbiano conferito mandato colletivo <pedale con rap- ·en Portugal l?s ~grupa:mentos c&mplerrumtares de empresas, segón
presentanza ad una di esse, qualificata capogrupo, la qualen espn~ ley del 4 de Jumo. de 1973 8 , sin porjuicio del gran desarrollo que
me I'offerta in nome e per conto propio de della mandati (art. ,el mst~tut~ ha temdo en el derer.ho estadounidense, al que luego
20). se hara reterencía, .
En el Brasil, el instituto está previsto y regulado expresamen- .En Francia, específicamente para los tTQI1)aUX p1.lblics, los
te en la sección IV del decreto 86.025, del 22 de mayo de 1981, Cahler, des elauses Admínistratives Generales como los Ca-
titulada, precisamente "Consorcios". Asi, su art. 14 establece que: hiers des Prescríptions Communes prevén la ~ contratación con
"Desde que prevista no edilal, admite-se a participac¡'o em conoo- gn.,'P,0s de empresas, en forma conjunta y solidaria, para la reali-
rrencia ou tomada de pre-¡gos. de pessoas fisicas au jurídicas reuni- zaclOn de obras de especial complejidad. En estas regulaciones se
n
das em cons6rcio '1, destaca especialmente la figura del mandatario, que asume no só-
lo responsabilidade~ en nombre de cada una de las empresas agru-
delle opere indicate nel secando comma, la responsabilita e Hmitata a quena padas, smo tamblen responsabilidades directas, aunque traslada-
derivante daH'esecuzione deHe opero di rispettiva competenza. forma restan- bles al resto. de las .empresas. Puede afirmarse que esta figura
ao la responsabiHtii soHdale deH'impresa capogruppo. del mandatano permlte superar los posibles problemas derivados
Art. 22. _ n mandato oonferito all'impresa capogruppo dalle aItre ¡m~
prese nunite deve risultare da scrlttura prívata autenticata. La procura re~
laUva e conferíta a chi legalmente rappresenta l>impresa capogruppo. n § 1Q ,<?
oonsórcí~. de':.erá relacIonar-se
com o objeto da licita¡;ao, nao
m¡\ndato e gratuito e irrevocabHe, La revoca del mandato per giusta eausa _sendo p:rmltt~a Ha parll~r~a<;ao de peS'Soas ou
empresa$ que nao apresentem a
non ha effetto nei confrontí del soggetto appaltante. necessáriá aptidao, a cntedó da Administrat;áo.
Al mandatario spetta la rappresentanza. esclusíva; anche processl.lale , de~ § 2~ O nú~ero de consorciados será fixaao no ato de sua constitui¡;ao
le in1prese mandanti nei confronti del soggetto appaltante per tutte le ope- qUe servIrá. para lnstruir o pedido inicial de habilita<;áo preliminar a canco:
raz¡oni e glí atti di qualsíasi natura dipen¿enti dall'appatto, anche dopo el rrEmcia ou a inscrir;io no registro cadastral de habiJita<;áo para tomada de
collaudo deí lavarlo fíno aU¡\ estinzione di ogni rapporto. I1 soggetto appal- prelr°s.
tante} tuttavia, puo far valere direttlmente le responsabilita facenti capo · § .3 9 A personalidad e jurídica, a capacidade técnica e a idoneidade
alie ü)'}prese mandanti. nnanceJra da cada consorclado seríio verificadas indivadualmente impórtando
n rapporto di mandato non determina di per sé organízza:úone o asso~ a recusa de um, na ínabilita;;íio do consórcio. '
ciazione fra le imprese riunite. ognuna delle quali conserva la propda auto~ .549 A critério da Administra;;íio, a admissio do consórcío pooerá ser
nomia ai finj deHa gestione e degli adempimenti fiscali e degli oneri sociali. defmlda ,pela soma de pontos atribuidos a cada um dos consorciados desde
Art, 23. _ In caso di falHmento dcll'impresa mandataria O'\'Vero, qtiaiora que prevl.sta esta condü;ao no edital.
si tratti dí impresa iPA.ividuale, in caso dí morte, ínterdizjone ? in~biJitazione
J

• § 59 Nos ,consórcios integrados por pessoas físicas ou jurídicas, nacio~


del suo titolare, i1 soggetto appaltante ha faooltA di prosegu ue II rapporto n~s ou e..stn::ngeu&s. caber á, sempre, a brasileiro a lidenmt;a e a representa-
di appalto con altra impresa che sia costituita mandataria nei modi previsU vao do consorcio,
dal precedente arto 22 e che sia di gradhnento del soggetto appaltante me- • 1 Art, 16. - E vedado a pessoa física ou jurídica consorciada participar
desimo ovvero di recedete daU·appalto. -g¡multaneamer:te, da mesms licita<;:iio. isoladamente ou como integrante d~
Jt~ caso di fallimento di una delle imprese mandanti ovvero, qualora si outro cons6rcu),
tratti di un'impresa individuale, in caso di mnrte, interdizione o inabilitaziooe Art. 1~. - A constitui¡;lio de consórcio importa no compromisso tAcito
del suo titolare, rimpresa capogrupPo, ove non indichi altra impresa suben- ,dos COIlS' o~c)ados de que nao terá a sua constítui.;8.o ou composio-;ao alteradas
trante, in prosseso dei prescritti requlsiti di idoneita. e tenuta aHa esecuxione, ou ro od , iflcadas, sen: ti. prévia e expressa anuéncia da Admi:nistra¡;a.o até o
direttamente o a meZzo delle altre imprese mandantí. cumprunento do objeto da licita¡;ao, mediante termo de recebimento.'
'; La misma. ley efectúa una regulación del instituto: ,Art., ~8, - Aos consórcios apHcar~se-lío subsidiariamente, no que couber,
Art. 15. _ A constítui~ao de consórcios, para 05 fíns deste decreto. obe ... as dlsposl;;:oes do Decreto n9 73,140, de 9 de novembro de 1973 nao revo
decará no que couber, ao disposto nos arts, 278 e 2-79 da Lei n9 6404, de <gadas expressa:rnente por este decreto. ' ~
15 de dezembro de 1976, devendo os contratos de consórcio ser arquívados • 8. Citado por Bonvicini. D., Le iomt ventttf6a, tecniw giuridica e pr~
na Junta Comercial uu registrados no Cartório de Registro de Títulos e Dó~ ..$1- SOC¡:etaria.. Dott A, Giufre Editore, Milán, 1917, p. 17,
L'Umentos, conforme a natureza das pessoas consorciadas,
de esa norma, asi como tambikn la grave sanci6n contemplada en
del no reconocimiento de personalidad juridica en el agrupamien-
to empresario, fundamentalmente a1 concederle un papel que exce- su art. 17. El conso~ciono es una sociedd, por lo tanto. las socie-
de la mera representaci6n de intereses ajenos, para situarlo, como dades por acciones podrhn constituir vhlidamente estas uniones
se dijo, en la calidad de res~onsabledirect0 ante la Administra- consorciales, lo que ahora esti autorizado por el art. 377 de la ley
ci6n comitente, sin perjuicio de la responsabilidad solidaria que 19.550, siempre que cumplan con 10s requisitos que caracterizan
se mantiene en el resto de las empresas que forman el g ~ p '.o esta figura, distinguikudola de la sociedad comercial. Obviamen-
La admisibn por el derecho argentinn del instituto "consorcio", te, si ocultos bajo el manto del consorcio pueden descubrirse 10s
a traves de las nomas resefiadas en 10s phrrafos anteriores permite
encauzar su anilisis y tratarniento por carriles distintos de la fi- 39 Le mandataire cammun assure la liaison e t la coordination des en-
gura de la sociedad comercial, con el importante efecto prictico, treprises entre ells, et la liaison entre les entreprises et le maitre d'ouvrage
aun antes de la refonna de la ley de Sociedades, de convertir en et le maitre d'oeuvre. C'est par son intermaiaire que sont adress6s aux
entreprises les ordres d e l'administration et lffi reserves ou r6clamations des
inaplicable a1 caso la implicita prohibici6n contenida en el art. 30 entreprises au maitre d'ouvrage et au maitre d'oeuvre, ainsi que leurs situa-
tions et mkmoires qu'il d e son visa ou les demandes d'agrkment d e sous-
trait&.
Q Mcntmerle, J., Passation et erecution des marches d e hauaux ~ b l i ~ s -
En cas d e contestation, c'est le mandataire coliimun qui repr6sente
Commentdre des cohiers des clauses administrotives g6nerales, Editions Eva- chaque entreprise, pour l'application de l'article 50 d u C.C.A.G., et B dhfaut
lles, Paris, 1966, ps. 49/51. d'accord amiable accept6 par I'entreprise inthresske, le mandataire commun
..Genbralment, le march6 est passe avec une entreprise dbterminee, mais, doit informer cette dernik~e,en vue d e ].application Cventuelle des articles
d'une faCon assez frbquente, les march& importanb sont conclus avec plu- 51 et 52 du C.C.A.G.
sieurs entreprises qui s'engagent conjointement et solidairement. Cet enga-
4° Le calendrier d'exbcution Btabli a n cours d b n e p6riode preppara-
gement a pour effet d'obliger chacune des entreprises personnellem~nt Pour toire, fire en particulier le dklai gddrol d'exkcution des travaux de toutes
le tout, nonobstant la rkpartition entre elles des travaux, qui a pu etre,mdr-
les entreprises, d6lai dont le dbpassement est sanctiannh par l'application des
que dans le marche, si certaines entreprises deviennent dkfaillantes, lautre
pbnalit6s de retard, dont le mandataire commun doit indiquer la repartition
ou ies autres, denleuries in bonis, ont l'obligation de pousuivre l'ex6cution du
entre entreprises, au maitre de I'ouvrage, A dkfaut de quoi elles lui sont
marchb, et de le mener Q son terme. ( . . .)
totalement imput6es.
En matiAre de travaux de batiment, la ~ r a t i q u ea tout d'ahord Btabli,
50 Le mandataire c o m m n joue Bgalement un r6le important, s'agis-~
puis gkn6ralis6, I'attribution des travaux Q des entreprises dites grmrpdes.
sant de l'organisation mat6rielle et collective d u chantier et la gestion du
l'klaboration juridique de ce mode d'attribution s'est ensuite faite dans diffk-
compte dit compte prmnta.
rents cahiers des charges, puis dans le Cahier des Prescriptions Communes
applicables aur march& d e travaux de bBtiment de I'Etat (Fasc. 02). ( . . . ) 69 Chaque entreprise, .& laquelle I'exemplaire unique pr6vu par les
tentes rkglementant le nantissement, est remis, peut nantir sa part d e tra-
Ce made d'attrihution des travaux est apparu nbcessaire, en raison d e
vaux; par l'intermkdiaire d u mandataire commun, elle constitue sa part de-
la diversit& des travaux, que nkcessite la construction d e bitiments, et de la cautionnement et r e ~ o i t directement, au compte ouvert B son nom, le prix
nkcessitk d'assurer une meilleure coordination e t liaison des diffkrentes en-
d e ses travaux.
treorises.. chacune ulus sp6cialement chargee d e I'exkcution des travaux d u
~~~>
79 Le C.P.C. Bitiment Fasc. 02 met d e lourdes rsponsabilit6s A la
corps d'ktat qui correspond B sa specialiik. ( . . .)
charge du mandataire con,mun.
L'iconomie &nkrale d e la convention d'entre~rises group6es est la
suivante: Aux termes d e l'article 3240: pendant la durke des travaur; e t jus-
q u a la r6ception dkfinitive incluse, le mandataire commun est solidnirement
19 Les diffkrentes entreprises dksirecses d e concourir signent une iettre
responsahie avec chacune des entreprises, pour les travaux qu'elle exbcute
d'accord, dkignant et hahilitant, I'une d'entre elles (gkn6ralement I'entrepri- au titre de son march8".
se de gros oeuvre) qui, agrkke par la maitre d e I'ouvrage, groupe les pfopo-
D'autre part, aux tennes d e I'article 6. 52: "En ce qui conceme le
sitions de ces entreprises et les transmet sons la f o m e d'une sourNSSlOn rklement du msrchk d e chaque entreprise, le mandataire commun conserve
d'ensemble. sa responsabilitB solidaire avec cette entreprise jusqu'A la liquidation dBfhi-
29 Cette soumission, remise en autant d'exe~n~lairesqu'il y a d'entre-
tive des comotes".
prises, comporte obligatoiremerit une dkcomposition d u prix total, r6sultant
8' La question de la d6faillance soit d'une entreprise, soit du manda-
de l'addition des propositions des diffkrentes entreprises, en autant d e postes
qu'il y a Sentreprises int&esskes, avec, en regard d e chaqoe poste, le nom taire commun, fait l'ohjet de l'a~ticle 3 . 7 d u C.P.C. Bitiment. Elle sera
Ctudiee ultkrieurement.
de rentreprise et le montant d e ses travaux.
tructiva, p. ej., preexiste, es contemporinea y precederi a1 con-
elementos que identifican la sociedad comercial, la ~rohibicidn
sorcio. Los consorciados continuarhn compitiendo entre si, aun
d e l art. 30 de la ley de Sociedades retomarh su ~ l e n avigencia.
durante la vigencia del consorcio (aunque no, por supuesto, con
Esta conclusi6n tiene importantes efectos pricticos, en parti-
respecto a la obra objeto del consorcio). Ellos no buscan aso-
cular en cuanto a la rapidez y sencillez de 10s actor constitutivos
ciarse, sino ejecutar una obra, la que, p r diferentes razones, no
del consorcio (un simple contrato celebrado por instrumento pri-
vado, sin necesidad de inscripci6n y autorizaci6n alguna), sin per- pueden encarar con exclusividad. Mis que la uni6n de esfuerws
para ejecutar la obra (lo que lo acercaria a la affectio societatis),
juicio de sus efectos impositivos cuyo anilisis escapa a1 contenido
10s consorciados buscan dividirse la obra entre si, ya sea en uua
de esta obra.
divisi6n plena (por sectores o especialidades) o relativa, realizan-
Pero, por sobre todo, tal distinci6n encuentra razones cienti-
do todo el trabajo conjuntamente, pero distinguiendo 10s cometi-
ficas determinantes, cuya demostraci6n surgirh del propio anilisis
de la figura consorcial, aunque desde ya pueden destacarse tres dos a realizar por cada empresa, como tal, consorciada. Por ello
la affectio societatis, en todo caso, aparece despds. Lo que cada
notas de singular importancia distintiva:
cousorciado quiere es ejecutar la obra, es decir que su ohjetivo
a ) Inexistencia de affectio societatis: kste ha sido calificado principal es ser contratista de un contrato de obra y no miembro
como el "elemento esencial" del contrato de sociedad lo, la que
de una sociedad; luego, por convenieucia empresaria, necesidad de
". ..debe entenderse como la voluntad o intenci6n de asociarse
hec.ho (falta de capacidad, equipo suficiente, capital de trabajo,
que encierra con mayor o m6nOr acento, de acuerdo con el tipo
etc. o porque asi lo impone el pliego licitatorio o la ley, se uniri
societario, la voluntad de colaborar en forma activa en la empresa
con otros competidores (no socios) para ejecutar la obra, esa obra
c o m b (lo que lleva insito el deber de lealtad del socio), el hni-
y nada mis, en comlin.
mo de concnrrir a1 &lea propia de la actividad negocial, todo ello
desarrollado dentro de un marco de igualdad juridica, pues en la El jurista francks Jean Guyknot '"efiala, precisameute, que
relaci6n societaria no existe s~tbordinaci6npor parte de alguno de con respecto a1 "grupo de inter& econ6mico" reconocido por el
10s contratantes (socios) hacia el o 10s socios" ". Si bien en su derecho franc&, la affectio societatis ". . . no es suficiente para ca-
aspect0 apareute estos caracteres podrian predicarse del consor- racterizar el consentimiento de una persona que conviene con otras
.cio, la diferencia estriba en la intencionalidad psiquica l2 hacia constituir un GIE . . ." (grupo de interks econ61nico). En cam-
donde estas notas estin orientadas. En realidad, en la sociedad bio, en estas agrupacioues aparece, como elemento esencial de la
la affectio societatis es plena, pues se da denko del negocio juri- voluntad de 10s concurrentes a formarla, el animus cooperandi que,
dico, actuando como un motor esencial en la vida de la sociedad. seg6n el autor citado, es identificable con el antiguo consortium
Asi, en la sociedad, la affectio societatis es un elemento presu- entre hermanos, del derecho romano, caracterizados par el jus
puesto, en el sentido de previo o precedente, a toda la actividad fraternitatis, seglin el Digesto de Justiniano, que reconoce en cada
que luego desarrollarh la sociedad como tal. En el consorcio, en participante "una voluntad sostenida y activa de obrar, tanto en
cambio, 10s consorciados no buscan encauzar su actividad lucrati- provecho de 10s otros como en el propio, en la prosecuci6n de su
va a travks de una uni6n societaria. Su actividad propia, la cons- inter& personal". Por ello el consortium ". . .puede no materia-
lizarse en el reparto o acwnulaci6n de beneficios obtenidos o eco-
nomias realizadas, pero trasciende en resultados que, obtenidos
10 Zaldtvar, E., Cuademos de derecho societacio, Macchi, Buenos
conjuntarnente, permiten hacer fructificar la actividad econ6mica
Aires, 1973, p. 83; Hal~erin, I., Sociedudes comercioIes, ~ e ~ a l m aBuenos
,
Aires, 1964, p. 49. de cada miembro, injertada sobre la de agrupaci6n que 81 ani-
11 Zaldivar, 06. cit., p. 81; Halperin (ob. cit., p. 46), la define como
"la voluntad de colaboraci6n activa, juridicamente igualitaria e interesada?
12 ". . .fundamentalmente es un factor de caricter psiquico, antes que
material", CFed. Rosario, LL, 87-751, citado par Hillperin, ob. cit., p. 48, '"uy4not, J., La ~mhcticade 10s grupos de inter& econdmico: La cms-
:nota n? '9. titucidn, LL, dialio del 1-7-83, de quien son las citas en el texto.
nueva persona juridica, un nuevo sujeto de derecho, ni siquiera
ma con 10s otros, independientemente de la suya", aspecio dste
a los efectos del contrato de obra para el cual, exclusivamente,
que se deberi tener muy en cuenta a1 analizar el objeto del con-
se constituy6. La personalidad juridica sigue perteneciendo ple-
sorcio.
namente a 10s consorciados, quienes se vinculan entre si y con eI
Para Astolfi, en el mismo sentido y refirihdose a 10s contra-
tos de joint venture (cuya relacibn con lo que en la prictica comitente mediante relaciones juridicas que luego se examinarin
argentina se denomina consorcio sera ex~licadam8s adelante) no mis en detalle. Por supuesto, no cabe asimilar esta situacibn a
corresponde subsumir esta figura en el esquema societario, ya las sociedades accidentales o en participacibn, exceptuada de l a
que esta posici6n ". . .no tendria e n cuenta la circunstancia d e que calidad de sujeto de derecho por la propia ley de Sociedades (art.
la convenci6n del contrato de joint venture esti motivada, en la 361), ya que aquel t i p societario (si asi puede calific6rselo) es
generalidad de 10s casos, en la propia voluntad de 10s contrayen- oculto respecto de 10s terceros 18, lo que no ocurre con el con-
tes de convenir en una relaci6n de colaboracibn que quiere ex- sorcio.
cluir la relacibn social" 14. La carencia de personalidad juridica del consorcio t a m b i b
Esta posicibn doctrinaria ha quedado incorprada a1 derecho ha sido reconocida en el derecho cornparado. Asi cabe citar el
argentino, ya que el 6ltimo pirrafo del art. 377 d e la ley 19.550 informe 49/72, de la Junta Consultiva de Contrataci6n Adminis-
expresamente afirma que 10s consorcios (alli llamados unwnes trativa (Espafia): "Respecto de la primera cuestibn, entiende esta
transitorins de empresas) "no constituyen sociedades". junta que 10s preceptos de la ley de Contratos del Estado y d e l
L a diferencia entre aquellas nociones de affectio societatis y Reglamento General de Contratacibn (arts. 23 y 24) . . . son con-
animus cooperandi puede ser sutil, pero existe. De todas mane-
cluyentes en el sentido d e la carencia de personalidad juridica de
ras, el mismo concept0 de la affectio societatis es sutil, sin perjni- las agrupaciones temporales. La terminologia utilizada, el r6gi-
cia de que ha servido a 10s jueces y a 10s juristas de gran utilidad men interno de la agrupaci6r1, el mecanismo de las responsabili-
uara construir en torno de 61 10s basamentos de la teoria del con- dades y 10s requisitos formales constitutivos d S aquella ponen de
e a t 0 de sociedad.
relieve, sin lugar a dudas, que nos hallamos ante una comunidad
b ) Personalidad iuridica: el art. 2q de la ley 19.550 afirma
interesadG-decaricter circunstancial, q u e se sustenta en l a
que "La sociedad es u n sujeto de derecho con el alcance fijado
en esta ley". Esta norma importa conferirle a la sociedad nlcr- personalidad juridica d e 10s participes, vinculados por su respon-
cantil el dato de la personalidad juridica, aunque limitado a lor sabilidad solidaria frente a la Administracibn. La figura del ge-
alcances qne le fija la misma ley de Sociedades. En este sentido, rente linico constituye, en fin, una exigencia con el doble ohjeto
dice Zaldivar l 6 "son personas societarias mercantiles, regidas co- de facilitar las relaciones de la agrupacibn con el 6rgano de con-
mo tales por nuestro derecho, aquellas domiciliadas en nucitro tratacibn y d e impulsar a un funcionamiento unitario y coordina-
territorio nacional que se originan en relaciones juridicas de na-
turaleza societaria o asociativa que hayan adoptado uno cualquie- '"Zavar, oh. cit., p. 145. L1 jurisprudencia ha seiialado: "La rela-
ra de 10s t i p s organizativos contemplados par la ley o en rela- cibn asociativa meramente interna, no exteriorizada frente a terceros, consti-
ciones societarias de hecho que tengan por ohjeto el desarrollo Inye nota caracterizante d e la sociedad en participacibn" in re "Eshldio inge-
de una actividad mercantil, con excepcibn d e las sociedades acci- niero Alfiedo van Lacke y asoc. S.R.L. y otros c/Artayer, Marcos E , y atro",
dentales o en participacibn que no generan el efecto personalidad". CNCom., Sala C, abril 7/1982, ED del 7/8/82. En el rnismo fallo se dijo:
"La circunstancia de que uno d e 10s constituyentes de una sociedad ncciden-
Ahora bien, como se ver8 mis adelante, el consorcio no es una tal o en participacibn sea una sociedad anbnima, supuesto vedado por el art.
30 de la ley 19.550 es suficiente causal d e nulidad, en razbn de mediar trans-
gresi6n de una d e las condiciones de validez del act0 constitutive, y dicha
I4 Astolfi, A,, El contrato i n t e m i - 1 da joint uenture, Denslma, B~ie- sancibn debe ser declarada de oficio por 10s jueees, atento su caricter d e
nos Aires, 1981, p. 7. nulidad absoluta".
1 5 Ob. cit., p. 140.
do de las empresas agrupadas"". E n carnbio, en el derecho mantiene invariado mientras no se modifique el contrato 2 2 . Se
franc&, la norma que regula 10s grupos d e interks econ6mico trata d e una cifra ideal, qne se contabiliza en el pasivo d e la so-
10s ha dotado de "personalidad moral y plena capacidad juri- ciedad, siendo insusceptible de distribucibn entre los socios, sin
dica" 18. modificaci6n del contrato social. Ello se debe, explica Zaldivar,
En el derecho argentino la cuesti6n h a sido definida por el a que es "una garantia para 10s acreedores de la sociedad, quienes
ya citado Gltimo pdrrafo del art. 377 de la ley de Sociedades Co- se encuentran amparados, en tal sentido, por diversas disposicio-
merciales, que afirma teminantemente que estas "uniones transi- nes de la ley d e Sociedades (art. 13, incs. 3?, 31, 32, 68, 71, etc.)" 23.
torias de empresas" no son sujetos d e derecho. "El interks juridic0 del capital social -agrega Zaldivar- se pre-
c ) Carencia de capital y patrimonio diferenciado: en el art. senta, especialmente, en las sociedades en las que ciertos zrocia-
2312 del Cddigo Civil se establece que ". . .el conjunto de 10s dos pueden limitar su responsahilidad (casos de cornanditas, so-
bienes de una persona constituye su patrimonio. . .". Esta "uni- ciedades de capital e industria, de responsabilidad limitada y por
versalidad juridica de sus derechos reales y de sus derechos per- acciones), lo cual no implica que tal interks no exista tambihn e n
sonales", que coma lo indica Vklez Sdrsfield en la nota al articulo las sociedades con respnsabilidad colectiva, ya que en kstas, si
citado caracteriza a1 patrimonio de una persona, "es la persona- bien 10s acreedores tienen accibn contra 10s socios personalmente,
lidad misma del hombre puesta en relacibn con 10s diferentes ob- advikrtase que previamente deben ejecutar 10s bienes de la socie-
jetos de sus derechos", segGn la acertada aclaraci6n del legisla- dad (ley de Sociedades, art. 56 y conc.)" 24. Nada d e esto ocu-
dor en dicha nota. Ahora bien, si existe esa intima relaci6n entre rre en el consorcio empresario, como se verd en 10s pdrrafos que
patrirnonio y persona, resulta una inmediata conclusi6n la impo- siguen. Es que en el consorcio no hay aporte en el sentido ju-
sibilidad del consorcio empresario d e ser titular de patrimonio ridico-societario del tbrmino. Guyknot explica cbmo en el grupo
alguno, puesto que carece de personalidad. El patrimonio es uno de interks econdmico el "aporte de 10s miembros se metamorfosea
d e 10s atributos de la personalidad, de la que carece el consorcio. ~ ~ ".. .ya no es esenciahente contabili-
a1 ser t r a ~ c e n d i d o "pues
Por el contrario, la sociedad, en tanto que sujeto d e derecho, po- zado p r su valor mercantil o creador d e riquezas valuables en
see un patrimonio propio, diferenciado del que pertenece indivi- dinero, sino en funci6n de su utilidad para la sealizacibn del ob-
dualmente a sus socios; se trata del patrimonw socinl o "conjunto jeto. .." del consorcio, el que es el mismo "conjunto de 10s bienes
d e relaciones juridicas de las que es titular el ente s o ~ i e t a r i o " ~ ~ . aportados por 10s miembros". Asi, afirma G u y h o t que ". ..el
L o mismo cabe seiialar del capital, el que es un elemento aporte no estd concebido y efectuado en funci6n d e u n valor fi-
especifico del contrato de ~ o c i e d a d ~Por
~ . supnesto que, en el nanciero, sino del servicio que presta como medio destinado a
caso del consorcio, si resulta incapaz de poseer patrimonio propio, funcionar activamente e n el crisol que constituye el G I E ( @ u p
tampoco puede ser titular de capital alguno. Ademis, .el capital de interks econbmico). Y prosigue: "En el sentido del derecho
social resulta del aporte de 10s socios, lo que es de la esencia del de las sociedades no pesa sobre 10s miembros una obligaci6n le-
contrato de sociedad; "sin k1 -dice Halperin- no hay sociedad gal d e aportar, en carnbio (si) nna obligacibn funcional resultante
ni socio, y le distingue d e otros negocios juridicos" ". El valor del GIE, sin la cual n o se podria poner por obra n i n g h medio
.del conjunto d e 10s aportes constituye el capital social, que se que le permitiera realizar el objeto que ellos han conve~do",pues

17 Citado por Moreno Gil, O., en Controtos adminishativos (Legislacibn 22 Halperin, ob. cit., p. 51.
Ministerio de Hacienda, Madrid, 1978, P. 190.
y Juri~~rudencia), 23 Oh. cit., p. 206.
18 Guyknot, J., o b cit. 24 Ob. cit., p. 206.
19 Zaldivar, oh. cit., p. 205. 2WuyCnot, J., La prdctka de 10s grupos de inter& econdmico: El ob-
20 Halperin, oh. cit., p. 45. ielo del contrato de grupo. Los apntes en medias efeduados pw 10s miembros,
21 Ob. cit., p. 50. LL, diar~odel 11/8/83, d e quien son las citas que siguen en el texto.
ELEMENTOS DEL COXTRATO DE OBRA PÚBLICA 183
CoNTRATO DE OBRA PÚBLICA
182
ioint verJture. Quizá la nota más distintiva - no en nuestro de-
' t ' cuando pueden ponerse recho, insisto entre consorcio y joillt venture es que al primero
estos: aportes « . . . s6lo presentan m eres
obra para alcanzar un resultado específicd'. se le atribuye personalidad jurídica) pues generalmente se reserva
en d 'al' ar que el esa denomlTIa~ión para las uniones entre entes públicos con el
Por lo antes expuesto es que se pue ~ a~,Ul d~17 mediato
consorcio tiene por objeto) más que 1 '
la reahzaclOfi lb
n 'bl'
" d una o ra pu 1-
objeto de prestar un detenninado servicio público O encarar, como
qúerido por sus miembros (p, ej" a e¡eCUClOn e 'dades entre comitentes, la ejecución de una Gbra de interés comÚn,
ca) la estricta cooperación y complemento de capaCI , ASÍ) al consorcio -ente público - no se lo considera como
, , I 'nI' la antes citada frase de Cuyenot
los COIlsOrclados, o que }US !Ca . .6 d un ente de gestión~ sino como una persona, por lo menos un ór~
por la que identifica al objeto del contrato de constltuCl ,n { u,;'
gano con subjetivación 27 en la medida de la competencia que le
CJE con el "conjunto de los bienes aportados por los mlcm roS ,
fuere otorgada, Afirma Stancanelli que lo que caractexiza a estos
Queda planteada, entonces, la tarea de definir la na~ralcza
entes \ de gestión) es que su actividad "resulta ser satisfactoria
jurídica del consorcio de empresas Y enumerar sus pnnClp es ca··
respecto de una esfera de intereses substanciales que permanecen
racteres, 1 esta obra se utilizará fuera de su propia órbita" ", Entonces, el consorcio (púhlico o
Previamente corresponde ac arar que en. . administrativo, no privado) ';'parece constituir una hipótesis de en-
, 1 que ha predommado en nuOS-
la expresión consorclO ~ que es a J •

, l ' 1 '6
tra praehea y egls aCl TI -
como similar a otras expreslOnes usua-
,~. f

les en el derecho extranjero, tales como agrupalmento.s te:npora- ,,"/ 811 nuestra obra Principios tÜJ derecho admmistraUvo, Cap, VI, ps.

n~os de empresas'" 26 o, especialmente, con la expresIón mgle sa 173/180, hemos desarrollado el tema de las "fjguras jurídicas subjetivas",
partiendo de la idea de que", . ,el tema de la persona jurídica en el derecho
público debe ser replanteado, ya que ha sido un instrumento utilizado en el
· ' .ó de esttl.S denominaciones. Así derecho administrativo de un modo nuevo que conserva bien poco de la razón
211 Los autores reConocen l a ImprCSIC\ n . 1l d'-
1 bl' Ión coníunta "'Le nOt1"M" di adeguamento a e l de ser por la que durante siglos fue utilizado en el derecho privado", segÚn
Pallotino, M" en a ~u l~ac l' d' 1_ • bUci" Giuffre Varese, 1979, p. expresión del jurista español Ariño OrUz. Las "figuras jurídicas subje-
rett1.ve CEE in materuI dl appa tI 1 wvon- pu >

181 nota n Q 2, afirma: di . • rché oramai Uvadas" son. en apretada síntesis, órganos ú complejos organizativos que go-
• "Si usa irtermine di <associazíone temporanea lm~res)e pe tt tto Z<1.n de alguno de los atributos de la personalidad, pero no de todos) sin llegar
. (' ed a la nota suCCCSSlva > roa sopra u
entrato nel línguag?l~ corr~uf,te SlaVlla d 'roa legge n Q 584) agli arto lQ a pOseer la plenitud de la personalidad. pero susceptibles de recibir una cierta
perché l'istitúto COSl e cúah lcato a me esl imputación jurídica,
e 4<], ad esempio. :>tancanelli, G" en su obra Los conSC!fcios en el derecho administrativo,
di un termine inf'..satto, certarnente non cocrente, com~
'#Si tratta tuttavia Estudios Administrativos, E~cuela Nacional de Admi'nistración Pública, Ma-
disCiplina interna che del raggruppamento dettano gh
si yedra, propfio con la drid, 1972, p. 71) señala: "'Creemos que el problema hay que plantearlo en
articoli qui commentatL ,. , , 'male ancorché contenuta nel cerpo los términos siguientes: no diciendo que el ente es~ sjmuháneamente, órgano
"Natnralmente la quahflCa?.lone fO~ , sa mod¡fiCllre o compromettere y persona jurídica, porque entonces sus actos serian atribuibles contemporá·
dclla rnedesima l~gge. non e e~emen~o tia n~~~a giuridica delYistituto, natura neamente a sí mismo y al Estado, con verdadera contraditio in terminis. Se
e
i termini dclla dtbaUnta ques~lOned _a T ttavia da un legislatores 'tecnico'~ debe, en cambio, atender, ante un ente de esta naturaleza, no ti: la actividad,
~~tremamenté incerta, como St v~ l., t;a e doveva attendere un maggiore sino a cada uno de sus actos por separado, para concluir que éstos serán a.tri~
come quello della legge n, 584, Cl SI po., .• ¡'.to "el commento dene altre
, lOgICO.
ligore ternuno · Pur t r oppo> come st '01'
e gla v " .'
otevolissima e non seIfl' buibles. unas veces al Estado y otras a si mismos. Cómo esto sea posible se
1 l' ossimazione termlll oglca e TI • explica teniendo en cuenta la relatividad de la posición de la dependencia
norme del Ia egge, appr , es,ere mustificata __ma si tratte~
1 '. in questo caso puo" I<o~ II administrativa: nada impide que sea considerada por el ordenamiento juri~
pre essa, come nOdo o e l'bi- con la ~ece))'Sita delradeguamento formal,e a e
rebbe Comunqu.e ~ un a l , tia E da osservare, como notazione dI can- dico como centro de imputaciones jurídiCas y por tanto como persona, res-
norme della Dlrettlva c~umta . '] (6'"2 presentato dal Governo aUa pecto de algunos actos, y tan sólo como órgano en relación a otros, con la
torno, che ¡'origjnario dlsegno ~h ~t1e at~' nefI'Áppendice con la relativa Re- consecuencia de que la actividad de su titular será entonces directament~
Camera il 23 ottobre 1976. ~Ul. pu. le. l' erché elaborati in modo diver- .utribuida al Estado",
lazione} non menzionava, nel mtati artlCOldi-P mpr€se" mentre la Relazione 28 Stancane1li, ob. cit.• p. 78,
so- il termine 'associazione temporanea. . .c " •
parlava conettamente di 'ra::gruppamento di lmprese.
ELEMENTOS DEL CONTRATO DE OBRA PÚBLIC,A
CoNTRA.TO DE OBRA pÚBLICA
t84
. POr e~ten~er que t""~'ta distinción es extraña a nuestra prác-
te instrumental qne actúa al servicio de los intereses propios de
tica y legrslaclOn mantendremos el térnúno consorcio como deno-
"os distintos sujetos asociados" 21). ~nu;a~ión del ~g:upam¡ento temporal de empresas sin personalidad
El problema, comO en todo el derecho administrativo,. radica
¡UT,.d= y smommo del concepto extranjero de ¡oint venfure, sin
"n una cuestión de competencia, del grado de competenCIa aSlg- olVidar que, en el campo público, es posible encontrar consorcios
nado al órgano que puede llegar a o!orgarle la. subje?vaCión. JU- f?rmados ¡;or entes públicos, p. ej., municipalidades, con persona--
rídica. Por eso dice Stancanelli que el consorclO actúa eJercien- hdad JurídIca plena o, al menos, con un cierto grado de subjetivi-
Jo una competencia suya propia> si bien al servicio de intereses dad generada en su atribución de competencia.
substanciales ajenos" 30, cosa que ocurre con cualquier ente per- En definitiva, lo que aquí Se propone es denominar consorcio
teneciente a la Administración pública descentralizada. 31. de em¡>resas lo que en la pd.ctica internacional se denomina ¡oínt
El ¡oint venture, en cambio (siempre con la terrninoJogí~ ~ti­ venlure. Así, no está de más, entonces, hechar un rápido vistazo,
¡izada por los autores extranjeros), carece de personalidad JundI- sobre el instituto ¡oínt venture, puesto que ello pernútirá aclarar
ca, lo que permite distinguirlo (según esos autor~s) del con~orc!O unportantes: aspectos de nuestro consorcio.
(incluso del formado entre entes privados), SI bicn reconoCiendo
Dicho instituto jurídico -el imm venture- ha tenido en los
la cercanía de ambos institutos '"o últimos años un importante desarrollo en función del creciente
proceso de integración industrial en orden a la realización de in--
29 lbíd., p. 81. Adara Stancanelli (p. 78L que "Examinando más ~e­ versiones cuya importancia económica o complejidad técnica re-
::aUadamente esa relad6n de instrumentalidad puede observarse qu~ constltu· quiere la integración de recursos complementarios por parte de
re un fenómeno consistente en que el CUidad? de intereses de un su~eto queda dos o más empresas"'. Esta posibilidad de integrar recursos COI1l-
a cargo de un sujeto diverso~ determinadOs lllter(>,.SeS, áun ~uando slguer:- ~er~
teneciendo a un sujeto, son confiados al cuidado de otro sUJeto cuya aCh\'ldad
se dirige exclusivamente a este fin. Trasladándonos al campo de ~?S entes solvono. dal riehiamare le diversi motivarioni che miJitano á :fa.vúre di questa
públicos y considerando la l·elaCión de instrumental1dad ~mo relacmn. entrs- concluslOne. Valga solo rieordare la capacitá. gíuridica del consorzio la fun-
uno de ellos y el Estado, podemo.~ afirmar que éSle, medIante )a Creaclón de
zJone perseguita dal fondo comune ed il regimene della respousablntá pcr
un ente instrumental, alcanza detenninado5 fines propios que p;r~anecen
aver con~erma deH'inesatezza di ql1eIle interpretazioni che, muovendo 'dalla
tales aun después del nacimiento del ente a cuyo cuidado se conflan . CQ~staU:ZIO~e circa la possibiHtá di utilizzare _lo schema consortile per perse-
30 Oh. cit .• p. 82, gurre finalltá comuni alla relazione di joint venture hanno avvicinato le
:)1Barra, Principios ... , Cap-. VI, ps. 172 y ss. ~ ", • .la calidad de. s~· futtispecie e ritenuto applicabiJe al contratto di jOint venture la disciplina.
jeto deudor en la relación jurldioo-adminL<¡trativa la. tienen tanto la A~ml~1S~ consortile",
tración Pública centralizada como la descentralizada. ~tas son dos tecnu,:as 83 Astolfi. ob. cit., 11 controttv ... ) p, 1; Bonvicini, ob. Cit., J2,e ioint t,:e:n--
que hacen a la estructura organizativa de la Ad~inístr~ci6~ Pública, ;o~t:l~ tute, .... p. 3 Y ss.> explica que <"Il termine joint venture ... ¡ si co1lega ruret--
mentándose con la técnica de la desconcentraCl6n. SlgUlendo la dlStmcwn tamente ad un renomena giá noto nella storia deUe origini del diritto socie-
empleada entre otros autores por Gordillo. la cen:traliZILCió,!, impltca que l~s tari,o ing]es~. .L'espress:ione appare. infattl, per la prima volta nel Reguo·
facultades de decisión están reunidas en los órganos supenores de la Adun- ~ruto per mdleare le organizzazioní dd leggendari Merchant Venturers o
nistracibn. la desconcentraci6n que la competencia para resolver en fOrIna Gentiemen Adventurers: per í1 commercio d"oltremare. Come noto le com-
definitiva ¡ en determinados prC:Cedimientos fue atribuida a órganos inferiores, pagnie deí mercanti rappresentavano. in origine, strumenti di colo~ízzazione­
pero sien~pre dentro de la m:sma organización o del ~o. ente estatal; la ea eserc1tavano funzioni poütiche per la Corona che concedeva loro con la
descentralización significa que la competencia Sé ha atribUldo a un nuevo per~onalitá giuridica (charter of incorporation), poten de governo e' di pro-
ente separado de la administración; dotado de personalidad jurídica propia Y tenone degli interessi ingles,i e pnvilegi monopolistici. Nel corso del secolo_
constituido por órganos propios, centralízado.<; Y desconcentrados que expresan
~11 Je compagnie manifestarono la tendenza ti trasformársi da strumento pub--
la voluntad de ese ente.... b~lCO a strumento ptivato e cosí ad esercitare in proprlo uu'attivitá commer~
32. Astolfi, ob. cit., Il c(mtratto ... , señala como ejemplo el consorcio
Cl~le _per .canto dei partecipanti. Pur nene differenze Ol'ganizzative derivanti
entre cooperativas el que es "un nuOVO soggetto giuridico deliberatario del-
d31 ~1V~r~ c~arters o incorporation, ne1le joint stock companies deJrepoca gli
l'appalto, unico ¿ontraente ed unico responsabile verso l'Ammin:istra~ione">. a~OCl~ti nuIUvano merci per venderle oltremarc (od aequisatvano le mede~­
En la p. 323 insiste: "Le argomentazioni giá svolte escludono con eVlde:n:z.a Slme ID comune per rivenderle all'asf4l al ritomo delle navi) e provvedevauo
la sussumibilitá della fattispecie nel tipo consorzio con attívitá estema ea as-
plementarios -y no la de realizar la totalidad del objeto societa- En c a r b i o el joint tienture cmporatwn es una nueva sociedad
rio, de cada una d e las empresas agrupadas, en comirn- es el .de capital con personalidad juridica, constituida para favorecer un
primer indicio esencial en orden a caracterizar la figura, ya sea preexistente contrato de faint centure. Tieue, entonces, una fun-
cuando se dirige a la realizaci6n de inversiones conjuntas o a la
ejecuci6n d e obras de complejidad tal que hace necesaria la parti- cibn que no requiere formalidad especial alguna para su constitucibn, no li-
cipaci6n de empresas y de recursos o especializaciones que, para mita la responsahilidad de 10s socios, carece d e personalidad juridica y nor-
e s e caso, resultan complementarias. El dato de mayor importan- malmente es de duracibn indeterminada. En este aspect0 es lo contrario d e
cia, entonces, es que, en cualquier caso, el contrato d e ioint ventu- las llamadas incorporated componys. Conf. UFF, ob, cit., " C o m t m t i m law",
re (consorcio para nosotros) satisface la exigencia de varias em- p. 31 y ss.: "The word company embraces anybody of persons combined far
a common object, whether incorporated or not. But it can also be used . . .
presas para participar directamente en el logro de un resultado in the narrower sense df an incorporated company, as opposed to a partner-
econ6mic0, manteniendo cada una de ellas su propia personalidad ,ship.. . The essential feature of a limited share company is that it exits as
y autonomia juridicas y operativas y asumiendb -entre ellas, aun- a separate entity, distinct from its shareholders . . . a partnership or firm is
que no frente a1 comitente, donde la responsabilidad es i n totum- an unicorporated body of persons combined for a common abject. While
the inc:,rporation or disolution of a company is an unequivocal act, i t can be
la obligaci6n de cumplir con las prestaciones comprometidas en el
difficult to determine whether or not a partnership exists. . . The essencid
.contrato consorcial a4. feature which distinguishes a partnership is the carrying on of a business in
En el derecho anglosajbn la expresibn abarca dos categor.as common with a view to profit . . . A partnership is not a separate legal entity.
d e agrupamientos empresarios: el joint tieniure propiamente dicho It is awned by the partners in common, and each partner except a limited
partner, is liable for the firm's debts".
o unincorporated venture y el joint venture corporation.
The New Encyclopaedia Britannica (Micropaedia V. VII), define a1
Esta diferencia tiene gran importancia en .orden a1 problema partnership de la siguiente farma: Partnership, voluntary association of two
d e la personalidad juridica de la uni6n empresaria. Asi, la pri- or more persons for the purpose of managing a business enterprise and sharing
mera categoria ha recibido habitualmente el mismo tratamiento que its profits or losses. In the usual partnership, each general partner has full
power to act for the firm as he thinks best in carrying on its business; thus,
la partnership 35, que carece d e personalidad juridica 36.
partners are at once propietors and also agents of thier copartners. Not only
is each partner individually liable to third persons for the obligations he incurs
ad una ripartizione periodica degli utili in ~roporzioneai conferimenti, per lo for the firm, but he is equally liable for obligations incurred by his copartners
pi6 alla fine della singola spedizione (adventure). Talora I'impresa sopra- when they are acting within the scope of the firm's business.
descritta assumeva carattere prettamente occasionale, desthata com'era a1 If a partner has paid or been required t o pay creditors of the firm from
singolo affare ed alla singola spedizione: in alcune associazioni mercantili, his personal assets, he may expect his partners to contribute on an equal or
infatti, gli 'a~v~nturieri',doPo la divisioni dei profitti derivanti dalla vendita some other agreed-upon basis. If this copartners have become insolvent,
.delle merci e la liquidazione d i un cornpenso (commitment fee) agli admi- however, this remedy to the problem of unlimited personal liability may turn
nistratori dell* mmpagnia, erano liberi di participare ad altre spedizioni 0, out to be inadequate. The alternative of restricting a partner's liability to
- ~ ~ ~ .
\,iwversa. di rinunciarvi". third persons on a pro rata basis or of limiting it to the property held in com-
34 Astolfi, oh, cit., p. 38. mon never gained foothold in the common law. Unlimitd personal liability
35 Bonvicini, ob. cit., p. 137. A h asi, teniendo en cuenta que el con- has been one factor restricting the partnership form of business to small en-
trato de joint omture se caracteliza par tener un objeto limitado a la reali- terprises.
zacibn d e un especifico negocio, en base a un acuerdo d e corta duracibn, se Unlike the corporation, the parhlership is generally regarderd merely as
admitia en 10s Estados Unidas su diferencia con la pirtnership. Asi, en el a n aggregation of persons doing business under a common name and not as
precedent8 Aiken Milk vs. U. S., l a jurisprudencia se1ial6 qne el joint venture a legal person separate and apart from its shareholders. The implication of
no era m6s que "a special combination of two or more persons who, in some this is that the earnings of the partnership will he taxed only as personal cam-
specific venture, seek a profit jointly without any actual partnership or a cor- ings of the partners. Although corporations are usually organized to have
porate designation". TambiCn se lo caracterizb coma una partnership limi- perpetual existence, partnerships may be dissolved at any time upon withdra-
tada en su alcance y duracibn, en Ross vs. Willett: "a joint venture is a li- wal of a partner and by operation of law upon the death of a partner. Disso-
mited no limited in a statutory sence as to liability but as to lution may be avoided by issuing bansferable shares, but this device is not
scope and duration" (ambas citadas por Astolfi, ob. cit., ps. 55/58, nota 62). feasible except by a large organization, in which, as in the case of a carpo-
36 En el derecho anglosajbn, recordemos, la ~ a r t n e r s h ies
~ una asocia- ration> operating control can be centralized in a board of managers.
terioridad a1 act0 de adjudicacibn. De esta manera, si bien el
ci6n instrumental con respecto a1 primer acuerdo, y su raz6n d e adjudicatario es el consorcio -o mejor, cada uno de 10s oferentes
ser estriba en la necesidad de evitar la responsabilidad solidaria consorciados, en tanto que formando parte de tal consorcio-, el
de 10s socios, natural del contrato de joint venture. El ioint ven- contratista pasa a ser la nueva sociedad, sin perjuicio del mante-
t w e curpmation aparece asi como una cobertura hacia terceros, a nirniento de la responsabilidad solidaria y directa de 10s consorciados.
fin de garantizar al co-venturer la limitacibn de su respnsabilidad De estos antecedentes del derecho comparado pueden extra-
31. erse Ias siguientes concIusiones: a ) el joint venture no es una so-
Se ha definido a la ioint ventme corporation como la "organi- ciedad, ci siquiera una partnership propiamente hablando; b ) tan-
zaci6n comlin que revist'e la forma de la sociedad par acciones y to no es una sociedad, que cuando quiere dhsele 10s caracteres
que es poseida por otra sociedad 38, de manera que se la ha ca- de taI es neccsario recurrir a Ia constitucidn de una figura p s t e -
racterizado como una "corporation de iure" (personalidad y res- terior y accesoria, una sociedad ex profeso, el joint ventwe corpo-
ponsabilidad distinta de 10s socios) y una "partnership de facto" ration, que aun asi, bajo la figura de la close corporation, no al-
(carencia de personalidad y responsabilidad solidaria y directa canza a tener todos 10s atributos de una verdadera corpo~ation,
de 10s socios) 39. For supuesto que esta sociedad, que podemos p. ej., de una sociedad por acciones.
denorninar accesoria, ha sido tratada con gran recelo por parte de Ahora bien, ~ c 6 m oha sido delineada esta figura en nuestro
10s autores y la jurispmdencia, admitikndosela finalmente, aun- derecho?
que con importantes limitaciones con relacibn a1 rkgimen societa- !
I Ya se ha visto que en el orden legal, la primera regulacidn
rio comlin, en particular con respecto al nhmero de accionistas y I que contempld 10s principles aspectos de la institucibn fue la
la transferibilidad de las acciones. Por ello, la ioint wnture cw- I ley 22.460. de consultoria, que equivocadamente la define en su
poration ha sido denominada close corporation ".
Es importante tener en cuenta lo expresado en 10s pirrafos
1! art. 20, np. 4, como una "sociednd accidental o en participacidn",
lo que es inexacto, pues seglin lo expuesto en 10s pirrafos anterio-
anteriores, por cuanto en la prictica local existe una fuerte ten- i
res nuestro consorcio -como el joint venture del derecho corn-
dencia, manifestada a traves d e 10s pliegos licitatorios, de exigir a i parado- no posee ninguno de 10s atribntos societarios.
10s consorciados la constituci6n de una sociedad anbnima con pos- i De mayor ntilidad resultan, en cambio, las disposiciones d e 10s
i arts, 6'J y 9'J de la citada ley: a ) el consorcio se constituye pam
37 - - ~~.
Astalfi 06. cit... -DS. 13 Y 47/50. k realizar uno o rnis trabajos ( s e ~ c i o sde consultoria para esta ley)
88 Bonvicini, ob. cit., p. 181.
determinados; b ) solidaridad de. 10s consorciados frente a todos
30 Bonvicini, ob. cit., p. 183, tambien recuerda que en eI precedente
estadounidense "Jackson vs. Hooper" se sintetiz6 este fenbmeno, desde el pun-
10s efectos del eontrato principal celebrado con el comitente; c )
to de vista de 10s co-ventuteres, como "partners inter seses and a corporation la integracibn del consorcio es inmodificable mientras no concluya
as to the rest of the world". con la ejecucibn del contrato principal, salvo antorizaci6n expresa
4 0 htolfi, cit., p. 52, ex~licaque la i~ris~rudencia estadounidense
del comitente.
ha hecho posible el "mantenimiento delle peculiariti della relazlone dl joint
venture nely ambito di una struttura societaria ed a cio, contribui anche La prictica administrativa, a travks de 10s pliegos licitatorios
pragressivo riconocimento, in sede legislativa, della figura della close corpofa- aporta tambi4n datos para la regulacibn de este instituto:
tion quale tipo de societi a base personale, con un nnmero ristretto di azlo- a ) Se admite la partieipacibn en el procedimiento licitatorio y/o
nisti, direttamente impegnati nella gestione sociale, le cui azione non sono
libermeente trasferibili" y cita a lrraels en The Close Corporation end the con10 posterior contratante a "consorcios de empresas" (proyecto
laru, quien define la close corporation como "an enterprise in corporate Yacireti, contrato Y -CI, "01. A- en adelante Yacireti) o "empresas
form in which management and ownership are substantially identical. As a
integradas en consorcio" (Subterrhneos de Buenos Aires, concesi6n
result of that identity the participants consider themselves partners and seek de la red de subterrAneos, pliego bisico, en adelante Subterrineo)
to conduct the corporate affairs to a greater or lesser extent in the manner
Como se ve, se trata de una corporate en la forma, pero.
,.grupos de empresas" o "sociedades accidentaIes de dos o &s fir-
.. a- narlnershio".
nf
una partnership en la realidad.
mas" (ENACE, Central Nuclear Atucha 11, pliego A, obra Grue- catario deberi, dentro de 10s 15 dias de notificada la adjudicacibn,
sa, parte civil, en adelante, Atucha). constituir en Buenos Aires una sociedad anbnima que seri consi-
b ) Cada uno d e 10s consorciados deberi presentar l a totalidad ! derada, a todos 10s fines del contrato, como el concesionario. El
d e la documentacibn que se eaige del oferente individual (Yacire- (no se entiende cdmo un oferente individual puede constituir una
t i , 1.12.C; Subterrineo, 4.3). sociedad anbnirna mauteniendo el priucipio d e identidad entre
c) Los consorciados deberin unificar el domicilio y la per- adjudicatario y contratista) o 10s oferentes que deban constituir
soneria (Id. fuente citada en el punto anterior). una sociedad anbnima serin ante la municipalidad garantes soli-~
d ) Deberi tambikn ser acompafiado a la oferta el contrato darios lisos y llanos pagadores con renuncia a 10s beneficios de
consorcial, e n el que conste (Yacireti, 1.12.C): divisi6n y excusibn por todas las obligaciones del concesionario-
"1. El compromiso expreso de responsabilidad principal, so- emergente del contrato, debiendo firmar la correspondiente ga-
lidaria e ilimitada de todas y cada una d e las empresas asociadas rantia simultineamente con la firma de la contrata por la socie-
durante el proceso d e licitacibn, la ejecucibn total de la obra, el dad an6nima concesionaria y en el mismo instrumento. Hasta
cumplimiento de todas las obligaciones del contrato (de obra), ! tanto se apruebe y registre debidamente, la sociedad anbnima
su respnsahilidad patronal, su responsabilidad frente a terceros concesionaria actuari como sociedad en formacibn, siernpre con la
y a todas las demis obligaciones y res~onsabilidadeslegales y con- I
I garantia de 10s oferentes en la forma arriba establecida. Los
tractuales. ! oferentes serin garantes solidarios, lisos y llanos pagadores de to-
"2. El compromiso d e mantener la vigencia del consorcio o. das las obligaciones asumidas por la sociedad anbnima concesio-
asociacibn por un ~ l a z ono menor del fijado para la terminacibn naria hasta el momento de constituirse en forrna definitiva dicha
de las obras y, en todo caso, hasta que se hayan cumplido todas sociedad anbnima concesionaria. En ese momento seri la socie-
las obligaciones emergentes del contrato ( d e obra). dad anbnima concesionaria la respnsable principal d e todas las
"3. El compromiso d e mantener la composicibn del consorcio obligaciones asumidas . . . , sin perjuicio de la garantia que otor-
o asociacibn durante el tkrmino fijado en el inciso anterior, asi goen en el acto de la firma de la contrata 10s oferentes, en 10s
mmo
~- ~ tambikn de no introducir modificaciones en 10s estatutos de plazos convenidos y su ejecuci6n, d e acuerdo con lor proyectos
las empresas integrantes que importen una alteracibn de la respon- aprobados, asi como tambikn su responsabilidad por 10s defectos
sabilidad, sin la aprobacibn previa de Taciretd. o vicios .ocultos que dichas obras puedan presentar".
"4. El compromiso de actuar ante Yacireti durante ese mismo
Se prevk, ademis (numeral c ) , que "las acciones serin nomi-
lapzo, exclusivamente bajo la representacibn unificada que se re- nativas, no endosables, y su transferencia deberi ser previamente
quiere en este numeral.. .".
notificada a la municipalidad" (no aclara si la concedente podria
En algunos casos se exige o se permite la constitucibn de una
o p n e r s e a tal transferencia).
sociedad por acciones, posterior a la adjudicacibn, sin' perjuicio
de la subsistencia de la responsabilidad directa y solidaria de 10s Los contratos consorciales, a su vez, por lo cornGn rehnen
consorciados. El pliego d e Subterrineo, en el numeral 4.9 exige 10s siguientes elernentos Pi-incipales *':
que "cada adjudicatario (es que la adjudicacibn a un consorcio
supone, de por si, que hay varios adjudicatarios: todos 10s tonsor- 41 Astolfi, A., ob. cit., El contrnto intemnciond de joint venture, enu-
ciados) deberhn constituir una sociedad anbnima cuyo objeto so- mera como "elementos generalmente recurrentes en 10s contratos intemacia-
cial especifico serA el cumplirniento de ins obligaciones emergen- nales de joint centure" a 10s siguientes: a ) un aporte d e recursos complernen-
tes del contrato". En el pliego de condiciones d e la Municipal; tnrios; b ) mandato a la empresa cabeza d e grupo; c ) exclusibn de responsabi-
lidad solidaria (lo que en nuestro derecho no acurre por ser una exigencia
dad de la Ciudad de Buenos Aires para la constmccibn por conce- comdn en 10s pliegos licitarios, convirtikndose la responsabilidad solidaria en
si6n de obra p6blica d e las autopistas 25 de Mayo y Perito More- favor de la comitente de la obra en una caracteristica propia del "consorcio':);
no SP establece (numeral 1.6): "El oferente que resultare adjudi- d ) conrtituci6n d e u.11 fond0 de gestibn; e ) constituci6n de un cornit6 de g e s
a ) la voluntad de constituir el consorcio, con el reconocimien- peciales de 10s consorciados para afrontar necesidades extraor-
to de la plena solidaridad ante el comitente, sin perjuicio de la dinarias de caja.
delimitaci6n de responsabilidades entre las partes; Corresponde seiialar que el contrato consorcial podri prever
b ) sin perjuicio de la solidaridad, las partes pueden tam- la exclusi6n de algdn consorciado, voluntaria o como sancion, no obs-
bikn definir, juntamente con sus aportes de ejecuci6n (personal, tante que este liltimo continuarA solidariamente obligado ante la
direccidn, maquinarias, etc.), la constitucibn de un fondo c o m h comitente, sin perjuicio de lo que pueda preverse por las partes,
para satisfacer las necesidades de caja; conio se veri mis adelante. No ocurre lo mismo, en cambio, con
c ) administraci6n del consorcio; suelen establecerse tres 6r- la posibilidad de incorporar nn nuevo consorciado, pues esto con-
ganos: trariaria el principio de identidad entre el adjndicatario y el con-
1) el Consejo de Direccibn, integrado por todos 10s consor- tratista. Este punto debe tener el mismo tratamiento que la
-pistas, con un ndmero de votos conforme a la participacibn de cada cesi6n y subcontrataci6n de obra (infra, $ 22), la que ~610es vi-
uno. lida frente a la comitente si ksta la autoriza. Ademis, lo que es
2) la Empresa Lider, que es aquella cuya presencia es deter- mis grave, la falta de autorizaci6n puede traer aparejada no s610
minante para la obtenci6n de la adjudicaci6n, o bien la que eje- la inoponibilidad de la existencia del nuevo consorciado ( o cesiona-
cuta la mayor parte de las prestaciones comprometidas con la rio, o subcontratista), sino la rescisi6n del contrato de obra por
comitente, quien asume la representaci6n del consorcio frente a culpa del contratista.
la comitente y frente a terceros y designa a1 director de obra. En Con todos estos elementos es posible intentar una caracteri-
ocasiones, sin perjuicio del papel especial de la Empresa Lider en zaci6n del consorcio de empresas:
el Consejo de Direccihn, si se constituye una sociedad andnima a ) Es un negocio juridic0 " s e ~ c i a l " ,por cuanto esti al ser-
accesoria a1 consorcio (joint venture corpo~atwn) ksta es la que vicio de otro anterior, qne es su objeto y finalidad. En efecto,
asume la representacibn del consorcio hacia el exterior; el consorcio (en lo que aqni interesa) no se explica sino en fun-
3) la Direccibn de Obra, que si es unipersoal se confunde ci6n, primero, de la presentacidn de una oferta en una determinada
con el representante tkcnico de la contratista, quien supervisa y licitaciCln, y, luego, si esa oferta es beneficiada con la adjudica-
dirige la ejecuci6n de 10s trabajos de acuerdo con las instruccio- cibn, la ejecuci6n de la obra contratada con el comitente principal.
nes que reciba de la Empresa Lider. Es un contrato accesorio del primero (contrato de obra), por con-
El contraw consorcial contempla tambihn, como es 16gic0, las siguiente su suerte depende de la validez y subsistencia deI con-
sanciones mutuas para 10s supuestos de incumplimientos y proce- trato principal. El consorcio, como realidad juridico-material, es
dimientos para resolver las disputas entre 10s consorciados, sin un medio para la realizaci6n d e una obra ( d e otro contrato); en
perjuicio del reglamento interno que regula 10s aspectos de de- si mismo no tiene fin de lucro, pues 10s consorciados pretenden
talle (pero cruciales en la relaci6n consorcial) referentes a la com- lucrar con su propio esfuerzo aunque accidentslmente, dentro del
plementaci6n y coordinaci6n de 10s consorciados en la ejecucibn consorcio; no tiene vida propia, en defintiva, sino una vida abso-
de las obras (lo que dependeri de que la obra sea o no divi- lutamente ligada a1 contrato principal.
sible), organizacidn del pa501 y dep6sito de maquinarias, conta- b ) Desde este punto de vista, el consorcio no es mhs que una
bilidad intema, asignacidn de personal, etcktera. parte del m i m contrato de obra, ello sin perjuicio de que 10s
Por supuesto el contrato no podri dejar de contemplar c6mo consorciados puedan regular sns relaciones con la libertad nego-
se distribuirin 10s beneficios, asi como tambikn 10s aportes es-
cia1 consagrada por el art. 1197 del Cddigo Civil, per0 con 10s. li-
mites irnpuestos por el contrato de obra principal.
ti6n o de una sociedad 6rgano; f ) adquisici6n a titulo originario, pro quota, Esta consideraci6n del contrato consorcial en el marw del
del fruto de la inversi6n o del correspondiente al contrato convenido con el
comitente; g ) previsinn de una cl6usula cornpromisoria para resolver 10s con- contrato de obra permite analizar a1 primero desde dos perspec-
flictos entre 10s consorciados (ps. 51 a 86). tivas. Como ya se dijo, entre 10s consorciados se celebra un ne-
gocio juridico amparado por el amplio marco del art. 1197 de1 obra es directa y plena, sin importar 10s acuerdos internos (no
C6digo Civil. Pero el aspecto mis importante es su caricter ser- conocidos por el comitente) de 10s mismos consorciados, que s61o
vicial con respecto al contrato de obra, de tal manera que ello tendrin validez entre sf. Esta solidaridad, que es lo habitual en
convierte en parte necesaria del contrato de consorcio a1 mismo materia de obras phblicas, deberi ser establecida expresamente
comitente de la obra, pues en ese contrato consorcial no podrj en el contrato de obra. De lo contrario regiri el principio de la
pactarse ninguna estipulacibn, que, por comprometer la correcta no solidaridad establecida en el art. 381 de la ley 19.550.
ejecucibn de 10s trabajos contratados o las garantias del comitente En contra del principio establecido en el nuevo art. 381 de la
no sea aceptada por este hltino. N6tese que el contrato consor- ley de Sociedades Comerciales, entiendo que corresponde soste-
cia1 forma parte de 10s documentos que 10s oferentes -consorcia- ner la regla d e la solidaridad frente a1 comitente de la obra (sal-
dos- deben presentar en el proceso licitatorio, el que seri valo- vo pacto expreso en contrario, que deberi ser aceptado por el
rado juntamente con 10s restantes antecedentes a 10s efectos d e comitente), pues responde mejor a la naturaleza de la institucibn.
decidir la adjudicacibn, y que, precisamente, es aceptado p r la Nbtese que en el contrato de obra pliblica la admisibn del con-
comitente con el act0 de adjudicacibn. La adjudicaci6n, entonces, sorcio se justifica por la complementacibn de capacidades y res-
selaciona al comitente con el consorcio, lo bacen formar parte, ponsabilidades de 10s ejecutores de la obra, lo que dificilmente
desde su posicibn juridica, del conjunto de derechos y obligaciones seri divisible. El mismo inter& pliblico comprometido en el
que surgen de ese acuerdo. Esto no significa que el comitente contrato no admitiri esta divisibn, que ademis carece de utilidad
pueaa tomar parte de ninguna decisibn o actividad que haga a la prictica y seri, en todo caso, fuente de conflictos.
vida interna del consorcio, per0 si que, al aceptar el contrato con- e ) El contrato de obra se caracterizari por tener un comitente
sorcial en el act0 de adjudicacibn, como se dijo antes, asume tam- hnico y un constructor o contratista plural y solidario, pero sera
bikn 61 -el comitente- sus consecuencias en lo que correspnda. siempre el mismo contrato de obra.
Por ejemplo, y esto tiene especial significacibn, la cliusula de ex- f ) Los bienes aprtados serin de propiedad de 10s consor-
clusibn por snncidn de alglin consorciado no podri ser impedida por ciados individnalmente, seghn su aporte, sin perjuicio d e que exis-
el comitente, en la medida, insisto, que dP su aceptaci6n de taI tan bienes adquiridos en comin bajo el regimen del condominio.
regulacibn al adjudicar la oferta. Sin embargo, por efecto del con- g) Las obligaciones asumidas frente a terceros (no el comi-
trato de obra, y se destaca aqui la intima complementaci6n e in- tente) pesarin sobre quien las asuma, sin perjuicio del traslado
jerencia de 10s dos contratos, esta exclusibn (que el comitente no ir~ternode esa responsabilidad y salvo que la obligaci6n haya sido
podri impedir) no elirninari la responsabilidad solidaria del ex- asumida en nombre y por cuenta de cada uno d e 10s consorciados
cluido frente a dicho comitente, salvo que este lo autorice expre- en virtud de la existencia de un poder otorgado en tal sentido,
samente (la eximicibn de la solidaridad) o ello se haya, pactado que puede estar contenido en el mismo contrato consorcial, con
expresamente en el contrato de obra. excepcibn de aquellos negocios juridicos que requieran poder es-
c ) No es una sociedad, y la posibilidad de existencia de una pecial y de determinadas formas de emisibn (p. ej., escritura p6-
sociedad posterior (joint uenture cmporation) es un elemento in- blica).
trascendente y no esencial al negocio juridico: ni con respecto al h ) La quiebra de uno de 10s consorciados no importa la res-
contrato de obra principal, ni con referencia a1 consorcio en si cisibn del contrato de obra principal en la medida que ello no
mismo. Esta "nueva" sociedad tendri, en todo caso, efectos con
relari6n a terceros distintos del comitente de la obra (p. ej., pro-
veedores), aunque con las limitaciones en materia de exclusibn El art. 68 del Pliego d e Cl5usulas Administrativas Generales para la
Contrataciiin de Obras del Estado, ley d e Contratos del Estado, Espafia, dis-
de responsabilidades de 10s socios, que son inherentes a su calidad pone: "Cuando alguna d e las empresas que forman p a t e de una agmpaci6n
de sociedad gestora. temporal quede comprendida en alguna de las circunstancias previstas en 10s
d ) La solidaridad de 10s consorciados frente al comitente de la n6meros 4, 5 y 6 del art. 157 del Reglamento General d e Contrataci6n (muer-
afecte sustancialmente las garantias que benefician a1 comitente de la to la bace responsable exclusiva y sujeta, por ende, a las penali-
dbra. dades previstas, que pueden llegar hasta la rescisidn parcial del
i) Hendici6n de cuentas entre 10s consorciados, segiin lo pac- contrato;
tad0 en el contrato y, supletoriamente, conforme lo establezca la b ) frente a terceros la responsabilidad es ilimitada y solida-
legislacibn pertinente. ria si la obligaci6n fue contraida por el Comit.4 de Direcci6n o por
Completando lo expuesto cabe citar por su importancia co- la empresa mandataria de todos 10s contratantes. Si una de las
mo aporte al estudio del tema, que la Subcomisi6n de Asesores empresas se obliga por si, sin invocar la representaci6n de 10s de-
Legales de la Chmara Argentina de la Construcci6n, en el Sim- mBs, s610 ella es responsable. Si nna de las empresas se obliga
posio sobre Agrupamientos Empresarios, celebrado en la ciudad invocando la representacibn de las demhs, o del consorcio, sin
d e C6rdoba 10s dias 28 a1 30 de noviembre de 1980 43 aprobt, la estar facnltada para ello, se aplican las reglas del C6digo Civil
siguiente confignraci6n de 10s caracteres del contrato consorcial: sobre mandatos.
P u ~ mP~MKRO: Se denomina conkato de colaboraci6n y PUNTOQUINTO: Ila organizacinn del consorcio y las restantes
coordinaci6n empresaria no societaria, o contrato de consorcio de relaciones entre sus miembros serBn regidas por el acuerdo consor-
empresa, a la convencibn por la cual dos o mhs personas fisicas cial, el que no podrB:
o juridicas se comprometen a realizar en comhn una actividad, a ) limitar la libertad de actuacinn de 10s consorciados fuera
obra o sewicio que se caracterice como un negocio determinado, del Bmbito estricto del negocio que origina el consorcio;
concreto e individualizado. b) habilitar a1 consorcio para la realizaci6n de otros negocios
P m m SEGUNDO: El consorcio definido en el punto anterior no distintos a 10s que justifican su actuaci6n.
es sujeto de derecho. Carece de patrimonio propio, no tiene fin
PUNTOSEXTO: LOS estados contables y rendiciones de cuentas
d e lucro en si mismo y no es sujeto de obligacibn fiscal alguna. emitidas por quien tenga la facultad de administrar el consorcio y
P U NTERCERO:
~ El contrato consorcial se caracteriza por:
respecto de la actividad de Bste harhn plena fe a 10s efectos im-
a) 10s contratantes comervan su individualidad juridica y au- positives, tanto en el orden nacional como provincial y municipal,
tonomia de gesti6n; sin perjuicio de la verificacidn de la documentaci6n que 10s res-
b ) el cocsorcio tendrh un objeto referido a un negocio con- palde a realizarse en el Iugar previsto en el contrato consorcial.
creto, determinado, individualizado y temporal;
En la misma reunibn, el doctor Horacio Oyuela produjo, con
c) el tiempo que demande cumplii el objeto propuesto sa- la aceptaci6n de 10s asistentes, el siguiente informe, que transcri-
iialarB la duraci6n del contrato.
PUNTO CUARTO: Responsabilidad: Corresponde distinguir en- bo en su parte medular:
tre las empresas contratantes y frente a terceros: 'La vinculaci6n que nos ocupa constituye un fendmeno tras-
a) entre las empresas la responsabilidad surge del cont'rato, es cendente en la actualidad empresaria y de efectos importantes en
individual y mancomunada. Cada conkatante asume ciertas obli- el proceso de la produccidn y ejecucidn de obras. Por lo tanto,
gaciones exigibles a todo lo largo de la relaci6n. El incumplimien- y atendiendo a razones de buena tBcnica juridica, corresponde dar-
le el lugar que le corresponde trasladando a la ley escrita, como
tantas veces, una figura que la realidad y la prBctica tienen ya
te, extincibn d e la personalidad juridica, declaracibn d e quiebra o d e suspen- delineada con claridad, aunque presente distintas variantes.
si6n d e pagos), la Administracih estari facultada para exigir el estricto cum-
plimiento de 1;s obligaciones pendientes del contrato a las restantes empresas
"En tal tesitura, optamos por el contrato d e 'consorcio', que
que formen la agrupacih temporal o para acordar la resoluci6n del mismo . se reconoce cuando dos o mhs empresas -constituidas o no bajo
48 Contb con la presencia de 10s abogados Zavalla, Oyuela, JuliBn del forma societaria- se vinculan temporalmente con el objeto de
del Campo, Palmero, Morera, Babino Garay, Maraggi A c u h , Garcia Rajo y realizar sus principales fines, o detenninada Brea de su actividad,
Barra, miembros de la citada subcomisibn d e Asesores Legales de la CQmara consemando su independencia juridica y bajo una direcci6n hnica.
Argentina de la Construccibn.
sas". Se reitera que en esta obra se mantiene el thrmino "con-
"La denominaci6n 'consorcio' se propone, par ser la mis usa-
sorcio" p r ser el m i s utilizado en la prictica nacional y ademas
d a en nuestro medio, sin desconocer su significado polivalente en
por resultar m i s representativo de la individualidad y diferen-
otros paises y sistemas iuridicos.
"Este contrato encuadra en la categoria d e 10s contratos de ciaci6n del institute juridico. En definitiva, si bien el consor-
cambio, por oposicidn a 10s denominados asociativos. Esto 10 ex- cio es por naturaleza una uni6n transitoria de empresas, no toda
reuni6n transitoria de empresas es necesariameute un consorcio.
cluye de las formas societarias tipificadas en la ley 19.550 y d e las
asociaciones reconocidas por el C6digo Civil, para situarlo en el Tambihn en el derecho comparado, seglin ya fue destacado
c a m p de 10s contratos comerciales. m i s arriba (p. ej. art. 20 de la ley italiana 59J, que regula la
"Dentro de l a categoria iudicada, el vinculo que analizamos adecuaci6n del prccedimiento d e adjudicaci6n de 10s "appalti d i
presenta 10s caracteres de 10s contratos parciarios, en especial el Zavori pubblici" a las directivas d e la Comunidad Econ6mica Eu-
,de asunci6n de u n riesgo en el proceso productivo. ropea), se suele utilizar la expresi6n "associazione t e m p r a n e a di
"Caracteres. Pueden seiialarse 10s siguientes: imprese", lo que es asimismo criticado por la doctrina: "si tratta
"a) contrato de cambio; tuttavia di un termine inesatto, certamente non coerente . . . , pro-
"b) de naturaleza mercantil; prio con la disciplina intema che del reaggruppamento.. ." que
"c) plurilateral: pueden intervenir varias empresas, su nli- regula la misma ley 584 4 4 . Es tan~bikn criticable la incorpra-
mero no esti limitado ni encaja en la bilateralidad clisica. Todas ci6n de esta figura e n la ley de Sociedades, pues el consorcio o
.,uni6n transitoria de empresas" no es, como la misma ley lo de-
y cada una de las empresas asume obligaciones respecto de las
demis y adquiere derechos frente a las demis; clara, una sociedad. De ahi que, metodol6gicamente, no se com-
"d) aleatorio: lo distingue la asuncibn de un riesgo en el pro- prenda el porquk de su inclusi6n en ese texto normativo.
ceso productivo; El art. 37'7 establece muy claramente el caricter "servicial"
" e ) no reciprocidad: las prestaciones no son reciprocas, en el del contrato d e consorcio, a1 sefialar que el mismo se constituye
,para el desarrollo o eiecuci6n de una obra, servicio o suministro
,
sentido del sinalagma cl&sico; estin sujetas a las alternativas y
necesidades d e la actividad emprendida; concreto". El contrato consorcial podrin celebrarlo las socieda-
" f ) oneroso: cada contratante se vincula para lograr un fin des ronstituidas en la repliblica y 10s empresarios individuales do-
lncrativo, direct0 o indirecto; miciliados en ella, asi como tambikn las sociedades constituidas
" g ) no formal: puede celebrarse por escrito o verbalmente. en el extranjero, las yue deberin, a tal efecto, cumplir con 10s
E n el primer caso esti desprovisto de solemnidades; requisitos que, para el ejercicio habitual en el pais d e 10s actos com-
" h ) de duracibn limitada: el t i e m p que demande cumplir la prendidos en su objeto social, o para establecer sucursal, asiento o
actividad propuesta sefiala la duracibn del contrato. cualquier otra especie de representaci6n permanente, establece
"Prueba. Puede probarse p r cualquier medio de prueba de el art. 118, pirrafo 3e d e la ley de Sociedades Comerciales. Na-
10s contratos. En nuestro rkgimen juridico se aplican 10s articu- turalmente, para la ejecuci6n del contrato de obra phblica 10s
10s 207 y siguientes del C6digo de Comercio." consorciados deberin tambibn estar inscriptos en el Registro Na-
cional de Constructores d e Obra Pliblica, seglin las exigencias de
la reglamentacibn del mismo y d e 10s pliegos d e cada licitaci6n
en cuesti6n.
Como novedad, el art. 380 d e la ley de Sociedades Comercia-

Como ya fue dicho, la reciente reforma d e la ley d e Socieda- 4' Pallotino, M., en la publicaci6n conjunta Le norm di ndeguamento

des Comerciales 19.550, establecida por ley 22.903, regula el ins- olle direttke CEE in materia di appalti di laoori pubblici, Giuffre, Mil&,
1979, p. 181.
tituto del consorcio, a1 que denomina "uni6n transitoria de empre-
les obliga a la inscripci6n del contrato consorcial y del documento 10) Las condiciones de admisi6n de nuevos miembros.
en que se designa a1 representante del consorcio (si es que esta 11) Las sanciones por incumplimiento de obligaciones.
designacibn no esti incorporada al mismo contrato consorcial) en 12) Las normas para la confecci6n de estados de situaci6n..
el Registro Phblico de Comercio, disposici6n que tiende a prote- a cuyo efecto 10s administradores llevarin, con las formalidades
ger 10s intereses de terceros que puedan tener relaciones con el establecidas por el C6digo de Comercio, 10s libros habilitados a
consorcio, otorgindole a Qste la publicidad debida. nombre de la uni6n que requieran la naturaleza e importancia de.
El consorcio, que como lo establece el art. 377 de la ley de la actividad comhn.
Sociedades no es ni sociedad ni sujeto de derecho, se constituye El art. 379 prevk la designaci6n de un representante comlifi
a traves de un contrato celebrado por instrumento pbblico o pri- de todos 10s consorciados cuyo mandato no podri ser revocado
vado el que, seg6n el art. 378, debe expresamente regular y prever: sino mediando justa causa, la que debe ser valorada .y decidida
1) El objeto con determinaci6n concreta de las actividades por el voto de la mayoria absoluta de 10s consorciados.
y 10s medios para su realizacibn. Esta mayoria, en carnbio, se convierte en unanimidad cuan-
2) La duracibn, que seri igual a la de la obra, servicio o do se trata de adoptar cualquier otra decisi611, salvo que el wn-
suministro que constituye el objeto. trato consorcial establezca lo contrario (art. 382), pudikndose
Estas disposiciones ratifican el caricter "servicial" del con- fijar distintas clases d e mayoria para distintos t i p s de decisiones.~
trato d e consorcio y su esencial vinculaci6n con el contrato ( d e Como ya fue dicho, seghn el articulo 381 la solidaridad entre
obra en lo que aqui interesa) para el cumplirniento del cual se 10s consorciados no se presume, principio que es criticable, segbn
constituye. las razones (confirmadas por 10s antecedentes del derecho com-
3) La denominacibn, que seri la de alguna o algunos o de parado) expuestas en 10s pirrafos anteriores. No obstante, en
todos 10s miembros, seguida de la expresibn "uni6n transitoria el contrato consorcial, para las relaciones entre 10s socios, o en el
de empresas". contrato principal para el cumplimiento del cual el consorcio se
I constituye, podri establecerse la responsabilidad s ~ l i d a r i a ~la~ ,
4) El nombre, raz6n social o denominacibn, el domicilio y
10s datos de la inscripci6n registral del contrato o estatuto o de que, en el segundo caso beneficiari exclusivamente a1 comitente
de la obra o contratante del servicio o suministro, independien-
la matriculaci6n o individualizaci611, en su caso, que corresponds
a cada uno de 10s miembros. En caso de sociedades, la relaci6n temente de lo que ocurra en la relacidn entre consorciados y frente
de la resoluci6n del 6rgano social que aprobi, la celebracibn de a otros terceros. Asi fue tratado en otras legislaciones, como en
el caso de la ley italiana 584, que en el art. 21 establece: ' X p
la uni6n transitoria asi como su fecha y nhmero de acta.
offerta delle imprese riunite determina la loro responsabiliti so-
5) La constituci6n de un domicilio especial para todos 10s lidale nei confronti del soggetto appaltante".
efectos que deriven del contrato de uni6n transitoria, tanto entre
las partes como respecto de terceros. El art. 383 establece otro principio importante: la quiebra
de cualquiera de 10s consorciados, o la incapacidad o muerte de
6) Las obligaciones asumidas, las contribuciones debidas a1
10s empresarios individuales, no va a provocar la extinci6n del
Fondo Comlin Operativo y 10s modos de financiar o sufragar las
contrato consorcial, el que continuari con 10s miembros restantes
actividades comunes en su caso.
si es que kstos acuerdan la forma de hacerse cargo de las presta-
7) El nombre y domicilio del representante. ciones del comitente.
8) La proporci6n o mktodo para determinar la participa-
No obstante este principio legal, debe recordarse que el co-~
cibn de las empresas en la distribuci6n de 10s resultados o, en
su caso, 10s ingresos y gastos d e la uni6n.
9) Los supuestos de separaci6n y exclusibn de 10s miembros 4 5 Conf. Cassagne, J. C., Los conrorcios o uniones tram'torins de em-.
y las causales de disoluci6n del contrato. :?resas en la conlratacidn dmtnnistrdiua, ED, del U) de octubre de 1983.
mitente, a1 adjudicar el contrato de obra luego del correspondien- prkctica de las exigencias de la justicia distributiva, en particular
te procedimiento de seleccibn, ha tenido en cuenta la conforma- hacienda uso del 'vinculo de comparaci6n" que, dentro de la es-
ci6n del consorcio coma tal, es decir con la totalidad de sus in- tructura de esa especial relaci6n de justicia, permite determinar el
tegrantes, en funci6n de sus cualidades individuales y con la nueva alcance de la "igualdad coma medida", elemento esencial en toda
calidad o competencia para ejecutar la obra que surge de la ~elaci6nregida por la virtud de la justicia 4 8 .
complementaci6n de 10s consorciados. En la ocasi6n pertinente se expondri y desarrollari en quk
Por ello no puede imponkrsele a1 comitente la obligaci6n de medida el procedimiento de selecci6n de contratista transmite sus
continuar la obra con un consorcio cuya integraci6n puede conver- efectos sobre el resto d e la vida de la relaci6n contractual, en la
tirse en diferente de la que se tuvo en cuenta en el momento de que, potenciahente, la presencia 'lirtuaI" de las restantes ofertas,
decidir la adjudicacibn, principio que vale no s610 para el su- no beneficiadas con la adjudicacibn, no puede ser descartada.
puesto de la quiebra o incapacidad d e uno de 10s consorciados, Como uno de 10s requisites mis determinantes para decidir
sino tambibn en lo que toca a cualquier otra forma de modifica- la adjudicaci6n es la "persona" del oferente (normalmente se tra-
ci6n de la composici6n del consorcio par admisi6n de nuevos tar5 de personas juridicas sobre las que se valorari su experiencia,
miembros, o exclnsi6n o modificaci6n de 10s miembros existeutes. antecedentes tkcnicos, correcci6n en la ejecuci6n de otros con-
Sin embargo, en aquellos supuestos en que puede demos- batas, certificaciones emanadas del Registro de Constructores,
trarse que la exclusi6n de un consorciado (por cualquier raz6n, solvencia patrimonial y financiers, etc.), no cabe dudas de que
incluyendo su quiebra) no afecte la capacidad y solvencia del cualquier alteraci6n posterior, no rigurosamente justificada, en la
consorcio en sf mismo, el comitente no podri negarse a continuar persona del contratista importari una grave contradicci6n con la
con la ejecuciin del contrato, ya que careceria de causa para regla de la comparaci6n que presidi6 todo el procedimiento de
ello. Aun asi, el comitente principal mantendria su poder de selection del contratista.
veto en relaci6n con la incorporacibn de nuevos consorciados, pox En definitiva, por la via de la cesi6n del contrato, e incluso
aplicacibn de 10s mismos principios que rigen en materia de cesi6n de la subcontratacibn total o parcial del mismo, se puede llegar a
y subcontrataci6n del contrato, que se veri en el parigrafu si- burlar la exigencia legal del debido procedimiento d e selecci6n
guiente. previo a la contrataci6n. Por tal motivo, las normas que regu-
La ya citada ley italiana 584 otorga, par ejemplo, una opcibn Ian el contrato de obra phblica han tratado a la cesibn y subcon-
en favor del comitente que, en caso d e quiebra de la empresa trataci6n con un criteria absolutamente restrictivo.
mandataria del consorcio, podrfi admitir la designacibn de otro Asi, el art. 23 de la ley 13.064 textualmente dispone: " F i r m
mandatario o tener par resuelto el contrato. En cambia, si la do el contrato, el contratista no padrci transferirlo ni cederlo, en
quiebra es de una de las empresas mandantes (el resto de .las con- todo o en parte, a otra persona o entidad, ni asocierse para m
sorciadas), Ia responsabilidad por la parte del fallido es asumida cumplimiento, sin nutoriurci6n o aprobacidn de autoridad c m p e -
par la empresa capogruppo (art. 23). tente", !legando a sancionar la cesi6n o subcontratacibn no autori-
zada con la resoluci6n del contrato por culpa del contratista, con-
forme lo dispone el art. 50, inc, d ) de la misma ley.
Una disposici6n semejante esti contenida por el art. 19 de
4 7.2. CESI~N
DEL CONTRATO Y 3-TACI~N
la misma ley, aun cuando referida a una situaci6n anterior a la
contrataci6n: el articulo autoriza la cesidn de 10s derechos emer-
Como se veri mis adelante, el contrato de obra del sector gentes de la calidad de oferente o adjudicatario, sujeto a la apro-
p6blico es, salvo raras excepciones, resultado de un procedimien-
to de selecci6n del contratista particular en el que la Administra-
ci6n comitente ha seleccionado la mejor oferta en una aplicaci6n 46 Barra, ob. cit., Principios.. ., ps. 120/123.
baci6n de la "autoridad competente" que, a falta de previsi6u mente, la ejecuci6u material de la obra quede a cargo de un su-
expresa, no puede ser otra que el 6rgano competente para adju:~ jet0 distinto del contratista.
dicar la oferta. Esta aprobaci6n seri siempre exceptional, y las. El mismo principio d e ejecuci6n personal del contrato 4 8 tor-
causales que justifiquen la pretendida cesi6n deberhn ser analiza- na invAlida tal subcontrataci6n de no contar con la expresa au-
das restrictivamente por el 6rgano con competencia para resolver. torizaci6n de la comitente. En este sentido, la situaci6n es id&-
La norma dice que el cesionario deberi ofrecer, "por lo menos",. tica que en el caso de la cesi6n, si bien en el subcontrato la rela-
iguales garantias -se refiere a la garantia de oferta, pero, si ci6n contractual original se mantiene inmodificada, en la medida
la adjudicaci6n ya fue efectuada, se puede interpretar que el le- que dicho subcontrato origina simplemente un vinculo contrac-
gislador esth pensando en la garantia del contrato (art. 21, ley de tual de derecho privado entre el contratista principal y el sub-
Obras Pliblicas national) y tambikn en 10s requisitos de calidad y contratista, sin efectos sobre la comitente, ni aun en el caso de
solveucia personales del oferente-, lo que indica que la Adminis- expresa autorizacibn, ni tampoco en 10s casos en que, por la natu-
tracibn tiene derecho, por motivos fundados, a exigir una me- raleza especial de la obra, la subcontratacibn esti autorizada en
jora de la garantia ofrecida por el cedente. '10s mismos pliegos licitatorios, admitikndose la nominaci6n del o
Corresponde destacar que el supuesto en examen se refiere los subcontratistas en la oferta.
Aun en estos casos la relaci6n contractual principal s61o al-
a la cesi6n o transferencia de la situacibn juridica del contratista
canza a1 contratista que result6 tal por haber sido adjudicada su
en la relaci6n contractual (la que puede ser total o parcial), de I
.oferta, provocando s610 el derecho de la comitente a exigirle que
manera que el originalmente contratista queda sustituido en for-
ma tambikn total o parcial, en su calidad de constructor en el ponga en prhctica el subcontrato indicado en aquella oferta. Pero
I
contrato. Distinta es la situaci6n de la cesi6n del crBdito del no hay relaci6n juridica entre Administraci6n y subcontratista.
Para Cianflone el caricter personal del contrato de obra pli-
contratista por el pago del precio de la obra, tema que se exami-
narb mis adelante.
1 blica impide a1 contratista transferir a otro su posici6n contractual,
i asegurando asi la inmutabilidad del sujeto contratante. Con el
Ante la clara disposicibn de la ley, la cesi6n s610 seri vhlida
de ser expresamente aceptada por la Administracibn, no bastando 1 mismo sentido, la prohibici6n del subcontrato (mbappalto) en-
cuentra su raz6n en la necesidad de impedir que el cumplimiento
para ello la mera notificaci6u. La invalidez de la cesibn, efec- I
del trabajo pueda generarse en la acci6n d e una persona distinta
tuada sin la aprobaci6n de la comitente, alcauza tambikn la rela- del contratista 4B.
ci6n cedente-cesionario, puesto que tal contrato de cesibn, por asi 1 En definitiva, el contrato de obra p6blica puede caracteri-
I
disponerlo la ley, se encuentra condicionado a la expresa autori-
zaci6n administrativa. De lo contrario, se trataria de un contrato.
con objeto prohibido.
I
I
zarse por el hncer (ver i n f ~ a ,Cap. N, $ 2 5 ) , a pesar de que Bste,
e n si mismo fungible, no excluye que la calidad de la persona

Si la cesi6n es aceptada por la Administracibn, el cesionario. I seleccionada en el procedimiento licitatorio pudo ser determinante
del consentimiento del comitenteKO,lo que de por si excluye la
se substituye a1 cedente en todos 10s derechos y obligaciones emer- I
i
gentes del contrato de obra pliblica, si bien la comitente puede
subordinar su autorizaci6n a1 mantenimiento de la responsabili- 49 Cianflone, ob. cit., ps. 24W7.47.
dad del cedente 4 7 . 60 MOIOZZODella Rocca, F., L ' a d o neUa giurisprudenza, Cedam, Pa-
La subcontrataci6n, en cambio, no sustituye la figura del con-. dua, 1972, p. 32:
tratista principal, sino que simplemente hace que, total o parcial- "I1 fatto che l'adempimeuto dchieda di regola una organizzazione di tipo
imprendiotoriale non B senza rilevanza per quanto attiene alla assunzione della
qualiti di parte nel nesso contrattuale, dal momento che la capaciti professio-
nale e produttiva dell'appaltatore puh essere ben determiiante per la scelta
47 Diez, ob. cit., Derecho odrnin*.tratioo, t. 111, p. 49. che il committente fa della sua persona: su quella capaciti, prima che su
Asi, por ejemplo, la ley de obras phblicas de Neuqukn, 687,

~i
posibilidad de la cesibn o subcontratacibn, salvo la expresih~:del.
consentimiento positivo del mismo comitente, decisibn que queda y su decreto reglamentario 108/72 (Pliego General 'Unico de Bases
librada a su exclusiva voluntad sin posibilidad de revisihn judicial, y Condiciones para la Contratacibn de Obras Phblicas):
salvo arbitrariedad manifiesta, la que deberh ser interpretada en I "5.1.43 No puede el contratista efectuar subcontratacidn ni
sentido restrictive. Pero ahn, no debe olvidarse, tal consentimien- asociacidn alguna sin la previa autorizacibn de Ia Administracibn.
to de la Administracibn comitente deberi ser excepcional, pues Esta autorizaci6n no exime a1 contratista de sus responsabilidades
no queda librado a la voluntad de la Administracibn phblica el ( L e y art. 43).
violar las reglas de la justicia distributiva que privaron en la elec- "5.2.43 1. El contratista pediri por escrito la autorizacibn para^
cibn de la oferta mas conveniente durante el procedimiento de subcontratar en cuya solicitud d a d el nombre del subcontratista,
seleccibn del contratista. la forma de contratacidn y las referencias de aquel, debiendo ser
Por ello, distintas normas reguladoras del contrato de obra personas de probada capacidad, a juicio exclusivo de la Adminis-
pfiblica condicionan detalladamente la posibilidad de autorizar tracihn, de acuerdo con la naturaleza de 10s trabajos. Deberh acom-
la cesibn o el subcontrato. pariar, asimismo, copia con certificacibn de firmas por escribano
phblico del contrato respectivo.
"Los subcontratistas se ajustardn estrictamente a ?as disposicio-
-~~
omi alho elemento ~atrimoniale,egli pub infatti fondare le sue aspettative
di esatto adernpimento.
~~ ~
I
I nes contractuales que rijan para la ejecucibn de la obra para el
La normale fungibilitB del focere dedotto in obbligazione non esclude
affstto, percib, cbe l'identiti o la qualit& della persona dell'appaltatore POS-
sano essere determinanti del consensa del committente. Anche rispetto alla
i contratista, no creando a la Administracibn obligacibn ni responsa-
bilidad alguna.
-
"2. En caso de autorizarse la co-asociaci6n de empresas, la
persona del committente trowre applicazione la comune disci~linadel- Administracibn estableceri las condiciones en aue admitirk la rnis- .-
l'errore (articolo 1349, n. 3, Cod. Civ.), ma B certo che essa presenta maggiore ma, quedando 10s asociados obligados solidariamente hacia aqub-
interesse in relazione alla persona dell'appaltatore.
I1 legislatore sembra, peraltro, avere dato in via generale rilevanza all'inte- Ila ( R e g . a?%.43).

I
lesse del committente alla immutabiliti della persona dell altro contraente, non "5.1.44. La ~dministracibnpuede autorizar Ia transferencia o
solamente ponendo un limite alia facolti dell'appaltatore di sostituire altri a s6 cesibn del contrato, siempre que se cumplan 10s siguientes re-
nella esecuzione dell'opera o nella prwtazione del servizio, ma anche riservando quisitos:
a110 stesso committente facolth di recess0 in caso di morte dell'appaltatore ben
oltre i limiti dell'art. 1671, Cad. Civ. Di qui I'ipatesi c l ~ ela fiducia caratterizzi a ) que el cesionario, inscrito en la especialidad correspon-
il contratto d'appalto. diente en el Registro de Constructores y Proveedores de Obras
E: particolarmente in relazione a1 divieto di subappalto (art. 1656, Cod. P6blicas tenga capacidad disponible suficiente;
Civ.) che la giurispmdenza si k talora posta il problema della rilevanza del- i
b ) que el cedente haya ejecutado no menos del 30 % del
l'intuitus personae nel contratto d'appalto. Non sono mancate decisioni, in
cui si B parlato esplicitamente di contratto stipulate appunto intuitu PeTsonae,
ma non sembra che da tali affermazioni passano essere desunti elementi in
i1 monto del contrato, salvo causa debidamente justificada;
C) que el cesionario sustituya las garantias de cualquier na-

I
favore di un orientamento gi~ris~rudenziale in tal senso fuori dei limiti delle turaleza que hubiese presentado o se le hubiesen retenido a1 ce-
-.
soecie decise. Allo stato si nub dire solamente che in difetto di autorizzazio-
ne del committente a dare in subappalto l'opera od il servizio promessi l ' a ~
dente ( L e y art. 44)".
paltatore non potri neppure utilmente cedere il contratto, nB conferirlo in Tambikn la ley de la materia, 4416 d e la provincia de Meu-
societi; come non p t r i trovare luogo Yadempirnento da parte di un terzo doza:
(art. 1180, Cod. Civ.), posta ciie il divietu di subappalto sembra presupporre ''Art. 33 - La Administracihn podri autorlzar la transferencia
la deduzione in contratto di un interesse del creditore ad ottenere I'adempi-
mento dall'appaltatore e soltanto da lui. Si veda in proposito la sentenza o cesibn del contrato en casos debidamente justificados. El ce-
della Suprema Corte no 2437 del 27 ottabre 1961, nella quale i l problema sionario deberh reunir condiciones similares a las del cedente, que-
della opponibiliti al committente del conferimento del contratto di appalto dando kste solidaria y mancomunadamente responsable.
in una societi di persone b stato risolto plesemente sulla base della afferma- "Asi~nismo el contratista podri subcontratar parcialmente la
zione del carattere fiduciario del rapporto".
obra, previa autorizaci6n de la Administracibn, lo que no le exi- Y tanbikn la ley de obras pdblicas 6351 de la provincia de
miri de sus responsabilidades, tanto contractuales como laborales, Entre Rios:
impositivas y previsionales, ni estableceri relacibn directa entre "Art. 43. - No puede el contratist2 efectuar subcontratacibn ni
10s subcontratistas y la Administracibn, salvo lo dispuesto en el asociacibn alguna, sin la previa autorizaci6n de la Administracih.
pirrafo anterior. Esta autorizacibn no exime a1 contratista de sus responsabilidades.
"En 10s casos que por sus caracteristicas 10s considere convenien- "Art. 44. - La Administracibn puede autorizar la transferencia
te, la Administracibn ~odr.4exigir en 10s pliegos que deterrninados o cesibn del contrato siempre que se cumplan 10s siguientes re-
~ubcontratistasestan inscritos en el Registro de Constructores. quisitos:
"Cuando por razones exclusivamente tkcnicas la Administracibn a ) Que el cesionario, inscripto en la especialidad correspon-
!
s e vea obligada a la ejecucibn de trabajos por contratos separados i diente en el Registro, tenga capacidad dispouible suficiente.
I
o por subcontratistas seleccionados en licitaciones por ella exigi- I b ) Que el cedente haya ejecutado no menos del treinta por
das, siempre que el adjudicatario sea impuesto por la Administra- I cieoto (30 %) del monto del contrato, salvo causa dehidamente
cibn, el contratista, sin perjuicio d e su responsabilidad p r la con-
ducci6n de la obra general, quedari eximido de responsabilidad I justificada.
por las demoras, incumplimientos, deficiencias y perjuicios que sz c) Que el cesionario sustituya las garantias de cualquier na-
turaleza que hubiese presentado o se le hubiese retenido a1 cedente".
originen por dicho motivo, teniendo derecho a que la Administra-
cibn le indemnice 10s gastos improductivos y 10s perjuicios que se Del mismo mod0 la ley 76 (decreto-ley), de la provincia de
originen por causa del cumplimiento deficiente de aqukllos". Ealta:
Asi, la ley 286 de la provincia de Rio Negro: "Art. 56. - Firmado el contrato, el contratista no podri trans-
''Aqt. 39. - El contratista de una obra, si el ministerio lo acep- ferirlo ni cederlo, en todo o en parte, a otra persona o entidad, ni
t a , podri hacer transferencia de su contrato mediante 10s siguien- asociarse para su cumplimiento sin autorizacibn y aprobaci6n de
tes requisites: autoridad competente.
a ) Que el cesionario inscrito en la especialidad correspon- "Podri autorizarse la transferencia sblo como excepci6n y en
diente en el Registro de Licitaciones tenga capacidad tknico-fi- casos plenamente justificados, siempre que el nuevo contratista
nanciera suficiente para la totalidad del contrato original y que rehna, por lo menos, iguales condiciones y solvencia tkcnica, fi-
el saldo de dicha capacidad supere el monto d e obra que falta nanciera y moral".
ejecutar. El proyecto de ley de obras phblicas de 1977 incorpora una
b ) Que el cedente haya ejecutado, a1 tiempo de la cesibn, no regulacibn similar:
menos del treinta por ciento (30 % ) del monto de 10s trabajos.
"Art. 35. - La Administracibn podri autorizar la transferencia
c ) Que si exi'stiere financiacibn bancaria, el crkdito se encon-
trare cancelado. o cesi6n del contrato en casos debidamente justificados. El ce-
sionario deberi reunir iguales o mejores condiciones que el ce-
d ) Que el cesionario, presente documentos que sustituyan a
dente.
12s garantias de cualquier naturaleza que hubiera presentado o se
le hubiere retenido a1 contratista cedente. "Art. 36 - El contratista podri subcontratar parclalmente la
"A 10s efectos de lo previsto en el inciso c ) , toda instituci6n obra, en cuyo caso deberi pone110 en conocimiento de la Admi-
bancaria o de cr6dito esta obligada a presentarse dentro de 10s nistracibn, lo que no lo eximiri de sus responsabilidades ni esta-
quince (15) dias de otorgada la financiaci6n a1 contratista para bleceri relacibn contractual directa entre 10s subcontratistas y la
una obra, denunciindola a1 ministerio y a la Contaduria General Administracibn, salvo lo dispuesto en el articulo 41. En 10s casos
de la provincia. La no presentaci6n en tkmino eximiri de las que, por sus caracteristicas, lo considere conveniente, la Admmis-
,exigencias del inciso c)". tracibn podrh exigir en 10s phegos que deteminados subcontra-
tancial del contrato, de orden pbblico, que "no se sustenta en l a
tistas estkn inscritos en el Registro Nacional de Constructores d e mpral o antecedentes del tercero que concurre a ocupar el lugar
Obras Phblicas 51".
cedente, sino en 10s contenidos de interks phblico que tienen 10s
Es por estas razones que, dentro de 10s par 61 llamados "Ele- contratos adrninistrativos" 52.
mentos
---- ~- Esenciales de la Contractualidad Adrninistrativa", Fiorini
Sin embargo, este principio no es absoluto y queda sometido
destacaba en primer lugar a la "incesibilidad", a1 contrario de lo
que ocurre en el derecho privado. En el campo del derecho ad-
ministrativo, en cambio, y particul&mente en la contrataci6n ad- ( 3 ) The Contractor shall make good any loss suffered or expense in-
ministrativa, el principio de la incesibilidad es un elemento sus- curred by the Authority by reason of any default or failure, whether total or
partial, an the part of any sub-contractor or supplier".
61 En el derecho cornparado se han elahorado similares regulaciones,
En la legislacibn espariola, el Reglamento General d e Contratacibn del
Ectadn
-.e.qtnhlpce.
....
por eiemplo, en el derecho inglks las General Conditios of Goverment Con-
~~ ~

"Articulo 182.-Los derechos dimanantes .de un contrato d e obras pa-


tracts for Building an Civil Engineering Works (edici6n setiembre de 1977)
drdn ser cedidos a tercero siempre que las cualidades personales o tkcnicas
estahlecen:
del cedente no hayan sido razbn determinante d e la adjudicacibn del con-
"30 ( 1 ) The Contractor shall n o t sub-let any part of the Contract with-
out the previous consent in writing af the SO. trato (articulo 58 L.C.E.). El cesionario quedari suhrogado en todos 10s
derechos y obligaciones que correspondian a1 cedente. Articulo 183. Para
(2) In every case of sub-letting in connection with the Contract the
sue 10s adiudicatarios puedan ceder sus derechos a tercero deherin cumplirse
Contractor shall enter into a sub-contract which, in addition to the power to
10s sieuientes reauisitos:
determine referred to in Condition 44(6) shall include:
1. Que la Administracibn autorice expresarnente y con caricter previo
( a ) a provision to the effect that from the commencement to the com-
la cesi6n.
pletion of the subcontract all things for incorporation belonging to the person
2. Que el cedente tenga eiecutado a1 menos un 20 por 100 del presu-
who enters into the sub-contract which are brought on the Site in connection
puesta total del contrato.
with the subsantract shall vest in the Contractor subjEct t o any right of the
3. Que se formalice la cesibn en escritura pkblica (art. 58 L.C.E.).
Contractor to reject the same;
Articulo 184. Salvo que el contrato disponga lo contrario o que de su na-
(h) such provisions as may be necessary to enable the Contractor to
turaleza y condiciones se deduzca que la obra ha de ser ejecutada directa-
fulfil his obligntions to the Authority under the Contract, including the obli-
mente por el adjudicatario, podrL &te concertar con terceros la realizaci6n
gations of the Contractor under Conditions 3(2), 4(4), 1 3 ( 2 ) and (3), 35,
de determinadas unidades de la ohra (art. 59 L.C.E.). Articulo 185. La
51, 56, 57 and 58;
celebracibn de 10s subcontratos estari sometida a1 curnplimiento de 10s si-
( c ) such provisions as will impose on the person who enters into the
sub-contract liabilities similar to those imposed on the Contractor by Condi- -nuientes reauisitos:
& ~~.
1. Que se dB conocimiento por escrito a la Administracibn del suh-
tions 27, 36, 55 and 59; and
contrato a celehrar, con indicacibn dde las partes de obla a realizar y sus
( d ) a provision to the effect that no part of the sub-contract work shall condiciones econbmicas, a fin d e que aqu611a lo autorice previamente, n no
be further sub-let without the consent of the Contractor.
ser que el contrato facultase ya a1 empresario a estos efectos.
(3) In the case of a sub-contract which involves the execution of work
2. Que las unidades d e ohra que el adiudicatario contrate con terceros
on the Site, the Contractor shall also include provisions similar to those in no erceda del 50 por 100 del presupuesto total d e la obra principal, salvo
Condition l l G ( 1 ) and ( 2 ) .
que se haya auto~iiudoexpresamente otra cosa en el contrato originario (art.
(4) Without perjudice to the obligations of the Contractor under any
59 L.C.E.). Articulo 186. Las subcontratistas quedarin obligados sblo fren-
of the provisions of the Contract, the Cantractor shall, whenever so requested te a1 contratista principal, que asumir6, por tanto, la total responsabilidad d e
hv
~, the Authority. .. take such action as shall b e necessary to secure that a la eiecucibn de la ohra frente a la Administracibn, con arreglo a1 proyecto
person who has entered into a sub-conf;aa complies with and performs all aprobado por la misma como si kl mismo la hubiese realizado".
obligations imposed upon him pursuant to (2) of this Condition.
5' Fiorini, B. A., Derecho administratiuo, Aheledo Perrot, Buenos Aires,
31 ( 1 ) No person against whom the Contractor shall make reasonable 1976* t. I, ps. 605/607. Continlia diciendo: "Las relaciones d e inter& pli-
obiection shall be employed as a nominated sub-contractor or nominated sup- hlico y d e derechos pdhlicos d e estos contratos no quedan a merced de la
plier upon or in connection with the Works.
(2) The Contractor shall he responsible for any sub-contractor or sup- voluotad y dispendio del particular que concurre para la contratacih. Los
intereses y derechos pliblicos no pueden ser motivo de operaciones d e ena-
plier employed by him in connection with the Works whether he shall be
nominated or approved by the Authority or the SO, or shall be appointed by jenaci6n lucrativa o no lucrativa de un particular. La custodia que perma-
nentemente tiene el poder administrador no puede permitir la enajenacih d e
the Contractor in accordance with the directions of the Authority or the SO lo que entrega, pero que mantiene siempre hajo su control'..
or otherwise.
CONTRATO DE ollllA ptBUCA
212
a la autorización de la Administración comitente, la que no pue-
de actuar con arbitrariedad, ya que en tal caso el administrado
podría recurrir a la justicia para que se reconozca su derecho 53.
En cambio, la sub contratación, si bien en principio también
subordinada a la necesidad de previa autorización por parte de
la Administración comitente, no se encuentra sometida a un ré-
gimen prohibitivo tan absoluto como la cesión, En este caso
(subcontratación) se tendrán en cuenta los antecedentes del po-
sible subcontratista 34, teniendo en cuenta> en especial, que, salvo CAPITuLO IV
pacto en contrario, se mantendrá inalterada la plena responsabili-
dad del contratista principal frente a su comitente, ELEMENTOS DEL CONTRATO
En el derecho francés el tratamiento es similar al reseñado DE OBRA PÚBLICA
en los párrafos anteriores: la cesión y la subcontrataci6n del con~
trato se encuentran probibidas~ salvo expresa autorización de la (Continuación)
Administracíón comitente) que siempre es discrecionaL En cier-
tos casOS de subcontratación, estando ello expresamente pactado,
el su bcontratista) si bien no establece ninguna relaciÓn jurídica di- ~ 23. PROCEDIMIENTO COh'TR.-'\cnJAL ADMINISTBATIVO

recta con la comitente, tiene derecho al pago directo del precio


de su prestación, siempre que en el contrato principal o en un mod C 0':'0
ya se ba visto, el contrato administrativo es uno de lo~
adicional al mismo se lo identifique expresamente, señalándose la ¡-o~ JurídICOS c~n que cuenta la Administración Pública para
naturaleza, cantidad y precio de sus trabajos y siempre, lógica- rea Izar sus cometIdos propios.
mente, que esta previsión se encuentre consentida por el contra- Ahora bien" toda la actividad jurídica de la Administración
tista principal 55. :;n:~u~e a ~ave~ d~ ';ln m?canismo procesal, pues el procedimiento
eree, o a mmlstratIvo es el medio elaborado r la le .
para garantIzar el regular cumplimiento de los f'
úblico 't'f'
pod'
mes e mteres
,Y
P que ¡US 1 lean tal actividad como tamb'é t 1
interés de 1 ' , I n pro eger e
,os, n:lsmos particulares O administrados, que encuentran
~, el procedImIento uno de los instrumentos que el derecbo pó-
lCO pone a su alcance en orden a un cabal res t d
gencias de la justicia distributiva', pe o e las exi-
, ,Deb~, cODs}derarse, asimismo, que toda actividad de la A
mlllls:raclOD Publica, como la actividad de los t d-
~~r:r!o~es Bdel Esta~o
(Legislativo y Judicial), o ::~sti~~~e~r~~:~
ena a envenub, el desarrollo del ejercicio de un poder, ejer-
53 En este punto la opinión de Fiorini es aparentemente contraria, pues
dice: "La autorización, en este caso, es potestad de la Administración Pública;
Conf, Boquera Oliver J M La le ci6
en casa de que ésta se opusiere no podrá concunirse ante el Poder Judicial 1
Estudios Polítíeos. Madrid i.Cl(j~ " ¡4/·¡etf e n- de contratíst(!$~ Instituto de
para que resuelva la incidencia'~ (ob. cit., p. 6(6), pero piensO que tal cri- 2 B . • i7\IU, ps. 1.)'.

terio nO puede ser tan absoluto como para dejar de lado del control judicíal envenub, F., Appttnti di diritto /1'I1'tministrati
1959, J!. 111, quien concluye' "O¡rn' f . . . vo, Cedam, Padova,
los posibles casos de manifiesta arbitrariedad administrativa, 1 f ') :. <:.>~.! unClOm SI estrinseca in un ed'
Il unZlOne egislativf\. si rende e 'd t I ' proc lmento:
54 Fiorlni, ob, cit., Derecho tldministratir;o. p. 601. :tione giurisdízionale nel procedir:~;n e. n~ ~~ocedllnento legislativo; la fun-
55 Montmerle, L ob, cit., Pa$s(Jtion et exectdion. .,. > ps. 70/72. o glUrisdi.zlOna1e; la funzione esecutiva si
ELEMENTOS DEI. CONTRATO DE OBRA PÚBLICA 215
CONTRAro DE OBRA PÚBL1C'..A
214
ella se regulen cuestiones sustanciales como el régimen de validez
cido que este autor denomina con la expreslOfi "función". A su del acto administrativo, su nulidad, la competencia del órgano,
vez, la función siempre para el autor iudicado: se exterioriza Co- las basés de la descentralización administrativa, etc. Sin duda, el
mo un conJunt~ de momentos sucesivos a través del cual se trans~ acto administrativo es el resultado de un procedimiento, la etapa
forma el poder en un acto final de aplicación concreta. A egt~ final dc dicho procedimiento, y así es tratado en nuestra legisla.
forma de exteriorización de Ja función se la denomma procedl- d6n y en la generalidad del derecho comparado.
miento, Lo mismo ocurre con el contrato administrativo, también re~
Es que, comO 10 señalaba Hauriou, "la Administración es un gido, aunque anal6gicamente, por la ley 19.549, conforme lo dis-
mecanismo) le falta conciencia sensible; esta conciencia central se pone el tíltimo párrafo de su art. 79. Aquí está la gran diferen-
suple por la multiplicidad de formalidades que hacen participar cia (entre otras) con el contrato del derecho privado; "el contrato
en el proceso de la operación a varios funcionados que se físca~ (administrativo) - corno lo indica Fiorini - es un acto público
n
!izan mutuulnente 3. ll.dministrativo y los actos de ejecutoriedad, órdenes, modificado-
Así. "el procedimiento administrativo es simultáneamente. el nes rectificaciones, revocación, anulación~ sustitución. subrogación,
1

-cauce formal de la serie de actos en que se concreta la ~ct~ac16n etc., el poder administrador deberá hacerlos según el procedi-
administrativa para la realización de un fin -como lo l~dlCa. la miento que rija sobre este particular. Aun en el supuesto de que
Exposición de Motivos de la Ley de Procedimiento Admmlstratrvo no estuviere establecido en los instrumentos contracruales, el prin~
Española- y garantia jurídica de los administrados» '. cipio del debido proceso, que es el comportamiento de razonabi-
Precisamente por esto es que nuestro legislador denominó a lidad que rige toda la actividad administrativa, receptado por la ley
una de las leyes vertehrales de nuestro derech? admmlStratrvo de Procedimientos Administrativos en el mt. 19 , inciso f), deherá.
(ley 19.549) Ley de Procedimientos Achmmstratlvos, aunque en aplicarse en forma inexorable. La ley regla el debido proceso,
COn más razón deberá ser aplicado en Jos supuestos de actos ad·
ministrativos que deciden sobre incidencias de la ejecución del
estrinseca nel procedimento amministrativo", Sobre el concepto d,e tun.ció~ acto contractual. Todo esto debe ser de acuerdo COn las normas
y su reJaci6n con el procedimiento. ver también Barra, R, C., ob. Cit., Princí
procesales de las leyes especiales, según el último apartado de]
píos •. '. ps. 141/145. Q 7 También Beu-
a Citado por Boquera Oliver, ob. c¡t., p. 14. nota n . ar!. 79 , o por analogía si fuera ello procedente"".
venúti oh cit en nota anterior, ps. 117/118: De acuerdo con el arto 79 ap, d) de la ley de Procedimientos
:D¡ ~olit~> si aSserva a riguardo di quest'ultitno che esso e una conseguen:
Administrativos, el procedimiento es un «requisito esencial" del
za del fatto che l'Amministrazione e un organismo comple~so e, che non e
, . solo sQO'getto fisico che provvede alta concretizzaZlOne del po- acto administrativo, y por lo tanto del contrato administrativo.
qUa51 mal un . ., , _A esauriente La necessita dí estrinsecazione En tanto que requisito esencial es un elemento constitutivo,
tere. Questa ralPone non e peHJ ' , d_ . _
formare della funzione corrisponde piuttosto ad una. ,eSlgenz:r 1 gara.nzm per lo que en materia contractual adquíere espedal significación.
e
1 tale estrínsecazione in una serie di atti procedimental¡ comente, ce,n , a En efecto, mientras que en el acto adminístrativo¡ por su pro~
~~bblicita di questl alt!, 11 contro!!o dei cittadmi -e in parl.lcolare degh 1O~
pía naturaleza, el procedimiento es necesariamente antecedente
teressnti- sull'€'sercizio del poten) . e
• Boquera 01,'ve,¡ob c,'t n 15 nota n Q B. También Cassagne, l " al dictado del acto (que es su culminación, como Se señaló más
' " ' 1" , 315/3.... 8
[)f,ff€cho administrativo, Abe.ledo-Perrot, Buenos Aires> 1982> t, Il} ~' di.' arriha), en el contrato el procedimiento es la columna vertebral
· ' t
o: « ' , ' el procedimIento
a ml-
quien dístingúe entre prOceso y proced lmlen ,. ' de la relación jurídiea que en él se origina, pues no s6lo dehe
nis.trativo wnstituye la forma o el cauce formal de la función admm1S~a~;t .1
(en sentido material). El concepto de proceso re$u~ta más adecuado T e~ o
considerru'se al procedimiento de selección de contratista, a través
t
al Cauce formal de la función jurisdiccional, entendIda ést:t come:> la soluc~~ del cual la Administración da forma y contenido a su voluntad
de controversias (en sentido amplio) con fuerza de verdad legal " ,Ta.m?len
G . '1 Pé J Comentarios a la ley de prDcedimientDs adrrnrustratwos,
C ~~~ ezM;~ ÚJ77 p. 70. Lo caracteriza como "el cauce formal de la
lVltas. a TI , , f" 1
función administrativa" y utiliza la siguiente igura: e prot'C 1 , 1
d'm"ento es a
"
!) Fiorini, R
1976, t. 1, p. 603.
A" Derecho administmtico, Abeledo~Perrot, Boenos Aires,

la: función administrativa 10 que el acueducto al agua que por el miSmo corre.
216 CoNTRATO DE OBRA PÚBLICA
ELEMENTOS DEL CONTRATO DE OBR4 PÚBLIC,A 211
de contratar un objeto determinado con Un sujeto también deter- que el término proceso supone que la satisfacción de las preten-
minadoJ sino también por su propia naturaleza) al procedimien- siones que en él se hacen valer serán dirimidas por un órgano im~
to por el cual transcurre la relación contractual, que no culmina parcial e independiente. El proceso tiene así una naturaleza ne-
con la celebración del contrato) sino cOn la extinción de] mismo cesariamente jurísdicciona]~ tanto en sede administrativa (cuando
por la causal que corresponda, la Administración ejerce actividad de esa clase) COmo judicial,
Así, el acto final de] procedimiento no es el contrato, sino)_ caracterizada por la resolución de un conflicto intersubjetivo de
en la extinción normal, el cumplimiento de su objeto, derecho por un 6rgano indepondiente de las partes y COn fuerza
Es por ello que el procedimiento contin6.a siendo un elemento de verdad legal.
esencial (es decir, forma parte de su naturaleza propia) durante En cambio, el procedimiento administrativo, si bien mante-
toda la vida de la relaci6n contractuaL niendo elementos comunes con la estructura dinámica del proceso
De aquÍ, que má.s que de contrato administrativo corresponda (por ejemplo: a) que cada una de las actuaciones que lo confor-
hablar de procedimiento contractual administrativo, man estén vinculadas casualmente entre sÍ) de tal modo que cada
Dentro del procedimiento contractual administrativo se pre- una de ellas suponga a la anterior y la última -a la q'ue se dirigen
sentan, asimismo, dos subespecies perfectamente diferenciables, no trxIa..- suponga a, tocú.. las anterWres; b) que cada una de las ac'~
obstante que ambas constituyen e integran una misma realidad tuaciones produzca, directa o indirectamente, el impulso hacia la
institucional. Así es posible distinguir el procedimiento genético siguiente; e) y todo ello en virtud de que la conexión entre todas~
del procedimiento ttlncional. las actuaciones radica en la unidad del efecto jurídico principal
El primero se refiere a la etapa de formación del contrato y y determinante a que se encuentran orientadas), constituye el cau-
se resume principalmente en la actividad procedimental interna de ce formal de la actividad administrativa, tanto en lo que respocta
la Administración, tendíente a formar su voluntad contractual a la formación de Sus decisiones como también a la actuación de
(análisis de la necesidad y presupuesto, decisión acerca del ór- las mismas. Es decir que en el procedimiento administrativo no
gano competente. intervención previa del órgano de control, etc,), se busca resolver un conflicto conforme a derecho sino tomar una
y también en el procedimiento de selección del contratista, decisión conforme a derecho y luego ejecutarla c~n la misma su-
El segundo, el procedimiento funcional, ya se inserta en la ieción,
dinámica del contrato en si mismo, su ejecución, extinción, efec- Estas diferencias se reflejan en las distinciones de las notas
tos, etcétera. principales que hacen al régimen jurídico del proceso jurisdiccio-
Pero, corresponde insistir, ambas sub especies pertenecen a nal y del procedimiento administrativo,
una única institución: el procedimiento contractual administrati- Siguiendo a Cassagne", se advierte que:
vo, de manera que - y en esto reside el efecto más singular del a) el proceso jurisdiccional se encuentra basado en el prin-
instituto estudiado- la validez de la segunda depende de la va- Cipío de la preclusión~ apareciendo como etapas que una vez CUIn~
lidez de la primera, plidas uo pueden reabrirse por el juez ni las partes, En el pro-
Lo expuesto en este punto se comprenderá mejor al conside- cedimiento administrativo ello no ocurre~ admitiéndose el infor-
rar las diferencias existentes entre el procedimiento adrninístrativo malismo como criterio rector en la sustanciación de Tos trámites
y el proceso jurisdiccional. procesales;
De las distintas posiciones doctrinarias que se han expuesto b) en el proceso jurisdiccional la institución de la cosa juz-
sobre el particular 6, Y siempre, se reitera, dentro del margen de ,
I~

gada (formal y material) le atribuye a la sentencia una inmuta-


arbitrariedad que suelen tener los nombres otorgados a la realidad bilidad prácticamente absoluta; en el procedin1Íento administra-,
que nos circunda, considero apropiada a aquella que concluye en tiVD ello como regla general no acontece (sin perjuicio de la es-

6 Ver Cassagne) J. c.. ob. cit., Dereoho administrativo, t. 11, ps. 375 y ss. '1 Oh, eH" Derecho arlmiriistratit>O~ t, 1I, ps, 319/380.
Z18 CONTRATO DE OER.--\. PÚBLICA ELEMENTOS DEL CO!<iTI~TO DE OBRA PÚBLICA 219

labilidad que posea el acto en sede administrativa) pues la de- ,-cedimiento en cuestión. De esta manera los actos: que se van Su-
cisión final puede ser luego revocada " favor del administrado o cediendo, antecedentes del acto final, no pueden s}'r impugnados
en contra del mismo (revocación por oportunidad); (:on independencia de este último,
e) el procedimiento administrativo es dirigido y coordinado En cambio, la teoría de los "actos separables" reconOce la in-
por una de las partes principales, la Administración Pública. En dividualidad juridica de cada UnO de los actos del procedimiento
. el proceso jurisdiccional, el juez o el tribunal administrativo que y, en consecuencia, su impugnabilidad independientemente de la
ejerce funciones jurisdiccionales interviene en el proceso como un impugnación del acto final.
órgano ajeno a las partes de la controversia. No puede caber duda de que esta última afirmación doctri-
En definitiva, y esto es su principal característica. como lo naria es la lnás correcta, tanto desde un punto de vista estricta-
afirma Cassagne "el procedimiento no es un acto complejo, sino mente científico (no es esta obra el lugar más adecuado para
un complejo de actos, cada uno de los cuales posee individualidad estudiar sus fundamentos en profundidad) como pór Una raz6n
jurídica propia, sin porjuicío de hallarse relacionados cOn los de- de justicia, que es el fin al que deben aspirar todas b:.s concep-
más actos con los cuales tiene una vinculaci6n común en !l1l§rito ciopes jurídicas (ya se verá la importancia de esta doctrina en
a la obtención de la finalidad de interés público que persigue la materia de los procedimientos de selección de contratista y de
Adrninistraci6n~~ s.
emisión de la certificación durante la ejecución de la obra).
De todas maneras resulta oportuno aclarar algún aspecto de
,esta doctrina de los "actos separables", que puede resultar útil
§ 24. DOCTRINA DE LOS AcrOS COLEGIADOS
para el fin de esta obra.
El considerar al procedimiento coma un "complejo de actos" Por de pronto no debe creerse que la consíderaciólJ de los
a través de los cuales se realiza la actividad administrativa tiene actos del procedimiento corno "separables" significa otorgarles una
una gran impottancía jurídica, de trascendencia particular en a - n: indepondencia absoluta con relación al acto principal objeto de
teria contractual, y coloca la cuestión en el marco de dos soluClo~ dicho procedimiento. Si fuese asi, el procedimiento perdería su
nes distintas que han provocado un sustancioso debate doctrina- coherencia interna) la necesaria unidad causal que deterrnína su
rio " la "teoría del todo indivisible" O "de la incorporaci6n" y la estructura, y, por Jo tanto, desaparecería como ia/.
"teoría de los actos separables". La independencia predicada, en lo que hace a su individua-
Por la primera se sostiene que la totalidad de los actos que lidad jurídica, es relativa y no absoluta. En cierto sentido el acto
se emiten durante el desarrollo de un procedimiento admíIiístra~ prec>{)dente se incorpora al acto final, por cuanto este último no
t¡vo se incorporan al acto final, que es el que se tuvo principal- tendría raz6n de ser sin el primero. Pero, a la vez, el acto pre-
mente en vista -objetivo principal- al inielar y realizar el pro- cedente es susceptible de producir electos jurídicos propios, en el
procedimiento y por el procedimiento, pero no por ello en desme-
8 lbíd., p. 381. La consideración del contrd.to celebrado por la Admi~ dro de esa indepondencia que hemos calificado como relativa_
nistración Pública ti otras personas públiCas como una conseCuenCia de una El acto precedente vive así como una doble vida, interesa
serie de actos administrativos antecedentes es admitida incluso por aquellos por sí mismo, pero siempre dentro del procedimiento y como re-
que sólo l\ceptan In existencia del contra lo privado de la Adminí:stradÓ11; así
Bo.rdusco, A., La struttUm dei éontratti delle pubbliche ammínistrazioni, Giu~ ferencia al acto final, al cual se incorpora, cumpliendo as! con su
fre Edit., Mitán, 1974: «n contratto della pubblica amministrazioni, che pUle destino natural. Es acto separable y es acto incorporado, ésta
é negozio di natura privnw. dipende di norma per la sua nnscíta da atti o da es la originalidad del procedimiento administrativo.
serie di atti di natura amministJ:o.tiva ... " Por eSa razÓn es preferible, siguiendo a la doctrina italiana
9 Ver Boquera Oliver, ób. cit.• La seleccwn de contratistas, ps. 18~/200;
Dromi, J. R, La licitcciQn pública, AsLrea, Buenos Aires, 1977, ps. 423/428, .aunqne refiriendo y restringiendo el término al ámbito del pro-
220 CONTRATO DE OBRA. PÚBLICA ELEMENTOS DEL CONTRATO DE OBRA PÚBLICA 221

cedirniento administrativo, hablar de actos coligados (atti ammi- antecedente, lo cual ha sido aceptado por la doctrina extranjera 11
nistrativi collegati) l., en lugar de actos separables. y también por la nacional 12 • Por supuesto que si el acto ante-
El acto antecedente coligado es aquel que posee efectos pro- <cedente fue impugnado, can resultado negativo para el adminis.
pios, pero que no se agotan en sí mismos, sino que son susceptí- trado agraviado, el acto consecuente no podría ser impugnado por
bies, como imposición de su propio objeto, de incidir en el con- ]~ misma r3zó.n, sin perjuicio de los casos en que es posible Ie~
tenido y efectos del acto coligado consecuente. Este último es e! VlSar la caza Juzgada administrativa.
acto susceptible de ser incidido en su contenido y efectos por el El régimen de los actos coligados, así como también Stl in1-
acto antecedente. En ambos casos se utiliza la palabra "suscep- portaneia práctica, puede eomprenderse mejor si se )0 compara
tible" por cuanto no necesariamente se producirá la incidencia con otros actos que son emitidos durante el procedimiento admi-
referida, sino que es de la naturaleza propia del procedimiento nistrativo, con cierta trascendencia a los efectos impugnativos.
administrativo ofrecer la potencialidad de que tal incidencia ocu- Por de pronto deben se: excluídas de la comparación las
rra en la práctica. "medídas preparatorias, informes y dictámenes" que, aunque sean
El efecto jurídico más importante de los aetos coligados es de requerimiento obligatorio y efecto vinculante para la Adminis-
su doble impugnabilidad: pueden ser impugnados tanto el ante- tracióu, no son reeurribles, confonne lo establece el arto 80 de!
cedente como el consecuente, por las mismas razones, siempre reglamento de la ley nacional de Procedimientos Administrativos
que no medie cosa juzgada administrativa, si bien ésta, en deter- (19.549), decr. 1759/72. La razón es muy sencilla: ést~s no son
minados supuestos, podría ser revisada por la Administración. actos admínistrativos~ por cuanto no producen efectos jurídícos di~
Precisando más el concepto anterior, y con un sentido prác-
tico, la situación generada por este tipo de actos es la siguiente: . • l~ Fragola~ oh. cit' l p. 82: "Or é manifesto il colJegamento, o~ si place,
el acto antecedente que provoca un agravio al derecho del admi- d Ttfenmel~to dI q~esti ulti~i, atti ai precedentí. Q\lesti costituiscono n pre
nistrado puede ser impugnado administrativa y judicialmente, por SUp?sto del secondl .. ~ ~unsprudenza ha insegnato che con l'ímpugnativa
las mh.mas vías y condiciones que si tratara de un acto definitivo, ~eU ultImo a.tto amml:ustrahv~ deUa catena di colIegamento, si puó procedere
<lltre.~l al1a Impugnativa degh atti che con Yultimo SOno Ín collegamento"
pues es Un acto definitivo, aunque coligado al acto consecuente. También en Espaiia~ González PéréZ~ J" El prinCipio de la buena fe en ei
Esto lo distingue del acto "ínterlocutorio" y del de "mero trámi- derecho administl'atioo, Madrid, 1983, ps. 122/123:
te", cuestión sobre la que se volverá más adelante. En canse· "No es correcta la doctrina jurisprudendaI referida a determinados actos
cuencia (y dejando también en suspenso la cuestión acerca de la que, sin dIstinguir en orden a la validez de los mismos, declara que la. n¿
impugnación de l~s mismos impide la impugnación de los ulteriores. Así>
distinción entre derecho subjetivo e interés legítimo, lo que será
respecto de los plIegos de la contratación administrativa, Pero una senten~
examinado más adelante), el acto antecedente puede ser impugna- cía del 9 de mayo de 1915 (Ponente: Ponce de León) al establecer la dis-
do a través del recurso jerárquico o el de alzada, y en las condi· :sin
tinción, viene a sentar la correcta doctrina; al decir: ' .. que tampoco pue~
ciones procesales pertinentes impugnado judicialmente, lo que no da sostenerse la aplicación a este caso de la reiterada doctrina jUrlsprudendai
serla posible de tratarse de actos preparatorios, de mero trámite de que la aceptación de las condiciones del pliego y el consentimiento pres:
tado a la. 7onv~atoria im~ideIl la impugnación del concurw, pues este poder
o interlocutorios.
Pero, por tratarse de un acto coligado que, en este sentido,
I, ·de atracctru: vmc~Jante solo puede admitjrse cuando exista una adaptaci6n
a la. nOrmahva aph~a_ble. mas no en cambio cuando según rucede en el pre-
,
se incorpora al acto consecuente, la falta de impugnación del mis- sente ,supuesto, se mcurre en omisiones o defectos sustanciales que afectan
mo no le otorga firmeza, puesto que puede ser impugnado con- su vahd~z, ya que entonces se está por encima de los intereses personales y
eH~ obltga tauto al Ay~nt~miento que convoc6 el conCurso como a quienes
juntamente o a través del acto consecuente, en la medida que el a el acuden y por cOIlslgmente su enmie_nda o corrección no depende de la
o uno de los vicios de este último sean consecuencia del acto voluntad de las partes, sino del propio juzgador, que ha de revisar ]05 actos
<ie fa Administración para a!>'Í veJar pOr la integridad y pureza de la actua-
CIón de la misma~ ".
10 Ver Fragola, U" GH atti amtninistrafirli, K Jovene Edit., NápoJes~ . ,1~ Cassagne, ob. cit::Derecho administrativo, t. n, p. 381, aunque sin
1964, ps. 81/83, ,dentlfic8T claramente a1 acto separable'" como acto definitivo,
222 CONl'R4.TO DE OBRA PÚBLICA ELEMENTOS DEL CONTRATO DE OBRA PÚBLICA 223

rectos sobre terceros, y de ahí que con muy buen criterio la nor- posibilidad recursiva mucho más amplia que los interlocutorios
ma arriba citada los llama "medidas" y no actos. (además de no ser estos últimos susceptibles de Ser atacados en
En cambio, el arto 84 del mismo cuerpo normativo, al regular el acto definitivo), e incluso abren la via 'de la revisión judicial.
el reCurso de recansideraci6n admite la interposición de ese re- Por ello, en caso de duda, deberá calificarse al aeto como coligado,
curso contra los actos "interJocutorios o de mero trámite" que le- pues esto es lo que más conviene al derecho de defensa de los
sionen un derecho subjetivo o un interés legítimo. Asimismo, el administrados.
arto 87, ap. a), prevé la posibilidad de interponer recurSO de ape- En definitiva, la doctrina de los aetos coligados, incluso en-
lación contra el acto que deniegue la reconsidcraci6n planteada tendiéndola como una manera especial de plantear la ya conocida
contra los actos interlocutorios o de mero trámite, pero queda construcción doctrinaria de los "actos separables", se agrega al
excluido el recurso jerárquico, y por lo tanto el recurso de alzada sistema de garantías que, dentro del régimen jurídico exorbitante
en los casos de entidades descentralizadas, y también la impug- al que pertenecen los contratos administrativos, beneficia 'al co-
nación judicial, ya que de acuerdo con lo dispuesto por el arto 23 contratante particular,
de la ley 19.549 esta impugnación sólo es procedente contra los ASÍ, por ejemplo, frente al instituto del precedente adminis-
actos definitivos O asimilables. trativo que es, como es sabido, un importante instrumento en la
En el proceso judicial se considera "sentencia interlocutoria" protección del principio de igualdad de los administrados frente
a las que resuelven cuestiones que requieren sustanciación (art. a la ley y frente al actuar administrativo, derivado de las exi-
161 del Código Procesal Civil y Comercial de la Nación), es de- gencias de la justicia distributiva. Nótese que, al respecto, se ha
cir, previa controversia de partes. En cambío, los uprovidcncias afirmado que al 'contrato administrativo en sí mismo no le es
simples", equiparables a los actos de mero trámite en el p;.oce- aplicable la doctrina del precedente, por la misma raz6n de ex-
dimiento administrativo, son aquellas que sólo tienden al des- clusividad y originalidad obligacional, nacida de cada acuerdo
arrollo del proceso u ordenan actos de mera ejecución" (art. 160) voluntario) que cada contrato guarda con respecto a otros, aun
sin requerir sustanciación previa. de su misma especie. Pero esto no se puede predicar de los
Si bien providencias simples y actos de mero trámite son con- actos coligados que, tanto en la etapa de selección del contratista
ceptos equiparables, no ocurre lo mismo con las sentencias y a~t~s como en el momento de la ejecución misma del contrato; confor~
interloeutorios, pues estos últimos, en el procedimIento aclmulls- man la rEalidad jurídica de tal acuerdo de voluntades. Así lo
tratívo, no requieren previa controversia de partes, por cuanto ha señalado recientemente el español Diez-Picazo 13:
en tal procedimiento no hay} estrictamente, partes contrapuestas, "Al contrato administrativo en sí mismo considerado no se le
Por ello el término acto illterlocutorio debe reservarse para aquel puede aplicar la doctrina del precedente. Un contrato adminis-
que sólo produ¿e efeetos jurídicos sobre el trámite del procedi- trativo, como contrato que es, en nada puede afectar a los demás
miento, pero no sobre el fondo, p, ej., medidas de prueba. contratos de la Administración ni ser afectado por ellos, a causa
En consecuencia la principal diferencia que existe entre los de la eficacia relativa de los contratos, Para los que no son parte,
actos coligados y los actos interlocutorios es que Jos primeros pro- todo contrato es res ínter alios a.cttJ.. Incluso en el caso de que el.
ducen efectos jurídicos, siempre "separables", dentro del proce- que contrata con la Adrnirústración se sienta comparativamente
dimiento, pero incidiendo sobre el fonclo del derecho del admI- agraviado con respecto a otros contratantes de esa misma Admi-
nistrado (p, ej., admisión de una mejora de oferta en el pro- i
I nistración, no se puede aplicar la doctrina del precedente; todo·
cedimiento de selección del contratista estatal); en cambio, el contrato está basado en un acuerdo de voluntades, de modo que
acto interlocutorio sólo produce efectos procesales, sin incidir di-
rectamente sobre el fondo de la cuestión debatida (p. ej., rechazo
de una medida de prueba).
Como se ha visto más arriba, los actos coligados ofrecen una
I
1
lS Diez~Picazo, L. M., La doctrina del precedente administrativo, "Re-·
vista de Adrninistración Pública", nI! 98, Madrid> p. 32.
326 CONTRA'l'O DE OBRA PÚBLICA CONCESIÓ~ DE 013EL>t PÚBLICA POR PEAJE 327

de los datos ap6ftados por el pliego con el tiempo de la concc, TO" 12, por lo que no es un mero cum}!Jimíento de una exigencia
si6n propuesto por el oferente, quedó enunciada la ecuación eco- del procedimiento de selección} sino el estudio que revela, racio·
nomicofinanciera, la que fue confrontada por el oferente, al va~ nalmente¡ que todo el esquema del negodo jurídico responde a
lorar la cantidad de años necesarios paTa la amortización en las la realidad conocida y previsible. De aquí que V~Ámiglio afirme
condiciones previamente fijadas por la Administración. Esta ecua- que el examen del piano finanziario constituye el pnnto de par·
ción o proyecto financiero fue también examinado por la muni- tida para comprender y precisar il nucleo principale della con.-
cipalidad, que previo a la adjudicación de la oferta tuvo que, en ven.zione tra le paliPs. Si bien esta afirmación puede ser un
funCÍón de sus propios datos y del número de años indicados por tanto exagerada, pues el núcleo principal de la convención entre
el oferente~ comprobar si se producía el «cierre" de la ecuación las partes no es sólo el aspecto financiero del negocio juridico,
economicofinanciera. sino la voluntad de construir una obra bajo un determinado pro·
La importancia de este documento. cualquiera sea la forma cedimiento de derecho público (la delegaci6n transestructural)
en que se lo elabore, es muy grande, pues es el que permite "ase- que precisa, instrumentalmente. de tal programación financiera,
gurar la factibilidad de la obra bajo el aspecto técnico fínancie- no deja de destacar Un importante aspecto del instituto en estudio.
La adjudicación de la oferfa importa, entonces, la aproba-
5,2.7.2.5, Nómina de lo.", entes financieros con los cuales se haya ción y acuerdo sobre la ecuaciÓn economicofinanciera, es decir
tratfldo la colocación de obligaciones indicando montos parciales, monedas la aceptación por ambas partes de que la vida futura del contrato
(pesos argentinos y/o dólares estadounidenses) Y áreas de colocación, debe transcurrir conforme lo diseñado en ese "proyecto financie·
5.2.7,2;.6, Indícar las características particulares de las distintas ope-
ra.ciones: tasas de interés, periodo de amortización y de gracia, vencimientos,
ro", Sobre su estructura y consecuencias, fundamentalmente so~
comisiones. gastos de colocación, etc. Cada una de estas operaciones deberá brc su "cierre" en función de unas datos objetivos, las partes han
ser desarrollada en forma independiente indicando discrimínadamente los ser- dado su consentimiento a la contratación de la construcción de
vicios de la deuda en cuotas de intereses y de amortización. El conjnnto de una obra pública, según esa especial modalidad instrumental de
las operaciones deberá guardar coherencia con los ítems correspondientes del
financiación, para la cual, y sólo para la cud, la Administración
Anexo JI que las agrupan,
5,2.7,2.7. Cartas de intenci6n sU5criptas por los entes financieros, decidió efectuar la delegación transestruclural.
donde consten clara y expresamente las características y modalidades de las Lógicamente este mecanismo contractual que obliga al con·
operaciones. Deberán cubrir el monto total de ]a Ínversión a realizar con cesionario a actuar como agente financiero de la Administración
recursos ajenos,
5,2.1.2,8, El flujo de fondos mensuales provenientes de los aportes y como explotador de la obra es una carga adicional para em-
en las condiciones establecidas en el Apartado 1 de esta Base Quinta. pre~as que, en la generalidad de los casos, son fundamentalmen-
5.2.7.2.9. Estimaci6n de cada uno de los impuestos que deberá te constructoras, es decir que su negocio principal es la construc-
afrontelT la Conceslouarla. tauto durante la etapa de construcción como de ción y no la intermediaci6n finaneiera y la gestión del cobro de
explotaci6n de la obra.
F,l cálculo de los mismos incluirá los impuestos nacionales, provinciales peajes. Pero, obviamente, la empresa tendrá también su benefi·
y municipales y deberá guardar coherencia con los valores incluidos en el ciD por estas prestaciones adicionales a la construcción, beneficio
Anexo 1I,
5,2,7,2 10, El Plan económÍco·financiero deberá presentarse en va~
lores constantes y expresado en pesos argentinos de la fecha que el Comi- 12 VermigHo, G., ob, cit. Cóftcessíoni autostradalL. '. p. 58.
tente fije en la correspondiente comunicaCiÓn de precaHficación. La finan~ 13 lbíd., p. IIB,y agrega:
daci6n de la inversión que se realice de odgen externo será couvertida de "1] piano costituÍSce un documento programmatico contab.ile nel quaJe
d6bres cstadonidenses a pesos argentinos, tomando el valor del primero al rolla base dj studi di previsione di svlluppo del parco automobiHstico ed ln~
tipo de cambio vendedor en el Banco de la Nación Argentina en el dla que dushia]e e della domanda di traffico cQn riferimento alle zone interessate dalla
el Comitente fije en la correspondiente comunicación de precalifkaciÓtl, autostrada da coslruire~ si raffrontano e hilanc1ano i costi di costruzione.. le
5,2,,1,3, El Plan económico~financiero deberá completarse con la de- spese generali di esercizio, gIi oueri fínauziari previsti in un arCo di tempo
tenrunación de la tasa financiera de retorno del capital propio y plazo de consíderato e le entrate costituíte da quote capítale, prestiti da Cúntrarrc>
recuperación de] capital propio'''. contübutl deHa Stato, per far fronte ai costi preventivatf',
328 CoNTRATO DE OBRA PÚBLICA CONCESIÓN DE OBRA P6BLlC'", pOR PEAJE 329'

que muchas veces constituhá la ~nica expectati.va razonable de no es lo que ha ocurrido en la práctica nacional, e incluso se'
ganancia empresaria, lo que obligará también (siempre dentro puede afirmar que no es conveniente trasladar a un administrado,
de lo exigido por la correcta ejecución del contrato) a extremar como de su exclusiva responsabilidad, la realizaci6n de tareas que
la reducción de los costos de la obra, circunstancia que es tam- directamente efectnadas por la Administración (y no 5610 con-·
bién valorada por la Administración al decidir la ejecución de trola das ) pueden ser más eonfiables desde la perspectiva del ín-
una obra pública bajo este sistema. terés público en juego. Además, hay Un problema de naturaleza
Ya se ha dicho que la ecuación economicofínanciera se ela- práctica insoslayable. Para que realmente los datos que luego'
bora a partir de datos que aporta cada una de las partes contra- conformarán la ecuación economicofinanciera sean de exclusiva
tantes. Por ello, lo que es importante frente a situaciones de responsabilidad del concesionario, éste los debió elaborar en el'
crisis de la ecuación economicofinanciera, cada parte será respon- momento de confeccionar su oferta. De esta manera el costo de
sable de la corrección de los datos por ella aportados, y, en lo preparación de las ofertas se elevará en una magnitud tan consí-·
que sea de su incumbencia) de su no alteración) sin perjuicio de derable, que frente a la posibilidad de ni siquiera resultar adju-
la responsabilidad que asume la contraparte en cuanto al deber dicatario hará que muchas empresas aptas para competir en el
de verificación, en la medida de lo posible y razonable, de la procedimiento de selección (con beneficio, entonces, para la Ad-
corrección de los datos elaborados por quien va a ser su COCon- ministración) no lo hagan al valorar esta relación entre costos ele-
tratante. vados y grado de incertidumbre,
Des:de un punto de vista meramente teórico, la responsabili- Por ello es qne en la práctica se reduce la cantidad de los'
dad por la elaboración de los datos Con que se estructura la ecua- datos que deben aportar los oferentes (que a veces ni siquiera
ción economicofinanciera debería estar en cabeza del concesio- precisan explicaciones) a los que dependen de su exclusiva capa-
nario, cidad empresaria, fundamentalmente el costo de las obras. el costo
de Ja explotación y mantenimiento, y, con ello y C011 los restantes~
I

Así, si distinguimos, en el proceso de elaboración de una


datos estudiados y aportados por la Administración, el número de
obra pública, tres fases principales: la iuiciativa, la construcción años de la concesión.
y la recopdón y gestión de la cosa constnüda, parecerla, con Ver-
miglio, que la concesión (la delegación, según la terminología Esto fue lo que ocurrió en la ya citada licitación para la Con-
aquí adoptada) implica que la Administración transfiere a otro cesión de las autopistas 25 de Mayo y Perito Moreno. Ya en el
sujeto el proceso total antes descripto, es decir, el ejercicio de toda concurso para la precalificación de oferentes se realizó la descrip-
la actividad inherente a la construcción y gestión del bien". ción del proyecto, la traza de ambas autopistas, sus características
técnicas, corno los parámetros de diseño y el diseño estructural,
Hay que destacar que la fase de la iniciativa comprende "
anticipándose también que, con el posterior llamado a licitación pa-
los estudios técnieos y económicos que fundan el proyecto de la.
ra las empresas precalificadas, se iba a entregar a los oferentes la
obra y la decisiÓn de los instrumentos Hnanderos con que reali- siguiente documentaciÓn (art. L 2.4):
zarla. La construcción es la etapa de ejecución del proyecto, y,
Planialtimetría completa de las obras.
luego de comprobada la conformidad de la obra con el proyecto,
Relevamiento planialtimétríco de la zona de las obras.
se la recibe y se inida la explotación o gestión de la misma, Con-
Estudio de suelos, con perforaciones cada 000 metros apro-
forme con lo previsto. "'Fínanziamiento, progettazione, costruzio--
xímadamente.
ne, acquísizione e gestione deU'opera sono fasi attraverso le quali
- Anteproyecto estructural con indicación de annaduras prin-
passa !'intero proces.o", como dice Vermiglío.
cipales y cuantías por elemento típico.
Ahora bien, esta situación, que es admitida por la ley 17.520,
Ubicación de centros de pilas.
- Anteproyecto de las restantes obras (estacionamientos, ga-·
H 1bid., ps. 39/40. lerÍas comerciales. etc.).
330 COl\"'TRATO DE OBR'\ PÚBLICA CO~CESIÓN DE OBfL,,- PÚBLlc::.t\ POR PEAJE 331

- Enlace COn subterráneo (planialtimetrfa y anteproyecto). principio según aquella modalidad instrumental) por parte del
- Relevamiento de obstáculos e infraestructura existente. <comitente-concedente.
Nótese que si bien el futuro concesionario estaba obligado a
elaborar el proyecto definitivo y los planos de detalle de todas las
~ 52. FINANCIACIÓN DE LA OBRA. GARANTÍAs DEL OONCEDENTE
obras involucradas (art. 1. 3, Pliego de Precalificaci6n), con la do-
y NA':I1JEALEZA DEL CONTRATO
cumentaciÓn antes citada ya podía definir el costo de las obras,
teniendo también en cuenta que se encontraba obligado a ejecu- El mecanismo instrumental descrito en los párrafos naterio-
tarlas en un plazo fijado; en principio, en dos afios. res representa~ especialmente para el concesionario-constructor,
Luego, ya en el pliego de condiciones de la licitación (para una importante clíferencia con relación al contrato de obra pú-
los oferentes preealificados) la futura concedente definió dos ele- blica propiamente dicho. Mientras que en este último el pago
mentos sustanciales en orden a la elaboración del "proyecto finan- del precio de la obra Se va realizando conforme el avallce en la
ciero>~ o ecuación economicofinancíera: la tasa de peaje y su fór-
ejecución de aquélla, en la concesi6n de obra pública, en prin-
mula de reajuste (arts. IV. 1.2. Y IV, 2,1.) Y el flujo de tránsito 'cipio, estos importes son recuperados recién con el producto obte-
diario que iban a recibir las autopistas, discriminándolos según nido por la explotación de la obra. De esta manera, durante la
los años de coucesión y garantizando que ése iba a ser el mínimo ejecución de la obra, y sin perjuicio de la eventualidad de adelan·
de usuarios de las obras construidas, Además, a través de estu- ·tos entregados por el concedente, el concesionario debe hacer fren-
dios colaterales, citados por el pliego, que también los hizo suyos, te a las inversiones necesarias para la construcción de la obra
se establecieron proyecciones acerca del incremento del tránsito concedida) con recursos que no provienen del comitente.
sobre el mínimo garantizado, en función de otras obras viales que Claro está que, en la gran mayorla de los casos, la magnitud
iban a estar terminadas contemporáneamente con las autopistas ~de las inversiones requeridas obliga al concesionario a recurrir
contratadas, vertiendo en ellas un mayor flujo de tránsito, y con- al Cl'édito de terceros, pues muy difícilmente podrá contar con
forme, también, a la proyección histórica de la evolución del par- capital propío suficiente para afrontar inversiones de esa impor-
que automotor en el país y particularmente en la ciudad de Bue- tancia y que, además, están sometidas a Un plazo de recupero
nos Aires y en el Gran Buenos Aires. También quedaban defini- muy prolongado. De esta manera, el aspecto analizado tiene
dos otros elementos del costo del contratista, ya no directamente más posibilidad de ser encarado dentro del giro normal de ulla
vinculados con la construcción, como el pago de los gastos de ins- entidad financiera que por una empresa constructora.
pección (ya que el servicio de inspección, si bien cumplido en En consecuencia, el recurSO al crédito de terceros es una al-
representación de la municipalidad, ('(ln o sin personal propio, ternativa que, como tal, forma parte de la estructura jurídica mis-
debía ser pagado por el contratista) y el reintegro en favor del ma de la concesión de obra pública, Así lo ha previsto la ley
concedente del importe de las indemnizaciones por expropiación 17.520, en su ar!. 59, exigiendo en tal caso (y debe interpretarse
que aquél había tenido que soportar. que esta regulación alcanza tanto a los entes públicos que el Es-
De esta manera, como en el caso citado como ejemplo. eS tado pudiese crear para cumplir el papel concesionario, como a
posible estructurar y desarrollar (esto último porque se trata de las ernpresas privadas o concesionarias propiamente dichas) que en
un concepto fundamentalmente dinámico) la ecuaci6n economÍco- los estatutos sociales se autorice la emisión "de bonos O títulos y a
financiera o "proyecto financiero" de la concesión que, cornO se contmer cualquier deuda y obligaci6n, en moneda local o extran-
ha visto, constituye la base instrumental del complejo obligacio- ¡era, vinculada con tales inversiones", de lo cual se deberá dejar
na] establecido entre concedente y concesionario~ sin perjuicio de constanCÍa en el mismo contrato de concesión.
que, como se estudiará más adelante, las prestaciones principales La referida importancia de los fondos comprometidos impone
de las partes seguirán siendo la construcción de la obra por parte también la necesidad de que el Estado concedente, en forma to-
del constructor-concesionario y el pago del precio de esa obra (en tal o parcial, garantice a los terceros prestamistas o inversores el
332 CON'11L~ TO bE OBRA púBLICA CONCESIÓN DE OBRA PÚlJIJCA POR PEAJE 333

recupero del capital comprometido y de sus accesorios. Difícil- La importancia de la garantía estatal frente a los terceros
mente pueda pensarse oye montos de tal magnitud sean prestados finandstas de las inversiones comprometidas en la ejecución de
sin una garantía de absoluta eonfiabílldad, como es la que puede la obra es reconocida también en el derecho comparado, donde
otorgar el Estado nacional o un Estado provincial. También la se la regula como un elemento necesario de la estruel:ura juddica
ley 17.520, como su similar de la provincia de Buenos Aires, prevé (y materialmente financiera) del contrato de concesión. Así, en
esta posibilidad en sus arts. 59 y 7Q, exigiéndose asimismo que Italia, desde la ley 729 del 2.4 de julio de 191'11 el régimen de esta
esta circunstancia sea expresada en el contrato. Obviamente tam- garantía se encuentra regulado normativamente, con las siguien·
bién deberá ser consignada en el pliego licitatorio, pues es un tes características: a) se autoriza a las regiones, provincias y CO~
dato de vital importancia para que los posibles oferentes tomen su munas a otorgar estas garantías, que serán a su vez garantizadas
decisión de participar efectivamente en el COnCurso IS. A la vez, su bsídiariamente por el Estado hasta el límite máximo del 50 %
el arto 9Q de la citada ley 17.520, teniendo en cuenta la influen- del costo total de la obra; b) el concesionario puede emitir obli-
cia que tales garantías estatales pueden tener sobre el manejo gaciones o contraer mutuos por un período de amortizaci6n má-
global de la política económica, en particular sobre aspectos de ximo de treÍnta años y nunCa superior a la duracíÓn de la conce-
la política monetaria y de la deuda pública, establece que "El sión; e) el concesionario puede también contraer préstamos con
'lASO por los concesionarios de las facultades de emitir Ylcolocar el exterior, pero s6lo con la Banca Europea degli Investimenti. A
valores y contraer deudas con garantías del Estado a que se rg- la vez, para afrontar los cargos derivados de la posible operati-
fiemn. los 01'1;". 59 Y 79 qtredará sujeto a autorización. preüW de las yidad de estas garantías estatales fue creado, por ley 382 del 28
autoridades econ6micas y monetarias competentes, al solo efec- de marzo de 1968, Un fondo central de garantías, dotado de perso-
to de la determinación de la oportunidad y de las condiciones de' nalidad jurídica, sometido a la jurisdicci6n del Ministerio del Te-
las operaciones a realízar", mientras que en el orden provincial, el 'Soro 16.
art. 11 de la ley 9254 establece una disposición similar, aunque Ií- Hasta aquí) entonces, fueron descritos los príncipales li~
mitando "la obtención de recurSOs del crédito y el otorgamiento· <lcamientos de este aspecto tan importante del contrato de conce-
de garantías por parte del Estado provincial. .. " al 50 % "del valor sión. Corresponde ahora analizar su verdadera naturaleza ju·
total actualizado de la obra". Cabe interpretar, sobre este último Tid;ca, a la luz del instituto de la delegación transestructural de
aspecto, que la límitación citada sólo se refiere a la obtención ·cometidos.
de crédito Con garantias del Estado provincial, pues no habna POi <le pronto cabe recordar que para el Estado concedente
razón alguna para impedir que el concesionario obtuviese finan- (dueño de la obra Que, naturalmente! tiene un destino de interés
ciaciones por un valor superíor al porcenta.je antes indicado, cuan~ público) la utílizaci6n de la figura contractual de la concesión de
do para ello no precise de tales garantías estatales, si bien, como ubra pública se justifica por dos razones principales: la necesidad
se verá más adelante, en realidad toda la financiación que el con- de financiar las inversiones necesarias para la ejecución de esa
cesionario haya contratado con terceros; y en la medida de su -obra y la necesidad, O conveniencia) de delegar en un adminis-
efectivo destino a la obra concedida (incluyendo los gastos de ex- trado la casi totalidad de ese proceso de financiamiento, tanto por
plotación y mantenimiento), gozan, para los terceros, de una im- razones organizativas como por motivos presupuestarios.
plícita garantía estatal. De esta forma, el verdadero interesado en obtener esa finan-
ciación es el misIPO concedente ya oue es él q uien previa deci- 1
j5 Lo expuesto puede comprobarse en la redacción del pliego para la.
concesi6n de las autopistas utbanas 25 de Ma.yo y Perito MoreJ.1o, ya citado
sión acerca de la razón de interés público que la obra está des-
anteriormente. Así su art. IV:IO.l establece: "La municipalidad. por inter- tina(1a a satisfacer, valora y decide también acerca de los medios
medio del Banco de la Ciudad de Buenos Aires, garantizará mediante un aval financieros que va.n a posibilitar su ejecución. En cambio, el in-
a inéorporarse en la C{}ntrata los compromisos por préstamos financieros que-
el Concesionario contraiga en el exterior para la ejecnci6n de las obms ...
Esta garantía cuenta con la contragarantia de la Nací6n Ar"gentina>. 16 'ermiglio, G .• oh. cit,) Concessioni autostradali .. '. ps, 59/(U.
334 CONTRATO DE OBRA PÚBLICA CO~CESIÓN DE OBRA PÚBUCA POR PEAJE 3:35

terés del concesionario, que no es un financista. se centra en el ajeno (del delegante, titular de la competencia), como es de la
negocio constructivo propiamente dicho~ aun cuando éste se realice naturaleza jurídica de la misma delegación estructural 18 ,
a través de ese mecanismo financiero instrumentat del enal el Nótese que, en realidad, en la materialidad del negocio jurí-
contratista no obtiene ninguna ventaja especial, independientemen- dico no se encuentran diferencias substanciales entre la situación
te de que su retribución se verá incrementada COn relación a la economicofinanciera del concesionario y la que asume el cons~
que correspondería por la sola construcción, puesto que) obvia- tructor en el contrato de obra ptiblica propiamente dicho,
mente, su desempeño como gestor financiero del concedentz Y.
En efecto, en la ohra ptiblica propiamente dicha el construc-
especialmente, la actividad de mantenimiento y explotación de
tor percibe su retribuci6n según el avance de obra y de esta ma-
la obra (que también, como se ved, es en beneficio del conce-
nera cubre sintéticamente expuesto~ las inversiones realizadas y
l
dente) deben ser retribuidas adicionalmente,
(a partir de un determinado momento en el avance de la certi-
Corresponde reiterar) para mejor comprensí6n de la tesis ex~
ficación) su beneficio empresario, Pero esto también ocurre en
puesta 1 que en la concesión de obra públíca como en el contrato.
j
la concesión de ohra pública, donde el concesionario-constructor
de obra pública propiamente dicho, el objeto principal y deter-
también afronta las inversiones de obra con los impertes obteni-
minante del negocio juridico es la ejecución del trabaio público,
dos de terceros (fundamentalmente), con lo cual ·paga' la cons-
que culmina en la obra pública requerida per el interés público
trucción aunque, normalmente, el beneficio empresario resultará_
valorado por la Administración, Pero, en la concesión, ese tra- 1

de la diferencia entre los ingresos por peaje y las amortizaciones


bajo público desde el punto de vista de su financiación reconoce
de capital e intereses, con más los gastos de explotación y man-·
la modalidad antes explicada que es instmmental con relación al
tenimíento.
fin principal perseguido (la ejecución de la obra), aunque no me-
ramente accesoria, pues forma parte esencial, en las condiciones En la práctica incluso (tal es el caso ya citado de la conce..
expuestas, del régimen jurídico del instituto analizado,
Lo expuesto significa que si bien la concesión de obra pública
se caracteriza por el descrito mecanismo de financiación, éste no 18 La presencia de la figura de la delegación es sugerida pO!' Vemüglio-
en distintas ocasiones, ver ps. 138/139/14]/199/205 y 210 ("Occorre sot-
es el objeto del contrato, sino s6lo la modalidad elegida por la tatineare dunque che la natura della attivitá --se refiere a la actividad de·
Administración Pública para llevar a cabo la obra en cuestión,. la Adminis-tración con relación a la ejecución de la obra-· non cambia se la·
Por ello la financiación interesa fundamentalmente a la Adminis- si esercita direttamente o tramite un concessionario. CiÓ sembra evidenziare
tración concedente y no al constructor, para quíen es sólo un me-- quanto deHo prima a propOsíto di concessioni di alltostrade (tesi per altro
dio de percibir su remuneración contractual. Hay que recordar orInai consolidata in dottrlne): la concessione é nna figura organizzatoria
ormai tipica di esercizio di attivitá pubbliche reíntranti nelIa categOria dei
que el concesionario es Un constructor y no Una entidad financiera; servizi, in cuanlo costitui$cono modo di conferimento di uHici", .. " .L'ípotesi
él concurre al contrato para realizar un négocio de construcción prospettata é tjpica e tradízionale: il conferimento di ufElci ad una impre....a
y no un negocio finandero. privata" ); p. 220 ("GH atH che il concessionario compíe nelIa qu.."lbtá di
Sin embargo, en virtud de la delegación transestructural, de- titolare degli uffici si imputano aH'ammínistrazione; tutti gli altil si hnputano·
al eoncesslonario"); p. 257 {"Questó effetto che scaturisce dan'atto di con~
berá intervenir en la gestión de la financiación de la obra, susti- cessione '.. sottolinea ed evidenzia la natura giuridica del modulo di con-"
tuyendo al Estado en dicha operación 11, aun cuando la misma vehzioni- conc.essioni in cui si articola la figura iUustrata prima ed il re~
será realizada en nombre propio (del delegado), pero en interés sultato a cui attraverso gli effetti degli atti si tende: sostiutire aH'amminjs~
trazione ne1l'eserclzío di atiivitá tecniche e finanziarie varíe e comp1esse íne~
renti Hd un'uniüa operazione fJnanziaria programmatJ- un soggetto organizzato·
17 lbíd' 1 p. 45: "11 concessionsrio pertanto di fatto si presenta come acl impresa in comando di enti pllbblici"), etc. En la p. 241; afirma: "Sem-
un operatore finanziado che in vece dello Stato reperisce - i capitali necess:ui bTa ... che il futuro concessionario asruma I'obbligo di pone in essere in
sul mercato .. :>. y aclara también: "Sembra quindi elle sul piano organizza- nome proprio ma per Canto delfaItra contraente ANAS (ente público con~­
tivo é íl sistema di flnanziamento prescelto che determina n ricorso aIla con~ cedente) tutti gil atti che attenp;ono aUa progeUazione, pianífícazione e'
ce..'\sione", finaziamento del sistema costrutuvo" (el subr<tyado es agregado).
;336 CONTRATO DE OBRA PÚBLJCA CONCltSJÓN DE OBRA PÚBUc" POR PEAJE 337

,sión de las autopistas 25 de Mayo y Perito Moreno) se realiza para quien los préstamos se contratan t y también se ejecuta, se con-
una certificación por avance de obra, emitída por la concedente, serva y se explota la obra. No es obstáculo a esta afirmación el
y este certificado es el que le permite al concesionario percibü hecho del cobro por el concesionario de la tasa de peaje, pues este
'los fondos tomados de terceros, por el monto de tal certificación, ingreso va a estar destinado, en su parte principal, a la amortización
que permanecen indisponibles hasta ese momento. ¿Cuál serÍa, del capital y accesorios de los créditos acordados, de manera que se
'a la vez, la diferencia sustancial -en la realidad material cconó- forma un círculo entre préstamo y peaje del cual e1 concesionario
mlca del negocio jurídico - entre el sistema de concesí6n aquí es meramente un gestor orgallizativo, es decir, un delegado al que
en estudio y otro, hipotético, pero perfectamente posible, en el se le ha encomendado o transferido el cometido de organizar y
que el Estado comitente obtuviese directamente la financión re- gestionar el correcto funcionamiento de todo el sistema. Nótese
querida por la obra, pagase al contratista la certificación perti- aue~ según los antores 'italianos, no sólo se transfiere el ejercicio
nente, y luego éste percibiese la tasa de peaje de los usuarios - ges- de la competencia, sino el mismo complejo organizativo (no en
tionando la explotaci6n de la obra- para entregar estos ingresos su materialidad, sino en Sl1 formalidad jurldica-públíca), que
al Estado previo cobro de su beneficio empresario? ellos llaman ufficio, que facilita o posibilita el ejercicio de esa
E'l sintesis, como parte del complejo obligacional del negocio comoetencia 21 Debe destacarse que lo antes expuesto es inde-
jurídICO, el concesionario asume la obligación de gestionar, en nom- pendiente de la existencia O no de garantms formales (general-
~¡'re propio y por cuenta de la Administración concedente, la fi- mente avales) otorgadas por la concedente, Estas facilitan la ges-
nanciación de las inversiones a realízar en la obra. ti6n de la financíación, pues le otorgan al acreedor un medio rá-
pido y directo de ejecución de su crédito sobre los bienes del ga-
Esta actividad de gestión u operación financiera es asumida
rante) en caSo de insolvencia del concesionario, además de su ins·
por el concesionario en tanto que delegado de la Administración
trumentación a través de tftulos de créditos de gran difusiÓn entre
y, según lo establecido en el arto 99 de la ley 17,520 y lo que
las entidades financieras y dotados de un régimen procesal de
'habitualmente disponen los pliegos 19, cumpliendo Con sus ins- rápida y efectiva tramitación.
trucciones. La operación financiera, dicho de otro modo, es una
,actividad delegada por la Administración en el concesionario 20,
para el cumplimiento de un cometido público, cual es la ejecu- 21 El ufficio es, precisamente, el complejo orp;anizativo sobre el que se
ción de la obra pública de propiedad de la misma concedente~ $Slent'an ciertos ÓTg311OS. pero OúílsiderándoJo, a dicho complejo j no desde
el punto de vista material, sino en su misma dímensi6n juridíca en tanto que
Esta circunstancia trae una importante consecuencia: aunque base o presupuesto para. el ejercicio de la competenda. As]. Benvenutí, F .•
f,()nnalmente el concesionario aparezca como sujeto deudor de los AppuMi di diritto amm1f1mrativo, Cedam, Padova~ 1959. p. 79: .... ,QCCorre
~créditos obtenklos para la financiación de la obra pública, el ver- intanto distinguere tra la persona che soggettivizza l"organo e Jl ufficio che
~ dadero deudor de los mismos es la Administración L'Oncedente, e l'insieme dei mezzi. persone e cose, ehe rendono possibiJe al primo la es~
plicazione deUa attivitá che rientra nelia sua competenza". También San~
dullí. A. M., Manuale di d-iritta amministrativo, Jovene FAiit., Napolll 1980,
p8. 165/166,
19 Así el arto IV.I0,3 del Pliego para la concesión de las autopistas "Ceneralmente gH organi (.MJnistro, Prefetto. cee,) sono affiancati ed
.2.5 de Mayo y Perito Moreno: Msistiti da apparnti org,pnizza.ton (Ministero, Prefettura, eee.) -costituiti di
~'EI Banco de la Ciudad de Buenos Aires intervendrá en la negociación uominí e di. mezzi (lacali, arredi, strumenti)- destinati ad asso1vere compiti
·del contrato de préstamo que deba suscribir el Concesionario. firmando los ausiliari e strumentali rispetto aUa funzione dei primi (att[víta conoscitive e
.documentos que correspondan> que cumplan con las condiciones establecidas preparntorie nene loro varie forme~ compHazione scrltturnzione e conserva-
en lV,lO,1 y IV.IO,2.", zione di documenti; gestione contabile; atthribl notificatoria; attivita esecu~
20 Vermíglio, ob, cit" p. ]40: Uva; eee,), SI da mcttere gU organi in eondizione di esercitáre la proprla. com~
"Sezrbra pertanto di potere conc1udere affe.rmando che il fina:nzinrnento petenza in modo consapevoJe ed effíciente. Queso apparati (che eostituis~
a mezzo presf'iti per la cOsrruzione dell>amostra:da costituisee un'uttivita del~ COllo anch'essi parti integranti deIrente) sono gli uffk:i, i quali, a differenza
l'r-mrninlstraúone che anche si rimessa al privato, rimane pubblidzznta e da¡;(li organi, hanno una propria consistenza materiale che non si limita alle
_Iunzional:izzata dalla regol'"l.mentazioIl€ legislativa e contrattuale esarrinata", sole persone fisiehe ad essi addette".
::;38 CONTRATO DE QDRA PÚBLICA CONCESIÓN DE OERA PÚBLICA POR PEAJE .33(1

Pero, según lo expuesto, en la relación concedente-concesiona- lo que excluye la responsabilidad del acreedor en el caso de des-
rio (relación de delegación) el posible aval (como también cual- viación de los fondos, siempre que esto último no haya ocurrido
quier otra forma de garantía) es trascendido de su propia natu- con su conocimiento) en la ejecución de una obra (en el estado
raleza (cambiaría, en el caso) en razón de la verdadera esen- de avance en que se encuentre) que es de propiedad de la con-
cia del negocio jurídico: el concedente no garantiza al concesio- cecente; si ésta no paga a los aparentes acreedores del concesio-
nario, frente a terceros, con relación a obligaciones asumidas por nario, se queda con la obra en forma gratuita, lo que es un su-
aquél; ¡:K)r el contrario, el concedente es el verdadero sujeto pa- puesto ajeno, no sólo al contrato de concesión de obra pública,.
sivo de la obligación que pretendidamente garantiza, por lo cual sino al mismo principio de la buena fe.
esta garantía no existe -nadie es, p. ej., avalista de una obliga- Por supuesto, la situación de los acreedores fiuancieros es la
ción propia- sino es una mera instrumentación formal que hace
misma si el incuplimiento del concesionario se debe a razones
a la practicidad de la gestión financiera delegada en el conce-
que le son imputables. Tampoco aquí puede la Administración
sionario.
quedarse con la obra (al término de la concesión, convencional o
La verdadera garantía, para los terceros inversores o presta- anticipada) sin pagar su precio. Nótese que, en cualquier su-
mistas (siempre sobre capitales destinados específicamente a la
puesto, si el concesionario se viese imposibilitado de percibir el
ejecución de las obras y demás prestaciones emergentes de la con-
peaje -p. ej., por extinción del contrato- o bien éste no fuese
cesión) es la calidad de deudor principal del Estado concedente,
suficiente, la Administración no podría obligarlo a que dicho con-
existan o no otras garantías formalmente instrumentadas 22.
cesionario afrontase las deudas emanadas de las inversiones en
Naturalmente cabe aqul realizar algunas precisiones, pero que,
las obras con su propio patrimonio, pues de lo contrario estaría,
en definitiva, no afectan la situación de los terceros frente aJ
también así, obteniendo una obra pública en forma gratuita. Est()
verdadero titular del pasivo.
es independiente, reitero, de las sanciones que le quepan al con-
El concesionario, como ya fue dicho, tiene la obligación de cesionario frente a sus posibles incumplimientos contractuales; éstos
satisfacer los créditos de los terceros con los ingresos de la tasa generan la aplicación de multas, obligación de indemnizar daños
de peaje, que, de haber sido correctamente elaborada la ecuación
y perjuicios, y otras sanciones de distinta naturaleza (p. ej., sus-
económicofinanciera debe ser suficiente para tal fin. Si esto no
pensión en los registros de licitadores), pero en ningún caso pue-
se cumple ¡:K)r cualquier razón imputable al concesionaria, la Ad-
den dar lugar a la pérdida de su derecho a cobrar el valor de su
ministración concedente tendrá diversas acciones c()nha éste, pero
no podrá dejar de cancelar los créditos de terceros destinados a prestación (sin perjuicio de las eventuales compensaciones que
ser invertidos en la ejecución de las obras. E.sto por una razón correspondan) so pena de retornar a una suerte de sistema escla-
muy sencilla: esos capitales fueron invertidos (o debieron serlo. vista, donde el deudor tiene la obligación de trabajar gratis en
beneficio del acreedor.
Es así, entonces que, tanto por razones doctrinales (que aquí
22 Conf., Vermiglio, ob. cit., ps. 176/178. En la p. 176, señala que: se explican mediante la figura de la delegación transeshuctural)
"Ció sembra sta a significare che l'obbIigo del concessioncuio e quella
como ror razones de Índole práctica, basadas en la realidad del
di fornire aIrANAS la prestazione nei madi e neBe forme convenute ivi in-
cluso l'obbligo di contrane in Dome proprio prestiti sul mercato dei capitali, negocio jurídico y al absurdo que llevaría una conclusión contra-
prestiti che pero in definitiva vengano assunti per canto della concedente. ria, es posible afirmar que el verdadero titular de las obligaciones
Il rimborso di questi prestih grava infatti sugli introiti da pedaggio che van- financieras contraídas en beneficio de la ejecución de las obras es
no devoluti aUa concedente, la quale, in ¡potesi di insolvenza, a norma di
convenzione, subentra nella posizione del concessionario autostradale, debi- la Administración concedente, no obstante la forma instrumental
tare principale". Nosotros creemos que esta obligación del concedente es con que tales obligaciones hayan sido constituidas.
jndependiente de toda convención contractual y que el concesionario es
sólo aparentemente deudor principal, por las razones apuntadas en el texto.
340 CONTRATO DE OBRA PÚBLICA

Lo expuesto es, en definitiva, una mera derivación de las re~


glas propias de la delegación transestrutural de cometidos (ver
supra, Cap. n, 9 16) Y de la interrelación de las prestaciones que
vinculan al concedente COn el concesionario 23.

CAPÍ'rUW VII

CONCESIÓN DE OBRA púBLICA POR PEAJE

( Continuación)

§ 53. TASA DE PEAJE Y REMUNERACIÓN DEL CO:<CESIONAruO.


RELACIONES JURÍDICAS COMPROMETIDAS

Es común en los autores identifícar~ de diversas maneras, al


peaje como el medio de satisfacer la contraprestaci6n dd conce-
sionario 1. Esto no es totalmente inexacto, pues con el peaje se
compensa, en principio, el costo de la obra y sus gastos de explo-
tación y mantenimiento.
Sin embargo, como se desarrollará seguidamente, a través del
peaje se paga a los inversores y prestamistas que adelantaron los
fondos que el concesionario destin6 a la ejecución de los trabajos.
2.3 Vermiglio, oh. cit., p, 243; quien resume .así ese complejo de pres~ En realidad, entonces, el concesionario ya percibió la casi totali~
ladones mutuas, con elementos qu~ indican. claramente> la pyesencia de ]a
dad de su remuneración durante la ejecución de la obra, es decir
figura de la delegación: "., .a) il cooroinatore assume fobbIigo di pon'e in
essere in nome proprio roa pe~ conto deUa amministrazione atti e negozi che COn anterioridad a los ingresos por peaje, difiriendo s610, y según
4ittengono alla progeUazione; pianificazione e Iinanziamento di un sistema
cosh'uttívo, nei limítl delle indicazioni di ptogetto e dí piano debbexate dalla
1 Diez) ob, cit,> Derecho adminmrativ(J~ t. lIl, p, 126: "Se puede de-
.amministrazione;
~'b) l'amroínistrazione si obbliga a sonuninistrare nel tempo 1 me7"xi ne~ finir 1a concesión de obra pública diciendo que es un modo de ejecución de
cessari aU'adempimento deHe obblígazioni assunte daI coordinatore: contri~ la misma que consiste en que la administraci6n contrata la realización de un
buto, pedaggío e proventi diversí, e, sembra, si possa evincere anche l'ob- trabajo ron una empresa, a quien no se remunera por medio de un precio
bligo di porre in essere gH gtrumenti necessari perche 11 coordinatore conduen que paga aquélla, sino acordándole dmante un término la explotación de la
l'operazione in modo pili efficiente e fun-ziol1ale; l'obbHgo cioo di assentire obra pública construida por ella", Para Escala, ob, dt.~ Tramdo integral, •. ,
in concessione la cOiitruz10ne e r eS6rcitio dell' opera per il tempo necessario t, H. p, 307, el peaje es ".,.la contribuci6n o pago que el concesionario
aWnche con i proventi ricavati da.lla gestione vengaDo estinte Ie obbBgazioni tiene derecho a exigir de los administrados que utilizan la obra" .", citando.
assunte per canto deWamminl.strazione e relative aquella operazíone." , ". a Marienhoff, ob, cit.# t. ID-B, p. 531,
342 CONTRATO DE OBRA PÚBUCA CONCESIÓN DE OBRA PÚBLICA POR PEAJE 343

y la rerlluneraClün del concesionario-constructor debe partir, nece~


los casos, al momento de la explotación de esa obra, la percepción
sariamente, del estudio del complejo de relaciones jurídicas que
de su beneficio empresario, con más el reembolso por los gastos
se encuentran insertas en este instituto de la concesión de obra
de explotación y mantenimiento. pública.
La diferencia tiene importantes efectos jurídicos y debe ser
analizada sin olvidar que la técnica del peaje es sólo una modali-
dad ínstrnrncnt:'1l, aunque característica, de este sistema de ejecu~
ción de las obras públicas. Sobre el punto se volverá más ade- § 54. HELACIÓN CONCEDENT&CONCESlDNAl\IO
lante, aunque corresponde destacar que el peaje es un elemento
esencial en la ecuación economicoHnanciera del contrato: eS el Sin duda, ésta es la relación jurÍdica principal, emergente del
dato de ckrre de la ecuación. O proyecto fínunciero, sobre cuya contrato de concesión de obra pública que vincula exclusivamente
'«potencialidad retributiva" se asienta la decisión inicía]7 compartí- a ambos contratantes.
da por concedente y concesionarío, de emprender la obra. De este contrato nacen las obligaciones de las partes, las que
Así. siempre recurriendo a los datos de la práctica admínis~ fundamentalmente consisten en:
trativu, es tratado en los pliegos licitatorios que regulan estos tipos a) para el concesionario: gestionar y ejecutar los cometidos
de contrataciones. Tal es el caso del pliego de bases y condicio' administrativos que la concedente le hubiese delegado, entre ellos
nes de la licitación pública para la "Construcci6n, mantenimiento la confección del proyecto definitivo de la obra, la realizaci6n de
y explotación de colectores, estaciones elevadoras y un estableci- las expropiaciones necesarias. la confección de la ecuación econo-
miento de depuración de aguas residuales - Estación depuradora micoIínanciera, la gestión de la financiací6n de las inversiones re-
norte", que t según el sistema de la concesión por peaje (aunque queridas; ejecutar la obra, conforme a lo pactado y a las reglas del
nO lo era exactamente pues dicho peaje era pagado por la misma arte, según 1as necesidades de Su uso y destino; realizar las opera~
comitente, lo que es llamado en infm, § fI7, "falsa concesión") llamó ciones necesarias para el mantenimiento de la obra, dentro deJ pla-
la empresa Obras Sanitarias de la Kación (no adjudicado a la fecha zo de la concesión; percibir de los usuarios la tasa de peaje (ex-
de esta redacción). Su arto 14 textualmente dispone: plotación), también durante el plazo de la concesi6n; pagar a la
Administración su participación en los resultados de la explotación,
"Art, 14. Sistema de reintegro. - La tarifa aplicada a los cau'
si ello estuviese así convenido,
dales mínimos garantizados de aguas residuales a tratar) durante
b) para el concedente: poner a disposición del conceden-
el período de concesión, deberá, te los elementos formales y materiales necesarios para que aquél
"a) permitir el pago de todas las obligaciones contraídas en pueda cumplir con sus obligaciones (estudios técnicos y econó-
el puls y en el exterior; micos) régimen tarifado) etcétera); otorgar los avales que hubiese
"b) permitir el pago de los intereses, comisiones, premios y comprometido en apoyo de la financiación de la obra y respouder
gastos relativos al financiamiento; por las demás garantías comprometidas en el contrato (p. ej., ga-
"e) eu brir los gastos de administración) mantenimíento y de ranUa de utilización mínima); facilitar el cobro puntual por parte
explotación de la obra; del concesionario de la tasa de peaje (p. ej" autorizando en tér-
nd) redituar una utilidad a favor de la Concesionaria comO mino Ins revisiones de la tarifa, según el sistema establecido en el
retribución de las prestaciones que toma a su cargo durante el contrato de concesión; contribuir al mantenimiento de la ecuación
período de concesión; economicofínanciera, cuando ésta se vea alterada por razones no
"e) reíntegrar el aporte de la Concesionaria en tiempo y for- imputables al concesionario; subsidiariamente al producido de la
ma conforme a lo ofertado." tasa de peaje, pagar el precio de la obra y demás prestaciones del
El análisis de la vinculación entre la tasa de peaje (más ade- concesionario,
lante se precisará el porqué de la utilización del término "tasa") Más adelante se volverá sobre el particular.
344 CoNTRATO DE OBRA PÚBLICA CoNCESIÓN DE OBRA PÚBLICA POR PEAJE 34$

perjuicio del derecho del concesionario al mantenimiento de la'_


§ 55, RELACIÓN CONCF.DENTE-USUARlO ecuación economicofinanciera y al pago de la remuneración pre-
vista al contratar.
Ejecutada la obra pública (y va de suyo que aquí sólo se está El n..~1Jario, a su vez, tendrá frente a la Administración. direc~"
considerando a aqueUas que están destinadas al uso público) co- tamente o a través de la figura del delegado concesionario, todas
mienza su utilización según el fin para el cual fue construida, La las garantías que el ordenamiento administrativo - y 'en generaL
obra, q uc, salvo algún supuesto excepcional, siempre pertenecerá todo el orden jurídico, COn su vértice constitucionaI- le confíeren
al dominio público, es de propiedad de la Administración Pública en orden a evitar, p. ej.> un trato discriminatorio en cuanto al uso·
(normalmente la Administración concedente) que no ve concul- de esa obra pública,·, Junto con este derecho el usuario deberá
cadas sus prerrogativas ordenadas a que dicha obra satisfaga el soportar las cargas que legítimamente la Administración le im-
interés público, por el becbo de la anterior existencia de un con- ponga con relación al uso de eSa obra pública, especialmente las,
trato de concesión, de naturaleza tributaria, como lo es, se adelanta, el pago del peaje,
Como es natural~ las relaciones jurídicas generadas por el uso Claro que la mayoría de estas relaciones que se establecen
de bienes públicos, tanto del dominio público como del llamado entre la Administración concedente y el usuario transitarán a tra-
dominio "privado" del Estado, se establecen entre el usuario de vés del concesionario) ya que para ello) emITe otras razones, fue·
dicho bien con el propietario del mismo, es decir el Estado en construida la obra bajo el sistema de la concesión, es decir me-
sentido lato, salvo que éste hubiese sometido a tal bien a algún diante la técnica de la delegación transestructu~al de cometidos,
tipo de negociación jurídica que provocase la aparición de un Como se ha visto en SUp1'1A, Cap, n, § 18, el delegado, frente a los
intermediario real frente al titular del bien y el usuario, Así, terceros administrados, actúa en la misma posición jurídica del'
por ejemplo, la locación de inmuebles, cuando el locatario a su delegante, de tal manera que para tales terceros la relación jn,
vez, y en la medida que tenga derecho a hacerlo, establece una rídiea no se ve modificada, en el sustancial equilibrio de derecbos
sublocación sobre el rnlsmo bien. Pero esto no es lo que ocurre y obligaciones, por el hecho de la delegación,
con la figura de la concesión, que es un contrato de gestión y no
De esta manera es posible afirmar que las relaciones que el
de uso y aprovechamiento de la cosa,
Es así entonces que el Estado (la Administración Pública),
titular de la obra pública construida bajo el régimen de la con- tarifas con bonificación general La Adminiruación concedente no se en-·
cesión, mantiene sobre el bien y sobre las condiciones de Su uso coentra ya coartada por el respeto debído al régimen tarifarlo pactado, ar~
la totalidad de sus prerrogativas, pudiendo disponer, por encima ticuJado contractualmente (con el concesionario), y puede modificar, cuando
así Jo exijan las circunstancias e intereses públicos, la t:::uantía de la tarifa;
del contrato de concesión~ es decir sin jmportar disposiciones en pudIendo negar, incluso, a no cubrir total o parciaJmente Jos costos de explo-.
contrario que en éste pudiesen estar contenidas, distintas' regula- tación y amortizaci6u del servicio>'. Naturalmente, lo expuesto por él en
ciones para el uso de la obra, En el caso, horarios de utilización, autos citados con re1acion a la Cfincesi6:n de servício público puede también
tipos de vehículos, direccíón de] tránsito~ accesos, penalidades por predicarse de la concesi6n de obra públíca, por las razone1J ya expuestas en
los capítulos precedentes. Ver también Jéze) G.} ah cít.~ Principios gene-
infracciones de policía distintas a las aplicables para otras vías de rales. <, t. V. p. 106. quien plantea " ... el derecho de la Administraci6n de
I

tránsito y, fundamentalmente, el valor de la tasa de peaje, y basta fijar las tarifas, de modificarlas y aun de reducirlas de oficio ... >Y, Y cómo se
la gratuidad del uso de la obra 2, Todo esto, naturalmente, sin congenía este derecho con la protección de la remuneraci6Il del concesionario"
tema del que se hablará más adelante.
S Ver, VermigHo, O., oh. cit., Goncessioni ... , p. 196:
Z Femández Farreres, O., Potestad tarifaria y equflibrio económico fí~ "Secondo la tesi esposta sembro che all'utente in possesso dei requisití
nonctero en las conceslones de servicio de las corparw;iones locales, ~"Revista previsti dalla ]egge per Yuso della autostrada spetti il dirma a nOn essere
de AdministIación Pública", nt! 87, Madrid, 1978, p. 376: ..... Pues bien, la esclusa dall'accedere aIla auLostrada stessa e, 5uccessivamente alia anmússlone,
potestad de imponer y modificar el régimen tarifario de la conces16n de ser- il díritto di usare l'autostrada in condizioni di parita ed eguaglianza rispetto'
vicios .ha potenCiado ampliamente el sistema llamado de precios políticos o ad ogni aItto utente".
346 CONTRATO DE OBRA PUBLICA CONCESIÓN DE OBRA PÚBLICA POR PEAJE 347

a.dministrado establece en virtud de su utilización de la obra "administrativa 5, que, como coinciden los autores, tampoco puede
concedida, y siempre dentro del marco de la concesión, lo vin- caracterizarse como un contrato de adhesión 6,
culan con la Administración concedente, aun cuando) en la ma~ No hay, entonces entre concesionario y usuario relación con~
1
yOrí3 de los casos~ tales relaciones se conduzcan a través de1 con- tractual alguna, tratándose, por el contrarío, de una relación de
cesionario o delegado. En definitiva, en el sentido que el dere- .derecllO público, conforme con las reglas de la delegación trans-
cho administrativo le acuerda al término, se es llSUario sólo frente cslructllral definidas en los reglamentos 7 y el contrato de con-
a la Administración Pública titular de la competencia para la pres- ,cesión.
tación del servicio u obra de utilidad común de que se trate.
Debe notarse que el concesionario nO es una empresa que
ofrece al mercado "el uso de la obra" a un precio generado por
el libre juego de la oferta (autopistas) y la demanda (usuarios) "
§ 56. REl..Acró" OONCESlONARIO-USUARIO sino que, en la explotación de la misma, cumple con Jas exigen-
cias emanadas del contrato de concesión que suscribió con la Ad~
En el marco de la delegación lransestructural, y por las ra- ministración eoncedente, Por ello podemos afirmar cOn Rivero
'zones ya expuestas, el concesionario asume frente al usuario el y sorn que "Jos usuarios de los servicios públicos (de las obras
mismo papel que el que le corresponde a la Administracíón con-
cedente, siempre en su calidad de delegado, es decir de gestor de
;:; Vermiglio, G,~ ob. cit., Conces,noni I1tItostl'adali.." p, 196; "La tesi
un determinado cometido público'. prospcttato in dottrína ha I'indubbio pregio di avere richinmata l'attenzione
Así~ entonces, como no hay relaci6n contractual entre la Ad- sul1a natura non contrattuale e pubblicistica del raporto di utenza eviden~
ministración y el usuario, tampoco la hay entre el concesionario ziando la natura impositiva del padaggio".
y aquéL Por el contrario, el concesionario debe habilitar la "bra e Rivera Ysern, ob. cit., La protecci6n . .. ~ p. 233,
7 Ibíd., "El usuario de estos servicios: se enCuentra sometido al regla-
al servido del usuario en las condiciones establecidas en su con~ mento del servido", También Vermiglio, oh. cit" p, 194> cita la siguiente
trato de concesión (celebrado, obviamente, con la Administración jurisprudencia que, según ]0 señala el autor, demuestra la tendencia jurisw
Pública y no con los usuarios), que a su vez tiene una indudable prudencial que abandona la vieja tesis privatista acerca de la relación con~
base reglamentaria. Esta base reglamentaria (y esto es lo propio ccsionario-usuario en materia de autopistas por peaje:
del instituto de la delegación) trasciende en sus efectos hacia el "Con decisione del 29 novembre 1966, n, 2806, la Corte di Cassazíone
ha ritenuto che 'in materia di viabilíta su autostradil per il cui accesso sia
usuario, quien se encuentra sometído al reglamento de utilización richíesto un pedaggío, i compiti delrANAS non sono assunti a titolo di diritto
de la obra, y e.sto en virtud de la genérica relación de sujeción prlvato e quindi a tutela di díritti soggettívi. bensi per iI soddisfacimento di
interessi gcnerali. E pOiche l'adempimento deí compiti istituzionaIi del-
l'ANAS non viene in essere come un obbligo gillTidico a cuí siano correla.ti dei
4 Rivera Ysern. E., La ptotección del usuario de los servicios públicos, diritti, ma costltuisce un dovere inerente a funzíoni o servizí di diritto pub-
'''Revlsta de Administración Pública", no? 87; Madrid, 1978, p, 233: "El usua~ bhco. í pl"ivatí utentí. anche se tenuti aU'onere della COtTcsponsione dl un
río de un servicio público prestado por un concesionario se encuentra en la pedaggio a salvaguardia di una circolazione ríservata esclusivamente agli au-
misma situación jurídica que los usuarios de Sf'JVicios propia.mente adminis- lomezzi ed interdetta nd altri autoveicoli ed ai pedoni, non vantano un diritto
trativos, es decir, en una sihlaci6n legal y reglamentaria de dere<::ho público". soggettivo sorretto da aziDne conttattuale per Yadempimento da parte del-
Con cita del italiano Gallo, también afirma; " .. .1a naturaleza de las ·YANAS stessa dei doved inerenti a questi compiU'. Questo indirizw e stato
relaciones entre concesionarios y usua.rios deben resolverse de igual forma successivamente esteso anche alIe altre autostrade gestite in concessione per
que las relaciones que medían entre la Administración y los usuarios. lndjca cui la Corte ha ritenuto che il pedaggio che l'utente ftrmnesso alI'uso deIrau_
CaBo que la actividad del concesjonario permanooe objetiva e intrinsooaIDente -tostrada paga aJI'Ente gestore, non rappresentn JI prezzo di un servizio ma si
pública y no se transforma porque sea efectuada por un sujeto privado, ID"'" configura come una presta.zione pecuniaria per la disponibilíta deU'autostrada.
diúute una actividad privada, La actividad Conserva todas sus característi- 'Cassazione civile seZ, llI, 5 febbraio 1969, n. 385, e 18 marzo 1971, n. 779;
cas propias y Se presenta con una estructura y disciplina inmutables; en 23 gennaio 1975. n, 260".
otras palabras, con las mismas características objet.ivas que cuando es ejer~ B VermigHo, ob. cit., p. 170.
,citada por un sujeto de derecho público".
CONCESIÓN DE OBRA PÚBLICA POR PEAJE 349
348 CoNTRATO DE OBRA PÚBLICA

no preciso el integrar (exclusivamente o no) los fondos destinados


públicas, en el tema que aquí interesa) son administrados, no.
clientes" 9. 'a solventar ya sea la construcción de la obra y/o sus gastos de
(onservación y uso. Esta característica salva la constitucionalidad
del peaje, pues si estuviese establecido como gravamen a la cir-
culación o tránsito interprovincial o al exterior sería Írrito: viola-
§ 57. TASA nE PEAJE. NATURALEZA
ría los artículos 99 , 10 Y 11 de la Constitución Nacional, tal como
acertadamente lo señala Marienhoff 12,
De acuerdo can lo expuesto en los parágrafos anteriores, el
peaje no puede, bajo ningún concepto, considerarse como la con- Si bien ésta es la naturaleza del peaje, no puede olvidarse,
traprestación pagada por el usuario por, precisamente, el uso de sin embargo, que la concesión de obra pública le reconoce, ins-
la obra. trumentalmente, pero de manera connatural al propio sistema, la
Ya fue adelantada (ver supra, Cap. V, § 43) la naturaleza calidad de término necesario para el "cierre" de la ecuación eco-
tributaria de la llamada "tarifa" a cargo de los usuarios de los nomicofinanciera contractual. Es decir, si bien para la Adminis-
servicios públicos, acerca de lo cual existe conformidad doctri- tración el peaje se presenta como una simple tasa, para el con-
naria 10, correspondiendo la misma interpretación en los supuestos cesionario, delegado de la Administración en la recaudación de la
de concesión de obra pública, dado la indudable similitud de misma, instrumentalmente se le presenta como el medio que, al
ambos institutos (concesión de servicio público y conCeSlÜn de <oonfinnar la estabilidad de aquel "proyecto financiero" (ver supra,
obra pública) fundados también sobre la misma estructura de Cap. VI, § 51) asegura, en principio, su derecho a la percepción
la delegación transestructuraI. de la remuneración que le es debida por el cumplimiento de sus
El peaje no es el precio de la utilización de la obra, se en- prestaciones contractuales.
cuentre ésta concedida o no. Es una tasa o contribución especial,.
según la interpretación que quiera dársele desde el punto de
vista tributario 11, pero que, en cualquier caso, tiene como desti- § 58. REMUNERACIÓN DEL CONCESIONAIUO-CONSTRUcrOR

Aunque elemento de «cierre" de la ecuación economicofinan-


9 Rivera Ysem, ob. cit., La protección ... , p. 234.
10Rivero Ysern, ob. cit., cita a Benoit, en la edici6n francesa de Le -ciera contractual, el peaje no es, en sí mismo, la remuneración del
droit Administratif fran(:ais, ps. 839.;843, mencionando el caso resuelto por el -concesionario-constructor, sino simplemente el medio instrumental,
Tribunal de Conflictos en "Ruban c/Société de l'Autoroute Estered-C6te
d' Azur": "Las cantidades pagadas por los usuarios... tienen el carácter de
una tasa cuya entrega no hace nacer ningún vínculo contractual entre aqué- impuestos, tasa y contribuciones. Se extiende también en la consideración
llos y el concesionario autorizado a percibirlas"'; ver también la .doctrina acerca de si el peaje es tasa o contribución especial, concluyendo en que es
citada en supra, Cap. V, parág. 11.2.2. Vermiglio, ob. cit., p. 195, sostiene: una tasa, pues en ésta "el criterio de distribución lo da la amortización del
"Dala struttura pubblicistica del rapporto conseguirebe la natura giu- gasto oríginado, o sea del costo del servicio", en cambio en la contribución
ridica di tassa da attribuire al peddagio, in quanto é ricoIlegato alla eUlana- -especial o contribución de mejoras el criterio de distribución "lo da el costo
zione di un atto amministrativo di ammisione. Né sembra dunque che questa de la obra, pero hasta la concurrencia del mayor valor recibido a conse-
tassa rappresenti il cqrrespettivo di una prestazione amministrativa resa al
cuencia de ella, es decir, hasta el beneficio aportado por la obra al .inmueble
privato o piú generalmente di un pubblico servízio; non sorge infatti, come
gravado" (p. 56). Nosotros creemos qu~ las dos situaciones, en la práctica,
é stato notato in dattrina, nessun rapporto obbligatorio tra utente e gestare,
tienen un mismo criterio básico de distribución (el uso o beneficio) diferen-
avente come contenuto una generalitá di obbligru corrispondenti a diritti sog-
ciándose ambas del impnesto propiamente dicho por su afectación especial.
gettiví, fra cui preminente quello del mantenimento della autostrada in con-
dizioni di idoneitá al transito". Pero la profundización del tema no es materia de esta obra, bastando acor-
dar en la naturaleza tributaria del peaje, y utilizando el término tasa por ser
11 Cincunegui, J. B .• El peaje, C.A.I.E.S., Buenos Aires, 1968, sintetiza
el m.is habitual en la doctrina.
en ps. 51 y ss., la opinión de los distintos autores tributanstas sobre la cues-
12 Marienhoff, M. M., ob. cit., Tratado ... , t. IU-B, p. 532.
tión, analizando la tradicional división tripartita de los tributos fiscales en
350 CONTRA TO DE OBRA PÚBL1CA CONCESIÓN PE OBRA PÚBLICA, POR PEAJE 351

impuesto por el sistema contractual, a través del cual dicha re- en la concesión de las autopistas 25 de Mayo y Perito Morer.o el
muneración se efectíyiza. contrato previó la facultad del concesionario de aprovechar '10s
La remuneración es la retribución en favor del administrado- bajos" de las autopistas para la instalación de oficinas, playas
concesionarIo, consistente en la suma de ingresos que le permiten de estacionamiento vehicular, parques recreativos~ etc., pactando
afrontar los gastos insumidos por la ejecución de la obra (inclu- libremente el alquiler de esos lugares con los terceros interesados.
yendo los intereses del capital), su mantenimiento y explotación, Pero, evidentemente, este rubro no es el peaje, que el adminis-
más su beneficio empresario. trado paga como consecuencia de la utilización de la via de trin,
Pero, debe recordarse, esta remuneración la percibió el cOn w
sito construida bajo el sistema de concesjó~ de obra pública.
cesionario -al menos en lo que respecta a los costos de oh obra-·- Si el peaje no es consecuencia de una relación contractual
durante su misma ejecución mediaute la fínanciac-Íón que ~I ges- entre concesionario y usuario, la que es inexistente. tampoco emer-
tionó como delegado del concedente, con o sin una garantía for- ge de relación contractual alguna entre concedente y usuario>
mal otorgada por este último. que tampoco existe. El peaje es una exclusiva consecuencia, es
De esta manera, el ingreso por peaje~ que se genera a partir decir emana exclusivamente de la potestad tarifaria del poder
de la habilitación de la obra al uso público, está destinado mucho público y por lo tanto reconoce un origen reglamentario y nO
más a reembolsar ese capital tornado en préstamo que a pagar contractual. '-
al mismo contratista, salvo en lo que se refiera a los nuevos costos Nótese que el peaje, en su valor y modalidad, ni siquiera
devengados por la explotación y mantenimiento de la obra, que forma parte, estrictamente de la relaci6n C'ontractual concedente-
en definitiva tienen un tratamiento similar, simplemente traslada- concesionario 13.
do en el tiempo, que el supuesto anterior. Es cierto que habitualmente los contratos de concesión con~
El concesionario es siempre un delegado de la Administra- tienen regulaciones acerca del peaje, ya sea estableciendo su base
ción. Toma los préstamos en beneficio de ella y cobra el peaje· de cálculo o bien directamente su monto y su mecanismo de revi-
que es¡ como ya fue visto, un tributo de afectación determina~ sión. Pero esto es (como OCUrre con el valor básico contractual
da - para pagar esos préstamos, y también en beneficio de la Ad· en el contrato de obra pública propiamente dicho) meramente
ministración delegante. indicativo y a los efectos de la confección de la ecuación econo-
Por ello, sólo en la superficie de la compleja estructura jurí-
dica de la concesión, el peaje aparece como un pago hecho no' 105 13 Ver Jéze, ob. cit., Principi08 •.. , t V, p. 96:
usuarios en favor del concesionarío. Si el peaje es un tributo "Las tarifas tienen carácter reglamenta.rio y no contractual. Son obra'
(sobre lo que no hay, casi, discusión), éste se paga s610 en favor exclusica de la Admir.istración. No son tIlla manifestación bilateral de las'
del Estado (en sentido genérico), de manera que el concesionario voluntades de la Administraci6n y del concesionario ...
Esta proposición fundamental se apoya en dos series de consideraciones:
no puede ser, en la esencia del sistema jurídico) más que ,un re- unas jurídicas y otras de orden econ6mico, político y social.
caudador de tal tributo. Desde el punto de vista lUf'úlico. las tarifas tienen nn carácter neta-
A la anterior afinnación se le agregan las razones vistas más mente reglamentario con relación al pÚblico: no es concebible qne tengan un
arriba acerca de la inexistencia de relaCÍón contractual entre el carácter contractual con respecto al concesionario. Un mismo acto no pue-
concesionario y el usuario, y la imposibilidad de aquél de pactar de tener una naturaleza jurídica diferente según las personas a quienes se
aplica.
libremente con dicho usuario el valor y las modalidades del peaje, Desue el punlo de vísta económico, político y social. el funcionamien-
sin perjuicio de la posibilidad de que, en el contrato de concesión to regular del servkio público se hará más eflcazmente por el sistema de la
E'xístan otras variantes económicas que le permitan al concesíona- tarjfa reglamentaria que por el sistema de la tarifa contractual".
rio obtener (participando de ello al concedente) un mayor ré- Antes, ps. 95/96, había señalado: '-'En Jo referente a los usuarios, la
tarifa es un reglamento de impuesto; ellos están obHgado3 jurídicamente a
dito de la obra construida, a través del aprovechamiento integral pagar las contribuciones establecidas en la tarifa, sin poder dÜlcutirlaS ni
de ésta sobre aspectos que no hacen a su esencia funcionaL Así, hacerlas modHicar>1.
CONCESIÓN DE OBRA PÚELlCA POR PEAJE 353
CONTRATO DE OBRA PÚELlCA.

mícofinanciera, sin limitar ni impedir de manera alguna las pre- 3.1 la prerrogativa de la municipalidad concedente de reducir "uni·
rrogativas de la cou'Cedente de modificar, conforme a las razones lateralmente la tasa de peaje" o bien no autorizar su reajuste se·
de interés público por ella apreciadas, la tarifa de peaje, aumen- gón la fórmula de revisión que el mismo pliego había regulado.
'tándola o reduciéndola con independecia del sistema de reV1S10n En ese caso" el pago de la diferencia en favor del contratista)
establecido en el contrato de concesión, O incluso de eliminar ese calculada primero sobre "el caudal de tránsito pron,edio anual
peaje) sin perjuicio, como se verá, de los derechos del contratista garantizado" sobre el trimeste correspondiente, y luego l vencido
·al mantenimiento íntegral de la ecuación economicofinanciera el trimestre, "sobre el real caudal de tránsito que hubiera utilizado
n
que fue la base del acuerdo de voluntades 14. la autopista, si éste fuera mayor que el mínimo garantízado , es
Esta prerrogativa de la Administraci6n tiene dos fuentes: el efectuado directamente por la municipalidad. al concesionario.
tUS ooriandí por razones de interés público, propio de todos los Naturalmente, salvado como está el derecho del concesionario a
contra tos administrativos conforme al régimen exorbitante a] que percibir el importe de la tasa de peaje resultante de la aplicación
'se encuentran sometidos (ver supra Cap. 1, § 3), y el origen de la tarifa y su fórmula de revisión establecida contractualmente,
reglamentario del peaje (en raZÓn de su naturaleza tributaria), calculada sobre el tránsito verucular de la autopista o sobre su
que lo independiza necesariamente de lo que las partes pudieron mínimo garantizado, si aquél fuese menor, no cabe duda de
haber pactado en el contrato de concesión. que la concedente podría reducir tal peajc hasta tornarlo inexis-
Esta doctrina, mayorivdríamente compartida) responde tam- tente, sin posibilidad alguna de oposición por parte del concesio-
~bién a la re¡,'Ulación práctica del instituto, emergente de los plie- nario. ya que, por lo expuesto, no suf'rirÍa perjuicio patrimonial
gos de condiciones que reglamentan los antecedentes administra- alguno.
·tivos ya citados en párrafos anteriores, El mismo pliego prevé expresamente una modalidad de eli-
Asl, en el caso del contrato para la concesión de las auto- minación de la tasa de peaje, según su art. IVA.!: "Después
pistas 25 de Mayo y Perito Moreno se estableció en su arto IV. del año 1985 y una vez que se habiliten otros viaductos urbanos
por el sistema de peaje, la Municipalidad podrá modificar el sis-
14 Ver Jéze. ob. cit., en nota a.nterior; p. 97: "Lag consideraciones de
tema de pago directo de peaje por el usuario, por el sistema de
interés público que han hecho formular el principio fundamenta1 de la facul- pago de una patente para el uso de toda la red de autopistas ur-
tad inalienable de la autoridad pública de adaptar el servicio público, aun banas. En tal caso el concesionario percibirá por mes adelantado
el concedido, a las necesidades públicas. valen para las taruas como para directamente de la Municipalidad, un importe equivalente de apli-
\todas las demás partes del servicio". También Fernández Farreres~ ob. cit.,
La protección . .. ~ p. 376: car las tasas de peaje al tránsito medio anual estimado para cada
" ... La superación de la naturaleza conhactual de la tarifa que impo~ año ... >~, segtÍn una f6rmu]a matemática que el mismo artículo
sibilitaba, salvo circunstancias excepcionales y a través del procedimiento le~ desarrolla. Esta última disposición destaca claramente el carácter
gal previsto, la modificación de las tarifas una vcz pactadas. ha pado paso tributario del peaje, tanto que puede ser reemplazado por otra
a un auténtico derechc" a una auténtica potestad de la Administración, para
clase de tributos. A la vez muestra cómo la remuneración del
imponer unilateralmente las tarifas que at-'Onsejen en 1.U1 momento dado las
'e.xigencias del interés público. Pues bien) la potestad de imponer y modificar concesionario se encuentra independizada de los ingresos por pea-
el régimen tarifano de la concesión de servicios ha potencíado ampliamente je, es decir, el derecho del concesionario no es al cobro de una
e-l sistema Bamado de precios políticos o tarifas con bonificación general. determinda tasa de peaje sino a recibir, durante la explotación
'La Administraciún concedente no se encuentra ya coartada por el respeto
debido al régÍffit,,'!l tarifado pactado} articulado contractualmente, y puede mo~ de la obra, un ingreso suficiente que le asegure la posibilidad de
,dmear cuando aSl lo exijau las circunstancias e intereses públicos la cuantía amortizar el capital invertido durante la construcción) con sus
,de la tarifa, pudiendo Hegar, incluso, a no cubrir total o parcíalmente los intereses, los gastos de explotación y mantenimiento y su benefi-
costos de explotaci6n y amortización del servicio, De tal forma que el prin~
üpio de la tarifa suficiente queda recortado y deja de ser, de alguna forma,
cio empresario,
pri~cipio ,!nfonnante con carácter general del régimen financiero de la con· Una disposición semejante está contenida en el contrato para
,eeSl6n, ...
354 CONTRATO DE OBBA PÚBLICA CONCESIÓN DE OBRA PÚBLICA POR PEAJE 355

la ejecución por concesión de la autopista Acceso Oeste (según <::esionario-constructor? En el contrato de obra pública la res-
el texto elevado para su aprobación por de<!reto del Poder Na- puesta es clara: el comitente o dueño de la obra, pero en la con-
cional, y respoodiendo a lo establecido en el pliego pertinente), cesión de obra pública un primer examen simplista ]Xldrla llevar
cuyo arto V está redactado de la siguiente manera: Aiuste de a la conclusión que quien paga tal remuneración es el usuario con
tarifas por razones de interh general: "Sí can ]Xlsterioridad a la la tasa de peaje. Nada más alejado de la realidad, según las ra-
habilitación de la autopista el Estado considerara que por razones zones ya expuestas. El usuario no es el dueño de la obra) sino
de interés general resulta conveniente O necesario modificar el simplemente la utiliza conforme a las condiciones reglamentarias
monto de la tarifa de peaje, así podrá resolverlo fijando las nue- fijadas por la Administración y no por el concesionario. En cuan-
vas tarifas. AsimismO deberá convenir con la concesionaria los
j to a la tasa de peaje, si bien, como ya fue dicho, es en principio el
medios que resulten necesarios para que se mantega inalterada la elemento de "cierre" de la ecuación economicofinanciera de la con~
ecuación economícofinancíera de la concesi6n en el caso de que cesión, no pierde por ello su naturaleza de tributo cuya determi-
la modificación de la tarifa la haya alterado. nación es siempre de res]Xlnsabilidad del poder público (que pue-
"A tal fin podrá optarse ]Xlr fijar compensaciones al Estado de ser o no la misma administración concedente), quien toma esta
o a la concesionaria y/o reducirse o ampliarse el plazo de la decisión no necesariamente guiado por el dato del costo de la obra,
concesión. Independientemente de lo expuesto en el prárrafo pre- sino, principalmente, ]Xlr las exigencias del interés público general
cedente y cuando el tránsito real no alcance al tránsito mínimo que debe gestionar.
garantizado corres]Xlndiente al trimestre precedente, el concedente El sujeto deudor de la remuneración del concesionario no pue-
podrá disponer que se fijen tarifas distintas a las resultantes de de ser otro, entonces, que la administración concedente, la dueña
la aplicación de la tarifa inicial actualí:¿ada Con el objeto de es- de la obra, nada más que segÚn una modalidad de pago indirec-
tudiar la curva de sensibilidad (tránsito-tarifa), a fin de deter- ta. Cabe recodar que, al obtener la financiación, el contratista
minar el máximo ingreso. ya percibió la parte más importante de su remuneración (la que
"Para esos períodos se continuará can la aplicacón de la ga- bace al costo de la obra), de manera que ya "cobróh ese rubro,
rantía de tránsito mínimo, reconociéndose a favor de la concesio- aunque, formalmente pese sobre su patrimonio como un pasivo.
naria la diferencia en menos entre el importe resultante de la ta- Este pasivo será saldado con la tasa de peaje (que deberá com-
rifa original actualizada por el tránsito mínimo garantizado, y los pensar también sus otras prestaciones y el lucro esperado), por lo
ingresos resultantes de la tarifa rectificada de acuerdo al párrafo que este elemento, es cierto, aparece en principio, y por aque~
pre<!edente por el tránsito real corres]Xlndiente al periodo de que lIa modalidad formal, como el pago de su prestaci6n. Pero el
se trate. Los eventuales mayores gastos de conservación y opera- peaje es sólo un medio indirecto de percepción, en la medida que
ci6n deberán Ser absorbidos ]Xlr el concesionario". también se cobra ]Xlr cuenta de la concedente y en las condicio-
¿Pero cuál es, entonces~ la remuneración del concesionario- nes fijadas por ella. Concretamente, el verdadero acrcedor (por
constructor? Como en cualquier contrato oneroso dicha remune-
y
su propia decisión unilateral, como en toda obligación de natura-
ración está formada por el costo de sus prestaciones más su bene- leza tributaria) de la tasa de peaje es la Administración, cuyo
ficio empresario. Y, como en el contrato de obra pública propia- ejercicio delega en el concesionario para que, de mantenerse inal-
mente dicho, la más im]Xlrtante de las prestaciones del constructor teradas las condiciones según las cuales se estableció la ecuación
está determinada por las inversiones necesarias para ejecutar la economicofinanciera, equilibre a ésta con el productl> de esa
obra que, tanto en la concesión como en la obra pú blíca, el cons- exacción Iríbutaria, quedando así todas sus prestaciones saldadas
tructor percibe a medida que la obra va siendo ejecutada. y aquel pasivo nominal compensado.
Lo expuesto en el párrafo anterior no ofrece, en sí mismo, Por ello es que, en realidad, la obra tiene un valor determi-
dificultad alguna. Sin embargo puede quedar planteada otra pre- nado de antemano y que no es el que resulte de un indeterminado
gunta, ¿quién es el obligado al pago de la remuneración del con- y aleatorio ingreso ]Xlr peaje.
356 CON'tRATO DE OBRA PÚBLICA
Cm'CESIóN DE OBRA PÚBUC',A POR PEAJE 357

Este valor predeterminado, que el futuro concesionario cono-


ce en el momento de la licitaciÓn y sobre la base del cual él ela- § 5-9. LAS LI..AMADAS "MODALIDADES DE LA CONCK-rrÓN"
bora su oferta, es la producción ml!Úma de la obra concedida
que, multiplicada por la tasa de peaje establecida por la Adminis- Como en el caso de la concesión de servicio púhlico (ver supra,
tración o propuesta por el oferente, según los casos, debe estabi- Cap. V, § 43), la concesión de obra pública se clasifica en onerosa,
lizar la ecuación economicofinanciera o proyecto financiero del gratuita y subvencionada.
contrato. Esta clasificación tiene origen legal -ar!. 2q de la ley 17.520
Esta producción mlnima resulta de datos objetivos, conforme y arto 19 de la ley 9254 de la provincia de Buenos Aires _ y se
a estudios habitualmente integrados a los pliegos licitatorios. Para refiere a las relaciones entre concedente y concesioq,ario 0, más
darle Ina yor objetividad a la selección y, en definitiva, para darle estrictamente, contempla un cierto tipo de obligaciones económicas
un dato de certeza que permita la concurrencia de oferentes, la entre las partes.
Administración garantiza tal producción mínima, tal cama la lla- La clasificación expuesta puede conducir a engaño, ya que
mada «garantía de tránsito mínimo" que se encuentra fijada en podría interpretarse que ella está atendiendo al régimen econó-
las concesiones de las dos obras viales utilizadas como ejemplo en mico esencial de la relación .contractual, y no a una simple moda-
los párrafos anteriores. La tasa de peaje, con su fórmula o siste- lidad accidental de la misma.
ma de revisión, multiplicada por la garantia de producción mÍ- En realidad la concesión de obra pública es siempre un con-
nima es la remuneración del {!oncesíonar1G, a cuyo pago se en- trato oneroso, por el cual el concesionario-constructor debe percibir
cuentra obligada la concedente, salvo que la producci6n real al- Ull precio en dinero como consecuencia del cumplimiento de su

cance ese mínimo o lo supere. En estos dos últimos casos se habrá prestación (ejecucjón, conservación y mantenimiento de la obra. .
producido el pago indirecto de la remuneración del concesionario, durante un período determinado), que debe ser pagado -y lo es
pero siempre sobre fondos que, por ser de naturaleza tributaria, conforme a la técnica de la delegación - por la concedente a tra-
son públicos y, por ende, pertenecen a la Administración concedente. vés del resultado de la explotación de la obra o directamente y
Dado que ésta es la verdadera naturaleza de las relaciones en subsidio, en caso de defecto de aquel ingreso sin responsabili-
dad del concesionario.
juddicas entre las partes comprometidas, es fácil concluir que esta
En la llamada ('concesión gratuita" el concesionario no asume
t"garantía de producción mínima'" no necesita ser pactada expresa-
ningún tipo de obligación patrimonial Con respecto a la concedente,
mente. La Administración concedente siempre se encontrará obli-
salvo aquellas amergentes de sus otras responsabilidades contrac-
gada a su reconocimiento pues~ de lo contrario, deiaría, simple- tuales.
mente, de pagar la obra, en un evidente enriqnecimiento ilícito,
La "concesión subvencionada" atiende a la necesidad del con-
salvo que, naturalmente, el defecto de producción se debiese a ra-
cesionario de contar con fondos durante la etapa de construcci6n
zones imputables al propio concesionario, quien no puede trasla-
de la obra, cuando no sea posible o no resulte conveniente obtener-
dar a otro (en este caso, la concedente) los perjuicios derivados los de tereeros. Estos adelantos de fondo pueden también hacer-
de Sus propias acciones u omisiones culposas O dolosas. se efectivos durante la misma explotación de la ohra, lo que nor-
En el supuesto de que los ingresos por peaje supereu el mí- malmente ocurrirá cuando los ingresos de peaje na resulten sufi-
nimo de producción, que es poSible denominar "mínimo de cierre cientes para la amortización de los préstamos contratados con an-
de la ecuación econQmk'ofinanciera", esto supondrá un mayor be- terioridad y el pago de los gastos que demande la misma explota-
neficio en el concesionario, totalmente aleatorio, que deberá com- ciÓn y conservación de la obra_ Como se ve no se trata en reali-
partir o no con la concedente según la mod~lidad pactada en el dad de una verdadera subvención (que es un típico medio de fo-
contrato. mento, lo que no se da en el caso). sino simplemente un adelanto
de fondos en beneficio del contratista, con cargo al total de su
358 CONTRATO DE OBRA PÚBLI.CA CONCESIÓN DE OBRA PÚBLICA POR PEAJE

remuneración, que será reintegrada o no al concedente (según las tua! l., también predeterminada en la oferta O en el mismo pliego,
dos alternativas previstas por el arto 9.P, inc. e) de la ley 17.520) sobre los ingresos por tasa de peaje.
de acuerdo ron la forma en que se haya elaborado la ecuación Como se ve en ambos casos, siempre se trata de una partici~
f

economicofinanciera, pacfón sobre los mayores ingresos del concesionario, ya que aun
El art. 29, inc. a) de la ley 17.520, camo su similar provincial, en el sistema de suma determinada (aunque reajustable) la exis-
también contempla la concesión "a título oneroso", por la que el tencia de garantías de explotación o producción mlnima (como
Estado concedente recibe también un beneficio por la explotación ocurre en el citado caso de la autopista Acceso Oeste) semrá
de la obra concedida, ya sea «ír"poniendo al concesiOf!L1.rio uOO con- para compensar aquella obligación, en el supuesto en que se pro-
tribución de;f;erminada en dinero o una participación sobre sus duzca un defecto o déficit de explotación, ello sin perjuicio del
beneticíos . .. I~> como. lo establece la norma citada. Natur.almen~ deliólcho del concesionario al mantenimiento de la intangibilidad de
te, nada impide, y ello es en beneficio del concedente, que se su remuneración, según se verá más adelante.
impongan ambos tipos de contribuciones en su favor, lo que resul ..
tará de las condiciones líeitatorias y de la oferta de los distintos
"5.1. Cotización de 'los aportes'
concursantes. Estos últimos podrán ofertar estos tipos de bene- , 5,1.1. Sumas a entregar mensualmente al Comitente, en adelante
ficios en favor de la Administración, aun cuando el pliego de la fos aportes~. con posteríorídad a la iníciación de la explotación de la auto-
licitación no los señale expresamente, bastando conque se ealinque, pista. indícando la fecha en que se comenzarán a hacer efeCtivos los apOrt:f's
en tal documento, a la licitación como onerosa, ya que . de acuerdo y la fecha en la mal finalizará. la efcctivízación de los mismos.
COn la naturaleza y finalidad de esas contribuciones, no puede in- 5.1,2. Los aportes se reajustatán en el momento de la efect!vización
del pago al Comitente con el procedimiento establecido para actualizar las
terpretarse que la existencia de una excluya necesariamente a la tarifas de peaje en el Anexo JI del Pliego de Cláusulas Particulares.
otra, dado que ambas lJo son más que meras modalidades de com- 5, l. 3. Pautas básicas a las que deberá ajustarse la cotizacin de los.
putar la participaci6n de la concedente sobre el beneficio del can· :oportes,
.cesionario. 5.1 . .3 .1. Los a.portes cotizados podrán iniciarse desde la habilitación
Precisamente esta «onerosidad" de la concesión se funda en de la autopista. Estos deberán ser mensuales, continuos y crecientes desde
la fecha de su iniciaci6n y el final de la. concesión, En ningún caso la fecha
que, de acuerdo can los estudios efectuados por la Administración de iniciación de los aportes podrá exceder el primer mes del octavo año com-
en época anterior al llamado a licitación, o bien realizados por el putado a partir de la fecha de notificación al oferente del decreto de otor-
propio administrado interesado en la concesión sí se sigue el pro- gamiento de 1a COnCesión.
cedimiento previsto en el art. 4Q, ine. e de la ley 17.520 (ver supra, 5.1.3.2, Los aportes deberán ser cotizados en pesos argentinos. Se
presentarán en un flnjo de aportes mens1Jala.:;, expresados en pe.ros, de la
Capítulo VI, § 48, los ingresos por la tasa de peaje superarán el pun- fecha que el Comitente fije en la correspondiente comunicación de precali-
to de equilfbrío de la ecuación economicoHnauciera~ incluyendo ficac1ón"
en la misma un porcentaje prudencialmente estimado de beneficio 16 Así fue establecido en el caso de la concesión de las autopistas 25 de
empresario. En este sentido, resultará de estricta justicia hacer parti- Mayo y Perito Moreno~ según su pliego de condicíones.
cipar a la Administración concedente de ese mayor beneficio ob- ,"IV.5,2. Si a partir de la habilitación de ambos viaductos, en algún
penado anual de la explotación. los volúmenes reales de tTánsito fueran ¡rre~
tenido por el concesionario, ya sea a travÉs de un importe pre- nares a los garantizados, la diferencia en menos, mnltiplicada por la tasa vi-
determinado en el mismo momento de efectuar la oferta o fi- gente para motocicletas, automóviles y pic.k-ups y deducida la participación
jado en el pliego licitatorio 15, y/o por una participación porcen- que cOlTesponda a la Municípalidad, será cubierta por esta última,
De superarse el promedio diario anual garantizado se devolverá a la
MUnicipalidad cualquier pago qne hubiera hecho COn m~tivo de la garantía
15 Tal es el caso de la autopista. AccesO' Oeste, definida como "onerosa", arriba mencionada, reajustado coufonne a la fórmula de reajuste de las tasaS'
en la que los oferentes debían cotizar UDa suma determinada y reajustable de peaje ~N.2.1.).
en concepto de "aporte"" en beneficio del concedente, independientemente del De no haber suma algnna qne devolver. el excedente del mínimo ga-
resultado de la explotación de b obra, según las siguientes cláusulas del pliego rantizado se ,repartirá veínticinco por dento (25 %) para la MunicípaI::dad
de Bases y Condicíones Generales: y setentf\ y CInco por ciento (75 %) para el Concesionarioh ,
360 CONTRATO DE OBRA PÚBLICA
CO~CESIÓN DE OBRA PÚBUCA POR PEAJE 361
En definitiva, el monto y modalidad de esta participación en
favor de la Administración concedente dependerá de los estudios "Para ello se determinará el valor actualizado total de 10s
que ambas partes efectúen acerca de la ecuación economicofinan~ portes' a la fecha prevista de inicio de la concesión (notificación
TI

del decreto de adjudicación de la concesión L origen del plan eco-


ciera contractual, así como también de l~s condiciones empresarias
del oferente, que le permitirán o no realizar una propuesta en nomicofinanciero requerido en el punto 5.2.7. de la Base Quinta
mejores condiciones competitivas con relación a la de los otros de este pliego, aplicando para tal fin una tasa de descuento ~nual
del nueve por ciento (9 %) .
oferentes. Esto, claro está, sin perjuicio del deber (no ya del de·
recho) de la Administración de valorar las ofertas, no tanto en "El comitente, a efectos de la adjudicación, evaluará además
razón de la mayor participación que se le conceda, sino, además los restantes elementos que componen la oferta, en especial la fac-
de la solvencia técnica y económica de los postulantes, desde la tibilidad del plan economicofinanciero, en el que se. tendrán en
perspectiva del previsible cumplimiento del proyecto financiero cuenta las previsiones de inversiones y gastos totales y las de in-
expresado a través de la dtada ecuacÍón economicofinanciera, de gresos de todo orden, las garantías documentales y de otro tipo a
10 que es un ejemplo lo regulado en la "base novena" del ya ci- efectos de la obtención de los recursos necesarios.
tado pliego para la concesión de la autopista para el Acceso Oeste "El comitente podrá solicitar a los oferentes las explicaciones
a la Capital Federal: y datos que estime necesarios, en las condiciones previstas en el
"ADJUDlCAcrÓN DE LA LICITACIÓN. - El estudio de las ofertas segundo párrafo de la Cláusula 9~ del Pliego de Precalifícación.
será realizado por el comitente, el que} una vez concluido el mis~ Es facultativo del comitente aceptar o rechazar alguna o todas las
mo, procederá a adjudicar la licitación ad referéndum del Poder propuestas en la medida que las ofertas no demuestren responder
Ejecntivo) a la oferta que estime más conveniente, teniendo en a una estimación real del costo de las obras y a las posibilidades
cuenta la comparación de 'los aportes' que los distintos oferentes financieras previstas para su construcción, explotación y mante~
ofrezcan al comitente según la Base Quinta de este Pliego de Ba- nimientd",
'ses y Condiciones Generales.

Ta~~bién se previÓ una participación fija, destinada al recupero de de- ~ 60, MANTENIMIENTO DE LA ECUACIÓN
terminadas inversiones efectuadas por la concenente; ECONOMIOOFrNANClERA
"IV,e, Part{¡:'ipación a la Municipalidad
lV.6.1. Sin perjuicio de la participación establecida en V.5.2., el
Con<.:esionario está ohligado a dar a la Municipalidad una participaci~óI3 de En supra, Cap. 1, § 8, se ha señalado el principio de la intan-
10 perCibido durante la explotadón de la obra, a fin de que le permIta re- gibilidad de la remuneración del contratista particuJ.ar como uno
sarcirse de los gastos de expropiaci6n de los inmuebles afectados al trazado de los elementos integrantes del régimen exorbitante de los con-
de los viaductos. El monto total de la participación por tal concepto se fija
en treinta mil millones de pesos ($ 30,OO(),()QO.OOO}, a valores de Octubre tratos administrativos, en la vertiente de las garantías de los ad-
de 1977. ministrados.
Ll participación se hará efectiva durante el plazo de la Concesión e~ Este príndpio, COmún a todos los contratos administrativos}
cuotas trimestrales iguales y consecutivas, La primera de las cuotas debera
ahonarse al mes siguiente de finalizado el décimo quinto año de explotación, tiene en la concesión de obra pública sus características propias,
El nún1ero de cuotas resultará de la cantidad de trimestres que medíen desde considerando las modalidades de pago de la remuneración debida
el comienzo de] plazo de devolución hasta la fecha fijada corno fin de la al concesionario, según lo expuesto en los parágrafos precedentes.
concesión. La suma a reembolsar se reajustará de acuerdo con la fórmula Pero esto no es obstáculo a su plena vigencia, pues, como ocurre
estahlecida en IV. 2.1, para la taSa de peaje, Sobre dicho importe se adi~
COn los restantes contratos administrativos, el contrato de concesión
Clonará un interés anual del seis pOr ciento (6 %) sobre saldo, que se de-
vengará a partir del momento en que comience el plazo de devoluciÓn, Des~ de obra pública tampoco se celebra, por parte del concesionario,
de la fecha de notificación de la adjudicación hasta el décimo quinto año a riesgo y ventura.
de explobción, no se de·vengarán intereses".
El principio de riesgo y centura es Una vieja idea privatista
362 CONTRATO DE OBRA PÚBLICA CONCESIÓN DE OllRA PÚBLICA POR PEAJE 363;

que tuvo vigencia teórica en los contratos de concesión de servicio no beneficia sólo a sus usuarios, sino al resto de la población y'
público 11} aunque de escasa aplicación práctica. de la economía general, al posibilitar y facilitar el rápido y seguro·
No es éste el lugar de desarrollar dicha teoría y su critica tránsito de personas y cosas, ello sin perjuicio de los beneficios
(lo que se hará al analizar el régimen de la variación de costos en económicos generales que trae durante su misma etapa de cons-
el contrato de obra pública), pero si debe anticiparse, como lo trucción, como cualquier obra pública - y es entonces la comu-'
dice Arillo Ortiz, que' ... el prindpio de riesgo y ventura, tra- nidad toda la que, por lo menos en subsidio, debe hacerse cargo·
dicional en los servidos públicos, viene hoy sustituido por el prin- del pago de la misma. Nótese, además, que una autopista (para
cipio de cobe-rtura suficiente que la Admiuistración garantiza al continuar con el ejemplo adoptado, que es el caso común en ma-
concesionario de los servicios>~ 18 ~ que, en sIntesis, consiste en la teria de concesiones de obras públicas) podría también ejecutar--
Ugarantía que se da al concesionario de que} sea o no suficiente se bajo el sistema del contrato de obra pública propiamente dicho.
la tarifa, su remuneración así lo será>~ 1 ti. La elección del sistema de la concesión no es sino un 'método ins-
trumental de realización, fundamentalmente inspirado en raZOnes
La teoria del contrato de concesión de obra pública como ce-
lebrado a "riesgo y ventura" parte de una idea equivocada acerca presupuestarías y tributarias, pero que aun trasladando el costo
de tal obra a sus usuarios, nO por eno deja de pesar, indirecta-
de la naturaleza del mismo, como si se tralara de una operación
comercial en la que el concesionario busca obtener su rédito em- mente, sobre el resto de la comunidad. Es que en economía todo
presario a través de la explotación de una obra, dependiendo, en- se desarrolla a través de un ciclo en el que los costos, de una u
tonces, el resultado de tal negocio de los ingresos efectivos que otra manera; son trasladados a los sujetos económicos que con-
tinúan en la sucesión de etapas de ese proceso. Así también la tasa
produzca tal explotación. Pero esta idea olvida un dato fun·
damental: el concesionario es, antes que nada, un constructor que de peaje se difunde sobre toda la comunidad, pues de una mane-
ra u otra será trasladada a los costos de los productos, de los ser-
ejecutó una obra que, independientemente de la concesión, es de
vicios de distintos tipos y de los salarios.
propiedad de un tercero (el concedente), quien, también indepen-
dientemente de la concesión, debe pagarla (como se ha visto más Por lo tanto, desde el punto de vista del dueño de la obra
arriba), pues no se puede pretender que por el solo hecho de un (la comunidad a través del Estado), tanto los beneficios como el
resultado desventajoso eu la explotación de la obra su propietario costo de aquélla no pueden ser circunscritos a sus usuarios, sino-
la obtenga sin pagar su precio justo ya costa del constructor. Debe que deben ser considerados en función de sus efectos directos e
destacarse, en este punto, que la obra, cualquiera sea su naturale- indirectos sobre todo el circuito econÓmÍCO.
za, se hace en beneficio de toda la comunidad, y no sólo de sus A la vez desde el punto de vista del concesíonario-constructor.,
1

usuarios efectivos. El hecho de que su precio deba ser "pagado" como se señaló antes. éste no es un comerciante que sale a ofrecer
(ello con las aclaraciones efectuadas más arriba) por aquellos el uso de una autopista al mercado. Por el contrario, se trata
usuarios no desmiente lo afirmado, pues tal circunstancia ('el pago de un empresario que realiza un negocio de construccí6n y que,
de la tasa de peaje) se trata sólo de una técnica de distribución de simplemente, aceptó cobrar el precio de esa construcción de acuer-
la carga tributaria, lo que es decidido por el Estado soberana- do con una modalidad determinada. Pero esta modalidad no pue-
mente. Pero, como se dijo, la obra beneficia a toda la comuni- de conducir al extremo de convertir al contrato, que por su natu-
dad, pues enriquece el patrimonio común -p. ej., una autopista raleza es oneroso, en gratuito. Esto último puede percibirse re-
eurriendo a un ejemplo límite, pero teóricamente posible: supon-·
gamos que, en una autopista por peaje, los potenciales usuarios
11 Ver Ariño Ortiz~ C.> Teoría del equioolente económico en los contra- deciden no utilizarla; por consiguiente, no habiendo ningún ingre-
tos administ1"atü)os~ Instituto de &tudios Administrativos, Madrid, 1968. en so por peaje, el concesionario no podrá recuperar la inversión efec-
particular su Título 1,
18 Ariño Ortiz. ob. cit.) lAS tarifas, ,." p, 112,
tuada o, más exactamente, no podrá pagar a sus acreedores (aun-
111: Femández Fa.ltares, oh, cit.) Potestad tarifaria . .. > p, 374. que ya se vio que son créditos tomados por delegación del conce-
364 CONTRATO DE OBRA FÚBLlCA.
C,oNCESIÓN DE OBRA PÚBLICA POR PEAJE 365

dente), cayendo en estado de insolvencia O alguna otra alterna- tiene en cuenta distintos parámetros, entre eHos el tiempo de la
tiva igualmente ruinosa. Lo concreto es que habrá realizado una concesión y el plazo de explotación efectivamente transcurrido, el
obra -generalmente de gran C05tO- que pertenecerá al dominio costo de las expropiaciones, etc_ Pero a este valor se le deberán
público o al dominio privado del Estado (en sentido genérico) descontar} entre otros rubros, Un 20 70 en concepto de penalidad
sin poder cobrar su precio y también, naturalmente, sin poder re- y la amortización de todas las obligaciones contraídas con terceros)
tirar un solo ladrillo de la misma. según 10 siguiente: "Si el concesionario hubiere contado entre sus
Desde este ejemplo extremo hasta las situaciones parciales de recursos, con créditos de terceras personas) nacionales o extranje-
defecto de ingreso por peaje habrá una gran cantidad de matices ras, no se abonará al mismo sino aquella parte de indemnización
y alternativas, pero dicho ejemplo sirve para demostrar el absurdo que restare después de solventar las obligaciones contra Idas por el
y la injusticia de aquella teona del "riesgo y ventura", que es pro- concesionario, entre las que tendrán carácter preferente las que
puesta como si el concesionario~constructor. en lugar de ejecutar
hubieran sido garantizadas por la Municipalidad ..." (art. V.3.3.,
obras públicas, vendiese camisas en un local alquilado y que, si
ap. d).
le fue mal, Simplemente cambia de ramo, o de zona, salvando gran
parte de sus inversiones (estanterías, máquina registradora, etc.) Es decir, aun en el supuesto de su incumplimiento, e1 conce-
y recuperando algo de dinero, aunque sea malvendiendo las cami· sionario tiene derecho a percibir el costo de las obras ejecutadas
sas sobrantes. El concesionario no puede IIludar la autopista ni ("valor de reintegro", el que está matemáticamente afectado por
rebajar la tasa de peaje, ni demolerla para vender el material apro- el plazo de explotación o ingreso efectivo de peaje), ya que el resar-
vechable> ni nada que no sea cumplir con el contrato de concesión. cimiento por su incumplimiento (que en el ejemplo dado está fi-
de inspiración y fundamento fuertemente reglamentario. En es- jado eo:1':O cláusnla penal) nO pnede nunca, COmo se dijo antes,
tas condiciones, ¿no es inapropiado sostener el principio del "ries- significar el obligarle a trabajar gratis. Pero, claro está, el con-
go y ventura"? . ·cedente se reserVa el derecho de pagar primero a los acreedores
Claro que junto " esta realidad económica existen también por los importes invertidos en las obras, les haya o nO otorgado su
razones de Índole jurídica que excluyen al principio del "riesgo y garantía) pues, como se ha visto, el concedente, cOmo delegante,
-venturan en razón de ese otro gran principio imperante en todos es responsable del pago de esas inversiones can las que Se pudo
los contratos administrativos, el de la "intangibilidad de la remu- constrnir la obra de su propiedad. Recién el sobrante, si lo hay,
neración del contratista particular", al que ya se hiciera referen- teniendo en cuenta la posible existencia de otros créditos contra
cia y sobre el que se vnlver;Í al desarrollar el régimen de las Va-
el concesionario in cumplidor, será saldado a éste como "valor de
riaciones de costos en el contrato de obra pública.
reintegro;', aunque, en realidad, en tal caSo sólo se pagarán las
También, necesariamente. rige aquí otro gran prin.cipío ju- inVersiones hechas por el concesionario con sus propios fondos, y
rídico: nadie puede invocar su propia torpeza, de rnanera que el
sí todavía restan fondos, su beneficío empresario (naturalmente
concesionario debe asumir las consecuencias gravosas del negocio)
cuando éstas le sean imputables. Pero aun asi, la obra ejecutada redncido por la extinción anticipada de la concesión), pues el cos-
debe ser pagada, y as! se encuentra establecido en los precedentes to de la obra 'la fue pagado al saldar los créditos de terceros acree-
administrativos antes analizados. Por ejemplo, en el caSo de las dorés.
autopistas 25 de Mayo y Perito Moreno, para el supnesto de re- Esto no quíere decir que el concesionario no asuma ningún
solución anticipada de la concesiÓn por incumplimientos del con- n-álea", Como en los otros contratos administrativos, sus mayores o
cesionario, siempre durante el período de explotación de las obras menores beneficios depender/m de su capacidad empresaria, de su
viale1'l\ el concesionario es íguaJmente acreedor a un ~'valor de rein- correcta organización en· orden a reducir costos, al uso de una
tegro" (al'ls. V.3.3. Y V.8, del pliego ya citado) según una fór- adecuada tecnología en la construcci6n de la obra, etc. Ademlts
mula matemática que, partiendo del costo actualizado de las obras
366 CoNTRATO De: OBRA ptBLICA CONCESIÓN DE OSnA PUBLICA POR PEAJE

no Se debe olvidar que su beneficio, en gran o en total medida,. basta aquÍ, tal limitación no encuentra justificación jurídica o eco·
según los casos, dependerá del uso de la obra por encima de la nómica alguna.
garantía de explotación mínin1a, siendo éste un dato relativamente Así también fueron interpretadas (para la conceslOll de SeIvi-
incierto al momento de ofertar~ aunque muchas veces en esta ex· cios públicos, aunque de evidente aplicación en el tema aquí tra-
pectativa de mayor utilización de la obra resida la verdadera uti- tado) disposiciones normativas semejantes en el derecho compara-
lidad del negocio emprendido, si con la garantía de explotación do, según lo que afirma el ya citado Fernández Fureres: "De ahí
mínima, según la oferta que baya presentado el concesionario (lo que lo relevante, ante todo, consista en la garantía que se da al
que dependerá de su capacidad empresaria) sólo Se paga el cos- concesionario de que> sea o no suficiente la tarifa, su remuneración
to de construcci60 de la obra y los gastos correspondientes a la e.x- sí lo será". Claramente -señala el autor- lo establece el ar!. 129,
plotación y matenimíento de la misma durante el período de la párrafo 3, del Reglamento de Servidos de Jas Corporaciones Lo-
concesión. .cales del 17 de junio de 1955: "En todo caso, la retribución prevista
El principío de la intangibilidad de la remuneración. O de la para el concesionario deberá ser calculada de modo que permita,
"cobertura suficiente", según la expresión de Armo Ortiz ya ci- mediante una buena y ordenada administración, amortizar duran-
tada, tiene aplicación cuando Jos ingresos por tasa de peaje no te el plazo de la concesión el costo de establecimiento del servicio y
logran producir el "cierre" o equilibrio de la ecuación economíco- cubrir los gastos de explotación y un margen normal de beneficio
financiera o proyecto financiero de la concesión. Esta situación industrial", y cita la siguiente jurisprudencia del Superior Tribu-
puede deberse tanto a un defecto de uso -lo que en realidad nal, de fecha 6 de junio de 1975:
« ••• rota la economía de la concesión. la Corporación - con~
sólo tendrá importancia euand" no se haya establecido expresa-
mente la garantía de explotación mínima- como a una insuficien- cedente- nO s610 tiene la potestad sino también el deber según
cia tarifaría, derivada, habitualmente, por la falta de representati- prescripción textual del artículo 126, núm. 1. ap. 29 ; b) del RSCL,
vidad sabreviniente de la fórmula de revisión de las tarifas de de mantener la retribución ecoMmica del concesionario, lo cual es
tasa de peaje (aspecto que será estudiado al desarrollar el régimen para éste un derecho correlativo según el 128, núm. 3, ap. 3°, de-
j
¡ de la variaci6n de costos en el contrato de obra pública). recho que es exigible no sólo cuando por acto de la autoridad se
! na modificado el servicio sino también como se dijo en el caso de
Nuestra legislación ha contemplado expresamente el proble- circunstancias sobrevenidas e imprevisibles, y debiendo tener lugar
ma, en el último párrafo del arto 79 de la ley 17.520: "En los ca- mediante revisión de las tarifas y subvenciones como dispene el
80$ en que las inversiones motit>o de la concesi6n fueoon a ser fi-
propio artículo 127 citado, no puede naturalmente entenderse esa
nancúulos can recursos del crédito a obtenerse por el EstmIo o prescripción limitada al caso de que existieran pactadas sino tam-
'JX'f el concesionario con la gamntía de éste, la concesión, - ade- bién en el de su modificación, supresión O establecimiento cuando
más de prever los procedimientos de fíjación y ajuste de tarifas- la propia naturaleza del servicio y de la alteración económica de
deberá contener las disposiciones que aseguren la am.ortizoción !I las contrapresiaciones lo exija a tenor del artículo 126, número 2
servicio de las deudas y obligaciones a contraerse, así como la; b) citado, que establece el deber de 'mantener en todo caso el
obligacíón del Estado de proveer el eventual defecto de ingresos equilibrio de la retribución ec0r0mica del cOMosio1Ulrio' a tenor
si las tarifas autorlzmIos o reaiustafÚls no resultasen suficientes". de las bases que hubieran servido para su otorgamiento' y 'en fun-
Esta obligación del concedente es, entonces, compensar, de la ma- ción de Ja necesaria amortización del coste de establecimiento del
nera que resulte apropiada al caso, el desequilibrio que afecta a ,ervicío, los gastos de explotación y el nom.al beneficio indus-
la ecuación economicofinanciera contractual, como correctamente trial. ... ~~ 2 o.
lo establece la norma transcrita, aunque deba criticársele su apa-
rente limitación a los supuestos en que se ha recurrido al crédite>
de terceros COn garantía estatal, pues por la razones expuestas 20 Femández Farreres, ob. cit., p. 374, y nota n'" 2, ps, 374/375,
368 CONTRATO DE OBRA PÚBLICA CONCESIÓN DE OBRA PÚBLICA PO}1 PEAJE 369'

sario para percibir de los beneficiarios de la obra el pago de este


§ 61. EXTINCIÓN DEL CONTRATO. REMISl6N especial tríbuto que, precisamente~ es también denominado en el
derecho tributario como "contribución de mejoras".
El contrato de concesión de obra pública por peaje tiene tam- Por consiguiente,. todo lo expuesto COn relación a la concesi6n
bién modalidades propias de extinción anticipada, que derivan de obra pública por peaje es aplicable para este caso, no siendo
del instituto de la delegación transestructural de cometidos en que necesario abundar en más detalles, salvo sobre aquellos aspectos
se fundamenta. Tal es el caso del rescate, por el cual el dele- reglamentarios específicos de esta figura jurídica.
gante (concedente) retoma el cometido delegado en el concesin· Cabe señalar que la contribución de mejoras no es un meca~
narlo, extinguiendo la concesión, obligándose al pago de la obra nismo de aporte de fondos para la construcción de obras públicas
ejecutada más una indemnización por daños y perjuicios que pue- de aplicación exclusiva en el sistema de la concesión, Por el con~
de estar o no pactada en el contrato. Por razones metodológicas trario, la Administración puede recurrir a esta forma de recaudar
es preferible estudh'U este especial modo de extinción del eontra- fondos sin delegar tal cometido en el constructor de la obra, tal
to (que no deja de tener íntimas relaciones con la figura de la como lo establece, por ejemplo, la ley 10.004 de la províncía de
revocación, propia de todo contrato administrativo) junto <--on los Buenos Aires, que reglamenta el "plan provincial para obras de
restantes modos de extinción del contrato de obra pública. Lugar gas", cuya aplicación es de responsabilidad de la Dirección de
adonde se remite su desarrollo. Energía de la Provincia de Bnenos Aires ( DEBA). Este plan
prevé la contratación de las obras con empresas constructoras,
previa licitación pública~ « •• , por el sistema de pago direL~o ... »~
§ 62. CONCESIÓN DE OBRA PÚBLICA POR OONTRIBUcrÓN
aunque diferido en un « ••• plazo de doce (12) años, incluyendo
DE MEJORAS
dos (2) de gracia a partir de la recepción de las obras" (art. 39 ),.
estableciéndose también que todas las demás cuestiones vincula-
das Con la ejecución del contrato se regirán por la ley provincial
Como ya fue adelantado, en este tipo de COn(eSlOn de obra
pública el elemento delegación queda reducido a una mínima ex- de obras públicas 0021. Independientemente de ello, la misma
presión, ya que, al nO existir explotación de la obra en un sentido ley 10.004, en su arto 79 impone "la obligación de pagar las mismas
estricto (vel supra, Cap. VI, § 47), lo delegado al concesionario (obras) a todo plopietalio, sus sucesores universales o particula-
es simplemente la percepdón de un tributo que guarda una rela· res de los inmuebles ubicados en áreas o ciudades ..." compren-
ción directa COn el precio de la obla (la remuneración del cons- didas en el respectivo plan de obras, mientras que el art. 8? dis-
tructor) y cuya base de distTibución subjetiva lo hace recaer so- tingue entre los obligados al pago, con sus pertinentes efectos, a
bre determinados beneficiarios inmediatos de esa obra pública. los "usuarios domésticos", "propietarios nO usuarios", «usuarios no.
Es de destacar, en e.<.;te sentido como Bezzi t al analizar este sis~
1
domésticos'" y "usuarios en alta presión".
tema de ejecución, nO lo califica como concesión, sino; símplemen v

te, se refiere a las "obras públicas municipales Con participación


de vecinos"':al.
§ 63. LA NATURALEZA TRIBUTARIA DE LA CONTRIBUCIÓN
El concesionario (manteniendo, entonces, la clásica califíca-
DE MEJORAS
ción) es aquí, como también en la concesión por peaje, un mero
constructor que sólo agrega a Su organización empresaria lo nece-
L~ contribución de mejoras integra el grupo de potestades tri-·

21 JJezzi, O. M., El contrato de o/n-a pública, Abe¡edo-Perro~ Bs. As.,


butarias que conforman lo que se ha dado en llamar "parafíscali-
1982, Ca)'. XVUI. dad", la cual no constituye, de acuerdo cOn la opinión de la doc-·
CONTRATO DE OBR..\. PÚBLlCA CONCESIÓN DE OBRA PÚBLICA POR PEAJE 371

trina autorizada, una categoría jurídica distinta de la tributaci6n Contrariamente a este criterio, en fallos 282:4(Y7, en una cau-
,'general o política 22. sa en la que se ventilaba igual cuestión, con una composición dis-
Según lo ha señalado la jurisprudencia de la Corte Suprema tinta, la Corte entendió que el Banco Hipotecario estaba obligado a
de Justicia, la contribución de mejoras emana del poder impositivo abonar la contribución aludida, pese a la exención establecida en
del Estado y consiste en hacer recaer, en todo o en parte, el costo la nOrma antedicha, En esta oportunídad también hubo disidencia
de una obra pública local sobre los inmuebles y los titulares de
,su dominio que resulten particularmente benefíciados por ella ".
Pese a la doctrina anteriormente transcrita~ no ha sído siem- rldad del país, de las prerrogativas necesarias o convenientes para el logro de
pre uniforme la opinión que la Corte ha sustentado acerca de la sus objetiVOS. tal como acontece con la exención de las contribuciones naci()~
nales, provinciales o municipales a que se refiere la citada norma, lo que
naturaleza jurídica de la contribución de mejoras, En algunas no ha de entenderse como indiscriminada o absoluta~ sino que reviste carácter
oportunidades ha sido asimilada al resto de los tríbutos generales. excepcional y debe juzgarse atendiendo a las circunstancias de la especie, a
Así, por ejemplo, en la causa B-376 caratulada "Banco Hipote- la naturaleza de la actividad desarroiIada por la institucioo que la invoca y
cario Nacional e/ Municipalidad de la Ciudad de Rafaela", fallada a la Índole del tributo ex.igído (Fallos; 299:77), a lo que agregó en esa
oportunidad que la exención impositiva establecida a favor del Banco Hipo-
el 27 de mayo de W82, el Alto Tribunal por el voto de tres de tecario Nacional sobre bieues inmuebles no comprende a las tasas retributivas
sus miembros decidió que el Banco Hipotecario estaba exento del de servicios, máxime si no se alega y demuestra que la imposición imposibiUte
pago de la contribución en mérito a lo dispuesto por el arto 50 del o dificulte 1a actividad que desarrolla el Banco, porque las tasas retribuyeu
decreto 13.128/57, el cual dispone que los inmuebles de esa insti- un servido pÚblícO oneroso" prestado con generalidad y sufragado por todos
en proporción al provecho que ocasione a riesgo de qoe si así no se pro-
tución bancaria se hallan exentos de toda contribución O impuesto ceden puede eJ/;ístir un cnriquecimíento sin causa.
nacional, provincial o municipal. Cabe decir que esta decisión Tal doctrina resulta a mi modo de ver aplicable al sub lite> aún cuando
cuenta con la disidencia de los doctores Gabrielli y Rossi, y con la naturaleza del tributo, cualquiera que eUa fuere. difiera de la que motivó
. dictamen desfavorable del Procurador General ", aquel pronunciamiento. porque existan similares razones a las mencionadas
por la: Corte en aquella oportunidad para excluir la contribución cuya repeti-
ción se persjgue de la exención que analiza la ley,
2'2 Giuliani Fonrouge, c., Acerca de la llamada rmrafiscalidad, LL, 126/ Op.i:no, por tanto, que corresponde confirmar la sentencia apelada en
'910. cuauto pudo ser materin del recurso extraordinario.
23 Ver, CSN, Fallos, 138> 161, 172, 272, 189, 394, 196, 218, 206> Buenos Aires, 27 de noviembre de 1981.
21, 256, 496, 263, 436. MARIO JUSTO LóPEZ.
24 Ver la transcripción del fallo y de las doctrinariamente importantes
disidencias a continuación: Buenos AireS', 27 de. mayo de 1982,
<BancCo Hipotecaría Nacional c/MunicipaJidad de la Ciu-
VISTOS LOS AJ.rros;
El recurso extraordinario concedido a Es, 181 es procedente por h¡¡berse dad de Rafaela slrepetkión de pago (ordinaríoY,
cuestionado la inteligencia de normas de carácter federal y por ser, la ded-
sión final del Superior 'l'ribunal de la causa contraria al derecho que en CONSroERAN.lX):
ellas fl,Hlda la institución recurrente. 19) Que medíante la demanda de autos, el Banco Hipotecario NaCional
En cuanto al fondo del asunto, la Cámara Federnl de Rosario confirmó persigue la repetición de la stuna que, en calidad de frentista obHgado al
10 resuelto por el Inferior, que no hizo lugar a la demanda interpuesta por pago, abonara en 1976 bajo prott'.sta a la Municipalidad de Rafaela, provincia
el Banco Hipotecario Nacional contra la Municipalidad de la Ciudad de de Santa Fe, en concepto de retribución de mejoras por la iluminación peri-
Rafaela por repetici6n de sumas pagadas en concepto de contribuciÓn de metral de la plaza 25 de Mayo de dicha ciudad, Invoca en favor de su
mejoras por iluminación con lámparas a gas de mercurio del perímetro de reclamo la exención que contiene el art. 50 del decreto-ley 13.128/57, y sos-
la plaza de dicha ciudad frente a la cual se ubica el edificio de 1a sucursal tiene la inconstitucionaljdad de las ordenanzas locales qué impusieron el re·
de la actora. quien funda su pretenci6n en 10 dispuesto por el 8rt 50 del feddo tributo. La Cámara Federal de Apelaciones dé Rosaría, pOr sentencia
,decreto-ley IU28/51. de fs. 160/163, confirmó la del inferior que había rechazado la dell1.1nda, 10
V. E. tiene dicho respe.cto !l la cuestión que conforme al arto 67, incisos que dio motivo al reCurtw extraordinario de fs. 171/185 ~concedido por el
18 y 28 de la. Constitución Nacional, la NaciÓn puede dotar a las ínstituclü- a qua a fs. 187- 1 que resulta procedente por hallarse controvertida la ínter-
:"nes de bien público. creadas con el fin de promover el progreso y la prospé- pret'iCÍón de una norma de carácter federal y ser la decisión definitiva im-
372 CO!'\TRATO DE OBRA PÚBLICA
CONCESIÓN DE OElIA PÚBLICA POR PEAJE 373
en el seno del Tribunal, ya que los doctotes Cabral y Chute vota-
ron por la soIucíón propiciada más recientemente. de mejoras carece de ('jernentos intrínsecos que permitan englo~
Sin entrar a considerar la constitucionalidad de la norma de baria en una misma categoría con el resto de la tributación ge-
exención impositiva dispuesta a favor del Banco Hipotecarío Na- neral. Es, por lo tanto, a mi juicio, una espede del género tri-
cional antes mencionada, na caben dudas de que la contribución buto y resulta por ello de pago inexcusable para los vecinos fren-
tistas que se benefician con la obra pública construida, cuando ésta
se ejecute según ese sistema de integración de fondos.
pugnadas contraría al derecho que el apelante sustenta en ella {arto 14, ine, 39
de la ley 48).
29) Que no se discnten en el sub lite las facultades del gobierno nacio~
na.} para f"..stablecer exenciones como la contenida en el arto 50 del decreto~ monto perseguido en la especie, por su magnitud, no llegaría a trabar el
ley 13.128/57, en cuanto prescribe que: 'los inmuebles del Banco ... están ejercicio de dicha actividad~ ello no basta para prescindir de la exención,
exentos de toda contribución o impuesto nocional, pTocincia1 o municipal .. ,', pues no debe perderse de vista la variedad de contribuciones que sería po-
cuya validez constitucional, por otra parte, ha sido reconocida por esta Corte sible reclamar, ni Ja pluralidad de sucursales que posee la entidad actora lo
(FaHos: 271:145), sino qne se discrepa H;specto del alcance que corresponde que podda oríginar imposiciones que llegasen a obstaculizar el cumplimi~to
otorgar ,. t::¡! privílegio, de la fmalidad de su creación.
39 ) Que, en ese sentido, luego de acorlarles una extensión amplia a las
69} Que si bien en la sentencia que se registra en Fallos: 2.82:407~ el
normas de ese tipo (confr, doctrina de Fallos: 259:303), el Tribunal res~
Tribunal consideró extraño a la exención el pago de lo. contribucíón de me.~
tringió su aplic:tción precis:mdo las pautas con que debían apreciarse las
ioras por pavimentos, ello fue asi en razón de haberse tenido particularmente
exenciones, y estableciendo sobre el particular que ellas no deben t"..$tlmarse
en cuenta qne el gtavamen recaía allí sobre un terreno baldío adquirido por
indiscriminadas y absolutas sino, por el contrario, de earácter excepciouaL
la actora en remate, en el que ella no desarrollaba ninguna actividad propia
En ese entendimieuto, considel'ó conveniente que su alcance se juzgue: en cada
de su giro ni de sus fines, ... circunstancia que determina una sustancial dife-
caso atendiendo a ías circumtancías de especie, a la naturaleza de la activi-
rt~ncia con el aqttÍ planteado, en el que se grava la sede de )a entidad recu-
dad desarrolh\da pm' la institución que las .invoca y a la ínaole del tributo
rrente. Otro enteudímiento privarla de su contenido a la expresión "toda
exigido (Fallos: 279:76, consid. 7 Q ), Así, se dedd16, con referencia COn-
contribueión" del art. 50, en cuanto se refiere a los inmuebles de la actora
creta a la norma aquí cuestionada, que es exigible a la actora el pago de las
tomándose de ese modo juoperante la norma. lo cual no es pOSible sin previo
tasas municipales de alumbrado l banidó y limpieza, que graven los e¿líficios
debate y declaración de inconstitueionalidad. extremo que no concurre en
construidos con destino <1 su posttrior adíudicaci6n a particulares (Fallos: la especie,
279:76), y aun cuando recaigan sobre la sede misma de la sucursal del Ban-
co {Fallos: 302:1426). Corresponde advertir, $iin embargo, que en ambcs 7 f1 ) Que, en mérito a 10 expuesto, ca be concluir que las ordenanzas
casos se tuvo especialmente en consideración que los gravámenes aplicados locales impugnadas, en cuanto imponen a la adora el pago de la contribu-
revestían la calidad de tasas, y la ch'cunstancia de que esa especie no se ción de mejoras por la iluminación perimetral de la plaza 25 de Mayo de
hanaba expresamente comprendida en el texto de la exención, ni podían la Ciudad de Rafaela, se encuentran en pugna eón lo establecido en el arto
asimilarse al concepto de 'toda contribución' que contiene el precepto en 50 del decreto~ley 13.128/57. cuya supremacía Corno ley de 1a Naeión debe
examen. reconocerse en virtud de 10 prescripto en el arto 31 de la ConstituCÍón Nacional.
49 ) Que, en f'1 caso de autos, y al margen de las discrepancias del Por eIJo, habiendo dictaminado el Señor Procurador General, se revoca
recurrente en cuanto a la distribución del costo de la obra y al beneficio la sent:ncia apelada, Vuelv~n los autos al tribi.U1a1 de origen a fin de que~
que ella podría reportar a los inmuebles de 'los propietarios frentistas. cuadra por qUIen corre~'Ponda, se dicte un nuevo pronunciamiento con arreglo a lo
coufigurar el tributo apHCldo como una conhibución de mejoras, sIendo de dispu~to en el arto 16. primera parte, de la ley 48. CostaS' por su orden en
destacar, por lo demás, que ésa es: la califícaci6ú que ha sosteuído la de~ atehClOn a la naturaleza de la cuesti6n debatida y a la existencia de prece~
mandada durante todo el pleito. deutes que pudieron inducir a la demandada en su raZÓn para litigar (art. 68
5'?) Que, en tales condiciones, y a diferencia de ros precedentes citados, Código Pro,:esal). Notifíquese, - ADOLf'O R. GABRlELLl (en diSidencia) :..
el gravamen qtle se Clle',stionu se halla expresamente comprendido en la exen- A:a:EJ...A11oo !" ROSSI (en diSidencia) - ELÍAS p, GUASTAVJNO - CÉsAR BLAC'J:
ción del art. 50 del decreto-ley 13.128/57 en cuanto alude a 'toda contri- - CAl\WS A. RENOM,
bución o impuesto nacifm.al, p-roDincial () munícipnl'. a 10 que se suma la Disidencia del sellOr Presidente doctor AdolfO' R. GabrieUi
circunstancia de que recae sobre el inmueble mismo de la sede donde la y del señor rn.ínístro doctor Abelatdo F. Rossí
actOra desarroIlfi su actividad, con el objetivo esencial de solucionar el pro- OONSIDEXlANOO :
blema habitacioIlal del país al menor costo posible) finalidad para cuyo logro
del legíslador acordó el referido privilegio. Si bien podría alegarse que ¡;ll 1 9 ) Que mediante la demanda de autos, el llanco Hipotecarlo Nacional
persigue la repetición de la suma que, en calidad de frentista obligado al
374 CoNTRATO DE OBRA PÚBLICA CONCESIÓN DE Om:tA PÚBLICA POR PEAJE 375

Así ha sido establecido por el art. 35 de la Ordenanza Gene- o poseedores a título de dueño de los inmuebles beneficiados, pre-
ral NQ 165 de la provincia de Buenos Aires, aplicable a todos los via declaraciÓn de utilidad pública."
partidos de la misma< "El costo total de las obras que se eje~u­ Ahora bien, interesa especialmente determinar cuál es el li·
ten conforme con lo establecido en la presente ordenanza -d.ce mite económico de la tributación que debe efectuar el titular del
la norma citada - serán de pago obligatorio para los propietarios dominio beneficiado, pues alli radica la cuestión esenciaL Si la
contl'ibucíón no se hiciera efectiva se produciría un enriquecirnien-

pago. abonara en 1976 bajo protesta a la Municipa1ídad de Rafaela J ~ovin­


da de Santa Fe, en concepto de contribución de mejoras por la nueva lOsta- 49) Que si bien 1a norma legal citada habla de 'toda contribución'~
lación de iluminacián petimetral de 1a plaza 25 de Mayo de dicha ciudad. ello solo no autoúza, por si. a atribuir un sentido lato y omnicomprensivo a
Invoca en favor de su reclamo la ex.ención que contiene el art. 50 del decreto- dichos términos sin motivo que lo íustifique (Fallos~ 302:1425), máxime
ley 13.128/57, Y sostiene la inconstitucionalidad de las ordenanzas locales cuando, según se dijo supra, la norma aquí en cuestitm debe interpretarse
que impusieron el referido tributo. La Cámara Federal ~e ~pelaciones de restrictivamente. Cabe recordar al respecto la jurisprudencia de esta Corte,.
Rosario, por sentencia de fs, 160/163, confir:m6 la del lnfeno~ q:ue habia segtÍn la cual pOr encima de lo que las Igyes parecen decir líterafmente, es
rechazado la demanda, lo que dio motivo al U;l(.'UfSO extraordmano de fs, propio de la interpretación indagar lo que ellas dicen juddicamente; en esa
177/185 -concedido por el a qua a fs. 187-, que resulta procedente por indagación no cabe prescindir de las palabras de la le-y, pero tampoco ate-
hallarse controvertida la interpretación de urla norma de carácter federal y nerse rigurosamente a eUas cuando la interpretación sistemática así 10 re-
ser la decisión definitiva impugnada contraria al derecho que el apelante quiere (Fallos: 283;239; 301:489 y muchos otros).
sustenta en ella (art. 14, ine. 3~. de la ley 4S), En este orden de ideas cuadra señalar que si bien el juzgador debe
2Q ) Que no se discute en el sub lite las facultades del gobierno nacional atender en primer lugar a las palabras de la ley, numerosos y cotidianos son
para establecer exenciones como la contenida en el art, 50 del de;:reto-Iey ios casos en que ello no basta para aplicar la norlI)a con auténtico sentido
13.128/57 en cuanto prescribe que~ 'los inmuebles del Banco. '. estdn exen- de justicia y recto juicio prudencial en el caso concreto, rodeado a menudo
tos de toda contribución o imptl&to. ruteíoncU. provincial o municipaL .. ', de variadas circunstancias que lo singularizan, I..il ley, por su propia na~
cuya validez constitucional, por otra parte~ ha sido reconocida por esta Corte turaleza, no puede sino hablar ut in pluri'bus, brevemente y en general, pre-
en numerosos precedentes (Fallos: 237:239; 271:145; 279:16; 282:407; 295: viendo hipótesis tipo; los casos a Juzgar son particulares, concretos y contin-
338; 302:1425) sino que se discrepa respecto del alca.nce que corresponde
j gentes y por su indeterminaci6n y mn1tiplicidad no son siempre S'Usceptibles
otorgar a tal privilegiO, de ser abarcados en sn totalidad cuantitativa ni en su tipicídad cualitativa.
39) Que esta Corte tiene establecido como pauta hermenéutica para por la previsi6n del legislador.
deterlI)inar el alcance que debe otorgarse a tales exenciones, que éstas no Aplicar fa ley importa siempre interpretada en función de su verdadero
han de entenderse como indiscriminadas y absolutas, sino que revisten ca- sentido y de la situación real a juzgar a fin de lograr la recta detcrmjnáci6n
rácter excepCional, por lo que es menester que se las juzgue atendiendo a de ]0 justo en conereto, La claridad líteral de un texto no siempre corre
las circunstancias de especie, a la naturaleza de la actívidad desarrollada por pareja con su auténtica sustancia jurídica, ni puede indiscriminadamente apli-
la institución que las invoca, a la índole del tributo exigido y a los distintos carse a todas la,')' situaciones que aparentemente se SUbsumen en su letra.
hechos jurídiCOS tributarios a que respondan las diversas clases de imposi- Entra aquí a jugar la delicada tarea jurisprudenciaI, cuya primordial fina.1i~
ciones, so pena de coarlar las facultades imposltivas de las provincias que dad es -además de lograr ra ade()uada ósmosis de norma general y situación
éstas deben eíerúe:r en su ámbito propio. en tanto no hayan sido delegada.,<; particular en función del valor justicia- la de desentrañar la verdadera in-
en el Gobierno Federal, conforlI)e a 10 dispuesto en los arts. 5, 104 y 105 terpretación de la ley. Y para ello se impone considerar armónicamente la
de la Constitución Nacional (conf. doctrina de Fallos: 279;76; 282:407; totalidad del ordenamiento ;urídíoo, los principios constitucionales y In rallO
302:1425 y los numerosOS precedentes en ellos citados), Va de suyo que legis (doci. de Fallos: 302:973) 120g, 1284 y sus citas). La n1isi6n judicial
tales prindpios rigen también respecto del poder impositivo de las munici- -ha dicho esta Corte- no se agota con la remisión a la letra de la ley (doct.
palidades, que es el supuesto de autos (Fallos: 123:313, COIlS. 59). de Fallos citados); sin desnaturalizar su senudo y dando por supuesto que
Si bien en Fallos: 279:16 y 302:1425 se trataba de <tasas', FaHos: el texto legal ('A)nstituye e1 primer elemento de juicio a que debe recurrir e1
282:407 se refena concretamente a 'contribución de mejoras' y allí se dijo juzgador para interpretar 'la norma. debe señalarse que cnando la expresi6n
que no cabía duda que cuadraba extender a este último supuesto las razo- literal presenta imperfecciones técnicas. dudas o ambigüedades jurídicas, ()
nes que se consignaban en los considerandos 89 a 12. de Fallos: 279:76 para admite razonab!es distinciones, ha de recurrirse a la ratio legís> porque no eg
conc1uir que no rige en el caso la liberaci6n fiscal prevista en el arto 50 del el espídtu- de la ley el que debe subordinarse a las palabras. sino éstas Il
decreto-ley 13,128/57, principio que esta Corte comparte. aquél, máxime cuando, como en el caso, aquella ratio se vincula con ~~'ñ-'~;r.
CONCSSIÓN DE OBRA PÚBLICA POR PEAJE 377
376 CmrTllATO DE OBRA PÚBLICA

Por sU parte. la ordenanza de la provincia de Buenos Aires,


to sin causa. Si es cobrada en exceso, es susceptible de ser til~ antes citada, establece que la contribución, calculada sobre la base
{lada de confiscatoria. del precio al contado de la {lbra no pmll-á exceder del treinta y
La Corte Suprema ha elaborado una pauta general según la tres por ciento del valor real del inmueble COn la mejora incorpo-
-cual el gravamen no debe exceder el mayor valor o beneficio que radaj estatuyendo. asimismo, que todo exceso «confiscatorio" será
produce la obra (Fallos 167:367; 201:351; 202:19 y &3), ni abso:- abonado por la munieípalidad respectiva (arl. 36).
ber una parte sustancial de la propiedad que 10 tome Conflscatono Otra cuestión que debe ser deslindada es a qué jurisdicción
(Fallos 181:5; 2j)O:352). compete 10 atinente a la fijación de las contribuciones de mejoras.
Por principio, y tratándose de cuestiones de orden local, ello recae
dpios constitucionales que siempre han de prevalecer en la interpretación
de las leyes. dijera que los propíetarios co.ntribuyentes están exentos de pérdida peeuniaria
5\1) Que, sobre las bases expuestas y a los fines de apreciar el alcance y no. re.$ultan :perjudicados con relación a los demás propietariOs, toda vez
<le los términos 'toma contribución' que emplea el arto .so del decreto-ley que se les toma el eqUivalente. {) nJenos, del beneficio excepciona} que n~co­
13.1.28/57 debe tenerse presene que la doctrina y antiguos precedente de gen de la obra y de la valorizaciÓn que ésta implica para el inmueble, Esta
esta Cort~ han asignado a la institución llamada 'contribuci6n de mejoras' Corte ha señalado el principio de justicia ínsito en esa situaciÓn (Fallos:
c<1tegorÍa tributaria aut6noma, distinta de los impues:os y. las. tasas; dE>Jl:ro 138:161 y 140: 175).
¿el género 'tributo» ella forma parte de la especie contnbuciOnes especl~~ De todo ello cuadra deducir que si bien la 'contribu~ción de meioras' es un
les', pero Con caracteres y modalidades tan peculiares que ~e, dan autonom,la tributo impuesto por el poder público y, por ende, ha de estar regído por
propia dentro de estas últimas (v .gr. contribut::iones de vIalIdad. de peaje, la igualdad proporcíonal típica de la justicia distributiva (arg. de los arts.
de secruridad social, etcétera). 49 y 16 in fine de la Constitución Nacional), el pago de la misma por el
;on citas de autores y de la Suprema Corte de los Estados Unidos, contribuyente más que ti una obligación de justicia general -<:omo es la de
nuestro Tribunal ha tenido oportunidad de conceptualizar con nitidez ia ins~ abonar los impuestos para las necesidades y fines del Estado- se asemeja
tltución de la 'contribución de mejoras', llamada en aquel país y en lngla~ a Una com:pcnsación o retribución de un gasto púb]1co efectuado en beoe.
terra special cwsessement (} local ass6ssement (Fallos 102:379; 123:313; ficio Particular del propietario; de aquí que la ~contrlbuci.ón de mejoras' no
138,161; 140'175; 282;407). pueda exceder del monto razonablemente estimado del valor que la mejora
A diferencia del impuesto, qUe es un tributo general y permanente es- produce para el inmueble (conf. doctrina de Fallos antes cítados); se trata
tablecjdo para atender a las necesidades de un determinado ~tad(l. (} su~­ más bien de una equivalencia de prestaciones, aunque una de ellas, la del
división política de éste. la 'contribución de mejOras' es un trIbuto e.specl~l contribuyente, sea establecida coercihIemente por el poder impositivo del
en tanto recae exclusivamente sobro los propietarios de inmuebles determI- Estado.
nados para sufragar -·.en todo o en parte- los gastos de una obra pública 6Q ) Que resulta, pues, aplicable al suv Ute la doctrina que surge de
que sólo a ellos directamente beneficia y en razón de ese beneficio; además. Fallos! 279:76; 282:4<11 y 302:142$ y cabe concluir que la 'contribución
la contribución de que se tnlta es ocasional y temporaria, toda vez que ella de mejoras' de que se trata en autos no debe considerarse incluida. en la
se origina COIl un propósito particular y termina cuando éste se ha cumplido. exenci6n prevista en el art. 50 del decreto-ley 13.128/57'; así 10 autorizan
De aquí la diferencia entre otras <contribuciones especiales' y la de <mejo- los principios interpretativos expuestos en los considerandos 3i{ y 4Q y las
ras~> pues las primeras tienen permanencia y si bien persiguen, objetivos caracte!.Ísticas propias del tríbuto en cuestión, señaladas en el precedente
pfllticulares benefician directa e indlscriminadarnente a ,muchos, nnentxas las considerando 59. Agréguese a eJlü que, como 10 ha puesto de relieVe el
segundas otorgan ventajas particulares directamente a mmuebles detcrm1na~ a quo, de 1m> circunstancias de la causa de ningún modo resulta que el
dos, aun cuando puedan presentar un remoto y limitado interés gener~. aporte que pretende repetir la aclora haya sido excesivo o en alguna manera
Aparte de lo expuesto, cabe poner de relieve la no~ típica y peculiar pueda incidir en la actividad y fines de la institución baucarla,
que, frente a otros tributos, presenta la 'contribución de mejoras', c~al es 79) Que 1'<\ aparentemente rígida expréSiÓll de la ley, que habla de
que la Jazón de ser de ésta reside en el beneficio especial que rcc1be. o 'toda contribución~, no obsta a la eonclu.sí6n a que se ha llegado, por las
puede razonablemente sostenerse que recibe, el propietario del inmueble en razones expuestas, ni erige tampoco dieha conclusión la declaración de Ín-
virtud de la obra pública y que no es comparUdo por el públiCO en genera1 constitucionalidad de la norma.
y los demás propietarios de inmuebles no afectados por aquélla; la 'mejora' Esto último en virtud de que el control de constitucionalidad de las
constituye una ventaja diferencial que se incorpora al valor del inUlUeble. leyes que compete a los jueces, y especialmente a la Corte Suprema, en los
independientemente de su destino actual. De aquí que en los Fallos: 138: casos concretos sometidos 11 S11 conocimiento en causa judicial~ no se limita
161 y 140:115 y respectivos dictámenes del entOnces Procurador General se
378 CONTRATO DE aEEA PÚBLICA CONCESIÓN DE OBRA PÚBLIf'A POR PEAJE 379

en )a provincia o bien en la municipalidad de que se trate, estando para lo cual ejercen también facultades impositivas en USo de
exenta de la jurisdiccíón nacional. un derecho primordial de autonomía 2{).
Así ha sido decidido por la Corte en la causa de Fallos 263: Por otra parte, la obligación a! pago de la contribución de
436 "Banco Hipotecario Naciona! el provincia de Mendoza; 9-12- mejoras no se extiende a todos los sujetos beneficiados directa~
65", en donde quedó establecido que la determinación de la con- mente por la obra. Algunas empresas prestatarias de servicios
veniencia, equidad u oportunidad del impuesto especial de me- públicos están exentas de aquélla. Tal el caso, por ejemplo, de
joras o retribución de servicios es de competencia de la provincia Ferrocarriles Argentinos, que se halla liberado de tal carga en
y no vulnera, corno principio, cláusula ni derecho constitucional al- virtud de lo dispuesto por el arto 39 de la ley 14,380, cuya cons-
guno. Agregando que la misma regla vale para la determinación titucionalidad ha sido admitida por la Corte en los casos de Fa-
de la oportunidad del reembolso de la obra provisionalmente sol. llos 256:496 y 269:149.
ventada por el fisco.
Por su parte, la Cámara de Apelaciones de Rosario ha sos-
tenido que la contribución de mejoras no es ajena a la jurisdicción
impositiva municipal, en tanto las municipalidades nO son más
que delegaciones de los poderes provinciales, -circunscritas a fines El reglmen jurídico de la contribución de mejoras carece) en
y límites administrativos que la Constitución ha previsto como en- el orden nacional, de un tratamiento detallado, siendo ésta, quizá J
tidades del régimen provincial y sujetas a su propia legislación, la raZÓn de su también escasa consideración por parte de la ge-
neralidad de la doctrina.
Esto no es así en algunos regímenes provinciales, donde, en
a la ftIDCi6n en cierta manera negativa) de de--scalificar una nOrma por lesionar especial en el orden municipal, el instituto ha tenido una regula-
principios de la Carta Magna. sino que se extieude posítivamente a la tarea ción más completa.
de interpretar las leyes con fecundo y auténtico seutido constitucional,. en
Tal es el caso de la provincia de Buenos Aires, donde la COn-
tanto la letra o el espíritu de aquéllas ]0 permita, Velar por la constitu-
cionalidad de las leyes no importa solamente descaJificarms por afectar dis- tribución de mejoras está legislada en forma uniforme por la Or-
posiciones constitucionales, sino también interpretarlas y aplicarlas con efee- denanza ('..enera! NQ 165, del 22 de mar"0 de 1973.
tivo influjo de los fundamentales p.rincipios de la Constitución Nacional, que De acuerdo con esta norma se consideran obras públicas mu-
son los que deben infonnar intrfnsecamente (y así ha de presumírse toda nicipales de infraestructura urbana a las siguientes: pavimentación
intención del legislador, en tanto no resulte lo contrario) las leyes y la vida
y repavimentación; cercos y veredas; urbanización; desagües plu-
jurldíco-poIitica de la Nación.
-viales y cloacales; aguas corrientes; redes de electrícidad ilurni-
8>/() Que, en este orden de ideas~ habida cuenta del caráeter excepcio- 1

nal de 1as exenciones, de la interpretación restrictiva de las mismas 'y de los nación y servicios públicos en general (art. 29).
diversos elementos de juicio que han de tenerse en cuenta para precisar su Estas obras serán constmidas disponiéndose al efecto las
alcance -a todo lo cual se hizo referencia en el considerando 31.;L y sobre la Testricciones al dominio privado que sean necesarías (art. 59).
base de gue 1 en e1 caso, el pago de la 'contribución de mejoras' en nada De ul manera) el art. 3Q establece que se considerará que existe
afecta a la institución bancaria aetora, ni interfiere en la consecucUm de suS"
fines, sino que~ por el contrario, la beneficia, ha de priva.r el carácter federal declaración de utilidad pública para su constmcción, cuando: a)
de nuestra orga.nización nacional y salvaguardar las facultades propias no se incluyan expresamente en planes íntegrales de desarrollo ur-
delegadas de las pro~jncias, conforme a lo dispuesto eu los arts. 1Q. 5? 104 bano, aprobados por el Departamento Ejecutivo; b) se disponga,
y 105 de la Constitución Nacional.
Por ello, >' conformidad del Senor Procurador General, se confirma la
sentencia de fs, 160/163. con costas por su orden en ateneión a la naturaleza 25 Cámara de Apelaciones Civil y Comercial de Rosario, . SaJa IV, nov.
de la cuestión planteada (art, 68 del COOigo Procesal Civil y Comercial), 3/1918, en autos "Vrdoljak de Justuru. María c/Mmlicipalidad de Venado
Notifiquese y devuélvase, ADOLFO R. GADlUELLI - A:el-::J..ARD(} F, ROSSI. Tuerto",
380 CONTRATO DE OBRA PÚBUCA CONCESIÓN DE OBRA PÚBLICA POR PEAJE 381'

por ordenanza especial, la realización de las obras; e) se conecten vecinos interesados. Estos, reuniendo el 70 % de «los propietarios..'
con otras obras similares ya existentes y se acrediten los porcen- o poseedores a título de dueño de las parcelas con frente a la
tajes de adhesión requeridos por cada modalidad de ejecución. obra" y que representan igual porcentaje de la extensión total de,
El proyecto de las obras puede ser realizado por: a) las ofici- los frentes y/o superficies, según el caS(} (art. 13) deberán SGlici-
nas técnicas municipales; b) profesionales contratados al efecto; tar de la municipalidad pertinente, acompañando la documenta-
e) beneficiarios de las obras. La dirección técnica estará a cargo ción descrita en el arto 14, la autorización para la ejecución- de'
de un profesional de la empresa contratista, quien será responsable la obra.
de la ejecución del proyecto (arts. 69 y 89 ). Otorgada ésta, que es el verdadero acto administrativo de de-
legación, los interesados suscribirán sendos contratos individuales
con la empresa constructora, junto cOn un contrato general for-
§ 65. MODALIDADES DE EJECUCIÓN malizado entre la comisión representativa de los vecinos y la em-
presa interesada (art. 16). Es de destacar que estos contratos,
El arto 99 de la ordenanza 165 prevé las siguientes modalida- junto con el plan de trabajos, se presentarán al municipio conce-
des de ejecución: dente, de manera q Uf! el contrato recién será vigente a partir de la
1) Ejecución directa con fondos de la municipalidad. emisión del acto administrativo aprobatÜlio, que complementa la
2) Contrato directo entre vecinos y empresas constructoras. delegación ya otorgada.
3) Por licitación pública. En este caso puede imponerse a la Un sistema semejante lo establece el Capítulo VI de la O. 165
empresa adjudicataria el cobro de la obra directamente de los be- para la ejecución de obras por consorcios o cooperativas de ve-
neficiarios. cinos legalmente constituidas, aunque éstos podrán ejecutar la obra
4) Por consorcios y cooperativas. directamente, es decir sin recurrir a la contratación de una em-
5) Por acogimiento a las leyes de la provincia o de la Nación. presa constructora, o bien celebrando este contrato, el que deberá
De todas ellas, resulta claro que las indicadas en los números cumplimentar los requisitos y tramitaciones antes indicados.
1 y 5 corresponden a la categoría del contrato de obra pública La figura más compleja de todo este sistema es la I1amada
propiamente dicho, nO existiendo en las mismas ningún tipo de por la ordenanza «ejecución por licitación pública COn percepción
concesión, aun cuando los vecinos frentistas igualmente se encuen- directa del costo por las empresas", cuya iniciativa puede originar-
tren obligados al pago de la contribución de mejoras, pues, como se tanto en los vecinos frentistas como en la propia municipalidad.
ya fue dicho, éste es un problema tributario independiente de la La particularidad que reconOce esta figura es la existencia de
figura de la concesión en sí misma. Ésta existe, valga la repeti- un "registro de oposición", que debe ser I1evado por la misma mu-
ción, cuando OCUITe la delegación transestructural de cometidos, nicipalidad. Ésta, previo al I1amado de la licitación pública per-
que en los casos citados no está contemplada. tinente, a los efectos de seleccionar al futuro contratista y cons-
En el caso de la llamada «ejecución por contrato directo entre tructor de la obra deberá abrir ese registro de oposición por 10
vecinos y empresas constructoras", la delegación se presenta tanto días a los efectos de que aIlí asienten su disconformidad con esa
en la contratación como en lo que hace al cobro del precio de la obra los vecinos frentistas, es decir los futuros obligados al pago
obra, ya que la contribución de mejoras es percibida por el cons- de la contribución de mejoras. Si las oposiciones, como 10 esta-
tructor del vecino frentista, según el mecanismo común previsto blece el art. 21, superasen el 30 % del total de los beneficiarios de
en la ordenanza comentada, que luego se analizará. la obra, no se hará la convocatoria a la licitación pública, y por
La particularidad de esta figura contractual - sólo procedente ende no se ejecutará la obra, salvo COn relación a aquellos sectores
para la realización de obra~ cuyo plazo de ejecución no exceda de que, siendo susceptibles de separación, no hubiesen recibido opo-
60 días, o no tengan una extensión superior a 10 cuadras, como SICIOnes por encima del porcentaje antes indicado.
lo señala el art. 18 de la O. 165- es que la iniciativa parte de los. En estas condiciones podrá convocarse a la prescrita licita-
CON'IEATO DE OBRA PÚBLICA CONCESIÓN DE OJlRA PÚBLICA POR PEAJE 383

d6n púbHca '., con la singularidad de que ésta s6lo seriÍ adjudi- nicipalidad disponga la ejecución de la obra por cualquiera de los
cada si, luego de la preadjudícaci6n, que será publicada en dia- restantes sistemas establecidos en el art. 99 de la ordenanza y que
rios locales, con costo a cargo de la empresa beneficiada, no hay fueron enumerados más arriba (art. 25).
oposición a los términos contractuales por más del 30 % de los La ordenanza comentada, con un criterio no del todo claro,
"vecinos interesados) para 10 cual cuentan con un término de 10 vuelve a requerir la firma de contratos individuales entre los ve-
días hábiles a los efectos de dejar esta constancia en el registro cinos y la empresa constructora (art. 26), de tal manera que si
de oposición. Si se superara ese límite, la obra no se llevará a estos contratos no alcanzasen la cantidad del 70 % de los vecinos
cabo, salvo que, por fundadas razones de interés público, la mu- frentistas, la obra sólo se podrá llevar a cabo parcialmente (si ello
es técnicamente posible y la contratista lo acepta), o bien se eje-
26 Cabe aclarar que la reci<:mte ley provincial 10,100 (modificatoria de
'la Ley Orgánica de las Municipalidades) establece, para estos casüS, la regla cutará por alguno de los otros sistemas si la municipalidad, por
general de la licitación púbTíca, con las excepciones previstas en su arto 132, ordenanza especial y fundada, así lo cree conveniente (arL 27).
.según el siguiente texto: Realmente no se comprende el porqué dc esta nueva (ya es la
"Art, 132 - La ejecución de las obras públicas corresponde al Depar- tercera) consulta a los interesados, que ya han dado su opini6n
"lamento Ejecutivo. En las realizaciones mediante consorcios, convenios y
·demás modalidades, su intervención será obligatoria.
favorable (de lo contrario no se hubiese llegado a esta etapa),
Las obras públicas que se realicen por contrato con terceros, aun aqué- generando el riesgo de que un inesperado cambio de humor po-
llas respecto de las cuales se ímpone la percepción de su costo a los bene- pular (cosa que puede ocurrir por Jos motivos más sorprendentes
ficiarios, sólo podrán ser adjudicadas cumplido el requisito previo de la lici~ y absurdos) torne ineficaz y dispendioso todo el procedimiento
~tación. Sin embargo, podrán contratarse directamente, sin tal requisito
que se había llevado a cabo hasta el momento.
cuando:
a) Se contrate con reparticiones oficiales y entidades en las que el Es-
'tado tenga participación mayoritaria,
b) Se trate de obras de costo cubierto, contratadas por beneficiarlos y
·-empresas constructoras, por las que no se imponga contribución a los ve- § 66. RÉClMEN DE PAGO
cinos no adherentC'-s.
c) Se trate de obras de infraestructura realizadas por cooperativas (1
asociaciones de vecinos con percepción del costo directamente de los bene- El arto 35 de la ordenanza en examen establece la obligato-
'Eciarios. riedad del pago del precio de las obras, incluyendo el costo del
d) Su justiprecio no exceda. el monto establecido en el artículo 133, proyecto, la dirección técnica, los trabajos y gastos accesorios y
'Primer párrafo, complementarios, y sus variaciones de costos, en cabeza de '10s
e) Se trate de trabajos de urgencia reconocídá u obedez('~n a cirC\illS-
'lancias imprevistas que demandaren una jnmediata ejecución, propietarios o poseedores a título de dueño, de los inmuebles be-
f} Se haya realizado una liCilación y no haya habido proponentes o no neficiados ... ". Este pago se realizará a través de la contribución
'se hnbleren hecho ofertas convenientes. de mejoras, prorrateando el valor total de la obra por frente, por
g) Se contrate entre vecinos y empresas constructoras la ejecución de
zona O por frente y zona, según lo dispone el arto 37. Además,
las obras referidas en el 'Óltimo párrafo del artículo 60> slempre que no exce-
~aan el volnmen ni el plazo y se satisfagan los recaudos que seguidamente el arto 36 establece que en ningún caso la contribución, calculada
se indican, sobre la base del precio al contado de la obra, podrá exceder del
Las excepciones que determinan Jos incisos c) y g) precedentes sólo
podrán ser autorizadas siempre que los vecinos 10 petiCionen en forma ex~
J3 ro del valor real del inmueble con la mejora incorporada. La
·diferencia deberá ser abonada por la munidpalidad concedente.
p!:esa y se cnente ron la adhesi6n del setenta (70) por ciento, como minimo,
·de los beneficiarios de la obra, Además, será menester que las obras que El pago se hará a posteriori de la recepción provisoria de la
'se contraten no excedan de cinco (5) cuadras cuando se trate de ejercitar .obra, de manera que el contratista financia, hasta este punto, el
pavimentos y de diez (10) cuadras para obras de iluminación, redes de elec~ precio contractual, Así lo establece el arto 45, el que también
tricída.d, gas, cloacas yaguas corrientes. En ningún caso las obras que se
autoricen podrán tener un plazo de ejecución superior a los sesenta (60)
.otorga dos modalidades de pago, a elección del beneficiario fren-
,días corridos''', tista: al contado, dentro de los 30 días de notificado de la perti-
364 CONTRATO DE OBRA ptBLrCA
CONCESIÓN DE OBRA PÚBLICA POR PEAJE 385
nente liquidación; a plazos, en un número de cuotas a determinar> De todas maneras, por las razones expuestas al tratar de la
que llevarán un interés no mayor que el autorizado por el Banco
concesión en general) y también por las mismas argumentaciones
Central .. de la República para entidades financieras no bancarias.
La liquidación, que debe ser acompañada por el acta de me- desarrolladas al analizar la concesión por peaje, el con~edente es
dición, el certificado de ohra y la planilla de prorrateo, es prepa- el verdadero garante del pago de la remuneración del contratis-
rada por el contratista y aprobada por el municipio concedente. ta, a pesar de la no muy clara dÍ!'posición del art. 20 de la orde-
Basado en ella el contratista prepara el o los certificados de deu- nama 165. Es que, cabe reiterar, el contratista sólo ha aceptado
da, que también deben ser aprobados por la municipalidad, pre- una modalidad de pago sin asumir -, y en este caso ello es mu-
yio cumplimiento de los requisitos estahlecidos cn los urts. 48 y cho más claro que en materia de concesión por peaje"- el riesgo
49. Estos certificados son el título que instrumenta el crédito del de, p. ej., la insolvencia de los frentistas. El contratista ha eje-
contratista y lo habilita a percibir de los administrados beneficia- cutado una obra que es de interés general (hasta se la declara
rios de la obra la contrihución de mejora o tributo, cuyo monto expresamente como de utilidad pública, según ya se ha visto), aun-
es, precisamente, el que surje de ese instrumento previamente que beneficie, desde cierto punto de vista (sólo Con relación al
aprobado por la concedente. valor del inmueble directamente afectado por la obra), más inme-
Estos certificados constituyen un título ejecutivo a los efectos diatamente al vecino frentista. Pero la obra en sí misma produce
procesales, y en la misma ordenanza se reguló un sistema para beneficios para todo el orden comunitario, direc~a o indirectamen-
garantizar su percepción. te, y as', el hecho de que sea pagada por los frentistas, es una
Así, sus arts. 51 y 52 disponen: cuestión que s6lo atañe a la poBtica tributaria estatal o municipal,
"Art. 51. - No podrán ser otorgadas escrituras de transferen- pero que nunca puede ser invocada, por razones de elemental jus-
cias de dominio, constitución de derechos reales y en general, es- ticia, en contra del derecho del constructor a percibir el precio
crituras relativas a cualquier modificación o limitación del derecho <le su trabajo y recupero de sus inversiones.
de propiedad de los imnuebles beneficiados por obras que se cons-
truyan por el régimen de la presente ordenanza, hasta el pago
total de ellas, sin previa certificación de la Municipalidad. Para
el otorgamiento de tal certificación, será obligatoria la interven-
ci6n de la empresa contratista o de la entidad respectiva acerca § 67. LA FALSA CONCESIÓN
de la deuda exigible. El escribano actuante deberá retener, en
su caso, la suma que se adeudare a la fecha de la escrituración, Bajo este título se incluyen contratos de obra pública que,
resFonsabilizándose por ese importe, en el supuesto de incumpli- por guardar alguna semejanza COn la concesión por peaje, son
miento de la presente disposición. así también denominados en la prá.ctica.
"En los casos de contratos aprobados por el Departamento Se trata, generalmente, de obras públicas destinadas a la
Ejecutivo y cuando aún no se hubiesen conformado las liquidacio- produccióu de bienes (plantas fabriles, liSinas generadoras de ener-
nes, la Municipalidad, con intervención de la empresa contratista g!a, etc.) cuya forma de pago, como en la concesión por peaje,
o entidad respectiva, certificará dicha circunstancia. se relaciona con la producción misma, pero con la particularidad
"Art. 52. - No se dará curso a la tramitación de subdivisiones de que quien paga no es un tercero usuario de esa obra o de su
de inmuebles gravados por obras a las que se refiere la presente produccíón, sino su mísmo dueño.
Ordenanza, sin la previa certíficací6n de la Municipalidad, con De esta manera, los pagos vinculados con la explotación de
intervención de la empresa ejecutante o de la entidad respectiva, la obra conforman directamente el precio de la misma, por lo que
en la que conste que la deuda se encuentra cancelada o que existe
no tienen, de ninguna manera) naturaleza tributaria, al contrario
deuda, cuyo pago en cuotas no registra atraso exigible".
<le lo que ocurre con el peaje y la contribución de mejoras.
386 CONTRATO DE OBRA PÚBLICA CONCESIÓN DE OBRA PÚBLICA POR PEAJE 381'

De esta manera, en definitiva, la modalidad contractual ana- su remuneraClOn por la construcción de la obra. La mayor pro-
lizada no se se trata más que de un contrato de obra pública de ducción, en lo que depende de la capacidad empresaria, afectó
pago total o parcialmente diferido, donde el constructor asume, simplemente el beneficio de la contratista, que nunca, se reitera,..
a la vez, la calidad de operador o explotador de la obra. Como se comprometió a ejecutar una obra a su «riesgo y ventura".
en la concesión, el precio por la construcción está representado- En el ejemplo señalado, como en otros casos semejantes, se·
por el valor pactado en el contrato correspondiente a una deter- trató de un contrato de obra pública con pago diferido y con la
minada cantidad de producción, generalmente garantizada en una prestación accesoria (y alcanzada por el carácter expansivo de l~
magnitud mínima, al que se le suma un precio por la explotación, obra pública) de la operación o explotación de la obra construi-
que es el vinculado con la cantidad de producción por encima da, pero nunca de un contrato de concesión.
del mínimo o remuneración por la construcción.
A título de ejemplo puede citarse la "Contratación de Obras·
y Servicios para la Captación Integral de Gas Natural de los Ya-
cimientos de Cañadón Piedras y Cañadón Alfa-Tierra del Fuego",
efectuada por Gas del Estado conforme a la licitación pública
abierta el día 15 de marzo de 1978. Este contrato tuvo como ob-
jeto la ejecución de '1as obras y servicios integrales para las ope-
raciones de captación, compresión y acondicionamiento del gas·
natural, estabilización de la gasolina obtenida, su almacenaje v
despacho; inyección de los hidrocarburos livianos que resulten d~I
proceso anterior y transporte del gas natural hasta su inyección
en el gasoducto existente (art. 1.1. 2 del Pliego de Condiciones
Generales). Para ello -sigue diciendo la norma contractual ci-
tada - el contratista deberá proveer, construir y operar y mante-
ner por su exclusiva cuenta todas las instalaciones necesanas.
El pago al contratista quedó dividido en dos grandes rubros, "in-
versión'~ y "servicios~~.

Según el arto 13.1 del contrato, el precio convenido en con-


r:epto de inversión quedó vinculado a los caudales de gas natural
entregado (con una garantía de producción mínima), pagadero
desde la puesta en marcha de las instalaciones, es decir desde la
finalización de las obras propiamente dichas, y por un plazo y se-
cuencias fijadas en el contrato. De la misma manera, por los
servicios u operación se fijó también un premio por metro cúbica
de gas entregado, en ambos casos los valores respectivos quedaron
sometidos a fórmulas matemáticas de reajuste. Naturahnente, eJ
precio por ambas prestaciones quedó a cargo del dueño de la obra,
es decir Gas del Estado.
Como se ve, na hubo en el caso delegación alguna, ni tam-
poco el contratista asumió el riesgo de la explotación de la planta,
ya que, con las garantías de caudales mínimos, quedó asegurada

También podría gustarte