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ACERO
Se conoce como acero a un conjunto de aleaciones del hierro (Fe) con otros elementos,
principalmente carbono (C), pero también zinc (Zn), silicio (Si) o aluminio (Al). Estas aleaciones
alteran las propiedades del metal resultante, obteniendo un material más resistente o menos
oxidable, etc. La cantidad de carbono en su composición puede variar entre 0,03% y 1,075% en
peso dependiendo del grado.
El nombre del acero proviene del latí aciarius, que refiere al material del cual estaban hechas las
armas blancas en la antigüedad.
No hay que confundirlo con el hierro, ya que el porcentaje de carbono en cada uno de ellos es
distinto. El acero conserva las características metálicas del hierro en estado puro, pero la adición
de carbono y de otros elementos metálicos y no metálicos mejora sus propiedades físico-
químicas, sobre todo su resistencia.
Figura 1
Tubos de acero
Nota. El acero es un material importantísimo en la industria para el ser humano. Tomado de [ CITATION
Jul201 \l 3082 ]
Un poco de historia:
Se han encontrado evidencias del registro de empleo de hierro en el antiguo Egipto (3000 a.C.).
Se puede creer que poco después se descubrió la posibilidad de mezclarlo con otros metales para
obtener nuevos materiales.
Sin embargo, las primeras evidencias de acero wootz (acero primitivo) datan del 300 a.C. y se
encontraron en India y Sri Lanka. Se encontraron también mezclas de hierro fundido con hierro
forjado proveniente de la Dinastía Han de China (100 a.C.).
Figura 2
Acero forjado
Nota. El acero forjado se calienta, modela y se enfría en una forja. Tomado de [ CITATION Jul201 \l 3082 ]
Por otro lado, si los elementos aleantes son más o menos comunes, puede distinguirse entre
aceros ordinarios (carbono) y aceros especiales (otros elementos). El acero inoxidable es uno de
estos aceros “especiales”.
Propiedades
Figura 3
Nota. El acero se puede soldar con mucha facilidad. Tomado de [ CITATION Jul201 \l 3082 ]
Las propiedades del acero varían de acuerdo a su composición, es decir, a los elementos que
estén aleados en su interior. Por eso es difícil determinar sus propiedades universales.
A grandes rasgos constituye un material con una densidad manejable (7850 kg/m3), que se dilata
y contrae con las variaciones de la temperatura. Posee un altísimo punto de ebullición (hasta los
3000 °C). En líneas generales se sumamente tenaz, medianamente dúctil, y es maleable.
El acero es además un material más duro que el hierro (y por ende más frágil). Se puede soldar
con suma facilidad, y es un buen conductor de la electricidad y del magnetismo. De hecho una
pieza de acero imantada no pierde su magnetismo a menos que se la calienta a cierta
temperatura. Por eso, se utiliza para fabricar imanes artificiales.
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La gran desventaja del acero es su susceptibilidad a la corrosión: ya que el hierro puede oxidarse
muy fácilmente, genera grietas superficiales que eventualmente pueden consumir la pieza
completamente.
La solución para este problema son los llamados “aceros inoxidables”. En ellos, se añade algún
otro componente metálico (níquel y cromo generalmente) para disminuir la reactividad del
hierro.
TRATAMIENTOS TÉRMICOS
Recocido
Alterar la estructura del material para obtener las propiedades mecánicas deseadas,
ablandando el metal y mejorando su maquinabilidad.
Las operaciones de Recocido se ejecutan algunas veces con el único propósito de aliviar los
esfuerzos residuales en la pieza de trabajo causadas por los procesos de formado previo. Este
tratamiento es conocido como Recocido para alivio de esfuerzos, el cual ayuda a reducir la
distorsión y las variaciones dimensionales que pueden resultar de otra manera en las partes que
fueron sometidas a esfuerzos.
Se debe tener en cuenta que el Recocido no proporciona generalmente las características más
adecuadas para la utilización del acero. Por lo general, al material se le realiza un tratamiento
posterior con el objetivo de obtener las características óptimas deseadas.
Figura 4
Nota. El Recocido es uno de los tratamientos térmicos del acero. Tomado de (UAdeC, Recocido en Aceros, 2017)
Normalizado
El normalizado es un tratamiento térmico que se emplea para dar al acero una estructura y
características tecnológicas que se consideran el estado natural o final de material que fue
sometido a trabajos de forja, laminación o tratamientos defectuosos. Se hace como preparación
de la pieza para el temple.
Con esto se consigue una estructura perlítica con el grano más fino y más uniforme que la
estructura previa al tratamiento, consiguiendo un acero más tenaz. Es lo que llamamos perlita
fina.
- El tiempo al que se debe tener la pieza a esta temperatura deberá ser lo más corto posible.
Figura 5
Nota. El Normalizado es el tratamiento idóneo para dar al acero la estructura necesaria para forjar y prepararlo para
el temple. Tomado de (laboratoriodeforja, Normalizado, 2017)
El Temple es un tratamiento térmico que tiene por objetivo aumentar la dureza y resistencia
mecánica del material, transformando toda la masa en Austenita con el calentamiento y después,
por medio de un enfriamiento brusco (con aceites, agua o salmuera), se convierte en Martensita,
que es el constituyente duro típico de los aceros templados.
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En el temple, es muy importante la fase de enfriamiento y la velocidad alta del mismo, además,
la temperatura para el calentamiento óptimo debe ser siempre superior a la crítica para poder
obtener de esta forma la Martensita. Existen varios tipos de temple que dependen del diámetro o
espesor de la pieza y de la calidad del acero.
Al dar a los aceros al carbono un temple y revenido se consiguen muy buenas características
cuando el perfil es delgado. En un acero al carbono bien templado o revenido, el valor del límite
elástico suele llegar a ser un 75% de la carga de la rotura. Cuando se traa de piezas de gran
espesor el tratamiento es casi inútil, porque se presenta el problema de poca penetración de
temple o templabilidad.
Los aceros al carbono templados y revenidos con porcentajes de carbono variables de 0,25 a
0,55% suelen usarse en casos excepcionales en fabricación de muelles, con resistencia de 150 a
200 kg/mm2.
El empleo de los aceros al carbono templados y revenidos para la fabricación de piezas con esas
resistencias tiene varias ventajas. Una muy importante es que el límite de elasticidad es más
elevado que en los aceros normalizados o recocidos, y otra que la combinación de características
(resistencia y alargamiento) también se mejora.
Figura 6
Nota. En el temple se calienta la pieza y se enfría rápidamente para alterar sus propiedades profundas. Tomado de
(DirectIndustry, Temple Acero al Carbono)
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REFERENCIAS
Tratamiento térmico de recocido en aceros bajo carbono. Universidad Autónoma de Coahuila. CienciAcierta Revista
científica, tecnológica y humanística. Tomado de http://www.cienciacierta.uadec.mx/2017/09/30/rolado-en-frio-y-
tratamiento-termico-de-recocido-en-aceros-bajo-carbono/